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DEBATES 21
LA ARGENTINA
Y TRUMP
Juan Gabriel Tokatlian
Profesor plenario del Departamento de Ciencia Política y
Estudios Internacionales en la Universidad Torcuato Di Tella
El gobierno del presidente Mauricio Macri se “normalizar” las relaciones exteriores del país.
inició el 10 de diciembre de 2015 con una No es este el sitio para analizar en detalle las
meta explícita en política exterior: “reinser- razones y los alcances de los postulados ini-
tar” a la Argentina en el mundo. Ese propósito ciales de la nueva “reinserción” de la Argen-
no era muy novedoso, pues desde el adveni- tina de acuerdo al gobierno de Cambiemos.
miento de la democracia en 1983 los manda- Lo que sí es clave es detenerse brevemente
tarios han invocado una herencia previa ne- a comprender el “mundo” que pareció con-
gativa, tanto interna como internacional, para cebir el presidente y su círculo más estrecho
anunciar un giro imprescindible y decisivo: tal de colaboradores. Todo parece indicar que,
fue el caso de Raúl Alfonsín respecto de la en esencia, predominó una concepción cán-
dictadura militar; de Carlos Menem respec- dida de la situación mundial y sus tenden-
to al gobierno de Alfonsín; del corto interinato cias de corto plazo; algo muy peculiar y que
de Eduardo Duhalde y del mandato de Nés- diferencia a Macri de Alfonsín, de Menem y
tor Kirchner respecto del incompleto gobier- de Kirchner. Primero, una aparente certe-
no de Fernando de la Rúa. Macri repetía, en za de que la sola llegada de un gobierno de
otro contexto, algo convencional: “relanzar” y una orientación ideológica diferente al de la
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administración precedente sería no sólo un ron a favor de Hillary Clinton, quizás con la
imán para atraer la atención y el respaldo de expectativa de que su eventual triunfo con-
influyentes mandatarios de Occidente, sino firmaría que la globalización hoy existente es
también un atractivo para la llegada de im- un fenómeno que debe ahondarse. Triunfó
portantes inversiones productivas extranje- Donald Trump.
ras, principalmente occidentales. Segundo,
una inusitada confianza en el estado de la En síntesis, y anticipando la conclusión, este
globalización; en especial del comercio in- texto apunta a subrayar que es hora de que
ternacional y de las oportunidades que ten- el gobierno se aboque más sistemática y se-
drían por delante los productores y exporta- riamente a un buen diagnóstico de los asun-
dores argentinos que ya no tendrían la carga tos internacionales. La victoria de Trump de-
de las retenciones del pasado en unos ca- biera ser una nueva llamada de alerta para
sos, y verían el renacer de las economías re- dejar atrás posturas ingenuas, voluntaristas,
gionales, en otros. Tercero, una expectati- auto-gratificantes, de corto plazo y dogmá-
va indisimulada de que el ciclo “populista” ticas.
en la región estaba terminado y que la ges-
tión con mandatarios más afines y la ausen-
cia de “hombres fuertes” al estilo Lula y Chá- EL CONTEXTO DE LA
vez, entre otros, le podrían abrir un espacio ELECCIÓN PRESIDENCIAL
de “liderazgo” a la Argentina. El seguimiento EN ESTADOS UNIDOS
en los medios de comunicación de las visi- -
tas, viajes, discursos, anuncios y aseveracio-
nes en materia internacional durante el pri- Un rasgo fundamental del sistema global al
mer semestre de 2016 permite comprobar, momento de la contienda por la presiden-
con nitidez, el optimismo reinante en el go- cia en Estados Unidos era (y es) su condi-
bierno de Cambiemos. Pero casi nada en el ción de sistema recargado; esto es, que en
mundo ni en la región indicaba que la reali- distintos tableros crecen y se entrecruzan,
dad se tornaba tan promisoria como el go- de manera intensa y simultánea, contradic-
bierno anhelaba y pronosticaba. ciones, retos, peligros y dilemas. El tablero
internacional remite a las relaciones espe-
Muy poco de lo que iba sucediendo en el cíficamente interestatales. Ahí, el dato fun-
campo económico y político a nivel mundial damental es la acelerada redistribución de
pareció obligar a una readecuación de la re- poder, riqueza e influencia de Occidente
tórica, de las expectativas y de las prácti- y del Norte en la dirección de Oriente y el
cas. Algunos ejemplos reflejan lo anterior. En Sur. Como lo muestra la historia de las rela-
enero de 2016 el presidente asistió al Foro ciones entre Estados, todo reacomodo sus-
de Davos y tuvo diversas citas con CEOs tantivo de poderío genera tensiones y pue-
de multinacionales, quienes, según el man- de conducir a conflictos mayúsculos. Ahora
datario, estaban “muy entusiasmados con el bien, dos notas parecen acompañar el actual
