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PARTE I
Tesis:
«Tampoco el reparo por error de hecho derivado de un falso juicio de identidad
se sujeta a las condiciones de técnica que lo hagan admisible pues, además de
que se evidencia confuso cuando se mezclan argumentos propios del falso
raciocinio al sostener que se incurrió en él por no observarse las reglas de
experiencia y de la sana crítica, desconoce el verdadero contenido del
testimonio rendido por la ofendida, toda vez que ésta aseguró que tras recibir
la llamada telefónica amenazante se dirigió a su casa, allí en la sala estaban el
acusado y JEV, éste le hizo nuevamente la exigencia del dinero a cambio de
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no retener a su hijo, mientras que AF reforzaba la acción induciéndola a esa
entrega más aun cuando se trataba de su pariente, de modo que una vez
obtenido parte del efectivo solicitado y un computador, el acusado salió en
posesión de éste para introducirlo en el vehículo usado por VM.
RELEVANTE
Tesis:
«Se itera que las instancias en sus consideraciones, no se basaron únicamente
en las pruebas aludidas para establecer la coautoría de JR y JR del acceso
carnal violento como lo propuso el censor, ya que mediante la prueba pericial
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sexológica de la víctima, se logró determinar la existencia de lesiones
corporales en las que se apreció la concordancia de las mismas, con las
versiones de los testigos.
[...]
[...]
[...]
3
En suma, al confrontar los fundamentos de la demanda de casación, el
libelista se limitó exclusivamente a enunciar inconsistencias de manera
aislada en los fundamentos de la demanda, e incluso en algunas
oportunidades no manifestó en qué consistían tales, efectuó afirmaciones en
contra de la verdad procesal y puso de presente circunstancias que no fueron
demostradas en juicio, las cuales tenía la carga de probar para corroborar su
hipótesis. En consecuencia, los argumentos esgrimidos por el recurrente, son
insuficientes e inadecuados para admitir el libelo, al incumplir con los
principios de corrección material, claridad y trascendencia, que rigen para el
recurso extraordinario de casación».
Tesis:
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cómplice para su procurada, como consecuencia de supuestos errores en la
valoración probatoria.
No obstante, está bien señalar que dicho título de imputación en los delitos de
contrato sin cumplimiento de requisitos legales y peculado por apropiación le
fue atribuido a YMAQ porque se comprobó, con los elementos materiales
probatorios acopiados en la actuación, su participación directa, en tanto
secretaria de educación distrital, en las fases precontractual y contractual
atinentes al contrato de suministro -que realmente era de compraventa- Nº
15BB1100 del 24 de junio de 2015, respecto de 30000 textos escolares que
estaban desactualizados, exhibían situaciones de plagio y no cumplían con el
certificado de registro de obras literarias inéditas del Ministerio de Educación
Nacional, lo que generó un detrimento patrimonial en las arcas del Estado».
Tesis:
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«Sólo pretenden deducir conclusiones ajenas a los fallos y anhelan la
modificación fáctica al resaltar que cada conducta es independiente y aislada,
desconociendo que en la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal y la
decisión conjunta de su realización no es necesario que los participantes
realicen íntegramente el tipo penal, ya que cada uno de ellos hace su aporte,
sólo que el delito se les imputa de manera integral.
Así, pasan por alto el análisis del Tribunal en relación con las acciones
desplegadas por los enjuiciados demostrativas del previo acuerdo de
voluntades para cometer el delito, porque una vez que MR manifestó su deseo
de acabar con la vida de B se encontró con CM “miembro de su gallada” y una
mujer llamada Y les suministró las armas blancas saliendo ambos en busca
de quien había ofendido al menor.
RELEVANTE
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de Personas.
Tesis:
«El general JAAC, más allá de toda duda, fue el líder de la operación militar.
Ordenó el ingreso de vehículos militares al Palacio, como él mismo lo aceptó -y
lo confirmó el Comandante de la Escuela de Caballería, coronel APV—, la
ubicación de las tropas y asignó funciones a los distintos miembros de la
Brigada XIII; dispuso que las personas que salieran del Palacio de Justicia
debían ser conducidas a la Casa del Florero, no para auxiliarlas, como él y el
coronel SR lo afirmaron, sino para identificarlas, interrogarlas y establecer a
los posibles integrantes del grupo enemigo.
“el individuo capturado dentro del mismo campo de combate debería ser
interrogado rápidamente y evacuado a los organismos superiores.”
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Está probado, entonces, el mando y control del general acusado en todos los
actos de la operación militar, sobre todos y cada uno de los contingentes y
hombres que intervinieron en la misma».
Tesis:
«En esta trama de órdenes y diálogos, en los cuales se destaca la constante
preocupación del mando militar por evitar la evasión de los asaltantes del
Palacio y la urgencia de establecer un control que se sustenta en la sospecha
como método de acción sobre posibles blancos, la frase que se mencionará
deja al descubierto el propósito delirante de realizar el máximo control sobre
todas las personas que salieron del Palacio, durante y al finalizar el operativo,
y la puesta en escena de acciones en las cuales el “enemigo” se sustrae al
poder civil y a su protección, para caer en el vasto margen de maniobra de un
estamento meramente castrense.
Esa serie de acciones en las que se dispuso a ciencia y paciencia de los que
salieron vivos, de los heridos y de los ilesos, de los civiles y asaltantes,
retenidos y sospechosos, como lo demuestra el contenido de las
comunicaciones y declaraciones que se han indicado, llega a un nivel de
inflexión e irracionalidad en el momento en que, conforme a como se había
actuado frente a indiciados de ser miembros de la guerrilla, y ante la
aprehensión de una de ellas, se ordena que “si aparece la manga no aparezca
el chaleco.”
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su importancia. De modo que solo a partir de ese inaceptable fraccionamiento
sería posible atribuirle un sentido distinto al que esa frase emblemática
expresa, o incluso menospreciar su contenido bajo el pretexto de presentarla
como una metáfora sin mayor relevancia en la aproximación a la verdad. Es
en este sentido que la defensa considera que dichas expresiones vistas desde
su individualidad -desde luego algo inadmisible—, impiden afirmar que el
general se concertó para desaparecer personas.
Desde este punto de vista es evidente que el general JAAC no fue, no pudo, no
podía ser ajeno a la aprehensión y posterior desaparecimiento de la guerrillera
IFP. Claro, porque es cuando se produce su retención, que se imparte la
simbólica orden a la manera de un mandato inaceptable:
[...]
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-dice— a la preocupación por necesidad de agilizar el combate y cumplir con
la misión ordenada desde la Presidencia, “toda vez que era conocida la
posición presidencial de no negociar ni dialogar con los perpetradores de la
toma violenta”
Otras veces sugiere que esa expresión es una simple “metáfora,” conclusión
que puede aceptarse a condición de que se entienda su significado como
figura retórica en el que se traslada el significado de un concepto a otro,
estableciendo una relación de semejanza o analogía entre ambos términos. En
ese entendido, la metáfora “si aparece la manga que no aparezca el chaleco”,
apreciada en el marco del concreto momento en que se informa de la
aprehensión de una abogada guerrillera, es obvio que asimila manga y chaleco
con captura y ocultamiento, dado que la orden tiene como destinatario al
mismo sujeto: la mujer “apresada.”
Aclarado ese punto, se debe agregar que esa misma frase la empleó la defensa
para demandar un segundo falso juicio de identidad. La relación temática
entre los cargos, por lo tanto, es indiscutible. Claro que en este caso no
discute las inferencias que surgen de su contenido, sino que censura el error
del Tribunal al suponer que las expresiones utilizadas en el diálogo entre los
coroneles LCS y ES las escuchó el general acusado. Concluye, entonces, que
si el General SM fue beneficiado con la preclusión de la investigación a pesar
de que participó de dicha conversación, el general que no lo hizo, no podía ser
acusado.
La Sala ya expresó al analizar la primera variante del error de hecho por falso
juicio de identidad propuesto por la defensa, que en la comunicación en la
que se imparte la orden cifrada, pero absolutamente comprensible dado el
entorno y circunstancias en que se manifiesta, ciertamente no interviene el
general JAAC. Sin embargo, bajo la consideración de que el operativo de
“retoma” del Palacio de Justicia no fue una acción compartimentada, sino un
conjunto de acciones con unidad de mando en la persona del general
acusado, concluyó que éste sabía y estaba enterado del procedimiento a
seguir con los retenidos catalogados de ser sospechosos o miembros de la
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agrupación guerrillera. Por eso, y porque como se indicó párrafos atrás, el que
solo intervengan dos oficiales con capacidad de mando, no significa que los
demás, y en particular el general JAAC, no estuviera al tanto de esas
directrices.
En tal sentido, entonces, es difícil aceptar que otros diálogos del mismo tipo,
entre los principales artífices de la llamada retoma del Palacio, correspondan
a un nivel de reserva tal que solo quienes participaban expresamente en los
mismos conocían de su contenido, y no el conjunto de mandos de la jerarquía
militar, cuando todo demuestra que la interconexión era indispensable por
razón precisamente de la complejidad de la acción militar que se llevaba a
cabo, y más aún cuando la persona capturada no era cualquiera, sino una
mujer que había sido distinguida e identificada por los organismos estatales
sujetos a las directrices del General AC como comandante de la operación, y
aun por los particulares, como parte del grupo insurgente.
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APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata:
concepto / APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata:
elementos / DESAPARICIÓN FORZADA - En el marco del conflicto armado
interno / APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata: elementos,
requiere de una estructura criminal organizada con vocación de
permanencia / APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata: su
fundamento consiste en que el sujeto activo no realiza un acto de ejecución
del tipo penal, sino que otro lo hace a su nombre / APARATO ORGANIZADO
DE PODER - Autoría mediata: por omisión, no se configura / DESAPARICIÓN
FORZADA - Se configura: evento en que correspondió a un plan militar
estratégicamente diseñado y analizado como unidad / DESAPARICIÓN
FORZADA - Se configura: evento en que se obró con desatención del principio
de distinción establecido en los protocolos adicionales a los convenios de
Ginebra / COAUTORÍA - Requisitos: subjetivo, decisión de realizar
conjuntamente la conducta punible / COAUTORÍA - Requisitos: objetivo,
codominio funcional del hecho / COAUTORÍA IMPROPIA -
Concepto / COAUTORÍA IMPROPIA - Se configura / DESAPARICIÓN
FORZADA - Coautoría impropia: del militar que ostentaba el mando y control
total de la operación
Tesis:
«Para la Agencia Especial del Ministerio Público -contrario a la opinión de la
Procuradora que concurrió al trámite casacional—, el Tribunal desconoció el
principio de congruencia.
Adujo que la Fiscalía acusó al general JAAC como “coautor impropio” del
delito de desaparición forzada, y el Tribunal lo condenó como “autor mediato
por omisión en aparatos organizados de poder.” Al hacerlo, considera que el
Tribunal varió el supuesto fáctico y vulneró el derecho de defensa del general,
al impedirle controvertir probatoriamente la acusación de último momento
como “autor mediato por omisión en aparatos organizados de poder”,
novedosa imputación del juzgador de segunda instancia que además
contradice la dogmática de ese modelo, que no prevé la autoría mediata
omisiva en aparatos organizados de poder.
[...]
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La Sala no hará un extenso análisis de la evolución de dicha figura.
Simplemente mencionará, según el diseño de la jurisprudencia sobre el tema
y la reflexión anterior, que la autoría mediata en aparatos organizados de
poder supone, entre otros: (i) una estructura criminal organizada con vocación
de permanencia, (ii) el vínculo con poder de mando del autor mediato sobre la
organización (el dominio de la voluntad), y la (iii) actuación responsable del
ejecutor fungible o intercambiable.
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esas instrucciones ilegales -pudiendo hacerlo—, por lo que se le imputa el
resultado, a título e coautor mediato en relación con los otros coautores
intermedios y ejecutores finales que reiteraron, transmitieron y cumplieron las
órdenes terminantes de desapariciones forzadas.”
La Sala no desconoce los esfuerzos dogmáticos por copar vacíos con el fin de
evitar costosas lagunas de impunidad y sabe de los esfuerzos de todo orden
-de la doctrina y de tribunales especiales internacionales, desde Nuremberg
hasta Ruanda y Yugoeslavia en Europa, y de Argentina y Perú en Suramérica
al juzgar crímenes de magnitudes incomprensibles— para evitar la impunidad
en eventos en donde la imputación del resultado se complica en casos en
donde el autor detrás del autor se esconde en complejas estructuras
criminales.
Pero si algo se debe destacar es que, sea que se trate de un asunto de autoría
mediata o de autoría mediata en aparatos organizados de poder, esas
elaboraciones parten de un supuesto fundamental: que la dificultad de
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imputar el resultado recae en el hecho de que el autor mediato no ejecuta el
comportamiento, no se implica con el momento ejecutivo del comportamiento,
o según algunos, “no interviene en la causalidad natural”, aunque al controlar
el aparato y la voluntad domine el hecho, lo que hace que fracasen los
arquetipos de la determinación.
Todo ello explica que el general JAAC, al participar de toda esa compleja
operación militar ejecutada por él y por sus subalternos, no omitió su deber,
sino que actuó como coautor, pues concurren en su caso dos elementos
esenciales de este tipo de imputación: un elemento objetivo expresado en el
aporte a la comisión de la conducta con dominio funcional del hecho en la
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fase ejecutiva y subjetiva que se refleja en la exteriorización de la voluntad con
base en el acuerdo o en la decisión común, como se probó (artículos 23 del
Decreto 100 de 1980 y 29 de la Ley 599 de 2000).
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conducta / VARIACIÓN DE LA CALIFICACIÓN JURÍDICA - Modalidades:
originada en prueba sobreviniente / PRINCIPIO DE CONGRUENCIA - No se
vulnera / APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata: por
omisión, no se configura / COAUTORÍA IMPROPIA - Se
configura / DESAPARICIÓN FORZADA - Coautoría impropia: del militar que
ostentaba el mando y control total de la operación
Tesis:
«El recurrente plantea la presencia de una violación directa de la ley por
interpretación errónea del artículo 29 de la Ley 599 de 2000.
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era la llamada a gobernar el asunto (aplicación indebida), omitió otra que sí
resolvía los extremos de la relación jurídico procesal (falta de aplicación o
exclusión evidente) o, habiéndola seleccionado correctamente, al aplicarla al
caso le atribuyó un sentido jurídico que no tiene o le extendió consecuencias
contrarias a su naturaleza jurídica (interpretación errónea)
[…]
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En realidad, el Tribunal realizó el proceso de adecuación típica partiendo del
hecho de que los tres intervinientes ejecutaron un plan previamente ideado de
común acuerdo y que participaron de los sucesos por su propia voluntad,
asumiendo de manera conjunta las consecuencias de su proceder, sin que en
esos propósitos se surtiera modificación alguna en el plano de la
responsabilidad individual por las circunstancias presentadas relacionadas
con la oscuridad del lugar o la fugacidad de la acción, pues precisamente
fueron estas condiciones las tenidas en cuenta para el logro del cometido
común y, en todo caso, el apuñalamiento de una de las víctima no fue fruto de
una decisión individual, por propia iniciativa, de alguno de los ejecutores sino
que se trató de un asunto previsible y asumido por cada uno de ellos en su
decisión conjunta, puesto que el uso de las armas implicó, de suyo, una clara
decisión para agredir a las víctimas en el evento de que se resistieran al
injusto accionar de sus victimarios.
RELEVANTE
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CONDENAR - Requisitos: convencimiento más allá de toda duda / FRAUDE
PROCESAL - Coautoría / FRAUDE PROCESAL - Se configura: cuando se
utilizan medio fraudulentos para inducir en error al servidor público que
selecciona al contratista / FRAUDE PROCESAL - Se configura: evento en que
se aportó una certificación falsa para inducir en error al servidor público
Tesis:
[…]
[…]
Por su parte, RSO hizo constar un hecho ficticio con pleno conocimiento de
que sería aducido ante una entidad pública, pues en el documento de su
autoría se indica que se trataba de una “Certificación de experiencia” expedida
“con destino a la Dirección Seccional de Administración Judicial
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Villavicencio”. Sabía el procesado, entonces, que ese documento sería
presentado ante la citada dependencia administrativa, esto es, que sería
usado para inducirla en error, dada la falsedad de la información que
contenía.
Siendo ello así, su accionar no se limitó al delito contra la fe pública sino que
también materializó el fraude procesal en la medida que conscientemente
certificó un hecho falso destinado a ser aducido ante la Administración
Judicial para obtener la adjudicación del contrato en favor de la empresa […]
de la que había sido gerente, según certificado de Cámara de Comercio en el
que se indica que fue nombrado en tal cargo el 16 de diciembre de 2008.
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ACTA n.º : 160
FUENTE FORMAL : Ley 906 de 2004 art. 181
Tesis:
«En el segundo cargo se plantea la configuración de un error de hecho por
falso juicio de existencia por suposición, al apreciar el pagaré P78727516 del
11 de septiembre de 2012, que no suscribió ILRV. Según el censor, como ella
no firmó el documento, no le son aplicables las consecuencias que surgen de
ese título para establecer la fecha de caducidad de la querella.
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TEMA: ACCIÓN DE REVISIÓN - Condena contra dos o más personas por
delito que no pudo cometer sino una o un número menor de las
sentenciadas / COAUTORÍA IMPROPIA - Diferencia con la coautoría
propia / ACCIÓN DE REVISIÓN - Condena contra dos o más personas por
delito que no pudo cometer sino una o un número menor de las sentenciadas:
no se configura
Tesis:
«El numeral 1° del artículo 220 de la Ley 600 de 2000 prevé que la acción de
revisión procede “Cuando se haya condenado o impuesto medida de seguridad
a dos o más personas por una misma conducta punible que no hubiera
podido ser cometida sino por una o por un número menor de las
sentenciadas”.
Sobre esta causal, la Sala, en providencia CSJ AP, 19 ag. 1997, rad. 13237,
precisó lo siguiente:
De ahí que al precisar su concreto alcance haya señalado la Corte que ‘esta
causal no se refiere a los eventos en que por interpretación de las normas o de
los hechos, el recurrente considera, disintiendo del razonamiento del Juez que
profirió la sentencia, que en una determinada conducta no se puede predicar
la coautoría, pues este debate se tiene que dar en las distintas etapas del
proceso, o en la Corte, pero sólo en sede de casación, y como violación directa
o indirecta de la ley sustancial, según el caso’ (Auto de febrero 8 de 1990. Dr.
Jaime Giraldo Ángel), es decir, que dicha causal no posibilita -como ninguna
lo hace-, discrepar total o parcialmente con la valoración probatoria de la
sentencia, pues de lo que en realidad se trata es de demostrar que a través de
los hechos probados surge de manera objetivamente indiscutible, que frente al
caso concreto el delito tuvo que ser cometido por una sola persona o por un
número inferior a las condenadas. (Destaca la Sala).
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Precisado lo anterior, en el asunto bajo examen resulta incuestionable que los
argumentos en los cuales se fundamentó la demanda de revisión no
corresponden a la hipótesis de la causal invocada pues, la libelista no dedicó
línea alguna en su escrito a demostrar, tanto fáctica como jurídicamente, que
los punibles por los cuales fue condenado su defendido no admiten su
realización por el número de personas que soportan la sentencia.
Así mismo que, era evidente “la ausencia del condenado en el hecho
investigado”, por cuanto “se encontraba el día de los acontecimientos
atendiendo su negocio de juego de sapo” y que “el verdadero autor del
homicidio y conato fue JC” debido a que los declarantes en juicio lo
identificaron como la persona que disparó el arma de fuego. Inclusive,
pretende que por medio de esta acción se degrade el grado de participación
por el cual fue condenado su prohijado, en tanto “debería habérsele imputado
“complicidad” y no coautoría”.
[…]
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De ahí que, aunque la coautoría propia exige, en efecto, que el verbo rector de
la conducta típica sea realizado por cada uno de los sujetos a quienes se les
atribuye tal calidad, no sucede lo mismo con la coautoría impropia, según la
cual, en virtud del principio de imputación recíproca todos los coautores
responden penalmente por las acciones de los demás, incluyendo aquellas que
no realizaron materialmente, como en el caso, disparar el arma homicida y
agresora, ya que actúan conjuntamente con conocimiento y voluntad para
lograr el resultado delictivo.
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SUSTANCIAL - Modalidades: técnica en casación / VIOLACIÓN INDIRECTA
DE LA LEY SUSTANCIAL - Modalidades: técnica en casación / FALSO
JUICIO DE EXISTENCIA - Por omisión: técnica en casación / FALSO
RACIOCINIO - Técnica en casación: el recurrente debe evidenciar el
desconocimiento de principios de la lógica, reglas de la experiencia o leyes de
la ciencia / COAUTORÍA IMPROPIA - Diferente a la participación como
determinador / CASACIÓN - Principio de transcendencia / DEMANDA DE
CASACIÓN - Inadmisión
Tesis:
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La violación indirecta corresponde a una indebida apreciación de las pruebas
por parte de los funcionarios, que ocurre por errores de hecho, cuando pese a
obrar en el proceso el medio probatorio no fue valorado (falso juicio de
existencia por omisión); ya porque sin figurar en la actuación se supuso su
presencia allí y fue ponderado en la decisión (falso juicio de existencia por
suposición); bien porque al considerarlo distorsionaron su contenido
cercenándolo, adicionándolo o tergiversándolo (falso juicio de identidad);
también, cuando sin incurrir en alguno de los yerros referidos derivaron del
medio probatorio deducciones contrarias a los principios de la sana crítica,
esto es, los postulados de la lógica, las leyes de la ciencia o las reglas de la
experiencia (falso raciocinio).
Además, pese a que aludió a unos falsos juicios de existencia por omisión, no
identificó las pruebas válidamente obrantes en la actuación que fueron
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pretermitidas y tanto menos indicó su aporte demostrativo sobre la
responsabilidad penal de RA.
[…]
RELEVANTE
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TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 27/03/2019
DECISIÓN : CASA PARCIALMENTE / REVOCA
DELITOS : Homicidio en persona protegida / Concierto
para delinquir
ACTA n.º : 75
Tesis:
«Las críticas formuladas al fallo de segunda instancia en las demandas de las
que se ocupa ahora la Sala, pretenden derruir la unidad jurídica inescindible
conformada por las sentencias de primero y segundo grado, en cuanto ambas
sedes coincidieron en absolver a OEB, JFCL, HACO, RBC, ÁPP y SCR frente a
los cargos por homicidio en persona protegida, cometido en concurso
homogéneo, y concierto para delinquir agravado -así como del delito de actos
de barbarie, absolución esta última frente a la cual los impugnantes no
expresaron reparo-.
[…]
[…] las premisas fácticas sobre las cuales la Sala debe resolver la pretensión
de los demandantes se sintetizan de la siguiente manera:
29
(iii) En desarrollo de esa ilegal convención, el 21 de febrero de 2005, los
miembros del frente “[…]” de las AUC dieron muerte a ocho civiles [entre ellos,
dos infantes y dos menores de dieciocho años] habitantes de la región, so
pretexto de que se trataba de guerrilleros, y en fosas comunes enterraron los
cuerpos de unas de las víctimas, mientras que los de otras los dejaron ocultos
entre la vegetación.
(iv) Los militares que aceptaron patrullar la región simultáneamente con los
integrantes de las AUC, estuvieron cerca de los sitios donde ocurrieron las
muertes cometidas por éstos, y aun cuando se enteraron de ese accionar de
los ilegales no reportaron la ocurrencia de los respectivos decesos.
(v) Según la acusación, desde un principio el TC. OEB y el MY. JFCL, mandos
inmediatamente superiores de los militares enviados a cumplir la misión, les
impartieron a éstos órdenes verbales para llevarla a cabo con intervención de
los miembros de las AUC, y además le aportaron a la tropa dos guías
pertenecientes a ese grupo armado ilegal para que la asistieran en los
desplazamientos.
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materiales-, sino también a quienes ejercen control sobre la jerarquía
organizacional, así no hayan tenido “injerencia directa sobre aquellos que
materializan o ejecutan las acciones ilícitas en el grupo”, en cuanto hayan
contribuido sustancialmente a la perpetración de los ilícitos”.
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En la acusación que gobierna este asunto, con base en los hechos
decantados, no se hizo alusión alguna a que los aquí procesados como
“eslabones articulados” o “anillos de una misma cadena” conformaran,
pertenecieran o hicieran parte de una organización jerarquizada al margen de
la ley en la que en el marco de su ideario criminal aquéllos hubiesen tomado
parte o contribuido, de alguna manera, en la materialización de las conductas
punibles aquí tratadas.
Tesis:
«Como se puntualizó párrafos atrás, dado que la atribución de los cargos en la
acusación se sustenta en la coautoría, la Sala considera oportuno, acerca del
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delito de concierto para delinquir, rememorar las siguientes precisiones que
sobre el mismo hizo en reciente oportunidad:
[…]
Vale la pena precisar aquí que al ser el delito de concierto para delinquir de
mera conducta por cuanto para su cristalización no exige un determinado
resultado, esa adhesión consciente y voluntaria a la empresa ilícita ya
establecida o constituida, esto es, al grupo armado ilegal, implica que los
nuevos integrantes de la agremiación son coautores propios, igual que ya lo
eran sus predecesores, porque unos y otros realizaron o recorrieron de
manera íntegra la correspondiente hipótesis típica (concertarse).
A este respecto la Corte debe precisar que a los procesados les es imputable
en las mismas condiciones de coautoría el delito de homicidio en persona
protegida, en concurso homogéneo, porque el objetivo de la ilegal conjunción
era el de obtener para los aludidos miembros del Ejército Nacional como obra
propia los resultados del patrullaje ilegal, tales como decomiso de caletas, de
armas de la subversión, o incluso la muerte de guerrilleros, producidos o
concretados con la incursión armada de los integrantes de las AUC,
auspiciada y apoyada por aquéllos.[…]
[…]
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[…] la Sala precisa que no resiste la menor discusión el afirmar que las
muertes de integrantes de grupos subversivos provocadas o causadas por el
obrar ilegal de miembros de las AUC -o viceversa-, así ocurran en un contexto
de enfrentamiento armado entre esas dos facciones, siempre serán y deben
ser considerados como homicidios, y si el hecho se materializa con
intervención de integrantes las Fuerzas Armadas -o de Policía- en
circunstancias como las aquí establecidas, los resultados obtenidos en
desarrollo del respectivo acuerdo les serán atribuible a estos últimos.
Es importante precisar aquí que de acuerdo con la acusación y los hechos que
se aceptaron probados en las sentencias de primera y segunda instancia, así
como los que en esta sede se decantaron en relación con los procesados
absueltos para revocar tal determinación, todos ellos de manera consciente y
voluntaria, resolvieron adherirse a los fines de la organización ilícita en
comento, esto es, las AUC con el fin de atacar a las FARC-EP, luego los
resultados delictivos inherentes a la ejecución de ese acuerdo ilegal los hace
incursos en las conductas punibles materializadas, pues el obrar de cada uno
fue sustancial frente a las mismas.
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Ellos, y los demás que estuvieron en el terreno, como GS, cumplieron las
instrucciones y desarrollaron las operaciones siguiendo órdenes impartidas
por los mandos militares a cargo, esto es, OEB y JFCL, Comandante y Jefe de
Operaciones del Batallón Militar, respectivamente. Esa conducta, en ejercicio
de la función militar, los llevó a unirse con un grupo ilegal, permitiendo con
ese proceder la intervención de los paramilitares en la ejecución de los actos
delictivos que realizaron, así facilitaron los resultados delictivos en ese
tránsito por una zona en la que se utilizó el armamento bélico portado como
efectivamente ocurrió respecto de los homicidios, delitos que tienen relación
directa y que se derivan de la finalidad y la acción ejecutada con base en la
alianza para el patrullaje, ese actuar de los militares regulares se convirtió en
un apoyo y una ayuda ilegal, eficaz y sustancial en el plan y la distribución de
tareas asumidas entre ellos. Con esta conducta, dejaron de ser autoridades
legales instituidas para proteger la vida de los colombianos y se convirtieron
en un medio sustancial y coautores no solo para fomentar los fines de los
paramilitares, sino también para asumir como suyos los reatos contra la vida
consumados efectivamente en varias personas.
35
JURISPRUDENCIA RELACIONADA: 39611 de 21/10/2013, 35113 de
05/06/2014: PRESCRIPCIÓN - Servidor público 39611 de 21/09/2013,
35113 de 05/06/2014: PRESCRIPCIÓN - Término a tener en cuenta a partir
de la ejecutoria de la resolución acusatoria 33663 de 03/08/2016: APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata: elementos 25974 de
08/08/2007, 40214 de 12/02/2014, 50236 de 05/12/2018: APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Autoría / APARATO ORGANIZADO DE PODER -
Coautoría: por cadena de mando 29221 de 02/09/2009: APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Coautoría: por cadena de mando 17089 de
23/09/2003, 27852 de 22/07/2009, 51773 de 11/07/2018: CONCIERTO
PARA DELINQUIR - Concepto C-241 de 20/05/1997, 17089 de 25/06/2002,
19712 de 23/09/2003, 28362 de 15/07/2008, 40545 de 25/09/2013:
CONCIERTO PARA DELINQUIR - Se configura: elemento "acuerdo" 48820 de
14/11/2018: DOBLE CONFORMIDAD - Impugnación especial: procede
cuando la primera condena se emite en casación
Tesis:
«[…] el impugnante, dentro de esa gama descontextualizada de argumentos
que nutren el cargo, de manera adjetiva buscó controvertir la justeza de los
argumentos planteados por el Tribunal para despejar coautoría en el actuar
de su representado judicial.
36
Ello daría lugar a pensar que la crítica se inscribe en el ámbito de la violación
directa de la ley, que reclama de una discusión eminentemente dogmática en
torno de la coautoría impropia y su aplicación en el caso concreto.
Vale decir, para que consulte mínimos de lógica argumental, en este caso el
demandante que eligió la senda de la violación directa, debe aceptar que quien
ejecutó materialmente el homicidio fue el compañero del acusado, solo que
ello no puede transmitirse a este.
Poco añade, sin embargo, para entender que se trata de una crítica seria y
razonada a la figura de la coautoría impropia, cuando, en contrario, los
falladores advirtieron, con citas jurisprudenciales pertinentes, que en este
caso se trata de que ambos asaltantes aceptaron, al llevar armas de fuego,
usar estas para someter a la víctima u obtener impunidad,
independientemente de que en el momento preciso debieran manifestar
expresa anuencia para el efecto.
[…]
37
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Buga
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 27/02/2019
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Trafico, fabricación, o porte de
estupefacientes
ACTA n.º : 52
FUENTE FORMAL : Constitución Política de Colombia art. 13 /
Ley 906 de 2004 art. 180, 181, 182, 184 /
Ley 600 de 2000 art. 310 / Ley 599 de 2000
art. 12, 25, 29-2, 376
Tesis:
[…]
38
b) Así mismo, falta a la verdad procesal cuando afirma que la sentencia
condenó a su representado por una omisión impropia para, enseguida,
cuestionar que no se tuvieron en cuenta los requisitos previstos en el artículo
25 del Código Penal. En efecto, basta leer algunos párrafos de aquella decisión
para advertir que JCRM fue condenado no por un delito de omisión impropia
sino por uno de acción realizado en coautoría y, por tanto, con distribución de
tareas.
[…]
Tesis:
«En el tercer cargo, se denuncia la aplicación indebida del artículo 376 del
C.P., porque este define conductas activas, de las cuales la acusación
seleccionó las de almacenar y transportar para sacar del país, y JCRM fue
condenado por una omisiva consistente en no «dar aviso de la contaminación
de la carga de café a pesar de que era su obligación al ostentar el cargo de
supervisor»-. Además, como argumento consecuencial, vuelve a pregonar la
falta de aplicación del artículo 25 ibídem, en la parte que regula los requisitos
de los delitos de comisión por omisión.
39
el cual los coautores se dividieron tareas de acuerdo al rol que cada una de
aquéllas tenía en la operación de embalaje del contenedor […] (supervisores,
auxiliares de tarja, conductores de montacargas, basculistas, entre otros), en
el que se introduciría, clandestinamente, la cocaína, como efectivamente se
hizo.
40
JUICIO DE IDENTIDAD - Por adición: no se configura / DEMANDA DE
CASACIÓN - Principio de corrección material: obligación de que corresponda a
la realidad procesal Rad: 25790 | Fecha: 13/09/2007 | Tema: VIOLACIÓN
INDIRECTA DE LAY SUSTANCIAL - Modalidades: técnica en casación /
FALSO RACIOCINIO - Técnica en casación: el recurrente debe evidenciar la
forma y el elemento de la sana crítica desconocidos por el juzgador / FALSO
RACIOCINIO - No se configura por desacuerdo en la valoración probatoria /
SANA CRÍTICA - Técnica en casación / REGLAS DE LA LÓGICA - Técnica en
casación / REGLAS DE LA EXPERIENCIA - Proposición: deben referirse a
fenómenos de observación cotidiana / FALSO JUICIO DE IDENTIDAD - Por
adición: no se configura / DEMANDA DE CASACIÓN - Principio de corrección
material: obligación de que corresponda a la realidad procesal Rad: 29251 |
Fecha: 15/05/2008 | Tema: VIOLACIÓN INDIRECTA DE LAY SUSTANCIAL -
Modalidades: técnica en casación / FALSO RACIOCINIO - Técnica en
casación: el recurrente debe evidenciar la forma y el elemento de la sana
crítica desconocidos por el juzgador / FALSO RACIOCINIO - No se configura
por desacuerdo en la valoración probatoria / SANA CRÍTICA - Técnica en
casación / REGLAS DE LA LÓGICA - Técnica en casación / REGLAS DE LA
EXPERIENCIA - Proposición: deben referirse a fenómenos de observación
cotidiana / FALSO JUICIO DE IDENTIDAD - Por adición: no se configura /
DEMANDA DE CASACIÓN - Principio de corrección material: obligación de
que corresponda a la realidad procesal Rad: 29529 | Fecha: 09/06/2008 |
Tema: VIOLACIÓN INDIRECTA DE LAY SUSTANCIAL - Modalidades: técnica
en casación / FALSO RACIOCINIO - Técnica en casación: el recurrente debe
evidenciar la forma y el elemento de la sana crítica desconocidos por el
juzgador / FALSO RACIOCINIO - No se configura por desacuerdo en la
valoración probatoria / SANA CRÍTICA - Técnica en casación / REGLAS DE
LA LÓGICA - Técnica en casación / REGLAS DE LA EXPERIENCIA -
Proposición: deben referirse a fenómenos de observación cotidiana / FALSO
JUICIO DE IDENTIDAD - Por adición: no se configura / DEMANDA DE
CASACIÓN - Principio de corrección material: obligación de que corresponda a
la realidad procesal Rad: 31109 | Fecha: 04/03/2009 | Tema: VIOLACIÓN
INDIRECTA DE LAY SUSTANCIAL - Modalidades: técnica en casación /
FALSO RACIOCINIO - Técnica en casación: el recurrente debe evidenciar la
forma y el elemento de la sana crítica d
41
DELITOS : Lesiones personales
ACTA n.º : 22
FUENTE FORMAL : Ley 599 de 2000 art. 32 inc. 6 / Ley 906 de
2004 art. 180 y 183
Tesis:
«En este caso, los cargos presentados por el recurrente no podrán ser
atendidos (y, por consiguiente, su demanda tampoco será admitida), toda vez
que carecen de coherencia jurídica, así como de fundamentos.
Por otro lado, desde un punto de vista material, ningún problema de fondo
presentó el recurrente susceptible de ser abordado en sede de casación. Todo
aquello que definió como “violaciones directas de normas de procedimiento
penal [sic]” nunca tuvo desarrollos en concreto. Se quedó en aserciones
genéricas, como decir que no se obtuvo el conocimiento más allá de toda duda
razonable, o no se entrevistaron a todos los potenciales testigos, o los jueces le
otorgaron credibilidad al testigo de cargo pero no a los de la defensa, etc. No
precisó cada tema ni se refirió a la relevancia que tendrían los vicios ante la
decisión adoptada. La argumentación es insuficiente.
42
Melo y los ocupantes de la moto, situación que impide la aplicación del
numeral 6 del artículo 32 del Código Penal.
Y, dicho sea de paso, el que el acompañante del acusado haya podido ser el
causante de la fractura del brazo tampoco los exonera ni da pie a la duda
razonable, puesto que ambos obraron en coautoría, aspecto que implica la
aplicación del principio de imputación recíproca, según el cual lo que haga
cada uno de los coautores es extensible a todos los demás, sin perjuicio de
que las contribuciones individuales sean o no constitutivas de delito.
RELEVANTE
43
conducta / CONCIERTO PARA DELINQUIR - Elementos / PRINCIPIO DE
LEGALIDAD - Alcances
Tesis:
Este es, sin duda, uno de los ámbitos donde se presentan mayores
imprecisiones en la delimitación de los hechos jurídicamente relevantes. Por
su utilidad para resolver el caso objeto de análisis y en aras de consolidar el
desarrollo jurisprudencial sobre esta materia, la Sala abordará algunos
aspectos de la estructuración de los hechos jurídicamente relevantes frente al
delito de concierto para delinquir (es de su esencia la participación de varias
personas) y en los casos de coautoría (ídem).
“El delito de concierto para delinquir tiene lugar cuando varias personas se
asocian con el propósito de cometer delitos indeterminados, ya sean
homogéneos, como cuando se planea la comisión de una misma especie de
punibles, o bien heterogéneos, caso en el cual se concierta la realización de
ilícitos que lesionan diversos bienes jurídicos; desde luego, su finalidad
trasciende el simple acuerdo para la comisión de uno o varios delitos
específicos y determinados, en cuanto se trata de la organización de dichas
personas en una sociedad con vocación de permanencia en el tiempo.
44
Contrario a lo expuesto por algún sector de la doctrina patria, tal como se
advierte sin dificultad en el desarrollo legislativo del concierto para delinquir,
no se encuentra circunscrito al acuerdo de voluntades sobre la comisión de
delitos contra el bien jurídico de la seguridad pública, pues por voluntad del
legislador que no distinguió, el pacto puede recaer sobre una amplia gama de
delincuencias lesivas de ese u otros bienes jurídicos, e inclusive respecto de
punibles de la misma especie .
45
Adicionalmente, en tanto la coautoría no precisa que el acuerdo tenga
vocación de permanencia en el tiempo, pues una vez cometida la conducta o
conductas acordadas culmina la cohesión entre los coautores, sin perjuicio de
que acuerden la comisión de otra delincuencia, caso en el cual hay una nueva
coautoría, en el concierto para delinquir la durabilidad de los efectos del
designio delictivo común y del propósito contrario a derecho, se erige en
elemento ontológico dentro de su configuración, al punto que no basta con el
simple acuerdo de voluntades, sino que es imprescindible su persistencia y
continuidad.
46
indeterminados, así sean determinables -homicidios, hurtos-, lo que se
contrapone a los acuerdos esporádicos para cometer un delito en particular
-el homicidio de X, el hurto en la residencia de Y, etcétera-; (iii) el rol de cada
imputado, acusado o condenado en la organización -promotor, director,
cabecilla, lo que implica suministrar la mayor información posible acerca de la
estructura criminal; (iv) la mayor concreción posible sobre el tiempo de
existencia de la organización, así como de su área de influencia.
47
| Tema: CONCIERTO PARA DELINQUIR - Concepto Rad: 17089 | Fecha:
23/09/2003 | Tema: CONCIERTO PARA DELINQUIR - Puede ser para
cualquier clase de delito Rad: 40545 | Fecha: 25/09/2013 | Tema:
CONCIERTO PARA DELINQUIR - Puede ser para cualquier clase de delito Rad:
45594 | Fecha: 05/10/2016 | Tema: SISTEMA PENAL ACUSATORIO -
Acusación: el juez no puede hacer control material, salvo violación flagrante a
garantías fundamentales Rad: 45594 | Fecha: 05/10/2016 | Publicado en:
SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Formulación de la acusación: control por el
Juez Rad: 44866 | Fecha: 16/04/2015 | Tema: SISTEMA PENAL
ACUSATORIO - Formulación de la acusación: funciones del juez, velar por la
claridad de los cargos elevados Rad: 44950 | Fecha: 25/01/2017 | Tema:
DEFENSA TÉCNICA - Nuevo apoderado no puede argumentar la violación de
este derecho por disparidad de criterios con el anterior apoderado Rad: 44950
| Fecha: 25/01/2017 | Tema: DEMANDA DE CASACIÓN - Principio de
corrección material: obligación de que corresponda a la realidad procesal Rad:
44950 | Fecha: 25/01/2017 | Tema: DEFENSA TÉCNICA - No se vulnera
Tesis:
48
complicidad en consideración a la labor desarrollada y al momento en que la
ejercieron.
En orden a corregir el error del sentenciador de segundo grado, dado que los
extremos punitivos del homicidio agravado en la legislación vigente al
momento de los hechos, oscilaban entre 300 y 480 meses de prisión, y que la
sanción para el cómplice se disminuye de una sexta parte a la mitad, debe
establecerse, en armonía con el artículo 60-5 del Código Penal, entre 150 y
400 meses, y como el ad quem trazó el ámbito de movilidad dentro de los
49
cuartos medios (212,5 a 337,5); se tomará como base de la pena el mínimo de
ese segmento y se aumentará, en la proporción considerada por el juzgador en
segunda instancia. Así las cosas, la pena definitiva que deben cumplir Fabio y
JHLE será de 213,5 meses de prisión, esto es, 17 años, 9 meses y 15 días,
lapso al que también se reduce la pena accesoria de inhabilitación para el
ejercicio de derechos y funciones públicas».
Tesis:
50
«Si se acude a la vía directa de violación de la ley sustancial, el demandante
debe conocer que su controversia se ofrece necesariamente dogmática, de cara
a lo que determinada norma consagra y su aplicación en el caso concreto.
Y, por último, del demandante se exige, cual sucede con todas las causales,
absoluta corrección material en sus afirmaciones, de manera tal que lo
sostenido en el cargo de verdad se corresponda con lo que contienen las
decisiones o lo efectivamente tratado en las correspondientes audiencias.
Ninguna de esas tres exigencias fue cumplida por el aquí recurrente, pues,
para comenzar con el primer tópico, en lugar de efectuar un análisis
conceptual del fenómeno de coautoría que quiere introducir como ajeno al
caso concreto, con el indispensable estudio de la norma que lo contiene y sus
derivaciones jurisprudenciales o doctrinarias, apenas expone, como especie de
criterio de autoridad, su particular visión de lo que el instituto comporta, sin
efectuar algún tipo de examen específico que permita verificar cuál es el
adecuado sentido que dicho precepto entrega al mismo o por qué la
interpretación del Tribunal se estima equivocada.
[…]
51
existencia o no de los elementos fácticos que configuran la coautoría
despejada en disfavor de los condenados.
En este sentido, dice el demandante en el numeral tres del primer cargo, que
“En la sentencia condenatoria de segunda instancia se consigna
expresamente que fue el joven YN conocido con el alias de “[…] el que le asestó
varias puñaladas al hoy occiso WSG, como se consignó en los folios 27 y 28 de
dicha providencia, señalándose, a su vez, que si bien el acusado CDMB (“[…]”)
también hirió al hoy occiso en una de sus piernas, esta herida no le causó la
muerte…”.
Nada más alejado de la realidad. La sola lectura del fallo de segundo grado
permite advertir que, por el contrario, allí expresamente se advirtió que el
crimen, en lo que toca con la directa autoría material, debe atribuirse
exclusivamente, ni siquiera por vía de la autoría impropia, que fue la
endilgada a los otros dos acusados, a CDMB, pues, a través de testimonios de
quienes presenciaron lo ocurrido, puede detallarse que fue él quien propinó
con un puñal la herida letal en el pecho de la víctima.
[…]
Bastante socorrido ha sido el tópico del in dubio pro reo en casación, pues, de
manera equivocada se viene entendiendo que es este el mejor camino para
soslayar la justeza argumental que reclaman las causales y así entronizar
veladamente la particular visión que el afectado con la decisión tiene de las
pruebas recogidas en juicio.
52
Tesis:
[…]
53
Como el casacionista no solo se equivoca al exponer la causal propuesta, sino
que omite demostrar la existencia de algún tipo de vicio valorativo en el
examen probatorio adelantado por el Tribunal, se alza necesario inadmitir el
segundo cargo, planteado como subsidiario».
Tesis:
Con tal postura, además de deducir conclusiones ajenas a los fallos, pasa por
alto que tras el análisis probatorio el Tribunal determinó que RD hacía parte
de la organización delictiva desempeñando una actividad principal en el
transporte de los expendedores, actividad propia de la coautoría funcional
deducida de los actos desencadenantes de los hechos que demostraban la
decisión conjunta de su realización.
54
Desdeña el censor que bajo la coautoría funcional, en ese designio común
ninguno de los participantes realiza íntegramente el tipo penal, ya que cada
uno de ellos hace su aporte, sólo que el delito se les imputa de manera
integral. Lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho, pues cada
sujeto domina el acontecer total en cooperación con los demás, no tiene en sí
mismo un dominio parcial, ni tampoco el dominio global, sino que éste se
predica de todos, por ello se determinó en el fallo que el plan común consistía
en traficar estupefacientes con claras funciones asignadas a los otros
integrantes como la de empacar, transportar y vender, correspondiendo al
procesado la de movilizar a los encargados de ponerla en el comercio.
[…]
RELEVANTE
55
ASUNTO:
La sustentación de los recursos de apelación interpuestos por los apoderados
de las víctimas y el delegado de la Fiscalía General de la Nación, giran
alrededor de 3 ejes temáticos: (i) caracterización de los patrones de macro
criminalidad, (ii) violencia basada en género y (iii) el daño a la víctima y
resarcimiento del perjuicio
Tesis:
Tesis:
Tal construcción conceptual tiene aplicación a los casos en que las conductas
punibles objeto de reproche son cometidas por miembros de una estructura
organizada, pero se busca atribuir responsabilidad por las mismas no sólo a
aquéllos - los autores materiales -, sino también a quienes ejercen control
sobre la jerarquía organizacional, así no hayan tenido “injerencia directa sobre
aquellos que materializan o ejecutan las acciones ilícitas en el grupo”, en
cuanto hayan contribuido sustancialmente a la perpetración de los ilícitos:
[…]
57
contrario, de un individuo que actúa libre e inteligentemente, de modo que
también él incurre en responsabilidad penal como autor material del ilícito.
Nótese que en este escenario, aunque el individuo tampoco obra como autor,
se le equipara jurídicamente a éste y se le responsabiliza como si lo fuera».
58
DE GARANTE - Circunstancias en que se puede constituir / POSICIÓN DE
GARANTE - Competencia derivada: de organización, de institución o injerencia
/ POSICIÓN DE GARANTE - Circunstancias constitutivas de posiciones de
garantía / POSICIÓN DE GARANTE - Sujeto garante: presupuestos para su
responsabilidad penal Rad: 33663 | Fecha: 03/08/2016 | Tema: APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata: concepto / APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata: demostración Rad: 33848 |
Fecha: 08/06/2016 | Tema: APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría
mediata: concepto / APARATO ORGANIZADO DE PODER - Autoría mediata:
demostración Rad: 29221 | Fecha: 02/09/2009 | Tema: APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Organización criminal: título de participación,
línea jurisprudencial Rad: 40214 | Fecha: 12/02/2014 | Tema: APARATO
ORGANIZADO DE PODER - Coautoría: por cadena de mando Rad: C-991 DE
2000 | Tema: RESPONSABILIDAD DEL SUPERIOR POR OMISIÓN -
Aplicación en el ordenamiento jurídico Rad: C-225 DE 1995 | Tema:
DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO CONSUETUDINARIO - Aplicación
Rad: C-291 DE 2007 | Tema: DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO
CONSUETUDINARIO - Aplicación Rad: C-674 DE 2017 | Tema: DERECHO
INTERNACIONAL HUMANITARIO CONSUETUDINARIO - Aplicación Rad:
37048 | Fecha: 06/12/2012 | Tema: LEY DE JUSTICIA Y PAZ - Prescripción:
inoperancia del término prescriptivo Rad: 46061 | Fecha: 04/05/2016 |
Tema: LEY DE JUSTICIA Y PAZ - Víctimas: representación / LEY DE
JUSTICIA Y PAZ - Víctimas: menor de edad, representación por quien ejerce
su cuidado Rad: 46672 | Fecha: 10/12/2015 | Tema: LEY DE JUSTICIA Y
PAZ - Reparación integral: incidente de reparación, trámite, reconocimiento de
víctimas, oportunidad Rad: 46084 | Fecha: 07/10/2015 | Tema: LEY DE
JUSTICIA Y PAZ - Reparación integral: incidente de reparación, trámite,
reconocimiento de víctimas, oportunidad Rad: 34547 | Fecha: 24/04/2011 |
Tema: LEY DE JUSTICIA Y PAZ - Reparación integral: incidente de reparación,
aspectos probatorios, juramento estimatorio Rad: 47616 | Fecha:
16/11/2016 | Tema: LEY DE JUSTICIA Y PAZ - Reparación integral:
incidente de reparación, aspectos probatorios, juramento estimatorio Rad:
51390 | Fecha: 23/05/2018 | Tema: LEY DE JUSTICIA Y PAZ - Reparación
integral: incidente de reparación, aspectos probatorios, juramento estimatorio
Rad: 38222 | Fecha: 14/09/2011 | Tema: INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS
- Daño a la salud: concepto / INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la
salud: evolución jurisprudencial / INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño
a la vida de relación: debe abordarse como daño a la salud / INDEMNIZACIÓN
DE PERJUICIOS - Daño a la salud: su demostración constituye una carga
atribuible a quien Rad: 19031 | Fecha: 14/09/2011 | Tema:
INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la salud: concepto /
INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la salud: evolución
jurisprudencial / INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la vida de
relación: debe abordarse como daño a la salud / INDEMNIZACIÓN DE
PERJUICIOS - Daño a la salud: su demostración constituye una carga
atribuible a quien Rad: 25000 | Fecha: 28/08/2014 | Tema:
INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la salud: concepto /
INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la salud: evolución
59
jurisprudencial / INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS - Daño a la vida de
relación: debe abordarse como daño a la salu
Tesis:
«[…] en afrenta contra el principio de autonomía que obliga a que las censuras
se postulen de manera separada, el libelista asegura además que se vulneró el
principio de contradicción “en el manejo y desarrollo de la prueba”, lo que
indicaría una irregularidad en el proceso de formación de las pruebas, que
debiera haber sido atacada por la senda del error de derecho por falso juicio
de legalidad. No obstante, al tiempo asegura que dicho postulado -de
contradicción se vulneró porque se incurrió en “error grave en la conjugación,
apreciación y determinación de la prueba que a la postre sirvió de base y
fundamento para condenar a nuestros defendidos”, lo que sugiere defectos a
la hora de sopesar los medios de convicción, y contraviene el principio lógico
de no contradicción.
Sin embargo, tal premisa deja al margen los razonamientos de los falladores, a
partir de los cuales aparece probado que, el convenio criminal fue
concomitante a los hechos y que cada uno de los miembros del grupo
60
atacante cumplió un rol determinante y esencial en el cometido de arrebatarle
la vida al inculpado, el cual finalmente no se cumplió por la intervención de la
ciudadanía y la oportuna atención médica.
[…]
61
DELITOS : Trafico, fabricación, o porte de
estupefacientes
ACTA n.º : 400
FUENTE FORMAL : Ley 522 de 1999 art. 442 / Ley 599 de 2000
art. 29, 32 y 376 / Ley 906 de 2004 art. 7 y
184
Tesis:
62
De manera que, si en la ejecución del injusto de tráfico de estupefacientes, en
la modalidad de transportar, cada sujeto hace su aporte, no es lógico exigir,
como lo hace el letrado, que “el agente a través de cualquier medio desplace o
lleve las sustancias alucinógenas de un lugar a otro”, porque, como de tiempo
atrás lo tiene dicho la Corte, para la atribución de responsabilidad, no resulta
indispensable que cada interviniente lleve a cabo o ejecute la totalidad del
supuesto fáctico contenido en el tipo.
[…]
[…]
63
Fecha: 19/09/2014 | Tema: FALSO JUICIO DE LEGALIDAD - Técnica en
casación: principio de trascendencia
Tesis:
«De otra parte, el censor juzga equivocado que el Tribunal abordara el tema de
la autoría mediata para visibilizar el error del a quo al condenar al acusado
por los homicidios agravados, por cuanto, afirma el libelista, el juez de
primera instancia solo habría apelado a la figura de la coautoría impropia.
Y por otro, la lectura del fallo del a quo permite advertir que ninguna razón le
asiste al recurrente, pues, en efecto, el juzgador unipersonal sí apeló a aquella
categoría -autoría mediata- al señalar que el concepto de coautoría se
extendía a los dirigentes del grupo delincuencial, considerando su orden
64
jerárquico o línea de mando, aunque no fueran ejecutores directos del
accionar criminal, luego, no devenía del todo exótico que el ad quem resaltara
la confusión dogmática de su inferior y que infiriera que no se acreditó que i)
el acusado hiciera parte de la referida línea de mando, ii) impartiera
instrucciones para la comisión de los homicidios y extorsiones o iii) tuviera la
capacidad de oponerse a las decisiones del cabecilla de la banda -alias “[…]”-.
En todo caso, está bien resaltar que, el Tribunal sí examinó los presupuestos
que delimitan la coautoría impropia de cara al caso concreto, encontrando que
no se estaban satisfechos porque no se probó el acuerdo común, la división de
tareas y el aporte esencial que el procesado habría prestado en la comisión de
los homicidios.
RELEVANTE
65
imputación recíproca / COAUTORÍA - Acuerdo puede ser antecedente o
concomitante al comportamiento / COAUTORÍA - Acuerdo puede ser expreso
o tácito
Tesis:
No en vano el acuerdo puede ser expreso, como cuando cada uno de los
coautores hace explícita su voluntad, por antonomasia propia del pacto previo
y la preparación ponderada del atentado al bien jurídico, pero también puede
66
ser tácito, como ocurre en el caso de un grupo de asaltantes entre los cuales
algunos llevan armas letales cuyo porte es consentido por los otros, todos en
procura de sacar avante la lesión al patrimonio económico».
Tesis:
Se probó con suficiencia, más allá de toda duda, que la víctima no tenía en su
poder un fusil como para haber disparado contra la patrulla comandada por
el mencionado Teniente, proyectiles calibre 5.56 como los que fueron hallados
en un bolso que se dijo le pertenecía, similares a los utilizados por los
militares que le causaron la muerte.
67
Se demostró con el informe de laboratorio de balística forense que la víctima
recibió de frente los impactos de arma de fuego cuando iba sentado sobre el
jumento -que también murió como consecuencia del ataque—,
estableciéndose además que los disparos únicamente se produjeron en
dirección al occiso y que en sentido contrario, es decir, hacia el lugar en el
cual se encontraba la patrulla no se accionó arma alguna.
[…]
Está acreditado que el agricultor PF era una persona protegida por el DIH , en
cuanto no intervino en contienda armada alguna, en aplicación del principio
de distinción (norma imperativa de derecho internacional o ius cogens), que
esencialmente se orienta a “la protección de la población civil y de objetos
civiles, y establece la distinción entre combatientes y no combatientes; los
Estados nunca pueden hacer a los civiles objeto de ataques, y en
consecuencia nunca pueden utilizar armas que sean incapaces de diferenciar
entre objetivos civiles y militares” , en el entendido de que el propósito central
del DIH no es conceder o reconocer derechos a los contendientes en el
conflicto, sino proteger a la población civil que se encuentra en medio del
mismo.
[…]
68
En efecto, si como lo relató el Teniente R, disparó hacia el aire, pero arrojó
tres granadas, en tanto los otros accionaron sus fusiles contra el objetivo, se
reitera, un humilde campesino desarmado y montado sobre un burro, que en
un camino real -no una zona selvática o boscosa— era imposible confundirlo
con una célula guerrillera que les disparaba, necesariamente debió mediar un
acuerdo en proceder de tal manera, lo cual viene a ser confirmado con la
conducta ulterior de modificar la escena de los hechos, colocar al occiso un
bolso con proyectiles 5.56 similares a los utilizados en el ataque del que fue
víctima, además de reportarlo como subversivo dado de baja en combate.
[…]
En efecto, es claro que todo el montaje de la escena, el reporte por radio, las
intervenciones de CAR dentro del proceso, permite advertir que estaba
fabricando su propia exculpación y con ello, la de sus subordinados
involucrados, todo lo cual denota que si se presentó ese acuerdo coetáneo con
la acción de disparar contra el inerme campesino.
