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JOHANN J.

WINCKELMANN

REFLEXIONES SOBRE LA

IMITACIÓN DE LAS OBRAS

GRIEGAS EN LA PINTURA
Y LA ESCULTURA

Traducción, introducción y notas,


SALVADOR MAS

FONDO DE CULTURA ECONÓMICA


MÉXICO - ARGENTINA - BRASIL - COLOMBIA - CHILE –
ESPAÑA- ESTADOS UNIDOS - GUATEMALA - PERÚ -
VENEZUELA
Primera edición, enero de 2008

Índice

Introducción: La Grecia de Winckelmann ........................... ……… 7


por SALVADOR MAS
Títulos originales:
Gedancken über die Nachahmung der Griechischen Wercke in der Mahlerey und
Reflexiones sobre la imitación de las obras griegas en la pin-
Bildhauer-Kunst.
Sendschreiben über die Gedanken van der Nachahmung der griechischen Werke in der tura y la escultura. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 75
Malerey und Bildhauerkunst.
Erliiuterung der Gedanken van der Nachahmung der griechischen Werke in der Malerey Carta sobre las reflexiones acerca de la imitación de las obras griegas en
und Bildhauerkunst; und Beantwartung des Sendschreibens über diese Gedanken. la pintura y la escultura. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . III
Elucidación de las reflexiones sobre la imitación de las obras
Diseño de portada: Leo G. Navarro
griegas en la pintura y la escultura; y respuesta a la carta
Ilustración: sobre estas reflexiones. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 145
A. R. Mengs, Retrato de].]. Winckelmann (1761-2)
Metropolitan Museum, Nueva York Notas a la edición. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... . . . 197
© de la traducción y la introducción: Salvador Mas Notas a las Reflexiones ........................................................ 199
Notas a la Carta. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 216
D. R. © 2007, FONDO DE CULTURA ECONOMICA DE ESPAÑA, Notas a la Elucidación. .... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 227
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Impreso en España

[5]
REFLEXIONES SOBRE LA IMITACIÓN DE LAS
OBRAS GRIEGAS EN LA PINTURA Y LA
ESCULTURA

Vox exemplaria Graeca


Nocturna versate manu, versate diurna."
HORAT. ART. POET.

Al serenísimo y muy poderoso Príncipe y Señor


FEDERICO AUGUSTO*
Rey de Polonia, etc. Príncipe Elector de Sajonia, etc.

Real y Sempiterna Majestad,


pongo estas páginas a sus pies con profunda sumisión.
La primera edición de las Reflexiones (1755) incluía en su frontispicio estas tres viñetas.
En la primera puede verse al pintor Timantes representando el sacrificio de Ifigenia, La confianza que deposito en esta empresa se apoya en los usos de
con Agamenón tapándose el rostro. En el pergamino que sostiene el artista puede
leerse, en griego, una cita de la Ifigenia en Áulide de Eurípides: «extendiendo su manto a aquella época dorada de las artes, que gracias a su Majestad Real y
los ojos» (trad. Carlos García Gual). Cicerón (Sobre el orador 22,74), Plinio (Historia Sempiterna vuelve a resurgir en el mundo con todo su esplendor.
natural 35, 10,73), Quintiliano (II, 13) y Valerio Máximo (4, 8, 12) elogiaron a En los tiempos de Augusto se creía que una obra dedicada a las
Timantes justamente por haber representado a Agamenón en esta postura, ocultando la artes mucho perdía en sí misma si acaso era dedicada a alguien, como
cabeza para así esconder su dolor. La ilustración indica de manera alegórica los
principales puntos del escrito de Winckelmann: a) que la imitación lo es de los griegos al mismo Augusto, padre de las artes.
y sólo de ellos; b) que las obras griegas (por ejemplo, la Ifigenia de Timantes) enseñan Sus Majestades Reales y Sempiternas han mantenido como una
que la máxima expresión de los afectos sólo se consigue mediante «la noble simplicidad parte de su herencia -junto a otras grandes cualidades de estos
y la callada grandeza», evitando la expresión de pasiones desmesuradas; e) que los monarcas- la protección de las bellas artes; y un escrito sobre las artes
pintores en particular, y en generallos artistas plásticos, deben dejarse guiar por los
poetas (como hizo Timantes), pues sólo de esta manera alcanzará su arte sentido y valor de las que Sus Majestades Reales y Sempiternas son máximos
alegórico. A propósito de la segunda viñeta, W. escribe en una carta del 3 del 6 de 1755 conocedores y jueces supremos no puede sino ser dedicado a aquel a
dirigida a Uden que representa al persa Sinetas mientras ofrece a su rey sus manos cuya más sabia decisión deben primeramente someterse.
llenas de agua, «porque de todos es sabido que nadie podía aparecer ante los ojos del
rey persa con las manos vacías» (Briefe 1, 172); la ilustración, pues, insiste en el tema de
la sencillez y la simplicidad, combinándolo con la metáfora del agua, tan querida por * Las llamadas de asterisco remiten a las Notas a la edición. Véase infra, pp. 197 ss.
W. La tercera viñeta representa al escultor Sócrates esculpiendo unas Gracias según la
forma de trabajar que W. propone en las Reflexiones (cfr. infra p. 212, nota 98.2). [75]

[74]
76 J. J. WINCK EL MAN N
EL BUEN GUSTO,* que se extiende cada vez más a lo largo del mundo,
comenzó a formarse por vez primera bajo el cielo griego. * Todas las
Sería justo no consagrar nada al sagrado nombre de Sus Majes-
invenciones de pueblos extranjeros confluyeron en Grecia, por así
tades Reales y Sempiternas -inmortalizado ras de las artes- que la
decirlo, tan sólo como las primeras semillas, y adoptaron otra
posteridad no reconociera al mismo tiempo como digno, pero mis
naturaleza y otra figura en el país que -se dice- Minerva.!" frente a los
fuerzas no alcanzan a tanto. ¿Y qué, por muy grande y sublime que
otros, dio a los griegos como morada por el clima moderado de las
pueda ser, puede presentarse a la Majestad, que no parezca pequeño y
estaciones que aquí encontró, como el país que habría de producir
bajo en comparación con ella?
sabias cabezas.
Lo poco que ofrezco sea al mismo tiempo una libación en honor
El gusto que esta nación ha dado a sus obras ha quedado como cosa
del dios protector del imperio de las artes, cuyas fronteras he osado
suya; raramente se ha alejado mucho de Grecia sin perder algo, y bajo
pisar; y las libaciones siempre han complacido menos por sí mismas,
distantes y diferentes cielos fue conocido más tarde. Sin duda, fue total
que por su pura intención: ésta hablará por mí.
y radicalmente ajeno bajo el cielo nórdico en la época en la que las dos
Sempiterna y Real Majestad artes" cuyos maestros son los griegos encontraron pocos admiradores,
la época en la que las admirabilísimas obras de Corregio* colgaban en
los Establos Reales de Estocolmo cubriendo las ventanas.
Su más humilde y obediente
Y debe admitirse que el reinado del gran Augusto" constituye el
servidor, Winckelmann
auténtico y feliz instante en el que las artes, cual colonia extranjera,
fueron introducidas en Sajonia. Bajo su sucesor, el Tito alemán," las
artes se han vuelto cosa propia de este país, y gracias a ambos el buen
gusto se ha tornado universal.
Constituye un monumento eterno a la grandeza de este monarca el
que, para la formación del buen gusto, haya puesto ante los ojos de
todo el mundo los mayores tesoros de Italia y todo lo perfecto que se
haya producido en la pintura de otros países. Su celo

* Las llamadas de asterisco remiten a las Notas a la edición. Véase infra, pp.

197·215.
1. Plato in Timaeo, edito Francof p. 1044.

[77]
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78 J. J. WINCKEL MA NN

para inmortalizar las artes no descansó hasta haber dado a los artistas monedas de los reyes egipcios y sirios raramente es parangonable con
para su imitación las verdaderas y auténticas obras de los maestros las cabezas de estos reyes. Los grandes artistas también son sabios en
griegos y, ciertamente, de primer rango. sus descuidos: no pueden errar sin instruir al mismo tiempo. Sus obras
Las fuentes más puras del arte están abiertas; bienaventurado se contemplan como Luciano" hubo de contemplar al Júpiter de
quien las encuentra y saborea. Buscar estas fuentes quiere decir viajar Fidias:" al mismo Júpiter, no el escabel donde reposaban sus pies.
a Atenas; y Dresden se convertirá de aquí en adelante en la Atenas Los conocedores e imitadores de las obras griegas no sólo
de los artistas. encuentran en sus obras maestras la más bella naturaleza, sino algo
Nuestro único camino para ser grandes, más aún, para ser, si es más que naturaleza, a saber, ciertas bellezas ideales* de la misma, que,
posible, inimitables, * es la imitación de los antiguos, y lo que alguien como nos enseña un antiguo comentarista de Platón. 1* han sido hechas
dijo de Homero, que sólo aprende a admirarlo quien ha aprendido a a partir de imágenes creadas tan sólo por el entendimiento.
conocerlo, también vale para las obras de arte de los antiguos, en Nuestro cuerpo más bello tal vez no sea más semejante al más bello
particular de los griegos. Para encontrar el Laocoonte tan inimitable cuerpo griego de lo que Ificles lo fue de su hermano Hércules. Si bien
como a Homero hay que declararse partidario de él como de un la influencia de un cielo suave y puro actuó sobre la primera formación
amigo. En semejante y preciso trato hay que enjuiciar como de los griegos, los tempranos ejercicios corporales dieron a esta
Nicómaco *la Helena de Zeuxis*: «toma mis ojos» -dijo a un formación la forma noble. Tómese a un joven espartano, engendrado
ignorante que deseaba censurar la imagen- «y entonces se te aparecerá por un héroe con una heroína, que en su niñez nunca fue aprisionado
una diosa». con pañales, que desde los siete años durmió en el suelo, que se ejercitó
Con estos ojos contemplaron Miguel Ángel, Rafael y Poussin* las desde su más tierna edad en la lucha y la natación; póngaselo junto a un
obras de los antiguos. Ellos bebieron el buen gusto de su fuente, y joven sibarita de nuestro tiempo y júzguese entonces a cuál de los dos
Rafael en el mismo país en el que surgió, pues se sabe que enviaba tomará el artista como modelo para un joven Teseo, para un Aquiles,
jóvenes a Grecia" para que dibujaran para él los restos de la Anti- sí, incluso para un Baco. Representado según éste sería un Teseo
güedad. educado entre rosas, según aquél, un Teseo educado en la carne, como
Una estatua realizada por una mano romana antigua siempre se juzgaba un pintor griego* de dos representaciones distintas de este
comportará frente a un modelo griego originario como la Dido de héroe.
Virgilio, * comparada en su cortejo con la Diana entre sus Oreádes, se Los Grandes Juegos constituían un poderoso estímulo para que
comporta frente a la Nausicaa de Hornero," que aquél ha buscado todos los jóvenes griegos ejercitaran su cuerpo, y las leyes exigían una
imitar. preparación de diez meses para los Juegos Olímpicos, y ello en Elis, en
Laocoonte fue para los artistas de la antigua Roma precisamente lo el mismo lugar donde eran celebrados. Los premios máximos no
que es para nosotros: la regla de Polícleto, * una regla perfecta del arte. siempre los obtenían adultos, sino la mayoría de las veces jóvenes,
No necesito señalar que en las obras más célebres de los artistas como muestran las odas de Píndaro. El deseo supremo de la juventud
griegos se encuentran ciertos descuidos: por ejemplo, el delfín aña- era asemejarse al divino Diágoras. 2*
dido a la Venus Medicea, * que acompaña a los niños que juegan, o el
trabajo de Dioscórides" en su Diómedes, excepto en la figura
principal. Se sabe que el trabajo sobre el reverso de las más bellas 1. Proclus in Timaeum Platonis. 2. v. Pindar. Olymp. Od. VII. Arg. & Schol.
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Contemplad al veloz indio que persigue a pie un ciervo: qué dibujo, pues creían que de esta forma se incrementaba la habilidad
volátiles sus humores, qué flexibles y rápidos sus nervios y músculos, para considerar y enjuiciar la belleza corporal.
qué ligera toda la arquitectura del cuerpo. Así nos presenta Homero a Por muy mezclada que esté con otras razas muy diferentes, la
sus héroes y así caracteriza a su Aquiles, * sobre todo por la velocidad belleza de la raza de los habitantes de la mayoría de las islas griegas,
de sus pies. así como el exquisito atractivo que en estas islas posee el bello sexo, en
Gracias a estos ejercicios, los cuerpos adquirían el contorno grande especial en la isla de Quios, permite suponer con fundamento la
y masculino que los maestros griegos daban a sus estatuas, sin brumas belleza de ambos sexos entre sus predecesores, que se enorgullecían de
ni añadidos superficiales. Los jóvenes espartanos tenían que mostrarse ser la raza originaria, más antigua que la Luna.
desnudos cada diez días ante los éforos, * que imponían una severa Todavía hoy en día existen pueblos enteros entre los cuales la
dieta a los que comenzaban a mostrar algo de grasa. * Más aún, entre belleza ni tan siquiera es un mérito, porque todo es bello. Los escri-
los preceptos de Pitágoras" se encontraba el evitar cualquier tores de libros de viajes" o afirman de manera unánime de los geor-
adiposidad corporal superflua. Tal vez por este mismo motivo, entre gianos, y exactamente lo mismo se dice de los cabardinos, una nación
los griegos de los tiempos más antiguos, a los jóvenes que se de la Crimea tártara.
preparaban para la lucha sólo se les permitía alimentarse con leche Los griegos aún desconocían las enfermedades que destruyen
durante el periodo de entrenamientos. tantas bellezas y corrompen incluso las más nobles formas. En los
Se evitaba cuidadosamente todo defecto corporal, y los jóvenes escritos de los médicos griegos no se menciona nunca la viruela, y en
atenienses seguían el ejemplo de Alcibiades, * que en su juventud se absolutamente ninguna de las descripciones de los griegos, que
negó a aprender a tocar la flauta porque desfiguraba el rostro. Homero desarrolla muy a menudo hasta los rasgos más mínimos, se
Toda la vestimenta de los griegos estaba dispuesta de manera que alude al hoyo de las viruelas.
no ocasionara la mínima violencia a la formadora naturaleza. El El mal venéreo, y su hija, la enfermedad inglesa, * todavía no se
desarrollo de la forma bella no sufría por los distintos tipos y partes de enfurecían contra la bella naturaleza de los griegos.
nuestra indumentaria actual, que nos aprieta y oprime, sobre todo en el Todo lo que, en general, desde el nacimiento hasta el pleno desa-
cuello, caderas y muslos. Entre los griegos, incluso el bello sexo rrollo, se administraba y enseñaba para la formación del cuerpo con
desconocía angustiosas coerciones en su atavío: las jóvenes espartanas vistas a su conservación, perfeccionamiento y adorno mediante la
vestían tan cortas y ligeras que se las denominaba «enseña -caderas», * naturaleza y el arte, fue llevado a cabo y utilizado en beneficio de la
También se sabe qué cuidadosos eran los griegos a la hora de bella naturaleza de los antiguos griegos, de suerte que puede afirmarse
engendrar niños bellos. En su Callipaedia, Quillet* no muestra tantos con la máxima probabilidad la superior belleza de sus cuerpos frente a
caminos para alcanzar este fin como entre ellos eran habituales. la nuestra.
Fueron incluso tan lejos que intentaron transformar los ojos azules en Ahora bien, en un país donde leyes estrictas hubieran refrenado
negros. También para promover este propósito se celebraban muchas acciones de la naturaleza, como sucedió en Egipto, supuesta
concursos de belleza. Tenían lugar en Elis y el premio consistía en patria de las artes y las ciencias, los artistas sólo habrían conocido
armas que luego eran colgadas en el templo de Minerva. Tales parcial y defectuosamente las criaturas más perfectas de la naturaleza.
concursos no carecían de jueces sabios y meticulosos, pues los griegos, Pero en Grecia, donde la juventud se consagraba al placer y la alegría,
como informa Aristóteles, * instruían a sus hijos en el donde a diferencia de lo que sucede en nuestros días un cierto bienestar
burgués nunca se opuso a la libertad de las cos-
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Así pues, entre los griegos cualquier celebración también pro-


