Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
III)
APLICACIONES 1
Antonio Hernández Mendo
(Coordinador)
Copyright
©Antonio Hernández Mendo
Edita
Tulio Guterman (http://www.efdeportes.com)
Diseño y Maquetación
Miguel Coranti
libros@efdeportes.com
I.S.B.N. 987-43-5959-5
Relación de Autores
Antonio Hernández Mendo. Doctor en Psicología por la Universidad de Santiago de
Compostela. Master en Psicología del Deporte por la Universidad Autónoma de Madrid.
Profesor Titular de Psicosociología del Deporte en la Facultad de Psicología de la
Universidad de Málaga. Ha sido Profesor de Enseñanza Secundaria en el área de
Educación Física. Es autor del libro El biofeedback en la rehabilitación de lesiones
deportivas (1995). Es coautor con Raúl Ramos Pollán del libro Introducción a la
informática aplicada a la Psicología del Deporte (1996). Ha dirigido y dirige varias tesis
doctorales y participa en varios proyectos de investigación nacionales e internacionales.
mendo@uma.es Antonio Hernández Mendo
Jesús García Barrero (…). Master en Psicología del Deporte por la Universidad Autónoma de Madrid. Licenciado en
Psicología por la Universidad de Oviedo. Psicólogo de la Selección Olímpica de Fútbol, ganadora de la medalla de oro
de Barcelona '92. Profesor de la Escuela Asturiana de Entrenadores de Fútbol. Psicólogo del Sporting de Gijón S.A.D.
Rosana Llanes Lavandeira. Master en Psicología del Deporte por la Universidad Autónoma de Madrid. Licenciada en
Psicología por la Universidad de Oviedo. Ha sido psicóloga del Sporting de Gijón S.A.D. Actualmente es psicóloga de
los equipos base del Oviedo F.C. Profesora de la Escuela Asturiana de Entrenadores de Fútbol. Pertenece al Consejo
Editorial de la Revista de Psicología del Deporte.
Carlos Fierro Hernández. Licenciado en Psicología por la Universidad Autónoma de Madrid. Ha publicado sus
trabajos en diferentes revistas nacionales e internacionales. Actualmente participa en diversos proyectos de
investigación de la Universidad de Málaga. Miembro del grupo EUDEMON. Ex-jugador de baloncesto. cfierro@uma.es
Enrique Cantón Chirivella. Doctor en Psicología por la Universidad de Valencia. Profesor Titular en la misma
universidad. Director Adjunto de la Revista de Psicología del Deporte. Director del Master de Psicología del Deporte
organizado por el Colegio Oficial de Psicólogos y la Universidad Miguel Hernández. Secretario General de la
Coordinadora Estatal de Psicología del Deporte del Colegio Oficial de Psicólogos de España. Coordinador del libro de
Actas del V Congreso de Psicología del Deporte y autor del libro Motivación y su aplicación al deporte (1999).
canton@uv.es
Mª Carmen Sánchez Gombau. Doctora en Psicología por la Universidad de Valencia. Presidenta de la Asociación de
Psicología del Deporte de la Comunidad Valencia (APECVA). Especialista en el área de Psicología de la Actividad Física
y el Deporte. Profesora del Master de Psicología del Deporte del Colegio Oficial de Psicólogos y la Universidad Miguel
Hernández. msangom@alumni.uv.es
Gonzalo Marrero Rodríguez. Doctor por la Universidad Complutense de Madrid. Catedrático de Escuela Universitaria
del área de Psicología Evolutiva y de la Educación en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Actualmente
desempeña su labor como Vicerrector de Estudios y Calidad de Vida en esta universidad. Es autor de Psicología y
Deporte (1989) y de Motivos, Motivación y Deporte (1999) junto con José Martín-Albo Lucas y Juan Luis Núñez Alonso.
vecd@empresariales.ulpgc.es
José Martín Albo Lucas. Doctor por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Profesor Titular del área de
Psicología Evolutiva y de la Educación. Profesor de Aprendizaje Motor en la Facultad de Ciencias de la Actividad Física
y del Deporte de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Es autor de Motivos, Motivación y Deporte (1999)
junto con Gonzalo Marrero Rodríguez y Juan Luis Núñez Alonso. jmartin@dps.ulpgc.es
Juan Luis Núñez Alonso. Doctor por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Profesor Titular de área de
Psicología Evolutiva y de la Educación. Profesor de Psicología de la Competición en la Facultad de Ciencias de la
Actividad Física y del Deporte de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Es autor de Motivos, Motivación y
Deporte (1999) junto con Gonzalo Marrero Rodríguez y José Martín-Albo Lucas. jnunez@dps.ulpgc.es
Isabel Balaguer Sola. Doctora en Psicología por la Universitat de Valencia. Profesora Titular de Psicología Social y
Directora de la Unidad de Investigación de Psicología del Deporte de la Universitat de Valencia. Durante los últimos
años su actividad investigadora ha estado centrada principalmente en el estudio de los determinantes psicosociales de
4
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
los estilos de vida de los adolescentes y en los procesos psicosociales en el deporte. Es autora y directora del libro
Entrenamiento Psicológico en el deporte. Principios y Aplicaciones (1994). Isabel.balaguer@uv.es
Yolanda Pastor Ruiz. Doctora en Psicología por la Universitat de Valencia. Profesora Asociada de Psicología Social
de la Universidad Miguel Hernández de Elche (Alicante). Su área de especialización e investigación han sido los estilos
de vida saludables, el deporte y el autoconcepto en la adolescencia. ypastor@umh.es
Diana Pons Cañaveras. Doctora en Psicología por la Universitat de Valencia. Profesora Titular de Universidad en el
Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos de la Universitat de Valencia. Sus intereses
principales de investigación son la ansiedad y el bienestar psicológico. Diana.Pons@uv.es
5
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Índice
21. INTERVENCIÓN PSICOLÓGICA EN ATLETISMO PAG. 07
Antonio Hernández Mendo. Universidad de Málaga.
6
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 21
Intervención psicológica
en atletismo1
Antonio Hernández Mendo
Universidad de Málaga
1
Algunas direcciones interesantes en relación al atletismo y la psicología pueden ser: http://www.efdeportes.com,
http://www.sportec.com/rfea, http://www.mec.es/csd, y http://www.psyc.unt.edu/apadiv47/links.htm
7
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
"En alguna medida parece que correr forma surgen -desmitificando a Filípides- maratones y carreras
parte del temperamento humano. Algunos corren por populares que no suponen -en muchos casos- la
alcanzar la gloria deportiva; otros, por el placer de competición entre las personas, sino el enfrentamiento
participar en una competición y no faltan, de cada persona con sus simbologías, con sus miedos y
afortunadamente, quienes simplemente lo hacen por el con sus esperanzas.
beneficio físico y psíquico que la carrera proporciona.
…y llegó el día… Ahora que estoy aquí
La facilidad de la elección y la relativa esperando la largada, cierro los ojos y quiero recordar
simplicidad de su técnica de base hacen de la carrera todo lo que costó… pero casi no puedo, es tan
la más difundida de las especialidades atléticas: maravillosa esta sensación, que casi no puedo creer que
«podemos considerarla como una manifestación hubo días en los que no me sentí capaz, no puedo
motora fundamental no sólo del atletismo sino de otras recordar cuanto llegaron a dolerme las piernas, cuantas
especialidades deportivas, ya que la técnica de base veces tuve frío; calor; cuantas zapatillas quedaron en el
de la carrera se manifiesta, con diferentes camino, cuantos días de lluvia… cuantas veces sumé,
modificaciones, en la expresión motora de la mayoría resté, calculé… faltan 291 días… 167… 89… 26…. y así…
de los deportes». sumando kilómetros, restando días… llegué aquí. Lo
que no puedo olvidar, es, cuantas veces lo soñé, lo
Sobre diversas distancias y a diferentes imaginé, cuantas veces se me llenaron los ojos de
ritmos, la carrera ayuda al desarrollo más armónico lágrimas pensando que estaría acá parada…justamente
del organismo. Además del trabajo activo de los acá… junto a 32.500 que quieren lo mismo, correr
grupos musculares de las piernas, brazos y tronco, en 42.195 mts, cada uno con distintas metas… algunos
la carrera tiene lugar una completa participación de los para ganarla… algunos para superarse…. quien sabe…
diversos aparatos y principalmente del para mi, cuando la cuenta regresiva llegue a cero…
cardiocirculatorio. habrá comenzado mi sueño, y quiero vivirlo con cada
También puede afirmarse que, además de las músculo de mi cuerpo, con mi mente y con mi alma…
cualidades biológicas fundamentales, como resistencia, sentir cada metro de este desafío tan ansiado…”mi
fuerza, velocidad, etc., la acción de correr desarrolla la primer maratón”. En esta tierra, donde Lennon algún día
sensibilidad espacio-temporal, la fuerza de voluntad y en su “Imagine”, soñó que el mundo sea uno… hoy, acá,
la combatividad." ahora, el mundo es uno, no importa lo que seas…
cuanta plata tengas, de donde vengas, que bandera
-Carlos Gil Pérez2 (1978, p.7). Pedagogía de la ames… queremos lo mismo. Podrán decir que sos un
carrera. Valladolid: Miñón. soñador, John, y que no sos el único, porque allí, cerca
de donde cada mañana, cruzabas la calle y sembrabas
Correr, saltar y lanzar podemos considerar tus frutillas…, en ese único y hermoso Central Park
que son actividades asociadas a la naturaleza humana muchos culminaran su gran sueño…Ya casi empieza…
y a la supervivencia. Después han sido y son, con el se huele en el aire la ansiedad, se mueven nerviosas las
transcurso del tiempo, estandarte olímpico. Pero más piernas, se ajustan los cordones, se frotan las manos,
allá de lo que supone competir -y tal y como lo señala los dedos se acercan al botón del cronómetro… casi
Carlos Gil Pérez en la cita de inicio- correr -como 10.49… que hora será allá, en mi querido Buenos
actividad simbólica del atletismo- es un hecho que Aires… 12.49?… en qué pienso??… no sé… se me
trasciende la propia realidad. Muchas de las personas mezcla todo, hace frío, no?… ya se larga… YA…… dicen
que corren a diario por nuestras calles y parques, que el primer paso lo dan solo los valientes… pero acá
comparten una simbología, una abstracción; su no es solo el primero… van a ser muchos, muchos
esfuerzo contra el espacio y el tiempo. Algunas veces, pasos, muchos minutos, muchas horas, un maratón…
confluyen en el devenir del tiempo y de la historia y cuántos pueden??… 7 de noviembre… 10.50…. y ya
estoy… ahora "atleta”, tienes ante ti lo que tanto
esperaste, nada puede detenerte, podés llorar, sí,…
2
Elegir este texto de Carlos Gil Pérez es un pequeño homenaje al pero no te detengas… ahí está… el cielo sobre ti, y el
trabajo realizado durante muchos años en pro del atletismo en
camino a tus pies… sólo puedes ir para adelante…
España. De ese trabajo o mediado por éste, se han forjado
atletas de talla internacional como José Luis Sánchez Paraiso, Staten Island… Brooklyn… los primeros 10 son un
Agustín Pérez Cordovilla, Efrén Alonso, Ambrosio González, suspiro… y los 21 llegan casi distraídamente…
Antonio Sánchez, Rosa Colorado, Angela Domínguez, Teresa acompañados de tanto “Go, go, go to finish” que gritan
Recio, Enrique Alguero, Alvaro González, Honorato Hernández, miles de gargantas emocionadas… Queens… 23, 24… y
Miguel Angel Rivero o Jesús Hernández (entre otros muchos).
Carlos Gil puso en marcha en la década de los años 70 una idea, este puente tan largo y empinado… uff… cuesta, sí que
pionera en España, las escuelas de atletismo. Estas escuelas cuesta pero ya pasa… que se sentirá a los 30? Quiero
contaban entre sus técnicos -por primera vez en España- con un saber… empiezan a pesar las piernas, los pies duelen
psicólogo, Gerardo Prieto Adanez (actual Catedrático de algo, pero puedo pensar y transformarlo… en placer…
Metodología de las Ciencias del Comportamiento en la Universidad
de Salamanca).
en sentir que falta poco… los últimos 12, no es mucho…
8
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Bronx… ya poco es el combustible que le queda a mis clínica. Se hace necesario tener el rigor científico y
músculos… pero como se pueda… de cualquier metodológico de cualquier investigador, tocado de la
forma… Manhatan… El Central Park!!! , que emoción comprensión humanística necesaria para lograr que los
da entrar en él, pero consciente también de que deportistas con los que colaboramos alcancen -en las
vienen los últimos 6 y más duros km. que pueda mejores condiciones- sus metas y objetivos. Se hace
imaginar, subidas y más subidas, aliento y más necesario -para llevar a cabo una buena intervención- so
aliento… cada vez más fuerte, ellos… que están solamente conocer las especificaciones técnicas de este
parados a los costados, también sienten que la corren, deporte -el atletismo- sino también conocer sus
también son parte, me aplauden de la misma forma sensaciones, de esa manera lograremos entender mejor
que lo hicieron con el primero, y que lo harán con los a nuestros deportistas. Esta consideración no invalida,
últimos. ¿Cómo puedo explicarte esos 150 metros en absoluto, compartir los fundamentos teóricos de
finales?, si alguna vez corriste, lo sabés, si no, quizás algunas técnicas de intervención de gran tradición
intentes entenderlo… esa entrega total, ese egoísmo clínica.
de sentirte único, esa profunda sensación de plenitud,
no hay cansancio, no duelen las piernas, más tarde La intervención psicológica en el deporte supone
seguro no pueda bajar un escalón… pero ahora si un conjunto de técnicas que modifican las conductas,
puedo apretar el paso y cruzar… 4 horas, 11 minutos, encaminadas a mejorar los recursos de acción del
02 segundos… será la marca a superar para la sujeto entrenado ante situaciones nuevas, inesperadas o
próxima, ahora sólo queda disfrutar este momento y que el sujeto codifica como desbordantes según el
guardar para siempre esta imágenes, vos propio análisis de la situación y de las expectativas
maratonista… sabes de que te hablo… nunca olvidaste (Palmi, 1989).
tu primer maratón… aunque haya pasado mucho
tiempo y muchas maratones, cerrás los ojos y sentís… Uno de los problemas con los que cuenta la
esto que yo estoy sintiendo ahora … y ese orgullo de Psicología del Deporte, entre otros muchos, es la falta
poder llamarme al fin… ”MARATONISTA”. de sincronía entre las técnicas y las planificaciones de
entrenamiento deportivo. Distintos autores utilizan
Diana Celeiro (2000)3. 7 de Noviembre de 1999 distintas técnicas. Con el fin de poder evaluar que
Maratón de Nueva York. http://www.efdeportes.com/ conceptos, y por ende, las técnicas más usadas, se ha
Revista Digital - Buenos Aires - Año 5 - N° 27 - realizado dos búsquedas, una en la base de datos
Noviembre de 2000 SPORT-DISCUS y otra en PsycINFO. La búsqueda en
SPORT-DISCUS se ha realizado siguiendo una estrategia
Intervenir como psicólogos en el deporte es cruzada utilizando las palabras clave RUNNING AND
distinto a otros tipos de intervención. Las actitudes, PSYCHOLOGY y como aparece recogido en la Tabla nº 1
normas, valores, procedimientos y estrategias de la se han encontrado 567 referencias. Estas 567
intervención clínica aquí no sirven, y no sirven porque referencias se reparten de 1951 a 1960 aparece un
las personas con las que hemos de trabajar no tienen único trabajo publicado, de 1961 a 1970 aparecen 4; de
-en general- trastornos de conducta, no son pacientes. 1971 a 1980 existen 117; de 1981 a 1990 se recogen
Hemos de olvidarnos de los modelos de intervención 289 y de 1991 a 2000, 156.
Tabla 1.
Nº de
Nº referencias Nº referencias referencias
Palabras clave Limites Nº Referencias por años
palabra clave limite búsqueda
cruzada
RUNNING AND 19.159 567 1951-1960 1
PSYCHOLOGY 30.805 1961-1970 4
1971-1980 117
1981-1990 289
1991-2000 156
3
Queremos agradecer a la autora, Diana Celeiro, y a Tulio
Guterman, director de la revista digital "Lecturas de Educación
Física" (http://www.efdeportes.com) la cesión de este texto.
9
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Tabla 2. Conceptos
running-
Running 343 9,27 Evaluation 11 0,3 4 0,11 belgium 2 0,05
psychophysiology
Running- psychology-goal-
332 8,97 injury 11 0,3 4 0,11 pre-exercise 2 0,05
psychology setting
abnormal-
Psychology 140 3,78 Questionnaire 11 0,3 factor-analysis 4 0,11 2 0,05
psychology
Middle-distance-
and-long- psychology-
131 3,54 Middle-age 11 0,3 Introversion 4 0,11 2 0,05
distance-running- attitude
psychology
socioeconomic-
track-and-field 100 2,7 Anorexia-nervosa 10 0,27 Counseling 4 0,11 2 0,05
factor
physiology-
performance-
distance-running 75 2,03 Physiology 10 0,27 4 0,11 cardiovascular- 2 0,05
prediction
hemodynamics
interpersonal-
jogging 74 2 Participation 10 0,27 4 0,11 problem-solving 2 0,05
relation
man 71 1,92 Age-factor 9 0,24 Interests 4 0,11 bodybuilding 2 0,05
long-distance- bodybuilding-
71 1,92 Treatment 9 0,24 Risk 4 0,11 2 0,05
running psychology
Psychology-
mental-training 68 1,84 Case-study 9 0,24 personality- 4 0,11 fantasy 2 0,05
testing
anxiety 67 1,81 Leisure 9 0,24 Student 4 0,11 psyching 2 0,05
psychology-
woman 61 1,65 Testing 9 0,24 Neuroses 4 0,11 2 0,05
relaxation
addiction 59 1,59 Heart-rate 9 0,24 Narcissism 4 0,11 body-height 2 0,05
Multiple-
motivation 55 1,49 Success 8 0,22 regression- 4 0,11 aggression 2 0,05
analysis
perceptual-motor-
processes-
personality 55 1,49 perception 8 0,22 Attribution 4 0,11 2 0,05
perceived-
exertion
comparative- women-
50 1,35 research 8 0,22 Ego 4 0,11 2 0,05
study psychology
Psychology- physical-fitness-
emotion 50 1,35 thinking 8 0,22 4 0,11 2 0,05
psychotherapy exercise-addiction
Psychology-
athlete 41 1,11 university 8 0,22 4 0,11 peak-experience 2 0,05
personality
running- marathon-and-
physical-fitness-
psychology- 41 1,11 ultramarathon- 8 0,22 biofeedback 4 0,11 2 0,05
middle-aged
mental-training psychology
physical-fitness-
programs-and-
exercise 40 1,08 dissociation 8 0,22 aerobic-capacity 4 0,11 2 0,05
activities-
relaxation
middle-distance-
36 0,97 lifestyle 8 0,22 habit 4 0,11 pacing 2 0,05
running
depression 35 0,95 boy 8 0,22 adverse-effect 4 0,11 muscle 2 0,05
psychology-
physical-fitness 34 0,92 obsession 7 0,19 4 0,11 occurrence 2 0,05
achievement
10
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
cross-country-
running-
stress 30 0,81 fatigue 7 0,19 3 0,08 Obesity 2 0,05
psychology-
mental-training
sex-factor 29 0,78 meditation 7 0,19 respiration 3 0,08 novice-athlete 2 0,05
Applied-
achievement-
attitude 28 0,76 7 0,19 psychophysiology 3 0,08 behaviour- 2 0,05
motivation
analysis
middle-distance-
and-long-
Relaxation 27 0,73 training-load 7 0,19 3 0,08 arousal 2 0,05
distance-running-
social-psychology
diseases-and-
internal-external-
Achievement 21 0,57 disorders- 6 0,16 subculture 3 0,08 2 0,05
control
anorexia-nervosa
middle-distance-
cross-country-
and-long-
behaviour- running-
Sport 21 0,57 distance-running- 6 0,16 3 0,08 2 0,05
modification perceptual-motor-
training-and-
processes
conditioning
Running-social- elementary-
18 0,49 endorphin 6 0,16 boredom 3 0,08 2 0,05
psychology school
running-
Commitment 16 0,43 mental-process 6 0,16 3 0,08 losing 2 0,05
bibliographies
incentive-
Self-esteem 16 0,43 young-adult 6 0,16 cattell's-16pf 3 0,08 2 0,05
motivation
Psychotherapy 16 0,43 treadmill 6 0,16 self-actualization 3 0,08 deprivation 2 0,05
physical-fitness-
mental-health 16 0,43 6 0,16 coach 3 0,08 diagnosis 2 0,05
psychology
middle-distance-
and-long-
distance-running- 16 0,43 social-psychology 6 0,16 satisfaction 3 0,08 imagery 2 0,05
psychology-
mental-training
psychology-
therapy 16 0,43 5 0,14 compliance 3 0,08 reward 2 0,05
motivation
state-trait-
cognition 15 0,41 5 0,14 confidence 3 0,08 holistic-health 2 0,05
anxiety-inventory
11
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
stress-
14 0,38 body-weight 5 0,14 bibliography 3 0,08 intelligence 2 0,05
management
pre-competition 14 0,38 strategy 5 0,14 master-athlete 3 0,08 cognitive-style 2 0,05
physical-fitness-
euphoria 14 0,38 psychodynamics 5 0,14 exercise- 3 0,08 history 2 0,05
prescription
correlation 14 0,38 hypnosis 5 0,14 planning 3 0,08 slump 2 0,05
psychology-
14 0,38 concentration 5 0,14 psychiatry 3 0,08 psychoanalysis 2 0,05
anxiety
psychology-
goal-setting 13 0,35 5 0,14 method 3 0,08 cathexis 2 0,05
depression
coronary-prone- physical-
coping-behavior 13 0,35 5 0,14 mental-disorder 3 0,08 2 0,05
behavior education
psychology- running- esalen-sports-
13 0,35 5 0,14 Menstruation 3 0,08 2 0,05
emotion physiology centre
coaching-social-
running-injuries- psychology-
Coaching 13 0,35 5 0,14 Extraversion 3 0,08 2 0,05
and-accidents athlete-coach-
relationship
Adult 13 0,35 self-perception 5 0,14 Marriage 3 0,08 rehabilitation 2 0,05
profile-of-mood- Psychology- cognitive-
13 0,35 parapsychology 5 0,14 3 0,08 2 0,05
states behaviour dissonance
psychology-
Skill 12 0,32 failure 5 0,14 3 0,08 consciousness 2 0,05
bibliographies
marathon-and-
ultramarathon-
Prevention 12 0,32 adaptation 5 0,14 longitudinal-study 3 0,08 2 0,05
training-and-
conditioning
psychology- emotional-
self-efficacy 12 0,32 peaking 5 0,14 3 0,08 2 0,05
mental-training disorder
competitive-
Girl 11 0,3 Winning 4 0,11 family 3 0,08 state-anxiety- 2 0,05
inventory
psychology- regression-
11 0,3 Endurance 4 0,11 follow-up-study 3 0,08 2 0,05
exercise-addiction analysis
Hemos realizado un análisis sobre esos 567 D. con 7 (21,84%); Martin, J. J. con 6 (18,72%);
trabajos para estimar quienes son los autores con más Morgan, W. P. con 6 (18,72%); Henderson, J. con 6
trabajos citados y son: Sachs, M. L con 16 trabajos (18,72%); Berger, B. G. con 6 (18,72%) y Watts, P. con
(49,92%); Lynch, J. con 14 (43,68%); Sheehan, G. con 5 (15,6%). El resto de los autores aparece recogido en
11 (34,32%); Anderson, O. con 10 (31,2%); Pargman, la tabla nº 3.
Tabla 3. Autores
12
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Tabla 4.
Nº de
Nº referencias Nº referencias referencias
Palabras clave Limites Nº Referencias por años
palabra clave limite4 búsqueda
cruzada
ATHLETES-* 3157 3700 ó 538 1951-1960 18
ATHLETES 4289 3000 ó 1961-1970 46
RUNNING 5620 2900 ó 1971-1980 95
3500 1981-1990 47
1991-2000 220
4
Se utiliza esta estrategía con el fin de eliminar las referencias provenientes de la etología o de aprendizaje animal. Los códigos pertenecen a
ciertas áreas: 3700 (Sport Psychology and Leisure), 3000 (Social Psychology), 2900 (Social Processes and Social Issues) y 3500 (Eductional
Psychology).
13
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Los principales conceptos encontrados en esta self-esteem (auto-estima) con una frecuencia de 11
búsqueda son: athletes con una frecuencia de (0.37%). Tercero (3) en quincuagésimo primer lugar
apariciones 178 que supone el 6,04%; sports con 78 (51) Injuries (lesiones), 10 (0.34%). Cuarto (4), en el
(2,65%); sport-psychology, 68 (2,31%); adulthood, 55 puesto quincuagésimo segundo (52), Imagery
(1,87%); athletic-participation, 54 (1,83%); college- (Imaginería), 10 (0.34%). Quinto (5), en sexagésimo
athletes, 45 (1,53%); athletic-performance, 42 segundo lugar (62). Goals (metas), 9 (0.31%). Sexto
(1,43%); intelligence, 39 (1,32%); educational (6), en el puesto octogésimo primero (81), decision-
psychology, 35 (1,19%) y running, 34 (1,15%). making (toma de decisiones), 8 (0.27%). Séptimo (7),
en el puesto octogésimo quinto (85) attention (atención),
Con respecto a las técnicas o estrategias más 7 (0.24%). Octavo (8), en el puesto 126, body-image
citadas, en primer lugar (1) aparece en el puesto (imagen corporal), 5 (0.17%). Noveno (9), en el puesto
trigésimo octavo (38) Self-confidence (auto-confianza) 134, coping-behavior (modelado participante), 5
con una frecuencia de 13 lo que supone un 0.44%; en (0.17%); y finalmente, décimo (10), en el puesto 154,
segundo lugar (2) en cuadragésimo quinto puesto(45), Hypnosis, 4 (0.14%).
Tabla 5. Conceptos
Concepto Fre %
Individual 5 0,17 phenomenology 3 0,1 sports-spectators 2 0,07
athletes 178 6,04 coping-behavior 5 0,17 psychiatry 3 0,1 mental practice 2 0,07
sports 78 2,65 Counseling 5 0,17 adult-attitudes 3 0,1 mental-disorders 2 0,07
sport-psychology 68 2,31
Crime 5 0,17 racial-differences 3 0,1 military-personnel 2 0,07
14
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
physical- scholarship
18 0,61
education aptitude 4 0,14 gpa 3 0,1 retention 2 0,07
achievement 18 0,61 School 4 0,14 mental disorders 3 0,1 risk-taking 2 0,07
teams 18 0,61 Research 4 0,14 body image 3 0,1 role 2 0,07
childhood 18 0,61
Success 4 0,14 motor-skills 3 0,1 physical-strength 2 0,07
recreation 17 0,58
sex-role-attitudes 4 0,14 mental tests 3 0,1 pueblo 2 0,07
athletic-training 17 0,58
Habits 4 0,14 delinquency and 2 0,07 self-management 2 0,07
15
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
16
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
baseball 6 0,2 group-dynamics 3 0,1 attitudes toward 2 0,07 marathon runners 2 0,07
costs-and-cost-
physical 6 0,2 elite athletes 3 0,1 analysis 2 0,07 marketing 2 0,07
competitive figure
basketball 6 0,2 skaters 3 0,1 athletics and 2 0,07 lifestyle 2 0,07
college-academic- persuasive-
achievement 6 0,2 competence 3 0,1 communication 2 0,07 incest 2 0,07
17
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
educational
treatment 6 0,2 saturation point 3 0,1 memory 2 0,07 background 2 0,07
organizational-
whites 6 0,2 colleges 3 0,1 climate 2 0,07 hopi 2 0,07
human-
war 6 0,2 test-construction 3 0,1 participation 2 0,07 development 2 0,07
perceived
involvement 5 0,17 course 3 0,1 competence 2 0,07 source 2 0,07
perceptual-motor-
psychopathology 5 0,17 audiences 3 0,1 processes 2 0,07 sociology 2 0,07
performance
smoking 5 0,17 navaho 3 0,1 enhancement 2 0,07 hypnotherapy 2 0,07
athletic ability 5 0,17 smoking and 3 0,1 social institutions 2 0,07 hypophrenia 2 0,07
athletic
participation 5 0,17 type of sport 3 0,1 occupations 2 0,07 italy 2 0,07
athletic
performance 5 0,17 physical-agility 3 0,1 social ability 2 0,07 in lebanon 2 0,07
occupational- intrinsic-
physical fitness 5 0,17 tolerance 3 0,1 attitudes 2 0,07 motivation 2 0,07
parent-child- physiological-
relations 5 0,17 arousal 3 0,1 philosophy 2 0,07 india 2 0,07
personality- individual-
tests 5 0,17 development 3 0,1 soccer players 2 0,07 differences 2 0,07
body-image 5 0,17 reading 3 0,1 physical defects 2 0,07 infancy 2 0,07
physical-
masculinity 5 0,17 australia 3 0,1 appearance 2 0,07 infant 2 0,07
physical-
violence 5 0,17 textbooks 3 0,1 development 2 0,07 social-values 2 0,07
college interpersonal-
achievement 5 0,17 textbook 3 0,1 soccer 2 0,07 communication 2 0,07
physical- interpersonal-
Character 5 0,17 nervous 3 0,1 endurance 2 0,07 influences 2 0,07
Interpersonal- personality
interaction 5 0,17 social-approval 3 0,1 correlates 2 0,07 higher-education 2 0,07
internal-external- socioeconomic-
locus-of-control 5 0,17 social-behavior 3 0,1 motor phenomena 2 0,07 status 2 0,07
Al igual que en la consulta anterior, hemos revisado quienes son los autores más citados, aparecen en la tabla nº 6.
Tabla 6. Autores
Hassmen, Peter 3 0,56 Bridges, Dana 2 0,37 Whelan, James P. 2 0,37 Tammen, Vance 2 0,37
18
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Al igual que hicimos en el primer capítulo, de Psicología del Deporte con el fin de examinar cual es
vamos a revisar algunos de los principales manuales el tratamiento que se le da al atletismo.
Nº Capítulos
Autor Año Titulo Nº Capítulos dedicados al
atletismo
Thomas A. Psychology of coaching
Tutko y Jacks 1971 (1985) (Psicología del entrenamiento 12 0
W. Richards deportivo)
No tiene ningún capítulo dedicado a técnicas de intervención
John D. Sport Psychology (Psicología
1972 (1978) 9 1
Lawther del deporte y del deportista)
No tiene ningún capítulo dedicado a técnicas de intervención
Psycho-motor behavior in
education and sport
Bryant J. Craty 1974 (1979) 22 2
(Motricidad y Psiquismo en la
educación y el deporte)
No tiene ningún capítulo dedicado a técnicas de intervención
Einführung in die
Alexander
1978 (1981) Sportpsychologie (Psicología 13 0
Thomas
del Deporte)
No tiene ningún capítulo dedicado a técnicas de intervención
Robert M. The Ethics and Practice of
1981 19 0
Nideffer Applied Sport Psychology
Biofeedback, la hipnosis, las autoinstrucciones, relajación progresiva, control
atencional, técnicas de imaginería, discriminación de señales y Visual Motor
Behavioral Rehearsal
The athlete's guide to Sports
Dorothy V Psychology: Mental Skills for
Harris & Bette 1984 (1987). Physical people (Psicología del 10 0
L. Harris deporte. Integración mente--
cuerpo)
Relajación, concentración, imaginería, meditación, fijación de objetivos
Robert M. Athletes' Guide to Mental
1985 15 0
Nideffer Training
Concentración, Relajación y Atención
Sport Psychology. Concepts
Richard H. Cox 1985 11 0
and Applications
Relajación (Progresiva, Entrenamiento autógeno, Meditación trascendental,
Biofeedback), Imaginería, Hipnosis, Establecimiento de metas, Visual-Motor Behavior
Rehearsal, Inoculación de estrés, Afrontamiento.
Applied Sport Psychology
Jean M. Williams 1986 (1991) (Psicología Aplicada al 22 0
Deporte)
Relajación, Imaginería, Técnicas Cognitivas, Atención , Concentración y Autohipnosis
Albert V.
1988 Group Dynamics in Sport 19 0
Carron
No tiene ningún capítulo dedicado a técnicas de intervención
Psychological Factors in
Don Davies 1989 8 0
Competitive Sport
Estrategias frente a la ansiedad y Anticipación
Arnold D.
Sport Psychology an
LeUnes y Jack 1989 13 0
introduction
R. Nation
19
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Atención
Robert N.
Singer, Milledge Handbook of Research on
1993 44 0
Murphey y L. Sport Psychology
Keith Tennant
Antonio
Introducción a la informática
Hernández
1996 aplicada a la Psicología del 6 1
Mendo y Raúl
Deporte
Ramos Pollán
Atención
Judy L. Van
Exploring Sport and Exercise
Raalte y Britton 1996 21 1
Psychology
W. Brewer
Establecimiento de objetivos, Imaginería, Estrategias cognitivas e Hipnosis
Jaume Cruz 1997 Psicología del Deporte 10 0
No tiene ningún capítulo dedicado a técnicas de intervención
20
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Bob Rotella, B.
Ann Boyce, Bill
Case Studies in Sport
Allyson y 1998 15 0
Psychology
Jacqueline C.
Savis
Control emocional
Como podemos comprobar, solamente en ajustada previamente a cada caso, si el lector decide
cuatro manuales se aborda esta temática. Con aplicarla. En esta propuesta hemos pretendido no
independencia de las causas que expliquen esta solamente hacernos eco de las investigaciones
situación, lo que parece evidente -si lo comparamos realizadas al respecto, también aportar nuestra propia
con los manuales técnicos de atletismo- es que apenas experiencia en este terreno. La propuesta tendrá una
tiene referentes una disciplina deportiva, que con toda triple vertiente, en primer lugar, se propondrá un
seguridad, ha sido donde más intervenciones esquema de trabajo para el psicólogo con todas las
psicológicas se han llevado a cabo. Basta comprobar referencias y anotaciones necesarias; en segundo lugar,
uno de los manuales clásicos de Jürgen Weineck se realizarán una serie de recomendaciones de
(1988), Entrenamiento óptimo. Cómo lograr el máximo autoayuda para los atletas; y, finalmente, algunos
rendimiento, la cuarta parte -compuesta por cuatro consejos para los entrenadores. Con esto pretendemos,
capítulos- está dedicada al entrenamiento psicológico. además de entrar en el ámbito académico, suministrar
O el texto A. Kirsch y K. Koch (1973), Series unas directrices de autoayuda y de intervención
metodológicas de ejercicios en atletismo, que aunque mediada.
no tiene un capítulo dedicado a la psicología, en la
introducción hace una breve reflexión de cómo es
necesario trabajar para mantener la motivación en los La intervención psicológica
niños y adolescentes. El manual de Gerhardt
Schmolinsky (1978), Atletismo, que aunque En este epígrafe vamos a describir unas
someramente y bajo el rotulo de educación social y directrices generales que permitan desarrollar un plan
moral también lo aborda. También el texto de Carlos de intervención con atletas. Este esquema pretendemos
Gil Pérez (1973), Pedagogía de la carrera, su título que, con algunas diferencias, sea aplicable tanto para
muestra la postura teórica desde donde se abordan las corredores, lanzadores o saltadores. Consideramos que
enseñanzas técnicas de este deporte. Hay también la planificación de la intervención psicológica debe estar
diversos manuales -en español y en inglés- que obvian mediada por varios factores (Hernández Mendo, 1993;
la importancia de la psicología en este tema. 1995):
Con respecto a las técnicas de intervención, (a) El atleta como persona, con su idiosincrasia
ocho manuales no dedican -específicamente- espacio a personal, sus variables diferenciadoras, sus
ninguna técnica de intervención. Autores como Nideffer valores, normas y actitudes, el nivel de motivación,
(1981,1985) cita el biofeedback, la hipnosis, las su adherencia al entrenamiento. Para lo cual se
autoinstrucciones, la relajación progresiva, el control hace necesario una evaluación de factores y rasgos
atencional, las técnicas de imaginería, la de personalidad, emocionales, etc. No
discriminación de señales y Visual Motor Behavioral descartaremos usar ningún tipo de instrumento que
Rehearsal. Por su parte Harris y Harris (1984) nos permita obtener información fiable:
proponen el manejo de la ansiedad, relajación, control cuestionarios, test, observación, entrevista, etc.
atencional, técnicas de imaginería, detención del
pensamiento negativo y entrenamiento en habilidades (b) La especialidad atlética que practique. Hay
sociales. Roberts (1986) cita las técnicas de especialidades como los saltos y los lanzamientos
imaginería, relajación, el reforzamiento, control que tienes pausas y pueden ser aprovechadas para
atencional y la motivación. Palmi (1989) realiza una realizar algún tipo de técnica o estrategia que
revisión bibliográfica de las técnicas más citadas, permita reorientar la ejecución, mejorar la
encontrándose que tanto el manejo de la ansiedad concentración, etc. Otras especialidades en
como las técnicas de imaginería superan el 60% y determinadas situaciones (campeonatos nacionales,
rondando el 50% (45%) la concentración/atención. Ba- de Europa, etc.) deben realizar eliminatorias,
con, 1989 considera cinco grupos de técnicas: semifinales, etc. y es necesario tenerlo en cuenta
relajación, autoinstrucciones positivas, energetización, para controlar el nivel de cansancio no solo físico,
visualización y concentración. también psicológico. Es conveniente asistir a
entrenamientos y competiciones y tomar todas las
Nosotros vamos a realizar una propuesta de notas necesarias sobre diversos aspectos de la
intervención de carácter general que deberá ser modalidad atlética.
