EL ESTUDIANTE PROLETARIO

Publicación mensual del Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil Nº6, noviembre-diciembre 2010

Precio de colaboración: 0.20 euros

“Metro, trabajo,
tumba”.
CREE. Alicante-Sevilla
El repunte en la “La dinámica de los tes sindicales. La In-
combatividad obrera acontecimientos revo- tersindical francesa,
que indicábamos en lucionarios se halla di- que aúna en su seno
artículos anteriores r e c t a m e n t e a sus principales “El aburrimiento es
como un fenómeno determinada por los fuerzas sindicales, ha siempre
que se comenzaba a rápidos, tensos y vio- sido desde la primera contrarrevolucionario.
observarse en Eu- lentos cambios que huelga en Marzo Siempre.”
ropa, se ha transfor- sufre la psicología de hasta las últimas jor-
mado en Francia en
una realidad palpable
las clases de la revo-
lución”.
nadas en Noviembre Guy Debord
una institución plena- prendió que las pen-
SUMARIO
y definida, un proceso En este sentido, la mente arraigada en el siones es una causa ► “Metro, trabajo,
en expansión que experimentada clase apacible triunvirato mínima y una simple
crece alimentándose obrera francesa ha que forma con Estado chispa, por lo que hizo
tumba”
de sí mismo y propor- respondido a las exi- y Patronal, constitu- todo lo que estaba en En portada
ciona a la clase obrera gencias del momento yendo un peligro mor- sus manos por frenar
mundial ejemplos y histórico, y la prolifera- tal para los intereses el avance de la refle- ► Los mineros chile-
experiencias que ción y unificación de la de los trabajadores. xión de la clase traba-
nos, estafados por el
constituyen un gran lucha sólo ha sido po- jadora. Entendieron capital
Panfletos tirados
paso adelante en la sible por el abandono que los trabajadores Página 3
lucha, aún en sus al- de los principios bur- desde aviones en
que han salido a la ► Marcelino Camacho
bores, por la emanci- gueses y la acepta- las playas por los
calle no se conforma-
pación proletaria ción y difusión de la sindicatos para
rán con un manteni-
nos dice adiós
mundial. solidaridad y la empa- subyugar al obrero
miento de la edad de Página 4
La oleada de huel- tía, elementos funda- ideológicamente jubilación (que de
gas, reivindicaciones, mentales de la igual modo no va a ► Proletarios engaña-
manifestaciones,etc. esencia proletaria. El 24 de Octubre, ocurrir). dos en el Sáhara:
que se han desarro- Más que un análisis tras cinco huelgas ge- Desean acabar con luchas obreras y
llado en el país galo, cronológico, nos dis- nerales y un descon- la precariedad, con los
nos muestra a gran- ponemos a realizar un tento creciente, el sueldos paupérrimos,
consignas
des rasgos cuáles son somero estudio de las secretario de la multi- con los contratos ba- nacionalistas
las líneas a seguir, enseñanzas y leccio- millonaria CGT tuvo la sura, con las dificulta- Páginas 5 y 6

