Abrazar a ese quien realmente eres y al que tanto rechazas

En mi experiencia, de más de 15 años trabajando como psicólogo y asesorando a

hombres (y mujeres) que desean mejorar sus habilidades de cortejo, he podido
concluir lo siguiente:

Las personas que llegamos a este camino hemos tenido importantes problemas en
nuestra infancia y adolescencia
Tales problemas están definidos por un poco exposición social, lo cual ha generado
un bajo desarrollo de habilidades sociales
Entre otras situaciones se ha desarrollado una fuerte personalidad ansiosa, que ha
generado un importante ruido mental que les acompaña
Sus fundamentos y pilares de su propia identidad son débiles y se caracterizan por
inseguridad y falta de confianza personal hacia sí mismos, lo cual genera una baja
autoestima
Han crecido con ideas erróneas de la feminidad y la masculinidad, estereotipos que
han sido implantados a través de la crianza y que les han llevado, por ejemplo a
idealizar o a tener expectativas erróneas sobre sí mismos y el sexo opuesto en
relación
Han desarrollado hábitos compensatorios a la soledad, en forma de ciertas
adicciones, ya sea a cultivar una mayor vida intelectual, a los video juegos, o a
la pornografía
Han crecido rechazando quienes son, comparándose con otras versiones y cultivando
un resentimiento hacia quienes tienen éxito socialmente y con el sexo opuesto
Y, como ya he dicho en muchas oportunidades, esto dista mucho de ser algo que se
solucione con charlas motivacionales o con técnicas de engaño.

Otra de las cosas que he observado en estos años, porque también a mí me pasó, es
que al inicio las personas buscan ser alguien que no son, y buscan copiar los
modelos de hombre que son exitosos, y casi que buscan clonarlos.

En una pésima adaptación de lo que significa modelar a alguien.

Porque no lo modelan, lo copian.

Y al hacerlo creen copiar sus creencias, y copiar su identidad, cuando en realidad

están haciendo un lavado exterior, adoptando tonos de voz, adoptando gestos,
adoptando estéticas, y es todo.

Y tienen un éxito relativo en un ámbito más superficial.

Sin embargo, siguen siendo ansiosos.

Siguen teniendo serias dudas respecto a su identidad.

Siguen siendo unos buscadores de aprobación ajena.

Y ello implica que sus sucesivas relaciones no sean del todo felices, porque tienen
que emplear mucha energía en sostener su falsa identidad, y en el fondo están
buscando la aprobación de sus parejas y luchando por ser amados.

También, puede ocurrir, que justamente las personalidades que suelen copiar, son
las formas más narcisistas y maquiavélicas, es decir, incorporan formas de ser
basadas en la triada oscura. Logran darse cuenta que imitar la estética más
aceptada (por ejemplo en look del cantante de género urbano) les va a generar un
mayor éxito entre las mujeres. Se hacen toda clase de arreglos estéticos (dientes,
barba, peinado) y logran mejorar su suerte.

Sin embargo, han incorporado prédicas que los hacen altamente manipuladores, que
hacen que realmente sean incapaces de conectar emocionalmente con una mujer (por
que su sensación de falta de amor profunda sigue allí), buscan en una conducta de
don juan suplir con exceso de sexo su falta de aceptación propia.

Y en últimas terminan peor de lo que empezaron.

Porque se han puesto una máscara que les funciona, pero que no logra curar sus
heridas más esenciales.

Sumemos a ello que para suplir sus carencias sociales caen en manos de grupos
manipuladores y con pensamiento tipo secta, donde son continuamente adoctrinados
para que tengan un pensamiento tipo borrego, el cual es consumido porque les
representa un beneficio de por fin ser aceptado en un grupo de personas semejantes.
Este grupo les brinda la seguridad y la inclusión de la que no habían podido gozar
en el pasado.

Exactamente igual que quien ingresa a una secta religiosa, estos han ingresado a
una secta de don juanes, de gente con cierto estilo de vida, de motivadores
compulsivos. Así que difícilmente podrán entrar en la necesaria disonancia
cognitiva para saber que han inventado una nueva versión de sí mismos que no es, ni
de cerca, su mejor versión.

Es su versión falsa.

Es un falso ser.

Es un falso ser que te va a llevar a establecer relaciones con personas a quienes

tú no les gustas en realidad, les gusta ese falso ser, esa versión falsificada,
maquillada y llena de efectos especiales en la cual te has convertido.

Querrán la mentira que les estás vendiendo y comprarán esa ideología de

manipulación que te han inyectado en tu secta.

Y lo peor, estarás tan metido en tu mundo delirante que lo habrás cultivado es otra
capa más que te impedirá el despertar.

Habrás logrado imitar dos tipos de personalidades muy difíciles: el narcisista y el

maquiavelista.

Habrás aprendo a que tus parejas te definen.

Habrás aprendido a presumirlas en redes sociales para lograr que tus pares
masculinos, aquellos que no te aprobaban en infancia y adolescencia) te aprueben
con sus likes.

Habrás aprendido a aparentar.

Habrás aprendido a mentir para conseguir lo que quieres.

Habrás aprendido discursitos sobre “machos alfa” y dominancia simplemente para

invertir tus papeles de tu vida, y pasar de ser el abusado para convertirte en el
abusador.

Habrás aprendido a ser tan superficial y encantador como un narcisista, pero

incapaz de sacar a luz lo que realmente te gusta, por temor a ser rechazado.

Habrás aprendido que solo se necesita unas cuantas frases de motivación, con la
cara de personajes de moral paradójica, como el Joker de Joaquin Phoenix (jajaja)
el Lobo de Wall Street, podrás conseguir todo lo que deseas. Y ese será tu
alimento, pequeñas dosis de anestesia en forma de frases motivacionales.

Habrás generado un necesidad de seducir siempre y te harás esclavo a gustar y

atraer.

Seguirás sin poder digerir del todo los rechazos.

Seguirás obsesionándote con aquellas personas que pueden ver tu real esencia y que
no se sienten cómodos con tu máscara.

Seguirás con muchas dificultades para sentir emociones profundas, porque ya no

sabrás cuándo está sintiendo el auténtico ser o cuándo estás fingiendo para
establecer una falsa empatía manipuladora.

Seguirás usando las mismas muletillas del dinero y el estilo de vida para disimular
tu falta de trabajo interior.

Seguirás lidiando con las mismas relaciones y mujeres superficiales, que

descubrirás, son un gasto excesivo y que no estarán allí contigo en tus
dificultades.

Si no quieres que ese sea tu camino, es preciso que comprendas que tu solución no
es desarrollar un falso ser, tu solución no es adoctrinarte, tu solución no es
imitar a los más populares, tu opción no es mentir ni manipular.

Tu opción es despertar.

En el próximo post te contaré qué es lo que he descubierto en las formas de superar

los 7 obstáculos que te mencioné al inicio de este escrito y cómo ello te llevará a
abrazar una forma más fiel a ti mismo, donde desarrolles un genuino orgullo y una
identidad sólida.

¡Es el momento de vivir una vida extraordinaria!