21
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
(c) El nivel de ejecución. Debemos diferenciar 1 mes) cada uno de ellos y dos curvas independientes,
entre el atleta novel y el veterano (por una curva que representa el volumen total de trabajo y
experiencia no por edad). Es posible que el atleta otra que representa la intensidad de ese trabajo. En
novel sea presa fácil de la ansiedad este ejemplo consideramos la opción mas sencilla, un
precompetitiva o bien que el veterano tenga solo período de competición (podríamos considerar dos
instaurados una serie de rituales que le impiden períodos de competición y repetiríamos el esquema, con
optimizar sus recursos de acción. las variantes lógicas que la realidad nos vaya
imponiendo). La labor del psicólogo se podría estructu-
(d) La planificación de sus entrenamientos. rar, en el caso más sencillo, en dos etapas (Hernández
Como veremos más adelante es necesario conocer Mendo, 1993, 1995).
si va a competir en invierno o en verano o a lo
largo de toda la temporada. Para lo que se hace Primera etapa, que abarcaría los dos primeros ciclos,
preciso tener una buena comunicación con el caracterizado por un gran volumen de trabajo a nivel
entrenador. físico. La actuación del psicólogo en estos dos ciclos se
caracterizarían por una labor de enseñanza de técnicas
(e) El tipo de relación que mantiene con su psicológicas básicas realizadas a nivel grupal o
entrenador. Es importante definir este tipo de individual. Las técnicas que se trabajan en estos
relación, hay entrenadores muy autoritarios, otros períodos son fundamentalmente:
que son más abiertos y este tipo de relación va a
mediar la intervención. Ejercicios de Relajación5. Estos ejercicios se
podrían realizar utilizando la Técnica de relajación
(f) El entorno emocional del atleta. El tipo de de Jacobson (1964), Técnica de Relajación Pasiva
familia a la que pertenece y los lazos que tiene con (Schwartz y Haynes, 1974) o el Entrenamiento
cada uno de los miembros, sus relaciones afectivas Autógeno de Schultz (Schultz, 1932; Schultz &
(si tiene novio/a, si esta casada/o, etc.) y la Luthe, 1959). Aunque utilizar procedimientos de
estabilidad de estas relaciones. relajación de bajo coste inicial (Bueno y Buceta,
1988) puede facilitar la adherencia. Esto es posible
(g) El lugar de la intervención. Debemos de pensar conseguirlo utilizando técnicas de respiración
donde vamos a realizar el trabajo, si lo realizamos (Davis, McKay y Eshelman, 1985) como se verá más
en el despacho podremos llevar a cabo una gran adelante al abordar las técnicas de respiración6.
cantidad de técnicas, sin embargo si lo vamos a Algunas técnicas de relajación son susceptibles de
realizar al pie de pista la variedad de técnicas se ser usadas en combinación con cierto tipo de
reducen. Es posible que realicemos la intervención música7. Se ha realizado algún trabajo sobre la
en ambos lugares con lo cual deberemos tener un musicoterapia en relajación (Mercado, 1984).
repertorio de técnicas distintas.
Técnicas de imaginería 8. Martens (1982) llevó a
Como ya ha quedado señalado, un factor cabo una revisión de los principales trabajos de
importante es considerar las fases en la periodización investigación sobre la imaginación y las conductas
del plan anual. Conocido este dato, la propuesta pasa motoras desde 1970 a 1982, concluyendo que las
por establecer una serie de habilidades mentales imágenes de movimiento mejoran la práctica
básicas, a continuación se trabaja sobre habilidades
mentales específicas y finalmente el trabajo se
5
centrará en estrategias individuales de competición. Un Se puede encontrar más información sobre relajación en la
bibliografía de este capítulo. Es interesante revisar los trabajos de
atleta -sea lanzador, saltador o corredor- es normal Bernstein y Borkovec (1973), Cautela y Groden (1985), Smith
que prepare una serie de competiciones a lo largo de (1992), Durand de Bousingen (1986), Davis, McKay y Eshelman
su temporada. Algunas de estas competiciones (1985), Labrador, de la Puente y Crespo (1993) y Vera y Vila
tendrán prioridad sobre el resto, pero esto no implica (1991).
6
Para más información sobre respiración se pueden consultar los
que a las demás acuda en baja forma. Para permitir
trabajos de Escolá (1989); Lodes (1990) y Labrador, de la Puente
estar a un buen nivel durante gran parte de la y Crespo (1993) .
temporada se han creado las planificaciones de 7
Personalmente hemos conseguido buenos estados de relajación
entrenamiento multicúspide. Un atleta puede en utilizando música de Vivaldi (L'estro armonio), Albinoni (Adagio) y
invierno competir en pista cubierta (o en cross) y en Handel (Música acuática). En el mercado existen multitud de
composiciones que sirven para este fin.
verano en pista al aire libre en la multitud de meetings 8
Este epígrafe lo desarrollaremos siguiendo la revisión efectuada
existentes. por Sánchez y Lejeune (1999). Para más información sobre
imaginería puede consultarse Denis (1979); Eberspächer (1990);
Consideremos, por ejemplo, la temporada Palmi y Mariné (1996); Vadocz, Hall y Moritz (1997); Moritz, Hall,
Martin y Vodocz (1996); Munroe, Hall, Simms y Weinberg (1998);
deportiva dividida en cuatro ciclos, con cuatro etapas Hall, Mack, Paivio y Hausenblas (1998) y Smith, (1987)
(u ocho) en cada ciclo y una duración de tres meses (o
22
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
deportiva. Los trabajos de Suinn (1993) y Suinn (1980, 1993) el mecanismo de adquisición de
Sánchez y Lejeune (1999) llevan a a cabo una habilidades (como es el caso de la imaginería)
profunda e importante revisión sobre la alcance dentro de la ejecución deportiva funcionaría de
de las imágenes en el deporte así como del apoyo acuerdo al esquema representado en la ilustración
teórico en el que se sustentan. De acuerdo con 1.
Siguiendo los trabajos de Suinn (1993) y más que la ausencia de práctica. Por su parte Driskell et
Sánchez y Lejeune (1999), los primeros autores en al. (1994) -en otro metaanálisis de 35 trabajos- afirma
mostrar interés por el tema son Jastrow (1892) y que la práctica mental puede ser utilizada como un
Washburn (1916), aunque los primeros trabajos son entrenamiento efectivo alternativo a la práctica física
de Jacobson (1932), Perry (1939) y Sackett (1934). “real”. Existen varias teorías explicativas aunque ninguna
Pero será a partir de los años 60 cuando hay una de ellas lo hace en su totalidad, estas son: Teoría
eclosión de trabajos. Uno de los principales autores Psiconeuromuscular, T. Aprendizaje simbólico, T.
sobre el tema de las imágenes mentales es Kosslyn Activación, T. Bio-informacional (o T. del Procesamiento
(1980, 1994), éste considera que la imaginería no es de Información), T. del Triple código, T. Regulación
una capacidad global e indiferenciada, es una red de atencional, T. Condicionamiento interno y la T. Auto-
sub-sistemas más o menos independientes que eficacia. Por otro parte, los parámetros a tener en
“generan” y “transforman” las imágenes en el buffer. cuenta para planificar un entrenamiento en imaginería
Podemos considerar que la "imaginería mental hace son:
referencia a todas las experiencias casi-sensoriales o
casi-perceptivas de las que tomamos conciencia y que 1. Práctica mental vs. Práctica física. El método ideal
existen para nosotros en ausencia de las es una combinación de práctica real y practica
estimulaciones externas que las producen mental (Hird, Landers, Thomas y Horan, 1991).
genuinamente” (Richardson, 1969, pp. 2-3). Autores
como Richardson (1967) consideran que la imaginería 2. Tipos de imaginería. Existen dos tipos básicos de
es eficaz para la mejora de la ejecución motora. imaginería, externa e interna, algunos autores
Corbin (1972) concluye que la práctica mental es afirman ser más eficaz la imaginería interna,
preferible a la ausencia completa de entrenamiento. especialmente con deportistas de élite (Mahoney y
Weinberg (1982) asegura que la imaginería es un Avener, 1977).
método eficaz para la mejora del rendimiento. Feltz y
Landers (1983) como conclusión a un trabajo de
metaanálisis consideran que mejora el rendimiento
23
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
10
Un Modrian está formado por cuadrículas coloreadas.
11
9
Se puede encontrar un buen número de descripción de Este software es de libre acceso en
imágenes que trabajan la integración de todos los canales http://www.efdeportes.com/soft.htm
sensoriales en Fezler (1989).
24
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
en realizar la visualización completa y el número de escala Likert de 7 puntos, excepto para dos ítems
errores cometido. La ventana de diálogo que ofrece que requieren una respuesta de “si o no”. El
este programa es simple, con un total de ocho promedio de coeficiente de fiabilidad mediante test-
opciones. Las tres primeras definen el modrian, retest fue 0.71. El contacto con los autores es: Craig
pidiéndole al usuario que defina el número de Hall, Faculty of Physical Education, University or
cuadrados que va a tener el modrian a lo largo y a lo Western Ontario, London, Ontario, Canada N6A 3K7.
ancho y el número de colores que desea que tenga. La (Phone # 519661-3076).
cuarta opción hace referencia al tiempo de exposición.
Otra de las funciones implementadas es el uso de un b Mental Imagery Tests (MIT) de Moody (1967). Este
metrónomo, su uso es opcional. Siendo las tres cuestionario permite evaluar las diferencias
restantes de ejecución del modrian, presentación del individuales en las habilidades motoras imaginadas.
mismo una vez que haya desaparecido y salir al El cuestionario esta compuesto de tres subtest
entorno windows. grabados en vídeo en el que se desarrollan
observaciones de objetos y/o personas en
Los principales cuestionarios para evaluación movimiento. El subtest de imaginación I se desarrolla
de la imaginería de acuerdo con el trabajo de Palmi y la cognición de cuatro formas geométricas que los
Mariné (1996) son: sujetos responden a 10 ítems. El subtest de
imaginación II requiere que los sujetos vean una
a Test of Visual Imagery Control (T.V.I.Q.) de breve película de un acto motor (como un balanceo
Gordon (1950) es un autoinforme no específico de de golf), y cuando identifican el acto es presentado,
deporte que evalúa la capacidad visual como como uno de los cuatro actos motores similares,
elemento dentro del proceso de imaginería. poco segundos después. El subtest de imaginación III
requiere que los sujetos vean una breve película de
b Vividness Visual Imagery Questionnaire (V.V.I.Q.) actos motores y cuando se instruye, responden a una
de Marks (1973), al igual que el anterior es un serie de 5 preguntas sobre los actos. La fiabilidad
autoinforme no específico que evalúa la capacidad obtenida por el método de las dos mitades es 0.87
de imaginería visual. (puntuación compuesta). Las pruebas de validez de
discriminación no tuvieron éxito.
c Sport Imagery Questionnaire (SIQ) de Martens
(1982) en el que se evalúan cuatro situaciones c Movement Imagery Questionnarie13 (MIQ) de Hall,
(practicando solo, con otros, observando a un Pongrac & Buckholz (1985). Este cuestionario consta
compañero y actuando en competición) de 18 ítems, 9 para la subescala visual y 9 para la
considerando las dimensiones visual, auditiva, subescala cinestética. Los sujetos son preguntados
knestésica y estado anímico. por el uso de la imaginación visual y cinestética en la
ejecución de varios movimientos del brazo, la pierna
d Imagery Exercise Questionaire (I.E.Q) de Epstein y movimientos que implican a todo el cuerpo. Son
(1980), a partir de unos ejercicios de imaginería el preguntados para que evalúen las dificultades que
deportista puntúa, de 1 a 7, la vivacidad de sus tienen en el uso de la imaginación visual y cinestética
sensaciones. mientras ejecutan cada movimiento. Los sujetos
responden a cada subescala usando una rating scale
e Mental Rehearsal Checklist (M.R.C.) de Nideffer de 7 puntos. La fiabilidad se estimo a través del
(1985) compuesto de siete ítems de coeficiente de consistencia interna alfa de Cronbach
verdadero/falso en relación a la claridad, control y es de 0.87 (subescala visual) y .91 (subescala
color de las imágenes. cinestética). El coeficiente de fiabilidad test-retest
estimado fue de 0.83 Se puede establecer contacto
También Ostrow (1990) propone otros cuatro con los autores en: Craig Hall, Faculty of Physical
cuestionarios para evaluar la imaginería y los procesos Education, University of Western Ontario, London,
asociados a este. Estos cuestionarios y una breve Ontario, Canada N6A 3K7. (Phone # 519-661-3076).
descripción de ellos se exponen a continuación.
d Vividness of Movement Imagery Questionnaire14
12
a Imagery Use Questionnaire (IUQ) de Hall, (VMIQ) de Isaac, Marks & Russel (1986). Este
Rodgers, & Barr (1990). Este cuestionario permite
evaluar los factores que se refieren a la utilización
de la imaginación en el deporte. Está compuesto de 13
Se puede obtener más información de este cuestionario en Goss,
37 ítems. Las respuestas se emiten sobre una Hall, Buckholz & Fishburne (1986); Hall, Buckolz & Fishburne (1989);
Margolies & Fahleson (1986); Mumford & Hall (1985); Pargman,
Juaire & Gill (1987).
12 14
Se puede obtener más información sobre este cuestionario en Hall Se puede obtener más información sobre este cuestionario en
& Barr (1989). Campos, A., & Perez, M.J. (1988). Vivedness of Movement
25
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
cuestionario evalúa las diferencias individuales en la dos tipos de situaciones. Una, que sería en una
imaginación visual del movimiento y la imaginación de situación general de competición o de
sensaciones cinestéticas. Esta compuesto de 24 ítems. entrenamiento y que iría encaminada a mantener la
Las respuestas se realizan sobre una escala ordinal de concentración; y dos, en una situación puntual de
5 puntos. El coeficiente de fiabilidad test-retest ejecución en la que el sujeto verbalizaría todas
estimado fue de 0.76 (intervalo de 3 semanas). La aquellas acciones conducentes a una optimización
validez convergente estimada fue satisfactoria. Se del rendimiento. Se recomienda el uso de esta
puede establecer contacto con los autores en: Anne técnica con aquellos atletas que presentan
Isaac, School of Physical Education, Box 56, University indicadores bajos de autoestima o de autoeficacia y
of Otago, Dunedin, New Zealand. (Phone #024- como técnica básica de mantener la motivación
798960) durante la competición.
26
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
AMPLIA
27
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
28
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
1. Para la evaluación de la ansiedad18 podemos optar confianza entre 0.87 y 0.90. La estimación de la
por los cuestionarios clásicos (STAI, ISRA, etc.) con el validez concurrente ha sido satisfactoria.
fin de obtener información sobre las distintas
dimensiones de la ansiedad o bien utilizar alguno de 2. Para una evaluación de algunos factores de
los cuestionarios específicos para medir la ansiedad en personalidad que nos suministrase información para
el deporte (Martens, Vealy y Burton, 1990) (SCAT y diseñar la intervención y el entrenamiento psicológico
CSAI-2) apropiado podemos recurrir a cuestionarios clásicos de
personalidad o de clínica. También permitirá diseñar la
a. STAI. Cuestionario de Ansiedad Estado Rasgo intervención adecuada en el caso de lesiones (Rotella,
de Spielberg, Gorsuch y Lushene (1986). 1991). Al igual que en el grupo anterior algunos de
Proporciona información que permite instrumentos más clásicos son:
determinar la ansiedad rasgo/estado del
sujeto. a. MMPI. Minnesota Multiphasic Personality Inventory
de Hathaway y McKinley (1988). De este cuestionario
b. ISRA. Inventario de Situaciones y Respuestas nos puede resultar interesante las siguientes
de Ansiedad de Tobal y Cano (1986). subescalas: sinceridad (L), hipocondriasis (Hs),
Proporcionaba información sobre los tres depresión (D) y responsabilidad (Re).
componentes de la ansiedad (cognitiva,
fisiológica y motora), que permitirá elegir la b. EPI. Eysenck Personality Inventory de Eysenck y
mejor técnica -llegado el caso- de reducción de Eysenck (1990). Este test nos proporciona informa-
la ansiedad. ción sobre el continuo Extraversión-introversión de
cara a planificar la utilización de los refuerzos
c. SCAT. Sport Competition Anxiety Test de (Hernández, 1991).
Rainer Martens, Dianne Gill, Tara Scanlan y
Julie Simon (Martens, Vealy, & Burton, 1990). c. EPQ-J. Eysenck Personality Questionnaire-Junior de
Este cuestionario permite evaluar las Eysenck y Eysenck (1978). Este cuestionario es la
diferencias individuales en ansiedad rasgo en versión EPI para adolescentes. Es recomendable
competición. Consta de 15 ítems con tres usarlo cuando los atletas no alcanzan la edad para
posibilidades de respuesta. Tiene dos formatos utilizar la versión anterior.
SCAT-A (adultos) y SCAT-C (para niños). La
fiabilidad de SCAT-C oscila, según los estudios 3. Para una valoración de los puntos débiles del perfil
entre 0.57 y 0.93.; mientras que la fiabilidad de psicológico competitivo se puede utilizar IPED19
la forma A oscila entre 0.95 y 0.97. En cuanto a (Inventario Psicológico de Ejecución Deportiva, véase el
la validez de contenido de la forma C se realizó anexo de este capítulo). Este inventario esta basado en
a través del juicio de seis jueces. En cuanto a una escala construida por Loehr (1990) denominada,
la validez convergente, divergente, concurrente Psychological Performance Inventory PPI. Este inventario
y predictiva de ambas formas ha sido facilita la construcción de un perfil de puntos débiles y
satisfactoria. puntos fuertes del atleta. A partir de estos datos
podemos planificar sobre qué aspectos va incidir más
d. CSAI-2. Competitive State Anxiety Inventory-2 intensamente la intervención y el entrenamiento
de Rainer Martens, Damon Burton, Robin S. psicológico. Este cuestionario consta de 42 ítems que se
Vealy, Linda A. Bump y Daniel E. Smith distribuyen en siete factores: AC (autoconfianza), CAN
(Martens, Vealy, & Burton, 1990). Este (control de afrontamiento negativo), CAT (control
cuestionario evalúa los componentes cognitivos atencional), CVI (control visuoimaginativo), NM (nivel
y somáticos de la ansiedad estado en motivacional), CAP (control de afrontamiento positivo) y
competición y la auto-confianza en relación a la CACT (control actitudinal). En un trabajo con remeros de
ejecución deportiva en competición. Consta de banco fijo (traineras) (Hernández Mendo y Francisco
27 ítems que evalúan tres factores: estado de García, 1995) se encontraron los siguientes índices de
ansiedad cognitivo, estado de ansiedad consistencia interna:
somático y confianza. Se responde sobre
cuatro alternativas de respuesta. La fiabilidad Factor Alpha de Cronbach
estimada para el factor de la ansiedad Autoconfianza .6674
cognitiva se sitúa entre 0.79 y 0.83, para la C.A. negativa .2976
ansiedad somática entre 0.82 y 0.83 y para la C. atencional .6527
18 19
Se puede obtener más información sobre cuestionarios que El IPED (Inventario Psicológico de Ejecución Deportiva) está
evaluen la ansiedad en Márquez (1992), Márquez (1993) y basado en la versión experimental del Psychological Performance
Tabernero y Márquez (1993). Inventory realizada por Amador Cernuda.
29
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
4. Para valorar los estados de humor y hacer 6. Por último y con el objeto de hacer una valoración
predicciones sobre la ejecución deportiva de los predictiva de orden cualitativo acerca de la aparición de
sujetos se puede emplear el cuestionario POMS. estados de ansiedad y de estados de humor que faciliten
Profile of Moode States de McNair, Lorr y Dropleman una buena ejecución deportiva, se puede utilizar el Test
(1971)20 que nos facilita información sobre el estado de los Colores de Lüscher (1990). Es una prueba
anímico del sujeto. El cuestionario Profile of Moode proyectiva en la que solo nos interesa valorar el
States (P.O.M.S.) de Mcnair, Lorr y Dropleman (1971) agrupamiento de ciertos colores en las primeras posicio-
es un autoinforme emocional compuesto de 65 nes o en las últimas, ya que la evidencia empírica de
adjetivos que tiene como objetivo evaluar seis estados algunos psicólogos que trabajan en este ámbito parece
de ánimo o estados afectivos identificados como aseverar que según se produzcan estos agrupamientos
tensión-ansiedad, depresión-melancolía, cólera- podemos predecir con cierta antelación la aparición de
hostilidad, vigor-afectividad, fatiga-inercia y estados de ansiedad manifiesta y también de buenas
confusión-desorientación. De acuerdo con los ejecuciones deportivas.
trabajos de Morgan (1968, 1978, 1980) se puede
utilizar para la selección de talentos deportivos -usado Además de estos instrumentos podemos
en combinación con otros cuestionarios del tipo del encontrar otros muchos que nos puedan servir de ayuda
IPED- y como predictor de resultados deportivos en (Ostrow, 1990). A continuación vamos a describir
deportistas de élite (Hernández Mendo y Ramos, 1995, esquemáticamente algunos cuestionarios que hemos
1996). considerado pueden resultar interesante 22 .
5. Cuando en un plan de intervención decidimos utilizar 1. Sport Cognitive Interference Questionnaire (SCIQ)
la hipnosis, es conveniente evaluar la susceptibilidad de Peter Schwenkmezger and Lothar Laux
de cada atleta a esta técnica de intervención. Podemos (Schwenkmezger & Laux, 1986). evalúa las tareas
emplear diversas escalas. Esto supone asumir una cognitivas irrelevantes experimentadas por los
postura ecléctica del proceso hipnótico21. Teniendo en deportistas de elite en balonmano. El SCIQ contiene
cuenta todo lo anterior, algunas de las escalas diez ítems. Los sujetos responden a los ítems con
utilizadas que podemos utilizar son: “Pienso sobre cosas no concernientes al juego” o
“Estaba preocupado por los errores previos” usando
a. EHSH-A. Escala Harvard de Susceptibilidad a la una escala ordinal de cinco puntos. No hay datos
Hipnosis, forma A de Shor y Orne (1962). Esta acerca de la fiabilidad. La validez de constructo y
escala nos ofrece una puntuación sobre la predictiva fue satisfactoria. La validez concurrente
susceptibilidad a la hipnosis del sujeto. A este fue parcialmente satisfactoria. El contacto de los
respecto hemos revisado los trabajos de Lamas, autores es: Peter Schwenkmezger, Departament of
Valle-Inclan, Blanco y Alcaraz (1985, 1989) sobre Psychology, University of Trier, P.B. 3825, D-5500
la utilización de esta escala en una muestra Trier, Federal Republic of Germany. (Phone # 0651-
española. Estos autores corroboran uno de 201-2889)23.
nuestros propósitos, es "un método estandarizado
de inducción hipnótica y son especialmente útiles 2. Perceived Physical Fitness Scale (PPFS) de Ben R.
para seleccionar sujetos (...) hipnotizables con Abadie (Abadie, 1988). evalúa las percepciones
individuales de las aptitudes físicas. Este
20
Este software es de dominio público y está disponible en cuestionario contiene 12 ítems que evalúan la
http://www.efdeportes.com/soft.htm. percepción individual de las aptitudes físicas en
21 relación a la resistencia cardiorrespiratoria, fuerza
En la conceptualización de la hipnosis se produce un
enfrentamiento entre el paradigma de estado versus no-estado,
también denominado de trance versus procesos generales 22
Estos cuestionarios aparecen descritos en el libro de Andrew C.
(Capafons, 1993). La literatura parece decantarse por el Ostrow (1990). Directory of Psychological Test in the Sport and
segundo (Shor y Orne, 1962; Spanos y Barber, 1974; Spanos y Exercise Sciences. Morgantown, West Virginia: Fitness Information
Chaves, 1989) según el cual la susceptibilidad a la hipnosis Technology, Inc.
entraría dentro de las diferencias individuales. 23
Se puede obtener más información de este cuestionario en
Sarason (1978).
30
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
31
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
32
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
las técnicas basadas en los pulsos podrían ser b. Si sigues un plan de entrenamiento ten constancia
sustituidos los pulsos fisiológicos por los del siempre del tipo de entrenamiento que cada día hay
metrónomo. que hacer y de las indicaciones relativas a distancias
(y su variabilidad), número de repeticiones, tiempos
de paso (si los hubiera), de ejecución y de pausa. En
Consejos para atletas el caso de que únicamente hagas carrera continua,
corre a un ritmo que te permita sentirte bien -
En este epígrafe vamos a intentar hacer una disfruta de la carrera y del paisaje- y alejado del
propuesta de guía de autoayuda. Con esto estrés ambiental (ruido, contaminación, tráfico,
pretendemos llegar también a los más interesados: los aglomeraciones, etc.).
atletas. Los manuales -como éste donde se encuentra
este capítulo- van dedicados a los psicólogos otros van c. Si corres o entrenas solo, hazlo por parajes o
para los técnicos, en la mayoría de los casos, ambos, circuitos cercanos a tu casa, de esta manera evitarás
olvidan que, en el fondo, estamos hablando, pensando cansarte o sentir pereza de desplazarte hasta un
sobre personas: los atletas. Cuando pensamos en un lugar lejano para correr. Puedes hacerlo a ciertas
atleta, acudimos a la imagen -prototípica- de una horas especiales (al amanecer o al atardecer, si es
persona que sigue las pautas de entrenamiento de un que te gusta ver la fiesta del sol) que te ayuden a
técnico o grupo técnico (entrenador, psicólogo, disfrutar plenamente.
médico, masajista, etc.), pero ¿qué ocurre con todas
esas personas que carecen -por distintos motivos- de d. Con independencia de si entrenas sólo o en grupo
todas estas ventajas? Para estas personas -en muchas procura siempre imaginarte (visualizar) realizando el
ocasiones atletas solitarios- hemos construido este entrenamiento o cada parte del entrenamiento. Esto
apartado que pretendemos resulte sencillo -alejado del además de permitirte entrenar mejor te impedirá la
academicismo- pero riguroso y entremezclado con improvisación y con mucha seguridad bastantes
nuestra propia experiencia. lesiones.
Consideramos importante distinguir dos e. Acude al entrenamiento con tiempo suficiente para
situaciones, una de entrenamiento y otra de charlar con tu entrenador, con otros atletas, para
competición. Para aquellos atletas (básicamente calentar de forma adecuada, para cambiarte o
corredores) que no compiten, que toda su motivación ajustarte la ropa adecuadamente, podrás comprobar
gira en torno a mejorar su calidad de vida está el material que vas a usar (zapatillas de clavos,
especialmente diseñada esta primera parte. Para los vallas, pesos, discos, jabalinas, martillos, balones
competidores, ambas partes podrán ser de utilidad. lastrados, fosos, etc.) y en general te permitirá no
estresarte más.
1. En el entrenamiento. El entrenamiento es el
proceso más repetido en la vida de un atleta y el f. Durante el entrenamiento utiliza el diálogo interno o
más primordial, por eso resulta de suma autoinstrucciones con frases de ánimo o que te
importancia cuidar con esmero todos los factores y ayuden a sentirte bien: ¡Venga, ánimo, tú puedes!,
elementos que hay a su alrededor. ¡Venga, ánimo, ya estás acabando!, ¡Venga <tu
nombre>!, ¡ánimo lo estás consiguiendo!
a. Está demostrado que la mejor manera de entrenar
es un grupo. Si entrenas solo es aconsejable que g. Cuando acabes de entrenar dedica un tiempo para
busques alguien con quien correr (o entrenar). En volver a la calma. Si es posible haz un ligero trote
el caso de que sea imposible utiliza diversas descalzo por el césped o simplemente haz un ligero
estrategias para paliar este inconveniente: corre o trote y aprovecha para repasar mentalmente
entrena por recorridos o parajes que te resulten aquellas cosas que has hecho bien y felicítate por
agradables, imagínate que corres con alguien ello. Después, puede ser un buen momento para
(puedes llegar incluso a imaginarte que estás hacer un ejercicio de respiración relajante (ver el
compitiendo), si utilizas distintos recorridos -y si apartado dedicado a las técnicas de respiración).
forma parte del plan de entrenamiento- vete
anotando las mejoras de tiempo de cada circuito, h. Para finalizar este apartado, y de forma general,
lleva un diario de entrenamiento en el que anotes actuar de forma que no generemos en nuestro
diversas variables (tipo de entrenamiento, distancia organismo más estrés y utilizar todas las estrategias
recorrida, pulsaciones al acabar y al minuto, peso, posibles para sentirnos bien después de haber
molestias, etc.), corre o entrena siempre a la entrenado.
misma hora (evita las horas del mediodía) y -si lo
permite el plan de entrenamiento- corre sabiendo 2. En la competición. La competición es el momento
que podrías correr más rápido y más distancia. para el que todo deportista se ha estado preparando
33
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
durante meses, este hecho, por sí solo hace que e. Cuando acabes de competir, y antes de hablar con
los atletas incrementen sus estados de ansiedad. nadie, dedica un tiempo con tu entrenador (o
La competición, per se, es un situación estresante. psicólogo) para valorar los resultados obtenidos en
Si a esto le unimos la característica agónica de función de los objetivos propuestos. La victoria en la
algunas especialidades (medio fondo, fondo o competición no es el único elemento para considerar
pruebas combinadas), hace que se duplique los nuestro éxito. El lector deberá revisar la historia con
estados de ansiedad de los atletas. El control de la que comienza el capítulo dedicado a la influencia
estas situaciones, el de ciertas variables social. Después para volver a la calma, si es posible
personales (autoeficacia, autoestima y locus de haz un ligero trote descalzo por el césped o
control) y una correcta reinterpretación de los simplemente haz un trote y aprovecha para repasar
resultados va a permitir o no que un atleta disfrute mentalmente aquellas cosas que has hecho bien y
de la compe-tición. Para lo cual puede ser felicítate por todo lo que has conseguido. Después
importante seguir alguno o ¡todos! Los consejos: puede ser un buen momento para hacer un ejercicio
de respiración relajante (ver el apartado dedicado a
a. Con antelación suficiente a la competición y de las técnicas de respiración).
acuerdo con tu entrenador, considerando como has
entrenado, fija tus objetivos realistas para esa
competición. Dependiendo del tipo de competición Consejos para entrenadores
interesará el puesto alcanzado o la marca o
simplemente acumular experiencia en ese tipo de En algunas modalidades deportivas el
competición, etc. entrenador es considerado como uno de los líderes del
grupo, sin embargo el atletismo presenta algunas
b. Acude a la competición con tiempo suficiente para diferencias. El entrenador, normalmente, puede ser la
situarte en el escenario. Esto te permitirá persona de confianza del atleta, y llegando incluso a ser,
comprobar la adecuación del desarrollo de la el que más tiempo pasa con él. En el entrenador recae
competición al horario previsto y así poder la responsabilidad de diseñar los planes de
determinar con cuanta antelación o retraso tendrás entrenamiento más adecuados, la continua renovación
que empezar a calentar. Además te permitirá técnica, la colaboración con el atleta en el
cambiar impresiones con tu entrenador o establecimiento de metas y objetivos y en los momentos
compañeros y poder realizar algún último ejercicio duros y amargos de las lesiones, los abandonos o los
de relajación o de autohipnosis. Resumiendo, el fracasos, el hombro amigo. La responsabilidad que
objetivo en una situación estresante es controlar asume es importante y por todo ello es importante
nuestro nivel de estrés. cuidar la relación que se establece entre entrenador y
atleta. Para cual puede ser conveniente observan
c. Si te consideras una persona altamente algunos de estos consejos:
influenciable es conveniente que calientes solo o
con compañeros de tu confianza. Si calientas solo, a. Consideramos que la base de cualquier interacción o
utiliza el calentamiento para visualizarte en relación es el diálogo. Conversa con tus pupilos,
competición y para repasar mentalmente todos los infórmate de cómo están (o de cómo se sienten), si
aspectos de la prueba. Puedes utilizar estudian o trabajan (como les va y si están a gusto),
autoinstrucciones apropiadas al momento y a la que hacen en los ratos libres antes o después de
especialidad, como por ejemplo: ¡Venga, ánimo, entrenar, etc. Cuanto más dialogues con ellos más
estamos en condiciones de hacerlo bien!, ¡Venga, posibilidades hay de obtener información y de que los
ánimo, todo va ir muy bien!, ¡Venga <tu nombre>!, conozcas mejor. No tengas miedo a perder
¡ánimo, esto ya está! autoridad, lo que puedas perder de autoridad lo
ganarás en amistad. Contribuye o facilita el hacer
d. Durante el transcurso de la competición utiliza el periódicamente comidas o meriendas que faciliten las
diálogo interno o autoinstrucciones con frases de relaciones entre el grupo de atletas y tú con ellos.
ánimo o que te ayuden a sentirte bien, parecidas a
las ya descritas. Evita los pensamientos negativos b. Aprovecha cualquier circunstancia o situación para
que acompañan a los autochequeos físicos para reforzar logros, victorias, resultados, conductas o
comprobar como estamos. Si esto te ocurre con intenciones. El refuerzo social es muy poderoso y
frecuencia, una forma de evitarlo es decir ¡Basta! e verás como en poco tiempo aquellas cosas que has
intentar construir pensamientos positivos. Además, reforzado aumentan en frecuencia e intensidad.
conociendo hasta donde puedes llegar, debes de Reforzando obtendrás más resultado que castigando.
tener confianza en ti mismo, ser valiente y no tener
miedo. c. Facilita a tus atletas toda la información sobre
entrenamientos y competiciones. Promueve el
34
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
intercambio de opiniones acerca de estos temas. Es f. Ayuda a los atletas a preparar y a enfrentarse a las
más productivo que el atleta esté convencido de competiciones, especialmente a los más jóvenes. Si
que el entrenamiento que va a realizar es el mejor conoces las instalaciones o la competición explícales
de los posibles, y no que, realice un entrenamiento como son, esto les ayudará a realizar ejercicios de
por imposición. Es mejor convencer o persuadir imaginería y a establecer mapas cognitivos.
que imponer obediencia.
g. Antes de la competición no les metas más presión
d. Antes de cada entrenamiento preguntan a tus de la que ya tienen. Ayúdales a mantener controlada
atletas como se sienten, informarles del la ansiedad. Se paciente.
entrenamiento y si notas algún síntoma (expresado
por ellos o detectado por tí) de falta de disposición h. Durante la competición no les des muchas
para llevar a cabo el entrenamiento, intenta, instrucciones, solamente las precisas y anímalo.
rápidamente, remplazarlo por un trabajo similar Anímalo para que se sienta seguro de sí mismo, para
(p.e. carrera continua por un intervall training). que confíe en sus posibilidades.
Busca la flexibilidad frente a la rigidez.
i. Después de la competición has una valoración de los
e. Colabora con tus atletas para fijar las metas y resultados obtenidos en función de los objetivos
objetivos de cada temporada, de cada competición, planteados. Si consideras que se ha esforzado al
de cada semana y de cada entrenamiento. máximo de sus posibilidades, haz de cada
Esfuérzate en que estas metas sean realistas. Esta competición un triunfo.
es una de las maneras más sencillas de motivar a
tus pupilos.
35
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Afirmaciones 5 4 3 2 1
casi casi
siempre nunca
1. Me veo más como un perdedor que como un ganador
durante las competiciones.
2. Me enfado y frustro durante la competición.
3. Llego a distraerme y perder mi concentración durante la
competición.
4. Antes de la competición, me imagino a mí mismo
ejecutando mis acciones y rindiendo perfectamente.
5. Estoy muy motivado para dar lo mejor de mí en la
competición
6. Puedo mantener emociones positivas durante la
competición.
7. Durante la competición pienso positivamente
8. Creo en mi mismo como deportista
9. Me pongo nervioso durante la competición
10. En los momentos críticos de la competición me da la
impresión de que mi cabeza va muy deprisa.
11. Practico mentalmente mis habilidades físicas.
12. Trabajo y entreno duro gracias a los objetivos que yo me
he fijado como deportista
13. Disfruto durante la competición, aunque me encuentre con
la presencia de dificultades.
14. Durante la competición mantengo autoconversaciones de
carácter negativo
15. Pierdo mi confianza fácilmente
16. Los errores durante la competición me hacen sentir y
pensar negativamente.
17. Puedo controlar rápidamente mis emociones y recuperar la
concentración.
18. Para mí es fácil pensar fotográficamente (en imágenes)
acerca de mi deporte.
19. No necesito que me empujen a entrenar duro y competir
con intensidad. Yo soy mi mejor elemento de motivación.
20. Cuando las cosas se vuelven contra mí durante la
competición, tiendo a desinflarme emocionalmente.
21. Empleo todo mi esfuerzo durante la competición, pase lo
que pase.
22. Puedo rendir por encima de mi talento y habilidades.
23. Durante la competición siento que mis músculos se tensan
y creo que no me van a responder.
24. Me tomo respiros durante la competición.
25. Antes de la competición, me visualizo superando situaciones
difíciles y ejecutando acciones complejas.
26. Daría lo que fuera por desarrollar todo mi potencial y
alcanzar la cumbre como deportista.
27. Entreno con una intensidad alta y positiva.
36
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Afirmaciones 5 4 3 2 1
casi casi
siempre nunca
28. Controlando mi pensamiento, soy capaz de transformar
estados de humor negativos en positivos
29. Soy un competidor mentalmente tenaz.
30. Cuando compito, las situaciones incontrolables, como el
viento, las trampas de los contrarios, los malos arbitrajes, me
alteran y hacen que me derrumbe.
31. Durante la competición pienso en errores pasados o en
oportunidades perdidas.
32. Durante la competición utilizo imágenes que me ayudan a
rendir mejor
33. Estoy aburrido y quemado.
34. Las situaciones difíciles para mí suponen un desafío y me
inspiran
35. Mi entrenador diría de mí que tengo una buena actitud.
36. La imagen que proyecto al exterior es de ser un luchador.
37. Puedo permanecer tranquilo durante la competición pese a
que aparezcan problemas perturbadores
38. Mi concentración se rompe fácilmente.
39. Cuando me visualizo compitiendo o entrenando, puedo ver
y sentir las cosas muy vivamente.
40. Al despertar por las mañanas me siento excitado en
re1ación a los entrenamientos y competiciones.
41. Practicar este deporte me aporta un sentido genuino de
disfrute y realización.
42. Yo puedo convertir una crisis en una oportunidad.
35
34
33
32
31
30
29
28
27
26
25
24
23
22
21
37
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
20
19
18
17
16
15
14
13
12
11
10
9
8
7
6
5
4
3
2
1
A A CA CVI NM A CAC
C N T P T
38
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Dowd, E.T. (1991). Hipnoterapia. En V.E. Caballo González Ordi, H. y Miguel Tobal, J.J. (1991, mayo).
