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ÍNDICE
P7.- Patologías
Definición
Túnel: Se trata de una vía subterránea que, por lo general, se abre de modo artificial con el
objetivo de permitir la comunicación entre dos lugares.
Túnel a cielo abierto: Se trata de la excavación en trinchera hasta el nivel de la base del túnel,
donde se ejecuta la contrabóveda, hastiales y bóveda, para posteriormente recubrirlo con el
terreno deseado. Para su realización normalmente se dispone de un carro interior deslizante
sobre el que se coloca el encofrado interior, las armaduras y tapes laterales. También te puede
construir instalando elementos prefabricados o mediante alguna máquina diseñada a tal
efecto para colocación de las partes del túnel.
Método ‘bottom up’: se excava a cielo abierto la totalidad del hueco ocupado por el
túnel y se construye en el interior. El túnel puede ser de hormigón in situ, hormigón
pretensado, arcos pretensados, arcos con acero corrugado y también con ladrillo, que
se solía usar al principio, coloquialmente se llama “FALSOS TÚNELES”
Por función:
1.- Carreteros
2.- Ferroviarios
3.- Metropolitanos
4.- Otros (hidráulicos, etc.)
1.- Se excava desde la superficie la totalidad o parte del hueco que ocupará el túnel.
2.- Se construye el túnel dentro del espacio a cielo abierto
3.-Se cubre una vez terminado.
Requiere un sistema de sostenimiento fuerte para soportar las cargas del material que cubre el
túnel.
Es una infraestructura que se construye cuando un obstáculo natural de escasa altura debe ser
atravesado por una línea ferroviaria, por una carretera o un paso peatonal.
Una forma de construir un falso túnel consiste en ejecutar unas pantallas, bien con pilotes o
con una hidrofresa. Tras esas pantallas laterales, se ejecuta la losa de cubrición para formar el
techo del túnel. Una vez fraguado el hormigón de la losa, se puede proceder a trabajar bajo
tierra, vaciando la caverna generada entre las pantallas y la losa, hasta el nivel del suelo del
túnel.
La ejecución de pantallas con pilotes consiste en hacer “taladros” consecutivos, que luego son
rellenados con acero y hormigón. Si utilizamos una hidrofresa el principio es el mismo, solo
que la perforación es rectangular.
Si el falso túnel se realiza a una profundidad mayor de 5-10 m es necesario ejecutar losas
intermedias, para garantizar la integridad de las pantallas laterales.
Este método es muy seguro, habiéndose realizado bastantes kilómetros de todo tipo de
túneles, por ejemplo en Madrid, tanto de metro (línea 11 en la avenida de Abrantes, línea 1 en
la Calle Congosto…) como de cercanías (Pasillo verde, Getafe…) sin incidentes a reseñar.
Incluso en terrenos particularmente complicados como es la vega del Manzanares este
método ha dado un gran rendimiento en la ejecución del soterramiento de la M30.
2.4.- Túneles marco in situ
Túneles mediante marco “in situ” cuando se puede detener el paso por encima:
Fases de realización:
1.- Replanteo
2.- Excavar hasta cota de cimentación del marco
3.- Formar el cajeado donde ira emplazado el marco de túnel
4.- Se monta la ferralla de la zapata del marco y se hormigona
5.- Se ejecutan los hastiales del marco, una vez desencofrados se impermeabiliza en
trasdós para evitar filtraciones
6.- Se ejecuta la losa superior, ya sea con cimbra o por medio de vigas prefabricadas,
se impermeabiliza también
7.- Una vez terminado todo el marco se rellena el terreno donde se emplazo el marco
El diseño de la sección estructural del cajón debe resultar compatible con los esfuerzos
originados en el proceso de traslación y con las solicitaciones derivadas de la ausencia de
cimentación en la estructura una vez completado el deslizamiento.
Paso inferior del metro ligero bajo la línea del ferrocarril Granada-Moreda, en la zona de
Cerrillo Maracena.
En la trinchera, los materiales deben poder soportar el talud sin desprendimientos, esto no es
siempre posible y dependerá del tiempo que aparezcan inestabilidades están principalmente
representadas por caída de bloques y derrumbes de los materiales eluviales y coluviales.
En la trinchera normalmente están sin cementar, las inestabilidades se deben a desplomes por
erosión del nivel inferior, aunque puede presentar varias zonas con muros de mampostería a
modo de recalces de voladizos.
Un proyecto de construcción para evitar inestabilidades define las actuaciones necesarias para
corregir las patologías observadas en los taludes de las trincheras, mejorando la estabilidad
tanto local como global, con objeto de evitar afectar a la seguridad de las instalaciones. Entre
las medidas diseñadas, se encuentran la disposición de mallas de triple torsión, geomallas,
redes de cables, muros de escollera, gunitados, además de actuaciones encaminadas a la
mejora del drenaje.
Foto trinchera de Botarell
El túnel a cielo abierto se propone como una alternativa a las trincheras convencionales, son
mas caros pero que eliminan los problemas de inestabilidades y además ocultan la
infraestructura con sus afecciones acústicas, medioambientales, estéticas y de peligro,
permitiendo además el paso y utilización de la bóveda del túnel como vial.
Como cualquier túnel también con los de cielo abierto deberemos realizar las siguientes
actuaciones:
1.- Estudios geométricos
2.- Diseño de trazado
3.- Estudios geológicos
4.- Estudios hidrogeológicos
5.- Estudios geotécnicos
5.1.- Ingeniería geológica
5.1.1.- Investigaciones de campo
5.1.2.- Investigaciones preliminares
5.1.3.- Investigaciones de detalle
5.1.4.- Prospecciones y toma de muestras de ensayo en laboratorio
5.1.5.- Geofísica
5.1.6.- Cartografía geológica
5.1.7.- Clasificaciones geomecánicas (RMR, Q)
5.2.- Mecánica de suelos
5.3.- Mecánica de rocas
5.4.- Modelización mediante elementos finitos
5.5.- Diseño del método y fases de excavación
5.6.- Diseño de sostenimiento y revestimiento
6.- Diseño de ventilación
Queda claro que cada localización, cada túnel tendrá unas características propias, será labor
del ingeniero proyectista estudiar y encontrar la mas óptima y apropiada al caso.
