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DERECHO CIVIL - OBLIGACIONES

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DERECHO CIVIL - OBLIGACIONES LA CUAL ES:

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CONTENIDO DEL DOCUMENTO

• De las obligaciones
• Obligación
• Obligaciones Condicionales
• Obligaciones pecuniarias
• Tiempo de cumplimiento de las obligaciones
• Transmisión de las obligaciones
• Modificación subjetiva
• Extinción de las obligaciones jurídicas

DE LAS OBLIGACIONES LIBRO III

El Código Civil.- Es la agrupación ordenada y sistemática de normas civiles.

Promulgación.- Se dio el 6 de agosto de 1975, entró en vigencia el 2 de abril de 1976.

Crítica.- Es decreto ley, con más de 30 años de vigencia, obsoleto en su legislación y con
falta de modernidad, tomando en cuenta que el derecho no es estático.

Estructura.- El C.Civil, está compuesto de 5 Libros o instituciones jurídicas:

Libro Primero- De las Personas. Arts. 1-73

Libro Segundo- De los Bienes, de la Propiedad y de los Derechos Reales sobre Cosa Ajena.
Arts. 74-290.

Libro Tercero- dividido en 2 partes:


Parte Primera- de las Obligaciones en General. Arts. 291-449.
Parte Segunda- de las Fuentes de las Obligaciones. Arts.450-999.

Libro Cuarto- de las Sucesiones por Causa de Muerte. Arts. 1000-1278.

Libro Quinto- del Ejercicio, Protección y Extinción de los Derechos. Arts. 1279-1570.
Persona.- Ser o ente capaz de adquirir derechos y contraer obligaciones.

Clases de Personas:

1) Natural.- Todo ser racional que está unido a un cuerpo humano.

Es erróneo pensar que los menores, enajenados o interdictos no puedan contraer


obligaciones, pues éstos los hacen mediante sus representantes o tutores. El interdicto para
el C. Familia y el C. Civil, es el que tiene trastorno mental.

2) Jurídica.- o colectivas son las enumeradas en los arts. 52-53 C. Civil.

Personalidad.- Es el conjunto de atributos que tiene toda persona para ser considerada como
sujeto de derecho. Son todos los derechos que tiene una persona (Art. 7 CPE y Art. 35
CPE.)

Capacidad.- Del latin “capitis”, es la aptitud legal que tiene una persona para tener derechos
y adquirir obligaciones.

Puede ser:
1) de goce, para ser titular de derechos o,
2) de ejercicio jurídico o de obrar, es para ejercerlo por sí o por medio de representantes.

Limitaciones.-
1) La ley, por excelencia es la limitante. En los escritos se debe decir “hábil por ley”.
2) La edad. La mayoría de edad (18 años) lo convierte en ciudadano, que es la capacidad
para ser elector o ser elegido.
3) El sexo. Por ejemplo la carga laborar de la mujer es de 40 hrs. semanales, el hombre 48.
4) Enajenación mental.
5) Nacionalidad.
6) Cultura, o grado de instrucción limita a la persona para ocupar ciertos cargos.
7) Condena. Los sentenciados penalmente tienen limitaciones.
8) Estado Civil. Ej. Para ser juez de familia debe éste ser casado.

Domicilio.- Es el lugar donde una persona tiene su residencia y si no se conoce, donde


tenga su actividad principal.

El C. Civil como la doctrina, establece que puede haber domicilios generales y especiales
para determinados actos jurídicos.
Personería.- Es la facultad conferida por ley o por mandato que tiene una persona para
actuar en determinados actos jurídicos en representación de otra. Ej. Por ley, la tiene el
padre por el hijo, por mandato, las personas colectivas actúan a través de sus gerentes o
representante legales. Éste sería el Personero.

Personas Colectivas que pueden contraer obligaciones.-


1) De existencia necesaria.- Ej. Los estados, organismos internacionales, etc. Del Derecho
Internacional Público.

Personas Públicas, las municipalidades, universidades públicas.

2) De existencia voluntaria o posible.- Existen por que nosotros queremos y son:


a) civiles, sin fines de lucro, las asociaciones, fundaciones y sociedades civiles.
b) comerciales, las que buscan fines de lucro (ar. 125 C.Com.) y son 7: colectiva, S.R.L.,
S.A., S.A. mixta, y otras.
c) sociales, como las mutuales, cooperativas, fraternidades, etc.

Cosa.- Es una definición simple del objeto que ocupa un lugar en el espacio.

Bien.- Proviene del latín “beare”= bueno para el hombre. Para que se considere Bien, se
debe cumplir los siguientes requisitos:

El objeto debe tener valoración económica o patrimonial.

Tener una función o cumplir con una utilidad.

Susceptible de apropiación.