(comp.), manual de técnicas de terapia y Datos experimentales versus clínicos en la
modificación de conducta. Madrid: Siglo XXI. investigación sobre hipnosis: posible fuente de
Driskell, J. E. Cooper, C. y Moran, A. (1994). Does un conflicto. II Congreso de Asociaciones de
mental practice enhance performance? Journal Terapia y Modificación de Conducta de Países de
of Applied Psychology, 4, 481-492. Lenguas Latinas “Latina Dies”. Sitges
Durand de Bousingen, R. (1986). La relajación. Madrid: (Barcelona).
Paidotribo. González Ordi, H. (1998). Hipnosis clínica: Fundamentos
Easterbrook, J. A. (1959). The effect of emotion on cue y Aplicaciones. Universidad de Málaga:
utilization and organization of behavior. Conferencia (Mimeografía).
Psychol. Rev., 66. pp. 183-201. Gordon, R. A. (1950). An experiment correlating the
Eberspächer, H. (1990). Mentale trainingsformen in nature of imagery with performance on a test of
der praxis. Colonia: Sportinform Verlag Gmbh reversal of perspective. British Journal of
Franz Wöllzenmüller Oberhaching (Traducción Psychology, 41, 63-67.
al castellano, Entrenamiento mental. Un Goss, S., Hall, C., Buckholz, E. & Fishburne, G. (1986).
manual para entrenadores y deportistas. Imagery ability and the acquisition and retention
Barcelona: Inde, 1995). of movements. Memory en Cognition, 14, 469-
Edmonston, W.E. (1986). The induction of hypnosis. 477.
New York: John Wiley & Sons. Hall, C. & Barr, K. (1989). Imagery use among rowers
Ellenberger, H. F. (1970). The discovery of (abstract). Proceedings of the 20th annual
unconscious: The history and evolution of conference of the Canadian Society for
dynamic psychiatry. New York: Basic Book. Psichomotor Learning and Sport Psychology
(Traducción al castellano, El descubrimiento (p.45). Victoria, British Columbia, Canada.
del inconsciente. Madrid: Gredos, 1976). Hall, C. R.; Mack, D. E.; Paivio, A.; Hausenblas, H.A.
Epstein, M. L. (1980). The relationship of mental (1998). Imagery use by athletes: Development
imagery and mental rehearsal to performance of the Sport Imagery Questionnaire.
of a motor task. Journal of Sport Psychology, International Journal of Sport Psychology. 29(1),
2, 211-220. 73-89.
Erickson, M.H. (1959). Further techniques of hypnosis- Hall, C., Buckolz, E., & Fishburne, G. (1989). Searching
Utilization techniques. American Journal of for a relationship between imagery ability and
Clinical Hypnosis, 2, 3-21. memory of movements. Journal of Human
Escolá, F. (1989). Educación de la respiración. Movement Studies, 17, 89-100.
Pedagotecnia para el rendimiento físico y la Hall, C.R., Rodgers, W.M., & Barr, K.A. (1990). The use
fonación. Barcelona: Inde. of imagery by athletes in selected sports. The
Eysenck, H.J.; Eysenck, S.B.G. (1978). EPQ-J, Sport Psychologist. 4(1), 1-10
Cuestionario de Personalidad. Manual. Madrid: Hall, C., Pongrac, J., & Buckholz, E. (1985) The
TEA-Ediciones. measurement of imagery ability. Human
Eysenck, H.J.; Eysenck, S.B.G. (1990). EPI. Eysenck Movement Science, 4 107-118.
Personality Inventory. Madrid: TEA-Ediciones. Harris, D.V.; Harris, B.L. (1984). The athlete’s guide to
Feltz, D. L. y Landers, D. M (1983). The effects of Sports Psychology: Mental Skills for Physical
mental practice on motor skills learning and people. Champaign, IL.: Leisure Press.
performance: A Meta-Analysis, Journal of (Traducción al castellano, Psicología del
Sport Psychology, 5, 25-27 deporte. Integración mente-cuerpo, Barcelona:
Fezler, W. (1991). Imágenes creativas. Visualización Hispano Europea, 1987).
terapéutica. Barcelona: Martínez Roca. Hathaway, S.R. y Mckinley, J.C. (1988). MMPI.
Field, P.B. (1965). An inventory scale of hypnotic Minnesota Multiphasic Personality Inventory.
depth. International Journal of Clinical and Madrid: TEA-Ediciones.
Experimental Hypnosis, 13, 238-249. Hernández Mendo, A. (1991). Unha experiencia piloto na
Gayton, W.F., Matthews, G.R., & Burchstead, G.N. area da psicoloxia do deporte: a aprendizaxe
(1986). An investigation of the validity of the motora a luz das formulacions de Eysenck e
Physical Self-efficacy Scale in predicting Gray. Cadernos de Psicoloxía, 11, 29-33.
marathon performance. Perceptual and Motor Hernández Mendo, A. (1993). Líneas de intervención
Skill, 63, 752-754. psicológica en el deporte de alto rendimiento:
Gil Pérez, C. (1973). Pedagogía de la carrera. (I) Intervención con lanzadores. Revista Galega
Valladolid: Miñón. de Psicopedagoxia, 8-9, 97-109.
Gil Roales-Nieto, J. y Delgado Noguera, M. A. (1994). Hernández Mendo, A. (1995). Líneas de intervención
Psicología y pedagogía de la actividad física y psicológica en el deporte de alto rendimiento:
el deporte. Madrid: Siglo XXI.
39
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
40
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Martens, R. (1982). Imagery in sport, unpublished Palmi, J. (1991). La imatgeria (IMAGERY) com a tècnica i
paper presented at the Medical and Scientific programa d'intervenció psicológica en l'esport.
Aspects of Elitism in Sport Conference, Tesis doctoral microfichada. Bellaterra:
Brisbane (Australia). Publicaciones UAB.
Martens, R.; Vealy, R. S. & Burton, D. (1990). Palmi, J. (1991). Pràctica imaginada, l'entrenament
Competitive Anxiety in Sport. Champaign: ideomotor. Apunts Educació Física, 9, 26-31.
Human Kinetics Books. Palmi, J. y Mariné, X. (1996). Evaluación de la
McAuley, E., & Gill, D. (1983). Reliability and validity of imaginería (imagery) en Psicología del Deporte.
the Physical Self-Efficacy Scale in a En E. Pérez Córdoba y J. C. Caracuel, Psicología
competitive sport setting. Journal of Sport del Deporte. Investigación y aplicación. Málaga:
Psychology, 5, 410-418. Instituto Andaluz del Deporte.
Mcnair, D.; Lorr, M.; Droppleman, L. (1971). Profile of Pargman, D., Juaire, S., & Gill, K. (1987). Comparison of
Mood States. Manual. San Diego: Educational imagery induced arousal effects on performance
and Industrial Testing Service. of a visually distorted, novel ball tossing task in
Meichenbaum, D. (1972). Cognitive modification of test female collegiate athletes of high and low
anxious college students, Bourn. Of Consult. imaging abilities (Abstract). Research Abstracts
And Clin. Psych., 39, 1972, pp. 370-380. (p.210). Reston, VA: Proceedings of the
Moody, D.L. (1967). Imagery differences among American Alliance for Health, Physical Education,
women of varying levels of experience, Recreation, and Dance annual convention, Las
interests, and abilities in motor skills. Research Vegas, NV.
Quarterly, 38, 441-448. Perry, H. M. (1939). The relative efficiency of actual and
Moritz, S. E.; Hall, C. R.; Martin, K. A.; Vodocz, E. imaginary practice in five selected tads. Archives
(1996). What are confident athletes imaging? of Psychology, 34, 5-75.
An examination of image content. Sport Pieron, H. (1957). Vocabulaire de la psychologie. PUF,
Psychologist, 10(2), 171-179. Paris.
Mumford, B., & Hall, C. (1985). The effects of internal Richardson, A. (1967). Mental practice: A review and
and external imagery on performing figures in discussion, Partes I y II. Research Quarterly, 38,
figure skating. Canadian Journal of Applied 59-107 y 264-273.
Sport Sciences, 10, 171-177. Richardson, A. (1969). Mental imagery. New York:
Munroe, K.; Hall, C.; Simms, S.; Weinberg, R. (1998). Springer.
The influence of type of sport and time of Rotella, B.; Boyce, B. A.; Allyson B. y Savis, J. C. (1998).
season on athletes' use of imagery. Sport Case Studies in Sport Psychology. Sudbury,
Psychologist, 12(4), 440-449. Massachusett: Jones & Bartlett Publishers.
Nideffer, R. M. & Sharpe, R. (1978). A.C.T.: Attention Rotella, J. R. (1990). Atención psicológica al deportista
control training. New York: Wyden Books. lesionado. En Daniel N. Kulund, Lesiones del
Nideffer, R. M. (1976b). Test of attentional and deportista (pp.151-164). Barcelona: Salvat.
interpersonal style. Journal of Personality and Ruiz Fernández, M. A. (1993). Control del dialogo
Social Psychology, 34, pág.394-404. interno y autoinstrucciones. En F. J. Labrador, J.
Nideffer, R. M. (1981). The ethics and practice of A. Cruzado y M. Muñoz, Manual de técnicas de
applied sport psychology. Nueva York: modificación y terapia de conducta (pp.656-
Mouvement Publications. 666). Madrid: Pirámide.
Nideffer, R. M. (1985). Athletes guide to mental Ryckman, R.M., Robbins, M.A., Thornton, B., & Cantrell,
training. Champaign (Ill): Human Kinetics. P. (1982).Development and validation of a
Nideffer, R. M. (1986). Concentration and attention Physical Self-Efficacy Scale. Journal of
control training. In J. Williams, Applied Sport Personality and Social Psychology, 42,891-900.
Psychology (pp.257-259). Palo Alto: Mayfield. Sackett, R. S. (1934). The relationship between amount
Nideffer, R. M. (1993). Attention Control Training. In of symbolic rehearsal and retention of a maze
R.N. Singer, M. Murphey, L.K. Tennant, habit, Journal of General Psychology, 13, 113-
Handbook of Research on Sport Psychology 128.
(pp.542-556). Nueva York: Macmillan Salmoni, A.W., & Sidney, K.H. (1989). The effect of
Publishing Company. exercise on physical self-efficacy in the elderly
Nideffer, R.M. (1976a). The inner athlete. Nueva York: (abstract). Psychology of motor behavior and
Thomas Crowell sport (p.151). Kent, O.H: Proceedings of the
Ostrow A. C. (1990). Directory of Psychological Test in North American Society for the Psychology of
the Sport and Exercise Sciences. Morgantown, Sport and Physical Activity annual convention.
West Virginia: Fitness Information Technology, Sánchez, X. y Lejeune, M. (1999). Practica mental y
Inc. deporte: ¿qué sabemos después de casi un siglo
41
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
de investigación? Revista de Psicología del Suinn, R. M. (1984). Visual motor behavior rehearsal:
Deporte, 8(1), 21-37. The basic technique. Scandinavian Journal of
Santacreu, J. (1991). El entrenamiento en Behavior Therapy, 13, 131-142.
autoinstrucciones. En V. E. Caballo, Manual de Suinn, R. M. (1993). Imagery. In R.N. Singer; M.
técnicas de terapia y modificación de conducta Murphey & L.K. Tennant, Handbook of Research
(pp. 607-626). Madrid: Siglo XXI. on Sport Psychology (pp.492-510). Nueva York:
Sarason, I.G. (Ed.). (1978). The test anxiety scale: Macmillan Publishing Company.
Concept and research. In C.D. Spielberger and Tabernero, B. y Márquez, S. (1993). Interrelación y
I.G. Sarason (Eds.). Stress and anxiety (Vol. cambios temporales en los componentes de la
5). Washington, D.C.: Hemisphere Publishing ansiedad-estado competitiva. Revista de
Corporation. Psicología del deporte, 5, 53-67.
Schmolinsky, G. (1978). Atletismo. Madrid: Pila Teleña. Templer, D. I., & Daus, A. T. (1979). An athlete
Schultz, J. H. & Luthe, W. (1959). Autogenic training: A adjustment prediction scale. The Journal of
psychophysiologic approach to psychotherapy. Sport Medicine and Physical Fitness, 19 413-
New York: Grune & Stratton. 416.
Schultz, J. H. (1932). Das autogene trainning. Leipzig: Thomas, A. (1978). Einführung in die Sportpsychologie.
Verlag. Göttingen: Verlag für Psychologie (Traducción al
Schwartz, M.S. & Haynes, S. N. (1974). Passive Muscle castellano, Psicología del Deporte. Barcelona:
Relaxation. New York: Guilford MBA. Herder, 1981).
Schwenkmezger, P., & Laux, L. (1986). Trait anxiety, Thornton. B., Ryckman, R. M., Robbins, M. A., Donolli, J.
worry, and emotionality in athletic competition. & Biser, G. (1987). Relationship between
In C.D. Spielberger and R. Diaz-Guerrero perceived physical ability and indices of actual
(Eds.), Cross-cultural anxiety (Volume 3) (pp. physical fitness. Journal of Sport Psychology, 9,
65-78). Washington, D.C.: Hemisphere 295-300.
Publishing Corporation. Tutko, T. A. y Richards, J. W. (1971). Psychology of
Shor (Eds.). Hypnosis: Developments in research and coaching. Boston: Allyn & Bacon (Traducción al
new perspectives. New York: Aldine Publishing castellano, Psicología del entrenamiento
Co. deportivo. Madrid: Pila Teleña, 1985).
Shor, R. E. (Ed) & Orne, M. T. (Ed) (1965). Nature of Unestáhl, L. A. (1991). Autohipnosis. En J. M. Williams
hypnosis: Selected basic readings. New York: (Ed.), Psicología aplicada al deporte (pp. 413-
Holt, Rinehart and Winston. 433). Madrid: Biblioteca Nueva.
Shor, R. E.; Orne, E. C. (1962). Harvard Group Scale Vadocz, E.A.; Hall, C. R.; Moritz, S. E. (1997). The
of Hypnotic Susceptibility, Form A. Palo Alto relationship between competitive anxiety and
(California): Consulting Psychologist Press. imagery use. Journal of Applied Sport
Singer, R.N.; Murphey, M.; Tennant, L. K. (1993). Psychology 9(2), 241-253.
Handbook of Research on Sport Psychology. Van Raalte, J. L. y. Brewer, B. W. (1996). Exploring
Nueva York: Macmillan Publishing Company. Sport and Exercise Psychology. Washington,
Smith, D. (1987). Conditions that facilitate the D.C.: American Psychological Association.
development of sport imagery training. Sport Vera, M. N. y Vila, J. (1991). Técnicas de relajación. En
Psychologist, 1(3), 237-247. V. E. Caballo, Manual de técnicas de terapia y
Smith, J. C. (1992). Entrenamiento cognitivo- modificación de conducta (pp. 161-182). Madrid:
conductual para la relajación. Bilbao: Desclée Siglo XXI.
de Brouwer. Weinberg R. S. y Gould, D. (1995). Foundations of Sport
Spielberg, C. D.; Gorsuch, R. L.; Lushene, R. E. (1986). and Exercise Psychology. Champaign, IL, USA:
STAI. Cuestionario de Ansiedad Estado-Rasgo. Human Kinetics Publishers (Traducción al
Madrid: TEA. castellano, Fundamentos de psicología del
Suinn, R. M. (1972). Behavior Rehearsal training for ski deporte y el ejercicio físico. Barcelona: Ariel,
racers. Behavior Therapy, 3, 519. 1996).
Suinn, R. M. (1977). Behavioral methods at the winter Weitzenhoffer, A.M. (1957). General Techniques of
olympics games. Behavior Therapy, 8, 283- Hypnotism. New York: Grune & Stratton.
284. (Traducción al castellano, Técnicas generales de
Suinn, R. M. (1980). Psychology and sport hipnotismo. Buenos Aires: Paidos, 1964).
performance: Principles and applications. In R. Williams, J.M. (1986). Applied Sport Psychology. Palo
M. Suinn (Ed.), Psychology in sports: Methods Alto (California): Mayfield. (Traducción
and applications (pp. 26-36). Minneapolis, MN: castellana, Psicología aplicada al deporte.
Burgess. Madrid: Biblioteca Nueva, 1991).
Wolberg, L.R. (1948). Medical Hypnosis, Vol.1: The
principles of hypnotherapy. New York: Grune & Stratton.
42
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 22
Intervención psicológica
en caso de lesión
Antonio Hernández Mendo
Genoveva Pérez Mazuecos
Maribel Molina Macias
Universidad de Málaga
43
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
No matter though our decks be swept No importa que las cubiertas sean barridas por las aguas
And mast and timber crack Que cedan mástiles y cuadernas
We can make good all loss except Nosotros podemos hacer buenas todas las pérdidas excepto la
The loss of turning back. pérdida de retroceder.
So, twixt these Devils and our deep Así que, entre estos Diablos y nuestro mar,
Let courteous trumpets sound, Permitamos que atentas trompetas den
To welcome Fate's discourtesy la bienvenida a la descortesía del Destino;
Whereby it will be found por ella se verá que
How in all time of our distress cómo en todo el tiempo de nuestro dolor
And our deliverance too, y de nuestra liberación también,
The game is more than the player of the game, el juego es más que el jugador que lo juega,
And the ship is more than the crew y la nave es más que la tripulación
The time you won your town the race And find unwithered on its curIs
We chaired you through the marketplace; The garland briefer than a girI's.
Man and boy stood cheering by,
And home we brought you shoulder-high. Mientras ganaste las carreras de tu ciudad
te hemos llevado triunfal a través del mercado;
To-day, the road all runners come, Hombre y muchacho de pie aplaudiendo,
Shoulder-high we bring you home, Y te trajimos a tu casa a hombros.
And set you at your threshold down,
Townsman of a stiller town. Hasta hoy, por el camino de todos los corredores,
te hemos traído triunfal,
Smart lad, to slip betimes away hasta el umbral de tu casa,
From fields where glory does not stay Habitante de un pueblo más inmóvil.
And early though the laurel grows
It withers quicker than the rose. Muchacho inteligente, márchate temprano lejos de aquí,
De los campos donde la gloria no se queda
Eyes the shady night has shut Y donde el laurel crece temprano aunque
Cannot see the record cut, Marchita más rápidamente que la rosa.
And silence sounds no worse than cheers
After earth has stopped the ears: Ojos que la noche sombría han cerrado
No puedes ver el record rebajado,
Now you will not swell the rout Y los sonidos del silencio no son peores que los aplausos
Of lads that wore their honours out, Después que la tierra ha dejado de escuchar:
Runners whom renown outran
And the name died before the man. Ahora no aumentarás la derrota
So set, before its echoes fade, De los muchachos que gastaron sus honores,
The fleet foot on the siII of shade, Corredores de renombre de una categoría superior
And hold to the Iow lintel up Y la fama murió antes que el hombre.
The stilI-defended challenge cup. Así puso, antes de que sus ecos se marchiten,
El pie rápido en el umbral de la sombra,
And round that early-laurelled head Y levantó hasta el dintel
WiII flock to gaze the strengthless dead, La copa ganada en el último desafío
"Los atletas son más fuertes, más rápidos y más recios, sin lugar a dudas, que el resto de las demás personas. Parecen ser individuos
afortunados. Olvidamos que lo que ellos hacen es duro. Con dificultad apreciamos sus puntos más vulnerables -el dolor y la falta de
motivación-. y casi nunca, desde su perspectiva, sabemos de aquellas situaciones que rompen sus formas de vida y causan estragos en sus
futuros.
25
Este poema está recogido por Nims (1983) y aparece en el trabajo de Petrie (1993), Injury From the Athlete's Point of View. Quiero
agradecer las sugerencias de Jhon Birch y de Alfredo Espinet en la traducción de ambos poemas.
26
Esta cita aparece en Rotella y Heyman (1991).
44
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Junto a esta cita inicial podríamos incluir las y el coste personal del deportista que se inicia o en el
que aparecen prácticamente a diario en radio, deportista aficionado.
televisión, en las revistas y periódicos deportivos y vía
Internet27 relacionadas con las lesiones y su En la intervención psicológica en casos de lesión
rehabilitación. hemos de distinguir entre factores que han propiciado la
necesidad de una intervención psicológica y las razones
La inclusión de un capítulo dedicado a la que justifican la importancia de la misma. Podemos
intervención psicológica en las lesiones28 deportivas, en afirmar que la necesidad de este tipo de intervención ha
un manual de Psicología del Deporte, de carácter surgido a raíz de (1) la aparición de la medicina
eminentemente social, se debe a dos razones conductual en los años setenta, a raíz de lo cual la
primordiales: la importancia epidemiológica de las rehabilitación29 pasa a ser un campo interdisciplinar
lesiones deportivas a nivel social y la concomitancia de donde a la psicología le corresponde un papel
factores sociales en la etiología de estas lesiones. En importante (Simón, 1992); (2) la aparición de nuevas
un trabajo de Boyce & Sobolewski (1989), estos técnicas de curación que reducen el tiempo requerido
autores afirman que la incidencia de lesiones es tan para una rehabilitación física, pero que no está acorde
importante entre los niños y los jóvenes que éstas han con el ajuste psicológico paralelo necesario, y (3) los
reemplazado a las enfermedades infecciosas como la atletas han llegado a ser más conscientes de la
causa principal de muerte y discapacidad. Kraus & necesidad e importancia de llevar a cabo un programa
Conroy (1984) consideran que unos 3 millones de las para el cuidado de su cuerpo.
lesiones ocurren durante la practica deportiva. En el
estudio de Boyce y Sobolewski se estima que durante Por lo que se refiera a las razones, éstas son de
la práctica deportiva se producen un 44% del total índole diversa; pero podemos agruparlas en torno a dos
lesiones. En los trabajos de Garrick & Requa (1978) y polos. En el primero, encontramos razones de índole
Hardy & Crace (1990) en el ámbito del atletismo personal y de relación. Cuando un atleta se lesiona se
aficionado encontraron que cada año, casi la mitad de convierte en un ser menguado en sus condiciones físicas
todos los participantes sufre una lesión que le impide y además se siente apartado de su mundo de relación
entrenar o competir. Este elevado número de lesiones (Palmi, 1988).
tienen un importante coste financiero para
administraciones, clubes, sociedades deportivas y En el segundo de los polos encontramos razones
compañías de seguros. A esto se unen las puramente deportivas y económicas, algunas ya
consecuencias que suponen las lesiones en la carrera mencionadas, de las cuales tres son primordiales: (a)
profesional del deportista, en los programas deportivos permite que una vez curada y rehabilitada la lesión, la
vuelta a la práctica deportiva o en su defecto la
recuperación del nivel de ejecución previo a la lesión,
27
sea más rápido y mas eficaz; (b) se va a conseguir que
Hay numerosas direcciones en Internet sobre lesiones
durante el tiempo que dure la lesión las pérdidas
deportivas. Algunas de ellas son:
http://web.missouri.edu/~tioslab (proyecto de investigación fisiológicas sean mínimas y (c) este tipo de intervención
sobre observación de las lesiones); psicológica nos va a permitir acortar los tiempos que el
http://www.psychologyofsports.com (artículos y ficheros de deportista va a estar inactivo, esto implica una reducción
audio); http://www.palace.net/~llama/psych/injury.html (textos en los costes económicos tanto para la Mutualidad
y enlaces sobre lesiones);
http://www.cdc.gov/ncipc/ncipchm.htm (National Center for Deportiva como para los equipos donde se encuentren
Injury Prevention and Control -NCIPC); realizando su actividad deportiva estos deportistas y/o
http://www.aapsm.org (American Academy of Podiatric Sports para las sociedades aseguradoras.
Medicine con recomendaciones para prevenir lesiones en distintos
deportes); http://www.healthpsych.com/bhiespanol.html (Batería
para la Mejora de la Salud (BHI™) Información);
La demanda de rendimiento al máximo nivel
http://www.clark.net/pub/pribut/spsport.html (indicaciones para durante las abundantes competiciones, que día a día van
recuperarse de un maratón o recomendaciones para otros tipos aumentando, así como el incremento en las cargas de
de lesiones); http://www.hockeyinjuries.com (lesiones en trabajo durante los entrenamientos están produciendo
hockey); http://www.rsmpsychology.com/index.htm (centro de
un progresivo crecimiento en el número de lesiones30
psicología donde se realiza rehabilitación de lesiones deportivas
con técnicas como la hipnosis y el biofeedback); http://www- 29
personal.umich.edu/~bing/oversite/sportpsych.html (información Navarro-Beltrán (1987, p.981) define la rehabilitación como
sobre distintas técnicas de intervención con especial mención a la "readquisición, por tratamientos apropiados, de la actividad
rehabilitación de lesiones deportivas); profesional perdida por diversas causas: traumatismos o
http://www.focusedtraining.com/articles.html (artículos sobre enfermedades".
30
técnicas y casos); http://www.nucknfuts.com/Papers/index.htm A esta causalidad en el progresivo incremento del número de
(artículos y software); http://www.mindtools.com/page11.html lesiones hay que añadir, de acuerdo con Rotella (1991), las que se
(textos básicos sobre técnicas de intervención). producen por un decremento del nivel motivacional. Este tipo de
28
El Diccionario Terminológico de Ciencias Médicas (Navarro- lesiones se puede observar en deportistas que aún siendo de alto
Beltrán, 1987, p.635) define la lesión como "daño o alteración nivel, no están en la élite, o los deportistas suplentes en los
morbosa, orgánica o funcional, de los tejidos". deportes de equipo.
45
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
(McDonald y Hardy, 1990); convirtiéndose en uno de psicológica. Diversos estudios han dejado patente la
los fantasmas más temidos en todo evento deportivo. relación que existe entre ciertas variables psicológicas y
Este tema ha sido tratado y estudiado desde diferentes las lesiones deportivas y su rehabilitación (Williams y
perspectivas y cuerpos teóricos (psicólogos, Roepke, 1993) Desde una perspectiva psicológica
biomecánicos, entrenadores, ortopédicos, etc.) que debemos considerar de vital importancia diversos
han tomado direcciones u orientaciones diversas ya factores de índole afectiva, perceptivo-cognitivo,
sean de carácter estructural, anatómica, física o personales y sociales.
46
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
conjeturas clínicas (Moore, 1966; Ogilvie & Tutko, fútbol cuando el locus de control fue evaluado con la
1966; Rosenblum, 1979; Sanderson, 1977). La escala general de Rotter, no obstante se encontraron
mayoría de las teorizaciones conciernen a los rasgos menos lesiones en jugadores con un locus de control
de personalidad o a los estados, sin distinguir las interno cuando la valoración estaba realizada con una
lesiones de sus consecuencias (Rosenblum, 1979; escala específica de fútbol desarrollada por ellos
Sanderson, 1977). mismos.
47
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
dictorios. Algunas investigaciones apoyan la relación Reajuste Atlético Social- SARRS). Conceptualmente el
entre cierto tipo de estresores y una mayor incidencia SARRS es administrada y puntuada de igual manera que
de lesiones (p.e. Bramwell, Minoru, Wagner y Holmes, la herramienta original. Usando esta nueva herramienta
1975; Coddington y Troxel, 1980) y otros, aunque no Bramwell y colaboradores estudiaron a 82 miembros del
lo niegan, no encuentran datos concluyentes (p.e. equipo de fútbol de la Universidad de Washington. Los
Passer y Seese, 1983; Williams, Tonyman y atletas fueron divididos en tres grupos de acuerdo a sus
Wadsworth, 1986). puntuaciones en el SARRS: (1) grupo de bajo-riesgo
(puntuación de 0-400); (2) riesgo moderado
El interés por esta área deriva de la relación, (puntuaciones de 400-800), y (3) alto riesgo
descrita en diversos trabajos, entre los eventos de (puntuaciones mayores de 800). Durante el seguimiento
cambio de vida y las enfermedades y accidentes de la temporada, las proporciones de la lesión fueron de
(Holmes & Rahe, 1967; Sarason, Johnson & Siegle, 30%, 50% y 73%, respectivamente, para los tres grupos
1978; Selzer & Vinokur, 1974; Stuart & Brown, 1981). de riesgo. Se consideraron atletas lesionados aquellos
Este interés se incrementó a raíz del trabajo de jugadores que faltaron a tres o más entrenamientos, o a
Holmes y Rahe (1967), que desarrollaron la Social uno o más partidos debido a una lesión específica. Los
Readjustement Rating Scale (Escala de Reajuste autores concluyeron que el riesgo de una lesión en un
Social-SRRS). La escala está basada en la asunción de jugador del fútbol aumenta en relación directa a la
la presencia del estrés, de forma inherente, en todos experiencia al estrés producido por los eventos de vida.
los estímulos medioambientales. Este estrés hace que (Anderson y Williams, 1993; Williams y Roepke, 1993).
aumente la demanda en el cuerpo para reajustar o
adaptarse, resultando que en individuos con alta En el tercer estudio, que fue llevado a cabo
exposición a cambios de eventos vida, requieren Coddington y Troxell (1980), con jugadores de fútbol de
mayor adaptación, aumentando el riesgo de escuela secundaria emplearon como instrumento de
enfermedad. Ejemplos de estresores son la muerte de evaluación la Life Event Scale for Adolescents (Escala de
un miembro familiar íntimo, tomar unas vacaciones o Evento de Vida para los Adolescentes-LESA). Estos
una trasgresión de la ley. En el SRRS, a cada evento autores no encontraron relación entre la lesión y los
de vida se da un valor, las ponderaciones numéricos eventos de cambio vida globales. Uno de los datos
se basaron en el presunto grado de adaptación característicos que encontraron fue que los adolescentes
requerido para el individuo típico de la población sufrían lesiones durante la temporada si experimentaban
general. Los individuos indican la frecuencia de la inestabilidad familiar como la separación de padres o la
ocurrencia de cada evento durante un periodo muerte de un progenitor (Anderson y Williams, 1993;
especificado de tiempo. La puntuación total del cambio Williams y Roepke, 1993).
de vida es clasificada sumando las puntuaciones
ponderadas de los ítems verificados (Williams y El cuarto estudio, realizado por Cryan y Alles
Roepke, 1993). (1983), es una réplica de la investigación de Bramwell,
Masuda, Wagner y Holmes (1975), optimizando el
En el trabajo de Williams y Ropke (1993) se diseño, se evaluó la incidencia y severidad de las
agrupan los estudios realizados en esta área, en dos lesiones en una muestra de jugadores de fútbol de tres
grandes bloques, los realizados (a) en el ámbito del universidades (n=151). Una lesión ocurría siempre que
fútbol y (b) los realizados en otros deportes. un atleta no pudiera participar durante un día. La
severidad de la lesión era determinada por las normas
a. Lesiones producidas en el fútbol. Se realizaron de la National Athletic Injury Reporting (NAIRS). Una
cinco estudios sobre el estrés producido por los lesión menor permitía volver a jugar en 7 días. Las
eventos de vida y su relación con las lesiones lesiones moderadas y mayores hicieron necesario,
deportivas. El primero de ellos fue llevado a cabo por respectivamente, estar fuera entre 8 y 21 días o más de
Holmes (1970), utilizando el SRRS con una muestra 21 días. Los autores encontraron que jugadores de
100 jugadores de la Universidad de Washington. En fútbol de universidad con altas puntuaciones en el
sus conclusiones afirma que el estrés del cambio de SARRS (puntuaciones superiores a 500) fueron
vida se relaciona con el riesgo de lesiones deportivas lesionados en una proporción mayor (68%) que los
así como con la ocurrencia de enfermedades jugadores con puntuaciones más baja (puntuaciones
(Anderson y Williams, 1993; Williams y Roepke, 1993). inferiores a 500), que fueron el 39%. Sin embargo no se
encontró relación entre la tensión del evento de vida y el
El segundo de los estudio fue realizado por riesgo de sufrir lesiones severas. (Anderson y Williams,
Bramwell, Masuda, Wagner y Holmes (1975). Estos 1993; Williams y Roepke, 1993).
autores modificaron el SRRS con el fin de adaptarlo
para atletas de la universidad. La nueva herramienta En los cuatro estudios precedentes las
estaba constituida en 57 eventos y fue denominada el herramientas utilizadas no diferenciaban entre eventos
Social Athletic Readjustement Rating Scale (Escala de de vida positivos y negativos, además asignaban una
48
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
ponderación prefijada a los eventos de vida en lugar Otros dos trabajos encontraron relaciones
de permitir al sujeto que contestaba indicar la significativas entre el estrés de vida y lesión. Sin
magnitud con que le afectaba. Sarason, Johnson, y embargo en el trabajo realizado por May, Veach, Reed
Siegel (1978), diseñaron la Life Experience Survey & Griffey (1985) con los miembros del equipo del esquí
(Medida de Experiencia de Vida- LES). En esta escala alpino americano, encontraron que los esquiadores con
se considera que los efectos de la adaptación a alto nivel de tensión experimentaban más lesiones
eventos de cambio vida negativos pueden ser agudas y experimentaban más problemas de
diferentes de aquéllos eventos de cambio vida enfermedad de garganta así como dolores de cabeza y
positivos. A los sujetos que contestaban el cuestionario perturbación de sueño. También el trabajo de Lysens,
LES se le hacían las siguientes indicaciones: si Auweele y Ostyn (1986) realizado con una muestra de
consideraban que el evento no tenía efecto lo estudiantes de educación física que participan en varios
puntuasen con un 0; si tenía un poco de efecto lo deportes con alto nivel de estrés de vida. Para evaluar el
debían de puntuar con -1 ó +1 (dependiendo si el estrés de vida modificaron la encuesta SARRS
evento se considera negativo o positivo); si tenía un (cambiando ítems) con el fin de hacerla más específica
efecto moderado con -2 ó +2; o si tenía un gran efecto para los estudiantes de educación física. A este nuevo
con -3 ó +3. Así el LES diferencia entre la valoración cuestionario compuesto de 74-ítem lo denominaron Life
de los eventos de vida negativos, eventos de vida Event Questionnaire (Encuesta de Eventos de Vida -
positivos, y los eventos de vida totales. Estos autores LEQ).
encontraron que los eventos de cambio de vida
positivos no tenía ningún efecto o un efecto menos Kerr y Minded (1988) examinaron a gimnastas
perjudicial en variables relacionadas con la salud femeninas de élite y encontraron que los eventos de vida
comparándolo con los efectos de eventos de cambio estresantes estaban relacionados de forma muy
de vida negativos (Williams y Roepke, 1993). significativa con la frecuencia y la severidad de las
lesiones. Hardy y Riehl (1988) encontraron que un
Passer y Seese (1983) modificaron la escala cambio de vida total y un cambio de vida negativo
LES para adaptarla a un población deportiva. La escala predecían significativamente la frecuencia de la lesión
resultante incluyó 70 eventos de vida y se denominó deportiva entre participantes de deportes de no-
Athletic Life Experiencies Survey (Medición de contacto.
Experiencias de Vida Deportivas-ALES). Estos autores
encontraron que el cambio de vida negativo había Trabajos recientes sugieren que la relación del
tenido un efecto perjudicial en la tasa de lesiones en la estrés de vida con las lesiones pueden ser más
2ª División de fútbol. En la 1ª División no encontraron complicadas de lo que en principio se pensaba. Smith,
ninguna relación significativa entre la lesión y las Smoll y Ptacek (1990) encontraron que las variables de
medidas de estrés de vida (Williams y Roepke, 1993). estrés de vida, el apoyo social y las habilidades de
aprendizaje vicario deben ser consideradas como
b. Lesiones producidas en otros deportes. En factores conjuntos más que de forma separada. Estos
este apartado podemos distinguir dos grupos de autores describen dicho fenómeno como una
trabajos, los que no han encontrado relaciones modelización conjunta, en la cual múltiples moduladores
significativas y los que sí las han encontrado. Con deben co-ocurrir en una combinación específica que
respecto a los primeros figuran el trabajo de Williams, maximizan la relación predictor-variable dependiente.
Tonymon, & Wadsworth (1986) y Williams, Haggert, Así mismo en esta modulación, cada uno de los
Tonymon, & Wadsworth (1986). El primero de estos moduladores numerados maximizan de forma
se realizó con hombres y mujeres de la 1ª división de independiente la relación predictor-criterio. Estos
voleibol y el segundo se realizó con una muestra de autores encontraron que en las lesiones deportivas en
jugadores escolares de secundaria y primaria de adolescentes, el apoyo social y el modelado actúan de
baloncesto y atletas de campo a través. En ninguno de una forma conjunta. Estimaron una relación significativa
los dos estudios se encontraron relación entre la entre el estrés y la lesión solamente en deportistas con
tensión de vida y la lesión deportiva. En el trabajo niveles bajos en dichos factores.
Williams, Tonymon, y Wadsworth (1986) también
intentaron determinar si los cuestionarios SARRS y
ALES podían medir y predecir de forma válida una Estrés y lesión deportiva: el modelo de
evaluación del riesgo de lesión. Se realizó un análisis Andersen y Williams
de regresión múltiple que indicó no existir ninguna
diferencia entre las dos herramientas. Estos resultados Andersen y Williams han propuesto un modelo
son cuestionables porque ninguno de los dos teórico interaccionista sobre la lesión (Andersen &
cuestionarios estimó una relación entre el estrés y la Williams, 1988; Williams & Andersen, 1986). El modelo
lesión. Tampoco encontraron ninguna relación entre (véase la ilustración 2) identifican diversas variables que
estrés y la severidad de la lesión del voleibol. podrían predecir las lesiones deportivas, proponiendo
49
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
posibles mecanismos subyacentes en la relación el modelo se afirma el supuesto de que dos de los
estrés-lesión y sugieren intervenciones específicas mecanismos básicos del estrés-lesión son, los aumentos
para reducir los riesgos de lesión deportiva. de la tensión muscular general y el déficit en la atención
durante el estrés. La hipótesis central del modelo afirma
De acuerdo con el modelo, cuando los atletas que los individuos con mucha tensión, características
se exponen a una situación estresante que demanda personales que tiendan a exacerbar la respuesta al
práctica o una situación crucial de la competición, la estrés y pocos recursos adaptativos, cuando se
historia de estresores del atleta, las características enfrentan a una situación estresante, son más
personales y los recursos adaptativos usados influyen propensos a valorarla como tal (p.e. informan de un
interactivamente en el resultado de las respuestas de estado de ansiedad más alto) y se muestra una mayor
estrés. Este es el punto crucial de los resultados tensión en los músculos y rupturas atencionales. El
responsables de que el estrés ponga al atleta en un resultado final es que estos individuos tienen mayor
incremento probabilístico del riesgo a ser lesionado. En riesgo de lesión si son comparados con el perfil opuesto.