tumbres, allí se mostró sin velos la bella naturaleza para instruir a los
artistas. porcionaba una ocasión para que los artistas trabaran conocimiento
La escuela de los artistas estaba en los gimnasios, donde los exactísimo de la bella naturaleza.
jóvenes, a cubierto del pudor público, realizaban sus ejercicios cor- En su floreciente libertad, la humanidad de los griegos no toleraba
porales totalmente desnudos.* El sabio y el artista iban allí: Sócrates a espectáculos sangrientos, y si acaso fueron habituales en el Asia jónica
-como algunos creen- fueron suprimidos hacía mucho tiempo. Antioco
instruir a Cármides, a Autólico, a Lisis; Fidias a enriquecer su arte con
estas bellas criaturas. Se aprendía el movimiento de los músculos, los Epífanes, * rey de Siria, trajo gladiadores de Roma, haciendo que los
giros de los cuerpos, se estudiaba su silueta o su contorno en la griegos vieran el espectáculo de estos desdichados seres, que
impronta que los jóvenes luchadores dejaban en la arena. inicialmente despertaron su repugnancia. Pero con el tiempo se perdió
La más bella desnudez de los cuerpos se mostraba aquí en acti- el sentimiento humanitario y estos espectáculos también fueron
tudes y posiciones tan variadas, verdaderas y nobles, como nunca escuela para los artistas. Ctesilas* estudió aquí a un gladiador
podrían adoptarlas los modelos alquilados que posan en nuestras moribundo1 «en el que podía verse cuánto de su alma quedaba todavía
academias. en él».
El sentimiento interior constituye el carácter de la verdad, y el Estas abundantes ocasiones para observar la naturaleza favore-
cieron que los artistas griegos fueran todavía más lejos: comenzaron a
dibujante que desea ofrecerla a sus discípulos académicos no obtendrá
ni una sombra de este verdadero carácter a menos que reemplace por formarse ciertos conceptos universales de la belleza, tanto de partes
sí mismo lo que el alma insensible e indiferente del modelo ni siente aisladas como de todas las proporciones de los cuerpos, que se
ni puede expresar mediante una acción de la que es propia un cierto elevaban por encima de la misma naturaleza; su modelo primigenio
sentimiento o pasión. era una naturaleza espiritual concebida por el sólo entendimiento.
El comienzo de muchos diálogos de Platón, * que él sitúa en los Así compuso Rafael su Galatea.* Repárese en su carta al conde
2
gimnasios de Atenas, nos da una imagen de las nobles almas de la Baltasar Castiglione: «Puesto que las bellezas» -escribe- «son tan
juventud y también nos permite concluir la identidad entre las raras entre las mujeres, me sirvo de una cierta idea en mi
acciones y actitudes en estos lugares y en sus ejercicios corporales. imaginación».
Los griegos representaban a los dioses y a los seres humanos según
Los jóvenes más bellos danzaban desvestidos en el teatro, y
Sófocles, el gran Sófocles, fue en su juventud el primero que ofreció a tales conceptos sublimes más allá de la forma habitual de la materia.
sus conciudadanos este espectáculo. Friné* se bañaba en los Juegos En los dioses y diosas frente y nariz formaban casi una línea recta. Las
Eleusinos ante los ojos de todos los griegos, y al salir del agua cabezas de mujeres ilustres en las monedas griegas tienen exactamente
proporcionaba a los artistas el modelo primigenio de una Venus el mismo perfil, si bien no se dejaba al libre arbitrio trabajar según
Anadiomene. Y se sabe que las muchachas, en Esparta, bailaban en conceptos ideales. O podría suponerse que esta forma fue tan propia de
cierta fiesta totalmente desnudas ante los ojos de los jóvenes. Lo que los antiguos griegos como entre los calmucos las narices chatas y entre
aquí tal vez pueda parecer extraño, se hace más soportable si se piensa los chinos los ojos pequeños. Los grandes ojos de las cabezas griegas
que los cristianos de la iglesia primitiva, sin nada que les cubriera, en gemas y monedas podrían apoyar esta suposición.
tanto varones como mujeres, eran bautizados al mismo tiempo y en 1. Algunos suponen que este gladiador, del que habla Plinio, es el famoso
una y la misma fuente bautismal. Gladiador Ludovisi, que hoy en día se encuentra en la gran sala del Capitolio.

2. V. Bellori Descriz. Delle Imagini dipinti da Rafaelle d'Vrbino & c. Roma. 1695.
fol.
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te los mismos pliegues, se alza onduladamente una suave vibración, de


