HISTORIA DE LA VENUS DE FRIAS

La Ciudad de Frías esta ubicada en la serranía del

Departamento de Piura, Perú; en las nacientes del Río Yapatera. Fue
en 1956 cuando se produjo en aquel lugar el sensacional hallazgo de
objetos áureos de los que forma parte la Venus de Frías. Exactamente
en Cahingará nombre de un antiguo fundo cercano a Frías.

El descubrimiento fue casual, se produjo debido a los

deslizamientos originados por las copiosas lluvias de aquel año. Estos
pusieron al descubierto una tumba de tiempos prehispánicos, cuya
antigüedad debe de retroceder a más de 1,500 años.

HISTORIA – ORIGEN

La Venus De Frías fue hallada por los hermanos Castillo

Calle, propietarios de los terrenos de Cahingará en el sector de
Ladrillo Blanco, caserío de Santa Rosa del Distrito de Frías.

Los deslizamientos habían puesto al descubierto lo que

parecía ser una tumba de los “Gentiles”; del hecho algo inusitado,
inspeccionaron de inmediato el sitio. Ávidos de hallar un tesoro,
procedieron a remover el lodo hasta topar con lo que era una segunda
tumba. Pero solo al continuar excavando y retirar la paja de lo que
debió constituir una tumba más profunda contemplaron
deslumbrados los fulgores que despedían las joyas emblemáticas, las
que iban asomando una tras otra, y que acompañaban a un difunto
ilustre cuyos retos habían sido devorados por la humedad del terreno.

Entre las diversas piezas de Orfebrería de aquella Tumba, se

encontraba la que terminó por ser denominada la VENUS DE FRIAS.

Por su estilo, al igual que los restantes objetos áureos hallados en

aquel antiguo sepulcro, podría tratarse de una pieza afiliada a la
orfebrería Moche, aunque vinculada extrechamente a la metalurgia
Ecuatoriano-Colombiana.

La Diosa de Frías, fue encontrada con diversos objetos

valiosos, como:
 • Cincuenta quindes (picaflores) de oro tamaño natural.
• Decenas de narigueras, aretes y collares con chaquira de oro,
turquesas y esmeraldas.
• Decenas de agujas, depiladores con brazaletes, tumis, platos,
mates, ollas, sonajas, huacos, keros (vasos), sapos.
• Innumerables choclos de piedra con granos de oro, cetros,
mascaras, huaracos con eslabones.
• Cinturón de oro macizo de una cuarta de ancho (tamaño de una
mano, metro y medio de largo con diminutas chaquiras y
pendientes del rico metal).
• Un cordón que pendía un pequeño disco de oro representando
al sol.
• Un rey y una reina (la figurina de oro y el idolillo o tótem), y
• Una corona.

Dicha figurina en conjunto con otros tesoros saqueados de las

tumbas de los antepasados fríanos, por desconocimiento fueron
llevados a la Ciudad de Chiclayo. Ya en dicho lugar se prepara una
operación por parte de la policía dirigida por el conservador del
Museo Brugning de Lambayeque Sr. Oscar Fernández de Córdova;
dicho hecho ocurrió el 20 de noviembre de 1956.

La Diosa de Frías es un objeto cultural que procede del área

septentrional andino formativo tardío, pertenece según varios
estudios a la cultura Vicús.

La estatuilla luce pequeñas argollas en el lóbulo de ambas

orejas. De estas penden placas discoidales que se mueven con el aire o
con el menor movimiento. Adornos similares simbólicos, cuelgan
también de su cintura. Al parecer evocaban la lluvia, en su forma de
gotas de agua. En efecto prendas rescatadas de tumbas mochica o
moche, van frecuentemente recamadas con placas similares a las que
ostenta la VENUS DE FRIAS; tal como lo demuestra la mascara
moche que va sujeta a grapas presentes en planchas de oro, utilizados
como prendas de vestir de carácter emblemático.
 La posición que adoptan las manos de la Venus de Frías no es la
natural, puesto que están frecuentemente dobladas al hacer ángulos a
la altura de la muñeca, aquello da la sensación de que la dama de oro
y platino estuviera ejecutando una danza ritual. La forma de la cabeza
llama poderosamente la atención, por cuanto acusa una extrema
deformación artificial del cráneo, práctica muy extendida en el
antiguo Perú.

Por la rasgadura muy inusual de sus ojos y la extensión de su

cráneo ha creado el mito de que esta figurina es una representación
de un ser extraterrestre.

La obra mas preciada de la orfebrería de Frías y que aquí ocupa

nuestra atención, es lo que representa a una joven desnuda conocida
como Venus de Frías, esta figura se encuentra en un buen estado de
conservación, pesa 60 gramos. Es una joya exquisita de la metalurgia
precolombina, realizada en oro de 24 quilates y con engaste de
platino en los ojos, mide 153 mm de altura y 86 mm de ancho de
mano a mano.

Para realzar su volumen, la figura fue elaborada en base a

diversas láminas, las que fueron sometidas a las técnicas del embutido
y del repujado, para finalmente ser soldadas.

Su cabeza es movible perteneciendo a la denominación quechua

CAYTA UMA (belleza, altivez, distingo, estético-social) – Q´AYTU
UMA (cabeza de hilo, cráneo alargado o figura oval).

En el año 1982; mediante resolución N° 005-82/INC fue declarada

“SIMBOLO PREHISPANICO DEL DEPARTAMENTO DE PIURA”.

El 02 de octubre de 1999 retorna la figurina de oro al

departamento de Piura, encontrándose hoy en DIA en el MUSEO
VICUS de a Ciudad de Piura.

Así mismo se entrego una replica de la DIOSA DE FRIAS a la

SALA CULTURAL DIOSA DE FRIAS el día 11 de mayo del 2000.
Declarándose ese día mediante resolución Municipal como “DIA
TURISTICO E HISTORICO”, dicha sala cultural se encuentra ubicada
en la segunda cuadra de la Calle Arequipa de la Ciudad de Frías.