Carmelitas Misioneras - Argentina

NOVENA A SANTA EDITH STEIN

Ofrecemos esta novena al Señor a través de nuestra Hermana Santa Teresa Benedicta de
la Cruz, contemplando su experiencia de vida interior.
 Carmelitas Misioneras - Argentina

La novena inicia con la invocación al Espíritu Santo, la meditación del día correspondiente,
continúa con una dinámica oracional y termina con la oración final

INVOCACIÓN AL ESPÍRITU

Plegaria ante el Misterio del Espíritu inefable que nos habita

¿Quién eres tú, dulce luz que me llenas e iluminas la oscuridad de mi corazón? Me conduces igual que
una mano materna y si me dejas libre, así no sabría ni dar un paso. Tú eres el espacio que envuelve
todo mi ser y lo encierra en sí, abandonado de ti cae en el abismo de la nada, donde tú lo elevas en el
Ser. Tú, más cercano a mí que yo misma y más íntimo que mi intimidad, y aún inalcanzable e
incomprensible, y que todo nombre hacer renacer: Espíritu Santo, ¡Amor Eterno!

También puede ser escuchada la canción: Oración al Espíritu Santo de Santa Teresa Benedicta de la
Cruz https://www.youtube.com/watch?v=47_BiR7TXwk
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 1. La Mirada empática

Edith Stein, se detiene en analizar el acto de la empatía, su esencia; y nos ofrece un ejemplo
demostrativo como punto de partida:
“Un amigo viene a mí y me cuenta que ha perdido a su
hermano, yo me doy cuenta de su dolor. ¿Qué es este darse
cuenta? ¿En qué se basa, de dónde percibo el dolor? El
amigo no dice que le duele algo. De entrada, ha de quedar
claro que en todo acto de empatía se requiere la presencia de
dos sujetos humanos, dos personas: yo y otro sujeto frente a
mí, en este caso mi amigo. El puente que los une, la
experiencia empática, discurre sobre las expresiones
sensitivas del uno percibidas por el otro, hasta captar la
vivencia de ese otro”.

Edith nos enseña que la empatía en resumen es ‘mi experiencia de las vivencias del otro’ Invitándonos a
ver la vida con los ojos de Jesús, así como ÉL miro a la Samaritana, a la mujer adúltera, al joven rico, al
ciego de nacimiento, al leproso etc… y desde ese encuentro de miradas de amor profundo, percibió su
realidad personal y la transformo.
Para sintonizar con Dios y nuestros hermanos, es necesario amar la vida y sumergirse en ella.

Dinámica de oración
Se les pide que se junten por pareja. se colocan sentadas
la una frente al otra y se miran a los ojos dejando lo que
cada una quiera trasmitir a su hermana. No se puede
hablar ni expresarse a través de otros gestos. Se ponen
de acuerdo para comenzar y disponen de 5 minutos. Al
cabo de ellos, se cambian los papeles y el receptor hace
de transmisor. Se realiza la dinámica con música de
fondo. Después, diálogo de cada pareja: lo que cada uno
ha captado; lo que ha intentado transmitir, cómo se han
encontrado, dificultades, etc.

Para reflexionar: ¿Sé estar abierta al sentir de los demás y puedo percibirlo por medio de su mirada?
Escuchar la canción “Dame Señor tu mirada”:
http://www.youtube.com/watch?feature=player_detailpage&v=3l_q1Ib0T20
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 2. El Valor del ser de la Mujer

En este día vamos reflexionar lo importante de nuestro ser de mujer. Ya que como país estamos viviendo
un tiempo fuerte en el que el feminismo extremista está desvirtuando la riqueza de valores y virtudes
que poseemos como mujeres y el tesoro más preciado de poder engendrar vida que Dios nos ha
confiado. Al respecto nos dice Edith Stein:

“El alma de la mujer debe ser amplia y abierta a todo lo humano; debe ser sosegada, de modo que
ninguna débil llama pueda ser apagada por la tempestad; debe ser cálida, a fin de que las tiernas
semillas no se congelen; (…) vacía de sí misma, para que la vida ajena tenga en ella espacio;
finalmente, señora de sí misma y de su propio cuerpo, a fin de que toda su personalidad se
encuentre en actitud de servicio a toda llamada”. (Los principios fundamentales de la
educación de la mujer)

Esto no significa que una mujer puede hacer lo que quiera con su cuerpo, sino que este debe ser
instrumento para su realización en este mundo. Según Edith, una mujer que está en total control
de sí misma es libre de vivir para los demás.

