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PROBLEMAS

DE PSICOLOGIA
GENERAL
S. L. RUBINSTEIN

te

tratados y manuales
grijalbo
MEXICO BARCELONA BUENOS AIRES
PROBLEMAS DE PSICOLOGIA GENERAL
Fraducción: Josep Marta Güell de Ia edición original en ruso

© 1976, V.A.A.P.
D.R. © 1983, por EDITORIAL GRIJALBO, S.A.
Calz. San Bartolo Naucalpan nú m. 282
Argentina Poniente 11230
"-liguei Hidalgo, México, D.F.

PRI'vIERA EDICIO:-.I

Este libro no puede ser reproducido,


total o parcialmente,
sin autorización escrita del editor.
ISB:>J 968-419-337-8
1.'vIPRESO E:-.I 'vIEXICO
Introducción:

Los problemas de psicología general


en los trabajos de S.L. Rubinstein
. (teoría y metodología)

S.L. Rubinstein es un eminente teórico de Ia ciencia psicológica


soviética. Es característica de Rubinstein Ia amplitud de sus intere-
ses científicos; ai mismo tiempo, su elaboración de muchos proble-
mas de psicologia queda unificada por ideas com unes en Ias que se
realiza el proyecto de construir Ia teoria de Ia psicología soviética.
Este libro consta de dos partes. La primera incluye unos ar-
tículos aparecidos en distintas épocas y en distintas publicaciones
(colecc iones, trabajos de institu tos, revistas, etc.). En estos ar-
tículos, el autor formula unas ideas que luego había de desarrollar
en Ias siguientes investigaciones monogrâficas o que tienen impor-
tancia por .sí mismas. La segunda parte dei libro está constituida
por el original inédito de Rubinstein El hombre y el mundo.!
Todos los materiales que publicamos tienen gran importancia
para comprender Ias leves de Ia creación y desarrollo de Ia ciencia
psicológica soviética. Pero no se trata sólo de Ia historia de Ia
psicologia. Los puntos de vista de Rubinstein constituyen una par-
te orgânica dei estado actual de Ia ciencia psicológica soviética.
En este artículo preliminar no es posible ofrecer una caracteris-
tica de todos o de Ia mayoria de los problemas tratados en este
libro. Nos detendremos tan sólo en algunos de los problemas teóri-
cos de Ia psicologia que Rubinstein examina en loe materiales que
publicamos, y prestaremos especial atención a Ias ideas principales
de Ia obra El hombre y el mundo.
El problema central de Ia investigación de Rubinstein es Ia cues-
tión de Ia naturaleza de 10 psíquico. Rubinstein se propone investi-
1. Este original sóIo se ha publicado en parte. Veáse: Cuestiones de Filoso-
[ia, 1966, No. 7; 1969, No. 8; Problemas metodológicos y teóricos de psico-
logia, Moscú, Ciencia, 1969.

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gar Ias diferentes relaciones objetivas ~~o psíquico, en cada una
de cuyas relaciones aparece en una nueva calidad (por ejemplo, en
calidad de realidad reflejada, en calidad de ~ctividad nerviosa supe-
rio r). Con ello, la tarea fundamental ha sido determinar el puesto
de 10 psíquico en Ia relación universal y mutu dependencia de los
[enômenos de Ia realidad objetiva. Los [enômenos psíquicos se in-
cluyen orgánicamente en Ias dependencias causales de Ia realidad
objetiva; aparecen, por una parte, como condicionados por Ias
acciones dei mundo exterior, por Ias circunstancias objetivas de Ia
vida del hombre, y por otro condicionan Ia conducta dei hombre.
La característica psíquica consiste pues en Ia característica de Ias
relaciones con Ia realidad objetiva.
La psicologia estudia los procesos psíquicos bajo Ias leyes espe-
cíficas de su discurso en unidad con su contenido específico. Ade-
más de los procesos psíquicos, también Ias formaciones psíquicas
forman parte de 10 psíquico. Las formaciones psíquicas y los pro-
cesos psíquicos están recíprocamente relacionados y sólo pueden
estudiarse en esta relación recíproca. El medio fundamental de
existencia de Ia psíquico es su existencia como actividad, como
proceso. El hombre es el portador de los procesos psíquicos y de
Ias formacionee psíquicas. Por ello, Ia tarea fundamental de Ia
psicologta, en opinión de Rubinstein, consiste en estudiar Ia mente
como cualidad cualitativamente específica de Ia personalidad. AI
estudiar Ias leyes del nacimiento y desarrollo de Ia conciencia, Ia
psicologta estudia a ésta en el proceso de establecimiento de Ia
personalidad. El conocimiento de 10 psíquico está condicionado
por todas las relaciones esenciales concretas en que se encuentra
incluido el hombre, por todas Ias formas de su actiuidad.
Para comprender Ia naturaleza de 10 psíquico tiene gran impor-
tancia analizar los problemas de Ia correlación entre conciencia y
actividad, correlación a Ia que Rubinstein dedica una serie de tra-
bajos. Su artículo "Problemas de psicología en los trabajos de Karl
Marx" tiene a este respecto un papel excepcional.
El contenido fundamental dei trabajo de Marx Manuscritos
económico-filosóficos de 1844 es un análisis de Ia actividad, dei
trabajo y de Ia conciencia humana. Desde el punto de vista marxis-
ta, Rubinstein presenta, en calidad de actividad inicial, el descubri-
miento de Ia misma como forma de relación dialéctica entre el
sujeto y el objeto de dicha actiuidad. Esta acción recíproca da
lugar a una correlación entre sujeto y objeto, a Ia relación entre Ia
actividad y el objeto, entre Ia actividad y Ia conciencia: en Ia rela-
ción recíproca entre hombre y naturaleza cambia tanto Ia naturale-
za como el hombre. Rubinstein pone su atención en Ia proposición

