Universidad Simón Bolívar.

Los cinco secretos de la innovación.

Estudiantes:
Lina Marín
María Goenaga
Laura Albor
Valery Cervantes

Docente:
Iván Ojito Castro

Grupo
T31

Barraquilla/Colombia
La innovación consiste en construir mejoras para lograr una determinada meta, es aumentar
el valor de la sociedad. En términos generales, innovar es conseguir un fin a través de un
conocimiento previo, dejando de lado los caminos ya utilizados y trazando caminos que no
se han seguido previamente. Las personas innovadoras son aquellas que piensan en el
futuro, que se sienten cómodos con su presente, pero que de igual forma toman la iniciativa
de trabajar en cambiar sus realidades. Es decir, los innovadores tienen la convicción de
querer mejorar las situaciones que se presentan en la actualidad, y así mejorar sus vidas y
las de las personas que los rodean dándole un giro a la economía.

A continuación se mencionaran los cinco secretos de la innovación mencionados en

capítulo 10 del libro “Crear o morir” de Andrés Oppenheimer.

En primer y segundo lugar, se recomienda crear una cultura de innovación y fomentar la

educación para la innovación. Por ejemplo, tenemos que mejorar la educación, aumentar en
la inversión de desarrollo, ofrecer estímulos fiscales a los que creen nuevos productos, y
muchas otras cosas que hay que tener en cuenta para mejorar. Pero todos estos pasos a
seguir pueden llegar a ser inútiles si no existe una cultura que estimule y exalte la
innovación, ya que la mayoría de las grandes innovaciones surgen de abajo hacia arriba
gracias a una cultura de emprendimiento.

¿Qué es una cultura de innovación? Es un clima en el que se produce entusiasmo por la

creatividad, que exalte a los innovadores productivos de la misma manera en la que se
exaltan a los jugadores de futbol. Para lograr todo esto debemos aprender de los fracasos,
como lo hizo el inventor de la bombilla eléctrica, que después de mil intentos fallidos al
final pudo lograr lo que quería. Volviendo al segundo secreto, vamos a dar un ejemplo de
porque debemos fomentar la educación. Hay que hacerlo para poder tener estudiantes
especializados en matemáticas, ciencias y tecnología. Como dijo Bill Gates, “las escuelas
primarias deberían cambiar radicalmente la forma en que enseñan esas materias, deberían
hacer proyectos como: diseñar un pequeño submarino, o un pequeño robot, o hacer lo que
hacen en Singapur, envían a los niños buenos en matemáticas a escuelas especiales de
matemáticas para que se vayan formando desde pequeños.

En el tercer y cuarto secreto, nos recomiendan anular las leyes que extinguen la innovación
e incentivar la alteración en innovación. Un ejemplo, es que se deben reducir los trámites
para abrir o cerrar una empresa. De igual forma, acoger nuevas normas que hagan respetar
la propiedad intelectual, no sancionar a quienes se van a la quiebra. Se recomienda hacer
una rebaja en países como Argentina. Además, destruir leyes que castigan al fracaso de los
demás, ya que en muchas ocasiones son situaciones que se le salen de las manos a
empresas, o simplemente son emprendedores que crean un negocio tratando de esperar
resultados positivos y les resulta todo lo contrario. Por último, se debe detener una gran
dificultad y es que actualmente la mayor parte del dinero desembolsado por los gobiernos
es por medio la universidades públicas y no por la empresas privadas que tienen mejor
conocimiento del mercado y se conoce que para llegar a ser un país exitoso a nivel de
innovación se le debe apostar a la educación, para así lograr realizar investigaciones que
aporten a temas de innovación y así aumentar el éxito a nivel poblacional.

El último secreto nos habla de que en América Latina, nos falta talento, creatividad y
audacia, para hacer cosas nuevas, tanto a nivel nacional como individual y no se considera
que sea problema de la iniciativa de la población, sino apoyo por parte de las entidades que
tienen poder, ya que los países latinoamericanos a lo largo de los años han sido muy
conservadores, por ejemplo al momento de permitir la elección de mujeres a la presidencia,
el matrimonio homosexual y la legalización de la marihuana. Alguna de estas decisiones
han sido muy controversiales, pero lo anterior solo se puedo haber logrado en sociedades
dinámicas y abiertas a la experimentación lo cual los países latinoamericanos siempre han
tenido. Además, de que muchas ciudades están en la vanguardia de la innovación urbana.
En varios países de América Latina se ha instalado Wi-Fi gratuitos en parque para todos los
estudiantes de escuelas públicas y se han brindados diversos recursos para que los
estudiantes puedan incrementar su nivel educativo.

La situación en Colombia con respecto a la innovación ha sido bastante satisfactoria, ya que

se considera que los Colombianos somos creativos y perseverantes, y uno de los puntos
más importantes en el tema de la innovación es conocer las capacidades que se tienen y
como se pueden utilizar para mejorar las realidades que nos rodean. Sin embargo, de nada
sirve tener talento y creatividad a la hora de innovar si la población no va a encontrar
respaldo u apoyo en entidades que apoyen el proceso y la mejora.
Lo mostrado en el libro “Crear o Morir”, es una muestra de las estrategias que debemos
alcanzar para dejar de ser países tercermundistas. Incluso hay países que se han superado
mucho más que los países latinoamericanos en los últimos 50 años gracias a que le
apostaron a la innovación y educación. Y a los países latinoamericanos nos falta entender
que si educamos a nuestra población, estaríamos educando a futuros líderes innovadores y
así apostarle al crecimiento economía, la investigación y la ciencia.

No es falta de conocimiento frente a un tema en específico, es falta de apoyo a las futuras

mentes maestras; podemos encontrar a un gran genio en un barrio vulnerable de una ciudad,
pero si este gran genio no tiene apoyo para explotar sus ideas, se considera imposible
generar innovación desde lo poco que se tiene. El verdadero reto, se encuentra en aquellos
sectores que tienen recursos para incrementar el crecimiento educativo y así aportar a la
población.