“Las mujeres comprenden no solo con el intelecto, sino también con el corazón”. (Problemas de
la educación de la mujer)

El objetivo del conocimiento es amar esas verdades hermosas y maravillosas que descubrimos. Esto
significa que el corazón, en combinación con la mente, es necesario para conocer el mundo que nos
rodea.
Y en una situación en la que estamos viviendo como país es necesario que la mujer caiga en cuenta si
realmente está luchando por sus derechos o si lo que está haciendo es degradando su ser de mujer. Por
eso nosotras como consagradas estamos invitadas a dar una respuesta profética a estos desafíos que la
sociedad de hoy nos plantea.
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Dinámica de oración
Escuchamos la canción: Los incontables de Ain Karem
https://www.youtube.com/watch?v=QZZvwaq1Qe0
Ambientación tener en el centro velas, telas coloridas, alguna flor, música instrumental de fondo. En en
círculo cada una trae a la memoria el nombre o la imagen de alguna de las mujeres que han luchado en
nuestro país por la defensa de la vida y de los derechos humanos. Encendemos una luz y traemos a la
memoria las mujeres latinoamericanas, prendemos una luz y traemos a la memoria las mujeres europeas,
encendemos una luz y traemos a la memoria las mujeres asiáticas, encendemos una luz y traemos a la
mente las mujeres africanas, con otra luz evocamos las mujeres australianas y así como mujeres
argentinas recordamos a todas las mujeres de toda clase, raza, religión encendemos una luz por nosotras
y sentimos que nuestro ser de mujeres están aquí con sus nombres, sus luchas, sus búsquedas y
exigencias, amores y resistencias. Para unirnos a todas ellas alzamos la luces y nos tomamos de las
manos, terminamos rezando el padre nuestro con la luz en el centro, y oramos por la realidad del país,
por las madres solteras, por las jóvenes embarazadas que piensan en abortar, por las mujeres que no
pueden tener hijos y anhelan tener un hogar, por las madres que son golpeadas, por las jóvenes que han
sido abusadas, por las jóvenes que están en grupos feministas, por las jóvenes de nuestra pastoral, por las
mujeres que comparten con nosotras la misión, por todas ellas vamos a orar encomendando a Edith Stein
buscadora de la verdad, mujer valiente y promotora de justicia, toda esta realidad para que triunfe la luz
de Cristo ante toda oscuridad.

Para terminar nuestra oración repetimos las siguientes expresiones:

Concédeme Señor:
La sabiduría de Miriam para superar las crisis,
El temor de Dios que tenía Raabe para confiar en ti,
La intrepidez de Ester para afrontar las adversidades,
El carácter de la mujer virtuosa de los proverbios,
La valentía de María Magdalena para superar el pasado,
El fervor misionero de la mujer samaritana para anunciar tu reino
La disponibilidad de Marta para servir con amor en todo momento
Y la escucha de María para postrarme a tus pies y elegir la mejor parte siempre, Amén.
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 3. La Gratitud

En este día reflexionaremos sobre la gratitud vivida en comunidad,

expresada en los detalles fraternos cotidianos que muchas veces
pasan desapercibidos pero que Edith Stein nos invita a hacer
conciencia de ellos y valorarlos como el paso de Dios por nuestras
vidas.

Texto bíblico Mateo 10,7-15

«En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: “Vayan y proclamen que el reino de los cielos está cerca.
Curen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos, echen demonios. Lo que han recibido gratis, denlo
gratis. No lleven en la faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de
repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando entren en un pueblo o
aldea, averigüen quién hay allí de confianza y quédense en su casa hasta que se vayan. Al entrar en
una casa, saluden; si la casa se lo merece, la paz que le desean vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz
volverá a ustedes. Si alguno no los recibe o no los escucha, al salir de su casa o del pueblo, sacudan el
polvo de los pies. Les aseguro que el día del juicio les será más llevadero a Sodoma y Gomorra que a
aquel pueblo”».

