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PARCIAL CUANTITATIVA

Los dos pilares fundamentales de la ciencia son la lógica y la observación. El conocimiento científico del
mundo debe 1) tener sentido y 2) corresponder con lo que observamos.
Las ciencias sociales se ocupan del estudio de las variables y los atributos que las conforman. Las teorías
sociales científicas están escritas precisamente en un lenguaje de variables, por lo tanto las personas
importan solo como portadoras de variables.
ATRIBUTOS: los atributos o valores son las características o cualidades que describen un objeto. Por
ejemplo: mujer, asiático, conservador, deshonesto, etc. Todo lo que se pueda decir para describir a
alguien es un atributo
VARIABLES: las variables son agrupamientos lógicos de atributos. Por ejemplo: hombre y mujer son
atributos, sexo o género son las variables compuestas por esos atributos. La variable ocupación está
compuesta de atributos como agricultor, profesor o médico.

Conceptuación
La conceptuación es el proceso por el que especificamos lo que queremos comunicar cuando usamos
determinados términos. El producto de este proceso de conceptuación es la especificación de uno o más
indicadores de lo que tenemos en mente y que señalan la presencia o ausencia del concepto que
estudiamos. Por su parte, la dimensión es un aspecto o faceta especificable de un concepto. La
conceptuación consiste tanto en especificar dimensiones como en identificar los indicadores de cada
una.
Carácter intercambiable de los indicadores: significa que si varios indicadores representan en algún grado
el mismo concepto, todos funcionaran de la misma manera que lo haría el concepto si fuera real y
observable. Así, si en general las mujeres son más compasivas que los hombres, se debería poder
observar esta diferencia utilizando cualquier medición razonable de la compasión. El carácter
intercambiable de los indicadores permite, en definitiva, estudiar y sacar conclusiones sobre los
conceptos, aunque no estemos de acuerdo en sus definiciones.

CRITERIOS DE MEDICIÓN DE CALIDAD


Es claro que la precisión y exactitud son cualidades importantes en la medición científica. No obstante
cuando los científicos sociales evalúan sus mediciones prestan especial atención a dos consideraciones
técnicas: validez y confiabilidad.

Confiabilidad
La confiabilidad se refiere al hecho de que determinada técnica, aplicada repetidamente al mismo objeto,
arroje cada vez el mismo resultado. Esto no significa que no pueda variar al largo plazo, pero sí que sea
coherente al corto plazo.
Asimismo, la confiablidad remite al nivel en que se puede asegurar la estabilidad y equivalencia de la
medida.
Estabilidad: es la comparación de las medidas repetidas. Por ejemplo: si yo aplico un cuestionario a una
persona, sus respuestas deben ser relativamente estables a las que me daría si le aplico el cuestionario
por segunda vez.
Equivalencia: se refiere al grado en que distintos investigadores con distintos instrumentos, miden lo
mismo. Por ejemplo: yo aplico un instrumento de medición para saber las carencias en un determinado
barrio y concluyo una de las carencias más importantes es la falta de educación. Cuando otro investigador
venga a relevar las carencias al barrio debería sacar las mismas conclusiones que las mías.
Existen varias técnicas para evaluar la confiabilidad

 Método de test-retest: a veces es apropiado hacer la misma medición dos veces. Si no se ve que la
información cambie, entonces se deben recibir la misma respuesta las dos veces. Si en cambió las
respuestas varían, el método de medición puede no ser confiable.
 Método de las mitades (Split half): si tengo un cuestionario de 10 preguntas que miden el prejuicio
por ejemplo, con esta técnica, puedo dividir al azar las preguntas en dos conjuntos de 5
 Uso de mediciones establecidas: otra forma de garantizar la confiabilidad consiste en usar
mediciones que han probado su confiabilidad en investigaciones anteriores. Por ejemplo, el “IQ”
 Confiabilidad asociada a formas alternativas: A veces se realizan cambios más sutiles de formato
para evaluar la confiabilidad de las medidas y la consistencia de respuestas de encuestados: por
ejemplo, cambiar el orden de los ítems o cambiar la redacción de los ítems
 Inter-ítem (consistencia interna): Cuando se utilizan muchos ítems para medir un concepto es
importante que haya consistencia y alto grado de asociación entre esos ítems
 Confiabilidad inter-observador: utilizar más de un observador que evalúe las mismas personas,
eventos o lugares: si emplean el mismo instrumento para evaluar el mismo fenómeno deberían
obtener resultados similares