69
sustancial con el Juez Especializado Rad: 44414 | Fecha: 24/09/2014 |
Tema: JUEZ PENAL DEL CIRCUITO - No existe diferencia sustancial con el
Juez Especializado Rad: 38725 | Fecha: 22/01/2014 | Tema: COAUTORÍA -
Concepto Rad: 19697 | Fecha: 27/05/2004 | Tema: COAUTORÍA - Concepto
Rad: 12384 | Fecha: 30/05/2002 | Tema: COAUTORÍA - Concepto Rad:
50394 | Fecha: 25/07/2018 | Tema: CAUTORÍA IMPROPIA - Diferencia con
la coautoría propia / COAUTORÍA - Concepto Rad: 19697 | Fecha:
27/05/2004 | Tema: CAUTORÍA IMPROPIA - Diferencia con la coautoría
propia / COAUTORÍA - Concepto Rad: 12384 | Fecha: 30/05/2002 | Tema:
CAUTORÍA IMPROPIA - Diferencia con la coautoría propia / COAUTORÍA -
Concepto Rad: 23438 | Fecha: 02/07/2008 | Tema: COAUTORÍA IMPROPIA -
Principio de imputación recíproca Rad: 48431 | Fecha: 09/08/2017 | Tema:
DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO - Principio de distinción Rad:
46263 | Fecha: 09/05/2018 | Tema: DOLO EVENTUAL - No se configura /
DOLO DIRECTO - Se configura / DOLO EVENTUAL - Frente a la culpa con
representación / PRINCIPIO DE CONGRUENCIA - No se vulnera: cuando no
se varia el núcleo factico de la imputación / PRINCIPIO DE NON
REFORMATIO IN PEJUS - No se vulnera Rad: 51038 | Fecha: 28/02/2018 |
Tema: DOLO EVENTUAL - No se configura / DOLO DIRECTO - Se configura /
DOLO EVENTUAL - Frente a la culpa con representación / PRINCIPIO DE
CONGRUENCIA - No se vulnera: cuando no se varia el núcleo factico de la
imputación / PRINCIPIO DE NON REFORMATIO IN PEJUS - No se vulnera
Tesis:
70
«Resaltó el recurrente que la primera instancia no demostró que lo expresado
por el procesado en su interrogatorio fuera falso, incoherente y contradictorio.
Sobre este punto, advierte la Corte que las aseveraciones de EGa fueron
infirmadas por la prueba de cargo. El acusado en el juicio sostuvo que no
escuchó, ni tuvo conocimiento de la conversación entre AFBG y el abogado
RFPC, en la cual el primero le demandó al segundo “cuatro paquetes”, para
“ayudarle” con la revocatoria de la medida de aseguramiento.
[…]
La declaración rendida por el abogado RFPC es, sin duda alguna, la prueba
que compromete seriamente la responsabilidad del implicado, puesto que es
detallado, circunstanciado, imparcial, desinteresado y a pesar del tiempo
transcurrido desde el suceso hasta el juicio oral, dio cuenta de la forma en
que se desarrolló la reunión, cómo se le ofreció ayuda y, además, describió
con precisión la participación del Juez EG, tal como se plasmó en la
transcripción traída a esta sentencia.
71
[…]
[…]
72
antes del juicio: como prueba de referencia, requisitos / SISTEMA PENAL
ACUSATORIO - Versiones rendidas antes del juicio: como prueba de
referencia, derecho de confrontación / DERECHO A LA NO
AUTOINCRIMINACIÓN - Alcance / SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Pruebas:
admisibilidad Rad: 33837 | Fecha: 18/03/2015 | Tema: SISTEMA PENAL
ACUSATORIO - Versiones rendidas antes del juicio: como prueba de
referencia, requisitos / SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Versiones rendidas
antes del juicio: como prueba de referencia, derecho de confrontación /
DERECHO A LA NO AUTOINCRIMINACIÓN - Alcance / SISTEMA PENAL
ACUSATORIO - Pruebas: admisibilidad Rad: 48131 | Fecha: 25/01/2017 |
Tema: SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Versiones rendidas antes del juicio:
como prueba de referencia, requisitos / SISTEMA PENAL ACUSATORIO -
Versiones rendidas antes del juicio: como prueba de referencia, derecho de
confrontación / DERECHO A LA NO AUTOINCRIMINACIÓN - Alcance /
SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Pruebas: admisibilidad Rad: 46814 | Fecha:
27/06/2018 | Tema: SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Versiones rendidas
antes del juicio: como prueba de referencia, requisitos / SISTEMA PENAL
ACUSATORIO - Versiones rendidas antes del juicio: como prueba de
referencia, derecho de confrontación / DERECHO A LA NO
AUTOINCRIMINACIÓN - Alcance / SISTEMA PENAL ACUSATORIO - Pruebas:
admisibilidad
RELEVANTE
73
RESULTADOS ELECTORALES - Modus operandi / COAUTORÍA -
Demostración
Tesis:
Lo que encontró el Ad-quem es que los implicados, esto es, TEOQ, DLM,
LCGG, GPV, XGG, PVGO, RJCS y EGGR, en su condición de miembros de las
diferentes comisiones escrutadoras, actuaron de manera mancomunada para
favorecer a una candidatura en particular. Para ello, alteraron los resultados
electorales de la contienda llevada a cabo el 14 de marzo del 2010, y luego los
consignaron en los formularios E-24, logrando su propósito criminal conjunto,
consistente en favorecer a los candidatos HP y JPM, para que salieran elegidos
como congresistas de la república.
[…]
74
En efecto, el modus operandi empleado da cuenta de la necesidad de
adelantar una preparación anterior, que vinculase a los co procesados con
una actuación concreta de modificar los formularios E-14 y E-24, implicando
ello no solo el actuar material conjunto, sino la voluntad conciente dirigida
por quien o quienes gobernaron el acto criminal.
Por todo lo expuesto, las falencias en las que incurrió el recurrente conducen
a inadmitir el libelo, como previamente se anunció».
Tesis:
75
asegurar el cumplimiento de las garantías fundamentales del procesado, en
concreto, sobre la prohibición de doble incriminación, respecto de lo cual la
Sala ha señalado, entre las hipótesis de aplicación, que «de una misma
circunstancia no se pueden extractar dos o más consecuencias en contra del
procesado o condenado. Se le conoce como prohibición de la doble o múltiple
valoración», cuyo fundamento es la necesidad de la seguridad jurídica y la
efectividad del derecho material, en forma que, encontrándose legitimado el
Estado para sancionar los delitos o las faltas disciplinarias, dictada «una
decisión definitiva sobre el hecho constitutivo del delito o de la falta y sobre la
responsabilidad o inocencia del implicado, no puede retomar nuevamente ese
hecho para someterlo a una nueva valoración y decisión» (Corte
Constitucional T-537 de 2002).
[…]
“(…) con acusar a una persona de haber realizado la conducta punible a título
de, por ejemplo, coautor, cómplice, autor mediato o determinador, no es
posible asegurar que se está atribuyendo para efectos de la punibilidad
circunstancia de agravación alguna…, sino tan solo se está sustentando
jurídicamente una forma de participación que sirve como base para argüir
que, en atención del respeto al derecho penal de acto o principio del hecho, el
implicado debe responder por el injusto, a pesar de que sólo lo perpetró de
manera parcial, o determinó a otro a hacerlo, o no fue su ejecutor material, o
se valió de otro individuo como instrumento (o como parte de una cadena de
76
mando), o su aporte no fue esencial para la consumación del delito, o no
reunía las calidades especiales requeridas para el sujeto activo, etcétera.
Para ello, en la parte general del código se prevé, de una lado, la figura de la
tentativa (artículo 27), aplicable cuando se da inicio a “la ejecución de una
conducta punible mediante actos idóneos e inequívocamente dirigidos a su
consumación, y esta no se produjere por circunstancias ajenas” a la voluntad
del sujeto activo; en tanto que el concurso de personas (artículo 28), se prevé
para los delitos en los que, siendo monosubjetivos y/o de sujeto activo
calificado, concurre en su realización un número plural de personas como
partícipes (determinador, cómplice e interviniente - artículo 30).
Así entonces, la pena para quien realiza el delito como autor —singular o
plural—, se encuentra determinada en el tipo penal de la parte especial. En la
parte general, a fin de dar el tratamiento correspondiente a esas situaciones
77
que no están contenidas en la descripción de los elementos de cada delito,
tratándose de los partícipes, establece que el determinador incurre en la pena
prevista para la infracción; al cómplice se le disminuye de una sexta parte a la
mitad; y al interviniente se le rebaja en una cuarta parte.
En conclusión, es claro que la ley no fija una sanción penal más grave a la
prevista en el tipo básico o en los calificados o agravados cuando se da la
condición plural de autores o partícipes; luego la imputación de la conducta
delictiva en cualquiera de esas modalidades de participación (coautores,
determinadores, cómplices, intervinientes), bien puede confluir con la
circunstancia de mayor punibilidad del artículo 58 de Estatuto Punitivo, por
haber obrado en “coparticipación criminal”, sin incurrir en la prohibición de
doble incriminación, que aplica para todos los delitos o todos los partícipes,
además porque la “coparticipación criminal” tampoco se encuentra prevista
como causal de agravación en el delito de homicidio.
78
No se configura / TESTIMONIO - Apreciación probatoria: el juez puede
acogerlo parcialmente
Tesis:
[…]
Aunque los reparos se identifican con el falso raciocinio y no con el falso juicio
de identidad denunciado, la Sala resolverá el problema jurídico propuesto por
cuanto la demanda fue declarada ajustada a derecho desde el punto de vista
formal.
De acuerdo al artículo 29 del Código Penal, «son coautores los que, mediando
un acuerdo común, actúan con división del trabajo criminal atendiendo la
importancia del aporte».
Como el artículo 381 de la Ley 906 de 2004 exige para condenar que el juez, a
partir de las pruebas debatidas en el juicio, adquiera conocimiento más allá
de toda duda sobre el delito y la responsabilidad del acusado, cuando se
impute la coautoría de un hecho punible, los citados elementos deben estar
acreditados probatoriamente. De no ser así, prevalece el principio de in dubio
pro reo y, consecuentemente, procede la absolución de los procesados.
79
Es así que antes del altercado los hermanos AR compartieron con JM y JEA el
consumo de estupefacientes y luego se dirigieron a la casa de habitación de J
a esperar la llegada de alias «N», jefe del tráfico en la zona de Coronado, para
hablar sobre la participación de Mosquera en el negocio de venta de
marihuana, lo cual denota una relación de camaradería, impropia de quienes
planean un crimen como el investigado.
[…]
Aún más, AC declaró que no vio a los hermanos AR portando armas de fuego
y que las únicas personas que las llevaban eran alias «N», JMG y la víctima
JM. Y aunque es cierto que el occiso recibió 16 impactos, a partir de esa
información no se puede colegir, como hace el Ministerio Público, que fueron
percutidos por J y J.
[…]
80
mientras esperaron a N y a JM. Si éste último salió en su persecución, la
primera inferencia es que quien los remató fue N».
[…]
Por el contrario, revisó con detenimiento cada uno de los hechos referidos por
el declarante y los contrastó con las circunstancias que expuso, con lo cual
satisfizo la obligación de tener en cuenta «lo relativo a la naturaleza del objeto
percibido, el estado de sanidad del sentido o sentidos por los cuales se tuvo la
percepción, las circunstancias de lugar, tiempo y modo en que se percibió, los
procesos de rememoración, el comportamiento del testigo durante el
interrogatorio y el contrainterrogatorio, la forma de sus respuestas y su
personalidad», como lo exige el citado artículo 404.
Con ese proceder el Tribunal cumplió con la obligación de aplicar las reglas de
apreciación probatoria contenidas en las normas de procedimiento penal
nacional, pues «no es posible desatender que cuando del análisis de lo
expuesto por los testigos se trata, el juez está en libertad de determinar las
materias que resultan inverosímiles, separándolas de aquellos elementos que
sí deben ser aceptados. Para ello se procede analizando en su particularidad
la narración de cada testigo confrontándola con la universalidad del cúmulo
probatorio, y por medio de los ejercicios de credibilidad se establece lo que se
aproxima a la verdad y lo que trata de desvirtuarla o generar confusión sobre
lo ocurrido y que es objeto de reconstrucción en el proceso penal» (CSJ AP
2/5/11, rad. 34976)».
81
JURISPRUDENCIA RELACIONADA: Rad: 34976 | Fecha: 02/05/2011 |
Tema: TESTIGO - Apreciación probatoria Rad: 36544 | Fecha: 02/11/2011 |
Tema: REGLAS DE LA EXPERIENCIA - Concepto / REGLAS DE LA
EXPERIENCIA - Configuración
Tesis:
82
del Código Penal, al disponer que son coautores quienes, “mediando un
acuerdo común, actúan con división del trabajo criminal atendiendo la
importancia del aporte”; se puede deducir, ha dicho la Sala, de los hechos
demostrativos de la decisión conjunta de realizar el delito.
Por su parte, el artículo 30-3 de la Ley 599 de 2000 preceptúa que es cómplice
“quien contribuya a la realización de la conducta antijurídica o preste ayuda
posterior, por concierto previo o concomitante a la misma”.
En suma, únicamente quien tiene el dominio del hecho puede tener la calidad
de coautor, mientras que el cómplice es aquél que se limita a prestar una
ayuda o brinda un apoyo que no es de significativa importancia para la
realización de la conducta ilícita, es decir, participa sin tener el dominio
propio del hecho».
Tesis:
«Si como fue señalado al establecer la conducta por la cual fue acusado y
condenado en las instancias PGR, acordó con su hijo OGP ir hasta la
residencia de LAGR y una vez allí, permaneció cerca del sitio, armado con un
revólver y pendiente de lo que ocurriera, en una labor de “respaldo o
aseguramiento del propósito criminal que los movía”, esto es, causar la
muerte a su hermano, advierte la Corte que el reclamo del demandante no
está llamado a prosperar.
83
tomar venganza por la muerte violenta de sus hijos P y MGP por parte de
JELH, miembro de la banda delincuencial de […], liderada por LAGC, ([…]),
hijo de LAGR, contra quien se dirigió la agresión que culminó con el homicidio
investigado en estas diligencias.
RESERVA
Este tipo penal se encuentra descrito en el artículo 390 de la Ley 599 de 2000,
modificado por el artículo 6° de la Ley 1864 de 2017 […].
[…]
Para las elecciones del 11 de marzo de 2018, el acuerdo consistió en pagar por
cada voto $50.000. Inicialmente recibían $15.000, luego de sufragar,
regresaban a la sede política en donde entregaban el certificado electoral, al
que se le adhería un sticker con el logo “gracias por tu apoyo”, momento en el
cual recibían el resto del dinero prometido correspondiente a $35.000
[…]
85
por el candidato de su preferencia, luego ninguna razón, distinta a la indicada
por el testigo PB, se ofrece para que se hallaran dichos certificados en la sede
política de la investigada.
[…]
[…] para la consumación del punible de corrupción del sufragante, basta con
desplegar la conducta corruptora sobre un ciudadano apto para votar, es
decir, prometer, ofrecer, pagar el beneficio o la dádiva. No se requiere por
tanto que la promesa efectivamente se cumpla o que el destinatario de ésta
vote en la forma propuesta o deje de hacerlo.
Por eso la ex - congresista AMR debe ser acusada como coautora del delito de
corrupción al sufragante, conforme lo establece el artículo 390 del Código
Penal, inciso 4º, modificado por el artículo 6° de la Ley 1864 de 2017 que
establece una pena de cuatro (4) a ocho (8) años de prisión y un aumento de
una tercera parte a la mitad cuando la conducta es realizada por un servidor
público, a quien entregue, como en este caso, dinero o dádiva a un ciudadano
o extranjero habilitado por la ley con el propósito de sufragar por un
determinado candidato o partido o corriente política».
86
JURISPRUDENCIA RELACIONADA: Rad: 39768 | Fecha: 31/01/2018 |
Tema: FUERO - Congresista: competencia de la Corte Suprema Rad: 48965 |
Fecha: 17/01/2018 | Tema: FUERO - Congresista: competencia de la Corte
Suprema Rad: 50969 | Fecha: 01/02/2018 | Tema: FUERO - Congresista:
competencia de la Corte Suprema Rad: 37395 | Fecha: 07/02/2018 | Tema:
FUERO - Congresista: competencia de la Corte Suprema Rad: 51580 | Fecha:
12/02/2018 | Tema: FUERO - Congresista: competencia de la Corte Suprema
Rad: 23754 | Fecha: 06/03/2008 | Tema: INSTRUCCIÓN - Término Rad:
36046 | Fecha: 11/02/2013 | Tema: INSTRUCCIÓN - Término Rad: 40054 |
Fecha: 22/01/2014 | Tema: INSTRUCCIÓN - Término Rad: 35691 | Fecha:
19/03/2014 | Tema: INSTRUCCIÓN - Término Rad: C-241 | Fecha:
20/05/1997 | Tema: CONCIERTO PARA DELINQUIR - Se configura Rad:
17089 | Fecha: 25/06/2002 | Tema: CONCIERTO PARA DELINQUIR - Se
configura Rad: 19712 | Fecha: 23/10/2003 | Tema: CONCIERTO PARA
DELINQUIR - Se configura Rad: 22626 | Fecha: 22/06/2005 | Tema:
CONCIERTO PARA DELINQUIR - Se configura Rad: 28362 | Fecha:
15/07/2008 | Tema: CONCIERTO PARA DELINQUIR - Se configura
RELEVANTE
Tesis:
«El delito de concierto para delinquir tiene lugar cuando varias personas se
asocian con el propósito de cometer delitos indeterminados, ya sean
homogéneos, como cuando se planea la comisión de una misma especie de
punibles, o bien heterogéneos, caso en el cual se concierta la realización de
ilícitos que lesionan diversos bienes jurídicos; desde luego, su finalidad
trasciende el simple acuerdo para la comisión de uno o varios delitos
87
específicos y determinados, en cuanto se trata de la organización de dichas
personas en una sociedad con vocación de permanencia en el tiempo.
88
A diferencia del instituto de la coautoría material, en el que la intervención
plural de individuos es ocasional y se circunscribe a acordar la comisión de
delitos determinados y específicos, en el concierto para delinquir, a pesar de
también requerirse de varias personas, es necesario que la organización tenga
vocación de permanencia en el objetivo de cometer delitos indeterminados,
aunque se conozca su especie. V.g. homicidios, exportación de
estupefacientes, etc.
89
En suma, el delito de concierto para delinquir requiere: Primero: Un acuerdo
de voluntades entre varias personas; segundo: Una organización que tenga
como propósito la comisión de delitos indeterminados, aunque pueden ser
determinables en su especie; tercero: La vocación de permanencia y
durabilidad de la empresa acordada; y cuarto: Que la expectativa de
realización de las actividades propuestas permita suponer fundadamente que
se pone en peligro la seguridad pública».
Tesis:
Ahora bien, no solo por lo anterior deviene ineficaz lo afirmado por el fiscal ad-
quem al resolver la apelación, en el sentido de que la responsabilidad de los
procesados, entre ellos los aquí demandantes, no se contrae únicamente a los
puntuales casos en los que se concretó su participación, con base en que por
el lenguaje cifrado, en clave o de sobre entendidos que usaban en las
abundantes comunicaciones telefónicas interceptadas, fluía el agotamiento de
un sin número de operaciones ilegales realizadas entre aquéllos, por el común
designio que los unía y bajo distribución de tareas.
91
estupefacientes investigados, determinó que le impartiera confirmación
integral, sin adiciones, a la acusación de primera instancia, en la que a VZ y
NC se les atribuyó un único delito de tráfico, fabricación o porte de
estupefacientes en relación con los sucesos explícitamente referenciados por
el fiscal de primer grado».
Tesis:
[…]
[…] el cargo examinado carece de corrección material, pues los jueces en las
instancias no desconocieron o cercenaron lo declarado por los testigos CN y
AZ, en el sentido de que LAVR, ideó, planeó, y pagó dinero para el secuestro
de JMRBO; como tampoco la sentencia les atribuyó haber señalado contra el
acusado alguna participación material llevada a cabo “a eso de las 18 horas a
las afueras de Popayán en la vía que conduce hacia la ciudad de Cali”.
Además, las premisas en las que se funda la coautoría fueron fijadas no sólo a
partir de los testimonios de CN y AZ -aludidos por el censor-, sino con base en
su valoración conjunta con otras pruebas, entre las que se cuentan: (i) el
testimonio del investigador MC, -quien dijo que CN, después de su captura,
señaló a los que participaron en el secuestro con nombres, descripciones,
horas, fechas y vehículos en que se movilizaban, obteniendo así la
individualización, entre otros, de LAVR, identificado por el capturado como la
persona que planeó la actividad ilícita, aportó el dinero para conseguir las
armas y suministró la información relacionada con la víctima-; (ii) la
declaración de CBO, en punto de lo que, previo al juicio, relató sobre el
comportamiento anormal del acusado “para con su hermano JM desde antes
de su secuestro”; manifestación sobre la cual fueron testigos ALI y JAL y se
introdujo al juicio la correspondiente acta, y (iii) el análisis de las llamadas
entrantes y salientes entre GWAZ, LAVR, MTC N y MAMV.
93
Con esa manera de “sustentar”, el libelista desconoce tanto la naturaleza del
recurso de casación como los reales fundamentos del fallo impugnado y
pretende que la Sala convalide su lectura subjetiva o reexamine todas las
cuestiones que menciona, sin asumir la carga de demostrar la existencia
cierta de algún error trascendente en la providencia impugnada, en
detrimento de las presunciones de acierto y legalidad que la cobijan.
Tesis:
Así mismo, no cabe duda que los defectos de motivación, bien sea por
ausencia absoluta, deficiencia sustancial o ambigüedad, conllevan a la
trasgresión de los derechos al debido proceso y a la defensa y pueden ser
atacados por la vía de la nulidad; sin embargo, la postulación específica de
uno u otro tipo de error no es homogénea, pues la argumentación que los
soporta es diversa en cada caso, en tanto el primero apunta a la categórica
falta de fundamentación fáctico jurídica del fallo, la segunda, a la ausencia
parcial de elementos de juicio suficientes de orden probatorio o legal que lo
tornan incompleto y la última, a la confusa, contradictoria, ambigua,
imprecisa o dilógica proposición de los argumentos de la decisión que la hace
ininteligible. El cuarto defecto de motivación, que no corresponde a un error
in procedendo sino a uno de juicio, denominado falsa motivación, en cambio,
se ataca por la vía de la causal tercera.
95
El mayor yerro se condensa en el hecho que el litigante aísla o deja sin
comunicación probatoria todo el concurso fáctico. Ese cerco teórico le permite
asumir una postura de participación criminal de cómplice, cuestión que se
sale de contexto, en la medida que los hechos muestran una unidad de
intención y acción que es indivisible y no puede fraccionarse, para extraer
conclusiones dogmáticas a favor de la enjuiciada.
[…] el autor material, VP, desde el inicio de la narración de los hechos, refirió
a una mujer que le estaba informando a un tercero, -paso a paso- los
movimientos de la víctima; igualmente, para identificarla aseguró que vivía en
el mismo edificio que DD, que para esa fecha estaba acompañándolo al cine y
que andaba con un niño, datos exactos, con base en los cuales se ejecutó el
ilícito contra la vida de aquél.
[…]
El iter criminis fue demarcado en la narración que de los hechos hizo el autor
material del homicidio, tanto que con precisión ubicó a su víctima manejando
la motocicleta descrita por los otros coautores, le disparó en la cabeza en
varias oportunidades y huyó pensando que había finiquitado su misión
sicarial.
[…]
En este punto, la Sala debe advertir que los requerimientos dogmáticos del
recurrente no pueden -para su validez- ser textuales a los sugeridos en la
demanda, puesto que la coautoría además de manifestarse fácticamente,
también tuvo una elocuente estructuración lingüística en las sentencias, sin
que se deba recurrir a una nulidad para reclamar su adecuación.
[…]
96
[…] no se requería de ingentes esfuerzos argumentativos, como los requiere el
demandante, para desarrollar el concepto dogmático de la coautoría como
reproche penal contra su mandante MM.
[…]
[…]
97
opuesto al de aquél, era quien lo iba entregar, persona que no es otra que
VAMM.
[…]
Por último, el cómo, cuándo y dónde se perfeccionó el acuerdo, fue uno de los
aspectos abordados por el Tribunal, quien infirió a partir de la comunicación
mantenida por la inculpada con alias “El Viejo”, 10 días antes del homicidio
tentado, su participación activa en estos hechos, con fechas, horas, enlaces
link, objetivo del victimario, contraprestación, personas involucradas,
información veraz para perpetrar el delito, descripción de lugares, transportes
y personas, hasta llegar al resultado determinado por la mujer, como
concluyeron los falladores.
Tesis:
98
En efecto, el fallo no desconoce que son coautores los que actúan mediando
un acuerdo común con división de trabajo criminal atendiendo la importancia
del aporte, solo que, luego de examinar las pruebas concluyó que existe duda
acerca de la participación de AGL en los homicidios de la pareja, bien como
coautor al haber intervenido en las labores de inteligencia, o como autor
material que hizo parte del grupo de hombres que sacaron de su vivienda a
MAE y MHV para asesinarlos».
Tesis:
«Según los censores, el yerro recayó sobre los testimonios de CAAQ y ALRG y
los documentos incorporados por ésta al juicio oral y suscritos por el
procesado JMUR.
99
Ciertamente, el testigo AQ no afirmó que MP y PR realizaron directamente los
actos de inducción que llevaron a los propietarios o tenedores de los vehículos
inmovilizados a entregar el dinero requerido para autorizar su salida de los
patios del Instituto de […]. Tampoco la declarante RG hizo lo propio respecto
de UR. Esa situación, igualmente, no aparece registrada en los documentos
suscritos por éste e introducidos por la citada testigo al juicio oral.
[…]
[…]
100
quiera que los dos conocieron el asunto relacionado con el Kodiak, mientras el
segundo se hizo cargo del atinente al Mazda.
Es cierto, el referido declarante dijo no haber visto que le haya hecho entrega
también a PR de otra porción de ese capital. Sin embargo, no hay duda que
éste también se sumó al acuerdo, pues, de una parte, el propio testigo dijo
que, en el caso del Mazda, PÑ solicitó el dinero para distribuirlo entre cinco,
incluido AQ, resultando claro que los restantes cuatro correspondían a los
aquí procesados, dado que eran quienes tenían relación con los dos vehículos
inmovilizados. Y, de la otra, porque sólo así se explica que no haya reportado
el procedimiento realizado, incluyendo el resultado de la prueba de
embriaguez y, por el contrario, hubiese contribuido a la desaparición de ese
documento.
[…]
101
En lo que se refiere a la camioneta Mazda, menos discusión existe frente a la
configuración de la concusión, pues de acuerdo con el testimonio de A, tan
pronto la persona (una dama) interesada en su devolución le preguntó a PN
cómo hacía para sacarlo de allí, éste le respondió que debía entregarle
$170.000 para “la gente del hospital” y adicionalmente $30.000 para cada
uno de los que estaban allí, haciendo así explícita la condición que impuso
para proceder en el aludido sentido.
Tesis:
[…]
“Se predica la coautoría, cuando plurales personas son gregarias por voluntad
propia de la misma causa al margen de la ley, comparten conscientemente los
fines ilícitos propuestos y están de acuerdo con los medios delictivos para
lograrlos, de modo que cooperan poniendo todo de su parte para alcanzar esos
cometidos, realizando cada uno las tareas que le corresponden, coordinadas
por quienes desempeñen a su vez el rol de liderazgo”.
“Los primeros, se refieren al acuerdo expreso o tácito, en razón del cual cada
coautor se compromete a desarrollar la tarea que le corresponde en la
ejecución del plan criminal, lo cual implica que cada uno debe ser consciente
de que voluntariamente comparte la misma causa, el mismo propósito ilícito y
los medios que se emplearán para alcanzar tales fines”.
“Los objetivos, aluden a que la contribución de cada coautor debe ser esencial
(“división del trabajo criminal atendiendo la importancia del aporte”, Código
Penal, art. 29, inc. 2), aspecto que necesariamente remite al denominado
“dominio funcional del hecho”, en virtud del cual cada sujeto domina el
acontecer total en cooperación con los demás”.
“Son precisamente esos los elementos que ha tenido en cuenta la Sala (CSJ,
SP, 22 de enero de 2014, rad. 38725), al precisar que la coautoría funcional se
puede deducir de los hechos que demuestran la decisión conjunta de realizar
el delito”:
“Es sabido que para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal no
requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes,
de los hechos demostrativos de la decisión conjunta de su realización”.
“Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto controla el acontecer total en cooperación con los demás, no
tiene en sí mismo un control parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos”.
103
“A su turno, de acuerdo con la definición prevista en el artículo 29 de la Ley
599 de 2000 relacionada con que “Son coautores los que, mediando un
acuerdo común, actúan con división del trabajo criminal atendiendo la
importancia del aporte”, la Corte Suprema de Justicia ha enfatizado en la
necesaria presencia de los siguientes elementos: i) un acuerdo o plan común;
ii) división de funciones y iii) trascendencia del aporte en la fase ejecutiva del
ilícito”.
“En síntesis, “…sólo quien domina el hecho puede ser tenido como autor;
mientras que el cómplice es aquél que simplemente presta una ayuda o
brinda un apoyo que no es de significativa importancia para la realización de
la conducta ilícita, es decir, participa sin tener el dominio propio del hecho.”
(CSJ, SP, 9 de marzo de 2006, rad. 22327)”.
104
“De antaño ha explicado la jurisprudencia de esta Corporación (CSJ SP, 7
mar. 2007, Rad. 23825) en qué consiste la coautoría y cómo se configura a
pesar de que no todos concurran a la ejecución del hecho”:
“Se predica la coautoría, cuando plurales personas son gregarias por voluntad
propia de la misma causa al margen de la ley, comparten conscientemente los
fines ilícitos propuestos y están de acuerdo con los medios delictivos para
lograrlos, de modo que cooperan poniendo todo de su parte para alcanzar esos
cometidos, realizando cada uno las tareas que le corresponden, coordinadas
por quienes desempeñen a su vez el rol de liderazgo”.
“Ese criterio fue recientemente confirmado por la Sala (CSJ SP, 22 ene. 2014,
Rad. 38725), al precisar que la coautoría funcional se puede deducir de los
hechos que demuestran la decisión conjunta de realizar el delito”:
“Es sabido que para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal no
requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes,
de los hechos demostrativos de la decisión conjunta de su realización”.
“Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto controla el acontecer total en cooperación con los demás, no
tiene en sí mismo un control parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos”.
105
postura de la Sala sobre el alcance de las figuras de la coautoría y la
complicidad ha sido constante. Más aun: al contrario de lo que sugiere el
accionante, se diría que la postura de la jurisprudencia de la Sala se orienta
cada vez más a involucrar a los intervinientes en el delito como coautores,
más que como cómplices».
RELEVANTE
106
TEMA: COAUTORÍA - Acuerdo: análisis probatorio de las
circunstancias / COAUTORÍA - No se configura / FALSO JUICIO DE
IDENTIDAD - Por supresión: se configura
Tesis:
Solo por ello se coligió, sin más, que existió una especie de contubernio
criminal, se supone, con otro funcionario o funcionarios, para facilitar el pago
de las acreencias laborales.
[…]
[…] incurre el Tribunal en un error de hecho por falso juicio de identidad por
cercenamiento, en tanto, deliberadamente pasa por alto que varios de los
declarantes, funcionarios de la entidad, detallan esa actividad como normal.
107
Baste citar, para el efecto, lo referido por MMV y NJBG -cuyas declaraciones
nunca fueron controvertidas o tachadas por las instancias e incluso se
transcribieron en el fallo de segundo grado-, claros en expresar como normal y
adecuado que previo a todo el trámite se hiciera esa reunión inicial de
conciliación, lo que explica que luego de las verificaciones necesarias, la
presentación del acta con su contenido solo representara un trámite formal.
Tesis:
108
«El falso raciocinio, dentro de la vertiente del error de hecho, se configura
cuando una prueba, legalmente incorporada a juicio, es considerada por el
juzgador en inobservancia de “la sana crítica”, esto es, de “las reglas de la
lógica, las máximas de la experiencia o las leyes de la ciencia”.
Lo anterior, con exclusivo soporte del relato de PP, razón por la cual, el
Tribunal elevó el rigor del examen de su testimonio, no tachándolo de
sospechoso, como equivocadamente lo señaló el recurrente en contravía del
principio de corrección material, sino, examinando con extremo cuidado su
versión para auscultar en la búsqueda de la verdad.
109
un hurto relacionado con el curso de los hechos, pero, aun así, fue la única
fuente de conocimiento del homicidio.
[…]
[…]
El día de los hechos, a las 4:30 p.m., se reunieron John,” […] “, su novia y
JDC, éste llevó una navaja y un revolver que le pasó a la compañera de “[…]”
para evitar a la policía, luego, se ubicaron en una panadería cercana hasta
después de las 9 p.m., cuando un hombre salió de la casa con la bici, la
identificaron y lo siguieron, en la esquina lo tomó del hombro derecho, lo bajó
de la cicla y le dijo “usted le robó la cicla a mi hermano”, esa persona le
respondió “no y sacó un cuchillo”, J le “echó mano ”y con su navaja le propinó
varias puñaladas, en “el brazo y la cabeza”, “la novia de […]” le pasó el
revólver y le propinó un tiro de frente, intentó huir y le dio otro por la espalda
y cuando cayó le disparó en la cara y se fue del lugar.
[…]
110
Frente a esa realidad probatoria, el libelista no concreta confrontación alguna
y solo trata de anteponer su óptica apreciativa con el objetivo de prolongar el
debate agotado en las instancias, desconociendo que el proceso concluyó con
el fallo de segundo grado y que a esta sede llega bajo el amparo de la doble
presunción de acierto y legalidad.
[…]
[…]
En ese orden de ideas, más allá de los defectos formales de la demanda, que
por sí solos resultan suficientes para desestimar la pretensión, desconoce el
suplicante que la estimación expuesta en la sentencia arriba a esta sede
dotada de la presunción de acierto y legalidad, de donde emerge inútil
confrontar la sentencia con los alegatos de la defensa y no con un auténtico
principio de la sana crítica, con lo cual, yace sin desarrollo el supuesto error
formulado
Los reparos del actor, en evidente desmedro de las exigencias propias del
recurso, carecen de incidencia, porque sin enfrentar los argumentos del
fallador, pretende superponer la percepción del testimonio de AJPP, desde su
particular entendimiento, el cual no tuvo acogida en la instancia».
111
M. PONENTE : PATRICIA SALAZAR CUELLAR
NÚMERO DE PROCESO : 47133
NÚMERO DE PROVIDENCIA : AP5744-2017
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Bogotá
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 30/08/2017
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio / Secuestro simple
FUENTE FORMAL : Ley 599 de 2000 art. 29-2, 30 y 30-3 / Ley
600 de 2000 art. 206, 207 y 212 / Decreto
100 de 1980 art. 176
Tesis:
112
[…]
[…]
[…]
113
COAUTORÍA - Demostración / COAUTORIA - Diferencia con la
complicidad / VIOLACIÓN DIRECTA DE LA LEY SUSTANCIAL - No se
configura por la discrepancia de criterios
Tesis:
De manera que el tribunal y el juez A quo (no se olvide que los fallos
pronunciados en el mismo sentido constituyen unidad inescindible),
concluyeron que efectivamente CC participó en los secuestros y homicidios,
específicamente al “ejecutar” el operativo ilícito en el cual el oficial que lo
coordinó llevó los vehículos del grupo de armados ilegales “pues lo mandó a
recoger [a CC] en una camioneta Luv, doble cabina, roja, conducida por los
agentes FF y CM y se encontró con el Capitán NF en un barrio cercano a
ciudad salitre, quien concurrió uniformado al igual que el mayor CC y otro
grupo de hombres”; es decir, como coautor y no como cómplice.
114
(inciso 3º, art. 30 ibídem) ha sido precisada de tiempo atrás por esta
Corporación (CSJ SP 9 mar. 2006, rad. 22327).
Tesis:
En ese sentido, el juez plural precisó que los procesados actuaron de manera
concertada y realizaron los aportes suficientes y necesarios para lograr su
cometido criminal, el que planearon y ejecutaron cada uno de ellos, con
dominio del hecho, tal como lo apuntó en su decisión.
[…]
Tesis:
Sin embargo, reitera la Sala, esa crítica realizada por el censor alude solo a
una parte de la apreciación del testimonio en cuestión, pues si bien el a quo,
al referirse a lo dicho por EC, lo consideró “mendaz, abiertamente
parcializado, como que incurre en protuberantes contradicciones e
116
inconsistencias [y] trae una historia totalmente inverosímil de que recogieron
accidentalmente a [VB] como alguien que se encontraba a la vera del camino,
habida cuenta que la prueba de cargo desvirtúa este aserto”, (aspecto
resaltado fuera de texto que por ninguna parte consta en la declaración del
testigo, según lo pone de manifiesto el defensor), las circunstancias en las
cuales supuestamente habría conocido apenas ese día a la procesada no fue
la única manifestación que hizo el testigo y que se apreció en el fallo.
[…]
117
NÚMERO DE PROCESO : 44248
NÚMERO DE PROVIDENCIA : SP8072-2017
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de
Barranquilla
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 07/06/2017
DECISIÓN : NO CASA
DELITOS : Peculado por apropiación
FUENTE FORMAL : Ley 599 de 2000 art. 32-10, 38B, 68A y
397 / Ley 600 de 2000 art. 178, 194 y 232 /
Ley 1709 de 2014 art. 23 y 32 / Decreto
2282 de 1989 art. 85-1, 85-4 y 85-5 /
Decreto 1400 de 1970 art. 303
Tesis:
[...]
118
que los títulos judiciales debían salir a nombre del I.S.S. y no de sus
apoderados; subsisten otros que mantienen la estructura del sentido de la
decisión, y pese a que en uno de los apartes de la sentencia por vaguedad se
haga mención de ZV como cómplice, tal yerro es irrelevante.
[...]
En este aspecto valga recalcar, una vez más, que cada una de estas
situaciones aisladamente considerada se ofrece inane para efectos de arribar a
la certeza demandada por el artículo 232 de la Ley 600 de 2000, pero todas
ellas concatenadas dentro del iter criminis examinado permiten develar, se
subraya, la división de labores que dio lugar a la defraudación dolosa del
patrimonio del I.S.S. y en el que el escribiente BEZV era pieza fundamental,
para de consuno con la juez librar los títulos judiciales de manera irregular.
Esquema criminal en el que los abogados que los reclamaron aceptaron el rol
de determinadores de estos servidores públicos quienes contaban con la
disponibilidad jurídica y material de los bienes estatales sustraídos en virtud
de la referida labor funcional compartimentada, según se plasmó en las
sentencias condenatorias dictadas en su contra [...].
[...]
[...]
119
unotenía roles definidos en esa labor compuesta y en la que se pasaron por
alto las más mínimas verificaciones por el dolo que acompañó su emisión
irregular, propiciándose el apoderamiento del erario por abogados que
comparecieron al proceso ejecutivo de manera que no solo debió generar
suspicacia sino en especial, la oposición a sus pretensiones, todo dentro del
específico ámbito de competencia de esos servidores públicos por razón de las
múltiples y ostensibles falencias sustanciales y además formales que
trascendían a la llana documentación falsaria.
[...]
[...] una vez llegado al cargo otra juez y de cara a ulteriores embargos que
solicitaron ser aclarados, el expediente se extravió temporalmente, hecho que,
de nuevo, no tendría que generar mayor recelo de no ser por el cúmulo de
circunstancias anómalas a las que ya se ha hecho referencia y que confluyen
hacia el convencimiento al cual arribó el Tribunal con respecto a la figura de
la coautoría en cuanto al rol del escribiente, funcionario que no puede
catalogarse cómplice, pues, dentro de la división de labores en comento, su
actividad era fundamental para la anómala gestión de los títulos judiciales,
sinella, no se hubiese logrado su expedición y entrega. Por contera, al margen
de la disponibilidad jurídica de los dineros públicos, a ZV, en virtud del
principio de imputación recíproca que rige la coautoría, le es endilgable el
resultado traducido en el peculado por apropiación al ser definitiva su
injerencia como servidor público en la consumación del delito.
[…]
“Desde la teoría del delito, se entiende que los itinerarios puramente ideativos
de los comportamientos ilícitos no son punibles, porque ello traduciría
penalizar las expresiones del pensamiento, por ello, un apoyo en esta etapa no
constituye coautoría, tampoco cuando se evidencia en actos preparatorios”.
121
SALA DE CASACIÓN PENAL
M. PONENTE : EYDER PATIÑO CABRERA
NÚMERO DE PROCESO : 46965
NÚMERO DE PROVIDENCIA : AP2649-2017
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Medellín
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 26/04/2017
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio / Hurto / Concierto para
delinquir
FUENTE FORMAL : Ley 599 de 2000 art. 242 / Ley 906 de 2004
art. 180, 181 y 184 inc. 3
Tesis:
[…]
122
de 2000 art. 29 / Ley 906 de 2004 art. 162
Tesis:
«[…] a partir de la prueba indiciaria -admisible en el sistema procesal penal
regido por la Ley 906 de 2004- la colegiatura, dedujo que HR actuó
“mancomunadamente” con otra persona para lograr apoderarse de los bienes
de Amparo Benavides Hoyos. Infirió así la existencia de un plan criminal, el
que se puso en marcha el día de los sucesos, con la consecuente división de
funciones, y en el que aquél tenía el dominio del hecho.
La defensa echa de menos la prueba directa del acuerdo, sin embargo, pasa
por alto que el mismo puede ser expreso o tácito y que, tal como lo ha
sostenido la jurisprudencia de la Sala, para demostrar la alianza criminal no
se requiere que la fiscalía lleve al juicio un documento escrito que así lo
constate, sino que se puede deducir de los hechos que acrediten la decisión
conjunta de cometer el ilícito. Así, en CSJ SP151-2014, rad. 38725 se afirmó:
“Es sabido que para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal no
requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes,
de los hechos demostrativos de la decisión conjunta de su realización.
Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto controla el acontecer total en cooperación con los demás, no
tiene en sí mismo un control parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos.
Tesis:
«[…] como se plantea en el fallo demandando, que la determinación de las
personas vinculadas jurídicamente al proceso penal se produjo, al parecer,
con fundamento en el informe de orden de operaciones 081 de 2002, suscrito
por ST. DGGP, Comandante de la operación, en el que bajo el título de
“Personal destacado” se relacionaron los nombres de ST. D GGP, SP. LGAD,
SLR. WAJ, SLR. HAGH, SS. CRM, SS. WDP, CP. BRD, CS. IARM y SLR. YAAM
y SLR. JDTC (fls. 222, c.1).
124
responsabilidad del juez de primera instancia, que se haya vinculado a un
grupo de soldados y a otros no.
[…]
125
En esa medida, como lo precisó de manera adecuada el juez de primera
instancia, los procesados ST. DGGP, SP. LGAD, SLR. WAAJ, SLR. HAGH,
hacían parte del pelotón militar que en conjunto irrumpió en el barrio Ocho de
Marzo para aprehender a DGM y, sin que mediara ningún combate, lo
ejecutaron, con lo que quedó suficientemente definido que cada uno de ellos
dominó tales acontecimientos y ofreció su aporte en la fase ejecutiva.
[…]
126
Así las cosas, quedó establecido que no obstante la disposición estratégica de
los integrantes de la tropa, dependiendo de sus rangos y de las funciones
precisas que tácticamente les fueron asignadas, resulta evidente que a
sabiendas de lo sucedido, todos prestaron su contribución esencial, llevando a
cabo una actuación conjunta, con la que de manera objetiva determinaron el
curso del suceso.
Imposible, por demás, resulta saber quién, de todos los militares participantes
en la operación, fue el encargado de disparar el arma de baja velocidad que
ocasionó la muerte de DGM. Esa acción final resulta indeterminada desde el
punto de vista probatorio por la misma dinámica de los acontecimientos, pues
se sabe que para su ejecución la víctima fue trasladada hasta un lugar
incierto, procurándose la impunidad del hecho, donde cualquiera de los
militares estuvo en condiciones de descerrajar el arma de fuego, no obstante
lo cual se presentó una decisión conjunta dominada por el dolo en cada uno
de los partícipes».
RELEVANTE
127
NÚMERO DE PROCESO : 46893
NÚMERO DE PROVIDENCIA : SP1483-2017
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Antioquia
CLASE DE ACTUACIÓN : SEGUNDA INSTANCIA
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 08/02/2017
DECISIÓN : NIEGA NULIDAD / CONFIRMA SENTENCIA
CONDENATORIA
DELITOS : Concierto para delinquir
FUENTE FORMAL : Constitución Política de Colombia de 1991
art. 91 / Ley 906 de 2004 art. 12, 32-3, 381
/ Decreto Ley 100 de 1980 art. 29-2
Tesis:
«La acusada no hizo ninguna consideración respecto de la importancia de la
supuesta función de prestar seguridad a la tropa que dice haber desempeñado
el soldado JJJD durante el patrullaje en que se perpetró el homicidio de DFA,
tampoco valoró que tuvo conocimiento del propósito criminal desde antes de
salir de la sede militar, no manifestó oposición, ejerció la labor que se le
asignó y al inicio de la investigación ayudó a sostener la falsa historia de que
el occiso era un guerrillero que intentó atacar al escuadrón con una granada,
situaciones que claramente estructuraban la figura de la coparticipación
criminal. Por lo tanto, persistía la calidad de coautor del homicidio aunque se
aceptara la errada conclusión de que alias “[…]” no accionó el fusil.
“…en los casos en que varias personas proceden en una empresa criminal,
con consciente y voluntaria división del trabajo para la producción del
resultado típico, todos los partícipes tienen la calidad de autores, así su
conducta vista en forma aislada no permita una subsunción en el tipo, porque
todos están unidos en el criminal designio y actúan con conocimiento y
voluntad para la producción del resultado comúnmente querido o, por lo
menos, aceptado como probable.
128
probables desde el momento mismo en que se actúa en una empresa de la
cual aquellos se podían derivar”».
RELEVANTE
Tesis:
«[…] se ha realizado el análisis de la prueba directa, especialmente la de
carácter testimonial, con el propósito de determinar si en MAMM concurre
responsabilidad penal en el delito de homicidio con fines terroristas imputado
(ordinal 5.2). En desarrollo de esa labor se demostró lo siguiente:
129
(i) Que la orden de ultimar a LCGS provino de PEEG, por lo que tras
frustrarse un primer atentado en la ciudad de Medellín, se realizaron varias
reuniones para planear otro, así que en una de ellas, con la asistencia de EG
y GRG, se decidió que este último fuera el encargado de la ejecución material
del homicidio, quien a su vez, aprovechando que era el principal financiador
de las autodefensas del Magdalena medio, comandadas por HJPD, le
encomendó a éste esa misión, gracias a la logística delincuencial que poseía,
el cual a su vez designó a JERR para que en efecto llevara a cabo el ataque;
(ii) Que en el inmediato pasado las autodefensas del Magdalena medio habían
atentado contra la vida de los miembros del movimiento Nuevo Liberalismo
orientado por LCGS, a raíz de las ideas políticas que difundían y que
particularmente se dirigían a combatir la corrupción, el crimen organizado y el
narcotráfico;
(iii) Que JERR tenía conexiones directas con el DAS para obtener información
sobre la actividad pública de LCGS, a fin de poder ejecutar exitosamente el
atentado;
(iv) Que parte del plan para atentar contra LCGS consistía en cambiarle y
debilitarle su escolta, por lo que se debía contar con la participación del DAS,
organismo encargado de su seguridad;
(v) Que LCGS había recibido amenazas contra su vida y que el DAS estaba en
el deber legal de garantizarle la seguridad;
(vii) Que LCGS nunca solicitó al DAS el cambio de su jefe del esquema de
seguridad, pues solo pidió que se le reforzara su protección y se le mejorara la
dotación a sus escoltas;
(x) Que JERR, autor material del atentado contra LCGS, se conocía con JATM,
al punto que como el primero fue capturado dentro la investigación que se le
adelantó por la muerte de GS, le pidió a TM que le hiciera un favor cuando
estaba en la cárcel;
130
político al municipio de Villeta, donde al día siguiente daría un discurso
público; intentó cambiar a los escoltas más antiguos de GS; no subió a la
tarima donde éste fue atacado, a pesar de que era su deber hacerlo por
tratarse del jefe del esquema de seguridad; momentos antes del ataque se
alejó de dicho sitio; tras haber sido herido G, se mantuvo pasivo en lugar de
auxiliarlo y; por último, el informe inicial que presentó para reportar sus
actividades el día del atentado no reflejó lo que en realidad había sucedido;
(xii) Que el día de los hechos JATM alardeó de que en Soacha tenía toda la
seguridad de LCGS bajo absoluto control;
(xiii) Que MAMM tenía conocimiento del atentado que se iba a perpetrar
contra LCGS y;
Así las cosas, de los hechos hasta aquí demostrados se extraen de manera
lógica las siguientes conclusiones:
(i) Que la orden de asesinar a LCGS fue impartida por PEEG y que el
encargado de materializarla fue GRG, el cual para el efecto echó mano de
HJPD, quien a su vez designó a JERR para que ejecutara el atentado;
(ii) Que JATM fue impuesto por MAMM como jefe del esquema de seguridad de
LCGS, no obstante la inconformidad frente a tal nombramiento, así expresada
y transmitida por el propio político y su esposa; sino que el Jefe del DAS
persistió en ese nombramiento, pasando por alto la falta de idoneidad y
capacidad de TM para ese encargo, sumado al comportamiento el día de los
hechos, el cual evidenció el incumplimiento de sus funciones;
(iii) Que MAMM tenía conocimiento del atentado que se haría contra LCGS y
que tras concretarse el homicidio desvió las investigaciones sindicando a
personas inocentes y evitó que se conociera la identidad de los verdaderos
responsables.
En esa medida, hasta aquí no hay prueba directa que señale a MAMM como
coautor del delito de homicidio con fines terroristas en la persona de LCGS.
131
esa labor se pierdan de vista los medios de convicción directos, por lo que se
hará la valoración conjunta de unos y otros.
Al efecto, inicialmente resulta necesario recordar que una vez PEEG tomó la
decisión de dar muerte a LCGS, se encargó de esa tarea, como ya se dijo, a
GRG, quien de inmediato delegó esa misión a HJPD, comandante de la
autodefensas del Magdalena medio, el que presto escogió a JERR para
materializarla.
Por su parte, IRDG, alias […], y DFMB, alias […], coincidieron en afirmar que
dada la “amistad” entre MAMM y HJPD, el grupo al margen de la ley de este
último no era perseguido; en tanto que WJP, hermano de PD, dio cuenta que
presenció encuentros entre éste y M.
[…]
Así las cosas, se observa que a la estrecha relación que existió entre MAMM,
como Director del DAS, con HJPD, comandante de las autodefensas del
Magdalena medio, lo que permitió concluir que el primero tenía la disposición
de ayudar al último, sin importarle que estaba al margen de la ley, se agrega
el hecho de que JERR, ejecutor material del atentado contra LCGS, fue
132
escogido por el propio PD para que cumpliera ese cometido porque además
tenía “amistades” con “los del DAS”.
Ahora, volviendo al plan criminal que se fraguó para atentar contra LCGS, se
tiene que como parte de él estaba el cambiarle la escolta.
[…]
[…]
En esa medida, si bien es cierto que MAMM le cambió el jefe del esquema de
seguridad a LCGS, ese solo hecho no demuestra la participación del primero
en la muerte del segundo. Empero, del material probatorio surgen hechos y
circunstancias adicionales que analizados en conjunto llevan a la certeza de
que MM es responsable del homicidio con fines terroristas del que fuera
víctima GS.
[…]
En otras palabras, es claro que MAMM en modo alguno quería que LCGS
contara con la mejor escolta en aras de garantizarle su seguridad, pues no
puede perderse de vista que GS era una de las personas más amenazadas del
país, situación plenamente conocida por MM.
133
lo refirieron los escoltas PNAB, LAC y BSV, precisando este último que por el
contrario TM se alejó del lugar instantes previos al atentado, a pesar de que
era su deber estar al lado de la persona protegida para garantizar su
seguridad como lo puso de presente AB. De esto se sigue que TM sabía que se
iba a llevar a cabo el ataque y por eso se alejó en protección de su propia
integridad personal, dejando solo a GS.
Del conocimiento que tenía MAMM del plan para atentar contra la vida de GS
dio cuenta REHG, […].
Sobre el mismo particular, es decir, que MM sabía del plan para atentar
contra LCGS, se ofrece oportuno recordar que IRDG, alias […], en declaración
del 28 de abril de 2009, al referirse a lo que le confesó Jaime Eduardo Rueda
Rocha, autor material del asesinato de Galán Sarmiento, sostuvo que éste le
“mencionó un señor TORREGROZA del DAS como su cómplice en el
magnicidio y al entonces director del DAS, general ALFREDO MAZA
MÁRQUEZ, quien según… RUEDA ROCHA, había acordado con el señor
HENRY PÉREZ, la vuelta, refiriéndose al homicidio del doctor LUIS CARLOS
GALÁN”.
[…]
[…]
[…] del hecho plenamente demostrado que MAMM desvió las investigaciones y
que conscientemente culpó a un inocente, se infiere que tenía la intención de
encubrir al verdadero autor material del asesinato del doctor G, frente al que
sabía su identidad y, si ello fue así, era porque estaba comprometido en la
realización del crimen.
De todo lo analizado se concluye sin dificultad, que MAMM, Director del DAS,
como se demostró suficientemente, tenía tratos con HJPD, comandante de las
autodefensas del Magdalena medio.
134
Así mismo, que MM se conocía con JATM, al punto que lo calificó como su
“persona de confianza” y respecto del cual “pondría las manos por él en el
fuego”, a quien designó como jefe del esquema de seguridad de LCGS.
También se demostró que JATM se conocía con JERR, quien fue el autor
material del homicidio de LCGS.
Además, se comprobó que tanto MAMM como JATM, sabían del plan que
existía para atentar contra la vida de LCGS.
Igualmente, se demostró que parte esencial del plan para asesinar a LCGS
consistía en cambiarle la escolta y debilitársela, lo que en efecto realizó
MAMM, a través de JATM, quien de manera sistemática, efectuó una serie de
acciones dirigidas a propiciar la desprotección del político en su salida
proselitista en Soacha, toda vez que para la fecha del evento el hombre por el
cual MM “pondría las manos… en el fuego”, ordenó una avanzada a otro sitio
reduciendo la escolta, no asumió el liderazgo del esquema de protección
durante todo el día, tampoco coordinó, contrario a lo que sostuvo, la presencia
de la Policía Nacional en la plaza del municipio de Soacha, no acompañó en la
tarima a GS como era su deber, pues se alejó convenientemente momentos
antes del accionar sicarial y después afirmó, en contra de lo probado, que
había intervenido activamente en el momento del atentado para defender a su
protegido.
Esto, por tanto, permite afirmar que el encargo de HJPD —comandante de las
Autodefensas del Magdalena medio—, de debilitar el esquema de seguridad de
LCGS, según lo sostuvo AJBA, alias […], se cumplió al pie de la letra por
MAMM, pues recuérdese que JATM fue puesto como jefe del esquema de
seguridad por aquél y, según se expuso ampliamente en precedencia, cumplió
esa tarea a cabalidad.
[…]
135
protervos fines de tal organización criminal, entre ellos, la muerte de LCGS,
siendo su aporte significativo, el cual constituye la base para predicar la
coautoría impropia, la ayuda que brindó para debilitar su esquema de
seguridad del político, contribución sin la cual no se hubiera logrado
consumar tal crimen».
Tesis:
«[…] a través de un yerro de juicio del Tribunal respecto de la categoría de la
coautoría, pretende mudar el fallo de condena adoptado en contra del
procesado al degradarlo al de complicidad, pero sin la contundencia necesaria
para denotar el error de selección normativa.
