Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
CHAMALÚ
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
DESPERTAR A LA VIDA
TRANSFORMACIÓN
PLACER Y FELICIDAD
LA SALUD
INTRODUCCIÓN
Este libro fue imaginado para ti, ¿será por eso que nos encontramos?
-Chamalú: Sí, claro, totalmente. Hay que apartarse del rebaño, hay que
asegurarse de ser la oveja negra, esa que luego se convertirá en un felino,
en un jaguar, porque habrá llegado a inaugurar eso que llamamos
nosotros: ‘la soberanía existencial’, que es tomar las riendas de tu vida en
tus manos, se trata de eso, que va más allá de técnicas, más allá de
soluciones en forma de receta, esto es reingeniería existencial; es por eso
que nosotros combinamos las conferencias que impartimos con los libros
que hemos escrito.
-Tania: Claro. Y Chamalú, con toda esta gran experiencia y este cúmulo de
sabiduría que tienes, ¿cómo describes tú la vida? ¿Para ti, qué es la vida?
La vida tiene que ser una fiesta de crecimiento y creación porque venimos
a evolucionar, nadie vino a sufrir y pues todo esto que estamos hoy
hablando, todo esto que nos reúne la Medicina para el alma, esto que tú
precisamente mencionaste de aprender a vivir, descubrir nuestro
propósito; el resto, celebrar la vida aprendiendo cotidianamente de todo lo
que pasa y creciendo con todo lo que nos ocurre, la vida es una buena
noticia y tenemos que saborearla instante a instante.
-Chamalú: Bueno, mira Tania, todos somos seres humanos pero estamos
incompletos y mientras no reconozcamos nuestra incompletud, no
recuperemos nuestra sensibilidad y mientras no tengamos nuestro poder
interior en nuestras manos, no habrá sabiduría en nosotros. Existe, pero
de manera latente, existe pero como semilla, no es un árbol; la sabiduría
comienza a manifestarse cuando posibilitamos que esa semilla, ese
conjunto de potencialidades germine, florezca, aflore, crezca y se convierta
en una historia evolutiva; justamente lo que nosotros hacemos es esta
labor.
A mí no me gustan las religiones porque te inducen a poner tu vida en
manos de una divinidad, cuando en realidad al enviarnos a nosotros a la
vida, a la Tierra, han puesto nuestra vida en nuestras manos. Nos parece
una imprudencia estar renunciando a esa posibilidad de hacer de esta vida
una historia evolutiva, pero además, una historia festiva, una historia
creativa, como tiene que ser.
- Jesi: Hola, soy Jesi Bernardino y te doy las gracias por acompañaros a
una sesión más de esta cumbre virtual: Rebeldes con causa. El encuentro
tiene como objetivo invitarte a ser tú mismo, tú misma, siempre desde el
respeto y la empatía.
Hoy está con nosotros un hombre de sabiduría, que reúne lo ancestral con
lo moderno, lo sagrado con lo mundano, lo interno con lo externo.
Chamalú, es un filósofo de la vida, un soñador práctico, un poeta
vivencial, un líder visionario que sueña un mundo nuevo y además vive en
coherencia con ese anhelo; hoy él nos hablará sobre las posibilidades que
existen de reinventar la educación, bienvenido Chamalú.
Las nuevas generaciones, están cada vez peor, se están drogando cada vez
a más temprana edad, hay suicidios infantiles, hay una epidemia de
depresión; todo esto no es casual, esto es parte de lo que se podría decir,
en términos de mercadeo, abrir mercado, esto es fidelizar clientes, es
volverle a la gente dependiente de los fármacos, infeliz, para que en su
infelicidad compre cualquier cosa, es volver a la gente enferma para que en
su desesperación consuma cualquier cosa y, básicamente, preservar la
ignorancia, diplomas incluidos.
Creo que una persona no tiene que perder nunca la capacidad de soñar,
pase lo que pase y aunque los del entorno cercano no te comprendan,
continua soñando, algunos sueños no se harán realidad, no importa, pero
están ahí para hacerte avanzar, para matizar, para pintar de colores tu
vida; también soñamos con contribuir a la gestación de un mundo nuevo y
por eso estamos hoy aquí, por eso estamos haciendo lo que hacemos.
Anhelamos un mundo más humano, más ecológico, con niños corriendo
en libertad por los bosques, por los parques, con una naturaleza no
contaminada, con un modelo de sociedad que no confunda progreso con
destrucción, con relaciones interpersonales de afecto, de respeto entre la
diversidad cultural y cualquier tipo de diversidad que exista.
-Chamalú: ¿Quieres muy concreto o muy profundo? Porque son dos cosas
que van en direcciones distintas; bueno, hagamos un híbrido a ver cómo
sale. Hay que comenzar adoptando una postura crítica frente a la
educación actual, no podemos hacerle juego a un sistema que está
destruyendo a las nuevas generaciones, nosotros manejamos el concepto
de que el principal acosador de nuestros niños y adolescentes es el sistema
educativo, hay acoso escolar pero el acosador es el sistema, a los niños el
sistema les hace bullying.
Creo que los papás tiene que ser más rebeldes, hay que cuestionar la
educación, hay que averiguar qué están aprendiendo nuestros hijos, qué
se le está enseñando, tanto tiempo invertido para nada. Pregunten a uno
que acaba de lograr el bachillerato, doce o catorce años después de haber
iniciado su infancia y no sabe nada, solo sabe complicarse, está listo para
tener adicciones, para tomar malas decisiones, no se conoce; y justo en el
peor momento, además se le pide, se le exige, en muchos casos, que elija
qué carrera va a estudiar para toda la vida, obviamente ese joven se va a
equivocar.
-Chamalú: Sí, totalmente, creo que no hay tiempo para esperar, no hay
tiempo para perder, estamos llegando a limites absolutamente
insoportables. Me gusta la idea que pusiste al congreso de esta Cumbre:
Rebeldes con Causa, me parece muy importante ir recuperando el sentido
original de la palabra rebeldía, en este caso se justifica, necesitamos papás
rebeldes, que cuestionen lo que sus hijos están aprendiendo para que no
sean futuros drogadictos, porque te has puesto a pensar, ¿dónde se
estudia para ser drogadicto? En gran parte en las escuelas y también en
los hogares destruidos, por supuesto; necesitamos docentes rebeldes, que
pongan en tela de juicio la educación convencional, los jóvenes no pueden
seguir gastando su vida, los docentes no pueden seguir contribuyendo a
destruir a las nuevas generaciones y cobrar un salario por ello;
necesitamos docentes y jóvenes rebeldes, pero rebeldes con lucidez, que
pongan en tela de juicio un conjunto de malos ejemplos y malos hábitos
que se les va a inculcando como si fueran normales.
Necesitamos gente rebelde, que se aparte del rebaño de los que están
aceptando, de los que se están adaptando, de los que se están
conformando; necesitamos gente realmente rebelde, que realmente se
cuestione las cosas, que se pregunte, que dude, que reivindique el derecho
de vivir bien, este es el momento para ello, no podemos seguir esperando
más tiempo a que el planeta cambie, se está llegando a poner en riesgo
hasta la capacidad de mantener vida en su seno. Necesitamos poner en
tela de juicio muchas cosas.
Nosotros hace casi treinta años que hemos creado en Bolivia nuestra
comunidad ecológica-educativa. Tenemos una comunidad educativa, un
Ashram educativo, en el cual nos presentamos como una escuela para
aprender a vivir y viene gente de todo el mundo que aprovecha la
oportunidad, para quienes quieran saber de nosotros vean nuestra página,
escríbannos, porque estamos ahí, hemos recibido miles de aprendices que
han venido básicamente a aprender a vivir, es eso lo que hace falta, antes
se hacía eso, nosotros estamos plagiando a los Abuelos, prácticamente.
Hemos creado una escuela pero es una comunidad, allá no hay propiedad
privada, estamos en Cochabamba, Bolivia, en Sur América y la gente
aprende a vivir viviendo, aprende a dar sentido a su vida, aprende a que la
diversidad puede ser factor de unidad también, aprende a aprender de
todo, aprende a desaprender las cosas que le enseñaron mal. Esto
nosotros lo hacemos, lo vivimos, nuestra filosofía de vida es integral y
apunta a todos los aspectos: es espiritual, es mundana, es educación, es
terapia, es arte, es sabiduría ancestral pero también es lo más
contemporáneo. Estamos también viajando por diversos lugares del
mundo impartiendo enseñanzas, nos invitan a diferentes sitios y
acudimos, llevo treinta y ocho años haciendo esto, de manera que es
ancestral y es contemporáneo.
Antes se vivía sin propiedad privada, por tanto, no había un afán de lucro,
de tener más, se daba más importancia a la vida; ahora estamos en una
época donde todo es tener y hay que ir un poco liberándose de eso y
nosotros estamos en contra de vivir para trabajar. Nosotros estamos en
contra de cómo se está viviendo, de cómo se educa, no es correcto que uno
tenga que pasarse treinta, cuarenta años de su vida trabajando, eso no es
vida.
La gente no sabe qué hacer con su vida, entonces, su vida no tiene sentido
y se limita a deprimirse o coleccionar adiciones, algunos incluso llegan
hasta el suicidio; tenemos que hacer algo, menos mal que hay buenas
noticias, este túnel tiene salida, por ello es que nosotros usamos como
referente las sabidurías ancestrales, lo que nos preguntabas, antes había
mucha sabiduría que nos puede servir ahora, la estamos usando y la
estamos compartiendo con la gente.
- Jesi: Más que nada, empezar a trabajar en conjunto, absolutamente sin
importar a lo mejor que tú estés en Bolivia, yo en México y otras personas
en donde se encuentran, empezar a trabajar en conjunto, hacernos
conscientes de qué sería lo que es importante empezar a hacer y llenar
esos vacíos existenciales con los que vamos creciendo, mejor dicho.
-Chamalú: Sí, totalmente, ahora además con la comunicación tan fácil, así
por este medio, mediante internet, las redes sociales, podemos estar en
cualquier parte, fácilmente podemos participar en eventos como el que
estás organizando, esto es muy importante. La gente puede entrar en
contacto con nosotros por este medio, o de vez en cuando reunimos un
grupo de aprendices y nos vamos a la India, por ejemplo, en enero estamos
haciendo un programa bien atrevido, bien rebelde.
Porque antes de rebelarte serás una oveja más del rebaño y hasta cuando
no seas mínimo como la oveja negra, tu vida no tendrá sentido, estarás
pasando ahí, desapercibidamente, jugando un rol de extra en la película
de tu vida y creo que acertaste muy bien en el tema, hay que inducir a que
la gente se rebele, necesitamos rebeldes con causa, lúcidos, pero rebeldes.
- Jesi: Oye, están súper interesantes todos los proyectos que estás
realizando y en especial ahora el crucero y el retiro que vas hacer a la
India. Definitivamente, para empezar a trabajar en nosotros mismos y ya
que tocaste el tema, por curiosidad también, ¿qué desarrollan en el
crucero, por ejemplo?
