Sunteți pe pagina 1din 25

Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited.

Usage subject to PEP terms &


conditions (see terms.pep-web.org).

LA FANTASfA CaNTRATRANSFERE~
e 1A L ca M a " S E N A L D E A LAR M A "
ELÍAS .J ARAST

Propésito:

, El tema de este trabajo es señalar las posibles implicaciones que puede


'tener una de las formas de la eontratransferencia. Me refiero a aquellas
fantasías' que ocasionalmente pueden surgir en la mente del analista du-
rante su labor, en forma de recuerdos y situaciones (como asociaciones
'libres) y que aparentemente no parecen guardar relación con el material
que el paciente está expresando en ese momento. Dichas fantasías han sido
-eomparadas por distintos autores a los sueños y a las fantasías diurnas
(19-11-1).
Freud (3) ha señalado que "el sueño es el delirio fisiológico del hombre
'normal' '. También señaló la: similitud existente entre la fantasía diurna
y la onírica. \
, El Yo del analista está ubicado en la dinámica transferencial-contra-
transferencial, en cierto modo en una posición de relajamiento, de reposo
anímico, la atención flotante de Freud. A veces puede ocurrir .que ésta
'peligre o se altere como sucede, por ejemplo, cuando la identificación pro-
yectiva del paciente sobre la figura .del analista es masiva, -en cuyo caso
-éste puede sucumbir a aquélla. Un ejemplo típico, se da en la.s situaciones
descritas por Grinberg (12) como contraidentificación proyectiva.
La fantasía u ocurrencia contratransferencial (23) puede surgir como
uria forma de ocurrencia libre, a la que podría asignársele la función de
proteger al yo de caer involucrado en la neurosis de contratransferencia.
De esta manera, llenaría una función similar a la que cumple la fantasía
onírica en .el dormir, donde éste protege !al Yo en su función de reposo.
Así dicha fantasía estaría destinada a proteger la atención flotante, tal
como los sueños lo hacen con el dormir. Al mismo tiempo puede consti-
1;uirse en " señal de alarma ~, o toque de atención para el analista (29).
Esta fantasía, al no perturbar la actividad normal del analista, puede
'Ser omitida posiblemente 'sin mayores consecuencias. Pero así como un
.sueño permite ampliar el conocimiento del inconsciente, sin necesidad de
ser expresamente traumático o angustioso (4), también la comprensión y el
insight. del analista pueden beneficiarse con la colaboración de aquellas
fantasías, sin constituir -preeisamente una neurosis contratransferencial.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS JARAST 46
Es a esta forma de fantasía contratransferencial no necesariamente-
neurótica a la que me refiero en este. trabajo. Expresamente eludo aquellas
situaciones contratransferenciales que, por su carácter y magnitud, pueden
perturbar seriamente la labor analítica y que, como los sueños traumáticos
y a~gustiosos, han de considerarse como neurosis de contratransfereneia,

Introdu.cmón al tema.

Freud (5) ha señalado expresamente quela respuesta interna total del


analista es decisiva para la comprensión e interpretaci6n de los procesos
psíquicos del paciente. .
En igual sentido señala Racker (21) que" el analista debe dividir su
yo en un yo racional observador y otro vivencial y emocional para dar
curso libre a las asociaeiones.. fantasías y sentimientos que surgen como
respuesta interna (total y libre de represiones y bloqueo afectivo) y para
poder .reprodueir las fantasías del paciente".
Señala también dos aspectos de la respuesta contratransferencial: q por
un lado la manifiesta y actual y por el otro la latente y potencial, pero
habitualmente reprimida y bloqueada". Ambas involucran aspectos de
dicha fantasía.
En el desarrollo de una parte del material clínico de un paciente, me
propongo señalar específicamente las circunstancias que dieron lugar a la
fantasía contratransferencial, el contenido de ésta y sus posibles implica-
ciones dentro del contexto transferencial-contratransferencial. Después se.:
ñalaré cómo la elaboración del contenido latente de la fantasía contra-
transferencial, permitió hacer consciente lo que inconscientemente yo estaba
percibiendo. Este contenido latente aparece desplazado y enmascarado en
el contenido manifiesto de .aquélla.
Así se pudo comprender que el paciente tuvo un .padre que se identificó.
poco con Ias necesidades del hijo y a su vez, cómo éste incrementaba dicha
situación negando al padre la percepción y expresión de (Echas necesidades.
. En el contenido manifiesto, aparecen fantasías relativas a la época de
mi formación, cuando yo era estudiante y me analizaba, lo que fue viven-
ciado-como grato y positivo. Ello a su vez condicionó la base de una buena
disposición para reencontrar ( en ese momento de la fantasía y proyeetiva-
mente) las figuras paternas positivas dentro de mí.
En esa, forma "y a través de dicha vivencia inconsciente, yo percibía mi
disposición para 'con el paciente, intentando hacer lo que elpadre no pudo
hacer por él. La elaboración del contenido latente de toda sstuación transo'
ferehcial-contratransferencial significó llenar aquella laguna entre el padre
y el hijo, que ellos mismos no pudieron superar. El tratamiento analítieo
permitió el acercamiento recíproco no sólo del hijo sino también del padre
y que. ambos pudieran. unirse en una tarea común constructiva'.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

47 LA FANTASÍA CONTRATI{ANSFERENCIAL COMO "SEÑAl, DE ALARMA"

Material clínico.
Se trata de un paciente de 20 años, el menor de dos hijos.
En la entrevista manifestó que deseaba analizarse por consejo de un
amigo, que .estaba en tratamiento analítico. Le preocupaba haber interrum-
pido sus estudios (era estudiante de segundo año de ingeniería) y señalaba
que tenía dificultades para concentrar la atención y que se distraía fácil-
mente; agregó que, su carrera parecía no gustarle. También expresó su pre-
ocupación porque aún no había logrado tener buena genitalidad COn una
relación afectiva estable. Sus.eseasas experiencias sexuales fueron ocasiona-
les coitos con una sirvienta.
Quiero señalar desde ya, que en el material clínico en el que se centra este
trabajo, las situaciones transfereneiales que indujeron a fantasías contra-
transfereneiales contenían el síntoma distracción (expresado como apa-
rente desconexión con el paciente) y unido a esto, el equivalente de una
fantasía diurna. Esto configuró una serie de asociaciones, cuyo contenido
latente reproducía el conflicto del paciente
En la primera sesión se refirió preferentemente a la madre .eomo una
figura sobreprotectora oralmente Señaló cómo lo cuidaba con la comida;
los platos que le hacía, cómo lo atendía cuando estaba enfermo, etc. "Cuan-
do como -dijo- no quiero que me retiren la fuente de la mesa por las
dudas, por si quiero comer más ". Asoció con los sabrosos postres que la
madre solía prepararle agregando: "ella se preocupa mucho de que yo
coma bien. Está siempre pendiente de eso".
Se refirió luego al padre expresando que aquél no lo comprendía ni
quería como lo quería y comprendía la madre y por eso, "cuando yo estoy,
comiendo y él llega del trabajo ni siquiera lo saludo". Se refirió al padre
como a una figura hosca, poco comunicativa, aunque recordaba: "de chi-
co -entre los cuatro 'Y seis años=-, me sacaba con frecuencia a pasear y
jugaba conmigo, pero después y poco a poco, se. fue alejando".
Por ese entonces el padre había adquirido un estableeimiento de campo
y pasaba prolongados períodos ausente del hogar, lo que fue vivenciado
por el paciente como un alejamiento afectivo.
También asoció el recuerdo de cuando la familia se mudó a un depar-
tamento nuevo y la alegría que le produjo. Recordó asimismo la emoción
que experimentó el día en que el padre apareció con un coche nuevo.
En este material mostraba que temía que yo no lo' comprendiera, que
le dispensase poco afecto, en cuyo caso me prestaría poca atención, como le
ocurrió con el padre; en cambio si yo fuese como la madre tolerante y
gratificante 1, el análisis sería como una buena mesa de comida en la que:

1 Más profundamente expresaba también su deseo que yo fuese la figura posk


tíva del padre, 'Para poder brindarle nuevas posibilidades (coche nuevo) en "un Yo'
nuevo" (departamento nuevo). .
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS JARAST 48
.se encontraría muy a gusto, como comiendo las interpretaciones. Entonces
también se sentiría como si tuviera un coche o un departamento nuevo.
Es decir, desde un comienzo me estaba señalando cómo debía compor-
tarme con él, y usando una técnica obsesiva (tal como debió de haber
sido el control de la madre, con la que se identificaba) expresaba su in-
tento de controlar el análisis. Además estaba mostrando la disociación
'con el vínculo padre y madre: su ligamen incestuoso con la madre (expre-
sado en un nivel oral de sobreprotección materna y de avidez) que esti-
mulaban su manía, en tanto que la figura paterna estaba asociada al as-
pecto depresivo del conflicto (13).
A la interpretación contestó que mientras yo le hablaba había hecho
una fantasía: estar viendo" la cola de un auto con un farolito rojo encen-
dido atrás".
Asoció cola con culo y el farolito rojo con el ano. Luego siguió aso-
-eiando : "cuando era pequeño tuve intensas diarreas y por el esfuerzo me
salió un pequeño trozo ,de intestino rpor el ano, durante unos días sufrí
mucho y me puse muy débil. Durante toda mi enfermedad mamá no se
separó de mí".
, Su desatención mientras yo le interpreté, estaba significando la ex-
presión de su síntoma: percibía como peligroso escucharme, puesto que
eso significaba la reactivación de su relación persecutoria anal con el padre,
desplazando en éste la persecución con la madre. Su defensa maníaca era
hablar escuchándose a sí mismo; en esta forma expresaba su ligamen oral-
genital con el objeto internalizado madre.
Luego siguió asociando: "recuerdo una vez que mientras estaba sentado
en el inodoro, mamá se peinaba. Cuando terminé de evacuar, me limpié con
él papel higiénico con toda prolijidad, usándolo y doblándolo como un
pañuelo y después se lo mostré. Me dio unas palmaditas y me elogió lo bien
que lo hacía ".
Aquí, el paciente esperaba igual cosa de mí, que lo elogie y lo acepte
con el material que 'podía darme, y no lo rechace; 'lflsÍcomo su 'madre lo
cuidaba durante sus diarreas, esperaba que yo lo cuide durante su análisis.
Igualmente mostraba el proceso final de cómo aprendió a limpiarse: lo
'Consiguió a expensas de un gran esfuerzo, el que incluso lo enfermó (las
diarreas y el prolapso como expresión de una madre persecutoria que
intentó sacarse de adentro).
Este material era demostrativo de cómo le fue impuesta por la madrc,
en forma traumática, la educación esfinteriana.
En el transcurso de las sesiones posteriores las relaciones con las figu-
ras parentales continuaron reproduciéndose en la transferencia. Su relación
afectiva- con el padre, expresaba un componente agresivo grande, pero- sub-
yacentemente también aparecía la admiración por la capacidad de trabajo
y los éxitos económicos de aquél. Su buena' identificación con el padre, se
vio perturbada cuando proyectó en él la parte de madre exigente (que se
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

