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PARADIGMAS DE LA PSICOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN

Resumen

Doctorando:
Disney Biviana Quiroga Arias

Presentado a:
Dra. Roquelina Jakeline Cabré Hernández
PSICOLOGÍA EDUCATIVA

CENTRO UNIVERSITARIO ISIC


DOCTORADO EN EDUCACIÓN
HISTORIA DE LA EDUCACIÓN LATINOAMERICANA
2019
PARADIGMAS DE LA PSICOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN
Resumen

“Intentar enseñar sin conocer cómo funciona el


cerebro pronto será como diseñar un guante
sin nunca antes haber visto una mano”

Francisco Mora

Después de la revisión bibliográfica realizada es necesario decir que la

Psicología ha aportado un sinnúmero de conocimientos a la educación. Considero

que a partir del momento en el que la educación se sirvió de los hallazgos de la

psicología, esta comenzó a ser más efectiva, coherente y humana. En este resumen

se expondrán algunas características de los principales paradigmas psicológicos y

expresaré mis apreciaciones acerca de su relevancia en el ámbito educativo.

Para iniciar debo afirmar que la educación está influenciada constantemente

por agentes de otros ámbitos: políticos, sociales, económicos, culturales, entre otros.

Además debe responder a los requerimientos de la actualidad, formar a los

ciudadanos que la sociedad necesita. De ahí la importancia de tener armas para

ofrecer una educación que se permea de tantos factores y en la que recae gran

responsabilidad. Por esto es importante que los legisladores, directivos, docentes y

otros agentes educativos conozcan los aportes que los diversos paradigmas de la

psicología educativa, ofrecen.

Uno de los paradigmas de los que se toman elementos que aún se emplean

en la educación pese a su antigüedad, es el conductismo. Este paradigma se

fundamenta en las teorías de Skinner, resultado de la experimentación. La postura


del conductismo en relación al aprendizaje es que este es regulado por el mismo

estudiante, se da a partir de la repetición y de la exposición a estímulos para reforzar

la conducta. Además, considera que la enseñanza es una forma de “adiestrar” al

estudiante para que aprenda y almacene conocimientos. Por lo tanto la evaluación se

basa en los resultados obtenidos y no en el proceso.

Para los conductistas la educar es hacer que el estudiante refleje lo que se le

quiere enseñar, no elabora conocimiento ni lo transforma, solo lo repite, lo memoriza.

Sin embargo, considero que hay aspectos del conductismo que son útiles, por

ejemplo la necesidad de repetir un procedimiento o una acción para poderla

aprender. Esto se usa por ejemplo para el aprendizaje de las operaciones básicas

en las que se debe seguir un proceso similar cada vez que se va a solucionar un

ejercicio. Además, creo que no se puede descartar del todo la memorización, existen

datos que es necesario aprenderlos de memoria para que sean útiles en la vida, por

ejemplo, las fechas de sucesos o los nombres de algunos personajes históricos.

Otro paradigma que ha aportado con sus hallazgos a la educación es el

histórico cultural, cuyo precursor es Lev Vygotsky. Este paradigma reconoce que en

el aprendizaje influye también el contexto del estudiante, no sólo los métodos de

enseñanza si no la realidad en el que el niño o el joven está inmerso. Afirma además,

que el aula debe asemejar la dinámica social, para lo cual considera importante

promover “la interacción entre personas y entre ellas y su entorno, profundizando en

la reciprocidad de sus acciones, asumiendo el proceso de enseñanza – aprendizaje

como un proceso interactivo” (Ramos, 2017).


Para este paradigma el aprendizaje se da en interacción con el otro y con su

contexto, además se regula por las “zonas de desarrollo próximo” entendidas como

la distancia que existe entre lo que el estudiante puede hacer solo y lo que puede

lograr con ayuda de otros (Abreu & Cabré, s.f.). Por lo tanto el propósito de la

educación es promover que el estudiante logre su desarrollo potencial, debido a que

para Vygotsky (citado por Abreu & Cabré, s.f.) “la educación y la enseñanza no

pueden esperar a que se produzca el desarrollo psíquico del niño, sino que tienen

que convertirse en impulsoras de ese desarrollo; por tanto, la educación, la

enseñanza, conducen y guían el desarrollo”. Además, en el aprendizaje el material

educativo juega un rol importante. Shuare (citado por Valera, 2008) afirma que “el

rasgo fundamental de la actividad humana es su carácter mediatizado por el

instrumento, que se interpone entre el sujeto y el objeto de la actividad”. Por su parte,

la evaluación se da en el proceso y tiene como finalidad tomar acciones para

garantizar el aprendizaje, se hace a través de la observación, la solución de

cuestionarios y de trabajos grupales.

