Rutar, Michael at al. (2000), “La comprobación de Lic. Educación secundaria Esp. F.C. y E.

hipótesis casuales” en la conducta antisocial de los

Alumno. Benítez Martínez José Julián
jóvenes, Madrid Cambridge, PP 39-47
Maestro: Armando Robledo
Después de la relativa primavera de los 8 a los 12 años, la entrada a la pubertad implica un florecimiento de
los conflictos diferentes entre los varones y las mujeres. Comienzan los horarios de regreso a la casa, los
¿con quién andabas?, cuotas semanales, usos del tiempo libre; las tareas en el hogar pasan a ser cuestión de
las hermanas.

La segunda exigencia ha sido diferenciar entre indicadores de riesgo y mecanismos de riesgo. En pocas
palabras, los indicadores son rasgos que tienen relaciones directas con los procesos causales, pero que en sí
mismos no forman parte de los mecanismos que están directamente asociados con la causalidad
La violencia o conducta antisocial se puede provocar debido a:
 Pobreza y presión económica.
 Consumo de drogas.
 Causas Psicológicas
 Malas influencias.
Hay tres explicaciones alternativas concretas que siempre hay que tener en cuenta y someter a
comprobación.
En primer lugar, existe la posibilidad de que la flecha causal vuele en la dirección contraria, que la
conducta antisocial haya causado el supuesto factor de riesgo en vez de al contrario.
Es importante apreciar que las experiencias negativas que han sido provocadas por los mismos jóvenes
pueden sin embargo seguir teniendo efectos en su propia conducta.
La segunda posibilidad es que la asociación refleje una mediación genética en vez de un proceso de riesgo
ambiental. Es evidente que los padres no solo transmiten genes a sus hijos, sino que también ayudan a
configurar y seleccionar sus experiencias.
la personalidad de los padres pueden ser equivalentes a las características individuales que predisponen a los
niños a la conducta antisocial.
La tercera posibilidad que hay que considerar siempre es que la causalidad guarde relación no con la
conducta antisocial como tal, sino con algún otro rasgo con el cual da la casualidad que está asociada.
La conducta antisocial se asocia frecuentemente con otras variadas formas de perturbación emocional
La intensidad de los efectos
Hay numerosas maneras distintas de expresar la intensidad de los efectos que un factor de riesgo o protector
tiene sobre la conducta antisocial, razones conceptuales y estadísticas sólidas para preferir medir el delito y
sus predictores en términos dimensionales en vez de categoriales
Enfoques «positivistas»
Una preocupación enteramente justificable por la excesiva atención hacia las diferencias individuales al
considerar la causalidad, junto con un apropiado rechazo de las ideas de que cualquier factor puede
determinar actos delictivos.
Puntos principales
Conducta antisocial es un término muy amplio que actúa como un rasgo dimensional que la mayoría de las
personas muestran en mayor o menor grado. Nos hemos centrado en la conducta de las personas que tienen
entre 10 y 19 años.
 Las fuentes múltiples de información son importantes porque unas fuentes diferentes de información sobre
la conducta antisocial y la delincuencia producen imágenes muy diferentes.
  Los estudios longitudinales a gran escala y enfocados hacia el futuro de muestras de la población general
son los tipos de estudios más útiles porque dilucidan las raíces y consecuencias de la conducta antisocial a lo
largo de la vida. Otros tipos de estudios son útiles porque responden a cuestiones específicas.
 Hay una compleja interacción de doble dirección entre rasgos biológicos y conducta que es preciso
reconocer en cualquier consideración de los testimonios sobre vías causales. Cada uno influye al otro.
 El entendimiento de la causalidad se ha desarrollado considerablemente, incluyendo: (a)-la consideración
de por lo menos cinco tipos de causalidad; (b) la apreciación de que lo que actúa en un nivel de la
explicación
Rutar, puede
Michael at no (2000),en“La
al. actuar comprobación
otro; (c) una mayordeexploración de los efectos
Lic. Educación concatenados indirectos;
secundaria Esp. F.C.yy(d)
E.
una mejor comprobación de las hipótesis causales
hipótesis casuales” en la conducta antisocial de los
Alumno. Benítez Martínez José Julián
jóvenes, Madrid Cambridge, PP 39-47
Maestro: Armando Robledo
Después de la relativa primavera de los 8 a los 12 años, la entrada a la pubertad implica un florecimiento de
los conflictos diferentes entre los varones y las mujeres. Comienzan los horarios de regreso a la casa, los
¿con quién andabas?, cuotas semanales, usos del tiempo libre; las tareas en el hogar pasan a ser cuestión de
las hermanas.
La segunda exigencia ha sido diferenciar entre indicadores de riesgo y mecanismos de riesgo. En pocas
palabras, los indicadores son rasgos que tienen relaciones directas con los procesos causales, pero que en sí
mismos no forman parte de los mecanismos que están directamente asociados con la causalidad
La violencia o conducta antisocial se puede provocar debido a:
 Pobreza y presión económica.
 Consumo de drogas.
 Causas Psicológicas
 Malas influencias.
Hay tres explicaciones alternativas concretas que siempre hay que tener en cuenta y someter a
comprobación.
En primer lugar, existe la posibilidad de que la flecha causal vuele en la dirección contraria, que la
conducta antisocial haya causado el supuesto factor de riesgo en vez de al contrario.
Es importante apreciar que las experiencias negativas que han sido provocadas por los mismos jóvenes
pueden sin embargo seguir teniendo efectos en su propia conducta.
La segunda posibilidad es que la asociación refleje una mediación genética en vez de un proceso de riesgo
ambiental. Es evidente que los padres no solo transmiten genes a sus hijos, sino que también ayudan a
configurar y seleccionar sus experiencias.
la personalidad de los padres pueden ser equivalentes a las características individuales que predisponen a los
niños a la conducta antisocial.
La tercera posibilidad que hay que considerar siempre es que la causalidad guarde relación no con la
conducta antisocial como tal, sino con algún otro rasgo con el cual da la casualidad que está asociada.
La conducta antisocial se asocia frecuentemente con otras variadas formas de perturbación emocional