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marxista según Ia cual el hombre, en el proceso de actividad, ai
transformar el objeto, descubre sus fuerzas esenciales. En última
instancia, el hombre es el resultado de su propio trabajo. Ru binstein
subraya especialmente Ia importancia que tiene para Ia psicologia
esta proposición acerca de Ia relaciôn entre actividad y conciencia,
así como el carácter social dei trabajo dei hom bre. El trabajo es
una actividad regulada por Ia conciencia dei hombre. Pero Ia con-
ciencia no es algo que exista fuera dei trabajo, que surja antes que
él y que le sea ajeno. La conciencia se forma en Ia actividad. La
peculiaridad específica dei trabajo, como forma de actioidad huma-
na, es su carácter social. El carácter social de Ia actividad humana
(tanto práctica como teórica) condiciona el carácter social de Ia
conciencia humana. "... La psicologia dei hombre y de su activi-
dad extrae su contenido objetivo de la actitud dei hombre hacia
otro hombre, hacia Ia sociedad ... La actitud social hacia otras per-
sonas condiciona en el hombre su actitud hacia Ia naturaleza, y en
general hacia el objeto. El hombre existe como hombre sólogracias
a su actitud hacia otro hombre".
Refleio de Ia existencia, concebida por Ia existencia, Ia concien-
cia condiciona en su forma ideal Ia actitud real dei hombre hacia el
medio. También estas relaciones se establecen y manifiestan en la
actividad dei hombre, por mediación de Ia misma. Conciencia y
actividad "están recíprocamente relacionadas de tal modo que se
abre una auténtica posibilidad de iluminar de alguna manera Ia
conciencia dei hombre a través dei análisis de su actividad, en Ia
que Ia conciencia se forma y se descubre" . La actioidad se adscri-
be ai campo de la investigación psicológica. Conciencia y actiui=
dad forman un todo orgânico, no son idénticas pero se hallan en
continua relación recíproca.
Rubinstein formuló el principio de Ia unidad entre conciencia y
actividad que se ha convertido en uno de los principios metodolô-
gicos determinantes en gran medida dei desarrollo de la ciencia
psicológica soviética. La consecuente aplicación de este principio a
las investigaciones psicológicas ha significado Ia comprensión de la
conciencia, de Ia mente, como proceso, como actividad dei sujeto,
dei indiuiduo real.
Uno de los problemas teóricos generales que Rubinstein elabora
y presenta con bastante amplitud en el presente libro es el proble-
ma dei desarrollo de Ia mente. Rubinstein demuestra que el desa-
rrollo de los procesos psíquicos no radica sólo en su crecimiento
sino en su variación, que discurre por una serie de estadios, de
etapas que se caracterizan por peculiaridades específicas cuyas le-
yes y condicionamiento debe descubrir Ia investigaciónpsicológica.

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Basândose en proposiciones contenidas en los trabajos de Marx,
Rubinstein aplica el enfoque histórico ai examen dei desarrollo de
Ia mente. Los fenômenoe psíquicos se desarrollan dentro dei pro-
ceso eoolu tivo dei mundo orgânico, en el curso dei desarrollo his-
tórico de Ia Humanidad y en el proceso de Ia vida individual dei
hombre. Rubinstein concede su atención a Ia característica de cada
uno de estos grados de desarrollo, y destaca algo determinante de
los mismos. Así, para el desarrollo [ilogenético de Ia mente resulta
importante una proposición acerca dei papel determinante dei gé-
nero de Ia vida en el desarrollo de Ia mente. La ley fundamental
dei desarrollo histórico de Ia mente dei hombre, de su conciencia,
consiste en que el hombre se desarrolla en el trabajo. AI transfor-
mar Ia naturaleza y crear una cultura, el hombre cambia él mismo,
forma y desarrolla su propia conciencia. "El mundo material en-
gendrado por Ia actiuidad humana condiciona todo el desarrollo de
los sentimientos humanos, de Ia psicologta humana, de Ia concien-
cia humana" El desarrollo histórico de Ia actiuidad
humana condiciona el desarrollo histórico de Ia conciencia. La
mente dei hombre es un producto de Ia práctica históricamente
desarrollado. El principio dei desarrollo está relacionado con el
principio dei historicismo. El condicionamiento por los productos
dei trabajo formados históricamente, por Ias formas de actiuidad
humana, es el rasgo específico de Ia mente humana. El carácter
histórico de Ia conciencia consiste en que ha surgido con Ia apari-
ción dei hombre como ser social, y también en que se desarrolla en
el proceso de una humanidad que euoluciona históricamente, de-
terminándose por condiciones histórico-sociales.
Punto de partida para comprender el desarrollo individual de Ia
mente, de Ia conciencia dei hombre, es Ia proposición fundamental
sobre el desarrollo de Ia conciencia en laactividad. Estaproposición
determina el planteamiento y resolución de los problemas bási-
cos dei desarrollo de Ia mente dei hombre.
La cuestión fundamental en el problema dei desarrollo indivi-
dual de Ia mente es Ia correlación entre desarrollo y enseiianza,
desarrollo y educación. Rubinstein formula una serie de proposi-
ciones de sustancial significancia que tienen una importancia ac-
tual, tanto teórica como práctica, para construir Ias bases de Ia
ciencia pedagógica. El artículo "La ciencia psicológica y el tema de
Ia educación" contiene una serie de importantes proposiciones teó-
ricas. EI nino se desarrolla educándose y aprendiendo, indica
Rubinstein. La educación y Ia enseiianza se conectan ai proceso
mismo dei desarrollo dei nino. La tarea de Ia educación y Ia ense-
iianza consiste en formar el desarrollo dei nino condicionando su