que no son otras que nes que nos han apor- osadía de declarar des para conseguir
las que marca el pro- tado las numerosas que: “el objetivo último vivienda, con las ele-
► Carta de saludo del
pio trabajador, que ad- huelgas generales y, es la apertura de ne- vadas tasas de paro, GEC al CREE
quiriendo conciencia en definitiva, el con- gociaciones con los con la privatización de Página 6
en la lucha se desem- glomerado de protes- sindicatos sobre el fu- la sanidad... El prole-
baraza de su armazón tas ocurridas en turo de las pensio- tariado se lanza a la
► Los sindicatos con-
de ideas, prejuicios y territorio galo. nes”. Mientras, en conquista de objetivos tra el proletariado (II):
comportamientos bur- Los ataques de la París, en Tourse, en que exceden la capa- los salvajes
gueses, para autoges- burguesía se Lyon, en Marsella, en cidad que tiene para años sesenta
tionar críticamente Toulouse, proliferan otorgar concesiones Páginas 7 y 8
suceden.
sus propias reivindica- las Asambleas Gene- un sistema capitalista
La respuesta
ciones, adquiriendo rales Interprofesiona- en descomposición,
éstas un carácter mar-
obrera a los les, que llegaron a que se apoya una vez
cadamente clasista mismos, también reunir en su momento más en los sindicatos
cuando son desarro- En primer lugar, la álgido a más de 400 para confundir y des-
lladas por Asambleas historia nos vuelve a personas; los grupos orientar a la masa.
y Órganos Interprofe- demostrar que el éxito que instan al proleta- Observamos de igual
sionales, fruto de la de una reivindicación riado a tomar las lu- manera que la expe-
extensión de la solida- proletaria es directa- chas en sus manos, riencia histórica no se
ridad y combatividad mente proporcional a los debates que apor- olvida, que el proleta-
obrera contra la atomi- la fuerza con la que la tan contenido y radi- riado sale al ruedo
zación e individuali- clase obrera sea calizan las mismas plenamente conoce-
dad propias de la capaz de dirigirla, al manifestaciones, etc. dor de las derrotas
sociedad burguesa. margen de los dirigen- La sindical com- que ha sufrido →
El Estudiante Proletario
→ en el pasado, de sus
aciertos y de sus errores.
No se trata únicamente
de si son dos o tres mi-
llones de trabajadores en
la calle, se trata de un
“ser colectivo dotado de
innumerables ojos, oídos
y tentáculos”, en cuyo
seno surgen los sectores
más avanzados que in-
tenta llevar al resto por el
camino de la autoorgani-
zación.
En más de diez
ciudades se
reprodujeron las
asambleas
interprofesionales
La burocracia sindical
es más débil de lo que
fue, pues llegó a necesi-
tar la creación de huel-
gas reconducibles para
llevar al engaño a los tra-
bajadores bajo la falsa
ilusión de que ellos con-
trolaban el movimiento.
Aunque el combate, en
este caso, no haya ido
contra los sindicatos;
empezamos a descubrir
pequeños focos de ver-
dadero enfrentamiento
abierto. Obreros hu-
yendo en masa de la
mayoritaria CGT, enfren-
tamientos con los dele-
gados sindicales que
paraban refinerías se-
cundarias y no iban a las
reservas de crudo del
país; manifestaciones
salvajes que obligaban a
los sindicatos a avisar a
la policía para que detu-
viera el avance inexora-
ble de los trabajadores;
etc. Todos ellos logros
parciales para un país
tan apegado a esta per-
niciosa tradición del mo-
vimiento obrero como es
el sindicalismo.
Después de la jornada
del 12 de octubre, en la
que aparecieron por pri-
mera vez las asambleas
interprofesionales y las
amenazas de corte de
suministros de combusti-
ble (que luego no fue
tal); los sindicatos hicie-
ron intentos de enfriar el
movimiento procla-
mando jornadas huel-
guísticas aisladas y
reivindicando objetivos
Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil Página nº2
mínimos que deben ser sudor de los obreros.
conseguidos de forma Pese a este percance,
pacífica; pero decenas no podemos más que
de miles de trabajadores alegrarnos ante la
entraron en huelga por enorme muestra de ma-
tiempo indefinido, blo- durez de parte del prole-
quearon carreteras, in- tariado francés, que
fringieron grandes daños descubrió una vez más,
a la red de comunicacio- como tantas veces han
nes del país. hecho sus hermanos in-
Los sindicatos, ante ternacionales en otras
este fulgor revoluciona- ocasiones, que toda
rio, no pudieron más que lucha que persiga objeti-
dividir todo lo posible el vos los conseguirá en de goles y retrocesos batar al Gobierno es lo
movimiento: aislaron tanto en cuanto posi- que los politólogos y so- que es suyo: su futuro.
protestas dentro de las cione a los sindicatos en ciólogos burgueses con-
fábricas pese a que los el bando rival y combata Las minorías proleta-
sideran definitivos. No
trabajadores querían contra ellos con la du- obstante, como el ave rias revolucionaiqas
salir fuera a converger reza y determinación su- fénix, el proletariado re- francesas abren la
con sus hermanos, vo- ficiente. surge siempre, más perspectiva de lu-
taban resoluciones al El férreo control sin- fuerte, más inteligente, chas masivas
margen de las asam- más concienciado. En
dical dejó a las
bleas; llegaron al ab- este sentido hay que Lenin consideraba ne-
famosas
surdo de proclamar destacar la gran labor cesario el contacto entre
huelgas
asambleas por sectores que han desempeñado revolucionarios de diver-
¡dentro de una misma reconducibles
en nada las minorías obreras en sas generaciones para
empresa! No es de ex- varias ciudades france- llevar a cabo una revolu-
trañar ante este pano- Las experiencias de sas, manteniendo vivo lo ción con éxito. En estas
rama que, al igual que 1995, 2003, 2006 y 2009 aprendido durante tantos jornadas francesas, uni-
Luis XVI cuando obser- no se olvidan, las Asam- años de combate contra versitarios, estudiantes
vaba con desprecio al bleas Interprofesionales la burguesía, proporcio- de instituto, jubilados,
“populacho” en 1789, marcaron un antes y un nando al proletariado trabajadores del sector
Sarkozy ni se inmutara; después en la lucha con- una respuesta cuando público y privado, traba-
actuando con el descaro tra la división que tratan abrumado por las cir- jadores sindicalizados y
y la soberbia de quien se de imponer desde las cunstancias históricas y no sindicalizados, acti-
cree superior e intocable. burocracias sindicales. casi sin respirar por la vos y parados, decidie-
Obligó so pena de cár- El proletariado conoce estrechez de las relacio- ron unirse en órganos
cel a muchos obreros a que es imprescindible nes de propiedad en las comunes y cantaron jun-
volver a trabajar, ordenó una colaboración con los que se mueve, realiza tos la Internacional, can-
la entrada de los gendar- estudiantes en estas una vez más la transcen- tos que se repetían en
mes en refinerías,… Los mismas Asambleas, re- dental pregunta: ¿qué diversos lugares del país
sindicatos le siguieron el cuerda que la brutalidad hacer? galo. Se oyen los prime-
juego, y comenzó una policial ya se dio en ros cantos de sirena, los
batalla jurídica cuyo ob- 1986, y que ha de ser uti-
Las refinerías
paralizaron; pero las cuernos de batalla que
jetivo no era otro que lizada como un factor anuncian tiempos difíci-
apaciguar a las masas y que incremente las lu- reservas de gasolina
les para la burguesía
trasladar la batalla a las chas y su intensidad, y del Estado
mundial, que aterrada y
tranquilas salas de Justi- nunca como un ele- permanecieron
acongojada observa
cia. Se estaba jugando mento desmoralizador. intocables cómo antes en Barce-
una partida de ajedrez La lucha de clases es Otra lección que no lona, en Turquía o en
sobre la sangre y el un proceso lento, repleto debemos dejar pasar es Grecia y ahora en Tou-
la activa participación de louse una pancarta apa-
Claves para entender las luchas la juventud en estas con- rece: “Asalariados,
vocatorias. Huelgas en desempleados, estu-
en Francia una cuarta parte de los diantes, jubilados, tome-
● Los sindicatos quisieron asestar el golpe definitivo al institutos, universidades mos la lucha en nuestras
movimiento convocando una jornada de lucha a las puer- bloqueadas, colabora- propias manos”. ■
tas del verano, pero más de 2 millones de trabajadores ción regional de los di-
en las calles hicieron reconsiderar su táctica. versos sectores en
● Los estudiantes no estaban dispuestos a permitir que
lucha. Las provocacio-
lles impusieran una peor vida que a sus padres y abuelos.
La perspectiva de un oscuro futuro empujó su solidaridad
nes policiales supusieron
una gran perdición para
de clase y las experiencias del CPE les dotó de fuerza.
este movimiento estu-
● La Intersindical se granjeó el apoyo de gobierno y pa-
tronal por su “sentido de la responsabilidad sindical” al diantil, se procedió a la
convocar movilizaciones aisladas en septiembre cuando manipulación de medios
el movimiento era una onda expansiva con mucho peli- de comunicación para
gro. presentar a estos jóve-
● Los “izquierdistas” no pudieron hacer nada por refrenar
nes como “ladrones” o
el ímpetu autoorganizativo de los trabajadores y estudian-
tes, tampoco así la policía aunque fuese su objetivo.
“vándalos”, cuando lo
único que desean arre-
El Estudiante Proletario Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil Página nº3