La vida nos sorprende en cada momento, en cada instante, a cada segundo y en cada ritmo del corazón,
estar vivos es un privilegio en el que a veces no nos detenemos a pensar, tener salud, un trabajo, una
familia, una comunidad etc... Todo eso es un DON DE DIOS que gratis hemos recibido y gratis hemos
de darlo. Cuán distinta sería nuestra vida si viviéramos agradecidos y sobre todo valorando lo que
tenemos.
La gratuidad es una respuesta concreta al amor. Las mejores cosas son gratuitas: la alegría, los detalles,
el cantar de un ave… La gratitud nace de un corazón que se siente amado y aceptado como es. Edith
también era una persona agradecida con la vida y con todo aquel que la había ayudado a ser mejor, ella
nos cuenta:
“Desde que estoy aquí mi actitud fundamental es la gratitud. Gratitud por
poder estar aquí y porque la casa sea como es. Con ellos siempre tengo
presente que aquí no tenemos morada permanente. No tengo otro anhelo,
sino que, en mí y a través de mi se cumpla la Voluntad de Dios. Él sabe
cuánto tiempo me deja aquí y qué sucederá después. En tus manos está mi
muerte. Ahí todo está a buen recaudo. Así que no necesito preocuparme
de nada. Pero es preciso orar mucho para mantenerse fiel en cada
situación. Ante todo, por tantos y tantos que lo tienen más difícil que yo y
no están tan anclados en la eternidad. Por ello, estoy agradecida de
corazón a todos los que prestan ayuda” (Del libro de Edith Stein filósofa
crucificada página 216)
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Más interesante es aún el testamento espiritual, que escribe y firma al final de sus ejercicios espirituales
el 9 de junio de 1939, del que se transcriben los párrafos más significativos:
“Agradezco de todo corazón a mis queridos superiores y todas las queridas hermanas el amor con que
me han acogido y todo lo bueno que se me dio en esta casa. Desde ahora acepto con alegría y con
absoluta sumisión a su Santa Voluntad, la muerte que Dios ha dispuesto para mí. Pido al Señor que
acepte mi vida y mi Muerte en honor y gloria suyos.” (Del libro Edith Stein: Nuestra hermana. Página
75)

Dinámica de Oración
Reflexionamos en silencio como
comunidad este pequeño fragmento:
¿Qué eres tú pequeña comunidad?
¿Un instrumento de eficacia? No.
Nunca. ¿Un grupo de hombres
reunidos para ser humanamente más
fuertes? Tampoco. ¿Llevamos una
vida común para estar juntos y
encontrarnos mejor? No. La
comunidad llegaría entonces a ser fin
en sí misma. ¿Ser felices juntos? Sí,
desde luego, pero en la ofrenda de
nuestras vidas. ¿Quién eres tú,
pequeña comunidad? Una parábola de
comunión, un simple reflejo de esa
única comunión que es el Cuerpo de
Cristo, su Iglesia, y por ello también un fermento en la familia humana. ¿A qué estás llamado? A
avanzar redescubriendo una y otra vez el milagro del amor en el perdón diario, en la confianza del
corazón y en una mirada de paz dirigida hacia los que nos son confiados" (H. Roger).

Podemos elevar como comunidad una acción de gracias que brota de la reflexión de este día.
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 4. El mundo está ardiendo

Cada año el día 14 de septiembre en la fiesta de la

exaltación de la Santa Cruz, las carmelitas
renuevan sus votos. Era costumbre en este
Carmelo, que la priora en este día leyera una breve
reflexión. Ahora encarga a Edith que la escriba y
ella lo hace desde el corazón dejando fluir su
experiencia con Jesús crucificado por amor:

