Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
La verdad es esa, y si no me cree, puedo decir que la fuente de la imagen de la derecha fue
Dos, tres, cinco, nueve veces; tantas y más las de contar monedas para un mísero pa- sacada del diario más sistémico, facho, capitalista y pinochetista que usted pueda encon-
saje de micro. Los vocingleros (1) están en todos lados, dejan el pecho sin aire, como trar, El Mercurio. Así es señor o señorita que adora o se siente representado por la fotito
al entrar de piquero al agua, pero importa una mierda; el vocinglero de la micro, el del del llamado orgullo, a usted lo visibilizan constantemente, lo muestran en la tele, hacen
matinal, el del noticiero, suenan como campanadas ininterrumpidas: ¡bong! ¡bong! programas homenajeándolo, y tiene representantes feministas en canales como el 13, que
¡bong! –“Tolera, tolera, tolera… lo violenta, lo ofende, lo agravia”- ¡Bong! ¡bong! por cierto esta manejado por el capitalista mas rico de Chile y dueño de todo lo que usted
¡bong! El vocinglero de economía, el de política, el de vivienda... ¡Cómo no olvidar ve, así es, el mismísimo Andrónico Luksic. Por lo tanto, saque cuentas, si grandes poderes
al de educación! Todos dicen lo mismo; todos son iguales. ¿Quién notaría diferencia nacionales apoyan su causa, entonces su revolución es afín y servil al sistema -al sistema
entre el freestyler con micrófono y parlante en la mano y un legislador de la Repúbli- injusto que imperó en tiempos del salitre y que impera ahora-. Sin mencionar el lobby de
ca de Chile? ¿Qué diferencia hay entre el emprendedor con gomina en el pelo y el le- las grandes transnacionales, las empresas como WOM, con propaganda de liberalismo ra-
gislador de la República de Chile? Muchos monos y un solo discurso: ¿quién quiere dical, sugiriendo a las madres dejar a sus hijos de lado por coger con el amante nuevo. Eso
hoy pensar? ¿Quién se atreve hoy a pensar? No hay más que relativistas, que no son es su revolución, un movimiento dirigido a la más acomodada burguesía que goza yendo a
sino escépticos jugando a bucear profundo. Pero hay una verdad ineludible: la reali- Loolapaloza y sólo quiere viajar para sacarse fotos en lugares paradisiacos; por eso le es-
dad obliga a asumir posturas y a afirmar verdades. El escepticismo es para los débiles torban los hijos… Pero los obreros, aquellos como los de Santa María de Iquique, como los
de carácter. ¿Qué nos dicen los vocingleros entones? Análisis, opiniones, análisis de niños y jóvenes que sacrificaron sus vidas en la Guerra del Pacifico, los 77 niños que die-
las opiniones y opiniones de los análisis, pero ¿quién puso sus temas sobre la mesa? ron su vida en la batalla de la Concepción, quienes yacen en la profunda alma del chileno
Son escultores de lindas frases, pero no saben de donde vino su destreza para cons- de a pie, en las poblaciones, en las calles, en ese hombre que se levanta día a día por levan-
truirlas ni mucho menos quién les entregó la arcilla con que las construyen. Son ana- tar al país (porque su alma es noble y sabe que en algo colabora con ello), mientras usted
listas de lo obvio, compungidos como el que oculta verdades incómodas: su concien- sube sus lindas fotos de la marcha a Instagram compartiendo unas chelas en algún bar por-
cia es cruel y los hace sonrojarse con un ardor de rostro. ¿Qué podrían decirle al que teño. Ese viejo que vende en la feria, el que sale de su casa a las 5 de la mañana de alguna
aun cuenta sus monedas para salvar el día, para comprar el pan de la once? ¿Qué les comuna en Santiago para ir a la construcción y anda con su ropa percudida, la señora de
solucionan con su vanidad? campo, la abuelita y tantos más.
Monos, muchos monos; monos adiestrados, monos balbuceantes, eso es lo que hemos Por lo tanto, amigo mío, sólo le puedo decir una cosa, como decía mi sabia madre:
logrado en 200 años de supuesta independencia. Que este mensaje llegue a oídos de “Sáquese las manitos de las bolitas y póngase a trabajar”
los incómodos; de aquellos a los que el vocinglero hace sangrar los oídos; aquellos
que ya no soportan sino por educación a los monos. Aquellos que han pasado frío,
hambre y penurias; aquellos a los que un crédito les machaca el escuálido sueldo de
¡¡¡¡¡Haz Patria y lucha en serio!!!!!
fin de mes. Vociferantes son sus conciencias, pero mudas sus bocas – “…deben ser
los problemas que aparecen en los medios los importantes”- se dicen a sí mismos y
agachan sus cabezas. A esos incómodos ofrecemos una voz; ofrecemos este eco de
sus conciencias. Esa conciencia que anhela la mejor de las condiciones; que anhela
problemas resueltos. Esos incómodos, mis hermanos, son los que ven con ojos impa-
sibles cómo camina la juventud hacia el abismo al que conducen esos dos murallones,
a saber, el uno que proclama la comuna y el otro que proclama al capital. Los incómo-
dos ven con malos ojos el destelleo orgásmico de los vocingleros, de los vociferado-
res de verdades comunes -de esas que huelen a caca-. La sospecha es más grande en
los corazones de los incómodos, pero esa sospecha se afirma en algo más concreto
que todas las verdades nacidas de la supuesta obra cúlmine de nuestra civilización, la
aparente panacea a todo el problema social, el alfa y el omega de los espíritus frígi-
EL BURGUESITO TAMBIÉN QUIERE ARMAR