La Planificación de obra será totalmente similar a cualquier otra obra civil, de contratación de
personal cualificado, materiales, maquinaría, proveedores y subcontratistas por lo que se
refiere a las fase de aprovisionamiento y compras, también en cuanto a los diagramas de
planificación temporal y avances o en el control de costes y de certificaciones que derivan del
plan económico-financiero.
Pero en particular para los falsos túneles serán de gran importancia las siguientes fases:
Pantallas:
Se denomina pantallas a los elementos de contención de tierras que se emplean para realizar
excavaciones verticales en aquellos casos en los que el terreno, los edificios u otras estructuras
cimentadas en las inmediaciones de la excavación, no serían estables sin sujeción. Las
pantallas también tratan de eliminar posibles filtraciones de agua a través de los taludes de la
excavación y eliminar o reducir a límites admisibles las posibles filtraciones a través del fondo
de la misma, o de asegurar la estabilidad de éste frente a fenómenos de sifonamiento.
Si la excavación se produce por debajo del nivel freático, habrá que prever una
impermeabilización suplementaria al propio hormigón.
Las condiciones esenciales de las pantallas que las diferencian de los muros y las entibaciones,
son:
Generalmente consisten en la excavación de una zanja, cuyo espesor varía normalmente entre
0,4 y 1,50 m, por paños o módulos de un ancho que oscila generalmente entre un valor
mínimo correspondiente a la apertura de la cuchara y un valor máximo en función de la
estabilidad del terreno, generalmente de 2,5 a 4,5 m, movimientos y deformaciones
admisibles u otras condiciones de la obra.
Un panel puede tener una o varias jaulas de armadura a lo largo de su longitud. En terrenos
con cohesión y por encima del nivel freático, las zanjas, de las dimensiones antes indicadas
para cada módulo y de la profundidad total de la pantalla, podrán ser estables sin necesitar
ningún elemento de contención, debido, en parte, al efecto tridimensional asociado a sus
proporciones.
Sin embargo, en general, y especialmente si se trata de suelos sin cohesión, como arenas y
limos, bajo el nivel freático, las zanjas no serán estables por sí mismas. La estabilidad sin
entibación se conseguirá llenando cada módulo de zanja con lodos tixotrópicos (suspensiones
en agua de arcillas tixotrópicas, de muy alta plasticidad, como bentonitas, sepiolitas, etc).
Pantallas de pilotes
Si no hay necesidad de que la pantalla sea estanca, los pilotes podrán disponerse con una
cierta separación entre ellos, con separaciones entre ejes inferiores al doble del diámetro de
los pilotes, salvo justificación en contra.
En la estabilidad del terreno entre pilotes separados se podrá tener en cuenta el efecto de
arco. La separación entre pilotes se determinará en función de la naturales del terreno, de los
esfuerzos a resistir u de la capacidad de flexión de los pilotes.
Cuando la excavación haya de permanecer abierta mucho tiempo, y sobre todo, si el terreno
es meteorizable y pierde rápidamente sus características resistentes en contacto con el aire,
debe protegerse la banda del terreno que queda vista entre pilotes por medio de hormigón
proyectado.
Cuando haya que excavar bajo el nivel freático será necesario que los pilotes sean secantes
entre sí, por lo que la pantalla deberá efectuarse mediante pilotes perforados o aplicar otras
técnicas de tratamiento del terreno entre pilotes.
Pantallas de tablestacas
Generalidades:
El valor del cálculo de la densidad del material de relleno debe definirse a partir de las
características del material previsto en el estudio de materiales, o su caso en el estudio
geotécnico (véase las tablas D.26 y D.27). Deberán especificarse los controles a realizar en fase
de obra para comprobar que los valores reales cumplen las hipótesis del proyecto.
La presencia de cargas repetitivas o dinámicas significativas requerirá un estudio especial para
evaluar su influencia sobre la estructura de contención.
a) El peso propio del elemento de contención, de acuerdo con el material previsto para
su ejecución
b) El empuje y peso del terreno circundante, teniendo en cuenta la posición del nivel
freático
c) Los empujes debidos al agua, bien en forma de presión intersticial, subpresión o
presión de filtración
d) Las sobrecargas sobre la estructura de contención o sobre el terreno de trasdós
e) Los efectos sísmicos, cuando sea necesaria su previsión por la zona de emplazamiento
de la estructura de contención
f) Excepcionalmente, los empujes de terrenos expansivos, los debidos a la congelación
del agua en el suelo, los inducidos por la compactación del relleno o las incidencias
constructivas previsibles
Los estados de empuje dependen del desplazamiento del terreno y son los siguientes:
Datos geométricos:
En cálculos de estados límite últimos en los que la estabilidad del elemento de contención
dependa de la resistencia del terreno frente al mismo, la cota del suelo estabilizante debe
reducirse del valor nominal en una valor “a”, que se definirá tomando en consideración el
grado de control existente sobre la permanencia de dicho material. En general y salvo
justificación, se considerarán los siguientes valores de “a”:
El empuje activo Pa se define como la resultante de los empujes unitarios, ´a, que puede
determinarse mediante las siguientes fórmulas:
Siendo
La tensión efectiva vertical, de valor ϒ´. Z, siendo ϒ´el peso específico del terreno y
Z la altura del punto considerado respecto a la rasante del terreno en su
acometida al muro;
La componente horizontal del empuje unitario activo
El ángulo de rozamiento interno y la cohesión del terreno o relleno de trasdós
Los ángulos indicados en la figura 2.3.
El ángulo de rozamiento entre el muro y el terreno o relleno
En un terreno granular, homogéneo, el empuje activo, Pa, sobre un paramento vertical, debido
exclusivamente al terreno, será igual a:
Siendo
El empuje pasivo PP se define como la resultante de los empujes unitarios σ´p, que pueden
determinarse mediante las siguientes fórmulas:
Siendo
La tensión efectiva vertical, de valor ϒ´. Z, siendo ϒ´el peso específico del terreno y Z
la altura del punto considerado respecto a la rasante del terreno en su acometida al
muro;
La componente horizontal del empuje unitario pasivo
El ángulo de rozamiento interno y la cohesión del terreno
Los ángulos indicados en la figura 2.4.
