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El cambio climático es la variación global del clima de la Tierra. Esto sucede a causas naturales o
antropológicas, también al acto del hombre y se producen a muy diversas escalas de tiempo. Las
variaciones ocasionadas se pueden dar por distintos cambios de energía que recibe el sol,
erupciones volcánicas, entre otros.
El ser humano está relacionado con estas variaciones, la emisión de CO2 y también la alteración de
grandes extensiones de suelo (deforestación). La influencia que tiene es grande para que el carbón
de los fósiles de la atmosfera se libere más rápido.
El gas responsable de la mayoría del calentamiento es el dióxido de carbono, también llamado CO2.
Efectos:
Al existir un aumento que sea acelerado afecta a los ciclos que son ocasionados en el
planeta.
El aumento en el nivel del mar, debido al deshielo y reducción de masas gélidas amenazan
las zonas costeras.
Aumento del nivel del mar.
Olas de calor.
Tormentas asesinas.
Sequía.
Especies en extinción.
Enfermedades.
Desaparición de glaciares
Acuerdos internacionales:
En nivel internacional se están dando la realización de unos acuerdos y compromisos de los países
con el fin de reducir las emisiones de CO2.
El primero acuerdo es La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático
(CMNUCC). Este pretende accionar por el clima.
Por ende, en el 2015 se establecieron otros acuerdos que involucra a países desarrollados e
introduce objetivos vinculados a la reducción de emisiones de estos países.
La emisión continuada de gases de efecto invernadero provocará más calentamiento y cambios a
largo plazo en todos los componentes del sistema climático, lo que aumenta las probabilidades de
consecuencias severas, generalizadas e irreversibles para las personas y los ecosistemas.
Por otro lado, está el calentamiento de los océanos, como consecuencia del aumento de la
temperatura global. Este fenómeno tiene un impacto muy grande en la biodiversidad de los mares
porque muchas especies de peces y mamíferos necesitan de aguas más frías para poder vivir
cómodamente. De la misma manera, y debido también al aumento de la temperatura global, las
placas de hielo de Antártica disminuyen su área con el paso de los años, las montañas nevadas
pierden hielo, los glaciares se están recogiendo, y el nivel de las aguas en los océanos está
aumentando, poniendo en peligro a muchas ciudades costeras.
Los últimos años se han visto las horribles consecuencias de las catástrofes naturales, además del
aumento en la cantidad de estas. Huracanes, tifones, tormentas, y temporadas de lluvias tórridas son
ahora el común y no eventos extraordinarios. Las olas de calor han aumentado en duración e
intensidad, así como las sequías. En consecuencia, cientos de miles de personas han perdido su
hogar; la agricultura se ha visto afectada por inundaciones o falta de irrigación, y las personas que
se han visto desplazadas se ven obligadas a vivir en condiciones infrahumanas dentro de campos de
refugiados en donde la propagación de enfermedades contagiosas es altísima.
¿Cómo ayudar a frenar el calentamiento global?
La respuesta más sencilla es ahorrando agua, energía y recursos. Por un lado, tomando
duchas cortas y no baños en la tina, usando el lavaplatos y no lavando los platos a mano,
lavando la ropa una vez a la semana con cargas completas y no todos los días con cargas
pequeñas.
Caminando y usando el transporte público es otra manera de ayudar. Las emisiones de los
carros solo afectan la calidad del aire y contribuyen a las emisiones globales que se van a la
atmósfera; caminar no solo ayuda a la salud sino es la manera en la que cada persona puede
disminuir su huella de carbono.
Reciclar en casa, comprar electrodomésticos que ahorren energía son pequeños pasos que
suman un gran esfuerzo si se miran en conjunto. La clave es crear un sentido de
responsabilidad en todo el mundo y mostrarles que cada pequeño acto tiene consecuencias
en el corto y largo plazo.
Huella De Carbono
Este indicador ambiental es la suma absoluta de todas las emisiones de gases del efecto
invernadero (GEI) los cuales son el vapor de agua (H2O), el dióxido de carbono (CO2), el óxido
nitroso (N2O), el metano (CH4) y el ozono (O3), estos los produce el ser humano a partir de la
fabricación de un producto o al realizar sus actividades diarias, pero de forma simple podemos
decir que: la huella de carbono se puede entender como la marca que dejamos sobre el medio
ambiente.
Entonces podemos hablar del Calentamiento Global, que pasa por el proceso de los gases de efecto
invernadero, principalmente el (CO2), este es procedente de la quema de combustibles fósiles y
estos acumulan en la atmósfera reteniendo parte del calor que emite la Tierra. Por eso es tan
importante que conozcamos exactamente cuál es nuestro impacto frente la huella de carbono y tratar
de reducir las toneladas de (CO2) que producimos diariamente, tratando de mejorar nuestros hábitos
y rutinas diarias.
Para saber cuál es nuestra huella de carbono contamos con una “calculadora” y esta se encarga de
valorar hábitos diarios en cuanto al consumo de energía, los cuales son:
1. La cantidad de electrodomésticos, con los que contamos en nuestro hogar.
2. el transporte (cuánto consume el coche, cuántos km realizamos, si utilizamos autobús o
moto).
3. La energía y el gas natural que nosotros consumimos por mes en nuestro hogar.
4. Los viajes que realizamos en cierto tiempo.
5. la frecuencia con la que consumimos carne de res.
6. las personas las que habitan en nuestro hogar.
Pero debemos reducir la huella de carbono de tal forma que haya una estabilidad en nuestro
ecosistema, ¿pero cómo logramos eso?, las soluciones podrían ser:
1. Utiliza menos la secadora de ropa: Los tendederos de secado son una opción amigable
con el planeta ya que las secadoras de ropa producen una gran cantidad de CO2 y al no
utilizarla disminuirá el consumo de electricidad.
2. Desconecta el cargador de tu celular: Aunque no estés usando el cargador, si lo dejas
conectado sigue consumiendo energía y contribuyendo al cambio climático
3. Mantén limpio tu refrigerador: El exceso de bolsas de plástico y empaques, así como
mantener el congelador con hielo, hacen que tu aparato necesite más potencia para enfriar,
y con ello se gasta más electricidad.
4. Saca la bicicleta: Muchos trayectos no justifican el uso del automóvil y de transporte
publico
5. Utiliza bolsas de tela cuando hagas el súper: Seguro esto ya lo sabías, pero uno de los
mayores enemigos del medio ambiente el uso excesivo del plástico, y usar cajas cartón o
bolsas de tela al hacer el mercado, es una medida necesaria.
6. Regresa al termo: Comprar botellas plásticas con líquido cada que tienes sed es poco
amigable con el planeta, mejor compra un termo y lleva en éste tus bebidas
7. Reduce la ingesta de carnes: el proceso para llevarlos a tu mesa gasta una gran cantidad de
energía.
8. Recuerda las tres erres: Reduce, Reutiliza y Recicla.