DOMINGO 6 DURANTE EL AÑO - 16 DE FEBRERO 2020 - Nº 2506 -CICLO A
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“LA SABIDURÍA DEL EVANGELIO”
Hoy Jesús nos dice cuál debe ser la actitud del discípulo
ante la Ley antigua. Y nos lo dice con su ejemplo de
aceptación, pero también de libertad y perfeccionamiento.
A la luz de esta afirmación, profundicemos el mensaje de
las lecturas bíblicas de este domingo.
La Libertad: Eclesiástico 15, 16--21
Este fragmento forma parte de una gran sección (15,11--
18,14) que trata el problema de la libertad y del pecado. El
sabio apela a la libertad del individuo para decidir si quiere
seguir uno a otro camino, el fuego o el agua, la vida o la
muerte. Es cada uno quien decide mantenerse fiel o no a
los mandamientos de Dios. No es Dios quien nos empuja
a hacer el mal, ni tampoco nos autoriza a pecar. Es el ser
humano quien escoge.
La Sabiduría: 1 Corintios 2, 6-10
Después de afirmar que la fe no se fundamenta en la
sabiduría, ahora san Pablo dice que sí hay una Sabiduría
de Dios que sólo puede ser enseñada a los que tienen
una fe madura. Los instrumentos de los poderes malignos
intermedios son las autoridades tiranas de este mundo que
se oponen al Evangelio y clavan en la Cruz al Señor de la
gloria. La sabiduría divina escondida, predestinada por Dios
es el Evangelio de Jesucristo, una Sabiduría que sólo puede
ser comprendida gracias a la acción del Espíritu Santo.
En Cristo se plenifica la ley: Mateo 5, 17-37
El fragmento que proclamaremos es la respuesta cristiana
PREGUNTAS ¿Sigo la ética que Jesús proclama, o la ética de mi ambiente, de mi cultura?// ¿Soy coherente con
DE REFLEXIÓN la fe cristiana católica que profeso? ¿Por qué?
RITOS INICIALES
M. Dios nos llama a gozar de la felicidad de la vida. Nos
da su palabra de vida y nos enseña a vivir como hijos de
la luz. Hoy nos invita a elegir entre el camino que conduce
a la muerte y la vida que lleva a la vida. Iniciemos nuestra
celebración uniendo nuestras voces en el canto de entrada.
1. CANTO DE ENTRADA “Vienen con alegría” (VSJ 40; E.R 9)
Vienen con alegría, Señor,
cantando vienen con alegría, Señor,
los que caminan por la vida, Señor,
sembrando tu paz y amor. (2-2)
Vienen trayendo la esperanza
a un mundo cargado de ansiedad,
a un mundo que busca y que no alcanza
caminos de amor y de amistad.
Vienen trayendo entre sus manos
esfuerzos de hermanos por la paz,
deseos de un mundo más humano,
que nace del bien y la verdad.
a la cuestión sobre la validez de la Ley de Moisés y sobre
el lugar que ocupa en el nuevo Pueblo de Dios. Jesús no
desautoriza al Antiguo Testamento, sino que le da plenitud,
es decir, lleva a la Ley a su perfección. Por un lado, afirma
que hay que cumplir toda la Ley; pero advierte que la nueva
justicia del Reino de Dios va más allá de la justicia de los
doctores de la Ley y de los fariseos. Partiendo de unos
mandamientos de la Ley, Jesús muestra en qué consiste “la
perfección de esa ley”: Al fin y al cabo, se trata de ir al fondo,
al interior; se trata de superar el legalismo de la Ley, para
ir al corazón: Es fácil cumplir la letra de la Ley; pero este
cumplimiento conduce a la justicia de los fariseos, a la doble
conducta de los maestros de la Ley. Jesús va al corazón de
la Ley, porque sólo así se puede vivir según la nueva justicia
del Reino de Dios. Entonces el sí es sí y el no es no.
2. SALUDO
C. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.
C. Queridos hermanos: “Que Dios los llene de alegría y de
paz en la fe” y que el Espíritu Santo esté constantemente
con ustedes. Y con tu espíritu.
3. ACTO PENITENCIAL
C. Antes de celebrar estos sagrados misterios, reconozcamos
que somos pecadores, y a Dios Padre que quiere la vida y
no la muerte de sus hijos, implorémosle su perdón. (Silencio
breve).
C. Tú que das mandamientos a tu pueblo como señales
de vida y no de muerte: Señor, ten piedad.
C. Tú que no has venido a condenar, sino a perdonar:
Cristo, ten piedad.
C. Tú que reúnes a tus hijos dispersos: Señor, ten piedad.
C. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros,
perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Amén.
4. GLORIA “Gloria a Dios en el cielo -Misa Andina”
(VSJ473; E.R. 709)
5. ORACIÓN COLECTA
C. Oremos (Silencio). Dios nuestro, que te complaces en
habitar en los corazones rectos y sencillos, concédenos
la gracia de vivir de tal manera que encuentres en
nosotros una morada digna de tu agrado. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de
los siglos. Amén.
LITURGIA DE LA PALABRA
6. PRIMERA LECTURA
M. El Autor sagrado nos muestra que Dios, desde
su inmensa sabiduría, nos ha hecho libres; por tanto,
somos responsables de las decisiones que tomamos,
sean buenas o malas.
Lectura del libro del Eclesiástico 15, 15-20
Si quieres, puedes observar los mandamientos y
cumplir fielmente lo que agrada al Señor. Él puso ante
ti el fuego y el agua: hacia lo que quieras, extenderás
tu mano. Ante los hombres están la vida y la muerte: a
cada uno se le dará lo que prefiera. Porque grande es la
sabiduría del Señor, Él es fuerte y poderoso, y ve todas
las cosas. Sus ojos están fijos en aquellos que lo temen
y Él conoce todas las obras del hombre. A nadie le
ordenó ser impío ni dio a nadie autorización para pecar.
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor.
7. SALMO RESPONSORIAL   118, 1-2. 4-5. 17-18. 33-34
R.  Felices los que siguen la ley del Señor.
Felices los que van por un camino intachable,
los que siguen la ley del Señor.
Felices los que cumplen sus prescripciones
y lo buscan de todo corazón. R.
9. EVANGELIO
M. Jesús no vino abolir las enseñanzas de la Ley y
los profetas, sino a dar su auténtico cumplimiento.
Jesús nos invita a una vida sincera, desde el corazón
para que se cumpla en nuestra vida diaria las leyes
del Reinado de Dios.
Aleluia.
Bendito eres, Padre, Señor del cielo y de la tierra,
porque revelaste los misterios
del Reino a los pequeños.
Aleluia.
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san juramentos hechos al Señor». Pero Yo les digo que no
Mateo 5, 20-22a. 27-28. 33-34a. 37 (versión brebe Lec. 291) juren de ningún modo. Cuando ustedes digan «sí»,
Jesús dijo a sus discípulos:
Les aseguro que si la justicia de ustedes no es superior Palabra del Señor. / Gloria a Ti, Señor, Jesús.
Tú promulgaste tus mandamientos
para que se cumplieran íntegramente.
¡Ojalá yo me mantenga firme
en la observancia de tus preceptos! R.
Sé bueno con tu servidor,
para que yo viva y pueda cumplir tu palabra.
Abre mis ojos,
para que contemple las maravillas de tu ley. R.
Muéstrame, Señor, el camino de tus preceptos,
y yo los cumpliré a la perfección.
Instrúyeme, para que observe tu ley
y la cumpla de todo corazón. R.
8. SEGUNDA LECTURA
M. El Apóstol nos habla del proyecto que Dios tiene
para nosotros, compara la Sabiduría divina con la
humana y nos muestra que es beneficioso apoyarse en
la misteriosa Sabiduría de Dios, manifestada en Cristo.
Lectura de la primera carta del Apóstol san Pablo a
los cristianos de Corinto 2, 6-10
Hermanos:
Es verdad que anunciamos una sabiduría entre
aquéllos que son personas espiritualmente maduras,
pero no la sabiduría de este mundo ni la que ostentan
los dominadores de este mundo, condenados a la
destrucción.
Lo que anunciamos es una sabiduría de Dios, misteriosa
y secreta, que Él preparó para nuestra gloria antes que
existiera el mundo; aquélla que ninguno de los dominadores
de este mundo alcanzó a conocer, porque si la hubieran
conocido no habrían crucificado al Señor de la gloria.
Nosotros anunciamos, como dice la Escritura, «lo que
nadie vio ni oyó y ni siquiera pudo pensar, aquello que
Dios preparó para los que lo aman». Dios nos reveló
todo esto por medio del Espíritu, porque el Espíritu lo
penetra todo, hasta lo más íntimo de Dios.
Palabra de Dios. / Te alabamos, Señor.
a la de los escribas y fariseos, no entrarán en el Reino
de los Cielos. Ustedes han oído que se dijo a los
antepasados: «No matarás, y el que mata, debe ser
llevado ante el tribunal». Pero Yo les digo que todo