RESPUESTA DE ESTRÉS
VALORACIÓN ASPECTOS
SITUACIÓN COGNITIVA FISIOLÓGICOS/
DEPORTIVA -demandas ATENCIONALES
-recursos -incremento general de la LESIÓN
POTENCIALMENTE -consecuencias tensión muscular
ESTRESORA -estrechamiento campo visual
-incremento de las distracciones
INTERVENCIONES
Con respecto a los distintos factores que acuerdo con las demandas. Si la valoración cognitiva
componen el modelo, a continuación se hace una es correcta o errónea, por sus creencias irracionales
breve descripción de su naturaleza y del o pensamientos desadaptativos, la respuesta de
comportamiento dentro del sistema descrito por el estrés variara. Si el atleta percibe inadecuados sus
modelo. recursos para satisfacer las demandas de la
situación, y esto es importante para obtener el éxito,
a. La respuesta de estrés. El punto central del la respuesta de estrés se activará (estado de
modelo de estrés responde a una relación ansiedad alto) y se producirán las consecuentes
bidireccional entre la apreciación cognitiva manifestaciones fisiológicas y atencionales. Un gran
personal, de una situación externa potencialmente número de cambios fisiológicos y atencionales
estresante, y los aspectos psicológicos y ocurren durante la respuesta de estrés, los músculos
atencionales del estrés. El sujeto hace una se tensionan y se producen rupturas del foco de
valoración de las demandas de la situación y de la atención. Estos son los mecanismos más frecuentes y
adecuación de sus habilidades para enfrentarse a probables que relacionan el estrés y la lesión. La
ellas, y de las consecuencias de los sucesos de respuesta de estrés más común es la contracción
50
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
simultánea de grupos musculares opuestos y vitales (Burks & Martin 1985; Kanner, Coyne,
antagonistas. Esta tensión muscular generalizada Schaefer & Lazarus, 1981). La historia anterior a la
puede llevar a fatigar y reducir la flexibilidad, lesión del individuo también puede ser una
coordinación motora y la eficacia de los músculos. importante contribución para la evaluación del riesgo
El resultado final es un aumento del riesgo de que de lesión. El atleta puede volver a jugar o a competir
ocurran lesiones como esguinces, tensiones y otras antes de estar recuperado. En este caso el miedo a
lesiones músculo esqueletales. En correspondencia, volver a lesionarse puede considerarse una
con el aumento del estrés, el campo atencional se respuesta de estrés e incrementarse la probabilidad
estrecha involuntariamente y se focaliza en el de lesión. Una valoración de los eventos vitales,
interior (Nideffer & Sharpe, 1978). Un foco interno molestias diarias o problemas y lesiones anteriores
restringe la habilidad de analizar, de trabajar con pueden dar al psicólogo una mejor estimación del
mucha información, de tomar decisiones racionales riesgo de lesión (Williams y Roepke, 1993).
e incluso ser consciente de lo que está pasando en
el ambiente. Las rupturas atencionales podrían ser d. Factores de personalidad. El modelo de estrés-
producidas a través de preocupaciones con los lesión contempla las variables de personalidad en su
eventos estresantes y sus posibles consecuencias funcionamiento. La literatura sobre tensión-
negativas o bloqueos de respuestas adaptativas. Si enfermedad identifica muchas variables de
esas rupturas llevan a un estrechamiento de la personalidad por su papel en la regulación de la
visión periférica, esto podría provocar una potencial relación estrés-enfermedad. Ciertas características
lesión por no responder a tiempo a las señales de personalidad pueden hacer que algunos individuos
peligrosas periféricas. Las rupturas atencionales perciban algunas situaciones como estresantes o
también podrían producir fallos en los que el atleta pueden predisponerlo a ser menos susceptible a los
no responda rápidamente a señales vitales del efectos de los estresores. La mayoría de las variables
campo central de visión porque la atención esta de personalidad fueron examinadas en un epígrafe
fijada en señales irrelevantes (Williams y Roepke, anterior. En general se ha demostrado que los
1993). individuos con pocos eventos estresantes en su vida y
con altos niveles de vigor o sentimientos de
b. Los factores de personalidad, la historia de coherencia (como mayor locus de control interno),
estresores y los recursos de adaptación contra el experimentaron menos problemas de salud que
estrés. De acuerdo con el modelo, los individuos individuos con eventos vitales estresantes más altos y
con características en estas tres áreas podrían ser sin esas características de personalidad. Otra de las
más propensos a valorar las situaciones externas hipótesis que se han manejado están relacionadas
como potencialmente estresantes, amenazantes y con los buscadores de sensaciones y la influencia del
por consiguiente, experimentan una elevada estrés. Los buscadores de sensaciones son individuos
respuesta de estrés. Este aumento de las que disfrutan con las situaciones extrañas y les gusta
respuestas de estrés exponen a los individuos a un el riesgo. Las personas evitadoras de sensaciones no
mayor riesgo a lesionarse. Esta hipótesis sobre la les gustan los cambios, evitan lo extraño y se alejan
historia de estresores contribuye directamente en de actividades que impliquen riesgo. En un trabajo de
la respuesta de estrés, mientras que los factores Smith, Johnson & Sarason (1978) usando la
de personalidad y recursos de adaptación actúan Sensation Seeking Scale (Escala de Buscador de
directamente en la respuesta de estrés modulando Sensaciones de Zuckerman, Kolin, Price & Zoob,
los efectos de la historia de estresores. Existen 1964) encontraron que los sujetos con altos niveles
numerosas críticas en la literatura del área de la de estrés vital y alta búsqueda de sensaciones
salud acerca de considerar esas variables puntuaron más alto en la escala que sujetos con alto
reguladoras como amortiguadores de los efectos estrés vital y baja búsqueda de sensaciones. Entre
del estrés vital (Williams y Roepke, 1993). los deportistas, los buscadores de sensaciones es
posible que experimenten pocas lesiones porque
c. Historia de estresores. La mayor debilidad de los compiten mejor o porque cada evento es percibido
primeros estudios sobre estrés-lesión se debieron a como menos estresante que como lo perciben las
la medida de los eventos estresantes. La tensión personas con pocas sensaciones de búsqueda. Por
también puede provenir de los pequeños problemas otro lado, individuos que puntúan alto como buscador
diarios, irritaciones, acontecimientos individuales de sensaciones pueden tener más lesiones porque
como la saturación del tráfico, mal tiempo, asumen grandes riesgos. Otra de las variables
preparar la comida diaria, el cambio de trabajo. En incluidas en el modelo son la motivación de logro y la
algunos estudios realizados en el área de la salud, ansiedad rasgo, ya que son variables relacionadas
un buen número de investigaciones encontraron ser con el estrés. La motivación de logro se refiere a la
un mejor predictor del estrés las medidas tomadas necesidad de tener éxito y a la necesidad de evitar el
del malestar diario que las estimadas de eventos fracaso. La ansiedad rasgo es descrita como una
51
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
disposición general o tendencia a percibir la evento de vida traumático con sus implicaciones
situación como amenazante y reaccionar con una psicológicas. Los modos en los que los individuos tratan
respuesta de ansiedad (Spielberger, 1966). con la lesión deportiva puede variar mucho, algunos
Individuos con una alta necesidad de evitar el deportistas se adaptan a los eventos estresantes con
fracaso o con una ansiedad rasgo alta pueden pequeñas dificultades, mientras que otros se hunden,
valorar mayor número de situaciones como literalmente, con la experiencia. En un estudio de Wiese,
estresantes y por consiguiente experimentar una Weiss y Yukelson (1991) con entrenadores, encontraron
elevada respuesta de estrés comparado con que el estilo de comunicación positiva, las estrategias
individuos con el perfil contrario. que fijan metas realistas y los métodos para aumentar
el ánimo eran las técnicas psicológicas más eficaces en
e. Los recursos de adaptación (o recursos de coping) el proceso de rehabilitación. Los factores psicológicos
abarcan una gran variedad de conductas y redes también se relacionan con el incremento de la salud. En
sociales que ayudan a los individuos a tratar con un trabajo de Ievleva y Orlick (1991) encontraron que
problemas, alegrías, desilusiones y con el estrés los deportistas que sanaron más rápidamente fueron
vital. Los recursos de adaptación pueden ser aquellos que hicieron una fijación de objetivos,
medioambientales como el apoyo social o recursos autoverbalizaciones positivas, control del estrés e
personales como control emocional o la buena imaginación, en comparación con deportistas que
nutrición. El papel de los recursos de adaptación en tardaban más tiempo en sanar. Todas estas evidencias
la literatura del estrés-enfermedad es amplio. enfatizan la importancia de entender los aspectos
Generalmente los investigadores han encontrado psicológicos en la rehabilitación de la lesiones (Williams
menos problemas de salud en los individuos de alto y Roepke, 1993).
estrés vital y con buenos recursos de adaptación
que en sujetos con alto estrés vital y pocos Para determinar la probabilidad de que las
recursos de adaptación (Billings & Moos, 1981). Los intervenciones psicológicas faciliten el manejo de la
recursos de adaptación incluyen conductas como el lesión deportiva es esencial entender primero la
sueño, los hábitos alimenticios y el tiempo para sí perspectiva del deportista ante la lesión, incluso el
mismo. Carecer de parte de estas conductas puede significado que tiene para él, así como el impacto que la
llevar a incrementar el estrés y así el riesgo de lesión ha tenido en su vida. Los tratamientos de una
lesión. Un recurso de adaptación importante es el lesión desde una perspectiva psicológica deben
apoyo social, que puede considerarse como la establecer cauces claros de comunicación con la lesión.
presencia de otras personas que nos valoran y nos Para realizar esto, los deportistas deben sentirse
quieren, y son con los que podemos contar en seguros de que interactúan en un ambiente favorable en
situaciones que nosotros percibimos como el que cualquier información será confidencial. Los
amenazantes (Sarason, Levine, Basham & Sarason, miembros del equipo de entrenamiento, (entrenadores,
1983). Los individuos podrían sentirse más capaces psicólogos, médicos, preparadores y fisioterapeutas)
de dominar el estrés cuando creen que forman deben poseer las habilidades para escuchar y ser
parte de una red de personas importantes para capaces de responder a los deportistas con empatía, sin
ellos. Las técnicas de afrontamiento al estrés y las juicios de valor y sin coacción. En este ambiente
habilidades mentales (o habilidades psicológicas) favorable, los deportistas pueden descubrir los
que un individuo tiene a su disposición es otro tipo pensamientos distractores y sentimientos relacionados
de recurso de adaptación que puede influir en la con la lesión.
respuesta al estrés. El último recurso de adaptación
es la medicación, en función de si es La historia de lesiones de los deportistas, la
automedicación o prescrita por un especialista. naturaleza de la lesión, el tipo de deporte, el nivel de
Muchos de los medicamentos influyen en la competición y la estructura de la personalidad de los
percepción y en la fisiología y podrían estar deportistas (Sanderson, 1978) así como el tiempo de las
afectando la respuesta al estrés y, por ende, la sesiones y el contexto en el que ocurre la lesión (Weiss
probabilidad de lesión. La valoración del uso de & Troxell, 1986) pueden influir en la recuperación. Es
medicamentos o drogas es a menudo difícil por la más, el manejo del estrés y el estilo de vida,
frecuente naturaleza clandestina de su uso. habilidades, mecanismos de defensa, factores de
motivación y habilidades de adaptación influyen en el
modo en el que la lesión es percibida y se afronta
Aspectos psicológicos de la (Yaffe, 1983). También es importante explorar la
rehabilitación de la lesión motivación o el significado que los deportistas asignan a
su ambiente deportivo (Wiese, Weiss & Yukelson, 1991).
Se invierte mucho tiempo y energía para La participación e implicación deportiva puede venir
obtener la óptima actuación en un deporte, tal que determinada por múltiples factores y tener significados
cualquier lesión significativa será percibida como un individuales distintos, tanto físicos, psicológicos como
52
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
sociales. Se puede realizar actividad física como Para elicitar la participación de un atleta en la
estrategia de reducir el estrés y producir una catarsis rehabilitación, se debe entender la lesión y su impacto y
emocional (Raglin & Morgan, 1987; Robbins & Joseph, se deben tener las habilidades necesarias para tratar la
1985). Otra de las razones puede ser que los logros situación. Aunque exista variabilidad individual, hay
deportivos de una persona sean una de fuente de sendas comunes por las que los deportistas percibirán y
autoestima y autoconcepto. A la vista de lo anterior, responderán al tratamiento físico. Los deportistas,
podemos comprobar que existen multitud de razones generalmente, experimentarán respuestas cognitivas,
para que se produzca una implicación en la práctica emocionales y comportamentales a la lesión (Williams y
deportiva, pero las pérdidas asociadas con la Roepke, 1993). Las evaluaciones cognitivas del
incapacidad para participar también pueden ser deportista lesionado y el impacto de este evento en su
diversas y extensas. Por esto, las pérdidas podrían vida influirá en las reacciones emocionales así como en
producirse en cada una de las áreas con las que su conducta. En un trabajo de Crossman y Jamieson
estaba asociada a la práctica deportiva. Por ejemplo, (1985) encontraron que cuando los deportistas
si la autoimagen ha sido una de las razones de su sobreestimaban el impacto y gravedad de la lesión
implicación en un deporte, esta será una de las áreas aumentaba significativamente la respuesta de dolor, los
afectadas en la lesión. Otras posibles áreas de estados de ansiedad y los sentimientos de enojo, apatía,
afectación son los roles sociales, la competición, las soledad e inadecuación; estos resultados eran más
recompensas externas, la autovaloración o el atractivo comunes entre deportistas que competían en niveles
(Astle, 1986). inferiores (no en la élite). Esto indica que esos
deportistas que perciben inadecuadamente la lesión
Mientras no sea común el uso de la como más grave, garantizan un aumento de los estados
recuperación psicológica de los deportistas, el retraso afectivos que empeoran el proceso de rehabilitación.
en la recuperación será moneda habitual de cambio. Las evaluaciones cognitivas de la lesión, sus actitudes y
Mientras se siga sin contar con la psicología en los creencias, cuando son de signo positivo, pueden influir
procesos rehabilitadores, el deportista, es muy mejorando el proceso de recuperación. Cuando un
probable que siga teniendo miedo o aversión a su deportista tiene creencias irracionales es más propenso
vuelta a la competición o siga quejándose de a tener aumentos diarios de los grados de depresión y
frecuentes y vagas informaciones sobre dolores (esto enojo, emociones que posiblemente interfieren en una
viene a insistir en la necesidad de evaluar la exitosa rehabilitación. La sensación de control, el nivel
significación y funciones que una lesión tienen para un de compromiso, la habilidad de competir contra el
deportista). El uso de la psicología en la rehabilitación estrés, aumentan la probabilidad de que ciertas
permitiría una rápida incorporación a la competición experiencias emocionales y acciones puedan o no
una vez finalizada la rehabilitación. facilitar la recuperación (Willians y Roepke, 1993).
53
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
un regreso seguro y exitoso al deporte puede arrastrar deportistas y los cuerpos técnicos. Cuando el dolor está
a un largo y dificultoso proceso de recuperación de la asociado con el proceso de recuperación, hay varias
confianza y del nivel de ejecución, esto no ocurre intervenciones psicológicas disponibles. Las Estrategias
cuando se está psicológicamente preparado (Rotella & cognitivo-conductuales han demostrado ser efectivas en
Campbell, 1983).Además, en este estado de no incrementar la tolerancia al dolor. Las técnicas usadas
preparación física y psicológica la probabilidad de una para aumentar la tolerancia al dolor incluyen el uso de
nueva lesión, en otra parte del cuerpo, aumenta. imágenes con el fin retirar la atención de los estímulos
dolorosos, habilidades que pueden ser comunicadas al
Es importante enseñar al deportista antes de deportista. Más adelante, en el apartado dedicado a las
comenzar la rehabilitación (o al mismo tiempo), a técnicas, se aconseja y recomienda el uso de la hipnosis
efectos de facilitar el proceso, habilidades relacionadas para manejar el dolor.
con el manejo de emociones, aumentos de motivación
y pensamientos de confianza en la consecución de Si un deportista se queja de un dolor de una
metas, cambios en las autoverbalizaciones negativas y magnitud, intensidad y duración desproporcionada para
en las creencias de culpa, manejo del dolor, del las indicaciones médicas, puede ser necesario explorar
estrés, etc. Como sugiere Rottella y Heyman (1991) los el significado que el deportista le asigna al dolor y a su
deportistas podrían ser ayudados o incitados a percibir expresión. El “comportamiento del dolor” puede ser
la lesión como una automejora, enseñando usado para elicitar lástima, atención o favor especial o
experiencias de mejora en vez de pensamientos de puede ser entendido para servir como capacidad
autoderrota. reforzadora. Se ha demostrado que en pacientes con
dolor crónico, cuando los miembros importantes de su
Es importante que los deportistas se impliquen red de apoyo social ignoran el “comportamiento de
activamente en la formulación de metas a corto y a dolor” y, sin embargo, refuerzan el comportamiento del
largo plazo. Es esencial que se impliquen en el proceso no dolor, esto produce como resultado un decremento
de seguimiento de metas y asuman responsabilidad en la incidencia de informes de dolor y un incremento
personal en el proceso rehabilitador. El seguimiento de del nivel de actividad (Fordyce, Fowler, Lehmann,
metas no solo provee al deportista del sentido de Delateur, Sand & Trieschmann, 1973). Esto sugiere que
control, sino que puede facilitar la motivación, los deportistas usan expresiones de dolor para obtener
persistencia y confianza. ganancias secundarias, la utilización de técnicas de
condicionamiento operante son posiblemente las
Se debe instruir a los deportistas en el uso de técnicas más eficaces en la disminución de los informes
técnicas de cambio cognitivo a fin de capacitarles en la de dolor y en el incremento de los comportamientos de
prevención de pensamientos negativos y manejar recuperación y mejora (Williams y Roepke, 1993).
efectivamente las dificultades que esto provoca. Los
deportistas pueden producir autoverbalizaciones Estrategias de afrontamiento del estrés.
positivas e imágenes positivas incorporándolas a corto
y largo plazo en las metas establecidas. Las El estrés está asociado con la lesión física
habilidades son generalizadas pronto y los deportistas (Andersen y Williams, 1988) y puede ser reducido con
se benefician de usar estos conocimientos en otras de empleo de técnicas de relajación, técnicas de
áreas de su vida. respiración, imaginación e intervenciones cognitivas (ver
capítulo sobre atletismo en este mismo manual). El
Junto a lo ya reseñado hasta ahora, dentro del entrenamiento con estas técnicas ayudan
proceso rehabilitador, consideramos de suma considerablemente en la reducción del estrés, ayuda a
importancia tres aspectos que van a ser determinantes eliminar los sentimientos negativos y el dolor puede ser
para una optimización en la resolución de la lesión: las aliviado física y psicológicamente. Muchas de esas
estrategias de afrontamiento del dolor, las estrategias técnicas son aprendidas en un tiempo relativamente
de afrontamiento del estrés y la vuelta a la práctica corto por los deportistas.
deportiva.
Las técnicas de respiración son de gran utilidad
Estrategias de afrontamiento del dolor. para reducir el estrés e incrementar los pensamientos y
sentimientos positivos. Se hizo un repaso de las mismas
Los deportistas suelen tener más tolerancia y en el capítulo dedicado al atletismo. Las técnicas de
mayor umbral para el dolor que las poblaciones no imaginería fueron reseñadas también en ese mismo
deportivas, quizás debido al esfuerzo para la capítulo. La utilización de imágenes mentales e hipnosis
insensibilización al dolor (Jaremko, Silbert & Mann, en la generación de analgesia hipnótica está avalada
1981). Este puede llevar demorar la aparición de experimentalmente (Crawford, 1996; Wallace y Turosky,
lesiones o disminuir las quejas sobre dolor. Esto debe 1996; Sheehan y Robertson, 1996) y se revisará en el
evitarse mejorando la comunicación entre los epígrafe correspondiente a las técnicas. En un
54
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
55
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
desarrollo de un perfil predictivo del tiempo de construido a partir de una modificación de la Escala
recuperación de los individuos lesionados. del Grado de Reajuste Social y Deportivo. (SARRS).
No hay datos sobre fiabilidad. La validez concurrente
5. Coping Resources Inventory (CRI). Es un inventario ha sido satisfactoria. El contacto con los autores se
de Hammer & Marting (1988) con 60 ítems que puede realizar a través de: R. Lysens, Institute of
comprende los recursos de aprendizaje e imitación Physical Education, Katholieke Universiteit Leuven,
con situaciones por parte del individuo. Los Tervuursevest, 101, Leuven, Belgium.
recursos de imitación pueden ser definidos como
esos recursos inherentes en los individuos que les 10. Sport Career Locus Of Control Test (SCLCT) de
hacen ser capaces de manejar estresores de Kamlesh (1989) permite identificar los factores
forma efectiva, para experienciar poco o menos la externos e internos más significativos que influyen
intensidad de los síntomas que se encuentran en la carrera de un deportista. Está compuesto de
expuestos al estresor, o en vía a alejarse pronto 20 ítems. El cuestionario está diseñado para evaluar
de la exposición. Las medidas del CRI tratan cinco los factores internos (superioridad en la habilidad de
aspectos: cognitivo, social, emocional, juego, practica, y habilidad) y factores externos
espiritual/psicológico, y físico. Su utilidad resulta (apoyo financiero, equipamiento y entrenador,
especialmente relevante como instrumento de suerte e influencia en las categorías superiores) y
investigación de recursos de modelado en varias como afectan a la carrera del deportista. Los sujetos
poblaciones, y como instrumento de identificación responden a cada ítem usando un escala Likert de 5
de individuos que podrían estar en riesgo, puntos. La fiabilidad se estimó a través del método
necesitando consejo o una intervención médica. test-retest (n=23) y fue 0.65. No hay datos sobre
validez. El contacto con el autor es: M.L. Kamlesh,
6. Life Experiences Survey-Athletes (LES-A). De Lakshmibai National College of Physical Education,
Hardy (1989), es un examen de 80 ítems que Kariavattom P.O., Post Box No.3, Trivandrum
pretende determinar si alguna de las variadas (Kerala) 695581, India. (Phone # 8712, 8722).
experiencias de vida ha ocurrido al deportista
dentro de los 12 últimos meses, y qué y cómo 11. Locus Of Control In Rehabilitation Scale (LCRS) de
percibió el sujeto el impacto de dicho evento. Duda, Smart & Tappe (1989) permite evaluar el
grado con el que los deportistas perciben su éxito en
7. The Exercise Salience Scale (TESS). Creado por la rehabilitación de la lesión por su control personal
Morrow y Harvey (1990), comprende un número o por la responsabilidad del entrenador deportivo.
de factores que determinan el grado de Este cuestionario está compuesto de 9 ítems e
dependencia del ejercicio. Los deportistas más incluyen subescalas de locus de control externo e
dependientes tienden más a insistir en la interno. Los sujetos responden a cada ítem usando
participación a pesar del estrés de vida negativo. una escala Likert de 6 puntos. La fiabilidad se estimó
El TESS posee grandes propiedades a través del alfa de Cronbach (n=40) para las
psicométricas. subescalas de Interno y Externo, se obtuvo unos
resultados de 0.77 y 0.75, respectivamente. La
8. Athletic Life Experiences Survey (ALES)33 de Passer validez de predicción fue satisfactoria. El contacto
& Seese (1983) evalúa los cambios vitales con los autores es a través de: Joan L. Duda,
positivos y negativos en deportistas masculinos Department of PEHRS, 113 Lambert Hall, Purdue
colegiados. Está compuesto de 70 ítems. Las University, W. Lafayette, 1N 47907 (Phone # 317-
puntuaciones en el ALES se gradúan desde +3 494-3172).
(bueno, mayor efecto) a -3 (malo, mayor efecto).
No se tienen datos acerca de su fiabilidad. No 12. Rehabilitation Adherence Questionnaire (RAQ) de
existen datos definitivos sobre su validez. El Fisher, Domm & Wuest (1988). Permite identificar
contacto con sus autores es en: Michael W. los factores personales y situacionales definidos
Passer, Department of Psychology, Ni-25, para la adherencia a la rehabilitación de los
University of Washington, Seattle, WA 98185. deportistas. El RAQ contiene 40 ítems y 6 escalas:
esfuerzo percibido, tolerancia al dolor, apatía,
9. Life Events Questionnaire (LEQ) de Lysens, apoyos significativos, plan de rehabilitación y
Vanden Auweele & Ostyn (1986) permite evaluar condiciones ambientales. Los sujetos responden
solo eventos vitales, está adaptado para los sobre un continuo de 4 puntos en una escala Likert.
estudiantes de educación física. El LEQ está No hay datos sobre la fiabilidad. La validez
discriminante fue satisfactoria. Se puede contactar
33
con los autores en: A. Craig Fisher, Departament of
Se puede obtener más información de este cuestionario en
Mueller, Edwards, & Yarvis, (1977).
Exercise and Sport Sciences, Ithaca Collage, Ithaca,
NY 14850. (Phone # 607-274-3112).
56
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
57
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
58
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
vocablo inglés. Asimismo, otros autores no anglófonos, derivada de la ejecución de una actividad que
se decantan por la utilización de dicho término previamente ha tenido lugar, no utilizan ningún término
(Friedman, 1977; Fontaine, 1981; Thomas y otros, en concreto para designarlo, aunque no en todos sus
1987; Swinnen, 1990). Por el contrario, otros autores trabajos (Fernández, 1980; d'Ydewalle y Eelen, 1982).
no anglófonos, pese a trabajar con la información
CONTROL
FEEDFORWARD
INDIVIDUO o Respuesta o
Instrucciones o
estado ideal de INSTRUCCIONES PACIENTE función
funcionamiento (mecanismo biológica
del sistema comparador) (estado real
del sistema)
INFORMACIÓN
FEEDBACK
Podríamos pensar que el término biofeedback respuestas específicas, utilizando diversos procedi-
apareció por vez primera en 1969 con la formación de mientos de moldeamiento y programas de reforza-
la "Biofeedback Research Society", actualmente miento. Explicar el BF desde este planteamiento teórico
denominada "Biofeedback Society of América". implica el considerar el feedback como un tipo especial
de refuerzo y dado que no reúne las características de
Con respecto a la aparición del primer trabajo los refuerzos utilizados en los programas de condiciona-
llevado a cabo en este campo, Schmidt (1988) cita a miento operante se plantea si la señal de feedback
Basmajian, afirmando que "hace años, Basmajian puede actuar como un reforzador en sentido estricto o si
(1963) dio a los sujetos información auditiva y visual actúa debido a sus propiedades fundamentales.
de su propio EMG, y mostró como esa información
podía permitir a los sujetos aprender a controlar una Un aspecto problemático añadido a este modelo
única unidad motora que normalmente no está bajo es el cómo se produce el control de la respuesta, si se
control voluntario" (pp. 450). produce de forma directa o mediada. Con respecto al
control mediado se han postulado dos tipos de modelos,
El biofeedback como técnica de autocontrol mediación somático-muscular y de mediación cognitiva
aparece reflejado en varios autores (Carrobles y (Carrobles y Godoy, 1987). A través de estos modelos lo
Godoy, 1987). "El biofeedback es una técnica de que se cuestiona es que el proceso tenga lugar de forma
autocontrol de respuestas fisiológicas que opera a directa, sin la mediación del sistema
través de la retroalimentación o información constante musculoesquelético, a través de la producción de
que el sujeto recibe sobre la función que se desea determinados niveles de relajación o sin el manteni-
someter a control voluntario" (Simón, 1989, p.20). El miento de ciertos ritmos respiratorios o sin el concurso
BF ayuda al paciente a ejercer un control voluntario de actividades de naturaleza cognitiva tales como
sobre la respuesta objeto de entrenamiento. pensamientos o imágenes.
59
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
discriminativa que sea función directa de la cantidad al aprendizaje de habilidades complejas" (pp. III). Desde
de información disponible" (Simón, 1991, pp.383). esta perspectiva el biofeedback podríamos entonces
considerarlo como una técnica no invasiva, que facilita al
El modelo cibernético considera que el cuerpo paciente el control voluntario de las respuestas
humano está formado por multitud de sistemas de fisiológicas sobre las cuales se está actuando, con el fin
feedback, que mediante un sistema automatizado, de modificarlas (Carrobles, Cardona, Fuente, García,
mantienen los sistemas homeostáticos bajo control. Jiménez y Llorente 1981, Carrobles y Godoy, 1987;
Cuando los sistemas de control han sufrido algún Simón, 1989, 1991, 1992; Vallejo, 1984) y que tiene una
trastorno psicofisiológico, el BF sería un medio para acción potenciadora sobre los sistemas homeostáticos
sobreimponer a un sistema de feedback natural un (Carrobles y otros, 1981; Simón, 1989) a través del
sistema de feedback artificial que le suministra aprendizaje de tales respuestas por medio de la
información al sujeto sobre dichos procesos y conversión de la señal fisiológica en auditiva o visual
facilitaría su control. (Vila, 1981), lo que implica la utilización de instrumental
que facilite dicha información, generalmente medios
Junto a estos modelos coexisten otros modelos electrónicos. Corraze (1988) refiriéndose al BF afirma
explicativos, como son el modelo de discriminación que "por medio del aprendizaje se obtiene un control e-
de Brener (1974) y el modelo de los dos fectivo sobre diferentes parámetros fisiológicos
procesos de Lacroix (1981) (Simón, 1991, pp.383). remitiendo al sujeto sus consecuencias sensoriales.
Entonces se puede mantener a un determinado nivel el
Si los modelos explicativos son variados tono muscular, la tensión arterial, el ritmo cardíaco, etc.
esperamos que diversos autores utilicen diversos En pocas palabras el control es posible si se permite al
modelos con el fin justificar la eficacia del BF. Así sujeto diferenciar los efectos sensoriales ligados al
mientras Simón (1988) apela al condicionamiento proceso que se tiene que dominar. Conviene precisar
instrumental utilizando el reforzamiento progresivo en que un aprendizaje así implica un condicionamiento
el marco del moldeamiento de respuesta, Carrobles y operante".
Godoy (1987) lo hacen, pero no a través exclusiva-
mente del condicionamiento operante. Labrador (1989) En el proceso de BF se distinguen unas fases en
afirma que el BF no se puede explicar enteramente las que básicamente todos los autores coinciden; así
desde un modelo de condicionamiento operante y se Simón (1989) identifica cinco fases en el proceso de BF:
debe considerar como una técnica que sirve "de ayuda
60
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Figura 1. Electrodos de BF-EMG, arandelas autoadhesivas -que permiten fijar los electrodos- y gel conductor
(permite mejorar la recogida de la señal). Los electrodos presentan un centro cóncavo que
se recubre de gel que facilita el paso de la señal.
1. Detección de la señal
2. Amplificación
3. Procesamiento y simplificación de la señal
4. Conversión de la señal
5. Información al sujeto (feedback) o exposición de la señal (Carrobles y Godoy, 1987; Simón, 1991).
61
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Simón afirma acerca del BF que "se basa en determinada respuesta ha sido realizada, mientras que
un principio fundamental del aprendizaje según el cual la información de que una respuesta concreta ha
se aprende a ejecutar una respuesta particular cuando ocurrido puede ser considerada al menos secundaria-
se recibe información acerca de las consecuencias de mente como reforzante”.
las mismas" (Simón, 1991 pp.26).
Por lo que respecta al aparataje, los modelos y
Con respecto a la modalidad de presentación marcas son variables (Carrobles y Godoy, 1987; Simón,
ésta constituye la Variable Independiente más 1989). Ya Krebs (1987) afirmaba de manera
importante (Simón, 1989, 1991). Distinguiendo entre pronosticadora que en futuros aparatos de BF se
feedback binario y proporcional. suprimirán los cables, utilizando la telemetría y se
logrará suprimir los artefactos. Actualmente se están
Por lo que se refiere a la información y el utilizando para el control de entrenamientos deportivos
refuerzo y la polémica generada a su alrededor, Simón unos pulsómetros a los que podríamos considerar
(1989, pp.41) afirma que "el reforzamiento aparatos de biofeedback -aunque su señal no es
necesariamente proporciona información de que una continua sino promediada- que utilizan la telemetría.
En lo referente a los ámbitos de aplicación del Por su parte Simón (1992) identifica cuatro
BF, Greene en la Encyclopedia of Psychology (vol.1, áreas más desarrolladas de intervención, a saber:
pp.148-150) señala cinco de éstos:
1. Disfunciones cardiovasculares
1. Estimulación para el desarrollo muscular. 1.1. Arritmias
2. Control de respuestas autonómicas. 1.2. Hipertensión
3. Entrenamiento autógeno. 1.3. Trastornos circulatorios periféricos
4. BF neuromuscular. 1.3.1. Migrañas
5. BF Electroencefalográfico. 1.3.2. Enfermedad de Reynaud
62
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
63
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
voluntarias y somáticamente controladas, Miller y sus la deseabilidad del uso de las técnicas del biofeedback
colegas observaron, bajo una variedad de condiciones (Bird y Cripe, 1986) sólo existen unas pocas demos-
experimentales, que los animales podían aprender a traciones experimentales acerca de la eficacia de la
controlar su tasa cardiaca, procesos digestivos, capaci- técnica en los nuevos campos de estudio (esto no ocurre
dad de salivación, y un gran número de otras en el área de la salud Simon y Amenedo, en prensa).
respuestas internas. En poco tiempo los "practicantes" Aunque son de alguna ayuda las investigaciones
estaban empleando técnicas reforzadas para tratar de realizadas en laboratorios de alto control experimental
todo, desde migrañas hasta exceso de tensión en performance motora (French, 1978), lo que se
muscular causado por el estrés. Hoy en día, los necesita son experimentos con atletas que realmente
tratamientos/procesos con biofeedback son común- estén trabajando bajo intenso estrés. Además hay una
mente recomendados para tratar la ansiedad. A cuestión muy seria sobre la fiabilidad de los efectos.
menudo el entrenamiento de BF incluye algún tipo de
equipo electrónico que le señale al paciente que ha Otros autores realizan trabajos puntuales en
ocurrido una respuesta autónoma apropiada. Y el uso este campo, como es el caso de Palmi (1986) que lleva
de esta técnica de BF en el tratamiento de atletas ha a cabo una aplicación de las técnicas del biofeedback a
producido convincentes resultados. Dewitt (1979) usó la actividad física y al deporte. Uno de los campos por él
un proceso electromiográfico para ayudar a jugadores citado es el de la recuperación de lesiones deportivas.
de fútbol a aprender a relajarse. El electromiógrafo Chevalier (1987) por su parte hace mención del
está equipado con electrodos que pueden ser situados biofeedback aplicado a las técnicas de imaginería
en puntos escogidos del músculo. Estos electrodos (Dewitt, 1981; Wilson y Bird, 1981; Daniels y Landers,
miden el grado de contracción muscular y la informa- 1981).
ción es presentada de forma digital o análoga en una
pantalla. Centrándose en la información de la pantalla, Quizás uno de los trabajos pioneros en el campo
los jugadores eran capaces de disminuir la tensión del BF aplicado al deporte sea el de Zaichkowky (1988),
muscular y de prevenir una excesiva excitación. En que realiza un trabajo con biofeedback de tasa cardiaca
investigaciones recientes Dewitt (1980), utiliza la tera- con tiradores de carabina.
pia cognitiva combinada con entrenamiento en BF en
un intento por disminuir el estrés entre los jugadores Hongler (1988) cita al biofeedback como técnica
universitarios de fútbol y baloncesto. Aproximaciones de preparación psicológica para la competición por lo
cognitivas basados en la reestructuración a través de que supone de reducción del estrés y al respecto afirma
procesos y autopercepciones han sido valorados como que "'To feed back' significa información de retorno.
técnicas de tratamiento en el marco de la clínica ¿?Informar de qué? El principio del biofeedback descansa
tradicional. Usando las técnicas de repetición mental y sobre la constatación de que los fenómenos psicológicos
reestructuración cognitiva conjuntamente con tales como el stress, el miedo, etc., son asociados a
feeedback electromiográfico, Dewitt disminuyó la modificaciones fisiológicas. Esta últimas (se trata de
tensión muscular en una prueba de laboratorio a seis datos fisiológicos como por ejemplo el pulso, la
jugadores universitarios de fútbol y doce de frecuencia respiratoria, la presión sanguínea, la
baloncesto. Y lo que es más, la eficacia de juego transpiración, etc.) son transmitidas a aquel que se
aumentó enormemente tras la intervención, aunque entrena, bajo la forma de signos ópticos o acústicos,
este estudio no incluye pruebas de los diferentes mediante aparatos apropiados. Así, el aprendizaje de los
efectos de la terapia cognitiva con el entrenamiento de mecanismos emocionales llega a ser posible, ya que
biofeedback, sí muestra evidencias de que la eficacia cada uno puede constatar 'por sí mismo' que tipo de
de juego aumenta paralelamente a la reducción de la comportamiento provoca (en él, en su caso) una
tensión del músculo conseguida en las sesiones de modificación de las variables psicológicas. El aprendizaje
biofeedback. Por otra parte, Daniels y Landers (1981) rápido -en algunos días- de un método individual de
condujeron una investigación con un grupo de relajación (que incluirá quizás también los
futbolistas que eran entrenados o con instrucciones procedimientos de relajación), así como un control
verbales o con entrenamiento auditivo de biofeedback. objetivo del grado fisiológico de descontracción, es una
Los resultados revelaron que los jugadores que ayuda rápida. Pero a pesar de su simplicidad a nivel de
entrenaron con biofeedback mejoraron más y concepción, su puesta en práctica crea muchos
mantuvieron una mayor consistencia que sus problemas que están lejos de ser resueltos. No es
compañeros que sólo habían recibido información propio el tratarlos aquí."(p.29).
verbal sobre su performance. Además los grupos de
biofeedback exhibieron un mayor grado de control Hasta aquí hemos repasado los principales
sobre la muestra, validando así la relación entre el trabajos buscando una definición tanto de la técnica en
control autonómico interno y la mejora de la sí como de sus principales áreas de aplicación,
performance de tiro. A pesar de los sólidos argumentadas desde la rehabilitación hasta el área del
argumentos de muchos médicos deportivos acerca de rendimiento deportivo.
64
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
43
El Instant Research Service de la ENCICLOÆDIA BRITANICA A continuación, se exponen esquemáticamente
recoge entre sus documentos tres artículos referidos a la algunas de estas técnicas que deben ser consideradas
hipnosis: Self-Hypnosis (R-8593), Techniques of Achieving Self
Hypnosis (R-8594) e Hypnotism (R-8592).