En un terreno granular homogéneo, el empuje pasivo PP sobre un paramento vertical, debido
exclusivamente al terreno, será igual a:
El rozamiento entre el terreno y el muro influye sobre la magnitud del movimiento necesario
para la movilización total de los empujes por lo que, salvo una justificación especial, se tendrán
en cuenta las estimaciones siguientes del ángulo de rozamiento δ entre el terreno y el muro.
El ángulo δ puede ser positivo o negativo según el movimiento relativo del relleno respecto del
elemento de contención. Usualmente δ > 0 (componente de rozamiento hacia abajo); pero
pueden existir combinaciones de fuerzas que alteren el signo de δ, por lo que en estos casos
especiales deben comprobarse las hipótesis adoptadas sobre la dirección de la fuerza de
rozamiento.
En pantallas de pilotes con separación entre ejes inferior a 3 veces su diámetro, se considerará
el empuje pasivo sobre la superficie total de la pantalla de pilotes como si se tratara de una
pantalla continua.
Para separaciones entre ejes de pilotes superiores a 3 veces el diámetro del pilote, el empuje
pasivo se calculará sobre la superficie proyectada de cada pilote. Para profundidades
superiores a 1,5 veces el diámetro del pilote se considerarán valores del empuje pasivo sobre
dicha superficie, triples a los definidos anteriormente.
Es difícil su determinación por depender de los esfuerzos tectónicos a los que haya estado
sometido el terreno en su historia geológica, del grado de consolidación y de la compacidad
alcanzada por el terreno natural o artificialmente. A falta de una valoración basada en la
experiencia local, ensayos “in situ”, información geológica u otras, puede estimarse con los
siguientes criterios:
Siendo
b) Si el terreno se eleva a partir del muro con un ángulo i < Φ´ con respecto a la
horizontal, la componente horizontal del empuje de tierras efectivo σ´ho se puede
relacionar con la tensión efectiva debida al peso por la relación Koi que es igual a:
Siendo
Si existe una sobrecarga uniforme q sobre el terreno, ésta se puede sustituir por una altura de
tierras equivalente HE:
Siendo
En este caso los empujes unitarios sobre el muro se incrementarán, en toda la altura, en:
Cuando la superficie del terreno sea irregular, el empuje resultante sobre el elemento de
contención se determinará tanteando diversas superficies de rotura.
c) En la
tabla 2.2se recoge una estimación de los valores de rotación de la pantalla necesarios
para desarrollar las condiciones de rotura para distintos tipos de terreno:
a) Se considerará el empuje activo en el tradós salvo para aquellos casos en los que,
debido a la rigidez del elemento de contención, las restricciones impuestas a su
deformación (anclajes, apuntalamientos, forjados u otros), o por el proceso de puesta
en obra del relleno o sensibilidad a las deformaciones de edificaciones o servicios
situados en las proximidades de la coronación del elemento de contención, no se
puedan producir los movimientos mínimos necesarios para movilizarlo.
b) Si existen cimentaciones de edificios o servicios sensibles a los movimientos, situados a
poca profundidad, a una distancia de la coronación del elemento de contención
inferior a la mitad de su altura, se considerará el empuje en reposo, K0 en el
dimensionado del elemento de contención por procedimientos de equilibrio límite. Si
la distancia está comprendida entre la mitad de la altura y la altura del elemento de
contención, debe considerarse al menos un coeficiente K = (K0 + KA )/2. Estos valores
podrán modificarse si se efectúa un estudio de detalle para el cálculo de los
movimientos.
c) En cualquier caso, la presión de tierras considerada sobre el elemento de contención
no será inferior a 0,25 veces la tensión efectiva vertical.
d) El empuje pasivo estará afectado por un coeficiente de seguridad ϒE no superior a 0,6
e) Para el cálculo de elementos de contención apuntaladas en arena por métodos de
equilibrio límite, se utilizará el diagrama rectangular semiempírico de la figura 2.6ª. A
estos empujes deben añadirse los debidos a las presiones intersticiales. Para
profundidades superiores a 12 m debe comprobarse que dicho diagrama es aplicable.
Siempre que sea posible debe evitarse el empleo de rellenos cohesivos en el trasdós de
elementos de contención.
En relación con los empujes debidos al agua se considerarán dos casos principales:
a) Estado hidrostático
b) Agua en circulación
Salvo justificación en contra los cálculos se efectuarán por el método de las presiones
efectivas. En el caso que exista una capa freática en reposo en el trasdós del elemento de
contención, se considerará el empuje debido al terreno sumergido, total o parcialmente, y el
empuje hidróstatico del agua.
En la figura 2.7 se ilustran los diagramas de presiones del terreno, Ps y del agua PW ,
correspondientes a diversos ejemplos, con superficie del terreno horizontal.
En caso de existir agua en circulación, debe determinarse la red de corriente o filtración
correspondiente a las condiciones de contorno, en el elemento de contención y en el terreno.
Para ello se pueden utilizar métodos analíticos, gráficos o analógicos.
De acuerdo con las condiciones del emplazamiento del elemento de contención, se estudiarán
los siguientes casos:
Cuando el nivel de la base del elemento de contención no exista un estrato impermeable y sea
posible la filtración bajo el elemento de contención, debe calcularse la fuerza de subpresión
correspondiente a partir de la red de filtración.
Cuando la magnitud de las sobrecargas es reducida en comparación con el empuje total sobre
el elemento de contención (sobrecarga inferior al 30% del empuje total), la obtención de los
empujes debidos a éstas puede efectuarse mediante la teoría de la elasticidad. Se admite la
validez del principio de superposición. Si el elemento de contención se considera fijo, la
tensión horizontal determinada por procedimientos elásticos debe duplicarse.
Análisis y dimensionado
Las comprobaciones necesarias para verificar que una estructura de contención cumple los
requisitos necesarios se basarán en el método de los estados límite.
ESTADOS LÍMITE
En los elementos de contención deben considerarse al menos los siguientes estados límite:
a) Estabilidad
b) Capacidad estructural
c) Fallo combinado del terreno y del elemento estructural
El cálculo de los estados límite últimos debe comprobar que se alcanzan las condiciones de
estabilidad y resistencia, utilizando el valor de cálculo de las acciones o del efecto de las
acciones y las resistencia de cálculo, con los coeficientes de seguridad parciales definidos en la
tabla 2.3.