Validez
El termino validez se refiere al grado en que una medición empírica refleja adecuadamente el significado
real del concepto que estudiamos. Se trata de la capacidad que tienen nuestras medidas de reflejar
adecuadamente el concepto que nos interesa medir. ¿Estamos midiendo lo que originariamente
queríamos medir?

Criterios de validez

 Validez pragmática o patente: las mediciones pueden concordar o no con nuestros consensos e
imagines mentales respecto a un determinado concepto.
 Validez de criterio o predictiva: se basa en algún criterio externo que tenga la capacidad de
predecir determinadas situaciones. Ejemplo: prueba de ingreso.
 Validez de constructo: se basa en las relaciones lógicas entre variables. Por ejemplo: yo quiero
estudiar la pobreza en un barrio. La educación por ejemplo, podría ser una variable que entra en
juego pero que no está dentro de mi concepto inicial.
 Validez de contenido: se refiere al grado en que la medición abarca la gama de significados que
comprende el concepto. ¿En qué medida mi concepto abarca todas las dimensiones que la
bibliografía señala?
Tensión entre confiabilidad y validez
Suele existir una tensión entre los criterios de confiabilidad y validez, un “tira y afloja”. Casi todos los
conceptos que nos interesa estudiar tienen muchos matices sutiles y es difícil especificar con precisión lo
que queremos que signifiquen. Por lo tanto, con frecuencia, la especificación de mediciones y definiciones
operacionales confiables parece robar a los conceptos su riqueza de significados.
Sin embargo, mientras más toleremos variaciones y riquezas de significados en un concepto, más
posibilidades hay de que no estemos de acuerdo sobre la manera en que se aplica en determinada
situación, lo que termina por reducir su confiabilidad.

ÍNDICES Y ESCALAS
Como ya vimos, muchos conceptos sociales tienen significados muy complejos y variados. Hacer
mediciones de tales conceptos puede ser casi un reto. Los analistas cuantitativos han concebido técnicas
específicas para combinar indicadores en una sola medición. Esto es, la elaboración de índices y escalas.
Escalas e índices pueden ser utilizados en cualquier forma de investigación social, pero son más comunes
en las encuestas y otros métodos cuantitativos.
Los índices y las escalas son instrumentos muy eficientes de análisis de datos ya que ofrecen una medida
precisa y comprehensiva que sintetiza múltiples indicadores
Algunas variables se miden fácilmente con indicadores únicos. Por ejemplo para saber la edad de alguien
solo hace falta preguntarle, ¿Cuántos años tiene? Se tratan de variables que son directamente
observables.
Sin embargo, los científicos sociales por lo general quieren estudiar variables que no tienen indicadores
únicos, claros e inequívocos. Por ejemplo, para medir el concepto de felicidad. Se trata entonces de
variables que no son directamente observables.
Comparación de índices y escalas
Tanto la escala como el índice son mediciones ordinales características de las variables. Ambos ordenan
las unidades de análisis según variables concretas como religiosidad, enajenación, prejuicios, etc.
No obstante, se pueden distinguir según la manera en que se asignan las puntuaciones. Así es que un
índice se elabora por la simple suma de las puntuaciones que se asignen a los atributos. Por su parte, la
escala se forma con la asignación de puntuaciones a esquemas de respuestas, reflejando que algunos
reactivos tienen mayor ponderación que otros. Así, las escalas aprovechan cualquier estructura de
intensidad que haya entre los atributos.

