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Mesa redonda

III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

9:00 - 9:45 h. Mesa I

Insuficiencia Venosa Crónica.


Conceptos actuales
Moderador: J. Marinel·lo
Ponentes: J. Calvo, R. Vila, O. Lapiedra

Presentación de la mesa la capacidad de resolución en un 42,4% con respecto al año anterior,


esta lista creció en un 16,6%6-9.
J. Marinel·lo. Servicio Angiología y Cirugía Vascular Las razones para avanzar también en los aspectos fisiopatológicos de la
Correspondencia: Josep Marinel·lo IVC son igualmente importantes, a fin de conseguir la capacidad de
Hospital de Mataró, CSdM correlacionar sus diversos estadios con las causas que los provocan, y
Carretera de Cirera, s/n - 08304 Mataró como paso previo ineludible para el planteamiento de terapéuticas con-
trastadas y por tanto, válidas.
En pocas enfermedades en el ámbito de nuestra especialidad tiene tanto En este último aspecto, pero también en el quirúrgico, el Estudio Funcio-
sentido referirse con la terminología de “conceptos actuales” como en la nal Hemodinámico (EFH) puede valorarse, en mi criterio, como el avance
Insuficiencia Venosa Crónica (IVC). más sustancial en la IVC de los últimos cinco años.
Genéricamente, bajo el epígrafe de IVC se clasifican un número muy eleva- No obstante en el momento actual es una metodología que corre el riesgo
do de situaciones clínicas que no obstante difieren de forma muy impor- de ser victima de su propio éxito.
tante entre ellas en su propio concepto, pero sobretodo en su curso evolu-
tivo y en su trascendencia para las personas a quienes afecta. Entiendo que es necesario consensuar y estandarizar protocolos, acredi-
tar y homologar a las personas que los realicen y racionalizar su actual
El propio concepto aislado de IVC, exento de la adición de matizaciones, demanda.
es de una notable ambigüedad, hasta el punto de ser cuestionado por este
motivo por algunas publicaciones. Para debatir sobre todo ello, esta mesa cuenta con la participación de
profesionales con experiencia en IVC:
En mi criterio, la necesidad de avanzar en una mayor concreción afecta a
la IVC en todos sus aspectos: epidemiológicos, fisiopatológicos, y clínicos – el Dr. Jordi Calvo, del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular del
y como consecuencia de éstos, a los terapéuticos. Hospital Dos de Maig.
– el Dr. Oriol Lapiedra, del Servicio de Angiología del Hospital Creu
Desde el punto de vista epidemiológico, las cifras de prevalencia de la IVC Roja de Hospitalet de Llobregat.
en la bibliografía se mueven en márgenes que van del 25% al 65%,
– el Dr. Ramón Vila, del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular del
absolutamente inadmisibles para ser utilizados como base de plantea-
Hospital Princeps d'Espanya de Hospitalet de Llobregat.
mientos rigurosos1-5.
La Clasificación de la CEAP, todo y aceptando algunas de sus limitacio-
nes, es un elemento de referencia que debería tenerse en cuenta en la
Bibliografía
realización de los estudios epidemiológicos. 1. Gesto Castromil R. Y Grupo Detect-IVC. Encuesta epidemiológica realizada en España
sobre la Prevalencia asistencial de la IVC en atención primaria. Estudio Detect-IVC.
No obstante, del análisis de los Registros de Actividad de la Sociedad Angiología 2001;53:249-60.
Española de Angiología y Cirugía Vascular, se concluye que la prevalencia
2. Callejas JM, Manasanch J. Problemática asistencial y estudios epidemiológicos.
de la IVC no tan solo es elevada, sino que su incidencia es creciente: de AngioMaresme 2003. An Cir Card y Vasc 2003;9(5):357.
5.358 intervenciones quirúrgicas para el diagnóstico de varices realiza-
3. Macroestudio Prospectivo Delphi sobre costes sociales y económicos de la IVC. Hori-
das en el año 1999, se ha pasado a 13.879 en el año 2003. Con zonte del año 2010. SEACV y CEF: 2004. (En prensa).
crecimientos interanuales del 33% en el año 2000; del 36,6% en el 2001
4. Sobaszek A, Frimat P, Tiberguent A, Dormont A, Chevalier H, et al. Venous insufficiency
y del 42,4% en el 2003. of the lower limbs and working condition. Phlebology 1999;13:133-41.
A pesar de la mayor capacidad de resolución quirúrgica en los Servicios 5. Encuesta de la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular. Opinión del médico
de Angiología y Cirugía Vascular, la lista de espera para una intervención sobre la patología venosa de los miembros inferiores. Angiología 1988;2:75-83.
sobre varices ha pasado de 8.090 personas a finales del año 1999 a 6. Moreno Carriles RM. Registro de Actividad de la Sociedad Española de Angiología y
10.349 en el año 2002. En el año 2002, y a pesar de haber incrementado Cirugía Vascular. Año 1999. Angiología 2000;5:195-208.

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7. Moreno Carriles RM. Registro de Actividad de la Sociedad Española de Angiología y reflujo venoso del cayado de la vena safena interna como factor
Cirugía Vascular. Año 2000. Angiología 2001;53(4):228-48. desencadenante y preconizó la ligadura del cayado. Babcock en 1907
8. Moreno Carriles RM. Registro de Actividad de la Sociedad Española de Angiología y que propone la extracción completa del eje safeno mediante el arranca-
Cirugía Vascular. Año 2001. Angiología 2002;54(5):415-30. miento o stripper, como tratamiento definitivo de las varices.
9. Moreno Carriles RM. Registro de Actividad de la Sociedad Española de Angiología y
Cirugía Vascular. Año 2002. Angiología 2003;55(6):561-77. No es hasta los años 90, cuando la disponibilidad del Eco-Doppler veno-
so, permite el estudio generalizado de las varices y sus orígenes, demos-
trar los diferentes patrones anatómicos, y al planteamiento hemodinámico
del problema, son cuando surgen diferentes valoraciones y seguimiento
Epidemiología. Redes venosas. Fisiopatología de las técnicas previas, a la introducción de otras técnicas hemodinámicas
de la insuficiencia venosa crónica (CHIVA), cuando se da un salto importante en dicha patología.

J. Calvo. Servicio de Angiología, Epidemiología


Cirugía Vascular y Endovascular
Para poder determinar la incidencia y prevalencia de una patología deter-
Correspondencia: Jorge Calvo. Hospital Dos de Maig minada, debemos primero definir la enfermedad a estudio y clarificar
Consorci Sanitari Integral. Dos de Maig, 301 - 08025 Barcelona muy bien los conceptos de la enfermedad. Los términos insuficiencia
venosa crónica y varices llevaron a confusión, y la Unión Internacional de
Las enfermedades venosas afectan entre el 10 al 40% de la población Flebología estableció la definición de Insuficiencia Venosa Crónica, como
adulta según diferentes estudios1,2 a nivel de las extremidades inferiores aquellos cambios producidos en las extremidades inferiores resultado de
en especial, y su posible evolución a la cronicidad, provocando unas la hipertensión venosa prolongada, incluyendo la hiperpigmentación, ec-
importantes repercusiones personales y económicas. La gran magnitud cema o dermatitis de éstasis y las úlceras. También se definió las varices
del problema producido por la perdida de jornadas laborales y la genera- como venas dilatadas a consecuencia de la alteración de las válvulas y/o
ción de múltiples ingresos hospitalarios, con un numero muy importante de la pared venosa. Posteriormente la definición de varices ha sido modi-
de estancias hospitalarias, junto a un gasto sanitario en aumento, hacen ficada, entendiendo como várices aquellas venas que presentan una di-
de la enfermedad venosa una patología de primer orden socio sanitario. rección del flujo no cardiopeto, es decir que se detecta un reflujo.
Posiblemente debido a una evolución de la especie humana a la Las flebopatías afectan especialmente a los países desarrollados, pero
bipedestación, al ortostatismo prolongado, sedentarismo de la sociedad los diferentes estudios epidemiológicos dan valores de incidencia y preva-
occidental, obesidad, aumento de la esperanza de vida, culto a la imagen, lencia con gran disparidad de resultados y no comparables, generalmente
necesidades estéticas, y otros factores, hacen que exista un aumento de la por utilizar conceptos no homogéneos.
incidencia de la enfermedad venosa.

Recuerdo histórico
El Papiro de Evers (1550 a.C.) describe la enfermedad varicosa y hace
mención al tratamiento de las varices y de las úlceras venosas mediante
cauterización. En el Museo Arqueológico Nacional de Atenas (siglo IV
a.C.) existe un Bajorrelieve votivo que representa una pierna con una vena
safena interna varicosa (Figura 1).
Hipócrates describe la punción repetida de las varices para conseguir su
oclusión. Galeno diferencia entre venas y arterias, y recomienda pócimas
y emplastos para conseguir la curación de las úlceras. En La Biblia existe
la referencia donde Ezequiel es curado de su úlcera venosa crónica al
aplicarle emplastos de pescado seco y agua por Isaías. En el Siglo XIII la
cultura árabe por Avicena, describió el tratamiento de la insuficiencia
venosa y realizó diversos estudios anatómicos de la circulación mayor. Se
describen muchos términos anatómicos, como la vena safena (que pro-
viene de Al-Safen).
Miguel Servet en el Siglo XVI describe la circulación menor y William
Harvey en el siglo XVII en su publicación “Conocimientos de la circula-
ción” del año 1648 describe la circulación de retorno y el sistema circu-
latorio en general.
La descripción anatómica de las válvulas venosas y su funcionalismo fue
realizada por Fabricio d'Acquapendente en su texto “De venarum ostiolis”.
Diferentes intentos de tratamiento de las úlceras venosas mediante in-
crustación de pequeños tallos de plantas en las venas próximas a las
úlceras, consiguen la cicatrización al provocar la trombosis de dichas
venas. Posteriormente la inyección de diferentes sustancias para provo-
car la trombosis, intentan explicar el origen venoso de las úlceras y el Figura 1. Bajorrelieve votivo que representa una pierna
reflujo como factor etiopatológico. Fue Tomás Rimas quién postuló el con una vena safena interna varicosa.

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III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

En Estados Unidos, el Departamento de Salud ha cifrado en el 2% de la siones y tratamientos inapropiados, que llevó a una nueva Nomenclatura
población, y la prevalencia entre el 10% y 30%, aunque aumenta en de Consenso7 .
grupos de mayor exposición. El Estudio de Basilea II sobre una población
de obreros de la industria química presentaban flebopatía en el 22% de la Las venas de las extremidades inferiores están divididas en tres sistemas:
población. Se detectó varices en el 62% y el 48% se hallaban Superficial, Profundo y Perforante. Se hallan localizadas en dos
compartimentos principales: Superficial y Profundo (Figura 2).
asintomáticos3 .
En nuestro país no existen estudios poblacionales de la epidemiología de El Compartimiento Profundo está limitado por la fascia muscular y con-
tiene las venas profundas. El Compartimiento Superficial está limitado
la insuficiencia venosa crónica. La incidencia y prevalencia se establecen
profundamente por la fascia muscular y superficialmente por la dermis.
por extrapolación de los publicados en países europeos. Disponemos de
varios estudios en nuestro país, que cifran la frecuencia de varices entre el El Eco-Doppler ha confirmado un compartimiento safeno separado, que
20 y 30%1,2,4. está limitado por la fascia safena y profundamente por la fascia muscu-
lar, que contiene las venas safenas (signo del ojo) (Figura 3).
Por extrapolación, España presenta 2,5 a 3 millones de pacientes con
varices en los miembros inferiores, y 250.000 a 300.000 pacientes con Las venas tributarias de las safenas, accesorias, colaterales y venas co-
úlceras, entre el 10 al 15% de la población adulta presenta varices, el 1 municantes se hallan externas a este compartimiento. Las venas safenas
al 2% tiene úlceras, y de estos el 45% se halla de baja laboral. accesorias son segmentos venosos que ascienden paralelos a las venas
safenas, más anterior, posterior o superficial con respecto a los troncos
La mejor aproximación al problema en España, fue el Estudio Detect- principales. Las venas perforantes son aquellas venas que perforan la
IVC 5 , estudio epidemiológico longitudinal en el que participaron 1.068 fascia muscular para conectar las venas superficiales con las venas pro-
médicos de Atención Primaria en 16 comunidades autónomas, coordi- fundas. Las venas comunicantes son aquellas venas que se interconectan
nados por 20 especialistas en Angiología y Cirugía Vascular. Se incluye- con otras venas del mismo sistema.
ron 21.566 pacientes que acudieron en un día determinado a la consulta
de AP, por cualquier motivo, sin ningún tipo de selección previa. Se pudie- Debido a la gran cantidad de nombres propuestos y modificaciones a la
ron extraer las siguientes cifras: terminología anatómica es preciso la revisión exhaustiva del documento
de consenso7; solamente a modo de resumen se ofrece un breve listado:
El 68% de los pacientes presentaban algún signo o síntoma compatible
con IVC, el 80,2% eran mujeres y el 19,2% eran hombres. Se identifica- – Vena Safena Larga, Interna o Mayor por Vena Safena Grande
ron los factores de riesgo más importantes, que fueron Vida sedentaria, – Vena Safena Corta, Externa o Menor por Vena Safena Pequeña
Antecedentes familiares, Sobrepeso y Profesión de riesgo. La sintoma- – Vena Safena Accesoria desglosada en Vena Accesoria Anterior de la
tología más destacable fue: Pesadez (48,3%), varículas (44,6%), Dolor VSG
(31,7%), Edema vespertino (30,4%), Varices (29,4%) y úlceras (2,5%). – Vena Accesoria Superficial de la VSG y Vena Accesoria Posterior de la
También permitió determinar la calidad de vida, y el 39,3% valoró la VSG
sintomatología como importante y/o grave, el 48,3% como deterioro en
su calidad de vida, el 2,1% baja laboral (mediana de duración de 30 Vena Femoral por Vena Femoral Común, y un largo listado que ha exten-
días), y el 1,9% requirieron Hospitalización (con una media de duración dido la descripción a nivel de venas perforantes, de ramas de las venas
de 9 días). Como resumen al estudio se demostró que el 24% de los tronculares, tanto a nivel profundo como superficial.
pacientes ya había sido tratado previamente, y el 76% restante no lo La aceptación universal de la nueva terminología facilitará el intercambio
había sido. Después de la encuesta, se trató al 73,7%, y el 26,3% no internacional efectivo de información. De igual modo, la nueva nomencla-
requirió tratamiento o indicación quirúrgica. tura internacional en la clasificación clínica (CEAP), y la reciente pro-
puesta de clasificación de los diferentes patrones hemodinámicos del
Anatomía y redes venosas CHIVA, favorecerá el intercambio de información y permita la compara-
ción de resultados diagnósticos y terapéuticos.
Para poder entenderse a nivel internacional, todos debemos describir la
misma Anatomía, para lo cual se estableció una Terminología Anatómi-
ca 6 , pero incorrecciones en la interpretación de los nombres utilizados, Fisiopatología
venas perforantes no descritas, abreviaturas incorrectas, provocó confu- El sistema venoso asegura un flujo cardiópeto unidireccional con el débito
y presión adaptados a las necesidades de drenaje de los tejidos,
termorregulación y reserva hemodinámica, independientemente de la postura

Figura 2. División de las venas Figura 3. Signo del ojo

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y de la actividad muscular. La función venosa precisa de unas vías venosas la anomalía. Para ello utilizaremos una combinación de técnicas fisioló-
y unas bombas. El sistema venoso se estructura en Sistema Venoso Super- gicas y de imagen. En la actualidad los métodos no invasivos que resultan
ficial y Profundo, interconectados con Venas Perforantes. Existen tres bom- más útiles clínicamente son: el doppler continuo, el Eco-Doppler con o sin
bas, la Cardiaca, la Tóraco-abdominal y la Válvulo-muscular. color y la pletismografía aérea o neumopletismografía.
Básicamente, las alteraciones del sistema venoso de las extremidades
inferiores son la obstrucción segmentaria, la insuficiencia valvular, fístula Pletismografía
arteriovenosa, incompetencia valvular superficial y shunts micro circula-
Las técnicas pletimográficas se dirigen a la detección y medición de los
torios que provocan presión venosa excesiva.
cambios de volumen. Aplicada al estudio de la insuficiencia venosa,
En la Insuficiencia Venosa Crónica existe una disfunción en el sistema trata de medir los cambios de volumen que se producen en la extremi-
venoso, iniciada con el reflujo venoso generado por la incompetencia dad tras ejercitar la bomba muscular o al bloquear el drenaje sanguí-
valvular, que provoca un aumento de la presión venosa, conocida como neo. Según el método físico empleado hablaremos de pneumopletis-
Hipertensión Venosa. mografía, pletismografía de impedancia, de anillo de mercurio, de agua
o de fotopletismografía.
Para entender el problema, debe hacerse un recordatorio de la Fisiología
del Sistema Venoso de la Extremidad Inferior. La pletismografía de impedancia y la de anillo de mercurio han demostra-
do ser procedimientos válidos en el diagnóstico de la insuficiencia venosa
El retorno venoso de la sangre hacia el corazón se consigue mediante dos aguda secundaria a una trombosis venosa, siempre que esta cause un
circuitos: Sistema Venoso Profundo y el Sistema Venoso Superficial, interco- compromiso hemodinámico. En este caso se realiza la exploración con el
nectados con Venas Perforantes. El sistema venoso valvular permite un paciente en decúbito, con la extremidad ligeramente elevada. Se practica
flujo unidireccional y cardiópeto, y el avance desde las zonas dístales a las una oclusión venosa a nivel del muslo y se mide el volumen de llenado
proximales se consigue mediante la bomba muscular. Durante el ortostatismo venoso (capacitancia venosa) y su relación con el tiempo de vaciamiento
se produce un aumento de la presión hidrostática a nivel del tobillo, y al venoso producido tras la desinsuflcaión del manguito neumático. La dis-
iniciar la deambulación la expresión de las venas por la contracción de la minución de la capacitancia venosa y el débito venoso máximo (maximum
musculatura produce la progresión del flujo venoso en sentido cardiópeto y venous outflow) son parámetros útiles para el diagnóstico de trombosis
un descenso de la presión hidrostática a nivel de tobillo. Existen otras venosas proximales de los MMII, pudiéndose alcanzar fiabilidades del
fuerzas en menor grado que favorecen el retorno venoso, pero de muy poca 90% si se combina con el doppler continuo1-3.
repercusión clínica. La alteración de la unidad funcional Bomba muscular
y sistema valvular provoca la aparición de la Hipertensión Venosa. Entre los distintos tipos de pletismografía, la pneumopletismografía se-
gún la técnica descrita por Nicolaides 4,5 es la que ha demostrado una
mayor utilidad para la cuantificación de la insuficiencia venosa crónica y
Bibliografía la eficiencia de la bomba muscular. Esta técnica se realiza en bipedestación
1. Jiménez Cossio JA. Epidemiología de las enfermedades vasculares periféricas. Angiología y permite determinar un sinfín de parámetros que analizan, básicamente,
1975;27:97. el tiempo necesario para que la extremidad alcance su volumen máximo,
2. Jiménez Cossio JA, et al. Estudio epidemiológico de las varices en una población laboral al recuperar la bipedestación tras el decúbito o tras haber “vaciado” las
de 512 individuos. Medicina Clínica 1977;69:415. venas ejercitando la bomba muscular. Hablamos así, de fracción de
3. Rougemont TA. Les varices des membres inferieuses. Étude épidémiologique chez 610 eyección, tiempo de llenado venoso, volumen residual, volumen o capaci-
vendeuses et ouvrieres. Evaluation de quelques facteurs étiologiques. Lausana: Tesis dad venosa máxima 6 . El índice de llenado venoso (VFI) se considera una
Doctoral, 1973. cuantificación del reflujo7 y se define como el cociente entre el volumen de
4. Varela Irijoa F. Estudio epidemiológico vascular. Análisis de 700 varones, Incidencia de sangre que llena la extremidad al incorporarse del decúbito (Volumen
las varices. Angiología 1986;38:245-67. venoso) y el tiempo requerido para alcanzar el 90% de este llenado
5. Gesto Castromil R, Grupo Detect-IVC, García JJ. Encuesta epidemiológica realizada en (tiempo de llenado venoso).
España sobre la prevalencia asistencial del IVC en Atención Primaria. Estudio Detect-
Valores de VFI superiores a 7 ml/s mostraron una sensibilidad del 73%
IVC. Angiología 2001;53:249-60.
y un 100% de valor predictivo positivo en la identificación del reflujo
6. Federative International Committee on Anatomical Terminology. Terminología Anatómica.
Stuttgart: Thieme, 1998.
venoso identificado con flebografía descendente, sin embargo, en casos
de oclusión venosa proximal, el VFI infravalora el grado de reflujo8 .
7. Caggiati A, et al. Nomenclature of the veins of the lower limbs: An international Clínicamente, valores con VFI superiores a 3 ml/s permitieron discrimi-
interdisciplinary consensus statement. J Vasc Surg 2002;36:416-22.
nar con un VPP del 96% entre piernas con insuficiencia venosa y pier-
nas normales 9 .
La fotopletismografía, aunque ha sido una de las modalidades más usa-
Exploración hemodinámica en la IVC das, demostró hace tiempo que no pasaba de ser un test cualitativo, dada
la imposibilidad de un adecuado calibrado y la falta de correlación con la
R. Vila. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular presión venosa ambulatoria10 .
Correspondencia: Ramon Vila. Hospital Universitari de Bellvitge De todas maneras, la falta de información anatómica, la imposibili-
Feixa Llarga, s/n - 08907 L'Hospitalet (Barcelona) dad de discriminar correctamente la insuficiencia valvular profunda
de la superficial, a pesar de una correcta utilización de torniquetes 11 ,
y la sencillez y facilidad del examen con Eco-Doppler han motivado
Introducción
que las técnicas pletismográficas hayan quedado en desuso y se em-
Los estudios no invasivos de la patología venosa se dirigirán a detectar y pleen únicamente en caso de no disponer de Eco-Doppler o cuando se
cuantificar la existencia de cambios de volumen, obstrucción o reflujo desea cuantificar numéricamente la IVC en el contexto de un ensayo
ligados a la insuficiencia venosa y a definir la localización anatómica de clínico 12 .

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III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Doppler continuo venas del plexo sóleo y gastrocnemio, la sensibilidad disminuye hasta el
73%13 . Ello se debe fundamentalmente al pequeño calibre de las venas a
El papel del doppler continuo en el diagnóstico de la trombosis venosa ha este “nivel” y su dificultad para apreciar la compresibilidad completa
quedado relegado a un segundo plano tras la aparición del Eco-Doppler. como signo directo de la presencia de un trombo.
Sin embargo en manos experimentadas consigue una fiabilidad próxima
al 90% en el diagnóstico de trombosis venosas proximales. Entre sus El signo más directo y fiable, es la imposibilidad de colapso completo de
limitaciones destacan la imposibilidad de explorar las venas profundas las paredes venosas cuando se comprime la misma con la sonda ecográfica
de las piernas (femoral profunda, venas gastrognemias, etc.) y de detectar en proyección transversal. En ocasiones es posible visualizar directamen-
anomalías anatómicas como el desdoblamiento de la vena poplítea o de te el trombo intraluminal e incluso valorar subjetivamente su antigüedad
la femoral superficial que pueden llevar a un diagnóstico erróneo de según su grado de ecogenicidad. Con Eco-Doppler también es posible
permeabilidad. valorar las características del flujo venoso que en condiciones normales
es detectable espontáneamente en las grandes venas, esta modulado por
La utilidad del doppler continuo en la insuficiencia venosa crónica se los movimientos respiratorios y aumenta con la compresión de masas
limita a la valoración “grosera” de la existencia de reflujo, ya que solo nos musculares distales. La pérdida de alguna de estas características es un
permitirá descartar su existencia, es decir que si detectamos reflujo en signo indirecto que nos permitirá completar el diagnóstico de trombosis
una encrucijada venosa no podremos saber que válvulas son las disfuncio-
venosa (Figuras 1 y 2).
nantes y necesitaremos el eco-doppler para localizar la insuficiencia,
pero cuando no registremos flujo retrogrado si que podremos afirmar que El Eco-Doppler es el único procedimiento no invasivo capaz de suminis-
todas las válvulas del sector funcionan adecuadamente. trar información topográfica y hemodinámica precisa de la circulación
venosa de las EEII a tiempo real. En el estudio de la insuficiencia venosa
crónica permite mostrar “in vivo” los cambios que se producen ante dife-
Eco-Doppler rentes maniobras que simulan el comportamiento fisiológico de la circu-
El Eco-Doppler es la exploración no invasiva que, en el momento actual lación venosa.
aporta la mayor información sobre la patología venosa tanto aguda (trom-
El examen con Eco-Doppler para la detección del reflujo venoso deberá
bosis venosa, TVP) como crónica (varices y secuela postrombótica).
realizarse inexcusablemente con el paciente en ortostatismo ya que es la
Ante la sospecha de trombosis venosa profunda, en ausencia de otras única manera de valorar la función de las válvulas bajo la carga de una
causas clínicas evidentes, el Eco-Doppler constituye una prueba bási- columna de presión hidrostática adecuada, o mejor dicho real. Esta pre-
ca y esencial. Su realización urgente permite la anticoagulación inme- sión hidrostática es el principal mecanismo que consigue el cierre de los
diata con heparina de bajo peso molecular o heparina sódica, orien- velos valvulares y si exploramos al paciente en decúbito es imposible
tando correctamente el caso clínico y evitando ingresos y costes inne- saber, tanto si no se cierran por falta de presión, como si el reflujo no
cesarios. aparece precisamente porque la presión es baja.
Diferentes estudios comparativos con la flebografía han demostrado la El estudio con Eco-Doppler de la insuficiencia venosa ha permitido sentar
fiabilidad del Eco-Doppler en el diagnóstico de la TVP utilizando la las bases para un tratamiento conservador de la insuficiencia venosa
flebografía como referencia cuando se trata de valorar sectores venosos superficial que en ocasiones, como la cura CHIVA 14-19 (Cura Conservado-
proximales (venas femorales, poplíteas y grandes venas proximales del ra Hemodinámica de la Insuficiencia Venosa Ambulatoria) utiliza como
sóleo y gastrocnemio), obteniendo una sensibilidad del 96% y especifici- estrategia la actuación sobre los elementos hemodinámicos que determi-
dad del 98%. Sin embargo, cuando la TVP se encuentra limitada a las nan la aparición de las varices. Esta cartografía venosa garantiza un buen

Figura 1. Trombosis de venal femoral común, Figura 2. Registro de flujo continuo, sin modulación respiratoria,
la vena está totalmente ocupada por trombo. en vena femoral como signo indirecto de TVP.

