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LITERATURA SAPIENCIAL

TRABAJO DE INVESTIGACIÓN
ALUMNO: JALVIK NEGRÓN
PROFESOR: FRANCISCO J. GONZALEZ

ANALISIS LITERARIO, HISTORICO Y TEOLOGICO

SALMO 16 (15)1
1 Guárdame, Dios mío, pues me refugio en ti.
2 Yo al señor: <<Tú ere mi Señor, mi bien sólo está en ti>>
3 Ello, en cambio, veneran a los dioses que hay aquí en la tierra,
malditos los que en ellos se complacen
4 Los que corren tras ellos aumentan sus desgracias.
Yo jamás tendré parte en sus cruentos sacrificios,
mis labios no pronunciaran jamás su nombre.
5 Señor, tu eres mi copa y mi porción de herencia,
tu eres quien mi suerte garantiza.
6 Me han caído las cuerdas en la tierra más fértil,
me encanta la heredad que me ha tocado.
7 Yo bendigo al Señor, que me aconseja,
hasta de noche mi conciencia me advierte;
8 tengo siempre al Señor en mi presencia,
lo tengo a mi derecha y así nunca tropiezo.
9 Por eso se alegra mi corazón, se gozan mis entrañas,
todo mi ser descansa bien seguro,
10 pues Tú no me entregaras a la muerte
ni dejaras que tu amigo fiel baje a la tumba.

1 Nieto M. Evaristo, La Santa Biblia, Ediciones San Pablo 1998.


11 Me enseñaras el camino de la vida,
plenitud de gozo en tu presencia,
alegría perpetua a tu derecha.

Contexto literario
El libro de los salmos es un texto distinto a los demás porque está formado por
diferentes tipos de oraciones, y a la vez, es un resumen de toda la teología de la
Escritura. Los autores de los salmos van a ofrecer su experiencia religiosa en varias
composiciones artísticas con diferentes tipos de géneros: salmos de suplicas o
lamentos ante el dolor, de acción de gracias y de confianza, etc. Los tres géneros:
suplica, acción de gracias y confianza guardan una unidad. Nosotros para no
abordar esta amplia gama de géneros y otros más que contienen el salterio sólo nos
referiremos al tipo de salmos de confianza, ya que según los autores2 es este género
en donde se encuentra el salmo que analizaremos sal 16 (15). El salmo que nos
compete a nosotros se encuentra en la primera colección de los salmos de David.
A veces el género de confianza se desarrolla ampliamente en todo el salmo como
por ejemplo el salmo 4. En el género de confianza o gratuidad el salmista desarrolla
un sentimiento de seguridad de ser escuchado o ayudado por Dios. Es un abandono
en Dios. El orante se complace en su relación de fe y amor. En este bloque o lo que
es lo mismo la primera colección de los salmos de David encontramos los salmos
4, 11, 16, 23, y el 27,1-6. Otra de las características que posee este género es que
en ellos también se da la alabanza sal 16, 5.
Es de forma habitual que en la plegaria de estos salmos se use los pronombres “tú”
y “yo” o el nombre de Yahveh. Por otro lado, usa con frecuencia los verbos: salvar,
arrancar, socorrer, rescatar. Dios es siempre ayuda, auxilio, protección. Es un
refugio y un cobijo contra el agresor y Yahveh siempre es pastor o herencia sal
16,2.5. Ahora bien, ya que hemos visto el género de confianza o gratuidad de una
forma breve y muy general nos dedicaremos a realizar una estructura literaria del
salmo que nos interesa salmo 16(15).
Si seguimos la traducción que tenemos hoy en día podremos realizar la siguiente
estructura propuesta por Hans J. Kraus3.
Los versículos del 1 al 2 son una expresión de confianza
Los versículos del 3 al 4 son una reflexión sobre la posición de Yahveh con respecto
a los santos, y sobre la relación del orante con los adoradores de ídolos.
Los versículos del 5 al 8 expresan la confianza y seguridad en Yahveh.