136
NÚMERO DE PROVIDENCIA : AP7135-2016
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Cali
CLASE DE ACTUACIÓN : REVISIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 19/10/2016
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio / Fabricación, tráfico, porte o
tenencia de armas de fuego, accesorios,
partes o municiones
FUENTE FORMAL : Ley 600 de 2000 art. 75-2, 220 y 222 /
Decreto 2700 de 1991 art. 1 y 3
Tesis:
«De conformidad con lo establecido en el artículo 222 del estatuto procesal
penal, constituyen presupuestos formales para la admisión de la demanda: i)
se determine la actuación procesal cuya revisión solicita, con la concreción del
despacho que profirió el fallo; ii) el delito o delitos que motivaron la actuación
procesal; iii) la causal que se invoca y los fundamentos de hecho y de derecho
en que se apoya la solicitud; iv) la relación de las pruebas que fundamentan la
petición; v) el aporte de copia de las sentencias de primera y segunda
instancia y de casación, según el caso; y, vi) constancia de su ejecutoria,
exigencias frente a las cuales ninguna objeción admite la demanda
instaurada.
[…]
137
Es decir, se exige una postulación encaminada a acreditar, con apoyo en las
pruebas allegadas y asumidas como “nuevas” que la verdad formalmente
declarada en el fallo no corresponde a la realidad, esto es, que la sentencia
atacada se muestra materialmente injusta, empero, en el asunto, surge
diáfanamente paradójico tener como prueba nueva un documento como el
allegado, pues el mismo no logra derruir la responsabilidad de EAG en los
punibles de homicidio en concurso con fabricación, tráfico y porte de armas
de fuego.
Tesis:
138
controvertir la legalidad de los fallos de instancia, cuya enmienda no
corresponde a la acción rescisoria.
Tesis:
139
RELEVANTE
Tesis:
«Se sostiene en el fallo impugnado que los glucómetros fueron importados con
el propósito de comercializarlos, toda vez que “el planteamiento defensivo,
relacionado con la finalidad altruista para ingresar los elementos al país
deviene absurdo, por dos razones: no es admisible donar elementos
caducados y de producción imperfecta, destinados a la destrucción y además,
el producto de un delito en el extranjero y, segunda, tampoco resulta
razonable que para efectos de donación se hayan pretermitido todos los
controles exigidos administrativamente para el ingreso al país de tales
elementos”.
En cuarto lugar, lo referente a que el único destino que se les iba a dar a los
glucómetros era su comercialización, porque se pretermitieron los controles
para su ingreso al país, no pasa de ser una simple conjetura. Muchos pueden
ser los motivos que tuvo ÁMR -y no el procesado- para actuar de esa manera:
venderlos clandestinamente (como lo supusieron los falladores de instancia al
acoger la pretensión de la Fiscalía), utilizarlos en la práctica de brigadas
médicas (como lo alegó RM), dotar clínicas clandestinas de la guerrilla o
clínicas donde se practican actividades ilícitas, etc.
[…]
Por último, la Corte considera que aún en el evento en que, como lo sostuvo el
Tribunal, el propósito de ÁR fuera el de comercializar los dispositivos en
Colombia, tal conducta no puede ser trasladada al procesado para deducirle
responsabilidad, habida consideración que no se demostró, por ningún medio
de conocimiento, la existencia de un acuerdo entre ellos para hacer la
141
importación de los dispositivos y demás equipos médicos y, menos aún, sobre
el destino que se les daría, sin que pueda la judicatura presumirlo, máxime
cuando hay prueba en contrario.
[...]
142
le fueron enviados, lo que significa que no había realizado ninguna actividad
para “destinarse a la comercialización y distribución” y menos aún que tales
labores las hubiera realizado “a poco andar”, expresión que significa “con
celeridad, con presteza”.
[…]
Tesis:
«La argumentación esbozada en el cargo principal, que ni siquiera indica cuál
es la causal de casación que lo soportaría, es insuficiente para develar a la
Sala la necesidad de invalidar las diligencias como mecanismo extremo de
solución, al circunscribirse la denuncia del presunto yerro a la crítica acerca
de la validez que al recurrente le merece, desde una interpretación subjetiva,
el método narrativo y jurídico empleado por la Fiscalía cuando sintetizó tales
aspectos en el escrito de acusación, el cual, por sí mismo, no se avizora lesivo
de garantías fundamentales.
144
Tesis:
«Acerca del argumento del demandante relativo a que su poderdante fue
absuelto por el delito de concierto para delinquir, eventualidad que en su
opinión acredita que “…no pertenecía a la banda criminal que dio muerte al
señor Raúl Oswaldo Cifuentes Montenegro…”, necesario resulta hacer
claridad respecto a que tal comportamiento se diferencia sustancialmente de
la figura de la coautoría, y en consecuencia, nada impide que no obstante no
haberse acreditado la existencia del punible de concierto para delinquir, se
deduzca responsabilidad criminal contra varias personas en calidad de
coautores.
[…]
145
En este caso según se dijo, se condenó por un acuerdo común con división de
trabajo criminal, esto es, se trata de una coautoría impropia, de modo que la
absolución por concierto para delinquir no la desvirtúa.
Como quiera entonces que las pruebas que se aducen para sustentar la
acción rescisoria, carecen de la aptitud requerida para propiciar el
decaimiento de las conclusiones fácticas de los fallos de instancia, lo
procedente es declarar infundada la causal de revisión invocada».
TEMA: COAUTORÍA - Demostración
Tesis:
«Es incontrastable que el reparo de la defensora se orienta a patentizar que el
Tribunal incurrió en error de hecho por falso juicio de existencia por
suposición en punto de la prueba que demostraba que el procesado actuó en
coparticipación criminal con las demás personas vinculadas a este proceso y,
por tanto, eliminado ese yerro, se le debe absolver del delito de peculado por
apropiación.
Con tal postura desconoce las bases del fallo, en el cual la prueba documental
y pericial, preferentemente, sirvió para reconstruir las particularidades de la
licitación del contrato de los morrales escolares, a partir de la que,
“inferencialmente” se concluyó que todo el trámite licitatorio estuvo orientado
a favorecer al acusado LJTP.
[…]
146
Recordado lo que el juzgador de segundo grado señaló en punto de la
responsabilidad del procesado LJTP, se evidencia que fue a partir de prueba
indiciaria que concluyó que el citado, junto con los restantes servidores
públicos allí anotados, actuó mancomunadamente para lograr la adjudicación
de la licitación e, igualmente, el provecho ilícito en contra del erario del
departamento del Meta.
Así las cosas, no es cierto que el Tribunal hubiese supuesto la prueba de que
el procesado LJTP actuó en coparticipación criminal con los servidores del
departamento del Meta, sino que a través de la prueba indiciaria arribó a esa
conclusión.
Así las cosas, cabe recordar que desde el inicio de esta decisión se dejaron
plasmadas las bases para atacar la prueba indiciaria en sede de casación,
labor argumentativa que es totalmente ignorada por la libelista por la
elemental razón de que no se percató de la existencia del medio de
conocimiento indirecto utilizado por el Tribunal».
147
Tesis:
Tesis:
[…]
Ahora, acerca de que en el fallo atacado se dio por sentado que no existió
combate, advierte la Colegiatura que en particular la presencia de tatuaje
alrededor de las heridas producidas por proyectiles de arma de fuego a una de
las víctimas, descarta de plano la existencia de una contienda, en especial
porque adujeron los militares junto con el procesado que luego de ser
atacados por cinco hombres con armas cortas, procedieron a perseguirlos,
dando de baja a cuatro, pues uno huyó.
[…]
[…]
En tal contexto, no hay duda que CG sabía acerca de las retenciones ilegales,
de las muertes, de la escenificación de la contienda y del falso reporte de bajas
en las filas de la subversión, para lo cual, como Comandante de la Compañía
[…], debió coordinar cada una de las fases del cruento resultado, pues no de
otra manera se explica que contrario a las pruebas recaudadas haya
pretendido aducir la existencia de un combate en cuyo desarrollo se causó la
muerte a LH y REQR, y NE SV y RESP.
149
Como también el defensor manifiesta que en la zona se encontraban cerca de
trescientos veinte militares, sin que se pueda sindicar a su asistido por el
único hecho de estar allí presente, encuentra la Corte que es precisamente lo
expuesto por el mismo CG en su injurada y en el juicio, lo que permite
descartar su ajenidad con los hechos, pues él refirió que obtuvo información
de “un viejo” acerca de la presencia de cinco o diez guerrilleros en la parte alta
del cañón de la quebrada San Juan, hacia donde se dirigió y tuvo lugar el
enfrentamiento con quienes llama “bandoleros”.
[…]
Tesis:
150
«Según el artículo 340 del Código Penal, el concierto para delinquir se
configura “cuando varias personas se concierten con el fin de cometer
delitos...”.
La diferencia entre una y otra figura jurídica fue explicada con suficiencia en
sentencia del 25 de septiembre de 2013, radicado 40545, la cual se transcribe
en lo pertinente en atención a su claridad.
151
delinquir, mientras que en la coautoría material no basta que medie dicho
acuerdo, pues si el mismo no se concreta, por lo menos, a través del comienzo
de los actos ejecutivos de la conducta acordada (tentativa), (…), es decir, el
concierto para delinquir subsiste con independencia de que los delitos
convenidos se cometan o no, mientras que la coautoría material depende de
por lo menos el comienzo de ejecución de uno de los punibles convenidos.
152
permanente, como ocurre con el secuestro, caso en el cual se prolongará por
todo el tiempo de duración de dicho delito, pero es claro que la realización de
otro ilícito configura una nueva coautoría.
153
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Bogotá
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 04/11/2015
DECISIÓN : CASA PARCIALMENTE / ABSUELVE
DELITOS : Hurto / Fabricación, tráfico, porte o
tenencia de armas de fuego, accesorios,
partes o municiones
FUENTE FORMAL : Ley 599 de 2000 art. 29, 365 Y 366
Tesis:
«Según el artículo 29 del Código Penal son coautores los que, mediando un
acuerdo común, actúan con división del trabajo criminal atendiendo la
importancia del aporte, y aquí los juzgadores acogiendo los criterios
jurisprudenciales de la teoría del dominio del hecho, en la que para efectos de
la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho, en donde
cada sujeto domina el acontecer total en cooperación con los demás, pues no
tiene en sí mismo un dominio parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos, determinaron la coautoría de los enjuiciados.
154
Tesis:
«En manera alguna se acepta en forma expresa e inequívoca que el delito aquí
investigado se concretó previo acuerdo común y división de funciones en pos
del resultado típico, que es lo que caracteriza la coautoría impropia que
reclama el demandante; por el contrario, el pronunciamiento es reiterativo en
que el acusado, con voluntad y conocimiento de su obrar contrario a derecho,
instigó la materialización de la conducta punible reprochada.
“…han aceptado que en los casos en que varias personas proceden en una
empresa criminal, con consciente y voluntaria división del trabajo para la
producción del resultado típico, todos los partícipes tienen la calidad de
autores, así su conducta vista en forma aislada no permita una subsunción
en el tipo, porque todos están unidos en el criminal designio y actúan con
conocimiento y voluntad para la producción del resultado comúnmente
querido o, por lo menos, aceptado como probable.
[…]
156
Lo anterior es demostrativo de que el aporte de GL dentro del plan concebido
era esencial para la concreción del designio criminal, y que la cabal ejecución
de la tarea encomendada a aquél en función del objetivo global, por supuesto
también dependía de las labores atribuidas y desarrolladas por los otros
compañeros de causa, como que todos ingresaron a un mismo tiempo de
manera repentina y violenta a un predio ajeno, mediante el empleo de armas
de fuego para someter a sus moradores, como en efecto lo hicieron, por lo que
desde tal perspectiva el aludido acusado tiene la calidad de coautor del hurto,
con sujeción a los lineamientos jurisprudenciales atrás recapitulados».
Tesis:
157
responde del hecho, siempre que éste permanezca en el ámbito de la decisión
común acordada previamente”.
Así mismo, fluye de la dinámica del suceso aquí debatido, que la razón para el
empleo de instrumentos bélicos por parte de los autores era someter y obligar
a los moradores que no se opusieran al saqueo, de donde resultaba también
lógico y probable que ante la resistencia de éstos o de un extraño que
interfiriera con el plan, las armas serían empleadas y con ellas se podría
ocasionar lesiones o la muerte de personas.
En este caso ocurrieron los dos supuestos: se sabe que JDGS, se opuso y no
cooperó con los asaltantes, y por ello fue abatido con un disparo en la nuca, y
al ser sorprendidos los ejecutores del robo por agentes de la SIJIN que
llegaron al predio alertados del posible saqueo, se produce un intercambio de
disparos entre los bandidos y los representantes de la ley, hecho este último
del que se deduce, sin lugar a dudas, que los maleantes iban resueltos a usar
las armas de las que se proveyeron, sin que pudieran ignorar las
consecuencias eventuales de tal comportamiento, por lo que los resultados
típicos concretados en ese proceder les son imputables a todos en calidad de
coautores.
158
Finalmente dígase que así no se hubiese establecido cuál de los ejecutores de
la empresa delictiva fue quien agotó el homicidio en la persona de JDGS, ello
en nada exime de responsabilidad a los sentenciados, pues como quedó
explicado párrafos atrás, el principio de imputación recíproca permite afirmar
que cuando existe una resolución común al hecho, lo que haga cada uno de
los coautores es extensible a todos los demás sin perjuicio de que las otras
contribuciones individualmente consideradas sean o no por sí solas
constitutivas de delitos».
Tesis:
160
convenidos se cometan o no, mientras que la coautoría material depende de
por lo menos el comienzo de ejecución de uno de los punibles convenidos.
(...)
161
En suma, el delito de concierto para delinquir requiere: Primero: Un acuerdo
de voluntades entre varias personas; segundo: Una organización que tenga
como propósito la comisión de delitos indeterminados, aunque pueden ser
determinables en su especie; tercero: La vocación de permanencia y
durabilidad de la empresa acordada; y cuarto: Que la expectativa de
realización de las actividades propuestas permita suponer fundadamente que
se pone en peligro la seguridad pública .
(...)
162
NÚMERO DE PROCESO : 46547
NÚMERO DE PROVIDENCIA : AP5124-2015
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Antioquia
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 09/09/2015
DELITOS : Homicidio
FUENTE FORMAL : Ley 600 de 2000 art. 95, 96, 206, 310-1,
310-3, 322 y 324 / Ley 599 de 2000 art. 9 y
29 / Ley 522 de 2000 art. 451 y 454
Tesis:
«Es evidente la inadmisibilidad de los dos cargos planteados, por el mismo
defensor y en términos muy similares, por la senda de la violación indirecta de
la ley sustancial, toda vez que aquél incumplió, frente a ambos, con los
presupuestos mínimos de su acreditación:
En segundo lugar, más allá de su opinión personal sobre el valor acertado del
conjunto probatorio, el censor no mostró la incongruencia o la disonancia que
existiría entre el contenido objetivo de una específica prueba y aquél que,
como tal, fue declarado en la sentencia. Ese cotejo nunca se realizó y, a
cambio, tan solo se advierte en la sustentación del cargo la diferencia de
criterios entre el impugnante y la sentencia, confrontación dialéctica ésta que
puede ser suficiente para fundar un recurso ordinario, más nunca el
extraordinario de casación que parte de la doble presunción de acierto y
legalidad del fallo, la cual solo puede cuestionarse a partir de uno de los
específicos errores reconducibles por la vía de las taxativas causales de
casación.
163
la coautoría puede materializarse a través de una distribución de funciones
heterogéneas, tal y como dispone el artículo 29 del C.P.
TEMA: COAUTORIA - Configuración
Tesis:
«Las pruebas acreditan que ÁFRM fue coautor del homicidio de AHC porque
ejecutó tareas de vigilancia del sector en que el mismo ocurriría, esperó al
autor de los disparos mortales, lo recogió garantizando su escape del lugar de
los hechos y realizó disparos con su arma de dotación para evitar
persecuciones como la que emprendió DBH y/o para dispersar potenciales
testigos. Además, utilizó para tal efecto su investidura de detective del (...) y
un vehículo de dicha institución, para desviar la atención, primero, de la
comunidad y, luego, de las autoridades judiciales, como se pudo comprobar.
Su actuación, entonces, se evidencia como previamente concertada y fue de
una importancia tal que sin ella las posibilidades de éxito en el operativo
criminal hubiesen sido menores, es más fue la conducta del procesado la que
ha determinado que hasta hoy día no se conozca ni la identidad ni la
ubicación del agresor directo».
164
NÚMERO DE PROVIDENCIA : SP8346-2015
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Ibagué
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 01/07/2015
DECISIÓN : NO CASA
DELITOS : Rebelión
ASUNTO:
El problema jurídico radica en determinar si por haberle informado al
comandante del frente 25 del grupo guerrillero f.a.r.c. (alias Bertil), acerca de
la situación económica de JEAM de quien dijo que era colaborador de los
paramilitares, EBB debe responder por la contribución en la realización de la
conducta antijurídica de rebelión o por la comisión, junto con otros sujetos,
de los delitos de rebelión, secuestro y homicidio
Tesis:
Los primeros, se refieren al acuerdo expreso o tácito, en razón del cual cada
coautor se compromete a desarrollar la tarea que le corresponde en la
ejecución del plan criminal, lo cual implica que cada uno debe ser consciente
de que voluntariamente comparte la misma causa, el mismo propósito ilícito y
los medios que se emplearán para alcanzar tales fines.
Los objetivos, aluden a que la contribución de cada coautor debe ser esencial
("división del trabajo criminal atendiendo la importancia del aporte"), aspecto
que necesariamente remite al denominado "dominio funcional del hecho", en
virtud del cual cada sujeto domina el acontecer total en cooperación con los
demás.
"Es sabido que para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal no
requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes,
de los hechos demostrativos de la decisión conjunta de su realización.
Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto controla el acontecer total en cooperación con los demás, no
165
tiene en sí mismo un control parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos.
Tesis:
«Conviene recordarle al actor que pasó desapercibido que ese acuerdo de
voluntades puede ser expreso o tácito y previo o concurrente a la comisión del
ilícito (CSJ SP, 2 sep. 2009, rad. 29221), por lo que, por regla general, no se
constata con una prueba directa o con un documento, sino por razonamientos
lógicos de naturaleza inferencial (CSJ SP, 3 jul. 2003, rad. 19563)».
JURISPRUDENCIA RELACIONADA: Rad: 29221 | Fecha: 02/09/2009 |
Tema: COAUTORÍA - Acuerdo puede ser expreso o tácito / COAUTORÍA -
Acuerdo puede ser antecedente o concomitante al comportamiento Rad:
166
26967 | Fecha: 12/09/2007 | Tema: CASACIÓN OFICIOSA - No requiere de
traslado previo al Ministerio Público
Tesis:
167
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 20/05/2015
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio
FUENTE FORMAL : Ley 600 de 2000 art. 212 y 213
Tesis:
(...)
(...)
168
M. PONENTE : PATRICIA SALAZAR CUELLAR
NÚMERO DE PROCESO : 41462
NÚMERO DE PROVIDENCIA : AP2581-2015
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Medellín
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 20/05/2015
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio / Fabricación, tráfico, porte o
tenencia de armas de fuego, accesorios,
partes o municiones
FUENTE FORMAL : Ley 906 de 2004 art. 181 y 184
TEMA: COAUTORIA - Concepto
Tesis:
Por lo tanto, evidente resulta para el efecto que la condena emitida en contra
de los procesados no lo fue a título de cómplices o determinadores, sino de
coautores de los delitos de Homicidio, cometido en circunstancia de
agravación punitiva, y Fabricación, tráfico o porte de armas de fuego, en
concurso de conductas punibles».
169
FECHA : 25/02/2015
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Extorsión
FUENTE FORMAL : Ley 599 de 2000 art. 28, 29 / Ley 600 de
2000 art. 213
Tesis:
«La orientación de la queja resulta contradicho con la inicial y expresa
afirmación del actor en el sentido de que no hay duda de la realización de la
señalada conducta punible, en modalidad de tentativa, siendo evidente de las
subsiguientes manifestaciones del libelista que su inconformidad radica en el
compromiso penal deducido a su prohijado en el delito, luego para construir
una adecuada proposición jurídica debió empezar por citar como
indebidamente aplicadas las normas inherentes a la autoría y participación,
esto es, los artículos 28 y 29 de la Ley penal Sustantiva».
Tesis:
«Este equivocado entendimiento del recurso extraordinario se replica en lo
concerniente al debate que se pretende suscitar tratándose de la coautoría
impropia deducida por el Tribunal, ya que con críticas que se enmarcarían en
la propuesta metodológica que orientaría la acreditación de la violación directa
de la ley sustancial, se desconoce que la jurisprudencia ha contemplado que,
para la materialización de este dispositivo amplificador del tipo, es suficiente
verificar el escenario fenoménico y las variables objetivas concurrentes en la
acción si plasman un convenio no expreso, sino tácito, como aquí se hizo. En
consecuencia, de ninguna manera es necesario demostrar, por ejemplo, algún
tipo de conversación explicita o un sopesado intercambio de pareceres entre
quienes co-dominan el hecho, para concluir en la vigencia de esta figura (Cfr.
CSJ AP, 27 Feb 2013, Rad. 40719). Así, en virtud de la misma, el resultado,
170
en este caso tentado, le es endilgable a sus protagonistas aun cuando cada
uno de los comportamientos visto en forma aislada no permita la subsunción
en un tipo penal concreto, al conjugarse sus voluntades hacía un único
designio».
RELEVANTE
Tesis:
«Las conductas investigadas (secuestro y homicidio) fueron ejecutadas por
una organización criminal que actuaba de común acuerdo y distribución de
funciones, pues no de otra manera se explica que sus voluntades coincidieran
en la realización del objetivo alcanzado y que actuaran en la forma
mancomunada como lo hicieron.
Ninguna incorrección, por tanto, se advierte en la conclusión que se cuestiona, pues las pruebas, como
se ha dejado visto, respaldan la imputación que se le hace a título de coautor en ambos delitos. Y si
bien es cierto el Tribunal terminó descartando por duda su presencia en la operación de secuestro del
abogado VV realizada en la finca (...), esto no excluye su participación en este delito, porque está
probado que hacía parte del plan criminal, y que horas más tarde se integró al grupo secuestrador en
171
la calle Loyola, donde continuó coejecutando la conducta de secuestro, situación que lo ubica como
coautor indiscutible del hecho».
TEMA: COAUTORIA - Demostración
Tesis:
«El censor únicamente adujo que el juez plural inventó la prueba de la
coautoría, como si se estuviera ante una de naturaleza directa, pero no indicó
cuál fue ella, por lo que el cargo quedó huérfano de demostración.
Pasó por alto que ese acuerdo puede ser expreso o tácito y previo o
concurrente a la comisión del ilícito (CSJ SP, 2 sep. 2009, rad. 29221), por lo
que, por regla general, no se constata con una prueba directa o con un
documento, sino por razonamientos lógicos de naturaleza inferencial (CSJ SP,
3 jul. 2003, rad. 19563). Precisamente, ello fue lo que acaeció en este caso,
pues el ad quem afirmó la coautoría de (...) no sobre la base de una prueba
directa que evidenciara que él y su compañero involucrado sostuvieron una
reunión previa para acordar voluntades, sino por la forma en que ocurrieron
los hechos, la sucesión de los actos desplegados cuando atendieron el
accidente de tránsito que suscitó la discusión y su cohesión en torno al
mismo propósito -solicitud y obtención indebida de dinero ».
172
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 02/12/2014
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Secuestro simple
FUENTE FORMAL : Ley 600 de 2000
TEMA: COAUTORÍA - Elementos
Tesis:
«El censor no le demostró a la Corte cuál era, en ambos reproches, la
trascendencia de su postura, de acuerdo con la cual GMM no participó a
título de coautor en el secuestro del cual AC fue víctima porque (i) no tenía
conocimiento acerca de la acción que LRTC iba a emprender y (ii) manifestó
su desacuerdo a que el sujeto pasivo fuera golpeado o maltratado.
173
Tesis:
(...)
(...)
174
la información ofrecida a los demás copartícipes, se habría afectado la
realización del reato.
Tesis:
(...)
175
de 2000 art. 398
Tesis:
«Para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal no requiere de un
pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes de los hechos
demostrativos de la decisión conjunta de su realización, además, en ese
designio común ninguno de los participantes realiza íntegramente el tipo
penal, ya que cada uno de ellos hace su aporte, sólo que el delito se les
imputa de manera integral.
Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho.
Cada sujeto domina el acontecer total en cooperación con los demás, no tiene
en sí mismo un dominio parcial, ni tampoco el dominio global, sino que éste
se predica de todos.
(...)
RELEVANTE
176
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Cartagena
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 01/10/2014
DECISIÓN : CASA / CANCELA MEDIDAS
DELITOS : Terrorismo
FUENTE FORMAL : Constitución Política de Colombia art. 29 /
Ley 599 de 2000 art. 9, 21, 27, 343 y 345 /
Decreto Ley 180 de 1988 art. 1 / Decreto
2266 de 1991 art. 4 / Decreto Ley 100 de
1980 art. 187
Tesis:
177
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Medellín
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 27/08/2014
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio en persona protegida
FUENTE FORMAL : Ley 600 de 2000 art. 207 y 212
Tesis:
Tesis:
«Si lo pretendido en el cargo primero era cuestionar la legalidad de la
adecuación típica, en lo atinente al concurso de personas en el delito, le
correspondía acudir a la causal primera o tercera de casación y demostrar la
valoración equivocada de los fallos, ya fuese a partir de una óptica netamente
178
dogmática o desde el ataque a la producción y valoración de la pruebas y
cómo se habían aplicado, inaplicado o erróneamente interpretado las normas
relacionadas con tal tópico».
RELEVANTE
Tesis:
179
En consecuencia, no necesariamente los partícipes en el delito debían tener
pleno conocimiento de todos y cada uno de los detalles de su ejecución, pero
no por ello dejan de ser responsables por las tareas ejecutadas en virtud de la
previa división de trabajo».
Tesis:
180
efectuar, siguiendo la división del trabajo planificada de antemano o acordada
desde la ideación criminal.
Ese criterio fue recientemente confirmado por la Sala (CSJ SP, 22 ene. 2014,
Rad. 38725), al precisar que la coautoría funcional se puede deducir de los
hechos que demuestran la decisión conjunta de realizar el delito.
(...)
181
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Valledupar
CLASE DE ACTUACIÓN : REVISIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : AUTO INTERLOCUTORIO
FECHA : 28/05/2014
DECISIÓN : INADMITE
DELITOS : Homicidio en persona protegida
FUENTE FORMAL : Ley 906 de 2004 art. 192
Tesis:
«Era indiferente individualizar el tipo de arma que causó el deceso o que el rol
de MP se hubiese circunscrito a “disparar al aire”, porque ese
comportamiento, según el devenir indiciario plasmado en las sentencias,
obedeció a un plan criminal -que no debe ser indefectiblemente producto de la
reflexión, la preparación o la ponderación al ser factible que se genere en un
convenio repentino o tácito (CSJ AP, 27 Feb 2013, Rad. 40719)-, que estuvo
encaminado a ocultar las condiciones reales en que se ejecutó el homicidio.
Por ende, cobró relevancia la significativa cantidad de munición que el citado
empleó el día de los acontecimientos, toda vez que ello reveló el ánimo de
mimetizar una oprobiosa acción de agentes del estado, “un falso positivo”,
bajo el amparo del uso legítimo de la fuerza que nunca hubo necesidad de
desplegar. A esta conclusión arribaron los juzgadores, luego de retomar, en
particular, el entorno inusual en que se halló el cadáver de la víctima».
RELEVANTE
Tesis:
182
«Los elementos de juicio así presentados permiten inferir razonablemente que
el postulado, junto con otros miembros del grupo, realizó las conductas
imputadas, a modo de una división funcional de tareas, desde donde surge
que los hechos fueron cometidos por esa agrupación y debe cargarse a esta,
sin importar que individualmente cada uno de sus integrantes no hubiese
recorrido todos los elementos del tipo penal. Cada uno de ellos, y por tanto el
sindicado, será coautor de ese comportamiento. Así se modificará el fallo del
Tribunal».
TEMA: COAUTORÍA - Configuración
Tesis:
183
M. PONENTE : EUGENIO FERNANDEZ CARLIER
NÚMERO DE PROCESO : 38725
NÚMERO DE PROVIDENCIA : SP151-2014
PROCEDENCIA : Tribunal Superior Sala Penal de Bogotá
CLASE DE ACTUACIÓN : CASACIÓN
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 22/01/2014
DECISIÓN : NO CASA
DELITOS : Homicidio en persona protegida / Concierto
para delinquir / Desaparición forzada /
Tortura en persona protegida / Secuestro
extorsivo / Hurto calificado / Cohecho por
dar u ofrecer / Fraude procesal
FUENTE FORMAL : Ley 600 de 2000 art. 398 núm. 1,3 / Ley
600 de 2000 art. 404 / Ley 599 de 2000 art.
29 / Ley 270 de 1996 / Constitución
Política de Colombia art. 257 núm. 1
Tesis:
«Es sabido que para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal no
requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes,
de los hechos demostrativos de la decisión conjunta de su realización.
Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto controla el acontecer total en cooperación con los demás, no
tiene en sí mismo un control parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos.
184
RELEVANTE
Tesis:
«De conformidad con lo establecido por el artículo 493-1 C.P.P. de 2004, para
conceder la extradición es requisito indispensable que el hecho que la motiva
también esté previsto en Colombia como delito y reprimido con sanción
privativa de la libertad cuyo mínimo no sea inferior a cuatro años.
(...)
(...)
(...)
185
Como en este caso las autoridades judiciales de los Estados Unidos de
América acusan a (...) y a otros de haberse concertado, junto con otras
personas, ilícita e intencionalmente para distribuir y poseer con la intención
de distribuir un kilogramo, o más, de heroína, así como para importar dicha
sustancia a los Estados Unidos de América, es de concluirse que en relación
dichos cargos se cumple el presupuesto relativo a la doble incriminación para
extraditar, pues en la legislación penal colombiana tales comportamientos
también se hallan definidos como delito, y por su realización prevé pena
mínima superior a cuatro años de prisión.
Cabe destacar, que las conductas imputadas tienen relación con delitos de
concierto para la distribución, posesión e importación de heroína, no
únicamente con la participación en un acto ilícito determinado, mediante la
realización de varios actos diferenciados en circunstancias de modo, lugar y
tiempo, como se destaca en la acusación proferida y en las declaraciones
juradas rendidas por el Fiscal Auxiliar de la Fiscalía de los Estados Unidos
para el Distrito Sur de(...) y el Agente Especial de la Administración para el
Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) en la ciudad de (...).
Tesis:
186
«Resulta apenas obvia la genérica imposibilidad material de hallar prueba del
sustrato que subyace a la determinación o a la coautoría, pero eso no impide
que por labor inferencial, como ha sucedido en este evento, se establezca
jurídicamente una u otra forma de participación delictual ».
Tesis:
«El acuerdo entre los coautores puede ser expreso o tácito. Esto último
significa que de ninguna manera es necesario demostrar algún tipo de
conversación o intercambio de palabras entre quienes co-dominan el hecho».
Tesis:
«Deviene diáfano que para la coautoría funcional el acuerdo del plan criminal
no requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos
desencadenantes de los hechos demostrativos de la decisión conjunta de su
187
realización, además, en ese designio común ninguno de los participantes
realiza íntegramente el tipo penal, ya que cada uno de ellos hace su aporte,
sólo que el delito se les imputa de manera integral.
Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto controla el acontecer total en cooperación con los demás, no
tiene en sí mismo un dominio parcial, ni tampoco global, sino que éste se
predica de todos.
Tesis:
«Aún haciendo eco al ejercicio de valoración probatoria que en esta sede hizo
la Delegada, no podría estimarse próspera la censura, porque si bien es cierto
y de modo objetivo el procesado estuvo presente en el operativo militar que
produjo la muerte de dos civiles, no menos lo es que su presencia obedeció al
hecho de que probablemente y por información de sus superiores, se iba a
188
entrar en combate real y que como consecuencia de ello eventualmente se
producirían bajas que serían repartidas entre los dos grupos militares que
intervenían en la operación.
(...)
En esas condiciones, si hubo un acuerdo con los miembros de la AFEUR, no
fue para dar muerte a civiles inermes, sino para entrar en un operativo militar
real que tenía por fin capturar o repeler a miembros de la guerrilla que
asaltaban y extorsionaban a personas que transitaban por aquél
corregimiento».
RELEVANTE
189
Tesis:
[...]
Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
190
Dos. Aporte significativo durante la ejecución del hecho, es decir, prestación
de algo trascendente para su comisión, servicio importante que cada uno de
los concurrentes presta a la gesta delictiva.
[...]
Así las cosas, para acceder a la petición de legalización de cargos elevada por
la fiscalía, se debe verificar la existencia de los requisitos antes citados en las
actuaciones objeto de pronunciamiento, de modo que si los mismos no están
presentes, se deberá confirmar la decisión del a-quo.
191
ente acusador se enlistaban las víctimas y misiones que debían llevarse a
cabo.
[...]
192
derivados, biocombustibles o mezclas que
los contengan
FUENTE FORMAL : Ley 153 de 1887 art. 40 / Ley 906 de 2004
art. 180 y 184
Tesis:
RELEVANTE
TEMA: COAUTORÍA - Elementos
Tesis:
« De la definición legal en mención la jurisprudencia y la doctrina han
extractado los siguientes elementos de la coautoría: (i) acuerdo común, (ii)
división de funciones y (iii) trascendencia del aporte durante la ejecución del
ilícito.
193
En relación con el tercero de los mencionados presupuestos, tradicionalmente
se ha discutido sobre si es necesario que el aporte se preste durante la
ejecución del delito, es decir, antes de producirse su consumación o si
también resulta dable hablar de coautoría frente a contribuciones posteriores
a la realización del punible.
Así, esta Corporación inicialmente sostuvo que si el sujeto activo está ligado
finalísticamente a la ejecución de la conducta, en forma que el aporte
posterior es producto de un compromiso objetivo y subjetivo con sus
resultados, es perfectamente dable predicar la existencia de la coautoría en
esos casos. Así lo señaló en la sentencia del 22 de mayo de 2003
(...)
La misma línea de pensamiento trazada en la precitada decisión guió la
definición del caso juzgado en la sentencia del 17 de agosto de 2005
(...)
Un giro parcial en relación con el tema dio la Corte en la decisión del 26 de
octubre de 2006, en cuanto en esta ocasión se sostuvo que solamente
constituía coautoría el aporte prestado durante la ejecución del hecho. »
COAUTORÍA - Concepto
Tesis:
« La Sala, por tanto, ha de reiterar aquí el criterio según el cual solamente es
dable reputar como coautores a quienes intervienen en la fase ejecutiva del
delito, no así quienes actúan con posterioridad a la consumación del mismo. »
RELEVANTE
TEMA: COAUTORÍA - Configuración
Tesis:
«Entonces, como con acierto lo consideró el a quo en postura que la Corte
comparte, dentro del plan urdido por los captores, no está en duda que
acogieron acciones propias y riesgos que compartieron; por eso iban armados,
194
dispuestos a los resultados que se alcanzaran, ya que constituía la finalidad
última el secuestro, para lo cual acordaron el uso de las armas con tal
propósito; luego si se pactan unos fines, se asumen los medios para
obtenerlo.
Tesis:
«No se advierte cómo la falta de apreciación del fallo por
cuyo medio se condenó a otro de los copartícipes tenga
relevancia para modificar la decisión condenatoria impartida
contra la señora (...)pues muy a pesar de que en
esa decisión judicial pudiera haberse establecido -así lo dice el
actor- que el ingreso del camión transportador de la marihuana y
posterior almacenamiento en una de las habitaciones de la
vivienda-parqueadero se realizó el 8 de abril de 2009 en horas de
la noche, cuando -se asegura- la enjuiciada no estaba en ese
sitio, además que las pruebas debida y legalmente descubiertas e
incorporadas en el debate oral en el proceso seguido contra
(...) son las que debían ser objeto de
apreciación por los juzgadores, es diáfano que en las sentencias
de instancia, la responsabilidad penal se le atribuyó a ésta por
prestar su decidida colaboración en el alquiler de dicho recinto y
195
no, por ser la persona encargada de abrir el garaje y descargar la
sustancia estupefaciente, a tal grado que la participación en el
delito se le endilgó a título de coautoría.».
RELEVANTE
TEMA: COAUTORÍA - Concepto
Tesis:
«De conformidad con el artículo 29.2 de la ley 599 de 2000, son “coautores los
que, mediando un acuerdo común, actúan con división del trabajo criminal
atendiendo la importancia del aporte”.
Tesis:
196
(v).- Una de las maneras de hacer efectivo y concreto el juicio de valor acerca
de si el aporte es importante o no en los términos establecidos en el artículo
29.2 ejusdem, consiste en hacer un ejercicio de abstracción y excluirlo del
escenario funcional del evento objeto de juzgamiento.
Desde la teoría del delito, se entiende que los itinerarios puramente ideativos
de los comportamientos ilícitos no son punibles, porque ello traduciría
penalizar las expresiones del pensamiento, por ello, un apoyo en esta etapa no
constituye coautoría, tampoco cuando se evidencia en actos preparatorios.
RELEVANTE
Tesis:
197
que de manera previa a su muerte, aquellas fueron sometidas a torturas e
inclusive mutiladas, todo indica que en sí, sus identidades, resultan
irrelevantes en punto de la comisión de los delitos investigados, es decir, tal
imposibilidad de identificarlos no guarda relación alguna con la pretensión de
desvirtuar la comisión de dichos delitos o con la responsabilidad penal de los
acusados.
RELEVANTE
Tesis:
198
el artículo 30 de la Ley 599 de 2000, norma que no difiere en mayor medida
del artículo 24 del Decreto-Ley 100 de 1980, vigente para la fecha de los
hechos, prevé que el cómplice es la persona que contribuye a la realización de
la conducta antijurídica o presta una ayuda posterior, por concierto previo o
concomitante a la misma.
La anterior división fue superada desde el Código Penal de 1980, por ello el
cómplice por no realizar la acción descrita en el tipo, no tiene dominio en la
producción del hecho, su conducta no puede ser la causa del resultado
antijurídico sino una condición del mismo.
De acuerdo con la teoría del dominio del hecho, si la participación del sujeto
en la conducta es de tal entidad que la determina o configura, no queda duda
que se le debe tratar como coautor».
RELEVANTE
Tesis:
«En orden a resolver el conflicto que plantea la intervención de varias
personas en la realización de una conducta prohibida, la dogmática
jurídicopenal hace distinción entre autoría y participación, para lo cual se ha
199
empleado surtidas pautas de las cuales se desprenden diversas teorías, entre
las que sobresalen las siguientes:
COAUTORÍA - Concepto
Tesis:
«En el caso concreto, los defensores de MR y RC niegan que estos sean
coautores del delito de secuestro extorsivo por el que se les acusó. Así, el de
aquél manifiesta que el delito atribuible es el de privación ilegal de la libertad
(artículo 174 de la ley 599 de 2000), en tanto que el de éste, asiente que la
privación de la libertad de locomoción de RB apenas constituye delito de
secuestro simple.
200
Fiscalía General de la Nación, participaron en el primero, comprendido desde
el momento en que el señor RB fue sustraído de su entorno hasta cuando se
bajaron del vehículo particular que contrataron para movilizarse, en el sitio
“La Violeta” de la vía que comunica a Chinchiná con Manizales, entregándolo
a CGF y desentendiéndose de su suerte.
Sin embargo, omiten los libelistas que las circunstancias en las cuales se
desarrolló el suceso ilustran que, de comienzo a fin, se trató de una empresa
criminal en la cual, de manera consciente y voluntaria, los codelincuentes,
previo acuerdo, se distribuyeron roles en orden a obtener la producción del
resultado típico, el cual se materializó desde cuando se produjo la privación
de la libertad de la víctima, conservando cada uno el dominio funcional del
hecho en la fase en que intervino y que la conducta ejecutada por los aludidos
investigadores del C.T.I. de la Fiscalía General de la Nación, fue trascendente
para la obtención del resultado perseguido.
RELEVANTE
201
art. 29 / Ley 600 de 2000 art. 306 y 310 /
Ley 906 de 2004 art. 23, 181, 232, 275,
376, 379, 380, 382, 383, 392, 424, 445, 456
y 457
Tesis:
«
[…] ambos sentenciados fueron capturados en flagrancia, agazapados en la
misma casa que les sirvió de madriguera, cuando pretendieron deshacerse de
una de las armas incriminadas, instantes después de cometer el múltiple
atentado y bajo la sindicación de numerosas personas que señalaron a los
Agentes el lugar del refugio. En ese contexto -salvo una paradoja- la captura
en flagrancia no puede desconocerse bajo ningún punto de vista.
De ahí que para estos efectos el acto colectivo debe apreciarse en su conjunto
y como lo ha dicho la Corte, "en los casos en que varias personas proceden a
una empresa criminal, consciente y voluntaria división del trabajo para la
producción del resultado típico, todos los partícipes tiene la calidad de
autores, así su conducta vista en forma aislada no permita una directa
subsunción en el tipo, porque todos están unidos en el criminal designio y
actúan con conocimiento y voluntad para la producción del resultado
comúnmente querido o, por lo menos, aceptado como probable".
202
En esas condiciones específicas, dada la captura en flagrancia, la conclusión
no puede ser diversa a que los dos asumieron la empresa criminal en
coautoría como lo dedujo el sentenciador, pues la evidencia técnica, científica
y testimonial los compromete en iguales circunstancias temporales y modales
como asunción conjunta de una conducta delictiva».
RELEVANTE
Tesis:
La otra, la coautoría material impropia, tiene lugar cuando entre las personas
que concurren a la comisión del delito media división de trabajo, figura
también denominada “empresa criminal”, pues todos realizan una parte del
delito, incluso algunos efectúan comportamientos objetivamente
intrascendentes o atípicos, como cuando alguien finge ser víctima de un
ataque dentro de las instalaciones de un banco y distrae la atención de los
vigilantes, mientras sus compañeros toman poder de la situación y consiguen
apropiarse ilícitamente de dinero.
A su vez, dentro de la misma preceptiva puede efectuarse un cotejo entre la
determinación y la autoría mediata. En aquella se establece una relación
persona a persona a partir de una orden, consejo, acuerdo de voluntades,
mandato o coacción superable entre el determinador y el determinado (autor
material), dado que ambos conocen de la tipicidad, antijuridicidad y
culpabilidad del comportamiento realizado, pero sólo éste tiene dominio del
203
hecho, motivo por el cual, también ambos responden penalmente de la
conducta hasta la fase en que se haya cometido».
RELEVANTE
204
En el presente caso, donde subversivos del ELN, de distintas jerarquías,
sumaron sus voluntades libres para dinamitar el oleoducto cercano a
Machuca, en cumplimiento de las políticas de ataque terrorista a la
infraestructura petrolera, compartidas por todos ellos, es evidente que los
directivos de esa organización criminal no actuaron como determinadores de
los ejecutores materiales, sino en calidad de coautores, porque no es cierto, al
menos las pruebas no lo indican así, que dichos directivos hubiesen hecho
nacer la idea criminal en los milicianos rasos y menos que dominaran la
voluntad de éstos; pues, por el contrario, lo que se verifica razonablemente es
que los guerrilleros del ELN implicados en la destrucción de la tubería
desplegaron la conducta que les correspondía, con acuerdo previo, por
convicción propia, por compartir las "políticas" del grupo armado ilegal,
directrices que conocían y a las cuales habían adherido con antelación, en un
proceso paulatino de reclutamiento, diseño de estrategias, entrenamientos,
aprendizaje de doctrinas y estandarización de modos de actuar.
RELEVANTE
205
TIPO DE PROVIDENCIA : SENTENCIA
FECHA : 14/02/2002
DECISIÓN : NO CASA
DELITOS : Homicidio
FUENTE FORMAL : Decreto 2700 de 1991 art. 333
TEMA: COAUTORÍA - Demostración
Tesis:
«Para el libelista no es posible que se atribuya ninguna responsabilidad a su
representado a titulo de coautor ni de cómplice, si los verdaderos autores
estaban dentro de la hacienda, en el sitio real de los hechos y (...) en un lugar
distante, cuidando los vehículos y desconociendo lo que estaba ocurriendo.
Que, entonces, por las características del dolo de ímpetu y la no
comunicabilidad de circunstancias es imposible la existencia de
responsabilidad por parte de su patrocinado.
RELEVANTE
Tesis:
206
«Es cierto que el testigo en mención, en el cual está sustentado el fallo
condenatorio, al referirse al ahora recurrente, afirmó que "se desempeñaba
como jefe de inteligencia, alias cinco, participó en lo de Pueblo Bello, ayudó en
el secuestro, no en la ejecución, al menos no me consta, yo lo conocí como
HVO" y que -como se dijo- era a quien le correspondió individualizar a las
personas simpatizantes o relacionadas con los grupos guerrilleros, pero
igualmente corresponde a lo afirmado por este declarante, que los delictivos
hechos objeto de su delación, entre los que se cuenta la toma de Puerto Bello,
no fueron ejecutados por individuos que actuaran en forma separada, sino,
por el contrario, que actuaron como miembros de un grupo paramilitar
debidamente jerarquizado, con un jefe, con específicas finalidades y con
planes previa y debidamente preestablecidos, en el que para su ejecución las
actividades a desarrollar se encontraban debidamente asignadas a cada uno
de ellos, sin que esta división de trabajo signifique que jurídicamente pueda
discendirse frente al resultado obtenido con las acciones individualmente
cumplidas, pues trátase de una real unidad delictiva en la que cada uno de
los integrantes de la organización intervino en lo necesario para lograr el fin
común propuesto, admitiendo como suyas no exclusivamente las acciones
previamente planeadas sino, igualmente, las que dentro de la complejidad del
objetivo propuesto debían ejecutarse, ya porque así estuviese previsto o
porque en su desarrollo a ello había que recurrir para asegurar el objetivo
propuesto.
....
207
darle muerte a todas aquellas personas que creyeran estaban vinculadas con
la guerrilla, y es dentro de ese específico objetivo que el delator señaló a (...)
como "el jefe de inteligencia", a quien le correspondió establecer quiénes eran
esos pobladores, procediéndose, seguidamente, a aprehender a esas personas,
secuestrarlas, amordazarlas, llevarlas hasta las orillas del río Sinú a uno de
las propiedades de su jefe Castaño, torturarlas, darles muerte y
posteriormente sepultarlas en ocultos sitios para que no fueran descubiertos
sus cuerpos y por ende, dejar todo en la impunidad.
208
casación respecto de los medios de prueba no tarifados, como es el caso de la prueba testimonial,
cuando en el fondo de lo que en verdad se trata es de discrepar sobre con el contenido y alcance dado
por el Tribunal al instituto de la coautoría a la hora de interpretar el artículo 23 del Código Penal».
RELEVANTE
Tesis:
«"Es verdad que doctrina y jurisprudencia han aceptado que en los casos en
que varias personas proceden en una empresa criminal, con consciente y
voluntaria división del trabajo para la producción del resultado típico, todos
los partícipes tienen la calidad de autores, así su conducta vista aisladamente
no permita una directa subsunción en el tipo, porque todos están unidos en el
criminal designio y actúan con conocimiento y voluntad para la producción
del resultado comúnmente querido o, por lo menos, aceptado como probable…
Así mismo, si a esa empresa criminal van armados porque presumen que se
les puede oponer resistencia o porque quieren intimidar con el uso de las
armas y como consecuencia de ello se producen lesiones u homicidios, todos
serán coautores de hurto y de la totalidad de los atentados contra la vida y la
integridad personal, aún cuando no todos hayan llevado o utilizado armas,
pues participaron en el común designio, del cual podían surgir estos
resultados que, desde luego, se aceptaron como probables desde el momento
mismo en que actuaron en una empresa de la cual se podían derivar."
209
"Los codelincuentes, armados por lo menos dos de ellos, asumieron el riesgo
de enfrentar posibles oposiciones y por ello se equiparon debidamente, sin
dudar en disparar ante la primera dificultad seria.
PARTE II
COAUTORIA IMPROPIA
10/03/1993
COAUTORIA-Aclaración de voto
210
acuerdo típico no le son imputables a los restantes coautores, ni tal conducta
puede gravitar sobre las espaldas de los otros intervinientes.
Aclaración de Voto
FECHA : 10/03/1993
PROCESO : 6996
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : DR.JORGE ENRIQUE VALENCIA MARTINEZ -
Aclaración de voto
06/07/1993
211
2- )Cabe precisar que la diligencia de inspección judicial con reconstrucción
de los hechos es facultativa para el juez, luego le está permitido prescindir de
ella cuando evidencie que no hay necesidad de fijar certidumbre sobre
algunos aspectos, ni establecer homogeneidad testimonial, porque los
elementos de convicción obrantes en los autos ofrecen la certeza suficiente.
Sentencia Casación
FECHA : 06/07/1993
DECISION : Casa parcialmente
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 7446
PUBLICADA : Si
11/05/1994
Coautoría impropia quiere decir, de manera general, que los sujetos activos
del punible actúan típicamente cada uno por su lado, pero todos colaborando
con los demás en el propósito común, razón por la cual se refiere la doctrina a
una "división de trabajo".
Todo hace ver que el casacionista se confunde al afirmar que existe nulidad
por "imputación de cargos con violación al principio de no contradicción" pues
este principio lo que implica es que se vulnere la lógica alegando al mismo
tiempo y sobre el mismo aspecto, cosas excluyentes u opuestas. Precisamente
es a este principio a que alude el artículo 225 del Código de Procedimiento
212
Penal, cuando dentro de los requisitos formales de la demanda impide que se
hagan dentro de un mismo cargo, reproches excluyentes.
Sentencia Casación
FECHA : 11/05/1994
DECISION : No Casa
DELITOS : Tentativa de homicidio, Homicidio
PROCESO : 8513
PUBLICADA : Si
06/04/1995
Son coautores todos aquellos que toman parte en la ejecución del delito,
codominando el hecho, ejecutando la parte que les corresponde en la división
del trabajo para obtener el resultado criminal, o sea que mancomunadamente
ejecutan el hecho punible.
De acuerdo con el art. 308 del C. de P.P., quien alegue la nulidad debe
demostrar no sólo que la irregularidad es sustancial, sino además que "...ésta
afecta garantías de los sujetos procesales, porque desconoce las bases
fundamentales de la instrucción y el juzgamiento...".
213
PONENTE(S) : DR.NILSON PINILLA PINILLA
Sentencia Casación
FECHA : 06/04/1995
DECISION : No Casa
DELITOS : Homicidio
PROCESO : 8951
PUBLICADA : Si
12/09/1995
COAUTORIA
Sentencia Casación
FECHA : 12/09/1995
DECISION : No Casa
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Homicidio
agravado
PROCESO : 9240
PUBLICADA : Si
21/02/1996
COAUTORIA
"En verdad que doctrina y jurisprudencia han aceptado que en los casos en
que varias personas proceden en una empresa criminal, con consciente y
voluntaria división del trabajo, para la producción del resultado típico, todos
los partícipes tienen la calidad de autores, así su conducta vista en forma
aislada no permita una directa subsunción en el tipo, porque todos están
unidos en el criminal designio y actúan con conocimiento y voluntad para la
producción del resultado comúnmente querido o, por lo menos, aceptado
como probable."
Sentencia Casación
FECHA : 21/02/1996
214
DECISION : Desestima la demanda, casa parcial en cuanto
a la pena accesoria
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Porte ilegal de
armas, Homicidio agravado
PROCESO : 9457
PUBLICADA : Si
06/05/1998
COAUTORIA
13/05/1998
CASACION/ COAUTORIA
215
La coautoría implica que luego del acuerdo criminal, el trabajo se divide entre
cada uno de los integrantes, a efectos de que con ese aporte se logre la
consumación del hecho criminoso.
20/05/1998
216
y únicamente se disiente sobre la aplicación o la interpretación del precepto
sustancial.
04/02/1999
217
de justicia contenida en el fallo, pues resulta inútil proponer la configuración
de uno o varios de tales desaciertos sin demostrar su repercusión en la parte
resolutiva de la sentencia que se impugna, como es igualmente improcedente
denunciar la transgresión de un precepto general del Código Penal, sin
incidencia en un específico tipo definido como delito en la parte especial del
mismo, o en estatutos punitivos especiales.
2.- Mayor soporte tiene lo que viene de ser expuesto, si se considera la cita
jurisprudencial que hace el Tribunal de una providencia fecha febrero 28 de
1985 con ponencia del Magistrado LUIS ENRIQUE ALDANA ROZO, reiterada
en la sentencia proferida el diez de marzo de mil novecientos noventa y tres
con ponencia del doctor RICARDO CALVETE RANGEL, en la cual sobre el
tema de la coautoría se precisó:
"En verdad que doctrina y jurisprudencia han aceptado que en los casos en
que varias personas proceden en una empresa criminal, con consciente y
voluntaria división de trabajo para la producción del resultado típico, todos
los partícipes tienen la calidad de autores, así su conducta vista en forma
aislada no permita una directa subsunción en el tipo, porque todos están
unidos en el criminal designio y actúan con conocimiento y voluntad para la
producción del resultado comúnmente querido o, por lo menos, aceptado
como probable. En efecto, si varias personas deciden apoderarse de dinero de
un banco pero cada una de ellas realiza un trabajo diverso: Una vigila, otra
intimida a los vigilantes, otra se apodera del dinero y otra conduce el vehículo
en que huyen, todas serán autores del delito de hurto. Así mismo, si a esa
empresa criminal van armados porque presumen que se les puede oponer
resistencia o porque quieren intimidar con el uso de las armas y como
consecuencia de ello se producen lesiones u homicidios, todos serán
coautores del hurto y de la totalidad de los atentados contra la vida y la
integridad personal, aun cuando no todos hayan llevado o utilizado las armas,
pues participaron en el común designio , del cual podían surgir estos
resultados que, desde luego, se aceptaron como probables desde el momento
mismo en que actuaron en una empresa de la cual se podían derivar".
11/02/1999
218
COAUTORIA
23/03/1999
219
conexidad, es decir que estén sustancialmente relacionados por vínculos de
carácter ideológico, consecuencial u ocasional, o de cualquier otra índole.
25/04/2000
220
Como lo recuerda el agente del Ministerio Público, aunque es un imperativo
para los funcionarios judiciales realizar la investigación integral, ello no
significa que ante cualquier coartada del procesado deba disponer de todo el
aparato investigativo del Estado para demostrar o intentar demostrar
situaciones que ninguna incidencia tienen en el establecimiento de la verdad
de los hechos.
Es oportuno que la Sala recuerde que cuando la censura se enruta por estos
senderos se deben aceptar los hechos tal como fueron presentados y las
pruebas tal como fueron apreciadas por el fallador, debiéndose, por ende,
centrar las argumentaciones en demostrar que la norma aplicada y que
regulaba el caso, fue erróneamente interpretada, o que la seleccionada no era
la llamada a gobernarlo, que en el caso que ocupa la atención de la Corte
sería, según el demandante, la atinente a la complicidad y no la concerniente
a la coautoría.
15/12/2000
221
1. El derecho de defensa en el campo penal, como las demás garantías de
estricta aplicación procesal, tiene indiscutible raigambre constitucional y
entre nosotros dicho origen se enmarca en el artículo 29 de la Carta Política,
en su doble manifestación de defensa material y técnica; aquélla referida,
como bien se ha dicho y conoce, a los actos que directamente realiza el
sindicado en beneficio propio dentro del trámite adelantado en su contra y
ésta última, como la necesaria expresión del deber que tiene el Estado de
salvaguardar los intereses jurídicos del sujeto pasivo de la acción punitiva,
asegurándose de que la persona a quien se atribuye la violación de la ley
cuente con un letrado designado por ella, o nombrado de oficio.
3. En relación con la terminación del poder, entre los motivos más frecuentes
suele presentarse el caso de su expresa revocación, o el del nombramiento de
un defensor de confianza y la posterior designación de otro defensor en
iguales condiciones, evento este último que se ha solucionado legal y
doctrinariamente, reconociendo que debe así considerarse implícitamente
revocado el nombramiento del primer defensor, por hacerse de este modo
manifiesta la voluntad del sujeto. Pero también, se ha previsto el de la
renuncia del apoderado, evento en el cual se ha entendido que la producción
de los efectos inherentes a esta determinación del letrado está sujeta, no
solamente al deber de esperar que el funcionario judicial profiera la decisión
que la admita, sino a que la misma sea debidamente notificada, hipótesis que
si bien corresponde promigeniamente al procedimiento civil, resulta
222
plenamente aplicable por principio de integración en el procedimiento penal,
al no existir en este Código norma expresa que las contemple, y no oponerse a
su naturaleza, pues por el contrario viene constituir la manifestación de una
máxima garantía a los intereses de los sujetos procesales y específicamente
del procesado, para que no quede desprotegida su defensa técnica, mientras
designa su reemplazo.