49 LA FANTASíA CONTRATRANSFERENCIAL COMO "SEÑAL DE ALARMA"

corresponde con el período del control esf'interiano ) y que percibió cuando


la madre ya no lo trató con la tolerancia a que se había habituado. Esto le
llevó a someterse masoquísticarnente a la figura de la madre, oralmente
sobreproteetora y analmente exigente. Al sentirse obligado a modificar el
primitivo esquema de conducta desarrollado por la madre, surgió su angus-
tia paranoide (13).
Desde luego, este tipo de relación neurótica con los primitivos objetos,
conformó a su vez una conducta neurótica con su mundo objetal externo.
Así, en una primera etapa del análisis. yo :fui vivenciado como un su-
peryo perseguidor; el paciente repetía así un aspecto de su relación con el
padre, pero mostraba inconscientemente en su material los mecanismos
que usó para defenderse de la; madre (las diarreas y el prolapso) y poste-
riormente la regresión en la enfermedad, o sea el sometiminto a ella. Poste-
riormente, configuró la situación transferencial vivenciándome como la pri-
mitiva figura de la madre.
En .esta forma, fue elaborando todo el masoquismo y la castración con
que se manejaba en ese nivel regresivo; la aparente gratificación que creyó
sentir como positiva, fue entonces percibida como una gratificación oral,
con la consecuente renuncia instintiva en niveles genitales. Esto lo llevó
a someterse a ideales perfeccionistas y de limpieza, para ocultar lo viven-
ciado como sucio y rechazable (que eran sus pocos deseos de estudiar, sus
distracciones, su genitalidad vivida como sucia, etc.). Este cuadro configu-
raba la expresión de su depresión en un nivel genital desplazado (el no
poder atender), y anal desplazado (la falta de memoria como el no poder
retener) (18).
En una sesión expresó que esa mañana al despertar recordó un libro
que estuvo leyendo la noche anterior. Era de los tiempos de Roma y comenzó
a hacer fantasías con el gran ejército romano; asoció luego a Roma con la
loba que amamanta a los hijos.
Aludía a él y al hermano; la, loba era la madre que les dió el pecho a
ambos, pero al mismo tiempo era una figura muy temida, ya; que la simbo-
lizaba en la representación de una fiera que se quedaba tranquila si él
comía. 'I'ransferencialmente era cómo me vivenciaba : gratificante en un ni-
vel y persecutorio en otro.
En seguida asoció: "mi madre siempre se ponía muy contenta cuando
yo comía bien". _
Me mostraba que lo único que la madre le aceptaba como bueno, era
-eomer y limpiarse bien.
Después agregó: "me siento jodido pero contento, como los pobres
judíos. Mario (un compañero con quien había estudiado tiempo ,antes)
aprobó una materia, me contó que fue medio lance, pero que salió bien.
:Ahora recuerdo una parte de un sueño: había una chimenea; y arriba un
candelabro dorado de siete brazos. De chico sabía esas historias y su sig-
.nificado, pero lo fui olvidando. La simbología hebraica me provoca re,
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS JARAST 50

chazo, me siento expulsado de todo eso. Le siento olor a VIeJo, herrum-


brado por la humedad, inservible y en decadencia; sólo sirve para tener
las velas encendidas. Recuerdo la ceremonia. del "barmitzva,". Me dió bron-
ca que no me lo hicieran a mi, Asoció el siete de los siete brazos del can-
delabro, con el siete como representación del ano.
La chimenea, las velas encendidas, eran su propia excitación, su erec-
ción, pero se sentía castrado y aparentemente aceptaba con sometimiento
masoquístico su castración (jodido pero contento). Sin embargo, mostraba
simultáneamente su frustración por no decidirse a "tirarse un lance"
como su amigo --inconscientemente su hermano-, a quien le fue bien. Las
velas encendidas no le servían más que para eso, para estar excitado sin
permitirse el coito. "1Ja simbología hebraica que provoca rechazo" equi-
valía a la figura de la madre que desaprobaba la genitalidad. La referen-
cia a la ceremonia del bartmitzva que no le hicieron, eqnivalía a la madre
que no le permitía ser adulto y por otra parte mostraba su frustración
frente al amigo exitoso (el padre exitoso y genital) ; olor a viejo era olor
a la vieja, que le hacía sentirse herrumbrado por la humedad (represen-
tativo de sus heces) y en decadencia, es decir: castrado por el pecho ma-
terno.
Realizaba así un mecanismo de defensa en el que transformaba y negaba
con lo contrario, mostrando lo que no le hicieron (bartmitzva) y no, lo que
sí le hicieron (la circuncisión). 1Ja chimenea a su vez, representaba simbó-
licamente los dos aspectos de su conflicto: su pene en erección que no podía
usar y simultáneamente su intestino (como fecalización del pene).
1Ja referencia a los siete brazos del candelabro, configuraba también una
alusión al período de latencia con una identificación oral-anal y con una
intensa persecución frente a la genitalidad.
Esto se confirmó pocas sesiones más tarde, al recordar que cuando el
padre se ausentaba por razones de negocios al interior (él tenía por ese
entonces seis o siete años), dormía con la madre ocupando el lugar del padre.
Cuando éste regresaba', a él lo mandaban dormir a su cama.
Evidentemente el ce-lecho le significó por un lado, la excitación prohi-
bida ante la presencia del padre (por el que se sintió desplazado) y a su
vez, significaba también que en esa circunstancia la madre lo prefería al
padre y no a él. Más adelante, recordó que cuando estaba en la cama con
la madre, "había; una especie de tácito acuerdo entre ambos: mi madre y
yo nos tirábamos pedos sin inhibición, pero sin decirnos nada. Recuerdo que
una vez quise aprender a bailar con Julia -una prima mayor- y no sé
si de miedo o qué, me tiré Un pedo y me rechazó, diciéndome que era un
chancho y se .puso a bailar .eon Marcos -otro primo también mayor-o Me
dio mucha bronca ver que ellos bailaban y yo no".
Le señalé, cómo en su actuación reprodujo la fantasía de que Julia (al
igual que la madre) aceptaría sus pedos, pero al mismo tiempo, ensayaba
de ver si aceptaba su excitación (el baile). Le perturbó percibir que lo
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

51 LA FANTASíA CONTRA'I'RANSFERENC'lAL COMO" SEÑAL DE AIJARMA"

aceptado hasta entonces por la madre en un nivel oral-anal, era rechazado


en lo genital como sucio. Que no pudo elaborar que lo que le rechazaban
a él (el baile 'como excitación con la madre) le era permitido al padre
(Marcos). Esa era su frustración y su rabia: el padre y la madre se satis-
facían sexualmente y él quedaba" con la veja encendida ", sin ceremonia
de adulto, y con el candelabro dorado sobre la chimenea, es decir: la exci-
tación sólo podía expresarla analmente, Era lo que le aceptaba la madre
como flatos y heces, que pasaron a ser para él valiosas -lo dorado- y
debiendo ocultar la excit.ación.
La repetición constante de este recuerdo iniensasnenie cargado en S1¿
relación transferencia,l, dio lugar (como veremos: má.s adeuinte), 'x <j1W iam-
bién ind'ttjem en mí la situacién del padre ausente, (oue se expresó entonces
enla distracción contmtmnsfM'enciaJ) corno anhelando 1tl1oX mejor reta-
món cO'n el hijo, en ta,nio que en su relación intM'na, de objetos, reproducía
S1¿ tt'wión fe.cal con la madre.

