El Sujeto Transformador

El SUJETO
TRANSFORMADOR
Escuela de Formación para la Organización Comunitaria
Esta iniciativa es del Ministerio del Poder Popular para

Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias encabezado
por el Ministro Jesse Chacón
Equipo de Coordinación
Cooperativa Educativa “Educación para la Transformación”:
Soraya El Achkar
Glenis Rodríguez
Mariana Paz
Esther Rojas
Colaborador en la redacción de este folleto

Juan Carlos Loreto
Editor
Ministerio del Poder Popular para Ciencia, Tecnología
e Industias Intermedias
Responsable de la coordinación y edición de textos

Jesús Machado
Corrección
Antonia Cipollone
Validación
este material fue validado por personas del consejo
comunal Mata palo en la Comunidad de San Blas Mata Palo,
de la parroquia Petare, municipio Sucre, con el propósito de
reconstruir los contenidos, adecuarlos a las prácticas
concretas de organización comunitaria y sistematizar
un discurso colectivo y compartido
Diseño Gráfico
Coordinación, diseño y diagramación:
Tibisay Rojas
Diagramación
Beatriz Serra
Portadas
Ramón Blanco
Número de ejemplares: 1500

Caracas, 2009
Índice
Prólogo 5
Presentación 7
¿QUÉ SIGNIFICA HABER SIDO ACTORES SOCIALES EN 10

LAS LUCHAS SOCIALES DE AMÉRICA LATINA?
SUJETO SOCIOPOLÍTICO… SUJETO REVOLUCIONARIO 28
NOTAS 47
ESCUELA DE FORMACIÓN PARA LA ORGANIZACIÓN COMUNITARIA Página

Prólogo
La formación para la organización comunitaria dentro del proceso

revolucionario es ineludible si queremos alcanzar mayor desarrollo, porque
sólo la comunidad organizada podrá dirigir, orientar e incidir en el diseño
de las políticas públicas de modo que éstas respondan a las necesidades más
sentidas de la gente. Es la formación sistemática y crítica la que permitirá
que las comunidades más vulneradas generen un cuerpo de demandas y asu-
man una actitud ética, de corresponsabilidad frente a los graves problemas
que hay que enfrentar.
Creemos que todos somos inconclusos y por ello tenemos capaci-

dad para el aprendizaje. Creemos que nos hacemos en la práctica y en conse-
cuencia no hay teoría sin práctica ni práctica que no nos lleve a la reflexión.
Creemos en la capacidad creadora de nuestro pueblo donde el diálogo se
convierta en un eje transversal que nos permita fundar nuevas realidades
más acordes con la construcción colectiva de los discursos y cotidianidades.
Creemos que la educación puede ser liberadora y generadora de situaciones
de dignificación, por tanto hemos apostado por una escuela de formación
para la organización comunitaria.
Esta escuela hace la diferencia porque va de la práctica a la re-

flexión y vuelve a la práctica para mejorarla desde un ejercicio de reflexión
permanente. Es una escuela cuyo propósito no es saber sino saber para
transformar el orden injusto y desordenado de las cosas. Es una escuela que
pone su máxima atención en los sujetos históricos y políticos para vigorizar
la voz de quienes han estado silenciados y potenciar su acción transforma-

dora. Es una escuela que tiene una opción: los más pobres, los excluidos,
los que nunca tuvieron escuela y les fue negada la posibilidad de articularse,
decidir sobre el interés público, diseñar las políticas y mucho menos manejar
los recursos del Estado.
Esta escuela que estamos impulsando para la organización de nues-

tro pueblo ensaya promover un esquema de valores socialistas porque parte
de la premisa que no habrá socialismo sin socialistas, y para que haya socia-
listas es necesario un espacio para reconvertir los valores que el capitalismo
fue instalando entre nosotros y ahora nos parecen normales como lo son
el individualismo, la competencia, la corrupción, la viveza, las relaciones de
dominación, el autoritarismo, la violencia. Los valores socialistas que que-
remos que sean un eje transversal en la escuela son aquellos vinculados con
la justicia, la dignidad, la probidad, la solidaridad, las relaciones de equidad,
la ternura, el voluntariado. Estamos convencidos de que el socialismo es la
única vía de supervivencia de la raza humana y por eso estamos empeñados
en que se concrete en nuestro territorio.
Una Escuela que sirva para reconocernos como Pueblo, potenciar

las capacidades de organización, articular los esfuerzos locales y globales,
problematizar la vida cotidiana, desnaturalizar lo que parece normal, recrear
las iniciativas colectivas, impulsar los cambios necesarios y utilizar la tecno-
logía como medio para desarrollar una cultura de lo comunitario desde la
producción del conocimiento que promueva la liberación de los pueblos y la
articulación de redes sociales que fortalezcan el poder popular e impulsen la
transformación del modelo socio-productivo.
Página El SUJETO TRANSFORMADOR

La Escuela ha sido y seguirá siendo una hechura colectiva y es-
tamos muy agradecidos por el esfuerzo de tanta gente que hizo posible la
publicación de estos materiales educativos que, pretendemos, sean el inicio
de una larga trayectoria que nos coloque en el camino hacia la suprema
felicidad social.
Muy respetuosamente;
Jesse Chacón Escamillo
Ministro del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Industrias
Intermedias.

“El Lenguaje es el lugar de lo humano,
en él vivimos, nos movemos y somos”
José Manuel Briceño Guerrero
El Origen del lenguaje.1970

Presentación
El presente folleto no tiene pretensiones de ser un recetario ni debe
ser asumido como tal. Se trata de colectivizar un tejido de reflexiones críticas que
hablan de la forma como hemos sido y hemos estado siendo en nuestros espacios
de vida.
El folleto está tejido en dos apartados: el primero orientado a las luchas

como Actores Sociales de América Latina, en el cual se expresa brevemente los
cambios ocurridos en esta parte del continente en su sistema económico a finales
del siglo XX, resaltando el fuerte impacto que trajo consigo en lo social y cultural.
El segundo apartado trata del Sujeto Sociopolítico… Sujeto Revolucionario, se te-
jen algunas ideas vitales para reflexionar críticamente, para mirarnos como sujetos
de transformación.
Al finalizar la lectura de cada uno de los apartados estaremos invitados

a revisar nuestro modo de vida a través de una serie de actividades motivadas al
aprendizaje colectivo.
¡Invitémonos entonces a leer entre tejidos!

¿Qué significa haber sido Actores Sociales
en las luchas sociales de América Latina?
Es muy importante para todas y todos nosotros develar la reali-

dad de lo que ha sido nuestra expresión hasta estos últimos tiempos, porque
no es que hayamos sido del todo sumisos a un sistema opresor, sino que nos
expresamos como simples “actores”; es decir, como quien juega un partido
y se retira, como quien actúa y al terminar la obra todo se acaba, como quien
se pronuncia sólo cuando tiene sed y al darle un poco de agua se silencia. Es
necesario saber lo que significa superar esta condición de simples “actores
sociales” para poder impactar la realidad de manera transformadora, sin de-
jar de reconocer que algunas de esas luchas como actores dejaron un campo
fértil para aspirar al nuevo hombre y la nueva mujer que queremos hoy.
En respuesta a la crisis económica que América Latina presenta-

ba a finales del siglo XX sus respectivos gobiernos decidieron someter sus
economías nacionales a procesos de cambios de corte neoliberal, mediante
reformas dirigidas a introducir mecanismos de libre mercado,1 bajo la premi-
sa de buscar “la máxima felicidad” de la sociedad.
Los primeros países en implementar estas reformas a finales

de la década de los 70 fueron: Bolivia, Chile y México; posterior-
mente, a principio de la década siguiente, Costa Rica, Ecuador,
Jamaica, Trinidad y Tobago y Uruguay, y a finales de los
80 y principio de los 90 Argentina, Brasil, Colombia, El
Salvador, Guatemala, Guayana, Honduras, Nicaragua,
Panamá, Paraguay, Perú y Venezuela.
Página 10 El SUJETO TRANSFORMADOR