Los mineros chilenos, estafados por el capital

CREE. Sevilla
Los obreros de la minería
han vuelto a las primeras pla-
nas de los periódicos en los úl-
timos meses. Casi por
ensalmo, la imagen del mono
azul y el casco blanco mancha-
dos de hollín ha tomado por
asalto las conciencias de millo-
nes de personas en todo el
mundo. El estoque lo daban los
trabajadores leoneses de la mi-
nería, que entraban en conflicto
por el impago de unas nóminas
y por la tardanza del gobierno
español a firmar el Decreto Ley
que primaba el consumo de
carbón nacional frente al ex-
tranjero. Simultáneamente, 33
mineros chilenos quedan atra-
pados en las minas de San
José. A los pocos días, se da a
conocer la noticia de que varios
cientos de mineros chinos han
muerto; cifra ésta que no re-
sulta significativa en un país
pretendidamente “comunista”
en el que mueren al año más
de dos mil mineros en misera-
bles condiciones de trabajo y
de vida. Lo más reciente: toda
la minería del norte de Chile
está recorrida por una Huelga
en respuesta sindical a la com-
batividad que los mineros esta-
ban empezando a mostrar en
el país y que amenazaba con
írsele de las manos. Los mine-
ros vuelven a la carga, y esta
vez ya no están solos.
La radiografía a aplicar en
estos casos es bien compleja.
Pensemos, en primer lugar,
que la mayoría de los países
con un desarrollo minero inci-
piente son países de la perife-
ria capitalista. El capital
aprovecha los pingües benefi-
cios que aquí podrá obtener en
la capitalización de un plusva-
lor logrado con inversiones pí-
rricas en salarios y medios de
subsistencia para los trabaja-
dores. Las condiciones de tra-
bajo en estas explotaciones
mineras semejan las que exis-
tían en el siglo XIX y los empre-
sarios tienen la espalda bien
cubierta por unos gobiernos
que no están dispuestos a sa-
crificar el flujo monetario activo
que entra en su país gracias a
esta actividad.
Eventualmente, todos estos
factores que operan en la in-
fraestructura productiva y que
nosotros no podemos ver
emergen a la luz con toda su
crueldad. Durante años, en las
conciencias de los trabajadores
se va gestando tímidamente la
respuesta ante estas misera-
bles condiciones laborales y de
vida a las que el capitalismo les
aherroja. Cuando se da el alda-
bonazo para que los dichos se
conviertan en hechos, la lucha
de clases aparece en toda su
magnificencia y a la burguesía
le entra el medio porque se
sabe vencida antes de empe-
zar. Su historia es la historia de
más de doscientos años inten-
tando evitar lo inevitable: su
destrucción por el proleta-
riado en tanto que destruc-
ción del orden productivo
que engendra su poder. Su
arma más preciada es la repre-
sión, aunque no menoscaba la
profusa labor ideológica que
lleva adelante a fin de intentar
convertir al enemigo en amigo.
La minería es la trampa
mortal de miles de
trabajadores
cada año
De tal manera, en la mina
San José (Copiapó) el capita-
lismo tenía muchas cosas en
juego. Y supo salvar la situa-
ción como de costumbre. Tras
69 días de calvario, los 33 mi-
neros atrapados a más de 600
metros de profundidad fueron
rescatados ante la mirada ex-
pectante de todo un planeta y
el gozo de una burguesía que
había sabido montar un “show”
como nunca antes. Desde el
primer día, no tardó esta un se-
gundo en tender su putrefacta
mano a los trabajadores atra-
pados, llevando por bandera un
burdo discurso de “reconcilia-
ción nacional” en el que vícti-
mas y verdugos quedaban en
el mismo saco. El empresario
de la empresa encargada de la
explotación de la mina derrum-
bada fue el primero en ofrecer
su “ayuda” desinteresada para
sacar a los trabajadores. Pero
el desinterés no es un con-
cepto que aparezca reseñado
en el ideario burgués; y si el pa-
trón tenía razones para interve-
nir de urgencia en la solución
de la catástrofe era porque:
1. Él era el responsable de
los trabajadores atrapados
en su mina. Si ellos habían
quedado allí abajo durante su
jornada de trabajo, las cuentas
las debía rendir la empresa que
los tenía bajo contrato.
2. Como no dejaba de ser su
mina, cada día que no se traba-
jaba en el yacimiento era una
pérdida de dinero para él de-
bido a la desvalorización de las
tecnologías productivas y de
las materias primas (capital
constante) y la imposibilidad de
continuar con la producción de
valor.
3. Una inspección técnica
del año 2007 confirmó que la
mina no era segura para los
trabajadores y debía ser inme-
diatamente cerrada. Dar esto
a conocer a la opinión pública
era echarse la soga al cuello y
hacerse un nudo y echar al
traste todo el circo “intercla-
sista” que se había montado;
por lo que gobierno, empresa-
rios y medios de comunicación
callaron el particular. Segura-
mente nada de importante o re-
levante era para lo que en San
José sucedía.
Piñera, los mass media y la
patronal trataron de hacer
piña para evitar una
escalada del conflicto
obrero
La creación de la “causa
común” en torno a la liberación
de los atrapados como pro-
yecto “humanitario” daba en-
trada en escena a un nuevo
elemento: la “nación”. En el
subsuelo, los mineros chilenos
colocaron la bandera de su
país. Para el boliviano, tenían
preparado en la superficie a
Evo Morales, aunque final-
mente no apareciera. En la
cápsula Phoenix que los res-
cató, de nuevo el nombre de
Chile. A la salida, el presidente
Sebastián Piñera se fundía en
abrazos con todos y cada uno
de ellos y cantaba su heroici-
dad y abnegación. Por todos
los medios había que evitar la
escalada del conflicto obrero
sobre la base de una expresión
más del irreconciliable conflicto
entre trabajo y capital. Y nada
mejor que hacer “piña” aunque
a la burguesía le importe una
verdadera mierda que los tra-
bajadores queden atrapados o
mueran.
Pero la estratagema les ha
salido rana a los burgueses, y
el camino de la revolución se
abre cada vez con mayor
fuerza en el medio minero. Lo
aprendido en el circo San José
está haciendo mucho por el
combate del proletariado y nin-
gún partido o sindicato ha en-
señado nada a estos valerosos
trabajadores. ■