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conocimiento morfológico y hemodinámico de la insuficiencia venosa y del sistema valvular. Es importante destacar que esta maniobra no
permite la racionalización del tratamiento. Ante una eventual indicación solamente comprueba la función de las válvulas femorales, sino que
quirúrgica, resulta pues imprescindible el estudio previo con un Eco- al detener bruscamente el flujo permite comprobar también la efica-
Doppler venoso. cia de las válvulas poplíteas, incluso con femorales competentes.
El estudio hemodinámico de pacientes que hayan sufrido una trombosis – Maniobra de Paraná, definida por Cl. Franceschi, consiste en conse-
guir reproducir la onda de flujo que genera la contracción muscular,
venosa estará dirigido a:
es decir aquella que produce la propia bomba muscular. Para ello
– En el estadio inicial: utiliza la contracción isométrica que tiene lugar, por mecanismo
- Controlar la extensión del proceso trombótico. reflejo propioceptivo, al empujar levemente al paciente e
inestabilizarle. Con esta maniobra exploraremos la vena poplítea
– En fases tardías:
colocando al paciente de espaldas a nosotros y empujándole leve-
- Valorar la recanalización y mente hacia delante mientras monitorizamos el flujo en la vena. La
- detectar la aparición de incompetencia valvular. contracción muscular generará flujo anterógrado. Si el mecanismo
valvular funciona correctamente, con la relajación muscular cesara
Control de la extensión del trombo el flujo, pero si es incompetente se producirá flujo retrogrado. La
misma maniobra puede realizarse también sobre la vena femoral,
El examen consiste en repetir la exploración inicial diagnóstica de la colocando al paciente de cara y empujándole lateralmente mientras
trombosis venosa para detectar la oclusión de nuevos segmentos. Ello es monitorizamos el flujo en dicha vena.
simple en sectores proximales y casi impracticable para el sector
infrapopliteo. La exploración de las venas perforantes merece aquí una mención espe-
cial, ya que la maniobra de Paraná, realizada sobre ellas, nos permitirá
Raramente se realiza y estaría indicada solamente en casos de empeora- valorar si existe reflujo y cuando se produce. Como es sabido, el flujo de
miento clínico o en el contexto de un ensayo clínico. las venas perforantes se dirige de las venas superficiales hacia las profun-
das. Cuando sus válvulas no funcionan correctamente es posible que el
flujo se dirija del sistema profundo al superficial con la contracción mus-
Valoración de la recanalización del trombo
cular (sístole) pero que se invierta o “normalice” con la relajación muscu-
La recanalización o reapertura de un canal venoso en el trayecto ocluido lar (diástole). Esta condición es la que denominamos flujo retrogrado en
se produce en la mayoría de casos, al menos parcialmente. Excepto en el sístole. También puede darse el caso de que el flujo en las perforantes se
caso de la vena femoral superficial que puede permanecer largo tiempo dirija del sistema profundo al superficial tanto en sístole como en diástole
ocluida, sobre todo si el drenaje por femoral profunda es bueno. y es solamente en estos casos, en los que podemos considerar que la
perforante ha perdido completamente su función y esta sobrecargando el
La exploración se realizará preferentemente con el paciente de pie y se
sistema superficial.
explorarán los diversos segmentos que se hallaban trombosados, en bús-
queda de compresibilidad y reaparición de flujo espontáneo o con la No fisiológicas
compresión distal. Son aquellas en las que la generación del flujo se consigue con la compre-
sión externa de las masas musculares por encima o por debajo del seg-
Estudio de la incompetencia valvular mento explorado. Es una maniobra sumamente sencilla que permite ir
explorando la vena segmento a segmento, pero que debe interpretarse con
La expresión hemodinámica de la incompetencia valvular se centra en la cautela ya que no reproduce una condición normal en la marcha.
aparición del reflujo venoso, es decir flujo de sentido inverso que se aleja
del corazón, en el segmento explorado. Numerosos autores han intentado estandarizar e incluso cuantificar el
reflujo que se produce con estas maniobras, sin embargo la utilidad de
La incompetencia valvular aparecerá en algún segmento en alrededor del ello es bastante dudosa dado que partimos de un flujo no “fisiológico” y
60% de los pacientes que hayan presentado una trombosis venosa de los por más que lo sofistiquemos y midamos nunca llegará a convertirse en
grandes vasos de los miembros inferiores. algo que realmente sucede en la pierna al andar.
El examen con Eco-Doppler para la detección del reflujo venoso deberá Tras esta revisión básica de la exploración de la insuficiencia venosa
realizarse inexcusablemente con el paciente en ortostatismo ya que es la profunda, es preciso destacar nuevamente que la existencia de incompe-
única manera de valorar la función de las válvulas bajo la carga de una tencia valvular no se asocia necesariamente a la aparición del síndrome
columna de presión hidrostática adecuada, o mejor dicho real. Esta pre- clínico y además, que existen condiciones fisiológicas en las que el siste-
sión hidrostática es el principal mecanismo que consigue el cierre de los ma venoso de los miembros puede no ser capaz de cumplir su función a
velos valvulares y si exploramos al paciente en decúbito es imposible pesar del correcto funcionamiento del sistema valvular. Tal condición se
saber, tanto si no se cierran por falta de presión, como si el reflujo no produce por ejemplo en la mujer embarazada, o en los lugares con pre-
aparece precisamente porque la presión es baja. sión atmosférica especialmente baja.
Así pues, con el paciente de pié procederemos a examinar de arriba abajo Por último hay que destacar la importancia de que la exploración
los diferentes segmentos venosos de la extremidad. Para detectar la exis- venosa de los miembros inferiores se realice siempre de las dos pier-
tencia de reflujo podemos realizar dos tipos de maniobras. nas, a no ser que exista alguna razón especifica para no hacerlo así.
Fisiológicas Las razones para explorar las dos piernas son múltiples, de una parte
no debemos olvidar que se trata de pacientes que ha sufrido un episo-
Son aquellas que reproducen el flujo tal como se produce en condiciones
dio trombótico y en una fase inicial tienen mayor riesgo de repetirlo en
naturales, y son, básicamente:
la misma o en la otra extremidad. Por otra parte la comparación entre
– Maniobra de Valsalva, con la cual el aumento de la presión abdomi- una y otra extremidad puede ser de gran ayuda a la hora de interpretar
nal se transmite a los grandes vasos y permite comprobar la eficacia la exploración.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 101


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Bibliografía hacia el corazón, adaptado a las necesidades de drenage de los tejidos,


termorregulación y reserva hemodinámica, con independencia de la posi-
1. Langeron P, Harle J. Détection des thromboses veineuses aigües par la plethysmographie.
Possibilités et limites. J Mal Vasculaires 1989;14 suppl B:52-5.
ción y actividad. La manifestación más característica es la hipertensión
venosa, que puede ser aguda (trombosis venosa) o crónica 1 .
2. Christopoulos D, Nicolaides An, Szendro G. Venous reflux: quantification and correlation
with the clinical severity of chronic venous disease. Br J Surg 1988;75(4):352-6. Las varices son la parte visible de una insuficiencia venosa superficial.
3. Christopoulos D, Nicolaides An, Szendro G, Irvine AT, Bull ML. Air plethismography Son venas dilatadas y tortuosas del sistema venoso superficial de las
and the effect of elastic compression on venous hemodynamics of the leg. J Vasc Surg extremidades inferiores.
1987;5(1):148-59.
4. Bays RA, Healy DA, Atnip RG, Neumyer M, Thiele BL. Validation of air plethysmography
Este término engloba una serie de síndromes complejos en cuanto a su
and duplex ultrasonography in the evaluation of severe venous stasis. J Vasc Surg 1994; clasificación clínica y ha dado lugar a múltiples intentos de conseguir una
20(5):721-7. clasificacion clínica de la insuficiencia venosa crónica (IVC) lo más útil,
5. Christopoulos D, Nicolaides An. Noninvasive diagnosis and quantification of popliteal práctica y completa posible2-5.
reflux in the swollen and ulcerated leg. J Cardiovasc Surg 1988;29(5):535-9.
6. Hosoy Y, Yasuhara H, Miyata T, Komiyama T, Onozuka A, Shigematsu H. Comparison Clasificación CEAP
of near-infrared spectroscopy with air plethysmography in detection of deep venous
thrombosis. International Angiology 1999;18(4):287-93. En el año 1994 estos problemas fueron abordados por el American
7. Harada RN, Katz ML, Comerota A. A non-invasive test to detect “critical” deep venous Venous Forum una convención organizada por el Straub Foundation en
reflux. J Vasc Surg 1995;22(5):532-7. Maui, Hawai, USA 6 . Este comité realizó un documento de consenso para
8. Ting AC, Cheng SW, Wu LL, Cheung GC. Air plethysmography in chronic venous la clasificación y gradación de la insuficiencia venosa crónica basado en
insufficiency: clinical diagnosis and quantitative assessment. Angiology 1999;50(10):831- las manifestaciones clínicas (C), factores etiológicos (E), distribución
6. anatómica (A) y hallazgos fisiopatológicos (P) denominada clasificación
9. Nicolaides An, Miles C. Photopletismography in the assessment of venous insufficiency. CEAP (Tablas 1-5). Su objetivo era crear una clasificación que se pudiera
J Vasc Surg 1987;5(3):405-12. promulgar en todo el mundo, hecho que se ha conseguido como así lo
10. Holmgren K, Jacobson H, Johnson H, Lofsjogard-Nilsson E. Thermography and demuestran la publicación en 25 revistas y libros en 8 idiomas. Aunque
plethismography, a non invasive alternative to venography in the diagnosis of deep vein en constante revisión y con múltiples inconvenientes, esta clasificación es
thrombosis. J Int Med 1990;228(1):29-33. la propuesta por la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular,
11. Van Bemmelen PS, Mattos MA, Hodgson KJ, Barkmeier LD, Ramsey DE. Does air siendo en la actualidad la más usada.
plethysmography correlate with duplex scanning in patients with chronic venosus
insufficiency? J Vasc Surg 1993;18(5):796-807. En el 1997 un grupo de trabajo europeo creó la European Phlebological
12. Akesson H, Brudin L. Venous strain-gauge plethysmography - Reference values.
File una base de datos constituida por 49 angiólogos procedentes de 9
International Angiology 1996;15(3):268-71. países europeos que incluía una exhaustiva muestra de 872 pacientes
13. Comerota AJ, Katz ML, Hashemi HA. Venous duplex imaging for the diagnosis of acute
durante 6 meses. El análisis de los resultados evidenció que la consisten-
deep venous thrombosis. Haemostasis 1993;23(Suppl 1):61-71. cia externa de la clínica de la clasificación CEAP (C) era correcta mientras
su consistencia interna se mostraba pobre. Este equipo también estudió
14. Franceschi Cl. Théorie et practique de la cure conservatrice et hémodynamique de
l'insuffisance veineuse en ambulatoire. Précy-sous-Thil: Armançon Ed, 1998. la reproducibilidad de la clase C hallando que este aspecto en el contexto
15. Franceschi Cl. The conservative and hemodynamic treatment of ambulatory venous
insufficiency. Phlebologie 1989;42(4):567-8. Tabla 1
16. Franceschi Cl. La Cure Hémodynamique de l'insuffisance Veineuse en Ambulatoire
(CHIVA). J Mal Vasc 1992;17:291-300. – C = Clínica
– E = Etiología
17. Fichelle JM, Carbone P, Franceschi Cl. Resultats de la cure hemodynamique de
– A = Anatomía
l'nsuffisance Veineuse en Ambulatoire (CHIVA). J Mal Vasc 1992;17(3):224-8.
– P = Phisiopatología
18. Cappelli M, Molino Rova R, Ermini S, Turchi A Bono G, Franceschi Cl. Comparaison
entre cure CHIVA et stripping dans le traitement des veines variqueuses des membres
inferieurs: suivi de 3 ans. J Mal Vasc 1996;21(1):40-6. Tabla 2
19. Zamboni P, Marcellino MG, Cappelli M, Feo CV, Bresadola V, Vasquez G, et al.
– Clínica ( C ): asintomático (a) y sintomático (s)
Saphenous vein sparing surgery. Principles, techniques and results. J Cardiovasc Surg
- Clase 0: sin signos visibles ni palpables de enfermedad venosa
Apr 1998;39(2):151-62.
- Clase 1: telangiectasias o venas reticulares
- Clase 2: varices
- Clase 3: edema
Clasificación CEAP. Criterios - Clase 4: cambios cutáneos asociados a IVC
4 a: pigmentación o eczema
para selección/manejo de prioridades 4 b: lipodermatoesclerosis o atrofia blanca
- Clase 5: cambios cutáneos con úlcera cicatrizada
O. Lapiedra. Unidad de Angiología Cirugía Vascular y Endovascular - Clase 6: cambios cutáneos con úlcera activa
Correspondencia: O. Lapiedra. Hospital Gral de l'Hospitalet
Consorci Sanitari Integral. Av. Josep Molins, 29-41 Tabla 3
08906 l'Hospitalet de Llobregat - josep.lapiedra@sanitatintegral.org – Etiología (E)
- Ec: congénita
Introducción - Ep: primaria
- Es: secundaria de etiología conocida, como la secuela postrombótica
Se define la insuficiencia venosa como la incapacidad de una vena para o la postraumática
conducir un flujo de sangre en dirección centrípeta, es decir en dirección

102 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa I

intraobservador era bueno (85%) y en el interobservador la reproducibi- so la división de la clase C en dos subclases para definir mejor la severi-
lidad era menor (47%). dad de los cambios cutáneos observados en la insuficiencia venosa cró-
nica. En efecto la lipodermatoesclerosis y la atrofia blanca predicen el
La clasificación CEAP introdujo algunas modificaciones durante el 14TH desarrollo de úlceras en mayor medida que otros signos clínicos.
World Congress of the Union Internationale de Phlebologie, así se propu-
Durante este consenso también se definieron algunos aspectos relaciona-
dos con la terminología con la finalidad de unificar criterios en este
Tabla 4 sentido7 (Tabla 6).
– Anatomía (A): muestra la localización de la insuficiencia y sus correspondientes
subdivisiones Comentarios sobre la clasificación CEAP
- As: venas del sistema superficial
1. Telangiectasias, venas reticulares, safena interna Esta clasificación aunque es la más utilizada no está exenta de controver-
2. En muslo sias y limitaciones, por tanto diversos autores han hecho distintas críticas
3. En pantorrilla y aportaciones a la misma 8,9.
4. Safena externa
5. No safenas La clasificación de la CEAP esta elaborada para clasificar piernas y no
- Ad: venas del sistema profundo pacientes, esto limita la valoración global del mismo con factores como la
6. Cava inferior edad, sexo, patología asociada, etc. Únicamente puede aplicarse en pier-
7. Ilíaca común nas con enfermedad venosa; si no existe evidencia de esta patología des-
8. Ilíaca interna pués de la exploración con dúplex u otras exploraciones, automáticamente
9. Ilíaca externa se excluye de esta clasificación, atribuyendo los síntomas que presentan
10. Gonadal, ligamento ancho estos pacientes a otro tipo de problemas distintos a la enfermedad venosa.
11. Femoral común
12. Femoral profunda Esta clasificación precisa de exploraciones objetivas como el Eco-Doppler
13. Femoral superficial y por lo tanto está sujeta a la falta de estandarización de los test que se
14. Poplítea utilizan y a la escasa uniformidad en los laboratorios de Cirugía Vascular.
15. Tibial anterior, posterior y peronea Afortunadamente con la Acreditación del Capítulo de Diagnóstico no
16. Venas del gastrocnemio, del sóleo, otras Invasivo de los distintos laboratorios de Cirugía Vascular, creemos estar
- Ap: venas perforantes en el camino correcto para su unificación.
17. De muslo
18. De pantorrilla A su vez la CEAP es una clasificación compleja, debido principalmente al
detalle y a los subgrupos que se utilizan, ello la hace más exacta pero
también más engorrosa su práctica.
Tabla 5
A pesar del esfuerzo por establecer la diferenciación entre venas reticulares
– Fisiopatología (P):
y varices existe todavía en muchos casos hay confusiones en su clasifica-
- Pr: reflujo
- Po: obstrucción ción. Potter en 1995, definió las venas reticulares como venas
- Pro: reflujo y obstrucción subdérmicas inferiores a 4 mm de diámetro y no palpables, a diferencia
de las varices y que se ha modificado posteriormente como ya se ha
Ejemplo: C2 s,p,s,r (paciente con varices tronculares sintomáticas esenciales por reflujo) citado. Pese a ello, existe con frecuencia una discrepancia entre los casos
C0 y C1 y C1 y C2, según autores 9 .
Tabla 6
Además a nivel anatomopatológico, en las úlceras, no existe relación
– Telangiectasia: confluencia de varículas intradérmicas <1 mm permanentemen- entre la magnitud del infiltrado y la localización de los monocitos en el
te dilatadas. endotelio, así como de los macrófagos en la pared de los vasos, con la
– Venas reticulares: venas intradérmicas permanentemente dilatadas con un diá- severidad o duración de la insuficiencia venosa. Así pues, la clasificación
metro >1 mm y < 3 mm. puede describir la situación clínica pero no correlacionarla con los ha-
– Venas varicosas: venas subcutáneas permanentemente dilatadas con diámetro >
llazgos histopatológicos.
3mm en bipedestación.
– Corona flebectática: telangiectasias en formación helicoidal, intradérmicas en la Entre las lesiones secundarias, no se distingue entre las lesiones postfle-
cara medial y lateral del pie. Puede ser el primer signo insuficiencia venosa bíticas o postraumáticas.
avanzada (el lugar de la corona en el apartado C es controvertido).
– Edema: Incremento perceptible del volumen de líquido en el tejido subcutáneo En un estudio realizado en Escocia en 199910 , se observó una escasa
caracterizado por fóvea durante la presión. correspondencia entre los síntomas y la gravedad de las venas varicosas,
– Pigmentación: pigmentación oscura de la piel, normalmente en la región del en especial en los varones. Estos autores también han observado que la
tobillo, que se puede extender a la pierna y al pie. prevalencia de síntomas según la edad no presenta diferencias en función
– Eczema: erupción eritematosa de la piel. de la existencia y la gravedad de las varices.
– Lipodermatoesclerosis: induración crónica localizada de la piel en ocasiones
asociada a retracción de la misma. Según otro estudio, el deterioro de la calidad de vida sólo se manifiesta en
– Hipodermitis: forma aguda de lipodermatoesclerosis caracterizada por enrojeci- pacientes con venas varicosas que presentan trastornos venosos simultá-
miento difuso de la piel e inflamación aguda por neos como el edema venoso o las úlceras11 .
– Atrofia blanca: áreas de piel circunscritas, a menudo circulares, de coloración
blanca y atróficas, rodeadas por manchas de capilares dilatados y en algunas
ocasiones hiperpigmentación. Criterios de selección
– Úlcera venosa: defecto crónico de la piel, que puede curar espontáneamente,
Un grupo de profesionales médicos nombrados por la Sociedad Española
causado por insuficiencia venosa crónica.
de Angiología Cirugía Vascular y Endovascular, en colaboración con la

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 103


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Dirección General de Atención Primaria y Especializada del Insalud12 , Tabla 7


elaboró una serie de recomendaciones para la inclusión en la lista de
Estado clínico Lesiones
espera quirúrgica de pacientes con varices. Se pretendía con ello la intro-
ducción en estas listas únicamente de varices verdaderamente quirúrgi- Estadio I: asintomático. Telangiectásias, varículas
cas con criterios homogéneos y evitar por otra parte la re-entrada precoz Importancia estética Varicosidades cutáneas,
por recidiva o tratamiento incompleto. Recomendaban que esta patología Venas varicosas localizadas.
fuera valorada y tratada por especialistas con formación específica. Estadio II: sintomáticas Varices tronculares
Cabe destacar que para un diagnóstico correcto se aconsejaba incluir un Ortostatismo (safenas / perforantes)
Varices de mediano y gran calibre
estudio con Doppler, con frecuencia un estudio con Eco-Doppler y en
Edema
ocasiones una flebografía.
Estadio III: lesiones tróficas cutáneas Pigmentación
Estas recomendaciones citaban unos: Atrofia blanca
Induración
Criterios de exclusión
1º. La edad como criterio de exclusión relativo. No se aconsejaba la Estadio IV: úlcera flebostática Ulceraciones
intervención por encima de los 70 años.
Creemos que este criterio ha sido ampliamente superado y debe
Se aconseja la inclusión en lista de espera quirúrgica a partir del grado
correlacionarse con el estado de cada paciente, su patología aso-
II.
ciada, clínica y técnica que se va a utilizar.
2º. Linfedema, se valoraba que podía empeorar con la cirugía.
Consideramos que este no es un criterio absoluto y debe valorarse Manejo de prioridades
si existe además del linfedema una patología venosa troncular
asociada. Prioridades médicas
Valoración mediante la puntuación por síntomas para establecer una
3º. Varices secundarias a angioplástias o fístulas arteriovenosas post- prioridad asistencial.
traumáticas.
Deberíamos valorar el tipo de angiodisplasia y en casos de fístulas Puntuación clínica y del grado invalidante de la IVC en la clasificación
arteriovenosas éstas podrían tratarse antes con otras técnicas. de la CEAP.
4º. Pacientes cuya clínica puede ser atribuida a otra patología coadyu- – Puntuación clínica:
vante (patología osteoarticular, radicular, etc). - Dolor: 0, ausente / 1, leve / 2, Intenso / ---
5º. Obesidad mórbida. - Edema: 0, ausente / 1, leve / 2, moderado / ---
6º. Varices secundarias a un síndrome postflebítico. - Claudicación venosa: 0, ausente / 1, leve / 2, moderada / ---
Aunque estamos de acuerdo en principio con esta contraindica- - Pigmentación: 0, ausente / 1, localizada / 2, extensa / ---
ción, creemos que en casos concretos, y con un estudio funcional - Lipodermatoesclerosis: 0, ausente / 1, localizada / 2, extensa / ---
previo, pueden indicarse correcciones quirúrgicas de las varices.
– Úlceras
7º. Varices cuya indicación se sustente exclusivamente por motivos
- Tamaño de úlcera: 0, no / 1 < 2 cm diámetro /
estéticos.
2, > 2 cm diámetro / ---
8º. Determinadas situaciones generales del paciente: cardiopatías - Duración de úlcera: 0, no / 1, < 3 meses / 2, > 3 meses / ---
moderadas, severas, coagulopatías, neoplasias y enfermedades
- Recurrencia de úlcera: 0, no / 1, una vez /
infecciosas en curso.
2, más de una vez / ----
En general, todos aquellos pacientes con riesgo quirúrgico importante - Número de úlceras: 0, no / 1, una / 2, múltiples / ---
derivado de otra patología asociada. No debemos olvidar que estamos
hablando de una patología “benigna”. Valoración total
Es frecuente también una discordancia entre los síntomas por la dificul-
Criterios de inclusión tad del propio paciente en su descripción. Es realmente difícil para los
– Se recomienda que para su inclusión en una lista de espera quirúr- enfermos discernir entre dolor, pesadez de piernas, quemazón o
gica de varices, cada paciente debe haber sido valorado por un parestesias13 . Con frecuencia los síntomas encontrados no tienen una
especialista en Angiología y cirugía vascular, realizándose causa venosa.
sistemáticamente un estudio hemodinámico básico (velocimetría
doppler).
Otras prioridades sociales
Creemos que el estudio no invasivo debería realizarse en todos los
En la actualidad consideramos en la priorización de las listas de espe-
casos y mediante ecodoppler.
ra, otros factores que pueden inducir a la discusión como:
Se cita que la entrada en una lista de espera quirúrgica no debe
suponer sistemáticamente la baja laboral. Esta deberá evaluarse en 1º. Responsabilidad del paciente en el ámbito familiar.
cada caso de forma individualizada. 2º. Pacientes que están de baja laboral por su incapacitación produci-
da por su patología venosa.
3º. Personas pendientes de una nueva actividad laboral o examen que
Indicaciones de entrada en lista de espera quirúrgicas
no puede superarse sin haberse resuelto previamente su problema
Para la inclusión en lista de espera, aconseja la clasificación de la Tabla 7. vascular.

104 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa I

4º. Enfermos en lista de espera de otra intervención quirúrgica que no 6. Porter JM, Moneta GL. International Consensus Comité on Chronic Venous Disease:
puede ser realizada sin antes haberse realizado su intervención de Reporting standards in venous disease: an update. J Vasc Surg 1995;21:635-45.
varices. 7. Partch H, Allegra C, Cornu-Thenard JF, Uhl P, Carpentier PL, Antignani J, et al. The
5º. Otras circunstancias personales que nos obliga a modificar el or- CEAP Classification at the 15 TH World Congress of the Union Internationale de
Phlebologie. Phlebolymphology 2001;34:26-7.
den de estas listas.
8. Allegra C, Antiguani PL, Bergen SS, et al. Regarding “the C” of CEAP: suggested
definitions and refivements: an International Union of Phlebology conference of experts.
Bibliografía J Vasc Surg 2003;37(1):129-31.

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París: 1996;19. of varicose veins? Edimburg Vein Study cross-sectional population survey. BMJ
2. Widmer LK. Classification of venous disorders. Peripheral venous disorders. Bern: 1999;318:353-6.
Hans Huber, 1978. 11. Kroeger K, Ose C, Rudofsky G, Hirche H. Differences in patients with and without small
3. Sytchev GG. Classification of chronic venous disorders of the lower extremities and cutaneous veins. Phlebololymphology 2001;34:18.
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4. Porter JM, Rutherford RB, Clagget CP, et al. Reporting standards in venous disease. J ciones para la inclusión e lista de espera quirúrgica de pacientes con varices.
Vasc Surg 1988;8:172-81. Sociedad Española de Angiología Cirugía Vascular y Endovascular.
5. Moneta GL. Regarding “the C” of CEAP: suggested definitions and refinements: and 13. Marinel·lo J, Gesto R. Patología venosa. Guía de Diagnóstico y Tratamiento del
International Union of Phlebology Conference of experts. J Vasc Surg 2003;37(1):224-5. Capítulo Español de Flebología. FAES: Luzan 5, SA de Ediciones, 2003.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 105


Mesa redonda
III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

9:50 - 10:40 h. Mesa II

Atención Primaria y Atención especializada


(hospitalaria). Un tándem dispuesto
a entenderse
Moderador: JR. Escudero, X. Bayona
Ponentes: A. Giménez Gaibar, Francesc Fàbrega, M. Merino

Presentación de la mesa (I) 2. ¿Quién debe prescribir y controlar los tratamientos médicos (fármacos
y compresión elástica)?
JR. Escudero. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular 3. ¿Quién debe solicitar o interpretar las exploraciones hemodinámicas,
especialmente el ecodoppler venoso?
Correspondencia: JR. Escudero. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau
4. Entre las soluciones:
Sant Antoni Mª Claret, 167 - 08025 Barcelona
a. ¿Deberían incluirse la creación de plazas de especialista en la
asistencia 1ª? ¿Por qué hay Cardiólogos y no Angiólogos?
Introducción b. ¿Sería más lógico o factible que el Médico de Familia asumiera el
El hecho de que la especialidad de Angiología y Cirugía Vascular sea control de la patología venosa no quirúrgica?
médico-quirúrgica y la ausencia de especialista en la Asistencia primaria c. ¿Cómo obtendría los conocimientos suficientes en patología
provoca un desfase inusual en la atención al paciente vascular. vascular?
- Formación continuada
La necesidad de reprogramación de la atención de la patología vascular - Rotación por Cirugía Vascular de los MIR de Familia
es clara y urgente ya que, actualmente, no cumple los mínimos de calidad
exigida ni merecida. Los déficits se sitúan a los dos niveles asistenciales
objetos de la mesa redonda: La asistencia primaria y la asistencia espe-
cializada. Presentación de la mesa (II)
Las causas de estas deficiencias posiblemente estén agravadas por dos X. Bayona. Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria
circunstancias:
Correspondencia: Xavier Bayona. Centre d'Atenció Especialitzada
1. El volumen de visitas diarias que debe atender el médico de familia Servei d'Atenció Primaria. Baix Llobregat Centre
2. La gran prevalencia de la patología venosa Institut Català de la Salut. Bellaterra, 4 - 08940 Cornellà de Llobregat

Dado que es previsible que la incidencia y prevalencia de la enfermedad


La patología venosa, en cualquiera de sus presentaciones, da lugar a una
venosa se estabilice o aumente en un futuro, no queda más remedio que
elevada repercusión socioeconómica, y a un número de consultas a los
descubrir las causas y buscar soluciones que en mi opinión deberán de
profesionales de atención primaria que puede representar globalmente
ser básicamente tomadas por la administración sanitaria ya que obliga a
entre 1 y 4 de cada 10 motivos de consulta (dada la elevada prevalencia,
aumentar la inversión tanto económica como humana.
del 10 al 65% según diferentes autores). El usuario presiona al médico de
El paciente con patología venosa debe desplazarse a un hospital que es familia para que resuelva el problema que le angustia, y éste en primera
incapaz de cumplir sus propios objetivos o tareas (primeras visitas, estu- instancia, tras valorar las posibles alternativas suele iniciar un trata-
dios hemodinámicas, intervenciones quirúrgicas…) para obtener la pres- miento higiénico-postural e incluso farmacológico al que, en muchas
cripción de medias terapéuticas o la confirmación de la necesidad de un ocasiones, le sigue una interconsulta al cirujano ambulatorio de referen-
tratamiento flebotónico o incluso para realizar el diagnóstico diferencial cia (“de zona”), para que le ayude a decidir la conducta a seguir, siendo
de molestias en extremidades inferiores que con una frecuencia superior conscientes ambos, de que en caso de necesitar la evaluación del angiólogo
a la deseada acaban etiquetándose de etiología no vascular. hospitalario, la solución del problema, si lo tiene, puede demorarse por la
“lista de espera”. Es entonces cuando en la mente de los profesionales que
trabajan en atención primaria (especialistas y cabeceras) las preguntas
Objetivo clásicas reaparecen:
Entre otros aspectos que deberán salir durante el desarrollo de la mesa, 1. ¿Estamos derivando lo que debemos?
me gustaría que se debatieran los siguientes puntos:
2. ¿Son suficientes los dispositivos hospitalarios consultores de refe-
1. ¿Quién debe realizar la prevención y control de riesgo de la patología rencia?
venosa? 3. ¿Tienen que estar estos en el medio hospitalario?

