Universidad Latinoamericana de

Ciencia y Tecnología (ULACIT)

Fundada el 21 de octubre de 1987.

Del 2011 al 2018 ha sido catalogada como la

mejor universidad privada de Centroamérica,
según QS World University Rankings de
Londres

En 2012 recibió el Premio de Responsabilidad

Social en Acción de la Cámara Costarricense-
norteamericana (AMCHAM).

Premiada por la Cámara de Comercio de

Costa Rica con el Galardón de Educación.

Alma mater de cada uno de los autores del

presente libro. Valeria Brenes y Alejandro
Piedra, B. en Administración de negocios.
Roberto Álvarez, B. Ingeniería Informática.
Luis Fernando Coronel, B. Ingeniería Química
Industrial. María José Huertas, B. Ingeniería
Industrial. Shalom Rivera, B. Bilingüe en
Relaciones Internacionales. Alonso Rojas, B.
Odontología. Nicol Vargas, B. Enseñanza y
traducción del inglés.
El Impacto de las redes sociales en la conducta de los seres humanos
© Roberto Álvarez Medina
© Valeria Brenes Chaves
© Luis Fernando Coronel
© María Jose Huertas Martínez
© Alejandro Piedra Gamboa
© Shalom Rivera Mesén
© Alonso Rojas Quirós
© Nicol Vargas Trejos

Primera edición: marzo 2019

Diseño de portada: © Fabricio Piedra Gamboa

Reservados todos los derechos. No se permite reproducir, almacenar en sistemas de

recuperación de la información ni transmitir alguna parte de esta publicación, cualquiera que
sea el medio empleado- electrónico, mecánico, fotocopia, grabación, etc., sin el permiso previo
de los titulares de los derechos de propiedad intelectual.

Impreso en San José, Costa Rica

Printed in: San José, Costa Rica.
Nuestros agradecimientos a las profesoras,
Silvia Castro Montero y Mayela Dabdub,
a nuestras familias y cada una de las
personas involucradas en la creación de
este libro, por todo su apoyo, exigencia,
aportes y sugerencias. La elaboración y
publicación del presente libro fue gracias a
ustedes y, por tanto, se los dedicamos.
 INDICE

Alonso Rojas Quirós

Capítulo 1
¿Son las redes sociales la principal razón de que las relaciones de pareja, amigos y familiares,
se vean afectadas? ...................................................................................................................... 2

Roberto Álvarez Medina

Capítulo 2
¿Tienen más influencia las redes sociales para la toma de decisiones en adultos que en
jóvenes?.................................................................................................................................... 10

Valeria Brenes Chaves

Capítulo 3
¿Son o no las redes sociales las responsables del acoso cibernético que sufren los
adolescentes? Online u offline: el ciberacoso siempre está presente. ...................................... 18

María Huertas
Capítulo 4
¿Influyen las redes sociales en la inteligencia para el desarrollo cognitivo y físico en niños y
adolescentes?............................................................................................................................ 26

Alejandro Piedra Gamboa

Capítulo 5
¿Son las redes sociales la razón de que se genere un bajo rendimiento académico en niños y
jóvenes universitarios? ............................................................................................................. 36

Shalom Rivera Mesén

Capítulo 6
¿Deben o no tener, los padres, acceso a las redes sociales de sus hijos menores de edad? ..... 44

Nicol Vargas Trejos

Capítulo 7
¿Son las redes sociales tan adictivas como las drogas? ........................................................... 52
Luis Fernando Coronel
Capítulo 8
¿Son las redes sociales el principal influyente de estar en desacuerdo con la iglesia católica?
.................................................................................................................................................. 60
Bibliografía consultada ............................................................................................................ 67
 PROLOGO
La vida sigue su rumbo. Los humanos, en medio de sus avances, contemplan su
progreso atesoran sus vivencias, oportunidades y relaciones. La ciencia, la investigación y el
desarrollo tecnológico, han venido, en buena forma, a generar cambios positivos en vida de los
seres humanos en sectores tales como, la salud, economía, agronomía, sistemas vigilancia,
sistemas jurídicos. equipos tecnológicos, maneras de convivencia, medios tanto sociales como
comunales, entre otros. Por tanto, no está de más decir, que la tecnología ha sido una
herramienta para el desarrollo y la innovación.
Sin embargo, no todo es positivo. En la actualidad, contemplamos una sociedad que se
adhiere a un dispositivo electrónico como herramienta principal para subsistir en un mundo
social. Se utiliza para interactuar, recibir información independientemente de la finalidad de la
misma. Puede que esta sea, veraz, falsa, oportuna o mal intencionada, el receptor, a través de
su dispositivo, está dispuesto a tomarla como suya y convertirla en parte de su subsistencia, su
socialización, su realidad y hasta parte de su estado anímico. La capacidad de discernir entre el
bien y el mal, lo positivo y lo negativo nos define como seres humanos y cada vez más, lo
estamos perdiendo, cediendo, lo estamos dejando en las manos equivocadas.
Se ha visto y escuchado, en medios informativos, que cada vez más, la utilización
excesiva de las redes sociales, genera disfunciones en el desarrollo físico de la vida social. El
aumento de relaciones impropias, acciones delictivas, acoso cibernético, adicción al internet,
pedofilia, pornografía infantil y miles otras, facilitadas aún más por la internet y las redes
sociales, han puesto al ser humano en necesidad de protegerse de una manera inusualmente
exagerada. Se recurre a la utilización de video cámaras, armas tecnológicas, chips de rastreo,
etc. todas facilitadoras de información personal, poniendo a disposición, de los más capaces, la
seguridad de nuestra identidad. Al mismo tiempo, entramos a cualquier red social, popular en
la actualidad y publicamos ¿qué estamos haciendo?, ¿dónde?, ¿con quién?, ¿por qué? Y todo
acompañado de una foto, una ubicación en vivo y una actualización periódica. Contradictorio,
¿no?
El presente libro amplia, aún más, sobre las repercusiones de las redes sociales en la
conducta de los seres humanos. Los autores desarrollan sobre cómo afecta las relaciones de
pareja, familia y amigos, la toma de decisiones, el desarrollo integral del adolescente, la
responsabilidad parental, la salud mental y física y hasta la forma de ver y comprender la vida.

¡En la dinámica de la vida, todas las incursiones en desarrollo del ser humano provocarán, un
cambio positivo o negativo en su forma de vida, todo va depender del momento y la percepción
con el que las tomemos!
Ana Isabel Martínez Matarrita
Ministerio de Salud.
Dirección Científico y Tecnológico.
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Capítulo 1

¿Son las redes sociales la principal razón de que las

relaciones de pareja, amigos y familiares, se vean afectadas?

-Alonso Rojas Quirós

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Durante el desarrollo pueden surgir preguntas como ¿de dónde proviene el ser

humano? ¿cómo la tecnología ha sido parte de la evolución del humano? O bien ¿debe ser
cambiada?; El ser humano se ve afectado en su diario vivir por la tecnología o bien por las
redes sociales para ser específicos, sin embargo estas preguntas tienen sus respuestas, los seres
humanos vivimos en un mundo dividido y conectado al mismo tiempo, donde la persona cuenta
con una gran habilidad de tener una conexión estable con cualquier otro, sin embargo desde la
llegada de la tecnología a nuestras vidas han visto un cambio drástico debido a la debilidad y
fatiga del humano. Conforme pasan los años los seres humanos encuentran más maneras para
poder comunicarse, esta comunicación puede abarcar desde lo más antiguo hasta aparatos
tecnológicos muy avanzados para mayores distancias.
Existieron diferentes medios de comunicación, pero el primero fue la telegrafía,
seguidamente por la telefonía, la radio, la televisión, la transmisión por cable y satélite, y por
supuesto Internet. Todo esto sucedió en los 150 años, aunque fue durante la última década
cuando el Internet llegó a su auge.
Según lo escrito anterior fue el inicio del surgimiento de las redes sociales, en la
actualidad estas han tomado una gran importancia para una comunicación estable entre,
amigos, conocido y familiares sin tener la necesidad de encontrarse cerca o que exista algún
contacto físico. Parte de tener una comunicación fluida por medio de las redes sociales no solo
es textual, sino la posibilidad de comunicar mensajes por medio de fotografías, videos,
grabaciones de voz, entre otros. Sin embargo, no todos usan estos medios con la misma
intención o el mismo cuidado y logran ocasionar un desequilibrio en sus vidas, las redes
sociales pueden ser un arma de doble filo, ya que son herramientas de comunicación que se
prestan para mal interpretaciones cuando es leído por el receptor, es decir, puede transmitir en
un solo texto, doble mensaje dependiendo de cómo se capte.
La mayoría de población que utilizan estos medios son los adultos jóvenes donde suele
presentarse el mal uso o el abuso de las redes sociales debido a la falta de educación, este no
es un tema de edad o género sino de prevención o medición de uso del mismo.
Dentro del desarrollo de los adultos y jóvenes, estos echan mano sentido común en la
situación que los diferencia la manera de la de un niño o un adolescente; esto es porque se debe
de entender que los jóvenes mantienen una conexión fluida y esto es debido a que los adultos
jóvenes mantienen diferentes tipos de conversaciones, comprenden situaciones más
complicadas y utilizan su experiencia para resolver problemas prácticos
 5

Desde lo anterior se puede entender como desde el paso del tiempo las redes sociales
pueden empezar a ser un problema ya que no son empleados de la manera correcta, sino que
empiezan a ocasionar daños, muchos adultos jóvenes utilizan esta “herramienta” de
comunicación como un medio de acoso, recordemos que internet es abierto a todo público, no
existen restricciones en este mundo, solo el hecho de subir una fotografía de algún usuario, ya
empieza a revelar datos que otras personas pueden utilizar en contra de su propietario, La
privacidad no es un término al que se le pueda dar confianza en este ámbito, ya que esto no
existe en las redes sociales. Y a partir de este punto es que se genera una controversia, ya que
las redes sociales también son consideradas los destructores de la vida social de las personas,
ya que la vida familiar, de pareja, laboral y social están expuestas detrás de una pantalla de un
teléfono celular, el material que es subido ya sea a las diferentes redes como lo son: Facebook,
Instagram, Snapchat, Skype, WhatsApp, entre otros, se encuentran totalmente expuestos, ya
que lo que se sube se vuelve totalmente público y relevador de información personal, con
lo que se genera un pensamiento abstracto, en el que hará que este no permite distinguir en
qué momento las redes sociales están empezando a ocasionar daño a otros, y muchos de estos
daños se dan también por la edad que tenga el usuario o la víctima ya que también se ve
involucrada como uno de los factores frágiles del humano el cual es dominado por los medios
de comunicación y esto debido a que la edad va a colocar un nivel de madurez en la persona
que permitirá tener un control más amplio de sus acciones , ya que podrá decidir entre sus
relaciones interpersonales en amistad, pareja o familia, muchos buscan intimidad, otros amistad
y otros simplemente empatía, pero esto suele verse destruido por el mal uso de las redes, la
toma de decisiones en conflictos, sexualidad, emociones, sentimientos y otros se ven muy
comprometidos.
El amor es otro factor importante en el cual también se puede ver de una manera muy
marcada los problemas que pueden presentarse por la intervención de los medios de
comunicación mal empleados, ya que según la compañía Apple, las personas revisan su
teléfono en un promedio de 80 a 130 veces al día, sea para ver noticias, responder correos, ver
mensajes de WhatsApp, entre otros. Lo que quiere decir lo anterior es que a veces el humano
le presta más atención al teléfono que a su pareja, y esto causa daño en una relación, ya que la
pareja empieza a sentir que le da más atención al teléfono que a ella o el mismo, asimismo por
estos motivos se empieza a generar desconfianza o inseguridad, un ejemplo muy común que se
vive todos los días es el famoso “Lique” de Facebook, ya que este es una vía de comunicación
pésima, debido a que una persona puede entender la información enunciada a su
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conveniencia mientras otra persona hace otra interpretación, esto ocurre mucho con los
emoticones, son imágenes que el receptor puede malinterpretar.
Además, las redes sociales son impulsores de celos y el control hacia otras personas,
con la idea en la cabeza que esa persona es todo para mí y yo todo para él/ella. Lidiando con
emociones preexistentes, lo que hace la lógica de internet es enfatizar las. Su inmediatez, por
ejemplo, provoca que se experimente más ansiedad porque sabemos que no se necesita una
espera tan larga por el contacto del otro. Las emociones vienen con una intensidad mucho más
virulenta
La atención del otro en forma de clics ya no son guiños espontáneos, sino gestos que se
exigen en las actuales relaciones. Saber el momento de “la última conexión” del ser amado
despierta la imaginación, de un modo perversamente grato, para crear elaboradas teorías que
justifiquen por qué no hay una respuesta al: “Hola amor, ¿cómo va tu día?”; mientras que “dejar
en visto” (aquél fenómeno de leer un mensaje y no responder) puede desatar rabietas más
grandes que las que, cuentan, montaba la reina Juana I de Castilla –conocida como “Juana la
loca”- a su esposo, el rey Felipe. Y los desaires, aun teniendo una vida tan breve en el mundo
digital, se pagan a un alto precio.
Hoy en día existe un producto que se está volviendo viral y es el llamado sex revengo.
Esta nueva dinámica consiste en que las parejas que pasan por una buena etapa de la relación,
deciden probar suerte con el intercambio de fotos, pero ¿qué pasa cuando a esto se suman unos
cuantos mega Hertz? “Me peleo contigo y, como venganza, público todo en las redes sociales.
No es una fotografía impresa que recuperas y listo. Aquí, una vez que está en la red, la imagen
se multiplica por millones
Así como el caso anterior, existen relaciones que empiezan a volverse tóxicas por un
motivo de celos e inseguridades de lo que se puede estar manipulando en las redes sociales.
Porque hacerse un exiliado del universo online es una alternativa poco real y porque nadie
quiere renunciar a las nuevas posibilidades. Mantener contacto, viviendo en continentes
distintos o “encontrar el amor” en alguien que no reside en la misma ciudad son situaciones
que estarían destinadas al fracaso sin la llegada del internet.
Existe una tendencia muy fuerte a demonizar a las redes sociales, pero el verdadero
problema son los celos indigeribles, el romanticismo, la idea de amor que concebimos desde
niños, lo que aprendimos en la televisión, lo que nos explican en casa, la falta de leyes de
educación sexual. El verdadero problema es lo otro y no lo virtual.
Las nuevas tecnologías son facilitadores de la vida, pero al mismo tiempo pueden
complicarla, pues pueden convertirse en un fin y no en un medio. Esto puede ser observado
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cuando hay una obsesión enfermiza por adquirir la última novedad tecnológica y esta ansia
puede llegar a poner en segundo plano necesidades más poderosas. Asimismo, las redes
sociales pueden llegar a atrapar a las personas, pues el mundo virtual contribuye a crear en ellas
una falsa identidad y distanciarle o perder el contacto personal, así́ como distorsionar el mundo
real.
A partir de la información dada anteriormente la adicción a las redes sociales es
considerada una patología por el nivel de destrucción que puede causar, sin embargo, no es
algo que se vea muy seguido, solo con consultar al psicólogo podemos ir tratándolo, el
inconveniente es la falta de educación de llevar a los pacientes a servicios de salud. Esta es de
suma importancia porque limita la libertad de la persona y disminuye el campo de conciencia,
por ende, esto puede repercutir en la vida cotidiana, a nivel familiar, escolar, social o de salud
de las personas afectadas.
La ciberadicción, como es denominada, se establece cuando el sujeto deja de verse con
sus amigos y se instala frente a la pantalla, cuando presta más atención a estas que a las personas
que lo rodean, o cuando el sujeto no rinde de manera adecuada en sus estudios o actividades
diarias. En todos los casos hay una interferencia negativa en la vida cotidiana. Como cualquier
otro adicto estos sujetos experimentan un síndrome de abstinencia cuando no pueden llevar a
cabo la actividad de ingresar a las redes sociales, caracterizado por un profundo malestar
emocional, en el cual se puede observar un estado de ánimo disfórico, irritabilidad, insomnio e
inquietud.
Cuando existe una dependencia los comportamientos adictivos se vuelven automáticos,
emocionalmente activados y con poco control sobre el acierto o error de la decisión. La persona
adicta aprecia los beneficios de la gratificación inmediata, pero no es capaz de mejorar en las
posibles consecuencias negativas a largo plazo. Es por ello que el abuso de las redes sociales
puede facilitar el aislamiento, el bajo rendimiento, el desinterés por otros temas, trastornos de
conducta, el quebranto económico, el sedentarismo y la obesidad.
Después de haber realizado esta investigación, se logra demostrar cómo las redes
sociales son un punto importante en el comportamiento de los adolescentes. Sin embargo, se
notan diferentes puntos como los superficiales que son, y la exposición de los sentimientos
abiertamente por parte de los usuarios, lo que puede ser un impulsor de conflictos, ya que estas
cuentan con la posibilidad de un acceso ilimitado e incontrolable a terceras personas.
Miles de adolescentes alrededor del mundo tienen miles de experiencias con la
tecnología, mencionando las redes sociales para ser específicos, donde estas se vuelven el
centro de atención del joven, siendo un factor importante de distanciador de la familia y amigos,
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o como la persona puede llegar a cambiar por estas mismas, recordemos que los adolescentes
tratan de buscar apoyo en otros para enfrentar las transformaciones físicas, emocionales y
sociales de la edad que se encuentre.
Además, que para la mayoría de ellos se vuelve indispensable estar conectado a la
internet, haciendo que otras situaciones de la vida se empiecen a mover en segundo plano,
alterando horas de sueño, generando ansiedad, y desplazando actividades diarias a llegar a
postergar las. Pero acaso este motivo es el indicador de que las redes sociales predominan en
la toma de decisiones de los jóvenes, e incluso los adultos. Debido a el dominio mental y de
tiempo que existe entre las redes sociales y el adolescente, donde se empieza a generar una
dependencia y obsesión por permanecer al día y conectado a las redes sociales.
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Capítulo 2