El neoliberalismo es una doctrina que hace referencia a una po-

lítica económica con fuerte énfasis tecnocrático (desarrollo de la técnica, de
la tecnología por la tecnificación misma) y macroeconómico orientada a dis-
minuir al máximo la participación del Estado como agente regulador de las
actividades económicas que se generan en el país. Defiende el libre mercado
(comerciar sin restricciones y el mínimo aporte de recursos) como mejor
garante del equilibrio institucional y el crecimiento económico. Promueve
el libre mercado no sólo en la producción de bienes, sino también en las
finanzas y los servicios, abarcando inclusive los públicos como la educación,
la salud, vivienda, etc.; es decir, la privatización de los servicios básicos para
la vida. Penetra las economías nacionales (macroeconomía) incorporándolas
al sistema capitalista globalizador (como si fuesen economías de países del
mundo “desarrollado”) mediante la instalación de las trasnacionales (empre-
sas foráneas) en territorio nacionales. Su implementación en América Latina
ha significado grandes secuelas a la clase trabajadora.
Contrario al augurio de “la máxima felicidad” promovida por la clase

burguesa nacional y los organismos trasnacionales3, lo que se obtuvo con estas
2
nefastas políticas globalizadoras del capital extranjero fue un incremento de la

pobreza y exclusión social en el hemisferio. Así lo devela la Comisión Económica
para América Latina (CEPAL), al descifrar en sus informes la evolución de los
indicadores socioeconómicos de la región durante la década de los 80 y 90.
La CEPAL al referirse a la pobreza y la distribución del ingreso de-

termina que América Latina en un periodo de diez años (1980 – 1990) sufrió
ESCUELA DE FORMACIÓN PARA LA ORGANIZACIÓN COMUNITARIA Página 11

un incremento de hogares bajo situación de pobreza en cinco puntos por-

centuales, pasando de 36% a 41%. Para 1980 existían 135.900.000 personas
pobres, incluyendo indigentes, y diez años después existían 200.200.0004.
La aplicación de las políticas neoliberales en América Latina ade-

más de establecer un estado que respondiera a la clase burguesa internacio-
nal y, por ende, al sistema capitalista globalizado, ha generado una profunda
brecha de desigualdad y pobreza, una fragmentación de la clase social ex-
plotada5, instalando en su imaginario social6 una visión individualista del
“sálvese el más fuerte”. Igualmente, ha producido un pensar alienado, donde
estamos sumergidos en el ideal de “llegar a ser” alimentado primordialmente
por los medios de comunicación que nos ha llevado a una cotidianidad de
violenta competencia, en la que sólo importa tener objetos para poder sen-
tirnos personas; por ello nuestra principal acción, esa que nos constituye, es
el consumismo, envolviéndonos sin darnos cuenta en la mercantilización de
la vida: todo se compra, todo se vende, incluyéndonos.
La situación en los sindicatos y gremios se manifiesta con una mer-

ma de sus capacidades físicas e intelectuales que cercenan a su vez su capaci-
dad de lucha, consecuencia de la reducción de sus afiliados por los despidos
masivos de las privatizaciones y la flexibilización (contratos por tiempos
determinado de trabajo, pago por horas, eliminación de la retroactividad)
de los derechos laborales y la división de la clase trabajadora 7, producto de
la tecnificación especializada de las de los espacios productivos8, ocasionan-
do, al mismo tiempo, un creciente subempleo, una lucha carnal entre los
mismos integrantes de la clase explotada por conservar el empleo en detri-

mento a la defensa de sus derechos (un ejemplo de ello son los asesinatos
entre trabajadores de distintos sindicatos por acaparar las contrataciones del
Estado). Se duerme la lucha por las nuevas conquistas, exigencias de conve-
nios colectivos, etc. Pero sobre todo, resultó en una fuerte desarticulación y
mistificación (fragmentación, falsificación) del tejido social que constituye a
la clase trabajadora.
Fragmentación social que aún hoy día refleja en América Latina a

un pequeño sector social: el 10% más rico con acceso al disfrute de las con-
diciones necesarias de supervivencia e inconmensurablemente consumiendo
mucho más de lo requerido; mientras que un gran sector, el 40% más pobre,
tiene únicamente la oportunidad de encontrar un empleo que apenas le per-
mite subsistir, respirar.
Esta situación vivida en América Latina por décadas, acentuada en

los años 80 y 90, asociada a la desatención por parte de las instituciones del
Estado de las necesidades de la clase explotada, el alto grado de descom-
posición de los partidos políticos y el fuerte debilitamiento de
las organizaciones reivindicativas, ha provocado procesos
intensos de cuestionamiento y resistencia gestado por los
pueblos constituidos en ACTORES SOCIALES, ejercien-
do acciones de protesta callejeras al régimen impuesto
por la clase burguesa nacional e internacional. El pro-
pósito de los actores sociales fue revertir la agenda de
gobernabilidad neoliberal y discriminatoria, gestando
así un gran movimiento social.

En ese momento histórico, los ACTORES SOCIALES son parte

del tejido social que constituye a la sociedad explotada que no se expresa en
las estructuras tradicionales de poder (partidos políticos o sindicatos). Los
ACTORES SOCIALES son la clase proletaria organizada de modo alter-
nativo a las estructuras tradicionales a los fines de intervenir con la lucha en
la vida social y conseguir determinados objetivos particulares, sectoriales o
propios, sin que ello suponga necesariamente una continuidad permanente
de su actuar como actor social, ya sea respecto a sus propios intereses como
apoyar las luchas de otros actores. La constitución de la clase proletaria en
ACTORES SOCIALES es resultado del desarrollo de un estado ingenuo
de la conciencia que todavía no llega a serlo, determinando y razonando de
manera aislada las carencias o situación que le aqueja, buscando mediante
acciones meramente reivindicativas o de protestas superar dicha situación.
En América Latina podemos identificar como actores sociales a las y los sin
tierras, las y los desempleados, las y los estudiantes, las y los indígenas, las y
los trabajadores asalariados, entre otros grupos, sectores, organizaciones o
movimiento en lucha producto de las relaciones de explotación.
Son infinitas las experiencias de la constitución de actores sociales desde

hace varias décadas en la región. Por ejemplo, en México a mediado y finales de los
90 a raíz de un proyecto de construcción de un club de golf en tierras comunales los
campesinos realizaron marchas y protestas, a tal punto que lograron un estado de
ingobernabilidad en el municipio de Tepoztlán9; en Argentina a principio del siglo
XXI están los prolongados conflictos de los trabajadores de la Ceramista Zanón y

Aerolínea Argentina por la política de despidos masivos, rebaja de salario y cierre

de establecimiento provocando la obstrucción de las vías públicas; en Brasil suscita
la intervención de tierras por parte del Movimiento Sin Tierra (MST) en cuestio-
namiento a la reforma agraria implementada por los gobiernos; en Chile, similar al
MST, acciones de calles y protestas por parte de la Coordinadora Mapuche Arauca
– Malleco y por el Consejo de Todas las tierras de Chile en reclamo al otorgamiento
de tierra y por el incumplimiento por parte de los gobiernos a los acuerdos esta-
blecidos, ocasionado la ocupación de fundos; en Bolivia la protestas agrarias de los
productores cocaleros contra la política gubernamental de erradicar los cultivos de
coca10 entre muchas otras acciones de resistencia a la privatizaciones y desfinancia-
miento del sector público y rescate y defensa de los derechos adquiridos en luchas
pasadas y que ahora son abolidos por el autoritarismo neoliberal.
A través de las acciones de calle a finales de siglo XX e inicio del siglo

XXI, son los ACTORES SOCIALES quienes toman el liderazgo de la lucha por
la humanidad, muy distante de los partidos políticos de izquierda o progresista del
hemisferio, pues estos se encuentran sumergidos en una crisis filosófica arraigada en
un triple origen:
1. Incapacidad histórica de elaborar un pensamiento propio, adecuado a

las particularidades de América Latina
2. Incapacidad de realizar un estudio riguroso de las experiencias

socialistas
3. No tener un análisis serio de las causas de su derrota en las décadas

anteriores

Paralelo, viven una crisis programática reflejada en grandes dificultades

en diseñar y presentar un proyecto transformador que pueda responder adecuada-
mente a la nuevo panorama mundial y hacer confluir en un solo camino a todos
los sectores sociales afectados por el régimen dominante neoliberal11. Crisis que
les impidió a los partidos articular y direccionar las acciones de resistencia de los
ACTORES SOCIALES, permitiendo que estos por sí mismo direccionen su pro-
pio quehacer y lucha política en colectivo y solidaridad ante el régimen capitalista.
Un ejemplo cercano en cuanto espacio a nosotros y nosotras educadores

populares, es lo ocurrido en Venezuela, territorio que no quedó fuera del alcance
de las políticas neoliberales y víctima del capitalismo globalizado. Recordemos que
Carlos Andrés Pérez en su segundo mandato como Presidente de la República
(1989 – 1993) junto a la coalición de partidos tradicionales12 , acordó salir de la
profunda crisis económica y fiscal que venía desarrollándose en el país a través de
la aplicación del recetario de los organismos trasnacionales del sistema capitalista13.
Al ser juramentado el 2 de febrero, en su discurso inaugural dado en el Teatro
Teresa Carreño destacó su programa de ajuste económico a establecer. Dentro
de las líneas estratégicas otorgó vital importancia a las relaciones internacionales
como elemento clave para salir de la crisis que se vivía, igualmente, decidió con-
tinuar con la ampliación del proceso de reforma política de corte neoliberal que
estaba realizando el gobierno antecesor a los fines de lograr la liberalización de
varios sectores de la economía.
Las principales medidas a tomar fue someterse al recetario del Fondo

