El poder de los territorios virtuales en la construcción de realidades sociales

Cuando se hace referencia a los territorios virtuales se está hablando de las

diferentes formas de expresión y comunicación generadas desde espacios que
contienen objetos y vivencias no compartidas de manera directa por nuestros
sentidos sino a través de una mediación. Esta mediación tiene una manifestación
física concreta que es la pantalla, la cual sirve como primer marco territorial para
darnos acceso a ese mundo que hace alusión a una espacio-temporalidad (la
relacionada en la historia o en la ilusión construida que nos permite percibir
objetos, lugares, personas, etc, cuyas característica fundamental corresponde a la
de la presencia ausencia), pero que carece de dicha espacio temporalidad, hecho
por el cual nos podemos referir a dicho mundo como a un territorio virtual.
Pero el hecho de que no tenga un espacio temporalidad no le impide a esta
territorialidad virtual tener una influencia directa sobre el mundo cotidiano en el
que se desenvuelven nuestras funciones como seres humanos, y por el contrario
cada día se hace mayor su influencia sobre nuestra cotidianidad.
A partir de esta aclaración sobre lo que se concibe aquí por un territorio virtual se
va a desarrollar una reflexión que permite desde lo teórico entender este
fenómeno para poder comprender su poder como constructor de realidades
sociales. De esta manera resulta necesario hacer un recorrido que dé cuenta de
su incursión en la historia humana, sus alcances como modelador de la sociedad y
su significado en la transformación de las sociedades.

Incursión de la virtualidad en la historia humana

El fenómeno virtual como se manifiesta hoy en día básicamente en todos los

elementos implicados en la existencia del internet y en el desarrollo de la imagen
audiovisual no pueden ser concebidos sin la existencia de la electricidad la cual ha
hecho del mundo un nuevo ambiente. Como Macluhan señala “As electrically
contracted, the globe is no more than a village. Electric speed in bringing all social
and political functions together in a sudden implosion has heightened human
awareness of responsibility to an intense degree. It is this implo-sive factor that
alters the position of the Negro, the teen-ager, and some other groups. They can
no longer be contained, in the political sense of limited association. They are now
involved in our lives, as we in theirs, thanks to the electric media 1. (Página 7
Undferstanding media).
Este proceso, que lo podemos entender como de mediación entre lo virtual y
nuestra materialidad humana, y que solo nos permite una experiencia sensorial
desde la dimensión visual y auditiva, parte de hechos tan fundamentales como el
descubrimiento de la imagen en movimiento que precisamente tiene su origen en
el estudio del movimiento de investigadores como Muybridge quien quería
establecer de manera precisa las características de la carrera del caballo, terminó
constituyéndose en un recurso para registrar hechos de la vida real, es decir,
congelar momentos de la historia en un material que pudiera preservarse. Este fue
el caso de los hermanos Lumier en Francia. También se buscó en un principio
aprovechar las virtudes fotográficas para intervenir una imagen, y alterar el
proceso de secuencia continua de los fotogramas que daría la sensación de
movimiento, para hacer trucos de magia, como lo hizo George Melies; o como
forma de complementar el magnetófono agregándole imágenes a una canción, la
cual fue la primera intención de Edison.
Estas y otras experiencias permitieron la consolidación de dos grandes corrientes
en la creación cinematográfica: la ficción y el documental, que empezaron a tener
importancia social por la manera como se llevó a cabo una reconfiguración en las
maneras de percepción de las personas a principios del siglo veinte. Y sin saberlo,
el cine se constituyó en un modelo a seguir por todas las comunidades de la tierra
ya que presentaba arquetipos ideales del ser humano por lo que como señaló
André Bazin que “the film -rather tan the stage-a is the médium with which we
identify” (pag. 11 Walter Ker). De manera que el cine plasmaba el ideal del
hombre, de la mujer, del niño, el ideal de la vida, de manera que quien tenía la
posibilidad de producir cine tenía la posibilidad también de definir el modelo que se
1
El globo terráqueo, eléctricamente contraído, no es más que una aldea. La velocidad eléctrica al
congregar todas las funciones sociales y políticas en una implosión repentina, ha elevado la
conciencia humana de responsabilidad a un grado intenso. Es este factor implosivo el que altera la
posición del negro, del adolescente y de algunos otros grupos. Ya no pueden ser contenidos en el
sentido político de asociación limitada. Ahora están involucrados en nuestras vidas, como nosotros
en las suyas, gracias a los medios eléctricos.
iba a imponer, de donde va a surgir con gran fuerza en las primeras décadas del
siglo veinte el modelo del emprendimiento norteamericano como el ideal a seguir,
que corresponde a la constitución de todo un ambiente que implica ridiculizar a las
personas de raza negra, condenar a la mujer a la vida doméstica, presentar a los
judíos como estafadores, etc.
Este nuevo fenómeno ofrecía los recursos ideales para consolidar una ideología
apropiándose de los sueños y las fantasías del público para darles una orientación
intencionada, de manera que se pudiera a través de este medio conducir a las
grandes masas de la población de acuerdo a unos intereses políticos
determinados. Como señala Acosta “A comienzos del siglo XX, ya se
argumentaba acerca de la importancia de transmitir a través del cine el valor del
pasado; por ejemplo, en las décadas de 1930 y 1940, en lo que fue la Unión de
Repúblicas Socialistas, los Estados Unidos de América y la Alemania nazi, el cine
se utilizó como instrumento de educación del pueblo. En cada uno de estos casos,
las realizaciones fílmicas cumplieron un papel de propagada política y de
justificación del presente, y formaron, asimismo, las imágenes del enemigo. Pag
39 Tesis de doctorado de Jiménez, Wilson Armando.
El fenómeno cinematográfico, que va a vivir constantes mejoramientos como el
paso del blanco y negro al color, la incorporación del sonido, el desarrollo del 3D y
del 4D, se constituyó en diferentes momentos de la historia en un elemento de
saturación, debido a que no permitía la participación de la audiencia, la cual debía
asumir una posición pasiva y cada vez se le iban reduciendo sus espacios de
participación mental, sin que este haya implicado la pérdida de poder y de control
de este medio, que por el contrario fue reforzado con el desarrollo de la televisión
a partir de los años 50, lo cual determinó una invasión a la intimidad de la familia,
generando un nuevo ambiente donde el aparato de televisión se constituía en el
centro de la familia.
A partir de los años setenta se empieza a indagar e implementar sobre formas de
comunicación entre computadores, experiencia que es la base del actual
desarrollo de internet. Estas formas de comunicación correspondían a un inicio de
la creación de redes entre instituciones universitarias en Estados Unidos para
compartir información, y que llevó a que en 1991 se hiciera pública la red de
internet global, a partir de la cual van a surgir las diferentes redes sociales como
las conocemos hoy en día.