¿Tienen más influencia las redes sociales para la toma de

decisiones en adultos que en jóvenes?

-Roberto Álvarez Medina

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Es increíble saber cómo la tecnología ha revolucionado las actividades del ser humano
desde la comunicación hasta la automatización de redes de distribución, manufactura y demás.
Desde los inicios de la humanidad la comunicación ha sido un mecanismo esencial en
relaciones de personas y para lograr acuerdos, expresar sentimientos, opiniones, satisfacer
necesidades que son esenciales y que a través del tiempo ha permitido lograr mejorar el acceso
a las mismas. El ser humano ha tenido la particularidad de querer sintetizar los procesos en
acciones más pequeñas que a la postre dan con una caída en el sedentarismo y la pérdida de
sociabilidad y contacto humano como parte de dicha relación. Parte de esta revolución, la
observamos en la comunicación que desde hace aproximadamente una década ha presentado
un crecimiento exponencial del uso de un medio no físico o “cara-cara” para entablar una
comunicación. De aquí partimos hacia el fin en discusión relacionado a las redes sociales y su
influencia inevitablemente y aunque parezca extraño, a su poder en la toma de decisiones en
los adultos aún más que en las personas menores de edad y adolescentes en contacto directo
con la tecnología. De manera que, siguiendo este hilo de sucesos, se debate tomando en cuenta
opiniones en relación con el contacto de las redes sociales y las personas, la situación mundial
que acarrea el uso de las redes sociales y el fin con el cual se les da dicho uso.
Motores de búsqueda para contenidos virtuales son muchos, como el que posiblemente
está usando en este momento para leer este libro. Las nuevas tecnologías permiten este tipo de
acciones de aprendizaje y comunicación de formas de pensar. Todo con muchísima facilidad y
rapidez, aún más con aplicativos que faciliten el acceso como lo es una red social. Es importante
el conocer esta lógica para comprender el impacto tan grande que las redes sociales y las
tecnologías en general provocan en una persona, a tal punto de manipular como por arte de
magia la elección de una decisión e influir muy fuertemente en ella.
Como primer punto hacemos referencia a la tecnología y su relación con las personas.
Es sabido que en la sociedad actual la tecnología, más que una herramienta de uso sirve también
para evitar la “fatiga” y al paso comunicar hechos e información. Es ahí donde un estudio
realizado nos ilustra con datos que en un intervalo de edad de personas entre 18 y 24 años usa
las redes sociales (Domínguez,2010). Por lo tanto, podemos observar un mayor uso de las redes
por parte de las personas jóvenes lo cual es un factor primordial para desarrollar capacidades
de análisis del entorno virtual. Esto viene a funcionar como una vacuna a lo hora en que las
redes sociales inducen a una persona a tener una determinada conducta o a tomar una decisión
debido a su influencia.
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Se ha demostrado también que los jóvenes aprenden de la retroalimentación que otras

personas les dan (Morduchowicz,2012). Esta percepción la usan para poder “mejorar”, verse y
actuar diferente. Es la principal diferencia en torno al punto planteado anteriormente debido a
lo que dicha influencia puede generar para tomar decisiones. Lo cual es un hecho ya que vemos
cómo los famosos “retos” de internet por ejemplo pueden desencadenar un potencial daño tanto
mental como físico. Aunque, lejos de adoptar ese “feedback” por gusto propio, puede ser un
ejemplo de evolución en la forma en que se adapta una persona al medio.
Cabe destacar que la forma en que la tecnología se ha acercado al hombre ha hecho que
incurramos en necesidad por pertenecer a un grupo, necesitar apoyos de externos y ser
partícipes de opiniones. Al traste, la relación entre personas produce un cambio notable en la
información que se comparte. Cuando uno o más integrantes de una sociedad determinada
difiere en la forma de pensar y actuar de la mayoría se juzgan dichas conductas como contrarias
a la tendencia que hay en el mundo y se tacha a las personas de desactualizadas.
Es sabido que el mundo actual está en constante aceleración. El acceso a las mismas
conoce un público meta que actúa diferente dependiendo de la esfera en la cual se desarrolla la
función de la aplicación, software o producto y los sucesos y situaciones mundiales. Es así
como sabemos que las redes sociales llevan un objetivo hacia los jóvenes. Por ende,
observamos un sinfín de personas que en su mayoría son adolescentes jóvenes ya que son los
que han crecido con este repunte tecnológico.
Para nadie es un secreto que la sociedad da pasos agigantados en materia tecnológica,
es ahí donde observamos una desproporción muy marcada en los tiempos de lanzamiento de
nuevas tecnologías. La aceleración de los dos objetos en estudio, tanto sociedad como
tecnología genera una relación casi dependiente entre los seres humanos y los insumos
tecnológicos. De manera que se genera un uso más continuo de apps y dispositivos
tecnológicos.
Es así como surge un tema interesante entre las redes sociales y el mundo actual. Según
un informe, los jóvenes y adolescentes son dados a socializar más unos con otros debido a
factores como hacer lazos de amistad y compartir experiencias (Domínguez,2010). Debido a
que la interacción social offline tiene los mismos principios que la interacción online es que
estas últimas trasladan, facilitan y maximizan esa necesidad social, de modo que no es de
extrañar que el grupo que más las use sea el ya mencionado. Ya que influyen muchos aspectos
como, por ejemplo: el colegio o escuela, grupos deportivos y culturales y de esparcimiento en
general.
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Se convierte este punto en una razón que impulsa la toma de decisiones ya que son los
adultos quienes pasan menos tiempo en relación continua con sus amigos y quienes pierden
contacto más fácil con ellos. Cabe destacar que esto es una razón debido a que la adaptación a
nuevos patrones sociales viene a actuar como una forma de enseñanza para conductas y
actitudes actuales, lo que les dotará de conocimiento para no tomar una decisión incorrecta y
pensar más detenidamente. De forma que, si hubiera una comunicación y relación más
continua, implicaría que las relaciones de amigos se mantuvieran también por medios
comunicativos virtuales e internet. Un aspecto unido a la falta de socialización es el que los
más adultos tratan de desenfocarse de ambientes laborales y rutinarios. Por lo que un factor
desencadenante de la falta de uso de las redes sociales es el descanso en todo aspecto.
La aislación del uso de las redes sociales genera una desprotección ante los nuevos
comportamientos unidos al esquema de las redes virtuales. Seguido a esto, la desprotección
puede provocar eventualmente una elección errónea, distinta o deliberada de una decisión en
torno a un tema específico y tenga mucho flujo de opiniones. De forma que, un uso constante
de redes sociales es un estilo de “entrenamiento” para el aprendizaje por medio de la tecnología.
Aunque también, hoy en día las redes sociales están teniendo un cierto cambio en cuanto
a su contenido. Es ahí donde vemos ahora información en relación con noticias tanto nacionales
como internacionales que interesen al público y dotarlo de criterio ante una situación que
involucre puntos de vista ante dichas noticias y facilitarle el acceso a las mismas utilizando un
medio que las personas frecuentan a menudo. De esta manera es cómo se puede también
estudiar cómo el mundo en estos momentos le está dando vuelta a la forma en que se accede a
la información a como antes se hacía, la cual era por medio de la televisión y periódicos de
papel.
Este punto anterior puede tener una influencia en la cantidad de adultos que pueden
intentar utilizar más las redes sociales para acceder a esas noticias que les llamen la atención y
dar su punto de vista en la misma aplicación. Así vemos ahora un mayor número de
publicaciones en torno a las formas de pensamiento y debates de ellas. Con esto, se pone en
discusión si en alguna parte de la historia veremos una equiparación en el acceso de las redes
virtuales por parte de los adolescentes y los adultos y por qué no adultos mayores. Pero que,
sin embargo, aún se está teniendo una brecha muy larga en cuanto a dicho acceso y que en un
futuro con el cambio de tecnologías la brecha se puede hacer todavía más grande.
Aquí es donde entramos a uno de los puntos más importantes en el estudio de este tema
y hacemos referencia al uso de las redes sociales. Como hemos comentado anteriormente las
redes sociales son un medio de comunicación masiva dotada de muchas características
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relevantes y que no distan en puntos en común entre sí. Según un estudio en caso, las personas
en general usan las redes sociales por la interactividad y el contacto con las personas
(Domínguez,2010). Con el fin de mantener esa relación y encontrar a aquellas personas que
conocen, pero no tienen un número telefónico o correo electrónico para dar con ellas. Esto, es
algo irrefutable ya que ha servido para entablar relaciones tanto de amistad como de pareja.
¿Quién no ha intentado buscar una persona en redes sociales porque no está en los contactos?
A pesar de que ya hemos comentado la influencia de la falta de uso de las redes sociales
en población adulta, tenemos un dato que puede en cierta forma contradecir lo planteado
anteriormente. En un estudio realizado a personas que se exponen a la tecnología,
específicamente los juegos online y virtuales en población adolescente, se demostró que son
ellos los más propensos a tomar decisiones por influencia de estas (Arab & Díaz,2015). Si bien
es cierto no son redes sociales, las mismas contienen en ciertas ocasiones juegos y llevan
anuncios para inducirlos a participar y utilizar dichos juegos. En donde, lo que al final no tiene
una relación tan directa, si se vuelve un aspecto importante para dar con una afirmación de este
tipo.
El pensamiento anterior va ligado a que se implementen ideas que no se apegan a la
realidad para situaciones que son de la vida real. Ahora bien, se analiza también que
independientemente del uso que se les dé a las redes sociales, estas a su vez cumplen con el fin
para el cual se brinda el servicio. Y si hablamos de los jóvenes se sabe que la mayoría están
cursando estudios secundarios o primarios por lo que el uso de redes sociales a como vimos
anteriormente puede tornarse un medio informativo aún si no es para uso profesional.
Es interesante la relación de las redes sociales como un estilo de consejero hacia las
personas. No se puede evitar caer en tomar una decisión de acuerdo con una red social y lo que
su contenido expresa. ¿Quién no ha tenido que decidir en donde tomarse un “selfie” para saber
el mejor punto y que la foto tenga muchos “me gusta”? Con esto se obtiene una fuente
importante y un ejemplo claro de cómo las personas pueden inconscientemente ser parte de un
problema social que resulta de la falta de autocontrol e independencia de nuestras acciones.
Las redes sociales como tecnologías han sido una razón por la que las personas en estas
épocas de la historia, estamos pasando mucho más tiempo en dispositivos móviles. Dejando de
lado en muchas ocasiones tiempos en familia en los que del todo no se utilizaba algún tipo de
tecnología salvo los televisores, radios y computadoras de escritorio. Cada vez la integración
de las redes sociales nos perjudica en gran manera sea para bien o para mal y nos introduce a
un mundo que de una u otra forma ya es completamente tecnológico en cuanto a la
comunicación se refiere. Con ello, la injerencia de una red social y sus características
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pertenecientes dentro y fuera de ella, generan un dominio en ciertas ocasiones imperceptible

en la manera que nos relacionamos y aún más en la toma de decisiones en diferentes entornos
sociales. La vida personal y social es cada vez más inducida a crearse en espacios virtuales
donde vemos reuniones, exposiciones y demás desde un computador o teléfono inteligente. Y
hasta donde se ha podido observar, las decisiones y elecciones de las personas, han sido
moldeadas por un sinfín de factores que en muchas maneras se asocian a lo que hoy en día
podemos llamar como revolución tecnológica y comunicativa. Dentro de esto está nada más y
nada menos que un aplicativo que ha venido solucionando problemas de comunicación entre
personas de diferentes hablas, así como también las distancias entre ellas.
Es así como el tema en discusión se vuelve provocativo sobre quién debería ser más
manipulado para tomar una medida en relación con un tema específico. La tecnología cada vez
toma mayor posición en la vida de las personas, no sólo como forma de comunicación, sino
también en otros factores que influyen para el uso de esta. Definimos con estas aclaraciones
que: increíblemente y aunque parezca mentira, la razón por la que los adultos son más
susceptibles a tomar decisiones con base en factores propios como externos de las redes
sociales es la misma por la que los jóvenes permanecen más tiempo en redes sociales. La
exposición a una situación le da la capacidad al ser humano de adaptarse a dichas situaciones,
de esta manera las personas aún más adultas son más propensas a tomar una decisión con base
en redes sociales por no estar en contacto constante con ellas. De una u otra manera, nosotros
los seres humanos por nuestra condición somos dados a luchar por sobrevivir, y ahora en un
mundo tecnológico, no queda más que adaptarse a él para llevar una mejor vida.
Tras desarrollar respecto a la influencia de las redes sociales sobre la toma de
decisiones, es evidente concluir que, la interacción a través del internet representa, en la
actualidad, una conducta humana cotidiana en casi todo el mundo. Por consiguiente, es
imperante desarrollar sobre si se debe o no responsabilizar a las redes sociales por estas
conductas, en especial, las que amenazan con los valores y la moral de la sociedad. Por ejemplo,
el ciber acoso, de aquí surge la cuestión ¿Son o no las redes sociales las responsables del acoso
cibernético que sufren los adolescentes?
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Capítulo 3

¿Son o no las redes sociales las responsables del acoso

cibernético que sufren los adolescentes? Online u offline: el
ciberacoso siempre está presente.