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maduración. De gran importancia práctica es Ia proposición de
Rubinstein en el sentido de que "Ias cualidades personales psíqui-
cas del nino, sus facultades, rasgos de carácter, etc., así como Ias
peculiaridades psíquicas de Ias procesos (percepción, memoria,
etc.), diferentes en Ias diferentes grados de desarrollo y de Ias dife-
rentes individuos, no sôlo se manifiestan sino que se forman en el
curso de Ia propia actividad dei nino, y que por media de dicha
actividad, el nino, bajo Ia âirecciàn dei pedagogo, se conecta acti-
vamente a Ia vida de Ia colectioidad, asimilando normas y do-
minando los conocim ien tos alcanzados en el curso dei desarrollo
histórico de Ia actividad cognoscitiua de Ia Humanidad",
La resolución de Ias problemas de Ia correlaciãn entre enseiian-
za y desarrollo, crecimiento y maduración (en el proceso de desa-
rrollo), presupone una determinada resolución dei problema de Ias
fuentes y de Ias fuerzas motrices del desarrollo. Bajo otra forma,
esta cuestión aparece como el problema de 10 biológico y Ia social
en el hombre, dei papel de 10 externo y 10 interno en el desarrollo.
Una serie de artículos de este libro, y especialmente el artículo
"Problema de Ias facultades y cuestiones de teoría psicológica ",
contienen proposiciones sustanciales a este respecto. La determina-
ción dei desarrollo de los fen6menos psíquicos, en particular de Ias
facultades, relaciona estrechamente 10 natural y 10 social, Ia exter-
no y Ia interno. No es 10 uno o 10 otro 10 que determina el desarro-
llo sino 10 uno y 10 otro.
Rubinstein critica ciertos puntos de vista según Ias cuales el de-
sarrollo de Ia mente dei hombre se define sôlo por determinación
externa. En particular, ai hablar de Ias facultades dei hombre, Ru-
binstein indica que no s610 son producto de Ia enseiianza, de Ia asi-
milación, que no son exclusivamente efecto dei condicionamiento
externo, sino que de alguna manera forman parte de Ias condicio-
nes de que parte Ia enseiianza. En Ia [ormaciôn de Ias facultades no
debe tratarse de una acción unilateral sobre el hombre, sino de una
mutua dependencia entre el hombre y el mundo material.
"Las facultades de Ias personas -escribe Rubinstein-: se forman
no sôlo durante el proceso de asimilación de los productos crea-
dos por el hombre a 10 largo dei proceso del desarrollo histórico,
sino también durante el proceso de su creación; el proceso de crea-
ción del mundo material por el hombre es ai propio tiempo el
desarrollo por él de su propia naturaleza",
En el conjunto de condiciones internas que meâiatizan el efecto
de Ias influencias externas y en cierta medida determinan Ia forma-
ción de Ias facultades dei hombre cabe incluir Ias peculiaridades
na tu rales de éste. A tal efecto, Rubinstein indica que si Ias condi-

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ciones naturales, orgânicas, no pueden explicar los cambios en Ia
actiuidad mental dei hombre, tampoco es posible excluirias como
condiciones para explicar esta actioidad,
Rubinstein descubre Ia influencia dei principio de desarrollo en
psicologia analizando una serie de problemas psicológicos concre-
tos (desarrollo de Ia percepción, dei lenguaje, dei pensamiento,
etc.) que presenta en los artículos publicados en este libro ("El
problema de Ias fases de Ia observación ", "Psicologia dei lengua-
je ", "Algunas observaciones acerca de Ia psicología de los sordo-
mudos ciegos ").
El problema de Ia personalidad ocupa el principal lugar en los
artículos que publica en el presente libro. En particular, ocupa ya
un puesto esencial en el artículo "Problemas de psicología en los
trabajos de Karl Marx". En él, basándose en Ias proposiciones que
figuran en los trabajos de Marx, Rubinstein formula una serie de
conciusiones de principio que luego han servido de base teórica a
Ia psicología soviética de Ia personalidad. Con toda jus tic ia, Rubins-
tein indica el estado poco satisfactorio dei estudio de Ia personali-
dad en psicología. AI propio tiempo -y sobre ello insiste Rubins-
tein más de una vez- no puede haber una interpretación auténti-
camente científica de ningún fenómeno psíquico ai margen dei
estuâio de Ia personalidad. El problema de Ia personalidad adquie-
re una importancia capital en Ia construcción de Ia ciencia psicoló-
gica.
La psicología no puede reducirse ai análisis de procesos y fun-
ciones separados de Iapersonalidad, desperso nalizados, como hac ían
los representantes dei funcionalismo. Rubinstein se alza decidido
contra el funcionalismo de Ia psicologia introspectiva. A su iuicio,
para superar el funcionalismo, tiene gran importancia Iaproposición
sobre el condicionamiento social de Ia concíencia dei hombre, y Ia
realización, en psicolo.gía, de Ia proposiciôn marxista en el sentido
de que Ia esencia de Ia personalidad es un conjunto de relaciones
sociales. "Las relaciones sociales son relaciones en Ias que no en-
tran aislados órganos de los sentidos o procesos psíquicos, sino el
hombre, Ia personalidad. La determinante influencia de Ias rela-
ciones sociales y dei trabajo en Ia formación de Ia mente tiene
lugar sólo condicionadamente a través de Ia personaliâad".
Rubinstein indica que, en Ia exolicaciôn de los [enômenos psíqui-
cos, Ia personalidad aparece como una coniunciôn de condiciones
internas unidas en un todo a través del cual se retractan todas Ias
influencias externas. Esto coloca a Ia personalidad en el centro de
lainvestigación psicológica y determina el enfoque de todos los
problemas de Ia psicologta. Pero ai propio tiempo, Ia personalidad