Verificación de estabilidad
Siendo
Verificación de resistencia
Ed < R d
En suelos con un porcentaje de finos superior al 35% deben efectuarse los estudios en
condiciones no drenadas y drenadas.
En los elementos de contención deben considerarse al menos los siguientes estados límite:
Los valores de cálculo de las presiones de tierras en estados límite de servicio se obtendrán
considerando valores característicos de todos los parámetros del suelo.
Los desplazamientos admisibles de las estructuras o servicios próximos ajenos a la obra, deben
definirse en función de sus características y estado, debiendo preverse en el proyecto las
medidas a adoptar en caso de que estos valores sean superados.
Debe analizarse si las acciones variables, tales como las vibraciones provocadas por el proceso
de ejecución o las cargas de tráfico, pueden afectar a los movimientos del elemento de
contención o a estructuras o servicios próximos.
PANTALLAS:
Criterios básicos:
En este caso, la flexibilidad de la pantalla puede ser un factor de la mayor importancia. Las
estructuras de edificación son, por lo general, tan sensibles, o más a los movimientos
diferenciales en sentido horizontal de los cimientos, que a los asientos diferenciales. Se tratará
de impedir o minimizar ambos, para lo cual se deben elegir tipos de pantallas relativamente
rígidas y, sobre todo, no dejar grandes alturas en voladizo, que salvo justificación en contra,
deben ser inferiores a 5m. Se debe disponer elementos de sujeción en cabeza de la pantalla
que sean muy poco susceptibles de alargamiento o deformación.
Si la excavación ha de realizarse por debajo del nivel freático, el conocimiento del terreno en
profundidad habrá de ser tal que permita el estudio de la red de filtración, con el grado de
precisión suficiente para determinar la seguridad frente al sifonamiento y la estimación de
caudales.
Para poder establecer la posibilidad de ejecución de una pantalla será preciso asegurarse
previamente de que no existen en el terreno obstáculos que hayan de ser atravesados por ella,
tales como: alcantarillas, colectores, galerías de servicio, conducciones eléctricas, telefónicas o
de distribución de gas, pozos, antiguas cimentaciones, etc. Caso de existir alguno de dichos
obstáculos se definirá su localización exacta, a fin de tomar las medidas oportunas en el
proyecto o durante la ejecución por el Director de Obra.
Si la excavación ha de realizarse en parte por debajo del nivel freático, quedarán descartados
aquellos tipos de pantalla que no garanticen un adecuado grado de estanqueidad.
Las vibraciones producidas por la hinca de tablestacas, sobre todo en terrenos sin cohesión,
pueden afectar gravemente a las obras próximas, bien porque éstas sean muy susceptibles a
las vibraciones, bien porque se compacte el terreno y se produzcan asientos.
Se ha de tener en cuenta igualmente las vibraciones originadas por la caída libre de los útiles
de apertura de zanjas para la ejecución de pantallas continuas, especialmente cuando se
trabaje sin lodos.
Estabilidad:
Los cálculos de estabilidad en cada fase deben verificarse al menos los siguientes estados
límite:
a) Estabilidad global
b) Estabilidad del fondo de la excavación
c) Estabilidad propia de la pantalla
d) Estabilidad de los elementos de sujeción
e) Estabilidad de las edificaciones próximas
f) Estabilidad de las zanjas, en el caso de pantallas de hormigón armado
La estabilidad debe verificarse bien para cada pantalla por separado o bien para el conjunto de
pantallas del edificio.
Las acciones de los elementos de sujeción de la pantalla que queden incluidos por completo en
las superficies de rotura no deben ser consideradas.
En la figura 2.9 se esquematizan algunas de las posibles formas de rotura, por deslizamiento
profundo.
En suelos cohesivos puede producirse la rotura del fondo de la excavación debida al descenso
de la tensión vertical por efecto de la excavación (véase figura 2.11). Asimismo, en suelos muy
preconsolidados, la tensión efectiva horizontal bajo el fondo de la excavación se reduce en
menor proporción que la vertical pudiendo alcanzarse estados de plastificación.
La seguridad frente a este tipo de rotura, en suelos coherentes, puede evaluarse mediante la
siguiente expresión:
Siendo
Cu: La resistencia al corte sin drenaje del terreno existente bajo el fondo de la excavación
Ncb: Un factor de capacidad de carga que se define en la figura 2.12 en función de la anchura
B, la longitud L, y la profundidad H, de la excavación
Si la excavación se hace en un terreno saturado u por debajo del nivel freático, se establecerá
una corriente de filtración de agua a través del terreno que aflorará en el fondo de la
excavación o irá a parar a los elementos de drenaje y agotamiento que se dispongan para
dejar en seco la excavación. En este caso, es necesario comprobar que no se va a producir
sifonamiento ni arrastre del material.
La seguridad frente al sifonamiento se estudiará minorando el gradiente crítico del terreno, icr,
por un factor ϒM=2
Siendo
a) Rotura por rotación o traslación del elemento de contención o partes del mismo
b) Rotura por hundimiento
Se comprobará que los empujes del terreno sobre la pantalla en su trasdós pueden ser
equilibrados por los empujes del terreno sobre la parte empotrada de la pantalla por debajo
del fondo de la excavación, en su intradós, y por las reacciones de los elementos de sujeción
(puntales, codales, forjados, otras pantallas, u otros) y los anclajes, si los hubiere.
Los cálculos de estabilidad de la pantalla pueden efectuarse, según los casos, por los siguientes
métodos:
Se debe comprobar que no se produce el fallo de cada elemento de sujeción para aquella fase
de excavación o construcción del edificio que dé lugar al máximo esfuerzo sobre el mismo.
Deberá comprobarse que los anclajes no provocan deformaciones inadmisibles en los edificios
o servicios próximos y que no interfieren con estructuras o cimentaciones colindantes.
La determinación de los esfuerzos sobre los elementos de sujeción se llevará a cabo según se
describe en el apartado de esfuerzos y deformaciones.
