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Nátaly Brito

Obligaciones

Carrera de Derecho – Paralelo B

Pontificia Universidad Católica del Ecuador Sede Ambato

Ambato

El Precursor y Alejandro Chávez s/n

0998709216

natalybrito2000@gmail.com

Andrés Chimborazo, MA
Obligaciones: Conceptos Básicos y Teorías

Las obligaciones se originaron en la época romana con Justiniano dentro de los siglos

XVI, XVII y XVIII, después de la tiranía de Julio César. Justiniano desarrolla un código,

aprobado por el Senado, otorgando derechos y obligaciones a los ciudadanos de la antigua

Roma. Con el tiempo dicho código es adoptado por Europa y posteriormente por el Derecho

germano. Este último decidió añadirle un plus, el Ius Positivismo, aplicando la subsunción.

Además, se instauró el patrimonio y los presupuestos de adquirirlo y perderlo. Sin embargo,

para los ellos el Derecho solamente era una herramienta a prueba.

A continuación de estas etapas siguió el desarrollo normativo itálico, seguido por el

francés con la Revolución Francesa. De esta manera, se llega pues a terminar con la teoría

clásica de los alemanes para empezar con la teoría neoclásica. Esta última se centra en los

pensamientos aristotélicos, es decir, que defendía mucho a los derechos del hombre. Todo

esto se determinó en la Carta de San Andrés. En esta, asimismo, se establece la premisa de

que “por deudas la sanción no será la prisión”.

Una de las propuestas más acertadas fue la del venezolano Andrés Bello, reconocido

jurista, quien finalmente trajo la teoría neoclásica a Sudamérica. Al ser profesor de Bolívar,

figura reconocida de la emancipación Hispanoamérica y fundador de la República de la Gran

Colombia, tuvo gran acogida dentro del gobierno de dicha República. Esto simplificó su

entrada a la administración política, convirtiéndose en asesor jurídico de la República e

implementando la prenda e hipoteca.

En la actualidad, las obligaciones, de forma general, se consideran como un vínculo

o atadura generado entre dos sujetos: el acreedor y el deudor. Entre ellos se establece una

relación jurídica donde se imponen obligaciones reales o patrimoniales en favor del

acreedor. En las que se entiende por obligaciones reales a aquellas que se dan de manera

personal, es decir, dirigido a la persona; y, las obligaciones patrimoniales como las que van

dirigidas a las cosas, esto significa que se refiere al patrimonio de las personas.
Dentro de lo que son obligaciones en el Derecho se desarrollan dos teorías

trascendentales. La primera es la Teoría de la Patrimonialidad; y, la segunda, la Teoría de la

Responsabilidad. Como preámbulo para entenderlas se debe definir lo que es una teoría.

Pues bien, una teoría se puede definir como aquella hipótesis propuesta por un autor que

tiene una antítesis; y, que no pudo ser probada pero que, sin embargo, es propensa a ser

comprobada en algún momento.

Ahora bien, la Teoría de la Responsabilidad es desarrollada en la época germánico-

romana por Barak. Viene de la mano de una corriente clásica. Esta teoría le otorga más

importancia y pone en primer lugar al objeto y no a la persona. Su autor decía que esta teoría

encuadra la obligación jurídica genérica para dividirla en: obligación del deudor y obligación

de responsabilidad; donde, pueden existir las dos o, sólo una. Igualmente, nace el garante, y

con él la acción pauliana. Él tiene las mismas obligaciones del deudor. Y la acción pauliana

se refiere al derecho del garante a cobrar lo que haya pagado en nombre del deudor original.

Dentro de la obligación del deudor se honran ciertos elementos. Uno de ellos es el

respeto a la libertad del deudor. Con ello se deja atrás el antiguo castigo de exponerlo en

plazas para posteriormente descuartizarlo. Otro de ellos es el tener un derecho moral muy

marcado, pues al no saldar una deuda se daña la honra de la persona. Además, se dice que

el acreedor no tiene el poder de exigibilidad frente a su deudor. No obstante, esta afirmación

es debatible en la práctica pues en realidad si lo tiene.

Dentro de la obligación de responsabilidad se dice que el legítimo activo, es decir el

que entrega sus bienes, tiene derecho a tomar parte en el patrimonio del deudor. Existen la

obligación del deudor y de responsabilidad cuando se da una relación de voluntades

acreedor-deudor; y, cuando el deudor ya no necesita del patrimonio.

Por otro lado, está la Teoría de la Patrimonialidad, o solamente Patrimonialidad, no

tiene un autor definido, sino que es anónima. El objeto de esta teoría son las cosas

específicamente el patrimonio de legítimo pasivo y del legitimo activo. Se desarrolla dentro


de la corriente neoclásica con influencia de la corriente aristotélica. Dentro de la cual se

considera en primer lugar a la protección del patrimonio del individuo y sus derechos, es

decir, se dirige especialmente a garantizar la defensa del patrimonio de la persona.

Dentro de esta teoría el legítimo activo entrega el dinero, que es su patrimonio, al

deudor y, este deudor garantiza la paga de su deuda con su bien o cosa, misma que debe

tener necesariamente antes de constituirse la obligación. En el caso en el caso de que el

deudor no tenga dichos bienes, deberá tener obligatoriamente un garante, en otro caso no

será necesario. La obligación se extinguirá cuando el deudor devuelva al acreedor su

patrimonio. O en su defecto, con la figura de la “dación en pago” donde se procura no entrar

en un proceso judicial y extinguir total o parcialmente la obligación entregando ciertos tipos

de bienes al acreedor. Dichos bienes pueden ser de cuatro clases: muebles, inmuebles,

semovientes y fungibles.

En conclusión, las obligaciones nacen en Roma con Justiniano dentro de los siglos

XVI, XVII y XVIII, para después esparcirse por Europa y el resto del mundo. Son un vínculo

o atadura que se genera entre el acreedor y deudor, dándose obligaciones reales (personales)

o patrimoniales (cosas). Tiene tres principios básicos: propiedad privada, vida digna y libre

contratación. Dentro de las obligaciones se desarrollan dos teorías: Teoría de la

Responsabilidad y Teoría de la Patrimonialidad. La primera nace de una corriente clásica y

es desarrollada por Barack. Aparece el garante y con él la acción pauliana. Barak subsume

una obligación jurídica genérica para dividirla en una obligación del deudor (respeto a su

libertad, con derecho moral y acreedor con poder de exigibilidad) y otra obligación de la

responsabilidad (vinculado al patrimonio del deudor). La segunda nace de una corriente

neoclásica y no tiene un autor definido. Sujeto es el patrimonio del deudor y del acreedor.

Se dedica a garantizar la protección del patrimonio de la persona. Garantiza una obligación

a través de los bienes. Y aparece la “dación en pago” como forma de extinguir total o

parcialmente la obligación.

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