Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
LA POLITICA
Ciencia que trata del gobierno y la organización de las sociedades humanas, especialmente de
los estados.
La deontología jurídica es la rama de la filosofía que trata sobre la moral del abogado y la forma de actuar con su cliente. El
profesional del derecho tiene que defender los intereses de su patrocinado actuando siempre con la verdad y teniendo en
cuenta su ética profesional.
La deontología es la disciplina que se ocupa de los deberes de los profesionales. En el caso de los abogados se trata de una
multiplicidad de deberes consigo mismo, con la sociedad, con la profesión, con los clientes, con los colegas, con los jueces,
con el Colegio.
Es aquella parte de la ética profesional que se ocupa de los deberes éticos de los abogados como servidores del Derecho, de
analizar y valorar la ética del abogado y su actuación en el ejercicio profesional en relación con los principios deontológicos y
su relación con los clientes, colegas y demás implicados en el proceso jurídico.
El jurista trabaja a favor de la justicia, en defensa de la paz que toda sociedad necesita para su armónico desarrollo. Cada
vez más se hace evidente la necesidad de profesionales del Derecho íntegros y capaces de resistir a las presiones de cualquier
tipo, que la sociedad exige.
Aquí explica sobre “lo que no esta previsto en el código se aplicaran lo dispuesto en
los tratados internacionales”,.,.. es decir, que este articulo esta en concordancia con lo
dispuesto en el art. 93 de la C.P.
c) Relacionar dichos artículos en el bloque de constitucionalidad y reseña de esto (art. 9, 53,
93, 102, 214 de la constitución política) y de acuerdo con la sentencia C-574/92
acercándolo al control de convencionalidad.
Antes de relacionar estos artículos con el bloque de constitucionalidad, se debe tener claro que es
el Bloque de constitucionalidad, y es un concepto que la corte constitucional mediante la
sentencia C-067/03 ha definido como: “aquella unidad jurídica compuesta “por...normas y
principios que, sin aparecer formalmente en el articulado del texto constitucional, son utilizados
como parámetros del control de constitucionalidad de las leyes, por cuanto han sido
normativamente integrados a la Constitución, por diversas vías y por mandato de la propia
Constitución”.
A partir del año 1995 la corte ha ido moldeando su jurisprudencia para legitimar el valor de
ciertas normas y principios supranacionales que se encuentran incorporados en la carta y que
por lo tanto son parámetros del control de constitucionalidad, así como parámetros
vinculantes de interpretación de los derechos y deberes protegidos por la norma suprema.
Son seis los artículos de la constitución política que definen los parámetros de adopción de las
normas internacionales en el orden interno:
a-) El artículo 9º, el cual reconoce que las relaciones exteriores del Estado se fundamentan en
la soberanía nacional, en el respeto por la autodeterminación de los pueblos y en el
reconocimiento de los principios del derecho internacional aceptados por Colombia;
b) El artículo 93, según el cual “Los tratados y convenios internacionales ratificados por el
Congreso, que reconocen los derechos humanos y que prohíben su limitación en los estados
de excepción, prevalecen en el orden interno. Los derechos y deberes consagrados en esta
Carta, se interpretarán de conformidad con los tratados internacionales sobre derechos
humanos ratificados por Colombia.”
c) El artículo 94, que establece que “La enunciación de los derechos y garantías contenidos en
la Constitución y en los convenios internacionales vigentes, no debe entenderse como
negación de otros que, siendo inherentes a la persona humana, no figuren expresamente en
ellos.”
d) El artículo 214 que al regular los estados de excepción dice en su numeral 2: “No podrán
suspenderse los derechos humanos ni las libertades fundamentales. En todo caso se
respetarán las reglas del derecho internacional humanitario.”
d) El artículo 102 que dice en su inciso 2 que “Los límites señalados en la forma prevista por
esta Constitución, solo podrán modificarse en virtud de tratados aprobados por el Congreso,
debidamente ratificados por el presidente de la república”.
CONTROL DE CONVENCIONALIDAD
La corte es consciente que los jueces y tribunales internos están sujetos al imperio de la ley, y,
por lo tanto, están obligados a aplicar las disposiciones vigentes en el ordenamiento jurídico.
Pero cuando un estado ha ratificado un tratado internacional como la convención americana,
sus jueces como parte del aparato del estado, también están sometidos a ella, lo que los
obliga a velar porque los efectos de las disposiciones de la Convención no se vean mermadas
por la aplicación de las leyes contrarias a su objeto y fin, y que desde un inicio carecen de
efectos jurídicos. En otras palabras, el poder judicial debe ejercer una especia de “control de
convencionalidad” entre las normas jurídicas internas que aplican en los casos concretos y la
convención americana de derechos humanos.
En esta tarea, el poder judicial debe tener en cuenta no solamente el tratado, sino también la
interpretación que del mismo ha hecho la corte interamericana, interprete última de la
convención americana.