Hay bienes muebles, semovientes (animales), inmuebles, sobre los cuales se puede contraer
obligaciones y celebrar contratos.

Derechos Reales.- Es la relación en virtud de la cual una persona puede obtener todo o
parte de lo que un bien produce oponible a terceros. Es la relación entre personas con
relación a la cosa.

Sistema Cerrado y Abierto.- En la materia de Derechos Reales, rige un sistema cerrado, es


decir que no hay más derechos reales que aquellos que la ley establece, en cambio en
obligaciones rige un sistema abierto, es decir que las personas pueden contraer
obligaciones, celebrar contratos distintos a los que establece el C.Civil, imponer sus propias
cláusulas, condiciones, pero siempre bajo las limitaciones que establece el orden público,
las buenas costumbres y la Ley.

Clasificación de los Derechos Reales.- Estos pueden ser:

Principales: a) La propiedad, b) la posesión, c) el usufructo, d) el uso, e) la habitación, f) el


derecho de superficie, g) el derecho a construir.

Accesorios: a) la hipoteca, b) prenda c) anticresis.

Patrimonio.- del latín “patris et monium”= obligación por parte del padre, era el significado
que tenía en la antigua Roma, donde en principio reconocieron que el patrimonio
comprendía al activo, incorporando luego el pasivo.

Modernamente los autores como por ejemplo Marcel Planiol, definen el patrimonio como
“todo lo evaluable en dinero”

Definición más completa: “Es el conjunto de bienes, acciones, valores, derechos


económicos, cargas, deberes y obligaciones que tiene toda persona” o “conjunto de
derechos y obligaciones que tiene una persona apreciable en dinero”.

Los Derechos Patrimoniales.- se dividen en derechos reales y derechos de crédito, también


llamados personales u obligaciones.

Derecho real.- Es una relación jurídica entre una persona como sujeto activo y todas las
demás como sujeto pasivo, en virtud de la cual una cosa se encuentra sometida a aquella de
manera directa e inmediata. Ej. La propiedad y el usufructo.
Derecho personal, de crédito u obligación.- Es la relación jurídica establecida entre dos
personas determinadas, en cuya virtud el sujeto activo llamado acreedor, tiene facultad para
exigir al sujeto pasivo o deudor, una prestación, es decir, la realización de un hecho
positivo o una abstención.

Diferencias entre Derechos Reales y Derechos Personales de crédito u Obligaciones.- El


primero es un derecho absoluto oponible a todos, tiene un sujeto pasivo universal, en el
segundo el sujeto pasivo está siempre individualizado.

Bienes.- Son las cosas materiales e inmateriales que pueden ser objetos de derechos (Art.
74 CC).

Derechos Patrimoniales.- Se encuentran dentro de los derechos patrimoniales las siguientes


materias:

1) derechos reales,

2) obligaciones o derechos creditorios,

3) contratos,

4) sucesiones y

5) derechos intelectuales.

Derechos extra patrimoniales. Son los que no tienen valoración económica.

Como ser: Sobre los derechos de la personalidad ( la vida, la libertad, etc.)

El derecho puro de familia.


Derecho.- Es el conjunto de normas, reglas, principios jurídicos que rigen la vida de las
personas en sociedad.

Deber.- “donde terminan los derechos de uno comienzan los deberes”. “Los derechos se
ejercen y los deberes se cumplen”. Art. 1279 CC.

Concepto.- Es la forma de conducta o comportamiento que deben tener las personas frente
a sus semejantes, en la familia o en la sociedad.

Clases de Deberes.-

Sociales.- que se rigen por las normas de trato social, que no tienen sanción en caso de
incumplimiento (el saludo, la vestimenta)

Religiosos.

Cívicos.- están relacionados con la nación, son subjetivos, intrínsecos de un pueblo, propio.

Militares.- son las normas que obligan a los militares.

Jurídicos.- es cuando las conductas de las personas se encuentran normadas por el derecho
y tienen sanciones en caso de incumplimiento que serán: sanciones personales o subjetivas
que afectan a la persona como la privación de libertad o sanciones objetivas cuando afectan
al patrimonio.

Clases de deberes jurídicos:

Familiares.- asistir a los hijos.


Tributario.- Pagar impuestos.

Laboral.- todas las personas tienen la obligación de trabajar según su capacidad, para
contribuir al desarrollo del Estado.

Civil.- Ej: respetar los derechos de la personalidad de otra persona ( el honor, la imagen,
etc.).

Penal.- Es el que más otorga deberes jurídicos ( no matar, no robar, no violar, etc) Dá
reglas de conducta.

Diferencia entre Deber Jurídico y Obligación.- El deber jurídico es más amplio que la
obligación. El deber jurídico conlleva relaciones entre las personas de carácter patrimonial
o extramatrimonial, en cambio las obligaciones son exclusivamente patrimoniales. Se
refiere a relaciones entre acreedores y deudores.

