PROGRAMA ACADEMICO DE PREGRADO ADMINISTRACION DE EMPRESAS
TALLER 1
OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE (ODS)
POR JUAN FERNANDO DEL RIO OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE (ODS)
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), también conocidos como Objetivos
Mundiales se gestaron en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible, celebrada en Río de Janeiro en 2012. El propósito era crear un conjunto de objetivos mundiales relacionados con los desafíos ambientales, políticos y económicos con que se enfrenta nuestro mundo, son un llamado universal a la adopción de medidas para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de paz y prosperidad, estos 17 Objetivos se basan en los logros de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, aunque incluyen nuevas esferas como el cambio climático, la desigualdad económica, la innovación, el consumo sostenible y la paz y la justicia, entre otras prioridades. Los ODS constituyen un compromiso audaz para finalizar lo que hemos iniciado y abordar los problemas más urgentes a los que hoy se enfrenta el mundo. Los 17 Objetivos están interrelacionados, lo que significa que el éxito de uno afecta el de otros. Responder a la amenaza del cambio climático repercute en la forma en que gestionamos nuestros frágiles recursos naturales. Lograr la igualdad de género o mejorar la salud ayuda a erradicar la pobreza; y fomentar la paz y sociedades inclusivas reducirá las desigualdades y contribuirá a que prosperen las economías. En suma, es una oportunidad sin igual en beneficio de la vida de las generaciones futuras. Los Objetivos están interrelacionados, con frecuencia la clave del éxito de uno involucrará las cuestiones más frecuentemente vinculadas con otro, los ODS conllevan un espíritu de colaboración y pragmatismo para elegir las mejores opciones con el fin de mejorar la vida, de manera sostenible, para las generaciones futuras. Proporcionan orientaciones y metas claras para su adopción por todos los países en conformidad con sus propias prioridades y los desafíos ambientales del mundo en general. Los ODS son una agenda inclusiva. Abordan las causas fundamentales de la pobreza y nos unen para lograr un cambio positivo en beneficio de las personas y el planeta. Según la Organización Mundial de la Salud el género se refiere a los conceptos sociales de las funciones, comportamientos, actividades y atributos que cada sociedad considera apropiados para los hombres y las mujeres. La desigualdad de género es estructural y conlleva a otras desigualdades como la económica que tiene un gran impacto, incluso más amplio que las raciales, etarias y sexuales; el trabajo doméstico, por ejemplo, además de no ser remunerado, no se comparte de forma equitativa entre mujeres y hombres. Del mismo modo, no se ha avanzado en la corresponsabilidad social del Estado y del mercado laboral. Asimismo, regularmente las mujeres son las responsables del bienestar familiar a costa del perjuicio de sus derechos humanos, si se entendiera que el trabajo doméstico no remunerado sostiene al trabajo remunerado. Un informe realizado por la Facultad de Derecho de la Universidad Libre, revela las ciudades y los días en los que se presentaron mayor número de casos. De 10 casos de maltrato, apenas se denuncian tres. En 2018 se han registrado al menos 3.014 casos de violencia de género contra la mujer en Colombia: es decir, alrededor de 50 cada día. Así lo reveló un informe de la Facultad de Derecho de la Universidad Libre, tras hacer un análisis de los documentos del Instituto Nacional de Medicina Legal. Aunque hay una disminución de 441 casos frente a los registrados durante el primer bimestre de 2017, las cifras no dejan de ser alarmantes.