EL ESTUDIANTE PROLETARIO, órgano propagandístico mensual del

Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil, lo encontrarás en:
► Pidiéndolo a través de nuestro correo: luchaestUS@hotmail.com
► En la Universidad de Sevilla y en la Universidad Miguel Hernández de Elche.
► En los puestos de venta de las facultades y zonas fabriles de Sevilla.
► En formato PDF en nuestro blog: http://espartaquismoestudiantil.wordpress.com
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El Estudiante Proletario
Marcelino Camacho nos dice adiós
CREE. Sevilla
Con él se va todo un
testimonio vivo de los
acontecimientos que sa-
cudieron el país hace
más de treinta años,
cuando el movimiento
obrero que dio el pistole-
tazo de salida en las
huelgas mineras de los
años sesenta estuvo a
punto de tirar por tierra la
dominación burguesa
mientras que los políti-
cos jugaban a hacer “de-
mocracia”. Marcelino
Camacho, secretario ge-
neral del sindicato Comi-
siones Obreras, con más
de catorce años de cár-
cel y represión a la es-
palda por su combate a
favor de las “libertades”;
fue sin duda una figura
destaca de la Transición
democrática tanto como
dirigente de CCOO
como militante y miem-
bro de altura del PCE, y
es por ello que en su
muerte toda la izquierda
honra su trayectoria.
Tras haberle dado por
muerto cuando sólo es-
taba gravemente en-
fermo, finalmente los 92
años de edad y las com-
plicaciones propias de la
senectud acabaron con
su vida. A la capilla ar-
diente instalada en la
sede de Comisiones
Obreras en Madrid se
han desplazado antiguos
y actuales compañeros
del combate que él lideró
hace ya muchos años: el
combate contra el pro-
letariado. En la burgue-
sía de izquierdas sólo
hay palabras de elogio
para un hombre que en-
tregó al movimiento
obrero a los leones
cuando la amenaza de la
insurrección proletaria
Colabora con el CREE
► Si posees algún sistema de impresión y quieres ayudarnos a la difusión de nuestra prensa y panfletos, háznoslo
saber a nuestro correo: luchaestUS@hotmail.com
► Si quieres escribir para EEP, escríbenos reeñando el tema y el enfoque que llevará el artículo para tener cons-
tancia.
► Cualquier confrontación de ideas, comentario, debate, etc. es un paso adelante, tanto para el partido como para
la consciencia de clase proletaria. Recibiremos con mucho gusto toda carta, crítica, objeción que se plantee.
Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil
en España llamaba a las
puertas del sistema que
con tanto sacrificio y ab-
negación habían defen-
dido compañeros suyos
como Santiago Carrillo o
Dolores Ibárruri
La burguesía debe
mucho a la figura de
Marcelino Camacho,
porque la verdad sobre
su condición en los tur-
bulentos años sesenta-
setenta se encuentra,
precisamente, allí donde
los que ahora se llaman
“herederos” no se atre-
ven a arrojar luz. Por
mucho que pretendan
ensalzar su condición
“obrera” o “socialista”, el
sindicalista que fue
nunca puso en jaque la
dominación burguesa
capitalista cuando su
amenaza estaba en el
punto más álgido jamás
conocido.
El movimiento asam-
bleario que se desarrolló
por aquel entonces le-
vantaba los mayores te-
mores en una burguesía
que echó mano de aque-
llos que mejor saben li-
diar con los conflictos
cuando de obreros ha-
blamos: los sindicatos.
Y entre ellos, el sindicato
que emergió de las mis-
mas asambleas que ani-
quiló cuando no les hizo
ya más falta: Comisiones
Obreras.
El capital, la
monarquía y la
burocracia sindical
reunidos para
recordarle
El recurso a la memo-
ria de su figura como lu-
chador incansable que
orquestan sin cesar los
izquierdistas calla y
oculta otra memoria, la
Página nº4
memoria de una genera- s i e r o n
ción de trabajadores que manos a la
vivió en sus propias car- obra: había
nes lo que fue la total que aplas-
subyugación del movi- tar el mo-
miento obrero autónomo, vimiento
constituido en las Comi- obrero re-
siones Obreras que pla- voluciona- Marcelino Camacho, histórico dirigente de CCOO
garon la geografía rio. Luego
española desde las huel- es más fácil echar la proletariado español e
gas del ’62, a los desig- vista atrás y arrepentirse, internacional le rasgara
nios de la estructura como hizo varias veces las vestiduras y quedara
burocrática y antiobrera Marcelino, una vez el al descubierto su verda-
del Partido Comunista, sindicato ni siquiera le dera faz. El PCE siempre
que no tardó en aprove- necesitaba ya para sub- fue un satélite de la
char para apoderarse de yugar a los trabajadores URSS, como siempre lo
la dirección de las porque ya era mayor de fueron Carrillo, Dolores
CCOO en todo el Estado edad y tenía una larga Ibárruri y compañía (in-
español (véase el caso trayectoria en esa em- cluyendo a Marcelino
de Barcelona, donde las presa. Camacho). Otra cosa es
CCOO fueron creadas Comisiones Obreras, que fueran realmente
por el PSUC para ha- el sindicato de la clase conscientes de ello, pero
cerse con el control del trabajadora, podrido en si algo nos enseña el
movimiento huelguístico su estructura desde el materialismo dialéctico
en toda la ciudad), dispu- mismo momento en que es a poner sobre la mesa
tándoselas con los se pusieron las bases los intereses de clase
maoístas, y convirtiéndo- para construir un sindi- que participan en el
las en sindicato-aparejo cato, y éstas son impen- papel que cada uno
de pesca de la burguesía sables sin el señor al que juega en el seno del mo-
cuando de echar mano hoy tantos y tantos rin- vimiento obrero. Y el
de trabajadores se tra- den homenaje, inclu- papel del señor Cama-
taba. La autoorganiza- yendo los que más le cho ha quedado lo sufi-
ción del proletariado deben: los burgueses. cientemente retratado
quedó así aplastada, y el ya.
papel que Marcelino Ca- El papel jugado por Pese a todo lo ante-
macho jugó no fue preci- CCOO fue crucial rior, enviamos nuestro
samente secundario. para asesinar el apoyo a sus familiares
Pepe Gutiérrez-Álva- movimiento obrero (especialmente a su es-
rez dice en un panegírico autónomo que se posa) porque no deja de
a la memoria de Cama- ser una persona que fa-
gestó durante la
cho que el PCE no acep- llece y una familia rota
Transición
taba ninguna disidencia por el dolor. Hasta siem-
en el seno del movi- Los focos subversivos pre, Marcelino. Contigo
miento obrero y que por no quedaban limitados a se va una parte de la his-
ello Camacho jugó el España. Francia, Italia, toria de este país; y el
papel que jugó en los Bélgica, Cuba, etc. El CREE confía en que,
Pactos de la Moncloa en mundo entero era un pol- contigo, se vaya también
calidad de diputado al vorín, y Moscú no daba ese fardo que hoy pesa
Congreso como comu- abasto; puesto que demasiado a las espal-
nista. ¡Es la revolución Moscú lo último que ne- das de las masas traba-
democrático-nacional, cesitaba era una revolu- jadoras y que tú
estúpidos! Nada impor- ción socialista que llamabas y nosotros lla-
taba un movimiento pusiera en entredicho su mamos: sindicalismo. ■
obrero más fuerte que bloque hegemónico de
nunca ni un sistema tam- dominación burguesa
baleante. El sindicato y hecha pasar por “socia-
el partido de clase se pu- lismo”. No quería que el
El Estudiante Proletario
Proletarios engañados en el Sáhara: luchas obreras
y consignas nacionalistas
CREE. Sevilla
La noticia saltaba este do-
mingo 24 de octubre cuando
tropas del Ejército marroquí
a un vehículo que no se
había detenido al darle alto y
que se dirigía hacia un asen-
tamiento ilegal a las afueras
de El Aaiún, la ciudad más
importante del Sáhara Occi-
dental. Nayem Elgarhi, un
niño de catorce años, moría
víctima de las balas de las
fuerzas de represión marro-
quíes. Aparte, otras cinco
personas fueron heridas y
tres de ellas se encuentran
en paradero desconocido
tras haber pasado varios
días en un hospital engrille-
tados.
Todo ello como resultado
del cerco de policías y fuer-
zas del orden que Marrue-
cos ha puesto como cordón
de seguridad a la multitudi-
naria concentración de jai-
mas que se han concentrado
a 18 kilómetros de El Aaiún
como medida de protesta
por las miserables condicio-
nes de vida de las clases ex-
plotadas en suelo marroquí.
Lo que comenzó siendo idea
de unos pocos jóvenes dis-
puestos a protestar por el re-
conocimiento de sus más
elementales derechos,
acabó convirtiéndose en
todo un movimiento de
fuerza contra el Estado capi-
En respuesta
El sábado 13 de no-
viembre se dieron cita en
Madrid miles de perso-
nas “por la libertad del
pueblo saharaui”. La pro-
testa, animada por las
críticas a Marruecos
ante la brutal represión
contra Gdaim Izik y por
la actitud pasiva y dile-
tante del gobierno, con-
gregó a multiplicidad de
colectivos sociales y per-
sonalidades del mundo
político y cultural.
Lo que debería haber
sido un verdadero ejerci-
Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil
talista marroquí; en el que se
dan cita trabajadores/as, pa-
rados y demás gentes explo-
tadas de la sociedad
saharaui occidental. Dos
veces arrasado por la poli-
cía, el campamento llegó a
contar con más de 6.000 jai-
mas a razón de unas cinco
personas por jaima. Tras las
intervenciones anteriores,
era de esperar que Marrue-
cos hiciera de nuevo acto de
presencia como tiene por
costumbre hacer siempre
que hablamos de disidencia,
más si cabe cuando del Sá-
hara ocupado se trata.
Las miserables
condiciones de vida y la
falta de trabajo, ejes
centrales de la protesta
en sus incios
El ataque se inició a las
6:45 horas de la mañana,
cuando los helicópteros del
ejército de Mohammed IV
comenzaron a lanzar agua
calienta y gases lacrimóge-
nos para “invitar” a la disper-
sión de la concentración.
Aparecieron destacamentos
de policía y ejército de tierra
que, acompañados de auto-
buses, se llevaron de la zona
brutalmente a mujeres y
niños para proceder, poste-
riormente, a arrasar con
fuego el campamento
Gdaim Izik.
a Marruecos Se bloquea-
cio de solidaridad prole- ron las sali-
taria e internacionalista das para
se convirtió en una pro- todos aque-
testa pestiche con aires
pacifistas y nacionalis- llos que esta-
tas; en la que lo mismo ban dentro
se tildaba acertada- todavía mien-
mente al PSOE de fas- tras las lla-
cista que se enarbolaba
por bandera la Declara- mas no
ción de los Derechos dejaban nada
Humanos. El acto ter- en el camino.
minó con la toma simbó- Cuando los
lica de la sede del PSOE
en Ferraz com forma de arrestos die-
protesta ante el silencio ron a su fin en
cómplice del Gobierno. Gdaim Izik, el
Página nº5
ejército y
la policía
desplaza-
ron su
centro
operativo
hacia la
ciudad de
El Aaiún.
Se cerra- El campamento Gdaim Izik, arrasado por las fuerzas de asalto
ron las en- marroquíes
tradas posibles a la ciudad y metiendo en las ciudades si-
comenzó la cacería de disi- tiadas.
dentes saharauis. Los dispa- El ejército marroquí
ros de soldados y reprimió brutalmente,
helicópteros se sucedieron como si de un
con virulencia con la ciudad
enfrentamiento militar
ya sitiada; pero fueron res-
se tratse
pondidos mediante la organi-
zación de guerrillas de Lo más sangrante de la
defensa que se sumaban a situación es que el partido en
los combates que en el inte- el gobierno de la República
rior de las casas al tratar el Árabe Saharui Democrática,
ejército de asaltarlas de ma- el Frente Polisario, vivía
nera totalmente arbitraria. estos acontecimientos a la
Un camión antidisturbios espera de iniciar negociacio-
(aunque también se habla nes con Marruecos en
de dos en total) fue arreba- Nueva York. Los mismos
tado y con él se llevaba ade- que no tardaron en salir al
lante la defensa de la ciudad, encuentro de la protesta en
concentrada esta sobre todo sus inicios para darle un
en el centro y en el este, con cariz nacionalista que en
especial atención al barrio modo alguno poseía, aguar-
de Hayd el Auda, el más cer- daban impacientes poder so-
cano al campamento. lucionar un conflicto que
Para dar un sabor esper- rehuía de su pérfida bandera
péntico a esta escena de burguesa. Los asentados en
barbarie, la policía marroquí Gdaim Izik eran proletarios a
incitó a su población asen- los que tan siquiera el capi-
tada en El Aaiún y otras ciu- talismo podía asegurar la po-
dades a destruir sibilidad de enajenar su
propiedades saharuis. La lla- fuerza de trabajo a cambio
mada fue ampliamente res- de un salario, no se pronun-
pondida: Smara y El Aaiún ciaron por la autodetermina-
fueron recorridas por pro- ción del Sáhara ocupado
marroquís equipados con hasta que el Frente Polisa-
armas blancas y enarbo- rio, las organizaciones de
lando banderas de su país. Derechos Humanos y los “iz-
Hay que sumar a los trece quierdillos” decidieron que
muertos encontrados, entre era momento de hablar en
los que se halla un niño pe- su nombre y reconducir la
queño, las miles de víctimas protesta.
que el asalto al campamento El final de la misma era
supuso y las que estos ele- poco menos que esperado,
mentos lumpenproletarios sobre todo a tenor de las ab-
puedan cometer y sigan co- surdas exhortaciones que →
El Estudiante Proletario Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil Página nº6