- Jesi: Claro, ya que nos has dado un ejemplo y ya igual para ir cerrando,
porque nos estamos también excediendo un poco del tiempo que nos
otorgaste, comentabas eso de que estás hablando de las cosas que le
gustan a los niños o a los jóvenes. ¿Nos podrías dar un ejemplo creativo, a
lo mejor si hay algún maestro que nos esté escuchando para que tenga la
forma, una base para empezar a hacer sus clases de una forma diferente?
-Chamalú: A veces con los niños les hemos dado conferencias, enviarle a
un niño a una conferencia parece una imprudencia, ¿no? Sin embargo,
hemos hecho esto, por ejemplo, decirles: cierren los ojos y todo lo que diga
lo van a convertir en una imagen, lo van a ver, no escuchen, vean lo que
estoy diciendo y después la conferencia la convirtieron en una película y la
podían contar completamente; estamos hablando de niños de siete, ocho,
nueve años, mira cómo pueden ellos con la imaginación fresca que tienen,
convertir las palabras en imágenes y la conferencia en una película y por
tanto, no olvidarse de ella, eso con los niños.
Con los jóvenes, básicamente hay que recordarles que la vida es una
aventura, hay que recordarles que ellos tienen libertad para ejercer su
libro albedrío de manera lúcida. Yo estuve en una oportunidad dando una
conferencia a un grupo de jóvenes y comenzamos diciéndoles: “vine a
proponerles, eso que es típico en la adolescencia, en la juventud, que
siempre estén enamorados, enamorándose, en noviazgo, les propongo que
hablemos del noviazgo a plazo fijo, así, por tiempo limitado; todos que
estaban distraídos, jugando, hablando entre ellos..., silencio total, atentos
absolutamente y en un minuto estaban ya todos involucrados en el tema.
Primero hay que tener el valor de llamar las cosas por su nombre, el
sistema educativo actual es bueno para fabricar zombis y si alguien quiere
morir como un zombi, pues ya sabe, la escuela es una buena alternativa.
No estoy pidiendo que no vayan a la escuela los niños o jóvenes, pero que
además lean, que generen el hábito de lectura, que sean críticos, que no
crean todo lo que les dicen, que sean observadores, que se eduquen, en
gran parte, de forma autodidacta; hay que contrarrestar lo que nos están
inyectando en la cabeza en las escuelas, con una formación autodidacta;
buenos libros, cursos, tutoriales de YouTube, en fin, pero hay que
contrarrestar, hay que hacer que el hogar también sea una escuela, que
sea una escuela alternativa, donde estén aprendiendo a ser felices y es
fundamentalmente importante desarrollar el espíritu crítico.
Creo que con eso podemos hacer mucho más para que se salven nuestros
hijos de un sistema educativo perverso que los está destruyendo
totalmente. Quiero también invitarles a los adultos que nos están
escuchando, a que ellos mismos se miren, que vean cómo están viviendo,
qué están haciendo con su vida, con qué hábitos funcionan, hacia dónde
encaminan su vida, porque eso es ejemplo que están absorbiendo los niños
y jóvenes en casa. Es decir, no puedes decirle “quiero enseñarte a ser
feliz”, si tú eres infeliz; uno no puede dar lo que no tiene, claramente,
entonces coherencia, que pueda tu silencio ser elocuente, que puedan tus
hechos, tu estilo de vida, hablar aunque tú no digas nada.
Creo que con eso ya podemos ir teniendo algunas alternativas para salvar
a las nuevas generaciones y, además, decirles que se rebelen, es mejor un
hijo rebelde, pero lúcido, un hijo rebelde pero consciente, que un hijo
conformista, sometido, sumiso que después va a sufrir en la vida. Mejor
hijos rebeldes pero enseñémosles a que se rebelen con lucidez y tomando
buenas decisiones.
-Jesi: Muchísimas gracias Chamalú, por todo lo que nos has estado
compartiendo y por toda la gran aportación que nos otorgaste,
definitivamente eres un hombre de sabiduría, a todos ustedes que nos
estuvieron acompañando, los invitamos para que conozcan un poco más a
cerca de él y de toda su filosofía. Solamente me queda agradecerles a cada
uno e invitarlos a que nos sigan acompañando y nos vemos en una
próxima ponencia.
DESPERTAR A LA VIDA
-Chamalú: Seguramente para un Abuelo, que viene por primera vez a una
ciudad contemporánea, sería una sorpresa, sería casi un trauma ver tanta
gente viviendo una mentira. Decimos esto partiendo de que hay otras
cosmovisiones, otros abordajes de esta vida; decimos esto con la seguridad
de que esta civilización es apenas una manera de vivir que ha elegido (y
que lamentablemente se ha globalizado) temporalmente la humanidad,
pero que no es la única, han habido otras formas, otras cosmovisiones,
otras maneras de ir manejando la vida, eso nos da la tranquilidad de que
las cosas cambian, que este modelo de civilización es temporal. Nosotros
que hemos sido testigos de la destrucción de muchas culturas indígenas,
de mucha gente de sabiduría con tal conocimiento de causa, podemos
afirmar enfáticamente nuestra discrepancia con esta civilización que nos
propone modelos de desarrollo que, a nivel general, destruyen la Madre
Tierra y, en lo personal, estilos de vida que nos destruyen a nosotros,
imagínate.
Además, qué podemos pensar de una sociedad que para funcionar
necesita cárceles y manicomios, policías y gente armada para hacer que
uno se porte bien, al final uno ya no sabe si uno es bueno o tiene miedo de
terminar en una cárcel, ¿te das cuenta? Creo que hay que relacionar
mucho el tema de la autoestima (el motivo de este gran evento) con los
principios que rigen nuestra vida, con la manera como me veo, me siento,
me organizo y cómo me proyecto, porque ahí entramos en un gran dilema.
Si no hay un código ético, somos un peligro para nosotros mismos y
podríamos decir, sin exagerar, que hay gente que hay que cuidarla de sí
misma, por esa gran capacidad de tomar malas decisiones; entonces, en
ese punto yo me quedo pensativo cuando escucho a la gente decir, por
ejemplo en el ámbito espiritual: “sé tú mismo”; depende a quién le decimos
eso. Porque si le dices eso a alguien que está descontrolado, desubicado,
siendo el mismo se va hacer daño o le va a hacer daño a los demás; es por
ahí que tenemos que ir viendo que todo tiene que contextualizarse, si algo
no está contextualizado carece de sentido y hasta puede ser un mal
planteamiento.
Lo que nosotros pensamos desde otra cosmovisión, es que lo primero que
hay que ir desarrollando es un sentido crítico, por ahí van a aparecer
personas hablando de la autoestima, eso ya lo sabemos; nos van a contar
cómo opera la baja autoestima, ya lo sabemos; nos van a venir a contar
cómo está la gente, en fin; lo estamos viendo, salimos a la calle y lo vemos
allí, hay bajas autoestimas con ropa y zapatos caminando todos los días,
pero, ¿cuál es la causa?, ¿por qué hemos llegado a este punto?
Eso que tu mencionaste al principio de la última pregunta acerca de que
no nos enseñan a pensar, pues, no solo no nos enseñan a reflexionar sino
que está mal visto reflexionar, porque ello significa repensar las cosas,
significa que yo me pregunte: ¿por qué?, y preguntarse por qué a la gente
le incomoda. ¿Por qué estás viviendo así? ¿Por qué vives con esta persona?
¿Por qué trabajas en algo que detestas? La gente no quiere reflexionar y
esto tiene que ver con la educación recibida, así como con el contexto
social en el que estamos viviendo actualmente.
-Lucrecia: ¡Qué lindo aprender a vivir!, tendría que haber sido el nombre
de la conferencia en realidad y aprender a disfrutar, ¿no?
EXPO SER
-Mike: Buenas tardes, estamos con dos Maestros de la conciencia, dos
Maestros del nuevo tiempo que son Mabel Katz y Chamalú. ¿Cómo están?
¿Qué estamos haciendo aquí en Expo Ser?
-Chamalú: Todos somos hojas del mismo árbol y árboles del mismo
bosque, más allá de la diferencia de forma hay una esencia que
compartimos y esto nos recuerda que cada vez que ocurren encuentros
como estos podemos darnos cuenta que no estamos solos, que estamos
siendo parte de una constelación de corazones y eso multiplica nuestras
intenciones y voluntades.
-Mabel: Así es. A mí lo que más me gusta Chamalú, es como nos damos
cuenta que todos estamos hablando de lo mismo, llamándole a lo mejor
con nombres diferentes, a lo mejor con filosofías diferentes, pero que todos
vamos a lo mismo ¿no? Volver a casa, ser nosotros mismos,
redescubrimos, reconectarnos con nuestro verdadero ser.
-Mike: El 3D.
-Mabel: No, no hay que estar despiertos hay que mantenerse despiertos.
-Mike: Hay muchos mitos en esto de estar despierto, que a veces la gente
cree que es así como estar haciendo oms, o namaste o estar vestidos de
blanco y caminado sobre nubes. ¿Qué es estar despierto en el día a día?
¿Cuándo se dieron cuenta ustedes que despertaron, por ejemplo, qué pasó
en sus vidas?
-Mabel: A mí me gusta mucho, Chamalú, trabajar con los padres y con los
chicos, porque para mí ser madre, ser profesional y ser muchos de los
títulos que tenía se volvió mucho más fácil cuando desperté, cuando me di
cuenta que no tenía que ser la madre perfecta, que lo que tenía que hacer
era ser una madre feliz, o que no tenía que saberme todas las leyes en
Estados Unidos de la contabilidad, que no tenía que hacer todo bien. Por
ejemplo, cuando yo me despierto me doy cuenta que no tengo que ser
perfecta, voy hablar con mis jefes y les digo, ¿saben qué?, yo aquí no hago
más research, que era buscar y me di permiso y fui y les dije: “yo no hago
más esto”, porque yo sabía que yo era buena para otras cosas. Les dije:
“ustedes seguro tienen en esta oficina alguien que hace esto mucho más
rápido, más efectivo y ustedes pueden hacer más dinero”. Y nunca más me
dieron esa función, me lo respetaron porque yo de repente supe quién era
y me di a valer. No, yo no tenía que ser perfecta, ni hacerlo todo. A veces
con los padres parece que tenemos que ser perfectos, que tenemos que
saber todo y yo creo que como padres lo único que necesitamos es ser
felices.
Por otro lado, es fundamental que los niños tengan tiempo para jugar, que
tengan tiempo para escuchar cuentos; los niños no pueden estar todo el
tiempo en la escuela, eso es nocivo para su desarrollo cerebral, es
importante que tengan contacto directo con la naturaleza, descalzos, que
se suban a los árboles, que jueguen con la tierra sin que importe ni les
preocupe a los papás que la ropa se ensucie o se rompa, pues esto es parte
de su normal evolución y desarrollo. Cuando sean un poco más grandes,
es importante que viajen con ellos aunque sea cerca, ir de campamento a
la montaña, a la playa, al bosque, en fin y cuando se pueda, viajar a
conocer otras culturas.