En sus monedas, los griegos representaron a las emperatrices
romanas justo según estas ideas: las cabezas de una Livia y una tal modo que estos pliegues parecen formar un solo todo y en su
Agripina tiene exactamente el mismo perfil que poseen las de una conjunto una sola noble presión. Estas obras maestras nos muestran
Artemisa y una Cleopatra. una piel que no está en tensión, sino que se extiende suavemente sobre
una carne sana, que llena la piel al margen de toda hinchada turgencia y
En todo ello se observa que la ley prescrita por los tebanos a sus
que en todas las flexiones de las partes carnosas sigue su dirección de
artistas, * «imitar la naturaleza de la mejor manera bajo pena de
una manera unitaria. La piel nunca forma, como en nuestros cuerpos,
castigo», también fue observada como una ley por otros artistas en
Grecia. Donde el suave perfil griego no podía emplearse sin menos- pequeños pliegues aislados que se destacan de la carne.
cabo de la similitud, seguían la verdad de la naturaleza, como puede Del mismo modo, las obras modernas se distinguen de las griegas
verse en la bella cabeza de Julia, hija del emperador Tito, esculpida por un conjunto de pequeñas marcas, así como por los demasiados y
1 demasiado sensuales hoyuelos, los cuales, cuando se encuentran en las
por Evodo. *
obras de los antiguos, quedan suavemente aludidos con ahorrativa
Pero la ley «hacer a las personas similares y al mismo tiempo más
sabiduría y según la medida de la más perfecta y más plena naturaleza
bellas» siempre fue la ley suprema que los artistas griegos reconocían
de los griegos, siendo a menudo sólo advertidos por una sensibilidad
por encima de ellos, y presupone necesariamente el propósito por
educada.
parte del maestro de tomar en consideración una naturaleza más bella
y más perfecta. Polignoto* la observó constantemente. Así pues, es verosímil que en la formación de los bellos cuerpos
griegos, así como en las obras de sus maestros, haya habido mayor
Así pues, cuando se dice que algunos artistas procedieron como
Praxíteles,* que esculpió a su Venus de Cnido según su amante unidad estructural, una ligazón más noble de las partes, una medida
Cratina, * o como otros pintores, que tomaron a Lais* como modelo más rica de la plenitud,* sin las enjutas tiranteces ni las excesivas
de las Gracias, ello sucedió, creo, sin apartarse de las mencionadas cavidades de nuestros cuerpos.
grandes y universales leyes del arte. La belleza sensible dio al artista No puede irse más allá de la verosimilitud. Pero esta verosimilitud
la bella naturaleza; la belleza ideal los rasgos sublimes: de aquélla merece la atención de nuestros artistas y conocedores del arte, tanto
tomó lo humano, de ésta lo divino. más cuanto que resulta necesario liberar la veneración de los
monumentos de los griegos de los prejuicios que muchos les han
Si alguien tiene inspiración suficiente para mirar en lo más íntimo
achacado, para no parecer que atribuimos mérito a su imitación tan
del arte, entonces, si compara la composición de conjunto de las
sólo porque huelen a moho. *
figuras griegas con la mayoría de las modernas, especialmente
aquéllas en las que se sigue más a la naturaleza que al gusto antiguo, Este punto, sobre el que están divididas las opiniones de los
muchas veces encontrará bellezas todavía poco exploradas. artistas, exige un tratamiento más detallado de lo que permite el
propósito del presente escrito.
En la mayoría de las figuras de los maestros más recientes se ve en
las partes comprimidas del cuerpo pequeños pliegues, incluso Se sabe que el gran Bernini* fue uno de los que quiso discutir a los
excesivamente marcados; por el contrario, allí donde las figuras griegos la preeminencia tanto en lo que hace a la bella naturaleza,
griegas, en partes igualmente comprimidas, muestran precisamen- como en la belleza ideal de sus figuras. Opinaba además que la
naturaleza sabe dar a todas sus partes su belleza necesaria y que el arte
consiste en encontrarla. Se vanagloriaba de haber superado un
1. v. Stosch Pierres gravo pl. XXXIII.
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prejuicio en el que había incurrido inicialmente víctima de la seduc- segunda] enseña qué medida de la más bella naturaleza puede en-
ción de la Venus Medicea, pero que luego, sin embargo, percibió en cumbrarse sobre sí misma atrevida pero sabiamente. Tal imitación
diferentes ocasiones tras un laborioso estudio de la naturaleza. 1 enseñará a pensar y concebir con seguridad, en tanto en que ve aquí
Así pues, la Venus le enseñó a descubrir bellezas en la naturaleza definidas las más elevadas fronteras de lo humanamente bello y, al
que él, previamente, sólo creía encontrar en ella, la Venus, sin la cual mismo tiempo, de lo divinamente bello.
no habría buscado en la naturaleza. ¿No se sigue de aquí que cabe Si el artista toma pie en este fundamento, permitiendo que la regla
descubrir antes la belleza de las estatuas griegas que la de la griega de la belleza conduzca sus manos y su sensibilidad, se
naturaleza y que, por tanto, aquélla es más conmovedora, no tan encuentra entonces en el camino que con seguridad le conducirá a
dispersa, sino más unificada, que ésta? Así pues, al menos, el estudio 'la imitación de la naturaleza. Los conceptos de la Antigüedad de
de la naturaleza será un camino más largo y trabajoso para el totalidad y de lo perfecto en la naturaleza le harán más nítida y más
conocimiento de lo bello perfecto de lo que lo es el estudio de la perceptible nuestra naturaleza dividida: en el descubrimiento de su
Antigüedad. Bernini no indicaba el camino más corto a los jóvenes belleza sabrá ligarla con lo bello perfecto, y con la ayuda de las formas
artistas a los que siempre dirigía a lo más bello en la naturaleza. sublimes que constantemente le están presentes se convertirá en una
La imitación de lo bello de la naturaleza está o bien dirigida a un regla para sí mismo.
asunto particular, o bien reúne las notas de diferentes asuntos par- Entonces, y no antes, podrá el artista, especialmente el pintor,
ticulares, llevándolos a una unidad. Lo primero implica hacer una entregarse a la imitación de la naturaleza en aquellos casos, como en
copia similar, un retrato; es el camino de las formas y figuras holan- las vestiduras, en los que el arte le autoriza a desprenderse del modelo
desas. Lo segundo es el camino hacia lo bello universal y sus imá- de mármol, concediéndose más libertad, como hizo Poussin. * Pues
genes ideales, y es el camino que tomaron los griegos. Pero la dife- como dice Miguel Ángel «quien constantemente siga las huellas de
rencia entre ellos y nosotros es la siguiente: los griegos alcanzaban otro, nunca avanzará, y quien no sabe hacer nada bueno por sí mismo,
estas imágenes aunque no las tomasen de cuerpos bellos, a saber, tampoco sabrá servirse bien de las cosas de otros».
mediante la observación cotidiana de lo bello de la naturaleza, que a Las almas para las que la naturaleza ha sido propicia,
nosotros, sin embargo, no se nos muestra todos los días y raramente
Quibus arte benigna*
del modo como el artista lo desea.
Et meliore luto finxit praecordia Titan,
Nuestra naturaleza no producirá fácilmente un cuerpo tan perfecto
como el que posee el Antinoo Admirando" y no será posible formarse
tienen aquí abierto el camino de la originalidad.
una idea por encima de las más que humanas proporciones de una
divinidad bella como el Apolo Vaticano:* lo que la naturaleza, el En este sentido hay que tomar lo que dice Piles, * que en la época
espíritu y el arte han sido capaces de producir, queda aquí ante en la que la muerte se acercaba, Rafael se esforzaba en abandonar el
nuestros ojos. mármol y en seguir totalmente a la naturaleza. El verdadero gusto de la
Creo que su imitación podrá enseñar a ser sagaces más rápida- Antigüedad le había acompañado constantemente aun en medio de la
mente, porque aquí, en la primera de estas obras, se encuentra uni- naturaleza común, * y todas las observaciones de esta naturaleza se
ficado aquello que está diseminado por toda la naturaleza, y [la habían convertido en él, mediante una especie de transformación
química, en aquello que constituía su esencia y su alma.
1. v. Baldinucci Vita del Cavo Bernino.
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Tal vez habría dado a sus pinturas mayor variedad, vestiduras más mente juveniles, no en las femeninas, que en sus manos se convierten
amplias, más colorido, más luz y sombras; sin embargo, de esta en amazonas. *
manera sus figuras habrían sido menos apreciables que por el noble El artista griego, por el contrario, trazó el contour de todas sus
contorno y el alma sublime que había aprendido a representar gracias figuras hasta el más mínimo detalle, también en los trabajos más finos
a los griegos. y elaborados, tales como cameos. Piénsese en el Diomedes y el Perseo
Nada puede mostrar con mayor claridad la preeminencia de la de Dioscórides. 1* en el Hércules con Jole debido a Teucro. 2* y admírese
imitación de los antiguos sobre la imitación de la naturaleza que a los aquí inimitables griegos.
cuando a dos jóvenes, supongamos que de idéntico talento, se les hace Parresio* es considerado por lo general como el más poderoso en
estudiar al uno la Antigüedad, al otro la mera naturaleza. Éste el contour.
representaría la naturaleza como la encuentra: si fuera italiano pintaría
También en las vestiduras de las figuras griegas domina un
figuras tal vez como Caravaggio;* si holandés, caso de ser afor-
magistral con tour, objetivo fundamental del artista, que también a
tunado, como Jacob Jordans;* si francés, como Stella. * Pero aquél
través del mármol muestra la bella construcción de su cuerpo, como a
representaría la naturaleza como ella quiere ser, y pintaría figuras
través de una tela de Coso *
como Rafael.
Pueden aducirse aquí como grandes modelos la Agripina,* trabajada
Aunque la imitación de la naturaleza pudiera ofrecer todo al
con elevado estilo, y las Tres Vestales de la Colección Real de
artista, por medio de ella, ciertamente, no podría alcanzar la correc-
Antigüedades de Dresden. Presumiblemente, la Agripina no es la madre
ción en el contour, * que sólo puede aprenderse de los griegos.
de Nerón, sino Agripina la Vieja, esposa de Germánico. Tiene una
En las figuras de los griegos, el contour más noble unifica o cir-
similitud muy grande con una estatua erguida de precisamente esta
cunscribe todas las partes de la naturaleza más bella y de la belleza Agripina que se encuentra en la antesala de la biblioteca de San Marcos
ideal, o es más bien el concepto más elevado de ambas. Eufranor, *
en Venecia.3* La nuestra es una figura sentada, mayor que el natural,
que descolló tras la época de Zeuxis, es considerado el primero que le
con la cabeza apoyada sobre la mano derecha. Su bello rostro muestra
dio la manier más sublime. un alma sumergida en profundas reflexiones y que, ajena a toda
Muchos artistas modernos han querido imitar el con tour griego, sensación externa, parece indiferente ante preocupaciones y congojas.
pero casi ninguno lo ha conseguido. El gran Rubens" está muy lejos Podría suponerse que el artista ha querido representar a la heroína en el
del contorno griego de los cuerpos, y más aún en aquellas obras que momento de tribulación en el que le fue anunciado el exilio a la isla
hizo antes de viajar a Italia y antes de su estudio de los antiguos. Pandataria.
La línea que separa la plenitud de la naturaleza de lo superfluo de Las Tres Vestales* son dignas de admiración desde una doble
la misma es muy pequeña, y los más grandes maestros modernos se perspectiva. Son los tres primeros grandes descubrimientos realizados
han desviado mucho por ambos lados de esta frontera no siempre en Herculano; pero lo que las hace aún más apreciables es la gran
perceptible. Quien ha querido evitar un con tour famélico* ha caído en manier* de sus vestiduras. En este aspecto del arte, las tres, pero
la hinchazón; quien quiere evitar ésta, cae en la escualidez. especialmente la que es mayor que el natural, son comparables con la
Miguel Ángel* es quizá el único del que podría decirse que Flora Farnesia* y con otras obras griegas de primer rango.
alcanza la Antigüedad; pero sólo en las figuras poderosas y muscu-
losas, en los cuerpos de la edad heroica; no en las figuras suave- 1. V. Stosch Pierres gravo pi. XXIX. XXX.
2. v. Mus. Flor. T. 11. T. V
3. V. Zanetti Statue nell' Antisala della Librería di S. Marco, Venez. 1740. fol.
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Las otras dos, de tamaño natural, son tan parecidas entre sí que ras una sala terrena, donde estaban ellas solas. La totalidad de la aca-
parecen deberse a una y la misma mano; sólo se diferencian en la demia y todos los artistas de Viena estaban indignados, pues se
cabeza y en el tocado del cabello. Y puesto que todas las copias son comenzó a hablar oscuramente de su venta, y todo el mundo las miró
más rígidas y frías que su modelo original, han tenido que haber sido con ojos apenados cuando fueron llevadas de Viena a Dresden.
hechas por la mejor mano, más aún, por el mismo maestro tomando Antes de que esto sucediera, el famoso Matielli,*
como modelo su propia obra, como afirma un crítico de arte griego.
Sin embargo, en lo que atañe a las vestiduras no puede decirse que al que Policleto dio la medida y Fidias el escalpelo
ninguna de estas vestales sea copia de las otras. Algarotti*
La cabeza de estas dos figuras no está cubierta con ningún velo, lo
cual, sin embargo, no hace dudoso el calificativo de vestales, pues pudo copiarlas en arcilla con la máxima diligencia, compensando de
cabe demostrar que también en otros lados se encuentran sacerdotisas este modo su pérdida. Algunos años más tarde las siguió, y llenó
de Vesta sin velo. O más bien parece, dados los poderosos pliegues Dresden con las obras inmortales de su arte: pero sus sacerdotisas
que el vestido forma tras el cuello, que el velo, que no es una parte siguieron siendo su modelo para la draperte.* su punto fuerte hasta su
separada del vestido, como cabe ver en la vestal mayor, yace plegado vejez, lo cual, al mismo tiempo, constituye un no infundado pre-
detrás. supuesto de su excelencia.
Merece la pena dar a conocer al mundo que estas tres piezas La palabra draperie indica todo aquello que el arte enseña acerca de
divinas indicaron los primeros pasos para los posteriores descubri- la vestimenta de las figuras desnudas y sobre los pliegues en los
mientos de los enterrados tesoros de la ciudad de Herculano. ropajes. Tras la bella naturaleza y el noble contour, esta ciencia
Llegaron a la luz del día" cuando su recuerdo yacía, por así decirlo, constituye la tercera primacía de las obras de la Antigüedad.
bajo el olvido, como la misma ciudad, enterrada y sepultada bajo sus La draperie de las Vestales es de la manier más elevada: los peque-
propias ruinas: en una época en la que el triste destino que afectó a ños pliegues surgen mediante una suave oscilación de las partes más
este lugar era conocido casi exclusivamente por el informe de Plinio el grandes y vuelven a perderse en ellas con una noble libertad y una
Joven* acerca del final de su pariente, que le sorprendió junto con la suave armonía del todo, sin ocultar el bello contour del desnudo, que
devastación de Herculano. aparece ante los ojos sin violencia alguna. ¡Qué pocos maestros
Estas grandes obras maestras del arte griego fueron transportadas modernos quedan libres de censura en esta parte del arte!
bajo cielo alemán, y allí veneradas, cuando Nápoles, por lo que sé, aún Sin embargo, hay que hacer justicia a algunos grandes artistas,
no tenía la felicidad de poder mostrar ningún monumento herculano. especialmente pintores modernos, por haberse apartado en ciertos
Fueron descubiertas en el año 1706 en Portici, Nápoles, en una casos, sin menoscabo ni de la naturaleza ni de la verdad, del camino al
bóveda enterrada, y, puesto que el terreno se excavó en una finca del que los maestros griegos se atuvieron habitualmente en la vestimenta
príncipe de Elbeuf, fueron a parar inmediatamente después, junto con de sus figuras. La mayor parte de las veces la draperie griega está
otras estatuas de mármol y bronce allí mismo descubiertas, a las elaborada siguiendo ropajes tenues y húmedos, que, en consecuencia,
posesiones del príncipe Eugenio en Viena. como saben los artistas, se ciñen a la piel y al cuerpo, permitiendo ver
Para tener un lugar exquisito donde poder exponerlas, este gran su desnudez. Toda la vestimenta exterior de las mujeres griegas era de
conocedor del arte hizo construir expresamente para estas tres figu- una tela muy fina; de aquí que se denomine peplon, velo.
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Que los antiguos no siempre hicieron vestimentas con delicados Sófocles: su desgracia nos llega hasta el alma, mas querríamos poder
pliegues, lo muestran sus relieves, las pinturas antiguas y, especial- soportar la desgracia como lo hace este gran varón.
mente, los bustos antiguos. El bello Caracala de la Galería Real de La expresión de un alma tan grande sobrepasa las creaciones de la
Antigüedades de Dresden puede atestiguarlo. bella naturaleza: el artista tenía que sentir en sí mismo la fortaleza del
En los tiempos modernos se lleva un vestido sobre otro y, en espíritu que imbuía en su mármol. Grecia tenía artistas y sabios en una
ocasiones, vestimentas muy pesadas, que no pueden caer en pliegues sola persona, y más de un Metrodoro. * La sabiduría daba la mano al
tan suaves y fluidos como las de los antiguos. Esto, en consecuencia, arte insuflando en sus figuras almas más allá de lo común.
dio ocasión a nueva manier de tratar las grandes superficies de las Con las ropas que el artista tendría que haber dado a Laocoonte en
vestimentas, en la cual los maestros modernos pueden mostrar su su calidad de sacerdote, habríamos sentido tan sólo la mitad de su
ciencia no menos que de la manera habitual entre los antiguos. dolor. Bernini creía incluso descubrir el inicio del efecto del veneno de
Carlo Maratta* y Francesco Solimena* pueden considerarse a este la serpiente en el entumecimiento de una pierna de Laocoonte.
respecto los más grandes. La nueva Escuela Veneciana, * buscando ir Todas las acciones y posiciones de las figuras griegas que no
aún más lejos, ha exagerado esta manier y, en la medida en que no quedan englobadas bajo este carácter de la sabiduría, sino que son
persigue sino grandes superficies, sus vestidos son, por ello, rígidos excesivamente ígneas y salvajes, caen en el error que los artistas
como el metal. antiguos denominaban paren tirso. *
La característica universal que otorga la primacía a las obras Cuanto más tranquila es la postura del cuerpo, tanto más adecuada
maestras de los griegos es, al fin y al cabo, una noble simplicidad y una resulta para expresar el verdadero carácter del alma: en todas las
callada grandeza, * tanto en la posición como en la expresión. Así posiciones que se apartan en exceso del estado de tranquilidad, el alma
como la profundidad del mar siempre permanece en calma por mucho no se encuentra en el estado que le es más propio, sino en un estado
que la superficie se enfurezca, del mismo modo la expresión de las violento y forzado. El alma se torna más reconocible y más
figuras de los griegos muestra, aun en medio de las pasiones, un alma característica en las pasiones intensas, pero es grande y noble en el
grande y sosegada. estado de unidad, en el estado de tranquilidad. Haber representado en
Este alma se muestra en el rostro, y no sólo en él, de Laocoonte, el Laocoonte tan sólo el dolor, habría sido paren tirso; por ello, para
incluso en medio del sufrimiento más extremo. El dolor que se des- unificar lo característico y lo noble del alma, el artista le confirió una
cubre en todos los músculos y tendones del cuerpo y que, sin tomar en acción que aun en el dolor era la más próxima al estado de
consideración el rostro y otras partes, casi cree sentir uno mismo en el tranquilidad. Pero en esta tranquilidad el alma debe quedar
vientre contraído dolorosamente, este dolor, digo, se exterioriza sin caracterizada mediante rasgos suyos y de ninguna otra alma, para así
embargo sin ningún furor ni en el rostro ni en la actitud en su conjunto. representarla tranquila pero a la vez activa, queda pero no indiferente o
No eleva ningún grito terrible, como Virgilio canta de su Laocoonte:* adormecida. *
la apertura de la boca no lo permite; es más bien un gemido angustioso La verdadera contrapartida y el fin máximamente opuesto al
y acongojado, como Sadoleto* lo describe. El dolor del cuerpo y la indicado vienen dados por el gusto más común entre los artistas
grandeza del alma se reparten por toda la estructura de la figura con actuales, particularmente los principiantes. No merece su aprobación
idéntica fuerza y, por así decirlo, quedan equilibrados. Laocoonte sino el dominio de las posiciones y acciones inhabituales, a las que
sufre, pero sufre como el Fíloctetes* de acompaña un fuego procaz, que ellos dicen llevado a cabo con espíritu,
con franchezza, * por expresarlo con sus palabras. El más querido de sus
conceptos es el de contrapost, * que para ellos es el
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compendio de todas las propiedades que suponen propias de ,una obra dicha, ya a una edad en la que las almas comunes y semiformadas no
de arte perfecta. Exigen un alma en sus figuras que, como un cometa, perciben la verdadera grandeza.
se desvía de su órbita; desean ver en toda figura un Ayax y un Uno debe acercarse a sus obras con ojos que han aprendido a
Capaneo. * percibir estas bellezas, con este verdadero gusto de la Antigüedad.
Al igual que los seres humanos, las bellas artes tienen su juventud, Entonces, la tranquilidad y quietud de las figuras principales del Atila
y su comienzo parece haber sido como el de los artistas, a los que al de Rafael,* que a muchos parecen sin vida, nos resultarán plenamente
principio sólo agrada lo grandilocuente y sorprendente. La musa significativas y sublimes. El obispo de Roma, que evita el propósito
trágica de Esquilo tenía esta forma, y por culpa de las hipérboles su del rey de los hunos de abalanzarse contra Roma, no aparece con el
Agamenón es más oscuro que todo lo que escribió Heráclito. Tal vez porte y ademanes de un orador, sino como un varón venerable que
los primeros pintores griegos pintaron como poetizó su primer gran acalla un tumulto con su mera presencia; como aquel que nos describe
trágico. * Virgilio:
Todas las acciones humanas comienzan con lo vehemente y efí-
mero; lo asentado y fundamental se sigue en último lugar. Pero esto Tum pietate gravem ac meritis si forte virum quem
último necesita tiempo para producir admiración, siendo propio tan Conspexére, silent arrectisque auribus adstant.* Aen.L
sólo de los grandes maestros, mientras que las pasiones violentas son
incluso ventajosas para sus discípulos. con un rostro pleno de divina confianza frente a los ojos del feroz
Los que saben de arte conocen las dificultades de esta imitación sanguinario. Los dos apóstoles no flotan en las nubes como ángeles
sólo en apariencia fácil: exterminadores, sino, si se me permite comparar lo sagrado con lo
profano, como el Júpiter de Hornero," que con el guiño de sus pár-
ut sibi quivis* pados estremecía el Olimpo.
Speret idem, sudet multum frustraque laboret En su famosa representación precisamente de esta historia en un
Ausus idem Hor. bajorrelieve que se encuentra en un altar de la iglesia de San Pedro en
Roma, Algardi* no dio, o no supo dar, a las figuras de sus dos
El gran dibujante La Fage* no pudo alcanzar el gusto de los antiguos. apóstoles la efectiva quietud de su gran predecesor. Allí aparecen
En sus obras todo está en movimiento y cuando uno las contempla como los enviados del Señor de los Ejércitos, aquí como guerreros
queda dividido y disperso como en una reunión donde todos quisieran mortales con armas humanas.
hablar al mismo tiempo. ¡Qué pocos entendidos ha encontrado el bello San Miguel de
La noble simplicidad y la callada grandeza de las estatuas griegas Guido* en la iglesia de los Capuchinos de Roma, capaces de com-
son al mismo tiempo la verdadera característica de los escritos griegos prender la magnitud de la expresión que el artista ha dado a su
1
de los mejores tiempos, * los de la escuela de Sócrates; y estas arcángel! Se da la primacía al Miguel de Conca, * porque en su rostro
cualidades constituyen la exquisita grandeza de un Rafael, a la que muestra enojo y venganza, mientras que aquél, tras haber derribado al
llegó imitando a los antiguos." enemigo de Dios y de los hombres, se cierne sobre él sin encono con
Sólo un alma tan bella como la suya, en un cuerpo tan hermoso, gesto sereno e impasible.
pudo percibir y descubrir por vez primera en los tiempos modernos el
verdadero carácter de los antiguos y, para su mayor 1. v. Wright's Travels.
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Igual de tranquilo y callado pinta el poeta inglés" al ángel ven- za de los colores; sólo el alma que el creador insufló a la obra de sus
gativo que se cierne sobre Gran Bretaña, con el que compara al héroe manos sigue vivificándola hoy en día.
de su batalla, el vencedor de Bleinheim. Todos aquellos que se acerquen a esta y otras obras de Rafael con la
La Galería Real de Pinturas de Dresden tiene ahora entre sus tesoros esperanza de encontrar las pequeñas bellezas que otorgan tanto valor a
una notable obra de la mano de Rafael, * y ciertamente de su mejor los trabajos de los pintores holandeses, la esforzada aplicación de un
época, como Vasari y otros muchos atestiguan. Una Madonna con el Netscher o un Dou, la carne marfileña de un Van der Werff,* o
Niño, con San Sixto y Santa Bárbara arrodillados a ambos lados, junto también el relamido manierismo de algunos compatriotas actuales de
con dos ángeles en primer plano. Rafael, * estos, digo, en vano buscarán al gran Rafael en Rafael.
Este cuadro era la hoja central del retablo del convento de San Sixto Tras el estudio de la bella naturaleza, del contour, de la draperie y
en Piacenza. Los amantes y los conocedores del arte iban allí para ver de la noble simplicidad y la callada grandeza en las obras de los
este Rafael, al igual que se viajaba a Tespias tan sólo para contemplar maestros griegos, sería necesario que los artistas atendieran a su
el bello Cupido de Praxíteles. * manera de trabajar, para así imitarlos más felizmente.
¡Contemplad a la Madonna con su rostro pleno de inocencia y al Es sabido que la mayor parte de las veces los griegos hacían sus
mismo tiempo con una intensidad más que femenina, en una actitud primeros modelos en cera;* los maestros modernos, por el contrario,
espiritualmente plácida, aquella tranquilidad que los antiguos hacían en vez de cera eligen arcilla o cualquier otro material maleable
que dominara en las imágenes de sus deidades! ¡Qué grande y noble es semejante: la encuentran, especialmente para expresar la carne, más
todo su contour! adecuada que la cera, que les parece en exceso pegajosa y dura.
El niño en sus brazos se eleva más allá de los niños comunes, Sin embargo, no puede decirse que el arte de moldear con arcilla
gracias a un rostro en el que parece brillar un rayo de divinidad a través húmeda fuera desconocido o inhabitual entre los griegos. Se conoce
de la inocencia de la infancia. incluso el nombre de quien hizo los primeros ensayos a este respecto.
Bajo ella, la santa se arrodilla a su lado con la silenciosa veneración Dibutades de Sición* fue el primer maestro que modeló una figura en
de su alma, pero lejos de la majestad de la figuras principales, arcilla, y Arcesilao, * el amigo del gran Lúculo, fue más famoso por su
inferioridad que el gran maestro ha compensado con el suave encanto modelos en arcilla que por sus mismas obras. Hizo para Lúculo una
de su rostro. figura en arcilla que representaba la Felicidad, por la que éste pagó
Frente a ella, el santo es un venerable anciano con rasgos que 60.000 sestercios, y el caballero Octavio dio a este mismo artista un
parecen atestiguar una juventud entregada a su Dios. talento por un mero modelo en yeso de un gran vaso, que luego quería
La veneración de Santa Bárbara por la Madonna, que las bellas realizar en oro.
manos apretadas contra el pecho hacen más sensible y más emotiva, se La arcilla sería la materia más adecuada para formar figuras si
expresa en el santo con la ayuda del movimiento de una de sus manos. mantuviera su humedad. Pero como la pierde cuando se seca y es
Precisamente esta acción nos pinta el arrebato del santo, a la que el cocida, entonces, por tanto, sus partes más firmes se compactan más
artista, para alcanzar una mayor variedad, ha conferido sabiamente más estrechamente, la figura pierda masa y ocupa un espacio menor. Si la
la fuerza masculina que el recato femenino. figura sufriera esta disminución en la misma medida en todos sus
Ciertamente, el paso del tiempo ha arrebatado a este cuadro mucho puntos y partes, las proporciones, aunque disminuidas, seguirían
de su aparente brillo y ha desvanecido parcialmente la fuer- siendo las mismas. Sin embargo, sus partes más pequeñas se
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torno externo ni aquel otro que, a menudo indicado tan sólo como con
secan más rápidamente que las más grandes, y el cuerpo de la figura,
un hálito, señala la partes internas del modelo o aquéllas que apuntan
en tanto que parte mayor, lo hace en último lugar. En consecuencia, en
al centro.
el mismo tiempo aquellas partes pierden más masa que ésta.
A ello se añade que en un trabajo que se dilata en el tiempo, que el
La cera no presenta este inconveniente: nada desaparece de ella, y
escultor no puede llevar a cabo por si solo, tiene que servirse de la
puede dársele por otro camino el lustre de la carne, que en el pousster*
mano de sus ayudantes, que no siempre consiguen alcanzar sus
sólo se consigue con gran fatiga.
intenciones. Sucede, pues, que una vez hecho el vaciado el error
Se hace su modelo de arcilla, se lo modela en yeso y luego se vacía
resulta irreparable, porque según esta técnica es imposible determinar
en cera.
hasta dónde hay que profundizar.
Sin embargo, la auténtica manera con la que los griegos realizaban
En general, hay que señalar a este respecto que el escultor que ya
sus modelos" en mármol no parece haber sido ésta, habitual entre la
en las primeras manipulaciones de su piedra la orada hasta la pro-
mayoría de los maestros modernos. En el mármol de los antiguos se
fundidad que habrá de alcanzar, sin tantear paulatinamente de modo
descubre por todas partes la seguridad y confianza del maestro, y ni
tal que sólo al final obtenga el vaciado deseado, que este escultor,
siquiera en las obras de menor categoría podrá probarse con facilidad
digo, nunca podrá corregir los fallos de su obra.
que se ha profundizado en exceso por algún lado. Esta mano ajustada y
Esta forma de trabajar presenta además el defecto fundamental de
acertada de los griegos necesariamente tuvo que haber sido conducida
que las líneas trazadas sobre la piedra se borran constantemente,
por reglas más precisas y fiables de las que son usuales entre nosotros.
teniendo que ser completadas y trazadas de nuevo muy a menudo,
El camino habitual de nuestros escultores es el siguiente: tras haber
cuidando de no desviarse.
estudiado a fondo sus modelos y haberlos modelado de la mejor
La inseguridad de esta técnica obligó a los artistas a buscar un
manera, trazan líneas perpendiculares y horizontales que se
camino más seguro, y el descubierto por la Academia de Francia en
entrecruzan. Como cuando se reduce o se aumenta una pintura
Roma, utilizado al principio para copiar estatuas antiguas, fue
mediante una retícula, proceden, pues, llevando a la piedra tantas
adoptado por muchos, también para trabajar a partir de modelos.
líneas que se entrecruzan como se hayan trazado.
Sobre la estatua que se desea copiar, de acuerdo con sus propor-
Así pues, la superficie de cada pequeño cuadrado del modelo se
ciones, se fija un cuadrado del que se dejan caer hilos de plomo
corresponde con la superficie de cada gran cuadrado de la piedra.
equidistantes. Mediante estos hilos se señalan los puntos más externos
Ahora bien, como de esta manera no puede determinarse el volumen
de la figura con mayor claridad de lo que era posible en la técnica
del cuerpo y, en consecuencia, tampoco cabe describir con precisión el
anterior mediante líneas trazadas sobre la superficie, donde todo punto
grado exacto de las crestas y valles del modelo, el artista podrá dar a su
es el más externo; los hilos también dan al artista una medida más
futura figura una cierta relación con el modelo, pero como tiene que
perceptible de las crestas y valles más pronunciados, en función del
fiarse de la perspicacia de sus ojos dudará constantemente de sí, de
grado de su alejamiento respecto de las partes que cubren, y de este
acuerdo con su proyecto, ha vaciado muy superficialmente o en
modo puede el artista trabajar con mayor desenvoltura.
exceso, si ha quitado poca o demasiada materia.
Pero puesto que no cabe determinar exactamente el movimiento de
El artista no puede determinar con tales líneas -mediante las cuales
una línea curva mediante una única línea recta, por este cami-
pudiera proyectar sin engaño y sin la más mínima desviación
precisamente el mismo contorno sobre su piedra- ni el con-
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no los contornos de la figura quedan indicados de manera muy dudosa, Miguel Ángel tomaba un recipiente con agua en el que introducía
ya la mínima desviación respecto de su superficie principal el artista su modelo de cera o de un material duro, elevándolo poco a poco hasta
quedará de inmediato sin guía ni ayuda. la superficie del agua. Así pues, en primer lugar se descubrían las
Se comprende igualmente que de esta manera también sea difícil partes más salientes y las más profundas quedaban cubiertas, hasta que
encontrar la verdadera proporción entre las figuras. Aunque se la finalmente todo el modelo quedaba fuera del agua. De esta manera
busca mediante las líneas horizontales que cortan los hilos de plomo, -dice Vasari- trabajaba Miguel Ángel su mármol: en primer lugar
las luces y sombras que nacen de los cuadrados que forman las líneas bosquejaba las partes salientes y poco a poco las más profundas.
que trazan los hilos de plomo, al no ceñirse a la figura, se nos Parece que Vasari no tuvo una idea del todo clara de la manera de
manifiestan con un ángulo tanto más marcado y, en consecuencia, trabajar de su amigo, o bien la inexactitud de su exposición obliga a
parecerán más grandes cuanto más altos o más bajos se encuentren tener que imaginársela de manera algo diferente de lo que él informa.
respecto de nuestro punto de vista. La forma del recipiente con agua no está precisada con suficiente
Para copiar estatuas antiguas, con las que no puede procederse a exactitud. La progresiva elevación del modelo desde el fondo hasta
discreción, los hilos de plomo conservan su valor incluso hoy en día, y sacarlo del agua sería muy trabajosa, y presupone mucho más de lo que
este trabajo todavía no ha podido hacerse de manera más sencilla y el biógrafo del artista ha querido que sepamos.
segura; pero en los trabajos con modelo, por los motivos indicados, Se puede estar seguro de que Miguel Ángel estudió a fondo este
este camino no es suficientemente preciso. camino descubierto por él, acomodándoselo. Con toda probabilidad,
Miguel Ángel tomó un camino desconocido antes de él y, dado que procedió de la siguiente manera:
los escultores lo veneran como su gran maestro, es sorprendente que, El artista tomaba un recipiente con la forma de la masa de su figura,
quizá, ninguno de ellos lo haya seguido. que podemos suponer rectangular. Trazaba entonces ciertas divisiones
Este Fidias de los tiempos modernos, el mayor tras los griegos, sobre la superficie de los lados de esta caja cuadrangular que luego
tomó, como puede suponerse, la verdadera huella de sus grandes trasladaba a su piedra a escala mayor, y, además, señalaba los lados
maestros; al menos, no se conoce ningún otro medio para llevar a la internos de la misma caja, desde arriba hasta el fondo, con ciertas
figura y expresar en ella todas las posibles partes y bellezas sensibles gradaciones. Colocaba entonces en la caja su modelo de un material
del modelo. pesado o, si era de cera, lo sujetaba en el fondo. A continuación,
Vasari describió esta invención de manera algo incompleta,' según revestía la caja con una retícula según las divisiones hechas, a partir de
su informe el concepto es como sigue: las cuales trazaba líneas sobre su piedra y dibujaba su figura, cabe
suponer, inmediatamente después. Vertía agua sobre el modelo hasta
que alcanzaba la parte más saliente del punto más extremo y, tras
1. Vasari Vite de' Pittori, Scult. & Archit. Edit. 1568. Parto III. p. 776. -"quattro
prigioni bozzati, che possano insegnare ií cauare de' marmi le figure con un modo sicuro señalar la parte de su figura que tenía que ser realzada, dejaba salir una
da non istorpiare i sassi, che il modo e questo, che s' e' si pigliassi una figura di cera o d' cierta cantidad de agua para hacer que sobresaliera un tanto la parte
altra materia dura, e si mettesi á giacere in una conca d' acqua, la quale acqua essendo realzada del modelo, comenzando entonces a trabajar aquellas partes
per la sua natura nella sua sommita piana e pari, alzando la detta figura ií poco ií poco
del pari, cosi vengono ií scoprirsi prima le parti piu rileuate e ií nascondersi i fondi, cioe según la medida de la escala, según iban apareciendo. Si al mismo
le parti piu basse della figura, tanto che nel fine ella cosi viene scoperta tutta. Nel tiempo se había hecho visible
medesimo modo si debbono cauare con lo scarpello la figure de' marmi, prima scoprendo
le parti piu rileuate, e di mano in mano le piu basse, il quale modo si vede osservato da
Michel Agnolo ne' sopra detti prigioni, il quai Sua Eccellenza vuole, che servino per
esempio de suoi Accademici".
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otra parte de su modelo, la trabajaba tan pronto como quedaba al agua, que también se metía en las partes más imperceptibles, perfilaba
descubierto, y así procedía con todas las partes salientes. de la forma más nítida el movimiento de estas partes, describiéndole
Dejaba salir más agua, hasta que también quedaban fuera las partes su contour con la línea más exacta.
más profundas. Las gradaciones de la caja le mostraban en todo Este camino no impide dar al modelo todas las posiciones posibles.
momento la altura del agua derramada y la superficie del agua le Puesto de perfil, mostrará al artista por completo lo que había pasado
indicaba la línea extrema de la profundidad. Un número igual de por alto. También le mostrará el con tour más externo de las partes
grados sobre su piedra constituía su verdadera medida. salientes y las internas, así como toda la sección.
El agua no sólo le describía los valles y crestas, sino también el Todo ello, así como la expectativa de una buena realización del
contour de su modelo; y el espacio comprendido entre las caras trabajo, presupone un modelo realizado con un arte formado según el
internas de la caja y el perfil marcado por la línea del agua, cuyo verdadero gusto de la Antigüedad.
tamaño lo daban los grados de las otras dos caras, le indicaba en cada Esta es la vía por la que Miguel Ángel alcanzó la inmortalidad.
punto cuánto podía rebajar su piedra. Su celebridad y sus honorarios le permitían el ocio necesario para
Su obra obtenía así la forma primera, pero correcta. La superficie trabajar con tal esmero.
del agua le describía una línea de la que eran partes los puntos Un artista de nuestro tiempo al que la naturaleza y la diligencia han
extremos de las crestas. Según salía agua del recipiente, la línea des- otorgado talento y que encuentra verdad y corrección en esta manera
cendía horizontalmente en la misma medida, y el artista seguía este de trabajar, se ve sin embargo obligado a trabajar más por el pan que
movimiento con su escalpelo hasta allí donde el agua le indicaba el por la gloria. Permanecerá, por tanto, en el camino que le es habitual,
punto más profundo de las partes salientes, que se confundía con las donde cree mostrar mayor habilidad, y continuará tomando como regla
superficies. Así pues, a cada grado reducido en la caja de su modelo el criterio ocular obtenido tras largo y penoso ejercicio.
adelantaba en su figura un grado proporcionalmente mayor, y de este Pero, al fin y al cabo, el criterio ocular, que habrá de guiarle prin-
modo la línea de agua le conducía en su trabajo hasta el contour más cipalmente, se torna decisivo por el camino de la práctica, que en parte
externo, hasta que finalmente el modelo quedaba fuera del agua. es muy incierto: ¿hasta qué punto no será acertado y fiable tal criterio
Su figura exigía la forma bella. Vertía de nuevo agua sobre su si el artista se ha formado desde joven en reglas infalibles?
modelo hasta una altura conveniente, y entonces contaba los grados de Si en sus primeros trabajos con arcilla o con otro material los
la caja hasta la línea que describía el agua, averiguando de este modo artistas principiantes fueran instruidos en esta segura manera de
la altura de las partes salientes. Sobre precisamente las mismas partes trabajar que Miguel Ángel encontró tras largas investigaciones,
salientes de su figura colocaba su escuadra totalmente horizontal y, podrían entonces esperar llegar tan cerca de los griegos como él.
partiendo de su línea más inferior, tomaba la medida hasta el valle. Si Todo lo que puede decirse en alabanza de la escultura griega,
encontraba el mismo número de grados reducidos y aumentados, valdría también con toda probabilidad para su pintura. Pero el tiempo
conseguía una especie de cómputo geométrico del volumen, y la furia de los hombres nos han robado el medio para expresarnos al
demostrando así que había procedido correctamente. respecto categóricamente.
Repitiendo el trabajo buscaba llevar a su figura la presión y el A los pintores griegos se les reconoce dibujo y expresión, y esto es
movimiento de los músculos y tendones de su modelo, el impulso de todo: se les niega la perspectiva, la composición y el colorido. Este
sus restantes pequeñas partes, así como lo más sutil del arte. El juicio se funda en parte en trabajos en bajorrelieve, en parte en
104 J. J. WINCK EL M A NN REFL E XIO NE S SO BR E LA IMI TA CIÓN D E LA S OBR AS GRIE GAS 105