“El mundo está en llamas; Si tú te decides por

Cristo, te puede costar la vida. El Salvador
cuelga en la Cruz, delante de ti, por haber sido
obediente hasta la muerte y muerte de Cruz. Él
vino al mundo no para hacer su voluntad sino la
voluntad del Padre. Si tú también quieres ser la
prometida del Crucificado, tienes que negar
incondicionalmente tu propia voluntad y no tener
ningún otro anhelo, sino el cumplir la voluntad
del Padre. El mundo está en llamas. El incendio
puede hacer presa también en nuestra casa; pero
en lo alto, por encima de todas las llamas, se
elevará la Cruz. Ellas no pueden destruirla. Ella es el camino de la tierra al cielo y quien la abraza
creyente, amante, esperanzado, se eleva hasta el seno mismo de la Trinidad. ¡El mundo está en
llamas! ¿Te apremia extinguirlas? Contempla la cruz. Desde el corazón abierto brota la sangre del
Salvador. Libera tu corazón por el fiel cumplimiento de tus votos y entonces se derramará en él el
caudal del Amor divino hasta inundar todos los confines de la tierra. ¿Oyes los gemidos de los
heridos en los campos de batalla?, tú no eres médico, ni tampoco enfermera, ni puedes vendar sus
heridas. Tú estás recogida en tu celda y no puedes acudir a ellos. Oyes el grito agónico de los
moribundos y quisieras ser sacerdote y estar a su lado. Te conmueve la aflicción de las viudas y de los
huérfanos y tu querrías ser el Ángel de la Consolación y ayudarles. Mira hacia el Crucificado. Si
estás unida a él, como una novia en el fiel cumplimiento de tus santos votos, es tu sangre preciosa la
que se derrama. Unida a él, eres como el omnipresente. Tú no puedes ayudar aquí o allí como el
médico, la enfermera o el sacerdote; pero con la fuerza de la Cruz puedes estar en todos los frentes,
en todos los lugares de aflicción. Tu Amor misericordioso, Amor del corazón divino, te lleva a todas
partes donde se derrama su sangre preciosa, suavizante, santificante, salvadora. Los ojos del
Crucificado te contemplan interrogantes, examinadores. ¿Quieres cerrar nuevamente tu alianza con
el Crucificado? ¿Qué le responderás? «¿Señor, a dónde iremos? Sólo tú tienes palabras de vida
eterna» ¡¡¡Ave Crux, spes única!!!”
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Edith se hace cargo de sus hijos, los limpia, los alimenta y les da el calor de su amor. Edith no deja de
ser consuelo para todos. Pero por encima de todo ora, y ofrece su sufrimiento por la conversión de su
pueblo, de los no creyentes, por sus perseguidores, por todos los que han abandonado a Dios.

Dinámica de Oración
Delante de nosotras pongamos una cruz y
contemplemos en silencio la realidad de nuestro
mundo de hoy trayendo a la memoria a nuestros
pueblos que sufren, NICARAGUA,
VENEZUELA, sus situaciones políticas, La
Iglesia de CHILE, la Violencia en COLOMBIA,
los inmigrantes en el mundo, el conflicto en
SIRIA y todas las realidades de nuestra querida
PATRIA, hagamos nuestras las palabras de
Edith: Ave Cruz nuestra Única Esperanza!!

Finalizamos este momento orante escuchando la

canción: Si tuviera que escoger Jesed
https://www.youtube.com/watch?v=nNuBEO4T
zrk
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 5. Nuestra jornada en las manos de Dios

Edith nos estimula en este día a no dejarnos atropellar por el activismo, consejos muy válidos para los
consagrados de hoy, embarcados muchas veces en un ritmo frenético, poco admirador. Cómo orar a lo
largo de una jornada ajetreada (la suya sirve de modelo).

“Las obligaciones y preocupaciones del día se acumulan en nuestro entorno en el momento

mismo de despertarnos por la mañana, si es que no interrumpieron ya la tranquilidad de la
noche. En ese momento se plantean ya cuestiones tan incómodas como estas: ¿Cómo puedo
sobrellevar tantas cosas en un solo día? ¿Cuándo podré hacer esto o aquello? ¿Cómo puedo
solucionar tal o cual problema? Parece que quisiéramos lanzarnos agitadamente o
precipitarnos sobre los acontecimientos del día, para poder tomar las riendas en las manos y
decir: ¡Lo hice!
Pero realmente importante es no dejarse turbar en ese momento: Mi primera hora en la
mañana le pertenece al Señor. Hoy quiero ocuparme de las obras que el Señor quiere
encomendarme y El me dará la fuerza para realizarlas. De esa manera quiero subir al altar
del Señor. Aquí no está en juego mi propia persona o mis cuestiones personales, pequeñas y
sin importancia, aquí se trata de la gran ofrenda expiatoria. Yo puedo participar de ella para
purificarme y llenarme de alegría y para ofrecerme en el altar con todas mis obras y mis
sufrimientos. Y cuando recibo luego al Señor en la comunión puedo preguntarle: Señor ¿qué
quieres de mí? En ese momento me decido a realizar aquello que, después de un diálogo
silencioso con Dios, considero que es mi próxima empresa. Una profunda paz inundará mi
corazón, y mi alma se vaciará de todo aquello que pretendía perturbarla y sobrecargarla”.

