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Tingo

Ubicado a 5 km. de la ciudad de Arequipa y a 8 minutos aprox. en auto. Lugar de recreación,


que cuenta con piscinas y un lago artificial en el cual puede dar un paseo en bote. Existe una
alameda donde se expenden buñuelos y anticuchos, entre otros platos tradicionales, que
deleitan el paladar del visitante. Antiguamente fue el Balneario de Veraneo de los arequipeños,
actualmente es muy típico que las familias acudan los fines de semana a su alameda.

Tingo. El tradicional Balneario de Tingo, motivo de atracción de antaño y orgullo


de Arequipa, en la actualidad se encuentra abandonado a decir de los
comerciantes que allí trabajan y de las personas que concurren en busca de
tranquilidad alejados del bullicio y contaminación de la ciudad.
El Balneario de Tingo con más de 200 años, está ubicado a unos 3 kilómetros del
centro de la ciudad y se requiere de unos 8 minutos para llegar en taxi o 12 en
combi, lo que significa que está bastante cerca, por lo que es visitado por los
turistas.
Este lugar por muchos años se ha constituido en un gran atractivo para los
turistas debido a la existencia de sus piscinas públicas que prácticamente han
dejado de funcionar, salvo una, por su mercado de vivanderas que se identifica
por sus incomparables buñuelos, sus exquisitos anticuchos, junto a su choclo
con queso, entre otros potajes arequipeños.

Sin servicios. En la actualidad el Balneario de Tingo, específicamente en el sector


del llamado Mercado de las Vivanderas, se encuentra sin agua potable, ni
energía eléctrica, situación que ha obligado a las comerciantes del lugar a
ingeniarse para utilizar el agua de los manantiales para el lavado de utensilios.
Esta situación preocupa a las 22 personas que comercializan en los puestos que
allí fueron construidos hace varios años. Algunas de esas comerciantes ya no
salen, otras sólo lo hacen los sábados y domingos, días donde se hace presente
una mayor cantidad de gente.
La última remodelación que se hizo al Balneario de Tingo fue en el año 1,988 en
el periodo de Luis Cáceres Velásquez y desde esa fecha hasta hoy nada ha
cambiado, pero se nota que los años han pasado y que es necesario su atención
por las actuales autoridades, afirma una comerciante que prefiere no ser
identificada.

Las piscinas. Antiguamente, hace unos 25 años atrás, solo existían tres piscinas
que eran administradas por la Municipalidad Provincial, llamadas la Pedro P.
Díaz (la grande de competencias), la mediana y la chiquita.
Pero ahora sólo funciona la llamada grande, pero sin reunir los requisitos
necesarios y no tiene la autorización del Ministerio de Salud; luego de la última
inspección se ha dado un plazo para que levante las observaciones, caso
contrario puede ser clausurada.
Las otras dos piscinas, la mediana y la chiquita, hace más de 4 años dejaron de
funcionar, sus locales están totalmente abandonados y la Municipalidad
Provincial no ha hecho nada para ponerlas nuevamente operativas.

Privadas. Pero en la actualidad y desde hace más de 15 años funcionan piscinas


privadas en la Alameda de Tingo, donde se enseña a nadar y que pertenecen al
ex nadador arequipeño Lucio Carpio Rodríguez y al profesor de Educación Física
Percy Castro, quienes a su estilo han logrado captar la gran cantidad de
alumnos, sobre todo en esta época de vacaciones.

Laguna. Una de las atracciones es la laguna, donde hace muchos años existían
patos y pequines, hoy sólo son unos cuantos pequines que comparten el lugar
junto a botes que sirven para la distracción de los visitantes.
A simple vista se nota que falta mantenimiento en la laguna ya que hay mucha
basura dentro de la poza y sobre todo por el color del agua, bastante opaca,
situación que da un mal aspecto a la laguna.

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