-Mike: Hay mucha gente que es profesional del desastre y dice que el
mundo se va a la guerra, que nos estamos separando y todo. Yo quiero
creer que no es así, quiero creer en un futuro coherente, más pleno,
despierto ¿Cómo es su futuro despierto, el futuro de la humanidad
despierta? ¿Cómo es el futuro de la humanidad despierta de Mabel?
¿Cómo es el futuro de la humanidad despierta de Chamalú?
TRANSFORMACIÓN
-Dani: Muchas gracias por estar aquí. ¿Tú nos estás hablando desde
Bolivia?
-Dani: Tú, además, aprendiste de los abuelos, que muchas veces nosotros
no consideramos, o los consideramos como una persona pesada; cuando
los abuelos de hecho tienen una sabiduría que nos pueden dar mucha
visión. ¿Cuál es la diferencia de vivir en una comunidad a diferencia de
vivir en la civilización?
-Chamalú: En realidad, un buen aprendiz tiene que saber vivir en todas
partes. Una persona despierta es como el agua que se acomoda a cualquier
circunstancia y utiliza las circunstancias que tiene para continuar
creciendo, no tenemos que esperar condiciones favorables en el entorno,
eso es un error, no podemos echar la culpa a las circunstancias de lo que
nos pasa. El entorno es incontrolable, eso no está en manos de nadie, pero
sí tenemos, como aprendices de la vida, como iniciados a la vida plena,
tenemos que aprender a elegir lo que necesitamos, lo que nos hace felices,
lo que nos permite crecer o aquello a partir de lo cual podemos ayudar a
los demás, el resto es innecesario, hay que descartarlo.
No podemos perder tiempo en una vida tan corta, creo que es fundamental
tener las cosas claras, en principio, más que buscar recetas, más que
adherirse a alguna secta religiosa, más que fanatizarse por alguna
metodología espiritual, lo que tenemos que hacer es abrir la mente,
atrevernos a dudar, a repensarnos, a no tener miedo de ser críticos con
nosotros mismos y con los que vemos. El lugar donde vivamos está en
función de lo que cada uno elija, vivir en comunidad tiene algunas
ventajas pero no todo el mundo está preparado para vivir en comunidad,
de todas maneras no es fácil ni difícil, cada circunstancia tiene sus
desafíos y lo que importa es la actitud de un buen aprendiz, que es la de
aprender de todo lo que le pasa.
Cada uno tiene que elegir los hábitos que necesita para los objetivos que
tiene en la vida; un hábito es básicamente una herramienta, entonces no
tenemos que tener hábitos para coleccionarlos, para hablar de ellos. Un
hábito es válido en la medida en que me sirve para lograr los objetivos que
tengo en la vida y los hábitos que no me sirven hay que descartarlos
directamente.
Esa es nuestra manera de vivir y todo esto tiene como respaldo las
sabidurías ancestrales, la sabiduría de los Abuelos, porque para nosotros
un Abuelo no es un señor de mucha edad, sino una persona, mujer u
hombre con sabiduría; porque también hay gente que se pasó la vida
sobreviviendo, entonces tiene frustración, rabia y muchas otras cosas, no
sabiduría. No es una cuestión de años, es cuestión de sabiduría, de
conciencia y de lo que uno hizo con su vida.
-Dani: Sí, y muchas veces también los hombres tenemos que aprender de
las mujeres esa sensibilidad, porque es algo que nos conecta más con el
Universo, con el ser, a no estar cerrados como hombres sino abrirnos a
esta conexión. ¿Cómo la persona puede lograr esta conexión? Porque, a
veces, muchas personas están mucho en la mente, no logran o no saben
cómo escuchar esta voz que tienen dentro o conectarse con el absoluto,
con el Uno, con el Universo. ¿Tienes algún consejo para las personas que
quieran acercarse a esta dimensión, que no es común?
-Chamalú: Bueno, tenemos que ver esto otra vez de una forma natural, lo
natural es que seamos felices, que seamos amorosos, es que tengamos
pocas necesidades, que seamos espirituales sin vínculo religioso alguno,
pero espirituales existencialmente hablando, es decir, conscientes de lo
que estamos siendo y haciendo, pensado y sintiendo. Es muy importante ir
redefiniendo lo espiritual, ir acercándose a la naturaleza como una forma
de irse purificando; es muy importante hacerse amigo del silencio, tener
tiempo para uno mismo, tener el valor de dudar de casi todo lo que
aprendimos y continuar explorando. A medida que vamos haciendo esto se
va a ir modificando nuestra forma de vivir, nuestras necesidades y todo
esto va a terminar llevándonos a otros niveles de conciencia, de eso se
trata.
Los hombres tenemos el deber de tener mucha humildad con la mujer, no
tener problema de aprender de ella. El machismo no solamente es anti
femenino sino también anti masculino, el solo hecho de decirle a un niño
“los hombres no lloran”, lo están entrenado para ser una persona
autorepresiva y la emoción que no se exterioriza, que no es canalizada o
transmutada adecuadamente, termina formando bloqueos energéticos, lo
que termina traduciéndose en enfermedades. Es muy importante que los
hombres se liberen del machismo y de toda concepción patriarcal.
-Dani: Todo lo que has dicho es verdad y muy importante, porque esta
conexión con la naturaleza, de la que nos has hablado, este escuchar, esta
sensibilidad que has dicho que tienen las mujeres y que nos pueden
ayudar a tener, esta transformación, ese cambio es muy valioso. Y para ir
concluyendo la entrevista, ¿te gustaría compartir algo adicional a las
personas que están en este evento sobre transformación y que están
buscando su sentido de vivir?, porque a veces la vida diaria nos deja un
poco desorientados; ¿si quieres compartir algo antes de cerrar?
En segundo lugar, quiero decirles que hay que hacerse cargo de la vida,
más que dejar la vida a cargo de alguna divinidad, o creer en un supuesto
destino, no existe el destino, el destino es la consecuencia, los efectos
colaterales de nuestras decisiones, hay un libre albedrío por lo que no
puede existir un destino mientras haya libre albedrío. ¿Qué significa esto?
Que nosotros elegimos, por eso hay tanta gente viviendo mal.
El ser humano elije vivir bien o mal. Algunas veces consecuencias de actos
anteriores, de siembras erróneas pero esto se resuelve haciendo servicio.
El servicio es la devolución o el pago de las deudas que podamos tener,
pero no podemos vivir pensando que nuestra vida está dirigida desde otra
parte. Asumamos la responsabilidad de estar vivos, de ser libres, de poder
elegir, entonces elijamos, ojalá con lucidez, lo que sea mejor para nosotros.
En tercer lugar, es muy importante saber que esta civilización, esto que se
ha impuesto, que se ha globalizado, es solamente un modelo civilizatorio,
antinatural, antihumano, anti-espiritual, anti-felicidad, anti-todo, anti-
vida. Pero en el planeta hay miles de culturas, hay miles de cosmovisiones,
otras maneras de vivir, hay otros estilos de vida, vayamos atreviéndonos,
en un acto de rebeldía, a explorar otras formas de vivir. La vida y nuestra
salud están en nuestras manos, no las dejemos en manos de nadie; no
puedes dejar tu salud en manos del médico, es mejor tener una cultura
preventiva y para eso no hace falta ir al médico.
Pero antes de darle paso, para que él nos cuente su historia y sus
herramientas, les voy a leer un poquito de su biografía. Chamalú es uno de
los líderes espirituales más reconocido de Sur América, fue pionero en la
época de los 80 de la ecología social en Bolivia, su tierra natal. Fue
fundador del movimiento ecologista Pachamama universal. Creó con sus
propios medios, recursos, la comunidad Janajpacha, un Ashram
chamánico, un espacio de ecología social y una escuela de vida para
aprender a vivir; es director del Centro de Sanación Andino, Co-fundador
de la Escuela de Felicidad online, conferencista internacional; ha
impartido más de 11.000 conferencias en los cinco continentes, ha escrito
más de 70 libros, muchos de ellos traducidos en varios idiomas.
Una vida sin propósito es una vida desperdiciada y, muchas veces, las
personas requieren una segunda oportunidad, que menos mal la vida en
su generosa bondad le va proporcionando a cada uno. Me gusta la
temática de este congreso porque nos va proponiendo una especie de
mirada retrospectiva, un sobrevolar lo que ya fue, lo que ya paso. En los
Andes decimos que el pasado está en frente, porque lo podemos ver y en
cambio el futuro está detrás porque es lo que se desconoce, se ignora; es
interesante, estamos diseñados para el asombro, para la sorpresa. Por eso,
un buen aprendiz tiene que estar preparado para todo, en especial para
aprender de todo lo que le pasa, para disfrutar de todo lo que ocurre, para
asumir su rol de aprendizaje a lo largo y ancho de la vida, porque la mejor
escuela es ella.
Aún florece en mi memoria ese cactus de flor blanca, que durante muchas
semanas prepara ese único día de fiesta, que será de un solo día. Me
resultaba interesante, un enigma, un misterio en forma de futuro, ese
pimpollo, ese capullo que un día, finalmente, al contacto con el sol, se
abría; era una fiesta para los insectos, para las mariposas, picaflores, me
incluyo en esa fiesta que, sin embargo, terminaba para siempre a la puesta
del Sol y al día siguiente era un recuerdo. Esa fue mi escuela, ver el
lenguaje de la naturaleza, comprender la fugacidad, porque esa flor, tan
largamente gestada, apenas duraba un día, así como es la vida. Con ello,
gradualmente fui aprendiendo a valorar cada día, cada momento, a
entender que ningún momento se repite, podría haber mariposas volando
un día y a los pocos días ya estaban allí, convertidas en un par de alas
desgastadas por el paso del tiempo.
Comprendí que las cosas se acaban, comprendí que los obstáculos pétreos
desaparecen mientras los acaricia la fuerza del agua, que con sutileza y su
capacidad de fluir se adecúa a toda circunstancia; cada circunstancia es
como un recipiente y una persona que aprende a adecuarse a cada
circunstancia es como el agua, no se complica. Se podría decir que esta
fue mi primera escuela hasta mi adolescencia, viví entre el bosque, la
montaña, los ríos y los accesos clandestinos a la biblioteca prohibida de mi
padre; creo que esa fue mi primera etapa hasta la edad de catorce o quince
años, en la cual tuve el privilegio de tener mi primera crisis existencial,
que inauguró la segunda etapa de mi vida.
-Olivia: Una pregunta, ¿estás diciendo que durante la época, a los catorce
años pasaste una crisis existencial y el transcurso de esa etapa fue en la
que descubriste y encontraste todo, toda esa trascendencia, esa escuela de
vida que te enseño y te abrió a entender la vida desde otro punto de vista?
