Si bien el art 14 bis de la cn, ordena al legislador dictar normas que protejan al trabajo en sus diversas formas, el derecho

del trabajo en su sentido estricto no tiene como objeto todas las relaciones de trabajo, sino únicamente aquellas que
implican una situación de dependencia del trabajador respecto de quien utiliza sus servicios. Quedan de tal modo
excluidas de la regulación laboral, las relaciones en que el prestador de servicio goza de real autonomía, como ocurre
normalmente en el caso de la situación de la locación de obra.

La hiposuficiencia no surge de la subordinación jurídica o poder de mando del empleador, sino principalmente, de la
situacion de dependencia económica del propio trabajador, que lo urge encontrar trabajo para el sostén propio y de su
familia.

La idea de dependencia constituye el concepto mas trascendente del derecho del trabajo porque a pesar de los cambios
operados en la organización productiva, sigue oficiando como la llave de acceso del trabajador a la protección especial
que provee la ley, y como contrapartida, para determinar su exclusión de ella cuando el vinculo que se entabla entre
partes no posee la mencionada característica medular y definitoria.

La nocion del trabajo dependiente o prestado por cuenta ajena, de la que el derecho del trabajo se ocupa de manera
excluyente, se encuentra plasmada en la lct, cuyo art 4 precisa que constituye trabajo a los fines de esta ley, toda
actividad licita que se preste en favot de quien tiene la facultad de dirigirla, mediante una remuneración. De dicha
definición surge como notas características: la licitud que debe revestir la actividad; la subordinación o sometimiento a
la dirección del empleador, que conduce a descartar de la aplicación de la legislación especial al trabajo autónomo, y la
onerosidad que si bien no resulta exclusiva de la relacion de trabajo, establecida por la ley como elemento tipificante de
su objeto, ecluyendo asi al trabajo considerado benévolo o gratuito (que se presta en forma desinteresada de cualquier
beneficio), amateur (relacionado con actividades recreativas o culturales), religioso (de quien ha efectuado votos y se ha
integrado a una orden o comunidad confesional) y el prestado bajo el régimen de voluntariado social.

La facultad de dirección del empleador no es sino la principal manifestación de la subordinación o dependencia que
determina la inclusión del trabajador en la legislación protectora. El sujeto principal de la relacion se encuentra
facultado por ley a dirigir el trabajo del dependiente, que debe guardar disciplina ante sus ordenes e instrucciones.

Pero la protección que recibe el trabajador dependiente no se acota exclusivamente a la ley. A las normas de fuente
estatal se suman el sistema de relaciones colectivas de trabajo y la seguridad social, conformando un triangulo virtuoso
de protección.