Dinámica de Oración

Como compromiso de este día de la novena, mañana muy temprano le diré al Señor: “Mi jornada te
pertenece” “Mi día está en tus manos”
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 6. Abrazar nuestra debilidad

En este día reflexionaremos sobre la confianza

en la misericordia de Dios que es lo único que
nos puede ayudar a vivir y atravesar las
situaciones de pecado en las que todos caemos,
y que no hacen sino acrisolar, purificar nuestro
amor a Dios y a los hermanos.
Dice Edith a una de sus alumnas: “No eres tú
sola la que cometes todos los días muchas
faltas; todos las cometemos. Pero el Señor es
paciente y rico en misericordia. En su
Providencia también puede sacar provecho de
nuestras faltas, si se las ponemos delante del
altar” (Carta a Anneliese Lichtenberger.
Breslau, 17 de agosto de 1931).
Acertadamente afirmará Edith: “El recuerdo de nuestros pecados es solamente bueno si está ligado en
el pensamiento de la misericordia de Dios” (Resumen Ejercicios Espirituales, 3-11 septiembre de
1941). Nos da la clave, que no es otra que Jesús conoce nuestra naturaleza, la asumió, sabe que no
somos sino un proyecto de amor, porque a imagen y semejanza de Dios fuimos creados. Y en Jesús no
hubo nada que “opusiera resistencia al amor. En cada momento de su existencia vivió entregado sin
reservas al amor divino. Al hacerse hombre, tomó sobre sí toda la carga de los pecados humanos, se
abrazó con ellos en su misericordioso amor” (Ciencia de la cruz).

Dinámica de Oración
¿A qué nos invita Jesús con este gesto de “abrazar nuestros pecados”? Nos acoge a cada uno, con la
carga que llevamos y nos envuelve en su misericordioso amor. Y nos invita a realizar el mismo gesto
con los hermanos.
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 7. No tienes por qué temer

En este día Edith Stein nos invita a meditar en el seguimiento que hemos hecho del Señor ciertamente
como consagradas experimentamos muchos temores. Al respecto Edith nos dice: “lo que tú Prometiste
está por encima de tus débiles fuerzas, pero no está por encima de la fuerza del Todopoderoso y ella
será tuya si confías en él, cuando acoja tu voto de fidelidad. Así hizo el día de tu santa profesión y
quiere hacerlo hoy nuevamente. Es el corazón amante de tu Redentor el que te invita al seguimiento.
El exige tu obediencia pues la voluntad humana es ciega y es débil. Ella no encontrará el camino
mientras no se abandone totalmente a la voluntad divina.
El exige la Pobreza porque las manos tienen que estar vacías de los bienes de la tierra para poder
recibir los bienes de cielo.
Él te exige la castidad porque sólo el desapego del corazón de todo amor terreno hace libre el corazón
para el amor de Dios. Los brazos del crucificado están extendidos para arrastrarte hasta su corazón.
Él quiere tu vida para regalarte la suya”.

Dinámica de Oración

Reflexionamos los siguientes interrogantes como comunidad

¿Vives los votos como camino de seguimiento y liberación y eres
consciente de su significado como configuración con Cristo, lo
vives como una unidad inseparable?

Reflexiona sobre ellos a la luz de cuánto dice el texto de Edith

Stein
Para terminar este momento orante, escuchamos la canción: Paz armada de Cristóbal Fones:
https://www.youtube.com/watch?v=72BtGYe6vfA
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 8: La importancia de la Eucaristía

En este día reflexionaremos sobre la Eucaristía como centro de nuestra vida consagrada al servicio de
Dios y los hermanos. Escuchemos con atención la experiencia eucarística de Edith Stein en la que nos
invita a dejarnos transformar por ella.

“El que come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida

eterna” Juan 6,54
El Salvador que sabe muy bien que somos hombres y que
permanecemos hombres, que cada día tenemos que luchar
con debilidades humanas, por eso viene en ayuda de nuestra
humanidad de manera verdaderamente divina, así como el
cuerpo terrenal necesita el pan cotidiano el cuerpo espiritual
necesita un sustento duradero.
“Este es el pan vivo bajado del cielo” (Juan 6,58). Quien
hace de Él su pan cotidiano deja que se haga realidad
cotidiana en sí mismo el misterio de la Encarnación del
Verbo. Y ese es el camino seguro para alcanzar el ser “uno
con Dios” y para crecer cada día con mayor fuerza y
profundidad en el cuerpo Místico de Cristo.
En nuestra vida tenemos que hacer sitio para el Salvador
eucarístico para que Él pueda transformar nuestra vida en la
suya, ¿acaso significa esto pedir demasiado?
A partir de entonces nos haremos cada vez más pequeños y
humildes llegaremos a ser pacientes e indulgentes con la
paja en el ojo ajeno, porque veremos clara la viga en el
nuestro y aprenderemos a soportarnos a nosotros mismos a
la luz inexorable de la presencia divina y abandonarnos a su misericordia que es la que puede
liberarnos de todo aquello que nuestras fuerzas son incapaces de combatir.
Estamos invitados a vivir en las manos de Dios con la sencillez del niño y con la humildad del
publicano quien haya entrado por este camino no sé volverá atrás. Esto es lo que significa ser
hijos de Dios hacerse pequeños el mismo tiempo hacerse grandes.
Vivir eucarística mente significa salir de las angustias de la propia vida y adentrarse en el
horizonte infinito de la vida de Cristo.