OBLIGACIÓN.

Etimología.- Del latín “obligare”=obligarse. Otros autores indican que es una palabra
compuesta del prefijo “ob”= por delante y del verbo “ligare”=atar, unir.

Concepto.- Es la relación, en virtud de la cual una persona llamada acreedor tiene el


derecho de exigir una prestación positiva o negativa, patrimonial a otra llamada deudor.

O, el vínculo por el cual el deudor debe cumplir una prestación de dar, hacer o no hacer de
carácter económico frente al acreedor.
Ubicación.- Esta disciplina jurídica se encuentra normada en el Libro Tercero del C. Civil.
La Parte Primera, titulada de las Obligaciones en General (arts. 291-449) y la Parte
Segunda (arts. 450-999) llamada de las Fuentes de las Obligaciones.

Importancia.- Las personas no pueden vivir aisladas, requieren de otras para satisfacer sus
múltiples y variables necesidades materiales como económicas y por esto celebran
contratos día a día, contraen obligaciones en forma permanente y de ahí vemos la
importancia de la materia de obligaciones que forma parte de la vida civil de las personas.

Derecho Comparado.- En otras legislaciones la materia de obligaciones, se encuentra


separada del Código Civil, es un código independiente. Ej: Rusia, o el Código Federal de
las Obligaciones de Suiza.

Elementos de la obligación.- Son cuatro los elementos necesarios e indispensables para la


existencia de las obligaciones: I) sujeto, II) objeto, III) causa y IV) relación de derecho.

I) Sujetos de la obligación.- Son las personas naturales o jurídicas, que pueden intervenir en
forma directa o indirecta en una obligación jurídica. Pueden ser de 3 maneras: a)
principales, b) accesorias y c) subsidiarias de las accesorias.

a) Sujetos principales.- son el acreedor (activo o titular del derecho) y el deudor (pasivo u
obligado a cumplir la obligación).

También se los llama creditor, debitor, obligacionista y obligado.

El derecho del acreedor se llama crédito, acreencia, jus solven.

El deber del deudor se llama deuda, débito, obligación, axipiens.


Obligación subjetiva Simple.- Recibe éste nombre cuando en la obligación hay un deudor y
un acreedor.

Obligación subjetiva Compleja.- Cuando hay pluralidad de acreedores como deudores en la


obligación.

INTRODUCCIÓN

Según la teoría de Bonafonte, la obligación romana nació en tiempos arcaicos dentro del terreno de
los delitos. Originalmente, la comisión de un delito hacía surgir a favor de la víctima o de su familia,
un derecho de venganza eventualmente limitado por el principio del talión, el cual, mediante una
composición podía transformarse en el Derecho de la víctima o de su familia a exigir cierta prestación
del culpable o de su familia. Como garantía del cumplimiento de tal prestación, un miembro de la
familia del culpable quedaba ob-ligatus, o sea, “atado” en la domus de la víctima como una especie de
rehén.

Por tanto, la obligación antigua era una atadura en garantía de cumplimiento de prestaciones nacidas
de los delitos. Luego, al irse desarrollando la comunidad con el aumento de los contactos económicos
entre las domus, se presentaba, a veces, la necesidad de que un paterfamilias prestara valores a otro:
en tal caso, el acreedor quería tener una garantía y así esta “atadura” se trasladaba al campo delictual
al incipiente Derecho Privado.

Por lo que desde la época romana encontramos utilizada la palabra obligación en el sentido de deber
jurídico, pero también empleada para el hecho de obligarse, para designar el vínculo jurídico entre
sujeto activo y sujeto pasivo, e inclusive en el sentido del Derecho del sujeto activo (como en la
expresión obligationem adquiere). Es más correcto, en el primer caso, hablar de deber, referirse, en el
segundo, a la fuente concreta de la obligación en cuestión, y decir, según el caso, celebración del
contrato, comisión del delito, etc., y utilizar, en el cuarto caso, el término obligación, por lo que el
término deuda no se refiere necesariamente a deudas de dinero, sino que equivale a deber en
general, de la misma manera que pagar y pago (solvere y solutio) significan cumplir con un deber y
cumplimiento.

Al igual que otros conceptos romanos, la obligación sufrió transformaciones a lo largo de su vida
jurídica y por tanto se hace necesario seguir su evolución en las distintas etapas históricas.

DERECHOS REALES Y PERSONALES

Los Derechos que componen el patrimonio de los particulares se dividen en Derechos reales y
Derechos de crédito.