En otra sesión, asoció sus recuerdos infantiles con un libro de tapas


verdes que había en un estante: se llamaba "El Capitán Veneno", y temía
leerlo. El hermano se reía y se burlaba mostrándole que él estaba leyendo
el "Sí de las Niñas". Que habla otro libro, "Los titanes del humorismo",
que sus padres escondían para que él no lo pudiese leer. Asoció esto con
sus propias erecciones y luego con un recuerdo encubridor: estaba en
cierta ocasión paseando con!su padre por el puerto y vio cómo sacaban un
auto de un cajón. "Era una cola de pato muy lindo ", agregó.
Los libres simbolizaban sus ideas. El libro de tapas verdes (Capitán
Veneno), era la alusión a cómo percibía la excitación genital sucia y vene-
nasa; la burla del hermano (representación del padre), que logra el "Sí
de las Niñas" (representación de la madre), lo sentía como su propia
envidia frente a la unión de .los padres. :f-:stosle ocultaban lo bueno y
divertido que podía haber en la sexualidad (Los titanes del humorismo),
en tanto que él se sentía triste y abandonado a sus propias excitaciones
y reducido a sus fantasías homosexuales. Su inhibición sexual era así
proyectada a la figura de los padres, de los que creía que sólo lo aceptaban
castrado (cola de pato muy lindo). Se sentía como un traste de niña ape-
tecido por su padre (primitivamente elogiado por la madre y luego buscando
igual relación con el padre). A través de los libros (como obje'os inte-
lectuales usados como símbolos) podía expresar la función intelectual de
incorporar, comprometida por sus perturbaciones psico-sexuales (14 - 18).
Como mecanismo obsesivo, utilizaba las ideas escritas como objetos con-
cretos. Después siguió asociando: "me gusta la palta, es una fruta verde.
El carozo mamá lo utiliza para zurcir medias, recuerdo que plantó uno
y salió un árbol". ,
Volvía a mostrar que sólo podía satisfacer la demanda instintiva genital
(fruta verde) en un nivel regresivo oral, en tanto que la madre era capaz
de concebir y engendrar hijos.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS J ARAST 52

Luego agregó: " ... el hombre tiene el 'sexo al pedo y la mujer lo hace
todo. .. pero 'es mentira... no es así. .. la negra cubeta de mi pensa-
miento. " una sombra oscurece mi cabeza... ¡, qué pasa? .. se cortó la
.,
seSlOn... "
Simbolizaba ahora su vínculo depresivo con el pecho que lo frustró (él
como fruta verde, era la alusión a un abandono del pecho sintiéndose aún
inmaduro). ,Además, aparecía la fantasía culposa de la madre destruí da
(zurciendo medias), ya que siendo él el menor, no hubo más embarazos.
El interior materno dañado, aparecía introyeetado dentro de su cuerpo,
ano y sus contenidos intestinales: "el hombre tiene el sexo al pedo". El
remiendo materno también representaba los mecanismos obsesivos, que
aparecían expresados en un desplazamiento de abajo hacia arriba (la
cubeta en sus pensamientos), con lo que simbolizaba su castración interna,
expresada dramáticamente y con perplejidad ( ... la sombra. .. ¡, qué pa-
sa? ... ). En: " ... í'le cortó :la sesión ... " representaba su propio daño
oral-anal: con la introyección del objeto madre dañado, dañaba su propia
capacidad de crear, que lo expresaba como" la negra cubeta de sus pen-
samien tos' ,.
Expresaba de este modo su 'envidia ¡a la mujer que puede crear (16),
tener hijos, a la madre que lo pudo tener a él, en tanto que él se sentía
frustrado por no poder competir con ella, ni ser como el padre o el her-
mano que usan el pene, en tanto él lo .tiene "al pedo", es decir, sin usarlo.
Que la negra cubeta de su pensamiento era ISU madre dañada y también
sus propias oscuras dudas de si hubiera sido mejor para él ser hombre o
mujer. Eso lo angustió y cortó la sesión con el silencio.
Se quedó unos minutos en silencio y después, ¡ya 'con, rabia y en un tono
agrio (que me recordó ¡'El Capitán Veneno")' dijo: "¡No creo que envidie
a las mujeres, ni que valen más que los hombres; son una iporquería
maloliente y la suya en primer lugar!"
, Era un ataque anal a mi pareja, equivalente a la actuación envidiosa'
frente a la pareja de los padres y 3J la relación de la madre con el hermano
(que en su fantasía se llevó lo mejor tocándole a él lo peor). Si hubiese sido
mujer, hubiera podido reparar con su fecundidad a la madre dañada,
en cambio, su cuerpo de hombre sólo podía .produeir heces. En esta forma,
fue como pudo actuar su envidia en la, sesión. Era el final de la misma
y hubo que interrumpir.
Durante la sesión siguiente, señaló primero que la noche anterior había
invitado a la madre al cine y-que había al lado de ella un chico que tiraha
pedos, por lo que tuvo que cambiar el lugar con ella. Agregó que fue al cine
"con bronca", porque antes intentó saludar a 'I'eresita (una prima) 'por
teléfono, por su cumpleaños, y no pudo obtener la comunicación.
Nuevamente mostraba cómo se sentía frustrado por no poder conectarse
afectivamente con una chica, lo que le llevaba otra vez a ligarse a la madre
en una situación regresiva, el cine, donde 'estaba sentado al lado de ella
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

53 LA FANTASÍA CONTRATRANSFERENCIAL COMO "SEÑAL DE ALARMA'"

y con rabia, ya que no podía sino ver lo que otros .hacian :(la película).,
en tanto que él no podía salir de lo anal. Este rondaren derredor de la.
madre, entre lo oral y lo anal, ya lo vivenciaba comoincómodo y frustrante-
y le producía rabia.
Además, mostraba también cómo había reaccionado ante sus propias'
dudas, en cuanto a ,si era mejor ser hombre o mujer. Que me tenía envidia,
porque yo tenía mujer y él no, motivo' asimismo de ¡la agresión de la sesión.
anterior. Esa envidia era la misma envidia .quele tenía al padre, el que era,
aceptado por la madre, en tant.o que él se sentía rechazado.
Después de otro silencio, dijo que le gustaba dibujar, que prefería eso
a cualquier cosa, incluso a estudiar y agregó: ," si estudio no dibujo y si
dibujo no estudio, y quiero dibujar". .
Señalaba claramente en este'momento, cómoaquello que no había logrado
sublimar est.udiando (sus impulsos genitales), necesitaba hacerlo con el
dibujo (sus impulsos anales). El dibujar se convertía así en una tentativa
mágica y omnipotente de concebir y crear, transformando lo sucio y mal-
oliente (heces) en algo valioso (dibujos), ya que la madre le había valorado
la elegancia con que podía higienizarse, pero no lo hizo en iguales términos
con la sexualidad. Desde luego, estaba también significando un intento de
transformar las heces en material valioso: los hijos.
Me refirió que en su casa tenía un cuartito que era su pieza de trabajo.
Allí .era donde dibujaba, y la tenía con llave porque la madre cada vez
que podía se metía y le hacía orden y limpieza, cosa que le molestaba mucho.
Llamaba. a su cuarto "su torre de marfil" .
. Mostraba así una parte de su mundo interno, 'en el que se aislaba muchas
horas al día, en una tentativa frustrada de sublimar sus fantasías en un
nivel anal, nivel que había sido erotizado por la actitud de la madre, que
se metía dentro de él y posteriormente 10 daña.ba. La .torre de marfil. era
la expresión de su aislamiento y de su imposibilidad de hacer buenas pro-
yecciones e introyecciones, lo que le hubiera permitido enriquecer su yo.
En esa pieza tenía una perrita que estaba permanent.emente a su lado
y lala que, .en-horarios fijos, sacaba a la ca.lIe"para hacer sus necesidades".
En el material, .pudo verse cómo la.perrita era también partes de él puestas
en aquélla, en tanto .que él se identificaba con su madre: él la limpiaba,
cont.rolaba los horarios en que debía sacarla, le daba la comida, etc. Así,
se manejaba con la perrita como la madre 10 hizo con él. Señaló que alguna
vez, cuando su perrita ensuciaba' "fuera de hora ", le daba una paliza.
Repetía así la severidad con que percibió a su madre, en la época de su
educación esfinteriana.
Por otra parte, la perrita controlada era la reaparición de la figura
materna superyoica dentro de él, satisfaciendo al super-yo en el objeto
perrita. Aislando y controlando ese aspecto de la madre dent.ro de 'él,inten-
t.aba recobrar el derecho perdido (referido al período anal primitivo), cuyos
mecanismos intentaba sublimar en sus dibujos -como defecando- dent.ro
de su yo aislado de la madre (su cuarto). La etapa anal secundaria (que
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS J AítAS'r 54