106 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa II

4. Y quizás mucho más importante, ¿cómo priorizar aquellos que real- que presentan verdaderos síntomas venosos y podrían beneficiarse de un
mente pueden beneficiarse de una unidad de cirugía vascular? tratamiento. La prevalencia de reflujos valvulares superficiales fue simi-
lar en hombres y mujeres, siendo de un 30%, mientras que uno de cada
Probablemente la solución no pase por hacer unidades hospitalarias 5 hombres tuvo un reflujo valvular del sistema venoso profundo compa-
más potentes, sino por hacer más eficientes los recursos existentes, y todo rado con el 10% de mujeres.
ello pasa por una mejora en el feedback de comunicación que debe
establecerse entre los diferentes niveles asistenciales, convirtiéndonos a Se estima que en España hay entre 2,5 y 3 millones de pacientes con
los diferentes actores en colaboradores y no competidores, dejando a un varices y entre 250.000 y 300.000 úlceras venosas. Por otra parte, una
lado el tópico “el paciente es mío”, y pasando a incorporar el colaboracio- gran proporción de estos pacientes (hasta un 45%) sufren bajas labora-
nismo inteligente respetando las habilidades y competencias que en cada les por complicaciones secundarias a su proceso venoso, lo que supon-
medio deben de ser distintas y adecuadas al tipo de patología a resolver. drá un alto coste sanitario.
Como herramientas para operativizar el colaboracionismo son clásicos
la elaboración de protocolos conjuntos (profesionales de distintos nive- Se estima que el 75% de la actividad asistencial de un Servicio de
Angiología y Cirugía Vascular se realiza sobre esta patología, pero a pesar
les) y consensuados (los distintos profesionales se ponen de acuerdo),
de esta cifra, la mayoría de los pacientes con insuficiencia venosa crónica
también las sesiones clínicas conjuntas fuera del hospital, las jornadas
de trabajo y como no, además del teléfono potenciar las nuevas tecnolo- no llegan al especialista. Estos pacientes acuden en primer lugar al médi-
gías como el correo electrónico. co de Atención Primaria, que hace un primer diagnóstico y en función del
estadio evolutivo en que se encuentra el paciente y las posibilidades de
derivación de su área sanitaria, será remitido a un cirujano general o a un
especialista en cirugía vascular. Por dicho motivo, y dado el desconoci-
La patología venosa en atención miento que los especialistas teníamos de la situación epidemiológica real
especializada (hospitalaria) que existía en España, la Junta Directiva de la Sociedad Española de
Angiología y Cirugía Vascular coordinó una encuesta en la que se incluye-
ron 21.566 pacientes realizada por 1.068 médicos de Atención Prima-
A. Giménez Gaibar, E. González, J. Vallespín, J. Hospedales
Servicio de Angiología y Cirugía Vascular ria en 16 comunidades autónomas. Los resultados evidenciaron que un
68,6% de los participantes refirieron alguna manifestación clínica com-
Correspondencia: A. Giménez Gaibar. HC Parc Taulí patible con insuficiencia venosa, de los cuales un 39,3% indicaron algu-
Parc Taulí, s/n - 08208 Sabadell na de las manifestaciones como importante o grave. En este último grupo
de pacientes, un 48,3% contestaron que estas manifestaciones les había
La patología vascular más frecuente de nuestros días es, sin duda, la supuesto algún deterioro sobre la actividad diaria; incluso un 2,1% había
venosa, dicha patología afecta a una significativa proporción de la pobla- sufrido baja laboral, con una media de duración de 30 días, y un 1,9%
ción europea y se estima que consume alrededor del 2% del total del gasto había necesitado hospitalizarse (media de duración de 9 días). Un 73,7%
sanitario.
de los pacientes que habían presentado algún síntoma finalizaron el
La alta prevalencia clínica de la patología venosa acompañada del dete- estudio con una indicación de tratamiento.
rioro de la calidad de vida de las personas a las que afecta, ha hecho que
Recientemente se está realizando un macro-estudio prospectivo sobre
en los últimos años se haya promovido un importante avance en el cono-
costes sociales y económicos de la insuficiencia venosa crónica, en el que
cimiento de la historia natural, en el diagnóstico fisiopatológico y en las se evidencia que:
actitudes terapéuticas.
– Un elevado porcentaje de la población española con insuficiencia
Bajo el nombre de patología venosa se engloba un grupo importante de venosa crónica está sin diagnosticar.
enfermedades que se caracterizan por el desarrollo de una hipertensión
– Esta situación se podría agravar en los próximos años debido al
venosa en las extremidades inferiores. Las dos entidades principales cau-
santes de esta patología serán: aumento de prevalencia de esta patología en España, secundario al
envejecimiento de la población, el sobrepeso, el desempeño de pro-
– Insuficiencia venosa crónica: Indica la existencia de una disfunción fesiones que impliquen permanecer mucho tiempo de pie o sentado
en el sistema venoso de la extremidad inferior, cuyo punto de inicio o con exposición al calor, la vida sedentaria y la falta de ejercicio
es el reflujo venoso generado por la incompetencia valvular que físico.
eleva la presión a niveles patológicos.
Por todo lo dicho, la insuficiencia venosa crónica es una enfermedad
– Enfermedad tromboembólica venosa: Se trata de una patología que crónica con una alta incidencia en los Servicios de Angiología y Cirugía
puede manifestarse como trombosis venosa profunda o embolismo Vascular y que, por lo tanto, condicionará un alto porcentaje de recursos
pulmonar. Su incidencia se cifra en alrededor de los 130-160 casos dirigidos al diagnóstico y tratamiento de esta patología.
por 100.000 habitantes/año. La fragmentación del trombo formado
en el sistema venoso y su migración puede producir un embolismo Se calcula que en los Laboratorios de Diagnóstico no Invasivo Vascular,
pulmonar en la fase aguda o subaguda, pero posteriormente las los estudios venosos suponen entre un 40 y un 50% del total de explora-
posibles recurrencias de una trombosis venosa o las secuelas tras ciones hemodinámicas.
un episodio trombótico podrán generar un cuadro de insuficiencia
En la actualidad y según el Registro de la Sociedad Española de Angiología
venosa crónica de extremidades.
y Cirugía Vascular, la cirugía venosa supone un 42% del total de procedi-
En 1999, se publicó el “Edinburg Vein Study” que evidenciaba que alrede- mientos quirúrgicos en las unidades especializadas. La cirugía
dor de un 30% de la población tiene varices, un 5-10% sufren una reconstructiva, la derivativa y los procedimientos interruptivos venosos
insuficiencia venosa crónica y sobre un 1% tienen úlceras venosas abier- son una minoría simbólica, siendo la gran protagonista de la cirugía
tas o curadas. Este estudio analizaba que la relación entre síntomas, venosa la extirpación de las varices en sus diversas técnicas.
signos y reflujo venoso puede ser compleja, si bien el Eco-Doppler podría
Las listas de espera quirúrgicas en los Servicios de Angiología y Cirugía
ser de ayuda a la exploración clínica para identificar aquellos pacientes
Vascular es 10 veces más grande en la patología venosa que en la arterial,

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 107


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

siendo la cirugía de las varices la cuarta indicación quirúrgica más fre- ser tratamientos ambulatorios, que conllevan una reinserción tem-
cuente en España. prana a la vida activa previa del paciente. La CMA tiene la capacidad
de aumentar la eficacia del sistema ya que mantiene los resultados
Como vemos, de entre toda la patología venosa, las varices de los miem- clínicos con un menor consumo de recursos y coste unitario. Se
bros inferiores es la causa más frecuente por la que es consultado el calcula que la reducción del coste por proceso frente a la cirugía con
especialista, sin embargo, a pesar de esta alta tasa de asistencias, la
ingreso está entre un 25 y un 30%, puesto que aunque el coste de la
problemática que se desprende de ellas está lejos de ser resuelta por intervención es similar, estamos reduciendo el coste hotelero y de
distintos motivos: personal.
– La gran incidencia de este proceso constituye un reto para la sani- En los hospitales que disponen de CMA, los programas de ingreso de
dad, que debe destinar recursos de elevado coste para atender una corta estancia (< 72 horas) u hospitalización domiciliaria pueden
enfermedad banal, que mal tratada o dejada evolucionar puede pro- ser el complemento perfecto para aumentar el rendimiento de los
ducir un importante deterioro en los pacientes. servicios quirúrgicos, acortando de forma significativa la estancia
– Existe una continua búsqueda de procedimientos cada vez más eco- media de algunas patologías que requieren hospitalización. La posi-
nómicos, que pretenden mantener los estándares de resolución de bilidad de disponer de estos programas hará que seamos menos
objetivos terapéuticos. En estos últimos años han aparecido nuevas estrictos en la CMA, colaborando en: a) la reducción de las estancias
técnicas o tratamientos con bases fisiopatológicas dirigidos a ser preoperatorias al aprovechar los circuitos de la cirugía ambulatoria
menos invasivos y susceptibles de realizar bajo anestesia local y en y b) favoreciendo que los pacientes reacios al alta el mismo día o que
régimen ambulatorio, atacando exclusivamente a la parte del siste- precisen ingreso por motivos geográficos puedan entrar en este tipo
ma venoso afectada por la enfermedad. de actuación.
– Por otra parte, la aparente banalidad y las implicaciones estéticas – Los Hospitales de Día: Se trata de un dispositivo ambulatorio que
permite hacer controles y aplicar terapéuticas en pacientes subsidia-
del proceso varicoso, acarrea una falta de comprensión a la hora de
posibles complicaciones del tratamiento quirúrgico, obligando a rios de un ámbito hospitalario, pero sin necesidad de un interna-
buscar técnicas cada vez más sencillas, seguras y eficaces. miento completo de los mismos. Los hospitales de día presentan
como ventajas: un buen control de los riesgos del cuadro clínico y de
Pero además, todo ello viene ligado a que en los últimos años los hospi- los posibles efectos secundarios del tratamiento; una atención espe-
tales están sufriendo un profundo análisis de los procedimientos y técni- cializada; las curas tópicas de las lesiones podrán ser realizadas
cas que se venían realizando, tendiendo hacia una adecuación de la diariamente por enfermería habituada y entrenada en este tipo de
demanda asistencial a los recursos sanitarios, a través de una asistencia pacientes; y mejorar la calidad de vida del paciente, favoreciendo
de calidad a un coste razonable, para ello los profesionales sanitarios una atención integral del paciente que evite romper al máximo con su
deben revisar sus prácticas asistenciales y eliminar aquellas innecesarias entorno socio-familiar.
u obsoletas. Las unidades quirúrgicas deben pretender una asistencia por – La Hospitalización Domiciliaria: Permite disminuir la presión
niveles de cuidados, simplificando los procesos diagnósticos y terapéuti- asistencial en las áreas de hospitalización (ajustando y optimizando
cos, incrementando la actividad productiva de los servicios quirúrgicos y estancias medias hospitalarias), disminuir el riesgo de infección
aumentando la satisfacción del paciente. Esta última premisa se puede nosocomial, educar la autocura, favorecer la readaptación al medio,
alcanzar mediante una atención más personalizada del paciente, al que y asegurar una buena coordinación entre los equipos profesionales
se debe dar una mayor información, con la cual podrá elegir, decidir o que participan para conseguir una asistencia integral y continuada.
negociar la conveniencia o no de una actitud terapéutica tras considerar Los criterios de inclusión que se siguen en este dispositivo precisan:
su situación personal y social. residir en el área de referencia, un entorno sociofamiliar favorable,
Cada centro deberá tener bien definida su cartera de servicios, los crite- voluntariedad por parte del paciente y de la familia, establecimiento
rios de selección y evaluación de los pacientes, la rutinas intra y previo de unas patologías, criterios clínicos y trayectorias pactadas
extrahospitalarias, así como los criterios de alta y seguimiento ambulato- entre los servicios de Cirugía Vascular y Hospitalización domicilia-
rio. La tendencia actual de la medicina se dirige hacia unas actitudes ria. En la actualidad, los equipos de hospitalización domiciliaria no
quirúrgicas cada vez menos agresivas y paternalistas, creando unidades sólo dan soporte a procedimientos postquirúrgicos, sino que en
polivalentes que posibiliten al paciente una reintegración a su entorno y muchos centros están definidos protocolos y trayectorias de deriva-
vida social lo antes posible. Deberemos favorecer una estrecha interrelación ción desde las áreas de hospitalización, e incluso desde urgencias,
con la asistencia primaria, promocionando todos aquellos mecanismos de pacientes afectos de trombosis venosa de extremidades para con-
que signifiquen una continuidad asistencial sin rupturas, encaminadas a trol y tratamiento anticoagulante.
evitar dudas o incertidumbres a los pacientes o a los profesionales. Se Pero además, desde el punto de vista del tratamiento médico de la insufi-
hará necesaria la elaboración de protocolos de actuación basados en la ciencia venosa crónica, cabe destacar que alrededor de un 25% de los
evidencia científica, si bien la decisión sobre la hospitalización o no de un pacientes diagnosticados de insuficiencia venosa crónica no se les reco-
paciente debe seguir basada en la necesidad clínica y la seguridad. mienda ningún tipo de tratamiento. Los fármacos “flebotónicos” están defi-
Se han desarrollado diversos dispositivos en los hospitales que son una nidos por la administración sanitaria como “subgrupo farmacológico de
clara evidencia de la tendencia hacia una racionalización de los disposi- baja utilidad terapéutica”, pero su prescripción supone el 1,2% del volu-
men del mercado farmacéutico nacional. Significando el 2,23% de los
tivos y recursos, como son:
recursos destinados a farmacia por el Sistema Nacional de Salud, y el 7%
– La Cirugía Mayor Ambulatoria: En nuestra especialidad de Angiología del global de las ventas de los fármacos relacionados con el aparato
y Cirugía Vascular, los dos procedimientos principalmente implica- cardiovascular. A pesar de la valoración de estos fármacos por la Adminis-
dos para su práctica en distintos centros quirúrgicos ambulatorios tración, el grado de aceptación y prescripción por parte de Medicina Prima-
son la cirugía de las varices y los accesos vasculares para ria y especialistas en Angiología y Cirugía Vascular es elevado. Respecto a
hemodiálisis. Las distintas técnicas empleadas para la cirugía de la terapia compresiva, tan sólo se prescribe a uno de cada 4 pacientes,
varices (stripping, CHIVA, Muller, láser...) parecen competir no sólo cuando este tipo de terapia es la base del tratamiento de la insuficiencia
en resultados a corto-medio plazo, sino también en la posibilidad de venosa crónica y debería aplicarse a la práctica totalidad de los pacientes.

108 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa II

Por todo ello, el diagnóstico, control y tratamiento de la patología venosa aplicada por el médico de familia frente el inicio de síntomas por IVC es
en la atención especializada debe seguir evolucionando para llegar a una recomendar un tratamiento en un principio higiénico-postural, seguido y/
estandarización de derivaciones desde la asistencia primaria, una ade- o complementado de un tratamiento farmacológico con algún que otro
cuación de los recursos sanitarios y una optimización de los circuitos agente flebotrópico. La presión del paciente con el paso del tiempo au-
asistenciales a través del establecimiento de protocolos consensuados menta dado que la IVC persiste y/o progresa sin que aparentemente se
entre asistencia primaria y especializada. Dichos protocolos podrán va- lleve a cabo un tratamiento definitivo por parte del médico de cabecera. Si
riar de unas áreas a otras en función de la presión asistencial y la capa- a ello añadimos el impacto que el factor cosmético representa para las
cidad resolutiva de los distintos centros, siendo probablemente más uni- mujeres la presencia de varices desde su manifestación más simple, como
formes en aquellas patologías que requieren de una derivación urgente son las pequeñas arañas vasculares a las formaciones venosas dilata-
(trombosis venosas, varicorragias, úlceras infectadas...). Los especialis- das, es fácil comprender que el paciente solicite si no bien demande la
tas de Angiología y Cirugía Vascular hemos de implicarnos en la organi- consulta del “especialista” a su médico de cabecera.
zación y realización de programas de formación continuada en Atención
Primaria y en el establecimiento de estos protocolos de actuación-deriva- El próximo eslabón en nuestra pirámide asistencial es el soporte que los
ción para poder mejorar los aspectos diagnósticos de la insuficiencia Centros de Atención Especializada o CAE ponen a disposición del usuario
venosa crónica y su tratamiento en función de su estado evolutivo. y del médico de familia dentro de la asistencia primaria. Cuando el médi-
co ce cabecera cree estar ante un paciente con IVC con clara indicación
quirúrgica lo remite directamente a un centro hospitalario de referencia,
lo que representa cerca del 46% de las derivaciones por esta patología.
La patología venosa en atención En el resto de los casos el médico de cabecera remite el paciente al
primaria especializada ambulatorio de referencia con la solicitud de consulta al especialista para
completar el estudio, tratamiento, seguimiento y establecer la conducta a
F. Fàbrega. Cirujano general seguir. En la mayoría de los CAE es el cirujano general el responsable de
atender esta consulta y por tanto quien ha de valorar de forma apropiada
Correspondencia: Francesc Fàbrega. Centre d'Atenció Especialitzada qué pacientes necesitan o pueden beneficiarse de ser referidos a un centro
Servei d'Atenció Primaria. Baix Llobregat Centre hospitalario para que reciban el tratamiento definitivo de la patología
Institut Català de la Salut. Bellaterra, 41- 08940 Cornellà de Llobregat venosa que adolecen mediante el uso de alguna de las varias técnicas
quirúrgicas disponibles.
La enfermedad venosa de las extremidades inferiores es una patología
muy frecuente en los países del mundo occidental1 . Se calcula que entre el Así pues es el cirujano general quien usando los medios que desde el
3 y el 8% de la población de Estados Unidos sufre de insuficiencia venosa sistema de atención primaria dispone ha de establecer qué pacientes
crónica sintomática 2 . La Insuficiencia Venosa Crónica (IVC) es el resulta- tienen indicación para ser intervenidos quirúrgicamente de varices. Este
do de anormalidades funcionales y/o estructurales de las venas que se proceso pasaría por una evaluación clínica lo más completa posible con
caracterizan ya en sus manifestaciones iniciales por la presencia de sín- una detallada historia clínica del paciente incluyendo preguntas como
tomas y/o signos clínicos de gran impacto en la calidad de vida de los historia de embarazos, traumatismos, síndrome de hipercoagubilidad,
pacientes afectos, siendo causa frecuente de baja laboral. ocupación laboral o historia de TVP previas. A continuación el proceso
debería incluir un examen físico lo más completo posible, con el paciente
La repercusión económica de la IVC es por tanto importante. Así por en pie, prestando atención no sólo a la extremidad inferior sino también
ejemplo, el coste de las bajas laborales relacionadas con la IVC de 1987 a la parte baja del abdomen y la región púbica, y usando alguno de los
en Alemania fue de aproximadamente 488 millones de Euros, represen- numerosos tests clínicos que llevan nombres de conocidos médicos inte-
tando el 1,2% de los días de baja laboral3 . El importe total del tratamien- resados en la patofisiología venosa como el test de Trendelenburg, test de
to de esta enfermedad para el sistema sanitario de los Estados Unidos fue Schwatz o de Perthes que si bien son útiles para el diagnóstico clínico de
de 1 billón de Dólares en el año 20022 . incompetencia valvular venosa, no son los más indicados como evalua-
ción preoperatoria. Esta hoy por hoy parece ser mejor establecida con el
La manifestación clínica más frecuente de la IVC son las varices. Según
uso del Eco-Doppler el cual en esencia se usa para evaluar los puntos
diversos estudios epidemiológicos el 26-38% de las mujeres y el 10- específicos de reflujo venoso. La obtención de un estudio del sistema
20% de los hombres presentan varices y su prevalencia aumenta con la
venoso superficial y profundo con Eco-Doppler como prueba complemen-
edad4 . En el estudio de Framingham la incidencia anual de varices fue del
taria diagnóstica está al alcance del cirujano general y como tal es fre-
2,6% en mujeres y del 1,9% en hombres 5 . Sin embargo las varices no son cuentemente solicitada para valorar el grado de insuficiencia y la necesi-
la única manifestación de esta enfermedad. La IVC puede manifestarse
dad y beneficio de un tratamiento quirúrgico.
por síntomas tan simples como escozor, piernas pesadas o calambres
nocturnos que afectan a gran parte de los pacientes, o más invalidantes Parece claro que con el uso apropiado de los recursos disponibles debe-
como edema, cambios de coloración de la piel o como complicaciones ríamos derivar los pacientes que más pueden beneficiarse de ser tratados
más tardías como las úlceras varicosas. quirúrgicamente. Pero, ¿es ésta la realidad? La mayoría de servicios
Nuestra asistencia sanitaria funciona como un sistema piramidal cuya hospitalarios de cirugía vascular manifiestan que sus consultas externas
están atiborradas de pacientes que una vez estudiados nos son candida-
base recae en la asistencia primaria que los médicos de familia llevan a
cabo en los Centros sanitarios de Asistencia Primaria o CAP. En el vértice tos a intervención quirúrgica con el detrimento que supone para la valo-
de la pirámide encontramos los hospitales de tercer nivel que ofrecen los ración y estudio de nuevos candidatos. El paciente una vez adecuada-
servicios de hospitalización más avanzados cubriendo todas las especia- mente evaluado por el cirujano vascular del centro de referencia es pro-
lidades y subespecialidades médicas y quirúrgicas. gramado para la intervención que mejor pueda tratar el grado de patolo-
gía venosa de base que sufre. Es decir pasa ha engrosar la lista de espera
El usuario de nuestro sistema sanitario acude a su médico de cabecera o que, si bien en los casos más graves el cirujano vascular puede priorizar
de familia con los primeros síntomas que le aquejan o molestan. La siendo reducido, en la mayoría de ellos es de varias semanas a varios
elevada prevalencia de la patología venosa se traduce en un elevado meses. Teniendo en cuenta que ya para la primera evaluación han trascu-
número de consultas por este motivo y la conducta más comúnmente rrido otros tantos meses no es de extrañar que ha efectos del paciente el

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 109


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

tiempo de “lista de espera” para ser intervenido por una patología tan Bibliografía
frecuente y que en muchos casos es causa de bajas laborales, sea el de
1. Franks PJ, Wright DDL, McCullum CN. Epidemiology of venous disease: a review.
más de un año o año y medio al incluir en su computo los tiempos de Phlebology 1989;4:143-51.
derivación del médico de familia al especialista de zona, el que precisó
2. Callam MJ. Epidemiology of varicose veins. Br J Surg 1994;81:167-73.
para realizarse y mostrar los resultados del Eco-Doppler que como prue-
ba complementaria éste solicitó y el que transcurrió hasta que recibió la 3. Laing W. Chronic venous diseases of the leg. London: Office of Health Economics,
1992.
primera cita para ser evaluado en el hospital de referencia.
4. International Task Force. The managament of chronic venous disorders of the leg: an
Ante esta realidad es evidente que estamos lejos de disponer de un mode- evidence-based report. Phlebology 1999;14(suppl):23-34.
lo de derivación-atención especializada con un grado de eficiencia ópti- 5. Brand FN, Dannenberg AL, Abbott RD, Kannel WB. The epidemiology of varicose
mo. Sin duda desde cada nivel con el buen hacer de sus profesionales se veins: the Framingham study. Am J Prev Med 1988;4:96-101.
realizan esfuerzos para mejorar en este camino, pero de alguna forma es
necesario revisar el sistema de establecer nexos de colaboración entre los
diversos niveles. La opinión del especialista en medicina
En el contexto de la consulta real diaria en cualquiera de nuestros familiar y comunitaria
ambulatorios llevar a cabo una historia detallada seguida de un examen
físico adecuado al grado de exigencia antes descrito excede con creces los M. Merino. Medicina Familiar y Comunitaria
7 u 8 minutos estimados de tiempo de dedicación para una primera visita
por parte del especialista de zona. Por otra parte el valor del uso del Eco- Correspondencia: Montse Merino. ABS Torrassa
Doppler aunque útil para el especialista de primaria para objetivizar el L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona)
grado de incompetencia valvular venosa queda en entredicho la informa-
ción que de él pueda obtener el cirujano vascular para planificar su La insuficiencia venosa crónica es la enfermedad vascular más frecuente,
estrategia quirúrgica, tanto por el tiempo transcurrido entre su obtención afecta al 40-50% de la población adulta en algún grado, siendo cinco
y el momento del estudio preoperatorio por parte del angiólogo del hospi- veces más frecuente en la mujer, y aumentando exponencialmente con la
tal de referencia, como por la conveniencia o necesidad de realizar el edad.
estudio detallado de cada paciente con esta u otras técnicas de la imagen Ello supone una demanda de atención especializada creciente y progresi-
lo más cerca posible en el tiempo al momento de la intervención y por va, generando listas de espera y llevándose entre el 2 y el 5% del presu-
parte del mismo equipo quirúrgico.
puesto sanitario. Es asimismo responsable de la ocupación del 5-10% de
La solución para obtener una atención especializada con un alto nivel de las camas de los hospitales públicos.
eficiencia no es una, y probablemente no pasa por hacer unidades hospi- Las lesiones tróficas y úlceras varicosas postflebíticas pueden afectar a
talarias más avanzadas, ni en aumentar el número de personal médico y más de 300.000 adultos de ambos sexos, lo que produce una importante
sanitario, o incrementar las dotaciones económicas para pruebas com- repercusión económica, es causa de largas bajas laborales y supone un
plementarias, medidas todas ellas puntualmente necesarias, sino por deterioro en la calidad de vida de los afectados.
saber usar mejor los recursos existentes. Para ello debemos plantearnos
cómo podemos establecer una buena base de colaboración entre todos El médico de familia es el primero en recibir la demanda, y su tarea
los niveles. Así el por ejemplo el médico de familia puede adjuntar una principal consiste en seleccionar aquellos casos que realmente se pueden
historia completa del paciente simplificando esta labor al especialista de beneficiar de una atención especializada de todo el resto que es tratable
primaria. El especialista de primaria puede derivar los pacientes de acuerdo desde nuestra consulta.
a parámetros establecidos de valoración clínica junto con el cirujano Para ello debemos realizar una anamnesis detallada, donde consten ante-
vascular del hospital de referencia y de esta forma priorizar según el cedentes familiares, obesidad, historia obstétrica -las varices recidivan
grado de afectación del paciente. Tanto el médico de familia como el durante el embarazo en el 99% de los casos- ortostatismo y estreñimiento.
especialista de zona han de actuar como pedagogos de los pacientes que
afectos de IVC no comprenden que en muchos caso su problema carece de En segundo lugar, se realizará una correcta exploración física, intentando
solución definitiva y que han de aprender a convivir con lo que un proble- descartar cualquier patología traumatológica o mecánica, como el apoyo
ma crónico significa cumpliendo con las recomendaciones de deambu- inadecuado de los pies.
lación, uso de medias de compresión y demás tratamientos posturales En aquellos casos susceptibles de cirugía se requiere una Eco-Doppler,
que si bien no lo curan, sí le pueden mejorar o al menos conservar el que resultará imprescindible para que el especialista identifique correcta-
estado funcional del que disfrutan. El hospital de referencia puede esta- mente la anatomía de la enfermedad varicosa, habitualmente compleja y
blecer un gradiente de indicaciones quirúrgicas como guía a seguir por sujeta a variaciones en un porcentaje significativo de casos.
parte del centro atención primaria para referir los pacientes de acuerdo a
la capacidad de atención del momento, informar sobre sus tiempos de Asimismo, el médico de cabecera será quien detecte y controle las posi-
espera según el grado de prioridad y mantener una vía de comunicación bles complicaciones derivadas de la insuficiencia venosa, así como el
con los especialistas de primaria que sirva para mejorar la forma en que manejo diario del tratamiento no quirúrgico, que en la mayoría de los
unos y otros atienden a sus pacientes. casos tendrá una eficacia sólo relativa.

Todos tenemos un mismo objetivo: Mejorar la atención de paciente. El que El objetivo principal del tratamiento será reforzar aquellas funciones que
el especialista de atención primaria sea más que un eslabón a dónde todavía están conservadas y no empeorar las ya alteradas.
derivar una patología frecuente y con soluciones aparentemente siempre Para ello disponemos de medidas higiénico-dietéticas y fármacos
distantes en el tiempo, y más que el eslabón de dónde se reciben pacientes venotónicos. Las medidas básicas son:
afectos de IVC y no siempre con la adecuada valoración depende del
grado de colaboración que desde todos los niveles merced a una buena – Control de sobrepeso
gestión y dirección sanitaria podamos establecer. – Evitar el estreñimiento

110 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa II

– Ejercicio físico – Lipodermatosclerosis


– Evitar exposiciones a fuentes de calor directas – Varones con clínica severa
– Evitar periodos prolongados de pie o sentados – Otros
– Duchas diarias de agua fría en las piernas
– Evitar ropa ajustada. Calzado adecuado
– Hidratación abundante de la piel Bibliografía recomendada
– Medias de compresión, que deberán ser de compresión decreciente
de pie a muslo Bonet Monné S. Evidencias de efectividad de los flebotónicos en el tratamiento de la insuficien-
cia venosa crónica. FMC 2003;10:711-9.
Como punto final, atención primaria y especializada deben unificar los Corominas Roura C. Correlación clínico-hemodinámica en la enfermedad varicosa. Siete Días
criterios de derivación, para seleccionar sólo a aquellos pacientes que se Médicos 2004;62-3.
beneficiarán de la atención especializada en el mínimo plazo posible: Todo Varices: www.todovarices.com/
– Varicorragias Vila MA i Coll, Fernández Parcés MJ, Fernández-Aramburu Lumbiarres MC. Insuficiencia
– Úlceras tórpidas venosa crónica de extremidades inferiores. FMC 1995;2:13-9.

– Varicoflebitis de repetición

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 111


Conferencia
III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

10:45 - 11:25 h.