DERECHOS REALES: Un grupo de Derechos subjetivos se reúne bajo la denominación de Derechos


reales o Derechos sobre cosas. Tal denominación no es romana, pues la expresión ius in re, es propia
de los romanistas del Medioevo. Los Derechos reales, que consisten en los diferentes beneficios que el
hombre puede obtener de una cosa, son en número limitado.
“El Derecho real es un Derecho , oponible a cualquier tercero, que permite a su titular el goce de una
cosa, sea en forma máxima que conoce el orden jurídico (propiedad), sea en alguna forma limitada,
como en el caso de los Derechos reales sobre cosas ajenas.”

Es característico de estos Derechos ser oponibles a todos, razón por la cual, la dogmática moderna los
considera como relaciones jurídicas en las que todos los habitantes del planeta, con excepción del
titular del Derecho, figuran como sujetos pasivos.

Las legislaciones modernas no han aumentado su lista. Quedando sobre poco más o menos, los
mismos que había en Derecho Romano. Unos han sido organizados por el Derecho Civil, y los otros
han sido admitidos y sancionados por el Derecho Pretoriano: a) El Derecho Civil reconoce, por una
parte e implícitamente, la propiedad, que es el más completo de todos los Derechos reales, y por esta
razón los romanos confunden muy a menudo con su objeto; por otra parte, y expresamente, las
servidumbres, que se dividen en servidumbres personales y servidumbres reales o prediales; b) Más
tarde, el pretor concedió en ciertos casos a personas cuya situación le parecía digna de este favor la
protección de una acción in rem, por la cual podían hacer valer contra todos, sus Derechos sobre una
cosa. De esta manera quedó sancionada la existencia de nuevos Derechos reales, que son: la
superficie, los Derechos de los colonos de los agri vectigales, la enfiteusis y la hipoteca.

DERECHOS DE CRÉDITO U OBLIGACIONES: Hemos visto que los Derechos que componen el


patrimonio de los particulares se dividen en Derechos reales y en Derechos de crédito; hemos
concluido el estudio de los Derechos reales, y nos falta hablar de los Derechos de crédito. Se les llama
también obligaciones.

El Derecho de crédito, es en efecto, una relación entre dos personas, de las cuales una, el acreedor,
puede exigir de la otra, el deudor, un hecho determinado apreciable en dinero. Ahora bien, esa
relación puede ser considerada desde dos puntos de vista diferentes; del lado del acreedor, es un
Derecho de crédito que cuenta en el activo de su patrimonio, del lado del deudor es una obligación,
una deuda que figura en su pasivo. Los jurisconsultos romanos se sirven exclusivamente de la palabra
obligado, en un sentido muy amplio, para designar el crédito lo mismo que la deuda. La teoría de las
obligaciones es la que los romanos han llevado al más alto grado de perfección.

“El Derecho personal, en cambio, permite a su titular reclamar de determinada persona la prestación
de un hecho positivo o negativo que puede consistir en un dare (transmitir el dominio sobre algo),
facere (realizar un acto con efectos inmediatos) o praestare (realizar un acto sin inmediatas
consecuencias visibles, como cuando se garantiza una deuda ajena o cuando uno se hace responsable
de cuidar de un objeto o se declara dispuesto a posponer el cobro de un crédito). A estos conceptos
podemos añadir los de non facere y de pati (tolerar). “

Es que ella fue la obra de la razón misma de los jurisconsultos, que, interpretes juiciosos de la
voluntad de las partes, se aplicaron a desarrollar sus principios con la delicadeza de análisis que era
su cualidad propia. Gracias a su influencia, las reglas de las obligaciones, sustraídas muy pronto al
formulismo primitivo, se ampliaron hasta el punto que han acabado por constituir un fondo común,
aplicable a pueblos de costumbres y de civilizaciones diferentes.

Por eso, a pesar del importante puesto que ocupa en el Derecho , los legisladores modernos han
podido aceptar esta teoría, en sus elementos esenciales, tal como los romanos la habían concebido.

La distinción sin embargo, no se plantea en el campo de los Derechos subjetivos, sino en el Derecho
procesal romano, en materia de defensa de los Derechos patrimoniales; así, la actio in rem se opone a
la actio in personam; mientras la primera representó la posición avanzada de la propiedad y de los
otros Derechos sobre las cosas, la segunda fue la defensa normal de los Derechos personales.

La diferencia se basa sobre la intentio. La de la actio in personam afirma un deber jurídico del
demandado, mientras la actio in rem la pertenencia de una cosa al actor, o del Derecho de obrar en
cierta dirección respecto de alguna cosa, o la no pertenencia de igual Derecho al demandado.

En tanto que la actio in personam no podía concebirse sino en función del deber jurídico de otro, la
actio in rem se dirige en primera línea hacia la cosa que es objeto del Derecho pretendido; el
demandado es un obstáculo que se interpone entre el actor y la cosa.