La intensidad de los efectos

Hay numerosas maneras distintas de expresar la intensidad de los efectos que un factor de riesgo o protector
tiene sobre la conducta antisocial, razones conceptuales y estadísticas sólidas para preferir medir el delito y
sus predictores en términos dimensionales en vez de categoriales
Enfoques «positivistas»
Una preocupación enteramente justificable por la excesiva atención hacia las diferencias individuales al
considerar la causalidad, junto con un apropiado rechazo de las ideas de que cualquier factor puede
determinar actos delictivos.
Puntos principales
Conducta antisocial es un término muy amplio que actúa como un rasgo dimensional que la mayoría de las
personas muestran en mayor o menor grado. Nos hemos centrado en la conducta de las personas que tienen
entre 10 y 19 años.
 Las fuentes múltiples de información son importantes porque unas fuentes diferentes de información sobre
la conducta antisocial y la delincuencia producen imágenes muy diferentes.
 Los estudios longitudinales a gran escala y enfocados hacia el futuro de muestras de la población general
son los tipos de estudios más útiles porque dilucidan las raíces y consecuencias de la conducta antisocial a lo
largo de la vida. Otros tipos de estudios son útiles porque responden a cuestiones específicas.
 Hay una compleja interacción de doble dirección entre rasgos biológicos y conducta que es preciso
reconocer en cualquier consideración de los testimonios sobre vías causales. Cada uno influye al otro.
 El entendimiento de la causalidad se ha desarrollado considerablemente, incluyendo: (a)-la consideración
de por lo menos cinco tipos de causalidad; (b) la apreciación de que lo que actúa en un nivel de la
explicación puede no actuar en otro; (c) una mayor exploración de los efectos concatenados indirectos; y (d)
una mejor comprobación de las hipótesis causales