Tema monográfico: Trombosis Venosa


Profunda (TVP)

Moderador: M. Cairols
1ª Conferencia: A. Masegosa
2ª Conferencia: C. Tolosa

Conferencia I: Consenso sobre tratamiento Nuestro objetivo fue elaborar un documento que recogiera los requisitos
de una buena práctica clínica, para su divulgación entre la comunidad
extrahospitalario de la TVP científica. Todos estos documentos tienen una fecha de publicación, que
hace que algunos de sus puntos puedan quedar superados por nuevas
A. Masegosa. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular aportaciones científicas, por lo que deben estar sujetos a revisión. La
Correspondencia: A Masegosa. Hospital General Albacete estructura del mismo se pensó para dar respuesta a una serie de pregun-
Hermanos Falcó, s/n - 02001 Albacete tas que uno podría hacerse antes de proponer a los pacientes el trata-
miento en el ámbito extrahospitalario. Las preguntas serían:
La Trombosis venosa profunda de las extremidades inferiores es una – ¿Puede realizarse? La respuesta sería si ésta opción terapéutica es
enfermedad frecuente en nuestro medio, y que presenta distintos aspectos Segura y Eficaz.
en cuanto a su profilaxis, etiología, tratamiento y complicaciones que - ¿A quién? La respuesta nos permitiría conocer los criterios de inclu-
hacen que deba ser conocida y tratada por distintas especialidades médi- sión y exclusión.
cas como angiólogos y cirujanos vasculares, médicos de atención prima- - ¿Con qué? Situación actual de los conocimientos sobre el tratamien-
ria, internistas, neumólogos, hematólogos, etc. to anticoagulante.
El mejor conocimiento de sus factores etiológicos, de los métodos de - ¿Cómo? Organización y requisitos necesarios para su puesta en
diagnóstico y de su historia natural, así como el tratamiento en su fase marcha.
aguda y de sus complicaciones, han motivado que, en los últimos años, - ¿Para qué? Saber si el paciente se beneficia de ello (estudios de
se haya producido un cambio importante en el enfoque terapéutico de la calidad de vida) y si supone un ahorro para el sistema sanitario
misma. No hace mucho tiempo, estos pacientes se trataban con periodos (estudios económicos).
de reposo prolongados ante el temor del embolismo pulmonar, y con
Hay que recordar también, que el tratamiento extrahospitalario no debe
perfusiones intravenosas de heparina sódica, que requerían controles
ser diferente del que se realiza en el hospital en cuanto a movilización,
analíticos frecuentes. En la actualidad disponemos de métodos diagnós-
uso de contención elástica, seguimientos y controles, y que debe seguirse
ticos incruentos rápidos, precisos y de bajo coste, y de tratamientos efica-
al paciente a fin de realizar las investigaciones etiológicas de la enferme-
ces, fáciles de administrar, con baja tasa de complicaciones y que no
dad.
necesitan frecuentes controles analíticos.
Considerando que el tratamiento domiciliario de la trombosis venosa es
una alternativa válida, que aporta ventajas para el paciente y ahorra
Seguridad y eficacia
recursos a la administración sanitaria, podemos afirmar que no en todos La seguridad y eficacia del tratamiento ambulatorio de la TVP de los MMII
los casos se realiza con el rigor y los requerimientos necesarios, quizás se planteó por primera vez en 1996 en dos grandes ensayos clínicos,
debido a la falta de medios diagnósticos en algunos niveles de la Atención Koopman y Levine. Sorprendentemente, desde entonces y a pesar de la
Sanitaria, también por la saturación de los servicios de urgencias o de las gran cantidad de literatura publicada al respecto, con la excepción de un
camas hospitalarias, y, porqué no decirlo, quizás también por desconoci- ensayo clínico menor (Boccalon 1998), no se han realizado ensayos
miento de algunos profesionales del estado actual del problema. clínicos bien diseñados y con un número suficiente de pacientes. Por
consiguiente, todo lo que sabemos sobre la seguridad y eficacia de esta
Es obligación de las sociedades científicas proporcionar a los profesio- modalidad terapéutica se basa en estos tres ensayos clínicos. El resto de
nales y a la administración, la información sobre los avances diagnós- literatura publicada son metaanálisis y trabajos de metodología deficien-
ticos y terapéuticos que permitan estandarizar los tratamientos y te que debilitan el poder de sus conclusiones, en general ensayos no
optimizar los recursos. Con ésta finalidad, y conociendo los problemas
controlados.
que puede suponer la implantación del tratamiento extrahospitalario de
la trombosis venosa, el Capítulo Español de Flebología de la Sociedad El problema se agrava cuando analizando estos dos grandes ensayos
Española de Angiología y Cirugía Vascular decidió elaborar un docu- aleatorios y controlados encontramos que también adolecen de impor-
mento de consenso que se presentó en el Congreso de Oviedo en Abril tantes problemas metodológicos. Los criterios de exclusión son demasia-
del 2003. do amplios, así en el estudio Koopman un 31% de exclusiones y en el de

112 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Conferencia I y II

Levine un 67%. El escaso porcentaje de pacientes que realizaron el trata- 1. Confirmación del diagnostico de TVP con pruebas objetiva (Eco-
miento domiciliario, en el de Koopman un 36% y en el de Levine un 50%. Doppler o flebografía).
En las dos ramas terapéuticas, ingreso y ambulatorio, el tratamiento se 2. Valoración por el Angiólogo y Cirujano Vascular. Si no lo hubiese en
administró inicialmente en algunos casos con el paciente ingresado, y no el centro, lo realizaría el especialista encargado de la atención de las
se tuvo en cuenta la etiología de la trombosis. En el trabajo de Boccalon TVP.
no se especifica el método de randomización y no se mencionan las 3. Realizar en el área de urgencias los estudios básicos: hemograma,
exclusiones. Por todo ello los resultados obtenidos se deben interpretar coagulación básica, recuento plaquetario, Rx de tórax, ECG, creatinina.
con cautela, y las conclusiones con reparos.
4. Valoración cuidadosa de los criterios de inclusión o exclusión.
En resumen, la mayoría de los trabajos concluyen que el tratamiento 5. Conformidad del paciente y la familia (Consentimiento informado).
ambulatorio de la TVP de MMII es igual de seguro y efectivo que el trata- 6. Asegurarse que el paciente al llegar su domicilio va a contar con la
miento hospitalario. Sin embargo, debido a la tasa de complicaciones, cobertura sanitaria adecuada, es decir, visita en 24 horas del equipo
equiparable en ambos grupos, nos tendríamos que preguntar si el pacien- de Atención Domiciliaria o Atención Primaria con los que se haya
te que recibe el tratamiento hospitalario goza de la posibilidad de un coordinado su seguimiento. Se recomienda que la inyección de
tratamiento de las complicaciones, más rápido y adecuado que el ambu- Heparina sea administrada por el ATS o que se instruya al paciente
latorio. La respuesta de la literatura es que esta situación es infrecuente, en su autoinyección.
y por el contrario, hay un gran número de pacientes que se podrían 7. Alta desde el área de urgencias firmada por el coordinador de las
beneficiar de esta modalidad terapéutica. No obstante el paciente ambu- TVP o por el médico responsable de esta patología, que a su vez será
latorio precisa de un supervisión para compensar esta posible desventa- el encargado de poner en conocimiento del médico de atención pri-
ja. maría la llegada del paciente a su domicilio.
8. Teléfono de contacto.
Criterios de inclusión y exclusión 9. Información clara al paciente y la familia sobre la enfermedad, posi-
bilidades de tratamiento, pautas a seguir en su domicilio, forma de
Ante la sospecha clínica de trombosis venosa, podremos comenzar trata- administrar la medicación, signos de alarma de las complicaciones
miento, pero la confirmación se realizará, de la forma más precoz posi- y actitud a seguir ante ellas.
ble, mediante Eco-Doppler o flebografía. La simple sospecha clínica, apo-
10. Fecha de revisión por el Angiólogo y Cirujano vascular o facultativo
yada o no en la positividad del Dímero D, no nos permiten confirmar el
encargado de su seguimiento.
diagnóstico. Por tanto, no es adecuado continuar un tratamiento de trom-
bosis venosa, en régimen ambulatorio o con el paciente ingresado, sin 11. Administrar la primer dosis de HBPM en el área de urgencias.
confirmación diagnóstica.
Los criterios de exclusión, y por tanto la necesidad de ingreso para trata- Aspectos económicos y de calidad de vida
miento, se hacen en base a una serie de razones médicas en las que la La revisión bibliográfica pone de manifiesto que existen muchos estudios
comorbilidad o el mayor riesgo de sangrado o de recurrencia trombótica económicos; pero pocos de calidad de vida, lo que debería motivar la
así lo aconsejen. También pueden ser causas de ingreso la carencia de autocrítica de los médicos y de las administraciones sanitarias.
atención domiciliaria adecuada, el rechazo por el paciente, o la distancia
excesiva del domicilio del centro hospitalario. Los resultados del ensayo de Koopman presentan un 64% de ahorro en
los pacientes tratados con HBPM en comparación con los tratados con
HNF, principalmente debido a los menores costos del hospital.
Tratamiento anticoagulante
De forma similar, una evaluación de los pacientes incluidos en el ensayo
El tratamiento se iniciará con heparina y no con anticoagulantes orales. de Levine mostró una economía del 57%. Los autores manifiestan que
Se utilizará heparina de bajo peso molecular, salvo que se piense en ésta es una estimación conservadora de la potencial reducción de costos.
suspender el tratamiento de forma aguda por alguna circunstancia, en
que se usará heparina sódica. Todas las heparinas de bajo peso molecular Muy pocos estudios informan de la satisfacción de los pacientes. En el de
son similares entre sí, salvo pequeñas diferencias que no tienen significa- Conner (1999) el 79% estaba contento de ser tratado en su casa, el 12%
ción estadística. Durante el tratamiento con heparina de bajo peso habría preferido el hospital, y el 9% no tenía ninguna preferencia.
molecular se monitorizará la cifra de plaquetas, y se controlará al pacien- Harrison (1998) efectúa un estudio de cohortes para valorar, además de
te por personal especializado. la seguridad y eficacia, el grado de satisfacción del paciente con el trata-
miento, mediante la contestación de un cuestionario de calidad de vida. El
Dado que en ocasiones puede ser el paciente el que se auto administre la
resultado fue que el 91% de los pacientes estaban satisfechos con el
heparina de bajo peso molecular, es importante instruirlo en su manejo,
tratamiento domiciliario; el 44% estaban conformes con la autoinyección
y que conozca las posibles complicaciones para consultar en caso de que
de HBPM y el 92% estaban satisfechos con el seguimiento realizado
se produzcan.
durante el tratamiento.
La indicación y duración del tratamiento anticoagulante oral será igual
La evidencia limitada sugiere que el tratamiento en el domicilio es eficaz
que en tratamiento hospitalario.
en relación a los costos y es probable que sea preferido por los pacientes.
Es difícil que se lleven a cabo ensayos adicionales grandes que comparen
Estrategia para la realización del tratamiento estos tratamientos. Por consiguiente, es probable que el tratamiento do-
Es posible iniciar el tratamiento desde el área de urgencias siempre que se miciliario se transforme en el estándar, y la investigación adicional esté
den las siguientes premisas. dirigida a resolver problemas prácticos.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 113


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Conferencia II: Trombofilia y TVP En los últimos 15 años se ha producido un incremento notable en la
identificación de nuevos defectos genéticos con riesgo trombótico. Actual-
C. Tolosa. Médico Adjunto de Medicina Interna mente, somos capaces de identificar alguna trombofilia en más del 50%
de los pacientes con diátesis trombótica, cuando anteriormente sólo se
Correspondencia: Carles Tolosa. Servicio de Medicina Interna evidenciaba en el 10-15% de los casos. Con toda probabilidad, esta cifra
Corporación Sanitaria del Parc Taulí seguirá aumentando en el futuro, poniendo de manifiesto el incompleto
Parc Taulí, s/n - 08208 Sabadell - ctolosa@cspt.es conocimiento que tenemos del sistema de la hemostasia (Tabla 2).

Tromboembolismo venoso y trombofilia ¿A quién indicar un estudio de trombofilia?


El tromboembolismo venoso (TEV) constituye la tercera causa de enfer-
No existe ninguna manifestación clínica que sea patognomónica de una
medad cardiovascular después de la cardiopatía isquémica y el accidente
trombofilia en particular, a excepción de la infrecuente y grave púrpura
vascular cerebral. Las factores que pueden originarlo son variados pero fulminante neonatal, asociada a un déficit homozigoto de proteína C o
pueden agruparse en una tríada, que Virchow ya postuló hace más de
proteína S. Por lo tanto, la búsqueda de una trombofilia resulta compleja
100 años: el estasis sanguíneo, la lesión vascular y la alteración de la
y de un gran coste económico para el sistema sanitario. Para que el
hemostasia, bien en forma aislada o en combinación.
rendimiento diagnóstico de estos estudios sea aceptable, es imprescindi-
En la actualidad, el TEV sigue considerándose una enfermedad multicausal ble proceder a una selección de los candidatos a evaluar. En primer lugar,
en la que convergen distintos factores de riesgo trombótico, unos excluiremos a los pacientes con trombosis en los que coexista algún
situacionales y adquiridos, y otros congénitos. Los factores de riesgo factor de riesgo adquirido que sea evidente a través de la anamnesis, la
situacionales representan circunstancias bien definidas, y siempre transi- exploración física y las exploraciones complementarias dirigidas. La edad
torias, asociadas a un riesgo trombótico como son la ingesta de del paciente en el momento de sufrir la oclusión venosa es un parámetro
anticonceptivos orales, embarazo, cirugía o la quimioterapia. Los facto- a tener en cuenta, ya que constituye un factor de riesgo trombótico inde-
res de riesgo adquiridos resultan de enfermedades médicas que interfie- pendiente. Mientras en las primeras décadas de la vida, la incidencia
ren con la hemostasia y no siempre son reversibles, como el cáncer, la anual de trombosis es de 1 de cada 100.000 jóvenes, esta cifra aumenta
enfermedad inflamatoria intestinal, los anticuerpos antifosfolípido, el sín- a lo largo de los años de vida hasta alcanzar una incidencia de 1 de cada
drome nefrótico o los síndromes mieloproliferativos y de hiperviscosidad. 100 personas ancianas. Así pues, la aparición de una diátesis trombótica
Los factores de riesgo congénitos están constituidos por mutaciones a edades tempranas debe sugerir la presencia de una trombofilia. Esta y
genéticas únicas o múltiples (polimorfismos), que favorecen un balance otras situaciones clínicas, que se recogen en la Tabla 3, nos deben hacer
procoagulante del sistema de la hemostasia, mediado por la disminución sospechar una posible trombofilia. En un futuro próximo, es probable que
de la capacidad anticoagulante natural o por la hiperfunción de los facto- se amplíen tanto las indicaciones de los estudios de trombofilia como el
res de la coagulación (Tabla 1). Todas estas situaciones clínicas compor- número de pruebas a realizar, a tenor de los recientes conocimientos
tan un estado de hipercoagulabilidad. Sin embargo, el término trombofilia sobre nuevos factores de riesgo trombótico.
se ha utilizado tradicionalmente para definir sólo aquellos estados de
hipercoagulabilidad, bien de origen genético o adquirido, para los que Tabla 2. Incidencia y riesgo trombótico de las trombofilias
disponemos de pruebas de laboratorio específicas.
Incidencia en la Incidencia en Riesgo de trombosis
Tener una predisposición genética o adquirida a la trombosis no es moti- población general 1ª trombosis respecto a la población
vo suficiente para sufrir una oclusión vascular, ya que la trombofilia está sin el defecto
presente a lo largo de toda la vida y la diátesis trombótica es un problema
episódico que no ocurre en todos los individuos. El motivo es el distinto Déficit de AT 0,02% 0,5-1% 25
riesgo trombótico de cada uno de los factores de riesgo, que contribuye Déficit de PC 0,3% 3-4% 10
Déficit de PS 0,3% 4-7% 10
con intensidad variable al desarrollo del evento trombótico (Tabla 2). En
RPCa - FVL 5% 15% 2-4
casi la mitad de los pacientes con trombofilia congénita puede identificar-
G20210A 2-4% 10% 2-3
se un factor precipitante de la trombosis. VIII:c > 150% 10% 25% 4-5
Homocisteina >15 µmol/l 5% 10% 2-3
Antifosfolípido 1% 4% 5-9
Tabla 1. Trombofilias congénitas
AT: antitrombina; PC: proteína C; PS: proteína S; RPCa: resistencia a la proteína C
Disminución de la capacidad anticoagulante natural activada; FVL: mutación del factor V Leyden; VIII:c: factor VIII coagulante; G20210A:
- Déficit de antitrombina mutación del gen G20210A de la protrombina; ND: no determinado.
- Déficit de proteína C
- Déficit de proteína S
Tabla 3. Pacientes con trombosis y sospecha clínica de trombofilia
Aumento de la función de los factores de la coagulación
- Resistencia a la proteína C activada y factor V Leyden - Edad inferior a 50 años.
- Mutación del gen de la protrombina G20210A - Historia familiar de trombosis.
- Aumento de la actividad del factor VIII, IX y XI - Trombosis espontánea o idiopática (particularmente en jóvenes)
- Disfibrinogenemia - Trombosis recurrente.
Otras trombofilias - Trombosis en lugares inhabituales (cerebral, mesentérica...).
- Hiperhomocisteinemia por mutación de la enzima - Necrosis cutánea inducida por dicumarínicos.
metilentetrahidrofosfatoreductasa (MTHFR) - Prolongación del tiempo de tromboplastina parcial activado.
- Hipoplasminogenemia - Mujeres con abortos de repetición.
- Aumento de la actividad del inhibidor de la fibrinolisis activable - Mujeres con trombosis en relación a embarazo, puerperio o tratamiento
por la trombina (TAFI) hormonal.

114 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Conferencia I y II

Una vez se confirma una trombofilia de base genética, es apropiado seguir, posteriormente, con un tratamiento oral con dicumarínicos. Algunos
indicar su estudio específico a los familiares de primer grado con una pacientes con déficit de antitrombina pueden necesitar dosis más altas de
doble finalidad, documentar la naturaleza hereditaria del problema e heparina para conseguir una anticoagulación adecuada. En caso de no
identificar a los individuos portadores asintomáticos de la trombofilia, ya conseguir este objetivo, que el paciente se presente con un TEV severo o que
que pueden beneficiarse de un consejo genético y de una profilaxis de las aparezca una recurrencia trombótica a pesar de la heparina, se recomien-
situaciones de riesgo. da la administración de concentrados de antitrombina.
Se puede evitar la recidiva trombótica en la gran mayoría de pacientes
¿Qué pruebas debe incluir un estudio de trombofilia? manteniendo un INR entre 2-3, durante un tiempo mínimo de 3 meses.
Algunos autores han sugerido que los pacientes con síndrome
No existe una única puebla de laboratorio que nos informe del riesgo antifosfolípido y TEV requieren una anticoagulación de mayor intensidad.
trombótico de cada individuo. Por lo tanto, necesitamos diferentes prue- Sin embargo, las opiniones son discordantes al respecto y la mayoría de
bas para identificar cada una de las situaciones de riesgo, que deben ser estos pacientes se mantienen asintomáticos con el rango de INR habitual.
limitadas en número, específicas y con resultados que sean clínicamente
relevantes. En este sentido, es aconsejable realizar el estudio de trombofilia No existen estudios comparativos que avalen una duración determinada
en etapas. En la primera etapa se incluyen pruebas para detectar una del tratamiento anticoagulante en cada situación de riesgo. Sin embargo,
serie de trombofilias, por diversos motivos: a) las que poseen un riesgo se aconseja fijar el tiempo de administración de forma individualizada,
trombótico mejor establecido, como son el déficit de los inhibidores prin- según el riesgo estimado de recurrencia. En la Tabla 5 se proponen unas
cipales de la coagulación, antitrombina, proteína C y proteína S; b) las recomendaciones básicas, basadas en la localización y gravedad de la
que son muy prevalentes en la población general aunque su potencial oclusión venosa, la presencia de una o más trombofilias, el antecedente
trombogénico es poco significativo, como la resistencia a la proteína C de trombosis previa y la coexistencia de algún factor de riesgo adquirido.
activada y la mutación del gen 20210 de la protrombina; c) los anticuerpos
antifosfolípido, dado que constituyen la trombofilia adquirida más fre-
cuente en pacientes con trombosis, particularmente en aquellos con una Tabla 4. Estudio de trombofilia, en etapas
enfermedad autoinmune; d) alteraciones muy infrecuentes, pero de fácil
Primera etapa Segunda etapa
identificación con una prueba sencilla, como el test de trombina para la
disfibrinogenemia y, finalmente, e) la que puede normalizarse con un Actividad funcional de AT En caso de detectar alteración en la
tratamiento sencillo como es la hiperhomocisteinemia. Actividad funcional de PC
Actividad funcional de PS actividad de AT: determinar antígeno AT
Siempre que sea posible, usaremos en primer lugar pruebas de laboratorio Resistencia a la PC activada actividad de PC: determinar antígeno PC
que midan la función de la proteína, ya que éstas son capaces de detectar Mutación G20210A actividad de PS: determinar PS libre y total
tanto los defectos cuantitativos como los cualitativos de una trombofilia. Si del gen de la protrombina resistencia a PC activada: Factor V Leyden
se detecta una alteración de la función en una de ellas, procederemos a En caso de estudio de primera etapa normal
confirmarla y, seguidamente, a determinar su concentración antigénica, Anticuerpos antifosfolípido
Homocisteinemia
para su correcta clasificación. En el caso de las trombofilias causadas por Actividad funcional del factor VIII, IX, XI
Fibrinógeno
un defecto genético único, es mejor identificar la mutación específica. Homocisteinemia tras test
Tiempo de trombina o reptilase
de sobrecarga de metionina
Cuando persiste la sospecha de una trombofilia hereditaria, y la primera
Anticuerpos anti β 2 -glicoproteína
etapa del estudio es normal, podemos proseguir con la investigación de Actividad funcional del plasminógeno
otros defectos hereditarios menos frecuentes, o no tan bien documenta-
dos en la actualidad (Tabla 4). Estos estudios pueden variar ligeramente AT: antitrombina; PC: proteína C; PS: proteína S
según los centros que los realizan.
Tabla 5. Recomendaciones sobre la duración del tratamiento anticoagulante,
según los factores de riesgo trombótico*.
¿Cuándo realizar el estudio de trombofilia?
De 3 a 6 meses Primer TEV, con factor de riesgo situacional# , en
No es aconsejable realizar el estudio de trombofilia en la fase aguda del
pacientes con resistencia a la proteína C activada,
TEV, ya que tanto la trombosis como el tratamiento anticoagulante alteran
Factor V Leyden o la mutación del gen G20210A
el resultado de algunas pruebas de laboratorio. El momento óptimo es de la protrombina.
cuando el paciente está en fase de estabilidad clínica y a partir de los 7
días, o mejor 15 días, de cesar el tratamiento anticoagulante, sea cual 6-12 meses Primer TEV, idiopático
sea su duración. Primer TEV, con factor de riesgo situacional
y déficit de proteína C o proteína S.

¿Qué influencia tiene una trombofilia sobre el tratamiento? 12 meses a indefinido Primer TEV, asociado a cáncer activo, anticuerpos
antifosfolípido o déficit de antitrombina.
La existencia de una trombofilia puede influir sobre la tromboprofilaxis Primer TEV, con 2 o más trombofilias.
secundaria y primaria. En general, se aplican unas pautas de actuación Primer TEV idiopático, grave o en lugar inhabitual.
básicas al respecto. Sin embargo, no existen estudios concluyentes que Segundo TEV, idiopático o con alguna trombofilia.
avalen estas recomendaciones. *recomendaciones sujetas a modificaciones según la localización y gravedad del evento
trombótico, la probabilidad de recidiva, la edad del paciente, la comorbilidad y las
Tromboprofilaxis secundaria: El tratamiento inicial de la diátesis trombótica
preferencias del paciente. La duración de la anticoagulación no está bien definida en
en pacientes con trombofilia no difiere del que se prescribe a pacientes sin caso de primer TEV en pacientes con Factor V Leyden homozigoto, homocisteinemia,
trombofilia. La heparina de bajo peso molecular, o la heparina no fraccio- déficit de proteína C o proteína S o trombofilias múltiples o en aquellos TEV recurrentes
nada en casos seleccionados, son los fármacos más útiles y seguros. La con factor de riesgo situacional; TEV: tromboembolismo venoso; #factor de riesgo
heparina elegida debe administrarse durante un mínimo de 5 días para situacional: cirugía, trauma, estrógenos, inmovilización transitoria, quimioterapia, etc.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 115


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

La edad del paciente y el riesgo hemorrágico individual son otros paráme-


tros a tener en cuenta en la decisión final.
Tromboprofilaxis primaria: Se estima que la incidencia anual de TEV es-
pontáneo es del 3% para los déficits de los anticoagulantes naturales y
del 0,3%, o menor, para las mutaciones del factor V Leyden y del gen
20210 de la protrombina. Estas cifras no superan el riesgo hemorrágico
que supone un tratamiento anticoagulante oral profiláctico a largo térmi-
no, por lo que no es apropiada su prescripción. Sin embargo, alrededor
de la mitad de los episodios de TEV que ocurren en pacientes con trombofilia
son provocados por un factor de riesgo adquirido. Se recomienda la
administración de profilaxis con 5.000-6.000 UI/día de heparina de
bajo peso molecular mientras dura la situación de riesgo transitoria.

Bibliografía recomendada
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data. Hematology (Am Soc Hematol Educ Program) 2002;353-68.
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116 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa redonda
III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

12:00 - 12:50 h. Mesa III

Tratamientos I en la Insuficiencia Venosa


Crónica. Indicaciones y resultados
Moderador: E. Viver
Ponentes: Ll. Roig, O. Pastor, E. Roche, J. Cabrera

Presentación Creo que toda especialidad que amplia sus conocimientos tanto en el
campo del diagnostico como del tratamiento es una especialidad que está
E. Viver. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular viva y la Angiología lo está.

Correspondencia: Emili Viver. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau


Sant Antoni Mª Claret, 167
08025 Barcelona Normas y fármacos en la Insuficiencia
eviver@hsp.santpau.es Venosa Crónica
La medicina y la Cirugía en general cada día va progresando tanto en el Ll. Roig. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular y Endovascular
terreno del diagnostico como en el tratamiento, y la Angiología y Cirugía
Correspondencia: Lluís Roig. Institut Municipal
Vascular también experimenta estos cambios.
de Assistencia Sanitaria (IMAS). Hospital del Mar
Esta Mesa es un buen reflejo de este hecho, ya que en el transcurso de la Passeig Marítim, 25 - 08003 Barcelona
misma vamos a conocer las ultimas novedades así como los resultados lluisroig@yahoo.es
obtenidos con la aplicación de los nuevos tratamientos en la Insuficiencia
Venosa Crónica. Introducción
Empezaremos con los nuevos Fármacos y veremos que nos pueden apor- La insuficiencia venosa crónica es un concepto que abarca de manera
tar para el mejoramiento clínico de la Insuficiencia. Estos fármacos están global y poco precisa todo un grupo de procesos relacionados con
puestos en entredicho por las autoridades sanitarias y es conveniente disfunciones del sistema venoso tanto profundo como superficial. En él se
conocer el alcance real de su efectividad así como las razones que nos incluye desde el simple ortostatismo subjetivo hasta la séquela
indiquen su utilidad y por consiguiente la necesidad de medican a los postrombótica severa en la fase de lesión trófica. Esto produce al paciente
pacientes con ellos. a una alteración significativa de su calidad de vida con la imposibilidad
de mantener una actividad laboral y social normal.
Durante muchos años el único tratamiento definitivo de las Varices era el
quirúrgico y de una manera especial la Fleboextracción, sin embargo hoy Por suerte se están iniciando ya serios intentos de sitematización y estu-
en día hay otras maneras de solucionar este problema, unas más agresi- dio de este grupo de padecimientos que afectan a un porcentaje elavadísimo
vas que otras, unas precisan ingreso y otras se pueden hacer en régimen de la población en las sociedades occidentales.
ambulatorio.
Para tratar estas situaciones clínicas tan diversas no existe ningún trata-
También es necesario conocer si antes de proceder a la aplicación de miento único y resolutivo. Tanto los procesos banales como los más
estas novedades es conveniente algún tipo especial de exploración graves tienen tendencia a cronificarse y a empeorar con el tiempo. El
hemodinámica para obtener un mejor resultado o no. paciente necesitará de atención continuada a lo largo de su vida y depen-
diendo de cada situación clínica concreta requerirá terapéuticas especifi-
Dentro de este apartado tenemos el Láser, que parece tener buenos resul- cas extendiendo las recomendaciones y medidas generales habituales a
tados sobre todo desde el punto de vista estético ya que su indicación todo el bagaje terapéutico a nuestra disposición. En este apartado revisa-
parece ser principalmente ésta. remos de forma extensa todas y cada una de las medidas conservadoras
habituales sin profundizar en cada una de ellas lo que sobrepasaría el
Quizás una de las técnicas novedosas que más discusión a producido
objetivo inicial.
dentro del campo de la Angiología es el tratamiento de las Varices con la
Micro-espuma. De alguna manera es aplicar el principio de la Escleroterá- Se pretende dar una guía exhaustiva de todas las medidas terapéuticas
pia pero ampliando sus indicaciones y usando una nueva formula que le descritas en la literatura y en la práctica clínica habitual teniendo
permite ampliar su campo de acción, tratando cuadros de Insuficiencia presente que algunas de ellas difícilmente podrían mantenerse des-
Venosa Crónica hasta hoy en día reservados exclusivamente para una pués de aplicar los criterios estrictos de la medicina basada en la
actitud más agresiva como es la Fleboextracción. evidencia.