Así, el artículo 69 de dicho Estatuto (Modificado por el D.E. 2282/89, art. 1°,
num.25), dispone:
...
223
DECISION : No casa
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Tentativa de
homicidio agravado
PROCESO : 11471
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
27/02/2001
224
que el defensor pudo solicitar una inspección judicial al lugar de los hechos o
una prueba de absorción atómica, sin demostrar una finalidad orientada en
su interés o el favor concreto y cierto que le sobrevendría a su condición ya
enrarecida por el hallazgo de las armas en el vehículo y las conclusiones del
dictamen de balística (fs. 158), sería pretender absurdamente que la mejor
defensa es la que solicita pruebas sin prever sus resultados.
225
los autores materiales que se apearan para realizar el hecho punible
propuesto; estuvieron pendientes de los resultados a corta distancia,
esperaron a los ejecutores físicos y los recibieron en el mismo automotor para
facilitar la huida; intercambiaron las camisetas en el interior del vehículo con
los realizadores materiales, con el fin de disuadir a eventuales testigos; fueron
capturados en flagrancia con los autores materiales y dentro de un carro en el
que se llevaban las armas recientemente disparadas; en la cárcel pagaron a
los ejecutores físicos el precio de su trabajo criminal; y, finalmente, ilustraron
al conductor del taxi sobre la forma como debía declarar para sostener una
coartada favorable a sus intereses.
De modo que los dos acusados exteriorizaron con creces el dominio del hecho,
porque tenían el control y la dirección sobre el curso de los acontecimientos,
además hicieron un aporte funcional y objetivo sin cuya presencia no se
habría podido consumar el delito. En efecto, si se hace abstracción del
contrato del taxi, la movilización de los autores materiales al escenario del
crimen, el presupuesto de la huida en el mismo vehículo y el incentivo de la
paga a aquéllos, conductas atribuibles enteramente a los procesados (...) y
(...), sin imaginar otras alternativas que no corresponden a la realidad del
hecho concreto, no hay duda que el delito de homicidio no habría podido
cometerse por ausencia de conductas imprescindibles para el plan. He ahí la
relevancia del aporte de los acusados y el dominio del desarrollo causal de los
hechos, que da lugar a la coautoría y no una mera complicidad.
226
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
16/07/2001
"Es verdad que doctrina y jurisprudencia han aceptado que en los casos en
que varias personas proceden en una empresa criminal, con consciente y
voluntaria división del trabajo para la producción del resultado típico, todos
los partícipes tienen la calidad de autores, así su conducta vista aisladamente
no permita una directa subsunción en el tipo, porque todos están unidos en el
criminal designio y actúan con conocimiento y voluntad para la producción
del resultado comúnmente querido o, por lo menos, aceptado como probable…
Así mismo, si a esa empresa criminal van armados porque presumen que se
les puede oponer resistencia o porque quieren intimidar con el uso de las
armas y como consecuencia de ello se producen lesiones u homicidios, todos
serán coautores de hurto y de la totalidad de los atentados contra la vida y la
integridad personal, aún cuando no todos hayan llevado o utilizado armas,
pues participaron en el común designio, del cual podían surgir estos
resultados que, desde luego, se aceptaron como probables desde el momento
mismo en que actuaron en una empresa de la cual se podían derivar."
227
agravado, porque no tuvo "nexo de culpabilidad" con los otros delitos (Fls.
318 y 321, C.5)
3. A pesar de que dice que "acepta y da por probados todos los fundamentos
fácticos que sustentan la sentencia", seguidamente afirma que "lo que no
comparte es la interpretación probatoria que se le dio a los mismos y que
culminó con la forma de culpabilidad que se le dio al homicidio".
228
especialmente si se mira que ello resulta nítido de la lectura desprevenida del
mismo título de la citada ley: "Por la cual se adopta el estatuto nacional contra
el secuestro y se dictan otras disposiciones".
"Cierto es que el proyecto inicial ingresó al Congreso sin estas reformas, pero
en el curso de los debates se planteó la necesidad de incluirlas para darle
coherencia, como se desprende del contenido de la ponencia en la Cámara,
donde se dijo: "En el curso de la fecunda discusión que esta iniciativa ha
tenido en el Senado se planteó, no sin razón, que no podría tratarse
punitivamente la conducta del secuestro con mayor severidad que la del
homicidio. Ello condujo a que se adoptaran decisiones legislativas, agravando
también las penas para el homicidio que mantuvieran principios universales
de la ´dosimetría penal´ " (Gaceta del Congreso de nov.18/92)".
229
solo puede ser aplicada en casos de conexidad. Absurdo sería, ha dicho la
Sala, "considerar que, en un mismo estatuto legal, el legislador fije dos penas
bien diversas para unos mismos hechos, ésta que acaba de señalarse de un
máximo de 60 años, y la otra de un tope de 40 del artículo 29, lo que por
fuerza de la razón conduce, fatalmente, a la certidumbre de que la pena en
este último artículo erigida, para nada demanda la correlación con el
secuestro, sino que es definitivamente independiente de tal circunstancia" ".
18/07/2001
230
GRABACIONES MAGNETOFONICAS/ COPARTICIPACION/ COAUTORIA/
CONCUSION-Diferencias con el cohecho/ PRESCRIPCION-Empleado oficial/
CONCUSION/ COHECHO/ GRABACIONES MAGNETOFONICAS-Valor
probatorio como documento privado
231
ende, eventualmente vulneradora de sus derechos fundamentales, por lo que
su proceder se constituye en un natural reflejo defensivo.
232
"Armonizando la jurisprudencia y la doctrina y el precepto legal, se puede
afirmar que son coautores todos aquellos que toman parte en la ejecución
del delito, codominando el hecho, ejecutando la parte que les corresponde en
la división del trabajo para obtener el resultado criminal, o sea que
mancomunadamente ejecutan el hecho punible."
233
figura típica median marcadas diferencias que con nitidez deslindan sus
ámbitos de aplicación, pues mientras en la concusión el funcionario genera
con su acto de abuso el temor o el error de la víctima llevándola a dar o
prometer mediante el constreñimiento, la inducción o la sola solicitud lo que
no debe; de la cosa que indebidamente se da u ofrece en el cohecho, se
desprende el particular por su libre voluntad, sin subordinaciones ni temores,
sino a manera de contraprestación dentro de un acuerdo corrupto en el que
ya se pactaron bilaterales compromisos -el del funcionario para proferir la
decisión que le compete o una que contraría su deber, y el particular la de
lucrarse o darle recompensas- cuando menos y con la misma libertad (artículo
210 C. P. M.), a su exclusiva iniciativa da u ofrece regalos o expectativas de
lucro para desviar al funcionario de la decisión debida, para conseguirla a
toda costa en su favor, para inhibirle secuelas de adversidad o de demora, o
aún para halagar o congraciarse al menos con el servidor oficial." (Casación
rad. 7.768, octubre 8 de 1993, M. P. Juan Manuel Torres Fresneda).
234
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
DR.EDGAR LOMBANA TRUJILLO -
Salvamento de Voto
01/08/2001
El defensor no cumplió con esa carga, pues como bien anota la Procuraduría
se limitó a oponer a los argumentos de las sentencias de primero y segundo
grados, su personal modo de valorar las pruebas.
235
escaleras y alcanzó la calle antes de que se iniciaran los disparos, cuando tal
hipótesis no aparece comprobada en el expediente.
31/08/2001
236
jurisprudenciales para que en lugar de estudiar en primer lugar el cargo de
nulidad, asuma antes los de violación directa e indirecta que conducen -
según el censor - a la inocencia del procesado. Semejante propuesta pasa
por alto que esos antecedentes jurisprudenciales no son otra cosa que la
expresión de la Constitución y la Ley en cuanto una y otra señalan el debido
proceso como derecho fundamental, que no significa otra cosa que el respeto a
las formas propias de cada juicio. Esto es que la responsabilidad o inocencia
de una persona vinculada a una actuación del Estado no puede declararse
sino dentro de un proceso adelantado con respeto de la ley. La ordenación de
las expresiones "legalidad y acierto" de cuya presunción se amparan las
sentencias dictadas por los Jueces en las instancias, no es arbitraria, sino que
corresponde al principio constitucional de legalidad y debido proceso: Primero,
la actuación debe ser legal; y, segundo, solo cuando ello se concluya así,
puede asumirse el estudio de su acierto. Si un proceso no se ha ajustado a la
legalidad - como lo reclama aquí el censor - hay que declarar esa ilegalidad,
pues ella impide la realización del juicio de certeza.
Si pretendía alegar que hubo una falta absoluta de motivación, así debió
plantearlo y demostrarlo. Probando además la incidencia que ese tipo de
error tuvo en el desarrollo del proceso. Si como lo advierte al final de la
demanda, la falta de motivación dificultó su derecho de defensa, ha debido
comprobarlo y en consecuencia desplazar el cargo de nulidad, a la causal 3ª
como error de garantía, abandonando la 2ª, que corresponde a errores de
estructura, dentro del artículo procesal correspondiente.
La confusión la genera el censor no solo por dedicar la mayor parte del tiempo
a criticar la resolución de acusación, sino porque lo que anuncia como un
defecto de falta de motivación, lo convierte en un supuesto error de falta de
motivación suficiente. Ello desvirtúa el carácter objetivo del error demandable
237
en casación pues hace derivar el aparente yerro de la mera opinión del censor,
que se manifiesta no sobre lo que ocurrió - sí hubo motivación - sino sobre lo
que a su juicio debió ocurrir - que esa motivación no fue suficiente.
Auto Casación
FECHA : 31/08/2001
DECISION : Inadmite la demand y declara desierto el
recurso
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Estafa, Concierto
para delinquir
PROCESO : 15734
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
16/05/2002
238
FAVORABILIDAD-Su alegación en casación procede por la causal primera/
CASACION-Finalidades/ HOMICIDIO-Ley 40 de 1993: Constitucionalidad/
COAUTORIA IMPROPIA/ CONEXIDAD/ COAUTORIA
"Cuando los miembros de una banda criminal resuelven utilizar armas para la
realización de sus propósitos delictivos, están admitiendo la posibilidad de su
uso. Su entrega o decisión de llevarlas consigo, es consecuencia de esa
previsión, y si aceptan una tal posibilidad, es apenas obvio que deban
239
responder de los delitos contra la vida y la integridad personal que de su uso
se deriven, y que deban hacerlo en calidad de coautores, pues habiéndose
representado anticipadamente como probable el resultado, nada hicieron en
procura de evitarlo, en nítida manifestación de voluntad hacia su producción."
30/05/2002
240
Sentencia Casación
FECHA : 30/05/2002
DECISION : No casa
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Homicidio
agravado
PROCESO : 14997
PUBLICADA : No
241
decadactilar, porque es allí donde aparecen registrados los rasgos y
características físicas de la persona, es equivocada.
"En esta materia, como en todo lo que atañe a la credibilidad del testimonio,
hay que emprender un trabajo analítico de comparación y nunca de
eliminación, a fin de establecer en cuáles de las distintas y opuestas
versiones, el testigo dijo la verdad. Quien se retracta de su dicho ha de tener
242
un motivo para hacerlo, el cual podrá consistir ordinariamente en un reato de
conciencia, que lo induce a relatar las cosas como sucedieron, o en un interés
propio o ajeno que lo lleva a negar lo que sí percibió. De suerte que la
retractación solo podrá admitirse cuando obedece a un acto espontáneo y
sincero de quien lo hace y siempre que lo expuesto a última hora por el sujeto
sea verosímil y acorde con las demás comprobaciones del proceso" (Cfr.
Casación de abril 21/55 y noviembre 9/93, entre otras).
243
INDAGATORIA-Cargos a terceros/ COAUTORIA IMPROPIA/ HOMICIDIO-Ley
40 de 1993/ LEGALIDAD DE LA PENA
244
desde el momento mismo en que actuaron en una empresa de la cual se
podían derivar."**
"Cierto es que el proyecto inicial ingresó al Congreso sin estas reformas, pero
en el curso de los debates se planteó la necesidad de incluirlas para darle
coherencia, como se desprende del contenido de la ponencia en la Cámara, en
donde se dijo: "En el curso de la fecunda discusión que esta iniciativa ha
tenido en el Senado se planteó, no sin razón, que no podría tratarse
punitivamente la conducta del secuestro con mayor severidad que la del
homicidio. Ello condujo a que se adoptaran decisiones legislativas, agravando
también las penas para el homicidio que mantuvieran principios universales
de la ´dosimetría penal´" (Gaceta del Congreso de nov.18/92)."
245
artículos 29, 30 y 32, pues el numeral 11 del artículo 3º ejusdem, recoge
como circunstancia de agravación punitiva para el secuestro extorsivo, la
hipótesis del concurso con los delitos de homicidio y lesiones, no siendo por
tanto de recibo la afirmación de que la pena prevista en los citados artículos
solo puede ser aplicada en casos de conexidad. Absurdo sería, ha dicho la
Sala, "considerar que, en un mismo estatuto legal, el legislador fije dos penas
bien diversas para unos mismos hechos, ésta que acaba de señalarse de un
máximo de 60 años, y la otra de un tope de 40 del artículo 29, lo que por
fuerza de la razón conduce, fatalmente, a la certidumbre de que la pena en
este último artículo erigida, para nada demanda la correlación con el
secuestro, sino que es definitivamente independiente de tal circunstancia"
(Casación de 21 de noviembre de 1995, Magistrado Ponente Dr. Gálvez
Argote)."
__________________________________
* Cfr. sentencias del 25 de octubre de 1989, radicado 3.510, M.P. Rodolfo
Mantilla Jácome; 28 de junio de 1994, radicado 8.539, M.P. Jorge Enrique
Valencia Martínez y 7 de abril de 1997, radicado 8.708, M.P. Guillermo Duque
Ruiz, entre otras.
** Corte Suprema de Justicia, sentencia del 28 de febrero de 1985. M.P. Luis
Enrique Aldana Rozo.
11/07/2002
246
En orden a facilitar el ejercicio de tales garantías, el artículo 180 del Decreto
2700 de 1991 (reproducido por el artículo 170 de la ley 600 de 2000),
establece los requisitos que debe contener la sentencia, entre los que se
incluye el deber para el juzgador de expresar las razones fácticas y jurídicas
que sustentan su decisión, pues si ésta es inmotivada, incompleta, ambigua,
equívoca, dilógica, o ambivalente, no sólo dificulta el conocimiento claro de la
declaración del derecho sino a las partes comprender las razones en que se
fundamenta, e imposibilitar su controversia mediante el ejercicio de los
recursos pertinentes y, por dicha vía, transgredir el debido proceso, que como
motivo de ineficacia de los actos procesales, en el código derogado aparecía
establecido en el artículo 304-2 y hoy en día en el artículo 306-2 de la ley 600
de 2000, denunciable en sede extraordinaria a través de la causal tercera de
casación.
247
Mejía Escobar (Rad. 11279) y 2 de mayo de 2002 con ponencia de quien aquí
cumple igual cometido (rad. 15262), entre otros.
...
18/07/2002
248
En este estado de cosas, no es muy compleja la labor cuando existe prueba
directa -la que reclaman la defensa y el Procurador-, pues en esos casos lo
que corresponde es sopesarla en conjunto y decidir si es o no creíble o cuál es
su capacidad demostrativa de los aspectos históricos que permiten traer al
proceso la reproducción sobre los hechos.
249
PONENTE(S) : DR.CARLOS AUGUSTO GALVEZ
ARGOTE
Sentencia Casación
FECHA : 18/07/2002
DECISION : No casa
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 10696
PUBLICADA : No
12/09/2002
250
idéntica conducta típica (Pedro, Juan y Diego hacen sendos disparos de
revólver sobre Juan y lo matan), ora porque realizan una misma y compleja
operación delictiva con división de trabajo, de tal manera que cada uno de
ellos ejecuta una parte diversa de la empresa común".
Dijo la Sala el 11 de julio de 2002, dentro del proceso radicado con el número
11.862:
251
estricto, no logra explicar la autoría mediata ni la coautoría, como fenómenos
expresamente reconocidos en el derecho positivo actual (art. 29 de la ley 599
de 2000), los cuales a pesar de no haber sido normativamente previstos en la
anterior codificación, no pueden dar lugar a entender que no fueron objeto de
consideración o que el sistema construyó un concepto de autor distinto del
dogmáticamente establecido" (M. P. Fernando Arboleda Ripoll).
26/09/2002
"Es verdad que doctrina y jurisprudencia han aceptado que en los casos en
que varias personas proceden en una empresa criminal, con consciente y
voluntaria división del trabajo para la producción del resultado típico, todos
los partícipes tienen la calidad de autores, así su conducta vista aisladamente
no permita una directa subsunción en el tipo, porque todos están unidos en el
criminal designio y actúan con conocimiento y voluntad para la producción
del resultado comúnmente querido o, por lo menos, aceptado como probable…
Así mismo, si a esa empresa criminal van armados porque presumen que se
les puede oponer resistencia o porque quieren intimidar con el uso de las
armas y como consecuencia de ello se producen lesiones u homicidios, todos
será coautores de hurto y de la totalidad de los atentados contra la vida y la
integridad personal, aun cuando no todos hayan llevado o utilizado armas,
pues participaron en el común designio, del cual podían surgir estos
resultados que, desde luego, se aceptaron como probables desde el momento
mismo en que actuaron en una empresa de la cual se podían derivar."
(Sentencia de febrero 28 de 1985, M. P. Luis Enrique Aldana Rozo).
252
"Resulta ilógico e injurídico pretender que se responsabilice a cada
interviniente en una empresa criminal únicamente por la tarea parcial que le
correspondió cumplir, pues ello haría imposible la configuración de la
coautoría impropia, ya que esta emerge de un plan común, del dominio
colectivo del suceso, de la distribución de funciones, cada una de las cuales es
una pieza de la realización del resultado comúnmente querido, la que, como
tal, no puede ser considerada aisladamente, pues podría aparecer como
despreciable o ineficaz y, por ende, impune, y que solo adquiere relevancia en
el conjunto y con relación al plan criminal propuesto." (Sentencia de abril 25
de 2000, rad. 11.925, M. P. Jorge Enrique Córdoba Poveda).
253
antaño ha sostenido esta Sala que la pena que corresponde, "depende
exclusivamente de la ley aplicable y el juzgador no puede variarla pues, de
hacerlo, estaría quebrantando el principio de legalidad de la pena, que prohibe
imponer sanción que no se encuentre establecida en norma vigente" (cfr.
sentencia de casación de julio 25 de 1996, rad. 9.577, con ponencia de quien
aquí cumple igual función).
Desconoció, en otros términos, que a nadie se le puede imponer una pena que
legalmente no preexista al acto que se le imputa. Esa Ley 40, por mandato de
su artículo 40, entró a regir a partir de su promulgación, que se produjo en el
Diario Oficial N° 40.726, del 20 de enero de dicho año, empezando a imperar
el día siguiente y, en consecuencia, ya estaba en vigor… siendo ineludible su
aplicación.
254
única que puede imponerse, tal como lo hizo el Tribunal en el asunto
sometido a estudio.
12/12/2002
1. El cargo esbozado por el defensor de (...) dentro del cuarto acápite del libelo,
se ha expuesto precisamente en favor de (...), aduciendo presuntas
irregularidades en las notificaciones de diversos actos y proveídos con
posterioridad al proferimiento de la resolución acusatoria con desmedro de
sus garantías, pretensión ésta para la cual, según se ha reseñado, resulta
evidente que el demandante carece en forma absoluta de legitimación dentro
del proceso, dado que su intervención está legalmente autorizada para actuar
sólo en beneficio de quien representa, esto es, del imputado (...).
255
(modificado por el art. 30 de la Ley 40 de 1.993), dado que en el calificatorio
de segunda instancia proferido el 21 de enero de 1.998 (fl.278) en forma
expresa la Fiscalía Delegada ante el Tribunal Superior de Medellín excluyó la
misma del pliego de cargos, pese a lo cual los falladores de primera y segunda
instancia la tuvieron en cuenta al momento del proferimiento de la sentencia.
Aun cuando plena razón asiste al casacionista en las afirmaciones que sirven
de sustento teórico a este reparo, omitió el actor evidenciar la razón por la
cual mas allá de la demanda del injusto en su objetivo aspecto, el yerro
alegado ha traído como consecuencia un agravio para los derechos del
imputado, única alternativa que posibilitaría aceptar la existencia de un
interés para recurrir de su parte.
...
24/04/2003
256
cumpliera el acto material, sino a quien por tener tanta responsabilidad como
éste, resultaba siendo coautor.
257
El criterio no varió. Por el contrario, se insistió en que el mismo, a pesar de la
redacción del artículo 23 del Decreto 100 de 1980, estaba incluido dentro de
la definición de autor. Y la descripción expresa que de coautores introdujo el
inciso segundo del artículo 29 del actual Estatuto represor (Ley 599 de 2000)
no permite la interpretación que intentan los defensores, pues si la acepción
de coejecutores parte y se apoya en una pluralidad de autores, el concepto ya
quedaba contenido en la primera disposición.
Dijo la Sala el 11 de julio del 2002, dentro del proceso radicado con el número
11.862:
Es cierto -como dicen los recurrentes- que los fallos no imputaron propósito
directo respecto de los delitos de homicidio y de uso de armas. Pero ocurre
que, en términos del artículo 36 del Decreto 100 de 1980, la conducta
también es dolosa cuando el autor acepta la realización del hecho,
"previéndola al menos como posible".
258
En casos como el que ahora estudia la Sala, el procesado se percata de que
alcanzar la meta perseguida puede ocasionar diversos resultados unidos a ella
de manera eventual y, como no obstante tal situación, no se detiene en su
actuar, asume los últimos como propios. Se representa la probabilidad de una
consecuencia no querida en un comienzo, a pesar de lo cual realiza la
conducta deseada. Y con ello hace suya la contingencia y, por consiguiente,
se compromete con ella.
15/05/2003
"1. Será suficiente señalar cualquiera de las normas de esa naturaleza que,
constituyendo base esencial del fallo impugnado o habiendo debido serlo, a
juicio del recurrente haya sido violada, sin que sea necesario integrar una
proposición jurídica completa.
259
"2. Si un cargo contiene acusaciones que la Corte estima han debido
formularse separadamente, deberá decidir sobre ellas como si se hubieran
invocado en distintos cargos.
260
también a la parte resolutiva, las consideraciones y examen de la realidad
probatoria agotados por el Juez de primer grado se entienden incorporados a
la sentencia de segunda instancia en todo aquello en que no se desvirtúe o
modifique, así tales análisis o argumentaciones no se hayan reproducido en el
fallo acusado" (sentencia del 22 de septiembre de 1993, radicado 8.003, M. P.
Jorge Enrique Valencia Martínez).
Sentencia Casación
FECHA : 15/05/2003
DECISION : Casa parcialmente, condena
DELITOS : Homicidio
PROCESO : 17081
261
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
22/05/2003
Por si existieran dudas, la Corte fue aún más enfática el 10 de mayo de 1991:
262
respaldo en nuestra doctrina y jurisprudencia nacionales. Por el contrario
impera la extensiva, la que no pretende, como su nombre bien lo indica,
disminuir el número de autores, sino ampliarlo...Con esta tendencia nuestro
estatuto se adscribe a la corriente legislativa y hermenéutica que trata de
imperar en el mundo actual del derecho penal: la complicidad secundaria se
bate en retirada bajo la consideración, en especial, "de integrar en la autoría
todas las actividades dimanantes de un mutuo acuerdo o plan, que genera ...
una responsabilidad "in solidum" de todos los partícipes, cualquiera que fuese
el acto de su intervención" " (M. P. Gustavo Gómez Velásquez).
263
El casacionista ha realizado un importante estudio del tema y se ha
sustentado, sobre todo - aparte del análisis del derecho comparado-, en la
historia reciente del Código Penal de 1980, para lo cual ha acudido al
Anteproyecto de Código Penal de 1974 y, desde luego, al pasado inmediato del
Estatuto mencionado. Bastaría responderle la inquietud, con palabras
autorizadas, así:
264
La inferencia lógica es el resultado de un proceso intelectual valorativo. Si no
se acepta la validez de la prueba del hecho que la genera, mal puede
cuestionarse por ilógica la inferencia que a partir de esa base se haga, dado
que de este modo se rompe la concordancia entre los puntos de referencia del
sentenciador y del recurrente. A partir de dos premisas distintas -la que
acepta la prueba del hecho indicador y la que la rechaza-, es un imposible
lógico construir una misma inferencia.
03/07/2003
265
coautoría se llegó, no a través de pruebas supuestas, sino de razonamientos
lógicos de naturaleza inferencial, que el actor no ataca.
06/08/2003
266
2. Igualmente, en relación con los elementos de la coautoría impropia se tiene
dicho que "Resulta característico de la denominada coautoría impropia que
cada uno de los sujetos intervinientes en el hecho punible realicen la
conducta típica de manera conjunta pero con división de trabajo, por ello es
inherente a esta figura la concurrencia de por lo menos dos elementos: uno
subjetivo que generalmente es previo o concurrente con la comisión del hecho,
consistente en la existencia de un acuerdo expreso o tácito para su
acometimiento y uno objetivo, que se manifiesta en la realización de actos
orientados a su ejecución como cometido común, siéndoles por ello
imputables a todos los partícipes el delito o delitos que típicamente se
configuren."**
...
3. Si bien el estatuto procesal penal (artículo 225, numeral 4°, Decreto 2700
de 1991, artículo 212, Ley 600 de 2000) permite al recurrente en casación la
formulación de cargos excluyentes en el cuerpo de una misma demanda, exige
que se haga separadamente y de manera subsidiaria, requisito técnico que si
se omite implica el fracaso de las diversas pretensiones.
267
Sentencia Casación
FECHA : 06/08/2003
DECISION : No casa
DELITOS : Porte de armas de defensa personal,
Homicidio, Tentativa de hurto calificado y agravado
PROCESO : 17396
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
21/08/2003
268
. Si todas las personas toman parte en la ejecución del hecho típico,
responden a título de coautoras (16 de septiembre de 1992, M. P. Juan
Manuel Torres Fresneda), etc.
Y estas palabras, así como otras de la Sala en torno al tema, que no han sido
modificadas, fueron retomadas y resumidas de la siguiente forma por la Corte,
en casación del 12 de septiembre del 2002, dentro del proceso radicado con el
número 17.403:
269
empresa común -comprensiva de uno o varios hechos- que, por lo mismo, a
todos pertenece como conjuntamente suya" (M. P. Alfonso Reyes Echandía)
(resalta la Sala, ahora)´".
"Dijo la Sala el 11 de julio de 2002, dentro del proceso radicado con el número
11.862:"
270
En estas decisiones la Corte no ha hecho más que reiterar el espíritu de los
juristas que confeccionaron el código mencionado, pues éstos tuvieron en
cuenta que siempre ha existido la preocupación por distinguir los autores -y
coautores- de los cómplices. Basta recordar algunas de las frases de la
Relación Explicativa del Proyecto que luego fuera ese código:
Es claro, entonces, que desde hace tiempos se tiene que si una persona actúa
en comunidad dentro de la ejecución del hecho, es coautora y no cómplice. Y
que no puede quedar exenta de responsabilidad.
...
271
Aportar, derivado de "puerto", equivale a llegar o presentarse a un lugar, hacer
algo en pro de un fin común.
Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
272
Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito.
23/09/2003
273
"La licencia, es una de las situaciones administrativas en las que se puede
encontrar un empleado del sector público, y consiste en la separación
temporal de las funciones laborales que habitualmente ejerce o, lo que es lo
mismo, el retiro transitorio del cargo que ocupa en determinada entidad del
Estado, sin que por ello cese su vínculo laboral con la empresa u órgano
estatal respectivo. Si durante el periodo de licencia no se pierde el status de
empleado público, es apenas lógico que sigan siendo aplicables a quienes
gozan de ese derecho, las normas que regulan la función pública,
concretamente el régimen de las incompatibilidades, en este caso, para los
empleos de la Fiscalía General de la Nación." (Sentencia C-558 del 6 de
diciembre de 1994, M.P. Dr. Carlos Gaviria Díaz).
274
Senado, mas no en el análisis de otras funciones de gestión, control y
vigilancia sobre el presupuesto de esa Corporación.
"Se entenderá por menor cuantía los valores que a continuación se relacionan,
determinados en función de los presupuestos anuales de las entidades a las
que se aplica la presente ley, expresados en salarios mínimos legales
mensuales".
Similares disposiciones contiene el artículo 112 del Decreto Ley 111 de 1996,
antes transcrito, de donde se infiere que el representante legal está autorizado
por la ley para delegar la facultad de ordenar el gasto para efectos de la
contratación administrativa.
8. Una cosa es ser el ordenador del gasto o tener la facultad de suscribir los
contratos en virtud de la delegación de funciones y otra muy distinta es tener
la iniciativa o potestad para decidir qué se debe contratar y qué se deja de
contratar. Sin embargo, este conjunto de atribuciones diferenciables no son
actuaciones completamente aisladas e independientes, sino que conforman
275
aquel conjunto complejo de manifestaciones de poder y decisión que
confluyen en la noción de disponibilidad jurídica del presupuesto.
276
En el concierto, la acción incriminada consiste en asociarse para cometer
delitos, que se traduce en la existencia de un acuerdo de voluntades con
permanencia en el tiempo. En la coautoría esa arreglo voluntario puede ser
momentáneo u ocasional; pues la comisión del ilícito constituye la
consecuencia de un querer colectivo que se manifiesta en la decisión y
realización conjunta de la acción típica determinada de antemano en toda su
especificidad, bien concurriendo cada uno de los plurales agentes a realizar de
manera integral y simultánea el comportamiento reprimido en la ley
-coautoría propia-, o mediante una división de trabajo con un control
compartido del hecho o con su codominio, de manera que cada coautor al
brindar un aporte objetivo a la ejecución del delito realiza la voluntad
colectiva.
Al abordar el estudio del artículo 146 del Código Penal, Decreto 100 de 1980,
"contrato sin cumplimiento de requisitos legales", esta Corporación, en
sentencia del 19 de diciembre de 2000 (radicación 17088, M.P. Dr. Álvaro
Orlando Pérez Pinzón)
...
-. Los principios rectores son el alma de los bienes jurídicos que involucran y
por ende son parte del tipo; su consideración como tales garantiza y delimita
el principio de antijuridicidad material. Así, por ejemplo, la selección objetiva
es un bien jurídico en sí mismo, y es un requisito esencial de los contratos de
la administración pública, pues propende por la participación democrática en
277
condiciones de lealtad e igualdad, por la moralidad y la transparencia de la
función pública.
278
investigado (artículo 16 Ley 610 de 2000), la defectuosa investigación fiscal,
inducción en error, prueba falsa, etc.
16. Aunque la redacción del artículo 137 del Código Penal no incluye dentro
de los elementos constitutivos de la estructura del tipo la necesidad de la
intervención dolosa de terceros en relación con los bienes extraviados,
perdidos o dañados es evidente que el influjo de dichos terceros no puede
despreciarse por completo en materia probatoria.
18. En Sentencia del 8 de julio de 2003, (radicación 20.704, M.P. Dr. Carlos
Augusto Gálvez Argote), la Sala explicó que ni el determinador ni el cómplice
respondían a la categoría de interviniente, concepto que únicamente puede
predicarse del coautor, cuando no reúne las calidades especiales exigidas en
el tipo penal.
279
"Sin perjuicio de las demás sanciones que establezca la ley, el servidor público
que sea condenado por delitos contra el patrimonio del Estado, queda
inhabilitado para el desempeño de funciones públicas."
-----------------------------
* La Corte Constitucional, con la sentencia C-394 de 1994, declaró exequible
el inciso final del artículo 369 del Código de Procedimiento Penal (Decreto
2700 de 1991), relativo a la colaboración eficaz en la fase instructiva, cuando
a la vez se solicitaba sentencia anticipada.
** Proclamada por la Presidencia de la Asamblea Nacional Constituyente, el 4
de julio de 1991.
*** Ley 190 de 1995, "Por la cual se dictan normas tendientes a preservar la
moralidad en la Administración y se fijan disposiciones con el fin de erradicar
la corrupción administrativa".
280
FECHA : 23/09/2003
DECISION : Condena, condena en perjuicios, no concede
subrogado, absuelve a otro, comunica
DELITOS : Peculado por apropiación, Celebración
indebida de contratos, Concierto para delinquir
PROCESO : 17089
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
DR.ALVARO ORLANDO PEREZ PINZON -
Salvamento Parcial de Voto
DR.CARLOS AUGUSTO GALVEZ ARGOTE -
Salvamento Parcial de Voto
DR.HERMAN GALAN CASTELLANOS -
Salvamento Parcial de Voto
DR.YESID RAMIREZ BASTIDAS - Salvamento
Parcial de Voto
DRA.MARINA PULIDO DE BARON -
Salvamento Parcial de Voto
02/10/2003
AUTORIA/ COAUTORIA
Desde luego, como lo destaca el señor agente del Ministerio Público, no ofrece
conclusiones satisfactorias abordar el problema a partir de los meros
referentes lingüísticos y gramaticales incorporados en la norma de que se
trata, porque si se toma la definición que del vocablo autor trae el Diccionario
de la Lengua Española: "El que es causa de alguna cosa", según su primera
acepción, y si se considera la de realizar: "Efectuar, llevar a cabo algo o
ejecutar una acción", habría de concluirse que aquel dispositivo tiene como
autor nada más que a quien, según los términos del casacionista, ejecuta la
acción de manera directo corporal.
281
Expresado de otro modo, la ley penal no crea las conductas ni modifica los
fenómenos de la naturaleza; apenas, en su pretensión de proteger los más
vitales intereses jurídicos para la sociedad estatuye normas generales que
señalan a los asociados su ámbito de libertad.
Por eso, el hecho de que el artículo 23 del Decreto 100 de 1980 considere
autores, según la nomenclatura asignada, a "El que realice el hecho punible o
determine a otro a realizarlo", no significa que deje al margen de protección
las conductas que constituyen codelincuencia o eventos de solidaridad
criminal, en especial frente a casos en los que hay división de tareas en la
búsqueda mancomunada de un resultado ilícito, ni que todos estos
fenómenos tengan que ser tratados conforme a la figura de la complicidad,
como aspira el censor, porque eso significaría que quedaran sin tutela
comportamientos que no encuentran perfecto acomodo en la ley penal, pero
que fueron causa de lesión o efectiva puesta en peligro de bienes jurídicos
amparados por el ordenamiento jurídico.
Bajo esta perspectiva, ya la Corte se había ocupado del tema al señalar que:
282
Obsérvese, entonces, que el aspecto de la coautoría pudo ser imputado con
base en la regulación legal genéricamente prevista para los autores, porque
tanto jurisprudencia y doctrina han entendido que autor no es sólo el que
ejecuta físicamente la acción típica, sino también quien ha aportado para
obtener el fin propuesto, quedando comprendidos dentro de la definición legal
de autores que preveía el artículo 23 del derogado Código Penal, tanto el autor
material, el determinador y el coautor -propio o impropio-.
283
plantearse la defensa**, y menos aún construir un cargo sobre la forma o los
términos en que debió confeccionarse un escrito, pues cada profesional del
derecho plantea su estrategia defensiva de acuerdo a su personal apreciación
que tenga sobre los hechos y el conjunto probatorio, que bien puede
distanciarse de la opinión que tenga el nuevo defensor, que tal vez sin
quererlo reproduce la sentencia de MAUROIS "lo que está de acuerdo con
nuestro deseo personal parece razonable, lo que está en desacuerdo nos
enfurece" sentencia de la cual el hombre no ha logrado librarse totalmente.
284
** CORTE SUPREMA DE JUSTICIA M. P. Dr. PÉREZ PINZÓN, Álvaro Orlando.
Sentencia, octubre 18 de 2000
*** CORTE SUPREMA DE JUSTICIA M. P. Dr. CÓRDOBA POVEDA, Jorge.
Sentencia, abril 25 de 2000
16/10/2003
285
"Serán coautores quienes a pesar de haber desempeñado funciones que por sí
mismas no configuren el delito, han actuado como copartícipes de una
empresa común -comprensiva de uno o varios hechos- que, por lo mismo, a
todos pertenece como conjuntamente suya; y serán cómplices quienes, sin
haber realizado acción u omisión por sí misma constitutiva de delito o delitos
en que participan, prestan colaboración o ayuda en lo que consideran hecho
punible ajeno" (M. P. Alfonso Reyes Echandía). (Destaca la Sala, ahora).
"Por si existieran dudas, la Corte fue aún más enfática el 10 de mayo de 1991:
286
"Esta tradición jurisprudencial no ha variado. Y no ha variado, porque es
lógica frente al Código Penal de 1980. Por ello, recientemente repitió esa
tradición, con estas palabras:
287
en caso de condena, se le reducirá la pena en una sexta (1/6) parte, si dicha
confesión fuere el fundamento de la sentencia."
"Sin perder de vista que la razón para disminuir la sanción con sustento en la
confesión es la colaboración con la justicia y el ahorro consecuencial de
esfuerzo jurisdiccional en la reconstrucción de lo sucedido, esos mismos
efectos, así sea excepcionalmente, se obtienen cuando una persona confiesa
su autoría o participación en su primera versión ante el funcionario judicial y
aunque aduce una circunstancia de exclusión de responsabilidad, sin esa
confesión no hubiera podido ser condenada. Piénsese, por ejemplo, en todos
aquellos casos en los cuales se desconocen los autores o partícipes de la
conducta punible y donde la investigación preliminar, que tiene como una de
sus finalidades recaudar las pruebas indispensables para lograr su
individualización o identificación, no ha logrado ese cometido. Y que en tales
circunstancias, mucho después del cometimiento del hecho y quizás ya
archivado el caso por falta de pistas para seguir, una persona se presenta
ante el Fiscal y confiesa la autoría del crimen, aduciendo una circunstancia
excluyente de responsabilidad. El funcionario, ceñido a lo dispuesto por el
artículo 281 del Código de Procedimiento Penal, practica las diligencias
pertinentes para determinar la veracidad de ese relato y averiguar las
circunstancias de la conducta punible, arribando a la conclusión a través de
medios de prueba logrados gracias a la confesión, de que la persona -en
efecto- realizó la conducta típica y que, además, es responsable penalmente de
ella.
288
"Esta última exigencia, que finalmente es la que determina la concesión de la
rebaja punitiva cuando se reúnen las demás exigencias legales, merece una
aclaración. Que la confesión sea el fundamento de la sentencia no significa,
como a veces se entiende, que constituya su soporte probatorio determinante.
Si así fuese, la norma de la reducción punitiva sería virtualmente inaplicable
pues si la ley impone verificar el contenido de la confesión (art. 281 cpp), es
normal que al hacerlo se logren otros medios de prueba con la aptitud
suficiente para fundamentar el fallo. El significado de la exigencia legal está
vinculado es, como lo ha señalado la Corte, a la utilidad de la confesión. Y si
se considera que su efecto reductor de la pena se condiciona a que tenga
ocurrencia en la primera versión y en casos de no flagrancia, la lógica indica
que fundamenta la sentencia si facilita la investigación y es la causa
inmediata o mediata de las demás evidencias sobre las cuales finalmente se
construye la sentencia."*****
-------------------------------
* Sent. Cas. 12/09/2002, rad. 12.262, M. P. Jorge E. Córdoba Poveda.
** Sent. Cas. mayo22/03, rad. 17457, M. P. Álvaro Orlando Pérez Pinzón.
*** Entre otras, Sent. Cas. mar.3/00, rad. 12.225, M. P. Carlos E. Mejía
Escobar; jun.6/00; rad. 11.303, M.P. Nilson E. Pinilla Pinilla y jul.24/01, rad.
11.165, M.P. Herman Galán Castellanos.
**** Sent. Cas. nov.20/96, rad. 9869, M P. Ricardo Calvete Rangel.
***** Sent. Cas. abr.10 /03, rad. 11.960, M. P. Yesid Ramírez Bastidas.
Sentencia Casación
FECHA : 16/10/2003
DECISION : Declara una prescripción, no casa
DELITOS : Enriquecimiento ilícito, Secuestro extorsivo
agravado, Concierto para delinquir-secuestro
PROCESO : 16774
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
DR.ALVARO ORLANDO PEREZ PINZON -
Salvamento Parcial de Voto
26/11/2003
COAUTORIA IMPROPIA-Elementos
289
resultado común en la que cada cual tiene dominio funcional del hecho con
división de trabajo, cumpliendo acuerdo expreso o tácito, y previo o
concurrente a la comisión del hecho, sin que para la atribución de
responsabilidad resulte indispensable que cada interviniente lleve a cabo o
ejecute la totalidad del supuesto fáctico contenido en el tipo o que sólo deba
responder por el aporte realizado y desconectado del plan común, pues en tal
caso, una teoría de naturaleza objetivo formal, por ende, excesivamente
restrictiva, sin duda muy respetuosa del denominado principio de legalidad
estricto, no logra explicar la autoría mediata ni la coautoría, como fenómenos
expresamente reconocidos en el derecho positivo actual (art. 29 de la ley 599
de 2000), los cuales a pesar de no haber sido normativamente previstos en la
anterior codificación, no pueden dar lugar a entender que no fueron objeto de
consideración o que el sistema construyó un concepto de autor distinto del
dogmáticamente establecido""**.
Además, en punto de los elementos que deben concurrir para que tal forma de
participación puede atribuirse a un procesado, se tiene dicho que "Resulta
característico de la denominada coautoría impropia que cada uno de los
sujetos intervinientes en el hecho punible realicen la conducta típica de
manera conjunta pero con división de trabajo, por ello es inherente a esta
figura la concurrencia de por lo menos dos elementos: uno subjetivo que
generalmente es previo o concurrente con la comisión del hecho, consistente
en la existencia de un acuerdo expreso o tácito para su acometimiento y uno
objetivo, que se manifiesta en la realización de actos orientados a su ejecución
como cometido común, siéndoles por ello imputables a todos los partícipes el
delito o delitos que típicamente se configuren"***.
...
El dominio del hecho en relación con el homicidio del vigilante, como también
lo consideró acertadamente el Procurador Delegado, es consecuencia del
riesgo creado por los intervinientes, el cual surge de la contribución que todos
hicieron en el delito de hurto calificado y agravado, pues para su realización
los coautores acordaron llevar consigo armas de fuego de uso privativo de las
Fuerzas Armadas y de defensa personal que serían utilizadas para vencer
actos de resistencia y lograr el apoderamiento de los bienes ajenos, de manera
que la imputación en las conductas punibles no se deriva de la efectiva
intervención de (...) en el homicidio sino de los actos que conformaron el
riesgo que finalmente se materializó en el resultado (muerte) cuya concreción
se dejó al azar.
-------------------------
290
* Sent.Cas.Jul.11/2002, rad. 11.862, M. P. Fernando E. Arboleda Ripoll y
Abr.24/2003, rad. 17.618 M. P. Álvaro Orlando Pérez Pinzón, entre otras.
** Sent. Cas.Dic.15/2000, rad. 11.471, M. P. Carlos A. Gálvez Argote.
2. Ante todo recuérdese que, como regla general, están legitimados los sujetos
procesales reconocidos en la actuación penal para impugnar las providencias
que les sean adversas a aquellas pretensiones propias de acuerdo con los
derechos que representan. Como lo ha dicho la Sala, en tratándose del
recurso de casación esta postura comporta idénticos efectos, esto es, que el
fallo de segundo grado necesariamente debe agraviar a uno de los sujetos
procesales en cualquiera de los extremos de la relación jurídico procesal para
que se ostente este presupuesto de procedibilidad.
291
3. El punible de secuestro es de aquellos que la doctrina y la jurisprudencia
han denominado de conducta permanente, es decir, que el comportamiento no
se consuma con sólo arrebatar a la víctima, sino que se prolonga por todo el
tiempo en que se le mantenga privada de la libertad de tal manera que puede
incurrir en él quien cometa cualquiera de los otros verbos rectores que
integran el tipo penal, tales como sustraer, retener u ocultar.
Vistas así las cosas y distinto a lo que sucede con la sentencia anticipada, es
claro que, como lo destaca la Procuradora Delegada, la petición elevada por el
procesado o su defensor de acogerse al trámite de audiencia especial, no
imponía el imperativo de su celebración, toda vez que si a juicio del fiscal no
había la duda probatoria frente a los citados aspectos, la misma no tenía
razón de ser.
6. Cuando el ataque en casación tiene que ver con la vulneración del principio
contenido en el citado artículo 31, desarrollado en el 217 del Decreto 2700 de
1991 (hoy 204 de la Ley 600 de 2000), esto es, el de la no reforma en perjuicio
cuando se trate de apelante único, se impone acudir a la causal primera, a
través de la violación directa de la ley sustancial, y no a la tercera o de
nulidad, pues se trata de un error in iudicando que nada tiene que ver con el
procedimiento, ni con la valoración de los hechos o de las pruebas, y que
afectaría únicamente la legalidad de la sentencia en lo que tiene que ver con
todos aquellos aspectos que implican pena.
292
tiene que entender que el marco lógico de ataque es el que enmarca la causal
primera que es instituida para resolver los vicios in iudicando.
293
Ahora bien, en cuanto a que la prohibición de la reforma peyorativa es una
garantía de tipo constitucional, al lado del principio de la doble instancia,
debe decirse que ésta no consagra un derecho absoluto y sin excepción alguna
al punto de llegar a inaplicar un mecanismo de protección especial de la
legalidad, así, "la Sala ha sido reiterativa en determinar que la prohibición de
la reformatio in pejus no tiene lugar cuando la sentencia materia del recurso
de apelación ha desconocido el principio de legalidad"**
-----------------------------
* Casación del 22 de octubre de 1997. M. P. Dr. Ricardo Calvete Rangel.
** Ver entre otras, casación del 27 de marzo de 2003. M. P. Dr. Carlos
Augusto Gálvez Argote.
---------------------------
* Ver entre otras, casación del 22 de octubre de 2003. M.P. Dr. Jorge Luis
Quintero Milanés. Rad. 15977.
18/02/2004
294
2. El tema de la "coautoría impropia" que el recurrente considera inexistente
en el ordenamiento jurídico colombiano, al punto de sostener que su
aplicación por vía jurisprudencial llegaría a derogar tácitamente el fenómeno
jurídico de la complicidad, ha sido objeto de esmerados estudios por parte de
esta Corporación dentro de la vigencia del Código Penal de 1980 y que dieron
lugar a reiterados pronunciamientos*.
Por lo expuesto, no puede afirmarse con certeza que la Corte legisló o, como lo
insinúa el demandante, que se "inventó" la figura de la coautoría impropia,
puesto que su comprensión dependió de la interpretación en vía de
jurisprudencia, de la disposición legal a la cual dio dicho sentido y que el
censor considera indebidamente aplicado.
295
regreso, pues en tal evento, la responsabilidad la asume el respectivo
concurrente.***
Es en este aspecto en el que se debe reflexionar, pues el recurrente considera
indebidamente aplicado el artículo 23, anterior, por cuanto que, dice, el
homicidio cometido no se le debe imputar a su representado ya que en su
realización no tenía dominio ni para ello medió "su contribución objetiva".
Quiere decir lo anterior, que la teoría del dominio del hecho no puede
entenderse, como así parece ser el caso del recurrente, dentro de un estrecho
concepto objetivo-formal, puesto que es evidente que la ejecución o realización
material, no constituye la única forma de manifestarse el dominio.
296
factorizado por el dolo eventual. La ley actual (art. 22) considera que es dolosa
la conducta cuando la realización de la infracción penal ha sido prevista como
probable, en tanto que la norma vigente para el hecho (Dcto. 100/80, art. 36)
estimó dolosa la conducta cuando el agente acepta el hecho como posible,
juicio éste más amplio si se tiene en cuenta que lo posible es una modalidad
de un hecho o proceso que se estima, en abstracto o en términos generales,
como real o necesario, puesto que la realidad se encuentra siempre en el
ámbito de la posibilidad. En tanto, un juicio de probabilidad, que es
posibilidad concreta, es de índole gnoseológica, en cuanto implica lo cierto o lo
verdadero, dependiendo de los grados de su mayor o menor acercamiento a la
certidumbre.
---------------------------
* CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. M.P. Dr. REYES ECHANDÍA, Alfonso.
Agosto 11 de 1981. Dr. MARTÍNEZ ZÚÑIGA, Lizandro. Noviembre 23 de 1988,
Dr. TORRES FRESNEDA, Juan Manuel. Septiembre 16 de 1992. Dr.
ARBOLEDA RIPOLL, Fernando. Marzo 23 de 1999. Dr. PÉREZ PINZÓN,
Álvaro. Abril 24 de 2003. Dra. PULIDO DE BARÓN, Marina. Junio 8 de 2003,
entre otros.
** Sala de Casación Penal. C.S.J. Septiembre 8/80. M.P. ALFONSO REYES
ECHANDÍA
*** Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Febrero 28/95. y
marzo 10/93
17/03/2004
297
2. La Sala aborda su estudio en el orden que el actor le diera y no haciendo
prevalecer su carácter prioritario, bajo la consideración de que con
posterioridad al proferimiento de la sentencia 12.262 del 12 de septiembre de
2.002 (M.P: Dr. Jorge Enrique Córdoba Poveda) -y con referencia al nuevo
estatuto procesal penal- hubo de clarificarse que un ataque de tal naturaleza
debe formularse y demostrarse conforme a la técnica propia de la primera
causal de casación, por no comprometer la estructura del proceso, a
diferencia de lo que ocurría en el anterior estatuto, bajo cuya vigencia un
yerro de esta naturaleza se alegaba por la causal tercera y se desarrollaba con
la técnica de la primera.
25/03/2004
". Para que exista coautoría se requieren tres elementos: acuerdo común,
división de funciones y trascendencia del aporte durante la ejecución del
ilícito.
298
". Para la determinación de la coautoría es menester analizar tanto lo objetivo
como lo subjetivo de la injerencia de la persona en el hecho.
"d) Las anteriores exigencias coinciden con las generalmente adosadas, antes
y ahora, a la coautoría, vale decir, acuerdo y decisión plural; sentimiento de
actuar en una obra propia inserta en una labor global, común;
comportamiento signado por esa directriz, o co-dominio del hecho; y aporte de
algo importante durante la ejecución del delito, todo ello, desde luego, mirado
objetiva y subjetivamente.
"Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
"Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
299
"Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
"Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrentamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
"Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito"*.
300
c) Falso raciocinio, cuando el juzgador se aparta, al momento de valorar los
elementos de juicio, de los postulados de la sana crítica, es decir, de las leyes
de la lógica, de la ciencia o de las máximas de la experiencia.
----------------------------
* Magistrado Ponente Dr. Álvaro Orlando Pérez Pinzón. Rad. 19.213.
Con la entrada en vigencia de la Ley 599 de 2000, las normas que ahora
regulan el fenómeno prescriptivo frente a los servidores públicos imponen
una nueva hermenéutica, implicando a su vez una variación del método para
301
el cálculo de dicho lapso, en la medida en que por la forma como está
redactado el artículo 83 del nuevo estatuto, la tercera parque que aumenta el
término extintivo debe establecerse directamente sobre el máximo de la pena
señalada para el delito en el tipo penal que lo define, con la misma
modificación consistente en que durante el período del juicio, debe contarse
pero en la mitad a partir de la ejecutoria de la resolución acusatoria o su
equivalente.
302
expresión fáctica, haciéndole producir efectos que objetivamente no se
establecen de ella (falso juicio de identidad); o, porque sin cometer ninguno de
los anteriores desaciertos, existiendo la prueba es apreciada en su exacta
dimensión fáctica, y al asignarle su mérito persuasivo transgrede los
postulados de la lógica, las leyes de la ciencia o las reglas de experiencia, es
decir, los principios de la sana crítica como método de valoración probatoria
(falso raciocinio).
303
7. Cuando la denuncia se orienta hacia la apreciación de la prueba indiciaria,
el censor tiene por deber informar si la equivocación se cometió respecto de
los medios demostrativos de los hechos indicadores, la inferencia lógica, o en
el proceso de valoración conjunta al apreciar su articulación, convergencia y
concordancia de los varios indicios entre sí, y entre éstos y las restantes
pruebas, para llegar a una conclusión fáctica desacertada.
304
inferencia el juzgador, en qué consistió el yerro, y qué grado de trascendencia
tuvo éste por su repercusión en la parte resolutiva del fallo.
Esta tarea comprende un nuevo análisis del acervo probatorio, valorando las
pruebas omitidas, cercenadas o tergiversadas, o apreciando acorde con las
reglas de la sana crítica aquellas en cuya ponderación fueron transgredidos
los postulados de la lógica, las leyes de la ciencia o los dictados de
experiencia; y excluyendo las supuestas o ilegalmente allegadas o valoradas.
Claro que esta labor no puede hacerse de manera insular, sino en
confrontación con lo acreditado por las acertadamente apreciadas, tal como lo
ordenan las normas procesales establecidas para cada medio probatorio en
particular y las que refieren el modo integral de valoración. Todo en orden a
hacer evidente la falta de aplicación o la aplicación indebida de un concreto
precepto de derecho sustancial, pues es la demostración de la errada
calificación jurídica de la conducta con incidencia en el debido proceso, la
finalidad de este motivo de casación.
305
9. Tampoco puede pasarse por alto, como sí lo hace el recurrente, que el
secuestro es un delito de conducta permanente que se prolonga en el tiempo
mientras la víctima se halle privada del derecho a la libertad.
306
21/04/2004
2. Las omisiones del apoderado que dan lugar a invalidar un proceso, por falta
de defensa técnica, lo ha reiterado la Sala, no pueden identificarse con la
ausencia de algunos actos procesales. La nulidad sobreviene como
consecuencia del incumplimiento irresponsable de sus deberes.
307
5. Téngase presente que el propósito del proceso penal no es la abundancia ni
la repetición innecesaria de pruebas, sino la incorporación de medios
necesarios y útiles para obtener certeza sobre lo ocurrido.
308
personal, ha sido objeto de esmerados estudios por parte de esta Corporación*
dentro de la vigencia del Código Penal de 1980, uno de tales
pronunciamientos, con ponencia de quien ahora cumple igual misión en esta
providencia**, resuelve a cabalidad los cuestionamientos hechos a la
sentencia proferida por el Tribunal de Medellín, por lo que en lo pertinente se
transcribe seguidamente:
"Es cierto que el concepto así expresado, como se dijo en algunos salvamentos
de voto, podría conducir a involucrar al cómplice dentro de un ampliada
comprensión del término "autor", dado que también interviene en el hecho
común, en virtud de un acuerdo previo, inclusive con "dominio" de su propia
intervención, que forma parte de la empresa total".
"Es en este punto en el que el censor centra su argumento, cuando afirma que
el sólo concierto previo no permite configurar la coautoría. Empero, de la
posición asumida por la Corte, se destaca la afluencia de varios principios
para entender el concurso de personas dentro de la institución de la
coparticipación criminal, a saber, el de la ejecutividad, entendida ésta como la
exteriorización de la conducta, mínimo hasta el grado de la tentativa, de la
identidad, de manera que en torno a una misma empresa delictiva se
aglutinen los partícipes, la convergencia dolosa, el cual supone el acuerdo de
voluntades y de la división de trabajo como efecto de lo concertado y
concretado. Si de la intervención así convenida, se podía deducir la
"realización de una misma y compleja operación delictiva", esta forma de
participación tenía que ser calificada como de autor, dado que el artículo 23
de la codificación anterior consideraba como autor al que realizara el hecho
punible, como así también lo establece el código actual (Ley 599/2000)" .
"Por lo expuesto, no puede afirmarse con certeza que la Corte legisló o, como
lo insinúa el demandante, que se "inventó" la figura de la coautoría impropia,
puesto que su comprensión dependió de la interpretación en vía de
jurisprudencia, de la disposición legal a la cual dio dicho sentido y que el
censor considera indebidamente aplicado".
309
regreso, pues en tal evento, la responsabilidad la asume el respectivo
concurrente".
"Quiere decir lo anterior, que la teoría del dominio del hecho no puede
entenderse, como así parece ser el caso del recurrente, dentro de un estrecho
concepto objetivo-formal, puesto que es evidente que la ejecución o realización
material, no constituye la única forma de manifestarse el dominio".
----------------------------
* CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. M.P. Dr. REYES ECHANDÍA, Alfonso.
Agosto 11 de 1981. Dr. MARTÍNEZ ZÚÑIGA, Lizandro. Noviembre 23 de 1988,
Dr. TORRES FRESNEDA, Juan Manuel. Septiembre 16 de 1992. Dr.
ARBOLEDA RIPOLL, Fernando. Marzo 23 de 1999. Dr. PÉREZ PINZÓN,
Álvaro. Abril 24 de 2003. Dra. PULIDO DE BARÓN, Marina. Junio 8 de 2003,
entre otros.