Monetario Internacional, que implicó obtener un crédito de US $ 4.500.000.000 en
tres años a cambio de liberar las tasas de interés en la banca nacional hasta un tope

temporal fijado alrededor del 30%, eliminar la tasas preferenciales de divisas, libe-
rar los precios de todos los productos a excepción de 18 renglones de la canasta
básica, aumentar las tarifas de los servicios públicos como luz, agua y teléfono, au-
mentar progresivamente durante 3 años los derivados del petróleo en el mercado
nacional con un primer aumento del 100% del precio de gasolina y un 30% en los
precios del transporte, eliminar progresivamente los aranceles en aduana, congelar
los ingresos de personal en la administración pública; disminuir el gasto público y,
paradójicamente, aumentar los sueldos y salarios de la administración pública entre
el 5% y 30%, entre otras políticas sociales de carácter paliativo que intentan frenar
las consecuencias de la reforma.
Sin embargo, la aplicación de estas políticas profundizaron más la crisis

y sumado a la desagradable alteración de la conducta social - político - cultural de
los partidos políticos que gobernaron el país, se generó un gran malestar en la ma-
yoría de la población venezolana. Por una parte existía, en pleno aumento, un alto
grado de corrupción en todos los niveles de sus direcciones, y por otra una fuerte
erosión y desarticulación en cuanto la resolución de conflicto y mediación entre el
Estado Burgués y los sectores más desfavorecidos, llevando a los partidos a fungir
como simples maquinas electorales al servicio de las élites económicas y políticas
internacionales del capitalismo globalizado, en nuestro casos las proveniente de los
Estados Unidos.
Sentida y concientizada la crisis económica en 1989, la clase venezo-

lana explotada inicia drásticamente protestas callejeras de manera sostenida en
este mismo año hasta finales de la década de los 9014. Revueltas populares de
vasta proporciones que abren franco proceso de pérdida de legitimidad de las

instituciones del Estado y las instituciones políticas (partidos políticos, sindicatos

y gremios) como agentes defensores de sus interés. Resultando dentro de esta
emergente relación de lucha y constitución de espacios alternos de poder, un
nuevo participante: los ACTORES SOCIALES en permanente movimiento15.
Al ser conocido las medidas del gobierno aquel año de 1989 a tem-
pranas horas del día siguiente comenzaron las primeras protestas en las princi-
pales ciudades del país (Guarenas, Caracas, Barquisimeto, San Cristóbal, Mérida,
Maracay, Barcelona, Puerto La Cruz, Los Teques, Puerto Ordaz y Maracaibo)16.
Las primeras expresiones de protesta (en la ciudad de Guarenas-

Edo-Miranda y en el terminal del Nuevo Circo de Caracas) fueron intercambio
verbales entre los usuarios de transporte público y los choferes, especialmente
los estudiantes que sirvieron rápidamente como detonantes para la extensión
de acciones colectivas de confrontación y violencia (concentraciones, cierres de
vías, quema de caucho y apedreamiento a carros y establecimiento comerciales),
con la participación de bastos números de actores sociales que progresivamente
iba creciendo en la acción en distintas ciudades del país.
Posteriormente a este año y a la intervención represiva (a fuego limpio

con balas, tirando a matar) del Estado, las acciones de protesta callejeras de con-
frontación y violencia se sostuvieron en las principales localidades del territorio
nacional. Se repetían los cierres de carreteras, toma de establecimientos, mar-
chas, concentraciones, pronunciamientos acompañado de acciones no practica-
das con anterioridad, como hacer fogatas, encadenarse, desnudarse en público,
lanzar ratas azules a las autoridades del estado, hacer huelga de hambre, rayar

aceras, paredes y automóviles con frases representativa del malestar popular: “El
pueblo tiene hambre”, “El Pueblo está bravo”, “¡Basta de engaño!”. Algunas
de estas acciones son utilizadas hoy, extrañamente, por esos mismos que en ese
momento eran nuestros represores y por sus nuevos representantes.
El objetivo de las acciones fue romper la rutina diaria de miles de

vecinos de la ciudad y hacer llegar el mensaje ante la opinión pública nacional e
internacional sobre la descomposición de las estructuras de poder en la sociedad
y el fracaso del modelo capitalista en su fase neoliberal.
Los actores de estas protestas se mantuvieron distantes de las mili-

tancias de los partidos políticos tradicionales. La mayoría de ellos provenían de
diversos orígenes y diferentes intereses, entre los que estaban se encontraban
buhoneros, jubilados y pensionados, vecinos de sector medio y barriales, trans-
portistas, empleados públicos, desempleados, policías, estudiantes, domésticas,
campesinos, indígenas, artistas, trabajadores, entre otros. Igualmente parte del
conglomerado sector explotado, constituyente de la emergente relación de
poder.
Entre esta variedad de Actores Sociales en movimientos, los vecinos

organizados protestaron por la carencia de acceso a los servicios públicos como
luz, agua, educación, salud, transporte, alimentos, tenencia de la tierra y su exclu-
sión de los espacios de toma de decisiones. Los vecinos organizados del sector
Hoyo de la Puerta, quienes realizaron marchas, concentraciones y cierre de vía
en contra de la desigualdad de derechos y su exclusión de la sociedad, sigue
siendo un vivo ejemplo de este sector social. En un evento realizado en el 2000

uno de los líderes expresó: “Nosotros los vecinos también queremos participar,
porque siempre se hacen las cosas y nunca se toman en cuenta los vecinos”.
A este cuestionamiento se sumaron las y los jubilados y pensionados

de la administración pública, quienes reclamaron el cumplimiento de los acuer-
dos establecidos con el Estado, consagrados en actas y decretos, exigiendo la
cancelación de la deuda de los meses no pagados, la cancelación puntual del
beneficio económico, la homologación del beneficio al salario mínimo y el me-
joramiento del servicio de salud. Las acciones que implementaron fueron cerrar
las avenidas principales y marcha hacia instituciones públicas. En una de sus
actividades de protesta, uno de sus participantes, señaló:
…Nosotros teníamos todo el servicio médico en todo el interior del

país y en Caracas, servicio médico, seguro y todo. Ahora no tenemos nada,
todo está paralizado, están paralizados los médicos, las medicinas, el seguro de
vida, todo lo tenemos paralizado y encima de eso tampoco nos pagan a tiempo.
Entonces ¿con qué vivimos? No tenemos dinero con que vivir. ¿De dónde va-
mos a vivir? Si no nos pagan pensiones, no nos dan medicinas, no nos
dan servicios médicos ni nada17.
El movimiento estudiantil fue el actor social más

perseverante de la sociedad venezolana en resistir las secue-
las neoliberales. Realizaron protestas en contra del FMI,
exigieron cerrar sus oficinas de negociación existentes en
el país y suspender la aplicación de su recetario. Exigieron
llevar al 7% del PIB la inversión pública en el sector de la
educación y reconfigurar la república.