Dinámica de Oración
Pregunta para reflexionar: Si Cristo se hace presente realmente en la Eucaristía como alimento ¿Me dejo
transformar por Él?

Para finalizar escuchamos la canción: Mi dulce esposo Jesed https://www.youtube.com/watch?v=Q-

7ZCvpDcEs
 Carmelitas Misioneras - Argentina

Día 9. Amor a María

En este último día reflexionaremos sobre la presencia de María en la

vida de Edith Stein y como ella supo tenerla como madre dejándose
conducir por su mano para llegar a la fecundidad plena de su ser como
carmelita.
Nos dice al respecto: “María es símbolo más perfecto de la iglesia,
cabeza y corazón son imágenes con las que se pretende expresar una
realidad, la cabeza y el corazón desempeñan en el cuerpo humano
unas funciones fundamentales, los otros órganos y miembros
dependen de esos dos en su ser y actuar y entre cabeza y corazón hay
una conexión especialísima, lo mismo sucede con María que por su
especial unión con Cristo necesita de un ligamento real entendido
como Místico con todos los miembros de la iglesia unión que se da
entre los miembros semejante a la existente entre madre e hijo.
Llamar a María como madre no es una simple imagen ella es nuestra
madre en sentido real y eminente en un sentido que trasciende la
maternidad terrena ella nos ha engendrado a la vida de la gracia, al
entregar todo su ser, cuerpo y alma, para la maternidad divina. Por
eso existe una íntima vinculación entre ella y nosotros: ella nos ama, nos conoce, se afana por hacer de
cada uno de nosotros lo que está llamado a ser, sobre todo nos quiere conducir a la unión más íntima
con el Señor.”.
También Edith Stein nos invita a pasar de EVA A MARÍA Tenemos que hacer entonces este
camino. “Cada mujer debe mirar a María como su ideal. Menos Ella, ninguna otra mujer manifiesta la
naturaleza femenina en su pureza original. Toda otra mujer tiene algo en ella heredado de Eva y debe
buscar la manera de ir de Eva a María” (La espiritualidad de la mujer cristiana - Enero 1932 - Edith
Stein)
“Si cada mujer fuera imagen de la Madre de Dios, esposa de Cristo, apóstol del divino Corazón,
entonces cada una cumpliría su vocación femenina dando igual las condiciones en que vive y la
actividad que le ocupa”. (La espiritualidad de la mujer cristiana - Enero 1932 - Edith Stein).

Dinámica de Oración
Iniciamos con la canción: Dios te Salve María, Cristóbal Fones
https://www.youtube.com/watch?v=kcV1c3pLd8k
Disponer una imagen de María, con una luz en el centro y los nombres de las hermanas de la comunidad
y frente a ella orar pidiendo la gracia del abandono en Dios, que como ella podamos ser no solo cabeza
sino también corazón, que ella nos brinde la gracia del equilibrio en nuestros pensamientos, sentimientos
y emociones.
 Carmelitas Misioneras - Argentina

ORACIÓN FINAL A EDITH STEIN

Tú que encontraste la verdad en la Cruz de Cristo, haz que nosotros
también seamos iluminados por la luz que emana de su misterio.
Haznos el regalo de saber abrazar la Cruz como tú la abrazaste. Haz
que podamos descubrir en la simplicidad cotidiana la grandeza de la
presencia de Dios. Que con tu intercesión los jóvenes se brinden
abiertamente al Señor sin tener miedo a perder sino a dar con alegría.
Que en todas las ocasiones de nuestra vida vivamos la caridad hacia
nuestro prójimo. Y que en los últimos momentos de nuestra vida
podamos abandonarnos serenamente en el Amor de Dios siendo
siempre fieles.
¡Santa Teresa Benedicta de la Cruz, ruega por nosotros!