implica el control esfinteriano), era desplazada en la perrita, produciendo


nuevamente dentro de él un splitting entre ambas actitudes (15).
Esa forma de disociación también fue expresada en la transferencia.
Así, en una sesión luego 'de sacar un papel y un lápiz, me pidió un libro,
que estaba sobre mi escritorio para apoyar el papel y dibujar, agregando:
"supongo que a Ud. no le molesta, siento ganas de dibujar, eso me hace
sentir menos.tenso".
Aquí en el pa.cienteya estaba actuando el splitting : hacía una disociación
que en la situación analítica se expresaba por una parte en su ligamen con
su madre internalizada (por medio de sus heces) 'y por la otra tya no me
escuchaba (equivalente a dejar de estudiar y aprender). En lugar de
flatos (agresión) ahora dibujaba.
Repetía aquí su experiencia de la torre de marfil, necesitaba sentir si yo
'Podía dejarlo tranquilamente hacer lo que él quería, o si me metería 'intem-
pestivamente "a limpi'arlo" como lo hizo .su unadre.
Dibujar, era mostrarme sin darme (defensa esquizoide frente al perse-
guidor), defendiéndose de una posible intromisión mía, vivenciándome como
a la madre, que lo forzó y lo castró.
Esbozó algo en el papel y así terminó la hora.
Siguió algunas sesiones trayendo papel y lápiz y dibujando durante
buena parte del tiempo, haciendo fantasiosos dibujos a los que Ilamaba
dibujo automático. Asociaba poco, act.uando con un mecanismo de defensa,
en el que su yo volvía a reconstruir el split entre la comunicación escasa
(poniéndome a distancia) y dibujando (como en su cuarto encerrado).
Además dibujando automáticamente equivalía a estar defecando automáti-
camente y sin temor.
Mientras dibujaba, asociaba escasamente con lo que los dibujos le suge-
rían. Asociar, significaba perder el control de sus cosas a través de la.
comunicación verbal; recuperaba dicho control, dibujando y reteniendo
la comunicación verbal (como cerrando sus esfínteres para que no saliesen
cosas sucias), mientras desplazaba su mecanismo anal en un intento de
sublimarlo ,a.través del dibujo.
Ante la figura del analista, como objeto madre,que Ie despertaba su
angustia paranoide ("Mujer maloliente"), ponía en juego un mecanismo
que le permitía ejercer el control, tanto sobre el objeto perseguidor como
de su propia capacidad de coutaminar.cé.sí;« través del dibujo; se manejaba
en forma omnipotente y mágica 1.
1 Arnaldo Bascovsky (25) ha señalado corno una expresión específica del ps'i-
quismo fetal, aquella en la que el yo mantiene un estrecho ligamen libidiI~oso ccn
sus objetos internos, a expensas del retiro de cargas ·de afectos de los objetos ex-
temes (en este caso la comunicación a través del dibujo). Esta situación expresa tam-
bién un trato bidunensional hacia dichos objetos y que el mismo autor ha señalado
también como propio del psiquismo fetal.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

55 LA ~'ANTASÍA CON'l'RATRANSFERENCIAL COMO "SEÑAL DE ALARMA"

A través de sus escasas asociaciones, le fuí señalando cómo se distan-


ciaba de mí tal como lo hizo con el padre y que simultáneamente me sentía
como a la madre, que lo está observando y controlando.
Sesiones más adelante se expresó diciendo: "que ya no le gustaba tanto
emplear parte de su tiempo dibujando" y luego refiriéndose a sus ,estudios,
agregó: "estudiar en la facultad no me gusta. Ingeniería es muy difícil
o 110 tengo ganas, no sé. Además exigen mucho y el porvenir de un inge-
.niero es muy incierto".
En ese momento, percibía como frustrante convirtiéndose en aburrido y
tedioso, el mecanismo defensivo a que recurría. Además al frustrarme, yo
era vivenciado como la madre (dañada) y como el padre (aburrido, ale-
jado) que no hacía nada por él. Con su mecanismo (dibujos y escasas
'asociaciones), sentía como que había dañado mi intelecto, tal como lo per-
cibía dentro de sí mismo. Se quedaba así sin incorporar interpretaciones
(comida), ni podía a su vez producir material que le gratificase más.
En este momento comenzaba a entrar en depresión: transferencialmente
el análisis dejaba de ser" automático" como lo fué la primtiva relación del
yo con la madre. Recibir interpretaciones, equivalía a estudiar y a apren-
-der, es decir, crecer y ser adulto. Seguir dibujando equivalía a seguir defe-
cando, cosa que .haeía ante el temor de sentirse exigido a hacer cosas que no
podía realizar limpiamente (como lo eran sus inhibiciones para estudiar y
su genitalidad también inhibida), pero, en ese momento y siguiendo el pri-
mitivo patrón de conducta señalado en relación con la madre, volvía a
reaparecer su angustia: transfercncialmente temía del porvenir de su rela-
ción conmigo, temiendo interpretaciones agresivas, como vivenció algunas
'actitudes de su madre.
En la sesión siguiente, continuó mostrando su' conducta persecutoria.
Así por ejemplo, y refiriéndose siempre a sus estudios y 'a su carrera, dijo:
"estudia-r sería para mí interesante, si yo supiese que podría convencer a
un cliente de lo que a mí me gusta hacer. ,Es lamentable que para hacer
carrera, uno tenga que someterse al pésimo .gusto de Ia gente y construir
sacrificando los propios gustos. Lo ideal sería un cliente que diga: necesito
un edificio de X condiciones y que no diga' nada más";
Nuevamente aparecía la fantasía mágica, frente a las fantasías de exi-
gencias mías (transferencialmcnte yo era la madre exigente, o los clientes
exigentes) .
Me sentíacorno .al supuesto diente, como a la gente. Él suponía de que
era yo el que deseaba que actúe y progrese en su análiais de determinada
.manera ..
Era su propia frustración frente a su avidez por querer conocer y pedir
pero sin saber qué ni cómo hacerlo. A su vez, en la fantasía del cliente,
estaba también proyectando una parte de sí mismo: la pasiva, que esperaba
recibir todo de mí, y tener así resueltos mágicamente sus problemas de
estudio, su carrera y sus logros genitales.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS .JARAST 56

En ese momento de su depresión, yo no percibí que él me había intro-


yectado (como un profesional: ingeniero), que se lamentaba del cliente que
le había tocado. Con esto,estaba expresando su propia depresión por la
depresión del padre, quien no tenia en él un hijo que le hiciese sentirse
mejor padre .. Es lo 'que señala Fenichel (2) como introyceeión patognomó-
nica, la que resultaba de haberme obligado, durante la etapa de los>dibujos,
a consentir en una; unión forzada por 'sus 'deseos de que él 'Y yo, fuésemos
como una sola persona. Yo, introyectado dentro de él, ya no le era útil
(reproduciendo lo ocurrido con el padre).
Respondiendo a la interpretación, recordó que cuando tenía seis años,
y al finalizar el primer mes de concurrencia a la escuela, trajo insuficiente
en su libreta de calificaciones. El padre en esta ocasión se mostró muy
reservado. "Recuerdo haber oído que le dijo :a;;nni madre: este hijo de
mierda".
Le señalé que estaba temiendo que yo pensara, de 'él, lo mismo que pensó
su padre (es la introyección patognomónica). A esto siguió un prolongado
silencio.
Se hacía evidente que, bajo,la apariencia de lo que se podría interpretar
como un deseo de controlar y dirigir al objeto padree-analistae.análíeis,
más profundamente estaba expresando su deseo de "construir" su yo en
absoluta libertad, "convenciéndome a mí como cliente ", y así podría él
hacer el análisis como le gustare. Así, estudiaría (se analizaría) con gusto.
Pero simultáneamente, si me convencía, era para repetir la experiencia de
la pérdida de objeto, como le ocurrió con el padre, al transformarse él en
reservado.
En la fantasía de "rendimiento insuficiente", reproducía las dificulta-
des que tuvo al entrar en el segundo .año de vida, cuando el Yo ¡pasa al
establecer nuevas relaciones de objeto (limpieza, orden, etc.). Aquí, pro-
yectaba su propia depresión sobre la ¡figura del padre; en su fantasía, era
el padre quien le imponía "ser comouna mierda", lo que al su 'Vezintentaba
sublimar en el dibujo.
Así. planteaba en ese momento su disyuntiva» por un lado toleraba poco
las interpretaciones, a las que reaccionaba 'con angustia. .Por el otro, quería
analizarse" como él quería" y no "como yo quería", pero percibía que eso
sería nuevamente quedarse en lo sucio (lo feeal ).
Durante algunas sesiones, se fueron repitiendo situaciones más o menos
similares. Ello me condujo a reducir las interpretaciones a un ritmo mí-
nimo, disponiéndome a hacerlo así en tanto no surgiesen puntos de urgencia,
precisamente por la angustia que el paciente mostraba frente a las mismas.
Fueron así transcurriendo algunas sesiones en las que sus fantasías volvie-
ron a estar referidas a un nivel muy regresivo,
El dibujar, pasó así a ser como una .f'orma de 'comunicación conmigo,
viveneiada como impuesta por el padre en un nivel anal (" este hijo de
mierda"). Más profundamente, representaba el sometimiento masoquístico
a la madre castradora. Por otra parte, el silencio estaba configurando la
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

57 LA FANTASíA CONTRA'rRANSFEHENCIAL COMO "SEÑAL DE ALAHMA"

regresión profunda del Yo, en una fantasía de relación simbiótica con la,
madre primitiva. Se manejaba en esta circunstancia con mecanismos refe-
ridos al psiquismo fetal (26).
Contratransf'erencialmente, cuando yo (frente a su actitud por momentos
agresiva y por momentos regresiva) reduje las interpretaciones, no hacía
sino repetir la actitud que el paciente seguramente impuso a su padre,
durante el período de la latencia. Hacía una contra-identificación con un
objeto interno de, él (la figura del padre) (17).
Se analizaba todas las mañanas, de lunes a sábado a las 19 hs. Llegaba
puntualmente, saludaba con un invariable "buen día", en el que tono y
gesto aL dar la mano, eran siempre exactamente iguales. Se acostaba, guar-
daba silencio y se ponía a dibujar. Se condicionó en tal forma .al Titmo
horario que, al llegar al término de la sesión con frecuencia lo percibía por
sí mismo, y sin que partiese de mí ninguna indicación, la interrumpía.
Cuando me contó que todas Las mañanas al levantarse, se quedaba casi una
hora en el baño, en el que ruidosamente iba de cuerpo, se hacía buches y
gargarismos, y luego se daba una ducha; que después se desayunaha y venía
la la sesión, pude señalarle que repetía el ritual del baño en su análisis. Aquí
también cumplía con su horario, representando en sus dibujos como un ir
de cuerpo y limpiarse, y que interrumpía la sesión y saJía a la calle como
antes había salido del baño. Asimismo, puede interpretarse en la regulari .•
dad de su concurrencia y en la exactitud con que manejaba su horario, como
un repetir en un nivel oral la regularidad del niño prendido al -pecho
materno.