Respecto a ello, Ángela Gómez Jutinico, docente de Derecho de la universidad,
experta en temas de género y vocera del informe, indicó que es un fenómeno más frecuente de lo que se cree, pero “actualmente, existe una invisibilización del mismo y una falta de reconocimiento de que existe un problema social”. De hecho, el informe reveló que, de 10 casos que se presentan sobre maltrato en una relación de pareja, solo tres son denunciados ante las autoridades. “Las mujeres no denuncian por miedo, temen a ser revictimizadas y a que la gente las juzgue como responsables de la violencia que a ellas mismas las afecta”, señaló Gómez. Ese miedo, según explicó la docente, se debe a un fenómeno cultural que termina por culpar a la mujer, asumiendo que “hicieron algo para merecer el castigo”, o señalándolas de “ser cómplices de la actitud violenta hacia ellas y de no denunciar. Ambos hechos han naturalizado el problema”. A eso se suma la inexistencia de políticas públicas que integren varios análisis y estudios sobre violencia de género, según manifestó Gómez. “Este tema, para muchos trillado, se volvió paisaje para la sociedad y un asunto de moda para los políticos” De acuerdo con el estudio, las mujeres más afectadas por esta problemática son aquellas entre los 20 y 29 años, con 1.295 denuncias. También se reportaron 81 casos en los que menores de edad fueron maltratadas por sus parejas. En cuanto a los presuntos agresores, se han registrado 1.716 actos de violencia por parte de la pareja y 1.026 en los que los responsables son exnovios o exesposos. Según las denuncias, al menos 2.858 hechos violentos se desencadenaron tras discusiones sentimentales y 156 por el estado de alicoramiento de los hombres. Esto, aclarando que la violencia no tiene justificación alguna. Finalmente, el análisis entrega la lista de zonas en las que más se registraron casos de violencia de género en lo corrido de 2018, siendo Bogotá la primera, con 760 mujeres maltratadas; seguida de Antioquía, 311; Cundinamarca, 236; Valle del Cauca, 204; Santander, 172; Atlántico, 136; y Meta, 103. Por otro lado los objetivos de desarrollo sostenible que apuntan a la reducción de la desigualdad de género y empoderamiento de la mujer son el objetivo uno que se basa en erradicar la pobreza en todas sus formas la cual sigue siendo uno de los principales desafíos que enfrenta la humanidad. Si bien la cantidad de personas que viven en la extrema pobreza disminuyó en más de la mitad entre 1990 y 2015 (de 1.900 millones a 836 millones), aún demasiadas luchan por satisfacer las necesidades más básicas. A nivel mundial, más de 800 millones de personas aún viven con menos de US$1, 25 al día y muchos carecen de acceso a alimentos, agua potable y saneamiento adecuados. El crecimiento económico acelerado de países como China e India ha sacado a millones de personas de la pobreza, pero el progreso ha sido disparejo. La posibilidad de que las mujeres vivan en situación de pobreza es desproporcionadamente alta en relación con los hombres, debido al acceso desigual al trabajo remunerado, la educación y la propiedad. Los avances también han sido limitados en otras regiones, como Asia Meridional y África subsahariana, donde vive el 80% de la población mundial que se encuentra en condiciones de extrema pobreza. Además, nuevas amenazas que plantean el cambio climático, los conflictos y la inseguridad alimentaria necesitan mayores esfuerzos para sacar a las personas de la pobreza. Igualdad de género es otro de los objetivos que apunta a la reducción de desigual de género ya que este consiste en poner fin a todas las formas de discriminación contra las mujeres y niñas que no es solo un derecho humano básico, sino que además es crucial para acelerar el desarrollo sostenible. Ha sido demostrado una y otra vez que empoderar a las mujeres y niñas tiene un efecto multiplicador y ayuda a promover el crecimiento económico y el desarrollo a nivel mundial. Desde 2000, la igualdad de género es un aspecto primordial de la labor del PNUD, sus aliados de la ONU y el resto de la comunidad global, y se han registrado algunos avances extraordinarios. Más niñas asisten hoy a la escuela que hace 15 años y en la mayoría de las regiones se logró la paridad de género en educación primaria. Además, las mujeres constituyen hoy el 41 por ciento de la fuerza laboral remunerada no agrícola, en comparación con el 35 por ciento en 1990. El último objetivo que escogí que complementa y apunta a la reducción de la desigualdad de género es el objetivo número 8, trabajo decente y crecimiento económico, Durante los últimos 25 años, la cantidad de trabajadores que viven en condiciones de pobreza extrema ha disminuido drásticamente, pese al impacto de la crisis económica de 2008 y las recesiones globales. En los países en desarrollo, la clase media representa hoy más del 34% del empleo total, una cifra que casi se triplicó entre 1991 y 2015. Sin embargo, mientras la economía mundial continúa recuperándose presenciamos un crecimiento más lento, un aumento de las desigualdades y un déficit de empleos para absorber la creciente fuerza laboral. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en 2015 hay más de 204 millones de personas desempleadas. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible apuntan a estimular el crecimiento económico sostenible mediante el aumento de los niveles de productividad y la innovación tecnológica. Fomentar políticas que estimulen el espíritu empresarial y la creación de empleo es crucial para este fin, así como también las medidas eficaces para erradicar el trabajo forzoso, la esclavitud y el tráfico humano.