En el desarrollo de una acción de calle, un integrante del movimiento

estudiantil señala:
Los países de América Latina tenemos que hacer un frente común

para no pagar la deuda externa. No es posible que por cada bolívar que entre en
la economía venezolana, destine cuatro céntimos al pago de la deuda externa.
La deuda externa lo que ha desarrollado es hambre, es miseria, desempleo, falta
de viviendas. Eso es lo que ha desarrollado aquí la deuda externa, donde unos
malandros de la política venezolana se han apropiado de esos dineros. Esos
dineros no han sido invertidos en la sociedad venezolana18.
Sin duda alguna, educadores y educadoras populares en formación,

estas acciones de protesta y resistencia del pueblo constituido en ACTORES
SOCIALES en permanente movimiento, han sido el resultado de un estado de
conciencia que ha permitido al hombre y la mujer explotada develar su situación
de discriminación en la distribución de la riqueza y exclusión a los medios y espa-
cios de toma de decisiones sobre lo público, dado la estructura política existente
y preservada por los partidos, sindicatos y la clase burguesa.
Las acciones de protesta de los actores sociales se limitaron en sus

inicios a ser luchas pragmáticas, reaccionarias a las decisiones de las élites gober-
nantes. Eran movilizaciones de protesta, resistencia al aumento de la gasolina,
el pasaje estudiantil, los alimentos, el retraso en la cancelación y no aumento
de sueldos, salarios y pensiones, establecimiento de impuestos al valor agre-
gado, privatización de las instituciones o servicios públicos, como hospitales,
escuelas, universidades, bancos, compañía cementeras, hoteleras, telefónicas y

televisión, entre otros miles de ejemplos a referir. Movilizaciones que expresaron

ante la opinión pública el descontento del pueblo por la indiferencia del Estado
Burgués y su exclusión como sector mayoritario a las condiciones que garantizan
el disfrute digno de la vida.
El desarrollo por parte de la clase explotada de una conciencia inge-

nua, todavía no revolucionaria, permitió además de ir ejerciendo nuevos modos
de lucha de clase y articulación distintos a la guerra armada y los partidos y
sindicatos, impulsó la superación progresiva de la enajenación19 y el alcance de
una conciencia emancipadora.
Actividad de aprendizaje
Latinoamericano
Nos engañaron a través de todos estos años

Con sucias promesas de alcanzar peldaños
Se llevaron nuestras riquezas naturales
Y nos dejaron corrupción mas fuga de capitales
Tales males mentales
No sabes cuánto vales
Prostituciones desiguales
Conceptos individuales
Te engancharon con realidades virtuales

Te pintaron rascacielos de cristales

Celulares y otras mierdas poco fundamentales
Y que tenemos
Sólo problemas sociales
Malos modales
Con valores morales espirituales
Cuales seres mortales tratándose como animales
Conviviendo como neandertales
Niños durmiendo en los portales
Sin recursos vitales ni educación ni techo
Ni hospitales desechos industriales
Y más problemas socio ambientales
De cuba une si combinación de pensamiento
Bomba flouh corazón resistencia
Y cuerdas vocales seguro
Política asesina al pueblo entierra la espina
La lucha no termina ouh don’t cry for my argentina
Los hermanos Da Malena sangre de la misma vena
Esta vez condena
Latino vamo a romper cadenas
Desde cuba todo el tiempo
Soandri cambio y fuera

Que más tu misma Latinoamérica

Puedes explicar la situación por la que pasas
Es trágica viviendo en cada ciudadano
La prueba práctica de la tragedia
El continente constantemente es azotado
Por corrupción, droga, violencia, miseria
Si seguimos en las mismas quedaremos pa la historia
Adinerados explotando a los humildes
Dictaduras que espanta
Los ricos derrochan plata y nada gastan
Los pobres derrochan vida hasta que se gastan
La cuidad el consumo industrias y humo
Esto lo han transformado en relajo puro
Donde nadie ni nada puede estar seguro
No hay que dudar que es una mierda
El modelo neoliberal
Y donde se aplique siempre va a ensuciar
La bomba a tiempo acaba de estallar
Los países se revelan aunque tiranos no quieran
Si te quieres liberar del genocidio
Latino las batallas nos esperan
Adelante latino rompe dictadura

América es la casa tu raza solo una

Cuba los convoca alcen la cabeza
En la unión radica nuestra fortaleza
Argentina los convoca alcen la cabeza
Dicen que el mundo ya no va a cambiar
Que no insistamos resignación nos piden
Latinoamericanos
Dicen que fuimos derrotados perdimos una guerra
Y ahora hay que resignarse a vivir en esta mierda
Por eso somos tratados programados como ganado
No todo puede medirse por las leyes del mercado
Por que tus cálculos pueden causar estímulos
Para revoluciones que se te vuelvan obstáculos
Y yo creo estamos en la dulce espera
Si te quedan dudas solo mira pa afuera
Hay un diluvio un pueblo ardiendo hundido en el lodo
Sin nada que perder dispuesto a todo
Que ya no compra más el mundo este de fantasía
En donde avanza el hambre avanza la tecnología

Donde nos siguen vendiendo el sueñito americano

Los mismos que tiran la piedra y después esconden la mano
Ay el ser humano parece que nunca aprende
Tropieza da tumbos no cambia de rumbo
Pero no me derrumbo estoy aquí parada
Como Latinoamérica no estoy derrotada
Es una misma voz que va retumbando en el planeta
La gente está cansada de ser la marioneta
Aquí con hermanos de causa yo Malena
Como dijo soandri rompiendo cadenas
Llego la hora de recuperar nuestro destino
Salir a la calle a la batalla latino
Cuba los convoca alcen la cabeza
Argentina los convoca alcen la cabeza
Venezuela – Bolivia unión es fortaleza
Chile - Perú alcen la cabeza

Nicaragua- México unión es fortaleza

Brasil –Uruguay alcen la cabeza
Paraguay – Colombia unión es fortaleza
Panamá - Ecuador alcen la cabeza
América latina unión es fortaleza
América latina unión es fortaleza
Unión es fortaleza
Grupo: Actitud María Marta
1. De acuerdo la letra de la canción “Latinoamericano” del grupo

Actitud María Marta ¿cómo se mira el neoliberalismo?
2. En el marco social neoliberal que nos afecta ¿tienes alguna situación

real, vivencial sobre la que podamos reflexionar críticamente?
3. ¿Las y los integrantes de tu hogar han experimentado un cambio

consecuencia del neoliberalismo implementado en la década de los 80 y 90 en
Venezuela?
4. ¿Cómo entendemos lo que ha sido un actor social?
5. ¿En nuestra localidad existen actores sociales? ¿Qué hacen? ¿Cuáles

son sus actitudes y manifestaciones en la comunidad?
6. Contémonos las experiencias si hemos sido o nos hemos constitui-

do en actor(a) social.

Sujeto Sociopolítico… Sujeto Revolucionario
Pensemos por un momento en la necesidad de ya no constituirnos

como simples hombre y mujeres identificados por medio de nuestros intereses
particulares o por el lugar que se nos ha impuesto ocupar en la sociedad capita-
lista. Pensémonos diferentes, todos con la conciencia común de negarnos a se-
guir viviendo en esta realidad sin sentido humano, negadora de la vida. Para eso,
tendríamos que plantearnos el pasar de ser actores y actoras sociales a sujetos
revolucionarios, sujetos políticos, sujetos históricos. Conociendo y reconocien-
do nuestras luchas asumamos la necesidad de cambiar esta sociedad esta realidad
que nos niega.
Al transcurrir la lucha de resistencia al neoliberalismo los actores so-

ciales han desarrollado la capacidad de superar la enajenación profundizando
sus prácticas de mera protesta y resistencia a objetivos y/o propósitos transfor-
madores. Este cambio de actitud en la lucha ha sido consecuencia del despertar
progresivo de la conciencia de un estado ingenuo a otro revolucionario, trasfor-
mando a los actores sociales en SUJETOS SOCIOPOLÍTICOS en el devenir
de las acciones y reflexiones colectivas, participativas y protagónicas, orientadas
al cuestionamiento desde la raíz de la situación que les afecta como sector social
o comunidad.
La concienciación revolucionaria ha permitido a la clase proletaria

determinar por sí misma la realidad en la que se encuentran bajo condición de
explotación, visualizando su carácter histórico y de totalidad, sus causas, con-
secuencias y actores participantes, así como también otra situación real posible
(horizonte histórico) y modos cómo alcanzarla (abolir la relación de explotación

a la cual es sometida como clase social por el Estado Burgués) constituyéndose

así en SUJETOS SOCIOPOLÍTICOS.
Ser SUJETO SOCIOPOLÍTICO presupone ser y superar a la

vez al actor social. Los Actores Sociales tienden a constituirse en sujetos
sociopolíticos cuando inician un proceso de reiteradas y continuas accio-
nes de develación y cuestionamientos en la vida social a través de la lucha,
generando un estado de conciencia, un ejercicio colectivo de lucha perma-
nente y niveles y formas de organización a los fines de transformar la rea-
lidad como totalidad. La constitución de la clase trabajadora en SUJETOS
SOCIOPOLÍTICOS es la trasformación de su condición de clase en sí,
a clase para sí. Adquiriendo la capacidad de saber, verse como colectivo,
entenderse como poder y decidir que quiere, a lo que aspira, diseñando y
construyendo el camino para conseguirlo.
El alcance del estado de la concienciación a través de la luchas en

la calle y la reflexión del quehacer, ha permitido a los Sujetos Sociopolíticos
obtener una apreciación de la realidad de tal modo, que la concibe como re-
sultado de las relaciones entre hombres y mujeres en sociedad, consecuencia
de las intervenciones, los desfallecimientos, los descuidos y la interposición
de intereses ocurrente de generación en generación, mediante una correlación
de fuerza (relación de poder) entre una clase social y otra, es decir, entre clases
sociales. O sea, entre la clase burguesa y la clase proletaria o clase trabajadora,
una patronal la otra asalariada.