44 45
El trabajo de Jara y Garcés de los Fayos (1995) realizan una En el anexo de este capítulo figura la Escala de Davis y Husband
revisión de la hipnosis en el deporte. (1931) para evaluación de la profundidad hipnótica.
65
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
como un marco de referencia y deben ser flexibles en tiranteces y pausas, pero el brazo termina
su administración y adaptarlas al repertorio verbal del elevándose apreciablemente (más de 9 cms.), puede
sujeto. concluirse que, en principio, el sujeto se resistió a las
sugestiones pero terminó por acceder a ellas. En
a. Balanceo Postural. Se pide al paciente que se cualquier caso, otro indicador fundamental es el
coloque de pie, en el centro de la habitación, en tiempo que hemos tenido que emplear para que las
posición erguida, con los pies muy juntos y los sugestiones fueran efectiva: cuanto menor tiempo
brazos pegados a los costados del cuerpo. Se le transcurra, el paciente se ha involucrado más
indica que cierre los ojos e intente dirigir su mirada rápidamente en el proceso y, por tanto, es lícito
hacia un punto determinado (se marca con el dedo pensar que es más sugestionable. Finalmente, en
índice el centro de la frente del paciente), ocasiones no es necesario que el brazo llegue a la
insistiéndole en que no debe dejar de dirigir su altura de los hombros para considerar que la prueba
mirada hacia allí. Seguidamente, el terapeuta se ha sido positiva. Se ha encontrado que ciertos
coloca detrás del paciente con las palmas de las sujetos que no elevaron el brazo en absoluto, al
manos apoyadas en los omoplatos del paciente. A preguntarles si habían experimentado alguna
continuación se comienza a contar de 1 a 5, sensación, informaron que ellos estaban convencidos
mientras se le van señalando sensaciones de de que su brazo se había elevado aunque, de hecho
rigidez y de desequilibrio. Después el terapeuta no fuera así. En realidad, la prueba había sido
vuelve a situar al sujeto en la posición erguida y se superada con éxito desde el punto de vista subjetivo,
coloca, seguidamente, delante de él, apoyando sus pero no se reflejó en el comportamiento motor. En
manos en la clavícula del mismo. Recuerda al estos casos, es mucho más útil trabajar con pruebas
sujeto que cierre los ojos y mantenga la mirada en esencialmente imaginativas, como es el caso de la
el punto antes señalando, y contando de 1 a 5, se “alucinación de sed” (González Ordi, 1998).
le sugieren sensaciones de desequilibrio. La prueba
del balanceo postural está concebida como una c. Bloqueo de las Manos. Se le pide al paciente que
prueba esencialmente de equilibrio. Es cierre los ojos y entrelace sus manos tan fuerte
relativamente sencilla y suele ser superada por el como le sea posible, manteniendo las palmas unidas
70% de la población (Piccione, Hilgard y Zimbardo, entre si. La prueba del bloqueo de las manos supone
1989). El objetivo de esta prueba es infundir la plantearle al sujeto un reto. La clave del éxito de la
suficiente confianza en el paciente para que “se prueba reside en que no supere dicho reto y no
deje caer” y se despreocupe de las consecuencias pueda separar las manos aunque insistamos en ello.
de la caída porque confía en que le sostendremos. El reto en cuestión se encuentra en las instrucciones
En esta prueba existen una serie de contingencias deliberadamente contradictorias que el paciente
que coadyuvan en el éxito de la prueba: recibe (“inténtelo... pero verá que no puede”;
“cuanto más lo intente...más difícil será
• la posición erguida con los pies juntos proporciona conseguirlo”), esta es una de las características de
un eje de equilibrio muy inestable las técnicas de inducción directivas y autoritarias. Si
el sujeto reacciona adecuadamente a esta prueba,
• los ojos cerrados impiden tener un marco de puede constituir un buen indicador para la aplicación
referencia visual para orientarse en el espacio. de este tipo de técnicas. Por lo demás, la prueba
Una persona desconfiada puede resistirse y incluye ciertas pausas minutadas que deben ser lo
mantener el equilibrio. Esto nos indicaría que la más estrictamente respetadas posible, a diferencia
inducción hipnótica pudiera no ser exitosa como del resto de las pruebas que se revisaran (González
esperamos aunque es aconsejable asegurarse Ordi, 1998). Esta prueba también aparece en la
aplicando otras pruebas de sugestionabilidad Escala Harvard de Susceptibilidad a la Hipnosis
(González Ordi, 1998). (EHSH) (Shor y Orne, 1962; Lamas, del Valle-Inclan,
Blanco y Alcaraz, 1985).
b. Levitación del Brazo. La prueba de levitación del
brazo se considera de mayor dificultad que la d. Alucinación de “Sed”. Se le pide al sujeto que cierre
anterior, aunque suele encontrarse entre los los ojos, se acomode confortablemente, y que
primeros ítems (los más fáciles de superar) de las preste mucha atención a las palabras del terapeuta.
escalas estandarizadas. Suele ser una prueba que Luego se inician las sugestiones Esta prueba es una
superan el 60% de los sujetos aproximadamente. prueba de carácter esencialmente imaginativo y, por
Es interesante que el terapeuta observe como se lo tanto, muy recomendable para sujetos con mucha
produce la elevación del brazo. Si el brazo está imaginación. Los criterios para que esta prueba sea
relajado y se eleva rápidamente, sin demasiadas exitosa residen en que el paciente realice
pausas ni tiranteces, constituye un buen indicador movimientos de deglución, humedecimiento de los
de que la persona es muy sugestionable. Si existen labios y gestos durante la administración de las
66
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
sugestiones que indiquen al terapeuta que se siente § las expectativas del sujeto por “seguir el
sediento/a. Una vez finalizada, es importante juego” (González Ordi, 1998).
preguntarle al paciente si realmente sintió sed y
qué sensaciones experimentó cuando se le indicó Con respecto a las técnicas de inducción
que se bebiera el vaso de agua helada. En la hipnótica, existe una gran variedad, probablemente
medida en que el paciente conteste que se sintió tantas como especialistas en hipnosis, la mayoría de
sediento y que al beber el vaso de agua ellas se basan en la manipulación de tres componentes
experimentó una sensación de alivio, nos principales (Hilgard y LeBaron, 1984): relajación,
encontraremos ante un sujeto altamente imaginación y ejecución motora.
hipnotizable, especialmente si se aplican técnicas
no directivas con un alto componente de imaginería En este epígrafe vamos revisar las consideradas
mental (González Ordi, 1998). La EHSH tiene un clásicas en el ámbito de la hipnosis clínica.
ítem sobre alucinación (Shor y Orne, 1962; Lamas,
del Valle-Inclan, Blanco y Alcaraz, 1985). a. Técnica de la Moneda (William S. Kroger, 1963). El
paciente deberá sentarse cómodamente en posición
El Péndulo de Chevreul. Para esta prueba, el erguida. Se le pedirá que extienda su brazo
psicólogo estará provisto de un círculo (como el de la dominante hacía delante al nivel de los hombros y
ilustración 5) y de un péndulo. El sujeto sostendrá el paralelo al suelo, quedando en ángulo recto con el
péndulo situándolo en el centro del círculo pero muy cuerpo. La palma de su mano deberá estar hacía
cerca del papel, teniendo cuidado que el brazo no se arriba con los dedos extendidos y se le depositará
apoye en ningún sitio (otros autores sugieren que se una moneda aproximadamente en el centro de la
debe apoyar el codo). Una vez que el sujeto tiene su mano. Mientras que cuenta se le indica como va
brazo en la posición deseada girando la mano hasta que la moneda cae (González
Ordi, 1998).
67
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
68
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Ilustración 6 La actividad de flujo de sangre en la analgesia hipnótica: Una visión topográfica del cerebro después de
eliminar el dolor mediante analgesia hipnótica. La imagen de la izquierda pertenece a un sujeto bajamente hipnotizable y la
derecha un sujeto altament e hipnotizable. La intensidad de sombreado marca la diferencia. La fuente de la fotografía es
H. J. Crawford, R. C. Gur. B. Skolnick, R. E. Gur, and D. M. Benson (1993). International Journal of Psychophysiology, 15,
181-195. Copyright 1993 by Eisevier Science Publishers. (Crawford, 1996)
El entrenador ante las lesiones deportista como tal es muy corta, Henderson y
y su rehabilitación Carroll (1993) destacan el hecho de la amenaza que
supone una lesión en la autovaloración del sujeto.
Antes de entrar en el apartado de las Con mucha frecuencia se percibe la lesión como una
conclusiones, hemos considerado importante hacer situación tan estresante que el resto de los atributos
una breve reflexión sobre la tarea que desempeña, o de la vida de un individuo pueden ser completamente
que puede desempeñar, el entrenador, a nivel de eclipsados por la identidad deportiva. Por esto, es
prevención de lesiones y, en el caso de lesiones, necesario hacer reconocer a los atletas el carácter
durante el proceso de rehabilitación. multidimensional de sus vidas, son algo más que
deportistas.
En la relación atleta-entrenador, la lesión,
puede ser una oportunidad para profundizar en ella. El entrenador cumple una función de "consejero de
Esta situación, además, permitirá obtener más datos primera línea". No obstante, esto no debe ser
acerca de los comportamientos, actitudes y incompatible con la ayuda psicológica profesional que
pensamientos del deportista. Pero la concomitancia de debería ser facilitada. Desafortunadamente, para
diversos factores y la multidimensionalidad de una todos -al menos en nuestro país-, las lesiones y su
lesión, hace difícil determinar la naturaleza de la rehabilitación se abordan desde un plano meramente
interacción entre estructuras fisiológicas y psicológicas. fisiológico o físico, olvidándose por completo de los
aspectos psicológicos y sociales.
En el trabajo de Henderson y Carroll (1993) se
destacan cuatro dimensiones concomitantes durante el El entrenador se encuentra en una excelente posición
tiempo que dura la lesión y también a lo largo del para obtener datos acerca de la eficacia y de los
proceso de rehabilitación. Estos factores son: puntos de debilidad física del atleta. También debe
ser sensible a las sutiles expresiones de inseguridad
a. Problema de identidad y miedo de los deportistas. Los entrenadores no
b. La autoestima deben reconocer sólo los aspectos psicológicos de la
c. Prevención de la lesión-foco atencional y lesión, deben además prever su posibilidad y
estrés contrarrestar su potencial efecto negativo.
d. Dependencia del lugar de entrenamiento
b. La autoestima. En su trabajo Henderson y Carroll
a. Problema de identidad. Partiendo de la base de (1993) señalan que los rasgos de personalidad, que
que a menudo la identidad personal de un atleta contribuyen al éxito deportivo de un atleta, pueden
coincide con su rol de atleta, y que la vida del coadyuvar en el proceso de rehabilitación de la
69
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
70
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
71
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
psicológicos para un mejor cuidado del deportista podría identificar los efectos moduladores que no han
(Henderson y Carroll, 1993). sido detectados en los análisis de regresión múltiple.
72
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
73
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
mood states: The Incredibly Short POMS. acquisition. Perceptual and Motor Skills, 47,
Paper presented at the annual meeting of the 883-889.
Association for the Advancement of Applied Friedman, H. (1977). Biofeedback. Etat actuel de son
Sport Psychology, San Antonio, TX. application en clinique. Acta Psychiat. belg., 77,
Dewitt, D. J. (1979). Biofeedback training with 118-133.
university athletes. In Proceeding of the Fuente, P. S.; García, A.; Llorente, J .M.; Pastor, A.
Biofeedback Society Annual Meeting. The (1981). Biofeedback-EMG y el proceso de
Biofeedback Society, Denver. contracción muscular. Aplicación clínica en un
Dewitt, D.J. (1981). Cognitive and biofeedback training caso de pie crónico caído. Actas del I Congreso
for stress reduction in university athletes. nacional de ingeniería biomédica, Madrid,
Journal of sport psychology, 2, 288. pp.195-197.
Dicara, L. (1970). Learning in the autonomic nervous García Fernández-Abascal, E. (1985). Hipnosis y dolor
system. Scientific American, 22, 30-39. inducido experimentalmente. Revista Española
Dowd, E.T. (1991). Hipnoterapia. En V.E. Caballo de Terapia del Comportamiento, 3(2), 151-164.
(Comp.), manual de técnicas de terapia y Garner, D. M. (1991). Eating Disorder Inventory-2
modificación de conducta. Madrid: Siglo XXI. manual. Odessa, FL: Psychological Assessment
Duda, J.L., Smart, A.E., & Tappe, M.K. (1989). Resources, Inc.
Predictors of adherence in the rehabilitation of Garrik, J. G. & Requa, R. K. (1978) Injuries in high school
athletic injuries : An application of personal sports. Pediatrics, 61, 465-473.
investment theory. Journal of Sport & Exercise González Ordi, H. (1992, julio). Hipnosis, sugestión y
Psychology,11,367-381. sugestionabilidad: hacia un intento de delimitar
D'Ydewalle, G. y Eelen, P. (1982). "Right" and "Wrong" las características del proceso hipnótico.
responses in Human Learning, University of Comunicación presentada al Congreso
Leuven, Leuven. Iberoamericano de Psicología. Madrid, 5 al 10
Edmonston, W.E. (1986). The induction of hypnosis. de julio.
New York : John Wiley & Sons. González Ordi, H. (1998). Hipnosis clínica: Fundamentos
Ellenberger, H. F.(1970). The discovery of y Aplicaciones. Conferencia Universidad de
unconscious : The history and evolution of Málaga: Mimeografía.
dynamic psychiatry. New York : Basic Book. González Ordi, H. y Miguel Tobal, J.J. (1991, mayo).
(Traducción al castellano, El descubrimiento Datos experimentales versus clínicos en la
del inconsciente. Madrid: Gredos, 1976). investigación sobre hipnosis : posible fuente de
Erickson, M.H. (1959). Further techniques of hypnosis- un conflicto. Comunicación presentada al II
Utilization techniques. American Journal of Congreso de Asociaciones de Terapia y
Clinical Hypnosis,2, 3-21. Modificación de Conducta de Países de Lenguas
Feltz, D. L. y Landers, D. M (1983). The effects of Latinas “Latina Dies”. Sitges (Barcelona), 2,3 y 4
mental practice on motor skills learning and de mayo.
performance: A Meta-Analysis, Journal of Grove, J. R. (1993). Personality and Injury Rehabilitation
Sport Psychology, 5, 25-27 Among Sport Performers. In D. Pargman,
Fernández, G. y D'Ydewalle, G. (1980). La influencia de Psychological Bases of Sport Injuries (pp.99-
algunas variables cognitivas sobre la impresión 120). Morgantown: Fitness Information
perceptual del número de éxitos y fracasos Technology.
obtenidos en una tarea experimental. Hammer, A. L. & Marting, M. S. (1988). Manual for the
Psychological Reports, 25, Department of Coping Resources Inventory (research edition).
Psychology, Leuven. Palo Alto, C.A.: Consulting Psychologists Press.
Fisher, A.C., Domm, M.A. & Wuest, D.A. (1988). Hardy, C. J. & Crace, R. K. (1990). Dealing with injury.
Adherence to sports-injury rehabilitation Sport Psychology Training Bulletin, 1, 1-8.
programs. The Psysician and Hardy, C. J. & Riehl, M. A. (1988). An examination of the
Sportsmedidine,16(6), 47-54. life stress-injury relationship among noncontact
Fontaine, O. (1981). La clinique du biofeedback un faux sport participants. Behavior Medicine, 14(3),
pas?. Acta Psychiat. belg, 81, 213-225. 113-118.
Fordyce, W.; Fowler, R.; Lehmann, J.; Delateur, B.; Hardy, C. J. (1989). Life Experiences Survey- Athletes.
Sand, P. & Trieschmann, R. (1973). Operant Chapel Hill, NC: Department of Physical
conditioning in the treatment of chronic pain. Education, University of North Carolina.
Archives of Physical Medicine and Heil, J. (Ed) (1993). Psychology of Sport Injury.
Rehabilitation, 54(9), 399-408. Champaign, IL: Human Kinetics.
French, S. N. (1978). Electromyographic biofeedback Henderson, J. y Carroll (1993). The Athletic Trainer's
for tension control during gross motor skill Role in Preventing Sport Injury and
Rehabilitating Injured Athletes: A Psychological
74
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Perspective. D. Pargman (Ed.) (1993). Holmes, T. H. & Rahe, R. H. (1967). The social
Psychological Bases of Sport Injuries. readjustment scale. Journal of Psychosomatic
Morgantown: Fitness Information Technology. Research, 11, 213-218.
Hernández Mendo, A. (1994). Atencion psicoloxica o Holmes, T. H. (1970, february). Psychological screening
deportista lesionado. estudio dun caso. in Football injuries: Paper presented at a
Cadernos de Psicoloxía, 16, 40-45. workshop (pp. 211-214) Sponsored by
Hernández Mendo, A. (1994). El biofeedback Subcommittee on Athletic Injuries, Committee
electromiográfico: una técnica de intervención on the Skeletal System, Division of Medical
conductual en psicología del deporte. Sciences, National Research Council, 1969.
Cuadernos de I.N.I.C.E. 61-62, 357-388. Washington, DC: National Academy of Sciences.
Hernández Mendo, A. (1995). El biofeedback elec- Hongler, R. (1988). El estrés y el miedo en el deporte.
tromiográfico en la rehabilitación de lesiones Revista de entrenamiento deportivo, 4(2),
deportivas. Cartafol, C-19. La Coruña: Centro 20-31.
Galego de Documentación e Edicións Deporti- Hull, C.L. (1933). Hypnosis and suggestibility : An
vas del INEF de Galicia. experimental approach. New York : Appleton
Hernández Mendo, A. (1996). Intervención psicológica Century Crofts.
en casos de lesión. En E. Pérez Córdoba y J.C. Ievleva, L & Orlick, T. (1991). Mental links to enhanced
Caracuel, Psicología del Deporte. Investigación healing: an exploratory study. Sport
y Aplicación (pp. 47-58). Málaga: Ed. Instituto psychologist, 5(1), 25-40.
Andaluz del Deporte. Irwin, R. F. (1975). Relationship between personality
Hernández Mendo, A. (1999a). Efectividad del and the incidence of injuries to high school
biofeedback-emg en la rehabilitación de football participants. Dissertation Abstracts
lesiones deportivas de la rodilla. Lecturas: EF y International, 36, 4328-A.
Deportes. Revista Digital,14, junio 1999. Jackson, D. W.; Jarrett, H.; Bailey, D.; Kausek, J.;
http://www.efdeportes.com/efd14/mendo.htm Swanson, M. J. & Powell, J. W. (1978). Injury
[Consulta: 23 agosto 1999]. prediction in the young athlete: A preliminary
Hernández Mendo, A. (1999b). El biofeedback report. The American Journal of Sports
electromiográfico en la rehabilitación de Medicine, 6, 6-12.
lesiones deportivas de la rodilla. Lecturas: EF y Jara, P. y Garcés de los Fayos, E. J. (1995). La hipnosis
Deportes. Revista Digital,15, agosto 1999. en Psicología del Deporte. Revista de Psicología
http://www.efdeportes.com/efd15/lesion.htm del Deporte, 7-8, 73-85.
[Consulta: 23 agosto 1999]. Jaremko, E; Silbert, L & Mann, T. (1981). Differential
Hernández Mendo, A. y Ramos, R. (1995). ability of athletes and non-athletes to cope with
Informatización del Profile of Moode States de 2 types of pain - a radical behavioral-model.
McNair, Lorr y Dropleman (1971). Psychological record, 31(2), 265-275.
Aplicaciones. Revista de Psicología del Johnston, T. (1998). Ted's Turmoil. In B. Rotella, B. A.
Deporte, 7-8, pp. 31-50. Boyce, B. Allyson & J. C. Savis, Case Studies in
Hernández Mendo, A. y Ramos, R. (1996). Introducción Sport Psychology (pp. 91-94). Sudbury,
a la informática aplicada a la psicología del Massachusetts: Jones & Bartlett Publishers.
deporte. Herramientas informáticas de uso en Kamlesh, M.L. (1989). Internal and external factors
las ciencias del deporte . Madrid: Editorial Ra- affecting sport career. Indian Journal of Sport
Ma. Science.1 (1), 59-67.
Hernández Mendo, A. y Ramos, R. (2000). El uso de la Kane, B. (1984). Trainer counseling to avoid three face-
informática en la Psicología del Deporte.. saving maneuvers. Athletic training, 19(3), 171-
Lecturas: EF y Deportes. Revista Digital, 19, 174.
marzo 2000 Kanner, A. D.; Coyne, J. C.; Schaefer, C. & Lazarus, R.
http://www.efdeportes.com/efd19/infpsi.htm S. (1981). Comparision of two modes of stress
[Consulta: 23 de marzo de 2000]. measurement: Daily hassles and uplifts versus
Hilgard, E. R. (1965). Hypnotic susceptibility. New York: major life events. Journal of Behavioral
Harcourt, Brace and World. Medicine, 4, 1-39.
Hilgard, J.R. & LeBaron, S. (1984). Hypnotherapy of Kavanagh, D & Hausfeld, S. (1986). Physical
pain in children with cancer. Los Altos (CA): performance and self-efficacy under happy and
William Kaufmann. sad moods. Journal of sport psychology, 8(2),
Hilgard, J.R. & LeBaron, S. (1984). Hypnotherapy of 112-123.
pain in children with cancer. Los Altos (CA) : Kerr, G. & Minden, H. (1988). Psychological factors
William Kaufmann. related to the occurrence of athletic injuries.
Journal of Sport and Exercise Psychology, 10(2),
167-173.
75
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Kraus, J. F. & Conroy, C. (1984). Mortality and Meyers, M.; Bourgeois, A.; Stewart, S. y Leunes, A.
morbidity from injuries in sports and (1991, October). Development and assessment
recreation. Annual Review of Public Health, 5, of the sport inventory fon pain. Proceedings of
163-192. the Association for the Advancement of Applied
Krebs, D. E. (1987). Biofeedback in neuromuscular Sport Psychology. Savannah, GA.
re-education and gait training. In Schwartz, Miguel Tobal, J. J. y González Ordi, H. (1988). La
M., Biofeedback. A practitioner's guide. New analgesia hipnótica: un análisis de las
York: The Guilford Press. principales aportaciones experimentales y
Krebs, D. E. (1988). Biofeedback. In S.B. O'Sullivan; clínicas de la hipnosis al tratamiento psicológico
T.J. Schmitz, Physical Rehabilitation: del dolor. Revista Española de Terapia del
assessment and treatment, 2,( 629-642). Comportamiento, 6(3), 251-270.
Philadelphia: A. Davis company. Miller, N.E. (1978). Biofeedback and visual learning.
Kroger, W.S. (1963). Clinical and Experimental Review of Psychology, 29, 373-404.
Hypnosis. Philadelphia : J.B. Lippincott. Moore, R. A. (1966). Sport and mental health.
Labrador, F. J. (1987). Técnicas de biofeedback. En J. Springfield, IL: Thomas.
Mayor y F. J. Labrador, Manual de Morgan, W. P. (1993). Hypnosis and Sport Psychology.
modificación de conducta (pp.361-398). In J. W. Rhue; J. Lynn, & I. Kirsch, Handbook of
Madrid: Alhambra Universidad. Clinical Hypnosis (pp. 649-670). Washington,
Lamas, J.; del Valle-Inclan, F.; Blanco, M. J. y Alcaraz, DC: American Psychological Association.
M. (1985). La escala de grupo de Morgan, W. P. (1996). Hypnosis in Sport and Exercise
susceptibilidad hipnótica de Harvard (Forma Psychology. In J. L. Van Raalte & B. W. Brewer,
A): Estudio en una muestra española. Análisis Exploring Sport and Exercise Psychology (pp.
y Modificación de Conducta, 11(28), 279-291. 107-130). Washington, DC: American
Lamb, M. (1986). Self-concept and injury frequency Psychological Association.
among female college field hockey players. Morrow, J. y Harvey, P. (1990). The exercise salience
Athletic Training, 21, 220-224. scale. Unpublished manuscript.
Lawlis, J. & Lawlis, G. F.(1990). Health Attribution Test Mueller, D.P., Edwards, D.W., & Yarvis, R.M. (1977).
Manual. Champaign, IL: Institute for Stressful life events and psychiatric
Personality and Ability Testing. symptomology : Change as undesirability.
Lefebvre, B. (1986). La retroaction biologique ou le Journal of Health and Social Behavior,18,307-
biofeedback: donnes 317.
neuro-psycho-physiologiques actuelles. Luo- Navarro-Beltrán, E. (1987). Diccionario Terminológico de
vain-le-Neuve: Tesis Doctoral. Ciencias Médicas. Barcelona: Salvat Editores.
Leunes, A. D. & Nation, J. R. (1989). Sport Psychology. Nideffer, R. M. & Sharpe, R. (1978). A.C.T.: Attention
An introduction. Chicago. Illinois: Nelson Hall. control training. New York: Wyden Books.
Lysens, R., Vanden Auweele, Y., & Ostyn, M. (1986). Nideffer, R. M. (1993). Attention Control Training. In R.
The relationship between psychosocial factors N. Singer, M. Murphey, L. K. Tennant, Handbook
and athletic injuries. Journal of Sports of Research on Sport Psychology (pp.542-556).
Medicine and Physical Fitness,26, 77-89. Nueva York: Macmillan Publishing Company.
Lysens, R.; Auweele, Y. V. & Ostyn, M. (1986). The Nideffer, R.M. (1981). The ethics and practice of applied
relationship between psychosocial factors and sport psychology. New York.: Mouvement
sports injuries. Journal of Sports Medicine and Publications,
Physical Fitness, 26, 77-84. Nims, J F. (Ed.)(1983). Western wind: An introduction to
Marmer, M.J. (1959). Hypnosis in anesthesiology. poetry (2nd ed.). New York: Random House.
Springfield : Charles C. Thomas Ogilvie, B. C. & Tutko, T. (1966). Problem athletes and
May, J. R.; Veach, T. L.; Reed, M. W. & Griffey, M. S. how to handle them. London: Pelham.
(1985). A psychological study of health, injury Palmi, J. (1983). Una experiencia con bioinformación
and performance in athletes on the U.S. alpine dentro de la práctica deportiva. Dentro de las
ski team. Physician and Sports Medicine, 13, jornadas de psicología de la actividad física y el
111-115. deporte de Cataluña. Barcelona: INEF.
Mcdonald, S. A. & Hardy, CH. J. (1990). Affective Palmi, J. (1986). La bioinformación como técnica de
Response Patterns of the Injured Athlete: An información directa en el campo de la psicología
Exploratory Analysis. The Sport Psychologist, del deporte. Presentado en el I Congreso de la
4, 261-274. actividad física y el deporte. Espluges de
Mcnair, D.; Lorr, M.; Droppleman, L. (1971). Profile of Llobregat. INEFC.
Mood States. Manual. San Diego: Educational Palmi, J. (1987). Biofeedback y registros fisiológicos y
and Industrial Testing Service, . una aplicación en el deporte. Comunicación
76
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
77
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
78
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
79
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
80
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 23
Intervención psicológica en fútbol
Rosana Llames Lavandera
Jesús García Barrero
Escuela Asturiana de Entrenadores de Fútbol
81
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Al igual que el resto de disciplinas, también la En líneas generales, y excepto algunos casos
Psicología deportiva ha ido evolucionando conforme a puntuales, actualmente el fútbol todavía se encuentra a
las necesidades que plantea la práctica deportiva y caballo entre la segunda y la tercera etapa, pues si bien
sobre todo la competición, pues no hay que olvidar que es cierto que cada vez hay más técnicos, dirigentes e
estamos hablando de un área dirigida a la mejora del incluso futbolistas que ponen en práctica un programa
aprendizaje y la ejecución deportiva en las edades de de preparación psicológica, también lo es que aún existe
formación, y a la mejora del rendimiento en las mucho desconocimiento sobre lo que la psicología, como
categorías profesionales. disciplina científica, puede aportar al deporte del fútbol,
así como reticencias sobre su aplicación. Por otro lado,
También el fútbol, como el resto de los es curioso que el fútbol sea uno de los deportes donde
deportes, ha ido evolucionando progresivamente en más se alude públicamente (entrevistas, ruedas de
todos los aspectos, atendiendo así a las necesidades prensa y medios de comunicación) a aspectos
que plantean sus procesos de formación, su psicológicos para explicar los errores o los malos
manifestación en competición y su estructura y resultados en competición, e incluso en muchos casos,
organización. se considera que la palabra del entrenador es suficiente
para preparar mental y anímicamente a los jugadores.
En el área psicológica aplicada al fútbol este
progreso se fundamenta en las siguientes "No estábamos mentalizados para este partido".
necesidades:
"Nos cuesta mantener la concentración durante noventa
82
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
En este capítulo intentaremos realizar una Para responder adecuadamente a todos los
breve exposición sobre cuáles son las áreas de aspectos antes mencionados, debemos dar respuesta a
intervención psicológica en fútbol, a qué niveles y dos preguntas importantes:
cómo podemos intervenir desde el ámbito de la
psicología aplicada al deporte y finalmente veremos 1º. ¿De quién surge la demanda?
algunos ejemplos prácticos.
Esto implica contemplar quien realiza, porqué y
Esperamos que con esta introducción al para qué, la demanda de un psicólogo del deporte, ya
mundo del fútbol, desde el área de la psicología, que no será lo mismo si viene planteada desde el equipo
podamos responder a algunas de las dudas más de dirección (Consejo de Administración, presidente,
frecuentes que se plantean en este deporte: directivos,...) que si viene planteada desde el ámbito
técnico (entrenadores, coordinador de equipos,
• ¿Qué significa "mentalizar" a los secretario técnico,...).
jugadores?
• ¿Por qué se consigue tan pocas veces? En el primer caso, cuando la necesidad se
• ¿Por qué entrena tan bien y en los plantea desde un grupo directivo, tendremos que
partidos no rinde igual? asegurarnos que nuestros propios criterios de trabajo y
• ¿Por qué frente a este equipo quedamos lo que de nosotros espera esa directiva, coinciden. En
atenazados? ocasiones el desconocimiento que existe en torno a la
• ¿Por qué cuando jugamos fuera, bajamos disciplina de la psicología lleva a solicitar un psicólogo,
el nivel? más como un profesional clínico para la solución de
• ¿Por qué empezamos la Liga tan bien y problemas, o incluso como un gestor de recursos
acabamos tan mal? humanos, que como un técnico deportivo que contribuya
• ¿Por qué cuando nos meten un gol no a la mejora del rendimiento (sea cual sea la orientación
sabemos reaccionar? que se le dé al termino rendimiento). Por ejemplo: una
directiva puede demandar un psicólogo para mejorar las
relaciones internas entre los técnicos o trabajadores del
Planteamiento club. En este caso el proyecto de trabajo estaría
encaminado al ámbito organizativo. O puede que la
El primer paso que debemos contemplar antes dirección se plantee la contratación de un psicólogo para
de establecer - y casi podríamos decir, de pensar atender a los “jugadores con problemas”. En ambos
siquiera - cualquier tipo de actuación (evaluación, casos, si el único cometido que se espera del psicólogo
intervención directa, etc.), será tener el mayor y mejor es una aportación puntual para dar solución a un tema
conocimiento posible del centro donde se ha de concreto, no procederá que nuestro proyecto de trabajo
desarrollar nuestra labor, y cuales son las necesidades se oriente a la psicología del rendimiento, a la mejora
que se plantean. de habilidades, y al trabajo aplicado entendido como
entrenamiento psicológico.
Son muchas las ocasiones en que un trabajo
objetivamente bien planteado puede fracasar y En el caso de que la demanda del equipo
resultar poco productivo, simplemente por el hecho de directivo esté orientada a un trabajo de psicología del
que no se ajusta a la demanda concreta y/o a las deporte aplicado, entendiendo éste como la aportación
expectativas que el demandante, (ya sea un club, un de un área de conocimiento más, que contribuya a la
equipo, un entrenador, etc.) tenía sobre lo que el mejora del rendimiento deportivo, deberemos conocer
psicólogo del deporte podía o debía aportar. cual es la opinión de los técnicos (entrenadores,
preparadores físicos, etc.), ya que el trabajo aplicado de
Por tanto, antes de establecer un entrenamiento psicológico se realiza con ellos y siempre
planteamiento de intervención, deberemos contemplar bajo su dirección. Por tanto, es importante conocer si
y tener muy clara y delimitada la demanda inicial, el están de acuerdo con introducir un nuevo miembro (en
tipo de institución donde se va a realizar, los objetivos este caso el psicólogo) en su cuerpo técnico, si conocen
a los que debemos llegar, las necesidades específicas la aportación que el psicólogo puede hacer, si están
que se plantean a priori, la infraestructura, dispuestos o motivados para introducir nuevas tareas en
instalaciones y material de que vamos a disponer, etc. el tiempo de entrenamiento, etc.
Todo ello nos llevará a especificar adecuadamente qué En el segundo caso que exponíamos sobre el
tipo de trabajo vamos a desarrollar, cuál es nuestro rol origen de la demanda, que venga desde el área técnica
en las actividades y tareas de la institución para la que deberemos, a su vez, tener el visto bueno del equipo
vamos a trabajar, y cuál será nuestra ubicación en el directivo, ya que hay muchas actuaciones que deben
organigrama. contar con el respaldo y autorización de los
responsables administrativos, empezando por el
83
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
84
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
es el caso por ejemplo de la gimnasia donde la etapa deporte tiene en estos ámbitos de intervención,
de formación se interrumpe y el rendimiento debe concretamente en el deporte del fútbol.
manifestarse en edades muy cortas (estamos
hablando de diez, doce años).
Evaluación
CENTROS DE FORMACION: Escuelas privadas, Escuelas
La evaluación psicológica en fútbol se puede
municipales, Clubs y/o Centros culturales-deportivos,
aplicar a diferentes niveles, según cual sea el objeto de
Equipos escolares, etc. estudio con el que queramos trabajar, así como la
información que necesitemos recoger para
El área de Rendimiento está orientada a la posteriormente utilizar en las intervenciones que
obtención de resultados deportivos, mejora y creamos convenientes.
manifestación máxima de todos los ámbitos
intervinientes en el rendimiento (técnica, táctica, física Cuando nos planteamos una evaluación, sea en
y psicológica). Esta área se centra en su mayor parte el ámbito que sea, primero debemos tener la respuesta
en los clubs profesionalizados, que actualmente son a la siguiente pregunta: ¿Qué es lo que quiero medir?,
empresas con objetivos productivos (incremento de que sería algo así como pensar ¿de qué o de quién
ingresos a partir de los resultados deportivos), y en las necesito tener datos? Una vez tengamos esta
Federaciones nacionales y regionales. información podremos escoger el tipo de evaluación más
adecuado que debemos realizar, el método con el que
La psicología del deporte aplicada, entendida vamos a evaluar (pruebas o técnicas de evaluación
como una ciencia del deporte o una disciplina más, específicas), y podremos planificar de forma sistemática
orientada a la mejora de rendimiento, encontraría en la evaluación.
esta área su máxima expresión para desarrollar su
labor en colaboración con el resto de profesionales y Aunque lo más común sea pensar que la
técnicos del deporte. evaluación se centra sobre los jugadores, y la mayoría
de demandas recogidas por parte de los técnicos o
dirigentes se dirigen hacía la evaluación de deportistas,
CENTROS DE RENDIMIENTO: Equipos profesionales
en realidad en deporte se pueden evaluar aspectos
(primera división, segunda división, segunda “B”), las psicológicos en otros ámbitos, igualmente importantes y
selecciones nacionales absolutas y de base, las necesarios para disponer de información real sobre los
selecciones regionales o autonómicas, y las categorías resultados finales del proceso deportivo.
85
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
aspectos concretos mencionados anteriormente. información suficiente sobre cuál es la causa real del
En la actualidad todavía son escasas las pruebas problema y cómo debemos tratarlo. No es lo mismo
elaboradas específicamente para deportistas. A que el jugador esté excesivamente centrado en
diferencia del ámbito, por ejemplo, de la pensamientos de expectativas de fracaso (“voy a
psicología clínica o industrial, en deporte hay una fallar”, “el contrario es más rápido que yo, me va a
carencia importante de pruebas adaptadas a desbordar en el campo”) que en sensaciones
situaciones deportivas, baremadas y validadas con corporales de cansancio (“no puedo con las piernas”,
población deportiva, por tanto, en ocasiones, es “estoy agotado”, “se me va a salir el corazón”). En
común encontrarnos con que se utilizan los tests o ambos casos este tipo de atención está interfiriendo
cuestionarios estandarizados. sobre el rendimiento, sin embargo el tratamiento que
le demos al trabajo posterior no será lo mismo en un
Sin embargo, aún cuando se utilizan caso que en otro. Por lo tanto, estos datos son
determinadas pruebas adaptadas a deporte, la imprescindibles para disponer de una buena
discrepancia existente en las investigaciones parece evaluación, que a su vez nos posibilite elaborar un
apuntar a la necesidad de concretar mucho más sobre programa de trabajo lo más ajustado posible, a las
estas herramientas, y quizá sería conveniente que necesidades concretas del jugador.
esas pruebas estuvieran adaptadas a cada deporte en
particular.
86
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
por la utilidad que tienen no sólo para la 3. Recogida de información de Datos personales
evaluación, sino para el posterior entrenamiento del jugador. Aquí recogeremos información sobre
en habilidades psicológicas, donde el jugador situaciones o características personales del jugador, que
aprenderá progresivamente a autoevaluarse. pueden completar toda la información mencionada hasta
este momento. Los datos que recopilaremos en este
apartado corresponden a: situación y antecedentes
2. Evaluación individual de estados de ánimo y familiares, actividades extradeportivas, estudios,
emocionales: En esta evaluación se recogen aspectos condiciones de vida, etc.
muy concretos, en momentos muy concretos (antes de
un partido, en un entrenamiento, frente a un
determinado rival,...). Estos estados emocionales Evaluación del equipo
variarán en función de condicionantes externos y
temporales, como por ejemplo: la situación del En fútbol, como deporte de equipo, es
jugador en el equipo (titular o reserva), del momento importante disponer de una evaluación del equipo en
de la temporada (inicio, mitad o final de temporada), conjunto, como grupo, y no solamente de cada jugador
los resultados obtenidos por el equipo, etc. a nivel individual. Esta evaluación de equipo nos
facilitará la elaboración de los programas de
Para la evaluación de estos estados podríamos entrenamiento mental.
destacar dos tipos de instrumentos:
En la evaluación del equipo tendremos en
- Cuestionarios específicos elaborados según las cuenta, fundamentalmente:
necesidades.