-Valeria Brenes Chaves

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¿Realmente los adolescentes son capaces de separar su vida personal y su vida en las
redes sociales? Muchas veces no se es consciente de lo que se está haciendo y más aún cuando
se tiene la facilidad de esconderse detrás de la pantalla del computador por medio de perfiles
falsos para humillar y acosar a los demás por diferentes razones. Este ha sido uno de los
fenómenos modernos que más se ha escuchado en los últimos años y que ha ocasionado un
impacto en gran parte de la población adolescente hoy en día. Es de suma importancia entender
la magnitud del tema y de las repercusiones irreparables que ocasiona en las víctimas ya que
causa daños psicológicos y emocionales como la depresión, ansiedad y muchas veces hasta el
suicidio. El acoso a través de las redes sociales puede llegar a cambiarles la vida a las personas
y es un ejemplo claro de que no solo existe el acoso físico, sino que también el emocional. Este
es igual de grave e importante de tratar en la sociedad y no se debe minimizar por el simple
hecho de que no es el tipo de agresión que se conoce normalmente. Las redes sociales han sido
las responsables del acoso cibernético que viven los adolescentes hoy en día.
Según Mendoza, el Coordinador Nacional del Seminario On-Line CIBERPEDS-
CONAPEME (2012), más del 50% de los adolescentes hoy en día usan algún tipo de red social
en la cual se comunican diariamente con amigos, familiares y hasta con desconocidos. Esta
última situación es la más peligrosa ya que es sumamente fácil el contacto con personas
extrañas que están a solo prácticamente un clic de distancia. Es realmente muy preocupante ya
que comparten su vida y todo lo que hacen por medio de estas redes sociales sin restricción
alguna. Al no tener control sobre los riesgos que pueden existir al estar compartiendo tanta
información, no se sabe quién lo ve y que se puede hacer con esa información ya que existen
personas mal intencionadas que están esperando la oportunidad perfecta para atentar contra
estas otras llenas de inseguridades y dudas. Es muy sencillo por medio de las redes sociales
aparentar ser otra persona diferente ya que, según Mendoza, el Coordinador Nacional del
Seminario On-Line CIBERPEDS-CONAPEME (2012), más el 50% de los adolescentes han
aparentando ser mayores de lo que son y han mantenido conversaciones con extraños al recibir
mensajes de estos. Este tipo de situaciones son realmente alarmantes ya que pueden ser un arma
de doble filo y pueden convertirse en situaciones en las que el acoso está presente.
El acoso que viven los adolescentes a través de las redes sociales, ciberacoso, puede
manifestarse de muchas maneras, pero tiene solo un objetivo, el cual es humillar y mostrar
dominio absoluto sobre la víctima. Muchas de ellas lo viven en silencio durante mucho tiempo
y esta represión puede tener grandes repercusiones psicológicas y emocionales en la vida de
 21

estos adolescentes. La depresión, la ansiedad y el suicidio son algunas de estas consecuencias

que a corto o mediano plazo puede provocar este fenómeno llamado ciberacoso.
Según Rodríguez, estudiante de la Facultad de Psicología en la Universidad de la
República en Uruguay (2017), la mayoría de adolescentes que sufren acoso pasan por periodos
de depresión que los afecta emocional y mentalmente sintiendo mucha tristeza y
desmotivación. Esta depresión se puede manifestar de muchas maneras como en cambios de
humor, aislamiento, aburrimiento, trastornos alimenticios, etc. Ciertamente es normal que
víctimas del “cyberbullying” se depriman, al encontrarse en un entorno que únicamente les
dice cosas negativas y despectivas sobre sí mismos, pero eso no significa que siempre suceda
así ya que muchas veces se siguen envolviendo en este entorno que se vuelve adictivo, aun
sabiendo las consecuencias que trae consigo. Sin embargo, es muy importante no minimizar
este tipo de conductas ya que realmente la depresión puede desencadenar a consecuencias muy
graves si no se trata a tiempo. Hay que saber manejar y comprender la magnitud del trastorno
y aceptar que es muy difícil salir del mismo sin ayuda profesional ni sin el apoyo de personas
cercanas.
Por el contrario, otras personas dicen que a pesar de que la depresión es un trastorno
serio, en la adolescencia es mucho más complicado de sobrellevar. Los adolescentes muchas
veces exageran y son más susceptibles con sus emociones, con el fin de llamar la atención al
sentirse inseguros sobre ellos mismos. Según López, Catedrático de Psicología en la
Universidad de Salamanca (2015), los adolescentes viven en una inestabilidad emocional en la
que buscan consolidar su seguridad o inseguridad personal al ir construyendo una teoría
positiva o negativa sobre ellos mismos que va a tener una importancia decisiva para el resto de
su vida. Muchas veces en la adolescencia se llega a magnificar el sufrimiento y los problemas
sin ver ninguna solución al tener cambios de ánimo tan abruptos.
Sin embargo, en la adolescencia puede ser más complicado comprender las emociones
que viven los adolescentes y muchas veces subestimados por estar en una etapa de tantos
cambios mentales y emocionales, es importante prestar atención para detectar si están pasando
por alguna depresión. La mayoría de veces les cuesta compartir lo que piensan o sienten y se
refugian en las redes sociales para sentirse mejor. Según Rodríguez, estudiante de la Facultad
de Psicología en la Universidad de la República en Uruguay (2017), el estar dentro de un
ambiente negativo puede tener mucha influencia en sufrir depresión ya que se está expuesto a
sufrir agresiones por parte del acosador y muchas veces ni siquiera darse cuenta al caer en un
hábito. Muchas veces las redes sociales son ese espacio en el que los adolescentes más
necesitan sentirse aceptados y en los a la vez más rechazados se sienten.
 22

Así mismo, la ansiedad, es otra de las consecuencias que pueden vivir los adolescentes
a raíz del acoso cibernético. Según el Doctor Reyes (s.f), los adolescentes que sufren de acoso
cibernético, experimentan ansiedad y les causa un sentimiento de temor constante sin saber por
qué ni de dónde viene. Esta ansiedad normalmente les hace sentir que algo malo va a pasar y
que están cercanos a vivir alguna experiencia peligrosa, por lo que entran en un estado de
sufrimiento. Según el Doctor Reyes (s.f), ciertamente, la ansiedad es un trastorno que sí sucede
en exceso puede llevar a sufrir enfermedades mentales, pero eso no significa que sea algo malo
ya que se considera que en cierto grado es necesaria para conocerse más a uno mismo. Esta
funciona como un método de defensa para el organismo y ayuda a ir forjando la personalidad
y la conducta de cada persona y más aun viviendo la etapa de adolescencia.
Por el contrario, otros especialistas expresan que no solo los jóvenes que sufren de acoso
cibernético experimentan trastornos de ansiedad ya que, de una u otra manera, este trastorno
forma parte del día a día de los adolescentes, y de hecho son uno de los más usuales. Según
Mardomingo, presidente de la Asociación Española de Psiquiatría Infanto-Juvenil (2005), la
ansiedad forma parte de la vida cotidiana como elemento natural de su estilo de vida. Así
mismo, los trastornos de ansiedad son los más frecuentes en la adolescencia, por encima de las
depresiones y de los trastornos de conducta. Gracias a lo antes mencionado, se puede notar que
la ansiedad en la adolescencia está siempre presente y más aun sufriendo de acoso cibernético,
ya que se siente estar en peligro constante al no saber cómo reaccionar ante las agresiones.
Según Mardomingo, presidente de la Asociación Española de Psiquiatría Infanto-Juvenil
(2005), el trastorno de ansiedad es algo que no se puede evitar sentir, por lo que se necesita
ayuda profesional para aprender a cómo controlarlo sin que se vuelva algo más grave aún.
Según Mardomingo, (2005), la ansiedad se relaciona mucho con la inseguridad sobre el
saber quién es cada quien, y que es capaz de hacer, tal vez porque la adolescencia es una etapa
en la que la identidad está siendo probada es que se vive con mayor intensidad la ansiedad. Las
redes sociales fomentan mucho el tener que mostrar una imagen diferente y muchas veces
alejada de la realidad para sentir que son alguien o parte de algo que están ansiosos por ser. Las
víctimas que a través de las redes sociales sufren de ciberacoso por ser diferentes o no entrar
dentro de los “estándares” de la sociedad hoy en día, experimentan constantes periodos de
ansiedad que son de suma importancia saber tratar. Según Mardomingo, (2005), el tratamiento
para los trastornos de ansiedad consiste en técnicas para el autocontrol, de relajación, terapia
psicológica, sin embargo, es fundamental el apoyo y contención de la familia para sobrellevar
y hacer efectivo el tratamiento. El tratar este tipo de trastornos es de suma importancia para
que el adolescente pueda tener calidad de vida, pueda tener un crecimiento emocional oportuno,
 23

desarrollar todas las capacidades necesarias para el futuro y poder prevenir que esta ansiedad
no desencadene otros trastornos más graves.
De otro modo, el suicidio, es una de las consecuencias más preocupantes y, es también
parte de lo que viven los adolescentes que sufren de ciberacoso. Según Hinduja y Patchin,
profesores universitarios en Estados Unidos (2010), los adolescentes que sufren ciberacoso
tienen pensamientos suicidas constantes, así como también hay otros que además de pensarlo,
lo llegan a hacer. Al estar tan vulnerables y al ser constantemente agredidos, estos pensamientos
suicidas se han vuelto cada vez más usuales en los adolescentes, representando un hecho
realmente alarmante hoy en día. Según Hinduja y Patchin, (2010), ciertamente, el suicidio por
ciberacoso se ha vuelto un tema mucho más significativo e importante de tratar, pero eso no
significa que las tasas de suicidio hayan ido aumentando, sino que por el contrario
disminuyeron durante un periodo de más de diez años. Sin embargo, esto no es ninguna noticia
positiva ya que las cifras volvieron a subir considerablemente, por lo que volvió a ser un tema
relevante en la sociedad actual.
Por el contrario, otros especialistas en el tema expresan que el acoso cibernético no
necesariamente es el principal causante del suicidio en adolescentes, sino que pudo
simplemente ser el detonante de ir cargando ya con otros problemas emocionales, de
personalidad y mentales del pasado. Según Girard, miembro Emérito de la Sociedad de
Medicina de Adolescentes de Estados Unidos, (2017), en más del 90% de los casos en los que
los adolescentes se suicidan, existe escondida alguna enfermedad mental como la depresión, la
bipolaridad o trastornos de personalidad. El crecer siendo una persona insegura, con poca
contención familiar o con baja autoestima son factores que si tienen mucho que ver y que de
cierta manera en la adolescencia se manifiestan aún más. El rol que juega la familia es crucial,
más aún en la adolescencia y cuando existen carencias que se van quedando ahí sin resolver,
pueden provocar lesiones de personalidad muy profundas en estos. El haber vivido una infancia
y un entorno sano es de suma importancia para el desarrollo óptimo de los adolescentes.
Todas las vivencias de cierta manera se proyectan en la adolescencia y eso puede
repercutir de manera positiva o negativa en sus vidas. El venir arrastrando todos esos problemas
desde la infancia puede ocasionar que se vuelva más complicado el encontrar otras soluciones
a estos problemas y que el único que si podría resolverlos sea el suicidio. Según Girard,
miembro Emérito de la Sociedad de Medicina de Adolescentes de Estados Unidos, (2017), es
fundamental tratar este tipo de comportamientos suicidas apenas haya un mínimo indicio o
sospecha, ya que como personas cercanas al adolescente no hay que minimizar las actitudes,
pensamientos o reacciones que puedan tener. Una buena comunicación es uno de los factores
 24

principales para poder saber cómo actuar ante una situación así ya que muchas veces por más
que se quiera ayudar no se sabe cómo, ahí la importancia de recurrir a ayuda psicológica
profesional para tratar el tema con las herramientas debidas y necesarias para él o la
adolescente. La ayuda profesional va a ser de gran provecho o satisfacción para él o la
adolescente ya que, según Girard, (2017), aunque pueda sonar un poco egoísta, el bienestar
individual siempre tiene que estar primero y ser el más importante. Si no se logra estar bien
con uno mismo ni se aprende a quererse como es, va a ser muy difícil poder estar bien con las
personas que se encuentren a su alrededor, ya sea familia, amigos y hasta desconocidos.
Hoy en día los avances tecnológicos han contribuido mucho y gracias a ellos contamos
con innumerables beneficios como sociedad. Sin embargo, estos avances no solo han
representado aspectos positivos, sino que también han servido para propiciar esto que
conocemos hoy como el ciberacoso. Es mediante esta facilidad y apertura a las nuevas
tecnologías que con simplemente un clic se puede saber la información que se quiera sobre
cualquier persona. Esto se presta para esconderse en el anonimato y llevar a cabo este tipo de
acoso, hostigamiento y agresiones.
Los niños y adolescentes hoy en día usan las redes sociales de manera excesiva sin
ningún tipo de restricción, muchas personas pueden pensar que eso no tiene gran relevancia en
la vida de estos niños y adolescentes, pero en realidad pueden afectar su desarrollo cognitivo y
físico, además claro del psicológico. El preferir estar todo el día pegado a un dispositivo
tecnológico el cual tenga acceso a las redes sociales, en vez de hacer actividades físicas,
relacionarse con personas y compartir en tiempo real diferentes actividades, puede causar en
estos niños problemas a la hora de desenvolverse y de la forma en que ven el mundo real. No
se trata de prohibir completamente el uso de las redes sociales, ni de satanizarlas, pero si es de
suma importante que se logre tener un control sobre el uso de estas redes ya que también con
ellas se pueden lograr hacer cosas muy útiles para expandir sus conocimientos, ayudándolos
en temas escolares o personales. La clave es saber usar este tipo de herramientas de manera
inteligente y educar a estos niños y adolescentes a usarlas y a no creer todo lo que ven ahí para
que no sucedan los problemas o consecuencias antes mencionados en este capítulo.
Por estas razones es necesario capacitar e informar a la población sobre este tema y
empoderar a estas personas para que sepan cómo utilizarlas y actuar y en caso de sufrir algún
tipo de acoso o situación extraña, lo denuncien y este pueda ser castigado penalmente por la
ley. Al ser un segmento de la sociedad tan vulnerable, se tiene que ser más consciente y
cuidadoso de la información que se comparte a través de las redes sociales ya que esta
información es la que da pie a este tipo de ataques y humillaciones. Así como los adolescentes
 25

tienen que ser más conscientes de lo que muestran y comparten, los padres, madres de familia
y los docentes en las escuelas también tienen un papel muy importante. Este es en la regulación
y en las restricciones del uso de las redes sociales y de la información que está en ellas para
saber abordar el tema y cómo actuar de manera correcta si está sucediendo, ya sea en los
colegios o en las propias casas.
 26

Capítulo 4

¿Influyen las redes sociales en la inteligencia para el

desarrollo cognitivo y físico en niños y adolescentes?

