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40 claves para comprender cómo funciona la política

actual en España

El desconcierto del centro y de la derecha frente al


fenómeno Sánchez parece demostrar que hay
algunas reglas de la política moderna que no han
sido entendidas al 100%.

Cristian Campos @crpandemonium 9 febrero,


2020 02:34

1. La moneda de curso legal en la política actual son los sentimientos.

2. Eso lo han entendido los partidos redentoristas y metafísicos, es decir los


partidos teológicos: PSOE, Vox, Podemos y los nacionalistas.
3. No lo han entendido los partidos humanistas y positivistas, es decir los
partidos científicos: PP y Ciudadanos.

4. La paradoja es que son los partidos que mejor conocen la naturaleza
humana los que peor han utilizado ese conocimiento para generar
adhesiones a su programa político.

5. En sentido contrario, son los partidos que no sólo desconocen, sino que
desprecian la misma idea de la existencia de una naturaleza humana, los
que mejor se han aprovechado de ella.

6. La paradoja se explica sola. Los partidos que analizan intelectualmente
la emocionalidad son incapaces de aprovechar su potencial porque la
intentan explotar racionalmente. Son partidos intentando aprender a
nadar mediante tutoriales de YouTube. Los partidos que no la comprenden
racionalmente, pero sí emocionalmente, la aprovechan infinitamente
mejor porque se limitan a hacer uso de ella.

7. La prensa es racional y la televisión es emocional. Por eso la televisión
decide hoy elecciones y la prensa sólo aspira a cortejarlas.

8. Y por eso el gran error del PP de Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de
Santamaría fue regalarle las televisiones al PSOE.

9. En la batalla entre racionalidad y emocionalidad, la segunda ganará por
K.O. en la inmensa mayoría de las ocasiones.

10. El proceso de toma de decisiones humano no es:

A) Analizo racionalmente un problema.

B) Me adhiero emocionalmente a la solución racionalmente más eficaz y
eficiente para él.

11. El proceso es exactamente el contrario:

A) Analizo emocionalmente un problema.

B) Intento justificar racionalmente la solución emocional que he imaginado
para él.

12. El proceso es el mismo a la hora de analizar el porqué del fracaso de
una determinada política pública:

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A) Analizo emocionalmente mi fracaso.

B) Intento justificar racionalmente la disculpa emocional que he fabricado
para él.

13. El punto anterior explica por sí solo el hecho de que las políticas
económicas del socialismo sigan siendo defendidas y aplicadas hoy en día
a pesar de haber demostrado una inaudita incapacidad para generar
progreso y bienestar en ausencia de capitalismo y libre mercado.

14. La justificación emocional es siempre "no es la idea lo que ha fallado,
sino su aplicación, así que nosotros la aplicaremos bien esta vez".

15. El criterio para aplicar hoy una u otra política pública no es su eficacia,
su eficiencia o su racionalidad, sino su capacidad para desatar la
emocionalidad del ciudadano.
16. A mayor emocionalidad generada, más probabilidades de que esa
política sea aplicada por las administraciones y más probabilidades de que
sea defendida frente a las críticas una vez su fracaso se haga evidente.

17. ¿Un ejemplo? Las subidas del salario mínimo por encima de la
productividad media del trabajador español.

18. El objetivo de las políticas públicas no es la erradicación de problemas
concretos, sino la satisfacción de la emocionalidad asociada a ese
problema concreto.

19. Otro ejemplo. El cambio climático. La energía nuclear es la más limpia,
segura, sostenible, barata y eficiente de todas las conocidas por el hombre.
Pero dado que el objetivo del movimiento ecologista no es solucionar el
problema real, sino generar satisfacción emocional entre sus acólitos, la

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solución ideal es desechada en beneficio de remedios parciales,
contraproducentes o lisa y llanamente destructivos, pero mucho más
efectivos a la hora de generar emocionalidad.

20. Y por eso las reivindicaciones justas y reales, pero racionales, no tienen
la más mínima oportunidad de prosperar frente a las reivindicaciones
injustas e irreales, pero emocionales.

21. El motivo por el que los líderes nacionalistas catalanes son
recompensados por el Gobierno a pesar de haber sido condenados a
décadas de cárcel por un golpe contra la democracia es porque generan
oleadas de emocionalidad mucho más poderosas y persistentes que las
generadas por los partidos y las comunidades leales a la Constitución.

22. ¿Es un contrasentido que los ciudadanos de una nación imaginaria
como la catalana disfruten de una mejor financiación, de mejores servicios
públicos y de mejores perspectivas profesionales que los ciudadanos de
una nación real como la española?

23. No lo es porque los catalanes separatistas sienten por su nación
imaginaria una emoción mucho mayor que la de los españoles que abogan
explícitamente por la destrucción de su nación real.