- Habilidades psicológicas del grupo. Al igual que
- POMS. Profile of Mood States (McNair, Lorr, en la evaluación individual, se evaluarán las
Droppleman, 1971). Esta herramienta, muy habilidades psicológicas que presenta el grupo en su
extendida en la psicología del deporte, aporta conjunto. La evaluación psicológica del grupo la
información sobre varias escalas relacionadas con obtendremos a partir de las medias de las
el rendimiento deportivo, y a su vez, a partir de las puntuaciones individuales, complementada con la
mismas se obtiene un perfil del que podemos observación directa en entrenos y competición.
inferir el estado emocional (estados de humor) del Así, sacaremos la puntuación media de atención,
jugador ante un determinado evento (partido, autoconfianza, nivel de activación, etc., y
entrenamiento, etc.). dispondremos de una información valiosa respecto
al grupo como equipo.
En la actualidad existen versiones de la prueba A partir de esta información haremos más hincapié
original que facilitan su aplicación y posterior en unos aspectos u otros en las sesiones de equipo
evaluación (Hernández, A., Ramos, R., 1996; de entrenamiento mental.
Fuentes, I., Balaguer, I., Meliá, J.L., y García
Merita, M., 1995). - Clima y ambiente de equipo. Aquí evaluaremos
la cohesión del grupo, así como los diferentes roles
que se dan en el equipo, los agrupamientos, etc.
80
70 Evaluación de técnicos
60
50 En lo que se refiere a la evaluación que
40 podemos realizar sobre los técnicos, especialmente
30 entrenadores, nos centraremos en:
20
10
- Dirección del entrenamiento.
0
D T C V F
- Dirección de la competición.
87
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Evaluación de la organización
En éstos dos últimos aspectos de evaluación El tipo de evaluación variará dependiendo del
mencionados, técnicos y entrenamiento, el psicólogo objetivo final que se quiera conseguir. Y este objetivo
del deporte podrá dirigir su trabajo bien asesorando a puede ir encaminado, tal y como tenemos planteado, a
un departamento específico (por ejemplo: Secretaria la elaboración de un proyecto de actuación, o a las
técnica), o bien realizando esa evaluación labores de coordinación y organización interna en un
directamente. Esto va a depender de cual sea el club o centro deportivo.
trabajo que con el psicólogo se haya planteado: labor
de asesoramiento en el club, o funciones de técnico Proyectos. Antes de centrarnos en los requisitos
deportivo formando parte del cuerpo técnico de los que deberemos evaluar para la confección de un
equipos. En líneas generales (siempre con la proyecto, expondremos la relación que existe entre el
88
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
tipo de decisiones, el nivel jerárquico de la planificador (Mestre, J.A., 1995) (tabla 1).
organización y las etapas correspondientes al proceso
Planificación Estratégica
Estratégicas Político de alta dirección
(Planes deportivos)
Directivo – Gerencia Planificación Táctica
Estructurales
Dirección Técnica (Programas deportivos)
89
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Muchos niños que juegan al fútbol sin Otro ámbito de intervención directa en deporte de
objetivos específicos de rendimiento, y en la mayoría formación son los padres, pues en muchas ocasiones lo
de los casos sin suficientes condiciones físicas ni tienen menos claro que los niños, y exigen resultados de
técnicas, abandonan la práctica del deporte cuando rendimiento olvidándose de los objetivos iniciales de la
éste deja de ser divertido: cuando el entrenador les práctica deportiva de sus hijos, e incluso perdiendo la
riñe, cuando no le dan opción de participar en los objetividad sobre sus cualidades técnicas y/o físicas
partidos (no juegan), cuando se aburren en los (todo padre cree tener un pequeño Maradona en casa).
entrenamientos, etc. En el mejor de los casos, que no
se produzca el abandono inmediato, inician un A los padres se puede acceder para este
recorrido por diferentes clubs intentando encontrar esa asesoramiento a través de:
motivación, o esa diversión, hasta que en algún
momento se “acaba la paciencia”, y no abandonan el - Aportación de documentación.
deporte del fútbol, abandonan la práctica deportiva, - Charlas de formación.
desilusionados y en muchas ocasiones frustrados a - Reuniones específicas por equipos,
nivel personal. estableciendo muy claro cuales son los objetivos
marcados para la temporada y posteriormente
El asesoramiento a los entrenadores se puede devolviéndoles información sobre los resultados
desarrollar desde diferentes niveles de intervención, a obtenidos en base a esos objetivos (diversión,
través de: socialización, mejora de habilidades, etc.).
- Encuestas en las que dirijamos sus aportaciones
a los temas que nos interesa que deban dar
90
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Periodización de la temporada
91
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
PERIODO PREPARATORIO
PERIODO COMPETITIVO
PRIMERA FASE o
Mesociclo I Microciclos
semanales
SEGUNDA FASE o
Mesociclo II Microciclos
semanales
TERCERA FASE o
Mesociclo III Microciclos
semanales
PERIODO de TRANSICION
En una temporada de fútbol los periodos, aproximadamente, según temporadas y planificación específica en cada
club y categoría, corresponderían: el periodo preparatorio a la pretemporada (Julio y Agosto), el periodo competitivo con el
tiempo de competición (de Septiembre a Junio), y el periodo de transición con las vacaciones (mes de Junio).
Dentro del periodo competitivo, nosotros marcamos las diferentes fases como sigue: periodo I, del inicio de
temporada hasta Navidad (parón de Diciembre), periodo II, de Enero a Semana Santa (mediados de Marzo, a mediados de
Abril), y periodo III, desde esta fecha hasta final de liga.
PERIODO PERIODO
PERIODO COMPETITIVO
PREPARATORIO TRANSICIÓN
§ Entrenamiento de grupo
Repaso y mantenimiento de técnicas
básicas.
92
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Por otra parte, dentro de cada mesociclo o trabajará específicamente sobre el rendimiento
fase del periodo competitivo, se marcan unos periodos competitivo, según el momento de la temporada. La
semanales (microciclos) en los cuales se estructura general de un microciclo sería la siguiente:
MICROCICLO SEMANAL
TAREAS
INICIO DE SEMANA:
Recuperación mental y muscular.
RECUPERACION POST-PARTIDO Retroalimentación (información sobre su
rendimiento en competición).
Análisis de datos de la competición.
MITAD DE SEMANA:
Según el momento de la temporada en que nos
ENTRENAMIENTO ESPECIFICO encontremos y el trabajo planificado en el
programa.
Necesidades específicas.
FINAL SEMANA:
Entrenamiento ideo-motor (visualización)
PREPARACION COMPETITIVA Rutinas precompetitivas.
Afrontamiento de la competición.
Veremos ahora, más detenidamente, en qué jugador en técnicas de relajación. Las más utilizadas en
consisten algunos de los términos y/o técnicas deporte son la relajación progresiva (muscular) de
mencionadas en el programa de temporada, aplicados Jacobson (1938), y el entrenamiento autógeno de
al deporte del fútbol. Schultz (1969).
93
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
determinado equipo, en una determinada circunstancia entrenadores, sin saber su repercusión psicológica o
o momento de la temporada. Las técnicas específicas sobre qué aspectos psicológicos hacen incidencia cada
las podemos dividir en dos bloques diferenciados: uno de ellos.
entrenamiento en gimnasio y ejercicios de campo.
En el último apartado de este capítulo veremos
En el entrenamiento en gimnasio, quizá la ejemplos concretos de alguno de ellos.
técnica más utilizada sea la visualización,
precisamente por la capacidad de maniobra que nos En lo que se refiere a la preparación
da para introducir todos los elementos que competitiva podríamos decir que es el punto clave de
necesitemos para producir cambios o mejoras, tanto la intervención orientada al rendimiento, ya que es en
en el equipo como a nivel individual. A través de la los partidos donde el jugador debe rendir al cien por
visualización podemos incidir sobre la mayoría de cien, donde debe manifestarse todo el trabajo llevado a
habilidades psicológicas necesarias para el fútbol: cabo en los entrenamientos y donde podremos evaluar
activación, atención, motivación, autoconfianza, si el jugador realmente tiene habilidades psicológicas
cohesión del equipo, etc. Para que el trabajo de adecuadas para afrontar el reto competitivo con éxito.
visualización resulte eficaz en deporte es necesario, Para que esto se produzca tendremos que abarcar todos
por parte del técnico (psicólogo) que la va a aplicar, los aspectos implicados en el rendimiento deportivo, y
tener una buena base de los procesos psicológicos no solamente aquellos que son susceptibles de
básicos y dedicarle el tiempo y la imaginación entrenamiento mental.
necesarios para elaborar visualizaciones adecuadas a
los objetivos que queremos conseguir con ellas. Para que el rendimiento sea óptimo en una
competición de fútbol podemos destacar tres puntos
básicos a nivel psicológico (sin menospreciar el resto de
variables psicológicas, ya que cada una tiene su peso
específico). Estos puntos son: el control de la activación,
una adecuada focalización de la atención, y un buen
nivel de autoconfianza. Si estos aspectos están
ajustados, tenemos muchas posibilidades de asegurar el
éxito en competición.
94
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
95
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
• ALOJAMIENTO Y MANUTENCION.
Se llama “Jugadores residentes” a jugadores
fichados de fuera de la provincia, que están viviendo bajo
la tutela del club. Esto es, el club les proporciona - Organización a principio de temporada.
alojamiento, manutención, estudios, y otras necesidades - Seguimiento continuo.
que pudieran tener, y por tanto se responsabiliza del
seguimiento de estos aspectos ante los padres.
• SOLUCION DE PROBLEMAS.
96
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
MES: MARZO
EQUIPO: CADETE B
ENTRENAMIENTO EN GIMNASIO
• JUEVES 9 5'00 AFRONTAMIENTO
• MARTES 14 5'00 ATENCION
• MARTES 28 5'00 ACTIVACION
ENTRENAMIENTO DE CAMPO
97
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
considerar zona de tiro. El jugador debía hacer puerta (“tengo hueco o no”). Si hay hueco: tiro, si no lo
consciente (dirigir la atención) a cuando pasaba esa hay: busco compañero y paso.
línea. El segundo paso sería mirar hueco entre él y la
La evaluación se llevó a cabo a través del Perfil psicológico deportivo (Loehr), del Test de estilo
atencional, TAIS (Nideffer), de múltiples entrevistas con el jugador, y de la observación directa en
entrenamientos y competición.
Zona de tiro 1 (paralelo a portería): de la línea de puntos hasta la portería.
Zona de tiro 2 (perpendicular a portería): línea discontinua derecha o izquierda de portería.
El jugador ensayó durante tres semanas este con el anterior. Una vez pasada la zona de tiro 1, se
ejercicio y modificó su conducta, pero en este tiempo establece otra segunda línea en perpendicular a la
planteó que cuando tiraba no enfocaba la portería e puerta. Nuevamente el jugador debe hacer consciente la
iban todas altas. zona en la que está en cada momento, y se le indica que
cuando mire a puerta focalice la escuadra de la portería,
Se elaboró otro segundo ejercicio a combinar su zona de tiro será de ahí hacia abajo.
98
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
NOMBRE: FECHA:
PUESTO DE TRABAJO:
DESCRIPCION DE COMETIDOS
PROPORCION DE ORDEN DE
TAREAS MATERIAL
TIEMPO PRIORIDAD
99
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
DATOS PERSONALES.
A. DATOS PERSONALES.
100
Psicología del Deporte (Vol. III) – Aplicaciones 1
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
101
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 24
Técnicas de intervención
psicológica en baloncesto
Carlos Fierro-Hernández
Universidad Autónoma de Madrid
102
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
103
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
104
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
105
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
106
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
107
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
No tiene sentido entrenar. No tengo Todos los grandes jugadores han tenido
talento. que entrenar mucho. Yo debo intentarlo.
Siempre perdemos por culpa del árbitro. El árbitro es algo que está fuera de nuestro
control y no podemos hacer nada para
cambiarlo. Mejor será que nos centremos
en nuestras posibilidades.
He hecho un partido muy malo. Soy un mal Debo esforzarme más en los
jugador. entrenamientos para no volver a realizar un
partido como el de hoy. Normalmente juego
mejor. Debo concentrarme más.
108
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
109
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
110
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
los cinco jugadores que recibieron explicar claramente los papeles de cada
directamente el programa acabaron siendo jugador, destacando la importancia de
titulares indiscutibles en el equipo, cuando sólo cada uno de ellos en el éxito del equipo,
dos de ellos lo eran al comienzo de la incluso de aquellos que menos juegan.
temporada. Por ejemplo, en equipos profesionales, a
los jugadores jóvenes que apenas juegan
en toda la temporada se les puede
El desarrollo de la cohesión explicar que su papel en el equipo es
aumentar la intensidad de los
En las semifinales de baloncesto entrenamientos, mientras que desarrollan
masculino de la NCAA de 1991, entre Duke y sus condiciones físicas y técnicas para
UNLV, había consenso en considerar que los formarse como jugadores. Los jugadores
jugadores de UNLV, imbatido hasta el desarrollan más fácilmente la empatía
momento, tenían más talento –incluidos dos cuando saben qué se les exige también a
integrantes del mejor equipo americano, Larry otros jugadores.
Johnson y Stacey Augmon-, pero los de Duke
jugaron un mejor baloncesto de equipo y • Establecer objetivos de equipo
ganaron (Weinberg y Gould, 1996). estimulantes. La fijación de objetivos
específicos y realistas es un elemento
El equipo deportivo debe considerarse motivador que ayuda a la concentración
como un grupo, cuyo rendimiento no depende y aumenta el rendimiento individual y
sólo de las capacidades y habilidades grupal. A ser posible los objetivos deben
individuales, sino también de las interacciones ser consensuados por el grupo. El
y relaciones que se establecen entre los establecimiento de objetivos de equipo y
distintos individuos que lo componen. Para su consecución alientan el sentido de
comprender el funcionamiento del equipo como grupo.
grupo es importante atender a la cohesión, que
implica “una tendencia del grupo a no • Estimular la identidad del grupo. Pueden
separarse y permanecer unido en la búsqueda introducirse elementos que ayuden a la
de sus metas y objetivos” (Carron, 1982). Las diferenciación del equipo con respecto a
investigaciones han encontrado una relación otros, como distintivos en la ropa o
positiva entre cohesión y rendimiento, reuniones sociales. Por ejemplo, en la
especialmente en deportes de equipo que época dorada de los Detroit Pistons en la
requieren interacción, coordinación y NBA (1989-1990), el equipo era conocido
cooperación amplia entre sus miembros, como como los “bad boys” (chicos malos), por
el baloncesto (Gruber y Gray, 1982). Asimismo su juego sucio, lo cual les ayudaba, sin
la cohesión del grupo se ha relacionado con duda, a desarrollar una fuerte identidad
otros aspectos importantes como la grupal. Otro ejemplo puede ser la
satisfacción y la permanencia de los jugadores selección española del Mundial Junior de
en el equipo. En definitiva se trata de un Baloncesto de 1999, cuyos integrantes
importante factor que debe cuidarse en la se tiñeron el pelo de rubio tras la victoria
programación de intervenciones en equipos en la final.
deportivos (García-Mas, 199?; Blanco y
Buceta, 1993) o más específicamente en • Evitar la formación de pandillas. Los
equipos de baloncesto (Buceta, 1992). subgrupos normalmente favorecen a los
integrantes de los mismos, mientras que
Los miembros del grupo, tanto el marginan al resto de jugadores. Las
entrenador como los propios jugadores, pueden parejas o equipos formados para realizar
ayudar a fomentar la cohesión del equipo, pero ejercicios de entrenamiento pueden
posiblemente es el entrenador quien se favorecer la interacción entre algunos
encuentra en la mejor posición para influir en jugadores y regular este tipo de
un cambio positivo (Carron, 1982). El problemas.
entrenador puede facilitar el desarrollo de la
cohesión siguiendo algunas pautas (Weinberg y • Evitar la rotación excesiva. Cuando un
Gould, 1996): equipo presenta muchos cambios en sus
filas, se reduce la cohesión y la
• Explicar los papeles individuales en el compenetración de los jugadores. En la
éxito del equipo. El entrenador debe incorporación de nuevos jugadores, es
111
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
aconsejable pedir a los más veteranos preocupación por los pocos minutos de
que ayuden a integrarse a los nuevos. juego de que dispone y podría preguntar
en qué tendría que mejorar para jugar
• Celebrar reuniones de equipo periódicas más en los partidos. Cuanto mejor se
para resolver conflictos. Las reuniones comuniquen y entiendan los jugadores
permiten el reconocimiento de con el entrenador, más unido estará el
problemas y favorecen su resolución. equipo.
Debe fomentarse la expresión sincera y
asertiva de opiniones, ideas y • Resolver los conflictos. Ante los
sentimientos. conflictos los jugadores no deberían
limitarse quejarse o a desahogarse con
• Conocer algo personal sobre cada otros compañeros. Es mejor plantearlos y
jugador. El deportista valora mucho que tratar de solucionarlos o minimizar sus
el entrenador preste atención a su vida consecuencias negativas.
personal, como pueden ser los estudios,
otras aficiones o circunstancias • Esforzarse al 100% en todo momento. El
adversas como problemas familiares. esfuerzo y la concentración intensos en
los entrenamientos y partidos es
Si bien el entrenador puede hacer percibido muy positivamente por el resto
mucho a favor de la cohesión del equipo, el de jugadores, resulta contagioso y crea
jugador también puede fomentarla, sobre todo un espíritu de lucha en el seno del
tratando de mejorar su propia relación con equipo.
otros integrantes del equipo, aunque también
de otros modos: Muchas de estas pautas, las sugeridas
para el entrenador y para los jugadores, se
• Conocer a los compañeros del equipo. reduce al intento por mantener una
Conociendo mejor al resto de jugadores, comunicación eficaz entre los miembros del
es más fácil aceptar las diferencias equipo. Esta comunicación permite un buen
individuales y comprender algunos entendimiento, una comprensión más profunda
problemas que se presentan en el de las circunstancias del equipo y promueve el
grupo. aprendizaje por comunicación -los jugadores y el
entrenador pueden aprender de las opiniones y
• Apoyar y ayudar a los compañeros observaciones que reciben- y facilita la
siempre que sea posible. El clima del resolución de problemas.
equipo mejora si entre los jugadores se
refuerzan las actuaciones y los
esfuerzos realizados, y cuando las El tiro libre
críticas se hacen de forma
constructiva, desde una perspectiva Uno de los aspectos del baloncesto más
optimista y sugiriendo alternativas para estudiados por la psicología del deporte es el tiro
el cambio. Sobre la ayuda recíproca se libre. Mientras que en otras áreas del juego la
construye el sentimiento de equipo. consecución de una canasta o de una acción
positiva depende en buena medida de la
• Ser responsable del rendimiento oposición de jugadores contrarios, en el tiro
individual. Algunos jugadores echan la libre, el jugador se enfrenta en solitario a la
culpa a otros de su mal rendimiento, lo canasta, sin oposición y siempre desde la misma
cual, no persigue ningún objetivo y crea distancia. Esta circunstancia permite que se
malestar en el equipo. Es más lleven a cabo estudios sobre la incidencia de
constructivo tratar de conseguir diversos factores –tales como la motivación, la
cambios positivos que ayuden a superar concentración o un entrenamiento específico-
los malos resultados. en el porcentaje exhibido por los jugadores en
esta área del juego.
• Comunicarse con el entrenador con
franqueza y sinceridad. Aunque esta Han sido varios los estudios que han
comunicación también depende del señalado la importancia del tiro libre en el
entrenador, el jugador puede inducir a baloncesto. Kozar, Vaughn, Whitfield y Lord
una comunicación más eficaz. Por (1994) encontraron en un análisis de casi 500
ejemplo, un jugador debería expresar su partidos de los College americanos, que en los
112
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
113
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
114
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
115
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Kozar, B., Vaughn, R.E., Whitfield, K.E. y Lord, Treasure, D. (1993). A social-cognitive approach
R.H. Importance of free-throws at to understanding children´s achievement
various stages of basketball games. behavior, cognitions and affect in
Perceptual and Motor Skills, Vol 78(1), competitive sport. Tesis doctoral no
243-248. publicada. Illinois: Universidad de Illinois.
Labrador, J.L., Crespo, M., Buceta, J.M. y Tresaure, D. y Roberts, G.C. (1995). Applications
González, S. (1995). Factores of achievement goal theory to physical
contextuales implicados en el education: implications for enhaceng
lanzamiento de tiros libres en motivation. Quest, 47, 475-489.
baloncesto. Revista de Psicología del Turnoliver, (1996). How Often Do Teams Get
Deporte, 7-8, 87-99. Lucky. Journal of Basketball Studies. (http:
Lane, J.F. (1980). Improving athletic //cmr.sph.unc.edu/~deano/bball/index.html).
performance visuo-motor behavior Vealey, R.S. (1991). Entrenamiento en
rehearsal. En R.M. Suinn (ed.), imaginación para el perfeccionamiento de
Psychology in Sports: Methods and la ejecución. En: Psicología aplicada al
applications (pp.316-320). Minneapolis: deporte. Madrid: Biblioteca nueva.
Burgess. Vickers, J.N (1996). Visual control when aiming
Meinchenbaum, D. (1975). Toward a cognitive at a far target. Journal of Experimental
theory of self-control. En: G. Schwartz, Psychology: Human Perception and
y D. Shapiro. Consciouness and self- Performance, Vol 22(2), 342-354.
regulation: Advances in research. New Williams, J.M. (1991). Psicología aplicada al
York: Plenum. deporte. Madrid: Biblioteca nueva.
Rivarés, L. (1996). La concentración en el tiro Weingerg, R.S., y Gould, D. (1996).
libre. Revista de Psicología del Deporte Fundamentos de psicología del deporte y
11, 77-88. el ejercicio físico. Barcelona: Ariel
Sampaio, A.J. (1998). Los indicadores Psicología.
estadísticos más determinantes en el Weinberg, R.S., Seabourne, T.G. y Jackson, A.
resultado final en los partidos de (1981). Effects of visuo-motor behavior
básquetbol. Lecturas: EF y Deportes. rehearsal, relaxation and imaginery on
Revista Digital, 11. karate performance. Journal of Sport
(http://www.efdeportes.com/efd11/sam Psychology, 3, 228-238.
pe.htm).
116
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 25
Variables psicológicas en los
deportes de aventura y riesgo
Enrique Cantón Chirivella
María Carmen Sánchez Gombau
Universidad de Valencia
117
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
!Atrévete! Esta parece ser la consigna • riesgo: entendido tanto como el peligro
para aquellas personas que buscan un nuevo de pérdida real (riesgo objetivo) como percibido
concepto de competición, distinto del que (subjetivo),
caracteriza a la mayoría de los deportes
basados en la contienda entre dos o más • entorno: medio natural,
contrincantes, individuos o equipos. Estos
nuevos deportes suponen un cierto desafío a • competencia: experiencia y dominio o
las leyes de la naturaleza, lo que comporta, capacidad que tiene la persona en la habilidad
además de emociones nuevas, el disfrute con que va a emplear.
prácticas que procuran alejarse de la rutina y
las tareas habituales. Para satisfacer ese Todo parece indicar que las personas que
deseo, surgieron los deportes llamados "de se implican en la práctica de este tipo de
aventura": surcar los aires, desafiar corrientes deportes, tienen una motivación diferenciada de
turbulentas, penetrar en las entrañas de la los practicantes de deportes más tradicionales.
tierra..., experimentar sensaciones al filo de lo Es posible que ésta venga influida precisamente
imposible. Además, experimentar nuevas por las características de este tipo de
sensaciones está muy unido al concepto de actividades en la naturaleza, en concreto:
libertad que prima en la actividad de aventura.
• se desarrollan en un entorno natural
(sensación de libertad) no estable (aumenta el
Conceptualización del deporte grado de incertidumbre),
de aventura y riesgo
• son muy variadas,
Los deportes de aventura, definidos
como "actividades deportivas de • son muy flexibles: no hay un reglamento
entretenimiento y turísticas, que se practican fijo, no hay horarios...,
sirviéndose básicamente de los recursos que
ofrece la misma naturaleza, el medio que se • se basan en el equilibrio psicofísico,
desarrollan, y que conllevan un factor de
riesgo" (Miracle, 1994, pp.7), cuentan en la • son accesibles a todas las tipologías
actualidad con un gran número de adeptos. La personales,
práctica de estos deportes supone afrontar un
riesgo determinado, pero también ofrecen la • el elemento de diversión es fundamental,
posibilidad de superar con éxito las dificultades
que entraña la actividad, a veces más • nos permiten buscar nuevas sensaciones
atractiva cuanto más intrincada resulta. Es y experiencias,
está práctica, donde se combina la belleza de
la naturaleza, en un ambiente lúdico, y que • y permiten demostrar autoeficacia,
oculta una serie de dificultades que deben dadas las situaciones de desafío y reto personal
superarse para disfrutar de ella, parece la que afronta el que las practica.
razón por la que estos deportes están
obteniendo una excelente acogida, no solo
entre los jóvenes sin distinción de sexo, sino Paradigma de la experiencia de aventura
también entre los adultos que conservan, junto
con unas condiciones físicas aceptables, una Con el objetivo de explicar y predecir la
cierta dosis de espíritu de aventura. motivación y conducta de los practicantes de
actividades en la naturaleza, se han propuesto
Como señalan Martín y Palmi (1999), la distintos modelos teóricos, entre los que
definición de este tipo de actividades gira destaca el de Martin y Priest (1986). Estos
entorno a cuatro conceptos fundamentales: exponen su “Paradigma de la Experiencia de
Aventura”, definiendo el funcionamiento de este
• aventura: se trata de una actividad tipo de actividades en función de la interacción
con una importante carga de incertidumbre, de dos variables fundamentales:
tanto objetiva como subjetiva, y que suponen
un reto para el practicante, a) Riesgo: posibilidad de pérdida de algo
valioso
118
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Como puede verse en la Figura 1, los La literatura científica en esta área indica
motivos que llevan a las personas a participar claramente como los participantes en deportes
en deportes que implican riesgo son variados y de riesgo tienden a ser buscadores de
todos ellos de interés en el ámbito de la sensaciones más activos que aquellos
psicología del deporte. Las personas que los practicantes de deportes menos arriesgados y
practican soportan, en ocasiones, un cierto que implican menos tipos de experiencias.
nivel de dolor, en la que la anticipación Asimismo, encontramos que las propias
cognitiva o la flexibilización de la atención evaluaciones de los deportistas acerca del
parecen jugar un papel importante. Por lo riesgo, apoyan la sugerencia de que la
demás, ponen de manifiesto la necesidad de maximización del riesgo no es el objetivo de la
demostrar competencia como una variable realización de estas actividades. Así, los
clave en la motivación para la práctica de deportistas de elite en éstas actividades de
estos deportes. riesgo participan en aquellas que conllevan
119
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
solamente un riesgo percibido como de grado relacionado tanto con el deporte, incluso los
medio, valorando el riesgo objetivo de su investigadores han notado un nivel más bajo de
deporte como alto, pero no muy alto, y Neuroticismo con deportistas. No podemos
pensando que sus amigos les valoran como más olvidar que el estado de ansiedad, la energía y la
arriesgados de lo que realmente son (Breivik, competitividad puede variar marcadamente
1991). antes, durante y después de la competición
deportiva.
En otras investigaciones se han
establecido claras relaciones entre la práctica
de deporte de riesgo y determinadas variables La búsqueda de sensaciones como variable
psicológicas. En este sentido, Fletcher y Dowell motivacional mediadora en la práctica de
(1971) encontraron que los estudiantes que deportes de riesgo
cursaban el primer ciclo en la universidad y
tenían una historia de participación deportiva Las investigaciones nos indican que la
anterior, puntuaban más alto que los no variable psicológica de búsqueda de
deportistas en “dominancia” y “agresividad”, sensaciones, definida como “la necesidad de
mientras que las personas que no practicaban sensaciones y experiencias variadas, nuevas y
deporte puntuaban más alto en “necesidad de complejas y la voluntad de asumir riesgos
orden”, un factor asociado con una baja físicos y sociales con tal de satisfacer esta
búsqueda de sensaciones. Por otro lado, necesidad” (Zuckerman, 1979, pp. 10), se
Stoner y Bandy (1977) encontraron también relaciona significativamente con la tendencia a
diferencias en un colegio de mujeres: las no realizar actividades con riesgo, tanto físico como
practicantes de deporte puntuaban más alto psicosocial (práctica de deporte de riesgo,
en “necesidad de cambio” y más bajo en consumo de sustancias adictivas, implicación en
“deferencia”, un patrón que nos sugiere una conductas de riesgo sexual, realización de
alta búsqueda de sensaciones. conductas antisociales y/o delictivas,...).
120
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
121
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Rowland y cols. (1986) encontraron que Svebak y Kerr (1989) clasific aron los
los deportistas que normalmente practicaban deportes como “de resistencia” (que requieren
deportes de riesgo como escalada, esquí y fuerza y actividad persistente) y “explosivos”
paracaidismo, estaban por encima de la media (que requieren concentración y actividad intensa
en búsqueda de sensaciones. Pero a éstos durante períodos relativamente cortos de
también les atraían algunos deportes tiempo). El cricket, el fútbol, el hockey, el
considerados de bajo riesgo como los juegos de béisbol y el surfing, son ejemplos de deportes
agua, el billar, el tiro al blanco y el baile explosivos, mientras que las carreras de larga
moderno, posiblemente por su relación con el distancia o el remo son de resistencia. En el
disfrute. estudio compararon corredores de larga
distancia con jugadores de hockey sobre hierba,
Barratt y Patton (1983) empleando empleando la escala Barrat de Impulsividad y la
personas que realizaban deportes de riesgo, y Escala de Dominancia Télica (TDS). Los
otras que no, correlacionaron el factor de corredores de larga distancia estaban más
impulsividad y las variables de Evitación de la orientados a la planificación y evitaban más el
Activación, Planificación y Seriedad, medidos arousal que los jugadores de hockey y los
por la Escala de Dominancia Télica (TDS, tenistas. Estos resultados son consistentes con
Murgatroyd y col, 1978). Recordemos que el otros datos que muestran que los corredores de
estado télico es aquel en que la persona se larga distancia suelen ser bajos buscadores de
orienta hacia un objetivo final y en todo lo sensaciones (McCutcheon, 1981) y más
relacionado con lograrlo; el estado opuesto, el introvertidos (Eysenck y cols, 1982).
paratélico, se centraría en el disfrute de
122
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
123
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
124
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
En conjunto, los datos parecen indicar negativa significativa entre esta subescala y el
que las personas que se dedican grado de ansiedad ante la práctica deportiva.
profesionalmente al esquí parecen ser, en
general, mayores buscadores de sensaciones, Los resultados obtenidos con deportistas
mientras que si la experiencia y la práctica son de elite, junto con la gran cantidad de literatura
menores las diferencias solo aparecen en científica relacionada con la materia, muestra
alguna de las subescalas de la SSS. como los participantes en deportes de riesgo
tienden a ser mayores buscadores de
Otros deportes de alto riesgo sensaciones que los practicantes de deportes
menos arriesgados y que implican menos tipos de
Straub (1982) comparó grupos de vuelo experiencias. La diferencia en la puntuación total
sin motor, automovilistas y jugadores de se produce principalmente debido a las altas
pelota. Dos tercios de los practicantes de puntuaciones en las subescalas TAS y ES. Las
vuelo sin motor y la mitad de los automovilistas puntuaciones altas en las escalas Dis y BS
consideraban su deporte como una actividad podemos encontrarlas en otros grupos, con una
de alto riesgo, mientras que ninguno de los búsqueda de sensaciones menos socializada. La
jugadores de pelota consideraba su actividad escala TAS representa el elemento de toma de
como arriesgada. Los tres grupos diferían riesgo físico, mientras que la ES sugiere la
significativamente en las escala Total, recompensa obtenida por nuevas sensaciones y
Búsqueda de Aventuras y Emociones (TAS), experiencias que proporcionan las actividades de
Búsqueda de experiencias (ES) y riesgo.
Susceptibilidad al aburrimiento (BS). Los grupos
de practicantes de deporte de riesgo En el extremo más alto de la escala SSS
puntuaron más alto en todas las escalas en encontramos esquiadores y buceadores y en el
relación con los jugadores de pelota. Los otro extremo a mujeres que practican aeróbic de
practicantes de vuelo sin motor puntuaron más forma regular (Babbitt y cols., 1990). Las
alto en las escalas TAS y ES, mientras que los motivaciones principales que arguyen se centran
automovilistas lo hicieron en las escalas Dis y en la salud, la apariencia física y el control del
BS, las escalas más antisociales de la SSS. peso. La constancia y la regularidad parecen ser
características en personas con baja búsqueda
Otro estudio comparó a buceadores de sensaciones. Los altos buscadores de
novatos, con las puntuaciones normalizadas sensaciones algunas veces intentan este tipo de
para la población general de la escala SSS actividades, pero raramente persisten en su
(Heyman y Rose, 1979). Las buceadoras práctica.
puntuaron más alto que las mujeres de la
población general en la SSS, pero la diferencia Las propias evaluaciones de los
en hombres no fue significativa, aunque por deportistas acerca del riesgo, apoyan la
poco (p < 0.10). Los hombres puntuaron más sugerencia de que la maximización del riesgo no
alto que las mujeres en la SSS, pero las es el objetivo de estas actividades. En una
buceadoras puntuaban un poco más alto en las escala de riesgo Breivik (1991), los deportistas
subescalas que los hombres. Este podría ser un de elite en actividades de riesgo dijeron que
ejemplo de un fenómeno observado en otras ellos participan en actividades que conlleven
conductas: en una actividad donde la mayoría solamente un riesgo que ellos percibían como de
de participantes voluntarios son hombres, la grado medio, siendo esta valoración sólo
mujeres que participan puntúan mucho más ligeramente superior a otros grupos, por ejemplo,
alto en los rasgos relevantes, y las diferencias los militares. Valoran el riesgo objetivo de su
son más amplias que las encontradas entre deporte como alto, pero no “muy alto”. Piensan
buceadores varones y varones de la población que sus amigos les valoran como más
general. arriesgados de lo que realmente son. Aunque
están por encima del promedio en situaciones de
Campbell y cols. (1993) compararon la riesgo en competición están a la par en riesgo
búsqueda de sensaciones en practicantes de financiero, comparado con los militares. Los
rafting (bajada en canoa por aguas bravas) y deportistas de alto rendimiento estaban en su
piragüistas, mediante la SSS-V. Los resultados gran mayoría cerca de los treinta, tenían una
mostraron como los piragüistas de ambos sexos educación superior y sus padres casi siempre
puntuaban significativamente más alto en la realizaban trabajos que requerían un riesgo físico
subescala TAS, así como una correlación o social, mientras que sus madres tenían
trabajos con bajo nivel de riesgo.
125
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
126
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Potgieter, J. y Bisschoff, F. (1990). Sensation Straub, W.F. (1982). Sensation seeking among
seeking among medium and low-risk high and low-risk male athletes. Journal of
participants. Perceptual and Motor Skills, Sport Psychology, 4, 246-253.
71, 1203-1206. Wagner, A.M. y Houlihan, D.D. (1994). Sensation
Rowland, G.L., Franken, R.E. y Harrison, K. seeking and trait anxiety in hang-glider
(1986). Sensation seeking and pilots and golfers. Journal of Personality
participation in sporting activities. Journal and Individual Differences, 16(6), 975-977.
of Sport Psychology, 8, 212-220. Zaleski, Z. (1984). Sensation-seeking and risk
Sánchez, M.C. (1998). La búsqueda de taking behavior. Journal of Personality and
sensaciones como variable motivacional Individual Differences, 5, 607-608.
mediadora en las conductas de riesgo. Zuckerman, M. (1979). Sensation seeking:
Tesis Doctoral. Universidad de Valencia. Beyond the optimal level of arousal. EEUU:
Schiendel, J. (1964). Psychological differences LEA Editions.
between athletes and nonparticipats in Zuckerman, M. (1983). Sensation seeking: The
athletics at three educational levels. initial motive for drug abuse. In E. Gotheil,
Research Quarterly, 36, 52-67. K.A. Druley, T.E. Skoloda y H.M. Waxman
Stoner, S. y Bandy, M.A. (1977). Personality (Eds.): Etiological aspects of alcohol and
traits of females who participate in drug abuse (pp. 202-220). Spingfield, Il:
intercollegiate competition and Thomas.
nonparticipants. Perceptual and Motor
Skills, 45, 332-334.
127
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 26
Psicología, arbitraje y juicio deportivo
Gonzalo Marrero Rodríguez
José Martín Albo Lucas
Juan Luis Núñez Alonso
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria
128
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
La psicología del deporte ha ido ofuscarán mientras que los seguidores del otro
evolucionado de forma vertiginosa desde que equipo aplaudirán. Tampoco podemos olvidar que
Martens (1979) abogara por quitarse las batas una decisión arbitral puede ser decisiva a la hora
blancas y sustituirlas por chándales. También de determinar que un club deportivo ingrese o
es cierto que el ámbito de aplicación de deje de ingresar sumas monetarias que pueden
nuestra disciplina se ha ido haciendo más llegar a cientos o miles de millones de pesetas.
complejo en sus contenidos, planteamientos y Sin entrar en otro tipo de costes para la propia
análisis como se recoge en el presente libro. vida personal y social del árbitro (amistades,
Contenidos como la performance, el familiares, relaciones laborales, etc.), es mucha
rendimiento, la motivación, el grupo deportivo, la responsabilidad para permitir que esta tarea
el aprendizaje motor, la personalidad o la se pueda ejercer sin la preparación adecuada.
metodología son temas comunes en los
manuales actuales sobre psicología del Antes de entrar en qué aspectos pueden
deporte. Pero, el análisis del arbitraje o el juicio ser abordados desde la psicología del deporte,
deportivo es un área débil en la investigación debemos intentar definir el arbitraje y el juicio
deportiva en general y en la psicología del deportivo. La comprensión de su labor nos
deporte en particular. permitirá estructurar el trabajo psicológico que,
como toda actuación psicológica, puede
El árbitro y el juez deportivo son los realizarse desde tres funciones básicas:
grandes olvidados de la psicología del deporte selección, formación e intervención.
aunque en los últimos años se les considere
como la tercera dimensión del deporte. Somos
conscientes que la determinación, modificación Arbitraje y juicio deportivo
y aplicación de las reglas de juego es una de
las características relevantes de cualquier Cada disciplina implica unas
deporte y no podemos imaginarnos una características propias que la diferencian de
competición deportiva sin jueces o árbitros que cualquier otra. En este sentido, el arbitraje o
determinasen quién ha ejecutado mejor el juicio deportivo estará en función de la disciplina
ejercicio o aplicaran las reglas al desarrollo del o modalidad deportiva de que se trate. Así, el
juego. Instituto Nacional del Deporte de Portugal
clasifica el arbitraje según diez criterios.
