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DELLAB
[NOMBRE DE LA EMPRESA]
[Dirección de la compañía]
CAPITULO 1. NORMATIVIDAD EN LA SUPERVISIÓN

DEFINICIÓN DE SUPERVISIÓN

Podemos definir la palabra SUPERVISIÓN como a la práctica de la inspección en los

trabajos realizados por otros. Si bien conocemos que el proceso de la administración se
encuentra dividido en 4 funciones o etapas principales: Planeación, Organización,
Dirección y Control, encontrándose la supervisión de manera implícita como herramienta
al momento de ejercer la Dirección.

FUNCIONES DEL SUPERVISOR

Dentro del contexto de la construcción definiremos al supervisor, como a la persona

encargada de la inspección de todos y cada uno de los trabajos contenidos en el catálogo
de conceptos a ejecutar de acuerdo al contrato de obra.

En los proyectos de construcción, la supervisión es ejercida tanto por el constructor,

como por el propietario. La supervisión que realiza el equipo del constructor o contratista
hace uso principal del ejercicio de la autoridad, la delegación de funciones y de la
comunicación del equipo humano.

En el ejercicio del control; la supervisión es responsable de que el tiempo de ejecución y

la calidad correspondan de acuerdo a lo planeado y se es corresponsable de ejercer el
control de los costos. Además, la supervisión, como parte del equipo del contratista, tiene
la responsabilidad legal y moral sobre la seguridad e higiene del personal técnico y obrero
asignado a la obra y del impacto que tengan los procesos constructivos en el medio
ambiente.

La supervisión podrá cumplir cada una de sus responsabilidades siempre y cuando

cuente con el apoyo de la dirección general, la cual será la responsable de que se den
las condiciones de operación, de no tener a disposición los recursos necesarios, el
supervisor se verá impedido a realizar con eficiencia sus labores y difícilmente podrá
cumplir con los estándares de calidad.
Para dar cumplimiento a todo lo anterior, el supervisor debe hacer un uso correcto de los
medios de comunicación a su alcance, principalmente de la bitácora de obra. Por esto
debe dominar las técnicas de la comunicación como un medio de lograr sus objetivos de
dirección y control en el proyecto.

PERFIL DEL SUPERVISOR

El trabajo de supervisión –como la mayoría de las labores desempeñadas por los

ingenieros– requiere de tres tipos de competencias: competencias técnicas, habilidades
interpersonales, y valores y actitudes positivas; del concurso de estas tres competencias
dependerá su desempeño integral como supervisor, entendiendo que cumplir con los
objetivos del proyecto con base en costos sociales y/o malas relaciones humanas no
puede considerarse como un adecuado desempeño del profesionista.

NORMATIVIDAD AL EJERCER LA SUPERVISIÓN

Para que un supervisor sea capaz de estandarizar los requerimientos en la obra, se es

necesario el conocimiento del tipo de norma a aplicar. Estas normas pueden clasificarse
de la siguiente manera:

1. Normas Particulares.
2. Normas Generales.
3. Normas Complementarias.

NORMAS PARTICULARES

Este tipo de normas se encuentran realizadas para un tipo de proyecto en específico, de

tal manera que se describen las especificaciones técnicas, los procesos constructivos y
los estándares de calidad de acuerdo a las necesidades y los objetivos del proyecto.

NORMAS GENERALES

En el marco de esta clasificación encontramos las especificaciones generales que dan

mayor énfasis a las características de calidad de la obra y los procedimientos necesarios
para obtener tal resultado. Estas son aplicables a cualquier tipo de proyecto, suelen estar
dirigidas principalmente a instalaciones, ergonomía del proyecto, estándares de
seguridad durante la realización de los trabajos, etc. Estas normas son de tipo oficial es
decir las podemos encontrar con la denominación “NORMA OFICIAL MEXICANA
(NOM)”.