DEFINICIÓN Y ELEMENTOS DE LA OBLIGACIÓN

Las instituciones de Justiniano definieron así la obligación: Es un lazo de Derechos que nos constriñe
en la necesidad de pagar alguna cosa conforme al Derecho de nuestra ciudad. La obligación está así
comparada a un lazo que une una a otra a las personas entre las cuales ha sido creada; es, por otra
parte, un lazo puramente jurídico. Pero si se sujeta al deudor, se limita su libertad, no hemos de sacar
de ahí la conclusión de que sea una molestia en la sociedad. El hombre no puede bastarse a sí mismo.
Tiene necesidad de la industria, de la actividad de sus semejantes; es por medio de las obligaciones
por lo que obtiene y por lo que da por sí mismo servicios recíprocos. Cuanto más se civiliza una
nación, más se desenvuelve en ella el Derecho de obligaciones; de donde surge la importancia capital
de esta materia, que no ha cesado de perfeccionarse desde los orígenes de Roma hasta nuestros días.

De la definición de la obligación surgen los tres elementos de que se compone: a) Un sujeto activo, el
acreedor; puede haber uno o varios. Al acreedor pertenece el Derecho de exigir del deudor la
prestación que es objeto de la obligación. El Derecho Civil le da, como sanción de su crédito, una
acción personal; es decir, la facultad de dirigirse a la autoridad judicial para obligar al deudor a
pagarle lo que se le debe. Esta sanción organizada según los principios del Derecho Civil Romano,
caracteriza a las obligaciones civiles, las únicas que son verdaderas obligaciones, que consisten en un
lazo de Derecho.

En ciertos casos, sin embargo, se encontró bien admitir que una persona pudiese más que según el
Derecho Natural; era un simple lazo de equidad. Resulta de consecuencias que los jurisconsultos y el
pretor acabaron por precisar. Pero estas obligaciones imperfectas, calificadas de naturales, no han
sido jamás sancionadas por una acción. a) Aquel en provecho del cual habían sido reconocidas no
podía contar más que con una ejecución voluntaria de parte del deudor; b) Un sujeto pasivo, el
deudor, es la persona que está obligada a procurar al acreedor del objeto de la obligación. Puede
haber en ella uno o varios deudores, como uno o varios acreedores. c) Un objeto.

El objeto de la obligación consiste siempre en un acto que el deudor debe realizar en provecho del
acreedor, y los jurisconsultos romanos lo expresan perfectamente por medio de un verbo: facere,
cuyo sentido es muy amplio, que comprende a una abstención. Al lado de esta fórmula general están
más precisos ciertos textos. Distinguen en tres categorías los diversos actos a los cuales puede ser
obligado el deudor, y los resumen en estos tres verbos: dare, praestare, facere.

La obligación tiene siempre por objeto un acto del deudor, que esta personalmente obligado; resulta
de ello que nunca ni aun cuando ella consiste en dare, transfiere por si misma ni la propiedad ni
ningún otro Derecho real. El deudor está obligado solamente a efectuar esa transferencia por medio
de los modos especiales creados para este efecto.

CONCEPTO DE OBLIGACIÓN

Las instituciones Gayanas no definen la obligación; el comentario se inicia, con un simple nunc-
transeamus ad obligaciones. Una definición que se atribuye a un glosador postclásico de Gayo se
encuentra en las instituciones justinianeas: La obligación es un vínculo de Derecho que nos constriñe
en la necesidad de pagar alguna cosa según el Derecho de nuestra ciudad.

La expresión solvendae rei ha de entenderse como una referencia a cualquier índole de prestación y
no únicamente a la de entregar la cosa.

Si se examina con detenimiento la definición anterior, se ve que la misma está formulada en función
del sujeto pasivo o deudor. Ello se debe a que la obligación es un estado normal, se limita la esfera de
acción de una persona (deudor) en beneficio de otra (acreedor); por eso no puede durar
indefinidamente, está destinada a desaparecer, sea cuando el obligado cumpla la prestación
prometida, en cuyo caso se dice que hay solutio (de- solvere) y se produce la liberatio del deudor, o
bien cuando surgen causas de extinción del vinculo de otra índole.

También podemos citar otro concepto de obligación que nos dejó el jurisconsulto Paulo, expuestas
desde el punto de vista del sujeto activo “lo esencial de la obligaciones no consiente en que se haga
nuestra una cosa, corporal o una servidumbre, sino en constreñir a otro a darnos, a hacer o responder
de algo”.

En cuanto a su etimología, el término obligación viene del sustantivo latino obligatio; expresión que a
su vez deriva de la preposición ob y del verbo ligare, que significa atar. Lo que quiere decir que por el
sólo hecho de asumir la obligación, el deudor queda ligado a su acreedor.