En un :nivel aún más regresivo y siguiendo .los conceptos de Amaldo


Rascovsky (27) puede también señalarse que en esas .cireunstancias, dibu-
jando 'yen silencio, ,su Yo se manejaba como un Yo fetal, frente a un Ello
ideal puesto en la figura del analista. Es decir, yo y el análisis como objeto
ideal del Yo del paciente.
Al no interpretarle, yo era vivenciado como un padre que lo dejaba
tranquilo, no 10 "perseguía" con interpretaciones y así reconstruía (en
sn regresión de ese momento) su Identificación con su: madre en Ios niveles
profundos señalados. Además (como lo señalé antes) a tmvés de S1t. meca-
nismo maníaco, ioqraba reproducir contratransfC1'encia7mente lo que en
realidad pasó con el:padre: cansado de los agresiones y del rechazo de él,
se aleJó'afectivamente.
En una sesión, y durante el desarrollo de la misma, le adelanté que
por razones personales tendríamos que interrumpir cinco minutos antes
de la hora. No acusó ninguna reacción y la .sesión terminó aparentemente
sin conflicto. (En realidad se lo calló, lo que equivalía a estar fruncido y
retentivo). ,
Al día siguiente, intentó nuevamente dibujar, pero estaba. inquieto,
dejó el papel y el lápiz, sefialó que "vino con hambre porque se había
desayunado muy rápido e insuficientemente, para poder llegar a tiempo".
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

'ELÍAS JARAST 58

Me estaba mostrando .que era "muy cumpl.idor " conmigo, .quiza más
que yo con él, puesto que habíamos interrumpido Ja sesión anterior cinco
minutos amtes ; que lo apuré y se quedó con hambre, y que .,me estaba mos-
trando que con hambre volvía. Nuevamente expresaba cómo, al interrum-
pirse el mecanismo obsesivo que trataba de controlar, .aparecía su necesidad
de incorporar.
Siguió en silencio unos diez minutos, retornó entonces a dibujar y
luego, .Ievantando el papel para que yo lo pudiese ver, empezó a señalar
partes del mismo, comentando: "éste soy yo encerrado .en 'Una casa, ésta es
'una isla rodeada de .agua , aquí construiría un puente levadizo, como lo
.rtenían los castillos de los señores feudales, 'que cuando querian salir lo ba-
jaban y cuando querían: estar seguros 10 levantaban yse aislaban.".
Mostraba cómo utilizaba sus dibujos para comunicarse o aislarse de mí:
como un puente al que podría manejar a voluntad. ,Que tenía "levantado
el puente" en tanto en silencio dibujaba, "que lo bajaba ',' cuando me
.mostraba su dibujo; que." salía de su castillo" cuando me hablaba. En su
nivel de expresión anal levantar el puente y cerrarse en una casa, equivalía
'a; cerrar los .esfinteres, contenerse, retener las heces. Bajar el puente era
lo contrario. En un nivel más profundo, igualmente configuraba una
forma de regresión fetal, cn la que el puente representaría el cordón um-
.bilical, la isla el útero materno' y el agua elIiquido amniótico.
Volvió a mostrarse un poco angustiado y agregó: "soñé mucho pero
no me acuerdo de nada, además-me parece inútil ni recordarlo ni contarlo".
Luego continuó ya en tono de protesta: "aquí el ambiente está muy pesado,
este .aire ya no se puede respirar, esa estufa ya molesta mucho. .. (silen-
cio). j N o .sé qué diablos me pasa! después. agregó: "U d. me interpreta
poco, antes me atendía mejor. j Y yo que me sentía tan bien aquí! y ahora
no me .siento bien ni aquí, ni afuera!"
Ante la frustración de la sesión anterior, se incrementó su agresión, la
que ahora se hacía explosiva, tal como un despeño diarreico. Primero,
intentó controlarse dibujando. Los sueños, retenidos equivalían 'a materia
fecal retenida, pero al igual que un intestino distendido, no pudo aguantar
sus propios, contenidos (" ambiente maloliente y pesado") lo que. le llevó a
una transitoria confusión (17). En ese momento proyectó su interior, en
el ambiente analítico.
Pero sus defensas tornaban estériles mis .interpretaciones, (que era lo
que él proponía y repetidamente le había interpretado) y en ese momento,
me sentí frustrado. Su silencio era nuevamente "levantar el puente leva-
dizo" iY cerrar .la comunicación. Atribuyo a este constante manejo ma-
níaco 'y a mi sensación de frustración, el que en ese momento yo también
"levanté .mi puente levadizo ", puesto que IDe desconecté del paciente.
Un pacienie en estas cond:ic?"ones,haciendo nna intensr::,y constante'
identilica,ción prouectio« sobre la figllradel analtista, puede en 1tn mo-
mento dado llevar a éste! a 1lna situación de stress. En esios condiciones,
no es excepcional que el omoiisto. caiga 'en una conira-identiiicacion. pro-
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

LA FANTASíA CONTRATRANSFERENClAL COMO "SEÑAL DE ALARMA"

:yectiva (que: PO?'otra parte ya Iiobia ocurrido y [ue señalado), La apa;r'ición


·en ese preciso -momerdo, de una serie de fantasías que S'urgier'on en mi
mente. a continuación inmediata. de; la desconexum; pueden. s'igtllificCLr el
:eq1ávrolente de lo que en el dormir significa. el. soñar, 0011'1,0 mecanisnw de
protección del. Yo. Es decir, la fatntasía contratransferencial llenaría et~ esta
circunstancia, la {tmoión de proteger la atención [lotomie (eqUlivalen.te a
ta situacum. de reposo) d.el amaZ,ista.
En el momento referido, recordé temas que estaba preparando para
determinadas clases. Pensé que esa noche tenía que dedicar algunas horas
.a dicha tarea, y no me sentía con mayores deseos.
Luego pensé que a pesar de eso, terminaría por sentirme gratificado al
recordar el interés que mostraba' el grupo de estudiantes que seguía dichas
clases. A continuación recordé la época en que fuí alumno de seminarios y
particularmente algunas clases que.. por la forma de ser expuestas, me re-
sultaron particularmente gratas. Luego pasé a recordar un trabajo clinieo,
cuyo material estaba ordenando y al que (pensé cnese momento) debía
dediearle más tiempo, si quería tenerlo terminado para una fecha dada.
Estaba sumergido en estas fantasías u ocurrencias, cuando el paciente
incorporándose bruscamente dijo "tengo ganas de irme".
En ese momento tomé eonciencia de que me había desconectado de él
y me habla puesto a recordar cosas que, aparentemente, nada tenían que
Ver con lo que yo estaba haciendo en ese momento. Inmediatamente se
hizo nuevamente presente que me había sentido molesto y frustrado unos
instantes antes. Pude señalarle que se sentía frustrado en tanto lucha-
baJ por controlar IY limitar su (comunicación, entre 110 que me decía lY lo
que dejaba de decirme * y que ahora percibía que esa actitud le irnpe-
día progresar en su análisis. Que sentía dentro de sí "un ambiente
'muy pesado y una atmósfera insoportable" y que volvía a angustiarse, en
cuanto intentaba comunicarse más libremente conmigo. Sólo se ligaba a
mí agresivamente, lo que le impedía expresarse con libertad trayéndome
.sus deseos, fantasías y sueños. En ese momento volvía a temer que yo,
como ya lo había hecho su padre (referido al episodio de la libreta o su
madre obligándole a ser limpio) le señalase algo que le pudiera mortifi-
J'

car, por lo que optaba por alejarse de mí como ya lo había hecho con su
padre. Por eso me decía: "tengo ganas de irme".
Con voz entrecortada respondió: "es verdad, doctor, lo siento así, pero
quisiera pedirle una cosa si Ud. no lo toma a mal, quisiera hacer tres se-
siones por semana. Siento que me hará bien y que tengo que intentar ma-

* Ya señalé que de la comunicación hacía un verdadero split, es decir la frag-


mentaba comunicando parte del material y silenciando otra, como lo l1izo con sus
objetes internos disociados y en couflieto dentro de él (padre unido a la imago madre
mala por una parte, e imago .de madre buena por lla, otra).
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELÍAS JARAST 60