-María Huertas
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El bajo rendimiento de los niños y adolescentes es dado por el uso excesivo de las
redes sociales tanto así que afecta su desarrollo físico, cognitivo y psicológico. ‘Préstele el
teléfono al chiquito para que juegue y se quede quieto’’, ‘’ guarda ese celular’’, ‘’te vas a
quedar ciego’’ y ‘’ búscalo en Google’’, serían típicas frases de los adultos hacia los niños y
jóvenes que pasan mucho tiempo con dispositivos electrónicos. La comunicación por las redes
sociales se han convertido actualmente en una acción de uso diario ya que es utilizada en los
estudios, el trabajo y los pasatiempos de las personas y es así como la población ha sido
impactada de forma positiva y negativa en sus vidas .Es claro que debido a las actualizaciones
en los dispositivos tecnológicos, las personas puedan llegar a tener un impacto el cual pueda
ser de gran ayuda, como son la accesibilidad y la facilidad pero a su vez puede impactar de
forma contraria. El rendimiento de los menores es de forma cotidiana solicitado por los adultos,
es por eso que, si saben la consecuencia negativa de las redes sociales en el desarrollo físico y
cognitivo, es muy contradictorio el seguir comprando dispositivos tecnológicos
independientemente de la edad y la razón de la entrega del mismo.
Se necesita aire libre, libros y comunicación directa con personas para el desarrollo
físico y cognitivo. Las redes sociales tecnológicas son un apoyo de la comunicación, pero no
son la mejor forma de aprender. Sin duda alguna, la niñez y la adolescencia son etapas de vida
las cuales son esenciales para el desarrollo de las personas. Según De Barba. G (2016), el
comienzo y la aplicabilidad de la tecnología empezó desde la Generación Z. Es así como las
personas han tomado la empleabilidad de las redes la cual se ha incrementado y como
consecuencia se han desarrollado buenas y malas prácticas de las mismas. Es usual que los
padres y madres de familia soliciten el rendimiento escolar y social de los niños y adolescentes,
pero así muchas veces no se demuestra lo solicitado, esto debido a la mala práctica de
enseñanza desde temprana edad, el mal uso de las horas de los dispositivos y la falta de control
de las redes sociales. Usualmente se permite que desde muy pequeños que las personas accedan
a las redes sociales ya sea para ser utilizada de forma educativa hasta como una manera
distractora. Según Giddens (2018), los videojuegos y la televisión y así mismo los periódicos,
las películas, las revistas, los anuncios y los vídeos son formas de redes sociales las cuales las
personas están expuestas día a día y gran ventaja de ellas es la facilidad de accesibilidad y de
uso a la mayoría de la sociedad. Sin embargo, el fácil uso causa que personas menores de edad
caigan en un uso excesivo de las redes sociales.
Según Faros Sant Joan de Déu (2018), los medios sociales pueden actuar como una
plataforma eficaz para una auto expresión positiva debido a que las personas pueden estructurar
 29

una identidad propia y crecer formando y manteniendo amistades “en línea”. Siendo así,
también las personas son capaces de seguir o gustar a páginas y personas de agrado. Cabe
destacar que es de gran importancia saber de qué las redes sociales son de gran ayuda para
aquellas personas que toman las horas debidas y así esta las utilizan para la comunicación, la
búsqueda de información y así mismo la libertad de expresión. Gracias a ello se puede saber,
entender, comprender y guiar por lo que se quiere, siendo así una forma positiva del uso de las
redes sociales. Según Keyes, Shmotkin y Ryff (2002) han planteado factores los cuales pueden
afectar de forma positiva a los niños y a los adolescentes: 1. La autoaceptación, 2. El desarrollo
personal de crecimiento continuo, 3. Propósito de vida, 4. La autonomía y el sentido de
autodeterminación. (p.21) y siendo así las y los jóvenes tienen capacidad de crecer de una forma
más libre en comunicación y expresión.
El sentido de redes sociales además de informar pretende: guiar, enseñar y transmitir la
libre expresión de las personas. Es buena práctica utilizar medios con redes sociales para
enseñar a los niños y a los adolescentes que el amor propio, la práctica de valores, el constante
estudio y las actividades extracurriculares son de gran importancia para sus vidas y entorno.
Además, se pueden poner en práctica con redes sociales de forma sana e inclusiva. Muchas
veces se tienden a seguir roles los cuales pueden ser de gran ventaja, ya que motivan a las
personas a realizar el bien personal y social y esto así ayuda en el futuro de las personas en la
toma de decisiones. Sin embargo, cabe destacar que es responsabilidad, de los encargados de
los niños y de los adolescentes, velar por las acciones de los mismos. Las redes sociales son un
mundo el cual tiene temas profundos y delicados, los cuales hasta cierto punto deberían ser
restringidos y/o prohibidos ya que podrían ser muy sensibles y de fácil acceso y así el mal uso
puede llegar a tener como resultado cambios negativos en las personas a través del tiempo. El
exceso de las redes sociales y la falta de control de estas puede llegar a salirse de control con
respecto a las acciones y los pensamientos que los niños y adolescentes puedan tener. Las
adicciones, el mal comportamiento, el bajo rendimiento académico, la falta de comunicación
hasta el “cyberbulling”, trastornos visuales, de sueño y alimentarios, así mismo la ansiedad, la
frustración y el aislamiento social son efectos secundarios de las malas prácticas de las redes
sociales. Es por esto que se es necesario, detenerse a pensar en lo que se les permite y lo que
no, a los niños y adolescentes y a la misma vez plantear parámetros los cuales sean de ayuda
para el desarrollo de los mismos.
Ahora bien, las redes sociales negativamente influyen a la sociedad debido a que el uso
extraordinario de esta pretende que la población mencionada tienda a seguir modas y retos
hechos por personas las cuales no son profesionales en los distintos sus campos y así estas
 30

acciones pueden llegar a afectar la salud física, mental, el desarrollo cognitivo y la toma de
decisiones de las personas. Según la Revista Iberoamericana para la investigación y el
Desarrollo Educativo (2007) las redes sociales obtienen temas los cuales ponen propensos a
los niños y a las niñas de sufrir riesgos tales son: la trata de personas, el sexting, el grooming,
la extorsión-antivalores y a propiciar conductas agresivas, así se puede agregar las conductas
aislantes. Adicionando a lo anterior, UNICEF (2017) propone a realizar a sí mismos la
diferencia entre conectividad e interactividad y cuáles serían los efectos de las redes sociales.
Los riesgos de las conductas, del contenido y del contacto son los principales riesgos que el
joven va obtener en el momento de estar conectado a las redes sociales.
La imagen corporal, la cantidad de seguidores, el contenido posteado, la libertad de
expresión son factores los cuales han sido algunas de las afectaciones en los niños y
adolescentes gracias a las Redes Sociales. Desde el inicio de la Generación Z, las redes sociales
han sido mayormente utilizadas en dispositivos electrónicos y en internet. Claro está que la
tecnología ha llegado a tener un rol importante, las redes sociales cibernéticas son de las redes
más utilizadas por la población. Según Amigo, Gutiérrez, & Ríos (2017) la utilización de las
redes sociales como pasatiempo son utilizadas en un 93%, la utilización de las redes sociales
de forma educativa obtiene un 4%, y el 3% restante es el porcentaje utilizado de forma variada.
Según Alfaro. X (2018), incluyendo los porcentajes de utilización de las redes sociales más
utilizadas se destacan: Facebook (81.3%), WhatsApp (78,8%), Messenger (45,7%), Instagram
(36,2%) y finalmente YouTube (52,8%), y es en los números donde se puede observar que
muchas personas pasan pendientes a las redes sociales por pasatiempos. Sin embargo, cabe
destacar que el uso de las redes sociales conlleva a las personas a obtener cambios físicos y
psicológicos. La utilización de las redes sociales como pasatiempos es evidente que es la forma
más utilizada y es el causante de que las personas como lo son los niños y los adolescentes
tengan un impacto en la imagen corporal como en su físico y conducta. Esto debido a que se
presentan modas, retos, imágenes a seguir, causantes de que las personas sean impactadas de
forma negativa como la vulnerabilidad hacia el acoso sexual y acoso escolar se incrementa
desde temprana edad, la exposición de información en las redes sociales puede llegar a ser
críticas esto debido a que, si no hay un control, puede presentarse desde la red social hasta en
planos como en la vida cotidiana. Los estándares de popularidad y belleza que se manejan en
las redes sociales muchas veces son tan estrictos que, si algún niño o adolescente no llega a los
márgenes puestos, ellos podrían recibir acoso cibernético y hasta escolar. Además, desde varios
años atrás se han podido evidenciar el acoso sexual y así se presenta la pornografía infantil, el
grooming y el sexting.
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La importancia de la autoimagen es que es de ayuda para las personas que estén más
seguros de sí mismos y con esto se adjunta la confianza y la seguridad personal para que dé
como resultado una mente positiva. Es de gran ayuda saber de qué muchas personas externas,
independientemente de la ubicación, educación, religión y/o profesión, tengan la iniciación de
motivar a otros, son el tipo ayuda en redes sociales que impactan a las personas de motivación
de mejora continua personal. Según Ryan y Deci (2001). Se han visto dos perspectivas las
cuales se han ligado así: la primera es relacionada con la felicidad que central el bienestar y la
segunda la cual es ligada al desarrollo potencial humano. Esto es de importancia ya que es la
parte positiva de que las redes sociales existan y sean utilizadas con buen uso, cabe destacar
que, gracias a blogs, formas de entretenimiento, foros y muchas otras formas más las personas
tienen a saber cómo formar y a actuar de forma correcta en una toma de decisiones y a su vez
se tiene a cuidar de forma más positiva y hasta pueden llegar a impulsar a otros para el bien de
una forma sana y sencilla.
Cabe destacar que es importante que las redes sociales se pueden tomar en cuenta hasta
como una forma educativa, comunicativa y de entretenimiento, no obstante, es importante que
de estas redes sociales es donde empiezan las malas prácticas y comienza los problemas de
imagen, problemas psicológicos, entre otros. El uso excesivo de las redes sociales lleva a que
los niños y los adolescentes tomen más tiempo en redes sociales que en el estudio y así es como
empieza a disminuir la atención escolar, el rendimiento académico y social, debido a que la
comunicación es por medio de un dispositivo móvil mayormente, así que las relaciones
interpersonales al mismo tiempo tienden a disminuir. Dedicar más tiempo a las mismas hay
personas externas suelen implementar retos y patrones de belleza, los cuales de cierta forma
hacen cambiar la forma de pensar de los niños y de los adolescentes de forma negativa. Según
Amigo, Gutiérrez, & Ríos (2017) existe un 92% de que no haya reglas del uso de las redes
sociales y esto abre la posibilidad de que haya un 83% de conductas de “cyberbulling”, un 72%
de conductas de sexting y un 47% de conductas de grooming. ‘’Según un estudio de 2017 de
la entidad británica que regula los medios de comunicación, la mitad de los niños del país de
11 y 12 años tenían un perfil en alguna de esas redes sociales.’’ (Wakefield. J, 2018). Muchos
casos son dietas, los patrones que tienden a seguir tales son la ''belleza'' y patrones para la
''superación'' en comparación con otros, tienden a afectar ya que las personas no se informan,
no consultan con especialistas o profesionales en el tema y esto impacta a la salud. El querer
tener el ''cuerpo perfecto'' tiende a hacer que las personas lleguen a cometer errores que
impactan a nivel físico de forma negativa. La depresión, ansiedad, bulimia, anorexia,
frustración, trastornos de sueño y entre otras afectaciones más son causantes de lo mal
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informados que son las personas en las redes sociales. Es importante saber que el control de las
redes podría ser causante de que se disminuyan los niveles dichos anteriormente y así las
personas tengan relación con personas externas. La buena alimentación, el ejercicio y buenas
relaciones interpersonales son la mejor opción para la calidad de vida de los niños y de los
adolescentes. El exceso de las redes sociales provoca que las personas tengan dorsalgias,
cefaleas, cervicalgias y trastornos visuales debido al exceso cantidad de horas, adicionando que
como efecto secundario podría ser la obesidad o la bulimia. Dicho así, el hecho de que un niño
o un adolescente tenga una red social y la utilice con frecuencia sin control alguno abre
posibilidades de sufrir altos niveles de dichos efectos.
Según Unicef (2017), ´´ningún niño está́ a salvo del riesgo en línea, y nunca ha sido
más fácil para los acosadores, los delincuentes sexuales, los tratantes de seres humanos y
aquellos que hacen daño a los niños, atacar a los más vulnerables´´. Y es así como la población
infantil está expuesta a la población desconocida, mostrando contenido personal y claramente
está que se puede expresar libremente sin embargo hay personas externas que al contrario van
más allá de los valores de otros. Unicef evidencia que hay un 42% de la población donde refleja
que los menores aprendieron a utilizar el internet por su cuenta, un 23% del contenido de
violencia el cual es de no agrado para ellos y con respecto al contenido sexual no deseado hay
un 33%. No es un secreto que la Web Oscura dan paso a facilitar cada vez más el uso de
contenido indebido el inapropiado para los niños y adolescentes. Y es así como la
vulnerabilidad es concreta cuando ya el daño está y esto da paso a la dificultad de la búsqueda
del responsable. La RSPH (Royal Society for Public Health) valoro un análisis del impacto de
las redes sociales en adultos jóvenes y los aspectos que se veían afectados son: la calidad de
sueño, la imagen corporal, el ciberacoso y el sentimiento de estar perdiéndose algo. Es usual
que las personas que tiendan a ser acosadas por las redes sociales y a su vez tienden a afectar
su vida personal, esto, así como la timidez, la falta de expresión, la agresividad, la
autosuficiencia y la influencia social fuera de redes y saber de qué se va a ver plenamente
afectado en la escolaridad de los niños y adolescentes. La falta de comunicación hacia mayores
es un factor muy importante ya que estos podrían ayudar a la resolución de los problemas. Las
probabilidades del sufrimiento de sufrir daños cibernéticos en redes sociales serían menores si
los mentores, padres y/o profesores limiten las horas y aplicaciones de las redes sociales que
utilizan a diario.
Según Unicef (2017) la conectividad y la comunicación son canales propicios para
sufrir acoso cibernético. Los niños y los adolescentes tienen a ser acosados día a día y como
consecuencia los resultados cada día terminan de forma negativa. Faros Sant Joan de Déu
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(2018), dice que 7 de cada 10 han experimentado ciberacoso, y es así como los jóvenes se
tienden a ver afectados su vida personal, esto, así como la timidez, la falta de expresión, la
agresividad, la autosuficiencia y la influencia social fuera de redes. Y cabe destacar que por
efecto la escolaridad se va a ver muy afectada. Unicef propone que las tecnologías de
información y comunicación sea seguidas por el gobierno o algún ente el cual controle cierto
tipo de información para los jóvenes ya que es preocupante que más de la mitad de la población
que utiliza redes sociales se vean afectadas de forma negativa.
El Estado Mundial de la infancia (2017) “Niños en un mundo digital”, proporciona un
examen oportuno, basado en fuentes de datos ya existentes y nuevas, sobre las vidas de los
niños en un mundo digital: analizando las pruebas, debatiendo los problemas y explorando
algunas de las controversias fundamentales, así́ como proponiendo principios y
recomendaciones concretos. Y claro está que los jóvenes han crecido y se han educado con
tecnología además de que el futuro está la actualización de las presentes. La investigación de
temas y la comunicación con otras personas es esencial para que las personas puedan ampliar
sus conocimientos y eliminar las barreras de la ignorancia y de la corta disminución que se
puede tener con las personas. Unicef adiciona que el acceso de la calidad de las búsquedas es
en línea usualmente, sabiendo que es para mucho de fácil acceso. La amplia alfabetización y
estimulación para los más pequeños es de gran ayuda para su desarrollo cognitivo. Por ejemplo,
la búsqueda de música, el aprendizaje con videos, juegos, imágenes incluyendo muchas veces
la posibilidad de conectarse con personas externas es de gran ayuda para los niños y los
adolescentes.
Sin embargo, el acoso es un acto que se ha dado desde muchos años atrás, el acoso
puede llegar a que se proceda los temas de cyberbulling y no sean atendidos a tiempo, y esto
ocasiones depresiones, ansiedades y puede llegar a la muerte. Según Pradheep et al (2018) la
detección de acoso-cibernético se presenta en imagen, vídeo y audio y la clasificación es el
bullying verbal y social. Y esto es la consecuencia de que muchas personas lleguen al suicidio
hasta las depresión y ansiedad junto a trastornos físicos y psicológicos. Es así como el control
se debería de aplicar ya que con ayuda externa podría disminuir los impactos negativos a estas
acciones. El hecho de tomar en cuenta escuchar a los demás y saber lo que sucede es de gran
importancia debido a que se pueden salvar vidas y/o la integridad del niño o adolescente. Las
redes sociales son una forma de acudir a la información y a la sociedad de forma más rápida,
sencilla y directa. El uso de estas como anteriormente se refleja puede ser un arma de doble
filo, ya que los niños y los adolescentes están cada vez más propensos a cualquier tipo de
información. La causa de la falta de la prohibición y la restricción de las redes sociales son
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bases para el mal comportamiento, trastornos físicos y psicológicos y el bajo rendimiento social
y escolar. El cambio de un libro, jugar al aire libre y hacer actividades recreativas a un
dispositivo móvil son directos en los niños y los adolescentes. La restricción de horas claro está
que depende de la persona a la cual se le aplicará y esta depende de las condiciones en se esté.
Sin duda alguna si debería de haber prohibición de contenido en las redes sociales debido a que
se puede esparcir información confidencial y la persona puede ser afectada.
Según Unicef (2017) La conectividad digital es la nueva necesidad la cual ofrece romper
ciclos de intergeneracionales de desventaja para las personas, sin embargo, los niños y los
adolescentes pueden ser desfavorecidos desde el primer momento en que se conecten en línea.
Las exposiciones al acoso sexual, el bullying, materiales violentos hasta la trata de personas
son causas las cuales los jóvenes pueden sufrir día a día. Los contenidos inapropiados no
obtienen alguna contraseña, son de fácil uso al igual que otras búsquedas. El material racista,
discriminatorio, de odio son búsquedas las cuales cualquier niño pueda llegar a tener acceso
fácil. Además, el contacto los cuales son como la pornografía pueden llegar a tener serias y
muy malas consecuencias. Es esencial educar de buena forma a los jóvenes desde temprana
edad, el bullying y el acoso son factores realmente impactantes, causan enfermedades físicas,
cognitivas y psicológicas y es así como los mayores¡, encargados de las futuras generaciones
tienen que estar conscientes del contenido. La educación es una base realmente importante para
las personas, y siendo así desde pequeños se tiene que aprender el uso correcto de las redes
sociales ya que dentro de estas hay muchas personas antivalores que hacen que los jóvenes
vean la corrupción y las malas prácticas como un estado normal, no siéndolo. Junto a
organización se debe tomar decisiones concisas, las horas adecuadas y la información recibida
para los niños y los adolescentes.
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Capítulo 5