En el viejo Derecho Romano la obligación era la sujeción en que se colocaba a una persona libre para
garantizar la deuda que había contraído ella misma o por otra persona. En caso típico, era la práctica
de un préstamo seguido de un nexum por el cual el deudor se entregaba en prenda al acreedor hasta
que con su trabajo o por intervención de un tercero extinguía la deuda y obtenía su libertad.

El sistema riguroso anterior termina en el año 326 a. de C., cuando la Lex Poetelia Papiria, suprimió a
la práctica de la entrega de la persona en prenda por deudas civiles, y estableció el principio de que el
deudor sólo podía garantizar sus deudas con sus propios bienes y no con su corpus.

ELEMENTOS DE LA OBLIGACIÓN

La obligación crea un lazo, una liga-vinculum-, que presupone por lo menos dos sujetos: Uno activo y
otro pasivo; el primero creditor sujeta en cierta forma al segundo debitor para que le preste la
conducta debida. Las expresiones creditor y debitor se usaron tardíamente, reus parece ser el término
admitido en la vieja lengua jurídica para uno y otro sujeto. El vínculo que es un lazo de Derecho
permite al acreedor usar los medios coactivos para que el deudor preste el comportamiento debido. El
objeto de la obligación, consistía en la conducta que el deudor debía observar en provecho del
acreedor; así, un dare, facere o praestare.

DEBITUM Y RESPONSABILIDAD

La obligación comprende dos elementos el debitum: “Schuld” de los alemanes, es decir, el deber de
prestar cierta conducta y la responsabilidad: “Haftung” que otorga al acreedor un medio de ejecución.
Tales elementos, sin embargo, no siempre se conjugaron, pues el debitum en un principio no fue
estrictamente jurídico ya que frente al deudor remiso, el acreedor no podía lograr la ejecución forzada
de la prestación misma, porque la obligación en su origen no llevaba aparejada responsabilidad, pues
para que ésta naciera era necesario que el acto que originara a la obligación (así, a la promesa
contractual) se añadiera otro nuevo que fundamentara la responsabilidad para el caso de
incumplimiento. Es hasta el momento en que el debitum y la responsabilidad están unidos en un
mismo negocio cuando se puede hablar de obligación tal como en la actualidad se conoce.

DIVISIÓN DE LAS OBLIGACIONES:

Las obligaciones pueden dividirse como sigue:

-obligaciones de Derecho Civil y de Derecho de Gentes.

Eran obligaciones de ius civile, las derivadas de los contratos sancionados por el Derecho Quiritario:
nexum, sponsio, etc.; y el Derecho de Gentes, las que se originaban en contratos reconocidos por este
Derecho : comodato, compraventa, etc. En un principio, sólo se conocían las obligaciones del Derecho
Civil, que eran limitadas, formalistas y sólo vinculaban a los cives. Así, la sponsio que se verificaba
mediante el empleo de palabras solemnes. Las obligaciones del Derecho de Gentes no necesitaron el
empleo de formalidades solemnes para su perfeccionamiento, fueron además accesibles a los
extranjeros, tales como las que nacían del comodato, depósito, compraventa, etc.

-Civiles y honorarias.

En las instituciones de Justiniano se dice que la división principal de las obligaciones se reduce a dos
clases: Civiles o pretorianas; son civiles las que han nacido por las leyes, o reconocidas por Derecho
Civil. Son pretorianas, las que el pretor ha establecido por su jurisdicción, llamadas también
honorarias.

-De Derecho estricto (stricti iuris) y de buena fe (bonae fidei).

Las primeras provenían del Derecho Quiritario (nexum, stipulatio y contrato litteris). El deudor en una
obligación de éstas debía cumplir lo estrictamente pactado, tal como se ve en el siguiente caso. Lo
que se dijese al celebrar un nexum o un mancipatio tenga fuerza de ley. De modo, que el juzgador no
podía apartarse de las palabras sacramentales que debía observar como ley, y referirse a otros
elementos extraños, como sería la intención presunta de las partes, la equidad,etc. En cambio en las
obligaciones de buena fe, el juzgador tenía facultad de interpretar la obligación del sujeto pasivo; así,
debía fijar el monto de la condena fundando su fallo en la equidad, en la voluntad presunta de las
partes y demás circunstancias del caso. En este tipo de obligaciones que nacen de los contratos
bilaterales, las partes podían invocar la compensación, los vicios del consentimiento, etc.

Posteriormente, las diferencias apuntadas fueron desapareciendo con lo cual perdió interés la división
que comentamos. Dado que el pretor, basándose en la equidad, concedió al deudor de una obligación
stricti iuris que acreditara haber sido víctima de maniobras dolosas por parte del acreedor, la exceptio
doli; y en caso de violencia, la exceptio quod metus causa: excepción por miedo.

-Civiles y naturales.