Índices
Elaboración de índices
Existen diferentes etapas en la elaboración de los índices: elección de reactivos, examinación de las
relaciones empíricas, asignación de puntajes, manejar la cuestión de los datos faltantes y finalmente la
validación de los índices.
1) Selección de reactivos o posibles ítems: la primera etapa es escoger los reactivos para la creación
de un índice compuesto destinado a medir alguna variable.
Validez aparente: es el primer criterio para llevar a cabo la elección de reactivos que compondrán
el índice. Elegimos reactivos que sean razonables y que corresponden con las intuiciones que
tenemos del fenómeno.
Unidimensionalidad: en la bibliografía metodológica se destaca la necesidad de la
unidimensionalidad en la construcción de las escalas e índices. Una medición compuesta debe
representar solo una dimensión.
General o específico: si bien es cierto que queremos medir una única dimensión, esta puede
presentar ciertos matices.
Varianza: al elegir reactivos para un índice también se debe prestar atención a la variación. Existen
dos opciones para garantizarla: la primera es elegir reactivos más graves que permitan dividir más
precisamente a la población. La segunda es incluir reactivos que tengan diferente capacidad para
captar la varianza.
2) Análisis de las relaciones empíricas: la segunda etapa de elaboración de índices es examinar las
relaciones bivariadas y multivariadas entre los reactivos que se quiere incluir. La cuestión básica es
notar si las respuestas de los entrevistados a una pregunta no da alguna clave de cómo
contestarán otras preguntas. Si dos reactivos no están asociados es bastante improbable que
ambos midan el mismo concepto.
3) Asignar un puntaje: una vez elegidos los mejores reactivos para el índice, se debe asignar
puntuaciones a las respuestas para crear un índice combinado de varios reactivos. En esta etapa
se deben tomar 2 decisiones básicas. La primera es decidir cuál es el margen deseado de las
puntuaciones del índice. La segunda decisión refiere a la asignación real de puntuaciones a cada
respuesta. Básicamente se trata de decidir si se debe dar el mismo o diferente peso a cada
reactivo del índice.
4) Manejo de los datos faltantes: cualquiera sea el modo de recopilación de datos, siempre va a
existir el problema de los datos faltantes. Hay varios métodos para lidiar con este problema. 1) Si
hay relativamente pocos datos faltantes se pueden excluir del índice, pero puede darse que los
datos disponibles no sean suficientes para el análisis, o también que la exclusión de estos datos
producirá una muestra sesgada. 2) A veces se tienen fundamentos para considerar a los datos
faltantes como una respuesta. 3) Un análisis de los datos faltantes puede conducir a una
interpretación de su significado y en tal caso asignarles un valor promedio.
5) Validación de los índices: en la lógica básica de la validación, asumimos que las puntuaciones
ordenan los casos de acuerdo con tal variable. Existen 2 métodos para validar un índice
combinado.
Validación interna: la primera etapa para validar un índice es una validación interna, también
llamada análisis de reactivos. En este análisis se examina el grado en que el índice combinado se
relaciona con los reactivos que lo componen. Si resulta que cierto reactivo se relaciona poco con el
índice, puede suponerse que otros reactivos cancelan su aportación. Por lo tanto, si ese reactivo
no aporta nada, es mejor excluirlo.
Validación externa: en esta segunda etapa se evalúa la validez de la medida global testeando su
relación con otros indicadores asociados al mismo fenómeno. Por ejemplo: la gente que califica
como conservadora en un índice debe aparecer conservadora en otros reactivos del cuestionario.
El ordenamiento de los grupos de interrogados debe predecir el orden con que estos grupos
contesten otras preguntas
Escalas
La expresión “técnica de las escalas” consiste en un conjunto de procedimientos creados por la
investigación social para “medir” determinadas variables en el hombre y la sociedad. Optimismo,
prejuicio, autoritarismo, religiosidad, son conceptos típicos de las ciencias sociales, que caracterizan al ser
humano pero que no son fácilmente traducibles al lenguaje de la investigación empírica.
La aplicación más frecuente de la técnica de las escalas es la denominada “medida de actitudes”, en la
que la unidad de análisis es el individuo, el concepto general es la actitud y los conceptos específicos son
las opiniones. Por tanto se puede decir que la actitud es el concepto general y las opiniones son los
indicadores.

