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Teorías del Estado

Guillermo León Labrador Morales

15 de Mayo de 2015

El estado colombiano y su trayectoria histórica través del ejército y la violencia

Introducción

Colombia a través de su relativamente corta historia, ha tenido dificultades para conformarse


como un estado políticamente estructurado, siendo esto consecuencia de la enorme cantidad de
conflictos que se han dado en los últimos dos siglos. El ejército en estos procesos ha funcionado
como herramienta del estado para sostenerse durante los momentos de crisis, demostrando a la
vez su falta de capacidad para afianzarse sin el uso de la violencia y la guerra fratricida.

Este pequeño escrito hará un recuento de diversos momentos de la historia en os que se han
presentado fenómenos de violencia interna, analizando con ello el papel del ejército y del estado,
de manera tal que se entienda la utilización de la guerra en Colombia como política de gobierno, lo
cual a pesar de en cierta manera haber sostenido al estado, también ha sido instrumento del
deterioro social, político y económico en el cual se encuentra actualmente la nación colombiana.

Creación y configuración.

El año de 1810 marco el inicio de la etapa colonial en el territorio colombiano, conformándose en


varios poblados del territorio juntas de gobierno, que aunque en su mayoría aun proclamaban
lealtad al rey de España, su existencia coincidía con un deseo de mayor autonomía de parte de las
colonias con respecto a la metrópoli. Cada una de estas juntas por tanto comenzó a conformar
ejércitos en cada uno de sus territorios, los cuales conformaron en primera instancia con los ya
existentes ejércitos coloniales que se habían aliado con los organizadores de las juntas y con
miembros de la población que se empezaron a reclutar, lo que conllevo a que estos primeros
ejércitos post-coloniales fueran una maza irregular, poco entrenadas y mal equipadas 1.

Pero estos nuevos ejércitos tendrían muy pronto su bautizo de fuego, no contra los ejércitos del
rey, sino entre ellos mismos. Las juntas que se habían conformado en ciudades como Santa Fe
(hoy Bogotá), Tunja, Cartagena, Girón, Pamplona, Socorro, Popayán y Santa Fe de Antioquia (entre
muchas otras), fallaron en conformar un estado unificado en el territorio que ocupaba el virreinato
de la Nueva Granada, y en cambio decayeron en localismos, que significaron en una feroz defensa
del territorio de cada región, que al carecer de representación en Santa Fe y Tunja, en donde se
trataron de conformar congresos, se entró en a desacuerdos que desencadenaron en
enfrentamientos civiles. Ciudades como Cartagena y Mompox, Pamplona y Girón 2, o las mismas
Santa fe y Tunja entraron en conflicto, demostrando la incapacidad de esos primeros gobiernos de
conformar estados estables, y a la vez dejando a la vista la enorme inexperiencia militar de los
primeros ejércitos, en donde los soldados disparaban al aire para que “Dios dirigiera las balas” 3.

1
Torres, Cesar. De milicias reales a militares contrainsurgentes, la institución militar en Colombia del siglo XVIII al XXI .
(Bogotá: Pontificia Universida Javeriana, 2008.) pp. 106
2
España, Gonzalo. El País que se hizo a tiros. (Bogotá: Random House, 2013.) pp. 24-30
3
Espinosa, José María. Memorias de un abanderado. (Bogotá: Banco Popular, 1971.) pp. 41
Al entrar España de lleno en confrontación con las recién conformadas republicas, (quienes se
decidieron al final declararse independientes), permitió la conformación de un estado unificado
bajo el objetivo común de ganar la guerra con España, bajo el liderazgo de fuertes líderes militares
como Simón Bolívar, que encauzaron a los heterogéneos ejércitos bajo una misma bandera,
permitiendo así obtener victorias definitivas y logrando la conformación de un estado
relativamente fuerte y grande, que se llamó Republica de Colombia (hoy conocida como Gran
Colombia). La conformación de Colombia como un estado centralizado permitió que para la
segunda década del siglo XIX se pudiera conformar un ejército regular, mejor equipado y
entrenado4.

Consolidación de un estado militarizado

Hacia 1826 los conflictos comenzaron a resurgir, sobre todo tras el surgimiento de facciones
militaristas y civilistas, en el sector político, así como el resurgimiento de regionalismos, que se
marcaron aquí entre los venezolanos y neogranadinos, que resultaron al final en la disolución de la
Gran Colombia. Tras esto se empezó a desarrollar el fenómeno del caudillismo, favorecido por la
búsqueda de estabilidad a través de una figura fuerte, de un alto rango militar, que sirviera como
una especie de patriarca para la nación 5. Ejemplo de ello serían los generales Melo, Obando,
López, Mosquera, entre otros.