→ se proferían para que los
países de la ONU sanciona-
ran a Marruecos por lo acon-
tecido. Con Francia y
España jugándose tanto en
Marruecos, el resultado no
podía ser más que el mirar
para otro lado de Trinidad Ji-
ménez cuando hasta los pro-
pios periodistas españoles
eran retenidos para que no
pudieran informar, violando
el ejército marroquí flagran-
temente ese derecho bur-
gués que, con tanto celo
suelen defender al otro lado
del Estrecho. Tantos intere-
ses cifrados en Marruecos
no pueden hacer más que
volver la vista cuando traba-
jadores a los que se les
niega esa condición son cri-
minalmente masacrados. Y
la estulticia de aquellos que
aún creen que existe una
justicia más allá de la clase
a la que ésta sirva, de aque-
llos que no ven que el Frente
Polisario es más de lo
mismo de lo que hay en Ma-
rruecos; ha dejado en la so-
ledad de las jaimas a los
saharuis que protestaban
por mejores condiciones de
vida y de trabajo como lo hi-
cieran en su momento en
Melilla los jóvenes marro-
quís. Corriendo, corriendo
tras una bandera burguesa
13 saharuis han muerto,
miles han resultado heridos
y nos echamos las manos a
la cabeza en gesto de indig-
nación e incredulidad. ■