Preguntas de respuesta graduada: la autonomía semántica de las respuestas


Por lo general, una escala está conformada por una “batería de preguntas”. Ante una pregunta cerrada,
cuando las opciones de respuestas están ordenadas, se puede presentar de 3 formas:

 La primera consiste en presentar posibilidades de respuestas que son semánticamente


autónomas, es decir, cada una tiene un significado intrínseco que para ser comprendido no
necesita relacionarse con el significado de otras opciones presentes en la escala.
 En la segunda forma las opciones de respuestas tiene una autonomía semántica parcial. En este
caso, el significado de cada opción de respuesta es solo parcialmente autónomo en relación a
otras opciones. Es el caso más común de las respuestas “mucho”, “bastante”, “poco”.
 Finalmente, están las denominadas escalas de intervalo de autoposicionamiento, en las que solo
hay dos categorías extremas, y entre ellas se coloca una escala, representada por casillas o cifras
en el que el entrevistado marca su posicionamiento.

Elaboración de escalas
Existen 4 fases en la construcción de escalas:
1. En la primera fase se determinan las dimensiones de la actitud estudiada y se formulan
afirmaciones que reflejan los diversos aspectos del concepto que se quiere estudiar.
2. En la segunda fase, la escala se aplica a una muestra de entrevistados. Es importante que se
incluyas las respuestas “no sé” y que no todas las afirmaciones tengan el mismo sentido, a fin de
que los entrevistados no respondan de forma mecánica y sistemática a todas las preguntas, sino
que reflexionen sus respuestas.
3. Una vez aplicada la escala a los entrevistados, es necesario asegurarse que la escala sea
unidimensional. Para ellos se utilizan 2 instrumentos básicos: la correlación elemento-escala, que
sirve para identificar los elementos de la escala que no son coherentes con los demás, y el
coeficiente alfa, que sirve para juzgar el grado total de coherencia interna de la escala.
4. Finalmente en la última fase se debe controlar la validez de la escala y su carácter unidimensional:
se parte de un elevado número de elementos que se aplican a la muestra limitada de sujetos y se
eliminan los elementos incoherentes.

