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Introducción

Por muchos siglos la iglesia católica se atribuyó el privilegio y la autoridad de ser la única en
poder interpretar las sagradas escrituras, y a la vez dictar a los fieles creyentes lo que habían de
creer. Con el advenimiento de la reforma y la traducción de la Biblia a otros idiomas, ésta se
colocó al alcance de todos los creyentes siendo cada uno un intérprete de la misma. Con la
reforma protestante hubo también una proliferación de denominaciones y sectas religiosas que se
vieron con la libertad de interpretar las escrituras. Muchas de estas sin conocimientos de reglas
exegéticas y hermenéuticas, resultando sus interpretaciones amañadas a sus intereses personales e
institucionales.

Normalmente las escrituras sirvieron para legitimar las prácticas de los sistemas acaparadores,
haciendo una interpretación desde las élites de poder, desde el pensamiento euro centrista y
colocando así a la Biblia al servicio de los opresores. Sin embargo, con el surgimiento de la
teología de la liberación, la interpretación de la Biblia experimenta un giro de ciento ochenta
grados, al empezar a interpretarla desde otra perspectiva: la de los pobres.

En este trabajo analizaremos primero cuáles deben ser esos aspectos que se deben tener en
cuenta para una correcta interpretación específica del texto bíblico desde una perspectiva
latinoamericana; y en segundo lugar, cuáles son esos rostros que pueden usar la Biblia como
espejo para interpretarse en ella como sujetos valiosos en la historia.

Aspectos que se deben tener en cuenta para una correcta interpretación específica del texto
bíblico desde la perspectiva latinoamericana

Comenzamos diciendo que toda interpretación de la Biblia está influenciada por una situación
social específica, y por lo tanto los intérpretes reflejan en sus interpretaciones esas situaciones.
De ahí que, según la interpretación eurocéntrica de la biblia sea desde perspectiva de los ricos,
poderosos, blancos, y tengamos un Dios semejante a ellos.

Pero, “los exégetas latinoamericanos proclaman pertenecer al mundo de los pobres como
única situación que permite entender la Biblia en el sentido de los autores que la escribieron y del
espíritu que la inspiró” (Comblin, 2001, p 38). Por tanto, este debe ser uno de los aspectos
importante a tener en cuenta para una correcta interpretación específica del texto bíblico desde
una perspectiva latinoamericana, es decir reconocernos como ese pueblo oprimido al cual Dios
quiere hacerle justicia.

Un segundo aspecto a tener en cuenta es que “La pobreza no es consecuencia de un fenómeno


natural, sino el resultado de la violencia y de la injusticia” (Comblin, 2001, p 39). Muchas de las
interpretaciones de la Biblia han tratado de explicar que la pobreza no es otra cosa que el castigo
de Dios o por lo menos su voluntad, justificando así las injusticias de las clases acaparadoras. Lo
mismo sucede con otros rostros específicos como, ser mujer, ser indígena, ser afro, etc.

Debemos tener en cuenta también como correcta interpretación específica algunos aspectos
que nos muestra el Antiguo Testamento. Por ejemplo: que Israel existe como liberación de los
pobres, que la ley de Moisés encarna el ideal de una sociedad sin explotación, y que la vocación
de los profetas era el de la superación de la explotación y de una sociedad sin pobres.

Y por último, el papel de la historia bíblica determina cuál fue el sujeto con el cual Dios dio
comienzo al pueblo de Israel, por eso, es la misma Biblia cuando se lee históricamente la que
debe establecer, cómo este sujeto, debe ser tenido en cuenta en cada relato bíblico. (De la torre,
2000). Es decir que fueron los oprimidos con quienes Dios inició la historia de la Biblia al
liberarlos de la esclavitud de Egipto. Por lo tanto es este sujeto la clave de la interpretación
bíblica.

Los rostros específicos que pueden usar la Biblia como espejo para interpretarse en ella
como sujetos valiosos en la historia

Ahora veamos cuales son esos rostros específicos que pueden usar la Biblia como espejo para
interpretarse en ella como sujetos valiosos de la historia.

Como vimos en el punto anterior el sujeto de interpretación de la Biblia debe el oprimido, ya


que con él o ellos Dios inicia la historia bíblica. Por consiguiente esos rostros específicos deben
ser todos los oprimidos de todas partes del mundo y de cualquier época.

Esos rostros específicos son los indígenas desplazados y marginados de sus tierras por la
diferencia cultural, religiosa, o por su cosmovisión. Son las mujeres violentadas por el solo hecho
de ser mujer, por considerarlas seres inferiores. Son los afrodescendientes discriminados por su
color y por el estigma de su pasado por haber sido sometidos a la esclavitud. Son los
empobrecidos y explotados de este mundo por las élites dominante. Son los niños víctimas de
violaciones, secuestros, abandono. Son los ancianos abandonados por considerárseles
improductivos. Son los migrantes venezolanos que peregrinan por nuestras ciudades sin
esperanzas. En fin son todos aquellos excluidos de la sociedad por ser diferentes, por ser
considerados inferiores, aquellos menospreciados etc. Ellos se pueden ver reflejados en las
escrituras como sujetos valiosos, puesto que Dios está de su parte obrando liberación, igualdad,
justicia y equidad.

Esto es algo esperanzador para estos rostros específicos tan necesitados.

En conclusión, estos rostros específicos, marginados y excluidos por la sociedad, son sujetos
valiosos en la historia, y se convierten en la clave de interpretación de la Biblia, puesto que fue
con ellos que Dios dio inicio la historia bíblica.

Bibliografía:

De la torre, G. (2000). Hermenéutica Bíblica Contextualizada. Quibdó (Chocó). Fundación


Universitaria Claretiana.

Vigil, J.M. (2004). La opción por los pobres es opción por la justicia y no es preferencial.
Theologica Xaveriana.

Comblin, J. (2001). Los pobres como sujetos de la historia. RIBLA (3), 37-48.

Gomez, H, M.D. (2018). En tiempos como estos no hay cosa más práctica que la teología.
Simposio internacional: pensamiento teológico y filosófico en América Latina. Universidad
Católica Luis Amigó.

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