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meral del bíceps. (En colaboración con el mismo autor). Clínica y La¬
boratorio, año II, núm. 6, Junio 1900; Boletín del Cuerpo de Internos de
la Facultad de Medicina de Valladolid, año X, núm. 2, Diciembre 1906.
Sobre la división de la arteria renal, relaciones de sus ramas al nivel
del hilio y algunas anonialías. (En colaboración con el mismo autor).
año I, núm. 9 y 10, Mayo 1906.
El Eco Médico- Quirúry ico,
ESTADO ACTUAL DE NUESTRAS CONOCIMIENTOS
TRADUCCIONES.
SOBRE
fías). lievista Ibero-Americana de Ciencias Médicas, tomo XVIII, nú¬ Policía judicial científica
mero 38. 1907.
E. DI MATTEI: Las alteraciones cadavéricas del retículo fibrilar
por
y endocelular de las fibrillas largas en las células de la médula espi¬
y
nal. (Con 7 fotograbados). El Confidente de las Ciencias Médicas, año II,
núm. 30. 1907.
ANTONIO LECHA-MARZO
E. DI MATTEI: Las alteraciones cadavéricas del retículo neurofi-
brilár de la célula nerviosa en las muertes por asfixia rápida mecánica. Interno de la Facultad de Medicina de Valladolid
(Con 5 fotograbados). El Confidente de las Ciencias Médicas, año II, nú¬
mero 31. 1907.
con una carta abierta del
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TRABAJOS DEL AUTOR.
1906, pág. 120.—Revista de Cliimica pura e applicada, año II, núm. 7.—
Les Causeries Médicales, año YI, núm. 5; año VII. núm. 3.—El Eco
Cirugía prácticas, año XXXI, núms. 965, 966, 967, 968, 969 y 970.
Madrid, Febrero-Marzo de 1907.—Estos artículos han sido tirados apar¬
te, con una extensa bibliografía, formando un fascículo de 86 páginas,
con láminas en colores. Precio: 2'50 pesetas.
La prueba de Barberio en el reconocimiento de las manchas de es¬
perma. Revista de Cliimica pura e applicada, año III,' núms. 9 y 10
Oporto, 1907.
La biología universal y los cristales de Barberio obtenidos con el es-
ESTADO ACTUAL DE NUESTROS CONOCIMIENTOS
SOBRE
ANTONIO LECHA-MARZO
SAU Vi
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PROFESOR S. OTTOLENGHI VATtJOS
ü'MAT.i j<
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tes? o*;
Director del Instituto de Medicina legal de la Universidad de Roma.
Director de la Escuela de Policía Científica de dioha ciudad.
GRANADA
tip. de lópez guevara
IQ07
Al profesor F. OLÓRIZ AGUILERA,
Catedrático de la Universidad Central
y profesor de la Escuela de Polioía"
Autor.
Egregio Sr. A. LECHA-MARZO.—-Valladolid.
Reiss (1) agrega á esta definición que trata también «del cono¬
cimiento, del modo de trabajo de las diferentes categorías de cri¬
minales, conocimiento obtenido por el estudio sobre el vivo del
mundo de los malhechores».
Nos parece más sencilla esta otra definición de Policía cientí¬
fica: consiste enla aplicación de los conocimientos científicos á las
embargo, será uno de los mejores medios con que podemos con¬
tar en la lucha contra el crimen y debe
ser utilizado por toda
Policía sabiamente organizada.
La Policía científica es una rama de la Antropología criminal.
Ha tomado también una buena parte de la Medicina legal.
La nueva ciencia interesa á los médicos peritos, pues en mu¬
chas ocasiones no es sino pura Medicina legal; interesa tanto ó
más á los jurados, criminalistas, magistrados, oficiales de policía,
(1) S. Ottolenghi: La nuova Cartella biográfica dei pregiudicati, adottata nell' Amministra
zíone dolía P. S., Acias de la Sociedad romana de Antropología, 1905.
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Junio, 1888.
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(1) Aunque el fémur crece algo, este crecimiento está compensado por la inourvaoión de la
columna vertebral.
torizados en
materias, que puedan tener impresiones digita¬
estas
supo recoger, pues nuestros ojos no ven más que lo que quieren
ver. Ciertos detalles como
impresiones de pasos, las dejadas por
los pulpejos digitales embebidos en sudor, grasa, sangre, etcéte¬
ra, revelados por la fotografía pueden servir para el hallazgo del
delincuente. Bertillon, con su aparato métrico nos ha dado un
medio excelente para determinar con una fotografía las distancias
(1) Gross: Manuel pratique d'instruotion judiciaire. París, Marchal y Billard, 1899.