Con respecto a los postulados de este paradigma considero que en el aula de

clase es fundamental promover actividades en las que se dé la interacción de los

estudiantes, de esta forma los niños adquieren conocimientos que no están si quiera

presupuestados. Además, para el docente es fundamental conocer lo que los

estudiantes pueden hacer de acuerdo con su potencial y emplear recursos

educativos para facilitar el aprendizaje.

El cognitivismo es otro importante paradigma educativo. La educación para

este paradigma se debe centrar en la necesidad de enseñar a pensar al estudiante y


de incentivar su creatividad para que pueda transferir el conocimiento teórico al

ámbito práctico. De ahí la importancia “de propiciar un aprendizaje con sentido para

el sujeto que aprende” (Valera, 2008, p.48). Propone que el aprendizaje debe ser un

proceso activo en el que el estudiante se involucra y lo construye teniendo en cuenta

sus conocimientos previos, su nivel de desarrollo intelectual y el contexto en el que

se desenvuelve. Por ello, una clase que se base en este paradigma se caracteriza

porque en ella se respeta el ritmo de aprendizaje de los estudiantes, se proponen

actividades para practicar lo aprendido, se busca la solución a problemas

relacionados con el contexto y se promueve el “aprendizaje significativo”.

Creo que este paradigma se acerca mucho a la educación que se requiere en

la actualidad, en la que el alumno sea libre de crear sus propios procesos para hallar

múltiples respuestas a los problemas propuestos, porque la vida requiere de dichas

habilidades, ser capaz de llevar a cualquier contexto los conocimientos construidos.

La evaluación en este paradigma no solo se aplica al proceso de aprendizaje del

estudiante, sino que también evalúa los métodos, los contenidos, los recursos que se

emplean para determinar su pertinencia.

Para finalizar, el humanismo es un paradigma que se centra en el ser humano,

no solo en el ámbito académico sino en todo su potencial, hace referencia a la

importancia de promover su formación integral. Para el humanismo cada ser humano

es único por lo que propone que la educación debe respetar la individualidad y los

intereses de sus estudiantes. Por lo tanto, el estudiante puede elegir lo que desea

aprender y el docente debe proveer los recursos para que pueda desarrollar su

talento particular.
En el marco de la educación guiada por este paradigma, en el aula de clase

cada uno aprende lo que desea a partir de relaciones que se basan en un trato

afectivo. Por lo tanto la responsabilidad de aprender recae en el propio estudiante y

es él quien evalúa su propio aprendizaje y su actitud frente al conocimiento.

Considero que este paradigma en el contexto colombiano actualmente es una

utopía, porque los docentes carecemos de la formación que se requiere para poder

guiar a un estudiante de acuerdo a sus intereses, me refiero a que sería necesario

ser un docente versátil en diferentes ámbitos del conocimiento. Además, sería

necesaria que las escuelas estuvieran dotadas de múltiples recursos que facilitaran

las prácticas de los conocimientos adquiridos. Sin embargo, estoy convencida que la

formación integral de los estudiantes debe ser una premisa de cualquier sistema

educativo porque más importante que ser un buen profesional, es convertirse en un

excelente ser humano.

En conclusión, los docentes tenemos en los diferentes paradigmas múltiples

recursos a nuestra disposición de los que nos podemos servir de acuerdo con

nuestro contexto, las características de los estudiantes, los saberes que se quieran

enseñar, los recursos que tengamos a disposición. Lo anterior debido a que no hay

un paradigma perfecto que se adapte a todas las necesidades, de allí la importancia

del juicio del docente para elegir de las variadas opciones, las que más se adapten a

sus necesidades.
Referencias

González, J. & Cabré, R. (s.f.). Enfoques de aprendizaje: el debate entre lo


tradicional y lo actual.

Ramos, E. (2007). Paradigmas de la Psicología Educativa. Recuperado de


https://www.gestiopolis.com/paradigmas-de-la-psicologia-educativa/

Valera, O. (2008). Las corrientes de la Psicología contemporánea. Primera


reimpresión.

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