La clase proletaria constituida en SUJETOS SOCIOPOLÍTICOS

entiende la realidad no como algo distante ni separado de los hombres y mu-
jeres que son, así como tampoco algo lineal, casual y estático. Por el contrario,
la valoran y la asumen como construcción social e histórica expresada en una
totalidad (donde se articula el trabajo, el sentimiento, el saber, el estado físico,
la vida material, la geografía, la política, lo económico, todo lo social)20, que los
condiciona pero no los determina21 . Por esta razón, para ellos la realidad no es
inexorable, no hay determinismo posible que pueda detener las intenciones de
transformación, la posibilidad de vivir, de relacionarnos de otra manera.
Así lo han demostrado las localidades organizadas del país. Un ejemplo

muy cercano es el encuentro (octubre-diciembre de 2008) entre las distintas co-
munidades de las parroquias Petare, Mariche, La Dolorita, Caucagua y Leoncio
Martínez del Municipio Sucre, Estado Miranda, quienes se han sumergido en
intensos procesos de reflexión crítica sobre las situaciones que les afectan, pa-
sando sus habitantes de manera progresiva de meros actores sociales (individuos
organizados con conciencia ingenua) a sujetos sociopolíticos (con conciencia
crítica-revolucionaria), esto lo hicieron a través de talleres de formación ético-
política con miras a la creación comunitaria de una Escuela de Formación para
la Organización.
Este proceso de encuentros de acción y reflexión generador de con-

ciencia crítica ha permitido dilucidar las necesidades más sentidas en lo socio
cultural (político), en la infraestructura, en los servicios públicos, la violencia,
así como también vincular causas, consecuencias y actores de la realidad como
construcción social e histórica expresa en una totalidad, estimulando a la pobla-

ción de las comunidades incursionar por procesos de construcción de horizon-

tes históricos que les permita trasformar su realidad.
Resultado de este proceso de encuentros fue la decisión de hacer de

esta concienciación un plan de acción inmediata expresa en la conformación de
una Escuela de Formación y Trasformación cuyo objetivo es impulsar cambios
en las estructuras político – ideológicas mediante procesos de formación ética
– política pero también con herramientas de pensamiento técnico- instrumental
con el fin de empoderarse como sujetos para la participación en la cogestión
municipal, que apunta a cambiar el orden de injusticia de la realidad.
Pero si miramos más allá de nuestro territorio nacional, encontramos

que en la gran extensión territorial de la región existen igualmente, en menor o
mayor grado de acción, programas y proyectos de transformación social pro-
pulsado por Sujetos Sociopolíticos. Entre los que podemos mencionar está la
reforma agraria del Movimiento Sin Tierra en Brasil, la toma y recupe-
ración de fabrica del Movimiento Los Piqueteros en Argentina, la
democracia participativa y horizontal del Ejercito Zapatista de
Liberación Nacional y la Asamblea Popular de los Pueblos
de Oaxaca en México, la autonomía y carácter plurinacio-
nal del Movimiento Indígena Pachakutik, Conferencia
de Nacionalidades Indígenas en Ecuador, Movimiento
Indígena Aymara en Bolivia, entre otros programas de
lucha desarrollados fuera de las estructuras políticas de
poder del Estado Burgués, con el apremio de conformar
el Sujeto Revolucionario.

Objetivos colectivos
orientados a la
transformación
Objetivos particula-
res y reivindicativos
Proceso de Lucha y
Aprendizaje Intervenciones
Intervenciones programadas,
ACTORES pragmáticas en la
= SUJETOS contínuas, articuladas
SOCIALES vida social
Superar la enajenación y SOCIOPOLÍTICOS y permanentes en la
alcanzar el empoderamiento vida social

Estructura de poder
tradicional Estructura alternativa
articulada y orgánica
para la transformación
Aprehensión de la realidad de la realidad
Determinación de otras posibilidades
Organización colectiva para la acción
Por tanto, esta concienciación sobre la realidad ha permitido a los

Sujetos Sociopolíticos otorgar otro sentido y significado al Poder, en el entendi-
do que es una relación social. Es múltiple mediante las relaciones entre hombres
y mujeres en sociedad. Cada relación entre uno y otro, es un núcleo de poder.
Cada relación entre unos y otros núcleos de poder es núcleo múltiple de poder.
Dando el sentido y significado al Poder como relación social, el

SUJETO SOCIPOLÍTICO coloca la posibilidad de construir el horizonte his-
tórico desde las relaciones entre hombres y mujeres, desechando la lógica que el
poder está en lugar alguno, que se adquiere, arranca o comparte; valorando que
el Poder es ejercicio pleno y consciente de la voluntad de ser hombre y mujer, de
hacer realidad lo imaginado desde sus relaciones sociales con los otros y otras.
La concienciación de la realidad como resultado de la correlación de

fuerza entre un sector y otro, ha impulsado a la clase proletaria como sujeto
sociopolítico colocar delante de sus proyectos la necesidad del ejercicio hegemó-

nico del poder, en el entendido de generalizar su horizonte histórico a todos los

segmentos explotados de la sociedad y promover el poder desde abajo en toda la
extensión territorial de lucha mediante proceso participativos y protagónicos.
Ha valorado que la articulación de las relaciones sociales entre los

diversos SUJETOS SOCIOPOLÍTICOS debe garantizar un alto grado de
correlación de fuerza que permita la interposición de sus intereses a la clase
burguesa, de modo que forme el SUJETO REVOLUCIONARIO expresado
en nuevas formas de saberes, de capacidades organizativas y de decisiones y
gobierno de lo propio en un colectivo orgánico.
Para una mayor comprensión, es bueno referir como un ejemplo

cercano a la articulación de sujetos sociopolíticos para la hegemonía la movi-
lización consciente del pueblo venezolano durante los días 11, 12 y 13 de abril
del 2002, producto de la coyuntura de acciones de violencia promovida por la
clase burguesa mediante la guerra psicológica de su industria cultural (medios de
comunicación), marchas e intento de paro patronal.
Ocurrió una acción de identidad, en medio de la diversidad que somos:

el sector explotado de la sociedad consciente de lo que ocurría sabía que se pla-
neaba algo en contra del Presidente de la República, Hugo Rafael Chávez Frías
(símbolo de liderazgo del proceso de transformación en Venezuela) y, más aún,
en contra del horizonte histórico en construcción que significa la Revolución
Bolivariana.
Con el propósito de interponer sus intereses como clase social y con-

trarrestar la opinión mediática de la clase burguesa la cual refería que el país

estaba en un 90% en paro y todo el pueblo en contra del Presidente, el proletariado

consciente comienza a organizarse en todos los estados del país con el fin de
lograr una articulación entre los distintos actores sociales y sujetos sociopolíticos.
La organización se inicio a través de mensajes de texto, llamadas telefónicas, co-
rreos electrónicos y/o visitas domiciliarias pasando por reuniones para evaluar
los hechos en permanente ocurrencia y reflexionar cómo actuar en contra de las
prácticas de la clase burguesas, las cuales iban en contra de sus intereses.
Así lo expresan muchas y muchos compañeros de lucha social. Leamos

el siguiente testimonio y reflexionemos críticamente en el marco de lo que es un
actor social y un sujeto sociopolítico:
“Se acordó hacer una asamblea donde concurrieron varios grupos or-
ganizados de Caracas, la idea era crear una coordinación, algo aglutinante, para
brindarnos como movimiento popular. Es un principio funcionó como tal; no
era un grupo con un nombre ni con aspiraciones de convertirse en algo más en
el futuro, sino un espacio de articulación para una coyuntura específica, que era la
conspiración y la situación de caos que estaba preparando la reacción. Cuando ya
era evidente que la intención de la oposición era mover a los suyos para Miraflores,
decidimos agruparnos todos en los alrededores del palacio para defender al
Gobierno Bolivariano22.
Por supuesto, en aquel momento no creíamos que el hombre iba a re-

gresar, pero sí estábamos seguros de que había que hacer presencia en la calle,
meterle candela a lo que fuera, hacer ingobernable el país si era necesario. Nunca
nos pasó por la mente rendirnos y quedarnos tranquilos.