nejarme mejor afuera, sin buscar tanto su apoyo, creo que así podré com-
prenderlo mejor a Ud. también. No es cuestión de venir todos los días,
decir poco y no querer escuchar".
En ese momento cambiaba su actitud conmigo, deseaba tener una re-
lación distinta, ubicándose en un nivel en el que se proponía "hacer" en
lugar de "dejarse estar" intentando superar el vínculo que tuvo con la
madre oralmente sobre protectora (pero castradora), y con eQpadre vi-
venciado como perseguidor (como desplazamiento en él, de un aspecto de
la madre). Pero nuevamente la angustia persecutoria le inducía a distan-
ciarse de mí, repitiendo así el split (tres veces en su casa y tres veces en.
análisis). Percibió su forma de comunicarse conmigo, pero simultáneamente
necesitaba poner distancia porque no aprendía a depender de mí como ob-
jeto bueno.
Á partir de ese momento el paciente pudo ir cobrando lentamente con-o
ciencia; de la .renuneia masoquística en la que se había dejado estar.
La. permanente elaboración de la intensa identificación proyectiva que'
hacía en la transferencia, le permitió progresivamente ir percibiendo su
situación interna, aumentando su insight, lo que también pudo llevarlo,
aunque muy lentamente, a una mejor relación transferencia1 y modificar
igualmente su relación con su padre. .Ex profeso paso por alto otros logros.
que tuvo el paciente en su actuación externa, con el objeto de mantener
la ·secuencia del tema.
Entre el material descripto y el .que sigue, transcurrieron aproximada-
mente tres años. En cierta ocasión yen virtud de que al finalizar la sesión
anterior y ya despidiéndose, hablamos cambiado breves palabras. comenzó
diciendo: "Estoy avergonzado por Io de ayer, era mi cumpleaños y cuando
nos despedíamos no pude decírselo y quedé con depresión. A Ud. quizá
no le hace mella, pero a mí si, Las breves palabras de anoche me emocio-
naron mucho y casi no podía bablar. Y eso me pasa con muchos. Pregun-
tar, responder y ser objeto de la atención de los demás aún me produce
tensión. Aún no lo puedo ver a Ud. como amigo y benevolente, como ima-
gino que es con Ana ", sino como perseguidor y exigente".
En este material el paciente estaba mostrando que había adquirido bas-
tante percepción de la comunicación afectiva, pero aún necesitaba recha-
zar la emoción que le producía, controlándola. Además, percibía la depre-
sión (como consecuencia del insight ) ; pero aún le molestaba sentir afecto
por mí, 'como si esto interfiriese sus 'propios celos y rivalidad frente a la
madre mostrando simultáneamente sus sentimientos frente a la pareja
de los padres (desplazados en Ana y en mí).
Agregó: "Sí, ima.gino que mi padre y mi ma.dre tienen buenas relacio-
nes, y yo no lo puedo hacer ni con Ud. ni con Susana. Cuando estoy solo me
siento bien, pero cuando aparece algún elemento de afuera no lo aguanto".
•. Ana es una paciente mía, de 45 años y con quien el paciente tuvo oportunidad:
de conversar alguna vez.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

161 LA FANTASÍA OONTRATRANSFERENCIAL COMO "SEÑAL DE ALARMA"

Después agregó: "debo preparar un trabajo para la facultad y estoy le-


yendo Bases de la com1tnicación lw,mana de Saúl y me doy cuenta de que
.estoy permantemente metido dentro de mí y que me cuesta pasar la ba-
.rrera de dar y recibir". Hizo un silencio, continuando: "me doy cuenta
.que en mi análisis no le he dado mucho material y quizá por eso no puede
ayudarme más (silencio) ... me siento blando y flojo, como entre nubes ... "
Estar solo y sentirse bien eran resabios de su "torre de marfil". Re-
conocía emociones valiosas, pero aún las controlaba intentando aislarse.
'I'odavía a veces, eludía la comunicación verbal, y en una regresión transi-
toria, trataba de recuperar el primitivo vínculo bueno con la madre.
Después de interpretarle cómo tenía que disociar su depresión y el
.afecto que sentía por mí, intentó con el silencio recuperar "las bases de
la comunicación humana" que constituían los cimientos de su primitiva
'buena unión con el pecho y con la madre, correspondientes a una etapa en
-que aún no existía la comunicación verbal; lo expresaba al señalar una
buena identificación y proyección conmigo pero que no podía ser expre-
sada en otra forma (" pasar la barrera da dan y recibir") !osea par y pedir
-dando más material-e- para poder recibir.
Mostraba su depresión renunciando a la magia y omnipotencia; reco-
nocía en forma manifiesta que también de él dependían mis posibilidades
de ayudarlo.
Escuchándose a sí mismo, se conmovió. Fue cuando con voz entrecor-
tada agregó que se sentía blando y flojo, etc. En esos momentos, al perder
.su rigidez obsesiva, se sentía "como entre las nubes", fuera de la realidad
a que Se! había habituado.
Más adelante agregó: "para salir, trabajar, estudiar, debo forzarme,
y así estudié, me recibí y estoy. con Susana; parece un cuadro perfecto,
pero por dentro no cambia, podrido hasta la médula".
'Estaba en ese momento mostrando cómo percibía sus esfuerzos y su
propia depresión. Continuó:" me resulta imposible darme nada a mí mis-
mo, ¡, qué es lo que necesito para sentirme bient '
Me mostraba su esfuerzo. porcambiar y al mismo tiempo. 10 hacía: para
que yo me hiciese cargo de cómo se sentía, para ayudarlo (ahora me pedía).
Luego, refiriéndose a un examen clínico. Que tuvo que hacerse su compa-
ñera dij 0.: "los análisis de Su san a salieron bien y eso me prod uj o alegría".
DE'sT)Up'q asoció con una administración de nrooiedades que le reportaba
'$ IO.OOO.-mensuales de benefició agregando : "ya no los, necesito tanto,
'el estudio. produce y puedo prescindir de eso Que me roba mucho tiempo.
Le voy a vasar la administración a Pedro (es un amigo), que él gane 7 y yo
me quedaréconB "~o
l· Los análisis que saliéron buenos exnresaban una-alusión a" ."11' nronio
análisis, Al no negar ahora que percibía modificaciones, me volvía a re-
euperar como objeto bueno en tanto él se movilizaba, dejando 1'17 ·(alusión
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELíAS JARAST 62
anal = relación con el objeto madre) y quedándose él con el 3 (alusión
a su pene = relación con el objeto padre):
Así, restituyendo. a la pareja padre y madre, él intentaba ligarse geni-
talmente bien con. la figura del padre, en cuya relación fue mejorando
progresivamente.

Desarrollo teórico.

El poder retener las ocurrencias contratransferenciales señaladas, des-


pertóen mí el deseode intentar ubicarlas dentro. del contexto transfereneíal
contratransferencial.
En Fenomono.oaía de la conirairamsierencui, Racker (23) señala una
forma específica de la vivencia contratransferencial que denomina "ocu-
rrencia contratransferencial". Diferencia "ocurrencia" de "posición".
Esta última se hace presente cuando el analista siente que está" envuelto"
en dicha vivencia, percibiendo al paciente como frustrante, exigente, agre-
sivo, etc. Agrega: "existe el peligro de hundirse en esta vivencia; el ana-
lista tiende a repetir, a actuar, en lugar de hacer consciente". En el caso
de la ocurrencia, al ser la reacción contratransferencial percibida como.
tal (ocurrencia, asociación libre o fantasía) "y no comprometiendo en mar
yo¡" grado ia situación emocional, permite al omalist« mantener su, equilibrio
frente al paciente y S'lb material". Así lo señaló Freud refiriéndose a las
ocurrencias libres, al aconsejar la atención flotante y a la importancia de
estas ocurrencias".,
Más adelante, también señala (siempre refiriéndose a la ocurrencia) :
"se caracterizan por el hecho de que no.representan pOI1lo general ningún
peligro para la posición objetiva y observadora del analista frente al ana-
lizado. Aquí el peligro 'reside más -bien, en que no se preste la suficiente
atención a estas ocurrencias, o no se lasuse para su comprensión y eventual
interpretación" .
En un trabajo presentado al Primer Congreso Psicoanalítico Latino-
americano, señala el mismo autor (24) las identificaciones que en la trans-
ferencia realiza el paciente. con el analista y en la contrat.ransferencia que
el 'analista puede realizar con el paciente. '
"Se acepta que el análista co-vivencieen grado adecuado los impulsos,
angustias y defensas del paciente, pero-no se acepta que normalmente co-
viveneie en un grado. adecuado también los impulsos, angustias y defensas
de los objetos internos del paciente. Sin embargo, si esto sucede real-
mente, el analista tiene una llave de suma importancia para la compren-
sión de la transferencia" (20).
Más adelante agrega: "la vivencia contratransferencial radeeuada de-
pende de varios factores, de los que dos son .especialmente decisivos: el
* Lo subrayado es mio.
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

63 LA FANTASÍA CONT'RATRANSFERENCIAL COMO "SEÑAL DE ALARMA"

grado de la propia integración del analista y el grado en el que éste puede


realizar para sí, lo \que tantas veces realiza para el paciente, es decir, dividir
su Yo en uno que vivencia y es irracional y en otro que es racional y observa-
dor de sí mismo. Rechazar y reprimir la elaboración contratransfereneial
significaría una posición masoquística del analista,en la que sucumbe a ella
en tanto no puede poner la adecuada distancia frente a todos estos pro-
blemas dentro de sí".
Desde luego, la señalada actitud masoquística se hubiera configurado
si yo por ejemplo, hubiese tenido una reacción, paranoide ecntratransf'eren-
eial y que, referida al momento en que me sentí frustrado, hubiese signi-
ficado "sucumbir" a dicha actitud.
Garma (7) también ha señalado cómo el masoquismo induce igualmente
al analista a ver su agresión en el paciente, en lugar de ver el propio ma-
soquismo y su sometimiento a un objeto interno frustrador.
En síntesis: la vivencia contratransfereneial al no ser ni rechazada. ni
reprimida, posibilita el no caer "en el círculo vicioso ele la neurosis de
contra transferencia' '.
A este propósito igualmente concurren los trabajos de Grinberg (12)
especialmente referidos a la "contra-identificación proyectiva" como co-
rolario de una identificación proyectiva, masiva y forzada del paciente, a
la que ocasionalmente sucumbe el analista. Señala el autor que en dicho
mecanismo reside la facilidad con que el analista puede caer en el juego
del paciente.
El material referido anteriormente y desde luego en apretada síntesis,
nos lleva a comprender los múltiples aspectos que cada autor se propuso
señalar para la comprensión de los fenómenos eoutratransferenciales. El
analista puede captar y comprender muchos de ellos consciente y directa-
mente en su relación con dI paciente. La intervención de otro analista (de
control, didacta, etc.) que señala aspectos contratransferenciales también
aparece con frecuencia en los trabajos sobre el tema.
, La dificultad técnica en relación a la ocurrencia contratransferencial
reside precisamente en el hecho de que, al no llevar manifiestamente nin-
gún elemento que delate la contratransferencia en forma más o menos di-
recta, corno lo son los estados anímicos de rechazo, fastidio, sueño, etc., la
ocurrencia pnede ser reprimida fácilmente.
En la práctica, la utilización de este material exige "la división del
Yo del analista en un Yo que observa yotro que siente". Para que así ocu-
rra, el Yo que observa (al estar en presencia de la fantasía u ocurrencia),
tiene que dirigir dicha parte de su yo (el que observa) hacia sí mismo.
En ese momento sólo puede hacerlo retirando parte de la libido puesta en
el paciente y ubicándola en su propia fantasía.
Ese es el momento preciso en el que surge la desconexión y también,
el momento en que surge la ocurrencia. Al volver a conectarse con el pa-
ciente, reintegra nuevamente la libido sustraída circunstancialmente, mo-
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELlAS JARAST 64