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no es tema únicamente de Ia ciencia psicológica. Esto 10 indica Ru-
binstein repetidas veces ai protestar contra Ia psicologización de Ia
personalidad. La comprensión de Ia conciencia dei hombre es esen-
cial para caracterizar psicológicamen te Ia personalidad. Sin concien-
cia no hay personalidad, pero Ia personalidad no se reduce a Ia
conciencia. Tomando como punto de partida Ia definición marxis-
ta de Ia esencia de Ia personalidad como conjunto de relaciones
socia les, Ia investigación psicológica debe necesariamente estudiar
ai hombre real y concreto que aparece en estas relaciones sociales.
Pero el hombre es parte de Ia naturaleza. Debido a esto, resulta
también esencial para Ia psicologia el problema de Ia correlación
entre 10 natural y 10 social dei hombre. Rubinstein subraya el pen-
samiento de Marx que determina Ia correlación sustancial entre 10
biológico, 10 psicológico Y 10 social dentro de Ia personalidad, pro-
blema no menos agudo y actual hoy día que treinta o cuarenta
anos atrás. "... para Marx -escribe- Ia pereonalidad, y ai propio
tiempo su concepción, están condicionadas por Ias relaciones so-
ciales, y su desarrollo se determina ante todo por Ia dinámica de
estas relaciones. Sin embargo, dei mismo modo que rechazar Ia psi-
cologización de Ia personalidad no significa excluir a Ia conciencia
y a Ia autoconciencia, rechazar Ia biologización de ningún modo
significará Ia exclusión de Ia biologia, dei organismo y de Ia natura-
leza, arrancándolos de Ia personalidad. La naturaleza psicofísica no
queda desplazada ni neu tralizada por Iasrelaciones sociales sino que
éstas Ia condicionan y reestructuran: jla naturaleza deuiene hom-
bre!".
Partiendo dei análisis marxista de Ia correlación entre naturaleza
y hombre, Rubinstein indica acertadamente que no basta una fór-
mula general sobre Ia correlación entre 10 natural y 10 social para
descu brir sus entrelazamientos reales y complejos, sino que se
requiere un anâlisis concreto. Rubinstein da un análisis concreto
de ciertos aspectos de este problema al elaborar Ia cuestión de Ia
esencia de Ias facultades, de Ias leves de su formulación.

AI analizar el trabajo de Marx Manuscritos económico-filosófi-


cos de 1844, Rubinstein descubre su insuperable importancia para
Ia psicoiogia.
En contraposición ai antropologismo de Feuerbach, que trata
con una abstraccion dei hombre, Marx analiza ai hombre real, que
vive en unas determinadas condiciones histórico-sociales, que cam-
bia con el cambio de estas condiciones y que se encuentra enunas
determinadas relaciones eociales con otras personas. En contradic-
ción con Ia teoría hegeliana, cuyo problema principal son Iasrelacio-

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nes entre el eeptritu y Ia naturaleza, Marx plantea Ia cuestión de Ias
relaciones entre el hombre y Ia naturaleza, entre el sujeto y el
mundo material. "De Ia concepción general de Marx se deduce,
creemos, que el punto inicial en Ia teoría dei conocimiento no es Ia
relación entre el pensamiento, Ia conciencia o Ia idea y el objeto,
sino Ia correlación entre el hombre como sujeto de Ia actividad
teórica y práctica, y el mundo material".
Estas dos líneas de análisis marxista llevaron a Rubinstein a Ia
investigación de Ia cuestión teórica fundamental dei lugar dei hom-
bre en el mundo.
El hom bre entra en relación recíproca real con Ia realidad obje-
tiva y transforma con su actividad el mundo exterior. En estas rela-
ciones reciprocas Ia conciencia dei hombre ocupa un determinado
lugar. Aparece como reguladora de Ia conducta dei hombre, de su
actividad. Este planteamiento dei problema lleuô a Rubinstein a Ia
conclusión de que Ia relaciôn gnoseológica fundamental no radica
en Ia correlación de Ias ideas e imágenes con el objeto o Ia existen-
cia, sino en Ia correlación entre Ia conciencia y Ia existencia, y por
consiguiente el problema dei lugar de Ia conciencia en el mundo
elaborado por él en su libro EI ser y Ia conciencia, no es un pun-
to de partida sino que debe ser refundido en otro problema fun-
damental y original, en el problema de Ia correlación entre existen-
cia y hombre, en el problema dei lugar dei hombre en el mundo.
AI planteamiento y elaboración de este problema se dedica Ia
obra de Rubinstein El.hombre y el mundo. Muchas ideas de Ru-
binstein, expuestas en este último trabajo, serán asimiladas y utili-
zadas en futuras investigaciones de Ia psicología y Ia [ilosofia. El
propio Rubinstein no ha terminado el manuscrito. No todos los
problemas expuestos en él han sido elaborados con suficiente ple-
nitud, muchas cuestiones han quedado solamente planteadas y Ia
formulación de una serie de proposiciones no es definitiva. Pero
este libro es Ia continuación lógica de Ias investigaciones psicológi·
cas y filosóficas de Rubinstein reflejadas en los artículos de este
libro y también en sus monografias fundamentales. El trabajo El
hombre y el mundo es Ia culminación de Ias investigaciones teóri-
cas de Rubinstein. Sólo se puede comprender Ia obra de Rubinstein
como es debido estudiando este último trabajo. Básicamente El
hombre y el mundo es un trabajo filosófico. En él se plantean mu-
chos problemas filosóficos fundamentales entre los que destacan el
de Ia existencia, el dei hombre, y el de Ia correlación entre ambos.
Este trabajo tiene una importancia excepcional también para mu-
chas otras ciencias sobre el hombre.