NORMAS COMPLEMENTARIAS

Con estas normas se pretende fijar los requisitos mínimos para el diseño y ejecución de
las obras e instalaciones de edificación a fin de asegurar su buen funcionamiento y
accesibilidad, respecto de la habitabilidad, higiene, servicios y acondicionamiento
ambiental; comunicación, evacuación y prevención de emergencias y de sus
instalaciones hidráulicas, sanitarias, eléctricas, telefónicas, de voz y datos; de
acondicionamiento y expulsión de aire; así como establecer las especificaciones de
diseño y construcción, y proporcionar al diseñador y al constructor las bases que faciliten
su trabajo dentro de la práctica recomendada internacionalmente.

CAPITULO 2. LABORATORIOS Y LA CALIDAD

Hablar en estos tiempos de “calidad en las obras” es de suma importancia para la

sociedad que formamos en la actualidad. La globalización y la evolución de las
construcciones hoy en día, han exigido a los Laboratorios de Construcción a prestar una
mejor calidad y servicio, esto con el fin de cumplir las expectativas del cliente, por lo cual
el Laboratorio de Construcción se denomina como el principal juez para la calidad en la
obra.

Se puede definir el control de calidad como el conjunto sistemático de los esfuerzos,

principios, prácticas y tecnología de una organización de producción o industria para
mantener o superar la calidad del producto al menor costo posible.

La intensidad del control de calidad depende del conocimiento con el que cuenta el
personal, sobre las necesidades, la magnitud de la obra, la disponibilidad de los
elementos y la organización que se tenga.
Controlar la calidad de una construcción debe estar garantizando la calidad de los
materiales junto a la durabilidad de la obra, mientras mayor calidad, mayor durabilidad
de la obra que nos da como resultado una mejor inversión.

La mayoría de los laboratorios se han esforzado por emitir informes de ensayos con la
mayor precisión y confiabilidad de resultados. Es por eso, que hoy en día, se utilizan
herramientas de capacitación y certificación en colegios, asociaciones e instituciones
avaladas por organismos nacionales e internaciones para su mayor competitividad en el
mercado de la industria de la construcción. Esto nos ayuda a llevar un ordenamiento de
procesos de ejecución de la obra y lograr encontrar lineamientos de control de calidad.

En la actualidad decir control de calidad en obra, es una serie de ensayos a los materiales
destinados para cualquier elemento de construcción verificando la composición de cada
uno de ellos por separado para posterior homogenización con otros materiales en
algunos casos, optimizando las cantidades aproximadas para cumplir con normas y
especificaciones relativas a la obra, así mismo, nos ayuda a reducir costos de operación
en ejecución de la obra. Los resultados que salgan de esas mediciones son
fundamentales para diseñar, construir y luego subsanar cualquier problema que se
presente en la obra.\De ahí que sean pieza fundamental en el gremio constructor.

Esos análisis determinan, por ejemplo, el tipo de cimentaciones y columnas o si una

sección de una estructura se debe demoler o mantener.

El laboratorio en obra, deberá tener el compromiso con el cliente de anteponer informes

trazables, es decir, que cuenten con el equipo verificado y calibrado trazable con
patrones de medida nacionales, personal capacitado y las condiciones necesarias para
la ejecución de los ensayos, esto con el fin de garantizar el resultado y la toma de
decisiones en campo y prevenir el atraso de obra. Por eso el laboratorio es sumamente
importante en cualquier tipo de obra, ya que si no tenemos un buen control de la calidad
de los materiales nunca podremos saber el origen del mal funcionamiento de una obra
por falla de los mismos.
PRUEBAS DE LABORATORIO

Las pruebas de laboratorio más utilizadas en la realización de proyectos constructivos

son:

 Pruebas de mecánica de suelos: El estudio de mecánica de suelos si no es

ejecutado correctamente, podría hacer colapsar a un edificio o vivienda. En toda
obra de arquitectura o ingeniería moderna, ya sea viviendas o edificios, es
necesaria e imprescindible la realización de un estudio de suelos. El Estudio de
Mecánica de Suelos, es un documento suscrito por un especialista reconocido y
acreditado en mecánica de suelos, a través del cual determina la resistencia del
terreno sobre el que se desplantan las edificaciones, mismo que sirve de base
para determinar el tipo de cimentación a usar.
 Pruebas a materiales de acero: Las características físicas se refieren a la
tensión, diámetro, peso unitario, dimensiones y espaciamiento de las
corrugaciones y doblado. Los ensayes de dichas características deben probarse
con una muestra de cada diámetro por cada diez toneladas o fracción o por cada
embarque o entrega, lo que sea menor.
 Pruebas para concreto. Las pruebas de laboratorio deben seguir un protocolo
normativo, donde se determina que, dependiendo del volumen producido, le
corresponde la cantidad de especímenes a sacar según el volumen de producción
por f’c se da la frecuencia del muestreo.

