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Adela, Luc y Nico, aprobaban todas las materias con muy buenas notas excepto

matemáticas.

Cuando reprobaron el último examen de matemáticas, su profesor, Felipe Romero,

decidió darles una segunda oportunidad, esta vez no consistía en un examen

normal, sino en un juego, en un juego donde el iba a pretender ser asesinado y

con una serie de preguntas ellos podrían resolver el caso.

Al día siguiente, para dar inicio al juego, el profesor se presenta ante ellos

envuelto en sangre y moribundo, diciéndoles que su supuesto asesino le había

disparado de verdad, y que tenían que detenerlo antes de que escapara, así que

debían adivinar quién era el supuesto.

Antes de morir el profesor les dijo que el primer sobre estaba en su bolsillo, que lo

tomarán por que el asesino se iría a las 6.

Ellos llamaron a la policía y cuando esta llego, el cuerpo ya no estaba. Al retirarse

los policías ellos decidieron abrir el sobre.

Fueron resolviendo los problemas tal cual se les indicaba, del 1 al 7, pero al llegar

al 8 descubrieron que era muy difícil de resolver, ya que era un problema del

examen que no habían podido resolver y solo les quedaba media hora.

Tras un rato de mucho pensar, dieron con la solución y descubrieron en nombre

del asesino, el ''DIRECTOR''. Los niños corrieron hacia la escuela buscando al

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supuesto asesino, cuál sería su sorpresa que al entrar a la oficina del director

estaba ahí también su profesor totalmente vivo.

El profesor les explico que su novia se dedicaba al mundo del cine y pensó que

con un poco de maquillaje podría jugarles esa broma y así motivarlos para pasar

el examen. El profesor les dijo que estaban aprobados.

Los tres niños no lo podían creer, su profesor vivo y además habían pasado el

examen.

Luego de esto ellos por fin pudieron pasar un verano libre de matemáticas.