en los escultores griegos, también tuvo que haber sido propia de sus
las pinturas de los antiguos (no puede decirse de los griegos) des-
buenos pintores.
cubiertas en y alrededor de Roma, en las bóvedas subterráneas de los
Estas partes del arte* que adeudamos a los pintores antiguos dejan aún
palacios de Mecenas, Tito, Trajano y los Antoninos, de las cuales no
se han conservado completas hasta hoy en día más allá de treinta, y a los pintores modernos muchos méritos en lo que hace a ellas.
algunas tan sólo como mosaicos. La preeminencia les pertenece sin discusión alguna en la perspectiva
En su obra sobre la pintura antigua, Turnbull 1* ha incluido una y, a pesar de todas las eruditas defensas de los antiguos, en esta ciencia la
selección de las piezas más conocidas, dibujadas por Camillo Paderni* superioridad queda del lado de los modernos. Por mucho que Equión*
y grabadas por Mynde,* lo único que da valor al magnífico y también las haya dominado, los antiguos sólo conocían parcial e
malutilizado papel de su libro. Entre ellas, hay dos cuyos originales imperfectamente las leyes de la composición y del ordonnance, como
pueden verse en el gabinete de famoso médico Richard Meads, * en ponen de manifiesto los bajorrelieves de los tiempos en los que las artes
Londres. griegas florecieron en Roma.
Que Poussin estudió la así llamada Boda AIdrovandina, * que aún En lo que hace al colorido, las noticias que aparecen en los escritos de
hayan dibujos que Anibal Caraccio* hizo siguiendo el presunto Marco los antiguos así como los restos conservados, también parecen hablar a
CorioIano, y que se haya querido encontrar una gran similitud entre las favor de los artistas modernos.
cabezas de las obras de Guido Reni y las del conocido mosaico del Distintos tipos de representaciones pictóricas han alcanzado en los
Rapto de Europa, ya ha sido notado por otros tiempos modernos un grado más alto de perfección. Según toda evidencia,
Si tales pinturas al fresco permitieran ofrecer un juicio fundado nuestros pintores han superado a los antiguos en las pinturas de animales y
sobre la pintura de los antiguos, en tal caso, partiendo de los restos de
en los paisajes. Los más bellos tipos de animales de otras latitudes parecen
este tipo, a estos artistas también habría que discutirles el dibujo y la
haberles sido desconocidos, si es que cabe concluir a partir de casos
expresión.
particulares, como el caballo de Marco Aurelio, los dos caballos de Monte
Se afirma que las pinturas de las paredes con figuras a tamaño
Cavallo, o incluso los caballos, pretendidamente de Lisipo, de la puerta de
natural, que fueron trasladadas junto con los muros del teatro de
Herculano, nos dan una mala idea de ella. El Teseo vencedor del la iglesia de San Marcos en Venecia, el Toro Farnesio y los restantes
Minotauro con jóvenes atenienses besándole las manos y abrazándole animales de este gruppo.
las rodillas, la Flora en compañía de Hércules y un fauno, el supuesto Cabe mencionar aquí de paso que los antiguos no observaron en sus
juicio del decenviro Apio Claudia: todo ello, según el testimonio caballos el movimiento diametral de las patas, como cabe ver en los caballos
ocular de un artista, ha sido dibujado en parte de manera mediocre y en de Venecia y en los representados en monedas antiguas. Algunos modernos
parte erróneamente. En la mayoría de las cabezas, se asegura, no hay los han seguido a este respecto por ignorancia e incluso han sido defendidos.
ninguna expresión, y en la de Apio Claudio, incluso, tampoco hay Nuestros paisajes, especialmente de los pintores holandeses, tienen
rasgos característicos de calidad. que agradecer su belleza principalmente a la pintura al óleo, gracias a la
Pero precisamente esto demuestra que se trata de pinturas de la cual los colores han alcanzado más fuerza, viveza y relieve, y la misma
mano de maestros muy mediocres, pues la ciencia de las bellas pro- naturaleza, bajo un cielo espeso y húmedo, no ha contribuido menos al
porciones, del contorno de los cuerpos y de la expresión, presente acrecentamiento de este género del arte.