¿Son las redes sociales la razón de que se genere un bajo

rendimiento académico en niños y jóvenes universitarios?

-Alejandro Piedra Gamboa

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¿Son las redes sociales una amenaza para el presente y futuro de la población
mundial? De acuerdo con Mejía (2018) “una red social es un grupo de personas o entidades
conectadas entre sí por algún tipo de relación o interés común”. Dicha estructura, ha sido un
tema de mucha controversia en Costa Rica y el mundo, ya que hay diferentes opiniones y
pensamientos con respecto al buen o mal uso que estas están generando globalmente. Sin
embargo, son los niños y jóvenes las personas que más mantienen contacto directo con las redes
sociales, razón por la cual su desarrollo ha tenido un cambio significativo en comparación con
épocas antiguas en la parte educativa. Las redes sociales, gracias al internet, han roto muchas
barreras alrededor del mundo, ocasionando un bajo rendimiento académico desde edades
tempranas. Entre las razones que destacan dicha situación, se encuentran, primeramente, la
desconcentración que estas estructuras generan durante la lección, en segundo lugar, el tiempo
o las horas que dedican en casa para realizar trabajos y estudiar; y, en tercer lugar, el poco
esfuerzo que el estudiante realiza para razonar y utilizar su conocimiento como medio de
mejorar su aprendizaje o desarrollo personal.
El 45% de los alumnos utilizan redes sociales a la hora de que las lecciones están siendo
impartidas, de los cuales un 86% de ellos, en promedio, utilizan las redes en un mínimo de una
hora de tiempo mientras está en clase (Irago, 2017). La desconcentración que estas redes
generan en lecciones, no es únicamente para el estudiante que la utiliza, sino también para su
entorno. Estos dispositivos se pueden utilizar como un método para copiar durante las
asignaciones, lo que provoca que el estudiante no aprenda ni estudie lo suficiente, ya que
optaría de antemano por la utilización del móvil como método de respuesta. Cabe destacar que,
“casi la mitad de los estudiantes (47 %) afirma haber visto u oído a otro alumno usar su
dispositivo en clase para hacer trampas en un examen, mientras que el 21 % admite haber
copiado con su móvil” (Irago, 2017). Por situaciones como estas, las redes sociales son directa
e indirectamente, un problema en el aprendizaje de los estudiantes, pero los padres y profesores
por si solos, no tienen la capacidad de cambiar dicha problemática. Sin embargo, no es la única
opinión sobre el manejo de redes en clase.
La tecnología no es vista de la misma manera por todos, al respecto Artero-Balaguer
(2011) menciona como las redes sociales han sido fascinantes para los alumnos, sabiendo la
interacción que estas han creado en cada estudiante y las facilidades de comunicación y
respuesta que se promueven debido a su rapidez. Estas plataformas de cierta manera, facilitan
directamente el aprendizaje y la relación colaborativa entre compañeros. Por otro lado, son un
medio de atracción e interés para el alumnado, ya que son una herramienta completamente
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distinta a la que se acostumbraba en tiempos pasados y la cual ha sido reemplazada por las
nuevas tecnologías. Asimismo, las redes consecuentemente van “involucrando espacios de
intercambio de información que fomentan la cooperación” (Islas, Carranza & Baltazar, 2012),
que crean un ambiente educativo cambiante y distinto a lo habitual. Las redes sociales sirven
para evaluar el rendimiento del estudiante desde varias perspectivas, no de un único método o
punto de vista.
Para muchos, el grado de utilidad que las redes sociales tienen durante las lecciones y
la fascinación que estas generan en los estudiantes es sumamente provechosa, debido a la
amplitud de información que hay en su interior, lo que le da al participante herramientas que
les beneficia en su trabajo (Fernández, 2017). Se está de acuerdo en la facilidad que brindan,
siempre y cuando se le dé el uso correcto educativamente. Cabe destacar que hoy en día los
niños desde pequeños, tienen las habilidades de acudir a información no deseada, siendo este
un control sumamente difícil de manejar. Esa información no deseada, muchas veces es para
los jóvenes contenido de interés, y es ahí cuando la ventaja de las redes se convierte en una
desventaja del desarrollo personal. Debido a estas facilidades, no es siempre adecuado el uso
de redes y menos en momentos de aprendizaje. Es esa información de interés la que
directamente aumenta el grado de dispersión en los jóvenes.
Se dice que, estas redes aumentan el desarrollo cognitivo de las personas, sin embargo,
no se concientiza que la distracción sea por ver información relevante e irrelevante siempre
estará presente. Por otro lado, los estudiantes disminuyen su interacción cara a cara con otras
personas, lo que los engloba en una época de tecnología moderna que no desarrolla al ser
humano como se debe (Almidón, 2017). Aproximadamente un 89% de estudiantes afirman no
poner atención debido al uso de redes sociales, los cuales concuerdan que las utilizan por un
tema de “mantenerse conectados” y “combatir el aburrimiento” (Van Dijk, 2017). Es decir, la
misión del estudiante en desarrollar su aprendizaje al máximo, se ve afectada tanto de manera
directa como indirecta. El efecto de la distracción es inevitable con dichas tecnologías, por lo
que su mal control y utilización en la educación, tendrá un grado de influencia muy alto en el
alumnado. La dispersión no es la única problemática de las redes, también el poco tiempo de
estudio que les deja a los estudiantes.
Las redes sociales fuera de la escuela, se encuentran en manos individuales y se le da
el tiempo que cada uno quiera, lo que promueve que, en lugar de trabajar en las obligaciones
educativas, se recurra al uso de teléfonos, tabletas o computadoras (Angelastro, 2015). Dichas
plataformas, han cambiado desde años atrás la manera en que los estudiantes aprovechan el
estudio y el énfasis que se le da. Hoy en día, la labor que tienen los padres y profesores para
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dicha problemática es casi nula, ya que los niños, jóvenes y hasta muchos de los padres de
familia, acostumbran a ver el uso frecuente de las redes sociales como un hábito normal de
todas las personas. Alrededor del mundo, muchos individuos sienten que las redes sociales son
indispensables en la vida cotidiana de cada uno, sin embargo, no se percatan que el uso de
dichas plataformas les roba mucho tiempo que podría ser aprovechado para el desarrollo
académico y, por ende, mejorar sus características personales y profesionales a futuro (Mora,
2016). Por lo tanto, es claro resaltar como el tiempo de estudio cada vez es menos aprovechado
y, por consiguiente, la capacidad o grado de aprendizaje se ve cada vez más deteriorado por las
nuevas tecnologías y sus avances. Cabe destacar, que dicho aprovechamiento del tiempo no
merece un único punto de vista académico.
Sobre el tiempo de estudio por medio de redes sociales y la tecnología, Florido (2016)
manifiesta como estas aumentan el grado de colaboración entre los compañeros, sabiendo que
dichos medios fomentan el trabajo en equipo de una manera más interactiva entre los grupos,
donde no solo participan ellos, sino también hasta sus mismos docentes. Las plataformas
sociales facilitan a los estudiantes mantenerse activos y al tanto de colaboraciones que se
puedan brindar en los grupos de trabajo, donde poco a poco con estos medios, se va fomentando
el trabajo en equipo. También, la facilidad que las redes y el internet brindan para acudir a
información útil y necesaria, es muchísimo mayor que cualquier otro medio físico. Estos
medios son fuentes que guían a las personas a difundir contenido importante, creando una
biblioteca como guía de aprendizaje para cualquier alumno que tome parte de ella (Florido,
2016). Dado esto, el beneficio y las facilidades que presentan las redes en la educación
moderna, son de gran utilidad para los estudiantes y profesores.
Es evidente cómo las redes aumentan la interacción de todos los alumnos y es una
herramienta muy funcional como medio de comunicación y participación, aprovechando los
avances que promueven lo que se denomina como enseñanza virtual (REDEM, 2017). Queda
claro que mientras el buen uso de la red esté presente, la enseñanza será beneficiosa en todo
momento. No obstante, las plataformas en línea cuentan con información que muchas veces no
es correcta, y el aprendizaje se puede ver confundido de cierta manera. El control de situaciones
como estas es prácticamente nulo, ya que no se puede evidenciar de manera inmediata qué
información es confiable y cuál no lo es, lo que desorienta el objetivo principal de cualquier
individuo en su rendimiento o desarrollo educativo. Su mayor manejo y seguridad, haría de
este desarrollo personal, un proceso más productivo.
Importante son las redes sociales como vías de comunicación entre los alumnos con sus
compañeros, sin embargo, es un hecho que 82% de las personas según una encuesta de
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Universia (portal de universidades) consideran que las redes sociales son una distracción en los
estudios o trabajos tanto para adultos, como jóvenes de escuela o universitarios (La República,
2010). Por otro lado, el 70% de jóvenes universitarios, confirma que serían más efectivos y
productivos si se dedicaran únicamente a su labor (La República, 2010). El objetivo de la
productividad cada vez está más intervenido por las nuevas tecnologías y el tiempo para
desarrollarse educativamente será más reducido. De acuerdo con un estudio de
GlobalWebIndex resaltado en la revista Forbes México, los individuos desde jóvenes hasta
adultos, utilizan las redes sociales en un promedio de dos horas diarias, gastando uno de cada
cuatro minutos equivalentes a un mes al año (Forbes, 2015). Visto esto, se demuestra cómo las
redes sociales aun siendo un medio colaborativo y facilitador de actividades académicas,
consume una cantidad de tiempo sumamente alto, y deja de lado mucho conocimiento que en
dicho tiempo podría ser generado para el desarrollo personal más óptimo. Asimismo, no es
únicamente el tiempo que se desperdicia en aprender, sino también el poco esfuerzo de
razonamiento y desarrollo que promueve, sabiendo que las redes y el internet, brindan la
información inmediatamente.
En la actualidad, 01. % de la información recolectada es por medio de redes sociales e
internet, lo que da a entender que el restante 99.9% se encuentra en formato digital, lo que
significa que, al día de hoy el buscador o navegador de la web, es la principal fuente de
recolección de información para niños, jóvenes y adultos (REDEM, 2016). Por medio de los
avances tecnológicos y la facilidad de acudir a fuentes informáticas, los estudiantes y seres
humanos de manera general, han disminuido su esfuerzo por utilizar el razonamiento humano
y fomentar el desarrollo personal de manera natural y racional. El uso de teléfonos y
computadoras han afectado la memoria de manera directa, haciendo que el tiempo de reacción
de las personas para pensar y razonar sobre alguna situación en específico, sea cada vez mayor
y nos vuelva cada vez más “tontos” (Shin, 2011). Es un hecho que la tecnología está muy
presente en el día a día de todos y más en los jóvenes, por lo que disminuir dicha problemática
para efectos de beneficio y rendimiento educativo, es casi imposible. No obstante, el uso del
internet y las redes como medio de recolección y razonamiento de información, es vista de
manera positiva en otras ocasiones.
La metodología clásica promueve que el estudiante no demuestre un grado de interés
significativo en las asignaciones y, por ende, malos resultados académicos, lo que con las
nuevas tecnologías se ve beneficiado debido al acceso de información interesante y variada, lo
que origina el análisis y el aumento de conocimientos de una manera más profunda y analítica
(Rivera, 2016). Es un hecho que mantenerse bajo una misma línea por mucho tiempo, se vuelve
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repetitivo y aburrido para el estudiante. Las tecnologías modernas hacen de la clase un