*Trad. en espaãol por Editorial Grijalbo, México, 1963.

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La idea fundamental que ensarta todo el trabajo de cabo a cabo
es la idea de la inclusión del hombre en el conjunto de la existen-
cia. R ubinstein analiza el desarrollo de la ex istencia y las concepcio-
nes filosóficas que caracterizan su esencia. A nivel de naturaleza
orgânica e inorgânica, no había en la existencia, antes de la apa-
riciôn dei hombre, una dioergencia entre lo objetivo y 10 subjetivo.
Cuando apareció el hom bre, surgió en la naturaleza la duplicidad
entre objeto y suje to. Analizando este proceso de desdoblamiento
de la existencia, los filósofos han resuelto de diversa manera la
cuestion de Ias relaciones entre sujeto y objeto. La filosofia idealis-
ta ha mistificado esta correlación. La mistificación consiste en que
la existencia se considera sólo como correlacionada de Ia concien-
cia. En muchas concepciones idealistas, la característica de la exis-
tencia como correlacionada de la conciencia desaparece: prâctica-
mente, eôlo queda la conciencia, mientras que la existencia se con-
vierte en apariencia. De este modo, Ia posiciõn idealista inicial hace
problemática Ia misma realidad de Ia existencia.
Rubinstein indica que en muchos casos, y a Ia luz dei análisis
materialista de la existencia, cuando ésta se identifica con Ia natu-
raleza, con Ia materia, cuando se convierte en "cosa ", el hombre
queda prácticamente excluido de ella. Rubinstein considera que Ia
idea de Ia necesidad de introducir al hombre en el conjunto de
Ia existencia es una idea inicial, una idea clave.
La existencia se desarrolla. En el proceso de su creación apare-
cen diferentes niveles del ser: nivel de materia inorgânica, nivel de
!:.. vida, nivel del hombre. El descubrimiento del nivel del ser se
determina por el medio específico de existencia. El medio bási-
co de existencia del hombre es su existencia como ser consciente y
activo, como sujeto de la conciencia y de Ia actividad. La aparición
de cada nuevo niuel del ser conduce al descubrimiento de nuevas
cualidades y calidades en todos los niveles inferiores.
La determinación del carácter específico de la existencia del
hom bre, y la proposición acerca de la influencia de los niveles supe-
riores del ser sobre los inferiores, tiene una gran importancia teóri-
ca. En la existencia, el hombre no es algo ajeno, como tantas otras
cosas existentes: con Ia creación dei hombre como nivel superior
de Ia existencia se descubren de un modo nuevo todos los niveles
inferiores. La existencia deja de considerarse sólo como mundo de
procesos y fenómenos de Ia naturaleza física e incluye en sí misma
ai hombre como ser social. Se supera la escisión de Ia existencia en
tres esferas: naturaleza, sociedad y pensamiento.
La introducción del hombre en el conjunto de la existencia, yal
propio tiempo el planteamiento del problema de los diferentes me-

