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PROPOSITOS
1. La satisfacción de las básicas de aprendizajes
2. Una visión renovada y un compromiso renovado
3. Universalizar el acceso y promover la equidad
4. Concentrar la atención en el aprendizaje
5. Ampliación de la perspectiva de la educación básica
6. Valorizar el ambiente para el aprendizaje
7. Fortalecer la concertación de acciones
8. Desarrollar políticas de apoyo
9. Movilizar los recursos
10. Fortalecer la solidaridad internacional
REQUERIMIENTO
Generar un contexto de políticas de apoyo
Movilizar los recursos financieros
Fortalecer la solidaridad internacional
EL INFORME DELORS
INTRODUCCIÓN
En noviembre de 1991, la Conferencia General de la Unesco invitó al Director General de la
Organización Señor Federico Mayor Zaragoza a convocar a la segunda Comisión
Internacional sobre la Educación, para “reflexionar sobre la educación y el aprendizaje en el
Siglo XXI”. La Comisión fue establecida a inicios de 1993, con la participación de quince
miembros originarios de diferentes países del mundo y presidida por el Señor Jacques
Delors, ExMinistro de Economía y Hacienda de Francia y Expresidente durante diez años
(1985-1995) de la Comisión Europea. Por América Latina y el Caribe fueron miembros de la
Comisión Michael Manley Exprimer Ministro de Jamaica; la socióloga Marisela Padrón
Quero de Venezuela y el antropólogo mexicano Rodolfo Stavenhagen.
La obra en que se presenta el Informe de la Comisión presidida por Jacques Delors, fue
dada a conocer en 1996, hace veinte años, bajo el título La Educación encierra un Tesoro,
que evocaba la parábola “El labrador y sus hijos” de Jean de la Fontaine que dice:
“Guardaos (dijo el labrador) de vender el patrimonio dejado por nuestros padres, veréis que
esconde un tesoro”, el tesoro, según Delors, es la Educación.
Todos los anuncios que se prefiguran como profecías en Aprender a Ser especialmente en
los campos de la Psicología, la Neurociencia, la Pedagogía, la Didáctica y la Cibernética y
su relación con los procesos educativos y de los aprendizajes, en 1993 cuando inicia sus
trabajos la Comisión Delors, ya han alcanzado regulares niveles de maduración y están
listos para dar un salto de calidad hacia adelante, el que quedará cristalizado para la historia
de la Educación contemporánea en el Informe Delors de 1996.
En este orden, el Informe Delors será como una línea recta, que en orden ascendente da
continuidad a más altos niveles a la matriz de pensamiento conceptual y metodológica que
fue Aprender a Ser, particularmente en un aspecto central y fundamental como es el de
concebir a la educación más allá de la escuela y para toda la vida, como lo afirma el
mandato del Director General Mayor Zaragoza a la Comisión, cuando afirma que “Aprender
a Ser tuvo el gran mérito de fundamentar el concepto de Educación Permanente, en un
momento en que los sistemas de educación tradicionales eran objeto de críticas “en todo el
mundo, especialmente en los Estados Unidos y otros países capitalistas altamente
desarrollados.
Desde que la Educación encierra un Tesoro fuera dada a conocer, hace veinte años,
muchos cambios han ocurrido en el campo de la educación en todos los países y todo el
mundo. Los dos grandes Foros mundiales posteriores a su publicación, el de Dakar,
Senegal en 1990 y el de Inchoen en Corea del Sur en 2015, bebieron y se enriquecieron de
su savia, su espíritu, su ideología, sus apuestas y desafíos. Hoy los Cuatro Aprendizajes del
Delors y de la Unesco son grandes Ejes Transversales en la mayoría de los procesos de
reforma curricular y de la Educación en los Ministerios de Educación y las Escuelas
Normales y en todas las Oficinas y Departamentos de Reforma Universitaria de todo el
mundo.
EL INFORME DELORS
El denominado Informe Delors es un estudio de la “Comisión Internacional sobre la
Educación del siglo XXI” (presidida por Jacques Delors), que se publicó en 1996 por
encargo de la UNESCO, bajo el título: La educación encierra un tesoro. Entre
sus objetivos, se quiere señalar la función indispensable que tiene la educación, como
instrumento para que la humanidad pueda progresar hacia los ideales de paz, libertad y
justicia social.
El Informe consta de tres partes: Horizontes, Principios y Orientaciones. En la segunda
parte, dedicada a los Principios de la Educación, se reflexiona sobre cuáles deben ser los
pilares de la Educación. Nos ofrece una orientación muy interesante acerca de cuáles son
las claves, en un momento incierto como el actual, sobre las que podemos construir, entre
todos, la Educación de nuestros hijos y resume maravillosamente qué es una educación
global e integral:
“La educación a lo largo de la vida se basa en cuatro pilares: aprender a conocer,
aprender a hacer, aprender a vivir juntos, aprender a ser.
• Aprender a hacer, a fin de adquirir no sólo una calificación profesional sino, mas
generalmente, una competencia que capacite al individuo para hacer frente a gran número
de situaciones y a trabajar en equipo. Pero, también, aprender a hacer en el marco de las
distintas experiencias sociales o de trabajo que se ofrecen a los jóvenes y adolescentes,
bien espontáneamente a causa del contexto social o nacional, bien formalmente gracias al
desarrollo de la enseñanza por alternancia.