Los medios de comunicación también
ayudan a la hora de entender la importancia de 1. El grado de participación en el juego.
los árbitros y jueces deportivos. Las decisiones Mientras que en el fútbol o baloncesto la
arbitrales, especialmente en algunos deportes, participación es máxima pues el árbitro puede
son analizadas una y otra vez ante millones de decidir la próxima jugada (una falta directa,
espectadores. No es raro que los periodistas, un tiro libre, un saque de banda, etc.) en
una semana antes del partido, empiecen a gimnasia rítmica el grado de participación es
comentar si el árbitro que va a pitar tal mínimo ya que en ningún momento la acción
encuentro es favorable o no al equipo de casa de los jueces interfiere, indica o
o es demasiado estricto o es el mejor o peor complementa el ejercicio.
que le podía haber tocado. Es cierto que esto
pasa sólo en determinados deportes 2. La naturaleza del juego. Existen deportes
mayoritarios como el fútbol, baloncesto, donde su propia realidad involucra actitudes
balonmano, voleibol, etc.; sin embargo, no deja y comportamientos de jugadores,
de ser relevante puesto que son deportes que entrenadores, federativos, espectadores,
involucran un mayor número de participantes y, árbitros auxiliares, etc. de manera que la
por tanto, de árbitros. A modo de ejemplo, comunicación, además del reglamento, se
valgan los miles de partidos de fútbol que se convierte en una herramienta esencial. Por
arbitran cada fin de semana. ejemplo, la comunicación en fútbol sala o
baloncesto es muy importante; sin embargo,
Las decisiones arbitrales son, en un juez de salto de longitud en atletismo no
ocasiones, tan relevantes en el acontecimiento requiere de este aspecto en una medida
deportivo que pueden generar reacciones tan apreciable.
extremas como el aplauso o el rechazo, aunque
casi siempre se pueden encontrar las dos 3. El margen de subjetividad. La apreciación e
cosas sea cual sea la decisión del árbitro o interpretación de la regla es, en algunos
juez: los seguidores del equipo sancionado se deportes, parte esencial de la labor arbitral.
129
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
130
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
3. Como director deportivo vela por un Son características comunes a los jueces
desarrollo limpio del juego, constituyéndose que no intervienen durante la ejecución de la
en un verdadero educador imparcial y actividad y sólo observan lo que sucede; no
garante de la competición propiciando, tienen potestad para detener o finalizar la
desde su competencia y cualificación, el actividad, lo que sí pueden llevar a cabo lo
espíritu deportivo. árbitros; y tampoco pueden comunicarse con los
deportistas, con lo cual la interacción
4. Desde la alteridad se divisa como un gran participante-juez durante la competición
maestro de ceremonias, como el artista que deportiva es inexistente. Normalmente el juez se
mediante su silbato regula y controla las sitúa fuera del terreno de juego donde los
diversas facetas del juego. deportistas actúan, mientras que los árbitros se
sitúan en el mismo espacio que los
Entiende que “el árbitro es el contendientes.
representante legal del juego que mediante una
evaluación de las acciones práxicas que se El juez posibilita la existencia de
generan en el transcurso de la actividad competición en determinadas actividades en las
deportiva, regula de modo responsable las cuales no existe oposición directa entre los
mismas, desde una alteridad ajustada al participantes y en las que el objetivo de las
evento” (Betancor, 1998, 79). mismas no es la consecución o logro de una
distancia, marca o diana, como ocurre en
Para Cabrera y otros (1998) el principal atletismo. En aquellas actividades en las cuales
cometido del juez es el de observar el ejercicio se debe valorar la ejecución de los deportistas,
realizado por el o los deportistas, evaluarlos y únicamente el juez se convierte en un elemento
decidir quién lo ha realizado mejor. Este juicio capital para el desarrollo de la propia actividad
es una evaluación personal, con la subjetividad como ocurre, por ejemplo, en gimnasia rítmica
que todo proceso evaluativo conlleva, pues deportiva.
cada juez aprecia la calidad de la acción del
deportista influido por sus connotaciones Después de repasar algunas nociones
personales. sobre árbitro, arbitraje, juez y juicio deportivo,
cabe preguntarse por las distintas concepciones
Dentro de los jueces podemos existentes sobre la figura del árbitro o juez. En
considerar dos categorías: este sentido, Navarro (1993) realiza una
tipología sobre la figura arbitral que implica ocho
1. Aquellos que aprecian la autoridad de los modelos diferentes:
deportistas complementando la actuación
de un árbitro que actúa dentro del terreno • Permisivo: árbitro que bajo su responsabilidad
de juego. Esta labor también puede ser de faculta una gran tolerancia respecto a las
consulta para el árbitro que interactúa con actitudes y acciones de la práctica deportiva
los participantes. Ejemplos de este tipo de reglada.
juez lo encontramos en deportes como la
lucha, el boxeo, las artes marciales y, en • Didacta: árbitro que gusta de orientar y
general, en la mayor parte de los deportes dirigir la educación deportiva de los
de oposición. intervinientes en el transcurso de los
encuentros.
2. Los jueces que actúan en solitario en sus
apreciaciones pero con responsabilidad • Diplomático: árbitro astuto, hábil, sagaz, a la
compartida con otros miembros del mismo hora de solucionar conflictos y quedar bien
jurado a la hora de emitir la puntuación con las partes.
como ocurre en la gimnasia, salto de
trampolín, patinaje artístico, etc. • Inseguro: árbitro que por diversas razones no
tiene fe en sí mismo, de baja autoestima,
Como primera característica común a con múltiples dudas a la hora de tomar
ambas categorías de jueces podemos señalar decisiones sobre las situaciones que lo
que su actuación siempre es a posteriori, una requieran.
vez finalizada la actividad, lo cual condiciona
su actuación, ya que sólo pueden juzgar lo que • Pícaro-camaleón: árbitro que comete
se ha realizado y no reconducir la actuación de engaños en provecho propio con habilidad y
los deportistas como sucede con los árbitros. destreza, cambiando con facilidad criterios
131
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
132
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
133
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
134
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Asimismo, nos parecen importantes las Según Riera (1985) las principales
estrategias relacionadas con la comunicación y estrategias de recogida de información
el desarrollo de las habilidades asertivas que psicológica sobre el juicio y arbitraje deportivo
son un buen recurso para mejorar la son el estudio del reglamento; los cuestionarios
comunicación entre el árbitro y el jugador o y entrevistas a jueces y árbitros y la
entrenador. En este aspecto, Cruz (1997) observación de los jueces y árbitros en la
recoge los siguientes elementos: competición deportiva.
135
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
los árbitros de algunos deportes. Ittenbach y perfil psicológico del árbitro en tres modalidades
Eller encontraron en 1988 que los árbitros de deportivas diferentes como son la gimnasia
fútbol americano, con una edad y experiencia rítmica, el fútbol y el baloncesto.
media de 46,4 y 13, 6 años respectivamente,
mostraban unas cualidades de liderazgo bien En 1998, Cabrera, Ruiz y Marrero
desarrolladas, poseían una gran seguridad en sí elaboraron el perfil general de las jueces de
mismos, además de autoconfianza, energía, gimnasia rítmica a partir de una muestra de 103
espontaneidad y adherencia a las normas sujetos pertenecientes a nueve comités de
sociales. categorías nacional e internacional, con un 50%
del total entre 31 y 40 años de edad y un 60%
A continuación prestaremos especial con más de 10 años de práctica deportiva como
atención a tres estudios realizados se muestra en las siguientes tablas.
recientemente y que aportan datos acerca del
1 España 40 38.8
2 Bulgaria 12 11.7
3 Hungría 5 4.9
4 Francia 8 7.8
5 Holanda 5 4.9
6 Rusia 9 8.7
7 Italia 6 5.8
8 Alemania 8 7.8
9 Portugal 10 9.7
Nacional 26 25.7
Internacional 75 74.3
136
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
25-30 15 15.6
31-40 48 50.0
41-50 25 26.0
Más de 50 8 8.3
01-05 16 16.8
06-10 22 23.2
Más de 10 57 60.0
137
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
ciones que impulsan a los árbitros a esta difícil más del 50% tenía tres o menos años de
tarea. La población de árbitros en activo se práctica arbitral como podemos apreciar en las
desglosó por Comités Técnicos y se recogieron siguientes tablas.
datos de 1470 árbitros de 17 comités, donde
13-15 86 5.9
16-18 51 3.5
19-... 39 2.7
Navarra 23 1.6
Aragón 88 6.0
Madrid 59 4.0
Álava 46 3.1
Baleares 64 4.4
Asturias 85 5.9
138
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
La Rioja 18 1.2
Extremadura 46 3.1
Valencia 11 0.7
139
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Betancor (1998) presenta un estudio en el que inicio, mantenimiento y abandono del árbitro de
trata de descubrir, por un lado, las baloncesto. Para ello, utilizó una muestra de
características psicológicas necesarias para el árbitros de distintas categorías y de países de
arbitraje en baloncesto así como los los cinco continentes como se aprecia en la
comportamientos de los árbitros en su labor siguiente tabla.
arbitral y, por otro, los principales motivos de
CATEGORÍA SUJETOS
INTERNACIONALES FIBA 99
NBA 24
ACB 25
EBA 42
2ª DIVISIÓN 74
PROVINCIAL/AUTONÓMICO 279
NCAA 46
140
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
1. Interviene verbalmente.
2. Informa con gestos.
3. Se mueve rápidamente y observa el juego.
4. Observa el juego.
5. Espera.
6. Otras conductas.
7. Conductas no codificables por no haberlas visto u oído.
141
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
1. Anima o comenta.
2. Discute.
3. Pide información.
4. Señala una falta.
5. Confirma o anula un gol.
6. Para el juego.
7. Controla los cambios de jugadores.
8. Otras.
1. Jugadores.
2. Entrenadores.
3. Jueces de línea.
4. Árbitro auxiliar.
5. Espectadores.
6. Todos los individuos asistentes.
7. No se dirige a nadie.
142
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
respecto, las técnicas psicológicas deben MARTENS, R. (1979). About smocks and jocks.
adaptarse al individuo teniendo en cuenta las Journal of Sport Psychology, 1, 94-99.
dificultades por las que demanda esa ayuda.
También podemos encontrar problemáticas MARTENS, R. (1991). Coaches Guide to Sport
grupales que soliciten técnicas específicas de Psychology. Champaign, Illinois: Human
dinámica grupal. En cualquier caso, estaríamos Kinetics Publishers, Inc.
ante una intervención concreta, ante personas
y problemáticas que deben ser afrontadas. MARTÍN-ALBO, J. (1998). Análisis de las
motivaciones de inicio, mantenimiento,
Bibliografía cambio y abandono en los deportes
de equipo: un programa piloto de
ANSHEL, M.H. (1995). Development of intervención. Tesis doctoral.
a rating scale for determining competence in Universidad de Las Palmas de Gran
basketball referees: implications for sport canaria.
psychology. The Sport Psychologist, 9, 4-28.
NAVARRO, F. (1993). Una aproximación a los
ARESU, M.; BUCARELLI, A. y modelos arbitrales desde la perspectiva
MARONGIU, P. (1979). A preliminary de los aficionados y deportistas.
investigation of the authoritarian tendencies Comunicación presentada en el IV
in a group of sport referees. International Congreso Nacional de Psicología de
Journal of Sport Psychology, 10, 42-51. la Actividad Física y el Deporte, Sevilla.
BETANCOR, M.A. (1998). Bases para la NÚÑEZ, J.L. (1998). Personalidad y motivación
formación del árbitro de baloncesto. Tesis del jugador de tenis. Tesis doctoral.
doctoral. Universidad de Las Palmas de Universidad de Las Palmas de Gran
Gran Canaria. Canaria.
143
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 27
Actividad física y estilos de vida
Isabel Balaguer
Yolanda Pastor
Universitat de València
144
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
145
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
146
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
VARIABLES
A B C D E F G H I J K L M N
Nº 6 6 6 6 1 5 4 3 0 4 6 2 1 8
% 10. 10. 10. 10. 1.7 8.6 6.8 5.1 0 6.8 10. 3.4 1.7 13.7
35 35 35 35 2 2 9 7 9 35 5 2 9
Muestras de adultos
VARIABLES
A B C D E F G H I J K L M N
Nº 15 14 13 12 1 4 5 5 6 1 2 3 2 5
% 17.0 15.9 14.7 13.6 1.1 4.5 5.6 5.6 6.8 1.1 2.2 3.4 2.2 5.68
4 0 7 3 4 4 8 8 2 4 7 1 7
Muestras de tercera edad
VARIABLES
A B C D E F G H I J K L M N
Nº 3 3 2 3 0 2 2 1 1 0 0 0 0 2
% 15.8 15.8 10.5 15.8 0 10.5 10.5 5.2 5.2 0 0 0 0 10.5
0 0 2 0 2 2 6 6 2
Algo similar ocurre con las variables: jóvenes son: el consumo de drogas no
consumo de medicamentos, hábitos de legalizadas y la conducta sexual. Ambas se
descanso y accidentes y/o conductas de introducen en los estudios sobre adolescentes y
prevención. Estas variables se introducen en jóvenes adultos (Pastor et al., 1998a).
los estudios con muestras de todas las edades
(Pastor et al., 1998a) (véase tabla 2). Una variable que se introduce en mayor
medida en los estudios de adultos y tercera
No obstante, otras variables de estilo edad son los chequeos médicos, como medida
de vida presentan un interés diferencial para preventiva para la salud. En los estudios de
los investigadores en función del grupo de edad niños y adolescentes, sólo se consideran las
estudiado. Así por ejemplo, el estudio del revisiones dentales. Por último, cabe considerar
tiempo libre es una variable típica de los que la apariencia y los hábitos de aseo, aunque
trabajos sobre niños y adolescentes (6.83% de con poca frecuencia, se han estudiado con niños
las variables introducidas) que sin embargo no y adultos pero no en la tercera edad (véase
es analizada ni en las muestras de adultos ni tabla 2).
en las de tercera edad (véase tabla 2). Otras
variables que aparecen vinculadas a los
147
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
148
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
consumir drogas. A esta edad también tradiciones investigadoras que difieren, entre
aprenden a conducir y a menudo combinan otras cosas, en el número de dimensiones que
esta nueva habilidad con el consumo de alcohol proponen: la unidimensionalidad (aquellos
o de otras drogas (Dougherty, 1993; Sarafino, trabajos que basándose en la Teoría de la
1994). Estas conductas constituyen un riesgo Conducta Problema estudian como las distintas
para la salud tanto a corto como a largo plazo conductas de riesgo para la salud y otros
(Jessor, 1984). Así por ejemplo, algunos comportamientos problemáticos se agrupan en
estudios actuales informan que las mujeres que una sola dime nsión denominada “síndrome de
comienzan a fumar durante la etapa conductas problema”), la bidimensionalidad
adolescente, tienden a consumir medicamentos (aquellos otros que además de las conductas de
de forma regular con mucha más frecuencia en riesgo introducen las conductas que realzan la
la vida adulta que aquellas que no fumaron salud encontrando la existencia de dos
durante la adolescencia. Además, tanto para dimensiones: estilo de vida de riesgo para la
hombres como para mujeres, el hecho de no salud y estilo de vida promotor de la salud) y la
haber fumado durante la adolescencia, es un multidimensionalidad (los estudios que también
buen predictor de la ausencia de problemas introducen ambos tipos de conductas pero
psicosomáticos durante la vida adulta encuentran múltiples dimensiones), (véase
(migrañas, reacciones alérgicas, asma, dolores Pastor et al., 1998b).
de cabeza, alteraciones del sueño, mareos,
etc.). Respecto al consumo de alcohol, Existen tres tradiciones investigadoras
aquellos adolescentes varones que tenían un sobre las dimensiones del estilo de vida saludable
consumo abusivo de alcohol presentan mayores en la adolescencia que fundamentalmente
problemas de salud e intervenciones quirúrgicas difieren en el número de dimensiones que
en la vida adulta, debido a un incremento en el sugieren: la unidimensionalidad, la
riesgo de padecer accidentes. En el caso de bidimensionalidad y la multidimensionalidad.
las mujeres, el uso abusivo del alcohol durante
la adolescencia parece estar relacionado con el En varios trabajos realizados con
consumo regular de medicamentos en la vida adolescentes valencianos, se replica la
adulta (Pulkkinen, 1990). estructura factorial de dos dimensiones hallada
en la literatura (Aaro, Laberg, & Wold, 1995;
Asimismo, durante la adolescencia, los Nutbeam, Aaro, & Catford, 1989; Nutbeam,
jóvenes deben afrontar muchas tentaciones y Aaro, & Wold, 1991), aunque aparecen algunas
fuerzas que les conducen a un estilo de vida discrepancias con los trabajos europeos de esta
de riesgo, ejemplo de ello son las presiones de tradición. Mientras que en los trabajos europeos
los pares (Jessor, 1984). A pesar de los las dos dimensiones son: 1) estilo de vida de
esfuerzos en la promoción de la salud, los riesgo para la salud (compuesta por el consumo
adolescentes poseen poca información de los de tabaco, alcohol, café, alimentación insana y
beneficios de otro tipo de comportamientos conductas de búsqueda de riesgo) y 2) estilo de
que pueden moderar el efecto pernicioso de vida promotor de la salud (compuesta por
estas conductas, como por ejemplo la práctica alimentación sana, higiene dental, actividad
de ejercicio, la alimentación equilibrada, la física, regularidad en la alimentación, conductas
higiene dental y los hábitos de descanso entre de protección o seguridad vial y consumo de
otros (Jessor, 1984). Dado que cada vez existe vitaminas); en nuestro caso, los dos factores
más información sobre la adquisición de hallados son el consumo de sustancias y la
patrones de conductas y no sólo de conductas actividad física (véase tabla 3). El primer factor
aisladas, varios investigadores han estudiado recoge el consumo de tabaco, de alcohol y de
las dimensiones de estilo de vida saludable en café y en el segundo factor todos los ítems
la edad adolescente. hacen referencia a aspectos relacionados con la
práctica de ejercicio y de actividad física
En lo que a estas dimensiones se (Balaguer, Castillo, Tomás, & Duda, 1997;
refiere, podemos hablar de la existencia de tres Castillo, Balaguer, Pastor, & Atienza, 1997).
149
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Como conclusión general de la hace ya varios años en los países del norte de
investigación sobre este área, cabría resaltar Europa, de donde proceden estos trabajos (Aaro
que el número de dimensiones obtenidas et al., 1995).
depende de múltiples factores, como pueden
ser el tipo de variables consideradas, la Aunque los autores no se pongan de
metodología empleada y los factores culturales acuerdo en el número de dimensiones existentes
y educativos (Pastor et al., 1998b). Respecto en la adolescencia, de todos estos estudios
a estos últimos factores, algunos autores podemos extraer las características de las
consideran que las dos dimensiones relaciones que se establecen entre las distintas
encontradas en los estudios de la tradición conductas que componen el estilo de vida en la
bidimensional son un producto de los programas etapa adolescente. Con respecto a las
de educación para la salud implantados desde conductas de riesgo para la salud, son muchos
150
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
los estudios que muestran una fuerte relación promotor de la salud hallado en la tradición
entre el consumo de tabaco, el consumo de bidimensional (Aaro et al., 1995; Nutbeam et al.,
alcohol y el consumo de drogas ilegales en la 1989, 1991; Thuen et al., 1992), indicando que
edad adolescente. De hecho, estas tres la práctica de deporte o de actividad física se
conductas suelen saturar juntas en un factor relaciona positivamente con otras conductas
en los trabajos realizados desde las distintas saludables, como la alimentación sana o la
tradiciones investigadoras. Este resultado se higiene dental. En los estudios realizados en la
replica con muestras de distintos países, con lo Comunidad Valenciana, las variables de deporte
que parece ser independiente de la cultura. Las o de actividad física conforman un factor que
relaciones con otras conductas de riesgo para aparece negativamente relacionado con el de
la salud, como por ejemplo la alimentación consumo de sustancias (tabaco, alcohol,
insana o el uso del cinturón de seguridad, son Cannabis) (Balaguer et al., 1997a; Castillo et al.,
débiles en general, aunque son algo más 1997; Pastor, 1999) y positivamente relacionado
fuertes en los países del norte de Europa. con el factor de alimentación sana (Pastor,
1999). Desde la tradición multidimensional,
Acerca de las conductas promotoras de también el sedentarismo aparece positivamente
la salud, se ha visto que la relación entre las asociado a la alimentación insana (Terre,
mismas es más débil y se halla más influida por Drabman, & Meydrech, 1990). En el apartado
factores culturales. En varios estudios siguiente examinaremos con mayor profundidad
realizados con muestras procedentes de los las relaciones que la práctica de actividades
Países Nórdicos, estas conductas saturan físicas guarda con otras conductas que
juntas en un factor (Aaro et al., 1995; componen el estilo de vida.
Nutbeam et al., 1989, 1991; Thuen et al.,
1992). Como apuntábamos más arriba, los
investigadores han sugerido que esta relación Relaciones entre la actividad física y
puede ser un producto de los programas de las otras conductas de salud
promoción de la salud que durante dos décadas
han sido llevados a cabo en estos países (Aaro El análisis de las relaciones que aparecen
et al., 1995; Nutbeam et al., 1991) y que por entre la actividad física y otras conductas de
consiguiente puede ser un efecto de la salud suele realizarse de dos modos: o bien a
modernidad (Aaro et al., 1995). partir de la correlación de Pearson o bien a partir
de análisis de varianza.]
Datos correlacionales de nuestro país
confirman que las conductas de riesgo para la En sus inicios, el estudio de estas
salud aparecen positivamente relacionadas relaciones se realizó con análisis correlacionales
entre sí y que las conductas promotoras de la y con muestras de adultos, tal y como se
salud se asocian positivamente entre sí, siendo informa en una revisión ya clásica sobre este
estas relaciones más altas para las conductas tema (Blair et al., 1985). Los resultados con
de riesgo (Balaguer, 1999; García-Merita & adultos indican que la actividad física se asocia
Fuentes, 1998). positivamente con el control de peso y
negativamente con el consumo de tabaco (Blair
Tampoco ha aparecido en los estudios et al., 1985).
sobre la dimensionalidad una relación negativa
clara entre los factores de las conductas de Posteriormente este área de estudio se
riesgo y los de las conductas promotoras de la introdujo en adolescentes. Los estudios
salud. Sólo en el estudio de Aaro y correlacionales realizados al respecto muestran
colaboradores (1995) la relación entre ambos que la actividad física se relaciona
factores adopta un valor de -.50. Lo que de negativamente con el consumo de tabaco y de
nuevo nos lleva a pensar en la influencia cannabis y con el nº de horas de ver la TV y
cultural. En países con menos tradición en positivamente con el consumo de frutas y
educación para la salud, los adolescentes verduras, con el uso del cinturón de seguridad y
pueden tener comportamientos relacionados con la higiene dental (Pate, Heath, Dowda &
con la salud más incoherentes. Trost, 1996; Wold, 1989). En varios estudios
realizados con adolescentes valencianos, la
Respecto al lugar que ocupan el deporte actividad física aparece negativamente asociada
o la actividad física en estas dimensiones de al consumo de tabaco, de alcohol y de cannabis
estilo de vida, cabe señalar que estas variables y positivamente a la higiene dental y al consumo
forman parte del factor de estilo de vida de frutas y verduras (Balaguer, Pastor & Moreno,
151
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
1999; Balaguer, 1999; Castillo, 1995; Castillo, Los métodos de evaluación por excelencia
Fuentes, Pastor & Tomás, 1996). Cabe resaltar del estilo de vida son dos: la entrevista
que los resultados obtenidos en los estudios estructurada y el cuestionario.]
correlacionales tanto con adolescentes como
con adultos eran más bien modestos a finales Los cuestionarios más utilizados pueden
de los 80 (Wold, 1989) y siguen siéndolo tras ser clasificados en tres grupos en función de la
una década de investigación. edad de las personas a las que van dirigidos:
cuestionarios para niños y adolescentes,
Por su parte, los estudios que utilizan el cuestionarios para adultos y cuestionarios para
análisis de varianza permiten conocer mejor personas mayores.
estas relaciones ofreciendo a su vez una
información más rica. Varios estudios realizados Entre los cuestionarios más conocidos
con adolescentes valencianos muestran que que valoran los estilos de vida saludables de los
aquellos que no practican deporte o actividad niños y adolescentes encontramos: el
física consumen tabaco y alcohol con mayor Cuestionario de Conductas de Salud en
frecuencia; y se lavan los dientes y desayunan Escolares (The health behaviour in
con menor frecuencia que los adolescentes schoolchildren: A WHO cross-national survey;
físicamente activos (Balaguer et al., 1997a; Wold, 1989; 1995) y la Escala de Autoconcepto
Balaguer et al., 1998). de la Salud para niños (Child's Health Self-
Concept Scale: CHSCS; Hester, 1984).
Como ya hemos comentado
anteriormente, apenas existe información El Cuestionario de Conductas de Salud en
respecto a la tercera edad. En un estudio Escolares fue diseñado por la oficina regional
correlacional, las personas más activas cuidan europea de la OMS para la puesta en marcha de
más su alimentación y se someten en mayor un proyecto internacional sobre estilos de vida
medida a chequeos médicos (Schwirian, saludables en la adolescencia (WHO, 1986a). Es
1991/92). el instrumento más empleado en Europa, aunque
también se está utilizando en otros continentes.
No sólo recoge las variables de estilo de vida,
Evaluación del estilo de vida sino que además incluye variables demográficas
y variables psicosociales relacionadas con la
Como se desprende del apartado de salud. Destaca por la diversidad de variables de
delimitación conceptual, la evaluación de los estilos de vida saludable que evalúa, entre ellas
estilos de vida saludables ha sido una cuestión encontramos: el consumo de alcohol, el consumo
difícil de abordar por los investigadores. Esto de tabaco, la práctica de actividades físicas, la
se debe en gran parte a la complejidad del alimentación, la higiene dental, el consumo de
término, a la confluencia de definiciones drogas, los hábitos de descanso, el consumo de
diversas y poco concordantes sobre el mismo y medicamentos, las conductas de riesgo de
a las múltiples variables que lo conforman. accidente y la conducta sexual (Wold, 1995).
Este cuestionario ha sido traducido al castellano
Los métodos de evaluación por por la Unidad de Investigación de Psicología del
excelencia del estilo de vida son dos: la Deporte de la Universitat de València (Balaguer,
entrevista estructurada y el cuestionario. En 1999; García-Merita & Fuentes, 1998) y por
este área de estudio, la entrevista adopta un Mendoza y colaboradores (1994).
grado de estructuración muy alto. Este hecho
mejora el nivel de validez y fiabilidad que La Escala de Autoconcepto de la Salud
habitualmente posee este método. El modo de para niños (CHCS) fue construida por Susan
administración de la entrevista suele ser o bien Hester (1984) para valorar las percepciones de
cara a cara, o bien por teléfono. No obstante, la salud y las conductas de salud de los niños.
el cuestionario es el procedimiento de Esta escala está diseñada para niños más
evaluación más empleado. Aun así, son más pequeños, de 6 años en adelante. Se centra
bien escasos los instrumentos de evaluación fundamentalmente en las variables de estilo de
estandarizados y validados, predominando los vida, aunque también recoge algunas variables
instrumentos diseñados ad hoc para una psicosociales relacionadas. Las variables de
investigación concreta (Pastor et al., 1998a). estilo de vida saludable que evalúa son la
alimentación, la higiene dental, los hábitos de
descanso, ejercicio y hábitos de aseo personal.
152
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
153
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Para entender como tiene lugar este segundo nivel del ambiente ecológico, el
proceso es necesario recurrir a las teorías mesosistema, comprende las interrelaciones de
clásicas de socialización. En este sentido, dos o má s entornos en los que la persona en
algunas de estas teorías ofrecen información desarrollo participa activamente. Por ejemplo,
sobre las estructuras sociales que envuelven a incluye las interrelaciones entre la familia y la
este proceso, mientras que otras sirven para escuela o la familia y el trabajo. El exosistema,
guiar y explicar el proceso de la socialización. tercer nivel, constituye el entorno más amplio
que no incluye a la persona en desarrollo como
Condiciones estructurales participante activo, pero en él se producen
de la socialización hechos que o bien afectan a lo que ocurre en el
entorno que comprende a la persona en
Una de las teorías clave que da cuenta desarrollo o bien se ven afectados por lo que
de las condiciones estructurales que rodean al ocurre en este entorno. En este nivel podemos
proceso de socialización es la Teoría Ecológica situar las instituciones sociales, como por
del Desarrollo de Bronfenbrenner (Bronfen- ejemplo: el sistema escolar, el sistema sanitario,
brenner, 1987). En este modelo, se concibe el el contexto laboral, etc. El macrosistema, último
ambiente ecológico como un conjunto de nivel del ambiente ecológico, se corresponde con
estructuras seriadas concéntricas (véase la cultura en la cual el individuo nace y se
Figura 1). En el nivel más cercano al individuo, desarrolla. Cabe resaltar que la socialización del
se encuentra el microsistema que es el entorno estilo de vida tiene lugar en un contexto cultural
inmediato en el que se sitúa la persona en que marcará las pautas de su desarrollo.
desarrollo. Es el conjunto de actividades, roles
y relaciones interpersonales que la persona en La Teoría Ecológica del Desarrollo de
desarrollo experimenta con su entorno. En la Bronfenbrenner (1987) concibe el ambiente
socialización del estilo de vida, algunos de los ecológico como un conjunto de estructuras
agentes socializadores de este nivel son la seriadas concéntric as, que son: microsistema,
familia, los pares, la escuela, los vecinos, el mesosistema, exosistema y macrosistema.]
trabajo y los medios de comunicación. El
MACROSISTEMA
Subcultura o cultura en su totalidad
EXOSISTEMA
Entorno más amplio sin relación directa con la persona
MESOSISTEMA
Interrelaciones entre entornos
MICROSISTEMA
Actividades, roles y relaciones
interpersonales que la persona
en desarrollo experimenta en un
entorno
154
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
155
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
para practicar deporte tienen lugar a través del principales influencias a resaltar de esta
proceso de socialización. institución. La primera de ellas forma parte del
currículo escolar, mientras que la segunda forma
Como hemos visto anteriormente, el parte del currículo oculto que la escuela
proceso de aprendizaje de roles sociales tiene transmite a los jóvenes (Hendry et al., 1993).
lugar dentro de una variedad de contextos,
cuya relevancia varía en función de la edad A pesar de que hemos enfatizado el papel
(Hendry Shucksmith, Love, & Glendinning, de los agentes de socialización, cabe resaltar
1993). Los principales agentes de socialización que las características individuales también
del estilo de vida en general y del deporte en poseen importancia en la socialización del
particular en la infancia y adolescencia son: la deporte y la actividad física, como por ejemplo
familia, el grupo de iguales y la escuela (Wold, las habilidades o la forma física. Siguiendo esta
1989). teoría diríamos que persona y ambiente
interaccionan en este proceso de socialización.
La familia constituye el primer contexto
en el que el niño puede observar e imitar la
actividad física y también aprender actitudes Modelos sociocognitivos que se utilizan
hacia la misma (Wold, 1989). Respecto al papel en la investigación de los estilos de vida
de la familia en la socialización de la actividad
física, cabe resaltar dos elementos que Además de estas teorías de la
aparecen directamente relacionados con la socialización, en la literatura sobre estilos de
atracción y evitación hacia la misma: la vida abundan diversos modelos que incorporando
disponibilidad de modelos en los que los distintas variables sociocognitivas tratan de
jóvenes pueden fijarse (por ejemplo, padres o predecir la conducta. Cabe resaltar que salvo
hermanos mayores) y el refuerzo recibido del alguna excepción estos modelos se aplican
contexto familiar para la práctica, como por fundamentalmente para el estudio de las
ejemplo las expectativas de los padres al conductas de salud aisladas, aunque
respecto, los ánimos para participar y el apoyo progresivamente se están incorporando al
recibido (Hendry et al., 1993). estudio de los estilos de vida saludables en su
globalidad.
El grupo de iguales también es un
agente de socialización importante para la De todos estos modelos, algunos de ellos
práctica de actividad física. De hecho, los surgen del área de la psicología social y se
adolescentes suelen practicar deporte o aplican al estudio de los estilos de vida, mientras
actividad física en mayor medida con los que otros surgen más bien de la psicología de la
amigos, comparado con otros grupos como la salud, y más concretamente de los campos de la
familia (Hendry et al., 1993). Diversos estudios prevención primaria y secundaria. Entre estos
han mostrado que aquellos adolescentes cuyo encontramos los modelos sociocognitivos puros
mejor amigo practica deporte a su vez que son la Teoría de la Acción Razonada, la
participan en actividades deportivas en mayor Teoría de la Acción Planificada y la Teoría de la
medida (Balaguer, Tomás, Pastor & Castillo, Autoeficacia, y los modelos más bien del área de
1995; Castillo, 1995; Wold & Anderssen, 1992). la salud que son el Locus de Control de la Salud,
Wold y Anderssen (1992) consideran que la el Modelo de Creencias de la Salud, el Modelo de
influencia del grupo de iguales puede realizarse Promoción de la Salud y la Teoría de la Conducta
de diversas maneras: 1) los jóvenes pueden Problema. Como bien hemos dicho anteriormente,
influirse mutuamente para iniciarse en el todos ellos tienen en común que incorporan
deporte 2) los jóvenes pueden hacer deporte variables sociocognitivas como determinantes
porque su mejor amigo ya lo realiza; y 3) se del estilo de vida.
hacen nuevos amigos que practican deporte.
Una de las teorías considerada como el
Por último, la escuela constituye una de enfoque más influyente que estudia la relación
las instituciones sociales de mayor relevancia actitud-conducta (Stahlberg & Frey, 1990) es la
que ha servido para comunicar a los jóvenes la Teoría de la Acción Razonada de Ajzen y
importancia que posee la actividad física para Fishbein (Fishbein, 1967; Ajzen y Fishbein,
la salud (Hendry et al., 1993; Wold, 1989). Los 1980). Ajzen y Fishbein (1980) asumen que el
programas de educación física implantados en determinante inmediato de la conducta es la
las escuelas y las actitudes de los profesores intención conductual de la persona de ejecutar
ante la actividad física constituyen las (o no ejecutar) esta conducta. La intención
156
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
conductual está determinada, a su vez, por la esperen que muestre la conducta pronosticada.
actitud hacia la conducta y por la norma También la norma subjetiva está determinada
subjetiva. La actitud por su parte es una por dos factores: las creencias normativas (lo
función de las creencias sobre si la conducta que los otros significativos esperan que haga la
considerada conduce a ciertos resultados, así persona) y la motivación para acomodarse a
como de la evaluación (el valor otorgado) de estas expectativas. Estos conceptos centrales
estos resultados. La norma subjetiva se define de la Teoría de la Acción Razonada y su
como el juicio que realiza la persona de la organización se muestran en la figura 2.
probabilidad de que los otros significativos
Importancia relativa de
las consideraciones Intención CONDUCTA
actitudinales y
Creencias de lo que las personas normativas
o grupos de referencia piensan
acerca de si debería ejecutar o
no la conducta
Norma subjetiva
157
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
158
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
AFECTOS Y
EXPERIENCIAS Y RESULTADO
COGNICIONES
CARACTERISTICAS ESPECIFICOS DE LA CONDUCTUAL
INDIVIDUALES CONDUCTA
BENEFICIOS
PERCIBIDOS DE
LA ACCION
BARRERAS
PERCIBIDAS DE LA DEMANDAS INMEDIATAS QUE
CONDUCTA COMPITEN
RELACIONADA ACCION
PREVIA (bajo control)
Y PREFERENCIAS
AUTOEFICACIA (alto control)
PERCIBIDA
FACTORES
PERSONALES AFECTO
RELACIONADO
Biológicos CON LA
Psicológicos ACTIVIDAD
Socio-culturales COMPROMISO CONDUCTA
CON UN PLAN DE PROMOTORA DE
ACCION LA SALUD
INFLUENCIAS
INTERPERSONALES
(Familia, Pares,
Cuidadores);
Normas, Apoyo,
Modelos
INFLUENCIAS
SITUACIONALES
Opciones Características de
la demanda Estética
159
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
160
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
161
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
ministro canadiense de salud y bienestar, Marc hay que promover y enfatizar, así como el papel
Lalonde quien en 1973, introdujo este término que ellos juegan y las estrategias a seguir para
en un documento denominado “Una nueva conseguir entre todos el objetivo perseguido,
perspectiva de la salud de los canadienses” esto es conseguir que los adolescentes
(MacDonald, 1998). La promoción de la salud adquieran estilos de vida saludables.
se diferencia de la educación para la salud en
que ésta última trata de cambiar Algunas recomendaciones a seguir en la
comportamientos concretos en una población promoción de los estilos de vida saludables
específica, sin embargo la promoción de la
salud es un planteamiento holista de Aunque la educación y la promoción de la
intervención. Si bien, la mayoría de los autores salud puede llevarse a cabo en grupos de todas
consideran la educación para la salud como las edades (niños, adolescentes, adultos,
parte de la promoción de la salud (Green, tercera edad), posee mucha más relevancia en
1984; MacDonald, 1998). la infancia y en la adolescencia. Esto es así
debido a que en estas edades se adquieren los
La promoción de la salud no designa hábitos de estilo de vida, que serán más difíciles
pues un área específica de intervención, sino de modificar en la vida adulta (Sinha, 1993).
que designa un movimiento hacia un estado
positivo de salud y bienestar. Se ocupa de las La promoción de los estilos de vida
personas y su bienestar desde la perspectiva saludables debe realizarse a partir del diseño de
de esas mismas personas (Raeburn, 1992). La programas adaptados a las características de la
salud es considerada como un constructo población objetivo (Sallis, 1993). Estos
positivo que implica personas con una programas deben ir orientados a modificar los
capacidad de participación. Como partici- determinantes más potentes de las distintas
pantes, las personas necesitan tener tanto conductas de salud. Si bien, algunos de estos
control como sea posible para alcanzar la salud determinantes son imposibles de modificar, como
y un estado de bienestar. Lejos de ser una por ejemplo, el género, las características
filosofía que trata de culpabilizar a la víctima, biológicas o el estatus socioeconómico. Los
la búsqueda de la salud y el bienestar desde determinantes psicológicos y conductuales son
esta perspectiva es una responsabilidad tanto los que más suelen introducirse en los
del individuo como de la sociedad en general. programas, sin embargo conviene remarcar que
De hecho, los componentes conductuales su influencia es más débil. En contraste, los
juegan un rol importante, pero también los determinantes ambientales son de los más
contextos ecológicos, económicos y sociales potentes y suelen ser dejados de lado en los
son especialmente relevantes (MacDonald, programas. Los cambios en estos determinantes
1998). son vitales para modificar los estilos de vida de
la población, cambios como por ejemplo alterar la
En resumen, la promoción de la salud es influencia de los medios de comunicación,
un ámbito de intervención multisectorial, restringir el acceso al consumo de productos
requiriendo una conceptualización de la salud perjudiciales para la salud y facilitar el acceso a
amplia y holista y un cuidado de la salud tanto programas de ejercicio (Sallis, 1993).
por sus consumidores como por sus Así pues, las estrategias de intervención útiles
proveedores. En un contexto amplio, la salud deben tratar de cubrir las siguientes
incluye consumidores de salud y profesionales recomendaciones:
autorizados y una nueva generación de
servicios de salud (Simard, 1992). Por 1. Conseguir que los entornos físicos y sociales
consiguiente, la principal función de la faciliten la actividad física en las personas.
promoción de la salud consiste en crear las 2. Que se redacten leyes consistentes con la
condiciones que promuevan la salud promoción de las conductas de salud.
ocasionando cambios en política local, nacional 3. Facilitar el acceso de productos saludables
e internacional (MacDonald, 1998). En (como los alimentos bajos en grasas) y restringir
definitiva, la promoción de la salud puede ser el acceso de productos insanos (como el tabaco
considerada como una responsabilidad moral. o los alimentos ricos en grasas y azúcares).