aquel que se irrita contra su hermano, merece ser
condenado por un tribunal. Ustedes han oído que se
dijo: «No cometerás adulterio». Pero Yo les digo: El
que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio
con ella en su corazón.
Ustedes han oído también que se dijo a los
antepasados: «No jurarás falsamente, y cumplirás los
que sea sí, y cuando digan «no», que sea no. Todo lo
que se dice de más, viene del Maligno.
10. HOMILÍA/SILENCIO Compartimos la misma comunión,
11. PROFESIÓN DE FE somos trigo del mismo sembrador;
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del un molino, la vida, nos tritura con dolor:
cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Dios nos hace Eucaristía en el amor.
Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra
y gracia del Espíritu Santo, nació de santa María 14. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue C. Que esta ofrenda nos purifique y renueve, Señor, y
crucificado, muerto y sepultado, descendió a los sea causa de recompensa eterna para quienes cumplen
infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, tu voluntad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
subió a los cielos y está sentado a la derecha de
Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a
juzgar a vivos y muertos. PLEGARIA EUCARÍSTICA
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la
comunión de los santos, el perdón de los pecados, la 15. CANTO DE COMUNIÓN “Ha venido el Señor” (VSJ 197; E.R
resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. 2308)
12. ORACIÓN UNIVERSAL Ha venido el Señor a traernos la paz;
C. Padre Santo, con la confianza de hijos y sabiendo ha venido el Señor
que nos escuchas porque caminamos haciendo tu y en nosotros está.
voluntad, te pedimos humildemente que aceptes
nuestras plegarias. A cada invocación respondemos: Te alabamos, Señor, por tu inmensa bondad.
Por Cristo, óyenos. Te alabamos, Señor, por tu Cuerpo hecho Pan.
Por nuestra Iglesia de Bolivia, para que abunde en
ella la alegría y la ilusión de vivir la Buena Noticia Este Pan celestial nos da fuerza y valor,
del Reino que nos anunció tu Hijo Jesucristo. nos prepara para habitar en el Reino de Dios.
Oremos.
Te alabamos, Señor, por tu inmensa bondad,
Por el Papa Francisco, los Obispos, Sacerdotes
y Diáconos, para que sean pastores fieles al te alabamos, Señor, por tu Cuerpo hecho Pan.
mensaje de tu Hijo y así muestren a la humanidad,
el camino de la salvación que nos conduce a la Tú eres sólo mi Dios, mi Señor, mi heredad,
vida eterna. Oremos. Tú eres sólo mi Dios, mi esperanza en Ti está.
Por los gobernantes nuestro país, para que el
Espíritu de Dios les inspire a trabajar por la paz y ¿Qué podré yo temer, si Tú moras en mí?
la justicia. Oremos. ¿Qué podré yo temer, si yo estoy junto a Ti?
Por todos los que sufren, para que unidos a la 16. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Cruz del Señor Jesús, experimenten el amor del
Padre y la presencia confortadora del Espíritu C. Saciados con el Pan del cielo, te pedimos, Padre, la
Santo, contando siempre con nuestra solidaridad. gracia de desear siempre este alimento que nos da la
Oremos. vida verdadera. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Por todos nosotros, llamados a participar en la
comunión de amor de la Santísima Trinidad, para RITO DE CONCLUSIÓN
que respondamos siempre con generosidad al
Plan de Dios en todas las circunstancias concretas M. Nuestra vida debe reflejar que Dios la dirige; que
de nuestra vida. Oremos. el Mensaje de Jesús es la gran Ley que ningún poder
(Otras intenciones referidas al momento presente) humano ha de cambiar. Difundamos esta enseñanza en
nuestra familia y sociedad.
C. Dios y Padre nuestro, escucha las oraciones de
tus hijos y guíanos por los caminos de tus designios, 17. BENDICIÓN
ayudándonos a hacer tu voluntad. Por Jesucristo C. La bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo, (†)
nuestro Señor. Amén. y Espíritu Santo, descienda sobre ustedes. Amén.

LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
13. CANTO DE LAS OFRENDAS. “Una espiga dorada por el
sol” (VSJ 146; E.R.1510)
Una espiga dorada por el sol,
el racimo que corta el viñador,
se convierten ahora en pan y vino de amor,
en el Cuerpo y la Sangre del Señor.
18. CANTO FINAL: “Tú eres María” (VSJ 274; E.R. 2746)
Tú eres, María, la Madre de Dios,
tú eres la Madre que nos dio el Señor.
Tú estabas ya presente ante los siglos
cuando el Padre por su amor te regaló
y fuiste tú la Madre de su Hijo,
por eso eres Madre del amor.
 “EL DESAFÍO DE SER CRISTIANO”
Las lecturas hacen un llamado a una vida digna, a elegir libremente el camino que conduce a la
vida o la muerte:

EN EL EVANGELIO, JESÚS:

• Nos invita a seguir las enseñanzas de

la “Ley” con una actitud nueva, con
sinceridad de corazón, superando
la justicia de los fariseos. Las leyes
cumplen su función cuando nos
acercan a Dios y al prójimo sobre todo
al más vulnerable.
• Nos llama a valorar y a defender la
vida, construyendo una sociedad
de comunión, de justicia, de paz, de
dialogo y de solidaridad.
• Nos llama a la fidelidad para
superar los problemas de la Alianza
Matrimonial.

EL PAPA FRANCISCO NOS EXHORTA:

Jesús revoluciona y sacude fuertemente aquella mentalidad cerrada por el miedo y recluida en los
prejuicios. Él, sin embargo, no deroga la Ley de Moisés, sino que la lleva a plenitud, declarando, por
ejemplo, la ineficacia contraproducente de la ley del Talión; declarando que Dios no se complace en
la observancia del Sábado que desprecia al hombre y lo condena; o cuando ante la mujer pecadora,
no la condena, sino que la salva de la intransigencia de aquellos que estaban ya preparados para
lapidarla sin piedad, pretendiendo aplicar la Ley de Moisés.
Jesús revoluciona también las conciencias en el Discurso de la montaña abriendo nuevos horizontes
para la humanidad y revelando plenamente la lógica de Dios. La lógica del amor que no se basa en
el miedo sino en la libertad, en la caridad, en el sano celo y en el deseo salvífico de Dios, Nuestro
Salvador, “que quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad”. “Misericordia
quiero y no sacrificio” (Homilía, 15 de febrero 2015)
Visítanos en:

Dios nos habla cada día: Del 17 al 23 de Febrero 2020.

Liturgia de las Horas: II Semana.
Lunes: St 1,1-11; Sal 118,67.68.71.72.75.76; Mc 8,11-13
Martes: St 1,12-18; Sal 93,12-13a.14-15.18-19; Mc 8,13-21
Miércoles: St 1,19-27; Sal 14,2-5; Mc 8,22-26
Jueves: St 2,1-9; Sal 33,2-7; Mc 8,27-33
Viernes: St 2,14-24; Sal 111,1-6; Mc 8,34 -- 9,1
Sábado: Fiesta, Cátedra del Apóstol San Pedro, 1P 5,1-4; Sal 22,1-6; Mt 16,13-19
Domingo 7 Durante el Año: Lev 19, 1-2.17-18; Sal 102,1-4.8.10.12-13; 1Co 3,16-23; Mt 5,38-48
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