Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales

Licenciatura en Musicoterapia
Año: 2019
Materia: Introducción a la Musicoterapia
Cátedra: Lichtensztejn-Macchi
Clase: 3
Alumno: Lucas Elias Amarilla.

En primera instancia me gustaría definir que en lo personal (previa lectura a los textos
a continuación) yo definía a la musicalidad en relación pura y exclusivamente a la habilidad de
poder hacer música mediante algún tipo de instrumento, excluyendo a aquellos por ejemplo
que son oyentes; no obstante del lado no la vinculaba en relación al talento.

En el texto de Zuckerkandl, se comienza abriendo el tema de la musicalidad dando a

entender la definición que esta tiene en la actualidad la cual es una falacia resumida en:
talento especial que tienen individuos para establecer un vinculo con la música de manera
cercana. Claramente esto genera una división entre aquellos que seres musicales y aquellos
que no “nacen” o “logran” serlo. Esto se convierte en un concepto derivado y relativo. Por otra
parte, para definir a la musicalidad en su concepto mas original y válido, comienza evocando al
Fedón de Platón en el cual se atribuía a la musicalidad como una cualidad del hombre en sí y lo
definía bajo el concepto de Animal Musical. Este es un término con el que discrepo bastante ya
que lo que nos diferencia de los animales es nuestra capacidad de racionalizar las cosas y por
ende la posibilidad de desarrollas habilidades para mejorar ya que estamos siendo conscientes
(en muchos casos) de todo aquellos que realizamos y deseamos. No obstante, entiendo la
referencia como la pertenencia de la musicalidad al gen del ser en humano, como una cualidad
nata y bajo ese tipo de metáfora.
Zuckerkandl presenta también las características que considera Géza Révész quien
considera a la personal musical como aquella que se destaca por la conquista mental de la
música y presenta un nuevo punto crucial: reconocer el grado de musicalidad como una etapa
de transición entre dos puntas mediante el juicio de la obra por parte de la persona. En otras
palabras caracteriza a la musicalidad como receptiva, sin confrontarla con la musicalidad
creativa.
En el texto se presentan resumidas cuatros aristas del desarrollo de la musicalidad:
obra, compositor, intérprete y audiencia. Obras compuestas individualmente bajo las ideas de
un creador (compositor constituyendo un “microcosmos”) las cuales demandan una notación
musical que debe ser interpretada por ejecutores dirigidas para una audiencia (la cual
responde según varios niveles de intensidad , sensibilidad y comprensión).
Zuckerkandl presenta también como musicalmente fue mutando la música como
cualidad nata a través de los tiempos y como a esta se la considero en distintos estadios
históricos: Música y Mitología (música como bendición y ofrenda), Música y Religión (música
empleada como rezo durante el Canto gregoriano por ejemplo), Música y Cultura (la música
folclórica que nunca queda concluida y se enseña a través de generación en generación).
Para concluir Zuckerkandl nos comenta que es justa la afirmación de atribuir la
musicalidad a los humanos como parte de ellos desde su raíz: el hombre es hombre musical.
 Levitin nos comenta en un poco lo que primera instancia plantea Zuckerkandl, ese
concepto relativo de la musicalidad relacionada al talento y quizás en parte a la
industrialización de la música la cual se ve afectada por otras aristas como la cultura. Nos invita
a pensar también como en diferentes culturas esta se la observa en su esencia más pura y se la
atribuye al hombre como tal ( léase su ejemplo de Jim Ferguson en Lesotho); de todos modos
nombra como nuestra cultura Occidental, ha establecido por ejemplo una distinción entre
interpretés especializados y aquellos músicos que solo “entretengan”. Como dato relevante,
Levitin nos trae a colación (a través del psicólogo cognitivo Roger Shepard) que nuestras
mentes coevolucionaron con el mundo físico, por ende las experiencias musicales tales como
oír, interpretar y componer música tienen lugar en las distintas áreas del cerebro y exige una
participación de todo el subsistema neuronal. Levitin presenta una perspectiva de
neurociencia cognitiva para hacer investigaciones en el campo de la música.

Elliot nos introduce el concepto de musicing (musicar) como una práctica humana
diversa. Nos recuerda que antes de las composiciones musicales, el hacer musical existía en
improvisaciones y cantos como redenciones e improvisaciones. Cabe destacar que debe haber
implícita una intención, la acción de musicing debe tener un propósito. Elliot nos indica que la
musicalidad se demuestra únicamente en acciones y es una forma de conocimiento práctico o
práctica reflexiva, la cual se ve influenciada por cuatro tipos de conocimiento musical:
conocimiento musical formal, el informal, el musical impresionista y el de supervisión. Dichos
conocimientos contribuyen de manera periférica brindando su apoyo. Se define también a la
musicalidad como práctica-especifica, esta difiera de practica en practica gracias a los 4
conocimientos musicales antes mencionados.

Ansdell coincide en el aspecto de que el ser musical es parte del ser humano y no solo
de unos pocos con talento especial. Nos comenta que todos poseen un núcleo musical central.
Nos comenta que más allá de observar a la musicalidad como una capacidad personal que
tiene origen biológico, dicha musicalidad es activada, respaldada y extendida por la ecología
sociocultural circundante (en su texto presenta los diferentes estadios musicales que puede
experienciar una persona a través de su desarrollo y crecimiento). Nos presenta (junto con
Pavlicevic) tres dimensiones dinámicamente interdependientes: Musicalidad (capacidad
humana central que nos habilita como una relación natural con la música; Musicianship (una
habilidad que deviene de la musicalidad, que se cultiva y se pone en acción dentro del mundo
socio cultura; por así decirlo habilidades musicales) y Musicking (musiquear como actividad
social participativa del musicianhship que ocurre durante ocasiones especificas). Ansdell nos
presenta un ecosistema musical reglado por la interdependencia.

Ya finalizados de leer todos los textos, he adquirido la concepción de nuevos términos

como los de Ansdell pero sobre todo quiero destacar esta noción y conciencia de que todos
somos seres musicales desde nuestros orígenes.