La conservación y preparación de los alimentos de forma higiénica es fundamental
tanto para evitar posibles problemas de salud como para mantener su calidad nutricional. Especialmente cuando llega la época de calor se deben extremar estas precauciones. Guardar alimentos en la nevera es una de las mejores formas de evitar que éstos se echen a perder, pues el frío ayuda a que los elementos degradantes de los alimentos actúen hasta diez veces más lento que lo harían a temperatura ambiente. Debido a esto la comida se conservará más tiempo si la guardas en la nevera. COMO CUIDAR Y ALMACENAR LOS ALIMENTOS LAS CARNES La carne es un ingrediente de gran importancia en la alimentación humana. Su gran riqueza nutritiva se debe fundamentalmente a su elevado contenido en proteínas de alto valor biológico El almacenamiento de las carnes crudas, ya sea en el matadero, en la industria o en la carnicería debe hacerse en perfectas condiciones de higiene y, por supuesto, sin romper en ningún momento la cadena de frío. Deben aplicarse las siguientes pautas de almacenamiento: w Evitar que los productos estén en contacto directo con el suelo. w No almacenar las carnes frescas junto con otros productos (productos curados, frutas y verduras, etc.). w Permitir una circulación de aire adecuada en las cámaras. w No superar los tiempos de almacenamiento recomendados. w Aplicar un programa de limpieza y desinfección de las cámaras y locales. w Vigilar que las cámaras mantengan la temperatura exigida. LAS VERDURAS Y FRUTAS La mayoría de frutas y verduras pueden conservarse a temperatura ambiente en un ambiente seco, fresco y muy bien ventilado. Ya que se trata de alimentos de rápido deterioro, es imprescindible realizar una cuidadosa inspección diaria de su estado. Almacenar frutas y hortalizas frescas de manera apropiada, no solo ayuda a reducir las pérdidas de dinero y los desperdicios de alimentos, sino que te permite disfrutar del sabor, aroma y textura de los comestibles en perfecto estado. Algunos vegetales se mantienen en óptimas condiciones durante una, tres o cuatro semanas si se almacenan correctamente, mientras que otros solo se conservan frescos por un par de días.