Las primeras, eran obligaciones provistas de una acción, que permitía al acreedor compeler
judicialmente al deudor en caso de incumplimiento, y las segundas, eran aquellas que aún cuando
carecían de acción producían consecuencias jurídicas, así: el acreedor insatisfecho podía retener el
importe de lo pagado voluntariamente por el deudor, sin que éste pudiera alegar pago de lo indebido.

También la obligación natural podía asegurarse su cumplimiento mediante garantía real y personal;
asimismo, podía ser novada y compensarse con una obligación civil. Como casos de obligaciones
naturales, se pueden citar los siguientes: las obligaciones de los esclavos con extraños, cuando el hijo
de familia recibía un préstamo en dinero y luego de salir de la patria potestad lo cubría al mutuante,
sin prevalerse del S. C. Macedoniano, no podía reclamar ese pago. Las deudas extinguidas por la litis
contestatio; la obligación extinguida por capitis deminutio, etc. Junto a las obligaciones naturales
anteriores, se suelen señalar las obligaciones naturales impropias fundadas en motivo de índole
religiosa o moral, de piedad o de buenas costumbres. Tales obligaciones no podían repetirse cuando
se cumplían en el Derecho Justiniano. Como ejemplo de ellas tenemos la prestación de alimentos a
parientes a quienes civilmente no se está obligado a proporcionarlos; la constitución de dote por parte
de la mujer en orden a sí misma, si creía estar obligada; el pago de los gastos del funeral de un
pariente; y el pago hecho por la madre para rescatar al hijo en esclavitud.

-obligaciones divisibles e indivisibles.

Una obligación es divisible cuando la prestación es posible ejecutarla en partes sin alterar su esencia;
y será indivisible en caso contrario. Son divisibles aquellas obligaciones cuyo objeto consiste en un
dare. En efecto, la propiedad y los demás Derechos reales pueden constituirse en pro parte.

Sin embargo, no lo son las servidumbres prediales, pues su división alteraría su naturaleza. Son
indivisibles aquellas obligaciones que consisten en un facere, ejemplo: pintar un cuadro, porque la
prestación no puede fraccionarse. Las obligaciones indivisibles en el Derecho Clásico, se estiman
solidarias, mientras que el Derecho Justinianeo las consideró diversas de las solidarias
reconociéndoles, en caso de pluralidad de sujetos activos o pasivos los efectos siguientes:
1. Si eran varios los acreedores, cualquiera de ellos podía perseguir al deudor por la totalidad de la
deuda, pero este último podía exigir al acreedor que cobra, una caución que lo ponga al cubierto de
una ulterior persecución por parte de los demás acreedores.

2.- Si concurren varios deudores frente a un solo acreedor, éste puede perseguir a cualquiera de ellos
por el todo, a su vez, el deudor interpelado puede pedir que le otorgue un plazo para dirigirse contra
sus demás codeudores y exigir, antes del pago una indemnización por las cuotas de éstos.

3.- Si a virtud de la prestación uno solo de los deudores cubre toda la deuda, podía dirigirse contra los
demás para recuperar lo que hubiese pagado en su descargo por medio de una acción que varía de
acuerdo con las relaciones del Derecho que entre ellos existiere, que puede ser: la comuni dividundo,
la familia erciscundae, la negotiorum gestorum, la pro-socio, etc.

4.- Cuando la obligación indivisible se traduce como consecuencia del incumplimiento en la de


indemnizar por los daños y perjuicios causados se hace divisible puesto que estos se pagan siempre
en dinero.

5.- Cada deudor responde sólo de su propia culpa.

-obligaciones genéricas y obligaciones específicas.

Son genéricas aquellas cuyo objeto no está determinado individualmente, sino tan solo por sus razgos
generales, ejemplo: un esclavo, diez sacos de trigo, etc. La obligación es específica si versa sobre un
objeto cierto, individual y concreto, así: el esclavo Estico.

Tiene interés esta división en caso de pérdida de la cosa por fuerza mayor antes del cumplimiento de
la obligación; en efecto tratándose de obligaciones genéricas éstas no se extinguen por perecimiento
del objeto: genus perire non censetur. El deudor continúa obligado, en cambio, si la cosa específica
perece por caso fortuito, el deudor queda libre: especies perit ei cui debetur.

-obligaciones alternativas y facultativas.

Las primeras son aquellas en las que se señalan varias prestaciones para que el deudor cumpla sólo
alguna de ellas, bien a elección suya o bien al acreedor. Ejemplo: dare bominem stichum aut decem.
En estas obligaciones el aspecto de mas interés es indudablemte el relativo a la elección de la
prestación a cumplir; lo normal es que la elección la haga el deudor, salvo convenio en contrario. El
deudor tenía la facultad de cambiar de opinión (ius varandi) hasta el momento de pago; y si la
elección compete al acreedor, el Derecho a cambiar de opinión duraba hasta la litis contestatio
(Derecho Clásico) o hasta que hubiere reclamado judicialmente uno de los 0bjetos (Derecho
Justinianeo). El Derecho de elección se transmite a los herederos del deudor o acreedor, según que lo
tuvieran uno u otro.