Si existen edificios medianeros con los límites de una excavación hecha al abrigo de una
pantalla, o en sus proximidades, debe considerarse su existencia como una sobrecarga en los
cálculos de los empujes. Asimismo, debe comprobarse para cada una de las fases de ejecución
tanto de la pantalla en sí como de la excavación, que los movimientos horizontales y verticales
a que se vea sometido el terreno en el trasdós, sobre el que se encuentren cimentados los
edificios medianeros o próximos, no son lo suficientemente importantes como para hacer
peligrar la estabilidad de los mismos o ser causa de agrietamientos, inclinaciones, etc. En el
apartado “estados límite de servicoo” se definen los criterios en cuanto a los movimientos y
deformaciones horizontales y verticales máximos admisibles de edificios o servicios próximos a
elementos de contención y en el apartado “esfuerzos y deformaciones”, los procedimientos
para evaluar estos movimientos.
Debe comprobarse la estabilidad de las zanjas, tanto si se emplean lodos tixotrópicos como si
no se hace uso de ellos. Es particularmente importante esta comprobación si existen
edificaciones próximas o inmediatas a las zanjas.
Para asegurar la estabilidad de una excavación de planta rectangular (zanja) se deben emplear
lodos cuando la profundidad de la zanja sea superior a la altura que podría excavarse con talud
vertical indefinido.
Este estado límite se alcanzará cuando los valores de cálculo de los efectos de las acciones en
los elementos estructurales que componen la pantalla superen el valor de cálculo de su
capacidad resistente.
Esfuerzos y deformaciones:
Los esfuerzos obtenidos sobre los elementos estructurales se mayorarán considerando los
coeficientes ϒE de la tabla 2.3.
Para el análisis de la aptitud al servicio de la pantalla se debe verificar que, para las situaciones
de dimensionado, su comportamiento está dentro de los límites establecidos en el apartado
“estados límite de servicio”, en cuanto a deformaciones, vibraciones y deterioro.
De la pantalla:
Los esfuerzos sobre una pantalla son los que resultan de los empujes del terreno y las
reacciones en los elementos de sujeción a que está sometida en cada una de sus fases. A su
vez, los empujes unitarios del terreno y las fuerzas de sujeción son función de la deformación
de la pantalla, de la propia naturaleza del terreno y de las características fuerza deformación
de los elementos de sujeción. En su determinación se tomarán en consideración el proceso de
excavación, el tipo de sujeción, el instante de su introducción, etc.
El cálculo de esfuerzos podrá efectuarse a partir de las leyes de empujes unitarios definidas en
el apartado “especificaciones técnicas”, empleadas en las comprobaciones de estabilidad por
métodos de equilibrio límite y de las reacciones de los elementos de sujeción deducidas en
tales comprobaciones. Con este procedimiento no se tiene en cuenta más que de forma
cualitativa la rigidez de la pantalla con relación a su empotramiento en el terreno y a las
condiciones de sujeción y, de ningún modo, las propiedades de deformación del terreno.
La determinación de los esfuerzos sobre la pantalla debe llevarse a cabo para todas las fases
de ejecución de la excavación o del edificio, que impliquen una variación de los empujes del
terreno o de las fuerzas de sujeción. Podrán omitirse aquellas fases en que pueda demostrarse
“a priori” que los esfuerzos son inferiores a los que se producirán en otras.
Del terreno:
Los esfuerzos sobre los elementos de sujeción se determinarán para todas las fases de
ejecución de la excavación en que intervengan; puede omitirse el cálculo en aquellas fases
para las que puedan demostrarse a priori que los esfuerzos son inferiores a los que resultan en
otras.
Para tener en cuenta el posible fallo de algún elemento (como por un ablandamiento local del
terreno en el caso de anclajes), que sobrecargará los más próximos, debe aumentarse en un
10% el esfuerzo deducido para cada elemento de sujeción en las comprobaciones de
estabilidad de la pantalla.
Dimensionado
a) profundidad de la pantalla
b) dimensiones y características de su sección transversal
c) elementos de sujeción
Los coeficientes parciales de seguridad a emplear para el dimensionado de la pantalla se
recogen en la tabla 2.3.
Profundidad de la pantalla:
Los esfuerzos que se deben tomar para el dimensionado son los que se deduzcan en
las comprobaciones de estabilidad en las diferentes fases de la ejecución y las
comprobaciones de los estados límite de servicio con los que se obtendrá la
envolvente de los máximos momentos flectores y esfuerzos cortantes a lo largo de
toda la pantalla.
a) pantallas de tablestacas
b) pantallas continuas de hormigón
c) pantallas de pilotes “in situ”
a) Pantallas de tablestacas:
Tablestacas de acero:
Las paredes de la zanja, que constituyen el encofrado de la pantalla, son planas con
bastantes irregularidades. El recubrimiwento mínimo de las armaduras cumplirá las
condiciones definidas en la Instrucción EHE para piezas hormigonadas contra el
terreno.
Se considerará a los pilotes como vigas de sección circular trabajando a flexión simple
o compuesta, si se tiene en cuenta el peso propio. Se dimensionarán estructuralmente
considerando los coeficientes de seguridad definidos en la tabla 2.3, y de acuerdo con
la instrucción EHE.
Elementos de sujeción:
Los muros deben disponer de juntas de dilatación para absorber las deformaciones debidas a
la temperatura y, en su caso, las de retracción.
Deben existir juntas en los cambios de sección, o cuando existan singularidades del propio
muro tales como escaleras, rampas de carga, etc.
Análogamente se dispondrán juntas cuando se han de diferenciar entre tramos contiguos del
muro.
La distancia entre juntas de dilatación, salvo justificación, no será superior a 30 m,
recomendándose una separación no superior a 3 veces la altura del muro.
Cuando los efectos de la retracción puedan ser importantes se intercalarán falsas juntas,
debilitando la sección del muro para predeterminar el plano de rotura. La separación entre
estas juntas será de 8 a 12 m.
La abertura de las juntas de dilatación será de 2 a 4 cm, según las variaciones de temperatura
previsibles.
Se evitará el paso de armaduras a través de las juntas. Cuando esto sea necesario para
mantener alineaciones o por circunstancias especiales, salvo justificación en contra, todas las
armaduras que penetren en una cara de la junta deben proyectarse como pasadores
lubricados y sin dobleces ni anclajes para permitir los movimientos longitudinales y
convenientemente protegidos de acuerdo con la durabilidad especificada.