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dios de existencia, llevaron a Rubinstein a Ia conclusión de que Ias
cualidades y calidades más generales aparecen espec ificamen te en
diferentes niveles de Ia existencia. Así, el tiempo y el espacio son
formas de existencia de Ia materia. Expresan Ia estructura del ser,
determinan Ia forma de sus relaciones. Pero el espacio y el tiempo
caracterizan diversamente Ias distintas esferas dei ser. EI espacio
aparece como espacio de los procesos físico-químicos, el espacio de
los organismos y el espacio dei hombre. También el tiempo se ma-
nifiesta de un modo específico: es el tiempo de Ia existencia en Ia
naturaleza, de Ia vida dei hombre y el tiempo de Ia historia humana.
Utilizando ampliamente Ia teoria de Ia relatividad y analizando los
datos psicológicos de Ia diferente duración dei tiempo en diferen-
tes períodos de Ia vida dei hombre, Rubinstein seiiala que "el tiem-
po vivido subjetivamente no es tanto el tiempo de Ia materia mó-
vil, inadecuada y aparentemente retractado en Ia vivenda, cuanto
el tiempo relativo de Ia vida (de Ia conducta) dei sistema dado, dei
hom bre, que refleja de modo plenamente objetivo el plan de Ia
vida de un hom bre dado".
Rubinstein concede mucha atención a Ia característica de Ias ca-
tegorías ontológicas, gnoseolôgicas, éticas y otras, asi como ai des-
cubrimiento de sus complicadísimas interrelaciones internas. Así,
ai definir los conceptos iniciales, Rubinstein da una característica
dei ser en diferentes cal idades, en diferentes sistemas de relaciones
e interrelaciones. La característica de Ias peculiaridades de los dis-
tintos niveles de existencia, su creación y desarrollo, se hace inves-
tigando Ias características dei ser, de 10 existente, de Ia substancia,
de Ia materia, de Ia naturaleza, dei mundo, de Ia realidad, de Ia
existencia, de Ia creación, del tiempo, dei espacio, de Ia causalidaâ.
La característica ontológica de Ia existencia sirve de base ai plan-
teamiento y resoluciôn de los problemas gnoseológicos. Rubinstein
somete a un análisis especial Ia correlación entre existencia y con-
ciencia; ai propio tiempo, descubre y caracteriza Ias categorias
esencia, fenómeno, apariencia, y pone de relieve Ia estructura lógi-
ca dei conocimiento, correlaciona 10 explícito y 10 implícito dei
conocimiento.
Nos parece muy importante Ia proposición de Rubinstein acerca
de que conocimiento y existencia no se correlacionan de forma ex-
terna, y de que Ias categorías ontolôgicas y gnoseolôgicas están es-
trechamente relacionadas y pueden ser conocidas en su unidad.
El descubrimiento de Ia existencia, de su característica gnoseo-
lógica, es el resultado de Ia acción recíproca entre existencia y
hombre. "Inicialmente -escribe Rubinstein- no existen objetos
de contemplación, de conocimiento, sino objetos de necesidad y de

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acción dei hombre: acciàn recíproca de [uerzas, reacción de Ia natu-
raleza, tension". La misma actitudgnoseológica dei hom-
bre hacia Ia existencia, que se basa en Ia actitud prâctica y efectioadel
hombre hacia el mundo material, aparece no sólo como acto de Ia
conciencia sino como medio, como modo de existencia dei hombre.
Las actitudes dei hombre hacia Ia existencia están relacionadas
con Ia actítud dei hombre hacia otro hombre. Estas relaciones es-
tán recíprocamente condicionadas. Las relaciones sociales dei
hombre entran en el conjunto de su existencia. EI hombre se co-
necta a Ia existencia en su calídad específica de hombre social. La
existencia social dei hombre entra en el conjunto de Ia característi-
ca ontológica de Ia existencia. Pero, en el conocimiento de Ia exis-
tenda, el hombre tampoco aparece como individuo aislado sino
sólo en correlación con otras personas, sólo de una forma social. EI
hombre es el sujeto social. "Conciencia = conocimiento presupone
pensamiento = lenguaje, y por 10 tanto, a comunicación. Hay pues
un condicionamiento social de Ia existencia, Ia existencia humana
y el 'mundo' material. EI conocimiento (conceptual) de Ia exis-
tencia, pues, está completamente condicionado socialmente, todo
es producto de Ia vida de los hombres, socialmente condicionada.
Así pues, existe realmente un sujeto colectivo del conocimiento
científico: el 'yo' es el 'nosotros' ."
Para caracterizar Ias relaciones dei hombre con Ia naturaleza,
con otras personas, Rubinstein utiliza el principio dei determinis-
mo en su comprensión dialéctico-materialista. La aplicación de es-
te principio se manifiesta en Ia proposición de Rubinstein que dice
que Ias causas externas actúan refractándose a través de Ias condi-
ciones internas. En su vertiente psicológica, Rubinstein ha elabora-
do profundamente esta proposición en los trabajos publicados
anteriormente, especialmente en el libro El ser y Ia conciencia.
En el original de El hombre y el mundo, este principio se pone de
manifiesto sobre otro material. Su acción se presenta muy clara-
mente en el análisis dei puesto dei hombre en Ia existencia, a Ia
que el hom bre se conecta como ser, mientras que su existencia queda
determinada por sus relaciones con otros seres. Rubinstein somete
a profundo anâlisis Ia acciôn recíproca entre Ias causas externas y
Ias condiciones internas, el problema de Ia correlación entre Ia de-
terminaciôn de Ia actividad humana y Ia dei carácter activo dei
hombre, el problema de Ia libertad dei hombre y de su responsabi-
lidado
La existencia de Ia esencía (Ia substancia) se determina desde Ias
posictones dei principio dei determinismo, así como Ias leyes de su
descubrimiento por el hombre en el proceso dei conocimiento. Ru-