1. Turnbull's Treatise on ancient Painting, 1740. fol.


106 J. J. WINC K EL M A NN
RE F LE XIO N ES S OB R E LA I MIT ACI ÓN D E LA S O BR AS GRIE GA S 107

Los méritos indicados, así como algunos otros, de los pintores


hasta qué punto le satisfacerán la Iconología de Ripa" o los Jeroglíficos
modernos frente a los antiguos merecen una demostración más
de los pueblos antiguos de van Hooghe.*
profunda de la emprendida hasta la fecha.
Esta es la causa por la que los grandes pintores sólo han escogido
Para el desarrollo ulterior del arte es necesario dar un paso aún
asuntos conocidos. En lugar de haber representado los hechos y
mayor. El artista que comienza a apartarse del camino común, o que se
acontecimientos más famosos de la casa Farnesia en la Galería Far-
ha apartado realmente, quiere atreverse a dar este paso; pero su pie está
nesia * como podría haberlo hecho un poeta alegórico mediante
en el lugar más escarpado del arte, donde se ve sin ayuda.
símbolos universales e imágenes sensibles, Anibal Caraccio mostró
Las historias de santos, las fábulas y las metamorfosis* constituyen
aquí todo su talento tan sólo con fábulas conocidas.
el asunto eterno y casi único de los pintores modernos desde hace
Sin lugar a dudas, la Galería Real de Pinturas de Dresden contiene
siglos: se los ha transformado y variado artísticamente de mil maneras,
un tesoro de obras de los mayores maestros, que tal vez supere a todas
al punto de que finalmente producen saciedad y fastidio en los
las pinacotecas del mundo, y Su Majestad, sapientísimo conocedor de
conocedores del arte y en los entendidos.
las bellas artes, tras una estricta elección, ha buscado tan sólo lo más
El artista que posee alma capaz de pensar la emplea inútil y
perfecto de cada género. ¡Pero qué pocas obras históricas se encuen-
ociosamente en una Dafne y en un Apolo, en un rapto de Proserpina, de
tran en este tesoro real! Y pinturas alegóricas, poéticas, aún menos.
Europa o en otros asuntos semejantes. Quiere mostrarse como un poeta
El gran Rubens es el más excelente entre los grandes pintores que
y pintar figuras mediante imágenes, esto es, alegóricamente.*
ha osado arriesgarse -cual sublime poeta- por el camino no pisado de
La pintura también abarca cosas que no son sensibles; éstas
esta pintura en obras de grandes dimensiones. La Galería de
constituyen su más alta meta, y los griegos se esforzaron en alcanzarla,
Luxemburgo," su obra más grande, es conocida por todo el mundo
como atestiguan los escritos de los antiguos. Arístides, * un pintor que
gracias a la mano de los más diestros grabadores.
exponía el alma, incluso pudo expresar -se dice- el carácter de todo un
Tras él, más recientemente, no se ha emprendido ni realizado una
pueblo. Pintó a los atenienses como eran: piadosos y a la vez feroces,
obra más destacada de estas características que la cúpula de la
atolondrados y al mismo tiempo obstinados, valientes y cobardes. Si tal
Biblioteca Imperial de Viena, pintada por Daniel Gran* y grabada al
representación parece posible, lo es tan sólo gracias al camino de la
cobre por Sedelmayern. La Apoteosis de Hércules, alusión al cardenal
alegoría, mediante imágenes que expresen conceptos universales.
Hércules de Fleuri, * pintada en Versalles por Le Moine, * de la que
El artista se encuentra aquí como en un desierto. Las lenguas de los
Francia se vanagloria como si fuera la mayor composición en el
salvajes indios, que tienen gran escasez de tales conceptos y que no
mundo, es, comparada con la docta e inspirada pintura del artista
contienen ninguna palabra que pudiera designar cognoscibilidad,
alemán, una alegoría común y de miras estrechas: es como un
espacio, duración, etc., no carecen menos de tales signos de lo que
panegírico donde los pensamientos más poderosos se refieren a los
carece la pintura de nuestros tiempos. El pintor cuyo pensamiento
nombres del calendario. Este era el lugar para haber hecho algo
rebasa su paleta, desearía tener una docta provisión donde poder ir y
grande, y es sorprendente, en efecto, que no haya sido así. Pero al
poder tomar signos significativos y hechos sensibles de cosas que no
mismo tiempo también se comprende ·dónde ha fallado el pintor, dado
son sensibles. Todavía no existe una obra completa de este tipo: los
que la divinización de un ministro tenía que decorar el lugar más
intentos habidos hasta la fecha no son suficientemente numerosos y no
distinguido del palacio real.
alcanzan este gran propósito. El artista sabrá
El artista necesita una obra que, a partir de toda la mitología, a
partir de los mejor poetas antiguos y modernos, a partir de la ocul-
108 J. J. WINCK EL M A NN
REF LE XI ON ES S OB RE L A IMIT ACIÓ N DE L AS OB RA S GRIE GA S 109

ta sabiduría cósmica de muchos pueblos, a partir de los monumentos


Esta es la causa por la que el artista al que se deja a su albedrío, por
de la Antigüedad en gemas, monedas y enseres, contenga aquellas
carencia de imágenes alegóricas, elige a menudo motivos más
figuras e imágenes sensibles por medio de las cuales se configuran
poéticamente conceptos universales. Habría que reducir todo este rico indicados para la sátira que para la honra de aquel al que dedica su arte;
material a categorías cómodas y disponerlo para la instrucción del y tal vez para ponerse a salvo de esta circunstancia, por pura
artista" mediante aplicaciones e interpretaciones específicas de los precaución, se exige del pintor imágenes que nada signifiquen.
posibles casos particulares. A menudo cuesta trabajo encontrarlas, y finalmente,
De esta manera se abriría al mismo tiempo un gran campo para la
- velut aegri somnia, vanae
imitación de los antiguos y para dotar a nuestras obras del gusto
Fingentur species" Hor.
sublime de la Antigüedad.
El buen gusto en la ornamentación actual que, desde la época en la
que Vitruvio lanzaba amargas quejas sobre su corrupción,* en los Se priva de este modo a la pintura de aquello que constituye su
tiempos más recientes aún se ha corrompido más, en parte por las mayor gloria, a saber, la representación de cosas invisibles," pasadas y
grotescas extravagancias puestas de moda por Morto,* un pintor futuras.
natural de Feltro, en parte por las insignificantes pinturas que cuelgan Pero aquellas pinturas que podrían ser significativas en este o aquel
en nuestras habitaciones, ese buen gusto podría al mismo tiempo lugar, malogran su efecto por el lugar indiferente o inadecuado que se
purificarse por medio de un estudio más fundamental de la alegoría y les asigna.
alcanzar verdad e inteligencia. El propietario de un nuevo edificio
Nuestras volutas y nuestra queridísima rocalla,* sin las cuales hoy
Divis agris, dives positis in foenere nummis."
en día no puede haber ornamento alguno, en ocasiones no poseen más
naturaleza que los candelabros de Vitruvio,* que portaban pequeños Hor.
castillos y palacios. La alegoría podría enseñarnos cómo hacer más
adecuados, incluso los más pequeños adornos, al lugar donde se tal vez hará colocar sobre las altas puertas de sus habitaciones y salas
encuentran. pequeñas imágenes que chocan contra el nivel de visión y contra los
fundamentos de la perspectiva. Aquí me refiero a aquellas piezas que
Reddere personae scit conuenientia cuique." constituyen una parte de los ornamentos fijos e inamovibles, no a
aquéllas que en una colección se ordenan simétricamente.
Hor.
En ocasiones, la elección de los adornos en la arquitectura no tiene
más fundamento: las armaduras y los trofeos son tan impropios en un
Las pinturas en los techos y sobre las puertas están la mayor parte
pabellón de caza,* como Ganímedes y el águila o Júpiter y Leda en los
de las veces donde están para tapar su emplazamiento y cubrir lugares
relieves de las puertas de bronce* en la entrada de la iglesia de San
vacíos que no pueden llenarse únicamente con dorados. No sólo
Pedro en Roma.
carecen de cualquier relación con la condición y circunstancias del
Todas las artes tienen una doble finalidad: deben agradar y al
propietario, sino que a menudo son incluso perjudiciales para él.
mismo tiempo instruir,* y muchos de los más grandes paisajistas han
Así pues, el horror ante el espacio vacío llena las paredes, y pin-
creído por ello que sólo satisfacían a medias su arte si dejaban sus
turas vacías de pensamientos tienen que reemplazar el vacío.
paisajes sin ninguna figura.
110 J. J. WINCKELMANN