Estas juntas suelen ser tubos metálicos (juntas circulares) o semi-circulares y en menor medida
las juntas triangulares. Las más usadas son circulares precisamente porque el agua debe
recorrer una mayor distancia desde el trasdós al intradós del muro. Por lo general las juntas
circulares se suelen emplear para profundidades mayores de 15-20 metros ya que son
fácilmente encajables entre sí y son más rígidas para recibir el empuje del hormigón. Las juntas
semi-circulares son empleadas en pantallas menores ofreciendo numerosas ventajas como la
excavación del panel siguiente sin sacar la junta (Así no se contamina con lodos ni terreno
excavado y evita entradas de agua en el interior del muro. También nos facilita la ejecución del
muro exterior más delgado (y por consiguiente menos espacio perdido) ya que la junta puede
ser extraída con los mismos equipos de excavación y no se necesita gatos hidráulicos que
ejercerían la presión en el muro guía.
Los anclajes y acodamientos son básicamente las uniones entre muros pantallas con
primeramente la bóveda y posteriormente con la contrabóveda.
La realización de los muros puede ser por medio de pilotes o pantallas de hormigón armado,
pero posteriormente al hormigonado completo, se realiza el descabezado de las pantallas, es
decir, se rompen los últimos 40 o 50 cm por dos razones: para descubrir las armaduras para
que la losa superior actúe como arriostramiento de las pantallas y para eliminar el hormigón
de mala calidad que queda en las cabezas debido a que se ha mezclado con bentonita.
A continuación se construye la viga de atado, que sirve para arriostrar horizontalmente todas
las cabezas de los muros y así evitar el fallo aislado de un elemento de pantalla y para repartir
el esfuerzo vertical.
La colocación de la losa superior o cubierta que solidariza y ancla a las pantallas (ya sean
continuas o discontinuas) en cabeza, no sin antes colocar un encofrado horizontal, existen
distintos tipos de estos forjados en los encofrados horizontales:
o Forjados unidireccionales: Transmiten las cargas a los apoyos según una única
dirección. Se apoyan o unen a la estructura portante a través de los bordes,
jácenas (vigas) y viguetas, donde los elementos resistentes van dispuestos en
una sola dirección. Pueden ser:
De semi losa prefabricada: Consiste en la colocación sobre una estructura
metálica de placas prefabricadas de hormigón armado de gran tamaño
(forjado semiacabado), las cuales se montan en obra y se rellenan allí con
hormigón preparado in situ para conseguir la losa definitiva. Por tanto, la
armadura estructural relevante y las armaduras de celosía vienen montadas ya
de fábrica.
Las armaduras pasivas son las armaduras de acero habituales del hormigón armado. Entre ellas
se encuentran las barras lisas o corrugadas y las mallas electrosoldadas
Una vez vaciado el túnel se realiza la contra bóveda. Para unir la contra bóveda con las
pantallas, se pican estas últimas y se disponen de unos anclajes o riostras que sirven de
conexión entre la armadura de la contra bóveda y la pantalla.
Anclajes temporales: Ciertos anclajes se utilizan en forma temporal, por ejemplo para
el sostenimiento de un muro pantalla; cuando han finalizado los trabajos del mismo, el
anclaje queda fuera de servicio, y aunque la corrosión afecte sus paredes metálicas,
esto carece de importancia porque su función ha sido cumplida.
Anclajes Permanentes: Los anclajes permanentes cumplen la función de sujetar un
muro de manera definitiva; tal es el caso de los muros de contención en carreteras,
donde los anclajes son barras de acero con tratamiento anticorrosivo para evitar su
deterioro.
Como ventajas, los anclajes hacen que varíe la distribución de esfuerzos en el muro, que
pasa de trabajar a modo de ménsula a una viga continua. De esta manera disminuyen los
esfuerzos, y ello permite adelgazar el espesor y el armado del muro. También ofrece mayor
seguridad en edificaciones contiguas pues elimina los movimientos habituales en muros de
contención.
5.4.- Diseño Antisísmico
Los falsos túneles como estructuras subterráneas están en todas las grandes ciudades de todo
el mundo, y es necesario garantizar la seguridad de estas obras ante movimientos sísmicos.
Es necesario considerar los efectos de interacción suelo-túnel, ya que su rigidez puede afectar
de forma considerable las deformaciones circundantes. Por tanto los métodos de análisis más
populares para el estudio y diseño de túneles son el de deformación de campo libre y el de
interacción suelo-estructura. Con ellos se calculan las máximas deformaciones axial y de
flexión (curvatura) producidas por diferentes tipos de ondas, así como la fuerza axial, el
momento flexionante y la fuerza cortante de diseño. Estos métodos se trabajan realizando
modelos por ordenador, ya sea utilizando elementos finitos o diferencias finitas
La deformación de campo libre se refiere a la deformación del terreno causada por el paso de
ondas sísmicas en ausencia del túnel o la excavación.
El método interacción suelo-estructura proporción expresiones para evaluar las fuerzas que se
desarrollan en secciones transversales y longitudinales del túnel.
1.- Ondas de cuerpo o internas, que son las que nos afectan al túnel profundo, las ondas de
compresión u ondas P y las ondas de cortante u ondas S.
2.- Ondas superficiales de Rayleigh, que producen un movimiento elíptico retrógrado al paso
de la onda y las ondas Love, que producen una oscilación horizontal de la superficie
Si nos centramos en las que mas afectan al túnel en su conjunto podemos y debemos
simplificar a cuatro tipos principales de deformaciones:
- Compresión axial (longitudinal) y extensión, debidas a las ondas P que viajan paralelas
al eje del túnel.
- Compresión y extensión transversal, debida a las ondas P que se mueven
perpendicularmente al eje del túnel.
- Flexión axial (longitudinal) o de arrastre, causada por las ondas S que viajan a lo largo
del eje del túnel.
- Cortante axial (longitudinal), debido a ondas S que se propagan en sentido
perpendicular al eje del túnel e inducen movimientos del terreno también
perpendiculares al eje del túnel.
- Ovalización o deformación transversal, inducida por ondas S que se propagan
perpendicularmente al eje del túnel e inducen movimientos del terreno también
perpendiculares al eje del túnel.