Alcances de la virtualidad como modelador de la sociedad

Para comprender el poder que tienen los recursos virtuales sobre la vida de las
personas es necesario partir de asumir que ellos nos resultan importantes en la
medida en que los asumimos como extensiones de nuestro ser. Es decir, en la
medida en que podemos realizar procesos de proyección y de identificación con lo
que nos muestra la pantalla. Los procesos de proyección corresponden a la
manera como nos trasladamos a la virtualidad en la medida en que nos sentimos
constreñidos a participar ya que queremos apoyar al personaje con quien
conpartimos el sufrimiento, el odio, los celos, el deseo, la envidia y nuestro
impulse interior empujare su acción para que pueda triunfar en su propósito. De
manera que sufrimos una metamorfosis que nos lleva a ser el personaje de la
virtualidad, a la cual le prestamos nuestra vitalidad cotidiana. Los procesos de
identificación corresponde a un viaje inverso, hacemos que el personaje que está
en la pantalla se traslade a nuestra vida, reconocemos que él coindide con
nosotros, que somos el mismo y cobra por tanto vida en nosotros. Este fenómeno
es el que hace que se imponga una forma de vestir, una forma de peinarse, de
cortarse el pelo, de caminar, de utilizar mercancías de acuerdo a los
comportamientos y formas asumidas por los héroes o las heroínas que emergen
del mundo virtual. Es un juego entre nuestra consciencia y la virtualidad, pues
como señala Macluhan “After three thousand years of explosion, by means of
fragmentary and mechanical technologies, the Western world is imploding. During
the mechanical ages, we had extended our bodies in space. Today, after more
than a century of electric technology, we have extended our central nervous
system itself in a global embrace, abolishing both space and time as far as our
planet is concerned. Rapidly, we approach the final phase of the extensions of man
-the technological simulation of consciousness, when the creative process of
knowing will be collectively and corporately extended to the whole of human
society, much as we have already extended our senses and our nerves by the
various media whether the extension of consciousness, so long sought by
advertisers for specific products, will be "a good thing" is a question that admits of
a wide solution. There is little possibility of answering such questions about the
extensions of man without considering all of them together. Any extension, whether
of skin, hand, or foot, affects the whole psychic and social complex”. 2
De tal manera que en un medio virtual como el cine podemos encontrar lo más
profundo de nuestra propia conciencia, y tenemos la oportunidad de confesar las
diferentes cosas que no se pueden presentar en la cotidianidad, de esta manera el
cine termina rigiendo nuestra propia consciencia, pues como señala Morin “El cine
imagina por mí imagina en mi lugar y al mismo tiempo fuera de mí, cón una
imaginación más intensa y precisa.

2
Después de tres mil años de explosión, mediante tecnologías fragmentarias y mecánicas, el
mundo occidental está implosionando. Durante la mecánica, habíamos extendido nuestros cuerpos
en el espacio. Hoy, después de más de un siglo de tecnología eléctrica, hemos ampliado nuestro
sistema nervioso central en un abrazo global, aboliendo el espacio y el tiempo en lo que concierne
a nuestro planeta. Rápidamente nos acercamos a la fase final de las extensiones del hombre, la
simulación tecnológica de la conciencia, cuando el proceso creativo de saber quiere extenderse
colectiva y corporativamente a toda la sociedad humana, de la misma manera en que ya hemos
ampliado nuestros sentidos y nuestros nervios. Los diversos medios son la extensión de la
conciencia, durante tanto tiempo buscados por los anunciantes para productos específicos. Hay
pocas posibilidades de responder a estas preguntas sobre las extensiones de una vez, sin
considerarlas todas juntas. Cualquier extensión, ya sea piel, manos o pies, afecta a todo el
complejo psíquico y social.