118 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

Medidas generales aquellos ejercicios que activen la bomba muscular y la “esponja” plantar.
Algunos de ellos pueden efectuarse de forma sencilla durante la jornada
La mayoría de ellas pretenden modificar algunos de los aspectos etiopatogé- laboral como las dorsi-flexiones repetidas del pie o el caminar de puntillas.
nicos de la enfermedad y su propia obviedad los hace altamente eficaces. El ejercicio físico más recomendable y en la práctica el de más fácil cumpli-
Es bien conocido que el caso de ulcera venosa pertinaz con sobre-infec- miento es simplemente caminar. Atendiendo a las características de cada
ción y flogosis la simple elevación de la extremidad y el reposo mantenido paciente son suficientes de una a dos horas diarias. Obviamente otros
constituye el elemento fundamental de todo el arsenal terapéutico. ejercicios como el ciclismo y cualquiera que suponga potenciar la bomba
muscular también son recomendables. La natación y la movilización de las
Genéricas extremidades inferiores dentro del agua aportan beneficios desde tres ángu-
Intentan contrarrestar los factores conocidos como causa de la insufi-
los diferentes: Estimulación de la bomba muscular, hidroterapia y presión
ciencia venosa crónica.
hidrostática progresiva. En la practica es de difícil cumplimiento.
Obesidad: En las mujeres especialmente el sobrepeso agrava sobremanera
la enfermedad por lo que es un factor determinante evitarlo o corregirlo.
Medidas compresivas
Sedentarismo y ortostatismo prolongado: Evidentemente no son reco- La compresión elástica es el elemento fundamental en el tratamiento
mendables los trabajos que requieran mantener a lo largo de muchas conservador de la insuficiencia venosa crónica en todas sus fases. Apli-
horas esta posición.
cado adecuadamente es la mejor arma terapéutica en estas situaciones.
Vestido y calzado: Deberían evitarse prendas con efecto “torniquete” y el Su eficacia se basa en el hecho de que contrarresta de forma activa los
calzado más recomendable es el de medio talón (máximo 3 cm) y lo más elementos fisiológicos fundamentales de la enfermedad.
cómodo y fresco posible. Aumenta el retorno venoso, disminuye el reflujo con lo que consigue
Temperatura: En cuanto al clima los fríos y secos son los mejor tolerados reducir de forma significativa la hipertensión venosa. Con ello se consigue
por estos pacientes. Es recomendable evitar las exposiciones gratuitas a reducir la sintomatología, el edema y retrasar la evolución de la enferme-
focos de calor como saunas, exposición solar prolongada etc. Los trata- dad. Bien aplicada es eficaz también en prevenir o reducir la reiteración
mientos con vendas frías y hidroterapia son de gran alivio para los sínto- de las complicaciones mas graves como las celulitis y úlceras. Como
mas de estos pacientes. norma general se debe aplicar durante todo el día y la compresión debe
ser la mayor posible tolerada por el paciente. Obviamente se personaliza-
Estreñimiento: Se intentará corregir para evitar la hipertensión intra- rá el tratamiento a cada caso particular. En los pacientes con patología
abdominal que produce. isquémica asociada la compresión elástica debe usarse con la máxima
Terapéuticas hormonales: La ingesta de anovulatorios no es en general precaución. Hay que diferenciar dos conceptos. Por un lado la compre-
recomendable pero debe valorarse cada caso particular y la situación sión elástica que se ejerce de manera pasiva en reposo y activa con el
concreta. Tanto estos como los tratamientos hormonales sustitutivos cons- ejercicio. Otro aspecto distinto es el de contención. Estos sistemas sola-
tituyen un factor de riesgo de trombosis venosa y pueden agravar los mente actúan durante el ejercicio y no en situación de reposo.
síntomas en pacientes ya afectos de insuficiencia venosa crónica. 1. Medias de compresión elástica. Es el más ampliamente utilizado.
Existen en el mercado múltiples marcas, formas colores y tejidos. La
Físico-posturales especial configuración de determinadas extremidades requiere la
1. Reposo con elevación de la o las extremidades afectadas. En general confección de una media a medida. Los grados de compresión se
se mantendrá el tobillo a nivel de la aurícula. Según la situación se basan en la presión hidrostática ejercida a nivel del maleolo. En
efectuará en cortos periodos alternados a lo largo del día o bien de general se agrupan en una escala de cuatro según las recomendacio-
forma permanente en las situaciones clínicas más graves y agudas nes del consenso del Capitulo Español de flebología de la SEACV.
como la ulceración en la fase inicial del tratamiento y en las celulitis Compresión leve o moderada que no sobrepasa los 20 mm de Hg,
activas. Evidentemente en esta situación debe efectuarse profilaxis compresión media que alcanza los 30, la fuerte que llega a los 40 y
de la enfermedad trombo-embólica con heparina valorándose en extra-fuerte que alcanza los 48. Como norma general a mayor grado
cada caso el riesgo beneficio del mantenimiento de la situación. clínico mayor compresión. Es fundamental concienciar al paciente
2. Elevación de las extremidades durante el descanso nocturno unos de la importancia de esta medida ya que será una situación que
20-25 cm es una práctica muy extendida y recomendada. Más du- deberá en muchas ocasiones mantener de por vida.
dosa es su efectividad e incluso tiene detractores por la relajación 2. Medidas de compresión inelástica o de contención. Se basan en el
excesiva de la pared venosa que puede condicionar a la larga. No principio de actuar como una funda inelástica de la extremidad que
hay duda de su efectividad para reducir el edema y poner la extremi- solo actúa en el momento del ejercicio y no con la relajación. Existen
dad en situación ideal para la compresión elástica diaria. varios sistemas y mecanismos el más conocido y utilizado es el
3. Masaje. En general es beneficioso y consigue buenos resultados siempre vendaje elástico que requiere una aplicación cuidadosa situación
que se efectúe correctamente de abajo arriba en forma de expresión. que no siempre es posible en la práctica. Otros sistemas son la
El drenaje linfático parece ser el más adecuado. llamada manga de Unna que es permanente y esta impregnada de
4. Hidroterapia (Cura de Kneipp). Básicamente duchas y masajes con una pasta de oxido de cinc, la bota Duke es una variante que utiliza
agua fría o bien alternando tibia con fría como sistema de estimulación hidrocoloide, el “Circ-Aid” el vendaje tipo Linton, etc.
“fisiológico” del tono venoso. La simple inmersión o deambulación 3. Los modernos sistemas multi-capas combinan en cierto modo las
con el agua hasta la cintura ejerce de por sí beneficios evidentes. cualidades de los elásticos y los inelásticos al mantener cierto grado
de compresión en el reposo. Estas medidas son especialmente útiles
en pacientes con úlcera venosa y la imposibilidad de efectuar reposo
Actividad física de la extremidad.
En general deben evitarse las situaciones de bipedestación prolongada y 4. Presoterapia instrumental basada en fundas hinchables a diferentes
de inmovilidad de las extremidades inferiores. Se recomiendan todos presiones y con diferentes pautas de tratamiento.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 119


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Recomendaciones de la compresión elástica terapéutica proceso de elaboración del colágeno elemento substancial para
mantener la estructura de los vasos y su funcionalidad.
y profiláctica del consenso del capítulo de flebología
de la SEACV De los datos obtenidos en los meta-análisis efectuados sobre ensayos
clínicos y venotónicos resulta difícil extraer conclusiones definitivas y se
En IVC
encuentran defectos metodológicos que deberían corregirse en un futu-
(C2) Media elástica grado 18-21 mm Hg. ro. Todos estos fármacos tienen acción en diversos frentes etiopatogénicos
(C3) Media o Venda elástica 22-29 de la insuficiencia venosa crónica a nivel experimental siendo de difícil
(C4) Media o venda elástica 30-40 demostración su efectividad clínica práctica. Este concepto que parece
(C5) Media elástica o venda 30-40 claro entre una gran mayoría de clínicos debería inducir a la reflexión de
(C6) Venda multi-capas por que son prescritos de forma poco rigurosa incluso por sus detracto-
Vendaje inelástico res.
Media elástica 30-40
Agentes reológicos
Secuela post-trombótica Media elástica 30-40 Su uso no es en absoluto generalizado en la insuficiencia venosa crónica.
Gestación Media elástica 22-29 La única indicación razonable seria la pentoxifilina en el caso úlceras
Trabajos en bipedestación Media elástica 22-29 flebostáticas asociada a las otras medidas habituales.
Viajes largos Calcetín 22-29
Síntomas sin datos objetivos Medias elásticas 22-29 Anticoagulantes
Fase aguda de la TVP es discutible 22-29 En este apartado solo valoraremos su uso de forma profiláctica en aque-
llas situaciones que se consideren de alto riesgo trombótico como sería el
encamamiento prolongado indicado en las úlceras graves y procesos
Tratamiento farmacológico celulíticos activos.
Existen multitud de publicaciones sobre fármacos aplicables a la patolo-
gía venosa crónica pero ni la más extensa de las revisiones permite hoy en Antibióticos
día justificar su uso en ocasiones abusivo y indiscriminado con una grave Su uso se limita a las úlceras venosas sobre-infectadas (sería mucho más
carga económica sobre los diferentes sistemas sanitarios. En este aparta- discutible en la simple colonización) y siempre según las normas genera-
do haremos mención a los fármacos “específicos” para la patología venosa les de prescripción de antibióticos atendiendo a la sensibilidad del ger-
y nos referiremos también a otros fármacos que en determinadas circuns- men detectado. No estarían indicados en la celulitis con integridad de la
tancias y especialmente en las complicaciones de la insuficiencia venosa epidermis ni en las varicoflebitis ni tromboflebitis superficial si no son
crónica tienen un valor demostrado y son imprescindibles. sépticas. En principio los antibióticos por vía tópica no son recomenda-
bles.
Venotónicos
En los tratados de farmacología y en los catálogos de especialidades farma- Diuréticos
céuticas se clasifican de forma poco definida como “antivaricosos sistémico s” A pesar de su uso en ocasiones excesivo no parece existir indicación
y “vasoprotectores por vía sistémica”. Si bien a nivel experimental existen razonable para su utilización en la insuficiencia venosa crónica aislada.
trabajos que cumplen criterios estrictos y presentan resultados contrastados Otro aspecto serían los edemas sistémicos asociados a la misma y con
se extrapolan de manera poco rigurosa a la práctica clínica y abordan cam- indicación de tratamiento por ellos mismos.
pos absolutamente dispares y en ocasiones inconexos dentro de la
etiopatogenia de la enfermedad venosa crónica. Muchas de estas sustancias
Tratamiento farmacológico tópico
tienen efectos múltiples y a distintos niveles lo que dificulta todavía más su
correcto análisis y valoración. Es encomiable el esfuerzo de determinados En general son de amplia utilización a pesar de que su efectividad es
grupos en intentar esclarecer este abigarrado campo farmacológico. difícil de demostrar. No referimos a los geles, heparinoides etc. Tratare-
mos exclusivamente del tratamiento de la úlcera venosa. Su tratamiento
Clasificación tópico consta de tres fases.
Puede Plantearse por grupos en función de sus efectos pero la multiplici-
dad de los mismos no lo hace aconsejable. La clasificación por grupos Una primera de limpieza que se efectuará con lavado suave con suero
genéricos parece la más razonable. fisiológico o bien agua y jabón. Se efectuará de forma cuidadosa retiran-
do al máximo los detritus acumulados. Las ultimas publicaciones des-
– Hidroquinonas. Dobesilato de calcio: Modifica determinados paráme- aconsejan el uso de antisépticos que pueden resultar contraproducentes.
tros homoreológicos en la insuficiencia venosa crónica y tendría
efectos clínicos sobre el edema y la sintomalogía subjetiva. Desbridamiento. Puede ser instrumental o quirúrgico en las fases inicia-
– Gamma-Benzopironas. Diosmina, hesperidina, hidrosmina, troxeruti- les y más graves especialmente si se sospecha la existencia de colecciones
na. En general todos ellos tienen su principal mecanismo de acción o abscesos profundos. En casos menos graves se efectuará un
a nivel de la microcirculación. desbridamiento enzimático con agentes del tipo colagenasa, tripsina,
– Alfa-Benzopironas. Cumarina. Esculina. Su efecto fundamental es la urokinasa, etc. Desbridamiento autolítico que se efectúa cubriendo la
proteólisis de cadenas de elevado peso molecular y sobre la agrega- úlcera con diversos apósitos que consiguen un ambiente húmedo y
ción plaquetaria. anaerobio.
– Saponinas. Escina: Presenta varios mecanismos de acción en rela- Una vez conseguida la limpieza y el inicio de la granulación se inicia la
ción con el mantenimiento del tono venosos y la protección de la cura húmeda que es el método más utilizado hoy en día. Existen múltiples
permeabilidad endotelial. productos en el mercado que básicamente son del tipo poliuretanos,
– Ácido ascórbico. Vitamina C: Su actividad se basaría en el efecto hidrogeles, hidrocoloides, carbón activado etc. Se seguirán estas curas
antioxidante y protector del endotelio así como su participación en el hasta la completa epitelización.

120 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

Conclusiones Entre las técnicas emergentes se encuentra el láser, que ya se aplicaba con
éxito en varios campos de la medicina. Algunas de sus propiedades físi-
La impresión final después de haber revisado todas las alternativas tera- cas hacían intuir que podía tratarse de un método útil, tanto para las
péuticas es que la compresión elástica es la principal arma terapéutica telangiectasias como para las grandes varices.
para el tratamiento de la insuficiencia venosa crónica. Se hace imprescin-
dible en estos pacientes y especialmente en los grados clínicos más avanza-
dos encontrar la compresión a medida para cada paciente y concienciarlo Breve descripción del láser
de que es la única medida eficaz tanto para tratar sus síntomas, retrasar la
La palabra láser está formada por las iniciales en inglés de Light
evolución y prevenir la recurrencia de las complicaciones.
Amplification of Stimulated Emisión of Radiation. Se trata, por tanto, de
un haz de luz para cuya emisión se necesitará:
Bibliografía recomendada – Un medio amplificador, que puede ser sólido (rubí, YAG, KTP), líqui-
Balin AK, Pratt L. Dilute povidone-iodine solutions inhibit human skin fibriblats growth. do (colorante: rodamina, piridina, comarina) o gaseoso (helio-neón,
Dermatol Surg 2002;28(3):210-4. vapor de cobre...); también puede tratarse de un semiconductor o de
Jull A, Waters J, Arroll B. Pentoxifiline in the treatment of the legs venous ulcers: A sitematic un láser de diodo. El conjunto se encuentra dentro de una cámara de
review. Lancet 2002;359:1550-4. activación.
Languillant N. Etude en double aveugle contre placebo de l'activite veinotonique d'Esberivén; – Un sistema de bombeo.
Evolution de l'hemodynamique musculaire des membres inférieurs appréciée grâce au
Xenon 133. Act Med Int 1989;88:1-5. – Un sistema de resonancia entre dos espejos.
Laurent R, Gilly R. Frileux C.Clinical evaluation of Daflon. A double-blind, placebo-controled – Un sistema conductor (fibra óptica, tubo hueco, espejos, lentes) que
trial. Int Angiol 1988;7(2):39-43. utilicen un sistema de enfriamiento generalmente por aire
Leal Monedero J. Insuficiencia venosa cronica de la pelvis y de los miembros inferiores. Se reconoce a los lásers cuatro tipos de efectos, según los parámetros
Primera edición. Madrid: Mostby/Doyma Libros SA, 1997. utilizados:
Marinel·lo J, Gesto, R. Patología venosa. Guía de diagnóstico y tratamiento del capítulo
español de flebología de la SEACV. Primera edición. Madrid: Egraff SA, 2003. – Efecto electromecánico.
Marinel·lo J. Terapéutica de compresión en patología venosa y linfática. Primera edición. – Efecto foto-ablativo
Barcelona: Ed. Glosa, 2003. – Efecto fotoquímico: la energía es absorbida por un agente químico
Marston W, Criado E. Nonoperative management of chronic venous insufficiency. Current exógeno que, convertido en activo, es capaz de inducir reacciones
Therapy in Vascular Surgery. Ernst and Stanley. Fourth edition. St Louis: Ed. Mosby, citotóxicas (fotoquimioterapia).
Inc, 2001;843-7.
– Efecto térmico: la energía luminosa se transforma en calor. Es este
Martinez MJ, Bonfill X, Moreno RM, Cacha A, Vargas E, Capellà D. Phlebotonics for venous efecto el que se aplica en vascular.
insufficiency (Protocol for a Cochrane Review). En: The Cochrane Library. Issue 3.
Oxford: Update software, 2003. Este efecto térmico necesita para su actuación tres etapas:
Nicolaides A, Belcaro G, Chan, P. Chronic deep venous insufficiency. Vascular Surger.
Principles and Techniques. Hernry Haimovici. Fourth edition. Cambrige: Ed Blak 1ª. Conversión de la luz en calor, debido a la absorción de la energía
Science Inc, 1996;1242-58. por las moléculas diana o cromóforos.
Nicolaides A. Investigation of chronic venous insufficiency. A consensus statement. Circulation 2ª. Transferencia de calor por la conductividad y difusión térmica.
2000;102:126-63. 3ª. Proceso de desnaturalización, que conduce a la destrucción
Ramelet A, Monti M. Prevention and treatment of venous insufficiency of the lower limbs. molecular de las estructuras que forman la vena.
Phefology guide. Fourth edition. París: Masson Ed, 1999;275-316.
En definitiva, la energía luminosa producida por el láser en la extremidad
Ramelet AA, Monti M. Phebologie. Paris: Ed. Masson, 1992.
de la fibra óptica se transforma en calor, ocasionando la fotocoagulación
Riambau V, Coll E. Diuréticos y edemas en cirugía vascular. Novedades farmacológicas en térmica, la destrucción del colágeno de la pared, oclusión, retracción de
las vasculopatías. Ros E. Primera edición. Barcelona: Ed. J. Uriach, 1998;439-52.
la vena y desaparición posterior.

Tratamiento de telangiectasias
Láser: distintas modalidades
Se tratan vasos con calibres que oscilan desde 0,1 a 1 mm de diámetro.
JO. Pastor. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular Es importante resaltar que no existe un laser que cubra todo el tratamien-
to de los diferentes tipos de telangiectasias. El láser ideal sería aquel que
Correspondencia: JO Pastor. Hospital de Granollers ocupara todo el espectro entre 532 y 1.064 nm de longitud de onda, con
Av. Francisco Ribas, s/n - 08400 Granollers posibilidades de variar.

Introducción La duración del pulso y la fluencia


Las telangiectasias rojas, que habitualmente oscilan entre 0,1 y 0,3 mm
Como todos sabemos, las varices constituyen una de las patologías que de diámetro, suelen responder mejor a longitudes de onda entre 532 y
generan mayor demanda de atención sanitaria. No en vano representan, 595 nm, típicas de los laseres de colorante pulsados.
por ejemplo, la segunda lista de espera más numerosa de la sanidad
catalana. Las telangiectasias azules, con diámetros entre 0.5 y 1mm, suelen res-
ponder mejor con lásers de diodo con longitudes de onda de 800 a 980
Por ello, no es de extrañar que se busquen alternativas terapéuticas a la nm, o a los de Nd:YAG.
cirugía tradicional, basada en la ligadura de cayado de safena interna,
stripping y resección de redes varicosas. Asimismo, hay que mencionar la Las distintas longitudes de onda proporcionan, fundamentalmente, dife-
creciente demanda de tratamientos con finalidad únicamente estética. rente penetración de la luz en los tejidos.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 121


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Técnica – Infiltración del trayecto de la vena con anestesia local.


Las vías de acceso son: – Aplicación de la energía láser mediante pulsos de pocos
segundos,desplazando lentamente la fibra óptica, repitiendo los dis-
– Percutánea a través de cristal de zafiro.
paros cada pocos centímetros. Se utilizan energías de entre 6 y 12
– Transdérmica por medio de fibra óptica vatios, dependiendo del tamaño de la vena.
Puede utilizarse como agente anestésico el frío por contacto. – Puede repetirse el procedimiento en otras venas, o complementarse
con esclerosis química o flebectomía, en el mismo acto o en un
Debe utilizarse un gel como protector de la piel. segundo tiempo.
Parece que mejoran los resultados si se asocia esclerosis química, sobre- – Colocación de vendaje compresivo o media elástica.
todo si se consigue localizar un vaso nutricio de la telangiectasia. – El paciente puede deambular inmediatamente y reanudar su activi-
dad habitual.
Es aconsejable esperar aproximadamente un mes antes de repetir el tra-
tamiento en la misma zona. Resultados
La mayoría de pacientes presentan, a las 24 horas y durante 7 a 10 días
Efectos secundarios equimosis y discreta induración en el área de aplicación de la terapia.
Son fundamentalmente de tipo estético y consisten en:
En la bibliografía consultada no se registra ningún tipo de complicación
– Hiperpigmentaciones
mayor, como podría ser trombosis venosa profunda.
– Hipopigmentaciones
– Quemaduras superficiales Se comunican porcentajes de éxito del 93 al 97% durante el primer
– Aparición de “matting” trimestre, entendiéndose por fracaso la recanalización de la vena tratada,
confirmada por Eco-Doppler.

Tratamiento de varices. Láser endovenoso


Conclusiones
Definición La técnica láser se consolida como una alternativa válida para el trata-
El láser endovenoso es una técnica que permite el tratamiento de las
miento de un amplio rango de varices.
varices mediante la introducción de un catéter de fibra óptica en el interior
de su luz. Se utiliza el láser de diodo, y se realiza ambulatoriamente y bajo En función de los resultados publicados, podemos considerar que el láser
anestesia local. Se aconseja realizar la técnica bajo control ecográfico. endovenoso ofrece resultados similares a la cirugía tradicional.

Objetivos Se trata de una técnica segura, con escasas complicaciones.


– Tratar los puntos de fuga o reflujo, como las uniones de safenas con
femoral o poplítea. Bibliografía recomendada
– Tratar cualquier shunt veno-venoso encontrado
Anastasie B, Celerier A, Blanchemaison P. Bases teóricas y técnicas de los tratamientos láser
– Ocluir todo el tronco venoso cateterizado, para que posteriormente vasculares.
se fibre y reabsorba.
Boné C, Navarro L. Láser endovenoso: una nueva técnica mínimamente invasiva para el
Material tratamiento de las varices. Anales de cirugía cardiaca y vascular 2001;7.
– La fuente láser más comúnmente utilizada es el láser diodo con Boné C. Tratamiento endoluminal de las varices con láser de diodo. Estudio preliminar.
longitud de onda de 980 nm Revista de patología vascular 1999;5.
– La energía se administra a través de una fibra óptica de 600 nm, que Boné Salat C. Nuevo tratamiento láser transdérmico de las telangiectasias. Patología
se introduce endoluminalmente a través de un catéter Vascular;Vol.8.
– Se controla el emplazamiento de la fibra óptica a través de Eco-Doppler, Chang CJ, Chua JJ. Endovenous laser photocoagulation (EVLP) for varicose veins. Lasers Surg
o bien por transiluminación de la piel por el haz de láser guía Med 2002;31.
Dover JS, Sadick NS, Goldman MP. The role of lasers and light sources in the treatment of leg
Criterios de exclusión veins. Dermatol Surg 1999;25.
– Embarazo Elias SM, Frasier KL. Minimally invasive vein surgery. The Mount Sinai Journal of Medicine
– Antecedentes de trombosis venosa profunda. 2004; 71.
– Arteriopatía obliterante
– Duplicaciones o malformaciones de los ejes safenos

Técnica
Técnicas novedosas en el tratamiento
– Marcaje de las varices con Eco-Doppler, para determinar los puntos de las varices
de reflujo.
– Infiltración con anestesia local del punto elegido para la introduc- E. Roche. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular
ción del catéter. Correspondencia: Enric Roche. Clínica Platón. Fundació Privada
– Cateterización de la vena, que puede realizarse percutáneamente o Torreblanca 18, 4º 3ª - 08970 Sant Joan Despí
bien mediante exteriorización de la vena a través de una pequeña
incisión.
– Posicionamiento del catéter en el lugar elegido para iniciar el dispa-
Introducción
ro. En el caso de tratarse de la unión safenofemoral, debe situarse a Durante los últimos diez años los principales avances tecnológicos apli-
unos 2 o 3 cm de la misma. cados a las patologías vasculares se han centrado en el desarrollo de

122 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

dispositivos endovasculares. Por otro lado el tratamiento de la patología El sistema de irrigación-iluminación esta formado por una cánula de
venosa no ha experimentado un fenómeno de innovación hasta hace acero de doble luz a través de la cual tenemos una fuente de luz fría y el
relativamente pocos años. conducto de irrigación por donde se instila una solución de suero fisioló-
gico acompañada de anestésico local y adrenalina (1000 cc Suero Fisio-
La patología venosa cuando se manifiesta en forma de varices tiene y ha lógico, de 50 a 80 cc al 1% de xilocaína y 2 cc 1:1000 de adrenalina).
tenido desde hace tiempo un trato de patología menor, de enfermedad Este instrumento sirve para realizar la tumescencia o infiltración de la
crónica con poca repercusión en el estado general del enfermo. En la anestesia que se puede asociar la anestesia intradural o sedación. Este
historia existen numerosas citas que hacen referencia al tratamiento de procedimiento además favorece el despegamiento de los paquetes
las varices. Ya desde la antigua Grecia y en la era hipocrática se hacen las varicosos. El suero está conectado a un presurizador que aporta una
primeras referencias a esta dolencia y a sus posibilidades terapéuticas1 . presión que debe oscilar entre 500 cc a 800 cc. La fuente de luz fría
Desde hace 2000 años se han estado realizando numerosas intervencio- realiza produce la transiluminación de las venas a través del tejido celu-
nes sobre el sistema venoso y éstas han ido desde las punciones, esclero- lar subcutáneo, favoreciendo la extirpación del paquete venoso mediante
sis, flebectomías y ligaduras hasta las más novedosas técnicas de escle- visualización directa.
rosis endovenosas mediante láser o radiofrecuencia2-3. La tendencia que
durante más años ha estado vigente es la que basa el tratamiento en El resector se compone de un mango que contiene un motor que regula la
extirpación de los paquetes varicosos. Este procedimiento al ser más velocidad y sentido de la oscilación. La cuchilla oscilante es la encargada
agresivo parece haber sido el que menos recidivas a presentado4 . Por ese de atrapar la vena, triturarla y succionar sus restos a través del sistema de
motivo el procedimiento basado en la flebectomía supone la estrategia aspiración a un contenedor (Figura 1).
más difundida en todas las escuelas. Partiendo de esa premisa en 1998
se inició la comercialización de un sistema de extracción de varices que
pretendía obtener mayor eficiencia en la intervención; mejorar los resulta- Nuestra experiencia con el Trivex
dos estéticos, ser más rápido y menos invasivo, sin representar un cam- Todas las intervenciones se han realizado con anestesia raquídea.
bio conceptual en el tratamiento clásico de las varices. Este procedimien-
to utilizaba la transiluminación de los paquetes varicosos y la resección El procedimiento empieza con la safenectomía tradicional, que nosotros
mecanizada de los mismos. Su nombre comercial es el de Trivex y respon- hemos realizado mayoritariamente desde la zona maleolar hasta la ingle.
de a la técnica de flebectomía por transiluminación. El procedimiento Trivex supone la realización de las flebectomías de los
paquetes varicosos. Al abrir la ingle se realiza el primer paso del procedi-
Otro de los procedimientos que abordaremos supone la aplicación de la miento: la tumescencia. Consiste en la infiltración de la solución anestésica
filosofía mínimamente invasiva endovascular al mundo de la patología del canal donde discurre la vena safena interna. Posteriormente se realiza
venosa. el stripping. A continuación se realizan dos incisiones de 2-3 mm (Figura
2) situadas estratégicamente para permitir la introducción del iluminador
Es bien conocida la aplicación del láser en el tratamiento percutáneo de y resector en ambas posiciones y así realizar la flebectomía por transilumi-
las varículas, que pretende obstruir o coagular su contenido mediante nación. Al finalizar la resección se realiza una segunda etapa de
aplicación de calor. Basándose en el mismo principio de agresión térmica tumescencia o infiltración de suero. Esta tiene como objetivo drenar res-
del vaso sanguíneo, el láser endovenoso y el sistema de esclerosis me- tos hemáticos y favorecer la hemostasia.
diante radiofrecuencia (Vnus Closure®) pretenden ocluir la luz venosa por
fibrosis endoluminal. Hablaremos de la radiofrecuencia como una de las Posteriormente, se cierran las heridas con sutura de monofilamento del
alternativas actuales al tratamiento de las varices. 4/0 y se coloca vendaje compresivo.
Para valorar la eficacia de este nuevo sistema y compararlo con la cirugía
Sistema Trivex convencional realizamos un estudio prospectivo.
El sistema Trivex se compone de varios elementos, los instrumentos de Desde principios de 2002 iniciamos este estudio descriptivo no
mano o quirúrgicos: sistema de irrigación más transiluminación y el randomizado que pretendía valorar la efectividad del sistema de
segundo elemento es el mecanismo resector- aspirador. Ambos instru- flebectomía por transiluminación Trivex® en pacientes con varices. Las
mentos van conectados a sendas consolas que aportan la fuente de luz variables evaluadas fueron el sexo, edad, clasificacion clínica CEAP, tiem-
fría y el generador de energía del motor resector. Existe una bomba infusora po quirúrgico total, procedimientos asociados y número de incisiones.
de suero preparado para realizar la tumescencia. Tras la intervención se realizó control clínico a las 48 horas, control al