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binstein analiza precisa y profundamente, a este respecto, uno de
los problemas teóricos más complejos: el problema de ia correla-
ciôn entre ia esencia y el fenômeno, el problema de Ia apariencia.
EI fenômeno existe +afirma Rubinstein-: como resultado de dife-
rentes interacciones, como existencia, aunque no es aspecto puro
sino complicado por las circunstancias presentes. El fenômeno se
va manifestando ai hombre cada vez más en el proceso del conoci-
miento, y cada vez tiene mayor contenido. Pero como cosa direc-
tamente dada, el fenômeno nunca se agota con 10 manifestado. EI
proceso dei pensamiento realiza condicionadamente un descubri-
miento de 10 que el fenômeno manifiesta. El proceso dei cono-
cimiento consiste precisamente en el descubrimiento âel ser. Pero
penetrando en Ia profundidad dei ser se descubre 10 que realmente
existe; 10 verdadero se separa de 10 aparente.
Para el idealismo subjetivo, el fenômeno se reduce a apariencia y
Ia apariencia es una idea del hombre. De ahí se saca la conciusión
de que Ia existencia es mi idea. La explicación dialéctico-materia-
lista y determinista de la apariencia permite superar el sofisma de
Ia filosofía subjetivo-idealista. A este respecto, Rubinstein promue-
ve una serie de proposiciones. Caracterizar aigo como apariencia
presupone ya que este algo existe. "... Algo descubierto como no
auténtico ser sino como algo que a mi me parece, solo se descubri-
rá en tanto y en cuanto en ejecto exista". Así pues, Ia
apariencia siempre presupone el ser, Ia apariencia sôlo puede exis-
tir con respecto a él.
En el proceso dei conocimiento, Ia apariencia aparece como el
momento de descubrimiento de la existencia. Este proceso puede
comprenderse por ia interacción real entre el hombre, como ser
material real, y el mundo efectivo que influye sobre él. Dentro de
esta interrelaciôn real entre el hombre y el mundo, los objetos, los
fenômenos y ias cosas le parecen al hombre de una u otra manera,
según las condiciones y circunstancias de su percepción. La apa-
riencia como momento dei conocimiento aparece como descubri-
miento de Ia naturaleza de los [enômenoe y depende de Ias condi-
ciones en que éstos son percibidos por el hombre. En calidad de
eiemplos, Rubinstein cita ias ilusiones de Ia percepción. La percep-
ciôn ilusoria, seiiala Rubinstein, no es una alteración subjetiva de
Ia realidad. "El tamaiio virtual de un objeto no es el tamaiio exis-
tente sino el tamaiio que legítimamente aparece ai ser percibido el
objeto en unas determinadas condiciones". Así pues, Ia
propia apariencia está condicionada por Ias Zeyes de ias relaciones
de este fenómeno con otros fenômenos. En el ejemplo particular
del problema de Ia apariencia, Rubinstein subraya Ia idea de que

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loe objetos y [enômenoe de Ia realidad objetiva existen en compli-
cadtsimas relaciones e interrelaciones, y sólo descubriendo estas
relaciones y actitudes podrán ser suficientemente conocidos por el
hombre. En el proceso del conocimiento se descubre la relación
entre Ias influencias externas, que se refractan a través dei estado
interno dei sujeto, a través de sus cualidades internas.
Rubinstein extiende la acción del principio del determinismo a
la comprensión de otros problemas psicológicos, ai planteamiento
y resoiucián de los problemas del hombre en conjunto. Así, Ia
proposición formulada en el libro EI ser y Ia conciencia en el
sentido de que, en interrelación con los objetos y fenômenos del
mundo material, los fenómenos aparecen por una parte, condicio-
nados por las influencias externas, y por otro, como condicionantes
de la conâucta del hombre, encuentra su ulterior desarrollo en el
trabajo El hombre y el mundo.
Rubinstein seiiala que el carácter especifico del media de exis-
tencia dei hombre se determina por Ia medida de la correlación
entre Ia autodeterminación del hombre y su dependencia con res-
pecto a todo aquello que estando fuera de él es con respecto a él
algo extraiio y ajeno. En su relación con este algo ajeno, el hombre
aparece como ser activo que transforma con sus acciones la reali-
dad circundante. Estas acciones suyas quedan determinadas por Ia
situaciôn; pero en ella se incluye también ai hombre con sus nece-
sidades, intereses e inclinaciones. La inclusión activa dei hombre
en Ia situación presupone que el hombre Ia analiza, subraya en ella
Ias condiciones que deben correlacionarse con Ias exigencias que se
le plantean y con las tareas que se salen de los límites de esta situa-
ciôn,
Las acciones del hombre, que transforman Ia situación, vienen
determinadas por las condiciones, pero ai mismo tiempo el hombre
cambia Ias circunstancias con sus acciones. AI cambiar la situación,
transformando 10 existente, el hombre cambia también. El hom-
bre transforma la situaciôn resoluiendo continuamente Ias tareas
que tiene ante sí, y realiza la salida más aliá de sus límites inclu-
yéndose en un infinito sistema de nuevas relaciones e interrelacio-
nes. Aparece como un eslabón del sistema universal de relaciones y
dependencias. En cierto sentido, Ia existencia del hombre, en cada
momento dado de Ia vida, está condicionada por su actitud hacia
todo 10 que ha sido engendrado por el precedente desarrollo de ia
Humanidad, encarnado en los productos de Ia actioiâad de los pue-
blos, en la cultura material y espiritual de ia sociedad.
Rubinstein aplica el principio del determinismo al aruilisis de los
problemas de ia necesidad y de ia libertado Considera que el pro-