¿Cuánto duro ese transcurso de tiempo? Lo digo porque hay personas que
pasan muchísimo tiempo y muchísimos años intentando encontrar esa
respuesta. ¿Cuánto puede cualquier persona llegar a entender y encontrar
esa respuesta?
-Chamalú: Sí, una crisis es el anochecer del alma, sin embargo, si nos
atrevemos, y es muy importante no darse por vencidos, si nos atrevemos a
vestirnos, a arroparnos, a abrigarnos de optimismo a pesar de que no
comprendamos muchas cosas en ese momento, si nos atrevemos a
preservar la alegría, si mantenemos el optimismo de pie, entonces vemos
las estrellas de la noche. Vemos esos puntitos de luz, recordándonos o
invitándonos a vestirnos de luz, vemos a la luna creciendo de luz y nos
damos cuenta que la oscuridad es un contexto de pruebas para vestirnos
de luz, para aprender otras cosas, quizás que las teníamos pendientes.
-Chamalú: Es que la felicidad no viene con las buenas noticias, esa es una
falacia, nos han hecho creer que cuando todo está bien, somos felices,
mentira. Hay que desechar eso, a los que nos están escuchando, por favor
tomen nota de esto. Yo escribí hace pocos años un libro que se llama
“Maestría en felicidad”, se publicó en Colombia con la editorial Intermedio,
lamentablemente solo circula por allá, Colombia, Ecuador, Centro
América, quizás a nivel online se puede conseguir, fue un best seller en su
momento. Toda la gente quiere ser feliz pero casi nadie lo logra, ¿cuál es el
dilema? ¿Cuál es el misterio? ¿Por qué la felicidad es tan tramposa?, se
esconde con tanta habilidad, todo el mundo buscando, algunos a través de
la fama, el dinero, en fin, el estatus y sin embargo, cada vez más infelices
poblando el planeta.
Hay personas que creen que van a ser felices con el último coche que se
compran o con la casa más grande que adquieren y se endeudan por
treinta años; eso no tiene nada que ver con la felicidad, la felicidad no está
asociada al tener, puede haber gente que tenga muy poco y ser
inmensamente felices y gente que esté lleno de cosas y este vacía, sin
sentido, aburrida, llena de cosas y planeando suicidarse.
-Olivia: ¡Qué gran verdad! Tiene toda la razón. Otra pregunta, ya que
estamos más avanzados en la entrevista, ¿cómo afecta a nuestro cuerpo y
organismo, a todos nuestros sistemas, si no estamos en concordancia con
lo que realmente queremos hacer o con lo que hemos venido hacer?
-Chanalú: Bueno, mira, te confieso que yo no leo mis libros, los escribo y
normalmente no los leo, la gente queda encantada, algunas (en especial
las mujeres) no lo sacan de su bolso. Hay un libro que se publicó en su
versión rústica, que va a salir editado el próximo año, que se llama el
“Despertar de la Guerrera”; también es un evento, un retiro que hacemos
para mujeres. Es un libro que tiene la extraña particularidad de conmover
a la mujer a pesar de que está escrito por un hombre; siempre le pedimos
a las mujeres que lleven dos, porque luego no quieren compartirlo, se
aferran tanto a este material.
Es como un telar, un tejido, en los Andes hay tejidos hermosos que son la
combinación artística de hilos de muchos colores que tenemos que saber
trenzarlos, saber manejarlos artesanalmente con sensibilidad, con lucidez;
cada día nos toca hacer el telar del aprendizaje, del conocimiento y de la
vida misma, cada día nos toca ir manejando la información que nos llega,
primero, sabiendo desechar la influencia que no queremos; por favor,
elijamos la influencia que queremos que entre en nuestro campo
energético. Luego, cuando es información útil, llevémosla a meditación, a
reflexión, llevémosla al diálogo, porque de esa manera se convierte en
conocimiento, que cuando es aclimatado al momento que estamos
viviendo, se puede compartir en sabiduría, que es modificación de nuestro
nivel de consciencia y por tanto ella crece.
PLACER Y FELICIDAD
-Yaiza: Lo mismo digo, para mí también es una gran alegría poder tener
esta oportunidad de charlar contigo directamente, que nos expliques estas
cositas que van a venir a continuación. Antes de empezar la entrevista,
para la gente que todavía no te conoce, me gustaría que nos explicaras un
poquito quién eres y la gran función que estás haciendo, tu manera de
trabajar, que es muy diferente a la mayoría de personas, autores o grandes
influencias que estamos viendo. Tú tienes una manera muy específica de
trabajar y me gustaría que nos la presentes un poquito.
Muchas veces, bueno, por lo menos aquí pasa, que muchos abuelos pasan
muchas horas muy solos, se ha perdido un poco esa comunicación de tú a
tú; por lo tanto, me parece una gran labor volver atrás, como explicas
también en tu página web, conectar esa sabiduría ancestral con estos
tiempos contemporáneos, porque yo creo que muchas veces sobretodo la
gente joven, estamos un poco perdidos, vamos viviendo, vamos haciendo,
pero realmente tenemos la sensación de que nos falta algo dentro, como
que queremos conectar con algo más y a veces no sabemos por dónde
empezar. ¿Que nos aconsejarías tú para vivir, pues, esto, una vida con
más sentido, con más espiritualidad tal vez? ¿Con esa parte que tal vez se
nos está olvidando en nuestras sociedad?
-Chamalú: Lo que pasa en las ciudades es que el humano entra en una
dinámica, una especie de síndrome colectivo de aceleración, que hace que
uno acabe constituyendo una manada, un rebaño, generalmente acrítico,
donde ya no se hace lo éticamente correcto, sino lo que hace la mayoría, o
las novedades en forma de modas que terminan también siendo repetidas
de una manera totalmente irreflexiva.
La gente se viste como se visten todos, sin cuestionarse por qué; esta
especie de manipulación consentida por las mayorías, a su vez, tiene el
previo de una educación que ha ido masificando a la gente, la educación
ha ido mutilando, aniquilando, destruyendo la diversidad, la
espontaneidad, la creatividad, para fabricar al hombre masa que se va a
amoldar, el que va a encajar. Si tú te das cuenta, encajar supone
cosificarse y entrar en casilleros denominados normalidad, en ese contexto
no es posible encontrar sabiduría, no es posible ni siquiera encontrar
felicidad, por eso hay tanta gente infeliz, por eso la gente se suicida, por
eso tanta depresión en este modelo de civilización.
Primero tenemos que darnos cuenta qué época nos ha tocado vivir, a mí
me sorprende que hay gente que va dando soluciones como el médico ciego
que no sabe qué problema tiene la persona, qué momento está viviendo,
una gastritis puede ser producida por la suegra, un insomnio puede tener
como causa que uno detesta el trabajo en el que está, entonces no
podemos ignorar el contexto en el que está. Las cosas fuera de contexto
carecen de sentido, una realidad que es como es, no vamos a cerrar los
ojos ante ella, requerimos soluciones nuevas, basadas muchas de ellas en
las sabidurías de otros tiempos, requerimos soluciones creativas,
requerimos repensarlo todo, incluso las soluciones que mucha gente va
impartiendo en eventos como estos deben ser susceptibles de repensarse,
porque más de lo mismo no resuelve el problema.
-Chamalú: Sí, puede ir por ahí, puede ir por muchos lugares, nosotros
somos anti recetas porque en la práctica no funciona y no funciona porque
cada uno es único, cada uno es una historia única e irrepetible, cada uno
tiene el deber de descubrir, decodificarlo, comprenderlo, abordarlo. Por ello
es que hay un punto en el cual la enseñanza tiene que personalizarse y es
ahí donde nosotros hablamos ya de una ruta de aprendizaje que
desemboca en situaciones iniciáticas, que responda a lo que realmente
necesitamos, porque cada persona es como una cerradura, el conocimiento
tiene que ser como la llave que acciona esa cerradura, de lo contrario es
solo información, es como cualquier llave que va a estar periféricamente
circulando y uno puede tener mucha información y ser un ignorante, uno
puede tener hasta un doctorado encima y no tener nada de sabiduría,
pues esta se expresa en calidad existencial, en esa dirección va nuestra
filosofía de vida.
Aquí entraría un poco esta temática que tratas en este último libro, que yo
creo que hace falta rebelarse, porque todos nos creemos así muy chulitos y
todos vamos como de muy listos, pero luego, a menudo nos vemos
sorprendidos por nuestros propios miedos y condicionamientos, así que
desde luego también pondré un enlace a este libro, porque necesitamos
adaptar esa rebeldía, pero de esta forma adaptativa no como algo
destructivo.
Yaiza: Muchísimas gracias a ti, sobre todo por estos mensajes y por este
final tan bonito y tan importante del que, por lo menos, yo tomo nota y
bueno no sé si podré dormir esta noche pero, sí que voy a reflexionar sobre
todo lo que has comentado, porque a pesar de que intento estar viva,
muchas veces sin querer, como a la mayoría de personas que por lo menos
vivimos en ciudad, nos vamos dejando arrastrar. Por lo tanto, creo que
esta ponencia es perfecta para hacer un poquito de parada, volver a
conectar con estos mensajes tan profundos, con esta sabiduría ancestral y
sobretodo disfrutar de la vida, muchas gracias Chamalú. Un abrazo.
ENTREVISTA CON BELÉN ZAMBUCETY, EN EL MARCO DEL
CONGRESO VIRTUAL: TU PODER INTERIOR
-Belén: Claro, y tú que promueves una nueva forma, una nueva filosofía de
vida en el que ser realmente felices, el amarnos a nosotros mismos, a ser
libres, pero muchas veces buscamos la felicidad en los lugares erróneos.
¿Qué es realmente la felicidad?
-Chamalú: Sí, en realidad hay que aprender a vivir el arte de vivir, porque
es que a vivir se aprende. No es cuestión ser mayor de edad, de ser
ciudadano, de tener un título, académico, la vida pasa por otro tipo de
aprendizajes, otras destrezas que nosotros les llamamos destrezas
existenciales y que básicamente nos habilitan para poder fluir ante las
diversas circunstancias cambiantes e impredecibles de la vida.
-Chamalú: Claro, para empezar, hay que descartar recetas, se trata de una
actitud, se trata de un proceso gradual, que no se sabe cuánto tiempo
puede durar, pero no hay el fast food espiritual, eso es un total engaño.
Justamente nosotros estamos pensado, en nuestro próximo libro,
referirnos a este tema, se llama espiritualidad mundana y estamos
poniendo en tela de juicio muchas panaceas y muchas supuestas
verdades, que en el fondo son pompas, burbujas, son simplemente
señuelos.
-Chamalú: Hay una frase que me gusta usarla con frecuencia hablando de
esto del control, nosotros hablamos del descontrol controlado, porque la
vida en el fondo es impredecible, no sabemos lo que nos espera ni siquiera
en la próxima hora. Pero, por otro lado, ese es el encanto de la vida, por
eso no me gusta la gente que nos lee el futuro, nos quita el placer de la
sorpresa y la posibilidad del asombro.