momento más ameno y atractivo para el alumnado, originando un grado de interés mayor al
habitual y disminuyendo el aburrimiento que se podría generar. La tecnología engloba al
estudiante en un interés diferente, generando más atracción por parte de los mismo al proceso
de enseñanza y concentración en las clases (Krishan, 2017). Por medio de métodos
tecnológicos, el avance y desarrollo educativo de los estudiantes puede sufrir un efecto distinto
y llamativo en el desempeño académico.
Es claro que las nuevas tecnologías y redes sociales en la educación, fomentan la
creatividad, innovación y atracción, donde se busca convertir cualquier información importante
y tradicional, en un método de innovación para el estudiante (Rivera, 2016). El innovar y
encontrar métodos distintos a los habituales, aumenta el interés del alumno en su propio
desarrollo personal. Mantener una misma metodología de enseñanza, es una razón reconocible
que se dé el aburrimiento o el desinterés de un estudiante, por lo que cambiar, innovar y utilizar
distintos métodos de aprendizaje es de suma importancia. Cuando la enseñanza se realiza
enfocada o centrada en los estudiantes, la participación en la lección aumenta
considerablemente, con lo que se logran los objetivos de aprendizaje del curso (University of
Washington, s.f). Por esto, encontrar las formas de generar confianza y gusto por parte de los
alumnos en la lección, conlleva a una práctica y desarrollo personal más efectivo.
Si bien es cierto, las redes sociales aumentan el grado de interés de los alumnos, no
obstante, se deja de lado el hecho de que el no leer, pensar y razonar, influye en la disminución
de profundizar y analizar la información debidamente y, por ende, se vuelve una dependencia
hacia el internet como el medio universal de información, creando un nivel de capacidad y
eficiencia personal cada vez menor (Grau, 2008). Con el tiempo, los estudiantes y personas
como tal, han hecho de un medio secundario, un medio primario y necesario para poder generar
criterio. “A medida que nos separamos de la realidad, nos absorbemos cada vez más por lo que
está sucediendo en línea” (Garbutt, 2014), dando a entender que cada vez se somete más a las
redes como medio para resolución de cualquier situación, sea académica o personal. Dichas
redes, engloban al estudiante en una burbuja de dependencias, creyendo menos en su opinión
propia y dudando del criterio humano como método de solución y respuesta.
Los cambios que las redes sociales han venido generando, deben ser manejados
debidamente, para evitar cualquier situación que en el presente y en un futuro cercano, genere
inconvenientes innecesarios. Académicamente hablando, el aprendizaje y los métodos por el
que este se desarrolla en la actualidad, requiere de mayor atención y control, especialmente si
se sabe la cantidad de información externa que puede influir en este proceso. Dichas redes, han
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sobrepasado límites que no se pensaba tiempo atrás, convirtiéndose en una influencia directa
en el desarrollo académico de la humanidad juvenil. Esta influencia, ha tenido efecto en
aspectos negativos como: la atención del estudiante en tiempos de aprendizaje, el tiempo de
estudio productivo en el día a día y también, se han convertido en el medio de información
primario, dejando de lado el razonamiento y conocimiento humano como herramienta
principal. Es imposible excluir a los estudiantes tanto mayores como menores de edad de estos
avances tecnológicos, sin embargo, una regulación en su uso traería muchos beneficios tanto
personales como también académicos para las estudiantes. Una gran parte de las personas que
utilizan estas redes, son los menores de edad, siendo esto una razón de preocupación para el
futuro en cuanto a desarrollo y desempeño humano, que, sin duda alguna, ya es muy diferente
a lo que era habitual. Es por esto que, ¿será necesario la intervención de los padres de familia
en el manejo de redes sociales, o habrá alguna razón para aceptar el uso frecuente de estas en
el día a día de las personas?
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Capítulo 6

¿Deben o no tener, los padres, acceso a las redes sociales de

sus hijos menores de edad?

-Shalom Rivera Mesén

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De acuerdo al informe de El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF)

“El Estado Mundial de la Infancia 2017: Niños en un mundo digital” uno de cada tres usuarios
de internet es un niño menor de edad. Este acceso les abre las puertas a enormes oportunidades,
pero también a enormes peligros. Durante los últimos años, principalmente la última década,
se han dado avances vertiginosos en la tecnología y sería irracional considerar que se debe
mantener completamente alejada a una persona de dichos avances. Al tratarse del acceso que
obtienen los menores de edad a estas tecnologías, el tema es complejo, ya que una vez que un
niño o niña se convierte en usuario de una red social, da inicio una inquietud constante por
parte de sus padres, la cual, es sumamente entendible, tomando en cuenta a los peligros que
aparecen en dichos contextos, dicha inquietud debe ser manejada de manera apropiada por
todos los implicados. Los niños y adolescentes buscan pertenecer a algún grupo social y virtual,
ya sea redes como Facebook e Instagram o comunicarse mediante aplicaciones de mensajería
como WhatsApp. Los padres siempre deben velar por la seguridad de sus hijos, por tanto, es
importante que tengan acceso a sus redes sociales con el fin de proteger su privacidad, velar
por su seguridad y conservar su buena salud, siempre bajo el respeto y la confianza mutua.
Al brindar acceso a los padres a las redes sociales de sus hijos, se podría garantizar el
control de una persona adulta sobre el contenido que ven y las personas con las que interactúan.
Los padres, en su mayoría, estarán de acuerdo con tener este tipo de control sobre sus hijos, al
menos hasta que cumplan la mayoría de edad. “No se trata de violar la intimidad, sino de velar
por su seguridad será posiblemente el argumento más escuchado por parte de los padres de
familia para justificar sus acciones de control.
Claro está, que un padre o madre de familia al estar atento a las redes sociales de su
hijo, le puede prevenir de una enorme cantidad de problemas y mantendrá lo más protegido al
menor. Siempre se debe tener en cuenta que la responsabilidad legal hasta los 18 años (en la
gran mayoría de países) es de los progenitores. En muchas ocasiones, los jóvenes incurren en
delitos, aunque no sean conscientes de ello. Además, muchos casos de acoso infantil por medio
de adultos mayores de edad empiezan con mensajes a menores por medio de estas plataformas
de comunicación. Si los padres hubiesen tenido acceso a sus teléfonos móviles, se aumenta las
posibilidades de evitar estos riesgos y poner en peligro la vida de los mismos.
Sin embargo, el sentimiento de invasión a la privacidad existirá y con mucha más razón
si el hijo, por ejemplo, ve que a algunos de sus amigos no les ponen tantas restricciones. Acá
es donde el padre debe tener constantemente presente cómo se siente su hijo al respecto. El
problema está en delimitar dónde termina el derecho a la intimidad de los menores y dónde
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empieza la responsabilidad de los padres. Las redes sociales son un espacio público de los
jóvenes y una forma de escapar de su realidad. Los niños y jóvenes tienen la necesidad de
relacionarse más allá del control de una persona adulta y ese deseo debe ser respetado
Por tanto, surge la incógnita, ¿Debe prohibirse el uso de la computadora o celulares a
los niños y adolescentes? Su utilización, como la de cualquier otra tecnología, no es ni buena
ni mala, debe verse como una herramienta de estudio, trabajo, ocio o, comunicación, entre
otras. El detalle siempre estará en el uso que se le dé. Prohibirle el uso de estos dispositivos a
los menores es un inmenso error, las nuevas tecnologías no dejarán de existir, cada año sale al
mercado un teléfono nuevo más moderno y con más usos, o una computadora con mayor
capacidad y más amigable con los usuarios. Estar conectado y poseer las últimas tecnologías
para los jóvenes ahora resulta indispensable. Como refleja el análisis del informe, previamente
mencionado, realizado por la UNICEF, la limitación del acceso a la internet amplía las
desigualdades y disminuye las oportunidades entre los niños, aproximadamente 346 millones
de niños alrededor del mundo no están conectados al internet aumentando su incapacidad de
participar en una economía cada vez más digital. Tal es el caso de Emmanuella, de 15 años que
menciona: “En Benin, muchos niños y jóvenes no tienen acceso la red. Yo me he visto en
muchas situaciones en las que la falta de internet me ha supuesto un problema. Esto nos sitúa
en desventaja respecto a otros jóvenes” (UNICEF, 2017, parra. 8).
Muchos padres prefieren que sus hijos no tengan acceso a redes, debido a que se han
dado casos de “bullying” cibernético, el cual consiste en insultar a los pequeños más
vulnerables con lo que se genera en ellos inseguridad, depresión y en ocasiones hasta el
suicidio. Las redes sociales pueden ser una fuente increíble de información, pero también un
arma silenciosa contra los jóvenes que sufren de estos acosos. En nuestro país ha habido casos
de adolescentes que por acoso cibernético han terminado en suicidio, o también el caso reciente
de Sebastián, el niño del Liceo de Costa Rica que por un reto y presión social fue atropellado
por el tren (La Nación, 2018). Por esto, los padres sienten que, al prohibirles el uso de redes,
los están protegiendo de muchos males, y que los están alejando de esas presiones de la
sociedad, de hecho, algunos padres quisieran meter a sus en una burbuja toda su vida.
Esta podría ser una actitud muy noble y protectora, pero los padres deben asesorar,
informar y, supervisar las páginas que navegan y con quién se hablan por mensajería de texto.
Establecer horarios y tener una relación de confianza en caso de que existe “bullying”, para
que el niño pueda expresarlo y atacar el problema a tiempo. Dejarles claro que siempre deben
pedir la ayuda de un adulto ya sea padre o profesor o terapeuta cuando sientan que algo no está
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bien. La educación en el hogar es fundamental, y es ahí donde el niño aprende los principales
valores y principios.
Como indica la UNICEF, a pesar de todos los beneficios que las Tecnologías de
Información y Comunicación (TIC) brindan a los jóvenes y al mundo en general, las mismas
han contribuido con el aumento del acoso a menores de edad, ya que el acceso a la
comunicación con los mismos, se ve facilitada por medio de estas, este acceso es mucho más
amplio y por consiguiente mucho más riego que el acoso fuera de línea. Simultáneamente, han
aumentado los casos de uso indebido y explotación de la privacidad de los menores de edad y
ha cambiado la percepción de los y las niñas y adolescentes sobre lo que significa y representa
su información privada.
Aunque, como se mencionó anteriormente, a los jóvenes les afecta su entorno y el hecho
de si a su grupo de amigos los rigen bajo las mismas reglas. Es aquí donde muchos recurren a
mentir a sus padres o buscar maneras de evadir los controles. Hay adolescentes que consideran
una ofensa la idea que sus padres instalen un software especial para vigilar qué hacen en
internet, o que revisen sus teléfonos. La pubertad es una etapa crítica a nivel personal y social
para los jóvenes, y respetar sus decisiones es importante. En redes sociales sólo se muestra lo
mejor de nuestras vidas. Si los niños están en redes y ven este tipo de publicaciones pueden
acabar idealizando la vida de los demás o bien anhelando vivir esas experiencias ellos también.
Nuevamente es esencial negociar las reglas para que haya un equilibrio. Quitarles el acceso a
internet y redes no debería ser una opción de prevención.
En lugar de poner restricciones basadas en el tiempo, los padres deberían ayudar al
menor a decidir lo que quieren hacer y cómo desean hacerlo, para demostrar una actitud
positiva e interés en la opinión del hijo. Eso significa usar juntos las pantallas para conectar
con otras personas, explorar nuevas ideas, divertirse o ver vídeos en YouTube para mejorar su
técnica deportiva, por citar un ejemplo. Como explica el informe realizado por El Centro de
Investigaciones Innocenti de la UNICEF que desarrolla sobre los retos y estrategias mundiales
en la seguridad de los niños que utilizan el internet, los padres muchas veces no están tan
involucrados como deberían, como prueba, se realizó una encuesta a 9.000 usuarios del internet
y se concluyó que, en promedio los menores de edad pasan en línea 39 horas al mes, el doble
de lo que sus padres promediaron (2012).
El tema quizás más crítico, es la seguridad de los menores y los peligros a los cuáles se
exponen. Como explica la UNICEF en su guía para el internet sano, existen adultos en internet
que, haciéndose pasar por adolescentes o niños, o, fingiendo ser representantes de modelos o
agencias de publicidad, engañan a otros menores de edad con el fin de ganarse su amistad y
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confianza para luego obtener sus datos personales, imágenes y videos del adolescente o niño
desnudo o realizando actos sexuales. Muchas veces, una vez que el acosador tiene suficientes
datos puede llegar a utilizar la amenaza para mantener el ciclo. Esto es reconocido como
grooming. Por tanto, hay padres que manejan rangos de edades para permitir el acceso a redes
sociales por parte de los niños y adolescentes. Incluso según las políticas de privacidad de redes
como Facebook, Twitter, Instagram, WhatsApp o Snapchat, la edad mínima para registrarse en
su plataforma es a partir de los 14 años, aspecto que no siempre se respeta.
Hay que tener claro que conforme avanzan las generaciones, la edad promedio se va
reduciendo cada vez más, hoy en día vemos niños de seis años con dispositivos, mientras que
hace quince años era algo casi imposible. Determinar una edad específica dentro de cada
familia para el acceso a redes puede ser una buena práctica, es una forma de establecer normas
familiares para todos los miembros y de esta manera tener un control desde edades tempranas.
Por eso hay que trabajar con nuestros hijos para enseñarles a socializar con el fin de que su
principal forma de establecer un círculo de amistad sea en la vida real y no en un mundo online.
Los niños muchísimas veces no son conscientes de la pérdida de privacidad que
conlleva el simple hecho de subir una foto a las redes sociales o hacer comentarios en las
publicaciones de sus amigos que cualquier persona puede ver. A través de una sencilla
publicación no sólo está cediendo los derechos de esa imagen a Facebook, sino que además
puede decirles a todos sus contactos dónde está y haciendo qué. Del mismo modo que en las
relaciones entre adultos el contenido que se lee a través de la red a veces se malinterpreta en el
caso de los niños esto puede verse multiplicado. En su mayoría navegan en un mundo que
realmente no manejan y se pueden ver obligados a afrontar situaciones que ni pueden, ni deben
hacer frente a su corta edad.
Según la Unicef, muchos jóvenes, la mayoría el rango de edad de 12 a 16 años, publican
información muy personal en sus redes sociales. Según una encuesta realizada por este ente de
la ONU, en Brasil, 46 por ciento de los usuarios menores de edad consideran normal publicar
diariamente fotos personales en línea, mientras que, en Bahrein, país de oriente medio, los
niños tienen escasa o ninguna comprensión del concepto de privacidad y publican información
personal diariamente.
La exposición a riesgos es inmensa, en redes sociales es muy fácil hacerse pasar por
otra persona, crear un perfil falso y ganar la confianza de un niño gracias a su inocencia. Este
es uno de los “modus operandi” más comunes y peligrosos utilizados por abusadores infantiles
y personas con malas intenciones. Pueden también ser víctimas de “sexting” que básicamente
se refiere al envío de mensajes eróticos a través del teléfono móvil. Mensajes que pueden ser
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utilizados como una nueva forma de acoso. Al tener un acceso poco restringido a redes el acoso
cibernético por parte de otros niños o incluso personas adultas puede darse de manera más
sencilla. La Internet Watch Foundation (IWF) en el 2010 determinó a la existencia de 16.700
casos de abusos sexuales contra niños en distintas páginas web de todo el mundo y tomó
medidas en contra de las mismas, aproximadamente, casi el doble de URLS identificados 5
años antes. (UNICEF, 2012)
Lamentablemente las nuevas tecnologías, en conjunto con los peligros en la calle, hacen
que cada vez exista una mayor dependencia o adicción a las redes, con lo que se causa, incluso,
problemas de salud a edades muy tempranas, es de vital importancia desarrollar el crecimiento
de los niños fuera de lo virtual, estableciendo relaciones sociales con otros niños, interés por
algún deporte o actividad física. Existe incluso como se indica en la tesis “Nomofobia y su
relación con la adicción a las Redes Sociales” la enfermedad llamada “nomofobia” que consiste
en tener miedo a estar incomunicado a través del teléfono u otros dispositivos, esto
principalmente en jóvenes mujeres entre los 13 y 16 años.
La rebelión contra los padres es otra consecuencia de un mal manejo de control sobre
redes, los adolescentes otorgan un valor fundamental a las nuevas tecnologías y a la internet,
como un signo de identidad y de estatus, y su uso se ha convertido en prioritario en su vida. El
padre o madre no debe convertirse en una persona permisiva para recuperar el aprecio u
obediencia de su hijo, de ser necesario la situación se puede manejar con una persona
profesional que ayude a establecer un equilibrio.
No tiene sentido alguno hacer la discusión tomando partida en un extremo o el otro. No
se debe prohibir el acceso y uso de redes por parte de los menores de edad, pero tampoco se
debe permitir que lo hagan libremente. El internet es una fuente inagotable de conocimiento,
hay que darle un uso apropiado. Los tiempos modernos son muy complicados y las nuevas
generaciones de padres deben estar aún más alertas a lo que ven sus hijos, con las personas que
hablan tanto personal como virtualmente. Los pequeños no tienen una noción real de qué es la
privacidad ni la importancia que esta tiene, tampoco saben las repercusiones que sus
publicaciones e interacciones pueden tener y es el deber de los padres fomentar de manera
apropiada las interacciones del niño. Es fundamental no olvidar que el tiempo que los menores
pasan frente a las pantallas debe ajustarse a las rutinas diarias familiares y a la conveniencia de
que llegada una cierta hora, como por ejemplo la de la cena, se puedan desconectar de todos
esos dispositivos. Por tanto, con el fin de proteger la privacidad, velar por la seguridad y
conservar la salud de los y las niñas, estos no deben tener libre acceso a redes sociales y es
imperativo que los padres de familia realicen un control sobre estas.
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Tras discutir tanto los beneficios como los daños que trae la utilización de la internet y
las redes sociales en la cotidianidad humana y concluir que, el abordaje adecuado no es el
completo alejamiento de las mismas, sino un manejo controlado de estas, es imperativo
desarrollar sobre la adicción a las redes sociales y como estas afectan la conducta de los seres
humanos.
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Capítulo 7