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blema de Ia necesidad y de Ia libertad se resuelve dialécticamente
descubriendo Ias complejas dependencias de Ias actividades dei
hombre y de su actitud hacia el mundo que le rodea. Para com-
prender el problema de la libertad dei hombre y de Ia determinan-
te influencia de Ia existencia resulta fundamental Ia proposición
que dice que Ias relaciones recíprocas entre el hombre y el mundo
incluyen Ia regulaciári consciente de Za conducta por el propio
hombre. Esto presupone que el hombre conciba este mundo y Zas
acciones encaminadas a su transformación.
Rubinstein subraya y analiza diversos aspectos dei problema de
la libertado Considera a la libertad como una autodeterminación,
en Ia que destaca especialmente el papel de Ias condiciones in-
ternas, para determinar Ia conducta.
Los pensamientos de Rubinstein acerca de Ia libertad como do-
minio o control dei hombre sobre sus propias inclinaciones y ne-
cesidades tienen especial importancia, Las condiciones externas,
aparecen como condiciones indispensables en Ia vida dei hombre
en sociedad, pero dichas condiciones actúan sobre el hombre sólo
refractândose a través de Ias normas internas morales de la -perso-
nalidad. La determinación externa, ai aparecer como sistema de
normas morales, se encuentra dialécticamente relacionada con Zas
condiciones internas, inclinaciones y necesidades internas de Ia
personalidad.
El hombre no sóZo se encuentra objetivamente en una determi-
nada relación con el mundo, sino que de alguna manera presenta
una actitud hacia él. El cambio de Ia actitud dei hombre hacia Ias
relaciones objetivas es Ia expresiôti deZcambio objetivo de estas re-
laciones, aparece como valoración dei cambio de situación, de
circunstancias. A este respecto, Rubinstein analiza profunda y pre-
cisamente eZ humor y Ia ironta, 10 trágico y lo cómico. Estas for-
mas de la actitud dei hombre hacia eZ mundo aparecen como Ia
expresión de Ia actitud dei hombre hacia una situación, como for-
ma de uaioraciôn de una posición dei propio sujeto dentro de esta
situaciàn. EZ humor y Ia ironia expresan una determinada actitud
deZ hombre hacia Ias debilidades, detectos e imperfecciones, hacia
la deformacion y el mal en su correlación con Ia fuerza, la bondad,
etc. El humor y Ia ironía no sólo expresan una correZación objetiva
de circunstancias que corresponde a la situación, sino que expresan
también la calidad dei hombre que penetra en esta situación y la
transforma. Las relaciones objetivas entre Ias circunstancias se po-
nen de manifiesto, se refractan, a través de Zas leyes internas dei
suje to, a través de su medio de visión, de percepción de estas cir-
cunstancias, a través dei sistema de relaciones subjetivas deZ hom-

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bre. Yen el medio de visión, en las actitudes hacia la situación, se
pone de manifiesto el propio hombre.
La explicacion determinista de Ias actitudes del hombre hacia
otro hombre conduce a Rubinstein a importan tes proposiciones éti-
cas que tienen un gran sentido teórico en Ia resoluciôn de los pro-
blemas de Ia educación dei hombre. Rubinstein indica que el sen-
tido ético del principio dei determinismo consiste en "subrayar el
papel del momento interno de autodeterminación, de fidelidad a
sí mismo, de sometimiento no unilateral a 10 externo. La determi-
naciôn externa, por sí sola, acarrea el vacío interno, Ia ausencia de
resistencia y de selectividad con respecto a Ias acciones exter-
nas... ". De estas proposiciones se deducen consecuen-
cias prácticas. Las tareas de Ia educación, a juicio de Rubinstein,
no se reducen únicamente a organizar sistemas de acciones exter-
nas sobre el hombre. Para resolver dichas tareas es preciso descu-
brir el sistema de acciones externas y el de las condiciones internas
que mediatizan Ia percepción de dichas acciones. La educación
moral no debe reducirse a ta simple moralización, a Ia presenta-
ción de unas ex igencias desde fuera. Debe aparecer como proceso de
cambio de condiciones en Ia vida del hombre, como organización
real de Ia conducta de un hombre en correlación con Ia conducta
de otros hombres.
Rubinstein plantea algunas exigencias ai educador. En primer
lugar, el educador debe vivir, él mismo, una vida auténtica, y debe
conectar a Ia misma a aquellos a quienes educa. Al asociar aios
educandos a esta vida, el educador debe realizar actos que sean en
sí mismos condiciones de Ia vida de otro hombre. En segundo lu-
gar, el educador debe provocar otros actos de respuesta por parte
de los educandos, actos en los que se formen las condiciones inter-
nas de una auténtica conducta moral. La moral, pues, aparece
no como algo externo con respecto a Ia existencia del hombre, sino
como característica de su existencia, de sus relaciones con otras
personas conectadas a su existencia.
Aparte estas cuestiones, tiene gran importancia para la ciencia
psicológica el análisis especial que Ru binstein dedica a Ia concien-
cia y autoconciencia del hombre, ai problema de la existencia
humana, ai amor âel hombre por el hombre, a Ia cuestión dela ac-
titud estética dei hombre hacia Ia realidad. Ellibro El hombre y el
mundo /leva a cabo un proyecto único y plantea una sola cuestión
cardinal: Ia naturaleza dei hombre y su lugar en el mundo. Esta
cuestión se resuelve como tarea íntegra doble: desarrollo de toda
Ia problemática del mundo en correlación con el hombre, en un
caso (a esto se dedica la primera parte dei original de El hombre y

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el mundo), y presentación de una característica dei hombre en co-
rrelaciôn con el mundo, en el otro (a esto se dedica Ia segunda
parte dei trabajo).
La obra que se publica exige un estudio meditado, detallado y
profundo, y Ias ideas formuladas en él un uso creador y un desa-
rrollo posterior.
Esperamos que Ia publicación dei libra de Rubinstein El hombre
y el mundo facilitará Ia solucion de Ias problemas dei hombre,
uno de Ias más importantes e inquietantes problemas de ia hora
actual.

E.V. SHOROJOV

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