El pincel del artista debe estar mojado en el entendimiento, como


alguien dijo del estilete de Aristóteles: debe permitir pensar más de lo
que muestra a los ojos, y esto lo alcanza el artista cuando aprende a no
ocultar sus pensamientos bajo alegorías, sino a revestirlos con ellas. Si
posee un asunto -Io haya escogido él mismo o le haya sido dado, que ha
sido hecho o que tiene que hacerse poéticamente- su arte lo enardecerá
y despertará en él el fuego que Prometeo* robó a los dioses. El
entendido tendrá que pensar y el mero aficionado aprenderá.
~

NOTAS A LA EDICIÓN

Las presentes notas, en su mayor parte, son una adaptación a las


características de esta edición de las que aparecen en Johann Joachim
Winckelmann, Kleine Schriften. Vorreden. Entwürfe. Herausgegeben
von Walter Rehm. Berlin: Walter de Gruyter, pp. 324- 409, así como
de las que pueden leerse en la edición de los escritos
winckelmannianos sobre la imitación publicados por Gottfried Boehm
y Norbert Miller (Hrsg.), Frühklassizismus. Bibliothek der Kunstliteratur
2, «Bibliothek Deutscher Klassiker», Frankfurt am Main 1995, pp.
428-485 (Hrsg. von Helmut Pfotenhauer unter Mitarbeit von Thomas
Franke). También me ha resultado muy útil la edición que Michele
Cometa ha realizado de los Gedancken... y de la Erlauterung...: Johann
Joachim Winckelmann, Pensieri sull'Imitazione. A cura di Michele
Cometa. Palermo: Aesthetica edizioni, 1992. El lector que desee una
información exhaustiva deberá acudir a estas modélicas ediciones. A la
hora de localizar a los personajes de la Antigüedad he acudido a la
Pauly- Wissowa Realencyclopadie der klassischen Altertumwissenschaft.

[197]
NOTAS A LAS REFLEXIONES

Pág.7S

l. Vox exemplaria graeca: Horado, Arte poética, 268-269: «Vosotros /


manejad modelos griegos de noche y manejadlos de día» (trad.
Horado Silvestre).
2. Federico Augusto: Augusto III (1696-1763), Federico Augusto 11
en calidad de rey de Polonia y príncipe elector de Sajonia (desde
1733); hijo y sucesor de Augusto el Fuerte.

Pág. 77

l. El buen gusto: Más adelante, W. lo definirá como la capacidad de


percibir y discernir correctamente (o sea, enjuiciar) lo bello en el arte y
la literatura.
2. cielo griego: se refiere a las muy favorables condiciones
geográficas y climáticas que se daban en Grecia. En la Historia, W. se
aleja decididamente de todo determinismo naturalista: «En todo caso
debemos ir con la mayor cautela en nuestros juicios sobre los talentos
naturales de los pueblos en general y sobre los de los griegos en
particular, y está muy lejos de nosotros el limitarnos a la influencia del
clima, pues también debemos considerar la educación y la forma de
gobierno. Las causas morales y físicas contribuyen a ello en gran
parte; las circunstancias exteriores obran sobre nosotros tanto como el
aire que nos circunda. La costumbre ejerce tal influjo en nuestro
espíritu como trabas a nuestro cuerpo, e impone sus leyes incluso a los
órganos que la Naturaleza nos ha dado; por esto un oído habituado a la
música francesa no se sentirá conmovido por la más bella composición
musical italiana» (1,1, § 66).
3. Minerva: en la correspondiente nota a pie de página se alude a
Timeo24 c.
4. las dos artes: pintura y escultura.
5.Corregio: Antonio Allegri, llamado «Corregio» (¿?-lS34), cuya
obra era muy admirada en el siglo XVIII. Richardson, por ejemplo,
alaba lo «sublime» de su arte (Traité..., vol. I1, pp. 291-292) Y lo sitúa
incluso por encima de Rafael (pp. 289 Y 293). En la Galería Real de
Dresden habían

[199]
200 NOTAS A LA EDICIÓN NOTAS A LAS REFLEXIONES 20I

cuadros suyos, algunos de los cuales describe W. en Beschreibung der del amor; me parece verla cuando se vio obligada a quitarse por
Gemalde ... , p. 2. primera vez sus vestidos y presentarse así, desnuda, ante los ojos del
6. gran Augusto: Federico Augusto 1 (1670-1733). Príncipe elector de artista extasiado» (1, IV, n, § 207).
Sajonia (1694-1733), Augusto II (llamado «el Fuerte») en calidad de rey de 10. Dioscórides: tallador de gemas de la época de Augusto.
Polonia (desde 1697).
7. el Tito alemán: Augusto II (1696-1763). Pág. 79

Pág. 78 1. Luciano: Sobre cómo escribir historia 27 y 65, 31.


1. para ser, si es posible, inimitables: W. se apoya en La Bruyere: «On ne 2.al Júpiter de Fidias: Fidias es el más célebre escultor ateniense
sauroit en écrivant recontrer le parfait, et s'il peut, surpasser les Anciens, que del siglo V a.c. De su colosal estatua de Júpiter dan noticia Plinio
par le leur imitation» (Les caracteres, en Oeuvres completes. Paris: (Historia Natural 36, 18) y Pausanias (Descripción de Grecia 5,11).
Gallimard, 1951, p. 58). 3. bellezas ideales: «Así pues, diremos que la combinación de
2. Nicómaco: junto a Apeles, el más célebre pintor griego del siglo IV diversas partes para formar un todo que no existe realmente como
a.C. La cita es de Eliano, Historia varia, 14, 47. Cfr. tb. Estobeo, Antología conjunto es lo que se llama ideal; y añadiremos aún que una imagen
n, 446, 7 (ed. Wachsmuth). puede ser ideal sin ser bella. Por ejemplo, la forma de las figuras
3. Zeuxis: pintor griego de la época clásica. egipcias, en las que no se hallan indicados ni músculos, ni nervios, ni
4.Miguel Ángel, Rafael y Poussin: estos tres artistas representan para W. venas, es ideal, pero no es bella. Del mismo modo, tampoco se puede
el momento cumbre del clasicismo en pintura y escultura, especialmente el pretender que haya belleza en el vestido de las figuras femeninas
egipcias, que, como no es en cierto modo más que pensamiento o
segundo, que W. consideraba heredero directo de la pintura antigua.
intención, es ideal, pero tampoco podría pasar por bello» (Historia 1,
5. enviaba jóvenes a Grecia: cfr.Vasari, Vite de piu eccellenti Architetti,
IV, n, § 44). Algo más adelante, con mayor precisión, señala que la
Pittori et Scultori (1551), que W. estudió en una edición de 1681.1
belleza ideal se surge mediante la «selección de las partes bellas y su
6. la Dido de Virgilio: Eneida 1, 496-506.
armónica disposición en una sola figura» (§ 47).
7. Nausicaa de Homero: Odisea VI, 101 ss.
4. un antiguo comentarista de Platón: como indica en la nota a pie
8.regla de Polícleto: Polícleto de Argos, el más famoso escultor pelo-
de página se refiere al comentario que el filósofo neoplatónico Proclo
poneso del s. v. a.e., compuso un escrito titulado «Canon»: «Reglas sobre las
escribió sobre el Timeo platónico: in Tim. (81 b-d), 1, 264-165 (ed.
proporciones del cuerpo humano». W. se ocupa detalladamente de esta Diehl). W. sostiene en estos momentos una teoría de acuerdo con la
cuestión en su Historia (1, IV, u, caps.vn-x). cual las obras de arte más bellas se construyen según las imágenes
9. Venus Medicea: por aquel entonces se consideraba original, hoy en día, prototípicas de la belleza que habitan en el espíritu del artista. De esta
sin embargo, se piensa que es una copia de Cleomenes a partir de un original forma, la superación o acrecentamiento de la naturaleza no se concibe
griego de la escuela de Praxíteles. En la Historia, W. describe esta estatua como imitación de la misma naturaleza, sino como alejamiento de los
con las siguientes palabras: «La Venus de Médicis es semejante a una rosa fenómenos y aproximación a las ideas (en sentido platónico).
que aparece después de una bella aurora y se abre a la salida del sol. Está 5. un pintor griego: Eufranor, pintor y escultor griego del siglo IV
entrando en esa edad en que los miembros comienzan a adoptar su forma y el a.e. (cfr. Plinio, Historia natural 34, 77 y 35,128-129).
seno se está desarrollando. Cuando yo la contemplo en esta actitud, me
6. Diágoras: Diágoras de Rodas, que venció repetidas veces en los
represento a aquella Lais a quien Apeles inició en los misterios
Grandes Juegos. Píndaro le dedicó su séptima Oda Olímpica, a la que
1. Trad. castellana: Vidas de los más excelentes arquitectos, pintores y escultores italianos se alude en la correspondiente nota.
desde Cimabue a nuestros tiempos, (trad. H. Aguilá et alt.) Madrid: Cátedra, 2004.
202 NOTAS A LA EDICIÓN NOTAS A LAS REFLEXIONES 203

Pág. 80 Pág. 83
1. Aquiles: Ilíada xx, 26 y XXII, 135 Y ss. 1. Antioco Epifanes: Cfr. Ateneo de Naucratis, Banquete de los eruditos
5, 194 e ss.
2. Éforos: los más altos magistrados de Esparta.
2. Ctesilas: escultor cretense del siglo v. a.C. La cita es de Plinio, Historia
3.mostrar algo de grasa: la noticia puede leerse en Eliano,
Historia varia 14,7. natural 34, 74.
4. preceptos de Pitágoras: Porfirio, Vida de Pitágoras 35; 3. Galatea: se refiere al fresco de Rafael El triunfo de Galatea, Villa
Jámblico, Vida de Pitágoras 3, 13. Farnesia, Roma (en torno al 1512). En nota a pie de página se menciona un
5. Alcibiades: Plutarco, Vida de Alcibíades 2, 5. lugar muy citado de una carta de Rafael a Baltasar Castiglione, recogido en
Giovanni Pietro Bellori, Descrizzione delle Imagini dipinti da Raffaelle
6.enseña-caderas: Eurípides, Andrómaca 595 ss.; Plutarco, Vida
d'Urbino nelle camere del Palazzo Apostolico Vaticano, Roma 1695, p. 100:
de Numa 25, 6.
«Ma essendo carestía e de i buoni giudicii, e di belle donne, io mi servo di
7. Quillet: Claude Quillet (1602-1661), poeta neolatino que certa idea, che mi viene alla mente». Bellori (1615-1696) fue uno de los
escribió una obra titulada Callipaedia seu de pulchrae prolis críticos más influyentes del siglo XVII, especialmente gracias a su L'Idea del
habendae ratione (Leiden, 1655), donde se ocupaba de métodos y pittore, dello scultore e dell'architetto (1644), donde pierde radicalidad la
estrategias para procrear hijos bellos.' dicotomia entre idea y fenómeno al entender la imitación como mímesis de la
8. Aristóteles: Política 1337 b 22 ss. verdad de la naturaleza y, a la vez, como acrecentamiento y elevación de lo
dado.'
Pág. 81
Pág. 84
1. Los escritores de libros de viajes: W. se refiere en especial a
Iean Cherdin (1643-1713), Voyages du Chavalier Chardin en Perse et l. la ley prescrita por los tebanos a sus artistas: Eliano, Historia varia 4, 4. 2.
autres lieux de l'Orient, 10 vols. (Amsterdam, 1711). 2 esculpida por Evado: en nota a pie de página se menciona Philipp von Stosch
2. enfermedad inglesa: raquitismo. (1691-1757), Gemmae antiquae caelatae, sculptorum nominibus insignitae
ad ipsas gemmas (Amsterdam, 1724). W. publicó un catálogo de la colección
de gemas de este aristócrata: Description des Pierres Gravées du feu Baron
Pág. 82
de Stosch dediée a Son Eminence le Cardinal Alexandre Albani (Florencia,
1. totalmente desnudos: la misma noticia se lee en Rubens, De 1760).2
imitatione statuarum, breve tratado publicado por Roger de Piles en 3. Polignoto: pintor de mediados del siglo v a.C. W. se apoya en Plinio,
su Cours de Peinture par principes (Paris, 1708). 3 Historia natural, 35, 58-59. En la Historia, W. recuerda que Aristóteles
2. El comienzo de muchos diálogos de Platón: por ejemplo, los afirmaba que Polignoto pintaba a los hombres mejores, Pausó n los hacía
citados más arriba: Lisis, Cármides. peores y Dioniso los dejaba parecidos a sí mismos, explicando la aseveración
3. Friné: Célebre cortesana ateniense. El episodio lo recoge del Estagirita acerca del primero como sigue: «He aquí lo que yo creo que
Ateneo de Naucratis, Banquete de los eruditos 5, 590-591. Aristóteles ha querido indicarnos: Poi ignoto ha hecho sus figuras pintando a
los personajes mejores, es decir, imprimiéndoles una características de
grandeza por encima de la talla y la conformación normales de los
1. Reimp.: Advertisers Composition Co., 1963 (ed. by. Mary R. Mahl).
1. Trad.: Vidas de pintores (contiene la «Idea del pintor, del escultor y del arquitecto, seleccionada
2. Reimp.: Paris: Union Générele d'Editions, 1965 (ed. de C. Gaudon). entre las bellezas naturales superior a la Naturaleza»), Madrid: Akal, 2005.
3. Reimp.: Nimes: Éditions Jacqueline Chambon, 1990. Con una introducción de Th. Put- 2. Reimp.: Baden-Baden / Strasbourg: Heitz, 1970.
tfarken.
204 NOTAS A LA EDICIÓN NOTAS A LAS REF LEXIONES 205