Problema también importante es aquel que se refiere a la pérdida de las cosas comprendidas en estas
obligaciones. Esta pérdida puede originarse, por el hecho del deudor, del acreedor o bien por caso
fortuito. En relación a este problema el Derecho Clásico adoptó soluciones acordes con la peculiar
estructura de la obligación alternativa y con las normas que rigen en materia de responsabilidad civil.
En cambio el régimen Justinianeo se resume en estos dos principios : 1º. Si corresponde la elección al
deudor y sin culpa suya perece una de las cosas debidas, puede liberarse pagando la aestimatio de la
que pereció: 2º Si perece una cosa por culpa del deudor siendo de éste la elección, y la otra sin culpa,
no se libera, dándose al acreedor la actio doli para obtener un resarcimiento. Concentración de la
obligación sobre el objeto que no ha perecido en el primer caso, y extinción de la obligación en el
segundo fueron las soluciones dadas por los clásicos.

-Las obligaciones facultativas.

Son aquellas en que el deudor se obliga al cumplimiento de una prestación determinada aunque
reservando para sí la facultad de liberarse cumpliendo con otra distinta. Así, el obligado por un fallo
condenatorio a resarcir los daños causados por un animal de su propiedad, podía liberarse haciendo
entrega del animal naxae deditio. Cabe advertir que el nuevo objeto no afecta al contenido de la
obligación, esto es, no entra in obligatione sino completamente in solutione. Por lo tanto, si el objeto
principal perece por caso fortuito, la obligación se extingue y el deudor queda liberado.

FUENTES DE LAS OBLIGACIONES

Se llaman fuentes de las obligaciones a aquellos hechos a los cuales el ordenamiento jurídico Romano
atribuía eficacia de hacer surgir un vínculo obligatorio entre dos o más personas.

Según Gayo, las obligaciones derivan de dos fuentes: el contrato y el delito, pero en la res cottidianae,
surge una clasificación tripartita de las causas de las obligaciones: las obligaciones nacen del contrato
o del delito, o por un cierto Derecho peculiar de varias especies de causas, la doctrina se inclina hoy
por creer que tal división no es clásica y que las Res Cottidianae que atribuyen a Gayo no son de éste.
Los jurisconsultos romanos al referirse al tercer término, indicaban a veces que la obligación se
desarrollaba en ellos de un modo parecido como se desenvolvía la procedente de un contrato
determinado o de los delitos.

En las instituciones justinianeas, la tripartición de las fuentes de las obligaciones se transformó en


cuatripartición: Por lo tanto provienen las obligaciones de un contrato o de un cuasicontrato, o de un
delito o de un cuasidelito. Científicamente, la cuatripartición, que puede considerarse justinianea, tuvo
el solo mérito de reafirmar de una vez y para siempre el concepto de contrato como acuerdo de
voluntades productivo de obligación.

Esta clasificación tiene la cualidad de señalar de forma definitiva cuáles son las principales fuentes de
las obligaciones, pero adolece de defecto de que dentro de ellas no quedan comprendidos todos los
hechos que pueden dar origen a una obligación, hechos que por ningún motivo fueron desconocidos
por Justiniano y que fue enumerando a lo largo de su obra.

CONCLUSIÓN

Esta clasificación de las fuentes de las obligaciones llegó a ser insuficiente a medida que el Derecho
Romano se perfecciona. Los jurisconsultos, tratando de determinar las causas de las obligaciones
sancionadas por el Derecho, reconocen que se puede estar obligado sin que haya habido contrato ni
delito, cada obligación toma en Derecho Romano una fisonomía particular, según la causa que la ha
producido. Por eso los jurisconsultos no estudian las obligaciones en sí mismas según sus caracteres
generales, sino que se limitan a describir las diferentes fuentes de donde nacen.

Normalmente, cuando el deudor cumple con sus obligaciones, éstas se extinguen; pero el simple
cumplimiento no disolvía la obligación, pues ésta era una especie de ligadura que requería un
desligarse, en términos inversos a los empleados para obligarse. A esta liberación se le conoce con el
nombre de contrarius actus. Por tanto, para que se extinguieran las obligaciones formales debía
seguirse un procedimiento inverso al realizado para constituirse.

Así tratándose de un préstamo celebrado por el antiguo contrato del nexum, la extinción de las
obligaciones se lograba mediante una acceptilatio (pregunta seguida de una respuesta), así pues, el
simple pago no extinguía la obligación; sólo en la época clásica, el Derecho Civil reconoció al pago
como modo de extinción de las obligaciones.

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