(2) Eeiss: Contribution á l'etude de la Pólice scientifique. Arch. d'Anthrop criminello, nú¬
meros 151,152 y 153.—Comunicación al IV Congreso Intern. de Antrop. criminal oelabrado en
Turín, 1906.—Un Code telégrapliique du Portrait parlé. Archiv. d'Anthrop. crim., número 158'
Archivio di Psiahiatria, vol. XXVIII, fase. 1, 2 y 3, 1907.
en
Bélgica; Olóriz, Alvarez Taladriz, Salillas, Simancas, etc., en
España.
Ottolenghi (Profesor de Medicina legal en la Universidad de
Roma) debe ser considerado como uno de los principales funda¬
dores de la Policía científica y en su última obra (1) (publicada
con la colaboración de Gasti) ha demostrado suficientemente su
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más netas las que son ja algo visibles se han recomendado diver¬
sos tratamientos, como las soluciones de nitrato de plata al 8 °/0,
consiguiente exposición al sol j sumersión en un revelador foto¬
gráfico; ó la coloración con los vapores de ácido ósmico ó de jodo
(Aubert j Coulier); ó el tratamiento con el ácido fluorhídrico que
ataca las partes del vidrio puestas al descubierto; ó la coloración
(1) Corin y Stockis: Un cas d' identification par les empreintes digitales. Annales de la
Societé de Médecine Legale do Belgique, 1904, pág. 44.
Véase también E. Stockis: Quelques procédés nouveaux pour revéler et fixer les empreintes
completo, de médicos?
A continuación vamos á estudiar una cuestión que
lo mismo
interesa al médico perito que al oficial de policía; y aprovechamos
esta ocasión para hacer su estudio porque á ella podemos aportar
nuestra humilde contribución personal.
(1) Magnamani: Sulle macoliie di sangne e sulla possibilitadi difenziare ilsanguo umanoda
quello degli animali domestici e il sangue mestruale da quello di nna qualsiasi fevita. Bollotti-
ao dolía Societa Lancisiuua
dogli Ospodali di liorna, 1897, XVII.
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Alo-unos
D
autores,7 fundados en el conocimiento de estas variacio-
nes de la materia colorante de la sangre, las han propuesto para
determinar su antigüedad. Han olvidado que dichas transforma¬
ciones son más ó menos rápidas según las variaciones externas.
El prof. A. Tamassia (2), examinando al espectroscopio manchas
de edad superior á tres años y otras datantes de 1877 y de 1881,
obtuvo constantemente (en 1884) las bandas de la oxihemoglobina
como si se tratase de sangre reciente.
(1) Véase sobre este particular, Hoffmann: Eulenberg's Vierteljahrs., 1873, t. II, pág. 89.
(2) A. Tamassia: Sulla determinazione cronológica delle maocliie di sangue. Atti del R. Is-
tituto Veneto, II, 4a serie. Venecia, 1884.
(3) Corona: Contributo alio studio legale del sangue. Giornale della R. Accademia di
Torino, 1891.
(4) Pfaff: Gerichtsarztliohe Blutuntersucbungen. 23 edición, Dresde, 1863.
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pecto y coloración.
La forma de los cristales de hemoglobina, tampoco resuelve de
una manera satisfactoria el
problema.
Los caracteres de una maucha antigua fueron ja descriptos en
1885, por nuestro ilustre amigo el doctor Florenc.e (catedrático de
la Universidad de Lyon) (2): presencia de polvo y de hongos,
pero con la laxitud que tienen estos términos, sin poder preci¬
sarlos.
Modernamente y muy recientemente la cuestión de la determi¬
nación de las manchas ha sido estudiada por el Dr. Luis Tome-
(1) Véase A. Montalti: Osservazioni sperimentali intorno alia grandezza dei oristalli di
emina in rapporto all' antiohitá del sangue. La Sicilia Medica, año III, fas. 11-12-1891.
A. Lecha-Marzo: Influencia de la edad y la putrefacción en la obtención de los oristales de
sales de hematina. La Tribuna Médica, año II, núm. 17. Barcelona, Agosto de 1907; Protocolo
(3) L. Tomellini: De l'emploi d'une table ohromatique pour les taches du sang. Archivos
<fanthropologie criminelle, t. XXII, núms. 164-165. Agosto y Septiembre de 1907.
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hermosos estudios.
Para determinar la antigüedad de unas manchas de sangre
sobre un
trapo, camisa, pañuelo, etc., ó maderas, mármol, vidrio
ó paredes blancas, procedo de la manera siguiente:
En el mismo momento de la entrega, que debe ser lo antes
posible,pues la determinación de la antigüedad se hace más difí¬
cil á medida que transcurre el tiempo, anoto la figura de la tabla
de Tomellini á que corresponde su coloración. Y en el mismo