CONTINGENCIAS

El examen de las contingencias se refiere a aquellas situaciones o conjunto de circunstancias que implican un grado
considerable de incertidumbre, el cual, a través de un evento futuro relacionado con ellas, puede resultar en una perdida,
en la adquisición de un bien, en un pasivo o en la eliminación de éste, en muchos casos con la concurrencia de una
utilidad o de una perdida. Como ejemplo de contingencias que pueden derivar en pérdidas o en la constitución de un
pasivo están los juicios pendientes por demandas o posibles demandas por el pago de mayores impuestos por parte de
las autoridades fiscales, reclamaciones de terceros en relación con productos que se les vendieron o respecto al precio
en que se les vendieron, garantías o avales concedidos a otra personas por préstamos que solicitaron, descuentos de
documentos por cobrar y acuerdos de recompra de activos que han sido vendidos. Las contingencias deben ser dadas a
conocer en los estados financieros o en las notas explicativas.

Objetivo del examen de las contingencias

El examen de las contingencias tiene los siguientes objetivos:

Comprobar que todas las contingencias de importancia estén mencionadas en los estados financieros o en las notas
a los estos financieros.
Determinar, en los casos en que el resultado de las contingencias se pueda anticipar razonablemente y redunde en
una perdida para la empresa, que se hayan hecho las provisiones necesarias en los registros contables.
Determinar, como consecuencia del estudio de las contingencias, si por la importancia de éstas el auditor puede tener
la necesidad de emitir un dictamen con salvedad, o de abstenerse de opinar.

Las contingencias son posibles resoluciones de eventos que en el futuro pueden traer como consecuencia para la
empresa el conocimiento de pasivos, ganancias o pérdidas que por el momento solo se conocen como potenciales.

El control interno aplicable a las contingencias dependerá fundamentalmente de la comunicación que exista entre el
contador y los directivos de la empresa.

El objetivo principal de la auditoría de las contingencias es asegurarse de que se examinen todas las conocidas y de que
las importantes se mencionen adecuadamente en los estados financieros.

Los procedimientos de auditoría para el examen de las contingencias son variados, pero básicamente dependerán de la
revisión que se haga de otros concepto en los estados financieros, de discusiones con el contador responsable de la
elaboración de los estados financieros y con los directivos principales de la empresa, ya sea en el curso de la auditoría o
una vez concluida ésta al solicitar la carta de confirmación del cliente.

El auditor juzgará a luz de cada caso particular, si determinadas contingencias que se mencionan en los estados
financieros pueden requerir de una salvedad a su dictamen o de abstenerse de dictaminar.