cambio” en la Argentina. Sin embargo, al pa- power shift: una, elocuente; la otra, conjetu-
sar los meses se hizo evidente que la llama- ral. La nota elocuente es la creciente resis-
da “lluvia de inversiones” no se produciría. tencia de Occidente a perder, en parte, pri-
Meses después se llevó a cabo el voto del vilegios, autoridad e incidencia a favor de la
Brexit y aún así en su visita a Ángela Merkel multiplicidad de países intermedios, poderes
en Alemania y a las autoridades de la Unión emergentes y potencias reemergentes, que
Europea (UE) en Bruselas el presidente Ma- antes eran de la periferia. La nota conjetural
cri destacó la voluntad a favor de un acuer- genera un interrogante: ¿es la decadencia
do de libre comercio UE-Mercosur; tema so- occidental una condición estructural? Hay
bre el que nadie parecía muy interesado en signos —en lo demográfico y económico,
comprometerse en Europa. Algo semejante por ejemplo— que tienden a confirmar ese
ocurrió en relación a la elección presiden- rasgo profundo y prolongado. Así, resulta
cial en Estados Unidos: los pronunciamien- esperable una mayor conflictividad en el ám-
tos oficiales más importantes se manifesta- bito internacional.
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de eso parece definir a Trump, su retórica y compromisos firmes con otros países y
discursiva y su ambición de cambio. Otros que alienta un muy bajo perfil en los asuntos
analistas han aseverado que Trump es un tí- mundiales. Segundo, el aislacionismo esta-
pico populista de los que han resurgido en dounidense se ha sustentado en distintas
Occidente en los últimos años y que expre- fuentes históricas, tuvo cierto arraigo entre
san la versión derechista del nuevo populis- conservadores y progresistas por igual, es-
mo. Sea en el marco del antiguo populismo pecialmente durante el período entre finales
o del neopopulismo lo esencial es que los del siglo XIX y la Segunda Guerra Mundial, y
populistas rechazan y hostigan a todo tipo se expresó en la neutralidad frente a conflic-
de élite, política, social y económica. No hay tos en Europa y Asia. Tercero, el aislamiento
dudas de que Trump ha fortalecido su ima- de Washington fue un ideal, una disposición
gen mediante fuertes críticas al estableci- y un impulso más que una práctica universal,
miento político pero no ha cuestionado al una conducta impasible y una modalidad de
establecimiento económico ni al estableci- ensimismamiento. En el caso de América La-
miento militar. Una cosa es ser anti-Washin- tina, y en aquel período, las intervenciones
gton pero ello no ha significado que Trump e invasiones de Estados Unidos en México,
sea anti-Wall Street o anti-Pentágono. Sus América Central y el Caribe fueron recurren-
principales nombramientos de gabinete a tes y la expansión de sus intereses econó-
diciembre de 2016 han sido CEOs, milita- micos en Latinoamérica fue decisiva. Cuarto,
res y políticos amigos de las finanzas y de en los debates políticos y académicos du-
Delegados en la Convención Nacional Republicana muestran carteles con el leitmotiv de la campaña de Trump
“America First” (América, en primer lugar). Para el presidente electo esto significa actuar preferentemente de
manera solitaria para satisfacer, básicamente, intereses propios. Cleveland, Ohio, 20 de julio de 2016.
valoración de los derechos humanos. Aden- bal fastidioso; es decir, el abuso de poder
tro parece crecer el temor por una regresión podría convertir a Washington en un gran
democrática. Afuera, su discurso es percibi- generador de desorden en el que injusticia,
do como promisorio por muchos gobiernos la arbitrariedad y la violencia tiendan a pre-
autoritarios, por los “hombres fuertes” de va- dominar.
rios países y por los partidos de extrema-de-
recha. Este dato no es insignificante en mo-
mentos en que la democracia aparece en AMÉRICA LATINA EN LA
retroceso a nivel internacional. ELECCIÓN ESTADOUNIDENSE
-
En breve, difícilmente Trump parece ser el
epítome del aislacionismo; parece la re-
afirmación de una gran estrategia de pri- Con base en los dichos de campaña por
macía. Este tipo de apunta a que Estados parte de Donald Trump y sus principales
Unidos no tolera ni tolerará la existencia asesores, así como de acuerdo a nombra-
de un poder equivalente de igual talla, sea mientos realizados es posible observar lo si-
una nueva gran potencia (China), un poder guiente:
resurgente (Rusia) o un tradicional aliado
(Unión Europea). En ese sentido, George “
W. Bush expresó el despliegue de una pri- El abuso de poder podría convertir
que desharía el acuerdo alcanzado por Ba- dados latinoamericanos entre 2007 y 2014.
