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Temeridad

La temeridad, del latín “temeritatis” es el sustantivo abstracto que nace del adjetivo temerario, que
proviene del adverbio latino “temeré” con el significado de lo que resulta oscuro o cegado.
Etimológicamente actuar con temeridad quiere decir hacerlo en la oscuridad. La palabra latina
Temeritas a su vez vino de Temus (oscuridad), luego se formó temeré (ceguera, lógicamente
implicando que quien camina ciego o, lo que es lo mismo, sin poder ver por dónde va, lo hace con
temeridad), de allí que la temeridad hace referencia a un accionar irreflexivo, que conduce a
exponerse a peligros que pudieron evitarse.

Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua, la temeridad es una cualidad, actitud o


comportamiento caracterizado por una exposición excesiva a situaciones de riesgo o peligro de
pérdida o daño, sin un premeditado examen y sin medir las consecuencias. Sus sinónimos
jerarquizan la falta de cuidado (imprudencia, precipitación, negligencia, descuido), así como el
exceso de exposición (osadía, atrevimiento, aventura, peligrosidad, riesgo). Se contrapone a la
prudencia, con sus sinónimos de cuidado, moderación y sensatez.

Es paradójico, que un comportamiento así definido, se considere socialmente como rasgo de


“normalidad” y por lo tanto poco problematizado.

La temeridad no es una virtud sino un defecto, pues si bien implica valentía, ésta es totalmente
inútil, ya que en vez de lograr el objetivo puede ponerlo en riesgo o aumentarlo. Por ejemplo un
conductor temerario es aquel que quiere llegar rápido a su destino y conduce más velocidad de lo
permitido, lo que tal vez pueda resultar eficaz, pero también puede constituirse en un peligro para
sí y para otros.

La temeridad excluye el sentimiento de miedo, en el sentido útil de ayuda y aviso frente al peligro.
Quien es valiente siente temor, evalúa sus posibilidades y si las tiene se arriesga, enfrentando sus
miedos. El temerario se lanza a la acción sin ningún recaudo, bajo el impulso de su ansiedad. Las
conductas temerarias son mucho más frecuentes en los jóvenes.

Frases sobre temeridad

“La valentía que no se funda sobre la base de la prudencia se llama temeridad, y las hazañas del
temerario más se atribuyen a la buena fortuna que a su ánimo. “ — Miguel de Cervantes

“¿No sabes tú que no es valentía la temeridad? “ — Miguel de Cervantes

“El valor es hijo de la prudencia, no de la temeridad” ― Pedro Calderón de la Barca


En Derecho la temeridad tiene un doble significado:

1) Se dice que es temeraria la conducta que infringe una norma penal cuando no se observa el
más elemental cuidado en la realización de la acción, faltando a las reglas de prudencia que
observaría el común de las personas. Estamos en la esfera del derecho penal que sanciona las
acciones cometidas por medio de la imprudencia, en su modalidad máxima o de grado más
elevado. Es la llamada imprudencia temeraria.
2) En un sentido más limitado y preciso, el vocablo “temeridad” se aúna a las consecuencias
procesales que se producen para quien en el curso de un proceso determinado se desenvuelve
con esa ausencia de cuidado.

Esa actuación temeraria, tiene un significado más profundo que en el primer caso, pues no se
conforma con la falta de diligencia, sino que trasciende a la ausencia de fundamento, casi a la
pretensión disparatada e incoherente de quien actúa temerariamente y encuentra su enclave de
aplicación en materia de las costas judiciales, pues conduce a su imposición cuando se aprecia
que alguna de las partes procesales se comporta deliberadamente en el curso de un proceso de
manera infundada. Y ese comportamiento incoherente, carece de soporte jurídico de la pretensión
que se deduce, provoca la imposición de una sanción procesal, que es la condena en costas. (tesis
177044, TCC)

En Psicología la temeridad tiene un doble significado:

Temeridad es una de las manifestaciones extremas en la gestión del miedo (en el otro extremo,
estaría el aislamiento)

Sin embargo, si la especie humana se ha desarrollado, ha sido precisamente gracias a los actos
temerarios.

Tales actos no solo se han emprendido desde la voluntad de defender la vida (por salvar a un niño
me arrojo al agua helada) muchos actos temerarios han sido y son impulsados por la necesidad
que el individuo siente de ampliar su propio mundo. Por esa necesidad de desarrollarse, el
individuo se encuentra en la tesitura de poner en peligro su integridad, o la del sistema en el que se
halla.
Todos vivimos en un sistema, que es la familia; todos estamos dentro de distintos sistemas. Y cada
uno de ellos administra el miedo, los excesos que son vistos como buenos y los que atentan contra
el sistema. Es al individuo, en conciencia, a quien le toca evaluar, decidir, actuar.

Fuente

Diccionario de etimologías, consulta electrónica en: http://etimologias.dechile.net/?temerario

Suprema Corte de Justicia de la Nación, semanario judicial de la federación, tesis y ejecutorias


dictadas en controversias constitucionales y en acciones de inconstitucionalidad. Consulta
electrónica en: https://sjf.scjn.gob.mx/SJFSem/Paginas/SemanarioV5.aspx

Jorge Zentner y Marcelo Antoni. (2014). Las cuatro emociones básicas. España: Herder.

DeConceptos.com, consulta electrónica en: https://deconceptos.com/ciencias-juridicas/temeridad

Fuente: https://citas.in/temas/temeridad/

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