Al Sr. Gerente de “Aseguradora Rio de La Plata S.A.

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Dra. Schulte Brockhoffe Fatima, Abogada, M.P nro. 1195, en representación del Sr.
Gómez Ricardo; DNI 18.765.342, argentino, de profesión Técnicoinformático, casado, con
domicilio legal en calle Isaac Newton esquina Bulnes, Córdoba, Argentina. Me presento
respetuosamente a Uds. O por su intermedio a quien corresponda y digo:

I.-OBJETO: que vengo por la presente a este a plantear Reclamo Extrajudicial contra
de la Compañía de Seguros “ASEGURADORA RIO DE LA PLATA S.A.”, en su carácter de
aseguradora de la empresa de servicios de pasajeros urbanos “25 de Mayo S.A.”, con domicilio
legal en calle Islas Malvinas 23, de la ciudad de Córdoba, por la suma de PESOS DOSCIENTOS
CINCUENTA MIL ($250.000) con más los intereses y honorarios correspondientes, en mérito de
las razones de hecho y de derecho que a continuación expongo.

II.-HECHOS: el día 5 de abril del corriente año, el Sr. Gómez Ricardo se encontraba en
su vivienda de su propiedad junto a su familia, conformada por su esposa y sus dos hijos
menores de edad, cuando EN FORMA INTEMPESTIVA E IMPREVISTA, un ómnibus de servicios
de pasajeros urbanos, marca Volkswagen, modelo 2018, dominio AC716IB, impacto contra su
vivienda luego de subirse a la vereda, cayéndose instantáneamente una de las paredes de la
cocina-comedor ubicado en el frente de la casa, parte de esa pared cayó encima de mi
representado causándole serias lesiones en su cuerpo.

La maniobra que realizo el Sr. Fernández Hugo, conductor del ómnibus fue
totalmente imprudente, ya que según afirman los testigos que se encontraban en la zona, el
ómnibus se trasladaba a alta velocidad por lo que no pudo frenar a tiempo, sin poder
maniobrar, colisionando en la casa de mi representado. Lo expuesto es afirmado por las
pericias técnicas realizadas por personas idóneas para tal fin.

El impacto en la vivienda del Sr. Gómez, al igual que en los muebles de la cocina han
sido de gran envergadura. Debido a ello y por razones de seguridad, mi representado junto a
su familia tuvieron que alojarse en un hotel por el lapso de dos meses.

La jurisprudencia ha llegado a construir criterios basados en las reglas de la

experiencia, con respecto a la velocidad del vehículo, la velocidad que se imprime al vehículo
debe ser tal que permita en todo momento al conductor mantener el dominio sobre el móvil.
La velocidad apropiada no es siempre la establecida en las normas, sino la que disimiles
condiciones permite al conductor maniobrar con eficacia y mantener el control del vehículo.
Esto incide causalmente en el resultado, debido a que el conductor del ómnibus además de no
respetar la velocidad indicada en las normas de transito, no respetaba la velocidad idónea para
realizar la maniobra de giro hacia la izquierda. En este sentido la jurisprudencia ha dicho: “el
principal deber de todo conductor es guiar el rodado a una velocidad prudente, que le
permita, además, estar atento a las variadas contingencias del tránsito y mantener el dominio
de su rodado en toda circunstancia.” Maglietti, Alberto R. y otra c/Arevalo, Victor Heraldo
s/ordinario. Sentencia 4 de octubre de 2012. CAMARA DE APELACIONES EN LO CIVIL Y
COMERCIAL. FORMOSA, FORMOSA. MAGISTRADOS: Betancur-Boonman. Id SAIJ: FA12250219.

Los hechos que dan motivo a este reclamo encuadran en un supuesto de

responsabilidad civil deriva de la intervención de cosas por imperio del art. 1769 CCyCN “los
artículos referidos a la responsabilidad derivada de la intervención de cosas se aplican a los
daños causados por la circulación de vehículos”; en concordancia con el art. 1757 CCyCN “toda
persona responde por el daño causado por el riesgo o vicio de las cosas, o de las actividades
que sean riesgosas o peligrosas por su naturaleza, por los medios empleados o por las
circunstancias de su realización”.

Por lo expresado hasta aquí, la compañía aseguradora es responsable por los daños
causados por el ómnibus asegurado en la misma, siendo fundamento de la responsabilidad la
reparación de los daños y perjuicios ocasionados, afrontando la obligación de indemnizar a la
víctima, atendiendo al art. 1740 CCyCN, entendiendo que la reparación debe ser plena, que
“consiste en la restitución de la situación del damnificado al estado anterior al hecho dañoso.