Nos fuimos a la casa en la tarde para comer algo y estábamos en eso

cuando se nos apareció ahí un camarada del Estado Yaracuy. Le preguntamos
cómo se había venido: “No importa” -nos respondió el pana- “Me vine porque
aquí va a haber coñazo y yo quiero estar presente”. Comimos y salimos a la
plaza del valle. Cuando llegamos había un gentío impresionante, la plaza estaba
llena. Escuchamos que la gente había intentando otra vez llegar al Fuerte Tiuna,
y nos fuimos para allá, remolcados otra vez por unos motorizados a quienes le
pedimos la cola. Estando allá nos subieron hasta la entrada principal del Fuerte
Tiuna y ahí había otro gentío más. Eran como las seis de la tarde. Vimos cuando
salió el general García Carneiro y a todos nos volvió el alma al cuerpo, porque
ya teníamos más o menos idea de cuál era la situación. Otro motorizado amigo
nos trajo hasta la casa (en esos dos días aprendimos a andar de parrilleros, con la
silla de ruedas), ya con buenas noticias. Era casi seguro, un hecho, que a Chávez
lo iban a rescatar pronto”.23
Experiencias de articulación de núcleos múltiples de poder que, ade-

más de lograr la restitución del Presidente de la República, incidió en la pro-
fundización de la conciencia del pueblo venezolano y continuar y acelerar la
organización contra-hegemónica24 a la clase burguesa. No es el simple regreso
o la movilización por “un hombre” era lo que ese hombre representaba como
expresión del anhelo de buena parte del pueblo venezolano, eso nos movió
la identidad de clase, la condición de lucha y la comprensión del “a qué nos
oponemos”.
Articular las relaciones sociales de los diferentes sujetos sociopolíti-

cos para la consumación del Sujeto Revolucionario, plantea a todas y todos, el

desafío de reconocer al sujeto sociopolítico del momento, desde sus propios

procesos colectivos e interactivos de lucha y reflexión y mundo de vida.
Se ha de tener presente que la constitución del SUJETO

SOCIOPOLÍTICO incluye otros sectores sociales más allá del sector obrero,
es más un sector de trabajadores y trabajadoras diversos, con diferentes niveles
de responsabilidades y con diversa inversión de fuerzas humanas. Comprende
todos los sectores excluidos del sistema productivo (las fábricas, las empresas,
las corporaciones, las industrias, etc.). Como los desempleados, los jubilados, los
conserjes, los estudiantes, los campesinos, los buhoneros, los pueblos indígenas,
los bachilleres sin cupos, las mujeres, los movimientos gays, entre otros, igual-
mente explotados y oprimidos por el sistema capitalista.
El reconocimiento pasa por aceptar colectivamente la capacidad de

transformación de cada uno de los sectores, independientemente de su rol en la
estructura socioeconómica constituida, y su conciencia de la realidad, su iden-
tidad, sus aspiraciones, sus modos vivenciales de asumir el mundo distinto a las
imposiciones del sistema capitalista.
El reconocimiento colectivo de los distintos sujetos sociopolítico rea-

signará identidad a todas y todos con la clase proletaria, con la clase explotada
o clase oprimida e impulsará la consumación de los Sujetos Sociopolíticos en
Sujeto Revolucionario.
La conformación del SUJETO REVOLUCIONARIO platea igual-

mente el desafío de que los diversos sujetos sociopolíticos, articulados entre sí
como núcleos múltiples de poder incursionen los procesos de:

a) Comprensión crítica y articulación, orientada al cuestionamiento e in-

terrogación de la realidad, búsqueda de su comprensión y del posicionamiento
del hombre y mujer organizada para intervenir, transformar y construir otra
posibilidad en todas las dimensiones (económica, cultural, política, ecológica,
etc.)
b) Proceso y transición: andar el camino y ejecutar los medios de la cons-

trucción estratégica alternativa de lo imaginado como realidad posible. Esto
implica que los SUJETOS SOCIOPOLÍTICOS constituidos en SUJETO
REVOLUCIONARIO den la lucha sin tregua entre las lógicas capitalismo y
anti-capitalismo en el seno del sistema de explotación, el cual se desea des-
montar absolutamente mediante la generación de condiciones y acumulación
contra-hegemónica, conciencia crítica y organización.
Hoy día existen diversos espacios de encuentros, debate, discusión,

formación y organización programática de Sujetos Sociopolíticos que intentan
constituir el Sujeto Revolucionario para el alcance de Otro Mundo Posible.
El Foro Social Mundial, el Encuentro Continental en contra del ALCA, el
Congresos de los Pueblos, el Encuentro de Artistas e Intelectuales, la Alternativa
Bolivariana para América, entre otros espacios que buscan rescatar desde la
acción y reflexión la democracia en su sentido real, estableciendo una
relación de horizontalidad y participación en los procesos de deci-
sión política y organización de la lucha en contra la privatiza-
ción de lo público, la hegemonía de lo económico sobre
los político y social y el plan de reestructuración del
Estado en pro de la emancipación de los pueblos.

Espacios que progresivamente han servido en contrarrestar cada vez

más la hegemonía neoliberal en lo ideológico y programático, trayendo como re-
sultado el levantamiento de estructuras de poder desde lo alternativo hasta llegar,
en algunas latitudes, a lo común político como ocurre en el Ecuador con Rafael
Correa, Bolivia con Evo Morales, Nicaragua con Daniel Ortega, Venezuela con
Hugo Chávez y Paraguay con Fernando Lugo, gestado desde el poder de abajo
de los sujetos sociopolíticos de su territorialidad en defensa de la humanidad y el
rescate de la dignidad ante las prácticas nefasta del capitalismo.
Este proceso de articulación y organización regional entre núcleos de

poder y núcleos múltiples de poder ha dejado como resultado en el devenir del
tiempo y en pleno movimiento, que América Latina reivindique al Sujeto como
lo conceptualizó Carlos Marx:
Los hombres son los productores de sus representaciones, de sus ideas,

etc.… pero se trata de hombres reales y activos tal y como se hallan condicio-
nados por un determinado desarrollo de sus fuerzas más lejanas. La conciencia
(…) jamás puede ser otra cosa que el ser consciente, y el ser consciente de los
hombres es su proceso de vida real.25
Y asumir su capacidad de apreciar que:
…todas las formas y todos los productos de la conciencia no pueden

ser destruidos por la obra de la crítica espiritual, mediante la reducción a la [au-
toconciencia] o la transformación en fantasma, espectro, visiones, etc. Sino que
solo pueden disolverse por el derrocamiento práctico de las relaciones reales de

las que emanan estas quimeras idealistas; de la fuerza propulsora de la historia,

incluso la de la religión, la filosofía y toda teoría, sino la revolución.26
El desarrollo de la conciencia crítica que se ha desarrollado en América

Latina ha permitido conformar horizontes históricos expresa en modos de hacer,
de estar, de ser, de luchar y de relacionarse en colectivo, sustentado en valores
humanista donde el hombre y la mujer son el centro de las relaciones sociales,
como ha sido el quehacer ancestrales de nuestros pueblos y comunidades indí-
genas y lo propone el Socialismo del Siglo XXI.
Este horizonte histórico ha colocado en el imaginario nuevos esque-

mas referenciales para construir realidades. Conceptualizaciones de categorías
distintas a la sociedad capitalista. Democracia participativa y protagónica, estado
plurinacional, desarrollo endógeno, diversidad cultural, mandar obedeciendo,
hombre y mujer nueva, ecosocialismo, educación emancipadora, equidad y jus-
ticia social, liberación, emancipación, superación y mirada crítica de las necesi-
dades, la naturaleza como sujeto de derecho, son algunos de estos. Claro está,
entendiendo que si no se transforman las relaciones de producción, si los medios
de producción siguen estando en manos de los patrones (transnacionales, países
dominantes) el beneficio del trabajo nunca se devolverá a quién lo aporta.
En el caso de Venezuela se ha logrado dar un paso gigantesco dentro

de un nuevo marco ideológico - cultural referencial, otorgando nuevos signifi-
cados a los conceptos de: democracia (le asignamos el adjetivo participativa),
estado (socialista), economía (político-social) propiedad diferenciando la propie-
dad de bienes necesarios para vivir, de la propiedad privada sobre los medios de

producción de vida (tierra, los recursos naturales)… sobreponiendo los valores

de cooperación, corresponsabilidad, solidaridad, justicia social, equidad, igual-
dad, colectividad, comunidad, etc. Imaginario social que ha permitido, después
de más de diez años de praxis de aquel año de 1989, maduración y lucha para la
adecuación de las estructuras legislativas del Estado a un modelo de democracia
participativa en contraposición a la democracia representativa, a través de un
proceso constituyente donde todos los sectores sociales tuvieron la oportunidad
de tomar la palabra, siendo esto justamente parte de la agenda programática en
su primera fase de surgimiento del Sujeto Sociopolítico de Venezuela .27
El Ser Sujeto Sociopolítico es resultado de la propia actividad prác-

tica y reflexiva de los actores sociales sobre su quehacer en la vida social. Los
actores sociales se van constituyendo como SUJETOS SOCIOPOLÍTICOS
en el mismo proceso de lucha y transformación social, a partir de este pro-
ceso se genera de manera dialéctica otra situación real posible (horizonte
histórico). Ser SUJETO SOCIOPOLÍTICO no es una condición anterior al
proceso de transformación; es en el proceso mismo de lucha que se gesta esa
condición de sujeto latente, oculto, silenciado.
Estas experiencias de constitución de la clase proletaria en SUJETOS