Carta de saludo del GEC al CREE los capitalistas y de sus Esta-

Grupo de Esclarecimiento Comunista. Perú
Estimados compañeros del
CREE:
Hemos podido leer un artí-
culo suyo titulado “Los mine-
ros chilenos estafados por el
capital”. Gracias a esto, sabe-
mos ahora de su presencia
dentro del proletariado. Y cré-
annos, saludamos con el más
profundo calor de clase que
aparezcan minorías conscien-
tes que tengan una visión in-
ternacionalista, proletaria,
comunista y revolucionaria.
Como presentación, les in-
formamos que somos el
Grupo de Esclarecimiento Co-
munista – G.E.C. Estamos for-
mados por proletarios de todo
sector, como también estu-
diantes. Somos un grupo
joven, en nuestro tiempo de
existencia y en las edades de
los militantes. Es por eso que
nos sentimos identificados
con ustedes por ser también
una organización joven que
sale de las entrañas de la
lucha de clases, rompiendo
con el izquierdismo, refor-
mismo, estudiantilismo, y pro-
poniendo un trabajo de
vanguardia en el conjunto de
los esclavos asalariados.
Aunque residimos en el
Perú, el sentimiento que nos
une rompe toda frontera im-
puesta por los Estados capita-
listas. Un sentimiento de
solidaridad y unión, que tiene
bases materiales reales en la
explotación que sufrimos
como clase, como clase mun-
dial. De la misma forma enten-
demos que los sucesos de
lucha que se producen en
todo el mundo ahora y en la
historia de nuestra clase nos
sirven para enfrentar el pro-
yecto comunista que tenemos
encargado. Y bien sabemos,
ustedes como nosotros, es
mundial o no es real.
En el artículo mencionan
que los mineros en Chile han
sido estafados por el capital al
ser comprados por jugosos
premios económicos y reco-
nocimiento “social”. Pues bien
compañeros, es importante
saber que la actual crisis capi-
talista se pone de manifiesto
de diversas formas, ustedes lo
pueden apreciar con lo que
sucede en Europa con las
leyes de austeridad, el pro-
blema de las pensiones para
los jubilados, etc. Esto nece-
sita una actuación contunden-
temente ideológica y social de
dos en contra de la organiza-
ción y toma de consciencia de
nuestra clase (lo peor que les
puede suceder es que nos-
otros tomemos nuestra lucha
en nuestras manos). Lo de
Chile es un claro ejemplo de
que se ha hecho todo lo “bur-
guesamente” posible para que
no haya un análisis materia-
lista y de clase sobre lo suce-
dido para que no se produzca
una reacción del proletariado
en Chile.
Es importante por eso su
toma de posición, y las del
resto de minorías ya que es la
única luz que se enciende,
dentro de toda esta oscuridad
a la que nos tiene acostum-
brados el sistema. Por eso es
importante que las minorías
participen en los espacios de
debate, de esclarecimiento de
nuestra clase, y el trabajo para
abrir estos espacios. Y en este
caso particular, como ustedes
mencionan, “para valerse de
esta experiencia para denun-
ciar sin contemplación ni con-
descendencia sus miserables
condiciones de trabajo y las
de toda la clase trabajadora
minera”. Nosotros nos fortale-
cemos de la experiencia de
nuestra clase.
Esto sería todo por ahora
compañeros, les reiteramos
los saludos de clase de parte
de nuestra organización
G.E.C., que como ustedes,
está en la brega de contribuir
al desarrollo de la lucha autó-
noma de nuestra clase a nivel
internacional. Esperamos
mantener mutua comunica-
ción, ya que uno de los princi-
pales puntos del Programa
Histórico Comunista es el de
trabajar para formar y estable-
cer lazos entre las minorías
revolucionarias del mundo en-
tero, no sólo por contribuir al
esclarecimiento sino porque
necesitamos establecer una
lucha organizada a nivel mun-
dial y conectar las luchas que
se producen y se producirán
en estos próximos años.
Adelante con la lucha, se-
guimos adelante, y si pode-
mos vernos con ojos
proletarios, nos daremos
cuenta que el Comunismo no
es un “hermoso sueño” sino
un futuro real, nosotros
somos prueba fehaciente de
esto. Nuestra existencia y de
las minorías que surgen a
nivel mundial son prueba de
ello. hora más que nunca la
burguesía tiembla ante una re-
volución comunista, nosotros
no tenemos nada que perder
excepto nuestras cadenas. ■

Textos recomendados
Como cada mes, en estas páginas de El Estudiante Proletario volvemos a traer una selección de textos que, desde el
CREE, consideramos esenciales para el debate sobre cuestiones de trascendencia para el proletariado en su lucha
por su emancipación internacional. Para acceder a ellos, pídenoslos a nuestro correo electrónico:
Jan Appel
luchaestUS@hotmail.com
◘ Notas para el análisis de la revolución rusa. Jean Barrot (Guilles Dauvé)
◘ Los consejos obreros en Alemania. Anton Pannekoek (Ediciones Mayo-37)
◘ Nación o clase. Corriente Comunista Internacional (*en digital en nuestr blog Lucha Proletaria)
◘ Burocracia y capitalismo de Estado. Ignacio Iglesias
◘ Ni parlamentos ni sindicatos. ¡Los consejos obreros! VV.AA.
El Estudiante Proletario Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil Página nº7

Los sindicatos contra el proletariado (II):

