aprenderás algo sobre los tuyos. Abordemos primero la Creación y los orígenes del universo. ¿No te gustaría saber finalmente de dónde provienes verdaderamente, y qué estás haciendo aquí? Vamos a viajaratrás en el tiempo —muy, muy atrás—, hasta el principio de todo. Hasta el principio de todos los principios. Mucho antes de Isaac Newton y del Renacimiento, antes de los Caballeros Templarios de la Edad Media, antes de que el profeta Mahoma enseñara en la Meca, antes de que Jesús caminara por la Tierra Santa, antes de que Sidarta fundara el budismo, antes de que Moisés subiera al Monte Sinaí y antes de que Abraham descubriera la unidad que subyace a toda la realidad, incluso antes de que yo sedujera a Adán y a Eva en el Jardín del Edén (explicaré este episodio más adelante). De hecho, tenemos que volver atrás unos quince mil millones de años y luego ir todavía más atrás, justo antes del Big Bang y de que la idea del tiempo empezara a existir. Aquí es donde empieza la verdadera historia. Podría escribir volúmenes para explicar el nacimiento del universo y el surgimiento de la vida en la Tierra. Pero prescindiré de todo eso. La auténtica verdad debe poder reducirse a un simple relato que todo el mundo pueda entender. Lo que sigue es la historia de todas las historias, contada en tres breves actos. Primeracto Érase una vez, antes de la creación del universo, una Fuerza Positiva de Energía infinita que ustedes tienen el hábito de llamar Dios. Esta Energía llenaba toda la realidad. No había nada más aparte de esta Energía, esta Luz. Segundo acto Un buen día, Dios decidió compartir toda Su Luz, que consistía en amor más allá del amor, dicha más allá de la dicha y alegría más allá de la alegría. Pero no había nadie con quien compartirla. Así que Dios creó a un ser para que actuara como recipiente, para que recibiera la bondad que Dios quería dar. Este ser receptor era un alma gigante que abarcaba todas las que serían más tarde las almas individuales de la humanidad, incluida la tuya. Este serera la Vasija. Terceracto Dios llenó la Vasija con felicidad infinita, con lo cual tanto Dios como la Vasija vivieron felices para siempre. Bueno, casi. Algo extraño ocurrió. Por un breve instante durante el tercer acto —justo antes de lograr el “vivieron felices para siempre"—, tuvo lugarun suceso extraordinario. ¿QUÉ SUCEDIÓ? En realidad, no mucho. Sólo el desarrollo del cosmos, incluida la historia entera de la civilización humana hasta e incluyendo el momento presente, así como todos los sucesos que ocurrirán mañana y ¡que nos llevarán hacia el destino final del mundo! Desde nuestra perspectiva, eso es mucho. Desde la perspectiva de Dios, ocurrió en menos de un abrir y cerrar de ojos. Lo que sigue es un conciso relato de lo que tuvo lugar (y lo que está teniendo lugarahora mismo). También es la historia de mi vida.