hombres. Como dicho pintor, lo mismo que casi todos los de la nucci, Vita del Cavallieri Gio. Lorenzo Bernino, scultore, architetto e
Antigüedad, representaba historias tomadas de la mitología y de los pittore (Florencia, 1682).
tiempos heroicos, sus figuras semejaban a las de los héroes y
expresaban la naturaleza en su más bello ideal» (1, IV, IV, § 432). Pág. 86
4. Praxíteles: escultor ático de mediados del siglo IV a.e., que pasa 1. Antinoo Admirandus: W. se refiere al Antinoo Belvedere, copia
por ser el descubridor del interés estético del cuerpo femenino, espe- romana de una estatua de Hermes debida a Praxíteles o a su círculo.
cialmente en su Afrodita de Cnido (copia romana en los Museos Va- 2. Apolo Vaticano: el Apolo Belvedere, copia romana -tal vez de época
ticanos). adrianea- de un original griego quizá de Leocares (s. IV).
5. Cratina: Plinio, Historia natural 36, 20-21.Tb. Clemente de
Alejandría, Protreptikos 41, 22. Pág. 87
6. Lais: Aristaneto, Epist. 1. 1. Poussin: Nicolás Poussin (1593-1665), una de los máximos repre-
sentantes de clasicismo en la pintura paisajista. De acuerdo con Poussin, la
Pág. 85
pintura representa la idea en tanto que orden y medida de las cosas.
1. mayor unidad (...) plenitud: en Erinnerung über die 2. Quibus arte benigna: «Quizá logren superar esto algún que otro
Betrachtung der Werke in der Kunst (1759) 1 escribe W.: «Das Schone joven a quien el titán [Prometeo 1 modeló las entrañas con arte benigno y
besteht in der Mannigfaltigkeit im Einfachen: dies ist der Stein der con barro de mejor calidad» (trad. Manuel Balasch). Juvenal 14, 34-35.
Weisen, den die Künstler zu suchen haben» (p. 6). Se trata de una 3. Piles: Roger de Piles (1635-1709). De acuerdo con este influyente
definición muy común en la época, que puede encontrarse, por teórico del arte, la pintura no es primariamente una copia de la naturaleza
ejemplo, en Hogart, Shaftesbury o Roger de Piles. En último extremo, (aunque sea embellecida) ni de una idea que preexiste en la mente del
puede retrotraerse a Leon Alberti: (De re aedificatoria VI, 2 Y IX, 5) artista, sino un mundo propio y autónomo que tiene sentido por sí mismo
que se apoya a su vez en el De architectura de Vitruvio. en la medida en que provoca estímulos o sensaciones específicamente
2. porque huelen a moho: en la obra citada en la nota anterior W. estéticos, donde el colorido desempeña un papel fundamental. De aquí que
distingue entre nachmachen (copiar, reproducir) y nachahmen, la en la pugna entre partidarios de la primacía de la línea y partidarios de la
imitación propiamente dicha. primacía del color (i.e. Poussin vs. Rubens) tomara partido a favor de los
3. Bernini: el arquitecto, pintor y escultor Lorenzo Bernini es, en segundos (cfr. Dialogue sur le Colorit, 1673). W. conocía en profundidad
cierto sentido, la bestia negra de W., para el que representa «la las obras de Roger de Piles y polemiza constantemente con ellas. En el
corrupción del gusto» y la «falsa maniera» (Cfr. Erinnerung über die texto parafrasea sus Conversations sur la connosaince de la peinture, et
Betrachtung der Werke in der Kunst). En una carta del 3 de junio de sur le jugement qu' on doit faire des tableaux aa por occasion il est parlé
1755 dirigida a Uden (Briefe I, p. 171), en la que W. resume en cinco de la vie de Rubens, pp. 260-261 (Paris, 1677). 1
puntos el sentido de su escrito, aparece en segundo lugar «la refutación 4. Naturaleza común: no en sentido despectivo, sino en oposición a
de Bernini»; el tercer punto, muy coherentemente, es el ensalzamiento «naturaleza ideal».
de la Antigüedad y de Rafael. En la Historia reprocha a Bernini «haber
Pág. 88
querido halagar excesivamente los sentidos groseros» y «querer
hacerlo todo de fácil comprensión por medio de las formas de 1. Caravaggio: Michelangelo Merisi, llamado «Caravaggio» (1753-
expresión comunes» (1, IV, II, § 32). En nota a pie de página se cita la 1610). Muy criticado en la teoría clasicista del arte.
biografía de Bernini escrita por Filippo Baldi-
1. Reimp.: Geneve: Slatkine Reprints, 1970.
1. Puede leerse el texto en Iohann [oachim Winckelmann, Kleine Schriften. Vorreden. Ent-
würfe. Herausgegeben von Walther Rehm. Berlin: Walter de Gruyter, pp. 149-156.
206 NOTAS A LA EDICIÓ N NOTAS A LAS REFLEXIONES 207

2. [acob [ordans: pintor holandés (1593-1698). En Gedanken vom jante. W. lo alaba por su constante imitación de la Antigüedad: «El arte
mündlichen Vortrag der neueren allgemeinen Geschichte (1754/55) 1, W. se moderno, siguiendo el mismo camino, habría llegado sin duda a su per-
refiere a él como «un copista y coleccionista» incapaz de cualquier originalidad fección si los artistas no hubiesen abandonado demasiado pronto el camino
(p. 21). que les había trazado Miguel Ángel, con contornos bien determinados y
3. Stella: o bien el pintor de historias y grabador francés Jacques Stella una enérgica indicación de todas las partes» (Historia I, IV, I1, § 283).
(1596-1657) o bien su padre Francois Stella (1563-1605), paisajista y pintor de
historias. Pág. 89
4. contour: los teóricos del arte que sostenían la primacía del dibujo sobre el
color ponían gran énfasis en el «contorno», cuyo modelo era la claridad de 1. que en sus manos se convierten en amazonas: tal vez W. esté pensan-
líneas de la estatuaria clásica. W. se sitúa en esta tradición que concede do en las figuras femeninas de la Capilla Medicea.
prioridad al disegno frente al colorido y que puede remontarse al De pictura 2. Diomedes y Perseo de Dioscórides: en nota a pie de página, W.
(1453) de Leon Battista Alberti. Situado en el contexto del horaciano ut pictura vuelve a citar la obra de Philipp von Stosch (supra nota 76.2).
poesis, Alberti defiende la importancia estética decisiva del proyecto 3. Teucro: tallista de finales de la República romana. En nota a pie de
intelectual, así como del dibujo del contorno en el que se materializa tal página se cita: Antonio Francesco Gori (1691-1757), Museum Florentinum
proyecto intelectual. Desde esta perspectiva, en gran medida asumida por W., exhibens insigniora vetustatis monumenta quae Florentiae sunt, 10 vols.
el arte imita la naturaleza en la medida en que pone en imágenes las (Florencia, 1731-1762).
concepciones de los sabios y las palabras de los poetas. De aquí, la íntima 4. Parresio: Parresio de Éfeso del siglo V a. e., contemporáneo, pues, de
vinculación entre la primacía del con tour y la exigencia de un arte con valor y Zeuxis. (Cfr. Plinio, Historia natural 35, 67-74; 67).
sentido alegórico. W. insiste repetidas veces en este aspecto de la cuestión. En 5. tela de Cos: las telas de Cos, sumamente transparentes, permitían
su Beschreibung der vorzuglichsten Gemalde der Drej3dner Gallerie, el entrever el cuerpo. (Cfr. Aristóteles, Historia animalium v, 67, 6; Plinio,
contour todavía era el mero dibujo que delimita las figuras (la línea del Historia natural 11, 76).
contorno); ahora, sin embargo, es más que esto, pues es concebido como un 6. Agripina: copia romana de una estatua debida tal vez a Fidias o
principio de unidad en la multiplicidad, como lo que unifica lo heterogéneo y, alguno de sus discípulos.
en consecuencia, como el principio que ennoblece y espiritualiza lo sensible 7. San Marcos en Venecia: en nota a pie de página se cita Antonio
común. Maria Zanetti Giovane, Delle antiche statue greche e romane, che nell' anti
5. Eufranor: pintor y escultor del siglo IV a.C. (cfr. Plinio, Historia natural sala della Libreria di San Marco, e in altri luoghi pubblici di Venecia si
34,77; 35, 128-129). trovano, 2 vols. (Venecia, 1740).
6. Rubens: por aquel entonces era un lugar común criticar las deficiencias 8. Las tres Vestales: copia romana de la época imperial de un original
de Rubens como dibujante. Queda implícita la crítica a Roger de Piles, que griego de finales del siglo lV. W. narra con más detalle la historia del des-
ponía a Rubens por delante de Rafael (cfr. Dissertation sur les ouvrages des cubrimiento de estas estatuas en Sendschreiben von den herculanischen
plus fameux peintres, p. 40).2 Entdeckungen (1762).
7. contour famélico: en oposición al «contour más noble» mencionado unas 9. gran manier: en la teoría italiana del arte, desde Vasari, el concepto
líneas más arriba. de «maniera» se utilizaba para indicar la expresión de lo subjetivo e
8. Miguel Ángel: la estética clasicista no tenía en gran aprecio la pintura de individual en el arte, bien sea como las características particulares de un
Miguel Ángel, tal vez por su compleja composición, muy alejada de la «noble determinado artista, bien sea, en sentido negativo desde las premisas
simplicidad»; era, sin embargo, muy apreciado como dibu- clasicistas, para señalar el alejamiento de la normativa imitación de la
naturaleza. W, sin embargo, utiliza la palabra «manien como sinónimo de
«estilo» y de «gusto».
1. En Rehm K.S. pp. 17-26. 2. Reimp.: Farnborough Eng.: Gregg, 1968. 10. Flora Farnesia: estatua colosal romana.
208 NOTAS A LA EDICIÓN NOTAS A LAS REFLEXIONES 209

Pág. 90
la calma es la actitud más conveniente a la belleza: «La noción de belleza suma
1. Llegaron a la luz del día: cfr. Sendschreiben von den herculanischen no puede nacer más que en el seno de la meditación, cuando un alma, replegada
Entdeckungen, pp. 17-18. sobre sí misma, aparta de sí todas las imágenes individuales. Además, la calma en
2. el informe de Plinio el Joven: sobre la muerte de su tío en la erupción el hombre y en los animales es un estado que nos permite examinar y conocer su
del Vesuvio del 24 de agosto del 79 d.C. (cfr. Plinio el Joven, Epístolas naturaleza y cualidades; por eso mismo solamente se descubre el fondo de los
6,16). ríos y del mar cuando sus aguas están tranquilas, sin agitación. De esta
observación resulta, pues, que sólo en la calma puede el artista llegar a expresar
Pág. 91 la esencia misma del Arte» (1, IV, 11, § 112).
1. Matielli: Lorenzo Matielli (1682-1748), escultor que trabajó en 5. como Virgilio canta de su Laoconte: Eneida 2, 222.
Dresden desde 1738. 6.Sadoleto: Iacobo Sadoleto (1477-1547), cardenal que celebró el des-
2. Algarotti: Francesco Algarotti (1712-1764). W. cita un verso de una cubrimiento del Laoconte con el poema latino De Laocoontis Statua. W. se
de sus «Epistole in Versi»: «Alla Maestá di Augusto III, Re di Polonia, Elet- refiere al verso 28: «Ferre nequit rabiem, et de vulnere murmur anhelum esse»
tore di Sassonia», (<<No puede soportar la acometida, jadeante gime herido»). 1
3. draperie: de acuerdo con Roger de Piles (Conversations sur la con- 7. Filoctetes: héroe trágico de Sófocles. Camino de la guerra de la Troya fue
noissance de la peinture, Anexo: Terme de Peinture par ordre mordido por una serpiente; gravemente herido, quedó abandonado por sus
alphabethique, París, 1677), «drapperie se dit en general de toute sorte compañeros en la isla de Lemnos.
d'estoffe dont les figures son habillées (...) Ce Peintre jette bien une
drapperie, pour dire qu'il en dispose bien les plis». Pág. 93
1. Metrodoro: filósofo y pintor (Plinio, Historia natural 35, 135).
Pág. 92
2.paren tirso: pathos máximo en un lugar inadecuado (Cfr. Longino, De lo
1. Carlo Maratta: pintor romano (1625-1713). En Beschreibung der sublime 3, 5).
vorzüglichsten Gemalde der Drefldner Gallerie1 es citado como ejemplo de 3. queda pero no indiferente o adormecida: la afirmación de que la calma es
«maniera vaga», en la que los contornos se esfuman dulcemente. la actitud que más conviene a la belleza en modo alguno significa la prohibición
2. Francesco Solimena: pintor napolitano del barroco tardío (1657- de representar la «expresión» en tanto que contrapeso de la «belleza»: «La gran
1747); también es citado en la obra mencionada en la nota anterior. doctrina de Empédocles sobre la afinidad y repulsión de los elementos, por la
3. nueva escuela Veneciana: W. piensa en cuadros de Belluci, Ghislan- cual la discordia y la armonía operan el actual estado de cosas en nuestro mundo,
di, Ricci, Brisighella, Piazetta, etc., que por aquel entonces podían con- parece referirse a esta máxima del Arte: «Sin la expresión, la belleza sería
templarse en la Galería Real de Dresden. insignificante; sin la belleza, la expresión sería desagradable.» De la acción y
4. una noble simplicidad y una callada grandeza: la fórmula, que cono- reacción de estas dos cualidades, de la amistad y de la unión de estas dos
cerá una gran fortuna en el debate en torno al clasicismo, tiene antecedentes propiedades discordantes, nace la belleza que conmueve y que interesa»
en la teoría estética francesa e inglesa del siglo XVIII: Richardson, (Historia 1, IV, 11, § 113).
Shaftesbury, La Bruyere, Félibien, de Piles etc. Tal vez la formulación más 4. franchezza: la expresión es de Baldinucci, que la aplica al dibujo de
próxima a la winckelmanniana pueda leerse en Richardson: «La peinture Bernini: «ne' quali si scorge simmetria maravigliosa, maesta grande, e una tal
nous fait voir ces héros tels qu'ils étaient dans leur véritable grandeur et dan franchezza di tocco che e propriamente un miracolo. Effeto di que sta franchezza
s leur noble simplicité» (Traité de la Peinture, et de la Sculpture. 1. Un é stato l'aver egli operato singolarmente in quella sorta di
Essai sur la Théorie de la Peinture, p. 4).2 Tampoco pueden excluirse raíces
pietistas en el topos de la «noble simplicidad». En la Historia W. afirma que
1. Este poema puede leerse en www.meditarranees.net/mythes/troie/laocoon/sadoleto.html.
1. En Rehm K.S. pp. 1-12. 2. Reimp.: Geneve: Slatkine Reprints, 1972
210 NOTAS A LA EDICIÓ N NOTAS A LAS REFLEXIONES 211