los salvajes años sesenta
CREE. Alicante-Sevilla
En la primera entrega de esta serie, Los sin- a escala internacional: la caída de la ilusión la burguesía podía ofrecer para encauzar la
dicatos contra el proletariado, analizábamos del estalinismo, los sacrificios megalómanos combatividad obrera. Muchos cayeron, pero
el repunte de la combatividad obrera en Italia llevados a cabo por los países europeos para muchos más se mantuvieron firmes en el ca-
durante y después de la I Guerra Mundial y el retomar el camino de la acumulación roto por mino. Las viejas lecciones del pasado volvían,
papel jugado por las dos más grandes orga- la II Guerra Mundial, el descontento obrero, casi por ensalmo, a tener una actualidad pe-
nizaciones del proletariado italiano, la CGT y las disidencias. El regreso, en definitiva, de la rentoria.
el PSI. En este segundo número volvemos clase obrera al espacio político. El proletariado renegaba de partidos y sin-
sobre Italia, 40 años después para enmarcar El maoísmo y el guerrillerismo, así como dicatos, volvía a autoorganizarse, volvía a
las luchas obreras italianas en un proceso los movimientos hippies y “antisistemas” tomar el poder en sus manos. El proletariado
mucho más complejo que se estaba operando anarquistas o anarquizantes eran todo lo que quiso ser y pudo ser de nuevo proletariado.
No podemos hablar de reducción de la jornada des cada vez mayores No era sino el co- era enorme, como así lo
un día D y una hora H a laboral y de los precios de la producción. mienzo de una oleada era su sección sindical,
partir de la cual poder de los alimentos básicos aún mayor de huelgas CGT. A través de ella, los
observar un cambio en la y se mandaba a los mili- Gran Bretaña salvajes masivas que los comunistas hacían el
correlación de fuerzas a tares para hacerles en- El propio término de sindicatos no convoca- juego a la burocracia so-
escala internacional. Ni trar en razón. huelga salvaje proviene ron y en las que partici- viética llevando al prole-
tan siquiera la II Guerra del inglés: “wild-cat paron redoblando tariado al camino sin
Mundial había dejado a El combate obrero strike”, huelga fuera de la esfuerzos por suprimir- salida de la lucha econó-
la clase trabajadora total- autónomo comenzó legalidad, no aprobada las. En otros casos, no mica y el parlamenta-
mente sometida, pues en las pretendidas por el sindicato corres- menos sangrantes rismo político.
los focos explosivos no repúblicas pondiente afiliado a la desde la posición sindi- En el contexto antes
fueron pocos aunque sí soviéticas Trade Union Council. cal, las huelgas se inicia- planteado de la evolu-
débiles. Aparte, aunque Éste no tenía estructuras ban con el ción del desarrollo capi-
imperceptible, existe un Las similitudes de en la fábrica, por lo que consentimiento sindical talista post-guerra, los
hilo rojo (nunca mejor estos casos con los que los acuerdos se arregla- pero terminaban con obreros de todo el
dicho) que recorre la his- recientemente hemos ban con el patrón siem- éste totalmente deslegiti- mundo y especialmente
toria del combate de la podido vivir en otros re- pre al margen de la mado. europeos dieron al traste
clase trabajadora contra gímenes “comunistas” verdadera realidad de la Obreros pedían la con las viejas direccio-
el capital y que nunca ha como China no nos debe fábrica. cabeza de los nes sindicales y políticas
podido ni podrá rom- hacer pensar en una es- Los trabajadores sen- para plantear un com-
representantes
perse; uniendo luchas pecificidad del mundo de tían al sindicato como bate que se dirigía, en
sindicales, quienes
aquí y allá aun si éstas la hoz y el martillo o de otro enemigo de clase primer lugar, a aquellos
se desconocen mutua- regímenes totalitarios. más, por lo que la articu-
negociaban a sus que se pretendían como
mente. Los años cincuenta, se- lación de las reivindica- espaldas su “vanguardia” o como
Sin embargo, podría- senta y setenta fueron ciones se hacía Las asambleas marca- los “generadores” de
mos localizar el inicio de un tsunami de huelgas conforme al “shop ste- ban el rumbo mientras conciencia obrera.
verdaderas acciones de “salvajes” que recorrió la ward” o delegado de ta- los sindicatos seguían En agosto de 1953,
masas contra el capital Europa “democrática” ; ller. Elegidos en la con la labor negociadora cuatro millones de traba-
en la “socialista” Polonia en todas ellas los sindi- misma fábrica, ellos le- de subidas pírricas de jadores entran en huelga
en 1953, en una serie de catos de todo tipo y co- vantaban a los trabaja- salario que los trabajado- sin pedir permiso a las
violentas revueltas obre- horte jugaron el mismo dores contra el patrón y res rechazaban de centrales sindicales. Y
ras que acabaron en papel contrarrevolucio- el sindicato oficial. Po- plano. Caso éste de la se inicia allí donde no se
1956 en Poznan, en una nario. dían ser revocados en huelga de la huelga sal- esperaba, en el sector
huelga insurreccional Pero hay que hacer cualquier asamblea y en vaje de tres meses del público. Achicando agua
aplastada por el ejército una precisión: si en los sus manos residía el bus de Londres, que se con cubos de fregona, la
pero que puso en jaque años cincuenta el movi- poder de los trabajado- enormemente al entrar CGT hace todo lo posi-
a todo el bloque sovié- miento de huelgas salva- res; un poder tal que se en contacto con los esti- ble por evitar que el mo-
tico. jes era un esporádico intentó retirar al término badores del puerto, tam- vimiento se extienda al
Tres años antes, una estallido frente a la zapa de las más de 500 huel- bién en Huelga por aquel sector privado.
nueva sublevación en el sindical y a las misera- gas salvajes que reco- entonces. Dos años después, en
este, en la Alemania bles condiciones de vida rrieron el país de norte a Nantes y Saint-Nazaire
oriental, irrefrenable aún obreras, en los años se- sur de 1955 hasta 1957. Francia entran en huelga los es-
con los tanques soviéti- senta y setenta el movi- Sindicatos y patronos, Durante los años cin- tibadores del puerto des-
cos en la misma Berlín miento se generaliza, al margen de los trabaja- cuenta, Francia era el pués de diecinueve años
disparando contra la se articula intrínseca- dores, firmaron acuerdos vivo ejemplo del plura- de delación y confor-
multitud y la declaración mente, se levanta con- en diferentes luchas sin lismo sindical. No podían mismo; tomando en sus
del estado de sitio. El tra el capital y contra la haber sido por ellos pro- existir huelgas “salvajes” manos las luchas y eva-
papel jugado por el sindi- racionalización del ca- movidas que los obreros etimológicamente ha- didos de cualquier con-
cato comunista en estos pitalismo moderno, que respondieron en la calle blando porque ninguno signa sindical. Todo a
dos casos fue atacar a suponía una flagrante a base de manifestacio- de los sindicatos tenía raíz de una disminución
los obreros simultánea- contradicción entre el ca- nes unitarias y gritos pi- por qué oficializar la de salario de 0.40 fran-
mente con el palo y la rácter cada vez más in- diendo la cabeza de los huelga. El peso del so- cos. La lucha de los tra-
zanahoria: se los ganaba humano y absurdo del delegados sindicales en cial reformista PCF entre bajadores alza la antaño
con bonitas promesas de trabajo y las posibilida- Glasgow y Manchester. el proletariado francés ajada y de nuevo →
El Estudiante Proletario Colectivo Revolucionario Espartaquista Estudiantil Página nº8
→ revitalizada bandera y deja a los trabajadores des sindicales que ha- allá de la propia fábrica, como así el león ataca al
roja en los edificios. sin posibilidad de llevar bían puesto en la calle a tal era el espíritu de la ciervo más débil y en-
Los aires de revolu- hacia delante el combate 7 mil trabajadores de la clase trabajadora. fermo del grupo. Pero
ción soplan y la calma por no haber convergido FIAT; encontramos un Una de las limitacio- como nada pudieron, se
tensa que precede a la con los compañeros de cambio cualitativo en el nes más importantes del dio inicio a la estrategia
tormenta se hace hueco Saint-Nazaire. mismo a tenor de la ex- movimiento del proleta- de la tensión, tras la que
en los corazones de los plosión de las luchas es- riado italiano es que se encontraban los servi-
patronos, convencidos El “mayo rampante” tudiantiles, el famoso nunca hubo un enfreta- cios de inteligencia italia-
de solucionar el pro- italiano y la matanza de Mayo del ’68 de los estu- miento abierto contra el nos.
blema con una subida Piazza Fontana diantes italianos, surgido sindicalismo. Se avanzó, El cierre de filas en
salarial. Mientras tanto, Las huelgas masivas por el contagio de la pa- sin embargo, en la expe- torno a las instituciones
5.000 obreros se dan en Francia fueron la gran sión revolucionaria que riencia autoorganizativa, democráticas, tan ame-
cita en un mitin sindical escuela de miles de tra- sacudía Francia por como en el caso del Co- nazadas por el levanta-
donde se criminalizan los bajadores jóvenes recién aquel entonces. mité Unitario de Base de miento obrero y la
“excesos” de los trabaja- incorporados a la indus- No tardaron estos en Milán. En los meses si- amenaza de que si-
dores, capaces de hacer tria, pues sacaron las mirar a la clase obrera, y guientes, los jornaleros guiera extendiéndose y
frente unidos a las pro- lecciones necesarias la presencia de piquetes agrónomos y la vanguar- generalizándose, hizo
pias fuerzas de asalto. que luego les llevaron a delante de las fábricas dia estudiantil se su- que el poder se viese
El movimiento se ex- ser el sector más deci- era lo consuetudinario. maba a la lucha abierta obligado a valerse de la
tiende a Nantes, donde dido y radical de los Así, cuando FIAT dio el contra el capitalismo y el táctica del terrorismo de
la negociación sindical combates del famoso aldabonazo, los estu- orden burgués que se Estado usando como
se logra ante unos pusi- Mayo del 68 francés. diantes no tardaron en estaba perfilando. Y el brazo armado cuadrillas
lánimes burgueses que De igual manera, fue converger en el movi- Comité Unitario de Base fascistas.
dicen haber firmado el la juventud obrera lle- miento masivo revolucio- quedó pequeño y los de- La burguesía sabe re-
acuerdo “bajo coacción”. gada de las atrasadas nario que sacudió toda legados de las distintas producir su dominación
La respuesta es terrible: zonas rurales sureñas si- Italia de norte a sur. Los secciones en lucha in- una y otra vez, a través
bombas contra los CRS, cilianas la que conmo- comités de fábrica susti- tentaron dar luz a una de diferentes personajes
destrucción del periódico cionó al proletariado tuyeron a los viejos co- primigenia forma de só- y modos de ejecución.
local, asalto a la cárcel. internacional desde 1960 mités de empresa, la viet obrero. Como Italia era un polvo-
Lo más llamativo del hasta 1973. Sin sindica- forma central de control Múltiples grupos rín, no quedaba más que
movimiento de Nantes lizar y sin ser política- sindical en las empresas. amenazar a los obreros
políticos obreros
es que los trabajadores mente militantes de “Todos somos delega- revolucionarios con car-
italianos buscaron
entran en una armería a algunas de las organiza- dos”, era la consigna nicerías que infundieran
posiciones
armarse. Ningún Partido ciones tradicionales del central que se fue ha- el temor.
Bolchevique, ninguna proletariado en Italia ciendo fuerte conforme proletarias Italia fue el último re-
consigna dada. No hay (PSI, PCI), sentían más el movimiento se exten- La fuerza que cobró- ducto de las grandiosas
vanguardia que tenga que ningún otro lo que día. La oposición a la ada en los sucesivos luchas obreras que los
que darles indicacio- era trabajar a destajo, sin mediación sindical era meses hacía presagiar años sesenta trajeron
nes porque ellos saben cualificación y sin espe- palpable. Los obreros se que, de no plantear la consigo. El nuevo re-
de sobre qué han de ranza de hacer carrera ponían en huelga (pen- necesidad de armarse y punte en la combatividad
hacer. Sin embargo, el en la fábrica. El despar- sadas para hacer el má- preparar el combate con- obrera nos obliga a pen-
movimiento muere pi- pajo y la rebeldía juvenil ximo de daño a la tra el enemigo de clase, sar la historia del movi-
llado en la horquilla de hicieron el resto. producción con el mí- éste cargaría sin condes- miento obrero para que
unos sindicatos que Aunque el combate se nimo esfuerzo) sin contar cendencia: primero, los saquemos las lecciones
hacen lo posible por des- inicia ya en 1960 como con las directrices sindi- sindicatos, agazapados pertinentes para los
trozarlo y un lock-out de reacción al libre albedrío cales. La lucha se retro- en un rincón y superados tiempos que se aveci-
la patronal que se ex- con el que actuaban los alimentaba del combate por el movimiento, vol- nan. ■
tiende durante semanas neofascistas y los ardi- que se desarrollaba más vieron a salir a la luz;