Para brindar altos estándares de confianza en el control de procesos de los

laboratorios, es necesario contar con laboratoristas certificados ante el American
Concrete Institute (ACI) con al menos la acreditación grado 1 donde se confirma
que se llevarán a cabo los procedimientos apegados a las normas, con una
metodología y calibración del equipo precisa. Todo este proceso en ocasiones su
 vuelve complejo y buscar opciones alternas como servicios de laboratorios con
externos es muy costoso.
 Pruebas para asfalto: Puesto que la mayoría de las vías suelen estar construidas
con mezclas en las que el asfalto es el principal componente de su capa superior,
la que está en contacto con los vehículos, es necesario el estudio de sus
propiedades mecánicas y dinámicas, tanto de sus elementos individuales como
del conjunto de la mezcla asfáltica para la elección de la más adecuada.
A través de la evolución de las mezclas asfálticas, se han desarrollado diferentes
tipos de dispositivos de laboratorio para compactación. En general, los aciertos de
éstos es que fabrican especímenes para caracterización volumétrica y física. Los
materiales pétreos y los materiales asfálticos que se utilicen en la elaboración de
mezclas asfálticas, cumplirán con lo establecido en las Normas N·CMT·4·04,
Materiales Pétreos para Mezclas Asfálticas, N·CMT·4·05·001, Calidad de
Materiales Asfálticos y N·CMT·4·05·002, Calidad de Materiales Asfálticos
Modificados.

CAPITULO 3. MARCO LEGAL DE LA SUPERVISIÓN

La supervisión de la obra debe realizarse de acuerdo al “Reglamento de la ley de obras

públicas y servicios relacionados con las mismas”.

El reglamento antes mencionado genera la estandarización de la ejecución de los

trabajos con respecto a la ley de obras públicas y servicios relacionados con las
mismas.

En el artículo 115 encontramos la descripción con respecto a las funciones detalladas

del supervisor.