** Sala de Casación Penal C.S. de J., Radicado 17252, 18 de febrero de 2004,
M.P. Herman Galán Castellanos.
*** Sala de Casación Penal. C.S.J. Septiembre 8/80. M.P. ALFONSO REYES
ECHANDÍA
310
FECHA : 21/04/2004
DECISION : No casa
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Porte de armas de
defensa personal, Homicidio agravado
PROCESO : 18007
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
27/05/2004
1. El artículo 13 del anterior Código Penal, así como del 14 del estatuto
vigente que preserva su contenido, referidos al principio de territorialidad para
la aplicación de la ley penal, estatuyen que la conducta punible se considera
realizada "En el lugar donde se desarrolló total o parcialmente la acción"
(negrillas fuera de texto).
311
3. Sin embargo, contrario a lo que estima el censor, se debe precisar, que la
responsabilidad penal es de carácter individual y ello, en principio, impide de
acuerdo con la postura que en forma reiterada y pacífica ha mantenido esta
Sala, que la ruptura de la unidad procesal originada en la orden de investigar
por separado a un posible autor o partícipe, genere la invalidez de la
actuación procesal, salvo que dicha situación entrañe vulneración a las
garantías de los sujetos procesales, lo cual exigirá siempre del interesado que
la auspicie, aportar la argumentación encaminada hacia esa propósito*.
4. La coautoría implica que para la consecución del fin propuesto cada uno de
los coautores desempeña un rol específico dentro de un plan previamente
definido, en donde todos responden por el designio común querido y por los
actos colaterales que de él se desprendan, en la medida en que tengan
dominio del hecho, salvo que se trate de conductas que se cometan por fuera
del marco del acuerdo, evento en el cual la responsabilidad se atribuye a título
individual**.
6.
"Sin embargo, es claro, que una tal exigencia, no sólo puede cumplirse con el
tratamiento individual de los fenómenos objeto de análisis o de los respectivos
medios de prueba, sino que igualmente puede lograrse con un análisis general
de diversas situaciones concurrentes en una investigación, sin que ello
signifique el soslayamiento de la prueba de cargo, su sustento legal y su
consiguiente conceptualización jurídica frente a cada uno de los conflictos por
resolver, sino que ante las concretas condiciones probatorias que se presenten
en la realización de un hecho en el que intervienen diversos autores o
partícipes, su propio modus operandi haga que la prueba se vincule de forma
tal que, contrario sensu, su separación impida su verdadera comprensión
histórica y, por ende, su real trascendencia jurídica, en la medida en que la
propia complejidad e interrelación de los intervinientes delictuales, en casos
como el presente, se pueda explicar la unidad de fin propuesto, lo cual,
opuesto a lo que se cree, posibilita idóneamente la contradicción jurídica de
los diversos conflictos por decidir, pues, una tal forma de argumentar no está
significando su ausencia, su anfibología, su ambigüedad, su equivocidad, o en
forma general, la ausencia de motivación, sino su global análisis, que no es,
312
tampoco, igual a superficialidad o no concreción, es su valoración universal de
lo sucedido, integral, es decir, sin evadir las individualidades, se integren
convergente y coherentemente"***
-----------------------
* Entre otras ver radicado 17005, sentencia de diciembre 11 de 2003, M.P.
Mauro Solarte Portilla; radicado 16818, sentencia del 2 de mayo del mismo
año M.P. Dr. Álvaro Orlando Pérez Pinzón y radicado 13936, sentencia del 10
de octubre de 2002, M.P. Dr. Álvaro Orlando Pérez Pinzón.
** Entre otras véanse sentencias de febrero 28 de 1985, M.P. Dr. Luis Enrique
Aldana Rozo, de noviembre 21 de 1995, M.P. Dr. Carlos A. Gálvez Argote y de
abril 25 de 2000, M.P. Dr. Jorge E. Córdoba Poveda, rad. 19987.
*** Radicado 18364. Sentencia de julio 4 de 2002, M.P. Dr. Carlos A. Gálvez
Argote.
21/07/2004
313
2. Es cierto que el artículo 360 del anterior Código de Procedimiento Penal,
vigente para el momento en que (...) rindió sus descargos, determinaba que el
imputado fuera interrogado en relación con los hechos que originaron su
vinculación en orden a obtener las explicaciones que estimara necesarias
acerca de su comportamiento y así garantizarle el ejercicio de su derecho a la
defensa, pero sin implicar ese mandato que el funcionario agotara en ese
mismo instante todas las preguntas acerca de las circunstancias en las cuales
sucedieron los hechos materia de investigación porque era finalidad que
dependía en gran parte de la postura que asumiera el indagado, quien podía
mostrarse completamente ajeno a la ilicitud o simplemente negarse a
suministrar los datos que fueran de su conocimiento.
28/07/2004
1. Aclárese, en principio, que al apoderado del señor Ángel María Cerón Zárate
le asiste interés para recurrir en casación, a pesar de no haber impugnado la
sentencia de primera instancia, por cuanto el fallo del Ad quem desmejoró su
situación.
314
04/08/2004
Los artículos 359 y 360 del Decreto 2700 de 1.991 señalaban las reglas que
regían su recepción y dentro de ellas, respecto al sustento fáctico de la
investigación, prescribían que "…el funcionario judicial interrogará al
imputado en relación con los hechos que originaron su vinculación", a
diferencia de la actual previsión hecha en el artículo 338 de la Ley 600 de
2.000 donde no basta el cuestionamiento sobre los sucesos de los que emana
el compromiso del sindicado, sino que además es necesario ponerle "de
presente la imputación jurídica provisional".
...
Además -ha dicho la Sala- "el artículo 360 del anterior Código de
Procedimiento Penal, precepto bajo cuya vigencia el sentenciado rindió sus
descargos, exigía que al imputado se le interrogara "en relación con los hechos
que originaron su vinculación", con la finalidad de que explicara su conducta.
En estos casos, sostuvo reiteradamente la Corte que la indagatoria no era una
diligencia de formulación de cargos, como lo entendió el demandante, sino
una forma de vinculación al proceso y un medio de defensa a través del cual
el sindicado puede suministrar las explicaciones que a bien tenga sobre las
circunstancias en que se desarrolló el acontecimiento objeto de imputación.
"Otra cosa muy distinta es que el fiscal no hubiere insistido sobre tópicos que
de antemano se sabía ningún resultado positivo arrojarían, dada, se reitera, la
postura asumida por el indagado en el interrogatorio al que se le sometió, de
donde cualquier pregunta sobre su participación en la tentativa de homicidio,
a más de insubstancial, resultaba inconducente atendida la persistencia de
aquél en sostener su coartada. Cuando así se procede, no es dable aducir
atentados al derecho de defensa o menoscabo de la estructura básica del
proceso, con el expediente de que quien tozudamente niega su participación
315
en los hechos no fue interrogado en debida forma sobre ellos" (M.P., Dr. Jorge
Aníbal Gómez Gallego, sentencia del 22 de agosto de 2.002, rad. 14.719)."
...
Es verdad -ha dicho la Sala- "que doctrina y jurisprudencia han aceptado que
en los casos en que varias personas proceden en una empresa criminal, con
consciente y voluntaria división del trabajo para la producción del resultado
típico, todos los partícipes tienen la calidad de autores, así su conducta vista
aisladamente no permita una directa subsunción en el tipo, porque todos
están unidos en el criminal designio y actúan con conocimiento y voluntad
para la producción del resultado comúnmente querido o, por lo menos,
aceptado como probable… Así mismo, si a esa empresa criminal van armados
porque presumen que se les puede oponer resistencia o porque quieren
intimidar con el uso de las armas y como consecuencia de ello se producen
lesiones u homicidios, todos será coautores de hurto y de la totalidad de los
atentados contra la vida y la integridad personal, aun cuando no todos hayan
llevado o utilizado armas, pues participaron en el común designio, del cual
podían surgir estos resultados que, desde luego, se aceptaron como probables
desde el momento mismo en que actuaron en una empresa de la cual se
podían derivar". (Sentencia de febrero 28 de 1985, M. P. Luis Enrique Aldana
Rozo).
316
pretende el recurrente- pues ello conduciría al inaceptable extremo de tenerlas
como accesorias, intrascendentes y consecuentemente carentes de
punibilidad cuando en verdad adquieren importancia para el derecho penal
sólo en tanto sean puestas en conjunto y en función de un plan delictivo
común a quienes en él intervienen.
22/09/2004
"Sin que se quiera desconocer la discusión doctrinal que existe sobre el punto,
y sin la pretensión de elaborar una lista excluyente, tradicionalmente ha sido
entendido que en materia penal tienen carácter de sustanciales aquellas
disposiciones que definen, privilegian o califican las conductas delictivas y las
que regulan la punibilidad en todos sus aspectos, esto es estableciendo el
mínimo y máximo, las circunstancias de mayor y de menor punibilidad, las
rebajas, la prohibición de la reforma en peor, la favorabilidad y el in dubio pro
reo, entre otras, independientemente del estatuto donde se encuentren
consignadas. También las que se refieren al pago de perjuicios (cfr. cas. feb.
4/98. Rad. 10388).
317
"De este modo, si el artículo 232 del Código de Procedimiento Penal se refiere
a la necesidad de la prueba sobre el hecho punible y la responsabilidad del
procesado, y el 238 ejusdem al método de la sana crítica para apreciar los
medios de convicción, es claro que indudablemente se trata de preceptos
instrumentales y no sustanciales.
Tampoco se percata que este tipo de error no tiene cabida cuando la prueba
que se dice omitida ha sido apreciada o analizada de alguna manera por el
juzgador en la sentencia, pues en tales eventos lo que corresponde denunciar
es la configuración de falsos juicios de legalidad, convicción, identidad o
raciocinio, nunca falsos juicios de existencia por omisión, toda vez que un tal
planteamiento caería en el vacío por carencia de fundamento.
Esto en razón a que los actuales desarrollos dogmáticos (art. 29 de la ley 599
de 2000) establecen como característica de la coautoría que cada uno de los
sujetos intervinientes en el comportamiento punible, eventualmente actúa con
división del trabajo cumpliendo acuerdo común, expreso o tácito, previo o
concomitante a la ejecución de la conducta, y puede no llevar a cabo la
totalidad del supuesto fáctico definido en el tipo, pero sí lo hace prestando
una contribución objetiva e importante la consecución de la finalidad
318
propuesta en la que cada cual tiene dominio funcional del hecho, sin que
para efectos de establecer el grado de compromiso penal sea necesario que
cada interviniente realice la totalidad de la conducta definida en el tipo o que
sólo deba responder por el aporte realizado sin consideración al plan
conjuntamente trazado, como en este caso pareciera ser la pretensión del
recurrente.
20/10/2004
Tampoco es posible hacer ese juicio de valor sobre la base de la inactividad del
defensor porque lo realmente importante para la viabilidad del cargo, es
acreditar cómo, a consecuencia de esa pasividad, se dejaron de cumplir
algunos actos que habrían determinado un resultado favorable al procesado.
...
319
gestión encomendada porque existieron actos de vigilancia y control del
proceso a través de la solicitud de copias de lo actuado que les permitía
enterarse de lo que estaba ocurriendo e intervenir en cualquier momento que
lo consideraran indispensable.
Evidenciado entonces que (...) fue visto con su hermano en el desarrollo de los
acontecimientos y que orientados por el mismo designio criminal llevaron a
cabo una conducta común con división de funciones en la misma acción
delictiva, lo jurídicamente predicable era su participación a título de coautor y
en consecuencia su responsabilidad frente al concurso de conductas punibles,
320
así como lo consideró el sentenciador, de manera que la sanción punitiva
impuesta al procesado guarda plena correspondencia con las señaladas
determinaciones porque el incremento fue producto del concurso delictivo que
se le imputó.
06/04/2005
321
Lo anterior, desde luego, sin caer en el simple formalismo, de dar respuestas
genéricas, abstractas o sin respaldo probatorio, pues en ese caso la
motivación sí que estaría en entre dicho.
3. No es que se deba exigir, como lo pretende el actor, que los otros coautores
se encuentren debidamente individualizados e incluso condenados. No, lo
importante es que se avizore que otra u otras personas podrían están también
involucradas con la comisión del delito.
...
Recuérdese que el delito se cometió bajo la vigencia del Código Penal anterior
(Dcto. Ley 100 de 1.980), y éste en el art. 23*** no hacía distinción, para los
efectos penológicos, entre autor y determinadores. Así mismo, tampoco desde
el punto de vista gramatical se hacía alusión a los autores, sino sólo al autor;
pero ese texto no impedía reconocer que la coautoría estaba involucrada en la
definición formativa.
Es entonces en el nuevo Código Penal (Ley 599 de 2.000), art. 29, en donde se
incluyen por parte del legislador los elementos que extraña el recurrente,
como son: el acuerdo común y la división del trabajo, dentro del cual habría
que atender la importancia del aporte. Pero de todas maneras se advierte que,
en cualquiera de sus diversas modalidades, el autor incurre en la pena
prevista para la conducta punible.
-----------------------------------------
* Art. 29 :- (...) Quien sea sindicado tiene derecho a (...) presentar pruebas y a
controvertir las que se alleguen en su contra; a impugnar la sentencia
condenatoria (...).
** Art.31.- Toda sentencia judicial podrá ser apelada o consultada, salvo las
excepciones que consagre la ley.
*** Art. 23.- Autores. El que realice el hecho punible o determine a otro a
realizarlo, incurrirá en la pena prevista para la infracción.
322
PONENTE(S) : DR.MAURO SOLARTE PORTILLA
Sentencia Casación
FECHA : 06/04/2005
DECISION : No casa
DELITOS : Peculado por apropiación
PROCESO : 20400
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
17/08/2005
"2. La decisión que aquí se tomará sigue la línea jurisprudencial trazada por
la Corte, a través de la cual - sin establecer reglas generales - ha venido
analizando puntualmente cada uno de los casos que las demandas de
casación en forma o los conflictos de competencia han traído a su
conocimiento, encontrando en algunos eventos que el concurso de los tipos
penales de hurto calificado y agravado y secuestro simple es apenas aparente,
y, en otros, que es real e incluso, en ocasiones, los hechos han demostrado
que se avanza por parte de ciertas bandas delincuenciales hasta el secuestro
extorsivo. Al efecto y sobre el primer tópico, baste relacionar, entre otras, las
decisiones del 4 de junio de 1986 y de 30 de mayo de 2001; y, sobre el
segundo, del 4 de junio y 26 de noviembre de 2002"* .
...
La postura que esta Sala ha brindado para la mayor parte de los casos, como
se vio de acuerdo con el recuento jurisprudencial previo, ha sido la de que sin
atender al factor temporal de la privación de libertad a que se someta al
tenedor, poseedor o detentador del objeto material del hurto, toda aquélla que
323
sobrevenga al doblegamiento de su voluntad y a la facultad de disposición que
logra el sujeto activo sobre el objeto material del ilícito, es innecesaria o
superflua para la consumación del delito y estructura un atentado contra la
libertad personal que debe ser sancionado como secuestro.
____________________________________
* Radicación 13745, decisión de fecha julio 12 de 2002; M.P. Dr. Yesid
Ramírez Bastidas.
28/02/2006
324
diversos resultados que se produzcan, independientemente de que cada uno
de los actos ejecutados por los concertados se subsuma de manera plena en
los tipos de delito acordados o en aquellos que en desarrollo de la empresa
criminal tengan ocurrencia.
(....)
Postura que ha sido reiterada por la Sala* , para concluir en que la coautoría
impropia se caracteriza por la existencia de un acuerdo previo de los sujetos
intervinientes, la identificación de voluntades en la realización de un
propósito delictivo común y la división del trabajo, de manera tal que los
coautores no son juzgados por el aporte individual, sino por la totalidad del
supuesto fáctico llevado a cabo por quienes hicieron parte de la empresa
criminal, en virtud a un designio común.
Sentencia Casación
FECHA : 28/02/2006
DECISION : Desestima, casa parcial y de oficio, reajusta
pena
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 21707
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : Véase también en - Internet
325
09/03/2006
COAUTOR-Cómplice
"Por si existieran dudas, la Corte fue aún más enfática el 10 de mayo de 1991:
326
nuestros artículos 23... y 24... no podrá encontrar esa connotación, pues el
articulado se muestra más favorable a incluir un número mayor de partícipes,
en calidad de autores, que los que usualmente sus intérpretes piensan o
imaginan. La tesis restrictiva de la autoría (solo son tales los que ejecutan
directamente la acción típica mandada por la ley), nunca ha encontrado
respaldo en nuestra doctrina y jurisprudencia nacionales. Por el contrario
impera la extensiva, la que no pretende, como su nombre bien lo indica,
disminuir el número de autores, sino ampliarlo... Con esta tendencia nuestro
estatuto se adscribe a la corriente legislativa y hermenéutica que trata de
imperar en el mundo actual del derecho penal: la complicidad secundaria se
bate en retirada bajo la consideración, en especial, "de integrar en la autoría
todas las actividades dimanantes de un mutuo acuerdo o plan, que genera ...
una responsabilidad "in solidum" de todos los partícipes, cualquiera que fuese
el acto de su intervención" (M. P. Gustavo Gómez Velásquez).
327
De acuerdo con esta última conclusión, que hoy reitera la Sala, bastará
conjugar elementos objetivos y subjetivos en la consumación de la conducta,
para diferenciar la coautoría y la complicidad, en la medida en que para que
una persona pueda ser considerada coautora de un delito, no sólo se exige su
voluntad incondicional de realizarlo, sino también su contribución objetiva, es
decir, la importancia de su aporte en la fase ejecutiva, pues ello es lo que en
últimas determina el llamado "codominio del hecho", entendiendo como
"hecho" el proceso causal que con la conducta se pone en marcha.
De allí que sólo quien domina el hecho puede ser tenido como autor; mientras
que el cómplice es aquél que simplemente presta una ayuda o brinda un
apoyo que no es de significativa importancia para la realización de la conducta
ilícita, es decir, participa sin tener el dominio propio del hecho.
_____________________________________
*Fallo de casación 17.457 del 22 de mayo de 2003.
06/04/2006
328
2. No resulta imprescindible que cada uno de los intervinientes ejecute la
conducta en su totalidad, pues dicha forma de participación obedece a un
plan preconcebido de distribución funcional, en donde cada uno de ellos
efectúa un aporte a su realización, que aisladamente considerado no
necesariamente debe recorrer íntegramente los elementos del tipo penal
respectivo.
ACLARACION DE VOTO
DR, Yesis Ramírez Bastidas
Sentencia Casación
FECHA : 06/04/2006
DECISION : No Casa
DELITOS : Tráfico, fabricación o porte de estuperf.
PROCESO : 24533
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : DR.YESID RAMIREZ BASTIDAS - Aclaración
de voto
Véase también en - Internet
26/04/2006
329
VIOLACION DIRECTA DE LA LEY SUSTANCIAL-Técnica en casación/
COAUTORIA IMPROPIA-Concepto
1. Tiene dicho la Sala que cuando se opta por atacar el fallo de segundo grado
a través de la causal primera de casación, apartado primero, como acá
sucede, es necesario que los fundamentos del cargo se dirijan a demostrar el
yerro del sentenciador en la aplicación de la ley sustancial, bien porque a
partir de la ponderación de los hechos objeto de juzgamiento no resolvió al
asunto a través de la disposición que regulaba la situación en concreto -falta
de aplicación o exclusión evidente-, ora porque realizó una equivocada
adecuación de los hechos probados a los supuestos que contempla el precepto
-aplicación indebida-, o ya porque pese a seleccionar adecuadamente el
precepto legal le atribuyó un sentido que no tiene o le asignó efectos diversos
o contrarios a su contenido -interpretación errónea-.
16/05/2007
COAUTOR-Cómplice
330
En la sentencia de casación de 9 de marzo de 2006 -radicado 22.327-, la Sala
recordó el examen histórico que realizó sobre la coautoría y complicidad en
otro momento: (4) (...) partiendo de la existencia legal de la coautoría y con el
ánimo de distinguir entre autores materiales y cómplices, dijo el 9 de
septiembre de 1980:
Por si existieran dudas, la Corte fue aún más enfática el 10 de mayo de 1991:
331
todas las actividades dimanantes de un mutuo acuerdo o plan, que genera ...
una responsabilidad "in solidum" de todos los partícipes, cualquiera que fuese
el acto de su intervención" (M. P. Gustavo Gómez Velásquez).
De allí que sólo quien domina el hecho puede ser tenido como autor; mientras
que el cómplice es aquél que simplemente presta una ayuda o brinda un
apoyo que no es de significativa importancia para la realización de la conducta
ilícita, es decir, participa sin tener el dominio propio del hecho.
332
La Corte, tras no pocas dificultades hermenéuticas, consideró que cuando el
procesado es apelante único, el juez de segunda instancia y el juez de
casación no pueden desmejorar su situación, (5) más allá de que se trate de
una sentencia o de cualquier otra decisión judicial que deba conocer el Ad
quem por virtud de la impugnación exclusiva del interesado.
333
Si bien no se trata de un valor absoluto, el asunto que se decide no es de
aquellos respecto de los cuales deba aplicarse la excepción a ésta garantía.
Sigue.
....
3.7. En el campo del derecho penal el principio del non bis in idem se
encuentra amparado bajo la fórmula procesal de la cosa juzgada, en los
términos del artículo 19 de la Ley 600 de 2000 (Código de Procedimiento
Penal):
334
desmejora al apelante, que fue sorprendido por la actuación ex officio del
sentenciador.
________________________________
(1) Sentencia de 25 de mayo de 2006, radicado 20.326.
(2) Ibídem .
(3) Sentencia del 26 de enero del 2005. Radicación 21474.
(4) Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, decisión del 9 de
marzo de 2006, radicación 17.457.
(5) Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, radicación 23.496 de
2006.
(6) Corte Constitucional, Sentencia T-099 de 1.994.
(7) Corte Constitucional. Sentencia C-544 de 2001.
(8) Corte Constitucional, Sentencia C-554 de 2001.
(9) Ibídem.
(10) Corte Constitucional. Sentencia C-096 de 1.993.
(11) Corte Constitutional S.T-575/93. También las Sentencias C-479 de
1992 ; ST-520 de 1992; SC-543 de 92 ; ST-368 de 1993; SC-214 de 94; SC-
264 de 1995; y ST-652 de 1996.
(12) T-168 de 1992.
28/09/2006
335
De ahí que para estos efectos el acto colectivo debe apreciarse en su conjunto
y como lo ha dicho la Corte, "en los casos en que varias personas proceden a
una empresa criminal, consciente y voluntaria división del trabajo para la
producción del resultado típico, todos los partícipes tiene la calidad de
autores, así su conducta vista en forma aislada no permita una directa
subsunción en el tipo, porque todos están unidos en el criminal designio y
actúan con conocimiento y voluntad para la producción del resultado
comúnmente querido o, por lo menos, aceptado como probable"*.
336
Dicho de otra manera, dada la naturaleza colectiva de ese influjo sobre el
ánimo defensivo del agraviado, resulta inaceptable desligar, para convertirla
en tarea accesoria, la intervención trascendente de quien no ejecutó la
específica acción de portar ilegalmente el arma de fuego y de causar el
resultado muerte. Dentro de la división del trabajo, su participación
intangible, por cuanto ella no introdujo ningún tipo de ruptura en la unidad
de causa y fines, fue tan esencial, aunque su manifestación al mundo exterior
hubiera sido distinta, como la de sus compañeros de empresa delictiva.
____________________________________________________________
* Providencia del 28 de febrero de 1985 citada en el fallo del 24 de enero de
2001. Rad. 12993.
** Radicación11.862.
*** Sentencia del 23 de septiembre de 2003. Rad. 19712.
05/10/2006
337
"por ello es inherente a esta figura la concurrencia de por lo menos dos
elementos: uno subjetivo que generalmente es previo o concurrente con la
comisión del hecho, consistente en la existencia de un acuerdo expreso o
tácito para su acometimiento y uno objetivo, que se manifiesta en la
realización de actos orientados a su ejecución como cometido común,
siéndoles por ello imputables a todos los partícipes el delito o delitos
cometidos que típicamente se configuren"**.
Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
338
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito"***.
________________________________________________________________________
* CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sents. de casación del 26 de junio de
2002, rad. 11.451 y 10 de noviembre de 2005, rad. 23451, entre otras.
** CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sent. Cas. Diciembre 15 de 2000, rad.
11471.
*** CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sent.- Cas. Agosto 21 de 2003, rad.
19213.
Sentencia Casación
FECHA : 05/10/2006
DECISION : No casa la sentencia impugnada
339
DELITOS : Homicidio, Porte de armas de defensa personal
PROCESO : 22358
PUBLICADA : Si
18/10/2006
26/10/2006
340
extraprocesal/ MOTIVACION DE LA SENTENCIA/ COAUTORIA IMPROPIA-
Elementos/ COAUTORIA-Complicidad: Diferencias
341
3. El derecho de motivación de la sentencia se constituye en un principio de
justicia que existe como garantía fundamental derivada de los postulados del
Estado de Derecho, en tanto que el ejercicio jurisdiccional debe ser racional y
controlable (principio de transparencia), asegura la imparcialidad del juez y
resguarda el principio de legalidad.
Las decisiones que tome el juez, que resuelven asuntos sustanciales dentro
del proceso -v.gr. una sentencia-, deben consignar las razones jurídicas que
dan sustento al pronunciamiento; se trata de un principio del que también
depende la cabal aplicación del derecho al debido proceso pues, en efecto, si
hay alguna justificación en la base de las garantías que reconocen la defensa
técnica, el principio de favorabilidad, la presunción de inocencia, el principio
de contradicción o el de impugnación -todos reconocidos por el art. 29 Const.
Pol.-, ha de ser precisamente la necesidad de exponer los fundamentos que
respaldan cada determinación, la obligación de motivar jurídicamente los
pronunciamientos que profiere el funcionario judicial .
De manera que puede que sea concebida desde este enfoque como la
contrapartida del derecho constitucional del libre acceso a la jurisdicción
efectiva en virtud del cual todas las personas tienen derecho a obtener tutela
judicial material que concluya con una decisión final motivada, razonable y
342
fundada en el sistema de fuentes (art. 230 Const. Pol.), presentando desde
luego pretensiones legítimas pues no resulta suficiente la posibilidad formal
de llegar ante los jueces con la simple existencia de una estructura judicial
lista a atender las demandas de los asociados, porque su esencia reside en la
certeza que en los estrados judiciales se surtirán los procesos a la luz del
orden jurídico aplicable, con la objetividad y la suficiencia probatoria que
aseguren un real y ponderado conocimiento del fallador acerca de los hechos
materia de su decisión .
343
Debe recordarse que a la fijación del aspecto fáctico se llega a través de la
elaboración de juicios de validez y de apreciación de los medios de convicción,
orientados éstos últimos por las normas de la experiencia, de la ciencia o de la
lógica, o de las reglas que les asignan o niegan un determinado valor. El
mandato constitucional impone que la fundamentación de la sentencia debe
comprender el correspondiente juicio sobre los elementos probatorios y que el
mismo sea expreso y asertivo y no hipotético, toda vez que si el fallo no es
explícito o determinante sino que se manifiesta de manera imprecisa, remisa o
contradictoria, o se limita a enunciar las pruebas, omitiendo su debida
evaluación y discusión y, por ende, el debido mérito persuasivo o conclusivo,
necesariamente el acto jurisdiccional es defectuoso en cuanto no es posible su
contradicción por parte de los sujetos procesales.
Por consiguiente,
". Para que exista coautoría se requieren tres elementos: acuerdo común,
división de funciones y trascendencia del aporte durante la ejecución del
ilícito.
344
. Para la determinación de la coautoría es menester analizar tanto lo objetivo
como lo subjetivo de la injerencia de la persona en el hecho.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
345
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito. "
346
09/11/2006
347
18/04/2007
1. Es cierto que los hechos que ocupan la atención de la Corte y en tal sentido
se constata con los registros que se incorporaron al proceso, que en las horas
de la noche del 18 de agosto de 2005, cuatro personas, - tres hombres y una
mujer -, abordaron el vehículo conducido por (...) que responden a los
nombres de (...), (...), (...) y (...) quienes fueron capturados al norte de la
ciudad, luego de que (...) fuera víctima de actos que atentaron contra su
libertad individual, patrimonio económico, todo ello bajo inminente amenaza
de un arma de fuego que exhibieron los actores de las conductas ilícitas.
348
ajustan a la realidad procesal, pues de haberse realizado un ejercicio
argumentativo de su versión junto con el restante acervo probatorio, se
llegaría a la indefectible conclusión que las cuatro personas que abordaron el
vehículo en la carrera 7ª con la calle 51 de Bogotá D. C., actuaron de común
acuerdo para cometer los ilícitos perpetrados en contra de la autonomía
individual de (...) y sobre sus pertenencias dentro del ámbito de la
intimidación de un arma de fuego. Recuérdese, adicionalmente, que a una de
las tres personas que abandonaron precipitadamente el vehículo le fueron
incautados por la Policía Nacional algunos elementos de propiedad del
conductor del taxi, entre los que se relacionan: el radio teléfono del
automotor, $15.700 en dinero efectivo, una licencia de conducción a nombre
de (...) , los cuales fueron objeto de la estipulación número 2.
349
Es en este aspecto en el que se debe reflexionar, pues atendiendo el grado de
participación de los procesados (...) y (...), según lo referido por la víctima, es
incuestionable que la misma fue producto de un acuerdo previo en el cual
cada uno cumpliría una labor dentro del esquema de la división del trabajo
criminal.
Significa lo anterior, que la teoría del dominio del hecho no puede entenderse,
dentro de un estrecho concepto objetivo-formal, puesto que es evidente que la
ejecución o realización material, no constituye la única forma de manifestarse
el dominio.
350
la violencia sobre las personas y secuestro, que en esos eventos venía
deducida por las instancias, correspondía sólo a un concurso aparente de
tipos penales, como acontece precisamente en la sentencia de casación del 30
de mayo de 2001 que es citada por la actora, así como en otros fallos
proferidos con posterioridad a esa fecha -Cfr. Radicados 13475 del 12 de
diciembre de 2002 y 15225 del 15 de septiembre de 2005-.
Mas, también se advierte que esta Sala ha llegado en muchos otros de sus
pronunciamientos a la conclusión contraria, esto es, la de reconocer que se ha
verificado el concurso material de hurto calificado por la violencia sobre las
personas y secuestro -Cfr. Radicados 13662 del 5 de febrero de 2002, 12768
del 4 de agosto de 2003, 21520 del 28 de julio de 2004, 21474 del 26 de enero
de 2005 y 20676 del 9 de febrero de 2006, entre otros-, cuando quiera que la
privación de libertad a que es sometido el tenedor, poseedor o detentador del
objeto material del hurto, sobreviene al doblegamiento de su voluntad y a la
facultad de disposición que logra el sujeto activo sobre el objeto material del
ilícito, razón por la cual esa retención, así sea temporal, se revela como
innecesaria o superflua para la consumación del delito contra el patrimonio y
estructura un atentado contra la libertad personal que debe ser sancionado
como secuestro.
351
punible contra el patrimonio pues, como es natural entender, quienes
participaron en su realización utilizando arma de fuego para intimidar y
doblegar la voluntad de propietario del bien, ya había eliminado cualquier
posibilidad de resistencia suya dirigida a evitar el despojo del vehículo o de su
carga, de suerte que fue ésa la violencia calificante del hurto y otra la
conducta consistente en trasladar a la víctima a bordo de un vehículo de
servicio público, bajo la doble custodia de quien dentro de éste lo vigilaba y
del otro asaltante que los seguía en la motocicleta, comportamiento último
que sin duda se erige como lesivo de la libertad personal y concursa de
manera real y efectiva con el delito patrimonial.
352
aplicables. Empero, conforme al artículo 61 actual, el ámbito punitivo puede
moverse hasta los cuartos medios y aun al cuarto máximo, cuando sólo
concurran circunstancias de mayor punibilidad, lo cual eleva
considerablemente la pena cuando por la naturaleza de la conducta punible,
la pena principal es significativamente alta. Por esta razón, la acusación debe
ser lo suficientemente explícita, cuando al concretar al autor aluda a
circunstancias tales como la posición distinguida, el motivo abyecto, los
móviles de intolerancia o discriminación o cualquiera otro de los mencionados
en el artículo 58, pues estas no surgen de la discrecionalidad, puesto que
para que cumplan sus efectos, deben estar supeditadas a la apreciación
probatoria y, sobretodo, a la discusión, contradicción y debate.
Con el respeto que siempre he profesado por las opiniones y el criterio ajenos,
procedo a consignar las razones que me llevaron a salvar parcialmente mi voto
en cuanto a la decisión referida al delito de secuestro simple adoptada dentro
de la presente causa que se sigue en contra de los procesados (...) y (...).
Tal como lo expuse durante los debates de Sala, teniendo en cuenta las
circunstancias espacio temporales y modales en que la conducta de los
procesados irrumpió en el mundo de los fenómenos, en mi sentir no resultaba
353
procedente reconocer con efectos jurídicos la concurrencia de los de delitos de
hurto calificado y agravado y secuestro simple, porque precisamente a partir
del factum de que da cuenta el proceso, lo que queda claro es que la violencia
que los procesados ejercieron sobre la víctima no trascendió la propia del
delito contra el patrimonio económico, como para haber dado lugar a la
configuración de un atentado contra su libertad individual.
354
PONENTE(S) : DR.JAVIER DE JESUS ZAPATA ORTIZ
Sentencia Casación
FECHA : 18/04/2007
DECISION : Casa sentencia impugnada, modificando pena
impuesta
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Porte ilegal de
armas, Secuestro simple
PROCESO : 26388
PUBLICADA : Si
NOTAS ACLARATORIAS : DRA.MARINA PULIDO DE BARON -
Salvamento Parcial de Voto
26/04/2007
355
(...)
356
4. El aducido yerro de hecho, ha dicho la Sala ***** , teóricamente consiste en
una intensificación o reducción material del contenido de la prueba, como
actitud meramente descriptiva y no prescriptiva del juzgador, quien se limita a
invocar datos relevantes que no pertenecen a la realidad de las declaraciones,
o a soslayar otros igualmente determinantes que sí hacen parte de facticidad
del medio probatorio.
A esa conclusión arribó tras considerar que los miembros de las fuerzas
militares son garantes de protección frente a los eventuales transgresores de
los derechos fundamentales de las personas, máxime cuando los mismos
prestan sus funciones en zonas de alto conflicto. Por lo tanto, cuando eluden
deliberadamente el cumplimiento de esos deberes de seguridad o protección,
consintiendo la producción de su lesión, o en otras palabras, no actúan
permitiendo que se ocasionen resultados graves y dañinos, tales conductas de
inactividad e indiferencia se colocan al margen del ordenamiento superior, y
sus responsables sujetos a la sanción prevista en el delito de acción, porque
el artículo 21 de la ley 100 de 1980, reproducido con mayor riqueza
descriptiva en el artículo 25 de la Ley 599 de 2000, equipara, mediante un
juicio de equivalencia puramente hipotético, la acción con la omisión.
357
de orden público que para la época de los hechos se vivía la región, de otro, no
puede desconocerse que la omisión de tales deberes se tradujo en verdaderas
acciones positivas encaminadas a prestar una importante contribución para
que los actos criminales planeados por el grupo armado al margen de la ley
involucrado en este proceso contra la población de Mapiripán y sus
alrededores, pudiera llegar a término, como en efecto ocurrió.
Así, por ejemplo, (....), como comandante de la unidad militar que prestaba
servicios de vigilancia en el aeropuerto de San José del Guaviare, omitió
cualquier control sobre el arribo de las dos aeronaves que transportaba a los
paramilitares y la carga pesada, permitiendo que entraran a la pista de
aterrizaje los camiones en los cuales se transportaron hasta el lugar de
encuentro con otros paramilitares, y que salieran del terminal aéreo sin que
fueran requeridos para el registro correspondiente. Sólo de esta manera el
grupo de paramilitares que arribó al aeropuerto en cuestión pudo llegar hasta
la población que había sido declarada como objetivo militar por el líder de la
organización criminal.
Por lo tanto, los militares que así actuaron en este caso, coparticiparon
criminalmente en calidad de coautores por acción, porque al incumplir con
sus deberes permitiendo el paso de los paramilitares en la forma en que lo
hicieron, colaboraron materialmente con la ejecución de la acción criminal de
acuerdo al rol que cada uno desempeñaba, en lo que se vislumbra como una
clara división de un trabajo criminal planificado de antemano o acordado
desde su ideación, pues de no ser por esa cooperación, como se admite en el
fallo demandado, nunca se habría logrado el arribo del grupo criminal a la
población de Mapiripán y menos su sometimiento en la forma como ocurrió.
358
aportes concretos según la división de un trabajo criminal previamente
planificado y acordado, y por tanto, son coautores por acción de las conductas
ejecutadas y responsables por sus consecuencias.
359
En el contexto de los presupuestos fácticos y jurídicos de la imputación,
atendiendo las circunstancias que rodearon la ejecución de los hechos, no es
esencial en este caso la distinción entre acción y omisión, porque, como lo
advierte el Delegado, no es extraña a la doctrina la pretensión dogmática que
busca asimilar esas formas de participación en los llamados delitos de acción
por omisión. En ese sentido, resulta pertinente traer a colación la puntual cita
que al respecto trae el Delegado en su concepto:
La Sala comparte esta posición doctrinal, que incluso ha sido avalada por la
jurisprudencia constitucional, que se refirió al punto al resolver la acción de
tutela que se interpuso en relación con el conflicto de competencia que se
suscitó en otro apéndice de este mismo caso, en los siguientes términos:
360
humanos, es claro que se trata de un comportamiento que no tiene relación
con el servicio.
361
El hecho de considerar probada la conducta y la responsabilidad del autor,
independientemente de la forma en que su participación se haya dado,
indudablemente debe llevar a una declaración de responsabilidad. Por
consiguiente, el error en que pudiera incurrir el fallador al estudiar la prueba
que lo llevó a considerar como responsable a quien no lo fue, implica una
violación indirecta de la ley sustancial, pero nunca una violación directa.
30/05/2007
362
COAUTORIA IMPROPIA-Noción
363
11/07/2007
1. Con total razón destacó el señor Delegado que el ataque del libelista dista
de la fundamentación de cualquier sentido de quebranto indirecto de la ley
sustantiva, en tanto, no demostró ni la existencia ni la trascendencia de
ninguna modalidad de error in iudicando en la apreciación de las pruebas del
proceso, pues más allá de los posibles falsos juicios de existencia (por
omisión, suposición), falso juicio de identidad o falso raciocinio que enuncia
de manera deshilvanada en la propuesta de cargo, lo que presentó fue una
insular apreciación del conjunto probatorio con la expectativa de que la Corte
entre -como si fuese juez ordinario de instancia- a apreciar por tercera vez y
de manera íntegra las pruebas del proceso (tanto las de cargo como las de
descargo), expectante de que "por fin" La Corte avale la estrategia defensiva.
___________________________________
(1)Artículo art.29, inciso 2º, de la Ley 599 de 2000
(2)Cfr. CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala Penal, sentencia del
07/03/2007, rad. núm. 23825; sentencia de 05/10/2006, rad. núm. 22358;
sentencia del 09/11/2006, rad. núm. 22698, entre otras.
12/09/2007
364
aquiescencia/ COAUTORIA-Crimen organizado/ DOLO EVENTUAL/ DOLO
EVENTUAL-Concordancia con los estándares internacionales/ CONCIERTO
PARA DELINQUIR-Asociación para conformar grupos de justicia privada/
CASO MASACRE DE LA GABARRA
De resaltar es que ese análisis resulta sesgado, pues que el mismo rasero no
fue aplicado cuando se trató de criticar los testimonios de soldados y oficiales
aportados en respaldo de la tesis exculpativa, pues independientemente de la
confiabilidad o no de estos, era un deber del juzgador valorar aspectos como
la "solidaridad de cuerpo", propia de instituciones militares, y, respecto del
mayor (...), quien corroboró que un ataque a la base militar impidió al teniente
(...) acudir en apoyo de la población civil, que precisamente estaba siendo
investigado penalmente por similares hechos, acaecidos en Tibú días
anteriores, y en donde (...) presentó idéntica explicación.
Pero es que el nexo con los afectados, como la residencia en el lugar del
acontecimiento, no puede ser parámetro único, como lo tuvieron los jueces,
para apreciar la credibilidad de un testimonio. En el contexto propuesto,
resultaría imposible determinar lo realmente acaecido en espacios exclusivos
como las cárceles o establecimientos de prostitución, por citar algunos
ejemplos, en donde evidentemente los testigos de lo acaecido tienen que ser
los delincuentes, las prostitutas y sus clientes, personas que, por regla
general, no serían "santas".
365
sinceridad de los relatos, porque, como contrapartida, en punto de la
participación del acusado en la ejecución de las muertes, los mismos
declarantes no aventuran expresiones de percepción personal, sino, ahí sí,
solamente alusiones a "me comentaron, la gente decía, se rumoraba".
Por tanto, esa consecuencia debe serle imputada a título doloso, como que por
todos los medios fue enterado, sabía, de la masacre por venir y no hizo nada
para evitarla, siendo ese su deber constitucional y legal.
366
Esta imputación coincide con los estándares internacionales. Así, en relación
con el artículo 30 del Estatuto de la Corte Penal Internacional, se tiene dicho
que en punto del "resultado" o la "consecuencia" de la conducta, hay lugar a
deducir dolo, así:
El único tema que realmente faltó abarcar sobre el "elemento mental" durante
la Conferencia de Roma, fue el de evaluar la necesidad de definir la
367
"imprudencia temeraria" (o de algún concepto similar). Allí se acordó que, en
principio, todos los crímenes de competencia de la Corte requerirían intención
y conocimiento, salvo que específicamente se previera lo contrario. Después,
se señaló que la palabra "imprudencia temeraria" no aparecía por ninguna
parte en la definición de crimen, y se acordó que era innecesaria. El artículo
entonces fue adoptado.
368
(2)"ARTICULO 93. Los tratados y convenios internacionales ratificados por el
Congreso, que reconocen los derechos humanos y que prohíben su limitación
en los estados de excepción, prevalecen en el orden interno.
Los derechos y deberes consagrados en esta Carta, se interpretarán de
conformidad con los tratados internacionales sobre derechos humanos
ratificados por Colombia.
(3)Kai Ambos, "La parte general del Derecho Penal Internacional", traductor
Ezequiel Malarino, Temis, 2005, páginas 397 y siguientes. En el mismo
sentido, confrontar: Revista Española de Derecho Militar, número 75, enero a
junio del 2000, Ministerio de Defensa, Madrid, página 419.
(5) The Interntional Criminal Court, The making of the Rome Statute, Edited
by Roy S. Lee., página 205.
This article was originally the subject of rather difficult discussions, because
of conceptual differences between legal systems (dolus eventualis versus a
probability requirement, recklessness versus gross negligence); but it proved
quite easy to agree in the end. The final text is based on a Canadian draft.
Another initial difficulty arose from the link between the mental and the
material element and the question of the role that omissions would play in the
material element. That issue was resolved by replacing "act or omission" with
the word "conduct". It was understood that the issue of omission would be
369
resolved in connection with the proposal for a special article on actus reus, a
proposal which was later dropped.
The only outstanding issue regarding the mental element during the Rome
Conference was whether a definition of recklessness (or some similar concept)
was needed. There was agreement that, in principle, all the crimes within the
jurisdiction of the Court would require intent and knowledge unless
specifically provided otherwise. After it was pointed out that the word
recklessness did not appeared anywhere in the definitions of crimes, it was a
agreed that a definition of that concept was unnecessary. The article was
adopted.
It should be added, however, that the concept of recklessness, thought not the
term itself, exists in the Rome Statute, i.e., in Article 28, which was negotiated
after Article 30".
[°]Article 30 of the Rome Statute deals with the question of mental element,
which provides, inter alia, that unless otherwise provided, a person shall be
criminally responsible and liable for punishment for a crime within the
jurisdiction of the Court only if the material elements are committed with
intent and knowledge. Intent and knowledge are then defined in that article.
& Recklessness:( (imprudencia temeraria)]. Cf. inconsiderate driving, careless
driving, dangerous driving, drunk driving. Diccionario de términos jurídicos,
inglés-español. Enrique Alcaraz Varó y Brian Hughes. Editorial Ariel.2002.
26/09/2007
370
Y ello es así, toda vez que el Alcalde de Armenia y el aquí procesado Andrade
Rosero, en su condición de Gerente de la Cooperativa de Municipios del Sur,
acordaron y, finalmente, suscribieron el cuestionado contrato, conductas que
llevan necesariamente inferir que ambos tenían el control y el domino del
negocio jurídico, resultando, entonces, un absurdo pretender que el
comportamiento de este último se le catalogue, como lo demanda el
casacionista, como una de simple ayuda y, de esa manera, arribar a la
deseada complicidad.
Por el contrario, las condiciones que rodearon la suscripción del contrato lleva
a concluir que ambos procesados incumplieron, de manera dolosa, las normas
que rigen la contratación estatal, situación que necesariamente los ubica
como coautores de la ilicitud por la que fueron acusados y condenados.
(....)
Para la Corte es claro que en este evento no se puede predicar que hay
incongruencia entre la resolución de acusación y la sentencia, en la medida
en que al procesado Alejandro Moisés Andrade Rosero se le condenó por el
grado de participación de coautor, de acuerdo a como se le había acusado,
siendo ese el motivo por el cual se le determinó la sanción impuesta.
28/11/2007
371
VIOLACION INDIRECTA DE LA LEY SUSTANCIAL-Falso juicio de identidad:
Técnica en casación
Si en este caso acordaron hurtar las oficinas del inmueble aludido y para ese
efecto se aprovisionaron de armas de fuego, se deriva que su intención es
remover cualquier obstáculo que se les presente en el camino para el logro
del objetivo principal. Y si utilizaron las armas, deben responder por las
consecuencias de esa actividad, que en este caso se concreta en el homicidio
del vigilante, en tanto lo aceptaron como probable.
372
atentado contra el patrimonio económico, máxime cuando los juzgadores
descartaron de plano esa posibilidad, luego de analizar la prueba en conjunto:
Es decir, aquí se presenta una labor mancomunada donde cada uno realizaba
el plan acordado: conversaron sobre el delito contra el patrimonio económico
fuera de la edificación, ingresaron a ella juntos y portando revólveres, se
escondieron en un baño en espera de que salieran los parroquianos y dueños
de oficina, empleados y estuviese distraído el centinela, estaban en el mismo
piso esculcando oficinas, (...) se guarda un dinero que se encuentra en una de
ellas, se descerraja objetos letales desde ese despacho siendo que se ocultó
uno de los delincuentes, y el revólver que dio al traste con la vida del centinela
de esa edificación atracada con armas de fuego no pudo ser hallada y sale (....)
con revólver en forma amenazante, pero no fue él únicamente quien disparaba
desde ese bufete como lo dejó diáfanamente establecido la prueba documental
y testimonial legalmente recopilada en estas fojas, (....) se queda escondido y
del arma homicida, valga decirlo, se desconocía su existencia hasta la
peritación que explicó que la hallada a (....) no era la que había detonado la
bala asesina, no presentan los sindicados (.....) y (.....), auxilio a los heridos ni
permite Ruiz que lo haga el sereno (....) pues despectivamente coge el revólver
del sacrificado y se marcha de ese lugar llevando por la fuerza e intimidando a
Ovidio; Orjuela se encubre y hace caso omiso de los lastimados, los ignora,
trata de salir de allí como ingresó pero desarmado y solo alrededor de 8 o 9
horas después, y pretende hacerse pasar como un usuario cualquiera
desconocedor de los graves hechos allí acaecidos, pero también ignorando ya
que los agentes y el personal de vigilancia de dicha empresa agraviada, tenían
información de que un tercer pillo estaba allí refugiado pues que (....) lo
comunicó a los uniformados cuando estaba con ellos en el carro oficial
retenido y por ello, luego de no toparlo cuando fue buscado, se custodió sobre
quien entraba y salía de allí. Los encausados conjuntamente asaltaban la
edificación de marras, tenían el dominio del hecho y armas de fuego con qué
cubrirse dado el caso .
373
05/12/2007
" Para que exista coautoría se requieren tres elementos: acuerdo común,
división de funciones y trascendencia del aporte durante la ejecución del
ilícito.
374
Acuerdo significa conformidad, asentimiento, reflexión y madurez de
determinación.
Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
375
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito.(1)
"De otro lado, como también lo ha dicho la Corte, cuando varias personas
deciden cometer un delito de hurto y para su realización utilizan armas de
fuego, están creando un riesgo jurídicamente desaprobado que a todos les
corresponde asumir en la medida de su intervención, pues la decisión de
incorporar a la tarea delictiva las armas se atribuye a todos y por tanto
también será de todos la responsabilidad por los delitos que se cometan con el
empleo de esa armas en desarrollo de la conducta punible convenida.
-----------------------------------------------------------
(1)Sentencia de fecha agosto 21 de 2003, rad. 19213.
(2)
Sentencia Casación
FECHA : 05/12/2007
DECISION : No casa la sentencia impugnada
376
DELITOS : Homicidio agravado, Fabricación de
Municiones, Fabric. y tráf. de armas fuego de def.persona
PROCESO : 26753
PUBLICADA : Si
03/01/2008
"[…]
377
alguna circunstancia no posean el documento de identidad en el instante que
su declaración deba tomarse"(3) .
"[…]
Y en lo que al testimonio del (...) respecta, es cierto que, en la copia del acta de
fecha 24 de febrero de 2001 , aparece esta persona como indocumentada y no
figura que el funcionario instructor le haya tomado una huella dactilar.
378
declarado, sino que además en dicha diligencia fueron consignados otros
datos de la testigo que permiten diferenciarla de sus semejantes (como su
nombre, edad, dirección, teléfono, estado civil, profesión y relación con las
partes(7), e incluso, como también lo destacó la Procuradora Delegada, no hay
motivo razonable alguno para suponer que dicha persona fue suplantada o
que afirmó ser quien no era.
Antes que todo, es menester aclarar que la Sala no encontró dentro del
expediente, más allá de la afirmación del defensor en este sentido, pieza
procesal alguna de la que se pueda extraer que (...) aceptó cargos como
mecanismo de terminación anticipada del proceso, toda vez que, de acuerdo
con lo que se analizó en precedencia (supra 2), obra copia de la actuación que
se adelantó en contra de esta persona hasta el momento en que se le calificó
el mérito del sumario como presunto coautor responsable de los delitos de
homicidio agravado y fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o
municiones(9).
Por otra parte, si lo que quería plantear el profesional del derecho en este
sentido era que a raíz de la aludida y no demostrada aceptación de cargos se
configuraba una especie de prohibición de valoración probatoria respecto de la
versión de los hechos que (...) brindó en indagatoria (en la que adujo haber
obrado en legítima defensa y ser el único que disparó en contra de la vivienda
de (...)(9), no hay que olvidar que, como tantas veces lo ha reiterado la
Sala(10) , dicha diligencia no sólo es medio de defensa, sino también medio de
prueba, y, por lo tanto, del contenido de la misma es posible colegir
circunstancias que afecten la situación jurídica tanto del interrogado como de
otras personas involucradas en los hechos, sin perjuicio del trámite procesal
que se surta con posterioridad a la vinculación.
379
TESIS CONTINUA: VER PROVIDENCIA COMPLETA
________________________________
(1) Radicación 4865.
(2) Radicación 10690.
(3) En el mismo sentido, sentencias de 18 de julio de 2002, radicación 11766,
y 19 de junio de 2003, radicación 18483, entre otras. Radicación 20634.
(4) Folios 75-76 del cuaderno principal.
(5) Folio 75 ibídem.
(6) Folio 10 ibídem.
(7) Ibídem.
(8) Folio 240 ibídem.
(9) Folios 61-63 ibídem.
(10) Folios 21-22 ibídem.
(11) Cf., entre otras, sentencia de 13 de febrero de 2008, radicación 21844.
12/03/2008
380
el pliego de cargos, siempre y cuando no agrave la situación del procesado con
una pena mayor(1).
(…) Si el fiscal considera que se debe proferir sentencia condenatoria pero por
un comportamiento menos grave que el deducido en el calificatorio, no es
menester seguir estrictamente el trámite establecido en la ley para la
variación. Simplemente, de manera expresa e indudable, lo hace saber al juez
durante su intervención.
(…) El fiscal puede hacer la mutación con base en su propia iniciativa o por
insinuación del juez, pues continúa con su función acusadora en el juicio. La
opinión del juez, admitida o no por la fiscalía, tiene que ser objeto de debate
para efectos de la congruencia.
381
desventajoso que le puede pasar es que sea condenado por los cargos que le
fueron definitivamente acreditados en el debate público.
Dentro del esquema procesal implementado por la Ley 600 del 2000, la
resolución de acusación hace parte del acto jurídico complejo de la acusación,
caracterización que, entre otras cosas, implica su mutabilidad dentro de la
fase de juzgamiento. Tal naturaleza es necesaria dentro de un sistema
procesal diseñado como acusatorio y que intenta priorizar la fase oral de
juzgamiento otorgando al Juez plenos poderes de control sobre la acusación
en aras de obtener la realización del principio constitucional de prevalencia
del derecho sustancial como única manera de que un Estado definido como
social de derecho garantice la convivencia pacífica y la vigencia de un orden
justo.
382
dictarse la sentencia se respete por el juez el núcleo central de la imputación
fáctica.
________________________________________________
(1) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal, Auto junio 30
de 2004, rad. 20.965.
383
(2) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal, Auto del 21 de
enero del 2003, radicado 20.161.
(3) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal, Sentencia del
20 de marzo del 2003, radicado 19.960.
(4) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal, Sentencia del 1°
de enero de 2007, rad. 23.540.
(5) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal, autos de 14 de
febrero y 12 de marzo de 2002, radicados 18.457 y 19.013384
08/04/2008
384
distorsión del elemento probatorio, sino de las inferencias resultantes de su
estricto contenido. En consecuencia, se encuentra en desacuerdo con la
valoración judicial que estimó equivocada.
... Una cosa es distorsionar o tergiversar la prueba para ponerle a decir lo que
no dice, y otra, muy distinta, es la inferencia que de ella hace el juez.
" Para la época en que sucedieron los hechos, regía el Código Penal de 1980,
que preveía en su artículo 23 la autoría y, desde luego, la coautoría, con estas
palabras:
385
Sobre el punto, y en relación con ese código, la Corte ha tenido muchas
oportunidades de pronunciarse. Así, por ejemplo, ha dicho que:
Si todas las personas toman parte en la ejecución del hecho típico, responden
a título de coautoras (16 de septiembre de 1992, M. P. Juan Manuel Torres
Fresneda), etc.
Y estas palabras, así como otras de la Sala en torno al tema, que no han sido
modificadas, fueron retomadas y resumidas de la siguiente forma por la Corte,
en casación del 12 de septiembre del 2002, dentro del proceso radicado con el
número 17.403:
386
criminal, de lo cual surgía si se trataba de un colaborador o de un autor,
condición última que, a la vez, podía ser cargada no sólo al que cumpliera el
acto material, sino a quien por tener tanta responsabilidad como éste,
resultaba ser un coautor".
387
la definición de autor. Y la descripción expresa que de coautores introdujo el
inciso segundo del artículo 29 del actual Estatuto represor (Ley 599 de 2000)
no permite la interpretación que intenta la defensa, pues si la acepción de
coejecutores parte y se apoya en una pluralidad de autores, el concepto ya
quedaba contenido en la primera disposición".
"Dijo la Sala el 11 de julio de 2002, dentro del proceso radicado con el número
11.862:"
388
Empero, la decisión condenatoria -se reitera- no era consultable, por expreso
mandato de la ley. De donde se concluye que el superior debía limitarse a
analizar los aspectos objeto de impugnación y a los inescindiblemente
vinculados a ella, pero en ningún caso podía agravar la sanción impuesta,
salvo que también hubiesen recurrido el fiscal, el Ministerio Público o la parte
civil, con interés, lo que no ocurrió.
389
apelación o de casación, no puede agravar la pena impuesta cuando el
condenado sea apelante único, premisas que se nutren de los salvamentos de
voto a la decisión proferida por la Corte en el proceso radicado 14.464 y la
jurisprudencia contendida en los fallos proferidos en los procesos con
radicación 22.323 y 22.150.
--------------------------------------------------------------------------
(1). Providencia del 12 de septiembre de 2007 (radicado 26.967).