-Belén: Sí, por eso siempre se habla de encontrar esa misión de vida y al
fin y al cabo es encontrar eso que te apasiona, es lo que, al final, la
frase que se dice siempre: "una vez que encuentras tu pasión ya no es
como si estuvieras trabajando porque realmente todas las horas que le
dedicas, se lo dedicas a aquello que realmente te gusta hacer”. Como en tu
caso, tú aprendiste o descubriste de muy joven que lo que te gustaba era
ayudar a los demás. ¿Cómo podemos descubrir esa pasión? Indagando en
nuestro interior supongo, ¿no?
-Chamalú: Bueno, está claro que uno no puede agradar a los demás y
desagradarse a sí mismo, eso sería un acto de infidelidad contigo mismo
totalmente imperdonable, yo creo que hay que buscar un equilibrio. Hay
otra frase que la hemos usado con mucha frecuencia, es la frase:
"Insoportablemente feliz", que justamente alude a que en cuanto uno se
declara feliz, se atreve a ser uno mismo, se trabaja y, en fin, va
transformándose, entonces, hay una emboscada de incomprensión que se
va generando en torno a uno.
Por lo tanto, uno tiene que estar con una felicidad todoterreno, el ejemplo
es: si enciendes una vela, conviértela rápidamente en una hoguera,
porque, si no, el ataque del prójimo, de todos, te la va a apagar y te van a
desanimar, confundir y vas a terminar peor que antes. Por eso hablamos
de la Guerrera. Nuestros principales programas, los cursos que hacemos y
el instructorado que estamos lanzando ahora para entregar este legado de
sabiduría, básicamente apunta a la mujer. A ella le estamos diciendo:
“Usted, hágase cargo de conservar el fuego del conocimiento y
retransmitirlo a las generaciones nuevas, porque esta civilización no tiene
futuro tal y como está, porque nosotros estamos convencidos también que
el futuro será femenino o no habrá futuro". Obviamente estamos hablando
de la mujer despierta.
Entonces, el tema que preguntas de la felicidad de los demás, sí, pero para
empezar, si queremos contribuir a la felicidad de los demás tenemos que
saber que la felicidad no viene de afuera, nadie puede hacer feliz a otra
persona, ni infeliz tampoco, sin el consentimiento de uno, partamos de esa
premisa. Podemos dar buen ejemplo y mejor si es desde la autenticidad,
podemos hacer que nuestra vida deje huellas inspiradoras y podemos
motivarles, esa es muy buena idea también, lo que no podemos es hacer
feliz a los demás, complacer a otros, pues cuántas veces nos hemos
encontrado con personas que han estudiado como tú mencionaste, una
carrera para complacer a sus papás, a su padrino, a su hermano mayor y
al final terminaron graduados de mediocres o abandonaron la carrera a
mitad de los estudios, perdieron un tiempo o egresaron pero no ejercen,
todo ello porque uno no puede ser bueno si no está en lo que ama.
Yo no creo que haya un gran despertar, creo que cada vez hay más gente
buscando y despertando, pero todavía somos una minoría, no nos
engañemos. Algo muy importante también, es que todo el tema de la
Nueva Era, ese facilismo, reduccionismo que se ha puesto de moda, puede
ser más de lo mismo, puede terminar haciéndole juego al sistema, porque
lo que necesitamos es disciplina consciencial, lo que necesitamos es
embárcanos en procesos de transformación que llevan años, esto no es un
fin de semana, no es cuestión de pensamiento positivo y la frase optimista
de decir: “todo está bien”, porque no todo está bien; de decir que todo lo
que te pasa es perfecto, no, porque hay tantas cosas que son
desagradables, que son injustas y que forman parte de un libre albedrío
mal manejado; creo que un buen aprendiz tiene que estar atento, porque
hay mucha falacia, hay mucha mentira.
Yo no creo que haya un gran despertar, creo que cada vez somos más , eso
es cierto y fíjate que esto te lo digo después de estar cuarenta años
viajando por los cinco continentes, después de haber estado en más de
1.3000 ciudades del mundo, después de haber estado dictando más de
11.000 mil conferencias y seminarios y haber escuchado a miles y miles de
personas, no creo realmente que estemos en una supuesta Nueva Era y no
importa lo que digan los astrólogos, yo tengo amigos astrólogos que se van
a enojar conmigo, quizás por escucharme hablar así, pero tenemos que
empezar por no mentir más a la gente.
Estamos en una situación bastante fuerte, crisis por todos lados y hay
grandes posibilidades de despertar, ojalá masivamente, pero todavía hay
mucha gente durmiendo, cada vez más nuevas generaciones están
enganchadas al internet, a las redes sociales, al móvil, en fin. Creo que
todavía somos una minoría y por eso me interesa participar en estos
eventos, quizás seamos la voz disonante, la voz disidente, la palabra
critica, quizás después de cada conferencia me gane algún nuevo enemigo,
pero vamos a ser honestos, para empezar con nuestra consciencia y con lo
que la gente, por respeto, merece y es que se le digan las cosas tal y como
son.
Hay alternativas de solución, nosotros mismos estamos treinta años
impulsando una escuela por donde han pasado miles de aprendices,
donde lo económico no es un requisito para venir con nosotros, hemos
publicado montones de libros y le estamos diciendo a la gente: “este
modelo de civilización tiene que ser transformado, la mujer tiene que jugar
un rol fundamental, el que le ofrece la actual circunstancia planetaria para
fundar una civilización más humana, para repoblar el planeta Tierra de
seres humanos”. Creo que esa es nuestra breve caracterización del mundo
actual, soy optimista pero con los pies en la Tierra.
-Belén: Claro, sin duda existe todavía mucha oscuridad y mucha crisis en
todos los sentidos, pero, bueno, la parte positiva es lo que mencionabas tú,
cada vez hay más gente que va despertando, cada vez se escucha más
sobre distintos temas que antes era impensable, incluso el chamanismo, la
meditación, todos estos temas están cada vez más a la orden del día, que
se necesita mucha gente todavía más despertando, obviamente, por eso
estamos aquí y esa es la intención de este congreso como bien decías tú.
-Chamalú: Gracias una vez más por esta oportunidad y por a través tuyo
llegar a mucha gente. Me gustaría decir tres cosas para despedirme: la
primera de ellas, definitivamente tenemos que preservar el optimismo y el
entusiasmo, hay razones para hacerlo. Aprender a vivir y al interior de ello
aprender a ser feliz, a amar, a ser libre, a estar en paz, a no enfermarse, a
renunciar, a fluir, todo eso es posible, solo que no se da en un fin de
semana, ni en un seminario rápido, pero sí como un estilo de vida en el
cual, bajo enseñanzas creíbles y profundas, uno puede reinventar su vida,
eso es totalmente posible. Nuestra filosofía está basada en las sabidurías
ancestrales aún vigentes, creo que mejor control de calidad que el tiempo
no existe, por un lado; pero seguramente hay muchas otras formas
auténticas de lograrlo, todo lo que sea auténtico bienvenido, todo lo que
sea coherente bienvenido, todo lo que sea reflejado en la forma de vivir
adelante.
PROSPERIDAD INTEGRAL
Uno de los miedos más comunes que tienen las personas, es: “no sé lo que
va a pasar”, es que yo quiero de repente iniciar este proyecto pero no sé lo
que va a pasar, yo quiero comenzar esta relación pero no sé lo que va a
pasar. En ese caso, estimadísimo Maestro Chamalú, ¿cuál es esa guía,
cuando nosotros nos paramos y decimos: “oye yo quiero, sí, estoy viendo
que ya esto está muriendo y está empezando a nacer algo nuevo, pero no
sé lo que va a pasar”?
Las abejas van a construir siempre su colmena igual y van hacer lo mismo
del resto de su especie, hoy como hace miles de años y lo mismo cualquier
otro animal. El humano que se independizó del mundo animal a partir de
esa capacidad consciente de darse cuenta de su existencia, de repensar su
paso por la tierra, de comprender su finitud, de preguntarse, en fin, debe
darse cuenta que “el precio de su libertad es su incompletud”.
Yo les enseño a mis aprendices a que cuando está todo muy tranquilo,
sereno y muy pacifico, que convoquen tener problemas, adversidades,
porque con ellos es que nos hacemos fuertes, flexibles, creativos,
desarrollamos la paciencia, el amor, el humor, en fin, dinamizamos
nuestro crecimiento.
Ahora bien, no todos los planes que uno tiene se hacen realidad; en mi
época juvenil soñé hacer una comunidad en la selva boliviana sobre los
árboles, con caminos de puentes colgantes, durmiendo junto a los árboles,
ahí arriba. No se pudo hacer realidad, el progreso corta tan rápidamente,
tan vorazmente la selva que prácticamente nos quedamos sin árboles, a
pesar que ya eran supuestamente nuestros.
Cuéntanos un poquito cómo fue ese proceso, para aquellos que en algún
momento quieren crear no sé, a lo mejor, es que yo quisiera tener un
centro de yoga o yo quisiera tener algo, pero es que claro es Chamalú, o
sea él puede, yo no puedo. En ese proceso de creación de Janajpacha,
¿cuál fue el proceso y en el tema especialmente financiero, este soltar los
recursos que tenías y empezar a ponerlos, a invertirlos en ese sueño?
Creo que hay que empezar teniendo el panorama claro. La gente viene a
nuestro Ashram en Bolivia y dicen: “pero aquí han gastado muchísimo
dinero”, sí muchísimo varios millones de dólares ¿Y alguien les
financio? Nosotros comenzamos diciendo: “no vamos a aceptar donativos”,
porque esto era la misión de mi vida, aquí hay un dato muy importante. Si
uno toma un camino muy fácil llega más rápido pero al lugar equivocado;
en realidad, una meta, la cima de una montaña es atractiva, pero en la
cima no hay nada. Lo interesante es el camino y esto lo aprendí en mi
adolescencia, cuando por fin llegué a la cima de una montaña piramidal en
Cochabamaba, donde vivo, ¡qué frustración que sentí!, tenía catorce años.
Yo había crecido toda mi vida mirando esa cima, esa montaña y,
finalmente, logré llegar a esa edad y allá no había nada, ni siquiera la
pirámide que veía desde abajo, porque estaba encima de ella, obviamente
en mi adolescencia no comprendía ese detalle.
La clave es que tengamos claro que misión y profesión son opuestos, pero
que se pueden volver complementarios en el estilo de vida. La clave es tejer
puentes entre lo interno y lo externo, la clave es hacer lo que amamos
porque entonces nos conectamos a eso que yo llamo el wi-fi cósmico, a
partir del cual dejamos de gastar nuestra energía y nos volvemos
incansables, la gente es incansable cuando hace lo que ama porque ya no
está gastando su energía.