rack Obama con Raúl Castro e impondría Por otro lado, parece incrementarse la so-
un acuerdo “más fuerte”, sin especificar lo licitud de que fuerzas regionales se sumen
que eso significa. Según la posición de la a misiones de paz; en particular en África,
Plataforma del Partido Republicano de julio aunque es cada vez más evidente que, de
de 2016, el acuerdo alcanzado por Obama hecho, se trataría de participar en guerras
con Cuba “fue una manera de plegarse ver- que, en su mayoría, están atravesadas por
gonzosamente a las demandas de los tira- violentos conflictos religiosos.
nos”. La normalización, lenta y gradual, de
las relaciones entre Washington y la Haba- En cuarto lugar, en el asunto de las drogas,
na durante la administración demócrata no Donald Trump ha cambiado su postura con
solo podría verse bloqueada, sino incluso los años. En los noventa se manifestó a fa-
podría ser revertida próximamente. Si la in- vor de la legalización, durante la campaña
necesaria Guerra Fría en el continente se presidencial se mostró convencionalmente
prolonga, será por la irresponsabilidad de a favor de la “guerra contra las drogas”. Es-
Estados Unidos. tuvo específicamente en contra de la legali-
zación del uso recreativo de la marihuana, y
En tercer lugar, fue significativa la centrali- defendió políticas más duras en la frontera
dad otorgada al tema del terrorismo. A pe- y de persecución punitiva en relación a Mé-
sar de que desde el 11 de septiembre de xico, en el exterior, y en las llamadas “ciu-
2001 América Latina fue la única región del dades santuario”, en Estados Unidos. Sin
mundo que no sufrió ningún ataque letal por duda, la situación interna en materia de dro-
parte de algún grupo fundamentalista, el te- gas —con el aumento del consumo de he-
rrorismo ocupará un lugar trascendental en roína y el uso de meta-anfetaminas— será
agenda del mandatario electo con el área. una guía clave para examinar la política de
El general retirado Michael Flynn, ex director Trump hacia países como Colombia. En el
de la Agencia de Inteligencia de la Defen- más reciente informe de la DEA sobre la
sa, designado Asesor de Seguridad Nacio- amenaza de las drogas para Estados Uni-
nal por parte de Donald Trump, y quien es dos, son Colombia y México los países del
conocido por su fóbica retórica anti-islam, mundo más mencionados —131 y 116 ve-
ha venido reforzando la idea de la existencia ces, respectivamente.
de un vínculo entre el terrorismo y América
Latina al afirmar, sin proporcionar más deta- “
lles, que los países que apoyan el terroris- Trump sólo mencionó a Venezuela
mo islámico han “cerrado tratos” con cárte- en el marco de su campaña
les mexicanos para conseguir entrar en los en Florida. Su triunfo en ese
Estados Unidos. Adicionalmente, dos diná- Estado supone una deuda con
micas convergentes pero diferentes podrían sus electores en cuestiones
incidir en las relaciones interamericanas en internas e internacionales.
asuntos de seguridad al comienzo del go-
bierno Trump. Por un lado, una baja en ma- ”
teria de recursos y un reposicionamiento en
materia de actores militares. En efecto, la En quinto lugar, Venezuela no apareció en
asistencia militar y policial de Estados Uni- un sitio prominente en los discursos nacio-
dos a América Latina descendió de 1.304 nales del candidato Trump, pero sí mencio-
millones de dólares en 2010 a 568 millones nó a ese país en el marco de su campaña en
en 2016 y el número de oficiales de la re- el estado de Florida y como parte de la bús-
gión entrenados en Estados Unidos cayó de queda del voto anti-chavista de venezola-
14.600 en 2014 a 1.289 en 2015, al tiem- nos-americanos y del voto anti-castrista de
po que el Comando Sur ha ido perdiendo los cubano-americanos. El triunfo de Trump
alguna centralidad ante la importancia ad- en Florida supone una deuda con sus elec-
quirida por el que, a través de sus , ha mul- tores en cuestiones internas e internaciona-
tiplicado por tres los entrenamientos de sol- les. Ahora bien, ya desde el gobierno y ante
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Bajo este marco general, la Argentina no Las dificultades económicas que se pueden
será un referente principal de la “agenda avecinar por situaciones tales como el au-
negativa” de Trump y no estar en el radar mento de la tasa de interés en Estados Uni-
de Estados Unidos es mucho mejor que es- dos y la absorción de inversiones para cum-
plir con el plan de infraestructura de Trump