(2). De manera reciente, se puede consultar la providencia del 11 de agosto de
2007 (radicado 15.904).
390
DR.SIGIFREDO ESPINOSA PÉREZ -
Salvamento de Voto
DR.YESID RAMIREZ BASTIDAS - Salvamento
de Voto
DRA.MARIA DEL ROSARIO GONZALEZ DE
LEMOS - Salvamento de Voto
09/04/2008
391
"En ese sentido, para que ofrezca fiabilidad una premisa elaborada a partir de
un dato o regla de la experiencia ha de ser expuesta, a modo de operador
lógico, así: siempre o casi siempre que se da A, entonces sucede B"(1).
392
"Acuerdo significa conformidad, asentimiento, reflexión y madurez de
determinación.
"Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
"Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
"Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
"Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
393
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
"Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación."(4).
En efecto, este último supone, como lo ha sostenido la Sala, que las distintas
conductas estructuran un sólo hecho punible, mientras que el concurso de
delitos implica la configuración de varios hechos delictivos, jurídicamente
autónomos, pero conexos ideológica, consecuencial u ocasionalmente.
394
es, agotar el delito, y por ello el legislador descartó como autor del ilícito de
receptación a quien haya tomado parte en la conducta punible inicial (6).
"Así las cosas, el delito complejo sólo existirá en la medida en que un hecho
delictivo forme parte de otra conducta típica, bien como elemento integrante
de éste o como circunstancia de agravación punitiva (8) . Los hechos
apreciados aisladamente, si ello fuere posible, constituiría por sí mismos
delitos. En aquella clase de delito unitario, el complejo, el legislador fusiona o
reúne en una tipicidad penal o prevé como agravante de la misma hechos y
situaciones objetivas de variada índole, de modo que se excluye la pluralidad
de infracciones, vale decir, el concurso de delitos; el hecho que aislado
configuraría una infracción se convierte por voluntad de la ley en elemento de
una figura delictiva especial o en circunstancia de agravación de la misma,
perdiendo el carácter de ente jurídico autónomo, pues de no ser así se violaría
el principio non bis in ídem (9).
"Es conveniente advertir que no se deben confundir el delito complejo con los
delitos conexos. El primero supone que las distintas conductas estructuran
un sólo hecho punible y los segundos la configuración de varios,
jurídicamente autónomos, pero conexos ideológica, consecuencial u
ocasionalmente (10). Además, la noción de delito complejo supone algo más
que un delito pluriofensivo o de ofensa múltiple. El primero implica que la
estructura de un tipo reúne en una unidad dos o más tipos. El segundo no
necesariamente exige un delito complejo, sino sólo una pluralidad de bienes
jurídicos afectados (11)."
395
caso lo hace el demandante al confrontar los relatos de los dos testigos de
marras, toda vez que este vicio o desaguisado lógico argumental consiste en
que un individuo, respecto de determinado asunto u objeto, formula
proposiciones que a la vez niegan y afirman una misma condición o
característica del asunto u objeto estudiado.
15/05/2008
396
DEFENSA TECNICA-Silencio como estrategia defensiva/ PRUEBA-
Conducencia y pertinencia/ SENTENCIA ANTICIPADA-Solicitud concreta/
AUDIENCIA ESPECIAL-Discrecionalidad del Fiscal/ SENTENCIA
ANTICIPADA-Voluntad del procesado/ CONFESION-Captura en flagrancia: No
permite rebajas de pena/ CIRCUNSTANCIAS DE AGRAVACION PUNITIVA-
Haber cometido el hecho para ejecutar otro/ COAUTORIA IMPROPIA-
Configuración/ JUEZ DE EJECUCION DE PENAS-Competencia para resolver
sobre el principio de favorabilidad
(...)
Por el contrario, la Sala encuentra tras examinar el expediente que, tal como
lo precisó la Procuraduría General de la Nación en su concepto, al defensor
que asistió a (...) a partir de la diligencia de indagatoria le resultaba muy
difícil plantear una estrategia defensiva distinta a la propia inactividad
probatoria y a la verificación del respeto de los derechos fundamentales del
procesado durante el devenir de la actuación procesal.
En efecto, la Fiscal que dio inicio a la actuación realizó una inspección judicial
al sitio en donde se encontró el cadáver de (...) y allí practicó las declaraciones
de los menores F. P. G. y M. G. S (2). , testigos que presenciaron los hechos.
El último de ellos señaló que vio cuando los agentes de policía capturaron a la
persona que se quedó dentro del bus de placas SCD-660, quien era el que
manejaba el vehículo ("los agentes detuvieron fue al conductor, no es
más"(3) ). Y el primero afirmó que observó a la víctima mientras era agredida
en el autobús y el vehículo estaba siendo conducido ("vi cuando le estaban
pegando al señor que está muerto ahí en el bus, el bus bajó despacio, frenó en
la curvita y paró, venían cuatro personas en el bus y cinco con el muerto, uno
venía al rincón, uno manejando y dos que le iban pegando al señor, el señor
gritaba"(3) ).
Ese mismo día, declaró (...), yerno de la víctima, quien confirmó que el día de
los hechos su pariente salió a cobrar un dinero que le adeudaba una persona
397
que al parecer se apellidaba (...) ("se iba a recoger una plata que le iban a
pagar […] creo que el señor que le debía la plata es de apellido (...)" ).
Igualmente, (...), sostuvo que el motivo de la cita entre (...) y su señor padre
consistía en el pago de una deuda que aquél le debía a éste, de suerte que el
día de su muerte se llevó consigo todos los documentos que acreditaban la
existencia de dicha obligación:
"Tengo idea que fue por la plata que se le debía a mi padre de arreglo de un
bus, del cual se le debía todo, tenía como soporte de esa deuda letras,
cheques y un contrato, el día que salió llevaba todo, sé que él tenía una cita
con el señor (..), que no sé concretamente el nombre […] Él tenía los recibos,
letras y cheques y demás documentos en la agenda que él llevaba, él tiene en
la casa letras y cheques de otra gente que él le prestaba, pero del señor ZIPA
no hay anotado nada, él llevaba todo eso ese día" .
Y, por último, (...), hermano de (...), sostuvo que la deuda que tenía (...) con
éste ascendía aproximadamente a los "cinco millones de pesos"(6) .
Con estos medios de prueba (que fueron utilizados por el organismo instructor
para proferir la medida de aseguramiento (7)), resultaba muy complicado,
desde el punto de vista de lo razonable y del respeto por el principio de
lealtad, exigirle al defensor de (...) que asumiera una actitud probatoria
distinta a la pasiva, o que impugnara la mencionada resolución con el fin de
cuestionar la configuración de la circunstancia de agravación prevista en el
numeral 2 del artículo 324 del anterior Código Penal, o que interrogara a unos
testigos que habían sido enfáticos y consistentes en sus deposiciones, o que
en general adoptara una estrategia diferente a la de velar para que no se
ignoraran los derechos fundamentales de su protegido.
398
Procedimiento Penal vigente, decreto 2700 de 1991, pues como bien lo
sostuvo la Procuradora Delegada, la expresión utilizada por el procesado
podía entenderse como una simple manifestación de la voluntad de confesar
y, en todo caso, la funcionaria instructora le preguntó acerca de la posibilidad
de determinar a los otros partícipes en la muerte de (...), sin que aportara dato
alguno que fuese de interés para el éxito de la colaboración. Así mismo, el
demandante tuvo todas las facultades para haber asesorado a su protegido, y
haber llegado a un acuerdo en ese sentido, desde el momento en que asumió
durante la etapa de instrucción la defensa de sus intereses.
399
"PREGUNTADO: ¿EL ACUSADO (...) SÍ ACEPTA LA RESPONSABILIDAD
PENAL QUE SE LE DERIVA EN SU CONTRA POR LOS CARGOS
FORMULADOS POR LA FISCALÍA 17 Y QUE SE LE ACABAN DE LEER?
CONTESTÓ: NO ACEPTO LOS CARGOS(9)" (negrillas en el original).
"[…] el señor gritaba duro porque nosotros lo escuchamos […], el bus duró allí
como tres minutos y yo subí a la carretera y llamé a la policía y la policía paró
y me dijo "qué pasó, mijo" y yo le dije que allí están matando un señor, ellos
bajaron en una patrulla de la policía, y la patrulla encerró al bus y fueron a
mirar qué estaba pasando y hasta ahí fue"(10) .
En este orden de ideas, para la Sala no hay duda alguna de que hubo una
situación de flagrancia, según lo dispuesto en el numeral 3 del artículo 346 de
la ley 600 de 2000 (anterior artículo 370 del decreto 2700 de 1991), que
señala que dicha figura se configura cuando la persona es "sorprendida y
capturada con objetos, instrumentos o huellas de las cuales aparezca
fundadamente que momentos antes ha cometido una conducta punible o
participado en ella", como ocurrió en este caso.
7. Tampoco viene al caso tener en cuenta las circunstancias bajo las cuales el
procesado admitió su participación en la muerte de (...), como en determinado
momento lo sugirió el demandante, pues, en primer lugar, el móvil señalado
por (...), en el sentido de que organizó el plan para matar a la víctima porque
ésta se comportaba en forma muy grosera con él, fue desvirtuado por las
declaraciones de (...), con las cuales los operadores jurídicos llegaron a la
400
certeza de que la muerte obedeció al propósito de cometer el delito de
destrucción, supresión y ocultamiento de documento privado, respecto de los
papeles que acreditaban la deuda que por la suma de cinco millones de pesos
había contraído el sujeto activo con el sujeto pasivo de la conducta, tal se
reseñó en precedencia (supra 2.2).
_______________________________________
(1)Sentencia de 27 de octubre de 2004, radicación 22305.
(2) La Sala se abstiene de dar el nombre completo de estas personas, en
atención a lo dispuesto en el numeral 8 del artículo 47 de la ley 1098 de 2006,
Código de la Infancia y la Adolescencia.
(3) Folio 13 del cuaderno I de la actuación principal.
(4) Folio 9 ibídem.
(5) Folio 24 ibídem.
(6) Folio 47 ibídem.
(7) Folio 37 ibídem.
(8) Folios 59 y 60 ibídem.
(9) Folio 57 ibídem.
(10) Folios 65-74 ibídem.
(11) Sentencia de 20 de marzo de 2003, radicación 17130.
(12)Cf. folios 33 del cuaderno III de la actuación principal y 31 del cuaderno
del Tribunal.
401
SENTENCIA-De primera y segunda instancia constituyen un todo jurídico/
INDICIO-Mentira/ COAUTORIA IMPROPIA-Concepto/ PRINCIPIO DE
PROGRESIVIDAD/ PROCESO PENAL-Principio de progresividad
402
segundo-, sin hacer alusión alguna al que supuestamente suscribieron en
hoja sin formato y manuscrito, en el momento de celebración del negocio.
(...)
403
conforme a los elementos probatorios indicativos del actuar típico de los
procesados, consolidado por la intervención colectiva de todos ellos, en
desarrollo del cometido común de traficar las sustancias controladas.
_____________________________________
(1) Ver auto del 26 de abril de 2006. Radicado 25.222.
404
en discusión dentro del singular proceso de conocimiento penal objeto de
examen.
405
un hecho o su negación, con el ítem de que en punto de la actividad
probatoria procesal, su apreciación no puede partir de hipótesis, sino de
hechos probados, los que contradictoriamente valorados, permitan o que
todos los medios obtenidos para su demostración conduzcan a una sola
verdad o que, por el contrario, su conjunto haga que, de la misma forma, con
base en la lógica, la ciencia y la experiencia común, unos de ellos sucumban
frente al objeto por demostrar, o que quedando los dos extremos en igual
grado de credibilidad, imposibiliten llegar a la certeza sobre la existencia de
una determinada conducta, de un hecho o de un preciso fenómeno, pudiendo,
entonces, llegarse a uno de los dos extremos viables, o la certeza o la duda
de su inexistencia.
En todo caso, sea que el sujeto cognoscente llegue a uno y otro grado de
credibilidad, lo que no puede ser jurídicamente admisible es que, a priori, se
pueda privilegiar el valor de una determinada prueba, dejando de lado la
imprescindible confrontación que se impone concretar con la integridad de su
conjunto, ya que cada una de ellas puede contener una verdad, o más
precisamente, dar origen a un criterio de verdad, que como tal debe estar
predispuesto a ser confrontado con los demás, para que en su universo,
integrados todos, sea dable deslindar los que puedan calificarse de lógicos, no
contrarios a la ciencia ni a la experiencia, y descartar aquellos que se escapan
a estos cánones exigidos por la ley para efectos de la apreciación probatoria, y
así, de ellos, sí inferir la conclusión que irá a producir una determinada
relevancia jurídica, tanto en lo sustantivo como en lo procesal, por haberse
llegado a la certeza sobre el objeto que se pretende demostrar, o por el
contrario, a la duda sobre el mismo (1).
De otra parte, resulta inane a los fines de plantear una inexistencia del
punible en mención por distanciamiento del dominio de la conducta punible
plantear, como lo hiciera la defensa técnica, que el Fiscal sí firmó el acta de
inspección de cadáver "pero que ignora quién la llenó", habiendo de esa forma
ceñido su conducta a "las funciones que le otorgaba la misma ley" con un
comportamiento "ajustado a derecho" en el que a su juicio no se vislumbra el
haber callado en todo o en parte la verdad.
406
en esa acta y esas expresiones, antes que excluirlo del punible en mención,
por el contrario, lo hace mas incurso pues los funcionarios públicos, y para el
caso un fiscal, responden no solo por su firma de manera exclusiva sino de los
contenidos que con su rúbrica certifican, máxime cuando con fundamento en
dicha acta se iba a adelantar un proceso penal, razones por las que se deberá
confirmar la sentencia en lo que dice relación con este delito.
407
Como su propio nombre lo indica, dicho delito es intra-procesal,
entendiéndose como una actuación judicial o administrativa en la que haya
discusión de derechos de alguna persona determinada, de donde se infiere
que su autoría está radicada de manera exclusiva en los sujetos procesales
que intervienen como partes al interior de un trámite de ese carácter.
Con la conducta así revelada podría llegar a decirse que con dicho oficio de
manera objetiva se consumó una inducción en error, pero el resultado de
inscripción en el libro de defunciones de una persona, como acto en sí, no
tiene la entidad, la naturaleza ni la fuerza equiparada de sentencia, resolución
ni menos de acto administrativo.
408
empresa delictiva", consideraciones que condujeron a una imputación de
coautoría en el delito de estafa.
409
presupuesto material de los actos siguientes desplegados por terceros,
habiéndose conformado un conjunto a través del cual se indujo en error a
Seguros Bolívar, empresa que mediante la orden de pago N° 1510004799, de
junio 26 de 2004, canceló por intermedio de abogado a la señora (...) la suma
de $40.000.000.oo.
10/06/2008
410
2- De conformidad con la previsión contenida en el artículo 85 del mismo
ordenamiento, el cambio de radicación procede cuando se presenten
circunstancias que puedan afectar: (i) el orden público, (ii) la imparcialidad o
independencia de la administración de justicia, (iii) las garantías procesales,
(iv) la publicidad del juzgamiento y (v) la seguridad o integridad personal de
los sujetos procesales o de los funcionarios judiciales.
Sentencia Casación
FECHA : 10/06/2008
DECISION : Casa parcialmente y de oficio en el sentido de
imponer pena accesoria
DELITOS : Porte ilegal de armas, Homicidio agravado,
Tentativa de hurto calificado y agravado
PROCESO : 23033
PUBLICADA : Si
411
18/06/2008
Así, la coartada exhibida por el procesado relacionada con que observó a dos
personas armadas al interior del colectivo y desarmó a una de ellas
produciéndose los disparos, se derruyó ante el hecho de que si pretendía
actuar conforme con un deber ciudadano de evitar un delito, dada su
condición de ex miembro de la Policía -ya que laboró en esa institución
412
durante once años-, no resultaba acorde con tal actitud que huyera del lugar,
tratara de evitar su captura por parte de los miembros de la autoridad, les
ofreciera incluso a éstos dinero y el arma que portaba a cambio de que lo
dejaran ir y se escabullera nuevamente al despojarse de la chaqueta negra
que llevaba, prenda reportada por la ciudadanía como característica de uno
de los agresores.
413
requiere de un pacto detallado, pues se deduce de los actos desencadenantes
del ilícito que demuestran la decisión conjunta de su realización, además, en
ese designio común ninguno de los participantes realiza íntegramente el tipo
penal, ya que cada uno de ellos hace su aporte, sólo que el delito se les
imputa de manera integral.
414
la no individualización de los otros dos sujetos, pues (...) tuvo el dominio del
hecho en una labor objetiva indispensable para la consecución del resultado
muerte y afrenta contra la vida de los hermanos (...).
415
intensificación punitiva, ni se puede establecer del recuento fáctico que el
propósito del ente acusador haya sido atribuirla al incriminado.
Sentencia Casación
FECHA : 18/06/2008
DECISION : No casa, casa parcial y oficiosamente y
condena
DELITOS : Hurto agravado, Tentativa de homicidio
agravado
PROCESO : 24755
PUBLICADA : No
02/07/2008
416
1. Teniendo en cuenta que la demanda presentada por el representante de la
Fiscalía General de la Nación fue declarada formalmente ajustada a derecho,
la Sala estima que a esta altura del trámite procesal el recurrente adquirió el
derecho a que se le analicen de fondo los problemas jurídicos traídos a
colación en la sustentación correspondiente, en armonía con los fines de la
casación de garantizar la efectividad del derecho material, respetar las
garantías mínimas de las personas que intervienen en la actuación, buscar la
reparación de los agravios inferidos a los sujetos procesales y unificar la
jurisprudencia, tal como lo establece el artículo 206 de la ley 600 de 2000.
417
Así mismo, la Corte ha señalado que las conductas de los directivos dentro de
este tipo de organizaciones (que son de estructura jerárquica y de corte
militar) no "se limitan a trazar líneas de pensamiento político" (2), sino que
"tales directrices también son de acción delictiva" (3) y, por lo tanto,
418
credibilidad de un testigo no se desvirtúa por ese solo hecho, sino que
depende del análisis de la prueba en conjunto, sujeta en todo momento al
sistema de persuasión racional, en aras de establecer cuándo el declarante
habló con la verdad y cuándo no (5).
En este orden de ideas, la versión de los hechos rendida por Roberto Melo
Álvarez el 2 de abril de 1993 no sólo se muestra verosímil, explícita y
detallada (tal como se puede apreciar de la transcripción que de la misma
aparece supra 2.2), sino que además varias de las circunstancias que allí
aparecen están respaldadas en otros medios probatorios, como la declaración
de M. J. Y. (de la cual se analizará infra 2.3.3.).
Tampoco explicó las razones por las que, en la primera versión, describió al
autor de la nota manuscrita de una forma que coincide con los rasgos
morfológicos del aquí procesado ("el tipo era alto, delgado, cabello pelado […],
con bigote" (6); "se trata de un hombre de aproximadamente 1"82 de estatura
[…], cabello de color negro con entradas pronunciadas […], al momento de la
diligencia presenta bigote" (7), mientras que, en la segunda, no sólo se refirió a
características completamente distintas ("[e]ra regularcito, más bien bajo,
negro, no moreno […], era koven [sic] de unos veinte años, hablaba
comúnmente como la gente de acá de Samaniego" (8), sino que incluso
destacó tales diferencias para seguir sugiriendo que se había presentado una
suplantación ("para mí no era porque a veces se hacen pasar por él […] yo
preguntando decían que don Joaco era alto y acá era bajito" (9).
419
primera instancia y que fuera desestimada por el Tribunal, en el sentido de
que, durante la primera declaración, fue cuando el testigo de cargo habló con
la verdad.
Tal postura no puede ser compartida por la Sala, pues, por un lado, si bien es
cierto que el tiempo es un factor que podría incidir en la apreciación racional
de un testimonio, en el presente caso, ni el que haya transcurrido más de
nueve años entre la fecha en que se presentaron los hechos y la época en que
la deponente rindió su versión, ni el que ésta se refiriera a sucesos ocurridos
cuando tan solo tenía ocho años de edad, constituyen por sí solos motivos
válidos para rechazar el contenido del mismo, sobre todo cuando M. J. Y. se
refirió a circunstancias tan traumáticas como violentas que bien pudieron
haber quedado consignadas en la memoria y que, como en su momento lo
consideró el a quo, fueron relatadas de manera clara, precisa y debidamente
detallada.
420
guerrillero, de un certificado médico que corroboraría la existencia del delito
cometido por el "ajusticiado".
421
Lo que el demandante extraña, por lo tanto, es una valoración jurídica acerca
de la circunstancia de agravación prevista en el numeral 8 del artículo 104 del
Código Penal, aspecto que a todas luces no debió haber sido abordado por el
Tribunal en razón de la naturaleza del fallo de carácter absolutorio que emitió.
10. Por último, no sobra precisar que la acción desplegada por el frente 29 de
las FARC, de la que (...) era su comandante, sí constituye un delito de
homicidio agravado de conformidad con las agravantes imputadas en la
providencia acusatoria, ya que el cadáver de Laureano Ipuján Anama no sólo
apareció amarrado tal como lo indicó el testigo Roberto Melo Álvarez ("en los
brazos estaban las señales o ronchas de la piola que lo habían amarrado, en
el pescuezo [sic] también la roncha de la piola […] los cordones que entrego
son los que había tenido manionado [sic] las manos" (12)), y por lo tanto fue
colocado en circunstancias de indefensión e inferioridad, sino que además se
trató de un acto de justicia privada, realizado por un grupo armado al margen
de la ley en franca contravía de las normas constitucionales que consagran el
debido proceso y prohíben la pena de muerte (al igual que cualquier trato
cruel, inhumano o degradante), y que llevan necesariamente tanto a una
grave perturbación del orden público y de la seguridad pública como, en
consecuencia, a la efectiva provocación o mantenimiento de un estado de
zozobra o terror en la población, o en un sector de ella (13).
_________________________________________________
(1)Sentencia de 7 de marzo de 2007, radicación 23825.
(2)Ibídem.
(3)Ibídem.
(4)Ibídem.
(5)Ibídem.
(6)Cf., entre otras, sentencia de 29 de septiembre de 2004, radicación 21939.
(7)Folio 6 del cuaderno I de la actuación principal.
(8)Folio 99 ibídem.
(9)Folio 66 ibídem.
(10)Folio 67 ibídem.
(11)Folio 323 del cuaderno del Tribunal.
(12)Folio 7 del cuaderno I de la actuación principal.
(13)Cf., en el mismo sentido, sentencia de 14 de noviembre de 2007,
radicación 28017.
Sentencia Casación
FECHA : 02/07/2008
DECISION : Si casa, confirma la sentencia condenatoria de
primera instancia
DELITOS : Homicidio agravado
422
PROCESO : 23438
PUBLICADA : Si
15/07/2008
1.Sin embargo, lo anterior, que fue analizado con minuciosidad por parte del
Procurador Delegado, pierde relevancia a esta altura de la actuación, ya que la
Corte declaró que todas las demandas eran desde el punto de vista formal
ajustadas a la ley y, por lo tanto, los procesados adquirieron el derecho a que
se les respondiera de fondo los problemas jurídicos traídos a colación en los
escritos correspondientes, en armonía con los fines de la casación de
garantizar la efectividad del derecho material, respetar las garantías mínimas
de las personas que intervienen en la actuación, buscar la reparación de los
agravios inferidos a los sujetos procesales y unificar la jurisprudencia, tal
como lo establece el artículo 206 de la ley 600 de 2000.
423
la individualización o identificación de los autores o partícipes en una
conducta punible, entre otros.
4.A su vez, el artículo 323 del ordenamiento adjetivo establece que, durante la
investigación preliminar, las diligencias serán reservadas, sin perjuicio de que
el defensor del imputado que haya rendido versión libre tenga derecho a
conocerlas y a que se le expidan copias de las mismas.
6.El artículo 325 de la ley 600 de 2000 estipula que quien tenga conocimiento
que en su contra se ventilan imputaciones en una indagación preliminar (que,
por lo demás, no podrá exceder el término máximo de seis meses) tiene
derecho a solicitar y a obtener que se le escuche de inmediato en versión libre,
así como a designar un defensor que lo asista tanto en ésta como en las
demás diligencias que se adelanten.
424
versión libre depende de la decisión razonable del Fiscal, de acuerdo con las
circunstancias particulares de cada caso en concreto. En palabras de la Corte
Constitucional:
Esta postura de ninguna manera riñe con la interpretación que del artículo
324 de la ley 600 de 2000 ha establecido la Sala en relación con la facultad
discrecional del Fiscal de escuchar en versión libre al imputado conocido:
425
7.Teniendo en cuenta tanto la situación procesal referida en precedencia como
el marco teórico expuesto supra 2.1, la Sala concluye que, en el presente caso,
las autoridades jamás tuvieron el deber de informarles a los procesados
acerca de la existencia de la indagación preliminar que se adelantaba en su
contra, ni mucho menos la razonable necesidad de llamarlos a rendir versión
libre durante el transcurso de la misma.
426
preliminar y para vincularlos a la actuación procesal, momento a partir del
cual conocieron tanto la imputación fáctica como la imputación jurídica
formuladas en su contra , así como pudieron ejercer con plenitud los derechos
de defensa y contradicción.
8.Por último, es de anotar que la única anomalía que observa la Sala dentro
del trámite de la investigación previa consiste en que la misma se excedió en
el término de seis meses contemplado por el artículo 325 de la ley 600 de
2000.
427
9.En lo que al principio de investigación integral se refiere, la Sala ha insistido
en que, para predicar de manera acertada su vulneración, las pruebas
pretermitidas, además de ser pertinentes, conducentes y útiles para los fines
del proceso, tienen que trascender de forma significativa al ser confrontadas
con los elementos de convicción que sirvieron de fundamento a la decisión
objeto de ataque.
428
Tal comparación es inaceptable, pues como bien ha quedado establecido en
los más recientes estudios semióticos acerca del tema una cosa es la
traducción interlingüística, en la cual algunos signos verbales son trasladados
a aquellos pertenecientes a cualquier otro idioma, y otra cosa muy distinta es
la interpretación intralingüística, en la que dentro de un solo lenguaje el
mismo contenido es expresado mediante el uso de sustancias diferentes .
Esto último fue lo que ocurrió con la valoración probatoria del Tribunal acerca
del contenido de las grabaciones telefónicas interceptadas. Por ejemplo, en los
diálogos en los que los interlocutores eran V, el ad quem interpretó los
términos "tela" y "consignación", entre otros, en los sentidos de
"estupefacientes" y "envío o cargamento de droga", respectivamente,
correspondencias a las que llegó aduciendo razones de lógica y sentido común
, como se analizará más adelante (infra 5.2).
429
publicidad y cosa juzgada, todos los cuales al tiempo que conducen a limitar
el poder punitivo en el campo penal, estructuran aquellos presupuestos
objetivos para un juzgamiento legítimo y procuran de este modo la realización
del derecho material en todos y cada uno de dichos ámbitos.
2.Una de las dimensiones más exaltadas del debido proceso está en la que se
ha denominado motivación de las decisiones judiciales, toda vez que
comprende el derecho que les "asiste a los sujetos procesales de conocer los
supuestos fácticos, las razones probatorias concretas y los juicios lógico
jurídicos sobre los cuales el fallador construye la declaración de justicia
contenida en su decisión, prerrogativa que a su vez hace posible ejercer
control sobre el proceso, pues permite identificar los puntos que son motivo
de discrepancia, a efectos de dinamizar los mecanismos de impugnación
establecidos por el legislador" (Cas. 24108. 30-05/07).
"…un juicio sobre los hechos y sobre el derecho. Pero la fijación de los hechos
implica una tarea que está más allá de su consideración histórica dada la
circunstancia de que a ellos se llega a través de los medios de prueba y que
sobre éstos han de hacerse juicios de apreciación o valoración jurídicos
(guiados por normas de experiencia, ciencia o lógica, o reglas que les asignan
o niegan un determinado valor) o juicios de legalidad o validez. La
fundamentación apunta precisamente a que el documento en que se recoge el
acto de jurisdicción, o sea la sentencia, comprenda ambas clases de juicios de
modo que de la manera más explícita posible sea asertiva, afirmativa y que no
hipotetice. De ahí que cuando la sentencia no es expresa o terminante, o se
manifiesta de manera ambigua o contradictoria, o se estructura de manera
simplemente enunciativa con referencia a los actos de prueba y prescindiendo
del thema probandi, se constituye en acto procesal defectuoso, vicio de
actividad éste imposible de subsanar en la dinámica de las instancias, como
tampoco susceptible de remedio en casación a través de su reemplazo, dado
que con ello el superior terminaría trastocando la estructura del proceso por
instancias o grados. " (Cas. 11279. 25-03/99).
430
Trátase por tanto de un defecto u omisión en el pronunciamiento que puede
concurrir o expresarse de distintas maneras: por ausencia total de motivación,
motivación deficiente, motivación anfibológica -todas cuantas han de atacarse
por vía de nulidad en casación- y motivación falsa o sofística -que es sin duda
una modalidad de la segunda, pero cuyo reparo en esta sede se ha sujetado a
la causal primera-.
17/09/2008
431
señalar con la claridad y precisión debidas sus fundamentos, la consecuencia
procesal inmediata no puede ser otra que su inadmisión según así lo establece
la referida norma.
(......)
432
Bajo el contexto que se acaba de tratar, la liberación del secuestrado no fue
voluntaria por sus captores sino que con la finalidad de obtener la tarjeta
débito y dejar libre de compromiso a los plagiarios retenidos -entre ellos el
aquí recurrente (.....)- se le liberó bajo la amenaza de atentar contra su vida y
la de su familia de incumplir lo exigido, razonamiento ponderado frente al
cual el demandante se limitó a exteriorizar que fue desatinado, confuso y
contradictorio, sin precisar el por qué de sus manifestaciones que en nada
acreditan el desacierto del intelecto atribuido.
433
el diligenciamiento no fue valorada (falso juicio de existencia por omisión); ya
porque sin figurar en la actuación supusieron que allí aparecía y la tuvieron
en cuenta en su decisión (falso juicio de existencia por suposición); ora porque
al considerarla distorsionaron su contenido cercenándola, adicionándola o
tergiversándola (falso juicio de identidad); también, cuando sin incurrir en
alguno de los yerros referidos derivaron del medio probatorio deducciones que
contravienen los principios de la sana crítica, esto es, los postulados de la
lógica, las leyes de la ciencia o las reglas de la experiencia (falso raciocinio).
434
PONENTE(S) : DR.JULIO ENRIQUE SOCHA
SALAMANCA
Auto Casación
FECHA : 17/09/2008
DECISION : Inadmite la Demanda
DELITOS : Rebelión, Terrorismo, Concierto para
secuestrar, Fabricación, trafic. y port. de armas de F.M.
PROCESO : 29950
PUBLICADA : No
(....)
435
3. A su vez, en correspondencia con la doctrina especializada, la Sala ha
puntualizado que los indicios contingentes pueden ser graves o leves, según el
grado de probabilidad que ostenten para inferir el hecho indicado.
Es así como, tan sólo frente a la sentencia de segundo grado, se tiene que esta
decisión también se basó en el mérito otorgado a las declaraciones de Sosmery
436
Cadavid Taborda, John Jairo Muñoz Zapata, Ninfa Zuluaga Quintero,
Heriberto de Jesús Londoño Sánchez, Martha Lilián David Girón y Jaime de
Jesús Cañaveral quienes, según el Tribunal, presenciaron directamente el
secuestro de los más adelante masacrados al punto de erigirse esta
comprobación, para esa Corporación, en "el centro de gravedad o espina
dorsal de todo el debate por la necesaria relación de causalidad que ella tiene
con su muerte violenta posterior", máxime cuando uno de los dos plagiados
liberados, concretamente John Jairo Muñoz Zapata, informó acerca de la
sentencia de muerte para quienes continuaron cautivos, como a la postre así
ocurrió no sin antes someterlos a torturas, conforme aparece demostrado en
el plenario, descartando, de paso, junto con el único medio de prueba
discutido por la libelista en este reparo, la pretextada muerte ocurrida en el
fragor de un combate con miembros de la subversión, como se hizo ver ante la
opinión pública.
En efecto, los medios de prueba sobre los cuales gravita el yerro propuesto,
contrario sensu a lo afirmado por la casacionista, fueron apreciados tanto en
437
el fallo de primer grado, el cual erige unidad inescindible con el impugnado,
como en el proferido por el Tribunal, tal cual se extrae de los siguiente apartes
de tales providencias.
Tal circunstancia, vale decir, a lo sumo revela una eventual vulneración del
principio de cosa juzgada, el cual esta demandante considera violado sólo
como consecuencia de la incongruencia pero que compagina con los precisos
términos propuestos por la defensora de (...), esto es, por la vía de la violación
directa de la ley sustancial, en este caso por falta de aplicación del
multimencionado artículo 8° del Código Penal y la correlativa aplicación
indebida del 29 ibídem, así como de las normas contentivas de las conductas
punibles endilgadas.
438
mediante determinaciones adoptadas al momento de calificar el mérito del
sumario, las cuales ya han hecho tránsito a cosa juzgada, en el fallo atacado
se les revivió esa imputación para justificar su responsabilidad penal por los
delitos de homicidio y secuestro.
11. Evidente deviene que cuando el ad- aquem refiere en los anteriores
apartes a la pertenencia de los procesados (...) y (...) a la empresa criminal a la
cual contribuyeron con aportes de importancia, de modo alguno hace alusión
a la supuesta asociación entre los miembros del Ejército Nacional -y
específicamente el comando operativo al cual pertenecían- y las denominadas
autodefensas para cometer, ente otras conductas indeterminadas, el secuestro
y postrer homicidio de los señores José Evelio Gallo y Uberney Giraldo,
imputación que se dedujo inicialmente en contra los procesados hasta la
calificación del sumario cuando se les precluyó investigación por el concierto
para delinquir, sino que refiere a su específica intervención en tales conductas
como coautores.
Si ello es así, resulta evidente que no existe identidad de materia entre los
hechos sobre los cuales se fundó la preclusión de investigación y los que
fincan ahora su responsabilidad penal, circunstancia ésta que excluye de
cualquier consideración la vulneración del principio de cosa juzgada de
acuerdo con los argumentos expuestos en esta censura.
13. Mucho menos resulta válida la tercer premisa expuesta por la libelista
para sustentar la censura según la cual el Tribunal por remediar las
incorrecciones de su inferior dejó de lado su labor consistente en resolver los
439
recursos de apelación interpuestos, supuesto esencial para darle cabida a su
tesis de violación del principio de la doble instancia.
Sobre el particular, téngase en cuenta que los reclamos elevados por quienes
fungieron como apelantes giraron principalmente en derredor de la
apreciación probatoria de la sentencia de primera instancia y por ello el
Tribunal necesariamente debió acometer su análisis, sin que por ello pueda
decirse que suplantó a su inferior en esa labor.
16. En lo tocante con la misma clase de error respecto de las declaraciones del
coronel Miguel Ángel Sierra Santos, subteniente Luís Mesías Quiroga Cubillos,
Yamil Enrique Escorcia Espalza, Carlos Alirio Buitrago Bedoya, Jhon Jairo
Giraldo Sánchez, Alfonso Mercado Altamar, Diego de Jesús Quiceno Cardona,
Ricardo López Betancur, Emigdio González Paternina, Enrique Zapa Tapias,
Ubaldo Enrique Quintero Marín, Marco Tulio Ortega Ramírez y Fred Hoyos
Ortiz, dirigidas a demostrar la existencia del combate, valga señalar que, como
bien lo precisa el Ministerio Público, no es dable pregonar su desconocimiento
en la medida en que la mayor parte del discurso argumentativo de los
falladores tuvo por fin precisamente desvirtuar la ocurrencia de las muertes
440
de José Evelio Gallo Gallo y Uberney Giraldo Castro en desarrollo de un
enfrentamiento armado con unidades del grupo mecanizado "Juan del Corral"
apostado en Rionegro, del cual hacían parte los aquí acusados.
19. Respecto del segundo yerro de esta índole planteado por la libelista en
relación con el indicio estructurado con base en el interés de los militares en
desaparecer los cadáveres, es poco lo que se puede indicar ante la evidente
confusión de la demandante, pues antes que demostrar el desconocimiento
evidente de pautas de la sana crítica se entrevera en la omisión del testimonio
de Heriberto de Jesús Londoño quien habría advertido que los occisos
tuvieron mando dentro de las filas de la subversión, de donde surgiría el
interés de los subversivos y no de los militares por recuperarlos.
_______________________________
(1)Fol. 53 del c. No. 10.
441
PONENTE(S) : DRA.MARIA DEL ROSARIO GONZALEZ
DE LEMOS
Sentencia Casación
FECHA : 17/09/2008
DECISION : No Casa
DELITOS : Homicidio agravado, Secuestro extorsivo
PROCESO : 24212
PUBLICADA : Si
29/10/2008
442
Auto Casación
FECHA : 29/10/2008
DECISION : Inadmite la Demanda
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Porte de armas de
defensa personal, Secuestro simple
PROCESO : 30062
PUBLICADA : No
443
que, al parecer, los hechos se originaron por la deuda existente entre el señor
(.....) y el señor (.....)" .
Con lo anterior, la Fiscalía quiso enfatizar que, a pesar de que (.....) admitió
haber jalado del gatillo, no descartaba la intervención de otros partícipes,
pues consideró que la muerte de (.....) obedeció a los intereses económicos de
(.....), quien justamente participó desde un punto de vista objetivo en el
desarrollo de los hechos de la forma como lo señalaron los procesados en sus
respectivas versiones y, por lo tanto, su acción fue determinante para la
obtención del resultado contemplado en la norma.
4.La juez a quo (cuya decisión, al haber sido confirmada por el Tribunal, ha
quedado integrada para efectos de este recurso con la del ad quem en una
unidad jurídica imposible de escindir) no sólo valoró la relación comercial
entre los sujetos activos y el sujeto pasivo de la conducta, al igual que los
vínculos de éstos con (.....) , sino que además trajo a colación, entre otros
aspectos, (i) la salida de (.....) del archipiélago de San Andrés, horas después
de haber ocurrido los hechos ; (ii) el que fuera el taxista (.....), y no cualquiera
de los otros dos ocupantes del vehículo, quien buscara a Álvaro Mario
Mosquera García en la recepción del hotel Sol Caribe Centro ; (iii) las huellas
de sangre que se encontraron en el interior del vehículo, que de manera
infructuosa habían intentado borrarse en la madrugada siguiente al hecho ;
(iv) el sitio en donde fue hallado el cadáver ; (v) la confidencia que (.....)
compartió con un amigo por sentir que mantenía económicamente tanto al
hermano de Luz Dary Heredia Ortiz como a su antiguo esposo ; (vi) la
experiencia de (.....) en el manejo de armas de fuego y la mala explicación que
dio acerca de su viaje y presencia en el archipiélago ; (vii) la presentación
voluntaria de los procesados ante las autoridades, que se dio cuando ya
estaba reunida la mayor parte de los elementos de juicio para vincularlos ; y
(viii) la ubicación de la víctima y de quien disparó en la parte trasera del
vehículo, cuando lo lógico era que alguien se hubiera sentado al lado del
conductor .
444
que implica alcanzar una efectiva comunicación entre el derecho y la realidad
social, de conformidad con las circunstancias particulares de cada asunto.
De ahí que la labor del funcionario judicial para aplicar la ley no obedece a
una actividad mecánica y desligada de su entorno, sino que, por el contrario,
implica la necesidad de adaptar, restringir, hacer extensivos los efectos o
incluso acondicionar, mediante su intervención interpretativa, el contenido
material de los preceptos legales llamados a regular el caso, para de esta
manera llegar a soluciones "justas", es decir, a posturas que estén en armonía
con los fines del Estado Social de Derecho, así como el conjunto de principios
y valores que integran el ordenamiento jurídico.
Como quiera que esta figura implica la renuncia al derecho de que se agote de
manera ordinaria el trámite del proceso, la razón de ser de esta disposición,
en el sentido de que sea el mismo procesado y no cualquier otro sujeto
procesal quien solicite acogerse al mecanismo, responde a la necesidad de
garantizar que en todos y cada uno de los casos esa renuncia sea, sin lugar a
equívocos, producto de una voluntad libre de todo tipo de apremios, presiones
o engaños. Así lo ha entendido de tiempo atrás la jurisprudencia de la Sala:
"Siendo entonces, por ministerio del rito que estos instrumentos le permiten al
procesado participar activamente en las decisiones que lo afectan, es a este
sujeto procesal a quien corresponde hacer explícita de manera inequívoca,
diáfana y voluntaria la manifestación de querer renunciar a la controversia
fáctica y jurídica por los hechos punibles que le han sido imputados en la
445
providencia por la cual se le impuso medida de aseguramiento, o se le convocó
a responder en juicio, según la etapa en la que el proceso se encuentre al
momento de la solicitud, para expresar allanamiento libre y voluntario a los
cargos que se le formulen, y aceptar de esta manera su responsabilidad penal
por el hecho atribuido" .
En este orden de ideas, cuando el Juzgado Penal del Circuito de San Andrés
interpretó el alcance del artículo 27 del decreto 2700 entonces vigente (actual
artículo 40 de la ley 600 de 2000), ignoró el principio de prevalencia de lo
sustancial sobre las formas previsto en el artículo 228 de la Carta Política, ya
que invalidó la diligencia de formulación y aceptación de cargos para
sentencia anticipada con el argumento de que la solicitud expresa por parte
del procesado era un requisito indispensable, sin tener en cuenta que la
misma actuación evidenciaba de manera inequívoca que su voluntad siempre
fue la de que se lo condenara anticipadamente.
446
voluntad de su protegido consistía, entonces, en acogerse a la figura de la
sentencia anticipada.
447
En el presente asunto, (.....) no sólo se presentó voluntariamente ante las
autoridades con el fin de confesar su participación en la muerte de Álvaro
Mario Mosquera García, sino que además tal admisión, aunque no constituyó
el único sustento probatorio de las providencias, le resultó útil a la
administración de justicia en aras de establecer la acción concreta realizada
por cada uno de los procesados, así como para corroborar las circunstancias
concretas que rodearon a la muerte de la víctima. En palabras del a quo:
"Si bien el citado artículo 351 no consagra directriz que sirva de guía para
encontrar cuál es la proporción de reducción sobre la pena finalmente
impuesta a la conducta punible realizada por el imputado, sí está implícita en
la misma naturaleza del instituto, que busca reconocerle el mérito por su
conducta procesal, es decir, un premio por optar un camino que significa
materializar los principios de celeridad, eficacia y eficiencia insertos en el de
lograr pronta y cumplida justicia que orienta la función pública de
administración de justicia.
"De esa forma, el fiscal, si decide llegar a un acuerdo con el imputado a raíz de
la aceptación de los cargos en la audiencia preliminar, o el juez al dictar
sentencia si no se celebra pacto al respecto, deberán sopesar el significado del
allanamiento en términos de la oportunidad y rapidez con qué se hizo, la
magnitud del ahorro de esfuerzos y recursos investigativos que esa conducta
post delictual significó, con el fin de establecer el porcentaje de disminución
de la pena que se fijó para la conducta punible realizada, que por tal razón
merezca el procesado" .
448
2000 (equivalente a ochenta y seis meses y tres días), aumentada en dos
meses y siete días, para una pena final que equivale a ciento setenta meses de
prisión o, lo que es lo mismo, catorce (14) años y dos (2) meses de prisión.
_________________________________________________
Sentencia Casaciòn
FECHA : 29/10/2008
DECISION : Casa Parcial y de Oficio
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 22047
PUBLICADA : No
NOTAS ACLARATORIAS : DR.JORGE LUIS QUINTERO MILANES -
Salvamento Parcial de Voto
DR.SIGIFREDO ESPINOSA PÉREZ -
Salvamento Parcial de Voto
DR.YESID RAMIREZ BASTIDAS - Salvamento
Parcial de Voto
DRA.MARIA DEL ROSARIO GONZALEZ DE
LEMOS - Salvamento Parcial de Voto
02/12/2008
449
para reconocer la ilicitud de la conducta y de determinarse de acuerdo con la
comprensión que de ello tenga, luego de lo cual corresponderá la valoración
jurídica sobre la relación modal y temporal de fenómeno mental con el
comportamiento delictivo objeto de estudio a fin de predicarle la calidad de
inimputable con miras a prodigarle la atención terapéutica de rehabilitación o
curación que amerite.
3.Así mismo, la Corte ha precisado que falta de la prueba técnica, como medio
idóneo para determinar el trastorno mental del que adolezca el procesado,
puede socavar las bases estructurales del debido proceso; sin embargo, es
este caso es patente que la falta de trascendencia del cargo anunciado le resta
la idoneidad necesaria para su admisión toda vez que el procesado sí fue
valorado psiquiátricamente y se concluyó que no estaban alteradas sus
facultades mentales y por lo tanto tenía la capacidad de comprender la ilicitud
del comportamiento y de autorregularse de acuerdo con esa comprensión.
6.Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y
para efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del
hecho, pues cada sujeto domina el acontecer total en cooperación con los
demás, no tiene en sí mismo un dominio parcial, ni tampoco el dominio
global, sino que éste se predica de todos.
450
siguientes elementos: i) un acuerdo o plan común; ii) división de funciones y
iii) trascendencia del aporte en la fase ejecutiva del ilícito.
Auto Casación
FECHA : 02/12/2008
DECISION : Inadmite demanda
DELITOS : Homicidio agravado, Secuestro extorsivo,
Tentativa de hurto calificado y agravado, Secuestro extorsivo agravado, Porte
ilegal de arma de fuego de defensa pers
PROCESO : 27677
PUBLICADA : Si
27/02/2009
451
Nulidad: Debido proceso, técnica en casación/ SISTEMA PENAL
ACUSATORIO-Nulidad: Derecho de defensa, técnica en casación/ SISTEMA
PENAL ACUSATORIO-Principio de imparcialidad/ JUEZ NATURAL-Noción/
INDEPENDENCIA JUDICIAL-Concepto/ SISTEMA PENAL ACUSATORIO-Juez
imparcial/ SISTEMA PENAL ACUSATORIO-Recusación: Técnica en casación/
SISTEMA PENAL ACUSATORIO-Impedimento: Haber participado dentro del
proceso/ SISTEMA PENAL ACUSATORIO-Violación indirecta de la Ley
sustancial: Falso raciocinio; técnica en casación/ SISTEMA PENAL
ACUSATORIO-Violación directa de la Ley sustancial: Técnica en casación/
HOMICIDIO-Con sevicia/ COAUTORIA-Concepto
2. Que se desarrollen los cargos, esto es, que se expresen sus fundamentos
o se ofrezca una sustentación mínima. Y,
452
3.Temática frente a la cual la Sala ha sostenido que ella está referida a los
defectos sustanciales de garantía o de estructura aptos para invalidar las
actuaciones, lo cual implica que la sentencia se haya dictado en juicio viciado,
con la prevención que no cualquier irregularidad conspira contra la vigencia
del proceso pues la afectación debe ser esencial y estar vinculada en calidad
de medio para socabar algún derecho fundamental de los sujetos procesales, y
si bien la demanda correspondiente no exige formas específicas para su
proposición, sustentación y desarrollo, tampoco es un escrito de libre factura
porque igual que en las otras causales, debe ajustarse a ciertos parámetros
lógicos de modo que se comprenda con claridad y precisión los motivos de
ataque, las irregularidades sustanciales alegadas y la manera como se
quebranta la estructura del proceso o se afectan las garantías de los
intervinientes.
4.Los motivos que generan esta causal son específicos, como lo señala el
principio de taxatividad (art. 458), y son: la nulidad derivada de la prueba
ilícita y la cláusula de exclusión (arts. 23 y 455); la nulidad por incompetencia
del juez (art. 456); y, la nulidad por violación a garantías fundamentales:
derecho a la defensa y debido proceso, en aspectos sustanciales (art. 457).
453
6.Al postular el recurrente que el fallo se dictó con transgresión del principio
de imparcialidad, ha de recordarse que éste rige la actuación de los
funcionarios judiciales, el cual se deriva por interpretación del de igualdad
(artículo 13 Const. Polt.), es un postulado que se integra a la categoría general
de debido proceso en lo que corresponde al principio de juez natural el que
además de gozar de autonomía deberá actuar con transparencia, criterios que
constituyen regulaciones funcionales que en la ley 906 de 2004 se recogen en
el artículo 5° (2) ejusdem.
454
convertido en el cuarto poder, con ejercicios unas veces de manera abierta,
otras de manera velada de constreñimiento, enjuiciamiento y censura respecto
de las determinaciones de los funcionarios judiciales(5) .
Al colocarse de presente que una de las características del juez natural está
dada en haber sido instituido con sus debidas competencias y facultades de
manera preexistentes a las conductas que deba investigar o juzgar, de contera
se constituye en una garantía de imparcialidad en orden a que al Estado se le
impida designar jueces especiales a posteriori de la ocurrencia de los hechos.
Téngase en cuenta que los artículos 228 y 230 en cita los que consagran la
independencia judicial, en sus textos hacen un llamado normativo a los otros
455
órganos y funcionarios del poder público incluidos los judiciales a no
inmiscuirse en las decisiones jurisdicciones.
::::::
_________________________________________________
1. CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal, Autos del 24 de
noviembre de 2005, rad. 24.323; del 14 de febrero de 2006, rad. 24.611; y del
23 de marzo de 2006, rad. 25.197, entre otros.
2. Imparcialidad. Art. 5°. En ejercicio de las funciones de control de
garantías, preclusión y juzgamiento, los jueces se orientarán por el imperativo
de establecer con objetividad la verdad y la justicia.
3. Corte Constitucional. Sentencia C-1260 del 5 de diciembre de 2005. M.P.
Dra. Clara Inés Vargas Hernández.
4. "Por todo ello, no cabe en puridad establecer diferentes tipos de
independencia tomando como referencia los sujetos cuya conducta pudiera
originar subordinaciones de hecho, si la independencia se entiende en
términos jurídicos. Las clasificaciones tradicionales que hablan de una
independencia frente a las partes, frente a la sociedad, frente a los restantes
órganos del Estado o frente a los demás órganos jurisdiccionales, únicamente
456
tienen sentido si se especifica que la expresión <independencia> se utiliza con
referencia a las subordinaciones de hecho y no como una categoría de
derecho, ya que en éste último sentido la independencia sólo opera frente a
los productos normativos que pueden ser elaborados por aquellos sujetos en
tanto que titulares de órganos del Estado, es decir, frente a normas jurídicas.
Por todo lo anterior, dentro del concepto general de independencia es preciso
distinguir con nitidez entre independencia en sentido jurídico y en sentido no
jurídico, utilizándose en estas páginas las expresiones <independencia> e
<imparcialidad> para referirse a cada uno de aquellos" JUAN LUÍS REQUEJO,
Jurisdicción e Independencia Judicial, Centro de Estudios Constitucionales,
Madrid, 1989, pág. 97.
5 "Los factores objetivos de influencia. (…) La presión de la opinión pública
actúa hoy fundamentalmente a través de la creación de determinadas
expectativas sobre una decisión judicial aportando informaciones sobre el
hecho o sobre las partes en el proceso, e incluso opiniones concretas sobre el
sentido que debería adoptar. Esta forma de actuación requiere siempre el
concurso de los medios de comunicación, aunque éste puede llegar a
producirse de modo complejo. Un ejemplo: un responsable político declara
antes de la decisión judicial que sobre los acusados ha de recaer todo el peso
de la ley. En este caso, es claro que la presión procede del responsable
político, que escoge los medios de comunicación y, por tanto, a la opinión
pública como vía para ejercerla (…) El problema no se encuentra sólo, sin
embargo, en la posibilidad de informaciones tendenciosas, aunque éstas
agravan el riesgo de que la presión pueda conducir a una decisión injusta (…)
Sin duda, se puede plantear aquí si existe un conflicto entre la libertad de
expresión e información y la independencia judicial; pero no puede olvidarse
de nuevo que la actividad del juez es el centro del sistema jurídico, y que, en
la medida que la libertad de expresión e información supone un recorte
efectivo de la independencia judicial, la decisión debe optar por el bien de
mayor valor para el sistema jurídico, que es la independencia judicial (…) "
Carlos Pérez del Valle, Estudios sobre la independencia judicial y el proceso
penal, Editora Jurídica Grijley, Primera edición: enero 2005, pág. 30.
6. Ley 906 de 2004.- Art. 456.- Nulidad por incompetencia del juez.- Será
motivo de nulidad el que la actuación se hubiere adelantado ante juez
incompetente por razón del fuero, o porque su conocimiento esté asignado a
los jueces penales de circuito especializados.
7. "La idea del estado de derecho celebra su mayor triunfo en la
independencia de las decisiones judiciales (…) Las palabras de Max Grünhut
(…) y que el propio Eb. Schmidt esgrimía al decir que no eran en absoluto una
exageración, permiten entender la forma en la que, en la sociedad moderna,
ha sido contemplada la necesidad de independencia del juez. La comprensión
de la independencia judicial no se ha reducido a la visión común -porque la
independencia de la función judicial está ya contenida como aspecto esencial
en el mismo concepto de juez (…)- que, por vulgar, es tan susceptible de ser
manejada de modo mediocre y malintencionadamente. La idea de la
independencia judicial ha sido objeto de su consideración en un sentido
integral; en su visión del problema, la independencia del juez no se limita a la
liberación superficial de prejuicios, sino que abarca y profundiza en la
decisión sobre el método de determinación del derecho. La explicación es muy
457
sencilla: si las constituciones insisten en referir como garantía de la
independencia la vinculación del juez a la ley y al derecho, es preciso delimitar
las relaciones entre ley y derecho (…) La razón de esta referencia a la ley es
muy clara: la ley es la más importante fuente de conocimiento jurídico de los
juristas en la modernidad (…) Pero no existe el juez que se introduce en el
caso concreto como un autómata y que produce una decisión de acuerdo con
una cuidadosa suma de datos en el cerebro (…) El juez no puede ser de
ningún modo -nunca puede serlo- "la bouche qui prononce les paroles de la
loi" (…) de la que hablaba Montesquieu, porque cada precepto de ley positiva
es insuficiente para determinar por sí solo su contenido normativo, lo que se
acrecienta en el derecho de las sociedades modernas, presentado como un
sistema de normas de extraordinaria complejidad. Los riesgos que este
contexto representa para la independencia judicial son, desde luego muy
diversos, porque únicamente el texto de la ley positiva no permite conocer con
certeza el contenido del derecho. La lapidaria afirmación de Feuerbach en el
sentido de que el juez no ha de servir a otro señor que la justicia ni seguir otra
voluntad que la ley no es una conclusión, sino la formación de un problema a
resolver (…) ¿Cómo se puede llegar a afirmar que un juez no ha sido
independiente en la realización del derecho? La respuesta puede ser
formulada sólo a partir de una aproximación al contenido de la decisión
judicial y a su posición en el sistema jurídico (…) " Cfr. Carlos Pérez del Valle,
ps. 43, 44 y 45.
_________________________________________________
Auto Casación
FECHA : 27/02/2009
DECISION : Inadmite demanda
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 31198
PUBLICADA : Si
11/03/2009
458
propio contenido o de la actuación procesal que condujo a su emisión, se
impone -al igual que en todas las demás- el deber de no solamente indicar la
pretendida irregularidad acusada, sino además señalar el real y concreto
menoscabo o perjuicio que la misma ha generado para el derecho de defensa o
el debido proceso, según el mismo se exprese con predominio en desmedro de
uno u otro, esto es, fijar si se deterioraron sus garantías o las bases
fundamentales del juzgamiento.
De modo que este caso no evidencia la imposición lesiva de los derechos del
imputado al proveerlo de un abogado que lo acompañara en el acto de su
indagatoria, sino el cumplimiento del imperativo de garantía que para el
Estado representa que toda persona cuente con una persona letrada en el
derecho al momento de ser vinculada a un proceso penal.
(.......)
Bien vale la pena reseñar que cuatro días después de surtida esta diligencia el
incriminado otorgó poder a una defensora de confianza y que con su
asistencia -los días 18 de agosto y 22 de septiembre posteriores- fue ampliada,
459
contando con plena posibilidad de avocar su defensa -dado el silencio
exhibido en la primera de ellas- con la estrategia concebida para dichos
momentos, aspecto que por demás explica justificadamente la razón por la
cual la designación de defensor de oficio inicial lo fue con exclusividad para
salvaguardar los derechos del imputado en ese sólo acto.
