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Escuela de la Gestalt, sus ideas fueron expuestas por su sistema Gestalpychologie, esta atribuyo
casi todo agrupamiento a la organización espontanea de formas simples y tendió a minimizar o
negar el papel de aprendizaje en la percepción y la organización de figuras.
Es posible que las leyes de la mente puedan en algunas circunstancias ser independientes de los
condicionamientos culturales. Sin embargo la organización más satisfactoria es producto de la
experiencia cultural.
Hay razones para creer que las leyes desarrolladas por los psicólogos de la Gestalt, en su mayor
parte en conexión con la experiencia visual, son aplicables de una forma general a la percepción
auditiva.
Es la falta de satisfacción con la organización psicológica lo que da lugar a lo que hemos aludido
como lo modos naturales de expectativa. Puede decirse que la mente tiende hacia la regularidad y
la sencillez en la organización.
La ley de pragnanz funciona dentro del proceso de la memoria, que tiende a completar lo que
estaba incompleto, a regularizar lo que era irregular y así sucesivamente. Además aquellas formas
que no están bien definidas y que la memoria es incapaz de enderezar, completar o hacer
simétricas tendrán a ser olvidadas.
Incluso aquellas figuras que se recuerdan resultan ser modificas a lo largo del proceso. Eso quiere
decir que solemos recordar lo temas mucho más sencillo de lo que realmente son.
Las normas cambian hasta tal punto que una nueva audición de una obra es realmente nueva, en
el sentido de que crea nuevas revelaciones.
La memoria tiende a mejorar las formas en la dirección de la regularidad, la simetría y la
compleción. Aquellas figuras incompletas que establecen tensiones reales hacia la compleción y
aquellas formas que están tan bien articuladas que su comprensión es evidente son mejor
recordadas que las que están completas.
Aunque la organización psicológica sea siempre tan buena como sea posible, con esto no se
estipula que dicha organización sea siempre tan buena como la mente lo desearía. La buena
continuación y la buena forma son poderoso factores de organización, las transgresiones de estas
leyes hieren nuestro sentido de la belleza.
Continuidad MELODICA
Este proceso de conjunción por medio de una nota común establece gran fuerza hacia la
continuación. (Véase ejemplo 5)
La continuidad siempre actúa dentro de un contexto estilístico particular, apelando a los factores
culturales: la armonía.
LA Continuación RITMICA
1. La percepción del pulso supone la división objetiva o subjetiva del tiempo en pulsaciones
regularmente recurrentes e igualmente acentuadas. El pulso puede existir sin crear ni
metro ni ritmo.
2. La percepción del metro implica la conciencia de la recurrencia regular de pulsaciones
acentuadas y no acentuadas aunque ese pulso no necesita oírse realmente pudiendo esta
implícito en la mente del oyente.
3. La percepción del ritmo implica un agrupamiento mental de una o más pulsaciones no
acentuadas en relación con una acentuada. El ritmo puede existir sin pulso o metro, como
en el canto llano.
El acento: algo esta acentuado cuando esta de alguna manera marcada para la conciencia, puede
ser resultado de diferencias en la intensidad, duración, la estructura melódica, la sucesión
armónica, la instrumentación o cualquier otro modo de articulación. El acento métrico no debe
confundirse con el acento se intensidad. El acento de intensidad es el énfasis dinámico de un
sonido que puede o no llevar acento métrico. Este último acento puede alterar el agrupamiento
rítmico o puede ayudar a clarificar una organización rítmica que de otra forma podría ser ambigua.
Ciertos agrupamientos rítmicos tienden a ser incompatibles con determinados esquemas métricos.
Los metros binarios no dan lugar fácilmente a modelos dactílicos (Fuerte, débil, débil).
Woodrow descubrió que cundo los intervalos de tiempo son iguales y se acentúa cada segundo
sonido, el ritmo pareciera trocaico. Si los intervalos son iguales y se acentúa cada tercer sonido el
ritmo parecería dactílico. De este modo el troqueo y el dactílico pueden clasificarse dentro de in
mismo grupo, dado que ambos son producto de diferencias en la intensidad, más que en la
duración.
Las diferencias de duración tienden a dar como resultado ritmos con acento final, y las diferencias
de intensidad ritmos con acento inicial.