El Informe Delors fue creado por una comisión internacional para la educación del siglo XXI,
a petición de la Unesco. Su nombre obedece a que estuvo presidida por Jacques Delors.
El Informe Delors está hecho por personas del mundo de la educación y otras ajenas a este,
pero además estuvo compuesta no sólo por personas del mundo occidental, sino de todo el
universo. Esto es muy importante, porque evidentemente hay grandes contrastes culturales
entre unos y otros.
El informe dedica la menor parte a las previsiones hacia el futuro, y la mayor parte a intentar
soluciones y alternativas para la educación del próximo siglo. En el primer párrafo se intenta
dar las líneas que definen la orientación del trabajo. Aquí se destacan tres elementos: la
educación es un factor indispensable para conseguir la paz; es fundamental en el desarrollo
más humano de las personas y de la sociedad; y, aunque hay otros medios para lograrlo, la
educación es el más importante.
En el primer apartado, analiza cuáles son las tensiones –no se plantea como problemas–.
Asegura que el siglo XXI planteará diversas alternativas ante las cuales habrá que elegir.
El Informe Delors defiende que cada persona debe ser ella y que la única forma de superar
tensiones es que cada uno sea como es.
Otra divergencia es tradición y modernidad: con esta modernidad que transmiten los medios
de comunicación, muchas veces podremos perder aquellas cosas más humanizadoras.
Una tercera divergencia es la de las soluciones a largo y corto plazo: actualmente todo se
debe resolver de hoy para mañana. Muchas veces, antes de conocer la propuesta, ya la
estamos criticando. Este es un tema de importancia capital para la educación, porque en la
educación de la persona se debe trabajar durante mucho tiempo; de un día para otro no
cambian las cosas.
En el Informe Delors se habla de que todas estas divergencias tienen como principio los
cambios en los estilos de vida, que van generando tensiones, cambios culturales, cambios
en la estructura familiar, que vive el mundo contemporáneo.
Tras aconsejar que debemos superar estas tensiones, en la segunda parte el Informe Delors
dice textualmente (pág. 76, cap. 4): «Eso que proponemos supone trascender la visión
puramente instrumental de la educación considerada como la vía necesaria para obtener
resultados (dinero, carreras, etc.) y supone cambiar para considerar la función que tiene en
su globalidad la educación. La realización de la persona, que toda entera debe aprender a
ser.» En esta parte explica los conocidos cuatro pilares de la educación.
2) Aprender a hacer: aprendemos para hacer cosas y nos preparamos para hacer una
aportación a la sociedad. Las personas se forman para hacer un trabajo, aunque muchas
veces no puedan ejercerlo. En lugar de conseguir una cualificación personal (habilidades),
cada vez es más necesario adquirir competencias personales, como trabajar en grupo,
tomar decisiones, relacionarse, crear sinergias, etc. Aquí importa el grado de creatividad que
aportamos.
El Informe Delors propone que se favorezcan los trabajos en común, que se preste atención
al individualismo –que no está en contra de la individualidad–, y que destaque la diversidad,
como elemento necesario y creador. Tengo la sensación de que cuando se habla de la
atención a la diversidad, se intenta romper la diversidad; pero no se trata de eso, no es
acabar con la riqueza de la diferencia, sino tratarla adecuadamente para igualar a todos y
así evitar conflictos. Este tercer pilar está muy influido por la actitud del maestro y por su
relación con los alumnos.
Creo que estos pilares son fundamentales si consideramos globalmente los cuatro, no de
dos en dos, es decir, no poner por un lado el conocimiento (la ciencia), y por el otro, el
hecho (la tecnología); esto no sólo en el sentido material sino también en el sentido
humanístico.
En tercer lugar, este Informe también destaca el papel de las emociones. Nuestro sistema
educativo ha dado prioridad a las dimensiones cognitivas, a las que están relacionadas con
el conocimiento, y ha olvidado las dimensiones afectivas; ésta es una palabra que
paulatinamente ha ido saliendo del ámbito escolar desde finales del siglo XIX e inicios del
XX. Incluso, si nos paramos a pensar, vemos que la escuela acoge muy bien a los niños
más pequeños y los satisfacen emocionalmente. Pero una vez terminada la primaria –no sé
si esto es demasiado traumático– acompañamos a los niños para que aprendan a leer y
escribir y los empezamos a preparar para los conocimientos de la secundaria. Damos por
sentado que la madurez emocional ya se ha consolidado cuando tienen 8 y 9 años; cuando
la verdad es que ninguno de los adultos ha acabado su educación emocional. Después,
cuando llegan a la universidad –claro, este es el templo de la ciencia–, no podemos
ocuparnos de los problemas emocionales de los jóvenes.
Creo que si tenemos en cuenta las tensiones de angustia a las que se refiere el Informe
Delors, estamos absolutamente obligados a hacer un tratamiento sistemático de las
emociones de los estudiantes. Pero esto sólo es posible con una educación emocional de
los padres y de los profesores. En el mundo occidental, se ha hecho una división: por un
lado, todo lo que es el conocimiento, la ciencia, el saber y el poder; y por el otro, todo lo que
son las emociones, la vida familiar, las amistades, la vida privada, la ausencia de poder