2 E. Cisterna Félix, Los salmos, Edit. Claretiana. Vol. V. 2003. Pág. 41


3 Hans, J. K. Los salmos, Ediciones Sígueme Vol. I. Salamanca 1993. Pág. 363
Los versículos del 9 al 11 son la certidumbre de ser salvado de la muerte
El salmo se parece a una oración de confianza en Dios. Por la profesión de lealtad
a Dios se emparenta con los salmos 115 y 135. El salmo 16 (15) encajaría muy bien
en boca de un sacerdote el día de su consagración o de un levita el día de su
dedicación Ex 29. Al comienzo del salmo en los versículos 1 y 2 es parecido al de
una súplica porque el que reza pide protección y asilo. Con esto la oración se
transforma en alabanza. Para el orante no hay más bien que estar bajo el amparo
de su Dios. Otros por el contrario corren tras los santos y los príncipes de la tierra,
que multiplican ídolos y lugares de culto como si en Dios no hubiera protección
alguna y amor que satisfaga todo deseo, por eso en los versículos 3 al 4 el orante
no desea contacto, ni les tributa honores, ni siquiera toma sus nombres en su boca.
Es de tener en cuenta que en los versos 2 al 4a presentan dificultades textuales
graves ya que se encuentran los mismos incompletos y mutilados por lo que esto
les ha traído dificultades a los exegetas a la hora de hacer su interpretación 4. Los
versículos del 5 al 6 hacen su aparición expresiones con aires de himno, que hablan
de la confianza del salmista, pero, lo que llama más la atención es el tema de la
herencia que le ha tocado al fiel, que no es una simple herencia material sino, la
herencia que le corresponde por estar cerca de Dios, es en definitiva Yahveh mismo.
En el versículo 7 se encuentra personalizado lo sapiencial ya que Dios es el maestro
que aconseja sin mediadores. En el verso 8 el salmista le dice a Dios su experiencia,
lo que siente con él y junto a él. En los versos 9 al 10 se nota fuertemente el
sentimiento de confianza y de gozo, puesto que Yahveh intervino con un consejo y
se halla siempre presente, aunque el cuerpo esté amenazado por la muerte. Los
especialistas se preguntan si el salmista está hablando de la salvación de la muerte
o es simplemente la esperanza en la resurrección. El salmo termina en el versículo
11 cuando el salmista desea vivir en plenitud al lado de Dios, pero esto no significa
evitar el abismo y la fosa sino encontrar el camino hacia la vida eterna durante la
vida terrena. El salmo 16 es citado en Hch 2, 24 y en 13, 34 para hacerle una lectura
cristiana, se le aplica a la resurrección de Jesús, de aquí que la comunidad cristiana
lo use en la oración con la esperanza segura en la resurrección.
Contexto histórico
Se sabe que los salmos fueron compuestos, rezados y recopilados en un periodo
de tiempo de muchos siglos. En los salmos nos encontramos con que los textos
base fueron ampliados y se hicieron retoques a medida que fue pasando el tiempo,
esto para orar con él durante la misma. Es muy difícil reconstruir la historia de las
diferentes colecciones salmicas, sin embargo, la primera colección de David que es
la que a nosotros nos interesa según los estudiosos seria la colección más antigua5.
Se puede sostener que dicha colección data del tiempo de la realeza, aunque
después se les haya hecho algunas adaptaciones como ya dijimos antes. Diversos