¿Son las redes sociales tan adictivas como las drogas?

-Nicol Vargas Trejos

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Las redes sociales son un medio de comunicación primordial en la vida de las personas
de la generación del siglo XXI, es común, ver jóvenes haciendo uso de las mismas y a su vez
suelen manipularlas a su antojo desde muy temprana edad. Es importante establecer y seguir
indicaciones que permitan proteger a los niños de peligros como el internet, ya que si no se
utiliza de manera correcta puede ser una trampa que genera diversos problemas. Por otra parte,
las drogas son sustancias que podrían ser importantes para personas con algunos problemas de
salud, pero esto no es legal en Costa Rica y menos cuando se trata de personas menores de edad
tratando de utilizarlas con fines de consumo personal, de esta manera, muchos logran verse
involucrados en dificultades fatales y pueden llegar a tener adicciones serias. Es esencial
entender que al igual que las drogas, las redes sociales pueden ser una trágica causa de muerte.
Por esto, se necesitan normas puntuales que sirvan de guía y llamen a la responsabilidad y uso
adecuado de las redes sociales, por ejemplo, se puede utilizar para: contactarse con personas
cercanas y obtener información para fines académicos.
El uso de redes sociales es incontrolable para algunas personas y en muchos casos es
una adicción que requiere medicación y ayuda de profesionales en psicología. Especialmente,
en la adolescencia los muchachos sienten la necesidad de tener en sus manos muchas fuentes
de tecnología avanzada que les brinden satisfacción y acceso a internet cuando lo requieran,
pero cuando no lo tienen pueden sufrir trastornos como ansiedad, depresión y estrés, los
mismos síntomas que se presentan al querer dejar las drogas. El psicólogo Enrique Echeberúa
(2010), afirma que el uso excesivo de la internet va de la mano con diferentes factores
psicosociales, por ejemplo, el estrés. Primero, la ansiedad que se puede llegar a sentir cuando
no se tiene un celular siempre en la mano y acceso al internet, es realmente preocupante y es
un trastorno nervioso. Segundo, la depresión es una enfermedad grave que debe ser tratada, y
si una persona es emocionalmente vulnerable debe tener especiales cuidados navegando en la
web. Tercero, el estrés es algo de lo que se escucha todos los días y algunos lo toman a la ligera,
pero cuando se presenta un cuadro grave el individuo puede llegar a autolesionarse o
provocarse la muerte. Por las razones anteriores se debe proteger este tipo de población para
que no estén expuestos a peligros graves.
Conforme pasan los años, cada vez más personas tienen acceso a diferentes redes
sociales. El uso excesivo de las mismas es una problemática real, es cierto que existen muchos
adolescentes que se sienten vacíos o no encuentran sentido a sus vidas si no tienen muchos
amigos en Facebook o Instagram, la mayoría de veces personas de todas partes del mundo y a
los cuales no conocen. Sin embargo, a pesar de la dependencia que generan las redes
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tecnológicas no se considera una adicción, médicamente hablando. Según Carbonell, y Oberst,

Psicologos (2015), las redes sociales en la web pueden generar dependencia y excesos, pero no
se considera una adicción y no está diagnosticada. Si bien es cierto, pasar demasiado tiempo
compartiendo la vida privada en medios de comunicación no es bueno, cada uno tiene derecho
a elegir cómo lo utiliza y no ser juzgado o etiquetado como un adicto. El internet es como un
nuevo imán que conecta amigos y familia en cualquier parte del mundo, por esta razón, es
justificable y un comportamiento normal que los chicos quieran estar actualizados de las
noticias en cada momento del día, lo que comparten las revistas y canales de televisión sobre
los famosos, deportes, cantantes y bailarines.
Sin importar el uso que se le dé a la tecnología, hay ventajas y desventajas en todos los
aspectos. Las redes sociales son un medio efectivo de comunicación, pero muchas personas lo
utilizan muchas horas al día y no hacen cosas productivas con ellas, se enfocan en sus
relaciones interpersonales y en estar enterados de todas las noticias de manera inmediata, son
dependientes a publicar sus vidas y actividades sin filtros y exponerse a diferentes peligros del
internet. No es malo compartir con personas en Facebook, pero hay que ser responsable de
conocerlas y no tener conflictos, si una persona pública su vida o sus actividades se expone a
graves peligros, tales como robo de identidad, que en niños se torna más complicada y con
mayores repercusiones, pedófilos que buscan menores de edad y quieren aprovecharse de la
inocencia y esto puede acabar en algo terrible como una violación o asesinato. Los seres
humanos suelen tener estados de negación con el típico “nunca me va a pasar a mí”, pero
siempre existen posibilidades de estar en problemas si dejan sus vidas privadas al alcance de la
mano de cualquier persona que no tenga buenas intenciones y utilice los medios para mal
aprovecharse de diferentes situaciones.
Las redes sociales son peligrosas, pero si se manejan con cuidado son fáciles de
controlar, por esta razón, jamás podrían compararse con las drogas, debido a que no tienen
sustancias dañinas para el cerebro y no tienen efectos secundarios que causan problemas
irreparables en la vida de las personas, es decir, que no existe punto de comparación entre
navegar en internet y la acción de drogarse para llegar a un estado de felicidad absoluta. Pasar
la mayoría del tiempo libre averiguando la vida de los demás en internet si provoca un estado
de emoción específico, sin embargo, afecta la concentración y esto puede verse reflejado en las
notas académicas, pero no todo es malo, los jóvenes hoy en día, utilizan estas plataformas para
encontrar información útil e importante para hacer sus tareas o como fuente para averiguar
cualquier cosa a la que no tengan fácil acceso en libros. Por el lado que se vea el internet es
 56

una ventaja significativa que marca el antes y el después de una nueva era, en la cual se
encuentra todo al alcance de la mano.
El internet puede abrir a las personas un universo de nuevas experiencias, pero el mal
uso del mismo afecta las habilidades de los humanos. En algunos casos, la comunicación
excesiva es a raíz de la falta de atención que sufren los jóvenes, esto se puede comparar con el
uso de drogas, las cuales son utilizadas para llamar la atención, por lo tanto, es responsabilidad
de los adultos estar atentos a lo que ven sus hijos y regular el uso de tecnología para disminuir
la cantidad de casos de muchachos que se ven envueltos en problemas como “cyberbullying”,
falta de intimidad y en los peores casos, robo de identidad. Un punto importante y de “moda”
en los menores de edad es el tema del “cyberbullying”, hay chicos que pasan meses recibiendo
amenazas o mensajes ofensivos por Messenger, por parte de personas que no conocen o incluso
de los mismos compañeros de colegio. Casos como estos reducen la autoestima, incrementa el
miedo y la inseguridad a tal punto que, por querer desconectarse del mundo real, acuden a
sustancias prohibidas. Según una investigación realizada por los estudiantes mexicanos, Cruz,
J., Domínguez, F., Salas, B., y Ortiz, C. (2016), “las redes sociales se han convertido en una
forma de explorar la relación de nuevos fenómenos sociales, entre ellos el consumo de drogas”.
Las personas son las responsables de sus acciones y cómo manejan el internet, los
padres de familia pueden estar enterados e intervenir en algunas cosas de las que ven sus hijos,
pero al igual que con el uso de las drogas es algo que se sale de control y los adultos no siempre
están cerca para asegurarse de que sus hijos no cometan errores por los que se puedan ver
perjudicados a corto o largo plazo. En Costa Rica casi no existen regulaciones de la ley para el
uso de redes sociales y los muchachos lo usan a su antojo, se puede destacar que muchos de
los menores de edad lo usan de manera responsable y segura, pero no siempre es así y han
ocurrido distintas tragedias a raíz de mal manejo de los medios. Según Plaza, I. experta en el
uso infantil de Nuevas Tecnologías y responsable del Departamento de Comunicación de la
Fundación Alia2 (2018). El tiempo que le dediquen los menores de edad al internet debe ser
regulado dependiendo del objetivo que tengan en ese momento.
Es inevitable que niños menores de edad tengan acceso a las redes sociales, es por esto,
que es importante estar al tanto de lo que hacen y buscar formas alternativas para que puedan
navegar de manera segura. El uso del internet cuenta con múltiples beneficios y es un apoyo
para que los estudiantes encuentren todo tipo de información, por lo tanto, los jóvenes tienen
derecho a usar las herramientas que se les presentan en la actualidad, pero es importante que
existan guías que los enseñen a tener los cuidados pertinentes.
 57

No existe un mal uso del internet, cada persona es responsable de cómo utiliza las redes
sociales. Gracias a las nuevas tecnologías existen maneras de bloquear páginas en la web para
utilizar de manera productiva y proactiva los recursos. Cuando un adolescente elige probar
algún tipo de droga de manera consciente, se convierte en una adicción grave y afecta partes
del cerebro, pero fue una decisión propia y la manera de abordar el problema es ofreciéndole
ayuda.
Es peligroso que personas menores de edad se encuentren expuestas a los
peligros del siglo XXI, el uso sin supervisión de redes sociales y el fácil y desenfrenado acceso
a las drogas están acabando con la vida de muchos jóvenes alrededor del mundo y es necesario
tomar medidas radicales por parte de las autoridades para disminuir el número de suicidios que
ocurren en menores de 18 años. Según González, A. (2014). Periodista del periódico La
Nación, Costa Rica, basada en una investigación afirma que la tasa de suicidios en Costa Rica
es la tercera más alta en América Central porque cada año se suicidan siete de cada 100.000
costarricenses.
El suicidio se da a raíz de una condición muy marcada de tristeza en el ser
humano, los trastornos depresivos que sufren algunas personas pueden afectar las emociones,
normalmente la baja autoestima y muchos factores culpan a las redes sociales de dicha acción,
aunque no lo son. Es importante proteger la salud mental de los jóvenes y mantenerlos alejados
del peligro de la web. El internet también sirve como herramienta efectiva que puede utilizarse
para motivar a los jóvenes a no acabar con su vida, luchar por sus sueños y metas. Los “blogs”
de personas que se dedican a enseñar técnicas de autoayuda están por todos lados en internet y
no siempre son la mejor opción, pero a veces ayudan a los jóvenes que están pensando en
acabar con su vida, aunque también hay que tener cuidado porque hay personas sin corazón
que buscan acabar con la vida de las personas sin piedad alguna.
Proteger la vida humana es uno de los mayores retos en la actualidad, y es necesario
estar consciente de las acciones que se pueden realizar para que no ocurran suicidios en
adolescentes y estar alertas a las señales que se presentan para poder tomar medidas y ayudar
sin tener que alejar a los jóvenes de las oportunidades que les brinda el internet, sino, hay que
darles herramientas efectivas por medio de las redes sociales que los hagan sentir mejor y que
vean un apoyo constante de aquellos que los rodean, principalmente los padres de familia son
un pilar fundamental en este proceso, porque en vez de castigar a los chicos y prohibirles el
uso de internet, deben ayudarlos y guiarlos de la mejor manera para que entiendan y aprendan
a diferenciar entre lo bueno y lo malo, acompañados de un adulto. Según, estudiantes de la
universidad de Huelva, Colás, P., González, T., y Pablos, J. (2013). Las redes en internet son
 58