6. Debe la Corte recordar que cuando se acusa el fallo por quebranto directo
de la ley -este es un parámetro por décadas reafirmado en la jurisprudencia-,
se impone al casacionista el deber de acatar en forma estricta la secuencia
fáctica y la valoración de las pruebas en los términos en que la decisión
impugnada lo ha hecho, sin que puedan controvertirse dichos extremos de la
460
providencia para por esta vía pretender abrir paso a una afirmada aplicación
indebida, falta de aplicación o interpretación errónea de preceptos legales.
7. Cabe en este asunto concluir que si bien los agentes activos del concurso
punible actuaron típicamente cada uno por su lado, colaboraron en esfuerzo
compartido en un propósito que era común a ambos, de manera conjunta
pero con división de trabajo en la realización del resultado típico que, en
condiciones semejantes, los hace coautores por obedecer a un mismo designio
criminal.
Sentencia Casación
FECHA : 11/03/2009
DECISION : No casa
DELITOS : Porte ilegal de armas, Homicidio agravado,
Tentativa de hurto calificado y agravado
PROCESO : 25611
PUBLICADA : No
18/03/2009
1.Por lo tanto, la Sala partirá del análisis del vicio de garantía que funda por
la falta de defensa, para seguidamente abordar el de la afección del debido
proceso, falta de congruencia y la oposición a la práctica probatoria en la
461
segunda instancia, en un orden que se acomoda al radio invalidante o de
restauración procesal que se precisa en las pretensiones.
462
También, una vez se emitió la resolución de acusación, para preservar la
debida diligencia profesional, se reemplazó el defensor inicialmente designado
y si bien no hay constancia de habérsele notificado personalmente la
resolución de acusación, -irregularidad que no fue planteada por el
demandante-, tal situación no generaría la intervención oficiosa de la Corte en
aras de la protección de garantías, por cuanto, como con anterioridad se ha
precisado: "En materia de nulidad también impera el postulado de
convalidación, según el cual, cuando el acto de postulación discrecional deja
de ejercerse, no por voluntad de la parte, sino porque se la priva
irregularmente de la oportunidad de hacerlo, los efectos invalidatorios del
vicio no solo dependerán de su trascendencia, sino de la circunstancia de no
haber sido saneada con motivo de la actitud procesal asumida por la parte
afectada, como acontece cuando guarda silencio frente a la irregularidad,
pues, entonces, habrá entenderse, con fundamento además en el art. 308.4
del estatuto procesal, (hoy artículo 310. 4 de la Ley 600 de 2000) que dispone
del derecho que le fue socavado, renunciando a su eventual ejercicio".
4.La Sala enfatiza en que la obligación del órgano judicial de garantizar tanto
la defensa material, como cualificada, se hace más patente en el momento
crucial del debate público, esencia de la fase del juicio y espacio propio para
garantizar el ejercicio del contradictorio al materializar las facultades
defensivas. Si se compara la labor desplegada por el abogado de confianza en
el juicio desde la solicitud de pruebas, intervención en las audiencias y
presentación de alegaciones en pleno ejercicio del derecho de contradicción,
así como luego del de impugnación al apelar de la sentencia, son notables los
actos positivos de gestión es beneficio del procesado.
463
haber recurrido esa decisión, que según el defensor era "fácilmente atacable",
precisamente por los fundamentos jurídicos y probatorios que le dieron piso.
464
Y en lo referido a la sentencia, el artículo 55 de la Ley Estatutaria de la
Administración de Justicia establece el deber de abarcar todos los hechos y
asuntos planteados en el proceso por los sujetos procesales, obligación
reproducida y ampliada en el artículo 170 del Código Penal de 2000, (artículo
180 del Decreto 2700 de 1991) al exigir, entre otros aspectos, el análisis de los
alegatos presentados por los sujetos procesales y la valoración jurídica de las
pruebas en que ha de fundarse la decisión.
465
que en concreto tuvo para el ejercicio del derecho, para lo cual ha de hacer el
examen de la actividad defensiva desplegada en el juicio encaminada a
oponerse a la imputación, como única manera de acreditar la incidencia
negativa en el derecho de defensa.
466
cumplir por parte de los Estados, como el no solo promover, proteger y hacer
efectivos los derechos humanos, sino de garantizar, apoyar la creación y el
desarrollo de instituciones encargadas de su promoción y protección,
otorgando a la par el derecho a los defensores de derechos humanos de
recabar y obtener información, debatir ideas, promover su respeto y
aceptación, así como presentar a las organizaciones gubernamentales
propuestas encaminadas a corregir actos que impidan la realización de los
derechos humanos o también a denunciar las políticas o acciones oficiales
atentatorias de los mismos.
_________________________________________________
467
FECHA : 18/03/2009
DECISION : No casa
DELITOS : Homicidio agravado, Tentativa de homicidio
agravado
PROCESO : 23974
PUBLICADA : No
1. Dado que las demandas presentadas por los defensores fueron declaradas
desde el punto de vista formal ajustadas a derecho, la Sala considera que no
viene al caso pronunciarse acerca del cumplimiento o no de los requisitos de
lógica y debida argumenta-ción en los escritos correspondientes, pues a esta
altura los procesados adquirieron el derecho a que se les analicen de fondo los
problemas jurídicos traídos a colación en las respectivas sustentaciones, en
armonía con los fines de la casación de garantizar la efectividad del derecho
material, respetar las garantías mínimas de las personas que intervienen en la
actuación, buscar la reparación de los agravios inferidos a los sujetos
procesales y unificar la jurisprudencia, tal como lo establece el artículo 206 de
la ley 600 de 2000, Código de Procedimiento Penal vigente para este asunto.
468
3. Con fundamentar desde los puntos de vista fáctico y jurídico las decisiones
judiciales, el funcionario, a partir de la lógica de lo razonable, no sólo intenta
convencer tanto a los sujetos procesales como a la comunidad en general de
que la providencia por él proferida fue materialmente correcta o conforme a
derecho (y que, por lo tanto, no hubo arbitrariedad), sino que además deja
abierta la posibilidad para que, en el interior del proceso, la justificación
empleada en la providencia, en tanto contenga argumentos susceptibles de
ser verificados o refutados para el ejercicio del derecho de contradicción, sea
objeto de los recursos de ley y, dado el caso, conocida en sede de segunda
instancia, así como del extraordinario recurso de casación.
"Es por la motivación como las decisiones judiciales resultan avaladas y, por
tanto, legitimadas por aserciones, en cuanto tales verificables y refutables,
aunque sea de manera aproximativa [...] Precisamente, la motivación permite
la fundamentación y el control de las decisiones tanto en derecho, por
violación de la ley o defectos de interpretación o subsunción, como en hecho,
por defecto o insuficiencia de pruebas o bien por inadecuada explicación del
nexo entre convicción y pruebas. Y no sólo en apelación sino también en
casación".(4)
469
"[....]
"La motivación es, pues, una justificación racional elaborada ex post respecto
de la decisión, cuyo objetivo es, en todo caso, permitir el control sobre la
racionalidad de la propia decisión".(5)
470
obligado a hacer un examen exhaustivo de las mismas, ni de sus extremos
asertivos, sino de las que considere jurídicamente relevantes para la
sentencia, pues de lo contrario ésta devendría en interminable.(7)
(......)
(.......)
(.......)
471
Lo anterior se encuentra en perfecta armonía con el principio de unidad
jurídica que rige en materia de casación, según el cual, cuando la segunda
instancia confirma la decisión dictada por la primera, los argumentos
contenidos tanto en una como en otra decisión deberán analizarse como un
todo.
(......)
(......)
472
procesales ejercer el control de la actividad jurisdiccional atacando la
racionalidad de tales decisiones, ya fuere mediante el reclamo de errores in
iudicando existentes en las mismas, así como de errores in procedendo
ocurridos en el decurso de la actuación.
____________________________________________
(1). Cf., entre otras, sentencia de 12 de noviembre de 2003, radicación 19192.
(2). Roxin, Claus, Derecho procesal penal, Ediciones del Puerto, Buenos Aires,
2000, pp. 425-426.
(3). López Barja de Quiroga, Jacobo, Tratado de derecho procesal penal,
Editorial Aranzadi, Navarra, 2005, p. 1371.
(4). Ferrajoli, Luigi, Derecho y razón. Teoría del garantismo penal, Editorial
Trotta, 2001, p. 623.
(5). Taruffo, Michele, La prueba de los hechos, Editorial Trotta, 2002, pp. 435-
436.
(6). Hernández Marín, Rafael, Las obligaciones básicas de los jueces, Editorial
Marcial Pons, Madrid, p. 167.
(7). Cf., entre otras, sentencias de 29 de octubre de 2003, radicación 19737, 8
de noviembre de 2007, radicación 27388, y 8 de noviembre de 2007,
radicación 24965.
(8). Sentencia de 20 de octubre de 2005, radicación 21816.
473
(9). Sentencia de 25 de marzo de 1999, radicación 11279. En el mismo
sentido, sentencias de 28 de septiembre de 2001, radicación 15997, 17 de
marzo de 2004, radicación 18743, y 10 de mayo de 2006, radicación 22082,
entre otras.
(10). Sentencia de 13 de octubre de 2004, radicación 20944.
(11). Cf., por ejemplo, Corte Interamericana de Derechos Humanos, casos
Sequiera Mangas contra Nicaragua (1997) y Bámaca Velásquez contra
Nicaragua, § 19 (2000): "En igual sentido, la Corte Europea ha señalado que
se deben considerar los procedimientos como un todo, incluyendo las
decisiones de los tribunales de apelación, y que la función del tribunal
internacional es determinar si la integralidad de los procedimientos, así como
la forma en que fue producida la prueba, fueron justos".
(12). Cf., entre otros, casos Ruiz Torija contra España, sentencia de 9 de
diciembre de 1994; Hiro Balani contra España, sentencia de 9 de diciembre de
2004; Higgins y otros contra Francia, sentencia de 19 de febrero de 1998,
García Ruiz contra España, sentencia de 21 de enero de 1999; Hirvisaari
contra Finlandia, sentencia de 27 de septiembre de 2001.
(13). Cf. folios 239-259, 260-270 y 275-297 del cuaderno VII de la causa.
(14). Por ejemplo: "En esa determinación, el funcionario de instancia valoró
todos y cada uno de los elementos de juicio legalmente aportados, y dentro de
ese análisis efectuado controvierte las argumentaciones de los representantes
judiciales de los procesado [sic], demostrando que ellas no tiene [sic] soporte
probatorio, llegando a la conclusión sobre la responsabilidad de todos [y] cada
uno de los procesados frente al cargo de doble homicidio, descartando la
existencia del secuestro" (folio 29 del cuaderno del Tribunal). "Comparte la
Corporación los planteamientos esbozados por el juzgador de instancia en el
fallo impugnado en todo [sic] su [sic] determinaciones" (folio 34 ibídem).
(15). Sentencia de 2 de julio de 2008, radicación 23438.
Sentencia Casación
FECHA : 18/03/2009
DECISION : No casa
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 26631
PUBLICADA : Si
14/04/2009
474
1. Debe hacerse hincapié en cómo la Corte, de manera pacífica y reiterada ha
advertido la necesidad de que la demanda de casación comporte un mínimo
rigor lógico jurídico y argumental, pues, no se trata de hacer valer una especie
de tercera instancia que sirva de escenario adecuado a la controversia ya
superada por los falladores de primero y segundo grados, en la cual se
pretende anteponer el particular criterio o valoración probatoria, a aquel que
sirvió de soporte a la decisión de los jueces A quo y ad quem, entre otras
razones, porque a esta sede arriba la decisión judicial con una doble
connotación de acierto y legalidad.
Se faculta, por ello, que la dicha presunción sea quebrada a través de criterios
claros, lógicos, coherentes y fundados, derivados del compromiso de
demostrar la violación en la cual incurrió el fallador, suficiente para echar
abajo el contenido de verdad de la sentencia, en el entendido de que, de no
haberse materializado el yerro, otra hubiese sido la decisión y precisamente
así se ofrece trascendente recurrir al mecanismo extraordinario de
impugnación.
(......)
De igual manera, fenómenos como los del dolo eventual y la llamada aberratio
ictus, o error en el golpe, inciden fundamentalmente al momento de verificar
475
cómo el resultado debe atribuirse a título de dolo, no solo al autor directo,
sino a los demás partícipes.(3)
(.....)
(......)
476
PONENTE(S) : DR.SIGIFREDO ESPINOSA PÉREZ
Sentencia Casación
FECHA : 14/04/2009
DECISION : Inadmite demanda
DELITOS : Lesiones personales, Tentativa de homicidio,
Homicidio agravado, Porte ilegal de arma de fuego de defensa pers
PROCESO : 31350
PUBLICADA : No
06/05/2009
477
demanda para su estudio. El documento del 9 de febrero de 2009, expedido
por la Secretaría del Juzgado Segundo Penal del Circuito del Espinal - Tolima
no certifica en manera alguna la ejecutoria de la sentencia. (Folio 41).
"...la coautoría impropia... emerge de un plan común, del dominio colectivo del
suceso, de la distribución de funciones, cada una de las cuales es una pieza
de la realización del resultado comúnmente querido, la que, como tal, no
puede ser considerada aisladamente, pues podría aparecer como despreciable
o ineficaz y, por ende, impune, y que solo adquiere relevancia en el conjunto y
con relación al plan criminal propuesto".(2)
478
(3). CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala Penal, auto del 30 de septiembre de
1997.
Acción de Revisión
FECHA : 06/05/2009
DECISION : Reconoce apoderado , inadmite demanda
DELITOS : Homicidio agravado, Porte ilegal de arma de
fuego de defensa pers
PROCESO : 31243
PUBLICADA : Si
479
primero corresponda a una extralimitación o abuso de poder. Por
consiguiente, el nexo no puede ser hipotético o abstracto y, en todo caso, se
rompe cuando el agente desde el inicio actúa con propósitos criminales.(3)
(.....)
480
interrogador también le puso de presente el tipo penal en el cual encuadraban
los hechos, al precisarle que la Fiscalía lo investigaba "por su presunta
participación en las conductas descritas en el artículo 17 de la Ley 365 de
1997, que modificó el artículo 33 de la Ley 30 de 1986, en concordancia con el
numeral 3º del artículo 38 de la Ley 30 de 1986".(6)
481
(2). Cfr. CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sala de Casación Penal. Sentencia
del 9 de febrero de 20005, radicación 20222.
(3). Cfr. CORTE CONSTITUCIONAL, Sentencia C-358 de 1997.
(4). Folios 115 a 136 cd. original # 6.
(5). CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, auto del 25 de mayo de 2003, rad. N°
20684; en el mismo sentido, sent. del 29 de octubre de 2003, rad. N° 19138.
(6). Fl. 131 ídem.
(7). Pág. 18 providencia del 7 de abril de 2000.
Sentencia Casación
FECHA : 06/05/2009
DECISION : No casa
DELITOS : Tráfico de Estupefacientes Agravado
PROCESO : 25702
PUBLICADA : Si
22/05/2009
482
complementariedad, a tenor de lo previsto en el artículo 62 de la Ley 975 de
2005, para todo lo no dispuesto en ella.
Pues bien, como quien desiste del recurso en este caso es uno de los
intervinientes procesales que lo interpuso -el defensor del postulado (......)-, no
se encuentra obstáculo alguno para aceptar su manifestación en ese sentido
durante la audiencia de sustentación, como así se decidirá en la parte
resolutiva de esta providencia.
(........)
483
lineamientos de la Ley 975 de 2005, en la medida en que cumpla con la
totalidad de los presupuestos en ella estipulados.
Dicho de otro modo, de llegar a establecerse, por cualquier medio legal, que el
postulado dejó de confesar alguna conducta ilícita cometida durante o con
ocasión de su pertenencia al grupo armado ilegal, se impone su exclusión del
régimen de justicia y paz y la pérdida de los beneficios que la normatividad
especial consagra, particularmente el de acceder a la pena alternativa, así se
hubiera reconocido mediante sentencia previa.
Por su parte, el artículo 29 de la misma ley dispone que una vez la Sala
competente del Tribunal Superior de Distrito Judicial haya reconocido que el
condenado ha cumplido las condiciones previstas en la ley, le impondrá una
pena alternativa que consiste en privación de la libertad por un período
mínimo de cinco (5) años y no superior a ocho (8), tasada de acuerdo con la
gravedad de los delitos y su colaboración efectiva en el esclarecimiento de los
mismos, a la cual tendrá derecho el condenado siempre y cuando se
comprometa a contribuir con su resocialización a través del trabajo, estudio o
enseñanza durante el tiempo que permanezca privado de la libertad, y a
promover actividades orientadas a la desmovilización del grupo armado al
margen de la ley al cual perteneció.
484
Sin embargo, la Corte Constitucional, en la aludida sentencia C-370 de 2006,
declaró la exequibilidad condicionada de este inciso "en el entendido de que
también se revocará el beneficio cuando haya ocultado en la versión libre su
participación como miembro del grupo en la comisión de un delito relacionado
directamente con su pertenencia al grupo".
(.............)
485
Entre otras razones porque, como se adujo en el auto del pasado 9 de febrero
dictado dentro de este mismo asunto,(9) respondiendo a la sistemática
empleada en la Ley 975, en especial por lo previsto en sus artículos 13 y 18:
_______________________________________________________
(1). Cfr. sentencias del 11 de abril de 2007, rad. 26128 y del 18 de julio del
año, rad. 26255, en donde se establece que aun cuando no hay regulación
expresa de este aspecto en la Ley 906 de 2004, se aplica igualmente para los
recursos de apelación tramitados en el sistema penal acusatorio.
(2). En su orden cronológico: Decretos 4760 del 20 de diciembre de 2005; 690
de marzo 7, 2898 de agosto 29, 3391de septiembre 29 y 4417 de diciembre 7
de 2006; 315 de febrero 7, 423 de febrero 16 y 551 del 28 de febrero de 2007
y Decreto 176 de enero 24 de 2008.
(3). Entre otros, auto del 4 de marzo de 2009, rad. 31332 y del 23 de
septiembre de 2008, rad. 30344.
(4). Radicación 29560.
(5). Radicación 30120.
(6). Cfr. en ese sentido, autos del 9 y 18 de febrero, rads. 30955 y 30755,
respectivamente, y del 11 de mayo rad. 312909, todos de 2009.
(7).Rad. 30120.
(8). Publicada en el Diario Oficial No. 44.703 del 7 de julio de 2000.
486
(9). Rad. 30942.
(10). Cfr. auto del 23 de julio de 20088, rad. 30120, en cuanto el grado de
conocimiento necesario para formular imputación.
08/07/2009
En esa medida, prevé el inciso 2º del artículo 29 del Código Penal: "Son
coautores los que, mediando un acuerdo común, actúan con división de
trabajo criminal atendiendo la importancia del aporte".
487
Ahora, la coautoría impropia se edifica sobre tres requisitos, es decir, la
existencia de un acuerdo común, la división de tareas y la esencialidad del
aporte, sobre los cuales la Sala ha expresado:
Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
Dos. Aporte significativo durante la ejecución del hecho, es decir, prestación
de algo trascendente para su comisión, servicio importante que cada uno de
los concurrentes presta a la gesta delictiva.
Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis la presencia
488
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, v. gr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito".
Así las cosas, es claro que el límite máximo de duración de la pena accesoria
en cita no puede ser mayor de 20 años, no obstante, en el caso particular se
observa que si bien el Tribunal redujo la pena de prisión a 270 meses y 18
489
días, no hizo manifestación alguna en relación con la referida sanción
accesoria, la cual se determinó por el Juez Unipersonal "por un periodo igual
al de la pena privativa de la libertad".
_____________________________________________
(1) Sentencia del 18 de julio de 2002, Radicado No. 10696.
(2) Sentencia del 11 de julio de 2002, Radicado No. 11862.
(3) Sentencia del 11 de julio de 2002, Radicado No. 11.862.
14/09/2009
490
1. Que se señalen de manera precisa y concisa las causales invocadas.
2. Que se desarrollen los cargos, esto es, que se expresen sus fundamentos o
se ofrezca una sustentación mínima. Y,
3.2. Los motivos que generan esta causal son específicos, como lo señala el
principio de taxatividad (art. 458), y son: la nulidad derivada de la prueba
ilícita y la cláusula de exclusión (arts. 23 y 455); la nulidad por incompetencia
del juez (art. 456); y, la nulidad por violación a garantías fundamentales:
derecho a la defensa y debido proceso, en aspectos sustanciales (art. 457).
491
También le corresponde al censor demostrar que la irregularidad cometida
durante el desarrollo del proceso e inadvertida en el fallo, incide de tal manera
que para remediarla no queda ninguna alternativa distinta a invalidar las
diligencias y por eso quien así alega debe indicar con precisión el momento
procesal al que han de retrotraerse las actuaciones una vez excluidas las
alcanzadas por los vicios.
- Indicar cuáles son aquellos medios probatorios cuya ausencia extraña, por
ejemplo, documentos, testimonios, experticios e inspecciones.
- Indicar cuál o cuáles eran las preguntas que en ejercicio del derecho a
interrogar o contrainterrogar se debieron formular a los declarantes, si los
objetivos de éstas últimas apuntaban a controvertir la credibilidad personal
del testigo por sus influencias y prejuicios, sus intereses y motivos, sus
convicciones o sus antecedentes personales (art. 403-3, cpp); la credibilidad
del testimonio en cuanto a las manifestaciones sobre los hechos en su
naturaleza inverosímil o increíble (art. 403-1 cpp); la capacidad del declarante
para percibir, recordar o comunicar cualquier asunto sobre la declaración
(art. 403-2 cpp); las manifestaciones anteriores del testigo, incluidas aquéllas
hechas a terceros (art. 403-4); la conducta del testigo en cuanto a la
mendacidad (art. 403-5); y, las contradicciones en el contenido de la
declaración (art. 403-6).
492
- Además, es preciso que el recurrente se ocupe acerca de la manera como las
pruebas dejadas de practicar por la postura negligente del anterior defensor o
los contra interrogatorios omitidos por el procesado o su defensor o por la
falta al deber de objetividad de la fiscalía (arts. 115 y 142), tenían capacidad
de incidir favorablemente en la situación del acusado, aspecto que se
configura cuando
493
actuación, para la prosperidad del mismo no resulta suficiente con mencionar
la irregularidad que genera el vicio, sino que se debe tener en cuenta que la
494
PONENTE(S) : DR.JULIO ENRIQUE SOCHA
SALAMANCA
Auto Casación
FECHA : 14/09/2009
DECISION : Inadmite la demanda presentada
DELITOS : Homicidio agravado, Secuestro extorsivo
agravado
PROCESO : 32098
PUBLICADA : No
En ese orden, es preciso que el censor postule sus argumentos con claridad,
precisión y contundencia. Su discurso debe ser lógico, jurídico y
suficientemente sustentado de modo que demuestre la afectación de derechos
o garantías fundamentales, la configuración de la causal o motivo de casación
que invoca, además de indicar los sujetos procesales, el fallo cuestionado,
relatar en forma sumaria los hechos materia de juzgamiento y la actuación
procesal, enunciar en forma clara la causal que escoge, formular
adecuadamente el cargo, indicando sin ambigüedades sus fundamentos y las
495
normas que estima infringidas, así como, la necesidad de intervención de la
Corte Suprema de Justicia.
3.Frente al juicio de identidad, el elegido por el censor, la Sala tiene dicho que
surge cuando el juzgador al apreciar el medio probatorio legal y
oportunamente producido distorsiona su expresión fáctica, lo recorta o
adiciona en su contenido literal poniéndolo a decir lo que materialmente no
dice. Es de carácter objetivo, contemplativo, y su demostración implica hacer
evidente no sólo que los fallos apreciaron la prueba contrariando su
materialidad, sino que este desacierto condujo a una decisión contraria a la
ley, su repercusión definitiva en la declaración de justicia contenida en el
fallo. El recurrente está obligado a cumplir los siguientes pasos:
496
de aquel, el mérito persuasivo otorgado por el juzgador, el postulado lógico, la
ley científica o la máxima de la experiencia que fueron desconocidos junto con
los que a su turno, debieron considerarse, la norma de derecho sustancial que
indirectamente resultó excluida o indebidamente aplicada y, por último, la
trascendencia del error en el fallo, de tal manera que sea posible llegar a la
convicción de que de haber sido valorado de manera diversa, la decisión
habría sido sustancialmente diferente.
Según la teoría del dominio del hecho, autor es quien domina el hecho y para
efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio funcional del hecho,
pues cada sujeto domina el acontecer total en cooperación con los demás, no
497
tiene en sí mismo un dominio parcial, ni tampoco el dominio global, sino que
éste se predica de todos.
23/09/2009
498
1.Acorde con el numeral 3º del artículo 75 del de la Ley 600 de 2000,
corresponde a la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia
conocer de las apelaciones interpuestas en los procesos que en primera
instancia conocen los tribunales superiores de distrito judicial, en este caso el
adelantado en contra del doctor (...) ex Fiscal 52 Seccional de la Unidad de
Fiscalías Delegadas del Espinal por hechos relacionados con el ejercicio de
sus funciones cuando aún hacía parte de la Fiscalía General de la Nación,
como está acreditado con el acto administrativo de nombramiento y la
certificación expedida por el Analista de la Sección de Desarrollo Humano de
la Dirección Seccional Administrativa y Financiera de Ibagué, Tolima(1).
El artículo 239 de la Ley 600 de 2000 dispone que "Las pruebas practicadas
válidamente en una actuación judicial o administrativa dentro o fuera del
país, podrán trasladarse a otra en copia auténtica y serán apreciadas de
acuerdo con las reglas previstas en este código".
499
3.En consecuencia los reparos del defensor acerca de la autenticidad de las
copias no alcanzan trascendencia jurídica alguna.
4.Al respecto, téngase en cuenta que el señor (...) narró ante el acusado que
varios individuos que iban en un vehículo marca Willis de color amarillo,
adelantaron el camión que él conducía atravesándosele en la vía, pero como el
continuó la marcha acelerando el camión, cuando los alcanzaba
desenfundaron sendas armas de fuego haciéndole uno de ellos "un disparo"
que lo hirió y lo obligó a parar.
500
para lograr el plan criminal. Aspecto que encuentra comprobación en la forma
en que el conductor y el ayudante del camión relatan lo sucedido, versiones de
las cuales se extracta que la agresión contra la vida del conductor del camión
fue prevista por ellos, por eso cuando aquél se negó a parar y continúo la
marcha acosándolos para abrirse paso, sin dudarlo desenfundaron las armas
que portaban y uno de ellos le efectuó el disparo que le impacto en el ojo
derecho [en la denuncia, el señor (...) dijo que fueron varios los disparos],
asumiendo cada uno las consecuencias jurídicas de esa actuación(4,5,6).
5.Las pruebas que obraban en el referido proceso revelan que cuando los
asaltantes esgrimieron las armas y uno de ellos disparó a la cabina del
camión apuntando al lugar donde se sabe que normalmente va el conductor,
sin duda querían la muerte de éste aunque la misma no fuera el fin que
perseguían desde el inicio, lo cual se traduce en un "momento volitivo" menos
intenso respecto del dolo directo o "de primer grado"(7), que no transmuta la
conducta delictiva en una de menor reproche punitivo.
Vale recordar que la Corte viene insistiendo en que cuando se comprueba una
motivación en concreto, ello facilita la demostración del móvil, pero si esto no
se logra, no implica que el conocimiento y la voluntad de transgredir la ley
desaparezca.
501
total de su sentido, porque, entonces, se cae en la arbitrariedad y en el
capricho.
__________________________________________
(1) Folios 42 y 43 del c.o. 1
(2) Folios 1 a 29 del c.o. 1
(3) Folio 100 del cuaderno anexo
(4) Sentencia del 7 de marzo de 2007. radicación 23815, reiterada en
sentencia de 8 de agosto de 2007, radicación 25974
(5) Sentencia de casación de 17 de julio de 2003, radicación 18768
(6) Se refiere a los delitos de "fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o
municiones, tentativa de hurto calificado y tentativa homicidio" Folio 60 del
cuaderno anexo.
(7) Cfr. ROXIN, Claus, Derecho Penal, Parte General, Tomo I, Fundamentos.
La Estructura de la Teoría del Delito. Traducción de Diego Manuel Luzón
Peña. Miguel Díaz y García Conlledo y Javier de Vicente Remesal, Civitas,
1997, pág. 412 y ss.
30/09/2009
502
1.La violación directa de la ley sustancial por aplicación indebida a la cual
acude el actor en esta censura, comporta una equivocada apreciación de los
hechos probados a los supuestos que contempla el precepto, de manera que
implica un error de selección de la norma aplicada que no es la llamada a
regular la cuestión debatida.
Con tal afirmación desconoce que los actos administrativos son obligatorios
mientras no hayan sido anulados o suspendidos por la jurisdicción de lo
contencioso administrativo, o cuando pierden su fuerza ejecutoria en los
casos previstos en el artículo 66 del Código Contencioso Administrativo; por
esa razón la misma ley agraria expresamente dispone frente a los actos
irregulares de adjudicación de baldíos, que son susceptibles a la revocatoria
directa de la administración o de que se declare su nulidad por parte de los
jueces competentes.
503
algunas hipótesis como estas: (i) Se incluyen en el fallo nuevas conductas
punibles; (ii) Se adicionan circunstancias específicas o genéricas de
agravación; (iii) Se desconocen circunstancias de atenuación reconocidas, o
(iv) Se modifica desfavorablemente las modalidades de la conducta punible
(dolosa, culposa o preteritencional) o la forma de participación en el delito (de
cómplice a autor).
4.En conclusión, ni por acción ni por omisión el fallo recurrido desbordó los
límites de la acusación, los cuales generan motivo para considerar que a la
defensa se le sorprendió con cargos improvisados imposibles de controvertir.
Para que exista delito de peculado por apropiación es indispensable que los
bienes se encuentren bajo la administración, custodia o tenencia del servidor
público que decide apropiárselos, y que se trate de bienes del Estado, o de
empresas o instituciones en que éste tenga parte, o de bienes o fondos
parafiscales, o de bienes de particulares, que le hayan sido confiados por
razón de sus funciones o con ocasión de ellas (artículos 133 del Código Penal
de 1980, modificado por el 19 de la ley 190 de 1995, y 397 del estatuto
vigente).
504
5.La respuesta a este cargo impone recordar que cuando el reproche se
postula por la vía de la infracción mediata de la ley sustancial, al demandante
le corresponde demostrar la existencia de errores de apreciación probatoria,
de hecho o de derecho, señalando su naturaleza específica. Pero, más allá de
ello, debe acreditar la trascendencia del desacierto en las conclusiones del
fallo recurrido, esto es, comprobar que de no haberse incurrido en el error
otro sería el sentido de la decisión.
Desde ningún punto de vista podía considerarlo coautor del peculado, porque
fue llamado a responder en juicio como determinador de esa conducta.
Además, no podía tener tal condición en la medida que no ejecutó
directamente la conducta y tampoco reunía las calidades que se exigen al
sujeto agente de esa ilicitud, pues se trata de un particular, no de un servidor
público a quien por razón de sus funciones se le hubiere encomendado la
administración, tenencia o custodia de los bienes apropiados.
Sentencia Casación
FECHA : 30/09/2009
DECISION : Desestima cargos de casación, casa oficiosa y
parcialmente a fin de aplicar desc
DELITOS : Peculado por apropiación
PROCESO : 27231
PUBLICADA : Si
505
09/11/2009
506
privación de la locomoción […] resulta un dato que no desquicia el juicio de
adecuación típica (3)" .
---------------------------------------------------------------------
(1)Cf., entre otras, providencias de 23 de febrero de 2006, radicación 24109,
29 de junio de 2006, radicación 25499, y 26 de marzo de 2008, radicación
25550.
(2)Sentencia de 31 de octubre de 2002, radicación 15612, citando al fallo de
29 de octubre de 1986.
(3) Sentencia de 26 de enero de 2005, radicación 21474.
(4)Sentencia de 2 de julio de 2008, radicación 23438.
(5) Sentencia de 4 de mayo de 2006, radicación 24531
(6) Ibídem.
(7)Sentencia de 29 de junio de 2006, radicación 24529.
Auto Casación
FECHA : 09/11/2009
507
DECISION : Inadmite demanda de casación
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Secuestro
extorsivo agravado
PROCESO : 28289
PUBLICADA : No
09/12/2009
508
En esas precisas condiciones (fundamento fáctico) resulta legítima la
deducción de responsabilidad penal contra ("), como coautor (2) (fundamento
jurídico), porque la manera como participó en el plan delictivo admite la
cooperación de un número plural de complotados que trazan un objetivo
ilícito (hurtar el dinero que porta la víctima utilizando armas de fuego para
minimizar la reacción previsible) y asumen deliberadamente la criminal
empresa y las consecuencias que ella pueda acarrear.
-------------------------------------------------------------------
(1)En la página 10 de la sentencia, el Tribunal precisó que no es propiamente
un "coautor impropio", sino que es un "autor conjunto" de las conductas que
atentaron contra la vida de las víctimas.
(2)Discusión que no altera las consecuencias punitivas.
(3) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sentencia Casación del 25 de abril de
2000, rad. núm. 11925.
509
14/12/2009
PONENTE(S) :
510
DECISION : Condena a Gonzalo García Angarita, no
condena por daños,líbrese orden de captura
PROCESO : 27941
PUBLICADA : No
511
y juzgar al ("), competencia que ahora se extiende para proferir la sentencia a
partir de los autos de primero y quince de septiembre del presente año,
mediante los cuales la Sala Penal reasumió las investigaciones y procesos
seguidos contra miembros del Congreso de la República que hubieran
renunciado al fuero o perdido la investidura, cuando la infracción imputada
es de aquellas que se deducen del desarrollo de la función, de las actividades
desplegadas en el ejercicio del cargo, como en los procesos fundados en el
concierto para delinquir agravado, se dispuso que la fijación definitiva de la
competencia, reglamentada en la Constitución, la realizaría la Corte Suprema
de Justicia, como órgano máximo de la jurisdicción ordinaria, en cada caso
particular.
512
grupos armados al margen de la ley", lo cual conlleva a un mayor agravio al
bien jurídico de la seguridad pública y por ende la variada respuesta punitiva.
El artículo 340 del Código Penal define diversas formas de ataque al bien
jurídico que denotan la manera progresiva como se atenta contra la seguridad
pública. Así, en el inciso segundo, es el acuerdo de voluntades para promover,
organizar, financiar o armar grupos armados al margen de la ley, lo que le da
sentido al injusto, en el contexto de una modalidad muy propia de los tipos de
peligro; y en el tercero, desde la óptica de la efectiva lesión, se sanciona la
conducta de armar, financiar o promocionar a tales grupos. Eso implica que
se describen comportamientos secuenciales en escala de menor a mayor
gravedad, cuya lesividad se refleja precisamente en el tratamiento punitivo,
como corresponde al principio de proporcionalidad.
Desde ese punto de vista y teniendo en cuenta la teleología del tipo penal -que
excluye cualquier visión concursal- es claro que quien arma, financia,
organiza o promociona grupos armados al margen de la ley, previamente
acuerda la ejecución de ese tipo de finalidades, lo cual significa que la
513
modalidad progresiva de ataque al bien jurídico permite afirmar que su
efectiva ejecución asume el desvalor de los pasos secuenciales que le dan
origen y sentido a la conducta; y de otra parte, que allí en donde no se logra
consolidar de manera efectiva la promoción, organización o financiación, de
todas maneras el injusto persiste, porque mediante la anticipación de la
barrera de protección de bienes jurídicos basta el acuerdo para tener por
satisfecho el injusto.
514
forman parte de ellos, en las que se les veía portando armas y ropa
camuflada.
515
de tiempo, modo y lugar, el análisis posterior y la confrontación con todo el
caudal probatorio, resulta ser un ejercicio de la mayor complejidad para
desentrañar de una postura testimonial el aporte a la verdad que pretende
probarse en el proceso penal.
516
racional, en aras de establecer cuándo el declarante habló con la verdad y
cuándo no .
La asistencia a la reunión por parte del sindicado (") no sólo fue voluntaria,
sino que con ella se generó un peligro para la seguridad pública.
No desconoce la Sala que es bien posible que los alcaldes de los municipios de
esa zona del departamento sintieran temor porque el grupo ilegal había dado
señales de que sus órdenes tenían que cumplirse en los términos que ellos
decían; sin embargo, esa situación no puede llevar a que se acepte, como lo
solicitan el Fiscal Delegado, el Ministerio Público y la defensa del doctor (") un
estado de coacción general que permita reconocer la exculpante que se
sugiere, la cual exige la inminencia de un riesgo concreto contra un bien
jurídico, el que sólo es posible salvar mediante el sacrificio de otro, requisitos
de los cuales la situación adolece.
Es más, el sacrificio del bien jurídico para salvar otro supone que no existe
alternativa diferente a esa opción. El doctor (")intuyó que de no acudir al
517
llamado del comandante podían sobrevenir peligros en el futuro, su condición
de Alcalde le permitía denunciar las presiones y solicitar la protección
indispensable ante las autoridades de policía y militares, pero sólo se limitó a
poner en conocimiento del Gobernador los hechos como la Masacre del Neme,
pero no existe denuncia o información concreta acerca del "secuestro" del que
fue víctima en la vereda Luisa García; por el contrario, el testimonio de los
habitantes lleva a concluir, como ya se expuso, que la connivencia con los
miembros del Bloque Tolima era el normal vivir de los habitantes y quienes
allí laboraban, como al parecer se desprende de las declaraciones de los
contratistas quienes nunca percibieron situaciones anormales, ni vieron
paramilitares, ni nunca hicieron aportes, ni jamás les fue solicitado dinero o
cuotas para el sostenimiento de las Autodefensas Unidas de Colombia.
518
Sentenia Unica Instancia
FECHA : 14/12/2009
DECISION : Condena al Procesado , no hay lugar a
condena por daños y perjuicios,
DELITOS : Concierto para delinquir agravado
PROCESO : 27941
PUBLICADA : Si
27/01/2010
519
del proyecto de ley 040 de 1998, a la postre sancionado como Ley 599 de
2000. (3) .
520
"El que, con ocasión y en desarrollo de conflicto armado, ocasione la muerte
de persona protegida conforme a los Convenios Internacionales sobre Derecho
Humanitario ratificados por Colombia, incurrirá en prisión de treinta (30) a
cuarenta (40) años, multa de dos mil (2.000) a cinco mil (5.000) salarios
mínimos legales mensuales vigentes, e inhabilitación para el ejercicio de
derechos y funciones públicas de quince (15) a veinte (20) años.
Parágrafo. Para los efectos de este artículo y las demás normas del presente
título se entiende por personas protegidas conforme al derecho internacional
humanitario:
521
"… En la situación de conflicto armado interno que padece Colombia, muchas
de las conductas vulneratorias o amenazadoras de Derechos Humanos,
constituyen a la vez infracciones al derecho internacional humanitario. Son
ellas actuaciones u omisiones con las cuales quienes participan directamente
en las hostilidades -los combatientes- incumplen los deberes o quebrantan las
prohibiciones que les ha impuesto el artículo 3 común a los cuatro Convenios
de Ginebra y el Protocolo II Adicional. […]
522
presunta de algunos miembros de esa comunidad a la guerrilla,
argumentaron en sentido inverso a esa realidad demostrada, afirmando que
tales hechos no aparecían vinculados al conflicto armado no internacional
523
Pero además, las pruebas también revelan que ese accionar no fue un caso
aislado: son múltiples las referencias procesales en cuanto a la existencia de
otras incursiones armadas al mismo Corregimiento de Atánquez y a sitios
aledaños al mismo por parte de las Autodefensas Unidas de Colombia, como
la presencia permanente de sus miembros en dicha zona, quienes efectuaban
control sobre la población y retenes en los caminos, ocasiones en las cuales
tras identificar a quienes presuntamente colaboraban con la guerrilla,
procedían a darles muerte, accionar coincidente en cuanto a su modalidad y
tiempo con los homicidios materia de esta actuación.
(ii) Que entre la guerrilla y las autodefensas no hay combates sino un frío
matrimonio de intereses ilegales, lo cual impide calificar los hechos como
acaecidos en desarrollo de un conflicto armado:
524
armados organizados que bajo la forma de aparatos militares irregulares,
llevan a cabo operaciones de esa misma naturaleza disputándose el control
territorial de vastas zonas del país, entre ellas, donde tuvieron lugar las
muertes acá investigadas.
En tal sentido, acerca del ámbito de aplicación de los tipos penales contra
personas y bienes protegidos por el D.I.H., precisó la Sala en reciente
decisión(6) :
Sentencia Casacion
FECHA : 27/01/2010
525
DECISION : Casa parcialmente modificando denominación,
reajusta pena, oficia a fiscalia ...
DELITOS : Homicidio en persona protegida, Concierto
para delinquir agravado
PROCESO : 29753
PUBLICADA : Si
17/02/2010
526
"Esas son las razones por las que el incumplimiento del principio de
investigación integral, desde la perspectiva de la Constitución y del sistema de
investigación y enjuiciamiento de la Ley 600 de 2000, puede constituir
irregularidad sustancial que atenta contra el debido proceso, por desacato de
los servidores del referido mandato superior (artículo 250 C. P.) y de las
normas que, haciendo parte del Bloque de Constitucionalidad, lo desarrollan,
así como de lo señalado en los artículos 20 y 234 del Código de Procedimiento
Penal (Ley 600 de 2000), en los cuales se hace énfasis en que al funcionario
judicial le corresponde buscar la "verdad real", para lo cual le corresponde
averiguar con igual celo tanto "las circunstancias que demuestren la
existencia de la conducta punible, las que agraven, atenúen o exoneren de
responsabilidad al procesado y las que tiendan a demostrar su inocencia"."(1)
2. Además de lo anterior, el derecho a la prueba no es ilimitado en cuanto está
supeditado a criterios de racionalidad relacionados con que las pruebas a
practicar sean conducentes, pertinentes y útiles a la investigación a fin de
representar lo sucedido, así como de posibilidad encaminado a que su
realización sea factible.
3. Por ello, cuando en sede de casación se denuncia la infracción del principio
de investigación integral, si bien es dable que el demandante acuda a
argumentos especulativos para mostrar la otra arista de lo que pudo haber
sido con la inclusión de los elementos de convicción dejados de practicar, sus
proposiciones (premisas que fundamenten conclusiones) han de mantener
una identidad formal y de contenido con miras a motivar la intervención de la
Corte.
En efecto, para valorar la contundencia del argumento y advertir
preliminarmente que los elementos de convicción dejados de practicar tenían
la capacidad de modificar el estado fáctico y probatorio de la actuación y por
ende trastocar el sentido de la decisión, el demandante debe realizar la
confrontación de lo que ellos arrojarían frente a las motivaciones del fallo y
evidenciar así la vulneración de las garantías del procesado.
Por lo mismo, no es suficiente enumerar las pruebas cuya práctica se
considera omitida, sino que es preciso señalar su fuente, conducencia,
pertinencia y utilidad, sin desatender la posible incidencia favorable a los
intereses del incriminado, pues tal situación no puede ser catalogada en sí
misma como una irregularidad sustancial si se avizora que tales pruebas eran
inconducentes, dilatorias, inútiles o superfluas, o también cuando pese a ser
relevantes para la demostración de los hechos, su ausencia es intrascendente
al estar suplidas a través de otros medios de convicción.
También, para una tal pretensión de invalidez de la actuación por carencia
probatoria se han de atender los principios que gobiernan las nulidades al
señalar la específica causal que legalmente la consagra, argumentar según el
principio de instrumentalidad de las formas en dónde se origina la falencia de
actividad y si ésta no cumplió con la finalidad para la que estaba prevista,
además objetivar y demostrar que el vicio afectó las garantías o las bases
fundamentales de la instrucción y el juzgamiento conforme al principio de
trascendencia, pero principalmente, acreditar que el sujeto procesal no
coadyuvó con su conducta a la configuración de la actuación irregular de
acuerdo al principio de protección, ni que lo hubiese convalidado con su
527
consentimiento según el principio de convalidación, siempre que se hubiesen
observado las garantías fundamentales.
4. A este respecto, la Corte insiste en que el ataque casacional de la prueba
circunstancial dada su compleja construcción (se acude a un proceso lógico
deductivo, a partir de una regla de la experiencia y la comprobación de un
hecho indicador, para inferir la existencia de otro hecho), requiere claridad
acerca del momento o paso en el cual recae.
Efectivamente, se ha de identificar si la equivocación judicial se cometió
respecto de los medios demostrativos de los hechos indicadores, la inferencia
lógica, o en el proceso de valoración conjunta al apreciar la articulación,
convergencia y concordancia de los varios indicios entre sí, o entre éstos y las
restantes pruebas.
Si el error radica en la apreciación del hecho indicador, como debe
acreditarse con otro medio de prueba, se ha de establecer si se trata de un
yerro de hecho o de derecho y con su modalidad (falso juicio de existencia, de
identidad o raciocinio; o falso juicio de legalidad o de convicción, en uno y
otro caso), pero si el yerro se ubica en el nexo inferencial, se ha de aceptar la
validez del medio con el que se acredita el hecho indicador y demostrar que el
juzgador en su apreciación se apartó de las leyes de la ciencia, los principios
de la lógica o las reglas de la experiencia, para seguidamente señalar en qué
consiste y cuál es su operancia correcta, así como su trascendencia en la
decisión impugnada.
5. Ciertamente, de acuerdo con la teoría del dominio del hecho, es autor quien
domina el hecho y para efectos de la coautoría lo decisivo es tener un dominio
funcional del hecho, pues cada sujeto domina el acontecer total en
cooperación con los demás, no tiene en sí mismo un dominio parcial, ni
tampoco el dominio global, sino que éste se predica de todos, por eso de
acuerdo con la definición prevista en el artículo 29 de la Ley 600 de 2000 "Son
coautores los que, mediando un acuerdo común, actúan con división del
trabajo criminal atendiendo la importancia del aporte".
La Corte Suprema de Justicia acerca de ese típico ha enfatizado en la
necesaria presencia de los siguientes elementos: i) un acuerdo o plan común;
ii) división de funciones y iii) trascendencia del aporte en la fase ejecutiva del
ilícito.
-------------------------------------------------------------------------------------------
1) Corte Suprema de Justicia, sentencia de casación de 10 de febrero de 2010.
Radicación 29755.
Entre otras, sentencia de casación de 21 de agosto de 2003. Rad. 19213.
Auto Casacion
FECHA : 17/02/2010
DECISION : Inadmite demenda de casacion
DELITOS : Peculado por apropiación
PROCESO : 33321
PUBLICADA : No
528
21/02/2010
Mecanismo de Insistencia
FECHA : 21/02/2010
DECISION : No consede mecanismo de insistencia
DELITOS : Porte ilegal de armas, Homicidio agravado
PROCESO : 32647
PUBLICADA : No
23/02/2010
529
FUNCIONES PUBLICAS-Motivación/ INHABILITACION PARA EL EJERCICIO
DE DERECHOS Y FUNCIONES PUBLICAS-Dosificación punitiva/
INHABILITACION PARA EL EJERCICIO DE DERECHOS Y FUNCIONES
PUBLICAS-Dosificación punitiva: Concurso/ INDEMNIZACION DE
PERJUICIOS-El juez los liquidará con base en lo demostrado en el proceso/
SUSPENSION CONDICIONAL DE LA EJECUCION DE LA PENA-Factor
objetivo/ PRISION DOMICILIARIA-Factor objetivo: Su ausencia libera de
analizar el subjetivo/ DESPLAZAMIENTO FORZADO-Evolución legislativa/
FUERO-Congresista: Conservación de competencia en caso de renuncia
(Aclaración de voto)/ CASO MASACRE DE MACAYEPO/ PARAPOLITICA
530
tareas y concurrencia de aportes -los cuales pueden consistir en órdenes en
secuencia y descendentes-, realizaron conductas punibles, fenómeno que es
factible comprenderlo a través de la metáfora de la Cadena .(3) (tesis continua
ver providencia..........)
Sobre tal grabación, varios fueron los reparos planteados por la defensa, con
miras a atacar su legalidad y autenticidad, argumentándose que esa
conversación fue producto de una ilícita interceptación, como también que es
técnicamente imposible haberla captado accidentalmente a través de la
frecuencia 843,910 MHz, como lo sostuvo el Comandante del Departamento
de Policía de Sucre. (tesis continua ver providencia................)
531
administración de los mismos. La solución jurídica que se impone -como se
dijo- es imputarle el peculado por apropiación a título de determinador, figura
dogmática sobre el nivel de intervención criminal en un hecho que es
plenamente compatible.
Es cierto, como lo precisó el defensor del ex Senador que en 2001 (") refirió
que de manera personal (") dio la orden de muerte en presencia de Salvador
Arana, Joaquín García y el mismo testigo, mientras que en su declaración de
Canadá, al volver sobre el tema señaló que telefónicamente (") le hizo el pedido
de aquél hecho de sangre al ganadero.
No comparte la Sala, sin embargo, que esa variación en el relato acredite que
el declarante es mentiroso. Cuando algo así pasa, no se discute, es mayor la
cautela en la crítica sobre el medio de prueba, lo cual no lleva a tacharlo de
mendaz de entrada por la presencia de aquellas divergencias circunstanciales
de los relatos. En este caso, ha de tenerse en cuenta que (") rindió alrededor
de cincuenta o más declaraciones sobre diferentes temas y ante variadas
autoridades, unidas estas circunstancias al transcurso del tiempo -hechos de
1997 se retomaron en el 2007-.(tesis continua ver providencia...............)
9.Tal conducta está tipificada en el artículo 103 del Código Penal de 2000 con
sanción de prisión entre 13 y 25 años, la cual resulta aplicable por
favorabilidad, ya que la que regía para el momento de los hechos, el artículo
323 del Código Penal de 1980 -con el aumento de punibilidad introducido por
la Ley 40 de 1993-, establecía como pena entre 25 y 40 años de prisión.
532
10. Tal como se dejó analizado en la providencia de llamamiento a juicio, el
homicidio no fue perpetrado con la consideración de que la víctima era
servidora pública, por lo que no cabría imputar la causal octava del artículo
324 del Código Penal de 1980. Como lo aclaró el artículo 104-9 del Código
Penal de 2000, acogiendo la reiterada interpretación jurisprudencial sobre el
particular, el homicidio se agrava cuando se cometa en persona que tenga la
condición de servidor público, siempre y cuando la conducta se realice en
razón de ello.
11.Vistas las distintas penas correspondientes a las conductas por las que se
juzgó al procesado y teniendo en cuenta que son más favorables los criterios
de dosimetría penal consagrados en la Ley 599 de 2000, se procederá a
graduar la pena de prisión, la de multa y la de interdicción de derechos y
funciones públicas a través del sistema de cuartos, partiendo de la que le
corresponde al delito más grave, para aumentarla hasta en otro tanto según
los lineamientos del artículo 31 ibidem, y, siguiendo las reglas de la tasación
para el caso de concurso de conductas punibles.
533
13. La referida sanción penal pecuniaria, sólo aparece prevista como pena
principal para los delitos de concierto para delinquir agravado, oscilando entre
dos mil (2.000) y veinte mil (20.000) salarios mínimos legales mensuales
vigentes y para el peculado por apropiación, en donde corresponderá al valor
de lo apropiado.
En tal medida, atendiendo los parámetros del artículo 39, numeral 4° del
estatuto penal sustantivo, corresponde tasar la correspondiente a cada delito
y luego proceder a su sumatoria, sin que, en todo caso, pueda ser superior a
cincuenta mil (50.000) salarios mínimos legales mensuales, así:
14.De manera preliminar se observa que esta sanción sólo acompaña los
delitos concursantes de homicidio simple y agravado y el de concierto para
delinquir en calidad de pena accesoria, en cambio, respecto del peculado por
apropiación fue prevista como pena principal, tanto en el artículo 133 del
decreto Ley 100 de 1980, como en el actual artículo 397 de la Ley 599 de
2000.
En esa dirección, establece el artículo 133 del Decreto Ley de 1980, con las
modificaciones introducidas por la Ley 190 de 1995, que en caso de peculado
el servidor público será inhabilitado para ejercer derechos y desempeñar
cargos públicos por un término de seis (6) a quince (15) años.
Los criterios para la dosificación de esta pena serán los mismos referidos con
antelación, de tal manera que corresponde dosificar esta sanción dentro de los
límites de los cuartos medios, esto es, de ocho (8) años, tres (3) meses y un (1)
día a hasta doce (12) años, nueve (9) meses.
534
A partir de este ámbito de punibilidad, para establecer la inhabilitación no
puede dejar de considerarse que el procesado fue uno de los gestores en la
consolidación de los grupos armados ilegales en su departamento; además, les
brindó apoyo constante por diferentes medios en calidad de Senador de la
República durante los años de permanencia del grupo en el departamento,
gestiones que por supuesto obedecieron a intereses mutuos, entre otros,
asegurar su poder político, convirtiéndose en una persona importante para el
desarrollo de las políticas de las autodefensas y así, en parte de la estructura.
(tesis continua ver providenca)
Por ello, se expedirá copia de esta decisión para que esta Corporación inicie la
correspondiente investigación en contra del ex Senador (") por dicha conducta.
------------------------------------------------------------------------------------
535
PONENTE(S) : SALA DE CASACION PENAL
Sentencia Unica Instancia
FECHA : 23/02/2010
DECISION : Condena por varios delitos, absuelve por otros,
niega subrogados, compulsa copia
DELITOS : Peculado por apropiación, Homicidio agravado,
Homicidio, Concierto para conformación de grupos armados
PROCESO : 32805
PUBLICADA : No
NOTAS ACLARATORIAS : DR.JAVIER DE JESUS ZAPATA ORTIZ -
Aclaración de voto
DR.JORGE LUIS QUINTERO MILANES -
Aclaración de voto
10/03/2010
536
desconocimiento de garantías defensivas (errores in procedendo de garantía),
ora por errores en la aplicación de la ley o en la contemplación material o
jurídica de las pruebas (errores in iudicando de hecho o de derecho) con
entidad para comprometer la legalidad del fallo.
-----------------------------------------------------------------------------------------------
1) Cfr. CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Auto del 15 de diciembre de 2008,
rad. núm. 30665; en el mismo sentido, del Auto del 20 de abril de 2005, rad.
núm. 23517; auto del 24 de noviembre de 2005, Rad. 23897; auto del 23 de
marzo de 2006, rad. núm. 24065, entre otras.
537
2) En la página 10 de la sentencia, el Tribunal precisó que no es propiamente
un "coautor impropio", sino que es un "autor conjunto" de las conductas que
atentaron contra la vida de las víctimas.
3) CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sentencia de revisión del 9 de noviembre
de 2009, rad. núm. 32288; ib. Casación del 25 de abril de 2000, rad. núm.
11925, entre otras.
05/05/2010
3) A su vez, el inciso 2º del artículo 184 de la ley 906 de 2004 señala que no
será admitida la demanda de casación "cuando de su contexto se advierta
fundadamente que no se precisa del fallo para cumplir alguna de las
finalidades del recurso", lo que puede darse cuando la Corte advierta que la
538
controversia jurídica planteada no tiene incidencia alguna en relación con lo
decidido en el caso concreto, o que podrá responder a los planteamientos del
recurrente sin tener que efectuar valoraciones de fondo acerca de lo que
ocurrió en la actuación.
539
Así mismo, prescribe que todo Estado Parte adoptará las medidas necesarias
para que, "como mínimo", los actos relacionados con la "producción,
distribución, divulgación, importación, exportación, oferta, venta o posesión"
de pornografía con menores de edad "queden íntegramente comprendidos en
su legislación penal, tanto si se han cometido dentro como fuera de sus
fronteras, o si se han perpetrado individual o colectivamente", "disposiciones
que se aplicarán también en los casos de tentativa de cometer cualquiera de
estos actos y de complicidad o participación en cualquiera de estos actos"
(artículo 3, numeral 1 literal c y numeral 2).
12/05/2010
540
y (ii) presentar una demanda que cumpla las condiciones mínimas de forma y
contenido requeridas por la ley y la lógica casacional para su estudio.
Además, las razones que aduce el demandante para persuadir a la Corte sobre
la necesidad de admitir la demanda, deben guardar correspondencia con los
cargos que formule contra la sentencia. Lo anterior porque no podría
entenderse cumplido el requisito de sustentación, de manera que si se
reclama el pronunciamiento de la Sala sobre la protección de los derechos
fundamentales o un específico tema, es apenas elemental que la censura le
permita a esta Corporación examinar en concreto uno o los dos puntos que la
habilitan. En otras palabras, debe haber perfecta conformidad entre el
fundamento de la casación excepcional (desarrollo de la jurisprudencia y/o
protección de garantías fundamentales), el cargo o los cargos que se formulen
contra el fallo y, por consiguiente, el desarrollo de los mismos.