√ Puedes contactar con nosotros en: luchaestUS@hotmail.com

√ Visítanos en nuestro blog: http://espartaquismoestudiantil.wordpress.com
√ También nos encontrarás en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla
y en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Miguel Hernández de Elche.

Sobre nosotros ecciones y aprender de sus errores.

-Somos un partido político comunista,
un grupo estudiantil que trabaja por la
articulación de las reivindicaciones
obreras y estudiantiles sobre la base
de una mutua comprensión de los pro-
blemas y una acción conjunta y radi-
cal.
- Somos herederos de las grandes lu-
chas obreras y estudiantiles de la His-
toria; tomamos ante ellas una posición
crítica que nos permita aprender sus
-Somos comunistas y revolucionarios,
no una secta ni un grupúsculo. Nues-
tras posiciones son nuestra mejor
arma, con las que intervenimos en los
órganos de lucha unitarios estudianti-
les y obreros: las asambleas o con-
sejos obreros, verdadera expresión
de democracia obrera y estudiantil.
- Intentamos imprimir a las luchas en
las que participamos una dimensión
más amplia y radical, valiéndonos de
nuestra presencia en los consejos y
asambleas.
- Somos marxistas antiautoritarios, co-
munistas espartaquistas e intransi-
gentes internacionalistas. Somos
trabajadores y estudiantes dispuestos
a todo por la emancipación obrera in-
ternacional.
- Somos radicales en la medida en
que las circunstancias exigen que lo
seamos.
- No somos vanguardia. Somos ex-
plotados, no explotadores.