una herramienta necesaria que permite a los jóvenes desenvolverse en diferentes aspectos en el
mundo real.
Por sí solas las redes sociales no son las culpables del gran número de suicidios
que sufren los adolescentes, sí es posible que generen ansiedad, pero la mayoría de veces que
se ven involucrados en una muerte están acompañados de problemas como drogas, alcohol,
agresión intrafamiliar o “cyberbullying”, por lo tanto, culpar al internet por los casos de muertes
es algo sin sentido. Cuando un adolescente tiene problemas suele refugiarse en personas que
no conoce, se siente más confiado y que no va a decirle a nadie por lo que está pasando. Los
problemas más difíciles de tratar con consejos son las drogas, la mayoría de personas que
deciden entrar a ese hueco oscuro por desesperación encuentran un apoyo en una sustancia que
les genera daños fuertes, pero les resulta mucho más difícil entender que necesitan ayuda
profesional. (Saldarriga, 2018).
Esta problemática social le debe interesar a todos, brindar ayuda cuando otras personas
lo requieran, campañas desde las diferentes áreas en educación y estar siempre presente en la
vida de las personas con algún tipo de vulnerabilidad para comunicarle a las autoridades lo que
está sucediendo, todos los individuos en el mundo deberían estar preparados con conocimientos
básicos para ayudar a personas con ideas suicidas, para hablarle mientras llegan las autoridades.
Finalmente, las redes sociales son una puerta que abre un millón de
oportunidades, sociales, laborales y académicas, por lo tanto, es importante que todas las
personas tengan acceso a utilizarlo de forma segura. Es cierto que los medios sociales pueden
ser considerados una adicción grave al punto de que algunos expertos los comparan con las
drogas y han sido un puente para que ocurran cada vez más muertes, sin embargo, existen
diversas maneras de solucionar esta grave dependencia. Por ejemplo, incluirlo más en la
educación desde edades tempranas porque utilizar internet no es malo, hay que saber abordar
las diferentes áreas que se presentan, porque hay personas que afirman que el uso del internet
también aleja a los jóvenes de la iglesia católica, pero no hay mejor manera de enseñar lo
correcto que por medio de las escuelas y colegios, con educadores, profesionales certificados
que puedan garantizarles a los estudiantes la seguridad de navegar en internet sin que nada
extraño suceda, otra alternativa importante es realizar campañas informativas que permitan a
la población conocer sobre los cuidados importantes que los menores de edad deben tener para
navegar en la web.
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 60

Capítulo 8

¿Son las redes sociales el principal influyente de estar en

desacuerdo con la iglesia católica?

- Luis Fernando Coronel

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Ese planteamiento fue parte de un análisis publicado en el año 2002 en el diario

español El Mundo, el cual destacaba la importancia de la religión en las sociedades, tanto en
lo que respecta a sus creyentes como para los detractores. (J. Mujica, 2019). El binomio iglesia
católica y redes sociales ha despertado mucho interés, en función de sus progresos, pero
también por sus estrepitosos desencuentros.
Las redes sociales, constituyen un portal, a través del cual las personas comparten no
solo aspectos importantes de su propia vida sino también su visión del mundo. Hacemos
referencia al ser humano como un ser biopsicosocial, cultural e histórico, cuyos valores,
opiniones, concepciones y representaciones buscan manifestarse a través de la satisfacción de
una necesidad fundamental, propia de la naturaleza humana, que no es otra que la
comunicación. Desde sus inicios entre los años 1994-1995 las personas en las redes sociales
han pasado de ser pasivos receptores de contenidos, a usuarios activos en permanente
interacción.
Para establecer una relación entre las redes sociales y la iglesia católica vale la pena
destacar la relevancia de ésta en América Latina. Según datos del Vaticano y del Pew Research
Center, de los aproximadamente 1.200 millones de bautizados del mundo casi 600 son del
continente americano; de estos, 480 millones (el 40%) son latinoamericanos. Además, esta
región alberga a los dos países con mayor cantidad de católicos del mundo: Brasil, con 134
millones, y México, con 96 millones. Claramente, la mayoría de los católicos del globo son de
América Latina. Considerando estas cifras era impostergable que la iglesia no sucumbiera a la
necesidad de reinsertarse y adaptarse a las nuevas tecnologías. (C. Hackett, 2017)
En este sentido, como muchos otros grupos religiosos, la Iglesia católica se incorporó
a estos espacios virtuales y específicamente el 19 de mayo de 2009, se hizo público el
lanzamiento de una aplicación en Facebook impulsada por el Pontificio Consejo para las
Comunicaciones Sociales. La aplicación se titulaba “El Papa se reúne contigo en Facebook” y
permitía intercambiar postales de Benedicto XVI y fragmentos de discursos, alocuciones,
homilías y pensamientos del Santo Padre en esa red social. Por otra parte, y según el sitio web
Pope2You esto permitió crear una estrecha red de comunicación alrededor del Santo Padre. El
sitio web Pope2You es otro medio a través del cual el Papa de la Iglesia Católica se dirige a las
personas que utilizan las redes sociales de Internet y otros sitios para transmitir sus mensajes
sobre asuntos actuales, así como algunos otros hechos o historias importantes. (TNS, 2012)
Ese mismo año, la Oficina de Relaciones con los Medios de Comunicación de la
Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, anunciaba el inicio de su presencia en
 63

Twitter, considerada una de las redes sociales más conocidas para ese momento, con el fin de
potenciar y hacer visibles los comunicados de prensa y otros de sus contenidos. La misma
Oficina de Relaciones ya había puesto en marcha un “blog” en el que, además de informar,
hacía posible debatir temas importantes y polémicos (P. Consejo, 2002)
Esta progresiva y creciente participación de la Iglesia en las redes sociales, alcanzó
relevancia, cuando el Pontífice Benedicto XVI, en 2012 a título personal abre una cuenta de
Twitter con finalidad evangelizadora; el Obispo José Ignacio Murillo, lo denominó “el efecto
llamada”, porque logró un significativo acercamiento de las personas alejadas de la Iglesia y la
difusión del Evangelio en un momento de crisis con escasez de vocaciones y en donde la
religión católica parecía no dar respuestas a las necesidades de amplios sectores de la sociedad.
(ABC, 2012)
Las redes sociales se han transformado en la forma más simple de comunicarse y tener
contacto con las personas, de esta forma, se van creando nuevas maneras de participar y
permiten al mismo tiempo organizar mejor un cierto grupo de gente (Hall, 2018) Otro aspecto
a resaltar, es que mediante el uso de las redes sociales la Iglesia Católica podía “ eludir a los
medios de comunicación tradicionales y relacionarse directamente y de una manera menos
distorsionada con los ciudadanos “Las personas podrían escuchar, ver y leer los mensajes de
su iglesia desde cualquier lugar, con lo cual ganó cada vez más espacios en redes como Twitter,
Facebook, SoundCloud, YouTube, Instagram entre otras. De esta forma se obtenía de forma
más directa e inmediata a importantes recursos religiosos y espirituales. Como lo son las
bibliotecas, museos o lugares de culto, ya sea de documentos del magisterio o escritos por el
mismo padre. (Hermans, 2010)
Finalmente, la iglesia logra su objetivo, estar allí, donde el hombre y la tecnología se
juntan y donde a nivel global se calcula que una persona pasa 18 horas de la semana conectado
y por lo que actualmente hasta el más humilde de los grupos tiene un perfil en las redes sociales
para promoverse y ganar adeptos. (I. González, 2018) Sin embargo es importante destacar, que,
así como las redes sociales tienen múltiples ventajas, también representan un arma de doble
filo y la iglesia ha sufrido, como lo expresa El Papa Francisco, en forma reiterada “una serie
de ataques con discursos heterogéneos, intencionadamente evasivos y sutilmente engañosos”
(A. Córdoba, 2002)
Para abordar el tema de la Iglesia Católica, se toma en cuenta un hecho relevante que
ha generado muchos contenidos en las redes sociales y es precisamente la elección del papa
Francisco, primer pontífice latinoamericano, el cual generó una verdadera revolución en la
Iglesia Católica, desde su ingreso y en diversos foros se discuten la gran cantidad de artículos
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y comentarios que pensadores de todo el mundo (católicos y no católicos) han dedicado a su

apostolado. Entre muchas de sus particularidades podemos mencionar, la sencillez, valentía,
cercanía, amor al prójimo y cambios de fondo y forma marcados, ante todo, con su propio
testimonio que han sido el sello de su lozano pontificado. No obstante, no ha dejado de ser
criticado también, por lo que algunos autores consideran una actitud beligerante con algunos
gobiernos de tinte socialistas o similares.
Es bajo la figura del anonimato, que precisamente se escudan personas y grupos que se
dedican a descalificar, discriminar y dañar a determinados sectores de la sociedad, de los cuales
no escapa la iglesia católica, la cual que se ha visto relacionada con situaciones que afectan su
institucionalidad por acciones y comportamientos de algunos de sus miembros. La naturaleza
escandalosa de algunas noticias, logran captar la atención de muchos usuarios y esto crea
estereotipos y prejuicios, además de canalizar inadecuadamente emociones como la rabia y la
frustración.
Al respecto el Papa Francisco, ha señalado que la mala difusión en redes de noticias
que son ciertas, de tal forma que manipula en cierto grado a la gente, de tal forma que como
muchos de estos contenidos carecen de fuentes verídicas, aun así, los oficiales de las iglesias
no pueden enmendar los daños que están falsas noticias producen. (Aci, 2018, p)
En los últimos años, en las redes sociales, se han difundido, videos, fotografías y
noticias falsas incluso atribuyendo al Papa Francisco palabras que nunca dijo y lo que es peor
aún, no se hace ninguna rectificación al respecto. En este mismo orden de ideas, la iglesia
católica ha alertado sobre el drama que representa la desinformación, que en muchos de los
casos se equipara a desacreditar al otro, por lo que se hace presente con bastante frecuencia en
las redes sociales, actitudes intolerantes y donde se abusa de lo que se conoce como libertad de
expresión.
Al respecto, Bucio Mújica, en la presentación del libro “Mensajes de odio y
discriminación en las redes sociales”, plantea que la frontera que divide el mundo virtual del
real se está volviendo cada más menos densa. Ya sean las fortalezas o debilidades de las
personas en ambos lados, pero el internet funciona como un amplificador de mensajes,
provocando pensamientos en las personas que son imborrables. (M. Ricardo, 2015). Vale decir
entonces que las redes sociales se han convertido en fuertes potenciadores y reproductores de
mensajes portadores de odio y resentimiento, situación delicada y lamentable por la posibilidad
real de que las personas vean afectada su fe católica por contenidos de las redes sociales y peor
aún si estos usuarios son jóvenes, que finalmente son quienes más tiempo pasan conectados a
las redes.
 65

En Costa Rica, el Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad

de Costa Rica, en el año 2016 resaltó entre sus resultados que el 70.3% de las personas
encuestadas manifestó que la religión es muy importante y de aquellos que dicen ser religiosos
71.8% son católicos. (UCR, 2017), el mismo estudio en marzo de 2018, determinó que este
porcentaje bajó a 52%. En relación a la calificación del 1 al 10, que los costarricenses le ponen
a la institución religiosa, destaca en el último reporte del mismo centro de investigación (CIEP-
UCR) que los costarricenses le ponen una nota de 6,5 cuando en años anteriores superan los 7
puntos. Esta caída ha sido sostenida desde 2016. Si bien es cierto, estos cambios pueden estar
relacionados con hecho concretos y escándalos públicos y notorios, la forma cómo han sido
expuestos y manejados por las redes sociales contribuye a exacerbar el repudio, situación que
es preocupante por su efecto en el entorno social.
La forma cómo muchos contenidos se han venido desarrollando en las redes sociales,
demuestra la existencia de una crisis de valores morales, porque más allá de que las mismas
constituyen una herramienta aprovechable para facilitar la comunicación, actualización e
información, también es cierto que es utilizada en muchos casos por inescrupulosos que
deshumanizan la sociedad. No se trata entonces de que las personas no puedan manifestarse
libremente en las redes sociales, sino de poner en práctica la prudencia y el respeto de las demás
personas.
En este orden de ideas, ¿hasta qué punto están amparadas las opiniones de las personas?
Ciertamente, constituye un derecho fundamental reconocido en nuestra Carta Magna, que
menciona que tenemos derecho expresar y difundir de forma libre nuestras ideas y
pensamientos mediante la palabra, un escrito o de cualquier forma de comunicación. (TSE,
2019) No obstante es claro que dicho derecho no debe chocar con otros derechos, es decir no
debe vulnerar la imagen y el honor de personas o instituciones.
Las opiniones emitidas a través de las redes sociales deben ser ejercidas dentro de un
marco de responsabilidad, con claridad sobre las eventuales consecuencias que, por afectación
a la moral, el orden público o a terceros, se puedan generar. No se puede permitir que las
bondades de la tecnología impliquen irresponsabilidad y que se cometan ligerezas que causen
daños irreparables a instituciones como la iglesia católica que tantos aportes ha realizado a
nuestra sociedad.
Claramente, la iglesia católica a lo largo de los años es la institución que genera más
confianza en la región por desempeñar un papel importante en el fortalecimiento de la
democracia y sus valores en América Latina, además de sus variadas colaboraciones y
programas sociales (Cáritas, pastorales sociales, etc.), y por ayudar a fortalecer valores básicos
 66

de la vida en sociedad mediante sus iniciativas pastorales (familia, juventud, mesas de diálogo,
mediación en conflictos, entre otras) o simplemente predicando estos valores a los millones de
católicos que asisten a misa diariamente, es de enorme ayuda para lograr este objetivo.
En la sociedad actual, marcada por los medios y por la era digital, es imperioso que la
iglesia católica siga realizando avances en ese sentido, es decir la iglesia debe seguir
permaneciendo en las redes, continuar desarrollando lo que podríamos denominar la
evangelización digital, "la comunicación es la esencia del cambio cultural y, al mismo tiempo,
la esencia de la propia Iglesia”. Que menciona que la comunicación llega a ser la esencia del
cambio cultural, y así, al mismo tiempo con la esencia de la propia iglesia. (J. Vidal, 2010, p)
Las redes sociales son una excelente vía de comunicación que hoy en día resultan
imprescindibles y, bien usadas, ayudan eficazmente a expresar ideas y pensamientos. Sin duda,
la envergadura del impacto que representan las tecnologías en las sociedades contemporáneas
requiere en los años venideros de una adecuada intervención, en el cual se destaque el papel
preponderante de la familia como principal agente socializador, junto a la educación formal,
los gobiernos y la sociedad en general, en un esfuerzo por evitar el enfrentamiento entre medios
o herramientas digitales e instituciones como la Iglesia Católica. La libertad de expresión tiene
límites: la verdad y el respeto a uno mismo y a los demás.
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