Operaciones con productos derivados - El registro contable de las operaciones financieras

derivadas se apega a lo señalado en el catálogo mínimo a que hace referencia el Criterio Contable
B-16 del Anexo 22.1.2 de la CUSF, así como a lo dispuesto en las Normas de Información Financiera
emitidas por el CINIF, siempre y cuando ello no sea contrario a lo establecido en la LISF.

Con el propósito de reducir la exposición al riesgo, la Aseguradora, realiza operaciones financieras

derivadas única y exclusivamente para fines de cobertura. En este sentido, todas las operaciones
con productos derivados están vinculadas a activos afectos a la cobertura de la Base de Inversión o
que respaldan Fondos Propios Admisibles. En ningún caso el vencimiento del derivado puede ser
mayor al vencimiento del instrumento financiero cubierto. Si en un escenario de mediano o largo
plazo, dichos activos tuviesen que ser vendidos, los productos derivados que los cubrían, deberán
cancelarse o vincularse a un nuevo instrumento que requiera de esta cobertura.

Los objetivos específicos de la Aseguradora sobre la celebración de operaciones financieras

derivadas son: a) Obtener un rendimiento superior a posibles inversiones en moneda local; b)
Mitigar en todo momento los riesgos inherentes a las inversiones; y c) Diversificar el portafolio en
el mercado global para lograr un mejor calce de activos-pasivos.

Las estrategias utilizadas por la Aseguradora buscan reducir riesgos en los activos que cubren las
reservas técnicas. Todas las estrategias a utilizar cuentan con una simulación de riesgo previa que
permite asegurar la eficiencia de la cobertura sobre el activo. El área de riesgos hace un
seguimiento diario a dicha cobertura para asegurar su complimiento a lo largo de la vigencia del
instrumento derivado.

La selección de instrumentos se realiza de acuerdo a las necesidades de los activos que cubren
reservas técnicas y fondos propios admisibles buscando en el universo de instrumentos derivados
ya sea en mercados listados o extrabursátiles. Cada una de las estrategias de cobertura es
documentada registrando los objetivos de dicha transacción.

De acuerdo con la CUSF, la Aseguradora invierte únicamente en instrumentos globales con

calificación mínima de BB+ y listados en un país elegible (Anexo 8.2.2 de la CUSF); asimismo y
haciendo uso de los equipos de crédito internos, la Aseguradora bajo estrictos criterios de
aprobación selecciona los instrumentos pertinentes para el portafolio, por plazo, tasa y riesgo
crediticio.

Cuando los derivados son contratados con la finalidad de cubrir riesgos y cumplen con todos los
requisitos de cobertura, se documenta su designación al inicio de la operación de cobertura,
describiendo el objetivo, características y como se llevará a cabo la medición de la efectividad,
aplicables a esa operación.

La Aseguradora reconoce todos los activos o pasivos que surgen de las operaciones con
instrumentos financieros derivados en el balance general consolidado a valor razonable. El valor
razonable se determina con base en la información proporcionada por el proveedor de precios.

Inversiones en valores como subyacentes de operaciones con productos derivados –

Incluye inversiones en títulos de deuda y de capital; se clasifican al momento de su adquisición

para su valuación y registro, con base en la intención que tenga la administración de la
Aseguradora respecto a su utilización como: títulos con fines de negociación o disponibles para la
venta de acuerdo con lo establecido en el Criterio Contable B-2 del Anexo 22.1.2. de la CUSF.