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-Escribe las 3 etapas de la producción de textos.
1. Proceso de planificación de textos.
3. La revision.
Entre los síntomas típicos de esa adición que ven los especialistas se encuentran los trastornos del sueño,
como el insomnio, dolores de cabeza, dolores de espalda por las posturas que adoptan, problemas de la
visión, de aprendizaje, bajo índice académico, depresión y aislamiento.
El doctor Elías Tejeda, coordinador del Clúster de Alcohol de la Dirección General de Salud Mental del
Ministerio de Salud, afirmó que a Salud Pública le preocupa todo lo que afecte al ser humano en relación con
su salud física y mental, en respuesta a Listín Diario en torno a las acciones que realiza el Ministerio de Salud
frente al fenómeno de las adicciones de niños y jóvenes a los videojuegos, detallado ampliamente en la serie
de reportajes “La sociedad conectada”.
No obstante, explicó que el Ministerio no tiene un protocolo exclusivo para esa condición, sino que cuenta con
uno general para el manejo de las adicciones que incluye el abordaje de las sustancias químicas y conductas
adictivas donde entra el internet o uso de celulares, videojuegos, computadoras, así como obsesión por el
juego de azar (loterías, bingo, dados, cartas, casinos).
Esto así, señaló Tejeda, porque la adicción es una sola, lo que varía es el tipo al que el ser humano se hace
dependiente, ya que ese comportamiento adictivo se caracteriza por la obsesión y la compulsión.
Dijo que las manifestaciones de esa problemática en la actualidad se manejan en los hospitales infantiles,
porque esa conducta genera trastornos del sueño, aprendizaje, depresivos y de aislamiento total, que se
refleja en el bajo índice académico en niños y adolescentes y en ausentismo laboral en las personas adultas.
“Hay especialistas como los neurólogos que ven este tipo de problemas, desde el punto de vista neurológico,
por las manifestaciones de insomnio, dolores de cabeza, dolores de espalda y los problemas de la visión, entre
otros.
Hizo un llamado a los padres, madres y familias para que se ocupen de poner límites, ya que existe una
pérdida de los limites en las horas que el niño o adolescente dedica frente al televisor, a la computadora o
celular. Recordó que a la adición al celular se le llama “celular dependiente” y en su momento se le llamó
CrackBerry, cuando se popularizó el teléfono BlackBerry.
Destacó que los primeros países en estudiar o en ponerle atención a esa problemática fueron España,
Argentina, Chile y Canadá, donde se han establecido centros para desintoxicar a esos pacientes con
conductas adictivas. En el país, agregó, en los servicios de salud mental de los hospitales infantiles se le
presta la atención profesional, y para los adultos se cuenta con el Centro de Atención Integral a las
Dependencias.