La realidad en el municipio de Cucunubá no es muy diferente según cifras de la
secretaria de salud y promoción social del municipio el 15.74% de 200 mujeres encuestadas manifiesta falta de oportunidades laborales para las mujeres, otro 15.74% manifiesta maltrato físico verbal, emocional y económico hacia la mujer en el hogar, otro 5.9% define la problemática más sentida, la falta de autoestima y seguridad de la mujer frente a sus capacidades para ser independiente y productiva, otro 5.5% manifiesta que la mujer no tiene autoridad en el hogar y otro 5.5% manifiesta que al tener que dejar solos a sus hijos para salir a trabajar no pueden desarrollar lazos afectivos de calidad con ellos. Una mujer y en general cualquier persona que llega a tener un empleo formal con los derechos y obligaciones que establece la ley laboral en Colombia para todos los trabajadores es una ciudadanía que no recibe si no que aporta recursos al país, darle la oportunidad a una mujer de ingresar al mercado laboral devengando un salario y demás garantías laborales pero que además está inmersa en el sistema de oferta y demanda del consumo y sumando la responsabilidad de hacer sus aportes derivados del pago a los sistemas de seguridad, el IVA, la rete fuente y demás impuestos nacionales y locales, implica la generación de más recursos de inversión público que resultan en mayores oportunidades de trabajo, desarrollo regional y finalmente el mejoramiento de la calidad de vida de la población en general el progreso del país y lo más importante hará de Colombia un país incluyente. Cucunubá es un municipio de categoría 6 con una totalidad de 7178 habitantes de los cuales son 1113 personas en el área urbana y 6065 personas en el área rural; de las cuales 1103 son mujeres entre 0 y 17 años. 790 entre los 18 y 29 años, 1244 entre los 30 y los 59 años y 422 de 60 años o más con los que podemos evidenciar que el mayor porcentaje de mujeres cucunubenses se encuentran en una edad productiva pero a raíz del tradicionalismo machista propio de la cultura cucunubense un gran porcentaje no puede laborar, percibe falta de oportunidades y es sometida a algún tipo de violencia. La administración de empresas al ser una carrera del área de las Ciencias Económicas en las que se adquiere las habilidades para coordinar el funcionamiento total de una organización y además adquirir conocimientos de economía, de manejo de recursos humanos y de matemáticas; permitirá ahondar en esta problemática desde el punto de vista resolutivo planteado alternativas de emprendimiento sostenible para estas mujeres, Cucunubá municipio tradicionalmente artesano representa un diamante en bruto para explotar turísticamente y desde el punto de vista de la economía naranja que permitirá no solo generar ingresos a la población objeto de intervención (mujeres vulnerables) si no la economía y comercio del municipio en general. A largo plazo planeo que esta idea que ronda en mi cabeza desde que estaba en el colegio se materialice y se convierta en un proyecto emprendedor, sostenible y que desde el punto de vista social genere empleo para las mujeres contribuyendo a la reducción de desigualdades equidad de género, producción de nuevos empleos y por qué no ser una experiencia exitosa referente provincial departamental y nacional. BIBLIOGRAFIA
1. Política pública municipal de mujer equidad y género. Cucunubá 2018.
2. Análisis de situación en salud (ASIS) Cucunubá 2017. Fuente secretaria de salud y promoción social 3. www. Universidadescr.com 4. www.milenio.com 5. www.elespectador.com 6. www.undp.org/content/undp