24. Dicho de otra manera: no importa que el objeto sea irreal si genera
emociones reales.

25. Y a la inversa: no importa que el objeto sea real si no genera emociones.

26. Desde el punto de vista de un cínico lo anterior tiene sentido. Las
emociones abarrotan manifestaciones, generan cohesión social y tienen el
poder de exterminar vidas humanas por la vía de la muerte social del
hereje.

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27. ¡Ni siquiera el código penal es ya necesario para acabar con la vida de
un hombre! Basta con que su supuesto delito sea emocionalmente
intolerable. Y ni siquiera la inexistencia del delito será motivo de
absolución.
28. La dictadura perfecta es aquella que basa su monopolio de la fuerza no
en el derecho sino en las emociones.

29. Aunque es perfectamente posible sostener hoy en día, sin temor a decir
una tontería, que la emoción es ya fuente de derecho. Y en el sentido más
literal posible de la expresión. Explicaba Alfonso Guerra hace apenas unas
semanas cómo el Tribunal Constitucional decretó la constitucionalidad de
una ley flagrantemente anticonstitucional, la de violencia de género, por
las presiones emocionales de su entorno.
30. Un segundo ejemplo, esta vez en los Estados Unidos. La aprobación por
parte del Tribunal Supremo del Obamacare a pesar de que su Constitución
prohibe explícitamente que el Gobierno obligue a los ciudadanos a
comprar un seguro obligatorio. El Tribunal Supremo decidió finalmente
aprobar el programa de Obama con el argumento de que este no era un
seguro, sino un impuesto.

31. Del ciudadano moderno, en fin, se exige sentimiento y no devoción por
las leyes. Porque la ley es mucho más difícilmente moldeable por los
políticos que los sentimientos.

32. La emoción motora de las políticas públicas no tiene porque ser
siempre una emoción positiva. De hecho, no suele serlo jamás.

33. Un ejemplo. El principal motivo de las dos victorias electorales del PSOE
de Pedro Sánchez en 2019 no fue la emoción positiva generada por un
programa político que por otro lado era inexistente más allá de un puñado

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de lugares comunes del socialismo, sino la emoción negativa generada por
el rechazo a esa abstracción llamada "la derecha".

34. Sólo emocionalmente puede explicarse que el electorado socialista
prefiriera ver a su partido pactar con un delincuente como Oriol Junqueras
condenado por sedición y hasta por malversación de fondos públicos, un
delito cargado de peso emocional para esa izquierda que venera lo público,
antes que con Pablo Casado o Inés Arrimadas.

35. Piensen en una sola emoción motora del socialismo que no sea en
realidad la manifestación de una emoción negativa. Del rencor hacia un
determinado sector de la población.

36. Piensen en la okupación, por ejemplo. Una política sensata de vivienda
pública permitiría dar cobertura a los casos más extremos, una vez
descartados los oportunistas. Pero eso no resolvería el problema de la
emocionalidad. El socialismo necesita castigar a esa abstracción llamada
"los propietarios" permitiendo que sus casas sean okupadas y destrozadas
impunemente porque eso sí satisface emocionalmente a sus votantes.

37. La okupación es la venganza de la izquierda contra el capitalismo
maquillada de política social.

38. Otra clave para entender la política actual: la derecha comprende
mucho mejor el razonamiento político de la izquierda de lo que la izquierda
comprende el razonamiento político de la derecha.

39. Jonathan Haidt explica en su libro La mente de los justos el porqué.
Muy resumidamente, el pensamiento conservador abarca un mayor rango
de lo que él llama "fundamentos de la moral humana". La izquierda abarca
un menor rango de esos fundamentos y por ello no suele comprender
determinadas motivaciones y razonamientos de la derecha. Es necesario

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señalar aquí que Haidt se considera a sí mismo progresista y que su
prejuicio, antes de comenzar sus investigaciones, era que el resultado de
estas sería exactamente el contrario. Le honra la decisión racional de no
haber enterrado esos resultados.

40. La última clave para comprender la política de hoy en día en España es
una sencilla evidencia. Lograr lo que ha logrado Pedro Sánchez –léase
pactar con delincuentes y simpatizantes del terrorismo sin que eso le pase
factura alguna a su partido, arrasar el centro político, dividir España en
progresistas y ultraderechistas, pactar con un individuo que desde su cargo
de vicepresidente llama a la izquierda a salir a las calles contra la mitad de
los españoles, negar a las comunidades pobres el dinero que les debe para
entregárselo a las ricas, demonizar a la oposición hasta extremos
caricaturescos o mentir día tras día sin que ello le suponga el más mínimo
dilema moral– es extraordinariamente fácil. Sólo es necesario patear el
tablero y pegarle fuego a las piezas. Otra cosa muy diferente, obviamente,
es que de ello vaya a salir algo bueno para el futuro de España y de los
españoles.

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