Sunteți pe pagina 1din 1

Función poética

La función poética del lenguaje, también conocida como función estética, es una
característica de la lengua literaria que tiene como pilar fundamental, la forma en la que
el mensaje es llevado hacia el receptor, ya que, en este tipo de función lingüística, la
estética es la principal característica, debido a esto, lo que dota de relevancia al mensaje
es la forma en cómo se expresa este mensaje.

Generalmente en este tipo de función lingüística, el objetivo del emisor es dotar de


belleza, creatividad y personalidad al mensaje, para así lograr crear sensaciones de
tranquilidad en el receptor. Dentro de la función poética, es importante recalcar que cada
autor se expresa de una manera diferente, por lo que esta función es una de las principales
características que puede definir a un autor, puesto que como se dijo antes, cada emisor
dota de una personalidad poética propia al mensaje.

Unas de las características principales de esta función del lenguaje, es que, gracias a la
forma embellecida de transmitir el mensaje, se dota a éste mismo de una mayor
relevancia, así mismo, la función poética no solo se aplica para un género un literario
como es la poesía, sino también que puede ser usada ya sea en novelas, cuentos, ensayos,
fábulas, obras teatrales, refranes etc. La característica más importante de esta función, es
sin duda la aplicación de recursos literarios (figuras literarias), tales como la metáfora, el
símil, la hipérbole, entre otras, que dotan al mensaje de esa belleza característica de esta
función, aunque es importante también, hacer un uso correcto de los matices de la voz
para dar más relevancia al mensaje emitido.

Ejemplos:
– El amor es una dulce medicina para el alma.
– Su piel es tan suave como la seda.
– Los labios de Ana eran tan rojos como las rosas en primavera.
– La noche permitió a los refugiados descansar un poco del inclemente y mezquino sol.
– Ese cuadro atrapó la realidad del momento, pareciera que el pintor puso su alma en él.
– La luna traviesa nos mira en el parque.
– Más vale pájaro en mano que cien volando.
– Una golondrina no hace verano.

S-ar putea să vă placă și