A partir de una caracterización del mundo, del tiempo que nos ha tocado
vivir, de esta civilización y sus características y, por otro lado, lo que
nosotros hemos traído como misión en la vida, que es un deber más que
un derecho, el deber de conocerlo para desplegar nuestro crecimiento,
entonces, con todo esto nuestra vida tendrá sentido.
-Chamalú: Bueno, muy agradable también para mí, me gusta la gente que
usa su inteligencia, me gusta la gente que convertida en artesano de la
palabra se atreve a esculpir el silencio, sin degradar ese nivel, tan
profundo que tiene. Me gusta la gente que reflexiona, que sabe
preguntarse, que no tiene miedo a preguntarse, que cada pregunta es una
flecha que marca cada dirección para ir llevando nuestra vida, me gusta la
gente que de vez en cuando me dice: “Chamalú, siguiendo tus enseñanzas
estoy en crisis”, entonces, excelente.
Hay algunos otros miedos que van a estar ahí, en el rincón, al fondo a la
derecha de tu vida, mirándote impotentes y tú haciendo lo que elegiste
hacer. Hay miedos que van a estar con nosotros pero que no nos van a
impedir nada. Entonces, si ese miedo no te interfiere déjalo, no gastes tu
tiempo y tu energía luchando con algo que es apenas totalmente inocuo.
Tú adelante, lo importante es que estés en camino y que este proceso lo
estés disfrutando.
El humano necesita todavía dos, tres años, para poder ser más o menos
independiente, pero eso es un tiempo en el que uno sigue desarrollándose,
como que estamos aún en la vida intrauterina fuera del útero. Es un
tiempo en el que maduramos jugando, por eso enviar muy temprano a los
niños a la escuela es un error. El cerebro de los niños necesita que
jueguen y tengan contacto con la naturaleza. Nuestro potencial, ¿qué es?
¿Sabes?, cuando se habla de talento, cuando se habla de vocación, no está
esto anclado a lo laboral, eso es una distorsión lamentable. Estoy en
muchas conferencias y entrevistas diciendo: tenemos que corregir, hay
una gran distorsión de estar articulando el talento con lo laboral. El
talento es un llamado del alma que tiene que ver con el propósito
existencial, está articulado a la misión que es lo que da sentido a la vida;
por tanto, el potencial no es otra cosa que las herramientas con las que
nos han enviado para cumplir una misión.
-Alfonso: Tal cual. Qué importante lo que acabas de decir, porque sí, de
este lado, sobretodo del lado de occidente, se cree que la misión, los
talentos tienen que ver o son directos hacia el trabajo que hacemos.
Entonces, por lo que acabas de decir, lo que yo interpreto es: una cosa es
en lo que se trabaje de forma terrenal, vamos a decir, y otra cosa es qué es
lo que yo vengo a desarrollar de mi esencia digamos, ¿es así?
-Alfonso: ¡Guau! “Es pecado no ser feliz”. Muchas gracias Chamalú, por tu
presencia, honro tu vida.
-Idoia: Sí, justamente a mí, y creo que a muchas personas, la vida que se
nos plantea es que venimos de una filosofía y de religiones que nos han
inculcado el que ser feliz, el disfrutar, es como un poco de pecado, de
sentimientos de culpa, de que hay que renunciar, de que la vida es un
poco un camino de sufrimiento, que hay que aguantar y justamente usted
propone una vida de felicidad, de salud y de vivir realmente con propósito
y abundancia. ¿Cómo podemos, Chamalú, sentirnos merecedores de
recibir y de vivir esta vida plena con este tipo de creencias inculcadas, de
forma tan intensa en el ser humano a lo largo de los siglos?
Idoia: ¿Cómo podemos aprender a ser más felices? ¿Qué consejos nos
puedes dar para esto?
-Idoia: Exactamente, pero, ¿cómo se puede uno dar cuenta o sentir que
está haciendo su propósito? Me imagino que sentirlo y que cuando tú lo
estás viviendo ya estás sintiéndote pleno y satisfecho, con lo cual ya sabes
que estás llevando tu camino; pero para las personas que se encuentran
insatisfechas, que no están viviendo su propósito, ¿qué les suele proponer
usted para aprender a cómo conectarse?
-Idoia: ¿O sea que no tiene nada que ver ni con el Karma ni con la
voluntad divina el hecho de que muchas veces en la vida encontremos
obstáculos, enfermedad o sufrimiento, sino que más bien no estamos
entendiendo nuestro vehículo y evolucionando en ese momento?
-Chamalú: Aunque está claro que uno cosecha lo que siembra, que cada
acción tiene su reacción, no podemos caer en ese reduccionismo simplista
de explicar todo a partir de ello. El destino lo hacemos con nuestras
decisiones y al tener un libre albedrío no podemos admitir que las cosas
que nos pasan son porque tenían que pasarnos. Si creemos en un libre
albedrío, asumamos la responsabilidad de hacernos cargo de nuestra vida,
aprender a vivir tiene que ver con la prosperidad, el éxito y todo lo que uno
quiere.
-Idoia: Con ese aprender a vivir, ¿qué siente usted o qué ha percibido qué
son las cosas que más nos alejan de sentirnos en plenitud, en satisfacción
personal, o que nos desconectan más de este propósito evolutivo del que
estamos hablando?
-Chamalú: Sí, va por ahí. Cuando nos invitan a dar conferencias a jóvenes
les decimos, no elijan una carrera, elijan cómo quieren vivir y para esto
tienen que conocerse y saber gobernarse porque crecer es eso. Uno crece
en conciencia, es decir, en sensibilidad y en poder, que es la capacidad de
manejar esa sensibilidad para poder gobernar su vida y darle el rumbo
preciso. De esa manera podemos hacer realidad nuestros sueños, de esa
manera podemos hablar de plenitud, que es la azotea de la felicidad. Pero
nada de esto va a ocurrir si repetimos fórmulas a manera de recetas
mecánicamente. Tenemos que modificar nuestro nivel vibratorio
modificando nuestra conciencia y esto se traduce en un estilo de vida,
desde lo que comemos y el tema salud, hasta cómo manejamos nuestras
relaciones.
Una persona por muy optimista que sea, por muy espiritual que sea, si
vive con la persona equivocada, no va a tener felicidad ni abundancia, sino
infelicidad y enfermedad. La espiritualidad que nosotros proponemos es lo
más cotidiano y mundano, es a pie, camina todos los días por la calle. La
espiritualidad tiene que redefinirse y verse no tanto como una cuestión de
elegidos o con fórmulas más o menos rígidas. Tenemos que liberarnos de
creencias limitantes, tenemos que liberarnos incluso de las formas
espirituales y de las recetas que nos van dando por ahí desde el mundo
esotérico. Fíjate que la mayor parte de la gente que habla de prosperidad y
abundancia está mal económicamente, esa es la mejor prueba de que por
ahí no es.
Hay que repensarlo todo, creo que por ahí podemos empezar abriendo
espacios de reflexión; este es un tema apasionante, interesante, pero si no
está bien planteado puede generar falsas expectativas y con ese tipo de
personas, con gente decepcionada con lo espiritual me encuentro en todas
partes, precisamente porque les contaron mal el cuento.
Pero eso siento que tampoco tiene por qué estar separado, es decir, no
tengo porque no tener dinero y no tener tiempo, o no tengo por qué tener
éxito y no tener tiempo para mis hijos. También puede ir de la mano,
siento que son clichés decir que no tienen por qué ir juntos. Es verdad que
muchas personas que han tenido éxito han olvidado su salud u otras
áreas de su vida, pero tampoco tiene porqué ser así, en la forma en que
cada uno crea su propia vida o en la que cada uno crea su propio camino.
-Chamalú: Sí, desde luego, pero tenemos que partir viendo las cosas como
son de verdad; si queremos ayudar a la gente tenemos primero que
ayudarles a ver y a ver críticamente. Por supuesto que todo tiene que estar
conectado, lo estamos diciendo desde el comienzo. En los entornos más
externos, o incluso en este caso financieros, todo tiene que estar
conectado, eso no significa que la gente lo esté viviendo así. Para quienes
viajamos mucho y conocemos gente de todas partes, nos damos cuenta
que quienes se embarcan en el éxito financiero se olvidan hasta de sí
mismos. En eso tenemos que estar muy alertas y creo que cuando decimos
aprender a vivir, estamos diciendo justamente eso, aprender que todo es
importante pero nada demasiado importante, como por ejemplo generarte
estrés y con ello problemas cardíacos, o tener un descenso inmunológico y
después un problema como el cáncer. Hay tanta gente exitosa que está
mal en términos de salud...
Por otro lado, la prosperidad no tiene que ver con el dinero, sino con el
saber vivir bien y esto significa saber ser feliz, saber amar, saber tomar
buenas decisiones, no tener necesidades innecesarias. Tú puedes
preguntar a la gente que está participando cuántas cosas tienen en casa
que no necesitan. Allí están las trampas de las ofertas, de las campañas
publicitarias, el neuromarketing, las neuroventas que ya prácticamente
saben cómo hacernos comprar lo que no necesitamos, para luego
almacenarlo en casa, eso es tiempo perdido, eso es vida perdida.
-Chamalú: En realidad, la prosperidad tiene que ver con saber vivir, con
saber darle calidad a nuestra vida y esto supone aludir a los niveles
espiritual, mental, emocional, social, ecológico y, por supuesto, a la salud.
Con todo esto tiene que ver la prosperidad y el dinero va a ser un
complemento interesante, pero va a ser consecuencia de estar manejando
bien nuestra vida; por tanto, no será nunca un objetivo en sí mismo, por
eso es más probable encontrar gente que se suicida en los estratos de la
clase media para arriba. Yo conozco muy poca gente que está en niveles de
extrema pobreza que se suicida, pero conozco muchísima gente en buena
situación económica que se suicida o cae en depresión.
-Chamalú: Bueno, no hay que lidiar con el miedo, hay que ir con el miedo
y hacer todo lo que tenemos que hacer; la gente valiente no es la que no
tiene miedo, es la que va con sus miedos y lo hace lo que tiene que hacer.
-Idoia: Sí, pero pareciera que si no hago eso que es lo que puedo hacer, no
entro en ese ir al colegio, a la universidad, encontrar un trabajo y vivir una
vida establecida como es conocida, entonces, ¿cómo vivo?
-Chamalú: Que cada uno elija con creatividad lo que considera mejor en
su vida y se prepare con base en lo que tiene como talentos y lo que ama
hacer. Lo que es muy importante es no tener esa mentalidad de
funcionario público, buscar un puesto fijo en el que ya sabes lo que va a
pasar en tu vida por los próximos treinta años y, luego, esperar la lotería
de la jubilación. Eso me parece que es mera supervivencia, no se lo
recomiendo a nadie. Más que trabajar, tenemos que hacer lo que amamos
y si hace falta un título para eso, bueno, yo creo que la realidad nos está
mostrando que a la gente sin título le está yendo mejor porque hace lo que
ama, creo que por ahí es. Ahora, hay gente que tiene una cantidad de
diplomas y títulos y no encuentra trabajo, eso también es cierto, entonces,
tenemos que ir leyendo el gran libro de la realidad.