I. REVISAR DE MANERA DETALLADA Y PREVIAMENTE AL INICIO DE LOS

TRABAJOS. Este apartado el supervisor deberá tener toda la información con
respecto al proyecto. Esta información le será proporcionada por el residente. Se
tiene por objetivo, que el supervisor y cada parte implicada en la administración
se encuentre enterada en el desarrollo de las actividades de la obra, al igual que
 esta información será necesaria para iniciar los trabajos de supervisión con
relación a lo programado, ejecutándose de manera interrumpida hasta su
conclusión. (antes del inicio)
II. PARTICIPAR EN LA ENTREGA FISICA; en esta actividad el supervisor estará
presente mientras se le hace entrega al superintendente del sitio de la obra. Así
mismo, el proporcionar trazos, referencias, bancos de nivel y todos los elementos
que sean necesarios para el inicio adecuado de los trabajos.
III. IOBTENER DE LA RESIDENCIA LA UBICACIÓN DE OBRAS INDUCIDAS Y
SUUBTERRANEAS. Dentro de esta instancia el supervisor a partir de los planos
e indicaciones de la residencia contar con la ubicación de todas las instalaciones,
ya sean eléctricas, de gas, hidráulicas y realizar junto con el contratista el trazo de
su trayectoria, ya que estas pueden interferir en la realización del proyecto
principal.
IV. INTEGRAR Y MANTENER AL CORRIENTE EL ARCHIVO. Como parte del
control el supervisor utilizará como herramienta un archivo en donde se llevará el
registro de la realización de los trabajos, integrado por los siguientes puntos:
 Copia del proyecto ejecutivo
 Matrices de precios unitarios, cédula de avanzas y pagos programados
 Modificaciones autorizadas a planos
 Registro y control de bitácora
 Permisos, licencias y autorizaciones
 Contratos, convenios, programas de obra, etc.
 Reportes de laboratorio y resultados de pruebas
 Manuales y garantía de maquinaria y equipo
V. VIGILAR LA ADECUADA EJECUCIÓN DE LOS TRABAJOS. Aquí el supervisor
dará fe de la ejecución de cada trabajo, se dirigirá al contratista de la forma
apropiada para brindar las instrucciones necesarias para dar paso a la ejecución.
Cuando el trabajo no cumpla con los requisitos pactados el supervisor deberá
hacer uso de las acciones correctivas para cumplir con su misión dentro de la
obra; sin embargo, muchas acciones correctivas no hablan de un buen supervisor,
sino de una carencia de acciones preventivas.
 VI. DAR SEGUIMIENTO AL PROGRAMA DE EJECUCIÓN. El supervisor deberá
corroborar que los trabajos realizados vayan de acuerdo al programa de obra
establecido.
VII. REGISTRAR EN BITÁCORA LOS AVANCES. El supervisor deberá llevar un
control por medio de bitácoras en donde describirá los avances y todos los
aspectos de importancia durante la ejecución de los trabajos.
VIII. CELEBRAR JUNTAS DE TRABAJO CON EL SUPERINTENDENTE O CON LA
RESIDENCIA. Estas juntas trataran como objetivo analizar el avance, los
problemas presentados, consultar las bitácoras y acuerdos tomados para dar un
seguimiento y que todo el personal se encuentre enterado.
IX. VIGILAR QUE EL SUPER INTENDENTE CUMPLA CON LAS CONDICIONES
DE SEGURIDAD, HIGIENE Y LIMPIEZA EN LOS TRABAJOS.
X. REVISAR LAS ESTIMACIONES. La revisión de las estimaciones garantiza que
lo estipulado en la estimación, realmente se haya ejecutado, de tal manera que su
aprobación sea oportuna para su trámite de pago.
XI. LLEVAR EL CONTROL DE LAS CANTIDADES DE OBRA. En este apartado el
supervisor será capaz de visualizar las cantidades de obra realizados y las
faltantes por ejecutar, para esto se debe considerar las cantidades dadas en el
catálogo de conceptos.
XII. LLEVAR EL CONTROL Y AVANCE FINANCIERO. Este control estará dado a
través de las estimaciones aprobada. De igual manera se hace consideración de;
la amortización de anticipos, las retenciones económicas. etc.
XIII. AVALAR LAS CANTIDADES DE LOS INSUMOS Y LOS RENDIMIENTOS;
Como ya se ha mencionado, el supervisor deberá realizar acciones de verificación
en la que inspeccionará el trabajo realizado con respecto a los rendimientos de
mano de obra, material y maquinaria. Un rendimiento bajo atrae consigo retrasos,
mayor tiempo de ejecución, mayor costo y probablemente también afecten a la
calidad.
XIV. VERIFICAR QUE LOS PLANOS SE MANTENGAN ACTUALIZADOS. El
supervisor deberá obtener esta información del personal encargado de la
actualización los planos, es necesario de igual manera verificar a través de notas
 de bitácora la notificación de dichos cambios y así mismo de la correcta ejecución
de las modificaciones. Dichas modificaciones deben ser solicitadas por el
residente de obra y avaladas por el supervisor y el director general.
XV. ANALIZAR DETALLADAMENTE EL PROGRAMA DE EJECUCIÓN.; El
supervisor debe contar con los programas de erogación de materiales, mano de
obra y maquinaria, esto con el objetivo de establecer una relación de acuerdo al
programa general de obra y verificar la ejecución de acuerdo a lo estipulado e
incorporado.
XVI. COADYUVAR CON LA RESIDENCIA PARA VIGILAR LOS MATERIALES; En
conjunto con la residencia el supervisor vigilará de manera minuciosa la calidad
de la mano de obra, materiales y equipo, de tal manera que estos cumplan con
los requerimientos necesarios y sean de las características estipuladas en el
contrato, de igual manera se deberá contar por parte de la superintendencia los
resultados de las pruebas de laboratorio.
XVII. VERIFICAR LA DEBIDA TERMINACIÓN DE LOS TRABAJOS; El supervisor se
encontrará en la culminación de los trabajos en tiempo y forma, de acuerdo a lo
estipulado en el contrato.
XVIII. COADYUVAR EN LA ELABORACIÓN DEL FINIQUITO; Una vez dando fe de la
última estimación, se procederá a la elaboración del finiquito, siempre y cuando
se cumpla con lo estipulado.

