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13114
INSTRUCTOR: RAUL MEJIA
Nutrición
Los seres vivos necesitan alimentarse,
incorporar los nutrientes que les aportan
energía para llevar a cabo los procesos vitales
básicos y materiales para la reparación de los
tejidos, el crecimiento y la conservación de la
salud.
La alimentación es el conjunto de actividades y
procesos por los cuales ingerimos alimentos
que nos aportan energía y sustancias nutritivas
necesarias para el mantenimiento de la vida.
Dado que es un acto voluntario y consciente, la
alimentación es susceptible de educación.
Todos los seres vivos están formados por
células que realizan todas las funciones vitales.
Las células forman tejidos y éstos forman a su
vez órganos que constituirán los sistemas de
los que depende el funcionamiento del
organismo.
El proceso de la nutrición propiamente dicho
tiene lugar en el interior de las células, pues en
ellas se desarrollan las reacciones químicas
que transforman las sustancias alimenticias
(nutrientes) en sustancias del propio
organismo, las degradan para obtener energía
de este proceso, y se eliminan los desechos
resultantes de esa degradación.
Como sustancias alimenticias deben considerarse
no sólo el agua y los nutrientes contenidos en los
alimentos propiamente dichos (sustancias orgánicas
y sales minerales), sino también gases como el
oxígeno (en animales y en vegetales) y el dióxido de
carbono (en vegetales).
Por ejemplo:
los hidratos de carbono (carbohidratos),
proteínas y lípidos.
Los micronutrientes son aquellos que el
organismo necesita en pequeñas dosis diarias,
pero que son indispensables para el buen
funcionamiento del cuerpo.
Por ejemplo:
las vitaminas y minerales.
Función energética: se refiere al suministro de
materiales para la producción de energía; llevada a cabo
por los hidratos de carbono, grasas y, en menor medida,
proteínas.
Las proteínas
Los hidratos de carbono (carbohidratos)
Las sustancias grasas o lípidos,
Los minerales,
Las vitaminas
El agua.
Las proteínas son sustancias orgánicas
esenciales para el crecimiento y la reparación
de tejidos, el buen funcionamiento y la
estructura de todas las células de nuestro
organismo. Todas las células y tejidos
contienen proteínas: las encontramos, por
ejemplo, en los músculos, los huesos, el pelo,
las uñas y la piel. Llegan a constituir el 20% del
peso corporal total.
Las proteínas están constituidas químicamente
a partir de 22 sustancias fundamentales
denominadas aminoácidos, de los cuales 9 son
“esenciales”, (no pueden ser sintetizados por el
organismo y deben ingerirse con los alimentos).
Al igual que las letras del sistema alfabético,
pueden combinarse de millones de formas
diferentes para crear “palabras” y todo un
“lenguaje” proteico. Según la secuencia en la
que se combinen, la proteína resultante llevará
a cabo una función específica en el organismo.
Cuando no incluimos la cantidad suficiente de
algún tipo de aminoácido, nuestro organismo
no puede utilizar de manera eficiente las
demás proteínas.
Podemos encontrar proteínas en distintos
alimentos.