-Idoia: Okey, bueno, estoy recapacitando con todo lo que usted me está
diciendo, que desmonta muchas de las ideas que tenemos acerca de lo que
es realmente vivir bien; me quedo con la idea que es aprender a tener
buenas relaciones con uno mismo y con los demás, que aprender a vivir es
disfrutar y que eso no tiene tanto que ver con tener mucho dinero o tener
mucho éxito, sino tener más criterio y juzgar más nuestros propios
pensamientos; esto es lo que usted nos enseña, realmente esto es real,
vivir de la forma adecuada. ¿Hay alguna cosa más que usted nos pueda
decir para ayudarnos a pensar de una forma más crítica respecto a la
forma en la que plantemos nuestra vida, para ser más felices y más
saludables?, porque sé que usted vivió en su infancia un gran problema de
salud y que parece que aprendió algunas formas de estar en la vida de
manera más saludable.
-Chamalú: Lo que aprendí básicamente es lo que todos tienen que
aprender antes que sea demasiado tarde y es que la salud, la vitalidad
heredada, es nuestro primer capital y hay que saber gerenciarla. El
segundo capital es el conocimiento, hay que invertir en uno mismo y esto
nos remite en lo interno, al trabajo interior, ahí viene el crecimiento
consciencial; y en lo externo, a volvernos expertos en algo que nos gusta,
quien está trabajando en algo que no ama se está castigando, porque el
primer salario es el placer de hacer lo que hacemos. Y el que no disfruta de
lo que hace prepárese, porque va a tener cáncer, o infarto o por lo menos
depresión, pueden elegir.
En tercer lugar están los contactos, uno tiene que aprender bien a manejar
sus relaciones, porque en la vida el aislamiento no es la alternativa, somos
seres que necesitamos que nos cuenten un cuento y expresar lo que
sentimos. Fíjate hemos mencionado ya tres capitales y aún no el dinero,
para que veas que el dinero es una consecuencia de una vida bien vivida,
más que una causa. Por otro lado, la creatividad mutilada en la escuela
tiene que ser recuperada, sin creatividad vamos a ver problemas en vez de
oportunidades, vamos a estar quejándonos, lamentándonos, viviendo mal
cuando en realidad podríamos disfrutar de lo mismo. La creatividad es
amiga íntima del humor, que nos permite ver la vida de otra manera. Con
estos insumos podemos ir repensándonos.
-Idoia: Esto es, creo, es la mejor manera en la que podemos cerrar esta
entrevista porque es realmente algo maravilloso lo que nos acabadas de
decir, el saborear cada momento de la existencia y para cada persona va a
ser diferente, siento que va a ser diferente su forma de estar, de sentirse,
de conocerse, de profundizar en sí, de su propósito.
Yo que tengo un hijo de once años ahora, creo que no es una cuestión de
edad, pero sí siento que poder separarnos en un momento dado, cuando
crezca un poco, podrá hacerle ver la vida sin mis creencias, sin mis ideas,
sin las ideas de lo que le ha estado rodeando hasta ahora para poder crear
las propias; viajando por el mundo o aprendiendo a estar en la vida sin
todo lo conocido y volver enriquecido, conectado; creo que eso lo puede
hacer mi hijo, pero que se puede hacer a cualquier edad así como en el
momento presente, tengamos la edad que tengamos, pues es un viaje
interior .
-Chamalú: Sí, totalmente, es un buen punto el que mencionas, una
persona próspera viaja para adentro y para afuera. Esto para conocerse;
no se puede ir por la vida viajando por este planeta sin conocerse, eso
sería como viajar con un desconocido. Viajar es la mejor escuela, es la
mejor universidad y es la mejor inversión en uno mismo, porque te abre la
mente y te permite aprender de la diversidad, tener en buen estado el
asombro, reírte por lo que antes te enfadabas, permitirte patear la rutina
para no quedar atrapada en ella nunca más, porque rutina no es hacer lo
mismo cada día, rutina es hacer lo que no amas.
-Idoia: Sí, imagínate que si tienes una casa y esa casa te impide viajar
porque tienes miedo de dejarla o si tienes siete perros y tienes miedo de
dejarlos o te da pena dejarlos, o sea todo lo que te atrape para no poder
tener movilidad, “te atrape” entre comillas, te sujeta un poco, es un apego,
es un indicativo que quizás esas cosas que estabas poseyendo, te estaban
poseyendo a ti más que tú a ellas y que no las estabas disfrutando, porque
no te dejan, no te permite hacer muchas de las cosas que amas.
Es una forma de vivir un poco curiosa y creo que tiene que ver mucho con
el miedo que tenemos, por ejemplo, a dejar ese trabajo que no nos gusta
por no poder tener cubiertas las necesidades. Ese miedo que tenemos en
confiar en nuestros recursos y en nuestras capacidades para encontrar
algo que realmente amemos. Creo que mucho tiene que ver esto con el
miedo.
SALUD
ENTREVISTA CON ALFONSO GUERRERO, EN EL MARCO DE LA
CUMBRE VIRTUAL: SALUD
-Alonso: Qué interesante. ¿Qué opinas sobre las vacunas? Tantas vacunas
que se están dando a los infantes.
-Chamalú: Las vacunas son un excelente negocio, para empezar. Luego,
son un peligroso atentado contra la calidad inmunológica, no deberían ser
obligatorias. Esto tendría que ser decisión de los padres de familia cuando
se trata de niños. Si un niño tiene una buena alimentación, una vida
saludable, no necesita vacunas. Hemos vivido sin vacunas el 99% del
tiempo y ahora resulta que son indispensables. Algunos dirán, es que se
han eliminado algunas enfermedades como la polio, la viruela, sí, pero no.
Por ello es que creemos que hay cosas como los fármacos, como las
vacunas que casi siempre son innecesarias. Puede haber algunas
excepciones, habría que analizar individualmente alguna situación, pero,
por lo general, el uso comercial de la medicina la cuestionamos
radicalmente, el uso, abuso y la automedicación, especialmente a lo que
especifica el uso de fármacos, absolutamente desaconsejable, peligroso e
innecesario y dejar la salud en manos del médico, eso no, no puede
hacerse. La salud tiene que estar en manos de cada uno y familiarmente
tendría que haber una cultura de salud, que le permita a cada uno de los
integrantes y a las nuevas generaciones, crecer sabiendo cómo no
enfermarse.
-Alfonso: Así es, hace rato mencionaste justamente qué es la salud, fue
una respuesta muy contundente, corta, me gustaría que se ampliara,
justamente, ¿cómo no enfermarnos, cómo encontrar esa salud dentro de
nosotros? Cuando aparentemente nuestro cuerpo está enfermo, ¿cómo
acceder a esa salud para que regrese a nosotros, al cuerpo sobretodo?
Segundo dato, ella vivía sola trabajando la tierra a esa edad, 94 años.
Tercer dato interesante, nos habló de su hermana mayor que todavía vivía
y que también vivía sola trabajando la tierra, 96 años. La conocimos
después y nos dimos cuenta que prácticamente el tema de no enfermarse
básicamente es estilo de vida. Vivir en contacto con la naturaleza,
alimentación saludable, sobria, sin excesos, sin carencias y con mucha
felicidad, ese es el secreto, no hay más secretos; es posible, es totalmente
posible vivir sin enfermarse, es totalmente posible vivir sin consumir
fármacos.
-Alfonso: Sí, ¿qué nos puedes decir sobre el estrés?, para mí es como una
enfermedad, si se puede catalogar, así moderna. Decía que ahora el estrés
es lo que ocasiona muchas cosas y es donde muchos de nosotros pronto
nos encontramos.
-Alfonso: Así es, la gente sana no es rentable, lo mismo que justamente las
vacunas, como de hecho la industria farmacéutica es la más grande y la
más poderosa en el mundo.
-Chamalú: La más saludable.
Cada uno tiene que encontrar su dieta, su menú, este tiene que ser
orgánico, complementariamente podríamos decir que hay dos cosas que
son muy importantes y me gustaría aprovechar este diálogo para
mencionar; por un lado, la desintoxicación permanente y, por otro lado,
hay que cuidar lo inmunológico, la clave son las defensas que tenemos
más que estar con miedo a la malignidad de algún microorganismo. Los
microbios por si solos no son suficientes para generar ningún proceso
patológico, una infección revela más que la virulencia de un microbio la
depresión inmunológica, por ahí hay que apuntar.
-Alfonso: Qué opinas por ejemplo que por ahí, ahora vamos con el tema del
cáncer, de estas purgas que hay con diferentes formas de limpieza o
colónicos, hay unos de maple que te hacen, son diferentes limpias, ¿qué
opinas de esto?
Un dato más, no se combaten síntomas, los síntomas son las alarmas que
el cuerpo enciende para decirnos que algo malo está pasando. Si suena la
alarma de casa anti incendios en la noche, no hay que correr a apagar la
alarma, ¿no?, hay que ver dónde está el fuego y ocuparnos de eso.
-Alfonso: Así es, totalmente de acuerdo, del cáncer Chamalú, ¿qué nos
puedes platicar sobre esto?
- Alfonso: Sí o como por misión de vida; ahh, es que con esta enfermedad
voy a entender tal vez ciertas cosas o practicar ciertas cosas.
Chamalú con qué quisieras justamente, cerrar esta platica de salud, qué
quisieras dejarle a las personas, además de todo lo que ya nos has dado.
-Chamalú: Bueno, pues me gustaría, por un lado, decirle dos cosas y por
otro lado luego invitarles que puedan conectarse con nuestra comunidad,
donde estamos vivenciando todo esto como una forma de ir aprendiendo.
- Ana Rosa: Hola, ¿cómo están? Bienvenidos a otra sesión del Congreso
espiritual: Plenitud y Felicidad después del divorcio; en esta ocasión tengo
el gusto enorme de contar con Chamalú. Muchas gracias por estar aquí,
gracias por enriquecer este evento y te agradecería mucho que le dijeras a
nuestra audiencia, ¿quién es Chamalú?
Creo que hay que repensar muchas cosas, redefinir muchas cosas,
tenemos que ubicarnos en esta época postmoderna donde las fronteras se
han diluido, donde lo ético ha quedado descartado y en la que hay un
consumismo desmedido que da la espalda a los principios. La vida ha
dejado de tener sentido y al interior de todo eso está pasando lo que está
pasando. Considero que el divorcio es un efecto colateral de cosas que se
están manejando de una manera no natural, no profunda y sin sabiduría.
Si no comprendemos las causas nos quedaremos en una mirada más o
menos superficial de los efectos y ese será un mero paseo por síntomas,
sin aludir a las causas. Tenemos que partir comprendiendo qué está
pasando con el matrimonio para intentar hacer luego un abordaje creativo
e inteligente del proceso de separación.