Figura 1 Figura 2 Figura 3

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 123


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

séptimo día de la intervención y recogida de variables subjetivas como la técnica Trivex presentó en un 40% algún tipo de secuela frente a un 10%
presencia de dolor en la extremidad y características del mismo. También de secuelas en el grupo de cirugía convencional a los cuatro meses de la
el investigador valoró la presencia de hematoma: leve-moderado-impor- intervención. Por tanto podemos concluir que a pesar de los resultados
tante. presentados en otros trabajos5,6 en nuestra experiencia el procedimiento
no sólo no aporta ventajas sino que además de encarecer el procedimien-
Se registraron las incidencias u otras complicaciones. Se realizaron nue-
to presenta más secuelas.
vos controles a los 30 días, a los cuatro meses y al año recogiendo en
cada una de la visitas la presencia de posibles secuelas, varices residuales,
complicaciones, preguntándose explícitamente sobre la satisfacción en el Esclerosis por radiofrecuencia: Vnus Closure
resultado.
El sistema conocido como Closure® es una patente que se realizó en
Seleccionamos una muestra de 40 procedimientos convencionales con- 1998 por Vnus Medical Technologies. Esta tecnología comprende un
secutivos desde marzo hasta mediados de abril de 2003. Realizamos generador de energía o radiofrecuencia (Figura 3) y el sistema de oclusión
una valoración prospectiva de los casos a los cuales se les intervino formado por diferentes catéteres (Figuras 4 y 5) de diámetros 6F y 8F, que
mediante procedimientos no mecanizados y siguiendo la práctica habi- pueden tratar venas de calibres que van desde los 2 mm a los 12 mm. Los
tual de stripping y flebectomías realizadas mediante ganchillo. Recogi- catéteres guía que se utilizan son de 0,025” y actualmente se integran en
mos las mismas variables pre y postquirúrgicas y se registraron a los siete un nuevo sistema armado de control manual (Figura 6).
días y a los cuatro meses.
El efecto que producen sobre el interior del vaso es la quemadura interior
Resultados provocando el encogimiento o repliegue de la pared venosa originando la
De febrero de 2002 a marzo de 2003 se incluyeron 38 procedimientos fibrosis posterior de la vena (Figuras 7 y 8).
Trivex en 37 pacientes. La edad media de este grupo fue de 58 años; Aunque el coste del aparato es variable, se calcula que el generador de
siendo 28 mujeres y 10 hombres. El grupo de safenectomía seleccionado energía puede venderse a partir de 12.000 euros. Debe añadirse a cada
consecutivamente de marzo a abril de 2003 se compone de 40 procedi- procedimiento el coste del catéter cuyo coste mínimo partirá de los 500
mientos. Este grupo presentó una edad media de 53 años y estuvo com- euros.
puesta por 25 mujeres y 15 hombres. Al comparar las series han resul-
tado ser homogéneas en cuanto a sexo ( χ2 :1.12; p:0.29), edad (F:1.218; Procedimiento
t:1.104; p:0.273) y clasificación clínica CEAP ( χ2 :0.01; p:0.94). Está indicado en pacientes que presenten reflujo venoso en territorio de
Tanto la serie de Transiluminación como la convencional no mostraron safena interna con diámetro máximo de 12 mm. Se aconseja incluir
diferencias respecto a tiempo quirúrgico (F:1.926; t:1.388; p:0.0.169), pacientes que no presenten segmentos venosos dilatados o venomas.
Tampoco esta recomendado cuando existe una excesiva tortuosidad de la
siendo la media de tiempo del procedimiento convencional más
vena safena, ni antecedentes de tromboflebitis superficial.
flebectomía trivex de 45,18 minutos, frente a 40,97 minutos al segundo
grupo. Tampoco el hematoma postquirúrgico ha presentado diferencias La anestesia a utilizar dependerá de cada cirujano pero puede utilizarse
significativas (χ2 :3.66; p:0.16), si bien ha existido cierta dificultad en anestesia tumescente a lo largo del trayecto de la vena a tratar y asociar
diferenciar el hematoma del procedimiento convencional de la equimosis una leve sedación endovenosa para relajación del paciente. Durante la
secundaria a la flebectomia Trivex. instilación de la anestesia tumescente se aconseja realizar un control
En la serie de transiluminación la media de incisiones practicadas fue de mediante Eco-Doppler para comprobar la correcta difusión del anestési-
5,8 (rango 2-10). Se encontraron diferencias significativas en cuanto a co evitando la perforación de la vena a tratar. En los primeros casos
puede realizarse anestesia raquídea para trabajar más cómodamente. El
dolor postoperatorio (χ 2 :11.92; p:0.00045) y secuelas (χ 2 :8.92;
paciente debe colocarse en posición Trendelemburg unos 15 a 30º. La
p:0.0028) siendo la técnica de transiluminación la peor valorada.
introducción del catéter de oclusión puede realizarse mediante la punción
También existió una diferencia estadísticamente significativa respecto a la percutánea o mediante introducción bajo visión directa tras la disección
satisfacción del paciente (χ2 :12.29; p:0.00055) en detrimento de la quirúrgica de la vena. La cateterización suele realizarse nivel de safena
nueva técnica. La complicaciones más relevantes de la nueva técnica interna por encima de la rodilla o en la zona genicular dependiendo del
fueron los hematomas 76%, dolor neurítico 15%, secuestros de grasa y diámetro de la propia vena. El diámetro debe permitir la introducción de
dolor postoperatorio 55,2%. Globalmente el grupo intervenido mediante un catéter de 0,025” a través de una aguja de 19 gauge.

Figura 4 Figura 5 Figura 6, 7 y 8

124 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

Una vez introducido el catéter se le hace progresar hasta el cayado de la El estudio EVOLVES (ensayo clínico multicéntrico y randomizado) más
safena interna justo por debajo de las colaterales epigástricas. Para ini- reciente publicado por Lurie9 y presentado en Septiembre de 2003 en el
ciar la liberación de energía colocamos la extremidad a 30º drenamos el congreso de Dublín de la European Society for Vascular Surgery compa-
contenido venoso mediante masaje o compresión, e iniciamos los dispa- ra los resultados clínicos y calidad de vida de 80 pacientes sometidos a
ros tratando cada cm de vena a 85ºC durante 1 minuto. Posteriormente radiofrecuencia (n= 44) o a cirugía convencional (n=36). Para el estu-
se tratan de 2-3 cm por minuto hasta llegar a la zona de inserción del dio colaboraron cinco centros (2 Franceses, 1 austríaco, 2 norteameri-
catéter. Inmediatamente después debemos comprobar ecográficamente la canos), se les controló a las 72 horas, 1 semana, 3 semanas y 4 meses.
desaparición del reflujo a través de la vena y el engrosamiento de las Todos ellos completaron el test CIVIQ2. Los resultados inmediatos obte-
paredes de la misma. Puede repetirse el procedimiento al visualizar un nidos mostraron una oclusión completa del 95% en el grupo Closure,
resultado incompleto o algún segmento permeable y con diámetro sufi- frente a un 100% de la safenectomía. Un 16,3% de casos realizados
ciente para recanalizarlo. con radiofrecuencia presentaron repermeabilización de algún segmento
safeno. Existe una diferencia estadísticamente significativa a favor del
Se aconseja la colocación de medias compresivas clase 2 (20-30 mmHg) grupo de RF respecto a dolor postoperatorio e incorporación al trabajo,
al menos durante 24-72 horas. También se recomienda la deambulación si bien estas diferencias manifestadas en el QOL disminuyen con el
precoz, evitar periodos largos de ortostatismo y se aplican los mismos tiempo.
cuidados que en cualquier herida quirúrgica.
Uno de los interesantes resultados de este trabajo comparativo muestran
Es importante el seguimiento de estos pacientes para comprobar la oclu- que la presencia o no de ligadura de la safena proximal no interviene en
sión venosa y para detectar una posible neovascularización local que
el resultado posterior. Este hallazgo concuerda con los trabajos de Jones 10
podría provocar una recidiva precoz.
o Dwerryhouse S donde el hallazgo de neovascularización, entendiendo
Resultados y experiencia como tal la aparición de venas serpinginosas provenientes de la vena
femoral mayores de 4mm, ronda el 50% en los casos en la ligadura de
Esta tecnología fue aplicada por primera vez en Estados Unidos en Febre-
cayado de safena. Por tanto parece lógico que pudiendo aplicar una
ro de 1998 asociada a la ligadura del cayado safeno-femoral. La prime-
ra presentación de la técnica se realizó en el XIII World Congress of terapéutica percutánea no está justificada la crosectomía.
Phlebology celebrado en Septiembre de 1998 en Sydney, donde el Dr. Uno de los autores que ha aportado la serie más extensa de procedimien-
Weiss presentó su experiencia inicial. Desde ese momento hasta la actua- tos, M. Whiteley11 presentó su casuística de más de 1.000 procedimien-
lidad este nuevo procedimiento ha generado más de una veintena artícu- tos también en la última edición de la reunión de la ESVS reporta un índice
los publicados en revistas indexadas, numerosas presentaciones en con- de éxitos inmediatos u oclusión de 99.5%, una recurrencia ecográfica y
gresos internacionales, seis capítulos de libros y dos estudios prospectivos clínica a un año 5% y 3,2%, a dos años 7,5% y 3,8% y a tres años 6,5%
y randomizados. Se calcula que se han realizado más de 30.000 proce- y 4% respectivamente. Concluye que tras su extensa experiencia la
dimientos en todo el mundo. radiofrecuencia puede reemplazar a la safenectomía convencional con
El autor con más experiencia y promotor del procedimiento fue el Dr. unos bajos índices de recurrencia a tres años.
Weiss que trabaja en el departamento de Dermatología de la Johns Hopkins
University School of medicine en Baltimore y reporta en su trabajo con 2 Comentario
años de seguimiento los siguientes resultado2 . El inglés Mark S. Whiteley
es otro de los autores más prolíficos en su utilización. No cabe duda que la evolución de la tecnología es imparable y que la
aplicación de nuevos sistemas basados en la sofisticación de los procedi-
El estudio de Weiss recoge 140 procedimientos realizados en 120 pa- mientos ha llegado a la patología venosa. Hasta hace muy poco el trata-
cientes. consiguiendo la oclusión (ausencia de reflujo venoso safeno- miento quirúrgico de las varices no se distinguía mucho de lo que se ha
femoral) del 98% en la primera semana de seguimiento. Tras dos años de estado haciendo desde haces más de cien años. La depuración de la
seguimiento se constató un 90% de oclusión completa. No se reportan técnica quirúrgica convencional y la aplicación de la anestesia local con
quemaduras cutáneas ni trombosis sintomáticas de safena. El autor con- objeto de favorecer la cirugía mayor ambulatoria han sido la tendencia
cluye que el tratamiento permite evitar las molestias propias de los proce- más consolidada de los últimos diez años. Ha coincidido con la entrada
dimientos convencionales, la anestesia general y/o raquídea ofreciendo del nuevo milenio la eclosión de nuevos procedimientos minimamente
buenos resultados y mínimas complicaciones. invasivos (endolaser, closure, trivex y espumas) para el tratamiento de
Chandler 7 presenta los resultados de un estudio multicéntrico y prospectivo una patología que durante años ha estado un tanto olvidada. Si bien esto
que incluye 301 tratamientos en 273 pacientes cuyo índice de oclusión ha supuesto una fuente de renovación, y entusiasmo conviene esperar a
inmediata fue del 96%. Las complicaciones más frecuentes fueron tener resultados a medio y largo plazo para poder afirmar que estos
tromboflebitis 6,7%, parestesias 19%, quemadura de piel 2,7% y 1,4% nuevos procedimientos van a ser al menos tan efectivos como los proce-
tromboembolismo pulmonar. La aparición de reflujo o recanalización a los dimientos convencionales. Ahora, por el momento, ya sabemos que son
5 meses fue del 7,2%. En 2002 Rautio, et al.8 publicaron un estudio más caros, y menos invasivos, por lo que nos queda comprobar que este
comparativo de eficacia y de costes entre la safenectomía convencional y el mayor coste inicial se compensará por la incorporación precoz al trabajo
procedimiento RF. Incluyeron en el estudio a 28 pacientes que randomizaron y por otro lado si el índice de recidiva es aceptable.
en dos grupos (N=15 Closure y n=13 stripping), se realizaron test de
Particularmente creo que la cirugía convencional entendida como la abla-
calidad de vida postoperatoriamente (RAND-36) y se calcularon los costes
ción mediante extirpación de la vena safena interna o externa es un pro-
de los procedimientos y de la repercusión de costes por día de baja laboral. cedimiento en vías de extinción, ya sea para dar paso a procedimientos
Las principales conclusiones a las que llegaron fueron que el procedimien-
endoluminales (láser, closure), a estrategias hemodinámicas o incluso a
to endovenoso era menos doloroso, favorecía la incorporación laboral más
las esclerosis con espumas o otros productos.
precoz y a pesar de ser una intervención más cara para el hospital, el
ahorro social que generaba al promover una reincorporación laboral com- Me pregunto ¿por qué debe existir una técnica de aplicación universal?
pensaba este mayor gasto, siempre y cuando se realizara un número minimo ¿Acaso no realizamos a nuestros enfermos arteriales una u otra técnica
de casos anuales de pacientes en edad laboral. según cada caso?

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 125


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Estoy convencido de que lo óptimo es conocer cada una de las técnicas o 330 extremidades inferiores con recidiva postoperatoria de varices tratadas entre 2
recursos que actualmente tenemos y aplicar éstas de forma individualizada meses y 40 años antes.
en función del estudio ecográfico venoso, el cual sí considero fundamen- 50 pacientes con malformaciones vasculares congénitas, predominantemente
tal antes de cualquier procedimiento. venosas. 15 con síndrome de Klippel-Trenaunay, 16 con malformaciones predomi-
nantemente venosa infiltrantes y 19 con malformaciones circunscritas, bien limita-
das.
Bibliografía Resultados: 81% de los ejes safenos varicosos tratados han desaparecido
ecográficamente y todas las varices superficiales en el 96,5% de los pacientes.
1. Bergan J. Evolution of varicose vein. In: Advances in vascular surgery. Mosby
De 180 miembros tratados con úlceras venosas, 163 (90,6%) cerraron con un
1998;6(6):81-91.
tiempo medio hasta el cierre de 2,7 meses; 9 nunca curaron y en 8 se perdio el
2. Weiss Ra, Weiss MA. Controlled radiofrequency endovenous occlusion using aunique seguimiento. Recurrieron 28 extremidades (20 con incompetencia del SVP y 8 con
radiofrequency catheter under duplex guidance to eliminate saphenous varicose vein incompetencia superficial y/o de perforantes.
reflux: a 2-year follow-up. Dermatol Surg 2002 Jan;28(1):38-42.
En los pacientes recidivados tras cirugía previa de varices, las comunicaciones
3. Min R, Khilnani N, Zimmet S. Endovenous laser treatment of saphenous vein reflux: incompletas con el SVP ocluidas en 310 (94%); todas las varices superficiales
long-term results. JVIR 2003;991-6. eliminadas; desaparición de los síntomas o gran mejoría (92%).
4. Dwerryhouse S,Davies B, Harradine K, et al. Stripping the long bsaphenous vein En 19 pacientes con malformaciones vasculares congénitas se obtuvo un excelente
reduces the rate of reoperation for mrecurrent varicose veins:Five-year results of a resultado; en 16 buen resultado; en 13 moderada mejoría y en 2 no se observaron
randomized trial. J Vasc Surg 1999;29:589-92. cambios.
5. Spitz GA, Braxton JM, Bergan JJ. Outpatientvaricose vein surgery with tran-silluminated Conclusión: La escleroterapia con microespuma de Polidocanol mejora de forma
POWERED Phlebectomy. Vasc Surg 2000;34:547-55. espectacular los resultados tradicionalmente obtenidos mediante cirugía en estos
6. Arumugasamy M, McGreal G, O'Connor A, et al. The technique of transillu-minated pacientes y revoluciona el tratamiento de estas enfermedades venosas.
Powered Phlebectomy-A novel minimally invasive treatment for varicose vein Surgery.
Eur J Vasc Endovasc Surg 2002;23:180-2.
Introducción
7. Chandler J, Pichot O, Sessa C, et al. Defining The role of extended saphen-ofemoral
Junction Ligation: A Prospective Comparative Study. J Vasc Surg 2000;32:941-53. Al realizar esclerosis de pequeñas varices y de telangiectasias, observa-
8. Rautio T, Ohinmaa A, Perälä J, Ohtonen P, Heikkinen T, Wiik H, et al. Endovenous mos que el líquido inyectado desplaza la sangre que contienen y ocupa su
obliteration versus conventional stripping operation in the treatment of primary varicose luz. El esclerosante, visible a través de la piel, los rellena de una manera
veins: A randomised controlled Trial with comparison of cost. J Vasc Surg 2002;35:958- homogénea, contacta sin dilución con todo su perímetro endotelial y si
65. continuamos la inyección, el tiempo de contacto esclerosante-endotelio
9. Lurie F, Creton D, Eklof B, Kabnick LS, KistnerRL, Pichot O, et al. Prospective puede prolongarse a voluntad. En estos vasos se logran los objetivos de la
randomised Study of Endovenous Radiofrequency obliteration (Closure) ver-sus Ligation escleroterapia: Conocimiento de la concentración intravascular del
and Stripping in a selected patient population (EVOLVES Study). J Vasc Surg
esclerosante, su homogéneo reparto sobre la superficie endotelial y con-
2003;38:207-14.
trol del tiempo de contacto esclerosante-endotelio.
10. Jones L, Braithwaite BD, Selwyn D, et al. Neovascularization is the Principal cause of
varicose vein recurrence: results of a randomized trial of stripping the long saphenous Alcanzar estos objetivos en grandes varices, exige evacuar la sangre que
veuin. Euro J Vasc Endovasc Surg 1996;12:442-5. contienen, ocupar el vaso completamente y en toda su longitud con el
11. Whiteley MS, Holstock JM, Price BA, ScottMJ, Gallager TM. Radiofrequency Ablation producto inyectado y mantenerlas llenas el tiempo necesario.
of Refluxing Great Saphenous Systems, Giacomini veins, and in-competent Perforating
veins using VNUS Closure and TRLOp Technique. Journal of Endovascular Therapy Esto no ha sido posible conseguirlo hasta el momento por estar los
2003;10:1-46. esclerosantes líquidos sujetos a: Inexorable dilución con la sangre, a
volumen insuficiente a dosis terapéuticas, a distribución poco homogé-
nea sobre los endotelios, a un imperfecto manejo una vez inyectados y a
Microespuma. Fase actual de desarrollo imposibilidad de ser visualizados en el torrente circulatorio.
Para paliar estas importantes limitaciones, el médico efectúa una serie de
J. Cabrera. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular maniobras que le proporcionan cierto gobierno sobre el líquido
esclerosante que inyecta: sobreeleva el miembro antes de la inyección,
Correspondencia: Juan Cabrera. Clínica Dr. Juan Cabrera
secuestra entre los dedos el producto inyectado, administra esclerosantes
Texeiro, 2 - 18005 Granada
más densos o bien dos de densidad distinta y a diferentes niveles buscan-
do sinergia de acción, comprime por encima del punto de punción des-
Resumen pués de la inyección, incrementa la concentración del esclerosante, lo
inyecta de forma escalonada a lo largo del eje tratado, lo administra a
Objetivos: Valorar los resultados obtenidos tras ecoesclerosis con microespuma de
Polidocanol en pacientes con: A) safenas internas varicosas de tradicional indicación dosis crecientes y en varias sesiones, sobreeleva y baja el miembro des-
quirúrgica y desarrolladas varices de miembros inferiores; B) úlceras hipertensivas pués de la inyección, distribuye el esclerosante a lo largo de la safena a
venosas de extremidades inferiores; C) recidivas importantes, en pacientes interve- través de un catéter en movimiento durante su inyección, etc.1-6. Estas
nidos de varices; D) malformaciones venosas inoperables en territorios diversos. En maniobras tienen el objetivo común de lograr la mejor acción posible del
todos los pacientes tratados se han anotado cualquier tipo de efectos secundarios, producto utilizado: unas buscando disminuir su dilución con la sangre,
complicaciones y valorados los resultados a largo plazo. otras promoviendo un mejor reparto intravascular y por tanto un efecto
Material y métodos: Hemos reexaminado 415 pacientes tratados de varices tronculares más homogéneo sobre el perímetro endotelial y otras terceras, prolongan-
de la safena interna, (500 extremidades inferiores) tratados entre julio de 1993 y do el tiempo de contacto esclerosante-endotelio.
julio de 1996 y sus fotografías en color de las piernas antes y después del tratamien-
to. La unión safenofemoral incompetente tenía en todos los pacientes un diámetro También se practican técnicas mixtas, que combinan la ligadura quirúrgi-
mayor de 9 mm. ca del cayado safeno interno con la esclerosis propiamente dicha, como
241 úlceras venosas en 180 piernas de 175 pacientes, de una antigüedad media de el Varicide7 , la técnica Savas o la técnica 3S8-10. Recientemente se ensaya
5,81 años, con evolución controlada tras tratamiento de 3,81 años. la colocación percutánea de un clip endosafeno a nivel del cayado, que al

126 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

provocar la oclusión in situ de este enclave, facilita la esclerosis ulterior diarrea severa, pero transitoria, por isquemia cólica después de la inyec-
del territorio venoso subyacente11 y también la irritación endotelial con ción de 2.000 cc. en un aneurisma de aorta 26,27 .
corrientes de radiofrecuencia, o una fuente de calor láser, mediante un
dispositivo intraluminal, a fin de restaurar la valvulación en unos casos o Entre las ventajas del CO2 destacan su fluidez que permite emplear finos
provocar la oclusión estable del eje safeno en otros. catéteres, la ausencia de toxicidad que autoriza la administración de
volúmenes importantes y su economía. Por eso, su utilización en
Estos procedimientos que son la respuesta a la creciente demanda de angiografía de troncos viscerales abdominales y extremidades inferiores
métodos terapéuticos resolutivos, de mínima agresividad y poco costo- experimenta un renovado interés 25,28 .
sos, evidencian las actuales limitaciones de los esclerosantes líquidos
También con fines de diagnóstico, actualmente se fabrican microcápsulas
sobre vasos de cierto volumen o alta velocidad circulatoria.
o micropartículas huecas rellenas de gas, como el Albunex (Nycomed
Nuestra aportación, basada en la inyección de esclerosantes en forma de Imaging AG), los Levovist y Echovist de Schering y el más reciente y estable
un específico tipo de microespuma de mínima talla de burbuja realizada Echogen de Abboth (microburbujas de Dodecafluoropentano). Dotadas
con gases fisiológicos solubles y difusibles 12 permite una considerable de un límite material sustantivo, el gas empleado es estrictamente
reducción de la dosis del esclerosante utilizado y un importante incre- encapsulado y realizadas en un rango de diámetros entre 4 y 10 micras,
mento de acción sobre los endotelios. Además hace visible ecográficamente consiguen el tránsito transpulmonar tras su administración i.v. Su utili-
su trayectoria a través de los vasos y logra la esclerosis de gruesos ejes dad como aumentador de señal, en ecocardiografía y ecografía vascular
safenos y voluminosas varices, hasta el momento sólo accesibles a la es diversa.
cirugía. En definitiva, solventa las limitaciones de la escleroterapia con-
vencional y la eleva al rango de procedimiento terapéutico de elección en La metabolización del gas englobado es lenta y progresiva conforme se va
los casos en que se encuentre indicada la eliminación anatómica y fun- disolviendo en la sangre su envoltura (albúmina, galactosa...) 29,30 .
cional de un extenso territorio venoso patológico 12,13 . Preliminares de nuestra técnica
En 1992, pudimos observar la diferente cinética intravascular de un bolo
Cirugía de gas y la microespuma, al efectuar flebografías con CO2 a cuatro pa-
cientes con gruesas varices ectásicas de la safena interna.
Antecedentes
Orbach describe en los años cuarenta la inyección intravenosa de un En decúbito, se colocó una aguja en la safena interna a nivel del tercio
pequeño bolo de aire antes de inyectar el esclerosante14 y poco tiempo inferior del muslo y a su través, inyectamos un bolo de 50 cc de CO2 que
más tarde comienza a utilizar una espuma de Tetradecyl Sulfato de Sodio difundió inmediatamente por su interior y se repartió de forma homogé-
de gran diámetro de burbuja15 ; observa con ambos métodos una mayor nea en sentido proximal y distal al punto de inyección, a todo lo largo de
acción de esta sustancia. Posteriormente Stemmmer verifica en un mode- los vasos avalvulados; el gas permaneció en ellos inmóvil y ni los cam-
lo experimental que en diámetros superiores a 4 mm. El aire inyectado bios posturales, en decúbito, ni los movimientos de flexión de rodilla y
forma una burbuja que flota en su interior y no desplaza el líquido en muslo modificaron las imágenes aéreas en la safena y ramas varicosas
horizontal16 . de las piernas; la aspiración con la jeringa, a través del mismo sistema de
inyección, obtuvo sangre líquida y nada o muy poco del gas introducido:
Desde entonces las técnicas de bolo de aire y de la espuma sólo han el CO2 había formado una burbuja continua que flotaba sobre la sangre
tenido utilidad en la esclerosis de pequeñas varices donde el aire o la de los vasos hasta la unión safeno-femoral, no siendo radiologicamente
espuma inyectada ejercen acción mecánica y al desplazar la sangre del visible a partir de ese punto.
interior de pequeños vasos incrementa la acción del esclerosante17 .
Igualmente pudimos apreciar que el CO2 inyectado no desaparecía de las
Teóricamente estos procedimientos podrían provocar un embolismo aé- ramas varicosas tras más de 30 minutos, que empleamos de media en
reo, pero no ha ocurrido en los 297 casos publicados por Orbach y realizar las diferentes radiografías, lo que sugiere que su eliminación va
tratados con la técnica del “air-bolus”14,17 , quizás debido a que la intro- más ligada a la existencia de una importante superficie de contacto con la
ducción de pequeños volúmenes de aire (3-4 cc.) en el sistema venoso es sangre que al tiempo de permanencia en ella.
generalmente bien tolerada. Recientemente Henriet18 publica la inyección
de 3-5 cc de espuma gruesa de Polidocanol, fabricada con aire atmosfé- Después de evacuar el gas de la safena y ramas varicosas, por expresión
rico, en 3.200 pacientes con pequeñas varices también sin incidentes manual y bipedestación, inyectamos a través de la misma aguja 20-25 cc
notables. Sin embargo está comprobado que la inyección IV de 8ml/kg de de una microespuma de poligelina, farmacologicamente inerte y observa-
aire, en 20-30 segundos, produce la muerte en animales de experimenta- mos que su comportamiento era diferente. Su difusión endoluminal fue
ción (480 cc en ese tiempo, sería la dosis letal para una persona de mucho más lenta que la del CO2, su desplazamiento distal fue apreciado
60Kg) 19,20 . por el cambio de color de las varices rellenas de ella y el proximal se
observó con el sistema de escopia radiologica. La aspiración que efectuá-
Otros gases fisiológicos se eliminan mejor. Así el CO2, por vía intravenosa, bamos secuencialmente con la jeringa, extraía sólo la microespuma in-
se emplea a dosis de 50-100cc como contraste para el diagnóstico troducida, comprobando sorprendidos que el ariete formado por ella,
radiológico de hemopericardio y en ecocardiografía21-23. Bendib, et al. desplazaba la sangre del interior de los vasos que progresivamente que-
presentan experiencias sin complicaciones en mil pacientes, tras inyec- daba llenos exclusivamente de las microburbujas inyectadas.
tarles 200 cc en el corazón derecho 24 .
Las imágenes radiológicas fueron similares a las obtenidas con gas, pero
La administración intraarterial de C02 en angiografía se remonta a los el contenido endovascular era muy diferente según demostraban los aspi-
años cincuenta, pero recientemente, aprovechando mejoras de software rados: En el primer caso coexistían dos fases, gas/sangre y en el segundo
radiológicos, Fermand, et al.25 efectúan aortoarteriografías inyectándolo el único elemento de ocupación endovenosa era la microespuma inyecta-
a un ritmo de 30 cc/seg sin observar ningún efecto secundario, incluso da.
después de administrar hasta 450 cc en una exploración. Hawkins, et al.
publican resultados en más de 700 arteriografías en aorta subdiafrag- Tras esta experiencia llegamos a la conclusión de que la microespuma, al
mática con este gas sin accidentes importantes; tan sólo describen una desplazar la sangre contenida en gruesas varices y ocupar en exclusiva su