4 Luis A. Schokel. Biblia del peregrino. Edición de estudio. Tomo II. Edit. Verbo Divino.
5 Félix E. Cisterna, Los salmos, Edit. Claretiana. Vol. V. 2003. Pág. 50
autores sostienen que David haya podido contribuir en la composición de algún
salmo, pero se piensa que ninguno de los compuestos por David haya llegado hasta
nosotros y que los que tenemos en esta colección hayan sido compuestos más
tarde, a partir del siglo VIII. Como fecha final todo el mundo acepta el posexilio 6. El
culto al segundo templo y la reforma de Esdras están reflejados en algunos de ellos
por ejemplo la preocupación por la ley del salmo 19.
Ahora bien, para hacer una datación de manera particular del salmo 16 (15) los
autores piensan a veces en las circunstancias que pueden observarse en Is 57, 3;
62, 11 y 65, 1. De aquí que algunos se inclinen por datar el salmo a la situación de
la diáspora, después del destierro. A. Weiser, cree que el salmo se remonta al
contexto de un culto de una festividad para celebrar la Alianza, en tiempos
anteriores al destierro, pero esto es solo una hipótesis. Los especialistas no se
cierran a la posibilidad de una fecha de composición de este salmo antes del
destierro.
Contexto teológico
Lo primero que observamos en este salmo es que es una plegaria de confianza en
Yahveh. El orante pide auxilio y protección al inicio de su oración. Por eso se piensa
que este salmo se entonaba en el recinto del santuario. Por los versículos 4 al 6 se
cree que aquí está hablando un sacerdote, un levita. Por eso se considera este
salmo una oración sacerdotal. Otro elemento teológico que salta a la vista es la
personificación de lo sapiencial: Dios mismo es el maestro que aconseja (versículo
7) y muestra el camino. En el salmo 16 los bienes del que se hablan son Dios mismo,
la saciedad está en su compañía. El Señor protege al hombre entregado a él.
Según los versículos 8 y 11 Dios está a la diestra del orante y el orante está a la
diestra de Dios. El que hace la plegaria se encuentra dominado por las emociones
y sentimientos de gozo y alegría, tranquilidad, confianza, saciedad, satisfacción.
También el salmista le dice a Dios su experiencia, lo que se siente al estar junto a
él. (versículo 9)
Ahora bien, ya hemos dicho anteriormente que la última parte del salmo el Nuevo
Testamento le hace una lectura cristiana para hablar de la resurrección de Jesús.
Esto le ha hecho dar una dimensión mesiánica y le ha dado una interpretación
nueva. El orante desea vivir y habla de la vida. La amistad divina es para él la fuente
de la vida: Dios es quien le defiende de todos los peligros y corona sus días de los
bienes deseables. Aunque en el salmo no se habla de la resurrección ni de la gloria,
la interpretación de Nuevo Testamento no destruye su sentido, sino que los amplia
hacia las dimensiones todas de la vida. Por eso decimos que la vida plena del
salmista consiste en la amistad con Dios, con ella no se siente la amenaza de la
muerte.

6Hans, J. K. Los salmos, Ediciones Sígueme Vol. I. Salamanca 1993. Pág. 364
Actualización del mensaje
El salmo 16 (15) es una hermosa suplica de confianza en Dios y a mi entender
pareciera que el que reza delante de Yahveh se siente perseguido o abrumado por
los problemas y persecuciones de la vida por eso se refugia en Dios para sentirse
seguro. Cuantas veces a nosotros los problemas de la vida nos desbordan y parece
que las dificultades no tienen fin alguno, a pesar de nuestra oración pareciera que
Dios no las escucha y guarda silencio, entonces es aquí en estos instantes en que
se pone a prueba nuestra confianza y fidelidad en Dios. Es la pregunta existencial
de cualquier hombre y que la Biblia nos lo deja ver claramente: ¿Señor cuando te
acordaras de nosotros? ¿Por qué no actúas? Parece que en algún momento el
hombre dijera: “el Señor se ha olvidado de nosotros”. Pero en realidad no es así
Dios permanece y acontece en medio de la angustia y de la desesperanza. Dios
actúa, pero no como nosotros lo pensamos ya que él hace las cosas distintas a la
de los hombres, su actuar es un actuar misterioso y no coincide con los nuestros,
se esconde detrás de los hechos y desde allí actúa de una manera compleja.
Los problemas de la vida se desvanecen, así como la sal en el agua, pero, al final
sólo queda Dios, su amor y su ternura nunca pasan y esto para nosotros es motivo
de esperanza y de alegría que nos puede ayudar a la hora de enfrentar las
dificultades. Dios siempre permanecerá intacto.
En una sociedad muchas veces anticristiana el mejor refugio está en Dios, es decir,
empezando a vivir desde lo más profundo de nuestro ser la buena noticia de Jesús.
Refugiarse en Dios es mirarlo a él cara a cara en la oración, en su Palabra, en el
hermano que sufre, en los sacramentos. La confianza se acrecienta más en Dios
cuando nosotros nos relacionamos continuamente con él a través de diferentes
medios. El hombre nunca debe dejar perder su confianza en su creador ya que es
éste el que le da el sustento a la vida y a su propia naturaleza.
Bibliografía
Schokel A. Luis, Biblia del peregrino. Edición de estudio. Tomo II. Edit. Verbo Divino.
Navarra 1997
Hans, J. K. Los salmos, Ediciones Sígueme Vol. I. Salamanca 1993.
Félix E. Cisterna, Los salmos, Edit. Claretiana. Vol. V. Buenos aires 2003.
Collins Mattieu, El libro de los salmos, Editorial Verbo divino. Navarra 1997.
González Ángel, El libro de los Salmos, Editorial Herder. Barcelona 1966
Schokel A. Luis y Carniti Cecilia, Salmos. Tomo I. Editorial Verbo Divino. Navarra
1992

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