CAPITULO 4. METODOLOGÍA DE LA SUPERVISIÓN

Durante el curso fue posible comprender las fases en las que se comprende la
supervisión, siendo a su vez relacionadas con los distintos apartados del “Reglamento
de la ley de obras públicas y servicios relacionados con las mismas”. Esto nos
demuestra que, al cumplir con el reglamento antes mencionado, contaremos con una
calidad estándar al instante de iniciar con las actividades correspondientes.

Las etapas de la supervisión se dan de acuerdo al siguiente orden:

1. Antes del inicio 3. Después de los trabajos

2. Durante los trabajos
 1. ANTES DEL INICIO.

El supervisor a cargo deberá documentarse con toda la información necesaria

relacionada con el proyecto. En esta etapa, el estudio minucioso de los programas de
obra, el contrato, los permisos, el catálogo de conceptos y las normas relacionadas, nos
brindaran un panorama previo del proyecto, evitando el desconocimiento en nuestras
visitas a la obra y, por ende, la supervisión se realizará de manera correcta.

ACTIVIDADES DEL SUPERVISOR EN ETAPA PREVIA:

 Reconocimiento del área del proyecto: Se debe verificar que el terreno esté en
las condiciones para realizar las obras, observando suelos desmalezados, la
existencia de escombros o basura, las posibles demoliciones, posibles controles
de plagas.
 Revisión del expediente ejecutivo: Velar porque la constructora posea toda la
información necesaria para que no existe margen de interpretación. De faltar
información.
 Informe de inicio de obras: Se emite un informe para salvar algún problema
detectado con respecto al expediente técnico o al terreno, para tomar las medidas
necesarias.

2. DURANTE LOS TRABAJOS

En esta etapa el supervisor llevará un control con respecto a los procesos constructivos,
los rendimientos y tiempos de ejecución, tal cual lo indica el apartado XIII del artículo 115
del reglamento de la ley de obras públicas.

ACTIVIDADES DEL SUPERVISOR DURANTE LOS TRABAJOS:

Control de contratos: Se revisa que la constructora esté cumpliendo con los

compromisos adquiridos según contratos, y según los protocolos para efectuar
reclamaciones de no cumplirse algo.
Revisión de los costos: Revisar que la constructora esté realizando la obra dentro de
los costos estimados. Ya que, de no hacerlo, se estará poniendo en riesgo la correcta
finalización de la obra. En caso de que elementos externos a la obra los estén afectando,
habrá que evaluar soluciones para disminuirlo.

Control de los plazos: Se revisa que la ejecución de la obra se encuentre dentro de la

etapa correspondiente según días de ejecución de obra. De estar retrasados, deberá
determinarse en reuniones qué medidas tomará la constructora para acelerar procesos
o asumirá las sanciones que supone dicho retraso.

Control de Avance de Obra: Se revisa que el avance de obras corresponda al programa

de obra, que muestre en qué etapa nos encontramos y si realmente se han ejecutado
correctamente las obras. O se deben tomar medidas para acelerar la ejecución.

Control de Calidad: Verificar el cumplimiento de los requerimientos de calidad

establecidos. Se revisarán los resultados de las pruebas de laboratorio de materiales.
Compra y venta de materiales, sean los que se especificaron o en su defecto,
equivalentes.

Propiciar la comunicación entre las partes: Generar una comunicación permanente y

fluida entre las partes (proyectistas, constructora, autoridades). Para que cada uno
cuente con la información necesaria, y tenga certeza de en qué etapa se encuentra el
proyecto, cuáles son los compromisos y metas por cumplir.

Registros y controles: Toda visita, observación, acotación, compromiso, sugerencia,

debe quedar por escrito, para que no quede nada en el olvido y los pendientes puedan
ser ejecutados ordenadamente. Se debe formalizar en reuniones, actas y bitácoras. Y
ser traspasadas al libro de obras, que es la prueba escrita de que cada profesional se
dio por enterado y asumió los compromisos de abordar el tema, según sus
responsabilidades y competencias.

