N° 05 -2020 PROTECCIÓN RESPIRATORIA

Un respirador es vital en ambientes enrarecidos y en áreas donde los niveles de

agentes contaminantes son altos. Un respirador le ayuda a protegerse de los
riesgos que le pueden causar daños, enfermedades e incluso la muerte.
Los siguientes síntomas nos pueden dar una idea de que estamos ingresando a un
área donde es necesario el uso de protección respiratoria:
Irritación de la nariz, garganta y pulmones.
Asfixia.
Las consecuencias de no usar protección respiratoria pueden ser daños al
corazón, pulmones, hígado, riñones, sistema nervioso y reproductivo.
Dependiendo del área donde desarrollaremos nuestras actividades, podemos usar dos tipos de
respiradores:

1. Purificadores de aire: indicados para áreas donde la atmósfera tenga concentraciones de agentes
nocivos o tóxicos en forma de gases, vapores, nieblas, aerosoles, polvo, etc., por encima del límite
permisible. Los purificadores de aire que podemos usar son:
DESCRIPCIÓN
Respiradores desechables.
Contra vapores
Respiradores de media cara. Contra gases ácidos
Respiradores de rostro completo. Contra vapores
orgánicos, gases ácidos
Para este tipo de respirador es importante identificar qué filtros
Contra amoníaco
nos ayudarán a controlar el riesgo de inhalación, la simbología es
la siguiente: Contra formaldehido

Alta eficiencia para

2. Proveedores de aires: áreas donde el porcentaje de oxígeno en el partículas tóxicas
ambiente está por debajo de 19.5% (deficiencia de oxígeno) o hay
temperaturas extremas que pueden dañar las vías respiratorias. En estos casos, este tipo de
respiradores nos proveen aire fresco de manera directa, algunos tipos son:

Capuchas con línea de aire.

Equipo autónomo de respiración autónoma.

Recomendaciones para el cuidado del respirador:

Reemplace los filtros cuando sea necesario. Algunos tienen un indicador que muestra el término de
su vida útil.
Lave su respirador con agua tibia y detergente suave. Revise la careta y verifique si hay
hendiduras, desgarros, grietas o pérdidas en válvula o sello. Guarde su respirador en un lugar
fresco y seco, dentro de una bolsa plástica u otro envoltorio.

¿Cómo darse cuenta de que es necesario cambiar sus filtros?

Los filtros usados para partículas dificultan la respiración cuando se
encuentran obstruidos.
Los filtros usados contra vapores le harán oler un contaminante químico
cuando los materiales adsorbentes del filtro se hayan saturado. Cuando
ocurra, reemplace el filtro del respirador de inmediato.