En este sentido cabe señalar que los 4. Que los mass media transmitan la importancia
educadores son los principales responsables de de un estilo de vida saludable (como por
la educación de los adolescentes y que por lo ejemplo, una dieta saludable y de estar
tanto su responsabilidad debería motivarles a físicamente activos), así como del peligro
estar informados de los aspectos de salud que
162
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
163
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
physical activity and other health health intervention. Social Science and
behaviors. Public Health Reports, 100 Medicine, 35 (4), 359-365.
(2), 172-180. Fishbein, M. (1967). Attitude and the prediction
Bronfenbrenner, U. (1987). La ecología del of behavior: results of a survey sample.
desarrollo humano. Barcelona: Paidós. En M. Fishbein (Ed.), Readings in attitude
Castillo, I. (1995). Socialización de los estilos and measurement. New York, Wiley.
de vida y de la actividad física: Un García-Merita, M.L., & Fuentes, I. (1998). Un
estudio piloto con jóvenes valencianos. estudio de los estilos de vida de los
Tesis de Licenciatura. Universitat de estudiantes valencianos de BUP, COU y
València, Facultad de Psicología. FP. Informe para un Proyecto de
Castillo, I., Balaguer, I., Pastor, Y., & Atienza, Investigación y Desarrollo Técnico de la
F.L. (1997). Un estudio de la estructura Generalitat Valenciana (GV94-2424).
factorial de los estilos de vida. VI Green, L., Kreuter, M.W., Deeds, S.G., &
Congreso Nacional de Psicología Social, Partridge, K.B. (1980). Health education
San Sebastián. planning. A diagnostic approach.
Castillo, I., Fuentes, I., Pastor, Y., & Tomás, I. California: Mayfield Publishing Company.
(1996). Ejercicio físico como Green, L.W. (1984). Health education models. In
determinante del consumo de tabaco y J.D. Matarazzo, S.M. Weiss, J.A. Herd,
alcohol. XIII Jornades de Psicologia de N.E. Miller, & S.M. Weiss (Eds.),
l’activitat física y de l’esport, Esplugues Behavioral health: A handbook of health
de Llobregat. enhancement and disease prevention
Chassin, L., Presson, C.C., & Sherman, S.J. (pp. 181-198). New York: Wiley.
(1987). Applications of social Harris, D.M., & Gutten, S. (1979). Health
developmental psychology to health protective behavior: an exploratory
behaviors. In N. Eisenberg (Ed.), study. Journal of Health and Social
Contemporary topics in developmental Behavior, 20, 17-29.
psychology (pp. 353-373). New York: Harter, S. (1990). Self and identity
John Wiley & Sons. development. In S. Feldman & G. Elliot
Clark, M.S., & Bond, M.J. (1995). The Adeilaide (Eds.), At the threshold: the developing
Activities Profile: A measure of the adolescent (pp. 352-387). Cambridge,
lifestyle activities of elderly people. Harvard University Press.
Aging Clinical Experimental Research, 7 Heaven, P.C.L. (1996). Adolescent health: The
(4), 174-184. role of individual differences. London:
Coleman, J.C. (1980). Friendship and the peer Routledge.
group in adolescence. In J. Adelson Hendry, L.B., Shucksmith, J., Love, J.G., &
(Ed.), Handbook of adolescent Glendinning, A. (1993). Young people’s
psychology. New York: Wiley. leisure and lifestyles. London: Routledge.
Cooper, S. E. (1990). Investigation of the Hester, N.O. (1984). Child's Health Self-Concept
Lifestyle Assessment Questionnaire. Scale: Its development and psychometric
Measurement and Evaluation in properties. Advances in Nursing Science,
Counseling and Development, 23, 83- 7 (1), 45-55.
86. Hultsch, D.F., Hammer, M., & Small, B.J. (1993).
Coreil, J., Levin, J.S., & Jaco, G. (1992). Estilo Age differences in cognitive performance
de vida. Un concepto emergente en las in later life: relationships to self-reported
ciencias sociomédicas. Clínica y Salud, 3 health and activity lifestyle. Journal of
(3), 221-231. gerontology: Psychological sciences, 48
Dougherty, D.M. (1993). Adolescent health. (1), 1-11.
American Psychologist, 48 (2), 193-201. Jessor, R. (1984). Adolescent development and
Elliot, D.S. (1993). Health-enhancing and behavioral health. In J.D. Matarazzo, S.M.
health-compromising lifestyles. In S.G. Weiss, J.A. Herd, N.E. Miller, & S.M.
Millstein, A.C. Petersen, & E.O. Weiss (Eds.), Behavioral health: A
Nightingale (Eds.), Promoting the health handbook of health enhancement and
of adolescents. New directions for the disease prevention (pp. 69-90). New
twenty-first century (pp. 119-145). York: Wiley.
Oxford: Oxford University Press. Jessor, R. (1992). Risk behavior in adolescence:
Erben, R., Franzkowiak, P., & Wenzel, E. A psychosocial framework for
(1992). Assessment of the outcomes of understanding and action. En D.E. Rogers
& E. Ginzburg (Eds.), Adolescents at risk:
164
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
165
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Twenty-first Century (pp. 209-241). VillamarÌn, F., & Alvarez, M. (en prensa).
New York. Oxford University Press. Modelos sociocognitivos en promoción de
Sarafino, E.P. (1994). Health Psychology. la salud: un análisis conceptual. Análisis y
Biopsychosocial Interactions. New York, Modificación de Conducta.
John Wiley & Sons. Walker, S.N., Sechrist, K.R., & Pender, N.J.
Schwirian, P. M. (1991/92). The seniors' (1987). The Health-Promoting Lifestyle
Lifestyle Inventory: Assessing Health Profile: Development and Psychometric
Behaviors in Older Adults. Behavior, Characteristics. Nursing Research, 36
Health, and Aging, 2 (1), 43-55. (2), 76-81.
Simard, L. (1992). A Saskatchewan vision for Walker, S.N., Volkan, K., Sechrist, K.R., &
health: A pramework for change. Pender, N.J. (1988). Health-promoting life
Regina, Saks: Saskatchewan Health. styles of older adults: Comparisons with
Simoes et al., 1995 young and middle-aged adults, correlates
Sinha, P.D. (1993). Developing positive health and patterns. Advanced Nursing Science,
lifestyle in schoolchildren. Project 11 (1), 76-90.
Lifestyle. Jamaica: Caribbean Food & Wallston, B., Wallston, K., Kaplan, G., & Maides,
Nutrition Institute - Regional Office of S. (1976). Development and validation of
the World Health Organization. the health locus of control (HLC) scale.
Sobal, J., Revicki, D, & DeForge, B.R. (1992). Journal of Consulting and Clinical
Patterns of interrelationships among Psychology, 44, 580-585.
health-promotion behaviors. American Wallston, K., Wallston, B., & De Vellis, R. (1978).
Journal of Preventive Medicine, 8 (6), Development of the multidimensional
351-359. health locus of control (MHLC) scales.
Stahlberg, D., & Frey, D. (1990). Actitudes I: Health Education Monographs, 6, 161-
estructura, medida y funciones. En M. 171.
Hewstone, W. Stroebe, J.P. Codol, y WHO (1986a). Health promotion concepts and
G.M. Stephenson (Eds.), Introducción a principles in action: A policy framework.
la psicología social. Barcelona: Ariel Copenhagen: WHO.
Psicología. WHO (1986b). Life styles and Health. Social
Terre, L., Drabman, R.S., & Meydrech, E.F. Science and Medicine, 22 (2), 117-124.
(1990). Relationships among children’s Williams, A.F., & Wechsler, H. (1972).
health related behaviors: A multivariate, Interrelations of preventive actions in
developmental perspective. Preventive health and other areas. Health Services
Medicine, 19, 134-146. Reports, 87, 969-976.
Thuen, F., Klepp, K.I., & Wold, B. (1992). Risk- Wold, B. (1989). Lifestyles and physical activity.
seeking and safety-seeking behaviors: a Unpublished doctoral dissertation.
study of health-related behaviours University of Bergen, Bergen, Norway.
among Norwegian school children. Wold, B. (1995). Health-Behavior in
Health Education Research, 7 (2), 269- schoolchildren: A WHO cross-national
276. Survey. Resource Package Questions
Ungemack, J.A. (1994). Patterns of personal 1993-94. Norway: University of Bergen.
health practice: Men and women in the Wold, B., & Andersen, N. (1992). Health
United States. American Journal of promotion aspects of family and peer
Preventive Medicine, 10 (1), 38-44. influences on sport participation.
Vilhjalsson, R., & Thorlindsson, T. (1992). The International Journal of Sport Psychology,
integrative and physiological effects of 23, 349-359.
sport participation: A study of
adolescents. Social Quarterly, 33, 637-
647.
166
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Capítulo 28
Actividad física y salud
Yolanda Pastor Ruiz
Diana Pons Cañaveras
Universitat de València
167
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
168
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
veremos como se pueden evaluar. Después minante. Así por ejemplo, correr es una actividad
pasaremos a revisar los beneficios físicos y típicamente aeróbica, mientras que levantar
psicológicos que se derivan de la práctica de pesas es una actividad anaeróbica.
actividad física y veremos las recomendaciones
para maximizar las ventajas, sin olvidar los El ejercicio constituye una subcategoría
riesgos que puede entrañar la realización de de la actividad física, dado que se define como
esfuerzos físicos para ciertas poblaciones. En una actividad física planeada, estructurada y
último lugar, repasaremos algunos de los repetitiva cuyo objetivo es mejorar o mantener
ámbitos de intervención más relevantes. uno o más componentes de la forma física
(Caspersen, Powell y Christensen, 1985). Así por
ejemplo, actividades como correr o ir en bici son
Concepto y evaluación ejercicios si se realizan con la finalidad de
mejorar la forma física, y serían actividades
Aunque a simple vista todos sabemos el físicas si se corre para coger el autobús o se usa
significado del término deporte, puede la bici como medio de transporte hacia el
resultarnos difícil diferenciarlo de otros trabajo.
términos relacionados como son el de ejercicio
o el de actividad física. Habitualmente En contraste con el ejercicio, el deporte
utilizamos estos términos como sinónimos, pero es una actividad tanto física como intelectual de
lo cierto es que no poseen el mismo significado. naturaleza competitiva y gobernada por reglas
Del mismo modo, otros términos que institucionalizadas (García-Ferrando, 1990).
aparecerán a lo largo de este capítulo Ejemplos de deportes son el baloncesto, el tenis,
necesitan ser clarificados, como lo son el de el fútbol, etc.
forma física y salud. En este apartado
ofreceremos las definiciones aceptadas por los Cabe preguntarse en estos momentos
expertos sobre estos conceptos, así como qué es la forma física. A diferencia de las
algunos de los métodos de evaluación de la definiciones anteriores, la forma física no es lo
actividad física más utilizados. que el individuo hace, sino lo que es capaz de
hacer (Blasco, 1994). Así pues, la forma física es
Por actividad física se entiende la habilidad para desempeñar tareas diarias con
cualquier movimiento corporal producido por la vigor y actitud alerta, sin fatiga y con energía
contracción de los músculos esqueléticos que suficiente para disfrutar de las actividades de
aumenta el gasto energético por encima del tiempo libre, así como para enfrentarse a
nivel basal (USDHHS, 1996). Con esta situaciones de emergencia (USDHHS, 1996). A
definición se recogen todos los movimientos fin de cuentas, la forma física es el conjunto de
que podamos realizar, desde bajar unas aptitudes físicas que poseemos. Caspersen,
escaleras a una actividad laboral, así como los Powell y Christenson (1985) consideran que
movimientos implicados en el ejercicio o en el estas aptitudes pueden dividirse en dos grupos:
deporte. aptitudes relacionas con la salud y aptitudes
relacionadas con las habilidades (Véase Tabla
En las contracciones musculares que se 1).
producen al realizar la actividad intervienen dos
tipos de mecanismos o procesos metabólicos Por último, la salud es entendida por la
que sirven para clasificar los tipos de actividad OMS como un estado de completo bienestar
física. Cuando se trata de una actividad de físico, psicológico y social. Así pues, cuando
intensidad baja o media que se desarrolla consideramos el rol de la actividad física en la
predominantemente en presencia de oxígeno es promoción de la salud, nos estamos refiriendo a
una actividad aeróbica. Por el contrario, si es la salud entendida en este sentido amplio con
una actividad de alta intensidad y rápida sus facetas física, psicológica y social. Por
demanda de los músculos, se denomina motivos exclusivamente expositivos, presen-
actividad física anaeróbica dado que en su taremos en diferentes apartados los aspectos
metabolismo se produce una inadecuada físicos y psicológicos de la salud en relación con
aportación de oxígeno, requiriéndose la la actividad física. Esta distinción se realiza por
utilización de otras vías energéticas (Blasco, motivos didácticos, no queremos que se pierda
1994). En realidad, la mayoría de las la visión integral de la misma.
actividades implican ambos tipos de
contracciones, sin embargo, se suelen
clasificar en función del movimiento predo-
169
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
170
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
resultados que se han encontrado respecto a sedentaria está asociada a una alta incidencia
la influencia de la actividad física en los de enfermedades coronarias (USDHHS, 1996).
aspectos físicos del envejecimiento. Entre estas investigaciones, encontramos
numerosos estudios prospectivos realizados en
Longevidad y mortalidad Europa y Norteamérica en los que grupos de
personas sanas eran seguidas durante periodos
Existe la creencia generalizada de que de hasta 20 años para comprobar si
realizar actividades físicas es saludable. Tal desarrollaban enfermedades cardiovasculares. La
creencia encuentra apoyo en diversas mayoría de estos estudios muestran una
investigaciones que han estudiado la relación correlación inversa entre las enfermedades
del nivel de actividad física con la longevidad y coronarias y los niveles de actividad física
la tasa de mortalidad. Por ejemplo, (Boutchard, Shephard, y Stephens, 1993).
encontramos la investigación de Paffenbarger, También se encuentran revisiones de estudios
Lee, y Leung (1994) realizada con adultos epidemiológicos (Powell, Thompson, Caspersen y
norteamericanos en la que se evaluaron Kendrick, 1987; Berlin y Coldtz, 1990; Blair,
distintas actividades como andar, subir 1994) donde se concluye que la actividad física
escaleras, o realizar diversos deportes y está fuerte e inversamente correlacionada con la
observaron que la mortalidad disminuía en enfermedad coronaria. En general, las
todos los grupos que realizaban alguna de investigaciones realizadas sobre este tema
estas actividades regularmente. Aún más indican que los beneficios de la actividad física
importante, hubo una tendencia significativa a comienzan a ocurrir a niveles moderados de
que disminuyera el riesgo de mortalidad actividad física y estos beneficios aumentan
conforme aumentaba la distancia andada, los conforme se incrementa el nivel de actividad, es
tramos de escalera subidos o el nivel de decir que siguen una tendencia dosis-respuesta
intensidad de los deportes. (USDHHS, 1996).
También encontramos otro tipo de Además del papel que juega la actividad
investigaciones más exigentes de corte física en la prevención de las enfermedades
experimental donde se estudiaba como influía el cardiovasculares, también favorece la rehabili-
aumento del nivel de actividad física en la tación de este tipo de enfermedades.
mortalidad subsecuente. Paffenbarger, Hyde,
Wing, Lee y colaboradores (1993), realizaron La rehabilitación cardíaca es definida por
un estudio longitudinal a lo largo de 11 años la Organización Mundial de la Salud como "la
donde observaron que aquellos sujetos que suma de las actividades requeridas para
comenzaron a practicar deporte de forma asegurar a los pacientes la mejor condición
regular tuvieron una tasa de mortalidad 23% física, mental y social posible de tal manera que
más baja que aquellos que continuaron siendo ellos puedan, por sus propios esfuerzos, ocupar
sedentarios. A similares resultados llegaron en un lugar en la vida de la comunidad de la forma
el estudio de Blair y colaboradores (1989), más normal posible... y que ... la rehabilitación
donde encontraron unas tasas de reducción de no tiene por qué estar relacionada con una
la mortalidad del 64% en hombres entre 20 y forma aislada de tratamientos lo cual constituye
82 años que habían mejorado su rendimiento sólo una de las facetas" (Página 62, Boutchard
cardiorrespiratorio a través del aumento de su et al., 1993). Las estrategias terapéuticas
nivel de actividad física. incluyen el ejercicio, la dieta, el control de peso,
la erradicación del tabaco, etc. (Blasco, 1994).
En general podemos decir que las Actualmente el ejercicio prescrito de forma
personas con niveles de actividad física que adecuada se considera un elemento
oscilan entre moderados y altos tienen una imprescindible para restablecer la funcionalidad
tasa de mortalidad más baja que aquellos que fisiológica de los pacientes afectados por esta
tienen hábitos sedentarios. Además se observa anomalía (Willis y Campbell, 1992). Esto se
una tendencia dosis-respuesta, es decir, a plasma en una preocupación creciente de
mayor nivel de actividad física mayores son los algunos centros médicos por educar al personal
beneficios que se obtienen. sanitario en este sentido a fin de que así
transmitan estas actitudes a los enfermos
Enfermedades cardiovasculares (Sallis, Criqui, Kashani et al., 1990). Además,
como corroboran la mayoría de los estudios
Investigaciones realizadas con muy empíricos realizados, no sólo se consiguen
diversas metodologías encuentran que la vida mejoras fisiológicas sino también psicológicas, ya
171
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
que los pacientes parecen experimentar una enzima que elimina el colesterol y los ácidos
disminución de sus sentimientos de incapacidad grasos de la sangre (Stefanick y Wood, 1994).
y un aumento de su autoestima, lo que reduce
el riesgo de padecer una depresión como Obesidad
resultado de la adopción del rol de enfermo
cardíaco (Willis y Campbell, 1992). La obesidad se caracteriza por un
porcentaje excesivo de tejido adiposo que
resulta de un aporte energético que excede al
Hipertensión gasto habitual de energía (Leibel, Risembaum y
Hirsch, 1995). El gasto energético total
Respecto a la relación entre la actividad representa la suma de tres tipos de gastos
física y la hipertensión se ha investigado tanto energéticos: 1) el gasto energético en reposo
los efectos a corto plazo de episodios aislados (basal) para el mantenimiento de las funciones
de actividad física, como los efectos a más básicas que aproximadamente representa el 60%
largo plazo de la actividad física practicada de del total; 2) la acción dinámico específica de la
manera regular. comida para la digestión, absorción, transporte y
depósito de nutrientes (que representa alrededor
Estudios tanto con humanos como con del 10%) y; 3) el gasto energético no basal, que
animales han probado que tras una sesión de se realiza primariamente en forma de actividad
ejercicio se produce una disminución de la física (aproximadamente el 30%) (Leibel et al.,
presión sanguínea y esta disminución puede 1995). El terc er componente es el más variable y
persistir durante varias horas. Por otra parte, sobre el que podemos actuar voluntariamente.
cuando se examinan los efectos del ejercicio Aumentado el gasto de energía no basal
habitual en estudios experimentales que contribuimos tanto al mantenimiento del peso
incluyen tanto normotensos como hipertensos, como a su reducción.
se observa que el entrenamiento aeróbico esta
asociado a una reducción de la tensión en La obesidad es difícil de medir y existe
ambos grupos, siendo esto aún más evidente bastante controversia al respecto. Una de las
en el grupo de hipertensos (Boutchard et al., medidas más utilizada es el Índice de Masa
1993). Corporal (IMC) que se calcula con la fórmula
siguiente: peso en Kg. / (altura en m) 2. Ejemplo:
Los mecanismos por los que la actividad persona de 60 Kilos y 1.7 metros de altura. IMC=
física disminuye la presión sanguínea son 60/(1.7)2= 60/2.89= 20.7 (normalidad). Se
complicados pero parece que un episodio considera que un IMC de 20 a 25 es normal para
aislado de actividad física baja la tensión los adultos de países desarrollados.
porque dilata los vasos sanguíneos periféricos
(ACSM, 1993), mientras que el ejercicio regular Respecto a la prevención de la obesidad,
puede bajar la tensión atenuando la actividad en general se piensa que las personas que son
del sistema nervioso simpático (ACSM, 1993). físicamente activas son menos propensas a
ganar peso que las sedentarias, lo cual sería
lógico ya que su gasto energético es mayor. Sin
Colesterol y Arteriosclerosis embargo, existen pocos datos para sostener
esta suposición (USDHHS, 1996). Algunos
La relación entre la actividad física y los estudios transversales han encontrado un IMC
niveles de lípidos ha sido extensamente menor entre las personas que informan realizar
revisada (León, 1991, USDHHS, 1996). De un más actividad física (Ching et al., 1996). Sin
total de más de 60 estudios, la mitad encontró embargo, los datos obtenidos en estudios
que el ejercicio incrementaba el nivel de HDL prospectivos nos hacen dudar de esta
en sangre (High Density Lipids). El HDL protege suposición, hasta tal punto que algunos autores
contra la arteriosclerosis transportando el se plantean si la ganancia de peso no será la
colesterol al hígado para que sea eliminado por causa del sedentarismo y no su consecuencia
la bilis (Tall, 1990). Incluso se ha visto cómo (Williamson et al., 1993).
un episodio aislado de actividad física puede
mejorar el perfil de lípidos en sangre y esta Hasta aquí hemos visto el ejercicio como
mejora puede persistir durante algunos días prevención de la obesidad, ahora nos vamos a
(Tsopanakis et al., 1989). Existe también centrar en la actividad física como tratamiento
evidencia de que el ejercicio regular incrementa de la obesidad. El tratamiento de la obesidad
la actividad de la lipoproteína lipasa, una normalmente conlleva la restricción calórica, es
172
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
decir la disminución de la cantidad de calorías ciones realizadas con personas sanas (sin
ingeridas. Esta estrategia se puede diabetes) han encontrado diferencias en sus
complementar con fármacos, terapias de apoyo niveles de glucosa entre los que eran activos y
o ejercicio físico (Blasco, 1994). Por desgracia los sedentarios. Después de una comida las
estas terapias suelen obtener unos resultados personas más sedentarias tenían niveles más
transitorios y sólo raramente consiguen un altos de glucosa e insulina que las personas más
resultado definitivo (Saldaña y Rosell, 1988). activas (Regensteiner, et al., 1995).
173
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
174
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
175
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
con el ejercicio físico y el deporte ha sido el Mutrie y Biddle, 1995; McDonald y Hodgdon,
Inventario de Ansiedad Estado-Rasgo (STAI) 1991; Willis y Campbell, 1992).
de Spielberger y colaboradores (1970) (Pons,
Balaguer y García-Merita, 1991). Este Algunos autores consideran además que
instrumento presenta una diferenciación entre para conseguir la reducción de la ansiedad el
ansiedad estado y ansiedad rasgo (Spielberger ejercicio debe ser al menos de una intensidad
et al., 1970). La ansiedad estado es moderada (entre el 50 y 69% de la tasa cardiaca
conceptualizada como un estado o condición máxima) y realizarse durante un mínimo de 20
emocional transitoria del organismo humano, minutos (Raglin y Morgan, 1987; Felts, 1989). De
que se caracteriza por sentimientos subjetivos acuerdo con Sime (1984), el ejercicio debe
y conscientemente percibidos de tensión y provocar una respiración fuerte y sostenida sin
aprensión, así como por una hiperactividad del causar un cansancio extremo y debe durar de 20
sistema nervioso autónomo, con la minutos a 1 hora o más, practicándose como
característica añadida de que es variable a lo mínimo tres veces por semana.
largo del tiempo fluctuando en su intensidad.
En contraste, la ansiedad rasgo señala una Conclusiones menos generalizables
propensión ansiosa relativamente estable por la podemos extraer de los estudios realizados con
que difieren los sujetos en su tendencia a poblaciones clínicas dado el menor número de
percibir las situaciones como amenazantes y a trabajos y los problemas metodológicos
responder a ellas con elevaciones en su estado asociados a los mismos (p. ej. ausencia de grupo
de ansiedad. de control) (Balaguer y García-Merita, 1994).
Mientras que los resultados de la investigación
Acerca del efecto ansiolítico del sobre los ataques de pánico y la agorafobia son
ejercicio existe una abundante literatura tanto conflictivos y poco concluyentes, sí que existen
con población normal como con población datos sobre el efecto positivo del ejercicio en los
clínica (Martinsen y Stephens, 1994). Los trastornos de ansiedad generalizada y en las
trabajos realizados con población normal tratan fobias simples. Sin embargo, dado que no se han
de estudiar la relación del ejercicio con la realizado intervenciones controladas con
ansiedad estado-rasgo. Un objetivo bien pacientes con trastornos de ansiedad, nuestro
diferente plantean los estudios que utilizan conocimiento sobre este área de estudio es
poblaciones clínicas, en los cuales se analiza el limitado (Martinsen y Stephens, 1994).
efecto del ejercicio como un tratamiento para
los trastornos de ansiedad. Así pues, todavía es necesario realizar
más trabajos que superen las deficiencias
En lo que se refiere a la población metodológicas que afectan a este área de
general, varios trabajos de revisión ya clásicos estudio. Aun así, algunos autores consideran
han concluido que una sola sesión de ejercicio muy recomendable la práctica de ejercicio para
posee un efecto tranquilizador inmediato regular los niveles de estrés y ansiedad tanto en
(Mihevic, 1982; Morgan, 1985). Este efecto se población clínica como no clínica. Esta
inicia a los pocos minutos de finalizar la sesión recomendación se basa en dos tipos de motivos:
de ejercicio y da como resultado unos niveles por un lado que practicar ejercicio aeróbico es
más bajos de ansiedad estado durante 20 o 30 más eficaz que no recibir tratamiento alguno y,
minutos después (Mihevic, 1982). Asimismo, por otro lado, que el ejercicio es una terapia
parece ser que el ejercicio practicado accesible para un mayor número de personas
regularmente se asocia a una reducción de la que los tratamientos convencionales (Martinsen
ansiedad rasgo (Morgan y Goldston, 1987). y Stephens, 1994).
Varios estudios experimentales confirman este
hecho con programas de ejercicio aeróbico que Depresión
poseen una frecuencia de práctica de al menos
tres sesiones semanales entre 10 y 20 Aunque se han realizado un gran número
semanas (Hylner et al., 1982; Steptoe, de trabajos sobre el tema, los efectos del
Edwards, Moses y Mathews, 1989). Estos ejercicio en la depresión son objeto de debate
resultados también se confirman en revisiones entre los investigadores (Willis y Campbell,
más actuales sobre el tema, tanto en aquellas 1992). Si en general este área de estudio
que emplean la técnica estadística del meta- adolece de problemas metodológicos, cuando
análisis como en las que utilizan estrategias hablamos de la relación entre ejercicio y
tradicionales (Balaguer y García-Merita, 1994; depresión estos son aún más marcados. Entre
los mismos podemos citar: la ausencia de grupo
176
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
177
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
aspectos diferentes del self (Byrne, 1996). En últimos años existen cada vez más estudios que
este sentido, mientras que el autoconcepto se interesan además por su relación con las
connota una definición más amplia del múltiples dimensiones del autoconcepto.
constructo que incluye aspectos cognitivos,
afectivos y conductuales, la autoestima Existe abundante literatura sobre la
denota un componente evaluativo más limitado relación entre ejercicio y autoconcepto global.
del autoconcepto (Blascovich y Tomaka, En una de las primeras revisiones sobre el tema,
1991). Brinthaupt y Erwin (1992) han vinculado Sonstroem (1984) concluyó que la participación
esta distinción a la diferencia existente entre en programas de ejercicio se asociaba a
autodescripción y autoevaluación. incrementos en las puntuaciones de autoestima.
En contraste, algunos autores consideran que Más concretamente, este autor enfatizaba el
en todas las mediciones del autoconcepto papel del ejercicio para incrementar la
existe un componente evaluativo, incluso en autoestima en las personas que la tuvieran baja.
aquellas medidas que, de forma manifiesta, Asimismo, remarcó que los diseños de los
carecen de contenido relacionado con la estudios eran demasiado simplistas por lo que no
estima (Greenwald, Bellezza y Banaji, 1988). se podía saber exactamente cómo y porqué se
Esto conduce a que la distinción entre ambos había producido la mejora en la autoestima.
conceptos sea más bien a nivel conceptual que
en la práctica. De hecho, a pesar de los Revisiones más actuales sobre el tema
reclamos de distinción entre ambos términos, la alcanzan conclusiones similares (Leith, 1994;
investigación sobre la validez de constructo no McDonald y Hodgdon; 1991). Empleando el
ha apoyado significativamente esta distinción meta-análisis McDonald y Hodgdon (1991)
(Byrne, 1996). Como consecuencia, en la encuentran que el ejercicio aeróbico posee un
literatura sobre ejercicio, al igual que en otros efecto significativo sobre la
campos, se usan estos términos como autoestima /autoconcepto. Por su parte, Leith
sinónimos. (1994) se ha encargado de revisar en qué
condiciones el ejercicio es más beneficioso para
El autoconcepto, entendido en un el autoconcepto global. En su trabajo indica que
sentido amplio, es el conjunto de hay dos tipos de actividades que han resultado
autopercepciones de una persona formadas a estar asociadas a mayores beneficios, se trata
partir de la experiencia y de las del levantamiento de pesas y de correr.
interpretaciones de su ambiente (Shavelson, Asimismo, remarca que para que el ejercicio
Hubner y Stanton, 1976). El autoconcepto es produzca mejoras significativas en el
considerado como un indicador del bienestar autoconcepto/autoestima las sesiones deben
psicológico. Esto ha hecho que muchos durar como mínimo una hora y poseer una
investigadores centren su interés en estudiar frecuencia mínima de tres veces por semana
las relaciones entre ejercicio y autoconcepto. (Leith, 1994). Otros autores han destacado
también la importancia de la duración de los
Históricame nte, ha habido una evolución programas de ejercicio, recomendando entre 8 y
en el concepto y evaluación de este 12 semanas como mínimo para que se observen
constructo. Los primeros investigadores que cambios en el autoconcepto (Bosscher, 1993;
trataron de operativizar el autoconcepto lo Frederick y Ryan, 1993). Así pues, los resultados
concibieron como un constructo de la investigación parecen apoyar el efecto
unidimensional. Sin embargo, en los últimos positivo del ejercicio en el autoconcepto global o
años se considera que el autoconcepto no autoestima.
puede ser entendido si se ignora su
multidimensionalidad (Byrne, 1996). Los Dentro de la visión multidimensional del
modelos imperantes en la actualidad, apoyados autoconcepto, se han realizado pocos trabajos
por los datos, revelan claramente que el que hayan analizado las relaciones entre el
modelo multidimensional del self describe ejercicio y las distintas dimensiones del
mucho más adecuadamente la fenomenología autoconcepto. En un estudio pionero en este
de las autoevaluaciones (Byrne, 1996; Marsh, campo con una muestra de adolescentes de
1997). Estos cambios en la evaluación del nuestro país, los chicos que practicaban deporte
autoconcepto se reflejan en la literatura sobre presentaban puntuaciones más altas en las
ejercicio. De tal modo que los primeros trabajos dimensiones del autoconcepto de competencia
realizados se planteaban únicamente el estudio deportiva, apariencia física y aceptación social
de las relaciones entre el ejercicio y el que los que no practicaban y las chicas que
autoconcepto global. Mientras que en los practicaban deporte presentaban puntuaciones
178
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
179
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
180
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
181
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Existen múltiples contextos o ámbitos características de este sector son muy variadas,
de intervención a nivel grupal que permiten en este caso, tanto en lo que se refiere al
acceder a distintos sectores de la población. estado de salud de los distintos pacientes como
Entre los ámbitos de intervención más a la edad de los mismos y al periodo temporal
importantes figuran: la escuela, el trabajo, las que permanecen en el centro. En este contexto,
residencias de la tercera edad, los centros de además de las técnicas cognitivo-conductuales
salud y los medios de comunicación de masas. y educativas, el conocimiento de técnicas
procedentes del ‘counseling’ por parte de los
Las intervenciones en el contexto profesionales de la salud es útil para la puesta
escolar son especialmente recomendables para en marcha de la intervención (USDHHS, 1996).
modificar los patrones de actividad física de los
niños y adolescentes. Dada la obligatoriedad de El tipo de intervención que nos permite
la enseñanza hasta los 16 años, en la escuela acceder a un sector más amplio de la población
podemos acceder a la inmensa mayoría de es a través de los medios de comunicación de
niños y adolescentes. Los objetivos a cubrir masas. De hecho, se pueden diseñar programas
por estos programas son aumentar el dirigidos a la población general. Los diversos
conocimiento de los escolares sobre la medios de comunicación que se emplean en
actividad física y el deporte, desarrollar sus estas campañas suelen ser la televisión, la radio,
habilidades motoras y conductuales que los panfletos impresos, los carteles publicitarios,
promuevan la actividad física a lo largo de toda el periódico, etc. Las técnicas publicitarias y el
la vida, fomentar actitudes positivas hacia la marketing juegan un rol muy importante en el
actividad física y animar a la práctica de diseño de este tipo de programas. A partir de
actividad física fuera de las clases de este ámbito de intervención podemos abarcar
educación física (USDHHS, 1996). múltiples objetivos: incrementar la imp ortancia
percibida de la actividad física como un hábito
A un sector bien diferente de la saludable, comunicar los beneficios que la
población están dirigidos los programas de actividad física posee tanto en la salud como en
promoción de la actividad física en el trabajo, otras áreas, generar interés por la actividad
en concreto a la población adulta. Muchos de física y conciencia sobre la disponibilidad de
los contextos laborales ofrecen un fácil acceso programas, proporcionar modelos de estilos de
a los empleados y una red social de apoyo que vida activos y ofrecer estímulos para la acción
ayuda a la consecución de los objetivos. Las tales como animar a la búsqueda de información
motivaciones detrás de este tipo de programas sobre actividad física, visitar un centro deportivo
no sólo hacen referencia a mejorar la salud o o iniciar la práctica de ejercicio (Donovan y
calidad de vida de las personas, sino también a Owen, 1994).
la consecución de determinadas metas de la
organización como son mejorar la imagen Los ámbitos de intervención presen-
corporativa, aumentar la productividad y tados no agotan todas las posibilidades
reducir el absentismo laboral, el agotamiento y existentes, aunque si son los más
los accidentes laborales (Shepard, 1989). representativos. A pesar de los avances en el
conocimiento de los beneficios que la actividad
Las residencias de la tercera edad física posee sobre la salud y de la difusión que
constituyen el ámbito de intervención en el que estos conocimientos puedan tener, en la
existe una mayor disponibilidad de personas sociedades modernas siguen predominando los
mayores. Muchas de las enfermedades y el estilos de vida sedentarios. Esto hace que la
deterioro físico y psicológico asociado al promoción de la actividad física sea un objetivo
incremento de edad puede ser prevenido, clave a perseguir tanto por los profesionales de
pospuesto o aminorado con la práctica regular la salud, como por las instituciones
de actividad física (USDHHS, 1996). gubernamentales que estén interesadas en
mejorar la salud pública y la calidad de vida de
Mientras que la intervención en los sus ciudadanos.
contextos escolar y laboral está
fundamentalmente orientada a personas sanas,
la intervención en los centros de salud está
dirigida hacia aquellas personas que no
disfrutan de buena salud, pero que pueden
mejorar su salud y calidad de vida. Al igual que
ocurre en las residencias de tercera edad las
182
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
183
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
184
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
185
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
186
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
Willis, J.D. y Cambell, L.F. (1992). Exercise joggers and non-exercisers. Perceptual
Psychology. Champaing, Ill: Human and Motor Skills, 50, 117-118.
Kinetics. World Health Organization (1985). Targets for
Wilson, V.E., Morley, N.C. y Bird, E.I. (1980). health for all. Copenhagen: WHO.
Mood profiles of marathon runners,
187
Psicología del Deporte (Vol. I) – Fundamentos 2
Antonio Hernández Mendo (Coord.)
188