III.-DAÑOS: como consecuencia de los hechos relatados, mi representado ha sufrido

los siguientes daños:

DAÑOS PATRIMONIALES:

Cabe aclarar que los valores expresados a continuación no aumentan el patrimonio, solo se
limitan a recomponerlo en términos económicos, procurando llevar las cosas, con el mayor
grado de exactitud posible, al estado en que se encontraba antes del daño
(Pizarro/Vallespinos).

-Materiales: por los daños causados a la vivienda en las paredes de la cocina-comedor, su

mobiliario e instalaciones (eléctricas, gas, agua). Los mismos ascienden a un valor de PESOS
SETENTA MIL ($70000), se adjunta comprobantes.

-Tratamientos médicos: mi representado sufrió lesiones al caerle parte de la pared encima,

causándole serias lesiones en su cuerpo, fractura de brazo y pierna derecha. Por las cuales
debió someterse a cirugías, rehabilitación, medicamentos, tratamientos kinesiológicos, etc. Los
gastos suman un total de PESOS SESENTA Y CINCO MIL ($65000).

-Incapacidad sobreviniente: ya que mi representado está incapacitado laboralmente a causa

de las secuelas físicas que atacan a la integridad de su persona, debiendo resarcir el lucro
cesante, es decir, la ganancia frustrada como consecuencia del hecho (Maria Virginia Bertoldi
de Fourcade). El monto a resarcir es equivalente a PESOS SESENTA Y CINCO MIL ($65000).

DAÑOS NO PATRIMONIALES:

A causa de la naturaleza del daño, y sus consecuencias disvaliosas con el espíritu, no se puede
arribar a una restitución del estado de las cosas anterior al hecho dañoso, se busca cumplir con
un fin propio y valido el cual es otorgar a la víctima una satisfacción sustituta y compensatoria
por el detrimento espiritual padecido, recurriendo a la obligación de dar dinero por parte de la
empresa aseguradora.

Los mismos son angustia, dolor, frustración, y demás que pueden ser padecidos por el Sr.
Gómez y su familia al ver que su vivienda fue destruida, y en consecuencia vivir en un hotel
durante dos meses; por los nervios que se sufren luego de un hecho de tal envergadura; por la
imposibilidad de ejercer su profesión con la consecuente disminución económica; el dolor y
miedo a no sanar físicamente. En vista de estos el monto que se reclama es de PESOS
CINCUENTA MIL ($50000).

III.-TOTAL DEL RECLAMO: por lo tanto, el presente reclamo extrajudicial asciende a

la suma de PESOS DOSCIENTOS CINCUENTA MIL ($250000).
 IV.-HONORARIOS: en cuanto a los honorarios profesionales del letrado
interviniente, estimo los mismos en un 20% del total de la indemnización que en definitiva
acordemos.

V.-DERECHO: Fundo el derecho que asiste a la pretensión de mi parte en lo

dispuesto en los arts. 1740,1757,1769 concordantes del Código Civil y Comercial, Ley Nacional
de Transito Nro. 24.449; además doctrina, jurisprudencia y legislación aplicable al presente
caso.

VI.-ACOMPAÑA DOCUMENTAL:

Acompaño a la presente la siguiente documental:

 Actuaciones policiales labradas el día del accidente.

 Certificado medico
 Doce (12) fotografías tomadas inmediatamente después del accidente.
 Presupuesto del costo de reparación de la vivienda.
 Boletas de compra de bienes muebles dañados.
 Presupuestos médicos (internación, rehabilitación, medicamentos, entre otros).
 Gastos de hotel en el que debieron quedarse dos meses (comprobantes).
 Testimonios de personas presentes en el hecho (6).

VII.-TOTAL DEL RECLAMO: por lo tanto, el presente reclamo extrajudicial asciende a

la suma de PESOS DOSCIENTOS CINCUENTA MIL ($250000), correspondientes a los daños ya
detallados en el apartado tres (gastos materiales, tratamientos médicos, incapacidad
sobreviniente y daños no patrimoniales (morales).

VIII.-HONORARIOS: en cuanto a los honorarios profesionales de los letrados

intervinientes, estimamos los mismos en un 20% del total de la indemnización que en
definitiva acordemos.- siendo la finalidad de esta presentación, lograr un acuerdo extrajudicial,
considero prudente un plazo de quince (15) días para obtener una respuesta conveniente para
ambas partes, haciendo desde ya reserva de ampliar los monto, en caso de tener que accionar
legalmente.- Sin otro particular y a la espera de una pronta respuesta, saludo a Uds.
Atentamente.

Gómez Ricardo Schulte Brockhoffe Fátima