El diseño sísmico consiste en dotar a las estructuras de la capacidad para soportar las cargas y
desplazamientos-deformaciones que se le apliquen, por cierto con el problema de ser
desconocidas, transitorias, pero de posiblemente alta energía, dependiendo la zona
geográfica y su sismicidad.
Las cargas sísmicas se superponen a otras cargas permanentes. Aunque los efectos sísmicos
son transitorios y temporales, el diseño sísmico deberá soportar y considerar estos efectos en
presencia de otras cargas que puedan sostener las estructuras.
El diseño debe tener en cuenta que las estructuras deben permanecer en condiciones elásticas
en cualquier periodo con cargas permanentes o que ocurran, un buen diseño sísmico, además
deberá considerar la naturaleza y estabilidad de las estructuras, los costes que implica, y el
riesgo asociado a la seguridad pública y la pérdida de funciones o servicios. Esta modalidad de
diseño viene dada por las experiencias anteriores en cuanto al comportamiento que tuvieron
distintos túneles subterráneos en base a terremotos, donde se obtuvieron las siguientes
conclusiones:
- Las estructuras enterradas parecen ser menos vulnerables que las estructuras
superficiales.
- Las estructuras enterradas en roca o a gran profundidad parecen ser más seguras.
- Los daños debidos a movimientos del terreno pueden reducirse estabilizando los
alrededores del túnel.
- La vulnerabilidad estructural está mejor correlacionada con la velocidad sísmica del
terreno que con la punta de aceleración sísmica del terreno.
- La variabilidad de desplazamiento del terreno, junto con la magnitud y distancia del
epicentro, componen los parámetros determinantes en el diseño sísmico.
- La duración del terremoto es muy importante debido a los fenómenos de fallos por
fatiga estructural que puede causar y como consecuencia, mayores deformaciones.
- Los movimientos de mayores frecuencias pueden explicar fenómenos de
desprendimientos o “spalling” de rocas u hormigón a lo largo de discontinuidades.
- Los efectos de movimiento del terreno pueden verse amplificados si las longitudes de
onda son entre 1 y 4 veces el diámetro del túnel.
La metodología basada en la información obtenida de acontecimientos anteriores ha
establecido un procedimiento de análisis completo para el diseño de túneles.
Excavación.
Movimiento de tierras.
Construcción.
Montaje y desmontaje de elementos prefabricados.
Acondicionamiento o instalaciones.
Transformación.
Rehabilitación.
Reparación.
Desmantelamiento.
Derribo.
Mantenimiento.
Conservación-Trabajos de pintura y de limpieza.
Saneamiento.
Trabajos con riesgos especiales: trabajos cuya realización exponga a los trabajadores a
riesgos de especial gravedad para su seguridad y salud, comprendidos los indicados en
la relación no exhaustiva que figura en el anexo II.
Promotor: cualquier persona física o jurídica por cuenta de la cual se realice una obra.
Proyectista: el autor o autores, por encargo del promotor, de la totalidad o parte del
proyecto de obra.
Coordinador en materia de seguridad y de salud durante la elaboración del proyecto
de obra: el técnico competente designado por el promotor para coordinar, durante la
fase del proyecto de obra, la aplicación de los principios que se mencionan en el
artículo 8.
Coordinador en materia de seguridad y de salud durante la ejecución de la obra: el
técnico competente integrado en la dirección facultativa, designado por el promotor
para llevar a cabo las tareas que se mencionan en el artículo 9.
Dirección facultativa: el técnico o técnicos competentes designados por el promotor,
encargados de la dirección y del control de la ejecución de la obra.
Contratista: la persona física o jurídica que asume contractualmente ante el promotor,
con medios humanos y materiales, propios o ajenos, el compromiso de ejecutar la
totalidad o parte de las obras con sujeción al proyecto y al contrato.
Subcontratista: la persona física o jurídica que asume contractualmente ante el
contratista, empresario principal, el compromiso de realizar determinadas partes o
instalaciones de la obra, con sujeción al proyecto por el que se rige su ejecución.
Trabajador autónomo: la persona física distinta del contratista y del subcontratista,
que realiza de forma personal y directa una actividad profesional, sin sujeción a un
contrato de trabajo, y que asume contractualmente ante el promotor, el contratista o
el subcontratista el compromiso de realizar determinadas partes o instalaciones de la
obra.
El promotor estará obligado a que en la fase de redacción del proyecto se elabore un estudio
de seguridad y salud en los proyectos de obras en que se den alguno de los supuestos
siguientes:
Que el presupuesto de ejecución por contrata incluido en el proyecto sea igual o
superior a 75 millones de pesetas. (450.000 €)
Que la duración estimada sea superior a 30 días laborables, empleándose en algún
momento a más de 20 trabajadores simultáneamente.
Que el volumen de mano de obra estimada, entendiendo por tal la suma de los días de
trabajo del total de los trabajadores en la obra, sea superior a 500.
Las obras de túneles, galerías, conducciones subterráneas y presas.
Deberá ser aprobado antes del inicio de la obra, por el coordinador en materia de seguridad y
de salud durante la ejecución de la obra.
El plan de seguridad y salud podrá ser modificado por el contratista en función del proceso de
ejecución de la obra, de la evolución de los trabajos y de las posibles incidencias o
modificaciones que puedan surgir a lo largo de la obra, pero siempre con la aprobación
expresa del Coordinador de Seguridad y Salud.
Recurso Preventivo:
Cuando los riesgos puedan verse agravados o modificados en el desarrollo del proceso
o la actividad, por la concurrencia de operaciones diversas que se desarrollan sucesiva
o simultáneamente y que hagan preciso el control de la correcta aplicación de los
métodos de trabajo.
Cuando se realicen actividades o procesos que reglamentariamente sean considerados
como peligrosos o con riesgos especiales. (Sig. Diapositiva)
Cuando la necesidad de dicha presencia sea requerida por la Inspección de Trabajo y
Seguridad Social, si las circunstancias del caso así lo exige
Trabajos con riesgos especialmente graves de caída desde altura, por las particulares
características de la actividad desarrollada, los procedimientos aplicados, o el entorno
del puesto de trabajo.
Trabajos con riesgo de sepultamiento o hundimiento.