mento en que reprime u olvida su propia fantasía, como tantas. veces ocurre
con la fantasía onírica.
Winieott (30) señala como" sueños curativos tanto en su propio análi-
sis. como en Ios años -que siguieron al término del mismo, a una larga serie
de sueños que aunque muchas veces desagradables, marcaron cada uno de
ellos el acceso a un nuevo estado emocional". y señala también cómo la
comprensión de un sueño propio, le permitió a su vez comprender más
profundamente lo que ocurría en su paciente y reparar determinados erro-
res interpretativos.
También ocurre que el sueño de un analista que está en análisis., le se~
ñale contenidos inconscientes de él que se encuentran en relación con el
material de un paciente.
Inducido por estas razones, me he planteado la posibilidad de tratar
la ocurrencia contratransferencial, como una fantasía equivalente a. la oní-
rica o a la diurna, proponiéndome seguir el mismo camino que. nos conduce
a descubrir el contenido latente de aquélla. Freud señaló los equivalentes
entre ambas fantasías. En ambos casos, por un proceso de elaboración se
llega a la representación de un conflicto, que sólo así. puede ser vivenciado
por el Yo (4).
Garma (9) señaló que la interpretación .de los sueños implica en cierta
manera realizar el mismo camino o proceso que hizo el Yo para ir del in-
consciente reprimido a lo consciente, manifiesto, pero en un sentido con-
trario, es decir: que es un proceso de elaboración que partiendo de lo cons-
ciente intenta negar a lo inconsciente.
Me propuse, entonces señalar algunos de los elementos que caracterizan
(al igual que a la fantasía onírica o diurna) a la ocurrencia contratrans-
ferencial, como ser: a) contenido manifiesto, b) contenido latente, e) aso-
ciaciones posibles al contenido manifiesto que permitiesen comprender el
contenido latente.
Desglosando aquella fantasía que aparece en el material clínico como
ocurrencia contratransferencial, su contenido manifiesto puede plantearse
así:
1) el recuerdo de las clases que estaba dando;
2) el recuerdo de cuando era candidato y concurría a seminarios.
3) el recuerdo de un trabajo clínico en preparación.
Las asociaciones correspondientes a cada una de estas situaciones, es-
taban implícitas en el desarrollo de la fantasía.
Así a la 1) se asociaba: es útn dar clases. Pero exige prepararse y
capacitarse para poder hacerlo, significando un esfuerzo que luego trae
gratificación (referido a los estudiantes y el interés deIos mismos).
A la 2) se asociaba: que bueno era cuando yo concurría a los semi-
narios. En lugar de tener 'que dar clases, evocaba con satisfacción algunas
de ellas (lo que en 'ese momento 'equivalía a reemplazar el dar, por recibir).
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

;65 LA FANTASÍA CONTRA1'RANSFERENCIAL COMO "SEÑAL pE ALAR~A"

,' A la 3) se asociaba: ya tengo preparado el material clínico y debo orde-


narlo. Me queda poco tiempo y debo apurarme de lo contrario, la fecha
.me sorprenderá sin tener el trabajo terminado. ,
Puede verse que en las situaciones señaladas en el punto 1) "es bueno
dar clases" pero exige un esfuerzo, y luego en el punto 2) recordar algu-
nas clases específicamente buenas que me fue muy grato escuchar, se plan-
teaban situaciones de placer-displacer, en tanto que para obtener una gra-
tificación, el Yo enfrenta la necesidad de realizar previamente la tarea o
el esfuerzo indispensables para lograrla. Es 10 que el paciente no podía
basta ese momento elaborar: salir de su posición oral-anal y aceptar que
hay que dar para recibir, en lugar de esperar pasivamente recibir. En las
fantasías de las clases aparecen ambos términos de la situación: es grato
recibir buenas clases (oral pasivo), pero una gratificación en un nivel más
maduro es poder dar clases que despierten interés (sublimación de la libido
desexualizada) .
Por otra parte, en la fantasía referida al tiempo que dedicaba a mi pa-
'ciente (seis horas semanales de análisis), estaba viveneiando :en ese mo-
mento, el esfuerzo que yo hacía por él, de quien sólo obtenía agresiones (en
"ese momento era para mí poco gratificante recibir del paciente -en fun-
ción de su mecanismo defensivo-- constantes y repetidas agresiones). Ante
esa vivencia de displacer, la fantasía del esfuerzo fue desplazada a otro
"nivel, gratificante para mí (preparar clases que eran bien recibidas por
los alumnos). Volvía así en mi fantasía, a reconstruir inconscientemente la
situación creada entre, el paciente y su padre, cuando éste se alejó afecti-
vamente de él, por las circunstancias antes señaladas y prestándole más
atención al hijo mayor (los estudiantes).
A su vez, al recordar el trabajo que yo estaba preparando (punto 3),
simbolizaba mi deseo de poder darle algo que podía serle útil, pero como él
no sabía qué pedir (puesto que no podía percibir al padre sino oralmente
'como madre), esa posibilidad se veía permanentemente pospuesta en tanto
él no saliera de su situación. .
Concretamente pues, cuando surgieron en mí los recuerdos de las clases
que daba, que recibí (los seminarios) y por último el trabajo que estaba
preparando, yo estaba también percibiendo en forma inconsciente, el con-
flicto del 'paciente. En efecto, esta circunstancia surge de la comparación
de ambos materiales, el del paciente y el mío. Así por ejemplo:
1) "Estudiar" para el paciente, tenía su equivalente en el "prepa-
rar las clases que debía dictar" de mi fantasía. Ambos: contienen la vi-
-vencia de dedicar un esfuerzo (llevan implícita también la fantasía de
.que puede ser exitoso o no).
2) "Construir", era el equivalente de "prepfl.rar, ordenar y presen-
tar" un trabajo. ,
,3) Al recordar ,que estaba posponiendo el trabajo me identificaba in-
conscientemente con el paciente, que 'posponía (par ¡su angustia y la re-
.gresión consecuente) la posibilidad deevolueionarc.Ln, "
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

ELlAS JARAST 66

4) En forma similar, cuando el paciente reaccionó con el silencio (al


suspender la comunicación, "el puente levadizo!") lo percibí inconsciente-
mente, traduciéndolo luego al contexto de recordar el trabajo y sentir que
estaba detenido en él.
El paralelismo entre el material transferencial y la fantasía contra-
transferencial surge de la comparación entre los contenidos manifiesto y
latente del material del paciente y de aquéllos de la ocurrencia contra-
transferencial. Así, la frustración y la angustia del paciente, pudo ser
contratransferencialmente vivenciada en forma inconsciente y referida
(en dicho momento) a una circunstancial fantasía mía, Pero a su vez,
ésta surgió como respuesta específica a la particullar situación trans-
'ferencia1.

ConClltsiones.

Freud (6) señaló el d~rmir como una necesidad del yo de, eludir las
exigencias yexcitacionesdel mundo externo.
Garma (8) ha señalado las condiciones muchas veces frustrantes que
implica la labor del analista. El Yo de éste puede necesitar recurrir a un
mecanismo de protección cuando las exigencias y excitaciones a que Jetlleva
la actitud de un paciente hacen peligrar .su adecuada labor, al comprome-
ter su estado emocional.
Rosenfeld (28) ha señalado la importancia de reconocer y formular
conscientemente lo que reconoció inconscientemente el analista; capacitán-
dose para usar su contratransferencia como un "receptor sensible".
Seyle (29) señala en sus estudios sobre ','stress" cómo el. individuo
reacciona a la sobrecarga permanente y continua de estímulos. Frente a
éstos lo hace primero con una respuesta: ":la. señal de alarma", la que su-
.mada a otras reacciones de orden psicosomático constituyen el "síndrome
de adaptación".
'Tal como en dicho síndrome y frente a la acción stressante .transferen-
cial, el Yo del analista puede desarrollar una serie de actitudes que lo
protegen. La desconexión y la ocurrencia contratransferencial serían como
una "señal de alarma" con la' que el Yo protege su adecuado estado emo-
cional, tal como ·la fantasía onírica protege el reposo del Yo durante el
dormir.
Estimo que fue todo el contexto del material del paciente, sumado a su
actuación, 10 que hizo que se crease dentro de mí una progresiva sensación
de frustración r-especto de él. Pero, ¡fue en unmomento preciso (al que-
darse en silencio prolongado después de mi interpretación); cuando se con-
figuró el equivalente de lo que podría ser una situación traumática para
'el analista: el silencio y la agresión obraron como estirmjlo desencade-
nante deja' desconexión, la que a su vez permitió la aparición de la ocurren-
cia; contratransferencial. Ésta y sus' asociaciones tuvieron': la virtud de ae-
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