541
(i) identificación de los sujetos procesales y de la sentencia impugnada, (ii)
resumen de los hechos y de la actuación procesal, y (iii) demostración del
cargo, exigencia que implica señalar la causal invocada, las normas
procesales y sustanciales transgredidas, y las razones del reparo, todo dentro
del marco de los principios que rigen la casación y la lógica de la causal
planteada.
542
(ii).- Acuerdo común(6) significa conexión subjetiva entre los intervinientes, la
cual puede ser tácita o expresa. A través de aquel se genera una comunidad
de ánimo dolosa entre los mismos. Dicho nexo se da alrededor de un plan
común (no necesariamente detallado) y una resolución colectiva(7) en el
objetivo de lograr la materialización de una o varias conductas punibles
determinadas.
Se entiende por tal, aquel sin el cual el plan acordado no tiene culminación
porque al retirarlo se frustra o reduce de manera significativa el riesgo de su
materialización, o al compartirlo se lleva a cabo.
543
(v).- Una de las maneras de hacer efectivo y concreto el juicio de valor acerca
de si el aporte es importante o no en los términos establecidos en el artículo
29.2 ejusdem, consiste en hacer un ejercicio de abstracción y excluirlo del
escenario funcional del evento objeto de juzgamiento.
Desde la teoría del delito, se entiende que los itinerarios puramente ideativos
de los comportamientos ilícitos no son punibles, porque ello traduciría
penalizar las expresiones del pensamiento, por ello, un apoyo en esta etapa no
constituye coautoría, tampoco cuando se evidencia en actos preparatorios.
544
unipersonal, donde la fase interna y externa están claramente delimitadas y
coinciden exactamente con la parte objetiva y subjetiva de la acción. En el
quehacer de sujeto múltiple la voluntad de la acción viene a cuajar mediante
una exteriorización del pensamiento u opinión de los participantes, que es
una fase de objetivación que la ley castiga a veces como conspiración o
proposición, situaciones que no se dan en la acción individual. Mario Garrido
Montt, Etapas..., ob. cit., página 25.
(7) Lo esencial en la acción de sujeto múltiple (sic) es la existencia de una
meta a alcanzar que se sabe común a todos los que intervienen, de la
voluntad de realizar una actividad en conjunto tendiente a lograrla mediante
la distribución del trabajo que han estimado como necesario. En el plano
normativo se requiere también tener en cuenta el tipo penal de que se trate,
pues no todos ellos aceptan la posibilidad de la acción colectiva (...)
No es lo mismo que dos o más personas tengan propósitos iguales a que
tengan una meta común. Es frecuente que, independientemente, varias
personas pueden pretender un objetivo ilícito idéntico sin que estén
conectadas por vinculación alguna y desarrollen separadamente, aun
ignorando la existencia del otro, un plan tendiente a lograrlo. Pero aquí no hay
un objetivo común, pues el objetivo aparece como particular de cada uno de
los sujetos a los cuales puede serles indiferente el de los otros. (...)
El objetivo común de la acción colectiva puede no coincidir exactamente con el
que alguno de los correalizadores individualmente puede preferir, a pesar de
ello, todos lo acatan y lo hacen suyo. Esta circunstancia da peculiaridades
propias a la acción colectiva. Así, la voluntad que impulsa la actividad a
desarrollar es diferente de la de los sujetos que la realizan, porque es
resultado de una confabulación, en cuya formación se ha participado o a la
cual se ha adherido después de formada, y domina y supedita la voluntad de
cada uno de los que intervienen. Mario Garrido Montt, Etapas..., ob. cit.,
página 24.
(8) La ejecución colectiva es otra característica en esta clase de acción, en ella
hay una distribución de la actividad, determinada por los mismos actores.
Unos pueden quedar a nivel de dirección del plan, otros en el de preparación
de los medios y condiciones de ejecución y otros hacerse cargo de su ejecución
material. Pueden desarrollar unos una labor exclusivamente intelectual y
tener más importancia en el plano de la realización que el hechor (sic) directo.
Estas modalidades hacen que el iter criminis en el comportamiento de sujeto
plural sea más complejo y corresponda tratarlo con criterio diverso que al del
hacer individual. Mario Garrido Montt, Etapas..., ob. cit., página 25.
(9) El proceso de desarrollo constituye lo que los prácticos denominaban iter
criminis y corresponde al proceso psicofísico del delito, que tiene su iniciación
en la mente del hombre y que acaba con la concreción de lo que aquel se
había propuesto. Las diversas etapas pueden estar conformadas por el
planeamiento, la preparación, la ejecución, la consumación y el agotamiento.
Las figuras descritas por la ley se presentan normalmente como consumadas,
salvo excepciones en que acciones de preparación o de principio de ejecución
son descritas en sí mismas como delitos. Los delitos se reprimen desde que el
legislador lo señala, esto es desde que se comienza la ejecución -tentativa- de
manera que cada tipo del C.P. debe entenderse constiuido conforme al art. 7º
545
por su consumación y por las etapas anteriores de ejecución referidas en el
artículo citado. Mario Garrido Montt, Etapas..., ob. cit., página 46.
546
fundamentales; para ello, deberá formular y desarrollar los
correspondientes cargos y, por supuesto, demostrar la necesidad de
intervención de la Corte para lograr algunos de los fines establecidos para la
casación, según lo previsto en el artículo 180 de esa normatividad, es decir, la
efectividad del derecho material, el respeto de las garantías de los
intervinientes, la reparación de los agravios sufridos por éstos y la unificación
de la jurisprudencia, propósitos que, como lo tiene dicho la jurisprudencia de
la Corte, son los mismos del proceso penal, lo que explica que las causales de
casación tengan un diseño dirigido a lograr esos fines.
547
igualdad de armas. Pero la garantía no puede avanzar hacia asegurar el uso
que el interviniente pueda hacer -o no- de la evidencia, pues eso hace parte de
autonomía que la asiste para orientar su propia gestión defensiva.
548
"Así, se concluye que la coautoría es una modalidad de coparticipación
criminal cuyo influjo se proyecta en la responsabilidad penal y la
comunicabilidad de circunstancias, pero que nada tiene que ver con la
tipicidad de los delitos que cometen los partícipes.
Del texto penal que describe el concierto para delinquir se extractan sus
elementos estructurales, algunos coincidentes con los rasgos que caracterizan
a la coautoría, pero otros permiten diferenciarlo en todo caso de ésta, y cuya
concurrencia tratándose de la conducta reprochada a los integrantes de la
Mesa Directiva de la Cámara de Representantes surge de hechos que la Sala
encontró demostrados en lo cursado de la presente investigación y que fueron
expuestos en las motivaciones que anteceden al consignar el análisis de los
medios de convicción legalmente recaudados a esta fase del proceso.
549
En el presente evento, la situación fáctica debatida ilustra la ocurrencia o
configuración de un concurso material heterogéneo de conductas punibles, y
desde tal perspectiva fue acertada la atribución de cargos, y posterior
condena, por los delitos de peculado por apropiación y falsedad en documento
privado, ambas en modalidad continuada." (Rad. 24184 del 23 de septiembre
de 2008)
"De otra parte, son igualmente infructuosas las afirmaciones del censor
acerca de la configuración de un "concurso aparente de tipos" entre el
peculado por apropiación y la falsedad en documento privado, con base en
que se trató de un delito "único o complejo", pues tal figura únicamente se
presenta,
"…en la medida en que un hecho delictivo forme parte de otra conducta típica,
bien como elemento integrante de éste o como circunstancia de agravación
punitiva(3) . Los hechos apreciados aisladamente, si ello fuere posible,
constituiría por sí mismos delitos. En aquella clase de delito unitario, el
complejo, el legislador fusiona o reúne en una tipicidad penal o prevé como
agravante de la misma hechos y situaciones objetivas de variada índole, de
modo que se excluye la pluralidad de infracciones, vale decir, el concurso de
delitos; el hecho que aislado configuraría una infracción se convierte por
voluntad de la ley en elemento de una figura delictiva especial o en
circunstancia de agravación de la misma, perdiendo el carácter de ente
jurídico autónomo, pues de no ser así se violaría el principio non bis in
ídem(4) .
"... [N]o debe confundirse el delito complejo con los delitos conexos. El primero
supone que las distintas conductas estructuran un sólo hecho punible y los
segundos la configuración de varios, jurídicamente autónomos, pero conexos
ideológica, consecuencial u ocasionalmente(5) . Además, la noción de delito
complejo supone algo más que un delito pluriofensivo o de ofensa múltiple. El
primero implica que la estructura de un tipo reúne en una unidad dos o más
tipos. El segundo no necesariamente exige un delito complejo, sino sólo una
pluralidad de bienes jurídicos afectados."(6)
550
10. Así mismo, esta Sala ha precisado que los incrementos punitivos fijados
en la Ley 890 de 2004 "rigen en cada distrito judicial a partir del momento en
que entre a operar el sistema acusatorio de la Ley 906 de 2004"(7) .
11. contradice los claros criterios que la Sala ha fijado y reiterado de largo
tiempo atrás sobre la tesis que aquí defiende la impugnante:
"(...) la Corte ha reiterado que hay eventos en que el negocio jurídico
constituye el medio más idóneo para hacer incurrir a la víctima en error y, por
consiguiente, vulnerar el bien jurídico tutelado del patrimonio económico,
pues a través de este acto se le da visos de legalidad a un acuerdo de
voluntades que está regido para una de las partes en la obtención de un
provecho ilícito. Es así como en decisión del 10 de agosto de 2000, se dijo:
"…lejos de excluir el artículo 356 del Código Penal los contratos como medio
de artificio o engaños que utilizados por el timador como simple apariencia de
obligarse pueden generar error esencial en el ofendido, tanto la doctrina como
la jurisprudencia admiten la posibilidad de su empleo como parte de los
medios defraudatorios, destacando justamente en aquellos la sutileza del
ardid y su no infrencuente uso, al punto de sostener que:
551
contraprestación, porque esta es la causa misma del acto o contrato según el
derecho civi.l
"" Si una parte engaña a la otra, por ejemplo, sobre su capacidad de pagar,
haciéndole creer que la tiene cuando, en realidad, carece de ella, bien sea de
modo absoluto o en forma que, de saber su situación, la otra no hubiera
contratado, o cuando calla estando obligado a manifestar su incapacidad de
pagar, ya no se trata de un silencio o de una mentira lícitos, sino plenamente
delictuosos"" (Sentencia de casación del 23 de junio de 1982).(9)
"Es verdad que en ocasiones "... pasan al campo penal la mentira o el silencio
cuando recaen sobre elementos fundamentales del contrato, por ejemplo, la
existencia de una contraprestación, porque es la causa misma del acto o
contrato según el derecho civil", pero la actividad inductora en error no se
reduce sólo a no decir la verdad sino que la mentira o el silencio hacen parte
de una compleja situación vivencial, a la que nada hay que añadir para que se
produzca el efecto patrimonial deseado por el timador. Es, por decirlo de otra
forma, el aprovechamiento de las circunstancias concretas en que se establece
o permanece una relación social, personal o comercial específica, que le dan
respaldo y hacen creíble la mentira.
____________________________________________________________
552
(2) Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, sentencia de única
instancia del 23 de septiembre de 2003, radicación No. 17089.
Auto Casación
FECHA : 12/05/2010
DECISION : Inadmite demanda
DELITOS : Falsedad en documento privado, Concierto
para delinquir, Estafa agravada por la cuantía
PROCESO : 32411
PUBLICADA : No
14/07/2010
553
1. No es cierto, como lo destaca la Delegada, que todas las pruebas
enunciadas fueron omitidas por el fallador de segunda instancia, pues como
se deduce claramente de la lectura del fallo, muchas de ellas sí fueron
consideradas, pero lo que sucede es que en su análisis se dejaron por fuera
apartes trascendentes, por lo que el yerro no es configurativo, en estricto
sentido, de un falso juicio de existencia por omisión, sino de un falso juicio de
identidad por cercenamiento parcial de la prueba, modalidades del error de
hecho que claramente ha distinguido la jurisprudencia de la Sala.
554
identidad(3), aspecto que sin embargo, ha sido superado con la admisión de la
demanda, por las razones que se consignaron con antelación.
555
afectaba directamente a su hijo, porque como lo aceptó con posterioridad, su
hijo adolescente fue miembro de esa banda criminal liderada por los agentes
del orden, razón poderosa, aún con vida su hijo, para omitir relatar todo
aquello que podía perjudicarlo penalmente.
Pero, la muerte de Oscar liberó ese prejuicio y pudo dar rienda suelta a ese
conocimiento que ya, huelga resaltar, no podía afectarlo.
556
De allí que, entre las tres normatividades que han tocado el caso, la más
favorable para los procesados es la Ley 599 de 2000, sin la modificación de la
Ley 890, en cuanto fija una pena de veinticinco (25) a cuarenta (40) años, que
fue la que precisamente escogió el Juzgado. Sin embargo, como lo advierte la
Delegada, al hacer la tasación por el concurso y sumarlo a la pena inicial, fijó
la pena en 600 meses de prisión, que equivalen a cincuenta (50) años,
quantum que resulta más desfavorable porque como ya se dijo, bajo el
régimen de la Ley 599 la pena máxima de prisión a imponer a un procesado
no puede exceder los cuarenta (40) años.
Desde luego la precisión que hace la Sala sólo busca delimitar adecuadamente
los hechos y sus consecuencias, sin que ello afecte positiva o negativamente la
condición sub judice de los condenados, evidente como se hace que en todas
las condiciones referenciadas la sanción opera dentro de los mismos límites
punitivos.
____________________________________________________
(1) Ver, entre otras, casación del 22 de julio de 2009, radicado No. 27.277.
(2) Casación del 7 de julio de 2008, radicado No. 29.374.
557
(3) El primero surge cuando el juzgador, al hacer la valoración de la prueba,
se aparta de uno o varios de los elementos que informan la sana crítica, esto
es, la ciencia, la lógica o la experiencia. En el segundo, el proceso de
apreciación de la prueba afecta su contenido literal ya sea por
fraccionamientos o cercenamientos, lo que conlleva a la desfiguración de la
prueba en su sentido material.
(4) Casación del 21 de mayo de 2009, radicado No. 22.825.
Sentencia Casación
FECHA : 14/07/2010
DECISION : Si casa, revoca y deja en firme sentencia
condenatoria de 1a instancia
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 26414
PUBLICADA : Si
28/07/2010
558
Acerca de lo anterior, la Sala ha precisado lo siguiente:
"Si bien es cierto que el inciso 2º del artículo 29 de la Ley 599 de 2000, actual
Código Penal, tan solo consagra como coautoría aquella en la que los sujetos
activos de la conducta, "mediando un acuerdo común, actúan con división del
trabajo criminal atendiendo la importancia del aporte", también lo es que,
tradicionalmente, la Sala ha distinguido dos clases de participación plural de
personas en la realización de la conducta punible.
"Una de las diferencias fundamentales entre ambas figuras radica en que, por
un lado, en la coautoría propia aún es predicable el principio de necesidad,
propio de las teorías de la participación de corte objetivo-material, según la
cual es autor (o, en el evento de una pluralidad de sujetos agentes, coautor)
quien realiza una aportación imprescindible y causal al resultado típico, sin la
que éste jamás se hubiera podido concretar.
""[...] cuando existe una resolución común al hecho, lo que haga cada uno de
los coautores es extensible a todos los demás, sin perjuicio de que las otras
contribuciones individualmente consideradas sean o no por sí solas
constitutivas de delito [sentencia de 2 de julio de 2008, radicación 23438]".
"De esta manera, salta a la vista que en la figura de que trata el inciso 2º del
artículo 29 del Código Penal no es posible aplicar el principio de necesidad de
la aportación causal, en la medida en que cada uno de los coautores necesita
la intervención de los demás en aras de la obtención del fin común. En otras
palabras, el dominio del hecho es conjunto, porque existe una
interdependencia funcional entre los partícipes (1)" .
559
3) Si bien es cierto que la causalidad (en tanto ley, fenómeno empírico o hecho
natural) ha sido cuestionada desde los albores del siglo XX en razón del
desarrollo del conocimiento científico (tanto en el ámbito de las partículas
subatómicas -física cuántica- como en el del cosmos -teoría de la relatividad),
también lo es que ello no ha sido obstáculo para que, en la vida cotidiana, su
importancia continúe vigente. Por el contrario, constituye el primer paso,
necesario mas no suficiente, para efectos de atribuir el resultado previsto en el
tipo como obra o consecuencia de la conducta de determinada persona.
De ahí que el epígrafe del artículo 23 del Código Penal Militar defina a la
causalidad como un "presupuesto mínimo de imputación", o que el cuerpo
final del inciso 1º del artículo 9 de la Ley 599 de 2000 señale que ésta "por sí
sola no basta para la imputación jurídica del resultado", o que incluso en la
doctrina se sostuviese que "el primer presupuesto de la realización del tipo es
siempre que el autor haya causado el resultado"(2) .
560
previsto en los artículos 111, 112 inciso 2º y 113 inciso 2º del Código Penal
ordinario.
________________________________
(1) Sentencia de 14 de octubre de 2009, radicación 26266.
(2) Roxin, Claus, Derecho penal. Parte general. Tomo I. Fundamentos. La
estructura de la teoría del delito, Civitas, Madrid, 1997, § 11, 1.
(3) Formulado en principio por Traeger, era presentado como la conducta del
tío que con la intención de heredarlo envía a su sobrino a una colina llena de
árboles para que muera por un rayo, pero en la actualidad se formula como la
del sobrino que convence a su tío de hacer lo propio. Cf. Schünemann, Bernd,
Temas actuales y permanentes del derecho penal después del milenio, Tecnos,
Madrid, 2002, p. 73.
(4) Es de anotar que la solución del caso de la tempestad varía dependiendo
del esquema de la teoría del delito que se maneje. En el finalismo, se resolvía
negando la "voluntad homicida", o el dolo de matar (Welzel, Hans, Derecho
penal alemán, Editorial Jurídica de Chile, Santiago, 1970, p. 97). De acuerdo
con la teoría de la imputación al tipo objetivo, faltaría la creación de un peligro
no abarcado por el riesgo permitido (Roxin, Op. cit., § 11, 45).
(5) Sentencia de 5 de diciembre de 2007, radicación 26513.
09/08/2010
1- Por otro lado, las posteriores referencias probatorias del actor están
dirigidas a corroborar los términos de dicho acuerdo, coincidiendo en ello con
la ponderación de los juzgadores, pues recuérdese que, como lo ha dicho la
Sala, la mera referencia probatoria no implica necesariamente fijar la
controversia en lindes de la violación indirecta de la ley sustancial.
561
"Acuerdo significa conformidad, asentimiento, reflexión y madurez de
determinación.
... Las anteriores exigencias coinciden con las generalmente adosadas, antes y
ahora, a la coautoría, vale decir, acuerdo y decisión plural; sentimiento de
actuar en una obra propia inserta en una labor global, común;
comportamiento signado por esa directriz, o co-dominio del hecho; y aporte de
algo importante durante la ejecución del delito, todo ello, desde luego, mirado
objetiva y subjetivamente.
Dos. Cada uno de los comprometidos sienta que formando parte de una
colectividad con un propósito definido, el hecho es suyo, pero incluido dentro
de una obra mayor, global, es decir, perteneciente, imbricada, realizada por
todos los concurrentes o, dicho con otras palabras, la persona debe sentir que
cumple tareas en interdependencia funcional.
Uno. El co-dominio funcional del hecho, entendiendo por tal que los varios
individuos, sin sometimiento, dependencia o subordinación de uno o unos de
ellos a otro u otros de ellos, se dirijan a la misma finalidad con un
comportamiento esencial, mirado no en términos absolutos sino relativos.
Por conducta esencial se debe entender, primero, que sin ella es imposible
cometer el hecho; o, segundo, que si una de las personas se opone o entra en
divergencia con las otras, pueda hacer fracasar el plan, molestarlo o variarlo
en su desarrollo; o, tercero, que la intrusión de las personas no debe ser
meramente casual, accidental o secundaria.
Esa contribución común en pro del mismo fin puede ser material o moral
-"espiritual"-, por ejemplo cuando, en esta última hipótesis, la presencia
definida de uno de los comuneros refuerza o estimula el cumplimiento del
562
plan trazado, presiona y multiplica las energías de los otros, apoya al resto,
reduce las defensas de la víctima, aumenta la intimidación padecida por ésta,
incrementa la agresividad de los otros autores o comporta una mayor
seguridad para estos en cuanto, vgr., la cantidad de sujetos intensifica el
amedrantamiento que sufre la persona objeto de la acción, etc.
Y el aporte durante la ejecución del hecho quiere decir que la prestación que
hace la persona debe ocurrir, total o parcialmente, entre el momento en que
se inicia la realización del verbo rector que guía la conducta criminal y el logro
de la consumación. De esta manera, el comportamiento frente a la pura
ideación delictiva o a los actos preparatorios, no constituye coautoría, como
tampoco aquél subsiguiente a la consumación o al último acto en materia de
tentativa de delito" (1) .
Ahora bien, como en el caso que se somete a estudio ningún reparo surge en
cuanto a que (...) actuó como verdadero coautor en el delito de secuestro
perpetrado en la persona de Germán Ortiz Novoa, tópico que pacíficamente
acepta el casacionista tras resultar incontrastable la existencia de un acuerdo
común en tal sentido, la distribución de tareas para lograr ese designio y la
importancia de su aporte, ninguna disquisición se efectuará sobre ese
particular, debiendo centrarse la atención exclusivamente en determinar si
resulta válido imputarle responsabilidad en el delito de homicidio agravado de
la víctima, el que fuera materialmente cometido poco después por los también
integrantes de esa empresa criminal a cuya custodia quedó el plagiado en una
cancha de tejo cercana de donde fue sustraído.
563
(1) Sentencia de fecha agosto 21 de 2003, rad. 19213.
(2) Sentencia de 2 de julio de 2008, rad. 23438. En el mismo sentido
sentencia de 18 de marzo de 2009, rad. 26631 y auto de 9 de noviembre del
mismo año rad. 28289
(3) URS KINDHÄUSER, Cuestiones fundamentales de la coautoría, traducción
de Manuel Cancio Melía, Bogotá, Universidad Externado de Colombia, 2002,
pág. 7. (4) CLAUS, ROXÍN, Autoría y dominio del hecho en Derecho Penal,
Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, S.A., Madrid, 1998, pág. 315.
22/09/2010
564
con lo señalado en el artículo 180 ibídem, tiene como propósitos lograr la
efectividad del derecho material, el respeto de las garantías fundamentales, la
reparación de los agravios inferidos y la unificación de la jurisprudencia.
3) A su vez, el inciso 2º del artículo 184 del ordenamiento procesal señala que
no será admitida la demanda de casación "cuando de su contexto se advierta
fundadamente que no se precisa del fallo para cumplir alguna de las
finalidades del recurso", lo que puede darse cuando la Corte encuentre a la
controversia planteada carente de incidencia alguna frente a lo decidido en el
caso concreto, o cuando pueda responder a los planteamientos del recurrente
sin tener que efectuar valoraciones de fondo acerca de lo que ocurrió en la
actuación.
5) Tal argumento es a todas luces insostenible, pues el artículo 119 del Código
de Procedimiento Penal (mencionado por el demandante en apoyo de su
postura) establece de manera clara e inequívoca que la elección del asistente
letrado "deberá hacerse desde la captura si hubiere lugar a ello" (inciso 1º), e
incluso que el "presunto implicado en una investigación podrá designar
defensor desde la comunicación que de esa situación le haga la Fiscalía"
(inciso 2º).
565
en el entendido de que el derecho de defensa sólo se puede ejercer desde el
momento en que se adquiere la condición de imputado, sería violatoria del
derecho de defensa.
Por su parte, la Sala ha sostenido que el actual régimen "comporta una noción
adversarial de partes gobernada por el principio de objetividad establecido en
el artículo 115 de la Ley 906 de 2004 (4)" y, por lo tanto, "no es posible
reprochar en el proceso acusatorio [...] omisiones en materia probatoria (5)" ,
sobre todo cuando, a la luz de los parámetros internacionales,
""[...] (i) interrogar o hacer interrogar a los testigos de cargo, (ii) interrogar o
hacer interrogar a cualquier otra persona que como testigo o perito pueda
arrojar luz acerca de los hechos y (iii) obtener la comparecencia de todos ellos
para que sean interrogados en igualdad de condiciones a los testigos de la
acusación (6)"" .
566
procesal de instrucción que posibilite la participación destruiría justamente la
verdadera instrucción [...], el imputado tendría todas las posibilidades de
hacer uso de sus derechos de participar no para averiguar la verdad, sino
para impedir una averiguación (9)" .
6) La Corte advierte que el inciso final del artículo 393 del Código de
Procedimiento Penal establece que el testigo "deberá permanecer a disposición
del juez durante el término que éste determine"; o que, en virtud del artículo
384 ibídem, la defensa puede solicitar medidas especiales para asegurar la
presencia de los testigos, en el evento de que se negaren a comparecer.
"En legislaciones foráneas que han sido fuentes de consulta, no sólo para la
estructuración del modelo acusatorio acogido mediante la Ley 906 de 2004,
sino, también, para aclarar los casos dudosos presentados durante su
implementación, se consagra como regla que "El juez que preside un juicio o
vista tendrá control y amplia discreción sobre el modo en que la evidencia es
presentada y los testigos son interrogados [...] en la forma más efectiva posible
para el esclarecimiento de la verdad, velando por la mayor rapidez de los
procedimientos y evitando dilaciones innecesarias", prerrogativa que
"descansa en la sana discreción del tribunal de instancia" [...]
"En conclusión, con respaldo en autorizada doctrina, puede afirmarse que "el
orden de incorporación de la prueba, en principio, es un asunto que le
compete al presidente del tribunal, pero debe satisfacer los principios del fair
trial", esto es, el de igualdad de armas(10)" .
567
policía judicial, adecuará su actuación a un criterio objetivo y transparente,
ajustado jurídicamente para la correcta aplicación de la Constitución Política
y la ley".
5) Auto de 30 de septiembre de 2009, radicación 32616.
6) Ibídem, citando a las sentencias de 28 de mayo de 2008, radicaciones
22476 y 22726.
7) Bernal Cuellar, Jaime, y Montealegre Lynett, Eduardo, El proceso penal,
Universidad Externado de Colombia, Bogotá, 5ª Edición, 2004, p. 150. Y
añaden, no obstante, que el organismo acusador "tampoco tiene potestad
alguna para omitir la evidencia que descargue la posible responsabilidad del
imputado".
8) Roxin, Claus, Derecho procesal penal, Editores del Puerto, Buenos Aires,
2000, p. 123.
9) "Cuestiones básicas de la estructura y reforma del procedimiento penal bajo
una perspectiva global" (conferencia pronunciada en Bogotá en el año 2004),
en Schünemann, Bernd, Obras. Tomo II, Rubinzal-Culzoni, 2009, pp. 417-
418.
10)Auto de 28 de noviembre de 2007, radicación 28656, citando a Reglas de
evidencia de Puerto Rico y Federales, Regla 43 (c); y Chiesa Aponte, Ernesto
L., Tratado de derecho probatorio, Publicaciones JTS, Estados Unidos, 2005,
Tomo II, p. 325; y Roxin, Op. cit., p. 359, respectivamente.
20/10/2010
568
No obstante, se debe resaltar que la des-formalización no convierte a la
casación penal en una tercera instancia para prolongar en libre discurso los
debates dados en las instancias sobre un presunto error por indebida
aplicación del artículo 29 inciso 2º de la ley 599 de 2000, argumento que de
manera aparente y descontextualizada de los hechos se desarrolló en la
demanda.
En esta sede extraordinaria a efecto de la prosperidad de los cargos antes que
exigencias formales de debida técnica lo que se demandan son requerimientos
lógico-jurídicos contundentes en la finalidad de demostrar con efectiva
trascendencia sustancial que la declaración de justicia objeto de impugnación,
la cual llega a esta sede extraordinaria amparada por el principio de la doble
presunción de acierto y legalidad, se fundó en vicios in iudicando o se profirió
al interior de un juicio viciado por irregularidades sustanciales que afectaron
la estructura o la garantía del debido proceso o del derecho de defensa,
falencias claramente diferenciadas en sus alcances que reclaman el
correspondiente control legal o constitucional y los necesarios correctivos.
(…)
Tratándose de una demanda de casación presentada contra una sentencia
proferida que corresponda al sistema acusatorio, la Sala ha precisado de
manera reiterada que el censor debe orientar lo acusado en orden a demostrar
con trascendencia argumentativa que en el trámite instrumental o en el fallo
de segundo grado se afectaron principios, derechos o garantías fundamentales
de incidencia sustancial o procesal, para lo cual habrá de invocar la causal de
que se trate para el caso señalándola de manera singular, e indicar las
razones con las cuales estima se ha materializado la modalidad de error o
violación, sin olvidar de referirse así sea de manera abreviada pero puntual
cuál de los fines consagrados para la casación en los términos del artículo 180
ejusdem amerita necesaria la intervención de la Corte, valga decir, si se hace
indispensable para lograr la efectividad del derecho material, el respeto de las
garantías de los intervinientes, la reparación de los agravios inferidos a ellos,
o lo relativo a la unificación de la jurisprudencia.
Como la casación penal es rogada y por esencia se constituye en un juicio
objetivo y lógico-jurídico con el que se pretende la ruptura sustancial total o
aminorada o la invalidación procesal que se eleva contra las sentencias objeto
de control de constitucionalidad y legalidad, resulta de utilidad metodológica
que el impugnante acoja los lineamientos dados por la jurisprudencia de la
Sala Penal los cuales tienen fuerza vinculante y se incorporan al postulado de
imperio de la ley en los términos de la Sentencia C-836 de 2001, para de esa
forma adentrarse en ésta sede extraordinaria en el desarrollo y sustentación
de los diferentes motivos de casación consagrados en el artículo 181 ibídem,
pautas que como eslabones armónicos se constituyen en un conjunto de
directrices orientados a conseguir que el casacionista argumente los objetos
de censura de acuerdo con unos dictados mínimos que sean lógicos y
coherentes, más no en libre discurso, anteponiendo sus criterios de valoración
a los efectuados por el Tribunal, como aquí ha ocurrido.
569
misma como en efecto lo hacía el anterior artículo 212, se observa que de los
artículos 183 y 184 de la Ley 906 de 2004 se derivan las siguientes:
(i).- Que se señalen de manera precisa y concisa las causales invocadas, (ii).-
Desarrollen los cargos, expresen sus fundamentos o se ofrezca una
sustentación mínima, y, (iii).- Demuestre que el fallo es necesario para
cumplir algunas de las finalidades del recurso.
570
elementos: acuerdo común, división del trabajo criminal e importancia de los
aportes.
(II).- ACUERDO COMÚN(1) significa conexión subjetiva entre los
intervinientes, la cual puede ser tácita o expresa. A través de aquel se genera
una comunidad de ánimo dolosa entre los mismos. Dicho nexo se da
alrededor de un plan común (no necesariamente detallado) y una resolución
colectiva(2) en el objetivo de lograr la materialización de una o varias
conductas punibles determinadas.
Cuando la concurrencia de voluntades se orienta en la finalidad de cometer
plurales (no singulares) delitos indeterminados o los específicos de que trata el
artículo 340 inciso 1º y 2º de la ley 599 de 2000, la adecuación típica se
traslada al comportamiento de concierto para delinquir.
(ii).- LA DIVISIÓN FUNCIONAL DEL TRABAJO(3) criminal se consolida a
través del acuerdo de voluntades. Por virtud de éste se reparte el todo en
partes, en parcelas de esfuerzos que valorados ex ante y ex post permiten
hablar de una acción compleja o conjunta formada por segmentos articulados
que vistos en singular y por separado no se advierten suficientes para
determinar la conducta punible de que se trate, pero que unidos la explican
como pluralidad de causas o condiciones.
(iii).- La fragmentación de labores convergentes conduce a que el control del
comportamiento delictivo no lo ejerce una persona sino todos los que
concurren al designio delictivo de que se trate. Por ello los co-autores ejercen
un co-dominio funcional. En esa medida sus realizaciones parciales son
mancomunadas y recíprocas.
(iv).- IMPORTANCIA DEL APORTE.- Para la configuración del instituto se
requiere en los términos inequívocos del artículo 29.2 de la ley 599 de 2000,
que el aporte objetivo o material (pues no se puede hablar de coautoría por
contribución moral o meramente espiritual) sea ESENCIAL, valga decir,
NECESARIO para la realización del hecho.
Se entiende por tal, aquel sin el cual el plan acordado no tiene culminación
porque al retirarlo se frustra o reduce de manera significativa el riesgo de su
materialización, o al compartirlo se lleva a cabo.
Por oposición al apoyo funcional así considerado, suelen darse los
accidentales, secundarios o subsidiarios en cuyo evento no puede hablarse de
coautoría sino de complicidad.
La sola posibilidad de evitar la conducta punible no se erige como
presupuesto fundamental de la forma de intervención tratada, pues ésta
circunstancia al igual se le puede presentar al mero partícipe o incluso a
terceras personas que se encuentran en el escenario a través de una voz de
alerta a los vecinos o a la policía. De aceptarse el criterio en cita se corre el
peligroso riesgo por demás contrario a la estricta legalidad de hacer extensiva
la figura de la autoría compartida hacia personas que no cumplen con esa
calidad.
(v).- Una de las maneras de hacer efectivo y concreto el juicio de valor acerca
de si el aporte es importante o no en los términos establecidos en el artículo
29.2 ejusdem, consiste en hacer un ejercicio de abstracción y excluirlo del
escenario funcional del evento objeto de juzgamiento.
Si el comportamiento delictuoso no se produce o bien reduce de manera
significativa el riesgo de su logro, se puede llegar sin dificultad a la existencia
571
de la coautoría, y si al apartarlo aquel de todas formas se consumaría, la
valoración a la que se puede arribar es que se está ante la presencia de una
complicidad.
(vi).- La contribución de esa calidad la que implica intervención de la persona,
debe darse durante la fase ejecutiva(4) del delito, valga decir, entre el
momento en que se inicia la realización del verbo rector que caracteriza la
conducta punible de que se trate, esto es, la fase tentada y el instante de su
consumación.
Desde la teoría del delito, se entiende que los itinerarios puramente ideativos
de los comportamientos ilícitos no son punibles, porque ello traduciría
penalizar las expresiones del pensamiento, por ello, un apoyo en esta etapa no
constituye coautoría, tampoco cuando se evidencia en actos preparatorios.
En igual sentido, por su obviedad no puede hablarse de autoría compartida
más allá de la consumación o del último acto constitutivo de tentativa de la
conducta punible(5) .
572
un objetivo común, pues el objetivo aparece como particular de cada uno de
los sujetos a los cuales puede serles indiferente el de los otros. (...)
El objetivo común de la acción colectiva puede no coincidir exactamente con el
que alguno de los correalizadores individualmente puede preferir, a pesar de
ello, todos lo acatan y lo hacen suyo. Esta circunstancia da peculiaridades
propias a la acción colectiva. Así, la voluntad que impulsa la actividad a
desarrollar es diferente de la de los sujetos que la realizan, porque es
resultado de una confabulación, en cuya formación se ha participado o a la
cual se ha adherido después de formada, y domina y supedita la voluntad de
cada uno de los que intervienen. MARIO GARRIDO MONTT, Etapas…, ob. cit.,
p. 24.
(3)La ejecución colectiva es otra característica en esta clase de acción, en ella
hay una distribución de la actividad, determinada por los mismos actores.
Unos pueden quedar a nivel de dirección del plan, otros en el de preparación
de los medios y condiciones de ejecución y otros hacerse cargo de su ejecución
material. Pueden desarrollar unos una labor exclusivamente intelectual y
tener más importancia en el plano de la realización que el hecho directo. Estas
modalidades hacen que el iter criminis en el comportamiento de sujeto plural
sea más complejo y corresponda tratarlo con criterio diverso que al del hacer
individual. (...) Etapas…, ob. cit., p. 25.
(4)El proceso de desarrollo constituye lo que los prácticos denominaban iter
criminis y corresponde al proceso psicofísico del delito, que tiene su iniciación
en la mente del hombre y que acaba con la concreción de lo que aquel se
había propuesto. Las diversas etapas pueden estar conformadas por el
planeamiento, la preparación, la ejecución, la consumación y el agotamiento.
Las figuras descritas por la ley se presentan normalmente como consumadas,
salvo excepciones en que acciones de preparación o de principio de ejecución
son descritas en sí mismas como delitos. Los delitos se reprimen desde que el
legislador lo señala, esto es desde que se comienza la ejecución -tentativa- de
manera que cada tipo del C.P. debe entenderse constiuido conforme al art. 7º
por su consumación y por las etapas anteriores de ejecución referidas en el
artículo citado. (..), Etapas…, ob. cit., p. 46.
(5)Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, sentencia del 2 de
septiembre de 2009, Radicado 29.221
Auto Casación
FECHA : 20/10/2010
DECISION : Se inadmite la demanda, advertir que es viable
mecanismo de insistencia
DELITOS : Homicidio agravado, Fabricación, trafic. y port.
de armas de F.M.
PROCESO : 34244
PUBLICADA : No
573
DEMANDA DE CASACION-Formulación de los cargos/ SANA CRITICA-
Noción/ FALSO RACIOCINIO-Técnica en casación/ COAUTORIA-
Configuración/ SENTENCIA-Motivación/ SENTENCIA-Falta de motivación/
SENTENCIA-Falsa motivación/ ESTAFA-Engaño con brujería
574
único ha ocurrido, en el cual de manera simple se pregonó que la motivación
efectuada por el ad quem era incompleta pues carecía de razones suficientes.
575
singular y por separado no se advierten suficientes para determinar la
conducta punible de que se trate, pero que unidos la explican como pluralidad
de causas o condiciones.
Se entiende por tal, aquel sin el cual el plan acordado no tiene culminación
porque al retirarlo se frustra o reduce de manera significativa el riesgo de su
materialización, o al compartirlo se lleva a cabo.
(v).- Una de las maneras de hacer efectivo y concreto el juicio de valor acerca
de si el aporte es importante o no en los términos establecidos en el artículo
29.2 ejusdem, consiste en hacer un ejercicio de abstracción y excluirlo del
escenario funcional del evento objeto de juzgamiento.
Si el comportamiento delictuoso no se produce o bien reduce de manera
significativa el riesgo de su logro, se puede llegar sin dificultad a la existencia
de la coautoría, y si al apartarlo aquel de todas formas se consumaría, la
valoración a la que se puede arribar es que se está ante la presencia de una
complicidad.
576
Desde la teoría del delito, se entiende que los itinerarios puramente ideativos
de los comportamientos ilícitos no son punibles, porque ello traduciría
penalizar las expresiones del pensamiento, por ello, un apoyo en esta etapa no
constituye coautoría, tampoco cuando se evidencia en actos preparatorios.
577
DECISION : Se inadmite la demanda de casación
DELITOS : Estafa agravada
PROCESO : 35084
PUBLICADA : No
17/11/2010
578
4. aun cuando la demanda no contenga las exigencias de orden lógica o
argumentativa exigidos para su admisibilidad, en el evento en que la Sala
advierta la necesidad de proferir un fallo de fondo con el objeto de garantizar
sus fines, sería del caso superar la deficiencia y adentrarse en el estudio de
fondo, sin que éste sea el caso.
(I) La insistencia es un mecanismo especial que sólo puede ser promovido por
el demandante, dentro de los cinco (5) días siguientes a la notificación de la
579
providencia por cuyo medio la Sala decida inadmitir la demanda de casación,
con el fin de provocar que ésta reconsidere lo decidido. También podrá ser
propuesto oficiosamente dentro del mismo término por alguno de los
Delegados del Ministerio Público para la Casación Penal -siempre que el
recurso de casación no hubiera sido interpuesto por un Procurador Judicial-,
el Magistrado disidente o el Magistrado que no haya participado en los
debates o suscrito la providencia inadmisoria.
(IV) El auto a través del cual se inadmite la demanda de casación trae como
consecuencia la firmeza de la sentencia de segunda instancia contra la cual se
formuló el recurso de casación, salvo que la insistencia prospere y conlleve a
la admisión de la demanda, o que la Corte proceda a casar de oficio.
______________________________________________________________
1. Casación 24323, 24 de noviembre de 2005.
2. Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, radicación 24.323,
auto del 24 de noviembre de 2005.
3. Providencia del 12 de diciembre de 2005. radicación 24322.
580
1. De conformidad con lo establecido en el artículo 181 de la Ley 906 de 2004
(Código de Procedimiento Penal vigente para este asunto), el recurso de
casación es un mecanismo de control tanto constitucional como legal que
procede contra los fallos proferidos en segunda instancia y que, de acuerdo
con lo señalado en el artículo 180 ibídem, tiene como propósitos lograr la
efectividad del derecho material, el respeto de las garantías fundamentales, la
reparación de los agravios inferidos y la unificación de la jurisprudencia.
3. A su vez, el inciso 2º del artículo 184 del ordenamiento procesal señala que
no será admitida la demanda de casación "cuando de su contexto se advierta
fundadamente que no se precisa del fallo para cumplir alguna de las
finalidades del recurso", lo que puede darse cuando la Corte encuentre a la
controversia planteada carente de incidencia alguna frente a lo decidido en el
caso concreto, o cuando pueda responder a los planteamientos del recurrente
sin tener que efectuar valoraciones de fondo acerca de lo que ocurrió en la
actuación.
581
procesado no es razón suficiente para configurar causal de impedimento
alguna, pues una postura en tal sentido:
"[…] no sólo parte del inaudito supuesto de que todas las personas que son
acusadas como coautores tendrían que ser declaradas penalmente
responsables si sólo a una de ellas se la hallase como tal, sino que además
desconoce que a cada uno de los implicados se le deberá probar de manera
individual un aporte trascendente a la realización del resultado típico"(4).
(i) Falso juicio de existencia, que se presenta cuando el ad quem omite valorar
el contenido material de un medio probatorio debida-mente incorporado a la
actuación, o le concede valor a uno que jamás fue recaudado y, por
consiguiente, supone su existencia; (ii) falso juicio de identidad, que consiste
en la tergiversación o distorsión por parte del juez plural del contenido
sustantivo de determinado medio de prueba, haciéndole decir lo que en
realidad no dice, bien sea porque realiza una lectura equivocada de su texto, o
porque le agrega aspectos que no contiene, o porque omite tener en cuenta
partes importantes del mismo; y (iii) falso raciocinio, que ocurre cuando la
segunda instancia se aleja al momento de valorar los elementos de convicción
de los postulados de la sana crítica, es decir, de las leyes científicas, los
principios de la lógica o las máximas de la experiencia.
_________________________________________
(1) Cf., entre muchos otros, autos de 4 de abril de 2006, radicación 24187,
y 15 de mayo de 2008, radicación 28716. En el mismo sentido, sentencia de
30 de marzo de 2009, radicación 30710.
(2) Sentencia de 27 de enero de 2010, radicación 29674. En el mismo
sentido, sentencias de 19 de enero de 2006, radicación 20769; 27 de marzo de
2007, radicación 26066; 1º de noviembre de 2007, radicación 28482; 26 de
marzo de 2008, radicación 25610; 6 de mayo de 2009, radicación 29328;
entre otras.
(3) Ibídem.
(4) Auto de 14 de noviembre de 2007, radicación 28633.
582
PONENTE(S) : DR.JULIO ENRIQUE SOCHA
SALAMANCA
Auto Casación
FECHA : 17/11/2010
DECISION : Inadmite demanda de casación, procede
mecanismo de insistencia
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Tentativa de
homicidio agravado, Fabric. y tráf. de armas fuego de def.persona
PROCESO : 35051
PUBLICADA : Si
09/12/2010
1- A este respecto basta recordar que la tipología adoptada por el Código Penal
divide la intervención de diversas personas en la conducta punible, esto es, la
coparticipación criminal, en autores y partícipes, clasificando a su vez entre
los primeros al autor inmediato o individual, al autor mediato y al coautor, en
tanto que en los segundos comprende a los cómplices y determinadores.
Tratándose por tanto del instigador, esto es, de quien determina a otro a
realizar la conducta punible, político-criminalmente el Estatuto represor ha
punido con la misma intensidad a éste copartícipe y al autor. Es así que el
art. 30 dispone que corresponde a "quien determina a otro a realizar la
conducta antijurídica...la pena prevista para la infracción", esto es,
consecuentemente, la misma en que estaría incurso el autor, sin que valga
decir -que dada la independiente regulación legal-, se pueda confundir desde
el punto de vista de su diversa esencia y contenido dogmático uno y otro.
De hecho, el consecuente punitivo se equiparó en el Código para autores,
coautores y determinadores, existiendo una disminución de la sanción para
los cómplices.
583
de pruebas cuya procedencia y trascendencia aparece imperiosa dentro de la
actuación procesal por conducir a la demostración de la verdad real de los
hechos, o cuando la no aportación de un medio de convicción al proceso es
efecto de una arbitraria, injustificada e inmotivada negativa por parte del
servidor judicial, caso este último, precisamente, que es en modo alguno
equiparable a aquéllos en que la no realización de la prueba deprecada se ha
debido a un rechazo en la orden de su práctica por resultar ilegal,
impertinente, inconducente y/o superflua, esto es, cuando es ostensible su
inidoneidad legal y fáctica.
5- Como ha quedado definido desde hace un par de lustros por la Corte, bajo
el concepto de falso raciocinio -pues tratándose de un ejercicio errado de
raciocinio se excluyó en su dogmática presentación denominarlo "falso
juicio"-, se impone al demandante el deber de evidenciar de qué forma y cuál
de los elementos que integran el método o sistema de la sana crítica en la
valoración de las pruebas, ha sido transgredido por el juzgador, esto es, que le
corresponde al casacionista indicar el fundamento que avala el
desconocimiento de las reglas propias de la lógica, la ciencia o la experiencia
común de que el mismo emana, resultando por ello absolutamente etéreo y
generalizado, simplemente acusar por falso raciocinio como suele hacerse, con
el confuso entendido de que dicho vicio se refleja a través de un elemental
enunciado de inconformidad valorativa de las pruebas.
584
Sentencia Casación
FECHA : 09/12/2010
DECISION : No casa la sentencia impugnada
DELITOS : Homicidio agravado
PROCESO : 29943
PUBLICADA : No
31/08/2011
585
desmovilizado sobre defensor/ LEY DE JUSTICIA Y PAZ-Beneficios: Exclusión,
falta de aceptación de cargos/ LEY DE JUSTICIA Y PAZ-Audiencia de
formulación de cargos: Aceptación de cargos, debe ser completa/
DESPLAZAMIENTO FORZADO-Vinculación con el conflicto armado/ LEY DE
JUSTICIA Y PAZ-Concierto para delinquir: Pertenencia al grupo armado ilegal,
concurso con porte ilegal de armas/ PORTE ILEGAL DE ARMAS-No concursa
con pertenencia con concierto para delinquir, pertenencia al grupo armado
ilegal, Ley de Justicia y Paz/ CONCIERTO PARA DELINQUIR-Pertenencia a
grupo armado ilegal, no concursa con porte de armas, Ley de Justicia y Paz
586
incluso se advirtió cómo, finalmente, esa tensión entre lo procesal y la verdad
histórica requerida por las víctimas, torna necesario acudir a mecanismos
complementarios, ajenos a la intervención judicial, tal cual sucede con las
llamadas Comisiones de la Verdad.
587
desmovilizado conoce y la Fiscalía está en capacidad de investigar, para no
hablar de los medios económicos o patrimoniales con los cuales pueda ser
satisfecha la pretensión resarcitoria.
En este sentido, es prudente significar que uno solo de los procesos, dígase el
que ahora se tramita, apenas constituye fragmento del todo ejecutado por el
grupo criminal y, en general, por las organizaciones armadas al margen de la
ley, por manera que no resulta posible exigir de la parte virtudes
omnicomprensivas, únicamente pasibles de adquirir cuando la totalidad de
los procesos culminen y se haya reconstruido lo más exhaustivamente posible
el accionar, finalidades, hechos, daños y víctimas de ese tipo de violencia.
Así las cosas, como se anotó ya, cuando el Tribunal, y la Corte en segunda
instancia, deben hacer el correspondiente pronunciamiento respecto al
cumplimiento de los objetivos de la audiencia de legalización de cargos, han
de verificar, en concreto, si el postulado efectivamente narró todo lo por él
conocido, si la Fiscalía adelantó al respecto una investigación juiciosa
encaminada a corroborar o desvirtuar lo narrado, si se tomaron en
consideración las controversias y elementos de juicio aportados por los demás
intervinientes, especialmente las víctimas y, finalmente, si la denominación
típica de los hechos es la adecuada.
588
En este sentido, el que no haya superado mínimos raseros constitucionales
una legislación anterior que propugnaba por favorecer casi automáticamente
a estos desmovilizados con el principio de oportunidad, lejos de sustentar la
necesidad de variar la posición de la Corte, advierte de cómo ella es acertada,
pues, delitos graves o de lesa humanidad no pueden pasar indemnes por
raseros de impunidad que además de abjurar, para el país, los compromisos
internacionales suscritos, representan ostensible vulneración de caros
derechos de las víctimas, resumidos en verdad, justicia y reparación.
Sin embargo, la simple revisión del auto en cuestión advierte que allí sólo se
acudió a criterios objetivos, remitiendo a lo que las normas sustanciales
detallan para contabilizar esos términos, sin que se hiciera algún tipo de
evaluación, así fuese accesoria, respecto a la naturaleza del delito, la
connotación de lesa humanidad que lo acompaña, o los efectos que ello tiene
en punto de prescripción.
589
"Si la parte de las sentencias que tiene fuerza normativa son los principios y
reglas jurídicas, ello significa que no todo el texto de su motivación resulta
obligatorio. Para determinar qué parte de la motivación de las sentencias
tiene fuerza normativa resulta útil la distinción conceptual que ha hecho en
diversas oportunidades esta Corporación entre los llamados obiter dicta o
afirmaciones dichas de paso, y los ratione decidendi o fundamentos jurídicos
suficientes, que son inescindibles de la decisión sobre un determinado punto
de derecho. (2) Sólo estos últimos resultan obligatorios, mientras los obiter
dicta, o aquellas afirmaciones que no se relacionan de manera directa y
necesaria con la decisión, constituyen criterios auxiliares de la actividad
judicial en los términos del inciso 2º del artículo 230 de la Constitución. Por
supuesto, la definición general de dichos elementos no es unívoca, y la
distinción entre unos y otros en cada caso no resulta siempre clara. Sin
embargo, la identificación, interpretación y formulación de los fundamentos
jurídicos inescindibles de una decisión, son labores de interpretación que
corresponden a los jueces, y principalmente a las altas Cortes. La ratio
decidendi de un caso, por supuesto, no siempre es fácil de extraer de la parte
motiva de una sentencia judicial como tal, y por lo tanto, su obligatoriedad no
implica la vinculación formal del juez a determinado fragmento de la sentencia
descontextualizado de los hechos y de la decisión, aun cuando resulta
conveniente que las altas Cortes planteen dichos principios de la manera más
adecuada y explícita en el texto de la providencia, sin extender ni limitar su
aplicabilidad, desconociendo o sobrevalorando la relevancia material de
aquellos aspectos fácticos y jurídicos necesarios para su formulación en cada
caso concreto".
590
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1. Auto del 10 de abril de 2008, radicado 29472.
2. Sobre los conceptos de ratio decidendi y obiter dicta ver las siguientes
providencias: SU-168/99, (M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz), SU-047/99 (M.P.
Alejandro Martínez Caballero), SU-640/98 (M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz),
T-961/00 (M.P. Alfredo Beltrán Sierra), T-937/99 (M.P. Alvaro Tafur Galvis),
Auto A-016/00 (M.P. Alvaro Tafur Galvis), T-022/01 (M.P. Cristina Pardo
Schlesinger), T-1003/00 (M.P. Alvaro Tafur Galvis).
28/09/2011
591
contemplados en la Carta Política y los tratados de derechos humanos -bloque
de constitucionalidad- de aquellos sujetos que intervienen dentro del proceso
penal.
Por ello se insiste en que además del interés jurídico para recurrir, un libelo
casacional implica que las razones expuestas sean jurídica y fácticamente
presentadas con fundados motivos inherentes a cada causal y con miras a la
realización de alguno los fines consagrados en el artículo 180 del C. de P.P.,
esto es, la efectividad del derecho material, el respeto a las garantías de los
intervinientes, la reparación de los agravios inferidos y la unificación de la
jurisprudencia, teleológicos cometidos todos que en todo caso deben estar
enmarcados por la valoración ab initio que la Sala hace de que se precise el
fallo de fondo en orden a materializar alguna de esas destacadas finalidades.
592
interdependencia en el juicio de responsabilidad, debe ser lógica y
jurídicamente, como lo fue en este caso, predicable de todos.
Auto casación
FECHA : 28/09/2011
DECISION : Inadmite la demanda
DELITOS : Hurto calificado y agravado, Homicidio
agravado
PROCESO : 35006
PUBLICADA : No
21/11/2011
593
1. La Corte ha sido insistente en sostener que la demanda de casación,
además de cumplir los requisitos mínimos de orden formal que la
normatividad establece, debe superar los juicios de corrección material e
idoneidad sustancial, aspectos que implican, en su orden, que las
afirmaciones en que se sustentan los cargos coincidan con la verdad que el
proceso revela y que cumpla los presupuestos mínimos requeridos para la
realización de los fines del recurso.
3. La Corte tiene dicho que el error de hecho por falso juicio de identidad es
un error de contemplación, que se presenta cuando el juzgador, al apreciar el
contenido material de la prueba, realiza una lectura equivocada del mismo,
poniéndole a decir lo que ella no dice, situación a la que puede llegarse por
tres motivos, (i) porque le hace adiciones a su contenido, (ii) porque omite
tener en cuenta apartes importantes del mismo, o (iii) porque altera su
expresión literal.
También ha precisado que este error se demuestra confrontando el contenido
material de la prueba con lo que el juzgador afirma que ella dice, para
evidenciar que entre uno y otro no existe correspondencia, y mostrando que
por causa del mismo se llegó a una decisión equivocada, porque influyó en la
definición de su sentido o en la aplicación de las consecuencias jurídicas.
Auto Casación
FECHA : 21/11/2011
DECISION : Inadmite demanda
DELITOS : Hurto agravado, Porte ilegal de arma de fuego
de defensa pers
PROCESO : 35108
PUBLICADA : No
27/02/2012
594
1. No se percató el defensor, respecto al cargo aludido, que con sólo
enunciarlo no suple la debida argumentación ni se entiende vulnerada la ley
sustancial; además de ello, es su deber constatar que los medios probatorios
allegados al proceso legalmente, al ser sopesados por los falladores en su
exacta dimensión fáctica, le asignaron un mérito persuasivo en total
transgresión a los postulados de la lógica (aceptados como tales por esta
disciplina del saber con exclusión de creaciones individuales con el fin de
resolver el caso a su favor, como aquí sucedió) de la ciencia o pautas de la
experiencia.
Habida consideración, tendrá como meta didáctica el demandante
determinar: i) qué dice de manera objetiva el medio, ii) qué infirió de él el
juzgador, iii) cuál valor persuasivo le fue otorgado, iv) indicar la regla de la
lógica omitida o apropiada al caso, v) o señalar la máxima de la experiencia
que debió valorarse, con el objetivo de probar que el fallo motivo de
impugnación tuvo que ser sustancialmente opuesto.
Por último, es deber intelectual del profesional del derecho mostrar cuál es el
aporte científico correcto y, por supuesto, la trascendencia del error, para lo
cual tiene que presentar un nuevo panorama fáctico, contrario al declarado en
instancias.
3. Cuarto: por otro lado, con la exclusiva mención que a sus pupilos jurídicos
les aplica el numeral 10 del artículo 32 de la Ley 599 de 2000, jamás se
demuestra el supuesto desafuero elevado contra el fallo de segundo nivel y,
menos aún, si dejó de trabajar aquellos presupuestos dogmáticos que le dan
vida al error de prohibición que pretendió encumbrar el defensor, olvidando,
como es su costumbre, referirse a los conceptos que lo sustentan, su
adecuación al caso en estudio, detenerse en la invencibilidad, el cual se
exhibe cuando el agente desconoce la normatividad vigente, positiva y
aplicable a su acto ilegal, el que cree estar ajustado a derecho, cuando de
suyo se encuentra infringiendo la ley penal.
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DECISION : Inadmite demanda de casación
DELITOS : Hurto agravado
PROCESO : 35270
PUBLICADA : Si
596