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 127


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

luz, podía ser un excelente vehículo de los esclerosantes que nos permitie- La microespuma fue preparada a partir de ingredientes activos autoriza-
ra administrarlos a concentración intravascular conocida, conseguir una dos por dos farmacéuticos que han contribuido a nuestro trabajo.
acción homogénea en todo el perímetro endotelial de un extenso segmento
venoso y proporcionar, al poderlos ver y manejar, un tiempo de contacto Los pacientes se trataron en decúbito supino, tras colocación en la safena
esclerosante-endotelio variable a voluntad. En definitiva que posibilitara interna del tercio medio-inferior del muslo de un catéter abbott 20G,
ayudados por control ecográfico. A su través se inyecto la microespuma,
controlar la acción de los esclerosantes incluso en zonas alejadas del
punto de inyección. que en una simple inyección ocupa el eje safeno desde la unión safeno-
femoral hasta las ramas varicosas de la pierna. Además de la informa-
Concretar el dominio de estos ambiciosos objetivos, que constituyen las ción ultrasónica, la aspiración de la microespuma inyectada, instantá-
metas soñadas de la escleroterapia, se persiguieron a todo lo largo del neamente revela por su color, el grado de ocupación intravascular
periodo inicial de nuestro trabajo. (blanco=exclusivo, rosa=parcial, rojo=no ocupación).
Un extenso y potente vasosepasmo sigue a la inyección de microespuma.
Material y métodos Las venas varicosas desaparecen de la vista en el instante. El paciente
puede moverse tras la inyección, pues el espasmo resiste la bipedestación
Esclerosantes en microespuma y la deambulación, siendo un excelente y precoz signo de la eficacia del
Es conocido que la mezcla de un gas en un líquido esclerosante surfactante, acto terapéutico.
forma burbujas con el límite inmaterial o evanescente del mismo líquido.
También pueden obtenerse de estos esclerosantes, con los coadyuvantes Una media elástica terapéutica se coloca inmediatamente y se mantiene
necesarios para su correcta formulación, microburbujas o micropompas hasta la próxima revisión.
de reducido diámetro y estabilidad suficiente para ser inyectadas en los
Resultados
vasos y que proporcionan al gas englobado y al esclerosante depositado
en su periferia, un gran incremento de superficie en relación a la que – En 500 venas safenas varicosas
poseen si este gas se inyectase en forma de bolo31,32 . Esta superficie se – Fibrosadas (desaparecidas tras un año) 81%
incrementa de manera exponencial conforme decrece el diámetro de las – Permeabilidad en algún segmento con reflujo 14%
burbujas; lo que unido a la alta solubilidad del gas incorporado, facilita – Permeabilidad sin reflujo 5%
su rápida metabolización por solubilidad en la sangre y difusibilidad – Desaparición de todas las ramas superficiales 96,5%
pulmonar31,32 . – Resultados
El esclerosante depositado sobre las microburbujas disfruta de este enor- – Safenas varicosas reinyectadas
me aumento de superficie activa a contactar con los endotelios, compara- – 1 reinyección 10,5%
do con la escasa que posee en forma líquida o depositado sobre burbujas – 2 reinyecciones 3,5%
de mayor diámetro.
Resultados úlceras
El escaso volumen de microespuma, (15-30 cc), que precisamos inyectar También presentamos nuestra experiencia en 175 pacientes consecutivos
en el tratamiento de las más gruesas varices de los miembros inferiores y con ulceraciones en 180 extremidades inferiores. Edad media 58,5 años
el bajo flujo al que se administra, son elementos añadidos de seguridad13 . (rango 27-90 años); 8,3% tenían más de 75 años. Edad media de las
úlceras 5,8 años (1mes-35 años); 149 miembros presentaban avalvulación
Selección de pacientes safena, 55 avalvulación del SVP y 101 avalvulación de perforantes.
A causa de la limitada acción de los esclerosantes líquidos, actualmente
se acepta la escleroterapia para la obliteración segmentaria de ejes safenos La inyección ecoguiada de microespuma de Polidocanol se efectuó en el
internos menores de 9 mm33 ; otros autores plantean como límite de indi- segmento superficial de la perforante adaptando el volumen inyectado a
cación los 7 mm, dependiendo del tipo de trabajo y sexo34 ; F.P. Vin lo sitúa la capacidad del lecho vascular receptor; en todos los casos se evitó el
en 8 mm medidos a 2 cm del cayado y propone un protocolo que contem- vertido de microespuma al SVP.
pla la administración de Iodo y Tetradecyl Sulfato de Sodio a dosis cre-
cientes a lo largo de varias sesiones e inyectados a diferentes niveles del Tras un tiempo de seguimiento de 3,7 años, de los 180 miembros trata-
eje safeno35 . dos, 163 (90,6%) curaron en un tiempo medio de 2,7 meses; 9 nunca
curaron y 8 se perdieron. 28 recidivaron (20 con avalvulación del SVP y
Para el tratamiento de ejes con mayores dimensiones queda la cirugía y 8 con incompetencia superficial y de perforantes). Después del
las técnicas mixtas aunque, con alguna de estas, se reconocen limitacio- retratamiento 14 continuaron abiertas (12 con incompetencia de SVP y 2
nes para obtener la esclerosis de algún grueso eje safeno10 . con incompetencia de perforantes). No hubo complicaciones mayores, en
particular TVP o embolia pulmonar.
Hemos revisado nuestra experiencia en ecoesclerosis realizadas entre
julio de 1993 y Julio de 1996 en 500 safenas internas varicosas con Resultados recidivas
incontinencia del cayado y avalvulación del eje y con diámetro de cayado Entre Enero 1996 y Diciembre 2002 se trataron 330 extremidades con
superior comprendido entre 9 y 32 mm; diagnosticadas mediante exa- varices recidivadas tras cirugía previa realizada entre 2 meses y 40 años
men físico y examen Eco-Doppler color. antes; pertenecían a 243 pacientes, 84 con recidiva bilateral (36%); 219
Todos los pacientes fueron inyectados con microespuma de Lauromacrogol mujeres y 24 varones. Edad media 49,7 (26-85); el 89% tenia más de
400 a concentración entre 0,6%-3%. Fotografías color de las piernas 65 años.
afectadas se realizaron antes y después del tratamiento. La eficacia del A los pacientes se les interrogó sobre la satisfacción tras la cirugía me-
tratamiento se confirmo con examen físico y ecografico en el primer trata- diante valoración de cicatrices, síntomas flebectásicos, venas varicosas y
miento y también en las sesiones de seguimiento 7 días, 1 mes, 3 meses, cambios en la piel.
6 meses y anual. Ningún efecto adverso se observo en los pacientes.
Documentos de evolución, disponibles, se emplearon en todos los pacien- – 173 (53%) se mostraron muy insatisfechos
tes de este grupo. – 130 (39%) insatisfechos

128 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

– 27 (8%) satisfechos Sin embargo la excelencia de los resultados hace menor este esfuerzo ya
– 245 (74%) recaída sintomática tras recidiva que las comunicaciones incompetentes con el SVP se ocluyeron estable-
– 41 (12%) persistencia de síntomas tras cirugía mente en 310 (94%); todas las varices superficiales eliminadas y el 92%
de los pacientes experimentaron desaparición de los síntomas o gran
– 44 (13%) sintomáticos tras cirugía y recidiva
mejoría (Tabla 1).
– Tipo de intervención sufrida
– 235 pacientes (71%) crosectomía S.I. + safeno extracción Conclusiones
– 57 (15%) extracción safena interna La enfermedad varicosa es progresiva.
– 12 Extracción safena interna externa
Las recurrencias ocurren tras una buena cirugía.
– 7 safena externa
– 26 (14%) varicectomía La corrección quirúrgica de las recurrencias (reintervención) es muy difícil.
– Origen de las recurrencias. Fuente del reflujo tras la intervención La terapia con ME es un método seguro y efectivo para el tratamiento de
+ Safena interna 47 la recurrencias post quirúrgicas:
– Unión safenofemoral 70 + Safena anterior 21
– Reduce costos y riesgos al paciente
+ Venas pélvicas 2
– Pocas contraindicaciones
– Unión safeno-poplítea 15
– Alto grado de satisfacción en los pacientes
La técnica consistió en la inyección, tras selección ecográfica, del punto/
s de fuga y de las vías de reflujo a diferentes niveles; pues al ser muy poco
frecuente la armonía anatómica en estos pacientes recidivados, las imá- Malformaciones
genes ecográficas muestran vasos irregulares, tortuosos e interconexio- De acuerdo con la clasificación de Mulliken y Glowacki, las anomalías
nados con un patrón caótico, que suele exigir numerosas inyecciones que vasculares congénitas se dividen en hemangiomas o malformaciones
cubren segmentos reducidos de estas vías de reflujo. Estas características vasculares. Las malformaciones vasculares son localizados o difusos
suelen hacer necesaria la inyección de mayores volúmenes de microespu-
ma, con frecuencia entre 30-50 cc. La compresión postratamiento es
igual al de los ejes safenos así como el retratamiento rutinario de las Tabla 1. Complicaciones
varices residuales.
Mayores Microespuma Cirugía
El tamaño de las varices tratadas fue mayor de 7 mm en 102 extremida-
des; entre 3-7 mm en 167 (51%) y menor de 3 mm en 61 (18%). TVP 0 5
Neuropatía 0 5
158 pacientes (48%) presentaban tobillos congestivos, cuya tradicional Linfedema 0 2
dificultad de tratamiento es fácilmente obviada con este procedimiento; Septicemia 0 1
lipodermatoesclerosis 18 y úlceras 15. Total 0% 4%
La inyección de grandes volúmenes de microespuma permitió que 144 Menores
pacientes (34%) precisaran menos de tres sesiones; 190 (58%) entre 4
Infección 0 1
y 8 y 26 (8%) más de ocho. Queloides 0 3
Sin embargo la duración del tratamiento es mayor pues la gran frecuencia Cicatrices 0 61
Tromboflebitis 5 2
de ramas varicosas dilatadas y superficiales, retrasan la reabsorción de los
Pigmentación 2 5
vasos tratados; de esta forma 106 extremidades (32%) precisaron menos
Total 2% 22%
de 6 meses; 167 (51%) entre 6 y 18 meses y 57 (17%) más de 18 meses.

Figura 1. Importante Figura 2. Resultado después del Figura 3. Esta gran Figura 4. Tras escleroterapia es apreciable le reducción de
malformación glúteo vulvar, tratamiento malformación se extiende tamaño, que se extiende a planos profundos. La malforma-
intervenida y recidivada en por musculatura de muslo ción I.M. también ha sido tratada con éxito
área vulvar y poplítea hasta la pierna

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 129


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

errores del desarrollo embrionario 2, y se subdividen anatómica y reológi- Material y métodos


camente en lesiones de bajo flujo (e.g.,malformaciones capilares, malfor-
maciones linfáticas, malformaciones venosas) y lesiones de alto flujo Pacientes
(e.g., malformaciones arteriales, como aneurisma, ectasia, estenosis, fís- Entre Julio 1993 y Enero 2002, hemos tratado 50 paciente con malfor-
tula, y malformaciones arteriovenosas). maciones vasculares congénitas predominantemente venosas mediante
escleroterapia con microespuma de Polidocanol y Tetradecyl sulfato de
Las malformaciones venosas ocurren en un amplio espectro dismórfico, Sodio. 18 varones y 32 hembras con edad entre 8 y 62 años. Todos
incluyendo varicosis y ectasias, masas esponjosas localizadas y comple- fueron diagnosticados de malformación venosa en el centro de referencia
jas lesiones que afectan a cualquier órgano o sistema, particularmente a y no tenían alternativa terapéutica. Las lesione fueron estudiadas por
músculos (Figuras 1-3). Están presentes desde el nacimiento y no tienen medios clínicos, pruebas invasoras y no invasoras con uno o más medios
tendencia a la involución espontánea. Crecen proporcionalmente más diagnósticos: ultrasonografía con Eco-Doppler (todos los pacientes); RNM
durante la infancia y adolescencia y en menor grado en la edad adulta. y angio RNM (40); flebografia (n=8), y arteriografia (n=4). Los pacien-
Algunas asintomáticas pueden ser tratadas de manera conservadora pero tes que habían sufrido cirugía presentaban recurrencias completas. La
en general duelen y las extensas pueden provocar coagulopatía de consu- mayoría de los pacientes son de España; cuatro enviados de Italia, dos de
mo. El examen Dopler color muestra ausencia de flujo o bien bajo flujo. Inglaterra, tres de Israel y uno de Chipre. Sólo los pacientes seguidos más
La Angioresonancia es la técnica radiológica más informativa en malfor- de 6 meses después del tratamiento se han incluido en este estudio.
maciones venosas.
Según la clasificación de Hamburgo, se dividen los pacientes en tres
El síndrome de Klippel-Trenaunay es bien conocido por ser una malfor- categorías: con localizadas o extensas lesiones subcutáneas (19 pacien-
mación capilar-linfático-venosa, asociada a hipertrofia de tejidos blan- tes), con infiltración intramuscular (16 pacientes), y con complejas-com-
dos y esqueléticos, usualmente en una o más extremidades. Venas latera- binadas malformaciones como SKT (15 pacientes).
les anómalas y dilatadas con avalvulación y anomalías del SVP.
Técnica
El tratamiento de las malformaciones venosas es complicado. La cirugía La microespuma de Polidocanol o de tetradecyl sulfato de sodio fue admi-
esta indicada en las bien circunscritas de moderado tamaño donde las nistrada por medio de inyecciones percutáneas ecoguiadas generalmente
posibilidades de restauración anatómica y funcional son máximas. El cada dos semanas, inyectando en cada sesión entre 20-80cc que corres-
tratamiento quirúrgico de las lesiones más extensas puede provocar dis- ponden a una moderada dosis de 3-6 cc de la solución liquida original. La
minución de función motora, lesiones nerviosas y hemorragias masivas. máxima dosis recomendada para Polidocanol es de 6 ml a 3%.
La escleroterapia solo es útil en algunos casos para reducir el tamaño de
la lesión o como complemento postoperatorio. La inyección de alcohol Polidocanol fue inyectado a concentración entre 1-4% dependiendo del
absoluto es delicada, no es un esclerosante seguro y es difícil de adminis- tamaño de la malformación y de las características hemodinamicas del
trar; presenta frecuentes complicaciones importantes locales y generales área tratada. Las malformaciones intramusculares (infiltrantes) suelen
(necrosis de piel y mucosas, lesión nerviosa, EP, colapso cardiorrespira- requerir mayores concentraciones (3-4%).
torio.
Resultados
Presentamos por primera vez nuestra experiencia recientemente publica- Los pacientes con malformaciones gigantes se les realizaron un completo
da en la revista Archives of dermatology, que muestra la buena accion examen hematológico pretratamiento. Este examen fue repetido 24-48 h
observada después de administrar esclerosantes convencionales en for- después de cada sesión hasta que el tamaño de la lesión se redujo. No se
ma de un específico tipo de microespuma en pacientes con malformacio- apreciaron cambios importantes de los parámetros hematólogicos anali-
nes venosas. Este nuevo procedimiento puede modificar las actuales indi- zados y no se presentaron secuelas trombóticas. Las anormalidades de
caciones de la escleroterapia al superar las limitaciones de los esclerosantes coagulación observadas en algunos pacientes al inicio del tratamiento, se
líquidos. normalizaron progresivamente a lo largo del tratamiento (Figuras 4-8).

Figura 5. Importante recidiva Figura 6. Excelente resultado Figura 7. Úlcera venosa por Figura 8. Rápido y estable cierre tras escle-
post quirúrgica bilateral postratamiento perforante baja inaccesible a SEPS roterapia de perforante y varices supraulcerosas

130 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa III

En 46 pacientes (92%), se ha comprobado mejoría en el examen físico y 7. Cadet P. El varicide. Patología Vascular. 1995;1(1):71-85.
con técnicas no invasivas. Cuatro pacientes no han respondido o sufrido 8. Hübner KJ. The outpatient therapy of trunk varicosis of the great saphenous vein by
recaída después de una buena respuesta inicial. De los 46 con buena means of ligation (crossectomy) and sclerotherapy. J Dermatol Surg Oncol 1991;17:818-
respuesta, en 18 pacientes la lesión ha desaparecido totalmente, en 15 se 23.
ha reducido en tamaño más del 50%, y en 13 la reducción a sido menor 9. Belcaro G, Christopoulos D. Treatment of superficial venous incompetence with a
del 50%. De 39 pacientes que presentaban dolor, este ha desaparecido en hemodynamic technique on an outpatient basis: The SAVAS technique. Vasc Surg
29 y se ha disminuido de manera considerable en 10. En 9 pacientes con 1992; January-February.
hemorragia espontánea, esta ha cesado en 8 y disminuido en el otro. 10. Vin F, Chleir F, Van Cleef JF, Allaert FA. Evaluation d'úne nouvelle technique ambulatoire
Cinco pacientes con úlceras crónicas las han visto cerradas. En 10 pa- de traitement des varices associant section et sclérothérapie des saphènes internes de
cientes con limitación funcional, esta ha mejorado en 9. Estos pacientes gros calibre (Technique 3S). Phlébologie 1994;3:237-46.
han sido seguidos durante más de 4 años El resultado ha sido excelente 11. Van Cleef JF, Lefebre JM. Clip percutané endosaphénien. Phlébologie 1994;3:251-4.
en (38%), bueno (32%), y con moderada mejoría en (26%). 12. Cabrera Garrido J, Cabrera García-Olmedo JR. Injectable microfoam containing a sclerosing
agent. European Patent Bulletin 1995;23.
También se han tratado 15 pacientes con SKT, que presentaban grandes
13. Cabrera Garrido J, Cabrera Garcia-Olmedo JR. Nuevo método de esclerosis en las
y ectásicas venas varicosas. Ocho de ellos presentaban infiltración de varices tronculares. Patologia Vascular 1995;4:55-73.
masas musculares, y cinco anomalías del SPP (1 aplasia, 2 hipoplasias,
14. Orbach EJ. Sclerotherapy of varicose veins: utilization of intravenous air-block. Am J
1 avalvulia y 1 aneurisma). El 86% de estos pacientes arrojan resultado Surg 1944;66:362.
excelente o bueno.
15. Orbach EJ. Clinical evaluation of a new tecnich in the sclerotherapy of varicose veins. J
Inter Coll Surg 1948;11:396.
Complicaciones 16. Tournay P, et al. La esclérose des varices. Expansion Scientifique Francaise. 4ª edition,
1985.
Cuatro pacientes han desarrollado pigmentación de piel que desapareció
17. Goldman MP. Sclerotheraphy treatment of varicose and telangiectatic leg vein. Mosby
espontáneamente. Pequeñas escaras de piel en dos pacientes durante el Year Book, 1992.
tratamiento de pequeños restos superficiales con microespuma de 18. Henriet JP. Un an de pratique quotidienne de la sclérothérapie (Veines reticulaires et
Polidocanol 0,5%. Otro paciente sufrió una necrosis de piel más extensa télangiectasies) par mousse de Polidocanol: Faisabilité, Résultats, Complications.
en muslo tras inyectar en una pequeña rama arterial Phlébologie 1997;50(3):355-60.

En un paciente se efectúo la inyección intra-arterial de microespuma de 19. Richardson HF, Coles BC, Hall GE. Experimental gas embolism: Intravenous air embolism.
Can Med Assoc J 1937;36:584-8.
Polidocanol a 3% que provocó dolor inmediato en el brazo y en la mano,
aparecieron de inmediato áreas violáceas irregulares en 4-5 dedos, indi- 20. Adornato DC, Gildenberg PL, Ferrario CM, Smart J, Frost EAM. Pathopysiology of
intravenous air-embolism in dog. Anesthesiology 1978;49:120-7.
cativas de trombosis capilar y anestesia con impotencia funcional de 4-
5º dedo que formo garra cubital. El paciente recuperó la función en algu- 21. Paul RE, Durant TM, Oppenheimer MJ, Stauffer HM. Intravenous carbon dioxide for
intracardiac gas contrast in the roentgen diagnosis of pericardial effusion and thickening.
nas semanas con resolución total, sin necrosis, de las lesiones cutáneas. AJR 1957;78:224-5.
Se comprobó la oclusión de la arteria cubital a los pocos días de la
22. Turner AF, Meyer HL, Jacobson G, Lo G. Carbon dioxide cineangiocardiography in the
inyección, por lo que la favorable evolución de este grave accidente es diagnosis of the pericardial disease. AJR 1966;97:342-9.
atribuible a la eficaz suplencia de los arcos palmares y a la menor canti-
23. Meltzer RS, Serruys PW, Hugenholtz PG, Roelandt J. Intravenous carbon dioxide as an
dad de esclerosante contenido en el volumen de microespuma que ocupo echocardiographic constrast agent. JCU 1981;9:127-31.
el territorio dista. Una necrosis interdigital temporal en el pie de otro
24. Bendib M, Toumi M, Boudjellab A. Carboxyangigraphie et carboxyangiographie élargie
paciente fue debido a extravasacion inadvertida de un importante volu- en Cardiologie. Ann Radiol 1977;20:673-86.
men de microespuma de Polidocanol 3%.
25. Fermand M, Marzelle J, Cormier F, Cormier JM. Aorto-artériographie des membres
Después de la esclerosis, algunos pacientes refieren moderado dolor que inférieurs au gas carbonique. La Presse Médicale 1994;1:19-22.
generalmente no requirió tratamiento analgésico y ha desaparecido pro- 26. Seeger JM, Self S, Harward TR, Flynn TC, Hawkins IF. Carbon dioxide gas as an
gresivamente. En algún paciente se ha administrado Ibuprofeno 600mg arterial contrast agent. AS 1993;6:688-98.
oral o Prednisona 0,5 mg/día durante 3 días. Ningún paciente sufrió 27. Kerns SR, Hawkins IF Jr. Carbon dioxide digital subtraction angiography: Expanding
ninguna TVP, EP o lesión neurológica estable; tampoco observamos applications and technical evolution. AJR 1995;164:735-41.
hemoglobinuria por hemolisis posiblemente a causa de la selectiva ac- 28. Powe NR, Moore RD, Steinberg EP. Adverse reactions to contrast media: Factors that
ción del esclerosante sobre los endotelios y a las moderadas dosis admi- determine the cost of treatement. AJR 1993;161:1089-95.
nistradas. 29. Sintetica SA. Method for the preparation of stable suspension of hollow gas-filled
microspheres suitable for ultrasonic echography. 1992.
30. Langholz J, et al. Contrast enhancement in leg vessels. Clinical Radiology 1996;51
Bibliografía Suppl.1:31-4.
1. Wallois P. Mise a jour de la technique de la supression des reflux saphéniens par 31. Bikerman JJ. Foams. Nueva York: Ed. Springer-Verlang, 1973.
sclérothérapie. Phlébologie 1986;2:223-6.
32. Sebba F. Foams and biliquid foams-Aphrons. John Wiley & Sons Lted, 1987.
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33. Wallois P. Sclérothérapie des saphènes. Phlébologie 1995;1:17-23.
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1992;191-6. de leur collatérales a l'exception des veinules et télangiectasies. Phlébologie 1994;4:399-
6. Robert C, JL. La sclérose par échocathétérisme. Phlébologie 1995;1:13-6. 406.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 131


Mesa redonda
III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

12:50 - 13:50 h. Mesa IV

Tratamientos II en la Insuficiencia Venosa


Crónica. Indicaciones y resultados

Moderador: M. Matas
Ponentes: C. Araño, A. Martorell, O. Pares, C. Miquel

Cura CHIVA - R1: venas situadas por dentro de la fascia profunda (SVP).
- R2: venas entre fascia profunda y superficial (safena interna, an-
C. Arañó. Servicio de Angiología, Cirugía Vascular y Endovascular terior, externa y Giacomini).
- R3: venas situadas fuera de la fascia superficial (ramas de safena)
Correspondencia: Cristina Arañó. Hospital Dos de Maig
- R4: tipo de R3 que comunica dos R2 pudiendo ser longitudinal o
Consorci Sanitari Integral. c, Dos de Maig, 301 - 08025 Barcelona
transversal.
– Conceptos hemodinámicos: Las varices aparecen por la existencia
Como todos sabemos, la insuficiencia venosa crónica constituye una de
de un shunt veno-venoso que se caracteriza por tener:
las patologías más frecuentes en la cirugía vascular. Entendemos como
insuficiencia venosa superficial a la existencia de un circuito retrógrado o - Punto de fuga: paso de una red a otra en sentido retrógrado.
shunt veno-venoso que vendrá determinado por un punto de fuga (la - Punto de entrada: paso de una red a otra en sentido anterógrado.
unión safeno-femoral), un trayecto generalmente retrógrado cuya parte - Shunt abierto: no existe recirculación.
visible lo formarían las varices y finalmente un punto de re-entrada al - Shunt cerrado: existe recirculación de sangre en el mismo.
sistema venoso profundo a través de venas perforantes.
A lo largo de los tiempos, se han descrito numerosas técnicas para Tipos de shunts
su tratamiento (flebectomía, stripping, esclerosis) pero no fue hasta
Teniendo en cuenta los tipos de redes venosas y la terminología base, se
1988 cuando Franceschi describió por primera vez el tratamiento de
pueden clasificar los shunts en diferentes tipos3 :
la insuficiencia venosa crónica basándose en las condiciones hemo-
dinámicas responsables del desarrollo de las varices y preservándose – Shunts veno-venosos que se activan durante la diástole muscular.
el sistema venoso superficial1 . A esta nueva técnica le llamó Cura – Shunts que se activan en sístole y diástole muscular (menos frecuen-
CHIVA: cura conservadora hemodinámica de la insuficiencia venosa tes, de carácter vicariante y generalmente dependientes de circula-
ambulatoria. ción colateral para suplir algún obstáculo en el sistema venoso pro-
fundo).
El desarrollo de dicha estrategia ha permitido aumentar el uso del Eco-
Doppler venoso para estudiar la situación hemodinámica del sistema Dado que los más frecuentes son los que se activan en diástole muscular,
venoso, permitiéndonos tanto un estudio morfológico como hemodinámico. éstos seran los que explicaremos a continuación.
Así mismo, se realizará una cartografía del sistema venoso superficial en
base a la cual se desarrollará la estrategia CHIVA. – Shunt tipo 1: presenta punto de fuga entre R1 y R2 teniendo entrada
a través de una perforante safeniana. Es un shunt cerrado.
Independientemente de las diferentes opiniones en cuanto al tratamiento – Shunt tipo 2: punto de fuga entre la safena (R2) y una colateral (R3)
de la insuficiencia venosa crónica, lo que sí es cierto es que cada vez se si es abierto o entre R2 y R4 si es cerrado.
buscan tratamientos menos agresivos, ambulatorios y con mejor resulta- - Tipo 2 A: con R2 proximal a la salida del shunt anterógrado.
do estético. La estrategia CHIVA ofrece todas estas ventajas ya que es - Tipo 2 B: con R2 proximal a la salida del shunt es retrógrado y
mínimamente invasiva, requiere de la deambulación precoz del paciente distalmente anterógrado.
y el resultado estético es correcto.
- Tipo 2 C: tanto proximal como distalmente, el R2 es retrógrado.
– Shunt tipo 1+2: presenta un punto de fuga R1 a R2 con reentrada
Terminología CHIVA R2 a R1 y asociándose a otro punto de fuga entre R2 a R3 o R2 a R4.
Es un shunt cerrado.
Para entender la estrategia CHIVA es recomendable iniciarse en su termi- – Shunt tipo 3: Tiene un punto de fuga en R1 a R2 existiendo un R3 o
nología. R4 que se interpondría entre la safena y la entrada al R1. Es uno de
– Redes venosas: la disposición del sistema venoso superficial viene los más frecuentes y también es un shunt cerrado.
determinado por su relación con las fascias venosas (superficial y – Shunt tipo 4: el punto de fuga consistiría en una perforante o un
profunda)2 . shunt pelviano que mediante un R3 reentra en safena haciéndola

132 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa IV

retrógrada hasta que reentra de nuevo en SVP por perforante sobre Aquellos pacientes con varices post-flebíticas, pueden beneficiarse del
safena. Considerado shunt cerrado. CHIVA siempre que no sean varices vicariantes que presenten un shunt
– Shunt tipo 4+2: presenta el mismo punto de fuga que en el shunt tipo cerrado activo.
4 pero con drenaje por perforante sobre safena interna así como a
Es de especial importancia recordar que uno de los requisitos imprescin-
través de R3 o R4.
dibles para realizar la técnica CHIVA es la posibilidad de realizar una
– Shunt tipo 5: Punto de fuga como en shunt tipo 4 y punto de entrada deambulación activa en el postoperatorio precoz dado que es necesario
exclusivamente sobre R3 o R4. para forzar el drenaje retrógrado venoso por perforantes de re-entrada.
– Shunt tipo 6: aquel entre un R1 y R3 o drenando a un R2 de sentido
anterógrado. Por último comentar que dada la escasa agresividad de la estrategia, se
pueden beneficiar de ella pacientes de edad avanzada y con patología
Teniendo en cuenta los diferentes tipos de shunt previamente explicados, asociada que contraindicaría la fleboextracción.
se pueden plantear las diferentes estrategias de la cura CHIVA que se
basan en los siguientes principios:
Metodología
– Fragmentar la columna de presión.
– Interrumpir los shunts veno-venosos. Una vez seleccionado al paciente y tras una valoración preoperatoria, se
indica la intervención quirúrgica según técnica CHIVA. Para ello el pa-
– Preservar las perforantes de entrada.
ciente acudirá al Laboratorio de Vascular previo a la intervención donde
– Eliminar la red terciaria o cuaternaria no drenada. se le realizará el marcaje CHIVA con tinta indeleble en la extremidad
Mediante dicha estrategia se obtendría un drenaje anterógrado o retrógra- previamente depilada. Así mismo se realizará la cartografía venosa en
do de sistema venoso superficial pero con un débito correcto y tras haber- papel indicando los resultados de la exploración así como la estrategia
se desconectado el punto de fuga. propuesta. Esta última será útil de cara al seguimiento posterior del pa-
ciente.

Estrategia CHIVA La intervención se realiza con anestesia local asociado o no a sedación y


tendrá una duración aproximada de 30 a 60 minutos. Es recomendable
CHIVA 1 insistir al paciente en deambular desde el mismo día de la intervención y
Aplicar los principios de la estrategia CHIVA en un sólo tiempo pero sin en los días posteriores una media de 1 a 2 horas asociado al uso de
alteración hemodinámica y manteniendo un sistema drenado. medias elásticas de compresión durante 1 mes aproximadamente.