SOCIOPOLÍTICOS, propulsoras de la conciencia de hombres y mujeres en
relación de explotación, ha permitido anular el planteamiento de los partidos de
izquierda del siglo XIX y XX, la cual afirma que tener conciencia es un don de
un pequeño grupo, la vanguardia (la burocracia). Pero contrario a esta afirma-

ción, nuestra experiencia latinoamericana ha demostrado contundentemente que

los hombres y mujeres pueden concientizarse a sí mismos participando activa,
consciente y orgánicamente en procesos de cuestionamiento y transformación
de su propia realidad.
Ejercicio
Fábula
El hombre
como realidad se ha emancipado,
se ha separado y
se hace llamar hombre;
su historia y sus actos
repletos de desobediencia y rebeldía,
buscan la concreción de elementos,
de medidas ascendentes,
de surgimiento de lo humano.
La esencias lo individualizan…
Brota de él la animalidad;
pensamiento;
ideales que mueven su universo social
donde lo humano alcanza el fin último de sí mismo:

“yo soy, hoy soy yo”;

convirtiéndose en las banderas nacionales
de la gran fraternidad social
denominada raza cósmica
sideral…
Porque para ser hombre

hay que definirse
y para “hacer” la revolución
hay que construirse…
Ramón A. Azócar A.
Equidad
Poesía urbana de dolor social
1. Leyendo el poema “Fábula” de Ramón

Azócar, ¿cómo tú interpretas al “sujeto” allí
expresado?
2. Hagamos la siguiente sopa de le-

tras. Latinoamérica. El Paquete. Gasto Público.
Crédito. Pobreza. CANTV. Vecinos. Estudiante.
Revuelta. Basta de engaño. Bolívar. Dignidad.
Justicia Social. Participación.

3. ¿Qué significado tienen para ti las siguientes palabras: enajenación,

conciencia y sujeto?
4. ¿Son diferentes el actor social y el sujeto sociopolítico?
5. ¿Conoces algunos actores sociales o sujetos sociopolíticos en la

comunidad?

6. ¿Cómo te ves en la realidad de hoy como: actor (a) social o sujeto

(a) sociopolítico (a)?
7. Discutamos en colectivo las características propias del sujeto revo-

lucionario y del sujeto sociopolítico.
8. Realicemos en colectivo el siguiente crucigrama:
a) Estado en el que el hombre y la mujer se encuentran sin conciencia. No

tienen esencia de sí mismo, sobre su situación y relación social.
b) Estado en el que el hombre y la mujer se encuentran libre de cualquier

relación de dominación.
c) Comprensión del hombre y la mujer sobre la estructura y desarrollo de

la sociedad. Tener esencia de sí mismo, sobre su situación y relación social.
d) Hombre y Mujer producto de sus representaciones, de sus

ideas. Conscientes que están condicionando por la sociedad y dispuesto a
transformarla.

3
2
9. Juego “El ahorcado”.
Como colectivo conformen varios equipos de trabajo. Cada equipo

debe seleccionar una palabra claves del texto leído. Posteriormente, decidan el
orden de participación. Cada equipo presentará algunas características generales

de una de las palabras seleccionada a través de mímicas al resto del colectivo. El

colectivo tiene seis (6) oportunidades para asignar las letras que constituyen la
palabra o decir la palabra completa que considera que es. Si el colectivo logra
acertar antes de consumir el total de oportunidades para responder, sus inte-
grantes explicarán el significado de la palabra. En caso de no haber acertado, el
equipo presentador hará la explicación.

notas
1 Este sistema económico se opone a la lógica del mercado regulado, en la cual el

Estado controla las fuentes de suministros, de producción y precios a los fines de garantizar
bienestar a toda la población. El libre mercado sustenta que la oferta - demanda logrará el
equilibrio del bienestar social.
2 Es la clase social propietaria de capital y cuyos ingresos provienen de la explota-

ción de la fuerza trabajo del proletario, ya sea de manera directa o indirecta. La burguesía no
solamente cumple un papel económico en la sociedad, sino que donde quiera que el régimen
capitalista es dominante, esta clase controla el poder político y cultural, manipula un conjunto
de medios de coerción social necesario para mantener el sistema de explotación imperante.
3 Fondo Monetario Internacional (FMI), Banco Mundial (BM), Banco Interamerica-

no de Desarrollo (BID).
4 CEPAL. (2000). La brecha de la equidad. Una segunda Evaluación.
5 La relación de explotación de una clase social tiene por base la existencia de un

mecanismo mediante el cual un grupo de hombres y mujeres se apropian de una parte del tra-
bajo (plustrabajo) de otro grupo diferente. Pero la explotación no es simplemente un sistema
de apropiación del trabajo de otros; una clase social explotadora, sino que en base a ello se
apropia también de las instituciones sociales y políticas (la educación, el Estado, los medios
de comunicación, los medios de entretenimiento, etc.). Es decir, la clase explotadora, o sea
la burguesa, se adueña del control de la superestructura de la sociedad. La clase burguesa le
roba a la clase proletaria, la cual es explotada, no solo una parte del trabajo, sino también
la libertad de participar en la organización de la sociedad y de beneficiarse plenamente de
los productos de la ciencia y la cultura. La clase proletaria es la clase social históricamente
explotada por la burguesía.
6 Conjunto de creencias, imágenes, representaciones y valoraciones que se definen en

torno a algo en un momento dado. Es una construcción social -al mismo tiempo individual y
colectiva- en permanente remodelación, una suerte de edificio mental que nunca se termina ni
se terminará de ampliar o remodelar. Refiere a la cosmovisión, la conciencia, la ideología.
7 La Clase Proletaria es clase social constituida por los trabajadores privados de me-
dios de producción que reciben sus ingresos de la venta de su fuerza de trabajo a los dueños de
capital, y que en el proceso global de la producción capitalista son explotado por la burguesía.
Marx refiere, haciendo alusión al obrero colectivo, a todas las personas más o menos ligadas

notas
al proceso de producción. Por tanto, no es conveniente definir al proletariado por estar ligado
directamente a la producción por su trabajo manual, como lo es el sector obrero. Se puede inferir
que los asalariados del sistema comercial, financiero y servicios forman parte del proletariado,
a pesar que ellos no crean plusvalía, pero inciden en la creación de ganancias para el capitalista
comercial al tener una cuota de participación en el proceso de producción.
8 Son las áreas en la que se organiza la economía: agrícola, petróleo, electricidad, tu-
rismo, industria. etc. La híper-especialización de las ramas productivas ha sido soportada por el
avance tecnológico y la profundización de la división del trabajo, es decir, la distribución de fun-
ciones que divide a los individuos en una sociedad de acuerdo a las diferentes tareas que realizan
las y los trabajadores. La diferencia de tareas y la descomposición del proceso de producción
son en última instancias un efecto del desenvolvimiento de las fuerzas productivas, que repercu-
ten inmediatamente en la estructuración de mercado y en la estructura clases. Según Marx, la
primera división del trabajo se efectuó al separarse el trabajo manual y el trabajo mental, que
sienta las bases para que una clase dominante se asigne funciones directivas, que no tardan en
convertirse en funciones de dominio y de explotación.
9 Levy B. (2002). Una introducción a los estudios actuales sobre política, el conflicto y
el estado en América Latina y el Caribe. En B. Levy (Comp.) Crisis y conflicto en el capitalismo
latinoamericano: Lecturas políticas (pp. 11 - 28). Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina:
CLACSO, Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales.
10 Seoane, J., Taddei, E. y Algranati, C. (2002). Tras el 11 de septiembre Conflicto

social y hegemonía norteamericana en América Latina. Observatorio Social de América
Latina, 6, 49 – 60.
11 Harnecker, Marta (2005). La izquierda en el umbral del siglo XXI. Fondo Editorial
Tropykos. Caracas, Venezuela.
12 COPEI, MAS, MIR, URD, MIN entre otros partidos minoritarios.
13 Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial y Banco Interamericano de Desarrollo.
14 Según registro de organización defensora de derechos humanos se realizaron en el