-Ana Rosa: Sí, esto que dices es muy interesante. Como comentas, cada
día son más los divorcios, ¿y tendrá que ver esto, con que todo se ha hecho
más rápido, de que todo lo queremos de inmediato, lo queremos rápido,
todo lo queremos fácil, con todos los avances de la tecnología?
Además, habría que ver, habría que redefinir cosas, como por ejemplo eso
que nos completamos con otra pareja; la incompletud es inherente a la
naturaleza humana, hemos venido a evolucionar, el cuento de la media
naranja es una falacia, nos completamos creciendo, conociéndonos,
evolucionando la conciencia, no sumando una persona, fracasando y luego
probando con otra y así sucesivamente. Creo que hay que replantear
también el tema de por qué la gente se casa, para entender luego las
crecientes cantidades de divorcios, de separación, de todo esto que
estamos presenciando.
-Ana Rosa: Esto que acabas de comentar es muy importante, ¿por qué la
gente se casa? Generalmente estamos buscando a alguien que nos
solucione, nos complete o sane esa herida que nosotros tenemos; como
puede ser la soledad o el miedo, en fin, creo que como tú comentas es muy
acertado el hecho de que nos reunimos dos necesidades y no dos
personas.
Alguna vez les hemos dicho, en conferencias que solemos dar para parejas:
¿No será que te estás casado con tu ex futura pareja? ¿No será que allí
están ya germinando las semillas de la separación? Porque está mal
planteado, está mal planteada la forma, mal planteadas las causas y
además mal planteada la propia ceremonia de unión, “hasta que la muerte
los separe”, o será: “hasta que el desamor les separe”, por ejemplo.
-Ana Rosa: ¡Qué hermoso Chamalú!, que gusto que nos estás
compartiendo, porque eso es hacia donde debe aspirar el ser humano
cuando quiere una pareja, como dices, ser dos personas completas que
tienen coincidencias, que buscan coincidencias. En este caso nuestra
Cumbre es acerca del divorcio y desafortunadamente se llega a esos
momentos porque no podemos, no encontramos esa pareja que reúna esas
características. Una vez que ya decidimos ir al divorcio, ¿qué podemos
hacer para sanar, para ir sanando y poder ir encontrando eso que como tú
dices se va a ir compartiendo, un tipo de relación que se comparta y no
que complemente?
A la gente que está con el tema del divorcio, hay que nada más ver qué es
lo que nos dice el alma, que es lo que nos dice la consciencia, sentir desde
adentro ese llamado de vivir lo conyugal como algo fundamental en su
vida; quizás esa persona estaba en el grupo de los que solamente tenían
que explorar esto, era parte de una experimentación, pero eso ya terminó y
es absolutamente normal. Lo anormal sería prolongar algo que ya murió,
es como guardar una fruta podrida, no tiene sentido, hay que vivir y se
vive por etapas. Si acaso una persona cediendo a la presión familiar o
social se casó, pues tampoco hay motivo para culpa, eso fue un error
entendible, el ser libre nos da la opción de equivocarnos, nos equivocamos
y borrón y cuenta nueva; no hace falta la culpa, ni el remordimiento,
quizás perdimos tiempo, energía, pero bueno, estamos aprendiendo.
Si a pesar del esfuerzo que se hizo, a pesar del amor y de la paciencia que
se puso, aquello no funcionó, podemos replantearnos más creatividad,
más amor, siempre suelo decir que el amor es la mejor venganza, amarle
más todavía y también usar esa relación insoportable, esa pareja
insoportable. Para muchas mujeres, a la gente en general les decimos: “No
se apuren en cerrar una relación”, a no ser que tengamos ya una historia
de infelicidad a dúo hace tiempo prolongada, pero a mí me gusta más, en
esto caso en la mujer, que se trabaje la paciencia, la creatividad, el amor
incondicional, el humor, eso que nosotros llamamos chamanizar una
relación, antes de desembocar en una situación de ruptura matrimonial,
podría incluso trabajarse la imperturbabilidad, todo esto con una pareja
insoportable.
-Ana Rosa: De verdad, creo que tus libros van a ser todo un éxito,
realmente nadie nos enseñó a ser pareja, como nadie nos enseñó a ser
padres o situaciones así y creo que esta forma de ver la vida va a
revolucionar este concepto o sea, es como la fiesta, una nueva fiesta de la
separación. Realmente poder darte cuenta que hiciste lo que pudiste y que
aún así, tienes derecho de vivir bien, de vivir feliz, de disfrutar de la vida.
Una mujer tiene que ser una artista, eso significa ir por la vida fluyendo
descomplicadamente y situaciones como una separación se tienen que
manejar artísticamente, hay que hilar bastante fino. Sé que en países
como México, por ejemplo, esto suele ser un gran desafío, dado que todavía
el machismo camina por las calles del presente con buena vitalidad, sin
embargo, a mayor machismo mayor creatividad, amor auténtico. Podemos
seguir amándonos después de separarnos, pero de otra manera, es que el
amor no es sinónimo de matrimonio, el amor tiene muchas, muchos
formatos, muchas presentaciones, al contrario, a veces el matrimonio es la
tumba del amor cuando no es la persona adecuada o cuando no era lo que
me tocaba en mi ruta de crecimiento. Llegando la inevitabilidad de la
ruptura, entonces: creatividad, optimismo, amor, por supuesto mucho
amor y aquello tiene que estar manejado como algo sagrado; entonces, sin
duda, no habrá remordimiento, ni culpa, ni sufrimiento, ni nada de eso,
porque estará amaneciendo otra etapa en nuestra vida.
- Ana Rosa: Creo que nos estás dando una gran respuesta, porque la
mayoría de las personas no pueden contemplar esta forma de ver la vida o
de ver el amor, qué es primero un crecimiento interior y que la soledad no
es un castigo, la soledad es una forma de crecimiento. El concepto que
tenemos de soledad es estar solos, pero sin podernos dar cuenta que la
soledad es estar contigo mismo, se habla en otra perspectiva
completamente diferente.
-Chamalú: Quiero decir algo más, Ana Rosa, para que la audiencia, los
participantes de este evento lo recuerden. El amor, y si se quiere, “el amor
conyugal” (entre comillas) entre dos personas dormidas, incluye gérmenes
de odio, para que lo recuerden, y esos gérmenes, esas semillas de odio van
a crecer a medida que se pasa la efusividad del enamoramiento; entonces,
el divorcio es consecuencia de eso, se fueron con sus semillitas que luego
germinaron y el resto es simplemente consecuencia natural de todo
aquello.
¿Qué tenemos que hacer entonces? Despertarnos antes que nada, incluso,
quienes creen que van a crecer acompañados tendrían primero que
trabajar consigo mismos, quien no aprendió a estar solo, no podrá estar
tampoco acompañado, estas son cuestiones que hay que resolver, hay
varios previos. Yo le pido a la gente joven que no se den prisa, no importa,
no hay edad, si alguien quiere compartir su vida con otra persona, la edad
es lo de menos, hay que ver el tamaño de la consciencia. Otra cosa que
también me gustaría dejarle a la audiencia de tu evento, es que “ninguna
mujer ha viene a la tierra por razones conyugales o reproductivas, la
maternidad no tiene nada que ver con la feminidad”, son cuestiones
opcionales, por tanto, lo que tenemos que privilegiar es estar en un camino
de crecimiento, todo tiene que estar subordinado a ello. El tener pareja o
no, tiene que compatibilizarse con nuestra ruta de crecimiento; de lo
contrario, lo que me distorsiona, lo que me interfiere es un error.
-Chamalú: Bueno, por ello, Ana Rosa felicitarte por este evento que
seguramente está trayendo luz a mucha gente, invitarles a que compartan
estas ideas también, a que puedan ver más de nuestra filosofía en las
redes sociales, en nuestra página web: www.chamalu.com. Cuanta gente
hermosa he conocido que se ha destruido simplemente por no tener claro
el panorama en este punto. Cuántas mujeres muy sensibles en este
momento están en un nivel de depresión por haber cedido a la influencia
de un entorno que no siempre es favorable. A veces uno está preparado
para luchar contra sus rivales, a protegerse de sus enemigos, pero no hay
forma de estar protegido de la gente que nos quiere, que es la que más nos
puede inducir a que comentamos errores, incluso sin mala intención.
-Chamalú: Pues así sea. Ya acercándonos al final, decirte que sin bien hay
muchos temas para seguir compartiendo, me gustaría rápidamente aludir
al tema de la felicidad, porque al final uno se casa buscando la felicidad,
uno hace tantas cosas para ser feliz y ocurre que la felicidad es nuestra
condición natural, los bebés son felices sin que hayan asistido a un curso
de felicidad o les hayan enseñado.
La felicidad hay que dejar de definirla como una emoción para verla como
un estado natural, como un estado de consciencia. ¿Cuándo somos
felices?, cuando estamos en el lugar adecuado. ¿Cuál es el lugar
adecuado?, donde está creciendo tu consciencia. ¿Cómo te das cuenta de
esto?, los demás se van a dar cuenta, te van a criticar o van a sospechar
de ti o les va a encantar tu presencia, tu energía, tu vibración, tu mirada.
Si estamos en el lugar adecuado van a ir pasando cosas que en otro sitio
nunca ocurrirían, ese es el crecimiento consciencial traducido en una
vibración que cada uno tiene el deber de convertirlo en un estilo de vida.
La felicidad se autogenera cuando estamos en el lugar adecuado, haciendo
lo preciso en el momento justo, porque total, la vida es tan corta, no
tenemos que dejar que se pierda ni un solo instante, estemos solos o
acompañados.
-Ana Rosa: Sí, esta es una de las enseñanzas que tengo más tuyas, es ser
feliz, que pareciera que es algo muy de alegría, pero que es algo muchísimo
más profundo. Como tú comentas, el aprender a disfrutar, el aprender a
vivir pleno, independientemente de la situación en la que nos
encontremos, es algo que yo aprendí de ti, el ser feliz es darle gracias a la
vida.
Creo que entre aprender de todo lo que nos pasa, disfrutar de todo lo que
nos ocurre y compartir, tenemos la receta completa, el menú, la fórmula
para garantizarnos una felicidad, un crecimiento y un vivir desde la
solidaridad.
-Ana Rosa: Muchísimas gracias, de verdad todo esto que nos compartes es
muchísimo y es como retornar a la esencia, como retornar a nuestra
verdadera esencia de disfrutar la vida, vivir la vida, de ser felices, de soltar
lo que no nos sirve, realmente Chamalú es maravilloso poder estar
platicando contigo, todo esto que nos compartes es increíble, de verdad,
que sí les puedes abrir un campo de perspectiva muy diferente a las
personas que están aquí en la audiencia.
-Ana Rosa: Muchísimas gracias Chamalú, yo sé que todo lo que nos has
compartido es de gran valía y de gran conocimiento para todo nuestro
público, muchísimas gracias y de verdad que esperamos volverte a verte
muy pronto, tanto en México, como en otros eventos.