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- Sus miedos se refieren a brujas y fantasmas; también tiene miedo al dolor físico. A veces
no manifiestan sus miedos y entonces hay que intentar comprender sus terrores y estar a
su lado.
- Quiere unir el mundo escolar y el familiar: quiere saber qué piensas sus padres del colegio
y le gustan los contactos profesores/as-padres/madres.
- Le entusiasma todo lo nuevo. Acomete las tareas con entusiasmo aunque se cansa
pronto. Necesita estímulos verbales.
- Se siente feliz de mostrar lo que ha conseguido hacer él/ella solo/a. Le disgusta que
hagan por él/ella las cosas que se siente capaz de hacer sin ayuda.
2. LA CONSTRUCCIÓN DE SU PERSONALIDAD.
La explicación a estas actuaciones hay que buscarla en la llegada de una nueva era para
el/la niño/a que se llenará, desde ahora, de actividad intelectual y de calma afectiva y que a
través de cinco años va a llevarle hasta el umbral de la pubertad.
A nivel orgánico, también manifiestan los cambios; comienzan a caerse los dientes de
leche y apuntan los primeros molares definitivos. El equilibrio corporal se deteriora y el/la niño/a
se queja de enfermedades bastante reales a las que se debe prestar atención.
Es dominante y puede ser tímido/a o desenvuelto/a. Provoca a sus hermanos/as, dice “no”
a sus padres, puede decir que no quiere ir al colegio y le cuesta lavarse y vestirse. Empieza a
tener presunción y le gusta elegir la ropa aunque no la cuide en absoluto y sea poco
ordenado/a.
Todo esto lo hace para asegurarse de su potencia, para darse cuenta de su valor y de su
fuerza, para comprobar que está vivo/a y conseguir un puesto entre los demás, construir su
individualidad y como base de su futura personalidad.
Una vez lograda la aclimatación al nuevo curso escolar, el gran objetivo del Primer Ciclo
de la Educación Primaria, es el aprendizaje de la lectura y la escritura.
- Inteligencia analítica.
4. ORIENTACIONES GENERALES.
- Fomentar las manualizaciones: recortar, plastilina, barro, juegos con las manos, etc.
- Fomentar el vocabulario: conversar, introducirle en las relaciones familiares, escucharle
sin dar por entendido el mensaje antes de haber terminado él/ella de hablar.
- Evitar la competencia, no compararle con nadie pues no es cierto que así se le prepare
mejor para la vida futura. Cada persona es diferente y tiene sus propias cualidades que
deben ser respetadas y fomentadas.
En el mundo de los/las niños/as el juego es una actividad muy seria, es su vida misma. Es
una actividad sin objetivos, sin metas; no tiene más fin que ella misma: va desde el jaleo loco,
la risa, el dejarse llevar por la fantasía, hasta el divertirse superándose y aprendiendo cosas
nuevas.
Conociendo a cada niño/a, reflexionando sobre sus gustos, sus aspiraciones, sus deseos
y luchas por ser más feliz, debemos elegir su regalo y así tendremos en sus manos el juguete o
el juego que más le ayuda a ser él/ella mismo/a.
Por esta razón, no se debe dejar al azar, o a los intereses del mercado y de la presión de
la televisión, la elección de los juguetes. Este es un acto que nos compromete, y por lo tanto es
responsable.
Debemos exigir de cada juguete el que sea una ayuda para la actividad del/de la niño/a,
que le ayude a jugar más y nunca le sustituya o le dé las cosas hechas, acabadas, ya que esos
juguetes mutilan su actividad de jugar.
El mejor juguete es el que exige la participación del/de la niño/a. Que sea sólido y se
conserve. Se debe evitar que el juguete sea tan completo, tan acabado que el/la niño/a no
pueda jugar con él, y se limite a mirarlo o a utilizarlo como adorno.
También hay que evitar el regalar muchos juguetes. El/La niño/a necesita establecer una
relación afectiva con cada uno, necesita quererle para jugar con él. Cuando se regalan muchos
y sin sentido, su juego se limita a estropearlos y tirarlos, sin haber sentido la necesidad de
jugar.
Los/Las niños/as son felices y juegan mejor cuando no tienen nada, cuando imitan a la
maestra, a la mamá, al señor del garaje. Enseguida surgen los pupitres, el café imaginario y los
platos se convierten en volantes de coches. Los/Las niños/as son los/las protagonistas, y al
asumir el papel del maestro o de la mamá es cuando son ellos/as mismos/as.
Siempre será importante que tenga un lugar para sus juguetes, que los guarde y ordene, y
que sea él/ella mismo/a el responsable de su cuidado.
También es importante que los padres dediquen parte de su tiempo a jugar con sus
hijos/as.
Es importante dar rienda suelta a la fantasía, a la ficción; hacer posible que cada niño/a
exprese el mundo interior que tiene dentro.
Pueden ayudarle a adquirir fuerza, dominio, seguridad y precisión. Esto puede hacer que
sus manos se transformen en manos creadoras. Educando sus manos desarrollamos la
capacidad creadora y mental. Desarrollará los sentidos, percibirá los objetos con sus formas,
multiplicará sus experiencias.
- Recortables.
- Muñecos articulados.
- Arcilla.
- Juguetes desmontables.
- Mosaicos.
- Pizarra.
- Sellos para estampar.
Es necesario que el juguete fomente la fantasía, que no sea un medio de una sola
solución.
- Mecano.
- Disfraces.
- Canicas.
- Juegos de lotería.
- Balón.
- Bicicleta.
- Zancos.
- Juegos de puntería.
- Bolos.
- Patines.
- Pelotas.
Es importante que en la lista de regalos haya siempre libros adecuados para esta
edad. Para más información podéis preguntar al/ a la maestro/a de vuestro/a hijo/a.