Actividades en las que se utilicen máquinas que carezcan de declaración CE de
conformidad.
Trabajos en espacios confinados.
Trabajos con riesgo de ahogamiento por inmersión.
Trabajos con exposición a radiaciones ionizantes en zonas controladas.
Trabajos con exposición a agentes tóxicos y muy tóxicos, y, en particular, a agentes
cancerígenos, mutagénicos o tóxicos para la reproducción.
Actividades en que intervienen productos químicos de alto.
Trabajos con exposición a agentes biológicos de los grupos 3 y 4.
Actividades de fabricación, manipulación y utilización de explosivos.
Trabajos propios de minería a cielo abierto y de interior, y sondeos en superficie
terrestre o en plataformas marinas.
Actividades en inmersión bajo el agua.
Actividades en obras de construcción, excavación, movimientos de tierras y túneles,
con riesgo de caída de altura o sepultamiento.
Actividades en la industria siderúrgica y en la construcción naval.
Producción de gases comprimidos, licuados o disueltos o utilización significativa de
éstos.
Trabajos que produzcan concentraciones elevadas de polvo silicio.
Trabajos con riesgos eléctricos, en alta tensión o en proximidad de las mismas.
Trabajos realizados en cajones de aire comprimido.
Trabajos que requieran montar o desmontar elementos prefabricados pesados.
Ejecución de Muros
Ejecución de Losa
Vaciado del túnel
Vigas estampidor
Fases de la Ejecución del muro
Plataforma de trabajo:
Elaboración de la armadura:
Colocación de armaduras:
Hormigonado del Muro Pantalla:
• Para poder dar comienzo a esta fase la zanja ha de estar llena de lodo bentonítico.
• Dicho tubo al ser capaz de alcanzar una profundidad de al menos 3 metros superior a
la parte superior del hormigón, evita que se contamine éste con los lodos bentoníticos,
lo que por diferencias de densidades, propiciará que los lodos vayan siendo extraídos
por la parte superior a medida que el hormigón se va depositando en la zanja.
Balsa de lodos:
Otros equipos de trabajo asociados:
Riesgos más importantes en la ejecución de muros pantalla:
Vigas Estampidor
P7.- Patologías
Una de las mayores dificultades que surgen en la construcción de cualquier túnel o espacio
subterráneo, en general, es la influencia del agua. Los túneles y cavidades subterráneas
tienden a actuar como drenes permanentes del terreno, siendo un gran problema constructivo
que se ha de solventar.
Los efectos del agua en falsos túneles suelen ser de menor medida que en los túneles
convencionales, aún así debemos tener muy en cuenta los siguientes aspectos:
En la excavación de un túnel en una zona contenedora de agua se debe tener en cuenta el flujo
de las filtraciones del agua hacia lugares de menor presión. Es por esto que se debe de
considerar la presión en los límites del túnel como presión atmosférica, de manera que
nuestro túnel actuará como drenaje de las aguas subterráneas, ya que estas tenderán a ir
hacia él.
Si estamos pensando en el diseño del túnel y sus pantallas, los empujes debidos al agua se
consideran dos casos principales:
- Estado hidrostático
- Agua en circulación
Salvo justificación en contra los cálculos se efectuaran por el método de las presiones
efectivas. En el caso que exista una capa freática en reposo en el trasdós del elemento de
contención, se considerará el empuje debido al terreno sumergido, total o parcialmente, y el
empuje hidrostático del agua.
El deslizamiento, este estado límite debe comprobarse tan solo en aquellos casos en los que la
máxima componente de los empujes horizontales sobre el muro sea mayor del 10 % de la
carga vertical total.
Según esta división existe una clasificación de las medidas a tomar en cuanto a las técnicas de
impermeabilización, así distinguiremos:
La impermeabilización de una obra subterránea puede tener distintos grados de exigencia, que
suelen depender del tipo de instalaciones que la obra vaya a albergar, como los túneles de
metro en donde se proyectan revestimientos en dos fases, siendo la impermeabilización el
único objetivo en la última fase.
Generalmente, hay una primera etapa, que consiste en captar las filtraciones singulares
permanentes y encauzarlas por medio de tubos u otro tipo de conductos que las lleven al
colector general. Cuando la dispersión de puntos con caudales sensibles es grande, cabe hacer
un tratamiento del terreno con inyecciones o recurrir a la impermeabilización total del túnel
con láminas impermeables.
El agua infiltrada debe ser conducida a los colectores del drenaje longitudinal para su
excavación por gravedad al exterior. Cuando el volumen de agua a evacuar es importante, es
conveniente instalar un sistema de bombeo en la red de drenaje.
En la mayoría de los casos esto es suficiente, en túneles superficiales en que estos accidentes
se hayan reflejado hacia el exterior, deben hacerse obras exteriores de regulación del terreno
y drenaje, para evitar que, en caso de fuertes lluvias, se produzcan filtraciones importantes en
los falsos túneles.
Dada la frecuencia con que se repiten las averías en los túneles debidas a humedades,
filtraciones y fugas, parece aconsejable dedicar una mayor atención a los Proyectos, en
relación con los métodos, procedimientos y materiales de revestimiento, en túneles
nuevos, a fin de conseguir con ello una impermeabilización apropiada con las máximas
garantías de eficacia y durabilidad
Los costes de impermeabilización para un túnel ya ejecutado son siempre superiores a
los costes de la impermeabilización de un túnel en ejecución
El sistema de impermeabilización en la construcción de un túnel debe ir en
consonancia con el sistema de excavación y revestimiento elegidos
Toda impermeabilización está compuesta de varias fases y la elección del conjunto de
ellas es lo que define un sistema
Es más económico y sencillo no desplazar el agua, sino captarla, drenarla y dirigirla a la cuneta.
Análisis de patologías:
Identificar las diferentes tipologías de túneles, tanto desde el punto de vista de los
métodos constructivos como de su utilización
Indicar la metodología a seguir en las inspecciones de los túneles
Analizar las patologías más frecuentes
Conocer los métodos habituales de reparación de túneles y auscultación para el
seguimiento de las medidas adoptadas
Visual
Métodos no destructivos: georradar, termografía, ultrasonidos, etc
Métodos destructivos: extracción de testigos