Tipos de escalas
Escala de distancia social de Bogardo:
Estas escalas se conforman con varias preguntas que indican diferentes grados de intensidad en una
variable. Es de suponer que si una persona está dispuesta a aceptar alguna asociación, aceptara también
todas las que siguen en la lista. Y viceversa, una vez que la persona ha rechazado una relación presente en
la lista, rechazará también las que le siguen, más difíciles.
Escala de Guttman:
La escala de Guttman cosiste en una sucesión de elementos que presentan una dificultad creciente, de
manera que si se ha respondido afirmativamente a una pregunta, se debieron haber respondido también
afirmativamente a todas las que le preceden en grado de dificultad.
Si los elementos de la escala están perfectamente escalonados, solo son posibles ciertas secuencias de
respuestas. A partir de la puntuación individual se pueden deducir las respuestas dadas por ese individuo
a cada uno de los elementos de la escala. Esta posibilidad de deducir las respuestas a partir de la
puntuación de la escala es una característica típica del escalograma de Guttman, que se denomina con el
nombre de “reproductibilidad”.
Por otra parte, a diferencia de la escala de Likert en la que todas las preguntas podían tener más o menos
la misma intensidad, en el caso de las escalas de Guttman , las preguntas deben cubrir toda la extensión
del continuo de la actitud, con el fin de obtener una batería de preguntas con dificultad creciente.
Escala Thurstone
Las escalas Thurstone son una forma alternativa para descubrir la estructura inherente a los reactivos. Se
da un gran número de indicadores que se cree miden actitudes respecto a una variable, a un grupo de
jueces expertos para que evalúen con un puntaje cuan representativos son. Sin embargo, actualmente
este tipo de escalas no se usan principalmente por el enrome gasto de tiempo y energía para que 10 o 15
jueces califiquen los reactivos.
Escala Likert
Esta técnica sigue siendo actualmente el procedimiento más utilizado para el estudio de las actitudes. El
procedimiento detrás de las escalas Likert es simple e intuitivo: se realiza la suma de los puntos de las
pruebas individuales.
Por lo general, el formato de las preguntas individuales de las escalas de Likert consiste en una serie de
afirmaciones para cada una de las cuales el entrevistado deberá decir si esta de acuerdo y en qué medida.
Diferencial semántico (Osgood)
El objetivo de Osgood y sus colegas era crear un instrumento capaz de medir la “significación” que las
personas asignan a diferentes situaciones, conceptos y objetos.
Osgood propone una técnica para extraer los significados que determinados conceptos adquieren para
los entrevistados, que se basa en las asociaciones que establece el entrevistado entre este concepto y
otros propuestos: “sofisticado” es duro o blando? ¿Agradable o desagradable? ¿Rápido o lento?. Por lo
general se recomienda al entrevistado que conteste de forma instintiva, sin reflexionar demasiado sobre
cada pareja.
Utilizando una serie de 50 adjetivos bipolares, Osgood y sus colegas constataron que, en líneas generales,
pueden identificarse 3 dimensiones básicas: evaluación, potencia y actividad.

Ahora bien, una vez hecha la escala se debe evaluar. La validez de una escala consta de 5 pasos (los
mismos que se usan para elaborar un índice)
1) Selección de ítems: validez aparente, unidimensionalidad, general o específico y varianza
2) Análisis de relaciones empíricas
3) Asignar un puntaje
4) Manejo de datos faltantes
5) Validación de los índices: validación interna y externa

Asimismo, se debe evaluar también la confiabilidad de la escala, mediante las técnicas que vimos anteriormente.

Datos primarios y secundarios en Uruguay


Investigación secundaria: uso de datos construidos por otros investigadores o instituciones.
Fuentes de datos secundarios en Uruguay:
 Instituto Nacional de Estadística (INE)
 Instituto de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas, UDELAR (iecon)
 Ministerio de Desarrollo Social (MIDES)
 Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP)
 Banco Mundial
 Banco de datos, Facultad de Ciencias Sociales, UDELAR
 Latinobarometro
 CEPAL
Tres formas de fuentes que se puede encontrar:
1) Micro datos
2) Procesadores en línea
3) Datos procesados / informes

Ventajas de usar datos secundarios:


a) Requiere menos recursos económicos y humanos que en el caso de los datos primarios
b) Facilita el acceso a un mayor volumen de información procedente de múltiples y diversas fuentes,
lo cual es muy difícil de lograr en una investigación primaria
c) Permite cubrir amplios periodos de tiempo
d) Complemento que sirve para desarrollar estudios desde inicio (formulación de
problema/hipótesis) hasta conclusión (interpretación de resultados)

Desventajas de usar datos secundarios:


a) No hay disponibilidad: el acceso a ellos es difícil o restringido
b) Inadecuación respecto a objetivos de investigación respecto al periodo de tiempo, población de
interés, etc.
c) Falta de control/conocimiento del proceso de obtención y registro originario de la información
d) Su comparación se debilita cuando hay cambios en la organización de la información a lo largo del
tiempo

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