Indicado para shunts tipo: 1, 2, 1+2, 4, 4+2, 5 y 6. En todos los casos está indicada la profilaxis con heparina de bajo peso
durante 1 semana para evitar trombosis de safena interna ya que será el
CHIVA 2 punto de drenaje venoso.
Aplicar los principios de la estrategia en dos tiempos evitando así un
El seguimiento hemodinámico con Eco-Doppler está indicado en todos
conflicto hemodinámico. Indicado en shunts tipo 3 donde en un primer
los pacientes pero con cierto interés en aquellos a los que se les practica
tiempo se trataría el punto de fuga R2-R3 dejando que posteriormente la
safena drenase por una nueva perforante de safena convirtiéndose en un un CHIVA 2 de cara a establecer el momento en el que se debe hacer el 2º
tiempo (desconexión safeno-femoral). Para este tipo de pacientes se pue-
shunt tipo 1 y actuar entonces sobre el punto de fuga R1-R2.
de proponer un seguimiento con Ecografía al mes, tres meses, seis meses,
Esta estrategia está contraindicada si la safena es superior a 1 cm por el 12 y 24 meses. En los CHIVA 1 o CHIVA 1+2 sólo está indicado el
alto riesgo de trombosis. examen ecográfico en aquellos pacientes que presenten recidiva clínica.
En shunts tipo 4+2 donde el punto de fuga es de difícil acceso (pelviano),
podría indicarse esta estrategia actuando sobre el R2-R3. Comentarios
Es importante tener en cuenta que si se realiza esta estrategia, es preciso La estrategia CHIVA es una técnica fácil pero requiere de un período de
mantener un control ecográfico a fin de determinar el momento ideal de aprendizaje. Requiere de un manejo experimentado con el Eco-Doppler
actuación sobre el punto de fuga safeniano. dado que es la base en la que se realizará la estrategia y posterior trata-
miento. Dada la necesidad de deambulación precoz y las facilidades
CHIVA 1+2 técnico-anestésicas, la recuperación es más rápida que con otras técni-
Aplicar los principios de la estrategia en un sólo tiempo y generando cas. Varios estudios han demostrado que es un tratamiento eficaz para la
conflictos hemodinámicos. Estaría indicado en los shunts tipo 3 y en este insuficiencia venosa superficial, con buenos resultados clínicos inmedia-
caso se actuaría sobre el punto de fuga principal así como sobre los tos y a medio plazo5-7. Concluir que la estrategia CHIVA permite una
secundarios. El drenaje se realizará a través de una nueva perforante correcta remodelación del drenaje safeniano acompañado de un excelen-
desarrollada sobre la safena o bien sobre un neoR3 que no tiene por qué te resultado clínico.
ser visible clínicamente. Hay que decir que la mitad de los casos desarro-
llan trombosis de safena interna a pesar de que la mayoría de ellas se
recanalizan antes del año. Como ventaja cabe decir que estos casos no Bibliografía
precisan de controles ecográficos ulteriores y por lo tanto es ideal para 1. Franceschi C. Théorie et practique de la cure conservatrice de l'insuffisance veineusse
aquellos casos en los que no va a ser preciso un seguimiento posterior. en ambulatoire. Précy-suos-Thil: Editions de l'Armanon, 1988.
2. Caggiati A. Fascial relationships of the long saphenous vein. Circulation 1999;100:2547-
9.
Indicaciones estrategia CHIVA4
3. Juan J. Révision de la terminologie anatomo-fonctionelle de CHIVA. VII Réunion de
La estrategia CHIVA puede ser indicada a cualquier paciente que sea l'Assotiation Européenne de CHIVA. Alemania 2002.
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Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 133


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

5. Cappelli M. Ambulatory conservative hemodynamic management of varicose veins: anormalmente alta de lesiones neurológicas. Ambas se diferencian en la
critical analysis of results at 3 years. Annals of Vascular Surgery 2000;14:376-84. distinta gravedad de la clínica, mucho peor en la afectación neurológica y
6. Iborra E. Estudio clínico y aleatorio comparando dos técnicas quirúrgicas para el en la más rápida resolución de la celulitis, de promedio entre una y tres
tratamiento de las varices: resultados inmediatos. Angiología 2000;6:253-8. semanas.
7. Escribano JM. Durability of reflux-elimination by a minimal invasive CHIVA procedure
on patients with varicose veins. A 3-year prospective case study. Eur J Endovasc Surg En cuanto a las recidivas, la teoría más aceptada es que se deben a
2003;25:159-63. neovascularización o bien al desarrollo de colaterales residuales, habi-
tualmente las del cayado. Berni realizó un estudio con 194 pacientes y
clasifica las varices postquirúrgicas en cuatro grupos: Recidivadas, que
representan el 65%, residuales el 14,3%, nuevas el 2,5% y de causa
Fleboextracción completa o parcial indeterminada el 8,3%. Al mismo tiempo consideró que la causa de las
recidivas se debió a un error quirúrgico en un 78,7% de los casos, a un
A. Martorell. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular error diagnóstico en un 9,2% y no pudo determinar el motivo en un 12%
Correspondencia: Alberto Martorell. Hospital Universitario Germans de ellos.
Trias i Pujol. Carretera del Canyet, s/n - 08916 Badalona Otra complicación prácticamente inevitable es la aparición de hematomas.
Se acepta comúnmente que una fleboextracción de safena interna com-
Ya antes de Jesucristo hay descripciones detalladas de intervenciones porta una pérdida hemática de 200 cc, aunque como es lógico esta
de varices, aunque la historia de la fleboextracción propiamente dicha cantidad es muy variable y depende no tan sólo de la anatomía del
se inicia en el siglo IV con Oribaso que realiza la primera valiéndose de paciente y del tamaño de las colaterales, sinó también de las maniobras
un hilo. Posteriormente Madelung en 1888, y disponiendo del gran que el cirujano ponga en práctica en el momento y posteriormente a la
apoyo que representó la anestesia, practicó una fleboextracción me- extracción. Las medidas que habitualmente se adoptan son la elevación
diante disección total de la safena con una técnica parecida a la utiliza- de la extremidad y la compresión enérgica a lo largo del trayecto de la
da por los cirujanos cardíacos, es decir mediante dos largas incisiones safena durante unos minutos. También se ha propuesto la introducción
en pierna y muslo. Mayo en 1906 describe la fleboextracción externa, momentánea a lo largo del trayecto de gasas u otro material para favore-
técnica prácticamente en desuso en nuestros días excepto en contados cer la hemostasia. Esta última maniobra conlleva el riesgo de que quede
lugares. Sus defensores alegan que esta técnica permite detectar colate- algún resto al ser retirado lo que favorecería las infecciones. La complica-
rales de gran tamaño que se pueden ligar mediante micro incisiones ción se resuelve espontáneamente en un par de semanas y es bien tolera-
disminuyendo el volumen del hematoma. El instrumento utilizado es da por el paciente si se ha tenido la precaución de avisar de su casi segura
semejante a un anillo de Vollmar que se desliza externamente a la vena aparición y de su falta de traducción patológica.
a resecar. Babcock en 1907 describió el stripping intraluminal subcutá-
La complicación más denostada por los críticos con la técnica de
neo, y Myers en 1947 ideó el fleboextractor elástico con lo que fue
fleboextracción es la lesión neurológica. Dicha lesión ya sea por sección
posible extirpar la vena desde el cayado hasta el maléolo. A partir de
o contusión puede darse durante la disección de la safena o bien durante
entonces, y con la lógica evolución de los materiales, la técnica ha
el stripping, y varía según distintas series entre el 3 y el 22% de las
variado muy poco, siendo la intervención más practicada aún hoy en
intervenciones. Para evitar la primera causa es necesario recordar la
día como tratamiento de las varices. Otra modificación en la historia de
anatomía de la zona y practicar una disección cuidadosa. En cuanto a la
la fleboextracción se produjo en 1988 con la descripción del CHIVA por segunda se han propuesto algunos recursos para evitarla. Los dos que
Franceschi, porque como dice Buchheim, contrario a esta técnica “una
gozan de mayor predicamento en la actualidad son la fleboextracción por
generación entera de eco-doppleristas se han formado bajo la guía del
invaginación y la fleboextracción parcial.
CHIVA y ello ha contribuido a la mejoría de nuestro conocimiento de la
hemodinámica venosa”. Está claro que el conocimiento de esta Durkin realizó un estudio en el que al margen de confirmar la mejoría de
hemodinámica ha redundado en un menor número de fleboextracciones la calidad de vida en general del paciente intervenido mediante flebo-
innecesarias. extracción, afirmaba que dicha mejoría era superior en los pacientes en
los que se realizaba por invaginación que en los pacientes en los que se
El que aún sea la técnica más utilizada se debe a sus buenos resultados, practicaba mediante la técnica clásica. Por el contrario Lacroix estudió
aunque éstos sean difíciles de cuantificar, ya que hay poco acuerdo en el una serie de pacientes en los que se practicó stripping bilateral, llevándo-
método a utilizar para valorar el éxito o el fracaso quirúrgico: Clínico o se a cabo en una extremidad por invaginación y en la otra clásicamente,
hemodinámico, objetivo o subjetivo, e incluso una vez decidido el méto- y no encontró diferencias significativas cuando cuestionó la calidad de
do, no hay criterios claros para definir la bondad del resultado. Noppeney vida tras cada intervención. Hay que añadir además que la técnica por
en un estudio con 1575 pacientes a los que controla a los tres años, invaginación posibilita una nueva complicación, que es la rotura de la
habla de un 33,3% de pacientes en los que no habían venas visibles, un vena, con fleboextracción incompleta en un número no despreciable de
56,8 en los que se observaban varículas y finalmente en un 9,9% existían casos.
varices. Otros estudios que defienden la fleboextracción alegan que las
venas que aparecen posteriormente lo hacen con una presión muy inferior Actualmente se lleva a cabo cada vez con más frecuencia la extracción
a la que tenían las varices resecadas y que son fácilmente eliminables parcial de la safena, es decir desde el cayado hasta justo por debajo de la
mediante escleroterapia. rodilla. Además de teóricamente disminuir el porcentaje de lesiones
neurológicas, aportan la ventaja de preservar un segmento de safena
Como toda intervención, la fleboextracción de safena está sujeta a una como hipotético injerto. Herman avala la extracción parcial al afirmar
serie de complicaciones. Hay descritas algunas catastróficas como el haber obtenido una disminución de pacientes con trastornos neurológicos
stripping de la vena femoral o aún peor de la arteria, pero las más del 7 al 1,6%, e Irace logra una mejoría aún más espectacular al lograr
frecuentes son las recidivas, los hematomas, la lesión neurológica y la rebajarlos del 11 al 0%.
celulitis. Esta última, bastante frecuente, en mi opinión es confundida a
menudo con una neuralgia, ya que también se localiza en la región Hay una serie de pacientes en los que la insuficiencia troncular de la
supramaleolar interna. De ahí que muchas series hablen de una cifra safena finaliza justo por debajo de la rodilla, en el lugar de donde emergen

134 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Mesa IV

colaterales varicosas insuficientes, siendo la safena anterógrada a partir Objetivos secundarios


de este punto. En estos caso parece evidente que la técnica de elección Estimar las diferencias en cuanto a complicaciones post-quirúrgicas, a
sería la extracción parcial de la safena. En los casos en que la insuficien- bajas laborales, grado de satisfacción.
cia de la safena es global, la elección no es tan sencilla. No hay duda de
que si la tasa de complicaciones neurológicas que uno tiene está por
encima del 20% al practicar la fleboextracción total, esta técnica debe ser Diseño
abandonada aunque la insuficiencia de la safena sea global. En otros Ensayo clínico prospectivo aleatorizado.
casos, creo que la preservación de un segmento de vena no justifica la no
extracción ya que esta vena lo más probable es que al estar enferma no
pueda ser utilizada como injerto, y además existen otras alternativas en la Instrumentalización
actualidad en caso de que el paciente la necesitara. Por otra parte las Se han distribuido 501 pacientes en los tres grupos de intervención
molestias supramaleolares, a no ser que se trate de una auténtica lesión
aleatoriamente y serán revisados clínica y hemodinámicamente (Eco-
neurológica, remitirán en pocos días, por lo que yo me inclinaría a prac-
Doppler) por parte de evaluadores externos previamente entrenados.
ticar la fleboextracción completa. En general podríamos decir que ambas
opciones son aceptables y que el optar por una o por otra, ha de depender
de la experiencia y resultados personales. Resultados
Se presentan el estudio, las características basales de la muestra y sus
Bibliografía recomendada resultados a tres años.
Berni A, Tromba L, Mosti G, Mele R, Tombesi T, Bedoni P, et al. Recurrence of varicose veins En Febrero 2003 se analizan las variables principales del ensayo sobre
after treatment. Multicenter study by the Italian Doppler Club, Clinical and Technological un total de 470 pacientes con un seguimiento de un año, 408 pacientes
Society. Minerva Cardioangiol 1998;46(4):87-90. a dos años y 264 pacientes a tres años. La muestra analizada cumple
Bofill R, Martínez E. Tratamiento quirúrgico de la insuficiencia venosa crónica. En: Patología criterios de homogeneidad estadística. No existen diferencias
venosa. Guía de diagnóstico y tratamiento del Capítulo Español de Flebología de la estadísticamente significativas respecto a la satisfacción y recidiva clínica
Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular (J Marinel·lo, R.Gesto). Madrid:
entre los tres grupos estudiados. Existen diferencias estadísticamente sig-
Luzán Ed, 2003.
nificativas respecto a los días de baja laboral, complicaciones post-qui-
Buchheim G. Varicose vein surgery en Phlebology. The Guide (A.A.Ramelet, M.Monti). París: rúrgicas y recidiva Eco-Doppler entre los tres grupos estudiados.
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Correspondencia: Carles Miquel. Hospital Sagrat Cor
7.
Viladomat, 288 - 08029 Barcelona
Lacroix H, Nevelsteen A, Suy R. Invaginating versus classic stripping of the long saphenous
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Las varices constituyen una patología de elevada incidencia y prevalencia
Noppeney T, Noppeney J, Kurth I. Results of standard varicose vein surgery. Zentralbl Chir
2002 Sep;127(9):748-51.
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entorno.
Samaniego E. Angiología Medicina y Sociedad en la Historia. Servicio de Documentación
Científica FAES Leioa (Vizcaya) 2000. La existencia de trastornos de trofismo cutáneo en forma de lipoderma-
toesclerosis o de ulceraciones constituyen en muchas ocasiones una difi-
cultad para el abordaje quirúrgico del tercio distal de la extremidad, lo
Ensayo clínico comparativo: que hace difícilmente asequibles al tratamiento las perforantes de dicho
sector.
fleboextracción versus CHIVA
La ligadura subfascial de las venas perforantes (SEPS) ha representado
O. Parés, J. Juan, R. Téllez, C. Moreno, I. Codony, A. Mata en éste sentido un avance para la exclusión de perforantes insuficientes en
Unidad de Angiología y Cirugía Vascular los supuestos de afectación cutánea mencionados, permitiendo una me-
jor evolución de los pacientes consiguiendo en muchos casos la curación
Correspondencia: O. Parés. Hospital General de Vic definitiva de sus ulceraciones y disminuyendo en otros el índice de recidi-
Francesc Pl “El Vigatà”, 1 - 08500 Vic va de las mismas.
Según el estudio norteamericano de SEPS (NASEPS) publicado en 1997,
Objetivo el 88% de ulceraciones habían curado al año de la intervención, mientas
a los dos años la recurrencia se establecía en un 28%, mientras que otros
Objetivo principal estudios con tratamiento conservador muestran unas recidivas entre el
Comparar la eficacia (recidiva clínica y recidiva Eco-Dopper) a los tres 33 y 100% al primer año y 52-100% al segundo.
años, del Tratamiento Conservador Hemodinámico, la cura CHIVA, en el
En el Servicio de Cirugía Vascular de l'Hospital del Sagrat Cor de Barcelo-
tratamiento de las varices de las extremidades inferiores, respecto al
na iniciamos dicha técnica a finales del año 2000.
Tratamiento No Conservador, la Fleboextracción, subdividida en dos gru-
pos: Fleboextracción con marcaje clínico y Fleboextracción con Marcaje Entre el uno de enero de 2001 y el 31 de diciembre de 2003 hemos
Eco-Doppler. tenido 2.675 altas quirúrgicas, de las que 2.176 fueron varices. De ellas,

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 135


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

tan solo 27 (1,2%) se consideraron tributarias de SEPS en pacientes Observamos inflamación regional en el 100% de los casos, mejoría clíni-
grado 4 y 5 de CEAP, excluyéndose el 6. ca en el 85% y persistencia de 1 perforante en tres casos.
Previo marcaje ecográfico se efectuó la ligadura subfascial de las Tuvimos recidiva ulcerosa en dos casos (7,4%) y flebitis superficial en
perforantes con técnica de laparoscopia, mediante dos accesos, uno para otros dos.
la óptica y el segundo para las pinzas de disección y clipaje. El procedi-
miento fue efectuado bajo anestesia regional y en régimen de ingreso de No observamos ninguna complicación severa, si bien en la literatura se
24 h. ha descrito lesión de perforantes, trombosis venosa profunda, difusión
del gas, lesiones nerviosas sensitivas y motoras, lesiones arteriales y
En el postoperatorio se estableció tratamiento con heparina BPM a dosis pseudoaneurismas.
profilácticas, antiinflamatorio y vendaje elástico.
Como conclusión podemos afirmar que se trata de un método útil y
Efectuamos seguimiento con Eco-Doppler al mes, 6 meses y un año de la mínimamente invasivo para el tratamiento de las venas perforantes en
intervención. aquellos casos en que el abordaje quirúrgico directo no es viable.

136 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Conferencia
III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

13:50 - 14:10 h. Conferencia III

Varices recidivadas. Análisis hemodinámico


del problema

J. Juan. Servicio de Angiología y Cirugía Vascular


Correpondencia: Jordi Juan. Hospital Vall d'Hebron
Paseo Vall d'Hebron, 119-129 - 08035 Barcelona

Introducción pélvicos, cayado de safena externa, perforantes de muslo). En otras


ocasiones es causado por errores técnicos durante la cirugía (mu-
La recidiva varicosa constituye un problema importante en el tratamiento ñón largo en el cayado de safena interna).
quirúrgico de las varices. Su aparición viene condicionada por diversos
– Recidiva por fracaso en el drenaje de la circulación superficial. Las
factores: etiología del síndrome varicoso, tratamiento utilizado, eficacia
venas tributarias sanas de la safena interna, tras la eliminación de
de los cambios hemodinámicos post cirugía, control de los factores de
ésta, primero se trombosan y posteriormente se recanalizan origi-
riesgo, tiempo transcurrido, etc.
nando una neogénesis de sentido retrógrado en búsqueda de una
Con frecuencia, se suele invocar a la evolución del síndrome varicoso y a perforante de reentrada. Habitualmente esto se consigue de forma
la enfermedad venosa parietal como las causas más destacado en la adecuada, sin embargo existe un cierto número de situaciones en las
aparición de dicha recidiva. El argumento de una vez extirpadas las varices, cuales no se consigue un adecuado drenaje de la circulación super-
si estas recidivan de nuevo, ello es debido a la evolución de la enferme- ficial apareciendo varices recidivadas en las que no existe un punto
dad, es a menudo el más utilizado ante la aparición de una recidiva de fuga entre la circulación venosa profunda y a la superficial, se
varicosa. No existe a menudo ninguna consideración a los errores tácti- trata de una recidiva con respuesta negativa a la maniobra de Valsalva.
cos y técnicos del tratamiento inicial, ni a como la reorganización del Asimismo consideramos las telangiectasias post cirugía de varices,
drenaje de la circulación superficial post cirugía puede intervenir como que aparecen a menudo cuanto más radical ha sido la cirugía, como
causa de dicha recidiva. la expresión de un fracaso en el drenaje de la circulación cutánea.
– Recidiva por aparición de nuevos puntos de fuga. Se trataría de
El objeto de este trabajo es estudiar la hemodinámica de la recidiva
varicosa post tratamiento quirúrgico convencional de varices primarias, recidivas originadas por nuevos puntos de fuga no consignados en la
a fin de intentar una comprensión de la fisiopatología de dicha recidiva. cartografía previa a la primera intervención. Correspondería a un
tipo de recidiva originado por la evolutividad de la enfermedad
varicosa. Se caracterizaría por presentar una respuesta positiva a la
Material y métodos maniobra de Valsalva.
Se analizaron los estudios con Eco-Doppler de 82 casos de recidiva de
varices post fleboextracción de safena interna y/o externa por varices Resultados
primarias.
Recidiva por fracaso en el cierre del punto de fuga
Siguiendo los patrones de la literatura actual, se consideró como recidiva 83 casos. Se distribuyen en:
toda vena visible de calibre superior a 5 mm.
– Región inguinal: 69% de casos
Los pacientes se exploraron en bipedestación utilizando las maniobras
de Valsalva, Paraná, y compresión-relajación para obtener una cartogra- - “Cayado in situ”. Observada en el 12% de los casos. Consiste en
fía morfológica y hemodinámica de la recidiva varicosa. un defecto técnico, debido a una confusión entre el origen del
cayado de safena interna a nivel femoral, con el origen de la
safena anterior (Figura 1). En esta situación el cirujano interrum-
Clasificación de la recidiva varicosa pe la safena interna a ras de la safena anterior originándose una
recidiva a partir de la safena anterior. Este tipo de recidiva presen-
Bajo el punto de vista hemodinámico, podemos clasificar la recidiva
ta una respuesta positiva a la maniobra de Valsalva, tanto a nivel
varicosa en tres apartados:
de la vena femoral común como en la propia recidiva varicosa.
– Recidiva por fracaso en el cierre del punto de fuga. Para que el - Neo cayado. Observada en el 6% de los casos. Se trata de un
cierre de un punto de fugas sea eficaz, éste debe realizarse a ras de su defecto técnico debido a una insuficiente disección de la vena
origen, de no hacerlo así, se originan muñones que a menudo son femoral Se origina un neo cayado a partir de una colateral de la
causas de recidivas. Estas recidivas se caracterizan por tener una vena femoral común. En esta situación se observará un Valsalva
respuesta positiva a la maniobra de Valsalva. El correcto cierre del positivo en vena femoral común, neocayado, así como en la reci-
punto de fuga puede en ocasiones ser muy difícil de realizar (shunts diva varicosa.

138 Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143


Conferencia IV

Figura 1. Relación entre las venas safena interna y safena anterior. Mientras
Figura 3. Cavernoma sin muñón. Obsérvese como en este caso la maniobra
que la safena interna adopta una disposición medial contorneando el músculo
de Valsalva produce una respuesta negativa sobre la vena femoral común
pectíneo, la safena anterior discurre en situación anterior a los vasos femorales
y positiva sobre el cavernoma

Figura 2. Cavernoma con muñón del cayado de safena interna. Obsérvese la Figura 4. Cavernoma de cayado de safena externa
respuesta positiva a la maniobra de Valsalva en las venas femoral común y en el
propio cavernoma

- Cavernoma con muñón del cayado de safena interna. Observada Con cierta frecuencia la incontienecia de la safena interna se
en el 31% de los casos. Se trata de la causa más frecuente de acompaña de una correcta competencia de la válvula ostial,
recidiva varicosa. Consiste en un error técnico originado por la no estableciéndose una incompetencia de safena interna a partir de
interrupción del cayado de safena interna a ras de la vena femoral la desembocadura de un shunt pélvico en la misma. En tal caso
común, dejando un muñón largo de safena (Figura 2). En esta la eliminación de la safena conduce a una recidiva de varices a
situación se origina una recidiva caracterizada por la visualiza- partir del shunt pélvico. No existe conexión entre la recidiva
ción de la válvula ostial del cayado de safena interna, así como el varicosa y la vena femoral común. Este tipo de recidiva se carac-
hallazgo de colaterales rectilíneas y el hallazgo de un Valsalva teriza por la no visualización de la válvula ostial, el hallazgo de
positivo en vena femoral común y recidiva varicosa. colaterales tortuosas así como la existencia de un Valsalva nega-
- Cavernoma sin muñón del cayado de safena interna. Observada tivo en la vena femoral común y positivo en la recidiva varicosa.
en el 20% de los casos. La vena safena interna es una de las Esta recidiva no es atribuible a un error técnico de la interven-
principales vías de drenaje de los shunts pélvicos (Figura 3). ción.

Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143 139


III Jornadas sobre Tratamiento Ambulatorio de las Varices

Figura 6. Recidiva de varices por aparición de una perforante insuficiente

Recidiva por aparición de nuevos puntos de fuga


Observadas en el 5% de los casos. Corresponden a la aparición de nue-
vas perforantes incompetentes (Figura 6), que originan nuevos shunts
veno-venosos. Dicha forma de recidiva, Valsalva positiva, estaría relacio-
nada con la evolución de la enfermedad.

Discusión
El 83% de casos de recidiva tiene está ocasionada por el fracaso del punto
de fuga, el 12% con el fracaso en el drenaje del sistema venoso superficial
y tan solo un 5% con la aparición de nuevos puntos de fuga. Estas cifras
Figura 5. Recidiva de varices sin punto de fuga por fracaso en el drenaje nos indican que la evolutividad de la enfermedad como causa de recidiva
de la circulación superficial. Obsérvese la pigmentación cutánea de varices es de escasa importancia, lo cual desmiente uno de los tópicos
tras múltiples sesiones de esclerosis de la recidiva varicosa
más frecuentes cuando se invocan a las causas de recidiva varicosa.
La mayor parte de recidivas varicosas están ocasionadas por fracaso del
– Región poplítea. Su manifestación clínica característica es el punto de fuga de causa técnica, no obstante algunas recidivas ligadas a
cavernoma de fosa poplítea. Se observó en un 8% de los casos. esta causa son difícilmente evitables (shunts pélvicos).
Puede revestir tres formas:
En el 12% de los casos la recidiva estuvo ligada a un fracaso en el drenaje
- Cavernoma de cayado de safena externa (Figura 4) del sistema venoso superficial que es una causa intrínsicamente ligada al
- Cavernoma de vena de Giacomini método de tratamiento y por tanto no solamente no evitable, si no de muy
- Cavernoma por perforante de fosa poplítea difícil solución puesto que una nueva extirpación o esclerosis de la recidi-
Recidiva por el fracaso en el cierre de perforantes. Observada en el 6% de va conducirá a desencadenar la misma causa que la ha originado.
los casos. Dos son los factores que inducen a esta recidiva: la dificultad Si consideramos la suma de causas no evitables de recidiva varicosa
en el cierre de perforantes a ras de su origen y la ausencia habitual de (20% de shunts pelvianos, 12% de fracaso de drenaje del sistema venoso
cierre del orificio aponeurótico por el que la perforante se exterioriza al superficial y 5% de nuevos puntos de fuga), podemos considerar de forma
sistema venoso superficial. global que el 37% de causas de recidiva de varices no son evitables
técnicamente, aun cuando solo un 5% son debidas a la propia evolución
Recidiva por fracaso en el drenaje de la circulación superficial de la enfermedad.
Dichas recidivas no originadas por defectos técnicos se observaron en un
12% de casos (Figura 5). En este sentido cabe señalar que el 72% de Finalmente, parece que del análisis de estos datos, debiera inducir a una
pacientes de este grupo presentaban telangiectasias que habían apareci- reflexión acerca de cual es la estrategia más adecuada en el tratamiento
do en el postoperatorio de la cirugía. de las diferentes causas del síndrome varicoso.

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Videoconferencias Anales de Cirugía Cardíaca y Vascular 2004;10(2):96-143

15:45 - 17:00 h.

Videoconferencias

Moderadora: N. Mundí. Médico Adjunto. Servicio Angiología


Cirugía Vascular y Endovascular

Correspondencia: Nuria Mundí


Hospital Dos de Maig. Dos de Maig, 301 - 08025 Barcelona

En los últimos años, se ha producido un cambio muy importante en el Al tratamiento de la insuficiencia del sistema perforante, se ha incorpora-
estudio y el tratamiento de las varices. La introducción del Eco-Doppler al do en los últimos años, la ligadura endoscópica de perforantes, SEPS,
estudio del sistema venoso, iniciada por Francheschi en 1988, nos ha para solucionar los casos de insuficiencia de perforantes, como respon-
permitido conocer la topografía anatómica y hemodinamica de la circu- sables de ulceras varicosas, o lesiones cutáneas. Su gran utilidad, viene
lación venosa, detallada y personalizada, para ofrecer a nuestros pacien- dada por la incisión a distancia, respetando la zona cutánea lesionada, y
tes el mejor tratamiento en cada caso. evitando las complicaciones de las heridas quirúrgicas.
El tratamiento de las varices en la actualidad, se basa en el estudio Por ultimo, quizá el tema más novedoso en el tratamiento de las varices,
hemodinámico y la realización de una cartografía venosa amplia y deta- sea la esclerosis con microespuma. La esclerosis es una técnica utilizada
llada, que nos permita decidir el tratamiento a seguir: si somos partida- desde tiempo inmemorial, siendo en él ultimo siglo cuando ha adquirido
rios de la fleboextracción clásica, eliminaremos solamente de los seg- su máxima difusión, utilizando un agente químico, que provoque una
mentos venosos insuficientes, evitando la exeresis de segmentos venosos reacción inflamatoria del edotelio venoso, fibrosis y desaparición del
valvularmente competentes, o bien mediante la cartografía venosa, plan- vaso. La novedad de los últimos años, es la utilización de microespuma,
tear una estrategia CHIVA, actuando sobre los factores hemodinámicos técnica controvertida, en desarrollo, pero que será sin duda un elemento
que determinan la aparición de las varices. mas dentro del arsenal terapéutico del que disponemos para el tratamien-
to de la enfermedad varicosa.

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