disegno che noi diciamo Caricatura» (Vita del Cavaliere Gio. Lorenzo Ber- point faire de maniére» (Entretiens sur les vies et les ouvrages des plus
nino, Scultore, Architetto e Pittore, p. 66). excellens Peintres anciens et modernes, avec la vie des Architectes, Paris,
5. Contrapost: marcada contraposición entre la pierna de apoyo y la 1672, vol. II, pp. 390 ss.; vol. III, pp. 96 ss. 1 ).
pierna desapoyada, característica de la pintura del barroco.
Pág. 95
Pág. 94 1. Atila de Rafael: Vaticano, Stanza d'Heliodoro.
1. un Ayax y un Capaneo: Ayax, preso de la locura, atacó un rebaño y 2.Tum pietate: «de pronto, a vista de la plebe surge / un varón grave con
luego, avergonzado, se dio muerte. Capaneo, uno de los «Siete contra ganados méritos / de virtud y bondad» (trad. A. Espinosa Pólit) Virgilio,
Tebas», fue castigado por Zeus por su soberbia: un rayo hizo que se preci- Eneida, 1, 151-152.
pitara desde lo alto de una escala de asalto. 3. el Júpiter de Homero: Ilíada I, 528 ss.
2. los primeros pintores griegos (. .. ) su primer gran trágico: la distancia 4.Algardi: Alessandro Algardi (1602-1654), arquitecto y escultor, frente
que media, por ejemplo, entre Agéladas y Polícleto es como la que separa a al que W. suele expresarse de manera crítica.
Esquilo de Sófocles: aunque parecía que el primero había llevado la tragedia 5. Cuido: Guido Reni (1572-1642), pintor muy valorado en el siglo
a su máxima perfección, Sófocles, «con vuelo de águila, se remontó pronto al XVIII: era considerado un maestro de la «gracia», ese misterioso efecto que
más alto grado que las fuerzas humanas pueden alcanzar: El primero el arte produce en los sentidos.
[Esquilo l, por la elevación de sus pensamientos y la belleza de sus 6. Conca: Sebastiano Con ca (1680-1764). En nota a pie de página,
pensamientos, asombra más que conmueve, y como en el desarrollo de los W.cita Edward Wright, Some Observations made in travelling through
acontecimientos tomados de la mitología está más apegado a la verdad que a France, Italy ... in the Years 1720, 1721 and 1722, London, 1730.
la verosimilitud, por eso parece menos poeta que historiador. El otro
[Sófocles l, por el contrario, sabe conmover, la causa de esta emoción no son Pág. 96
las palabras, sino las imágenes llenas de sentimiento que hacen vibrar el
alma. Merced a la verosimilitud que él busca, tanto en el nudo como en el 1. el poeta inglés: J oseph Addison (1672-1719). W. se refiere a su
desenlace de sus tragedias, mantiene tensa la atención y nos conduce cada poema «The Campaigne» (Miscellaneus Works, London, 1753): «So when
vez más allá de nuestras esperanzas» (Historia I1, I, I1, § 23). an Angel by divine command / With rising tempests shakes a guilty land, /
3. ut sibi quivis: Horacio, Arte poética, 240-242: «[Moldearé un poema Such as of late o' er pale Britannia past / Calm and serene he drives the
con material conocido l, para que, / quien me imite, sude lo suyo y sufra en furious blast».
vano por tener igual / osadía» (trad. Horacio Silvestre). 2. Una notable obra de la mano de Rafael: la llamada Madonna Sixtina,
4. La Fage: Raimond La Fage (1656-1690), dibujante y grabador. principal obra del periodo clásico de Rafael.
5.los escritos griegos de los mejores tiempos: cfr. über Xenophon, pp. 3. Cupido de Praxíteles: mencionado por Pausanias IX, 27, 9 Y
13-15.1 Calístrato, Estatuas 11,233-234.
6. a la que llegó imitando a los antiguos: que la grandeza de Rafael se Pág. 97
debió a su proximidad a los antiguos es un lugar común que puede leerse, por
ejemplo, en Chambray, Richardson y explícitamente en Félibien: «Ainsi e il 1. Netscher (...) Dou (...) Van der Werff: Caspar Netscher (1639- 1648).
partagera son temps, tantost a desseigner, tantost a remarquer ce qui est beau Gerárd Dou (1613-1675). Adriaen van der Werff (1659-1722). De estos tres
dans Raphaél, & tantost a copier l'Antique san jamais abandonner le naturel, pintores había cuadros en la Galería Real de Dresden y eran considerados
qui doit etre son principal objet, a fin de ne se modelo insuperable de realismo.

1. Reimp.: Paris: Les Belles Lettres, 1987.


1. Cfr. Rehm, KS, pp. 13-16.
212 NOTAS A LA EDICIÓ N NOTAS A LAS REFLEXIONES 213

2. algunos compatriotas actuales de Rafael: W. se refiere a Chiari, Tre- 5. Boda Aldrovandina: fresco romano que representaba los preparativos
visani, Batoni, Roberti, etc., cuyas obras también colgaban en las paredes de la de una boda.
Galería Real de Dresden. 6. Anibal Caraccio: (1560-1609), pintor muy valorado por la crítica del
3. en cera: Plinio, Historia natural, 35, 153. arte clasicista.
4.Dibutades de Soción: de acuerdo con Plinio (Historia natural 35, 151)
fue el descubridor del modelado en arcilla. Pág. 105
5. Arcesilao: Plinio, Historia natural 35, 155-156. 1. partes del arte: en la enumeración de las «partes del arte» que se leen
en las líneas siguientes W. sigue los principios regulativos de la estética del
Pág. 98
clasicismo tal y como fueron formulados, por ejemplo, por la Academia de
1. poussier: modelar. Fabricación de modelos para la escultura realizados Francia en Roma
con alguna materia blanda y sujetados con ganchos de madera o hierro. 2. Equión: pintor de la segunda mitad del siglo IV (cfr. Plinio, Historia
2. la auténtica manera con la que los griegos realizaban sus modelos: la natural 35, 50; 35, 78).
larga y tediosa digresión que puede leerse en las páginas siguientes se explica
porque, dado que los griegos son modélicos, parece conveniente investigar la Pág. 106
manera en la que trabajaban, que es -presupone W. sin mayor fundamento, 1. las metamorfosis: alusión a las Metamorfosis de Ovidio, que consti-
malinterpretando el texto de Va¿ari que él mismo cita en nota a pie de página- tuían un tema predilecto para los pintores del barroco.
la que reinventó Miguel Ángel, «este Fidias de los tiempos modernos», que 2. alegóricamente: todas estas páginas sobre la alegoría pueden enten-
retomó «la verdadera huella de sus grandes maestros». En la citada carta del 3 derse como una polémica contra Dubos, que en la sección XXIV de sus
de junio de 1755 dirigida a Uden (Briefe I, p. 17l) aparece, como punto quinto, Réflexions critiques sur la Poésie et la Peinture, 1 titulada «Des actions alle-
«la nueva forma de trabajar el mármol». En esta misma carta sugiere que se goriques & des personnages allégoriques par rapport a la Peinture», había
proponga al escultor Coudray trabajar de la manera indicada; al parecer, este rechazado, por su carácter incomprensible, el uso de alegoría en la pintura
experimentado artista hizo la prueba y comprendió rápidamente la insensatez moderna. Una tesis similar a la de W. -que insiste en que la alegoría debe ser
de la propuesta. En cualquier caso, W. nunca más volvió a mencionar «esta comprensible incluso para un intérprete moderno- puede encontrarse en
nueva forma de trabajar el mármol». Hagedorn, Betrachtungen über die Malerey, Leipzig, 1762, cap. XXXII. Las
discrepancias entre W. y Dubos no se limitan al terreno de la alegoría, sino
Pág. 104
que afectan incluso a la concepción del carácter modélico de la Antigüedad.
1. Turnbull: Georges Turnbull (fechas desconocidas). En nota a pie de Dubos parte del efecto de la obra de arte sobre el espectador, esto es, supone
página se cita su obra A Treatise on Ancient Painting ... , London, 1740.1 que las obras de arte deben despertar emociones en quienes las contemplan, lo
2. Camillo Paderni: dibujate que trabajó en Inglaterra y Nápoles, llegó a cual permite prescindir del deber de reflejar un mundo objetual dado
director del Museo del Portici. W. lo despreciaba profundamente. previamente. Con mayor precisión, tal deber sólo resulta exigible en la
3. Mynde: Iohn Mynde (fechas desconocidas), retratista, grabador e medida en que pueda ayudar a constituir una realidad estética propia en
ilustrador inglés. función de las emociones a las que me refería anteriormente. Esta concepción
4. Richard Meads: (1673-1754), médico del rey Jorge III, filólogo y sensualista y psicologista del arte obliga a una comprensión relativista de los
coleccionista. Era famosa su biblioteca particular. antiguos, los cuales, frente a lo defendido por W., no son medida absoluta,
aunque sólo sea porque también su arte
1. Reimp.: ed. by Bevilacqua, München: Fink, 1971.
1. Este texto de Dubas puede leerse en www.gallica.bnf.fr/arkIl2148/bpt6k88225f.
214 NOTAS A LA EDICIÓN NOTAS A LAS REFLEXIONES 215

surgió bajo condiciones específicas y sólo bajo ellas puede despertar emo- Pago 108
ciones. Un punto de vista contrario al de Dubas se encuentra expresado en el
Essai sur la théorie de la peinture (1715) de Jonathan Richardson, que 1. para la instrucción del artista: como hizo el mismo W. más adelante
defiende el principio de la perfección, de acuerdo con el cual la naturale za en su Versuch einer Allegorie, besonders der Kunst (Dresden, 1766).
no debe reproducirse meramente, pues el artista -por mor del citado 2. Vitruvio (...) sobre su corrupción: alusión al De architectura 8, 5, 2-4.
principio- tiene incluso que elevarse por encima de ella hasta alcanzar la La polémica sobre lo grotesco, iniciada por Vitruvio por motivos
idée. Ahora bien, tal idea se encuentra expresada en las obras de los antiguos estructurales y formales, se mantuvo viva a lo largo de todo el cinquecento,
y, por tanto, sólo puede aprenderse estudiándolas. De donde se sigue con si bien ahora por razones morales.
necesidad, como posteriormente afirmará W., que estas obras, y sólo ellas, 3. Marta: Marta da Feltre (1467-1512).
son modelos atemporales de perfección. 4.volutas (. .. ) y rocalla: esto es, la decoración rococó, sobre la que W. se
3. Arístides: cfr. Plinio Historia natural 35, 98. manifiesta negativamente en Anmerkungen über die Baukunst der alten
Tempel zu Girgenti in Sizilien (1762).1
Pág. 107 5. Candelabros de Vitruvio: Vitruvio, 7, 5, 3-4.
6.Reddere personae: Horacio, Arte poética 316: «sabe dar los rasgos
1. Iconología de Ripa: Cesare Ripa (fechas desconocidas), Iconologia convenientes a cada personaje» (trad. Horacio Silvestre).
overo Descrittione dell' Imagini universali cavate dall'antichita et dal altri
luoghi... Opera non meno utile, che necessaria Ci Poeti, Pittori & Scultori, Pág. 109
per representare le virta, vitii, affetti, & passioni humane (Roma, 1593). 1
W. siempre se muestra muy crítico con esta obra. 1. velut aegri: Horacio, Arte poética 7-8: «... como los sueños de un
2. Van Hooghe: Romein de Hooghe (1645-1708), pintor, grabador y enfermo, / se moldeen tan vanamente [que ni pie ni cabeza a una / única
autor de una Hioroglyphica of Merkbeelden der oude Volkeren (Ámsterdam, forma correspondan...]» (trad. Horacio Silvestre).
1735). 2. representación de cosas invisibles: alusión crítica a Roger de Piles,
3. Galeria Farnesia: se refiere a los frescos de Caraccio en el Palazzo que había sostenido que la pintura debe limitarse a los objetos visibles: «La
Farnese de Roma, que representan el triunfo del amor sirviéndose de figuras peinture est la perfaite imitation des objets visible. Sa fin est de tromper la
de la mitología antigua. veúe» (Dissertation sur les ouvrage des plus fameux peintres, p. 33).
4. La Galería de Luxemburgo: pintado por Rubens entre 1621 y 1625, 3. Divis agris: Horacio, Arte poética 421: «anima a los asentido res a que
consta de 21 cuadros que representan alegóricamente diversos momentos de vayan a ganancia segura» (trad. Horacio Silvestre).
la vida de Maria de Médicis. 4. pabellón de caza: W. piensa en el Hubertusburg (construido en 1721-
5. Daniel Gran: infra nota 185.3. 23), donde Augusto el Fuerte celebraba fastuosas fiestas.
6.Cardenal Hércules de Fleuri: André Hercule de Fleury (1653-1743), 5. relieves de las puertas de bronce: obra del artista florentino Antonio
cardenal y desde 1726 primer ministro del rey Luis XV, miembro de Filarete (1400-1469), en la que trabajó más de diez años.
«Académie Francoise» y célebre mecenas. 6. agradar y al mismo tiempo instruir: alusión a Horacio, Arte poética
7. Le Maine: Francois Lemoyne (1688-1737), que pintó el «Salan 333.
d'Hercule» del palacio de Versalles.
Pág.110
1. Prometeo: cfr. Beschreibung der Gemalde ..., p. 8.
1. Trad.: Madrid:Akal, 1987 (trad. de J. Barja, Y. Barja, R. Ma Mariño, F. García Romero; prólogo
de A. Allo Manero).
1. En Rehm K.S. pp. 174-185.

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