Estos caudillos poco a poco empezaron a representar diversas facciones con diversos intereses y
puntos de vista de cómo dirigir la nación (lo cual se conformó especialmente en los partidos
tradicionales, liberal y conservador), las cuales desarrollaron comunidades sectorizadas que
resultaron en una fragmentación de la sociedad, y resultaron en un enfrentamiento continuo, que
se manifestó a través de las múltiples guerras civiles a lo largo del siglo XIX que culminaron con la
catástrofe humana de la guerra de los mil días, que resulto en que Colombia entrara al siglo XX
como un estado supremamente débil, y no estuviera en capacidad defender su propia soberanía
ante intereses extranjeros, resultando en la perdida de Panamá 6.

La crisis del estado colombiano se aumentó con el aumento de la conciencia de clase en los
sectores populares de la población, que hasta el momento solo habían sido instrumento de las
facciones políticas de las clases dirigentes, dando lugar a reclamos por las injusticias cometidas en
su contra, dando lugar a movimientos como el gaitanista, y a la vez aumentando la noción de una
Colombia como sociedad inestable7. Esta crisis del estado permitió que el gobierno tuviera la
necesidad de apoyarse más y más en la institución militar y la guerra para mantener el control del
país, permitiendo así que se diera una mayor preponderancia al ámbito militar sobre el político 8.

Procesos actuales

4
Torres, Cesar. De milicias reales a militares contrainsurgentes, la institución militar en Colombia del siglo XVIII al XXI .
(Bogotá: Pontificia Universida Javeriana, 2008.) pp. 120-124
5
Torres, Cesar. De milicias reales a militares contrainsurgentes, la institución militar en Colombia del siglo XVIII al XXI .
(Bogotá: Pontificia Universida Javeriana, 2008.) pp. 21-24
6
España, Gonzalo. El País que se hizo a tiros. (Bogotá: Random House, 2013.) pp. 246-248
7
Alonso, Manuel Alberto. Conflicto armado y configuración regional. (Medellín: Universidad de Antioquia, 2013.) pp. 53
8
Alonso, Manuel Alberto. Conflicto armado y configuración regional. (Medellín: Universidad de Antioquia, 2013.) pp.
152
El estado colombiano puede decirse que no entro de lleno a los procesos del siglo XX sino hasta
bien entrado el mismo, entrando muy tarde en el desarrollo industrial que estaban alcanzando
otras naciones del mundo. Pero al entrar en él, Colombia pudo experimentar la profesionalización
y modernización de un verdadero ejército nacional. Tras el fenómeno conocido como La Violencia,
se conformaron nuevas facciones que entraron en conflicto directo con el estado, siendo el
reclamo de estas sobre todo en favor de los intereses de las clases populares, como en un
principio las guerrillas, lo que resulto en que el estado necesitara del ejército como una fuerza
contrainsurgente9.

Este conflicto interno se ha complejizado con la inclusión de otro actores como los paramilitares,
que surgieron para mantener la vida e intereses de los terratenientes ante los ataques de las
guerrillas, así como de actores internacionales como los Estados Unidos, que vieron en la guerra
contrainsurgente del estado colombiano un frente más de su lucha en contra el comunismo en el
escenario de la guerra fría. El desarrollo de escenarios como la guerra del narcotráfico a la vez dejó
un conflicto que escalo cada vez más en atrocidades que resulto en un estado con necesidad de
realizar un gran esfuerzo para mantener el control de su propio territorio, este es un estado donde
para mantener el orden público al ejército no le basta con “patrullajes” sino con “operaciones
militares”10.

Conclusión

La evolución del estado colombiano a la par de su ejército, ha demostrado que Colombia es un


territorio en guerra permanente, en donde el estado ha carecido de la capacidad para regular
estos conflictos sin la utilización de la fuerza, por lo que es necesario que el estado replantee su
papel ante la pluralidad intrínseca del territorio colombiano, dando una verdadera representación
a los sectores enfrentados, de manera tal que ya no sea una sociedad enfrentada, sino una en
capacidad de construir un mejor futuro.

Bibliografía

Alonso, Manuel Alberto. Conflicto armado y configuración regional. Medellín: Universidad de


Antioquia, 2013.

España, Gonzalo. El País que se hizo a tiros. Bogotá: Random House, 2013.

Espinosa, José María. Memorias de un abanderado. Bogotá: Banco Popular, 1971.

Hobbes, Thomas. El Leviatán. Madrid: Alianza, 2009.

Torres, Cesar. De milicias reales a militares contrainsurgentes, la institución militar en Colombia


del siglo XVIII al XXI. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana, 2008.

9
Torres, Cesar. De milicias reales a militares contrainsurgentes, la institución militar en Colombia del siglo XVIII al XXI .
(Bogotá: Pontificia Universida Javeriana, 2008.) pp. 315-319
10
Torres, Cesar. De milicias reales a militares contrainsurgentes, la institución militar en Colombia del siglo XVIII al XXI.
(Bogotá: Pontificia Universida Javeriana, 2008.) pp. 358

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