67 LA FANTASÍA CONTRATRANSFERENCIAL COMO "SEÑAL DE ALARMA"

tuar como un mecanismo protector, evitando posiblemente al analista de


caer ("hundirse") en el sentimiento de frustración. Ésta era percibida
en ese momento a consecuencia de la reiterada actuación del paciente, quien
'buscaba inconscientemente, que Ql analista (y como lo hizo con él padre)
,se sintiese realmente frustrado y tuviese un alejamiento afectivo 'de: él.
Ello hubiera significado someterse masoquísticamente al paciente.
IJa frustración como situación traumática ha sido señalada por Gar-
ma (9) como elemento presente en los sueños. Dicha situación se repite en
la ocurrencia contratransferencial; dado que el sueño es un mecanismo
-prcteetor del Yo en la función del dormir, la ocurrencia contratransfe-
rencial puede ser interpretada (en forma similar) comouna protección que
permite al Yo del analista preservar la atención flotante, evitando" ásí
.posibles contra-identifieaciones neuróticas. El sueño señada que enelpsi-
quismo está pasando algo que le lleva a movilizarse substrayéndolo del
dormir profundo (6) ; igualmente la ocurrencia contratransfereneial puede
ser la "señal de alarma ~, o el toque de atención para cl
analista, advir-
tiéndole de que también dentro de si está pasando" algo" que puede com-
prometer la adecuada posición de atención flotante.
La elaboración de la ocurrencia contratransferencial, permitió al ami-
.lista percibir- en su inconsciente lo que ocurría en el inconsciente delpa-
eiente y paralelamente en el propio, aumentando así las posibilidades de su
insight. Se configuró de este modo, una especie de aeting-ín dentro' de la
vivencia transferencial-contratransferencial, constituyendo una comunica-
'eiónde inconsciente a inconsciente, en la que cada uno, realizando sus pró-
.pias fantasías y en apariencia desconectadas entre sí, sé comunicaban 'Y
se correspondían. Del material surgen las correlaciones evidentes en ese
sentido. ' !

Expresado en otra forma, puede señellarse que las cargas de afecto


-puestas-al servicio de la 'representación, en el material de la ocurrencia
contratransferencial, son similares a las cargas de afecto que el paciente
'moviliza en sus fantasías o sea' que, el contenido latente del material con-
tratransferencial expresa una dinámica similar a la del contenido latente
del material del paciente. '
Correlativamente, también existen semejanzas entre la representación
manifiesta de la fantasía contratransferencial y la del paúiente., ';
:. Se hace posible pues, elaborar la fantasía u ocurrencia contratransf~w
ferencial tal como puede ser elaborada una fantasía onírica.
Creo que el hacerlo nos acerca a Freud (3) : "Loúnido 'que tiene v~lor
en Ia vida anímica, son 10Si sentimientos y toda la importancia de.las fne],'-
zas psíquicas reside en su capacidad de hacerlos surgir; Si 'las ideas tairl-
bién sucumben a la represión, ello es tan sólo por su enlace COl'). la: pro~u~~
'eiénrle sentimientos que deben ser evitados: la represión recae 800re'I08
sentimientos, los que nos son perceptibles sólo en su enlace con 'las repre-
sentaciones". '
Copyrighted Material. For use only by FieldingGraduateU. Reproduction prohibited. Usage subject to PEP terms &
conditions (see terms.pep-web.org).

BIBLIOGRAFíA

(1) CESH>, F.: Psicoanálisis de una melancolía con ataques histeroepilépticos, Hev.
Psa., t. IX, n9 4, 1954.
(2) FENICHEL, O.: Teoría PsicoanaUtica de las Neurosis, Ed. Nova, Bs. As. 1957,
pág .. 507. , -
(3) FREUD, S.: El Delirio y los Sueños en la Gradiva, Obras Completas, tomo III,
Ed. Rueda, Bs. As. 1956, pág. 247.
(4) FEUD, S.: La Interpretación de los Sueños, Obras Completas, Ed. Rueda 1953,
tomo VII, 1J19 ,2. ' , '
(5) FREUD, S.: Nuevas Aportaciones al Psicoanálisis, Obras Completas, Ed, Rueda,
1953, tomo XVII.
(6) FREUD, ,S.: Adición Metapsioológica a la Teorio de los Sueños, Obras Completas,
Ed. Rueda, 1955, tomo IX, pág. 165.
(7) GARMA, A.: Interpretaciones Err6neas de Hostilidad Reprimida en Cefaleas,
Rev. ¡Psa., :\'01. IX, 1954.
(8) GARMA, A.: Contenidos Latentes de las Discordias entre Analistas, Rev. Psa.,
t. XVI, 1959,n9 4.
(9) GARMA, A.: Psicoanálisis ae los Sueños, Bibliot. de Psa Ed. Nova, 1959.
(10) GRINBF,RG,L.: Aspectos Mágicos en la Transferencia y en la Contra transferencia.
Sus i1nplicaciones Técnicas, Rev. de Psa., tomo XV, oet.vdie, 1958.
(11) GRINBERG,L.: Sobre la Despersonalización en el Curso de la Neurosis Trans-
ferencial, Rev. de Psa., t. XI, n? 3·19.
(12) GRINBERG,L.: Perturbaciones en la Interpretación por la Contraidentificaci6n
Proyectiva, Rev. de Psa., t. XIV, n? 1-2, 19.
(13) KLEIN, M.: Algunas Conclusiones Teóricas Relativas a la "Vida Emocional deZ
Lactante, Rev, Uruguaya de Psic., t. II, n9 3, ..1958.
(14) KLEIN, M.: A Contribl¿tion to the T1~eory of Intelectual Inhibition, Int. J.
Psychoan., 1931, p. 12.
(15) KLEIN, M.: On the DevelopmeniJ, o] Mental Functioning, The Int. J. of Psyehoan.,
1958, págs. 39·84.
(16) KLEIN, M.: El Psicoanálisis de los Niños, Ed. A.P.A., 1948, pág. 261.
(17) LIBERMAN,D.: Ilragmen'to del Análisis de una Psicosis Paranoide, Bev Psa., t. IX,
n9 4, 1952.
(18) PLATA, C.: Conflictos psíquicos en las dificultades para el estudio (un caso cU-
mic(). Presentado en la A.P.A., 1957.
(19) RAOKER,H.: Estudios CI'¿nicos sobre Técnica Psicoanalítica, Ed. Paidós, Bs. As.,
1960
(20) RAOKER; H.: Loo. cit., pág. 72.
(21) RACKER, H.: Loo, cit., pág. 70.
(22) RACKER, H.: Loe. oii, pág. 169.
(23) BACKER, H.: Loe. cit., pág. 170.
(24) RACKER, H.: Técnica Analítica y el Masoqui81no Inconsciente del Anal.ista, 1er.
Congreso Psa. Lat. Amer. (1956). Publicado en 'I'he Psyehoan, Quart. V, 27,
1958.
(25) RASOOVSKYA.: El Psiquisl/no Iletal,Ed. Paidós, 1960, pág. 83.
(26) RASOOVSKY:A.: Loc. cit., pág. 66.
(27) RASOOVSKY,A.: Loe. cit., pág. 70.
(28) lOOSENFELD:Rev. de Psa., t. nI, A. 19, pág. 330.
(29) SELYE, H.: Stress, Edit. Científico Médica, Barcelona, 1954. . .
(30) WINNI~TT, D. W.: Hate in the Countcrtransferenoe, Int.J. Psa., t. XXX, 1949,
pág. 69.
PEP-Web Copyright

Copyright. The PEP-Web Archive is protected by United States copyright laws and international treaty provisions.
1. All copyright (electronic and other) of the text, images, and photographs of the publications appearing on PEP-Web is retained by
the original publishers of the Journals, Books, and Videos. Saving the exceptions noted below, no portion of any of the text, images,
photographs, or videos may be reproduced or stored in any form without prior permission of the Copyright owners.
2. Authorized Uses. Authorized Users may make all use of the Licensed Materials as is consistent with the Fair Use Provisions of
United States and international law. Nothing in this Agreement is intended to limit in any way whatsoever any Authorized User’s
rights under the Fair Use provisions of United States or international law to use the Licensed Materials.
3. During the term of any subscription the Licensed Materials may be used for purposes of research, education or other
non-commercial use as follows:
a. Digitally Copy. Authorized Users may download and digitally copy a reasonable portion of the Licensed Materials for their own use
only.
b. Print Copy. Authorized Users may print (one copy per user) reasonable potions of the Licensed Materials for their own use only.

Copyright Warranty. Licensor warrants that it has the right to license the rights granted under this Agreement to use Licensed
Materials, that it has obtained any and all necessary permissions from third parties to license the Licensed Materials, and that use of
the Licensed Materials by Authorized Users in accordance with the terms of this Agreement shall not infringe the copyright of any third
party. The Licensor shall indemnify and hold Licensee and Authorized Users harmless for any losses, claims, damages, awards,
penalties, or injuries incurred, including reasonable attorney's fees, which arise from any claim by any third party of an alleged
infringement of copyright or any other property right arising out of the use of the Licensed Materials by the Licensee or any Authorized
User in accordance with the terms of this Agreement. This indemnity shall survive the termination of this agreement. NO LIMITATION
OF LIABILITY SET FORTH ELSEWHERE IN THIS AGREEMENT IS APPLICABLE TO THIS INDEMNIFICATION.

Commercial reproduction. No purchaser or user shall use any portion of the contents of PEP-Web in any form of commercial
exploitation, including, but not limited to, commercial print or broadcast media, and no purchaser or user shall reproduce it as its own
any material contained herein.

S-ar putea să vă placă și