periodo de 1989 – 1999 un poco más de 7.050 protesta callejeras en diversas modalidades. Estas
protestas reconfiguraron de manera particular en Venezuela el sentido de lucha de clase exis-
tente en la sociedad desde hace mucho tiempo. Esta reconfiguración se expresa desde entonces

notas
con un alto grado de maduración, pugna, concienciación y alternos modos de acción en todas
sus dimensiones (sociales, políticas, religiosas, económicas y filosóficas). La lucha de clase
existe en todo momento en las sociedades, aunque sea solo en forma latente y oculta, pero se
convierte en motor de las transformaciones sociales sólo cuando madura abiertamente y se
expresa de una manera activa, práctica y consciente.
15 López, Smilde y Stephany hacen una descripción minuciosa sobre estos aconteci-
miento en una investigación realizada sobre protesta y cultura en Venezuela, marcos de acción
colectiva, la cual referiremos a partir de ahora para una mejor comprensión de los elementos
anteriormente desarrollado sobre los actores sociales. Ver López, M., Smilde, D. y Stephany K.
(2002). Protestas y cultura en Venezuela. Los marcos de acción colectiva en 1999. 2da. Edición.
Caracas: FACES – UCV, CENDES, FONACIT.
16 El terminal de Nuevo Circo y La Guaira ubicada en Caracas y Guarenas a sus in-

mediaciones, se consideran las localidades centrales de las protestas que luego se expanden
al resto del país.
17 Ídem, p. 88.
18 Ídem, p. 150.
19 Es el estado de falsa conciencia al cual llega el hombre y la mujer mediante la

adquisición de un conjunto de ideas, actitudes y sentimientos que asumen como creen-
cias propias para comprender la realidad. Esta asunción desfigura la comprensión de la
realidad objetiva, llevando al individuo a mantener una conducta sumisa ante el sistema
al que no se atreve a impugnar por considerarlo algo ajeno a su propia actividad crea-
dora, se somete ciegamente y cumple las normas que le impone un estado de cosas que
en realidad es un estado de hombres y mujeres en relación. La falsa conciencia es desa-
rrollada por la clase burguesa a través de sus aparatos ideológicos como la escuela, la
universidad, los medios de comunicación (televisión, radio, internet, juegos interactivos,
la iglesia, etc.).
20 La realidad como totalidad refiere a su carácter multidimensional. Este supues-

to remite a la necesidad de aprehender la complejidad de la realidad, reconociendo en
ésta la interconexión de múltiples dimensiones (políticas, económicas, psico-culturales,
ecológicas, sociales) en un todo múltiple, sin el cual no es posible comprender y hacer
la realidad. Ver Zemelman, H. Educación como construcción de Sujetos Sociales. En la
Revista La Piragua. N° 5, pp. 5 – 18. Ver Damiani. L. (2004) La diversidad metodológica

en la sociología. FACES/UCV. Fondo Editorial TROPYKOS. Tercera Edición pp. 171
– 190.
21 La relación de condicionamizento y no de determinación de la realidad refiere al su-

puesto que, sí bien cierto la realidad en una construcción colectiva que incide en las condiciones
de vida, no es cierto que condicione absolutamente. Solamente la condiciona relativamente, per-
mitiendo que el hombre y la mujer condicionada puede gestar acciones que permitan trasformar
la realidad y viceversa.
22 Testimonio del luchador social Luis Emilio Morín, Caracas. Ver Duque,
R. (2007). Del 11 al 13. Testimonio y grandes historias mínimas de abril de 2002. Segunda Edi-
ción. Fondo Editorial Fundarte. Caracas. pp. 9 - 21
23 Testimonio del luchador social Johnny Moreno parroquia El Valle, Caracas.

Ídem. pp. 67 - 75.
24 El entendido contra-hegemónico del proletariado refiere a su organización hegemó-

nica que contrarresta la hegemonía ejercida por la clase burguesa para garantizar su control
absoluta como clase dominante no solo de los medios de producción, sino de los aparatos ideo-
lógico, cultural, religioso, político de la sociedad.
25 Marx, Carlos (s/f). La Ideología Alemana. L’eina Editorial. Barcelona España. p. 18.
26 Ídem pp. 37 - 38
27 Resultado de la crisis socio económico y política de Venezuela para finales del siglo
XX para diciembre de 1998 el pueblo venezolano decide apoyar mediante el sufragio, y sin
vacilo alguno, la propuesta del Teniente Coronel Hugo Rafael Chávez Frías en transformar a
Venezuela mediante una revolución democrática, logrando la victoria electoral. Los objetivos
principales de esta alternativa puesta en ejecución de manera casi inmediata a la toma de
posesión de la presidencia, fue iniciar un proceso de transición que fundara una Nueva Re-
pública mediante un cambio profundo del marco político – jurídico e impulsara el desarrollo
humano y la transformación productiva. Resultado de esta primera etapa de transición ha
sido satisfactoriamente la aprobación mediante referéndum popular, previa debate y reflexión
de los sectores sociales, de una Nueva Constitución que establece: una nueva estructura del
Estado organizada en cinco poderes: Ejecutivo, Legislativo, Electoral, Judicial y Ciudadano,
éste último comúnmente conocido como Poder Moral; los principios de la democracia parti-

cipativa como fundamento del nuevo Estado - referéndum consultivo, revocatorio para todos
los cargos de elección popular, contraloría social en la administración pública y organización
popular para la decisión de las políticas públicas -; la preeminencia de los derechos humanos
- políticos, civiles, económicos, sociales y culturales -; y el ejercicio del pensamiento político
latinoamericano expreso en los principios de independencia, soberanía, justicia social, liber-
tad, igualdad, paz y autodeterminación de los pueblos.

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¿QUÉ SIGNIFICA HABER SIDO ACTORES SOCIALES EN 10

SUJETO SOCIOPOLÍTICO… SUJETO REVOLUCIONARIO 28

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La formación para la organización comunitaria dentro del proceso

Creemos que todos somos inconclusos y por ello tenemos capaci-

Esta escuela hace la diferencia porque va de la práctica a la re-

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Esta escuela que estamos impulsando para la organización de nues-

Una Escuela que sirva para reconocernos como Pueblo, potenciar

Página  El SUJETO TRANSFORMADOR

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en él vivimos, nos movemos y somos”

José Manuel Briceño Guerrero

El Origen del lenguaje.1970

El folleto está tejido en dos apartados: el primero orientado a las luchas

Al finalizar la lectura de cada uno de los apartados estaremos invitados

¡Invitémonos entonces a leer entre tejidos!

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Es muy importante para todas y todos nosotros develar la reali-

En respuesta a la crisis económica que América Latina presenta-

Los primeros países en implementar estas reformas a finales

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El neoliberalismo es una doctrina que hace referencia a una po-

Contrario al augurio de “la máxima felicidad” promovida por la clase

nefastas políticas globalizadoras del capital extranjero fue un incremento de la

La CEPAL al referirse a la pobreza y la distribución del ingreso de-

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un incremento de hogares bajo situación de pobreza en cinco puntos por-

La aplicación de las políticas neoliberales en América Latina ade-

La situación en los sindicatos y gremios se manifiesta con una mer-

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Fragmentación social que aún hoy día refleja en América Latina a

Esta situación vivida en América Latina por décadas, acentuada en

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En ese momento histórico, los ACTORES SOCIALES son parte

Son infinitas las experiencias de la constitución de actores sociales desde

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Aerolínea Argentina por la política de despidos masivos, rebaja de salario y cierre

A través de las acciones de calle a finales de siglo XX e inicio del siglo

1. Incapacidad histórica de elaborar un pensamiento propio, adecuado a

2. Incapacidad de realizar un estudio riguroso de las experiencias

3. No tener un análisis serio de las causas de su derrota en las décadas

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Paralelo, viven una crisis programática reflejada en grandes dificultades

Un ejemplo cercano en cuanto espacio a nosotros y nosotras educadores

Las principales medidas a tomar fue someterse al recetario del Fondo

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Sin embargo, la aplicación de estas políticas profundizaron más la crisis

Sentida y concientizada la crisis económica en 1989, la clase venezo-

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instituciones del Estado y las instituciones políticas (partidos políticos, sindicatos

Las primeras expresiones de protesta (en la ciudad de Guarenas-

Posteriormente a este año y a la intervención represiva (a fuego limpio

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El objetivo de las acciones fue romper la rutina diaria de miles de

Los actores de estas protestas se mantuvieron distantes de las mili-

Entre esta variedad de Actores Sociales en movimientos, los vecinos

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