Revisar informes de ensayos y de la obra en general: Se deben revisar los informes

que han arrojado los distintos ensayos que se encargan a laboratorios externos, para
evaluar si la obra cumple con los estándares y especificaciones solicitadas.
Revisar etapa de avance, para aprobar estados de pago: Los supervisores revisarán
en qué etapa se encuentra el avance de la obra, para indicar al mandante qué pago
corresponde.

Establecer medidas para solucionar conflictos: Se debe haber establecido canales,

procedimientos y protocolos contractuales para la resolución de conflictos entre las
partes.

Observar medidas de seguridad en general: La falta de seguridad, desde un punto de

vista humano, puede poner la vida de los trabajadores de la obra. Y desde un punto de
vista comercial y bastante frío, podría significar una paralización de obras y su
correspondiente investigación del accidente. Se debe comprobar que el encargado de
seguridad, esté realizando las charlas correspondientes, cada trabajador cuente con los
implementos que requiere.

Comprobar cumplimiento de normativas en general: Se debe verificar que todo tipo

de normativa esté cumpliendo con la ley. Ya sean generales, de tipo ambiental, de
tránsito, de uso público del espacio, radio de las grúas, permisos en general, desarrollo
de la obra. Como por otro lado la correcta ejecución de los elementos constructivos, los
procedimientos seguros hacia los trabajadores, leyes laborales, de subcontratación,
servicios higiénicos, zona para comer, etc.

Rechazar los elementos que no cumplan con las especificaciones: En caso que algo
realizado por la constructora no cumpla con las especificaciones solicitadas en principio,
deberá ser rechazado e informado formalmente a la constructora, para que lo modifique,
o eleve sus reparos al rechazo.

Evaluar limpieza en la obra y protección del entorno medioambiental: El orden y la

limpieza son claves en una obra. Mientras más sucia, más desorganizado su
funcionamiento, y, por ende, menos eficiente. Esto, aunque parezca un detalle, visto a
largo plazo supone un retraso constante en la circulación y avance de la obra. Además,
la falta de orden en la obra, los residuos, escombros aumentan la probabilidad de
accidentes.
 3. DESPÚES DE LOS TRABAJOS

El supervisor realizará la revisión del producto terminado, realizando las pruebas de

calidad correspondientes a las normas generales de construcción.

ACTIVIDADES DEL SUPERVISOR DESPÚES O ETAPA FINAL DE LA OBRA.

Puesta en marcha: En esta etapa se realizan todas las pruebas de funcionamiento de

cada aspecto del edificio y el predio. Según las pruebas normadas para cada
especialidad. También se revisan nuevamente el aspecto de cada recinto, para asegurar
la calidad esperada.

Recepción Final de la Obra: Aquí ya se ha verificado que toda la obra está funcionando
correctamente. Se han certificado las instalaciones ante las autoridades, por lo que se
puede gestionar la Recepción Final Definitiva.

Liquidación de la obra: La constructora ha realizado de manera correcta la ejecución

de la obra, por lo que se le indica al mandante que las labores por parte de la constructora
han finalizado y se deben liquidar los contratos y realizar los últimos pagos, en donde
todas las partes quedan conformes. Y sólo se hacen presentes los seguros y garantías
de cada aspecto de la obra, según la ley, o garantías de los artefactos que en ella se
hayan instalado.

Informes Finales: Aquí el supervisor elaborará un resumen de todos los aspectos que
significó el proceso de edificar el proyecto. Sus distintas etapas, y los resultados
finalmente obtenidos. Se emiten informes generales resumiendo a grandes rasgos los
aspectos principales.

Otros documentos: También se pueden elaborar manuales de uso para el propietario

y la administración del edificio, junto a todos los manuales del equipo que los hace
funcionar, y el contacto de los proveedores. Debe ser realizado por los proyectistas, para
la mantención adecuada según un calendario de mantención del recinto ideal o lo mínimo
que exige la ley para ciertas instalaciones.